EFECTOS DE LA REHABILITACIÓN A TRAVÉS DE LA FORESTACIÓN EN LA ESTABILIDAD DE LOS

AGREGADOS DEL SUELO Y CARBONO AGREGADO ASOCIADO DESPUÉS DE INCENDIOS FORESTALES

EN CHINA SUBTROPICAL

Resumen

La recuperación de las reservas de carbono mediante la forestación de tierras degradadas es una

práctica de gestión que puede aplicarse para mitigar las crecientes concentraciones de dióxido de
carbono atmosférico; sin embargo, debido a la presión económica, la mayoría de las plantaciones
se talan en la etapa de crecimiento y se desconoce el efecto de la edad del bosque en la
acumulación de carbono en el suelo. Evaluamos los efectos de la edad de la masa forestal sobre el
carbono orgánico del suelo (COS), la estabilidad de los agregados del suelo y el COS asociado a los
agregados durante la forestación. Recolectamos suelos a lo largo de una cronosecuencia de 10, 20,
40, 60 y 100 años luego de la restauración con P. massoniana luego de incendios forestales en la
región subtropical de China. Los resultados mostraron que los agregados del suelo eran
principalmente macroagregados (> 10 mm, 2-5 mm), y la estabilidad de los agregados del suelo
primero aumentó y luego disminuyó a medida que pasaba el tiempo. La estabilidad de los
agregados del suelo fue máxima a los 20 años después de la siembra. El diámetro medio del peso
(MWD), el diámetro medio geométrico (GMD) y la dimensión fractal (D) fueron 5,90 ± 0,17 mm,
4,25 ± 0,21 mm y 2,10 ± 0,04 mm, respectivamente, para los agregados del suelo en la capa de 0-
20 cm. El contenido de COS aumentó continuamente con el tiempo desde la restauración, y el
almacenamiento de COS se concentró principalmente en los agregados del suelo con tamaños> 10
mm y 2-5 mm. En comparación con los bosques con tiempos de restauración de 10 años, el
almacenamiento de COS en la capa de 0-20 cm en los bosques de 20, 40, 60 y 100 años aumentó
en un 10,10%, 9,57%, 31,39% y 69,40% , respectivamente. En comparación con los bosques con
tiempos de restauración de 10 años, el almacenamiento de COS en la capa de 80-100 cm de
bosques de 20 y 40 años no difirió significativamente, pero los de los bosques de 60 y 100 años
aumentaron en 83,76% y 116,85%, respectivamente. Para los bosques entre 10 y 100 años de
edad, las tasas de secuestro de carbono del suelo fueron 0.33 ± 0.02 (0-20 cm), 0.42 ± 0.07 (20-40

cm), 0.39 ± 0.09 (40-60 cm), 0.33 ± 0.05 (60–80 cm) y 0.28 ± 0.03 (80–100 cm) Mg · C · ha − 1 · a –
1. Concluimos que la acumulación de COS durante la forestación ocurre principalmente en
macroagregados, que tienen una rotación más rápida que los microagregados. Los suelos de los
bosques maduros y sobremaduros todavía tienen una alta tasa de almacenamiento y secuestro de
carbono, especialmente en las capas más profundas del suelo (60–80 cm, 80–100 cm).

INTRODUCCION

El cambio global y el potencial de secuestro de carbono de los ecosistemas terrestres es un tema

científico de gran preocupación para los investigadores internacionales del cambio climático
(Martin et al., 2014; Bai y Zhou, 2020). Como recurso importante de los ecosistemas terrestres, los
bosques del mundo almacenan 861 ± 66 Pg · C − 1 de reserva de carbono, el 44% del cual se
almacena en el suelo forestal (Pan et al., 2011), que desempeña un papel importante en la
regulación y ralentizar el aumento de la concentración de CO2 atmosférico. Bajo la amplia
influencia de los cambios en el clima, la vegetación y la actividad humana, la reserva de carbono
del suelo puede ser un sumidero que almacena carbono o una fuente que emite carbono (Schuma
et al., 2002).

El flujo anual de CO2 liberado por el suelo a través de la respiración representa dos tercios de la
cantidad total de carbono intercambiado entre los ecosistemas terrestres y la atmósfera (Post et
al., 1982). Por lo tanto, pequeños cambios en la reserva de carbono del suelo pueden causar
cambios significativos en la concentración de CO2 atmosférico, afectando la estabilidad del
sistema climático global (Eze et al., 2017). Actualmente, los patrones regionales y las causas de las
fuentes y sumideros de carbono terrestre siguen siendo inciertos (Keeling y Piper, 1996; Schimel et
al., 2001; Houghton, 2007). En China, debido a la deforestación excesiva y la degradación forestal,
el noreste de China se ha convertido en una fuente neta de emisiones de CO2 a la atmósfera
(0,018 ± 0,004 Pg · C · año − 1); por el contrario, el sur de China representa más del 65% del
sumidero de carbono del país, lo que puede atribuirse a los planes de forestación a gran escala
desde la década de 1980 (Piao et al., 2009). Los incendios forestales son perturbaciones naturales
importantes que tienen un impacto importante en el ciclo del carbono (Bond-Lamberty et al.,
2007). Los incendios forestales cambian la cantidad y la tasa de descomposición de la basura en los
ecosistemas forestales y la tasa de descomposición de la materia orgánica del suelo (O’Neill et al.,
2011) y, como resultado, afectan la reserva de carbono orgánico del suelo forestal (COS). En
general, los incendios forestales provocan la pérdida de carbono orgánico en la superficie del suelo
(Cairney y Bastias, 2007; Holden y Treseder, 2012). Sin embargo, en algunos bosques, los incendios
en movimiento queman solo la capa superficial del suelo (0 a 5 cm) y no afectan directamente a la
mayoría de la materia orgánica del suelo (Sawyer et al., 2018). En respuesta a las lluvias recientes,
la intensidad del fuego y el contenido de humedad del suelo cambiarán, lo que afectará el
consumo de humus en la capa superior del suelo (Santín et al., 2016). Durante el proceso de
restauración vegetativa, el carbono orgánico se fijará en la vegetación y el suelo (Shrestha et al.,
2010), y la pérdida de carbono orgánico causada por la respiración del suelo está estrechamente
relacionada con la edad del bosque (Pregitzer y Euskirchen, 2004). Sin embargo, la relación entre

el proceso de secuestro de COS y la duración de la recuperación del bosque después de la

reforestación posterior al incendio no es clara en las regiones subtropicales. Como componente
básico de la estructura del suelo, los agregados del suelo se forman mediante procesos naturales
como la cementación (Shinjo et al., 2000). El SOC es el material cementante de los agregados y
juega un papel importante en la formación y estabilización de la estructura del agregado. En
general, un mayor contenido de COS conduce a una mejor formación y estabilización de los
agregados del suelo (Puget et al., 2008). Las estructuras de agregados de suelo más grandes y
estables pueden ralentizar la descomposición por microorganismos, proporcionar protección física
para el carbono orgánico mineralizado original y facilitar el almacenamiento de carbono orgánico
(Pulleman y Marinissen, 2004).

258/5000
En el rango de <200 ° C, debido a la estabilidad de la materia orgánica del suelo y los aglutinantes
inorgánicos, el daño del fuego de baja intensidad a los agregados del suelo es pequeño e incluso
puede aumentar la estabilidad de los agregados del suelo (Mataix-Solera et al., 2011; Albalasmeh
et al., 2013) . Los incendios de alta intensidad pueden aumentar o disminuir la estabilidad de los
agregados del suelo porque los agregados del suelo pueden degradarse por la combustión de
materiales cementosos, como la materia orgánica del suelo, los compuestos organometálicos y las
secreciones microbianas, o aumentar por la fusión de partículas y la recristalización de minerales
arcillosos (Campo et al., 2008; Mataix Solera et al., 2011). La estrategia de manejo después de un
incendio afectará la estabilidad de los agregados del suelo, lo que resultará en diferencias en la
tasa de erosión del suelo (Zituni et al., 2019). La restauración de la vegetación favorece la mejora
de la estabilidad de los agregados (Zhou et al., 2012) porque provoca un aumento significativo de
la materia orgánica del suelo y la actividad microbiana a través del aporte de residuos vegetales y
raíces muertas (Li y Shao, 2006). Por lo tanto, la formación y transformación de los agregados del
suelo están estrechamente relacionadas con el secuestro de COS, pero hay pocos estudios sobre la
estabilidad de los agregados del suelo y el COS en función del número de años desde la
restauración del bosque.

China es rica en recursos forestales subtropicales y los incendios, que ocurren con frecuencia, son
el principal tipo de perturbación del ecosistema forestal en esta región (Su et al., 2019). Después
de los incendios, los gobiernos locales utilizan la forestación para restaurar el bosque, creando
condiciones favorables para acelerar la restauración y la construcción forestal ecológica (Su et al.,
2019). Pinus massoniana, que es nativa de una amplia zona del centro y sur de China, es una
importante especie arbórea maderera y de forestación, y tiene un gran potencial para mitigar el
cambio climático (Chen et al., 2016). Los ecosistemas de plantaciones juegan un papel importante
en el ciclo global del carbono y el balance de carbono (Paquette y Messier, 2010). Sin embargo,
debido a la demanda económica, la mayoría de los bosques artificiales se talan en la etapa de
crecimiento, lo que afecta la estabilidad de los agregados del suelo forestal, la estimación de las
reservas de carbono orgánico y especialmente la evaluación ecológica del proceso de recuperación
de la forestación después de un incendio. Por lo tanto, es muy importante determinar los cambios
en el almacenamiento de carbono con el tiempo durante el proceso de reforestación posterior al
incendio (Chen y Shrestha, 2012). Evaluar el impacto del número de años de recuperación de la
reforestación después de un incendio. sobre la estabilidad de los agregados del suelo y el COS
asociado a los agregados en los ecosistemas de plantaciones, realizamos experimentos en un
bosque experimental en la región subtropical de China

Intentamos aclarar las siguientes cuestiones científicas:

(1) ¿Cómo cambia la estabilidad de los agregados del suelo durante la restauración forestal en
plantaciones subtropicales?

(2) ¿Cuál es la contribución del COS asociado a los agregados al sumidero de carbono del suelo?
Nuestros hallazgos son útiles para comprender el proceso de acumulación de COS en plantaciones
subtropicales y proporcionan una referencia para el potencial de secuestro de carbono de las
plantaciones en otras áreas del mundo.

Región de estudio

El estudio se realizó en la finca forestal experimental de la Academia Forestal de Silvicultura de

Guizhou (26 ° 31′-26 ° 34′E, 106 ° 43′-106 ° 46′N), que se encuentra en la ciudad de Guiyang en la
provincia central de Guizhou en el sur de China (Fig.1).

La región tiene un clima monzónico subtropical con una precipitación anual de 1129,5 mm, una
temperatura anual de 15,3 ° C, una temperatura máxima de 35,1 ° C y una temperatura mínima de
−7,3 ° C.

Los suelos en el área de estudio están clasificados como Inceptisoles de acuerdo con la taxonomía
de suelos de EE. UU. Y tienen características obvias de amarilleo, que es típico de los suelos
amarillos subtropicales en China.

La vegetación incluye Pinus massoniana, Rhus chinensis Mill., Rhododendron simsii Planch.,
Camellia oleifera Abel., Coriaria nepalensis Wall., Pyracantha fortuneana (Maxim.) Li, Lithocarpus
glaber (Thunb.) Nakai, Imperata cylindrica (L.) Beauv., Lophatherum gracile, Polygonatum
odoratum. , Pteris multifida Poir. Y Dicranopteris linearis.

DISEÑO DE MUESTREO

La sustitución espacio-temporal es un método eficaz para estudiar cambios a lo largo de series de

tiempo (Sparling et al., 2003). La historia de reforestación en el área de estudio nos permitió
definir cinco clases de edad (10, 20, 40, 60 y 100 años desde el incendio).

Estos representaban crecimiento joven (10 a), madera inmadura (20 a), bosque maduro (40 a) y
bosque sobremaduro (60 y 100 a), que son consistentes con las clases de edad utilizadas por la
Administración Estatal de Silvicultura de China.

Había tres cuadrantes estándar (20 m × 20 m) para cada edad de restauración para un total de 15
cuadrantes.

Para reducir la influencia de las condiciones del sitio sobre los agregados del suelo y el COS, las
condiciones del sitio fueron similares (sin encharcamiento) y se seleccionaron suelos con
espesores de más de 100 cm (Cuadro 1).

La historia de la explotación forestal se remonta a 1904 (Yang, 2018). En 1956, fue designado por
el gobierno como una granja forestal de prueba para la investigación científica a largo plazo. La
edad del bosque se determinó mediante el cono de crecimiento y el historial de incendios se
determinó a partir de los registros de forestación.

Se seleccionaron tres árboles al azar en cada parcela de muestra.

Primero, la capa de hojarasca se eliminó dentro de un radio de 120 cm del árbol; luego, se excavó el perfil
del suelo a una profundidad de 100 cm.

Se recolectaron muestras de suelo de las capas de 0-20 cm, 20-40 cm, 40-60 cm, 60-80 cm y 80-100 cm, y las
muestras de suelo de la misma capa de suelo se mezclaron y se colocaron en una caja de hierro para
asegurarse de que se mantuvo la estructura principal

durante el transporte al laboratorio. La selección de suelos para la recolección se basó en el contenido de

humedad; suelos muy secos o húmedos que Fueron difíciles de recolectar ya que se evitaron núcleos
intactos.

ANÁLISIS DE SUELO

En el laboratorio, las muestras de suelo se dividieron en bloques de 10 a 12 mm de diámetro de acuerdo con

la estructura natural.

Se eliminaron piedras, raíces de plantas y residuos de plantas de las muestras de suelo, que se secaron al
aire a temperatura ambiente para preservar

Los agregados del suelo se separaron mediante el método de tamizado en seco.

Los suelos agregados se separaron en fracciones de diferentes tamaños por

agitando suavemente las muestras de 1 kg a través de una gradación de tamices para obtener las diferentes
fracciones de tamaño de agregado, incluidas> 10, 7–10, 5–7, 2–5, 1–2, 0.5–1, 0.25–0.5 y <0.25 mm .

El COS se determinó para cada fracción de agregado del suelo según el método de Walkley y Black (1934).

La densidad aparente del suelo se midió utilizando el método de la cuchilla circular.

(Hossain et al., 2015)

2.4. Cálculo de estabilidad agregada y almacenamiento de SOC

sugirió que el diámetro medio del peso (MWD; mm),

el diámetro medio geométrico (GMD; mm) y la dimensión fractal (D) se pueden

utilizado para cuantificar la estabilidad de los agregados del suelo (mayores valores de MWD y GMD

se asocian con una mayor aglomeración de tamaño de partícula y mayor

estabilidad; por el contrario, una D más pequeña conduce a una mejor estructura y mayor

estabilidad del suelo).

MWD, GMD y D se calcularon utilizando el siguiente

Fórmulas

El método de igual masa se ha considerado el más apropiado

estrategias para describir las existencias de C en suelos (Ellert y

Bettany, 1995) y se puede calcular de la siguiente manera

2.1. REGIÓN DE ESTUDIO

El estudio se realizó en la finca forestal experimental del

Academia Forestal de Guizhou (26 ° 31′-26 ° 34′E, 106 ° 43′-106 ° 46′N),

que se encuentra en la ciudad de Guiyang en la provincia central de Guizhou de

el sur de China (Fig. 1).

La región tiene un clima monzónico subtropical

con una precipitación anual de 1129,5 mm, una temperatura anual de

15,3 ° C, una temperatura máxima de 35,1 ° C y una temperatura mínima de −7,3 ° C. Los suelos en
el área de estudio se clasifican como Inceptisoles de acuerdo con la taxonomía de suelos de EE.
UU. Y tienen características obvias de amarilleo, que es típico de los suelos amarillos subtropicales
en

China.

2.2. DISEÑO DE MUESTREO

La sustitución espacio-temporal es un método eficaz para estudiar

cambios a lo largo de series de tiempo (Sparling et al., 2003). El historial de reforestación en el

área de estudio nos permitió definir cinco clases de edad (10,

20, 40, 60 y 100 años desde el incendio). Estos representaron un crecimiento joven

(10 a), madera inmadura (20 a), bosque maduro (40 a) y sobremaduro

bosque (60 y 100 a), que son consistentes con las clases de edad utilizadas por

Administración Estatal de Silvicultura de China. Había tres estándares

cuadrantes (20 m × 20 m) para cada edad de restauración para un total de 15

cuadrantes. Reducir la influencia de las condiciones del sitio en los agregados del suelo.

y COS, las condiciones del sitio fueron similares (sin anegamiento), y los suelos

Se seleccionaron espesores superiores a 100 cm (Cuadro 1). La historia

de la explotación forestal se remonta a 1904 (Yang, 2018). En 1956, fue

designado por el gobierno como una granja forestal de prueba para la investigación científica a
largo plazo. La edad del bosque fue determinada por el cono de crecimiento, y

El historial de incendios se determinó a partir de los registros de forestación.

Se seleccionaron tres árboles al azar en cada parcela de muestra. Primero el

la capa de hojarasca se eliminó dentro de un radio de 120 cm del árbol; entonces el

El perfil del suelo se excavó a una profundidad de 100 cm. Muestras de suelo del

Capas de 0-20 cm, 20-40 cm, 40-60 cm, 60-80 cm y 80-100 cm fueron

recolectadas, y las muestras de suelo de la misma capa de suelo fueron mezcladas y

poner en una caja de hierro para asegurar que se mantuvo la estructura principal

durante el transporte al laboratorio. La selección de suelos para la recolección se basó en el

contenido de humedad; suelos muy secos o húmedos que características geográficas en diferentes
bosques de edad de rodamiento en la ciudad de Guiyang,

La provincia de Guizhou, China.

2.5. ANÁLISIS ESTADÍSTICO

En este estudio, se utilizó un análisis de varianza bidireccional para analizar la

influencias separadas de las variables independientes (tiempo de recuperación del bosque

y profundidad del suelo) en las variables dependientes (tamaño agregado, agregado

estabilidad, concentraciones de COS asociado a agregados, almacenamiento de COS asociado a

agregados y tasa de secuestro de COS asociado a agregados).

Antes del análisis de varianza, todos los datos fueron probados para normalidad y

homogeneidad de varianza.

Cuando la prueba de homogeneidad de varianza fue

aprobado, el método de Duncan (el intervalo de confianza está dentro del 95%)

utilizado para analizar las diferencias en comparaciones múltiples (Steel y

Torrie, 1980). Se utilizó el software SPSS 24.0 para todos los análisis estadísticos.

Los gráficos y tablas de este estudio se elaboraron con Excel 2014,

Origin 9.0 y Photoshop CS6

3.1. CARACTERÍSTICAS DE DISTRIBUCIÓN DE LOS AGREGADOS DEL SUELO.

El tiempo posterior a la restauración forestal y la profundidad del suelo tuvo un

influencia en la distribución de los agregados del suelo, pero no hubo interacción significativa
entre ellos (Cuadro 2).

Entre las capas del suelo, la

La proporción de microagregados (<0,25 mm) fue mayor en los 10-

bosque de un año, que tiene un valor máximo de 13.59%, y las diferencias entre las capas de suelo
no fueron significativas (Cuadro 3). En el

Bosque de 10 años, la proporción de agregados de suelo de 2 a 5 mm fue

mayor en las capas de suelo de 0-20, 20-40, 40-60 y 60-80 cm en todas

agregados de tamaño. En el bosque de 20 años, la proporción de> 10 mm

Los agregados del suelo aumentaron con la profundidad de la capa del suelo, alcanzando hasta

47,71%. Los cambios en los agregados de suelo de 7 a 10 mm no tuvieron

patrón. Las proporciones de otras clases de tamaño en los agregados del suelo.

tendió a disminuir a medida que aumentaba la profundidad del suelo.

En el bosque de 40 años,

la proporción de agregados de suelo de 2 a 5 mm fue mayor en el período de 0 a 20 y

Capas de suelo de 20 a 40 cm, al 22,16% y 22,20%, respectivamente, y la

proporción de agregados de suelo> 10 mm aumentó con la profundidad de la

capa de suelo. En los bosques de 60 y 100 años, la mayoría de los agregados

fueron> 10 y 2-5 mm, y las proporciones de agregados de suelo de otros tamaños no mostraron
diferencias significativas por profundidad de capa de suelo

3.2. CARACTERÍSTICAS DE ESTABILIDAD DE LOS AGREGADOS DEL SUELO.

El tiempo después de la restauración del bosque y la profundidad del suelo influyeron

significativamente en la MWD, pero no hubo un efecto interactivo significativo entre

ellos (Tabla 2). En comparación con el bosque de 10 años, la MWD de los 20 años

bosques de años, 40, 60 y 100 años aumentaron significativamente

en 66,42%, 22,89%, 37,75% y 31,30%, respectivamente

Análisis de la varianza de la influencia de la edad del rodal y la profundidad del suelo en el

agregado

distribución y estabilidad.

3.5. AGGREGATE-ASSOCIATED SOC SEQUESTRATION RATE

El momento de la restauración forestal tuvo un efecto significativo sobre el carbono

tasa de secuestro de COS asociada a agregados, mientras que la profundidad del suelo

ningún efecto significativo sobre él. Ambos tuvieron un efecto interactivo en el>

Tasa de secuestro de COS asociado a agregados de 0,25 mm (Tabla 5). Con

la profundización de la capa de suelo, hubo diferencias significativas en la

Tasa de secuestro de COS asociada al agregado en diferentes períodos de recuperación (Tabla 6).
Durante el período de recuperación de 10 a 20 años, el máximo

Tasa de secuestro de COS asociada a la agregación en el 0-20, 20-40 y

Las capas de suelo de 40 a 60 cm fueron de 1,44 Mg · C · ha − 1

·A−1

, que fue significativamente

superior a −0,15 y −0,27 Mg · C · ha − 1

· A − 1 en los 60-80 cm y

Capas de suelo de 80–100 cm, respectivamente. Durante la recuperación de 20 a 40 años

período, las tasas de secuestro de COS asociado agregadas en el período 0-20

y capas de suelo de 80-100 cm fueron −0.01 Mg · C · ha − 1

·A−1y

0,02 Mg · C · ha − 1

·A−1

, que fue significativamente menor que los de la

20 a 40 cm (0,18 Mg · C · ha − 1

·A−1

), 40 a 60 cm (0,65 Mg · C · ha − 1

·A−1

)y

60 a 80 cm (0,59 Mg · C · ha − 1

·A−1

) tasa de secuestro del COS asociado agregado (p <0.05). Durante el período de recuperación de 40
a 60 años, el

La tasa de secuestro de COS asociada al agregado tendió a disminuir primero

y luego aumentar con capas de suelo más profundas, y el agregado asociado

La tasa de secuestro de COS fue tan alta como 1.03 Mg · C · ha − 1

· A − 1 en Análisis de varianza de la influencia de la edad del rodal y la profundidad del suelo sobre
las concentraciones de COS asociado a agregados, almacenamiento de COS asociado a agregados y
tasa de secuestro de COS asociado a agregados

3.4. ALMACENAMIENTOS DE SOC ASOCIADOS A AGREGADOS

El momento de la restauración forestal y la profundidad del suelo tuvo un impacto significativo

en el almacenamiento de SOC asociado a agregados, y tuvieron un efecto interactivo significativo

en el almacenamiento de SOC asociado a agregados> 2 mm

(Cuadro 5). En términos de la escala de tiempo, el almacenamiento de SOC aumentó gradualmente

con el aumento del período de recuperación, y hubo una cierta regularidad en la distribución del
almacenamiento de SOC asociado al agregado (Fig. 3).

Las diferencias en el almacenamiento de SOC asociado a agregados de diferentes tamaños

eran pequeños en el bosque de 10 años (p> 0.05), pero en el suelo de 0-20 cm

capa, los agregados> 10, 2–5 y 0.25–0.5 mm representaron

Resultados y análisis

3.1. Características de distribución de los agregados del suelo.

El tiempo después de la restauración del bosque y la profundidad del suelo tuvieron una influencia
significativa en la distribución de los agregados del suelo, pero no hubo una interacción
significativa entre ellos (Cuadro 2).

Entre las capas de suelo, la proporción de microagregados (<0.25 mm) fue mayor en el bosque de
10 años, que tiene un valor máximo de 13.59%, y las diferencias entre las capas de suelo no fueron
significativas (Cuadro 3).

En el bosque de 10 años, la proporción de agregados de suelo de 2–5 mm fue mayor en las capas
de suelo de 0–20, 20–40, 40–60 y 60–80 cm en los agregados de todos los tamaños.

En el bosque de 20 años, la proporción de agregados de suelo> 10 mm aumentó con la

profundidad de la capa de suelo, alcanzando hasta 47,71%.

Los cambios en los agregados de suelo de 7 a 10 mm no tuvieron un patrón obvio.

Las proporciones de otras clases de tamaño en los agregados del suelo tendieron a disminuir a
medida que aumentaba la profundidad del suelo. En el bosque de 40 años, la proporción de
agregados de suelo de 2 a 5 mm fue mayor en el período de 0 a 20 y

Capas de suelo de 20 a 40 cm, al 22,16% y 22,20%, respectivamente, y la

proporción de agregados de suelo> 10 mm aumentó con la profundidad de la

capa de suelo.

En los bosques de 60 y 100 años, la mayoría de los agregados eran> 10 y 2–5 mm, y las
proporciones de los agregados de suelo de otros tamaños no mostraron diferencias significativas
en la profundidad de la capa de suelo.

13,42% (5,67 Mg · ha − 1

), 19,55% (8,26 Mg · ha − 1
) y 15,60%

(6,59 Mg · ha − 1

) del almacenamiento total de SOC, respectivamente. En 20-, 40-, 60-

y bosques de 100 años, el almacenamiento de COS se concentró principalmente

en agregados> 10 y 2-5 mm. En la capa de suelo de 0-20 cm, el> 10

mm valores de almacenamiento de SOC asociados a agregados en los valores de 20, 40, 60 y

Los bosques de 100 años eran 27,74% (12,89 Mg · ha − 1

), 14,80%

(6,85 Mg · ha − 1

), 35,05% (19,46 Mg · ha − 1

) y 23,94% (17,13 Mg · ha − 1

del almacenamiento total de SOC; el almacenamiento de SOC asociado a agregados de 2 a 5 mm

los valores fueron 20,38% (9,47 Mg · ha − 1

), 22,52% (10,42 Mg · ha − 1

), 15,85%

(8.80 Mg · ha − 1

) y 23,86% (17,07 Mg · ha − 1

) del almacenamiento total de SOC,

respectivamente.

Desde la perspectiva de la profundidad del suelo, el COS asociado a agregados

almacenamiento de los bosques con diferentes años después de la restauración gradualmente

disminuyó en capas más profundas del suelo. Con la disminución de la profundidad del suelo, hay

No hubo diferencia significativa en el almacenamiento de SOC entre los diferentes

agregados de tamaño en el bosque de 10 años (p> 0.05), pero la proporción

Características de estabilidad de los agregados del suelo.

El tiempo después de la restauración del bosque y la profundidad del suelo influyeron
significativamente en la MWD, pero no hubo un efecto interactivo significativo entre ellos (Tabla
2). En comparación con el bosque de 10 años, el MWD de 20 años

años, bosques de 40, 60 y 100 años aumentaron significativamente

al 66,42%, 22,89%, 37,75% y 31,30%, respectivamente (Tabla 4).

Entre todas las capas de suelo, la MWD del bosque de 10 años fue la más pequeña y la MWD del
bosque de 20 años fue la más grande; esta

la diferencia fue significativa (p <0.05).

No hubo diferencias significativas en los valores de MWD entre los bosques de 40, 60 y 100 años,
pero la MWD de estos bosques fue significativamente mayor que la

MWD del bosque de 10 años (p <0.05) y fue significativamente menor que la MWD del bosque de
20 años. En el bosque de 10 años, hay

no hubo diferencia significativa en la MWD entre las capas de suelo

(p> 0,05), con un valor mínimo de 3,47 mm (20–40 cm). El MWD

de los bosques de otras edades aumentaron con la profundidad de la capa del suelo.

Hubo algunas diferencias en la GMD de los bosques en diferentes

años después de la restauración, y estas diferencias eran similares a las del MWD.

El momento de la restauración forestal y la profundidad del suelo tuvieron una influencia

significativa en la GMD, pero no hubo un efecto interactivo significativo.

entre ellos. La DMG de los bosques de 20, 40, 60 y 100 años aumentó en 134,40%, 33,86%, 48,34%
y 53,07%, respectivamente, en comparación con la de los bosques de 10 años.

La DMG de cada capa de suelo del bosque después de 20 años fue la más grande entre todos los
períodos de restauración y fue significativamente más alta que la del suelo del bosque después de
10 años (p <0,05).

En el suelo de 0-20 cm, hubo diferencias significativas en la GMD entre los bosques de 40, 60 y 100
años (p <0,05), y las diferencias en las otras capas de suelo fueron pequeñas.

A excepción del bosque de 10 años, la DMG de los bosques tendió a aumentar con la profundidad
de la capa de suelo.
El tiempo de restauración del bosque y la profundidad del suelo influyeron significativamente en
D, pero no hubo un efecto interactivo significativo entre

ellos.

La D del bosque de 10 años fue significativamente mayor que la del bosque de 20, 40, 60 y 100
años en un 18,62%, 14,43%, 5,05% y

13,98%, respectivamente.

La D de cada capa de suelo del bosque de 10 años fue la más grande y la del bosque de 20 años
fue la más baja entre todos los años después de la restauración, y hubo diferencias significativas.

(p <0,05).

En la capa de suelo de 0-20 cm, no hubo diferencias significativas en el bosque D en los bosques de
40, 60 y 100 años (p <0.05), mientras que hubo algunas diferencias en las otras capas de suelo.

A excepción del bosque de 10 años, la D de las otras edades del bosque tendió a disminuir con la
profundidad de la capa de suelo.

En conclusión, la MWD (6,64 mm) y la GWD (5,11 mm) fueron las

más grande y D (2.01) fue el más pequeño en el bosque de 20 años, lo que indica que esta clase de
edad tuvo la mayor estabilidad agregada.

En el bosque de 10 años, la MWD (3.99 mm) y GWD (2.18 mm) fueron los más pequeños, y el
valor D fue el más grande (2.47), lo que indica que esta clase de edad tenía la estabilidad agregada
más baja.

Las estabilidades de los agregados del suelo forestal en los bosques de 40, 60 y 100 años fueron
intermedias a las de los bosques de 10 y 20 años.

3.3. Concentraciones de SOC asociadas a agregados

El momento de la restauración forestal y la profundidad del suelo tuvieron efectos significativos

sobre las concentraciones de COS asociadas al agregado, y hubo un efecto de interacción

significativo entre el tiempo y la profundidad (Tabla 5).

En la misma capa de suelo para el mismo período de recuperación, las concentraciones de COS
asociado a agregados con diferentes tamaños variaron levemente, y la mayoría de los agregados
con tamaños <0.25 mm tuvieron concentraciones altas de COS (Fig. 2).

En las capas de suelo de 0-20, 20-40 y 40-60 cm, la concentración de COS asociada a agregados de
los mismos tamaños aumentó
significativamente al aumentar el tiempo de recuperación (p <0,05).

En las capas de suelo de 60-80 y 80-100 cm, la concentración de COS asociada a agregados del
mismo tamaño en bosques de 10, 20 y 40 años estaba al mismo nivel, pero la concentración de
COS asociada a agregados en 60 y Los bosques de 100 años fueron significativamente mayores (p
<0.05).

En todos los años del bosque después de la restauración, la concentración de COS asociada a
agregados de todos los tamaños disminuyó al aumentar la profundidad del suelo.

En la capa de suelo de 0 a 20 cm, las concentraciones de COS asociadas a agregados fueron las
más bajas en el bosque de 10 años, oscilando entre

17.01 a 18.91 g / kg, y el más alto en el bosque de 100 años, que varía

de 27,59 a 28,66 g / kg.

Almacenamientos de SOC asociados a agregados

El momento de la restauración forestal y la profundidad del suelo tuvo un impacto significativo

en el almacenamiento de SOC asociado a agregados, y tuvieron un efecto interactivo significativo

en el almacenamiento de SOC asociado a agregados> 2 mm

(Cuadro 5).

En términos de la escala de tiempo, el almacenamiento de SOC aumentó gradualmente con el

aumento del período de recuperación, y hubo una cierta regularidad en la distribución del
almacenamiento de SOC asociado al agregado (Fig. 3).

Las diferencias en el almacenamiento de COS asociado a agregados de diferentes tamaños fueron

pequeñas en el bosque de 10 años (p> 0.05), pero en la capa de suelo de 0-20 cm, los agregados>
10, 2-5 y 0.25-0.5 mm representaron el 13,42% (5,67 Mg · ha − 1), el 19,55% (8,26 Mg · ha − 1) y el
15,60%

(6,59 Mg · ha − 1) del almacenamiento total de COS, respectivamente.

En bosques de 20, 40, 60 y 100 años, el almacenamiento de COS se concentró principalmente en

agregados> 10 y 2-5 mm. En la capa de suelo de 0-20 cm, los valores de almacenamiento de COS
asociado a agregados> 10 mm en los bosques de 20, 40, 60 y 100 años fueron 27,74% (12,89 Mg ·
ha − 1), 14,80 % (6,85 Mg · ha − 1), 35,05% (19,46 Mg · ha − 1) y 23,94% (17,13 Mg · ha − 1)

del almacenamiento total de SOC; los valores de almacenamiento de COS asociado a agregados de
2-5 mm fueron 20,38% (9,47 Mg · ha − 1), 22,52% (10,42 Mg · ha − 1
), 15,85% (8,80 Mg · ha − 1) y 23,86% (17,07 Mg · ha − 1) del almacenamiento total de COS,
respectivamente.

Desde la perspectiva de la profundidad del suelo, el COS asociado a agregados almacenamiento de

los bosques con diferentes años después de la restauración gradualmente disminuyó en capas más
profundas del suelo.

Con la disminución en la profundidad del suelo, no hubo diferencia significativa en el

almacenamiento de COS entre los agregados de diferentes tamaños en el bosque de 10 años (p>
0.05), pero la proporción de> 10 y 2-5 mm SOC asociado a agregados en el SOC total en el El
bosque de 20, 40, 60 y 100 años aumentó con la profundidad de la capa del suelo y fue
significativamente mayor que en los otros agregados de tamaño (p <0.05).

3.5. Tasa de secuestro de COS asociada a la agregación

El momento de la restauración del bosque tuvo un efecto significativo en la tasa de secuestro de

COS asociado a agregados de carbono, mientras que la profundidad del suelo no tuvo un efecto
significativo en ella. Ambos tuvieron un efecto interactivo en el>

Tasa de secuestro de COS asociado a agregados de 0,25 mm (Tabla 5).

Con la profundización de la capa de suelo, hubo diferencias significativas en la tasa de secuestro

de COS asociado a agregados en diferentes períodos de recuperación (Cuadro 6).

Durante el período de recuperación de 10 a 20 años, la tasa máxima de secuestro de COS

asociado a agregados en las capas de suelo de 0 a 20, 20 a 40 y 40 a 60 cm fue de 1,44 Mg · C · ha −
1 · a − 1, que fue significativamente superior a −0,15 y −0,27 Mg · C · ha − 1 · a − 1 en las capas de
suelo de 60–80 cm y 80–100 cm, respectivamente.

Durante el período de recuperación de 20 a 40 años, las tasas de secuestro de COS asociado a

agregados en las capas de suelo de 0 a 20 y 80 a 100 cm fueron de −0,01 Mg · C · ha − 1 · a − 1 y
0,02 Mg · C · ha− 1 · a − 1, que fue significativamente menor que los de 20 a 40 cm (0,18 Mg · C · ha
− 1 · a − 1), 40 a 60 cm (0,65 Mg · C · ha − 1 · a − 1 ) y 60-80 cm (0.59 Mg · C · ha − 1 a − 1) tasa de
secuestro del COS asociado al agregado (p <0.05).

Durante el período de recuperación de 40 a 60 años, la tasa de secuestro de COS asociado a

agregados tendió a disminuir primero y luego a aumentar con capas de suelo más profundas, y la
tasa de secuestro de COS asociada a agregados fue tan alta como 1.03 Mg · C · ha − 1 · a −1 en 80-
100 cm. Durante el período de recuperación de 60 a 80 años, la tasa de secuestro de COS asociado
agregado fue la más alta en la capa de suelo de 20 a 40 cm (0,48 Mg · C · ha − 1 · a − 1), y no hubo
diferencia significativa en la Tasa de secuestro de COS asociada a agregados de las otras capas del
suelo (p> 0.05).
En el período de recuperación de 10 a 100 años, no hubo una diferencia significativa (p> 0,05) en
la tasa de secuestro de COS asociada a los agregados entre las capas de suelo de 0 a 100 cm; de
arriba a abajo, las tasas fueron de 0,33, 0,42, 0,39, 0,33, 0,28 Mg · C · ha − 1 · a − 1,
respectivamente.

4. Discusión

4.1. Variaciones en la estabilidad de los agregados del suelo después de la vegetación

restauracion

La restauración de la vegetación puede promover la formación de macroagregados y mejorar la

uniformidad de los agregados para mejorar la estabilidad del suelo (Zhu et al., 2018), y los
agregados del suelo pueden brindar protección física para la materia orgánica del suelo y disminuir
las tasas de descomposición (Pulleman y Marinissen, 2004).

Por lo tanto, la distribución de los agregados del suelo es de gran importancia para el ciclo de los
nutrientes del suelo y para el secuestro de carbono del suelo.

Nuestro estudio mostró que los agregados del suelo en las plantaciones de pino Masson de
diferentes edades eran principalmente macroagregados (> 0.25 mm), que representan más del
85% de los agregados totales.

La estabilidad de los agregados del suelo en las plantaciones de pino Masson después de un
período de restauración de 10 años fue la más baja, y la estabilidad después de un período de
restauración de 20 años fue la más alta.

No hubo diferencias significativas en la estabilidad de los agregados del suelo en las plantaciones
de pino Masson después de 40, 60 y 100 años de restauración.

Debido a la posible baja actividad microbiana (Wu et al., 2015) y a la vegetación sobre el suelo en
los bosques de pino Masson de 10 años, la erosión del suelo y la pérdida de agua pueden ser
sustanciales en estos climas lluviosos y húmedos, reduciendo considerablemente la estabilidad de
los agregados del suelo ( Yao et al., 2019).

Además, el tiempo necesario para restaurar completamente el suelo después del impacto de los
incendios forestales en los nutrientes del suelo y las comunidades microbianas puede ser de hasta
13 años (Prieto-Fernandez et al., 1998).

Los bosques de pinos Masson con 20 años de restauración se han convertido en bosques
frondosos, el aumento en el contenido de materia orgánica del suelo proporciona un buen
ambiente de plantación para plantas tolerantes a la sombra, y la abundante vegetación puede
reducir el daño a la estructura agregada del suelo causado por el
Fig. 2. Concentraciones de COS asociadas al agregado en diferentes años después de la
restauración.

Las letras mayúsculas indican diferencias significativas en los SOC de los agregados del mismo
tamaño en diferentes años de recuperación (p <0,05). Las letras minúsculas indican diferencias en
el COS en los agregados con diferentes tamaños en los mismos años de recuperación (p <0.05).

A para la capa de suelo de 0-20 cm; B para la capa de suelo de 20 a 40 cm; C para la capa de suelo
de 40 a 60 cm; D para la capa de suelo de 60 a 80 cm; E para la capa de suelo de 80-100 cm.

Fig. 3. Almacenamiento de COS asociado a agregados en diferentes años después de la

restauración.

Las letras mayúsculas indican diferencias en el SOC en los agregados del mismo tamaño en
diferentes años de recuperación (p <0.05).

Las letras minúsculas indican las diferencias en el COS en los agregados con diferentes tamaños en
los mismos años de recuperación (p <0.05).

A indica la capa de suelo de 0 a 20 cm; B indica la capa de suelo de 20 a 40 cm; C indica la capa de
suelo de 40 a 60 cm; D indica la capa de suelo de 60 a 80 cm; y E indica la capa de suelo de 80 a
100 cm

impacto físico del agua de lluvia (Yao et al., 2019). Los bosques de pinos Masson de veinte años
son altamente competitivos, por lo que el impacto de la poda natural y la cantidad de basura
acumulada es grande, lo que favorece la acumulación de nutrientes del suelo (Bearden y Petersen,
2012).

El aumento de nutrientes del suelo promovió el proceso de unión de microagregados para formar
macroagregados, lo que llevó a una mayor estabilidad de los agregados del suelo (Bearden y
Petersen, 2012; Zhu et al., 2017).
Con el aumento de los años de recuperación, los bosques de Pinus massoniana a los 40, 60 y 100
años ingresaron al bosque maduro, bosque sobremaduro y otras etapas.

La muerte de los árboles y el fenómeno del plegamiento de las ramas fueron comunes, lo que
redujo la densidad de la capa del dosel (Cui et al., 2014). Debido al ambiente de luz intensa, se
inhibieron algunas plantas tolerantes a la sombra y su diversidad de especies fue inferior a la del
bosque de pinos Masson de 20 años (Cui et al., 2014).

Merilä y col. (2010) mostró que la capacidad de ciclo de nutrientes del suelo forestal se
correlacionó positivamente con la riqueza y diversidad de especies del sotobosque.

La investigación de Zhao et al. (2019) mostró que la capacidad de ciclo de nutrientes del suelo bajo
el pino Masson Los bosques después de 25 años de restauración estaban disminuyendo, lo que
puede reducir la capacidad de los polisacáridos y el ácido húmico en la materia orgánica del suelo
para cementar las partículas del suelo (Martins et al., 2009), lo que lleva a la disminución de la
estabilidad de los agregados del suelo.

4.2. Variaciones en el COS después de la restauración de la vegetación

Los cambios en el grupo de COS de los bosques de diferentes años después de la restauración
pueden entenderse de manera integral y objetiva desde la perspectiva de los agregados (Gao et
al., 2013; Zhu et al., 2017).

Nuestro estudio mostró que las concentraciones de COS asociado a agregados y el

almacenamiento de COS asociado a agregados aumentaron con el aumento en los años de
recuperación de la vegetación (p <0.05) pero disminuyeron con la profundidad del suelo.

La restauración vegetativa puede influir positivamente en el COS, principalmente a través de la

descomposición de la hojarasca (Paul et al., 2017), la renovación de raíces (Jacobs et al., 2018) y la
protección agregada.

Con el aumento del tiempo de recuperación de la vegetación, el crecimiento de la vegetación del

sotobosque puede interceptar más lluvia, aumentan la humedad del suelo, reducen la tasa de
mineralización del suelo y la tasa de erosión (Yao et al., 2019), mejoran el microhábitat del suelo y,
por lo tanto, aumentan el almacenamiento de COS (Wang et al., 2011).

Además, nuestro estudio mostró que el aumento en el almacenamiento de COS a lo largo del
tiempo era más dependiente de grandes agregados (agregados> 10 y 2-5 mm) que de
microagregados (agregados <0,25 mm).

Zhang y col. (2017) mostró que la contribución de los agregados grandes (> 0.25 mm) al COS fue
mayor que la de los agregados de otros tamaños.
De manera similar, la investigación de Gao et al. (2013) mostró que después de la restauración de
la vegetación, el secuestro de COS asociado a grandes agregados fue más significativo.

Nuestro estudio determinó que los tamaños> 10 mm y 2-5 cm tenían las tasas más altas de
secuestro de carbono.

Las tasas de secuestro de carbono en los agregados de tamaño 1–0.5, 0.5–0.25 y <0.25 mm fueron
bajas e incluso negativas en la mayoría de los agregados.

Entre 20 y 40 años después de la restauración, la tasa de secuestro de COS asociada a los

agregados y la estabilidad agregada del suelo superficial disminuyeron.

Esta similitud mostró que el cambio dinámico en el COS no solo dependía del aporte de materia
orgánica sino que también estaba estrechamente relacionado con la estructura de los agregados
del suelo (Zhang

et al., 2016).

Un estudio de Six et al (2000) sostuvo que después de que la materia orgánica fresca ingresa al
suelo, primero cementa las moléculas orgánicas, la arcilla y los iones positivos para formar
microagregados que cementan con los componentes periféricos.

partículas elementales u otros microagregados para formar macroagregados.

La descomposición de materia orgánica particulada intraagregada gruesa (iPOM), o la

descomposición de macroagregados, se forma

microagregados.

Después de la restauración de la vegetación, la tasa de rotación de gruesos

agregados es mayor que la de los agregados finos, y por lo tanto, la

El carbono orgánico en los agregados finos es relativamente constante (Deng et al., 2018).

Sin embargo, los agregados gruesos pueden secuestrar más carbono que los finos.

agregados, proporcionando condiciones para la conservación y estabilización del carbono orgánico

(Deng et al., 2018).

Si los bosques maduros y los bosques sobremaduros son capaces de secuestrar carbono es uno de
los temas de discusión más populares y la mayor fuente de incertidumbre en la estimación de los
sumideros de carbono forestal global (Liu et al., 2014).

La mayoría de los estudios existentes sugieren que la productividad primaria neta (NPP) de los
bosques sobremaduros está entre un tercio y la mitad de su NPP máxima (Mund et al., 2002; Ryan
et al., 2004), tipificando un sumidero de carbono neutro. Sin embargo, la evidencia basada en
diferentes

Los ecosistemas forestales ha demostrado que los bosques de más de 100 años son capaces de
realizar un secuestro continuo de carbono.

Por ejemplo, Zhou et al. (2007) demostraron que de 1979 a 2003, la tasa de acumulación de 0-20
cm de carbono en el suelo en los bosques demasiado maduros y bien conservados del sur de China
era todavía tan alta como 0,61 Mg · C · Ha − 1 · a − 1.

Nuestro estudio mostró que, además de la capa superficial del suelo, el suelo profundo también
exhibía una alta tasa de secuestro de carbono, con valores de almacenamiento de COS en la capa
de 80-100 cm en los suelos de 10, 20 y 40 años de 21.76 Mg · ha − 1, 19,02 Mg · ha − 1 y 19,33 Mg ·
ha − 1, respectivamente.

El almacenamiento de COS podría llegar a 39,98 Mg · ha − 1 y 47,18 Mg · ha − 1 en suelos de 60 y

100 años, respectivamente. Para los períodos de restauración forestal de 10 a 100 años, las tasas
de secuestro de carbono en los suelos de 10 a 20, 20 a 40, 40 a 60, 60 a 80 y 80 100 cm fueron de
0,33, 0,42, 0,39, 0,33 y 0,28 Mg · C · Ha − 1 · a − 1, respectivamente.

Aunque el COS fue bajo en suelos profundos, puede haber representado un alto porcentaje del
almacenamiento de COS en todo el perfil del suelo (Rumpel y Kögel-Knabner, 2011), por lo que
con respecto a la reducción del CO2 atmosférico, el subsuelo puede ser más importante que la
capa superficial del suelo.

Lee y Pankhurst (1992) mostraron que el 30-40% del COS proviene de exudados de raíces y raíces
muertas, pero la tasa de descomposición del sistema de raíces se ralentiza en las capas más
profundas del suelo, lo que puede ser una de las razones del lento aumento de carbono en suelos
profundos (Hicks Pries et al., 2018).

El carbono orgánico disuelto también puede ser una fuente de COS en las capas profundas del
suelo.

En los bosques de California (Sanderman y Amundson, 2008), el carbono orgánico disuelto se

transportó y reservó en un suelo mineral de 100 cm de profundidad y puede representar el 20%
del almacenamiento de COS.

5. Conclusiones

Es de gran importancia comprender la estabilidad de los agregados del suelo y los mecanismos de
cambio dinámico del carbono orgánico en el proceso de forestación a largo plazo después de los
incendios forestales para identificar y fortalecer el secuestro de carbono del suelo forestal para
mitigar el cambio climático.
En la serie de tiempo de 100 años de restauración forestal, el cambio en la estabilidad agregada
probablemente estuvo relacionado con la estructura cambiante del bosque y el ambiente
microbiano del suelo durante todo el proceso de desarrollo forestal.

La forestación y restauración a largo plazo aumentaron la concentración y el almacenamiento de

COS asociado con el agregado, y los suelos a 0-20 cm (71,56 Mg · ha − 1) y 20 a 100 cm (55,96 Mg ·
ha − 1) todavía tenían

altas capacidades de secuestro de carbono.

Además, la retención de COS durante la forestación y restauración puede atribuirse a la

acumulación de carbono orgánico en grandes agregados.

En general, la forestación mejoró la estructura de los agregados del suelo, proporcionó una fuente
de materia orgánica del suelo y aumentó la capacidad de retención de carbono del suelo.

En el futuro, se debe considerar la capacidad de secuestro de carbono del subsuelo forestal

demasiado maduro.