Está en la página 1de 59

1

SECRETARÍA DE AGRICULTURA, GANADERÍA,


DESARROLLO RURAL, PESCA Y ALIMENTACIÓN
Lic. Enrique Martínez y Martínez
Secretario
Lic. Jesús Alberto Aguilar Padilla
Subsecretario de Agricultura y Ganadería
Lic. Arturo Osornio Sánchez
Subsecretario de Desarrollo Rural
Lic. Ricardo Aguilar Castillo
Subsecretario de Alimentación y Competitividad
Lic. Marcos Augusto Bucio Mujica
Oficial Mayor
M. V. Z. Efraín del Castillo del Valle
Delegado Federal de la SAGARPA en Durango

INSTITUTO NACIONAL DE INVESTIGACIONES


FORESTALES, AGRÍCOLAS Y PECUARIAS
Dr. Pedro Brajcich Gallegos
Director General
Dr. Salvador Fernández Rivera
Coordinador de Investigación, Innovación y Vinculación
M. Sc. Arturo Cruz Vázquez
Coordinación de Planeación y Desarrollo
Lic. Luis Carlos Gutiérrez Jaime
Coordinador de Administración y Sistemas

CENTRO DE INVESTIGACIÓN REGIONAL NORTE CENTRO


Dr. Homero Salinas González
Director Regional
Dr. Uriel Figueroa Viramontes
Director de Investigación
Dr. José Verástegui Chávez
Director de Planeación
Lic. Daniel Santillán Aguilar
Director de Administración

CAMPO EXPERIMENTAL VALLE DEL GUADIANA


M. C. Andrés Quiñones Chávez
Director de Coordinación y Vinculación en Durango
SELECCIÓN DE ÁRBOLES SUPERIORES
DEL GÉNERO Pinus

Ing. H. Jesús Muñoz Flores


Investigador del Programa Nacional de Investigación
Plantaciones y Sistemas Agroforestales. Campo
Experimental Uruapan. Centro de Investigación
Regional del Pacífico. munoz.jesus@inifap.gob.mx

Dr. José Ángel Prieto Ruíz


Investigador del Programa Nacional de Investigación
Plantaciones y Sistemas Agroforestales. Campo
Experimental “Valle del Guadiana”. Centro de
Investigación Regional del Norte.
prieto.jose@inifap.gob.mx

M.C. Andrés Flores García


Investigador del Programa Nacional de Investigación
Plantaciones y Sistemas Agroforestales. Centro Nacional
de Investigación Disciplinaria en Conservación y
Mejoramiento de Ecosistemas Forestales.
flores.andres@inifap.gob.mx

Ing. J. Trinidad Sáenz Reyes


Investigador del Programa Nacional de Investigación
Plantaciones y Sistemas Agroforestales. Campo
Experimental Uruapan. Centro de Investigación
Regional del Pacífico. saenz.j.trinidad@inifap.gob.mx

M.C. Manuel Alarcón Bustamante


Investigador del Programa Nacional de Investigación
Plantaciones y Sistemas Agroforestales. Sitio
Experimental La Campana Madera. Centro de
Investigación Regional del Norte Centro
alarcon.manuel@inifap.gob.mx

i
Instituto Nacional de Investigaciones Forestales,
Agrícolas y Pecuarias
Progreso 5, Barrio de Santa Catarina
Delegación Coyoacán
C. P. 04010, México, D. F.
Tel. 01 (55) 38 71 87 00
ISBN 978-607-37-0236-2

Folleto Técnico Núm. 69


Primera Edición 2013

No está permitida la reproducción total o parcial de esta


publicación, ni la transmisión de ninguna forma o por
cualquier medio, ya sea electrónico, mecánico, fotocopia,
por registro u otros métodos, sin el permiso previo y por
escrito de la institución.

Impreso y hecho en México.

ii
ÍNDICE
Página

1. INTRODUCCIÓN 5
2. SISTEMAS DE SELECCIÓN DE ÁRBOLES SUPERIORES 6
2.1. Definiciones 6
2.2. Criterios para seleccionar árboles superiores 7
2.3. Selección de árboles superiores en rodales coetáneos 7
3. CONSIDERACIONES PARA LA SELECCIÓN DE ÁRBOLES SUPERIORES 8
4. SISTEMA DE SELECCIÓN “ÁRBOL DE COMPARACIÓN O TESTIGO” 10
4.1. Criterios para la selección de árboles por comparación o testigo 10
4.2. Personal técnico, equipo y materiales 11
4.3. Selección de árboles superiores 12
4.4. Toma de datos 15
4.4.1. Características cuantitativas 15
Diámetro normal con corteza a 1.30 m 15
Altura total y altura de fuste limpio (poda natural) 15
Volumen 16
Edad 17
Tamaño de copa (proyección de copa) 17
Distancia entre árboles superiores 18
Distancia entre el árbol superior y testigos 18
4.4.2. Características cualitativas 20
Rectitud del fuste 20
Diámetro y ángulo de ramas 21
Forma de la copa 22
4.5. Evaluación de árboles candidato a superior 22
Diámetro normal con corteza a 1.30 m 22
Altura total árbol 22
Volumen total árbol (VTA m 3) 23
Copa 24
Rectitud del fuste 24
Poda natural 24
Diámetro de ramas 24
Ángulo de ramas 24
Ajuste por edad 24
5. SANCIÓN DE ÁRBOLES SUPERIORES 26

iii
6. CODIFICACIÓN DE ÁRBOLES SUPERIORES O PLUS 28
7. SELECCIÓN EN RODALES MULTIETÁNEOS O MEZCLADOS 30
7.1. Selección por regresión 31
7.2. Sistema del árbol madre 33
7.3. Sistema de puntaje subjetivo 34
8.ANALISIS DE COSTOS PARA LA SELECCIÓN DE ÁRBOLES
SUPERIORES 34
9. LITERATURA CITADA 37
10. ANEXO 41

iv
1. INTRODUCCIÓN

Debido a que la demanda nacional de semilla forestal


aumenta año con año, es necesario incrementar la
producción de germoplasma de calidad, a través del
establecimiento de áreas semilleras y de huertos
semilleros. Esto permite contar con fuentes permanentes
de abastecimiento de germoplasma, las cuales tienen un
incremento en la ganancia genética del 5 al 50%,
dependiendo de la estrategia de mejoramiento genético
utilizada.

Normalmente los programas de mejoramiento genético


forestal se desarrollan a través de varias estrategias, lo
que permite que a futuro se tengan plantaciones más
productivas, con respecto a las obtenidas con
germoplasma colectado de rodales semilleros. En el caso
de los huertos semilleros, los materiales a propagar, ya
sea semilla o yemas, se obtienen de árboles superiores,
ya sean plus o elite. De manera general, los huertos
semilleros se generan de la selección de 40 a 60 árboles
(Droppelmann, 2012). En este folleto se describen los
pasos a seguir para seleccionar árboles superiores de las
especies del género Pinus, con base en la experiencia
que se ha generado en México y en otros países.

1
2. SISTEMAS DE SELECCIÓN DE ÁRBOLES
SUPERIORES

2.1. Definiciones

Para clarificar algunos términos que se utilizarán en este


capítulo, a continuación se presentan algunas
definiciones:

Árbol candidato. Es aquel que ha sido seleccionado


tentativamente para evaluarlo debido a sus cualidades
fenotípicas deseables, pero que aún no se ha valorado o
sancionado (Zobel y Talbert, 1988; Maynard, 1996).

Árboles testigo o de comparación. Son árboles que se


localizan en el mismo rodal, tienen casi la misma edad y
crecen en el mismo sitio o en un sitio mejor que el árbol
candidato; se utiliza como patrón para valorar al árbol
candidato. Los árboles seleccionados como árboles
testigo son los mejores del rodal, con características
similares a los árboles “comerciales” que se utilizan en un
aprovechamiento (Zobel y Talbert, 1988).

Árbol selecto, superior o plus. Son árboles que


después de evaluarlos (sancionados) se recomiendan
para utilizarlos en el establecimiento de huertos de
investigación o de producción. Posee un fenotipo superior
para favorecer el crecimiento, forma, calidad de la

2
madera y otras características deseables, y parece ser
adaptable. Sin embargo, no se ha probado su valor
genético, aunque son altas las posibilidades de que
posea un buen genotipo para heredar características
deseables (Zobel y Talbert, 1988; Maynard, 1996;
INFOR, 1998).

2.2. Selección de árboles superiores en rodales


coetáneos
Para seleccionar árboles superiores se utilizan varias
técnicas y su elección depende de varios factores entre
los cuales destacan: a) Características de crecimiento de
la especie, b). Situación actual de manejo del bosque, y
c) Variabilidad y patrón hereditario de las características
importantes, según los objetivos del programa de
mejoramiento genético forestal (Zobel y Talbert, 1988).

Por otro lado, los sitios donde se seleccionan los árboles


superiores son de dos tipos y cada uno de ellos requiere
diferentes sistemas de selección en la primera
generación, según Zobel y Talbert (1988):

a). Rodales naturales coetáneos originados de semilla no


mejorada, o plantaciones donde se desconoce el origen
ancestral o procedencia de los árboles.

3
b). Rodales inconetáneos, dispersos u originados por
brotes, donde se desconoce el origen ancestral de los
árboles. Se incluye aquellos rodales que poseen especies
que crecen entremezcladas y donde se carece de árboles
testigos.

Independientemente del sitio, la búsqueda de los árboles


debe hacerse de forma sistemática en los mejores
rodales disponibles para el inicio de programa de
mejoramiento genético.

2.3. Criterios para seleccionar árboles superiores

Mergen (1959), señala que los árboles en los huertos


semilleros se seleccionan atendiendo a caracteres como:
resistencia a enfermedades, crecimiento rápido, forma
del fuste, poda natural y alta densidad de la madera.
Estos árboles se eligen basándose en el aspecto externo
(fenotipo), y son fuente de semilla y polen para ensayos
de progenie y esquejes para la propagación vegetativa,
además permiten preservar plasma germinativo de
calidad para futuras generaciones.

Giertych (1967), Zsuffa (1975) y Butcher (1977), reportan


que en la mayoría de las especies puede obtenerse
rápidamente un mejoramiento considerable en la rectitud
del fuste, resistencia a las enfermedades, calidad de la

4
madera y adaptabilidad a ambientes adversos o
tolerancia a las plagas, a través de la selección y
permitiendo que exista fecundación (polinización) cruzada
entre los mejores árboles.

Zobel y Talbert (1988), consideran que las técnicas


utilizadas en el mejoramiento genético forestal, para
encontrar y seleccionar árboles superiores, dependen de
los tipos de rodales en los cuales se realiza. Los mismos
autores enfatizan que el sistema de “Árboles testigo o por
comparación” se debe utilizar en rodales coetáneos. La
búsqueda de los árboles candidatos se realiza
sistemáticamente en todos los rodales, sin importar la
calidad de estación, ya lo que se busca es la expresión
genética de los individuos; su comparación se realiza con
los cinco mejores árboles testigo circundantes de la
misma especie, tomando como base las condiciones de
competencia similares a las del árbol candidato (clima,
suelo y topografía). Asimismo, señalan que para rodales
mezclados o multietáneos, se deben utilizar otros
métodos como el “sistema de selección por regresión” o
el “sistema de puntaje subjetivo”, aunque este último
resulta en menor ganancia genética.

3. CONSIDERACIONES PARA SELECCIONAR


ÁRBOLES SUPERIORES
5
A continuación se presentan algunas consideraciones,
propuestas por Zobel y Talbert (1988), Ipinza (1988) y
Flores (2000), para seleccionar los árboles.

a). Obedecer a un Programa de Mejoramiento Genético,


con sentido de convicción y continuidad, con
objetivos precisos y claros. Seleccionar sin objetivos
claros propicia pérdidas económicas.

b). Analizar las características botánicas y anatómicas de


la especie a seleccionar, para evitar confusión de
identificación con otras especies.

c). Contar con información y observaciones de la


variación de las características fenotípicas intra e
interespecífica (estudios de variación morfológica).

d). La selección de rodales se facilita cuando se cuenta


con información sobre aspectos ecológicos y la
distribución de la especie.

e). Conocer la situación legal del rodal o áreas forestales,


ya que la presencia de litigios puede originar
problemas.

6
f). Realizar la selección en rodales coetáneos, para evitar
confusión de las expresiones fenotípicas con los
efectos de la edad (en edades juveniles el fenotipo
está parcialmente definido; por lo tanto, es necesario
esperar algún tiempo, que puede estar sobre la base
de un turno o de un estado de madurez
reproductiva).

g). Hacer la selección en rodales maduros, ya que


presentan un fenotipo definido.
h). Buscar los árboles selectos en rodales de la misma
condición ambiental que aquellas donde se van a
establecer las plantaciones de semilla mejorada.

h). Realizar, de preferencia, la selección en rodales


puros.

i). El tamaño del rodal en el cual se puede localizar el


árbol superior no es primordial, siempre y cuando se
tenga el tamaño suficiente para elegir árboles testigo
o por comparación.

k). Buscar el soporte de prestadores de servicios técnicos


forestales locales o propietarios, que faciliten
personal de apoyo con conocimiento de los rodales
bajo estudio.
7
l). Los árboles a seleccionar deben ser dominantes y que
presenten indicios de producción de semillas (conos
adheridos a las ramas), para asegurar que producen
semillas y que pueda utilizarse si la estrategia es a
través de reproducción sexual. De igual manera, ser
cuidadoso al elegir la mejor forma de la copa de los
árboles, sobre todo cuando se tenga contemplado
realizar colecta de yemas o púas (reproducción
asexual).

m). El sistema de selección de “árboles testigo o por


comparación” tiene restricciones cuando los rodales
son incoetáneos, bajo estas condiciones se sugiere
utilizar el sistema de “selección por regresión” o el
sistema de “puntaje subjetivo”, aunque este último
resulta en menor ganancia genética.

4. SISTEMA DE SELECCIÓN “ÁRBOL DE


COMPARACIÓN O TESTIGO”
4.1. Criterios para la selección de árboles por
comparación o testigo

Para el uso de este sistema de selección es importante


considerar los siguientes criterios:

8
a). La búsqueda y selección de árboles superiores se
debe realizar en rodales coetáneos.

b). La selección de los árboles candidatos a clasificarse


como superiores y de comparación o testigos, deben
ser elegidos entre el estrato dominante o
codominante.

c). Los árboles empleados como comparación y/o


testigos con el árbol superior son los cinco mejores
de la misma especie, situados a menos de 25 a 50 m
de distancia del árbol superior.

d). El árbol superior y los árboles que se comparan deben


ser de la misma edad, o bien la diferencia no debe
exceder a cuatro años.

e). Se debe dejar un mínimo de 100 m entre los árboles


seleccionados, para reducir la consanguinidad por
seleccionar árboles cercanos.

f). Las condiciones del sitio como calidad de estación,


pendiente, densidad y las del suelo como fertilidad y
humedad, deben ser similares para los árboles
testigos y el candidato.
9
g). Para cuantificar el volumen, es necesario contar con
tablas de volúmenes locales por especie y región.

En rodales coetáneos la selección individual tiene varias


ventajas en relación a rodales mezclados: a) Se tiene la
certeza de que la edad no diferirá ampliamente entre
árboles y que las expresiones relativas del crecimiento,
forma, tolerancia a las enfermedades y adaptabilidad, no
se confundirán con los efectos de la edad, b) Los árboles
crecen en situaciones competitivas similares a las que se
encuentran cuando se establecen en plantaciones
comerciales. Asimismo, en este tipo de rodales puede
utilizarse el sistema de selección “Árbol de comparación“,
en el cual los árboles considerados para la selección se
comparan con los mejores del rodal.

4.2. Personal técnico, equipo y materiales


Para seleccionar los árboles superiores es necesario
contar con el personal técnico y equipo indispensable
para este tipo de estudios. En general, se requiere que la
brigada de trabajo, como mínimo, esté conformada por
cuatro personas: un jefe de brigada, encargado de tomar
las decisiones de las actividades a realizar y de la
planeación de las mismas; un técnico o auxiliar del jefe
de brigada y dos ayudantes.
10
Para trasladarse a los sitios de interés, se requiere de un
vehículo pick-up, de preferencia de doble tracción, y
considerar también el equipo siguiente: GPS, clinómetro,
brújula, cinta diamétrica, taladro de Pressler, binoculares,
así como longímetro de 50 m, pintura acrílica de color
rojo y amarilla, derroñador, brochas y formatos (Figura 1).

Figura 1. Equipo forestal necesario para la selección de


árboles superiores.

4.3. Selección de árboles superiores

11
La búsqueda de los árboles candidato y testigos, se
realiza sistemáticamente en todas las condiciones del
rodal, para ello se recorren los rodales propuestos con la
finalidad de evitar que se ignoren individuos candidatos.
Se recomienda realizar el recorrido en dirección al Norte,
partiendo de uno de los vértices del rodal, el jefe de
brigada y su auxiliar elegirán los árboles candidato y los
cinco testigos. Además los dos auxiliares se encargarán
de realizar la toma de datos (Figura 2).

Figura 2. Distribución de los árboles candidato a superior


y testigos en rodales naturales.

12
La distancia mínima entre árboles candidato debe ser
mayor a 100 m en rodales naturales, incluidas las áreas
semilleras. La distancia del árbol candidato con los
testigos no deberá sobrepasar los 50 m. Una vez tomada
la decisión de evaluar un árbol, se seleccionan los cinco
mejores árboles (testigo o de comparación) del rodal que
se encuentren cercanos al árbol candidato; es decir,
éstos deben tener las características y dimensiones
similares al árbol a evaluar. Los cinco árboles testigo, al
igual que el árbol candidato, deben tener una copa en
posición dominante o codominante y estar creciendo en
condiciones de competencia similares a las del árbol
candidato (misma condición de suelo, clima y topografía).

Si el rodal se localiza en un sitio relativamente uniforme,


localizar los árboles testigo en un círculo alrededor del
árbol candidato, si esto no es posible, seleccionar los
testigos en cualquier punto dentro del círculo (Figura 3).

13
Figura 3. Formas de seleccionar los árboles testigo o de
comparación.

Cuando el candidato se ubica en un terreno inclinado, los


árboles por comparación deben seleccionarse en la
misma curva de nivel que el candidato, o cuesta abajo, si
esto no es posible entonces hacerlo a un costado (Figura
3).

En la práctica, algunas veces es difícil encontrar los cinco


árboles testigo o por comparación, en este caso con tres
árboles es suficiente para realizar la comparación.

Para seleccionar los árboles candidato, es necesario


considerar las siguientes características:

a). Árboles dominantes.

b). Con fuste recto, no bifurcado ni torcido.


14
c). Copa redonda, tamaño de la copa cercano o igual a 1/3
de la longitud total del árbol

d). Inserción de las ramas con el fuste lo más cercano a


un ángulo de 90°.

e). Diámetros mayores al promedio de los árboles testigo.

f). Altura de fuste limpio, superior al de los testigos.

g). Árboles sanos, libres de plagas y enfermedades.

Cuando la selección se realiza en rodales que se


encuentran bajo manejo forestal, la variación fenotípica
entre el árbol candidato y los de comparación es poca,
por tal motivo la selección se debe concentrar en el
criterio de superioridad en volumen (Droppelmann, 2012).

4.4. Toma de datos

4.4.1. Características cuantitativas.

Los datos de los árboles candidato y testigos deben


recabarse en el formato correspondiente (Anexo 1),
registrando las características cuantitativas siguientes:

a). Diámetro normal con corteza. Se mide con cinta


diamétrica y para facilitar los cálculos, los valores que

15
se obtengan se redondearán a números enteros
(Figura 4).

Figura 4. Medición del diámetro normal a 1.30 m de los


árboles candidato y testigos.

b). Altura total y altura de fuste limpio. Se mide con


pistola haga o clinómetro o algún aparato para medir
estas variables (Figura 5 y 6).

16
Figura 5. Medición de la altura total árbol de los árboles
candidato como testigos con Pistola Haga.

Figura 6. Medición de altura de fuste limpio.

17
c). Volumen. Esta característica está determinada por la
relación que existe entre el diámetro y la altura del
arbolado. Entre mayor sea el diámetro y la altura, el
volumen total árbol (VTA) también será mayor. Debe
emplearse tablas de volumen por especie, de las
localidades donde se encuentran los árboles de
interés.

d). Edad. Se estima mediante extracción de una viruta


con el taladro de Pressler de los árboles candidato y
testigos, a 1.30 m de altura (Figura 7).

Figura 7. Conteo de los anillos de crecimiento en viruta


obtenida para obtener la edad.

18
En la viruta obtenida de cada árbol se cuenta el número
de anillos de crecimiento. Posteriormente, en gabinete, se
promedia el total de las edades muestreadas y se
comparan con las edades de los candidatos con el
promedio de los testigos, esto permite determinar la
condición del árbol candidato respecto a los testigos.

e). Tamaño de copa (proyección de copa). Con la ayuda


de un longímetro se mide la copa en dirección norte
(N) a sur (S) y de este (E) a oeste (W), a partir del
fuste visualizando hasta donde se extienden las
ramas más largas de la copa (Figura 8).

Figura 8. Medición del tamaño de copa de los árboles


candidato
y testigos.

19
f). Distancia entre árboles superiores. Se mide con la
ayuda de un longímetro de 50 m, para reducir la
posibilidad de obtener árboles que sean parientes
cercanos y evitar la consanguinidad. Los árboles
seleccionados como superiores deben localizarse a
una distancia mínima de 100 m (Figura 9).

Figura 9. Medición de la distancia entre los árboles


candidato a superior.

g). Distancia entre el árbol superior y testigos. Se mide la


distancia del árbol candidato a cada uno de los
árboles testigos. Esta puede ser variable, aunque
algunos autores recomiendan que se realice en un
radio de 25 a 50 m, preferentemente hay que elegir
los cinco árboles testigo para la comparación en un
20
radio menor a 50 m. Esta distancia máxima es con la
finalidad de tener la certeza de que éstos están
creciendo en condiciones similares a las del
candidato (Figura 10).

Figura 10. Distancia entre los árboles candidato a


superior y árboles testigos o de comparación.

Una vez seleccionados los árboles candidatos a superior,


se tomarán sus coordenadas geográficas y altitud, para
ello se utiliza un geoposicionador (GPS), esto permite

21
ubicarlos geográficamente y regresar sin problema a ellos
cuando se realice la recolección de semillas o yemas
(Figura 11).

Figura 11. Ubicación geográfica de árboles candidato a


superior.

4.4.2. Características cualitativas

22
Además de las variables cuantitativas antes
mencionadas, es necesario considerar características
cualitativas como:

a). Rectitud del fuste. Se evalúa subjetivamente en el


árbol candidato y no se juzga en relación con los
árboles testigo o de comparación. Para que el árbol
candidato sea aceptado debe satisfacer un nivel de
rectitud de fuste, sin importar que tan rectos o torcidos
estén los fustes de los árboles testigo. Para cumplir
con una determinación adecuada de la rectitud del
fuste realizar la observación en las cuatro caras (N, S,
E y W), así como al pie del árbol (Figura 12).

Figura 12. Rectitud del fuste de los árboles candidato a


superior.

23
b). Diámetro y ángulo de ramas. Se realiza visualmente
en campo entre los árboles a seleccionar. El árbol
candidato debe presentar un diámetro de ramas menor
al promedio del diámetro de las mismas en los
testigos, así como un ángulo de ramas cercano a 90°
con respecto al fuste (Figura 13).

Figura 13. Forma de la copa (conformación y


ejemplificación del ángulo de inserción de las
ramas en el fuste lo más cercano a formar un
ángulo de 90º) de árboles superiores.

24
c). Forma de la copa. Considera la conformación,
densidad del follaje, dominancia y radio de la copa
(Figura 13). Estas características se evalúan
subjetivamente, comparando en forma visual el árbol
candidato con los cinco testigos (excepto rectitud de
fuste).

4.5. Evaluación de árboles candidato a superior

La evaluación de los árboles candidatos está basada en


los siguientes fundamentos y supuestos (Droppelmann,
2012):

a). La selección de árboles plus es la actividad más


importante de un programa de mejoramiento
genético.

b). La puntuación del candidato para todas y cada una de


las características debe ser calculada en términos
relativos a los árboles de comparación con el objetivo
de cuantificar la plusvalía del candidato.

c). Los efectos ambientales deben ser corregidos al


máximo, para ello es adecuado definir que el área de

25
acción sea homogénea, antes de decidir el radio de
acción a utilizar.

d). Cada característica debe ser ponderada según su


importancia, esto es especialmente válido cuando los
objetivos son muy específicos dentro de un
programa.

e). La certeza de la selección aumenta con la edad del


bosque, de ahí que se sugiera buscar rodales
próximos a la edad de rotación.

f). El árbol seleccionado debe poder ser propagado tanto


vegetativa como generativamente.

Después de recabar la información de campo, se realiza


la evaluación de los árboles candidato a superior,
tomando en cuenta las siguientes variables dasométricas
(cuantitativas y cualitativas):

a). Diámetro normal con corteza (DAP). Por diferencia de


diámetros del árbol candidato y el DAP promedio de
los cinco árboles testigo; se asignará 1 punto por
cada 10 cm que el candidato supere en diámetro, al
promedio de los testigos.

DAP Ac-DAP At

Donde:

26
DAP Ac =Diámetro a la altura de pecho (cm) del
árbol candidato.

DAP At =Diámetro a la altura de pecho (cm)


promedio de los árboles testigo.

b). Altura total árbol. Se registra de los árboles candidato


y de los cinco testigos. Para su cálculo se emplea la
fórmula siguiente:

 Ac  
Altura total árbol=  x 100   100
 At  

Donde:

Ac = Altura total (m) del árbol candidato.

At= Altura total (m) promedio de los cinco árboles


testigos.

Con el resultado de esta fórmula, se obtiene el


puntaje con la siguiente escala de superioridad, sobre
el promedio de los árboles testigo. Para ello se
consideran tres rangos de edades (Cuadro 1).

Cuadro 1. Puntaje para calificar la altura total de los


árboles candidato y testigo.

27
Puntaje
Altura Edad (años)
(%) ≤ 30 31-50 ≥ 51
≤ 5 0 0 0
6a8 1 2 5
9 a 11 2 3 4
12 a 13 3 4 5
14 a 16 4 5 6
17 a 19 5 6 7
20 a 22 6 7 8
23 a 25 7 8 9
≥ 26 8 9 10

c). Volumen total árbol. Volumen estimado a través de


tablas de volúmenes por especie, para cada región.
Para calcularlo se emplea la fórmula siguiente:

Vc
V x100 Donde:
Vt

V= Volumen.

Vc = Volumen total árbol (m3) del árbol candidato.

Vt = Volumen total árbol (m3) promedio de los


cinco árboles testigo.
28
Al árbol candidato se le asigna un punto por cada 10%
que exceda en volumen, con respecto al promedio del
volumen de los cinco árboles testigo.

d). Densidad. Esta variable se evalúa cuando el interés


sea la densidad de la madera. Para esto se deben
extraer muestras de 12 mm al DAP con taladros de
Pressler, en dos puntos opuestos del fuste, en los
árboles candidato y los de comparación.

El puntaje se asigna de la misma forma a la descrita en el


volumen, ya que el rendimiento de la pulpa es resultado
del volumen y de la densidad.

e). Copa. Se registra de 0 a 5 puntos dependiendo de la


superioridad.

f). Rectitud del fuste. Solo considera la rectitud de los


árboles candidatos. Se asignan cero puntos para
fustes torcidos, curvos o pandos y cinco puntos para
fustes rectos. Es importante que el árbol candidato a
superior cumpla al 100% con el requisito de rectitud
del fuste.

g). Poda natural. Si la poda natural del árbol candidato es


similar a la de los testigo, se le asignan 0 puntos y si
es superior, dependiendo de la superioridad, recibe de
uno a tres puntos.

29
h). Diámetro de ramas: Se registra cualitativamente, al
comparar visualmente las ramas del árbol candidato y
las de los cinco testigos. El diámetro promedio de
ramas de los cinco árboles testigo vale 0 puntos; y al
diámetro de ramas menores al promedio de los testigo
se le asignan de uno a dos puntos.

i). Ángulo de ramas. Si el ángulo promedio de los testigos


es menor o igual a 45° vale cero puntos y a medida
que las ramas del candidato tiendan al ángulo recto,
se asignarán de uno a dos puntos.

j). Ajuste por edad. Ningún candidato será aceptado si su


edad supera con cuatro años o más al promedio de los
árboles testigo, ya que es necesario tener la certeza
de que la edad no diferirá ampliamente entre los
árboles y que las características relativas de
crecimiento, forma, tolerancia a las enfermedades y
adaptabilidad, no se confundan con los efectos de la
edad (Zobel y Talbert, 1988). Si el candidato es más
joven que el promedio de los árboles testigo recibe un
punto por cada año.

A los árboles candidato se les asignan puntos en cada


característica mostrada en el formato de selección, con
base en la importancia de la característica y la relación

30
del árbol candidato con los cinco árboles testigo o de
comparación.

Es importante mencionar que en este sistema de “Árboles


testigo o por comparación” se obliga al evaluador a
seleccionar críticamente las características del árbol. La
evaluación realizada no representa la decisión final, si un
árbol se utilizará para un huerto semillero, sólo se podrá
decidir después de haber efectuado pruebas de progenie.

Si en los caracteres de altura, volumen, copa, poda,


diámetro y ángulo de ramas, el árbol candidato es inferior
a los testigos, se le restan puntos usando el mismo
criterio que cuando es superior. Normalmente si un árbol
tiene puntaje negativo en más de un carácter, se rechaza.

La distancia mínima entre árboles candidato debe ser


mayor a 100 m en rodales naturales, incluidas las áreas
semilleras. La distancia del árbol candidato con los
testigos no deberá sobrepasar los 50 m.

Ningún candidato debe presentar síntomas de ataques


por plagas o enfermedades, tampoco debe tener
bifurcaciones, ni malformaciones o defectos en el fuste.

La búsqueda de los árboles candidato debe realizarse


sistemáticamente en el rodal (ya sea de calidad buena,
regular o pobre), pero la comparación entre los testigos

31
deberá hacerse en la misma condición de suelo, clima,
topografía y exposición. De ahí que ésta deba realizarse
entre los árboles más cercanos (vecinos).

Para el caso de las características cuantitativas, las cifras


obtenidas deben redondearse a enteros.

5. SANCIÓN DE ÁRBOLES SUPERIORES

Obtenida la información de los árboles candidato a


superiores considerados para el establecimiento del
huerto semillero, se procede a su sanción, entendiéndose
como el destino final que se dará al material de acuerdo a
los objetivos planteados en el programa de mejoramiento
genético (por ejemplo: madera aserrada, densidad de la
madera, producción de resina o de otras substancias
químicas, entre otros).

La sanción de preferencia debe realizarla personal


técnico calificado, que no haya participado en la selección
de los árboles candidato. Los árboles considerados serán
aprobados o rechazados por este personal, el cual
decidirá en campo si son aptos para ser incluidos en el
establecimiento de huertos semilleros. Este fallo depende
principalmente del fenotipo del árbol; es decir, si un árbol
reúne las condiciones para ser considerado un árbol

32
superior y si existiera algún detalle que hiciera dudar al
sancionador, el árbol podrá ser incorporado al programa
para ser incluido donde con base en el desempeño de su
progenie se decidirá su permanencia en el programa de
mejoramiento genético.

Si el sancionador encuentra que el árbol candidato tiene


un fenotipo sobresaliente, y que no existen dudas
respecto a su superioridad, lo puede recomendar para su
incorporación inmediata al huerto semillero, donde
finalmente los resultados posteriores de las pruebas de
progenie indicarán su permanencia en el huerto.

En términos generales, el sancionador tomará la decisión


en campo de acuerdo al procedimiento siguiente:

a). Verificar que las mediciones sean correctas y que los


árboles testigo o de comparación sean adecuados (de
la misma especie que el candidato y los mejores
árboles del rodal o área semillera).

b). Contar con registros bien elaborados completos


durante la sanción.
c). Cuantificar la superioridad real del individuo selecto de
acuerdo a la situación en la que se encuentre. Evitar
comparaciones con otros candidatos evaluados para
no dudar con esta decisión (recordar que el individuo

33
seleccionado como candidato es superior en su
entorno; es decir, en su ambiente, el cual afecta su
desarrollo).

d). Tener claros los objetivos del programa de


mejoramiento genético, con respecto al material en
proceso de selección.

e). Realizar en conjunto la decisión respecto de la


superioridad de un candidato, ponderando la variable
volumen en primer lugar, pero sin descuidar otras
variables de importancia, como rectitud del fuste o
eficiencia de la copa. Sin embargo, no será válido un
candidato de mucho volumen, pero que la copa esté
viva en más de 2/3 partes del árbol o es muy amplia
(radio de copa), que en parte estaría justificando su
superioridad volumétrica, pero tendría demasiado
nudosidad en el fuste.

Cuidar que el árbol candidato o los de comparación


no se encuentren en una situación privilegiada, como
sería cercanos a un cuerpo de agua o en la parte baja
de una ladera con suelos profundos, lo cual le daría
mejores condiciones de crecimiento.

34
Finalmente, una vez que el sancionador haya tomado la
decisión de incluir el árbol candidato a superior dentro del
programa este se marcará, identificará y se registrará en
un formato diseñado para tal fin (Cuadro 2).

Cuadro 2. Registro de información de los árboles


superiores seleccionados.

Información general

Número de árbol: 1 Especie: Pinus pseudostrobus Lindl. Código de Identificación: P

Recomendado para: Madera aserrada Predio o Paraje:


“Juristzicuaro”

Municipio: Nvo. Parangaricutiro. Coordenadas: Latitud N 19° 45’ 045’’ y Longitud W


102° 21’ 417’’

Estado: Michoacán Altitud: 2,612 m. Exposición: W Pendiente


Media: 5%

Propietario: Comunidad Indígena de Nuevo San Juan Parangaricutiro.

Seleccionador: Ing. Jesús García Sánchez Evaluador: Ing. Isidro Castro


Mendoza

Fecha de evaluación: 15 de enero de 2008

Criterios de selección: Árboles dominantes, vigorosos, de fuste recto, sin bifurcaciones,


buena poda natural, libres de daños por insectos y enfermedades y ángulo de ramas casi
recto.

Distancia promedio del árbol superior a testigos: 27.8 m.

Datos dasométrico del árbol superior


Árbol No Árbol Edad DAP Altura Total Altura de fuste Tamaño de copa Volumen
(No) Inventario (Años) (cm) (m) limpio (m) (m) (VTA m3 )

1 2 71 34 15 13 6.801 54

Así mismo, hacer una ficha técnica (Anexo 2), que


incluya información más precisa del rodal y de los árboles
superiores seleccionados. Además, elaborar un croquis

35
de ubicación de los árboles superiores por rodal, esto
facilitará localizarlos cuando se realicen las actividades
de colecta de púas para injertar los patrones, al
establecer los huertos semilleros clonales, así como
bancos clonales o huertos semilleros para investigación.

6. CODIFICACIÓN DE ÁRBOLES SUPERIORES O


PLUS

La identificación de los árboles superiores en campo,


consiste en marcar con pintura acrílica de color llamativo
(rojo o amarillo) franja alrededor del árbol de
aproximadamente 10 cm de ancho, a una altura
aproximada de 1.40 m de la base del árbol, librando la
altura de pecho (DAP), además de pintar el código
correspondiente de los árboles seleccionados como
superiores. Esta actividad debe realizarse previo a la
cosecha de conos o yemas, y deberán repintarse cuando
lo requiera para que permanezca en forma permanente.

Por ejemplo, para seleccionar los árboles superiores, se


realizará el señalamiento de los árboles con una franja de
color rojo, una letra S de superior, seguida por un guión y
el número de árbol superior en orden progresivo (Figura
14).

36
Figura 14. Marcación de la franja de color rojo y la S de
superior y su numeración correspondiente (1)
para identificar los árboles superiores en
campo.

Con la finalidad de diferenciar los códigos empleados


durante la identificación de las principales especies y de
otras que se pudieran incorporar en un futuro al programa
de mejoramiento genético, se puede utilizar un código
alfanumérico de seis caracteres, donde los tres primeros
indicarán la especie, y los tres últimos el número del
mismo. Por ejemplo el código empleado para Pinus
pseudostrobus sería PSE, desde 001 hasta el “n”
(PSE001, PSE002 hasta PSE099). Mientras que para
Pinus montezumae el código sería PMO.

37
Existen otras formas de codificación como en el caso de
la Comisión Forestal del Estado de Michoacán (COFOM),
que cuenta con 10 delegaciones regionales, para lo cual
una clave que se podría emplear para seleccionar árboles
superiores de Pinus montezumae, sería: MII6, donde M=
a Pinus montezumae, II= correspondería a la delegación
número 2 de la COFOM y 6 sería el número de árbol
correspondiente a esa región o quizás para la especie de
P. pseudostrobus, la clave sería: PVI5, que
correspondería a P= Pinus pseudostrobus, VI= al número
de la delegación forestal y 5= al número de árbol
superior.

Lo más importante para la señalización de los árboles


superiores en campo, es que quien la realice tenga bien
identificado el código o clave de la especie (s) y que la
marca permanezca lo más claro posible para que no
existan dudas durante la colecta de conos o material
vegetativo, ya que ésta se tiene que realizar por árbol y
siempre se deberá tener la identificación correcta de los
árboles superiores que se utilicen en un determinado
Programa de Mejoramiento Genético Forestal.

7. SELECCIÓN EN RODALES MEZCLADOS

38
Con bastante frecuencia, los rodales forestales carecen
de las características adecuadas para utilizarlos en los
programas de selección individual como el que acaba de
describirse para rodales coetáneos. Existen varias
razones para esto (Zobel y Talbert, 1988):

a). Los rodales pueden ser incoetáneos.

b). Las especies deseables pueden estar tan dispersas,


que no se cuenta con árboles para comparación
(testigos).

c). La especie puede ser un rebrote vigoroso y los árboles


que crecen cerca del árbol candidato tener un sistema
de raíces común y el mismo genotipo.

d). Es posible que el rodal esté formado por una mezcla


de especies.

Cuando los árboles crecen en rodales incoetáneos, el


sistema del árbol de comparación no es aplicable. Debido
a que las curvas de crecimiento dentro de una especie
varían con la edad, no es conveniente utilizar
proporciones como el crecimiento en diámetro o altura
por unidad de tiempo para fines comparativos. Además,
la forma del árbol cambia con la edad; en consecuencia,
las características cualitativas no pueden compararse
entre árboles de diferentes edades, provenientes de

39
rodales multietáneos. Sin embargo, raramente se
encuentran rodales que sean verdaderamente
multietáneos y muchos técnicos cometen el error de
suponer que los rodales formados por árboles de
diferente tamaño son multietáneos. Algunos bosques son
coetáneos en su origen y son llevados a condición
multietánea mediante la manipulación realizada a través
de corta selectiva. Incluso dentro de los verdaderos
rodales multietáneos, existe una tendencia a presentarse
una clase de edad predominante (Zobel y Talbert, 1988).

7.1. Selección por regresión

El sistema de regresión es uno de los métodos más


adecuados para evaluar árboles en rodales mezclados,
incoetáneos (Nienstaedt, 1986; citado por Plancarte,
1990). Este sistema requiere la elaboración de tablas
donde se relacione la característica de interés con la
edad del árbol. El método de regresión es de particular
importancia respecto a las características de crecimiento,
ya que las características cualitativas con frecuencia sólo
pueden determinarse con base en el fenotipo del árbol
candidato, sin la necesidad de utilizar árboles para
comparación.
40
Este sistema de selección consiste en muestrear una
cantidad determinada de árboles para una característica
deseada; por ejemplo, crecimiento en volumen en un sitio
determinado, y graficarlos después en relación con la
edad. Es fundamental que se hagan diferentes
regresiones para diferentes sitios (Zobel y Talbert, 1988).
Es posible desarrollar una curva de regresión confiable
para altura o volumen muestreando aproximadamente 50
árboles, siempre que exista una distribución razonable de
grupos de edades. Una vez que ha trazado la curva, la
regresión se utiliza en la forma siguiente:

1. Se selecciona un árbol candidato con base en la


opinión del seleccionador y se miden las características
deseadas, tales como altura o volumen.

2. Se colocan las características en la gráfica de


regresión utilizando la edad y sitio adecuados. Si el árbol
candidato cae a alguna distancia definida arriba de la
línea de regresión es aceptable, y cuando más arriba
quede colocado, más conveniente es y cuando el valor de
la característica queda abajo del nivel aceptable, el árbol
se rechaza (Figura 15).

La regresión lineal, se puede realizar a través del


programa de cómputo denominado Curve Expert ver.1.4,
en el cual se introducen los datos de edad en el eje de las

41
X y la variable volumen, altura, etc., en el eje de las Y,
finalmente se obtienen los datos de la regresión lineal
(Desviación estándar y coeficiente de regresión) así como
la gráfica (curva de regresión) (Figura 15).

V
11.06 y = -2.916116 + 0.12335476 (x)

9.22 r = 0.72803955
o
S = 1.20811412
7.37

l
5.53

u
3.69

1.84
m
0.00
0.0 10.8 21.6 32.5 43.3 54.1 64.9

e Edad (años)

Figura 15. Curva de regresión lineal para las variables


edad-volumen de árboles candidato a
superior de Pinus pseudostrobus (Modelo de
regresión; y=a + bx + ε).

Aunque el sistema de regresión funciona bien, requiere


un trabajo previo considerable. Para complicar la
situación, algunas especies, especialmente las
latifoliadas de porosidad difusa y de lugares húmedos,
42
carecen de anillos de crecimiento definidos, lo cual
dificulta determinar su edad. Cuando esto ocurre, y si se
desconoce la historia o la edad de establecimiento del
rodal, es posible hacer una estimación razonable de la
edad si crecen árboles con anillos porosos
entremezclados en el rodal. Estos pueden utilizarse para
determinar la edad del rodal (Zobel y Talbert, 1988).

El sistema de regresión es más difícil de utilizar que el


método del árbol por comparación, pero sin duda se
utilizará con más frecuencia en la medida que se
practique más habitualmente el mejoramiento genético
forestal (Zobel y Talbert, 1988).

7.2. Sistema del árbol madre

En caso de que no exista urgencia inmediata de obtener


grandes cantidades de semilla mejorada, el sistema de
selección del árbol madre puede ser mejor, el cual
consiste en localizar árboles sobresalientes, que en
general tienen menos calidad que los árboles
seleccionados bajo el método del sistema de regresión o
del árbol por comparación. Una vez seleccionados los
árboles superiores, debe obtenerse semilla de éstos,
propagarla y establecer las plántulas mediante pruebas
genéticas. Después de esto, utilizar los mejores árboles
43
progenitores o los más sobresalientes de las mejores
familias en un huerto vegetativo. Si se desarrolla
convenientemente, la prueba de progenie puede refinarse
hasta crear un huerto semillero sexual (o de plántulas)
(Zobel y Talbert, 1988).

La principal desventaja del sistema del árbol madre es


que se requiere bastante tiempo antes de obtener
cantidades comerciales de semilla para los programas de
plantaciones. Las pruebas deben llevarse a cabo durante
un periodo largo, por lo menos la mitad de la edad de
rotación (Zobel y Talbert, 1988), aunque existen
evidencias que un tercio del turno puede ser suficiente
para lograr buena respuesta a la selección, y obtener
valores de mejoramiento adecuados para calificar a los
progenitores, periodo que usan algunas cooperativas de
mejoramiento como CAMCORE. También da buenos
resultados para el caso de especies que crecen a
rotaciones muy cortas, como eucalipto, teca, melina o
pinos tropicales.

Si se utiliza el concepto del huerto sexual, el tiempo para


la producción de semillas puede acortarse, pero
disminuyen las ganancias potenciales debido a que el
diferencial de selección es más pequeño en relación al

44
huerto asexual. El sistema del árbol madre también
puede dar buenos resultados en rodales altamente
explotados, donde se cuenta con pocos fenotipos
adecuados. También puede ser el mejor método en el
caso de características como resistencia a
enfermedades, la cual sólo puede determinarse a través
de pruebas (Zobel y Talbert, 1988). De cualquier forma,
los árboles que sean seleccionados como superiores
deberán tener su evaluación de progenies o clonal, ya
que se necesita determinar que dichos árboles transmitan
su superioridad a su descendencia.

7.3. Sistema de puntaje subjetivo

Las personas que conocen bien a una especie en


particular, pueden efectuar una tarea aceptable de
selección basándose únicamente en el juicio de quien
realiza la selección respecto a lo que constituye un buen
árbol. Sin duda, esto es posible, pero quien hace la
selección debe conocer bien la especie y ser imparcial.
La tendencia, cuando se utiliza el sistema subjetivo, es
dedicar el menor tiempo posible a la búsqueda de los
árboles candidatos, seleccionando así árboles menos
sobresalientes con diferenciales de selección más
pequeño. Esto da como resultado menos ganancia

45
genética. El sistema por puntaje subjetivo suele utilizarse
en latifoliadas, pero da buenos resultados sólo si la
selección la hace una persona experimentada y dedicada
a encontrar los mejores árboles posibles (Zobel y Talbert,
1988).

8. ANALISIS DE COSTOS PARA LA SELECCIÓN DE


ÁRBOLES SUPERIORES

Los costos para seleccionar árboles superiores se


muestran en el Cuadro 3, con las actividades que se
requieren y su costo estimado con el sistema de
selección de árbol testigo o de comparación en especies
del género Pinus, por ser el más utilizado en México.

46
Cuadro 3. Estimación de costos para la selección de
árboles superiores con el sistema de
selección “Árbol de comparación o testigo”
Concepto Unidad de medida Costo Total
(Personal técnico) Unitario ($)
($)

Selección de árboles * Una brigada 52, 500


candidato a superior durante 15 días,
para seleccionar 60
árboles candidatos a
superior.
Evaluación en gabinete de los 5 días en gabinete 2,500/Día 12,500
árboles candidato a superior
1 ingeniero y 1 3,300/Día 19,800
Marqueo de los árboles técnico, durante 6
superiores días

Elaboración de resultados de Un servicio 42,000 42,000


la selección de árboles profesional
superiores incluye ficha
técnica (ubicación geográfica,
datos dasométricos, resultados
de la evaluación y croquis de
los árboles superiores).
TOTAL 126,800
* La brigada se compone de 1 ingeniero forestal, 1 técnico y 2 auxiliares de
campo

Cuadro 4. Salario estimado del personal técnico/ día*

Personal Monto
($)($)C
Ingeniero Forestal 1,000.00
Técnico Forestal 400
Trabajador de campo 150

. *El costo estimado por árbol superior evaluado es de


aproximadamente $ 2,113.00.

47
Se considera la selección de 60 árboles superiores, por
ser el número promedio de genotipos que se requieren
para el establecimiento de un huerto semillero. Este costo
podrá incrementarse a medida que la distancia a los
rodales sea más grande, respecto al lugar donde se
tenga el personal técnico capacitado para realizar la
selección. Para este caso se considera una distancia
máxima de 120 km.

No se incluye el costo de la sanción de los árboles


superiores, debido a que ésta la deberá realizar personal
técnico calificado, que no haya participado en la selección
de los árboles candidato.

9. LITERATURA CITADA

Butcher T., B. 1977. Gains from Pinus pinaster


improvement program in Western Australia. 3er.
World Consul. on Forest Tree Breeding.,
Canberra, Australia. 78 p.

Droppelmann, F. 2012. Inicio de un programa de


mejoramiento genético forestal. Universidad
Austral de Chile. Valdivia, Chile. 20 p.

Flores L., C. 2000. Selección de árboles superiores en el


Estado de Chihuahua. In: Primer Congreso
Nacional de Reforestación. PRONARE-
SEMARNAT. México. 4 p.

48
Giertych M., R. 1967. Genetic gain and methods of forest
tree seed production. Sylvan. 110. (11): p. 59-
64.

Instituto Forestal (INFOR). 1998. Lenga genética y


silvicultura. Boletín informativo. Vol. 1. No. 1.
INFOR-Proyecto FONDEF. Chile. 5 p. In:
http://www.infor.cl/webinfor/investigacion/apoyo_
proyectos/circu1.pdf (08de Febrero de 2006).

Ipinza C., R. H. 1988. Mejoramiento Genético Forestal:


Bases teóricas para la selección de árboles plus.
Serie Técnica / no. 42. Programa CONIF-
MINAGRICULTURA sobre Investigaciones en
Semillas de Especie Forestales INSEFOR. Santa
Fe de Bogotá, Colombia. 84 p.

Maynard, C. 1996. Glosario de genética. Apuntes: Curso


Mejora Genética Forestal Operativa. Universidad
Austral de Chile. Chile. pp. 403-426. Disponible:
In:
http://www.genfys.slu.se/staff/dagl/Glossaries/Gl
osario.doc(15 de Febrero de 2006).

Mergen, F. 1959. Investigaciones sobre genética de los


árboles forestales. Revista internacional de
silvicultura e industrias forestales. UNASYLVA.
13. (2):1-10. FAO. Roma. In:
http://www.fao.org/documents/show_cdr.asp?url
_file=/docrep/x5391s/x5391s04.htm (22 de
Noviembre de 2005).

Plancarte B., A. 1990. Selección de árboles superiores.


In: T. Eguiluz P. y A. Plancarte B. (Eds):
Mejoramiento Genético y Plantaciones

49
Forestales. Memoria. Centro de Genética
Forestal, A. C. Chapingo. Edo. de México. pp.
51-58.

Zobel B., J. y T. Talbert J. 1988. Técnicas de


Mejoramiento Genético de Árboles Forestales.
Editorial Limusa. México. pp. 199-244.

Zsuffa L., R. 1975. Broad sense heritability values and


posible genetic gains in clonal selection of P.
griffithii x P. strobes. Silva Gen. 25(4):85-88.

50
En el proceso editorial de esta publicación colaboraron:

Comisión Editorial del CEVAG:


Presidente: Jesús López Hernández
Vocales: Rigoberto Rosales Serna, José Angel Prieto
Ruíz, Rafael Jiménez Ocampo, Adán Castillo Rosales,
Hilario Flores Gallardo

Coordinador de la información:
José Ángel Prieto Ruíz

Edición:
Dr. José Angel Prieto Ruíz

Revisión técnica:
Nombre: M.C. Andrés Quiñones Chávez
Nombre: M.C. José Angel Sigala Rodríguez

Diseño:
L.I. Zayra Noriega García

Campo Experimental “Valle del Guadiana”


km 4.5 Carretera Durango-El Mezquital
Durango, Dgo., México
Tels. 01 (618) 826-0426, 826-0433 y 826-0435
Correo electrónico: direccion.dgo@inifap.gob.mx

La presente publicación se terminó de imprimir en


Diciembre de 2013 en la imprenta Tradición Impresa.
Avenida Lázaro Cárdenas # 503, Colonia Fátima. C. P.
34060, Durango, Dgo.

Su tiraje fue de 500 ejemplares


51
Investigador Programa de Investigación
M. C. Rafael Jiménez Ocampo Carne de Rumiantes
M. C. Evenor Idilio Cuéllar Robles Frijol y Garbanzo
M. C. Arnulfo Pajarito Ravelero Frijol y Garbanzo
Dr. Rigoberto Rosales Serna Frijol y Garbanzo
M.C. María De La Luz Salazar
Sánchez Hortalizas
Ing. Sergio Rosales Mata Incendios Forestales
M. C. Hilario Flores Gallardo Ingeniería de Riego
M. C. Adán Castillo Rosales Maíz
M. C. Carmen Leticia Mar Tovar Manejo Forestal Sustentable y Servicios Ambientales
M. C. Gerónimo Quiñones Barraza Manejo Forestal Sustentable y Servicios Ambientales
Dr. Enrique Merlín Bermudes Plantaciones y Sistemas Agroforestales
Dr. José Ángel Prieto Ruíz Plantaciones y Sistemas Agroforestales
M. C. José Ángel Sigala Rodríguez Plantaciones y Sistemas Agroforestales
M. C. Homero Sarmiento López Plantaciones y Sistemas Agroforestales
M. C. Saúl Santana Espinoza Sanidad
Dr. Horacio González Ramírez Socioeconomia
M. C. Jesús López Hernández Trigo y Avena

También podría gustarte