C Á T E D R A D E OB R AS H ID R Á ULIC A S
PRESAS DE HORMIGÓN
PRESAS DE GRAVEDAD ALIGERADAS
1. DESCRIPCIÓN
Una presa de gravedad aligerada está compuesta por un conjunto de elementos
estructurales contiguos de perfil aproximadamente triangular, dispuestos en dirección
más o menos paralela al eje del valle, que se ensanchan en el extremo de agua arriba
en forma de cabeza o morro para constituir una pared continua, Figura 1.
Secciones típicas
GM = 1 / 2 H (n M + mM ) H 2
para : H = 2,3 t / m 3 y (n M + mM ) = 0,80
resulta :
FN' = GM = 1 / 2 2,3 0,80 H 2 = 0,92 H 2
Gravedad aligerada: además del peso propio, en una presa de gravedad aligerada
también contribuye a la estabilidad al deslizamiento la componente vertical del empuje
hidrostático sobre el paramento de agua arriba. Esta es igual a:
EV = 1 / 2 n A H 2
Si adoptamos que es el grado de aligeramiento, el peso propio del muro, por unidad
de longitud, será:
GA = (1 − ) GM
Por lo tanto:
FN' = EV + (1 − ) GM
Debiendo ser ambas componentes verticales
iguales resulta:
GT = EV + (1 − )GM = GM EV = GM
Luego:
1 / 2 nA H 2 = 0,92 H 2
Y por último:
nA = 1,84
La mayoría de las veces el nervio está limitado por dos planos trasversales al eje de la
presa, verticales y paralelos, o ligeramente inclinados, de modo que el espesor aumente
hacia los niveles inferiores de conformidad con las exigencias estructurales. La longitud
AC también va acrecentándose con la profundidad, según el talud “n” del paramento de
agua arriba para A y “m” del de agua abajo para C, acoplándose así a las necesidades
de la resistencia en cada nivel de la presa. (Ver Fig. 5.1).
La forma rectangular del nervio en su extremo de aguas abajo es muy frecuente, pero
cuando la obra excede de una cierta altura, su momento de inercia puede no ser
suficiente y se requiere complementarla mediante un pilar de espesor y ancho variables,
ubicado en el extremo de agua abajo de la sección
horizontal a manera de las alas de un perfil doble T.
Su forma es más sencilla que la de la cabeza, pues
no está sometido a la acción de la presión
hidrostática. Consta simplemente de un rectángulo
PQQ'P' que ensancha el nervio, y de las cartelas
Fig. 5.6. Pilar triangulares MN y M'N' cuyo objeto es el de suavizar
la transición, evitando la concentración de tensiones
en los ángulos vivos. Tanto el espesor como el ancho del pilar suelen ir aumentando
desde los niveles superiores del elemento, donde la sección resistente es por lo general
más que suficiente, hasta llegar a tocarse con el pilar vecino en la parte inferior del
muro. Esta disposición, además de contribuir a la resistencia, proporciona un cierto
arriostramiento que resulta muy conveniente para la estabilidad transversal de los
elementos aislados, sobre todo en gargantas con fuerte inclinación de las laderas.
Los elementos abiertos con forma de T simple son de construcción sencilla y permiten el
acceso directo a toda la presa, facilitando su vigilancia y la ejecución de eventuales
reparaciones. Como contrapartida, la estructura presenta una gran superficie expuesta a
la acción nociva de los agentes atmosféricos. Las lluvias, las heladas y otras
inclemencias pueden llegar a deteriorar los paramentos, hasta causar serios daños que
pueden evitarse utilizando elementos en forma de doble T (Fig. 5.8).
Ello equivale a una economía en el costo del 20% al 25%, que resulta muy interesante
en estas obras cuyas inversiones son muy elevadas. En costos resulta entonces:
3 4
C A = Cm ,
4 5
Resultando en término medio, por unidad de volumen
CUA ≥1,10 CUM ; Se refiere al Costo del Metro Cúbico de hormigón.
Como se ve, el ahorro que se logra en el costo, es menor que la disminución en el
volumen.
Cuando la presa es baja, pero el valle es ancho, los contrafuertes pueden proyectarse
bien para esa altura uniforme, ya que muchos elementos tendrán esa altura y es posible
optimizar más la forma de la cabeza para una longitud importante.
En cambio, si la garganta varía mucho la altura, los elementos se diseñarán de acuerdo
con las exigencias del contrafuerte más alto y las dimensiones de la cabeza pesarán
mucho en los más bajos, elevando el umbral económico.
Por ello, el límite de 18 metros de ancho de los elementos, puede variar entre unos 12 y
25 metros, ambos en condiciones muy extremas.
Para calcular las intensidades de las tensiones principales en el punto P cualquiera del
plano horizontal I – I del elemento, Fig. 5.11, se trazan los planos AB y DC paralelos y a
la distancia ½ ∆y encima y debajo de I – I, y en cada uno de ellos se obtienen las
tensiones normales verticales en los paramentos, σy1 y σy2, con las ecuaciones lineales
reproducidas en 5.5. Para lograr la exactitud necesaria, la distancia ∆y entre estos
planos debe ser relativamente pequeña. Luego se traza un plano vertical por P, que
intersecta a AB y CD.
El prisma elemental ABCD limitado por el paramento de agua abajo del elemento
aligerado, los planos horizontales AB y CD y el vertical AD que pasa por P,
representado en la Fig. 5.12, debe encontrarse en equilibrio bajo la acción de las fuerzas
aplicadas sobe él. Estas son:
N y + N y = CD b' e ' dx
T y = (N y + N y ) − N y − G
La tensión media de corte AD en la cara AD, que puede suponerse aproximadamente
igual a P en el punto P si ∆y es pequeño. Se obtiene dividiendo ∆ Ty por el área ∆AAD
de la cara AD del prisma elemental ABCD:
Ty
AD = = P
AAD
Donde: AAD = 1/ 2 (eA + eD ) y
Siendo eA y eD los espesores del elemento en los puntos A y D, respectivamente.
Fig. 5.17. Distribución de las tensiones normales verticales debidas al peso propio y al
empuje hidrostático en una presa de gravedad aligerada.
2.1. JUNTAS.
Los distintos tipos de juntas responden a exigencias funcionales o constructivas, para
adecuar el comportamiento de la estructura a las hipótesis de cálculo, a los
procedimientos de hormigonado discontinuo, y a las variaciones de volumen
ocasionadas por diversas causas.
Si los elementos están provistos con juntas para preservar la estructura columnar, el
comportamiento estructural y las tensiones se aproximan más estrechamente a las
hipótesis teóricas.
Los elementos con juntas tienen la ventaja de:
(1) minimizar las tensiones debidas al asentamiento y a la temperatura,
(2) eliminar la necesidad de cuantiosas armaduras horizontales o inclinadas en el
cuerpo principal del elemento,
(3) facilitar la construcción, y
(4) aproximarse al comportamiento teórico.
El ancho horizontal más conveniente de la columna es del orden de 10 a 12 m,
admitiendo un adecuado curado del hormigón, de modo que cada colada pueda
efectuarse sin riesgo de fisuras por contracción de fraguado.
2.2. ABERTURAS
Deben evitarse las grandes aberturas a través de los contrafuertes. Cuando sean
necesarias pasarelas interiores, las bóvedas de los vanos deberán tener forma circular y
el área perimetral del elemento será conveniente reforzada con armaduras.
Aspecto general de lo obra sobre la margen derecha del río. A la izquierda, en primer
plano, la planta de elaboración, y al fondo, la torre móvil del blondín y la estructura sobre
la que opera.