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Señor,

JUEZ DE FAMILIA DE BOGOTÁ D.C. – Reparto


E. S. D.
Referencia: Proceso de Divorcio y Cesacion de Efectos Civiles de Matrimonio Religioso
Asunto: Contestación
1. PARTES:
1.1 El demandante es Ana María, actuando bajo su apoderado José Luis Velandia Muñoz, con domicilio en la ciudad
de Bogotá D.C., e identificado con la cédula de ciudadanía número 79.665.878.
1.2 El demandado es Germán, identificado con cédula de ciudadanía 1.342.659.975, domiciliado en la ciudad de
Bogotá, D.C., actuando bajo poder especial otorgado a María Camila Jaimes Camacho, identificada con cédula de
ciudadanía C.C 1.005.340.035, y T.P 154.658, con domicilio en la ciudad de Bogotá, D.C.
2. PRONUNCIAMIENTO SOBRE LOS HECHOS DE LA DEMANDA:
ADMITO los siguientes hechos:
2.1. En el 2003 la señora Ana María y el señor Germán contrajeron matrimonio civil registrado en la Notaría 64.
Se acepta el hecho, en la medida que existe el certificado del matrimonio civil entre Ana María y German.
2.2. En el año 2004 la señora Ana María y el señor Germán contrajeron matrimonio religioso. Se admite.
Se acepta el hecho, ya que en la iglesia de la celebración del matrimonio religioso existe constancia.
2.3. La señora Ana María y el señor Germán procrearon una hija. Cristina, menor de edad, nacida en el 2008.
Se acepta el hecho, pues en el certificado de nacimiento de Cristina consta como madre Ana María y padre, German.
2.4. La señora Ana María y el señor Germán convivieron durante 17 años.
Se acepta el hecho, pues prueba de ello es el certificado del matrimonio civil como la constancia del matrimonio
religioso.
2.5. Actualmente la Sociedad Conyugal no se ha disuelto ni liquidado.
Se acepta el hecho, pues no se ha decretado sentencia judicial sobre la disolución del matrimonio, ni ha habido mutuo
acuerdo entre los implicados.
NIEGO los siguientes hechos:
2.6. Cuando terminó la licencia de maternidad de Ana María, Germán se opuso rotundamente a que regresara a
trabajar al considerar que debía quedarse al lado de su hija, indicando que él asumiría todos los gastos que
demandan las necesidades de su cónyuge y la niña. Sin embargo, Ana María decidió seguir laborando.
Se niega el hecho, pues German no se opuso rotundamente a que Ana Maria regresará a trabajar, sino que
simplemente le propuso la idea, a la cual ella accedió de manera libre y voluntaria.
2.7. Ante los constantes reclamos por parte de Germán, Ana María, en un intento por salvar su matrimonio,
decidió renunciar a su trabajo en el año 2009 y dedicarse al hogar.
Se niega el hecho, pues no hubieron reclamos abusivos por parte de German, y al contrario era Ana María la que
abusa psicológicamente del implicado en varias ocasiones, cuando este se negaba a despilfarrar el dinero.
2.8. La dedicación absoluta al hogar por parte de Ana María consolidó una total dependencia económica de su
cónyuge. Fruto de esa limitación económica Ana María fue víctima de constantes recriminaciones e
insultos. Esta situación se fue acentuando a tal punto que, en octubre del año 2019, en una reunión familiar,
Ana María fue agredida físicamente por Germán, así como también esté, en su inestabilidad emocional,
destruyó por completo el teléfono celular de Ana María. Lo anterior constituye una clara causal de divorcio
a la luz de la causal tercera del art. 154 del código civil.
Se niega el hecho, pues aunque si bien es cierta la pelea entre Ana María y German, la demandante no mencionó la
causa de la pelea, la cual fue la infidelidad de Ana Maria evidenciada en varios mensajes de Whatsapp enviados por
parte de Juan y respondidos por Ana Maria, expresando un intento de relación. Por otro lado, el inciso final no es un
hecho sino una pretensión.
2.9. El 15 febrero del año 2020 Ana María con la finalidad de preservar su integridad física, salvaguardar el
bienestar de su hija y dar por terminada la dominación que su cónyuge tenía sobre ella fruto de esa
dependencia económica, se refugia en casa de sus padres y toma de la caja fuerte 50 millones para asegurar
su manutención y la de su hija.
Se niega el hecho pues la integridad física tanto de Ana Maria como de su hija nunca estuvo en peligro, y prueba de lo
anterior es el cumplimiento a cabalidad de todos los deberes de cónyuge por parte de German reflejados en las esferas
morales y económicas.
2.10. Muestra de la inestabilidad emocional, Germán se refugió en el trago. Situación que hizo imposible pensar
en una solución mediante el diálogo e hizo impensable cualquier forma de reconciliación. Esta situación fue
concurrente y da lugar a la aplicación de la causal 4 del art. 154 del código civil. En varias ocasiones fue en
busca de Ana María a la casa de su madre en estado de embriaguez y la terminaba agrediendo verbalmente.
Se niega el hecho, pues la demandante omitió varios hechos, como el abandono de hogar por parte de Ana María el
cual incluyó llevarse a Cristina sin autorización de German. Aspecto que si bien le causó bastante pena y depresión al
implicado generando bajos rendimientos en el trabajo y socialmente, NO generó un refugio en el alcohol como lo
intentan mostrar.
2.11. Debe decretarse el divorcio de matrimonio civil y la cesación de efectos civiles de matrimonio religioso.
(NO ES UN HECHO ES UNA PRETENSIÓN)
Se niega pues el anterior NO es un hecho sino una pretensión.
2.12. La señora Ana María, madre de la menor Cristina, no posee recursos suficientes para satisfacer la totalidad
de las necesidades propias y de su hija
Se niega el hecho pues Ana María arbitrariamente tomo 50 millones de pesos colombianos que guardaba German en
una caja fuerte, con el propósito de abandonar el hogar. de igual forma todos los gastos de Cristina los sigue cubriendo
German y prueba de aquellos son los recibos del colegio y el dinero en efectivo entregado por el padre a su hija.
NO ME CONSTAN los siguientes hechos:
2.13. Cuando Cristina ingresó al colegio, Ana María le expresó a Germán su intención de ingresar al mercado
laboral. Sin embargo, Germán nuevamente manifestó su desacuerdo
No consta el hecho, pues la afirmación realizada no tiene tiempo específico, es imposible ubicarse temporalmente.
2.14. Cristina no ha logrado conseguir empleo por su falta de experiencia laboral en los años recientes.
No nos consta pues, debido al abandono de hogar, Germán no ha sabido de la vida de Ana Maria.
3. PRONUNCIAMIENTO SOBRE LAS PRETENSIONES:
3.1. Se rechaza la pretensión primera de la demanda - Decretar el divorcio y la cesación de efectos civiles de
matrimonio religioso entre la señora Ana María y el señor Germán, con fundamento en las causales 2, 3 y 4.
- dado que, nunca hubo existencia de actos que concuerden con dichas causales.
Primero, la causal segunda (incumplimiento grave e injustificado de los deberes que la ley les impone a los cónyuges como tales
y como padres) que está siendo alegada con fundamento en el incumplimiento del deber de ayuda no se cumple, puesto
que, durante todo el matrimonio se han suministrado todos los elementos materiales necesarios para una vida digna.
El artículo 176 del Código Civil establece que los cónyuges están obligados a guardarse fe, a socorrerse y ayudarse
mutuamente, en todas las circunstancias de la vida; sin embargo, la Corte Constitucional en la sentencia C-246 de
2002 determinó que “[p]ara que un deber constitucional sea exigible de un individuo en un caso concreto se requiere
(...) de una decisión previa del legislador consistente en precisar el alcance del deber constitucional”. De este modo,
se tienen en cuenta dos pronunciamientos.
Por un lado, la Corte Suprema de Justicia en la sentencia del 13 de junio de 1985 dejó notar que entiende la ayuda y el
socorro como un mismo deber. Por otro lado, la Corte Constitucional, en la sentencia C-246 de 2002, afirmó que la
obligación aquí discutida comprende varias dimensiones, entre esas, las prestaciones de carácter personal y económico
que hacen posible la vida en común y el auxilio mutuo; manifestando el principio de solidaridad. Así pues, se entiende
que este deber busca velar por la cooperación y auxilio en todas las circunstancias de la vida por ambos de los
cónyuges, condiciones que se han cumplido totalmente, visto que el señor Germán les ha dado una vida respetando un
equilibrio económico, en el que nunca les ha faltado nada y los “lujos” se comparten, pues se encuentran a nombre de
los dos el apartamento, la cabaña de Villa de Leyva, la finca y los 2 carros.
Segundo, la causal tercera, referente a los ultrajes, el trato cruel y los maltratamientos de obra no puede ser alegada por
la contraparte, puesto que, el Código Civil en el artículo 156 establece que “El divorcio sólo podrá ser demandado por
el cónyuge que no haya dado lugar a los hechos que lo motivan”, condición que no cumple Ana María, ya que, es ella
quien no controla su ira y en medio de las peleas muchas veces terminó dañando varios de los trajes y ultrajando con
palabras soeces a su cónyuge. Asimismo, en una pelea referente a la falta de respeto hacia la relación por parte de Ana
María con su ex compañero de trabajo, Germán terminó arañado y golpeado.Evidenciando así, violencia intrafamiliar
tanto física como moral por parte de la demandante hacia su cónyuge.
Tercero, es improcedente alegar la embriaguez habitual, ya que, la habitualidad es un requisito necesario para alegar
dicha causal y hace referencia a aquella acción que ocurre, se hace o se repite con frecuencia o por hábito; lo cual no
sucedió en el presente caso. Durante todo el matrimonio Germán nunca tuvo problemas de alcohol, sin embargo, fue
el abandono de Ana María, secuestro de Cristina y robo del dinero del hogar, lo que le ocasionó una fuerte recaída
emocional que lo hizo refugiarse en el trago por un lapso corto de tiempo. Ahora bien, Germán tomó terapia
psicológica y se repuso de dicha recaída ocasionada por su cónyuge, lo cual permitió evidenciar el buen hombre, padre
y esposo que siempre ha sido, al buscar solucionar la problemática mediante el diálogo.
En conclusión, no hay cabida de ninguna de las tres causales subjetivas alegadas en el caso, por lo cual, no debe ser
decretado ni el divorcio ni la cesación de efectos civiles de matrimonio religioso. Dado que, la Corte Constitucional en
la sentencia 394 de 2017, establece que
“una vez los contrayentes aceptan el contrato de matrimonio, al que concurren de forma voluntaria, aceptan también las cláusulas de
las que se derivan restricciones para su autonomía, y ello incluye las relativas a los mecanismos que existen para disolverlo. En tal
sentido, la Sala consideró que si los cónyuges no desean continuar con el vínculo matrimonial, cuentan con posibilidades jurídicas
para disolverlo como el mutuo acuerdo, o la posibilidad que ambos cónyuges tienen de acudir a la separación de cuerpos para luego
de transcurridos dos años, proceder a solicitar el divorcio, restricción que no es desproporcionada si se tiene en cuenta que la finalidad
es proteger a la familia y tratar de recomponer el vínculo matrimonial.”
3.2. Se solicita que no se declare disuelta y en estado de liquidación la Sociedad Conyugal conformada
dentro del matrimonio entre la señora Ana María y el señor Germán.
Por otro lado, en cuanto a la pretensión de que se declare disuelta y en estado de liquidación la sociedad conyugal
conformada entre Ana María y Germán, cabe puntualizar que la sociedad en tanto efecto económico puede ser disuelta
por el divorcio judicialmente decretado, por la disolución del matrimonio, por la separación judicial de cuerpos, por la
sentencia de separación de bienes (Código Civil, artículo 152 y ss.). Frente a lo anterior, cabe resaltar que no hay lugar
a liquidación de la sociedad conyugal, sólo a la disolución, ya que la primera es un proceso alterno consecuente a la
declaración del divorcio que aún no tiene lugar.
3.3. Se rechaza la petición de la demandante en lo concerniente a la declaratoria del señor Germán como
cónyuge culpable del divorcio.
Para solicitar el divorcio la demandante alega las causales 2, 3 y 4 del artículo 154 del Código Civil. Sin embargo, las
referidas son causales subjetivas en el divorcio, aquellas pueden ser invocadas únicamente por el cónyuge inocente
dentro del término de caducidad del artículo 156 del Código Civil. Partiendo de lo anteriormente enunciado, a saber,
que no hay cabida a ninguna de estas, se hace necesario hacer énfasis en que, por otro lado, tampoco son procedentes
debido a que Ana María es la culpable en el divorcio no el señor Germán, como se expondrá consecuentemente.
En primer lugar, la causal 2 enuncia que “el grave e injustificado incumplimiento por parte de alguno de los cónyuges
de los deberes que la ley impone como tales y como padres” (Código Civil, artículo 154). Uno de estos deberes en el
matrimonio es la fidelidad. Su incumplimiento, por oposición, puede ser tanto material -como las relaciones sexuales
extramatrimoniales- y moral: aquellos comportamientos afectivos que no desembocan en una relación sexual. Desde
octubre del año 2019, Germán comprobó que Ana María estaba siéndole infiel, de lo cual la familia entera tuvo
conocimiento y, según se observa en los screenshots de WhatsApp de las conversaciones entre Ana María y el señor
Juan, en las pruebas solicitadas al juez para que sean admitidas al proceso. Pese a que nunca llegaron a un beso y/o a
tener relaciones sexuales extramatrimoniales, lo anterior se cataloga como una infidelidad moral que ha afectado tanto
a la vida de Germán como al matrimonio. Germán afirma seguir profundamente enamorado de Ana María e intentó en
múltiples ocasiones salvar el matrimonio sugiriendo asistir a terapia. No obstante, no pudo recuperarse del todo de su
infidelidad y menos de la forma en que esta abandonó el hogar intempestivamente, llevándose a su hija y hurtando el
dinero ahorrado de la caja fuerte, lo cual condujo a una afectación psicológica tratada por especialistas.
En segundo lugar, no es cierto que Germán haya maltratado a Ana María. Por su parte, en repetidas discusiones ella no
medía sus palabras y en medio de la ira incontrolable terminaba agrediendo a German con insultos a los que él no
respondía. Asimismo, el día en que Germán se enteró de la infidelidad de Ana María esta lo empujó y, una vez más,
agredió física y verbalmente a su cónyuge, aduciendo que no valía nada como hombre, que ya no le generaba ningún
deseo y que era un hombre repugnante. Germán siempre estuvo dispuesto al diálogo y se lo propuso oportunamente a
su pareja, quien afirmó estar cansada de la relación y enamorada de otro hombre. Es por esto que Germán tampoco es
el culpable en el divorcio y, de la misma manera, tiene la facultad de demandar por las causales 2 y 3, a diferencia de
lo argumentado por la contraparte en la demanda inicial.
3.4. No se debe condenar al señor Germán al pago de alimentos
Se entiende que la obligación alimenticia para con el cónyuge surge del deber personal de socorro que nace con el
matrimonio y sigue vigente aún cuando este ha terminado. No obstante, existen unos requisitos con los cuales el
cónyuge que pretende acreditar este pago debe cumplir. En este orden de ideas, el deber de pagar alimentos puede
condenarse al cónyuge declarado culpable cuando el inocente demuestre la necesidad de este soporte económico.
Primero, en cuanto al requisito de necesidad, es necesario recalcar que antes de que Ana María, de manera voluntaria,
abandonase el hogar familiar, Germán proveía todo lo necesario para su familia. Además, la supuesta situación de
insolvencia de declara Ana María no tiene cabida en la medida que esta, antes de su abandono, tomó un monto de
cincuenta millones de la caja fuerte. Este dinero, haciendo un análisis razonable, resulta más que suficiente para los 7
meses en los que se ha ausentado, voluntariamente, del hogar. Esto, sobre todo, teniendo en cuenta que Germán ha
continuado con el pago efectivo del colegio de Cristina, su hija, además de enviarle dinero para sus gastos personales.
Por otro lado, ha entendido la jurisprudencia colombiana (Corte Constitucional, sentencia C-985/2010) que existen
dos clases de causales para invocar el divorcio, a saber, las causales sanción y las remedio, siendo las primeras
aquellas en las que hay lugar a reparaciones de tipo económico en favor del cónyuge inocente. De acuerdo con el
análisis previo, expuesto en las consideraciones sobre la tercera pretensión de la demanda, no es procedente
determinar al señor Germán como cónyuge culpable cuando la señora Ana María también incurrió en actos
conducentes a la configuración de una causal de divorcio. En este sentido, no puede la demandante pretender el pago
de una cuota alimenticia cuando esta es culpable del divorcio por las razones esbozadas con anterioridad y en el
documento de demanda en reconvención.
3.5. No se debe conceder la quinta pretensión en la cual establece que German debe asumir los costos de
crianza, educación y establecimiento de la menor de edad.
Germán no puede asumir la totalidad de los costos de crianza, educación y establecimiento de la menor dado que estos
son pasivos sociales de la sociedad conyugal. En el artículo 2 de la ley 28 de 1932 indica que: “cada uno de los
cónyuges será responsable de las deudas que personalmente contraiga, salvo las concernientes a satisfacer las
ordinarias necesidades domésticas o de crianza, educación y establecimiento de los hijos comunes, respecto de las
cuales responderán solidariamente ante terceros, y proporcionalmente entre sí, conforme al Código Civil.” Por lo
anterior, Ana María debe asumir su parte de este pasivo.
3.6. Pretensión 6: Me opongo a la pretensión 6 de la demanda, referente a la custodia completa de la
menor de edad para la parte demandante.
Al solicitar la custodia completa de la menor, es evidente que la accionada no vela por el interés de la menor sino por
el interés propio. Lo anterior, trayendo a consideración la Ley 1098 de 2006, que consagra el actual Código de la
Infancia y la Adolescencia, en donde el artículo 23 de esta, instituye que los niños, las niñas y los adolescentes son
sujetos titulares del derecho a que sus padres de forma permanente y solidaria asuman directa y oportunamente
su custodia para el desarrollo integral. Por otro lado, el artículo 14, introduce la figura de responsabilidad parental la
cual, establece en cabeza de los padres las obligaciones de orientación, cuidado, acompañamiento y crianza de los
hijos menores dentro de su proceso de formación, lo cual incluye la responsabilidad compartida y solidaria del
padre y la madre de asegurarse que los niños, las niñas y los adolescentes puedan lograr el máximo nivel de
satisfacción de sus derechos; y, finalmente el artículo 10, que consagra el principio de corresponsabilidad, según el
cual la familia y por ende los padres, son los primeros llamados a garantizar los derechos de los niños, las niñas y
los adolescentes a través de su atención, cuidado y protección, concurriendo también el Estado y la sociedad.
Lo expuesto anteriormente está complementado con argumentos de la Corte Constitucional en la sentencia T- 384 del
2018 MP Cristina Pardo, al ser explícita en que el deber de custodia y cuidado personal de ambos padres frente a los
hijos menores, además de responder a los lineamientos de la progenitura responsable y a la igualdad de derechos y
obligaciones entre los progenitores, se justifica prevalentemente desde la perspectiva constitucional en el interés
superior de los niños, las niñas y los adolescentes, y en el derecho que tienen a la unidad familiar. Por lo tanto, es
posible evidenciar que al conceder la custodia completa del menor a un padre sin causa justificada está vulnerando
directamente los derechos de la infante y los mismos deberes de los padres. En el caso en particular, no solo se logra
evidenciar que el señor German cumple con todos sus deberes de padre, en tanto le impone disciplina y orden a la vida
de Cristina, pagó el estudio y las necesidades a su hija toda la vida, sino también se evidencia el cumplimiento de sus
deberes tras el abandono de hogar por parte de Ana Maria donde le impidió a German cualquier trato con la niña, y
que con posterioridad “le permitió” visitar a la menor y tener comunicación regular con Cristina, evidenciando el
afecto y cariño que el acusado tiene frente a su hija, al igual que le ha seguido pagando el colegio, comprandole ropa y
le entrega directamente a la niña dinero para sus gastos, aun cuando Ana Maria se esmera en lograr el distanciamiento
de la hija, evidenciado en que ya no quiere pasar mucho tiempo con él, por lo que si hay algún padre que este
incumpliendo con sus deberes es Ana Maria, al influir directamente en la relación de padre e hija, y adicionalmente ser
responsable económicamente, aspecto reflejado en el despilfarro de los 50 millones de pesos, en vestidos de diseñador.
No obstante, el bien mayor de la niña es convivir con ambos de sus padres, por lo que la custodia debe ser compartida.
3.7. Se opone al pago de las costas y gastos del proceso.
4. EXCEPCIONES DE MÉRITO
4.1. Divorcio
4.1.1. Culpabilidad del cónyuge demandante
Alegamos la excepción de mérito de culpabilidad del cónyuge demandante, debido a que es Germán, por el contrario,
la única persona que puede solicitar el divorcio por las causales 2 y 3 del artículo 154 del Código Civil. Lo anterior,
debido al maltrato físico y verbal sufrido por Germán y la infidelidad de Ana María con Juan.
4.2. Deudas
4.2.1. Compensación por el pago de las deudas sociales
Alegamos la excepción de mérito de compensación por el pago de las deudas sociales, en la medida que las deudas de
la hipoteca y la póliza educativa de Cristina no solo son obligaciones que tiene demandado. Por lo tanto, la
demandante también debe asumir su parte de las deudas.
4.2.2. Compensación por el pago de las terapias psicológicas de Germán.
Alegamos la excepción de mérito de compensación por el pago de las deudas sociales, pues los gastos personales de
los cónyuges son un pasivo social.
4.3. Crianza
4.3.1. Compensación por los gastos de crianza
Alegamos la excepción de mérito de compensación por los gastos de Cristina. Esto es, pues los gastos que tengan la
finalidad de pagar las necesidades de los hijos son sociales.
5. FUNDAMENTOS DE DERECHO
5.1. Sobre el pasivo de la sociedad conyugal, el artículo 1796 C.C. indica en su numeral 2 que: La sociedad está
obligada al pago: “ De las deudas y obligaciones contraídas durante su existencia por el marido o la mujer, y
que no fueren personales de aquél o ésta, como lo serían las que se contrajeron por el establecimiento de los
hijos de un matrimonio anterior.La sociedad, por consiguiente, es obligada con la misma limitación, al gasto
de toda fianza, hipoteca o prenda* constituida por cualquiera de los cónyuges".
5.2. Asimismo, el numeral 3 del artículo 1796 C.C., establece que la sociedad está obligada al pago: (...) “3. De
todas las deudas personales de cada uno de los cónyuges, quedando el deudor obligado a compensar a la
sociedad lo que ésta invierta en ello.”
5.3. Del mismo modo, el numeral 5 del artículo 1796 C.C. indica que la sociedad está obligada al pago: “Del
mantenimiento de los cónyuges; del mantenimiento, educación y establecimiento de los descendientes
comunes, y de toda otra carga de familia.(...).”
5.4. Sobre la imputación de las expensas invertidas en un descendiente común, dicta que “Las expensas
ordinarias y extraordinarias de alimentos, establecimiento, matrimonio y gastos médicos de un descendiente
común, se imputarán a los gananciales, a menos que se probare que el marido o la mujer han querido que se
paguen de sus bienes propios”.
6. PRUEBAS
(1) Aportadas: Se solicita al despacho que tengan como pruebas las siguientes:
1.1 Copia de los comprobantes de pago de tiquetes.
1.2 Copia de los recibos del pago de la educación de Cristina.
1.3 Copia de los recibos de servicios públicos, que demuestra que viven en un sector lujoso de la ciudad.
1.4 Copia de la tarjeta de propiedad de ambos carros de alta gama.
(2) No testimoniales solicitadas:
1.5 Solicito a su despacho se sirva registrar el celular de Ana Maria donde se encuentran mensajes de texto de
whatsapp, en los cuales se puede evidenciar el ultraje de Ana María hacia German con Juan.
(3) Testimoniales solicitadas:
1.6 Solicito a usted se tenga en cuenta el testimonio del mesero que se encontraba el día de la celebración de
cumpleaños de la mamá de Ana María, lo anterior, debido a que evidenció el momento en que Ana María maltrató
física y verbalmente a German cuando este se enteró de su infidelidad.
1.7 Solicito a su despacho se sirva registrar el celular de Juan Pablo, invitado de la celebración del cumpleaños de la
mamá de Ana María, donde se encuentra el video de la pelea sucedida entre los cónyuges dicho día.
7. NOTIFICACIONES
Se notificará al demandado en la calle 84A #17-28 de la ciudad de Bogotá, y en la dirección de correo electrónico:
German@gmail.com.
El apoderado se notificará en la calle 127 A #18B-81, barrio La Calleja, de la ciudad de Bogotá. Dirección de correo
electrónico: camilajaimes@gmail.com.
De usted señor Juez,
ANEXOS:
1. Podeespecial otorgado a María Camila Jaimes
Bogotá, 3 de octubre del 2020

Señor(a)

JUEZ DE FAMILIA DE BOGOTÁ- D.C.

Demandante: Ana María.


Demandado: Germán.

Asunto: Otorgamiento de Poder

Yo, Germán mayor de edad, domiciliado en la ciudad de Bogotá e identificado con la cédula de ciudadanía
Nro. 1.342.659.975 de Bogotá, D.C., comedidamente manifiesto que mediante el presente escrito confiero
PODER ESPECIAL AMPLIO Y SUFICIENTE, en cuanto a Derecho se requiere, a MARIA CAMILA
JAIMES, mayor de edad, domiciliado en la ciudad de Bogotá e identificado con la cédula de ciudadanía
1.005.340.035, abogado en ejercicio con Tarjeta Profesional No. 154.658 del Consejo Superior de la
Judicatura, reconocida para que en mi nombre inicie y lleve hasta su terminación la Demanda en
Reconvención del divorcio y, todos el proceso de divorcio iniciando desde la contestación de la demanda
que versa en mi contra.

Mi apoderado queda facultado para solicitar medidas cautelares, desistir, conciliar, renunciar, reasumir,
notificar(se), retirar la demanda con todos sus anexos, transigir, recibir, sustituir el poder con todas sus
facultades en otro abogado y todas las demás facultades inherentes para el buen desarrollo de la función de
apoderada y en beneficio de los intereses míos como representado y todo cuanto en Derecho sea necesario
para el cabal cumplimiento de este mandato.

Sírvase, por tanto, Señor(a) Juez(a), reconocerle personería a mi apoderada, en los términos del presente
escrito y para todos los efectos de la ley.

Atentamente,

Acepto el poder.
2. Tarjeta profesional de abogado
3. Cédula de German López Salcedo
4. Pruebas

1.1 Copia de los comprobantes del pago de tiquetes


1.2 Copia de los recibos del pago de la educación de Cristina al Colegio Santa Guadalupe
1.3 Copia de los recibos de servicios públicos
1.4 Copia de la tarjeta de propiedad de los carros de alta gama (1).

1.4 Copia de la tarjeta de propiedad de los carros de alta gama (2).


1.5

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