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1.

1 COMERCIO
Se denomina comercio a la actividad socioeconómica que consiste en el intercambio de algunos materiales
en el mercado de compra y venta de bienes o servicios, sea para su uso, para su venta o su
transformación. Es el cambio o transacción de algo a cambio de otra cosa de igual valor o ya sea por
dinero. Por actividades comerciales entendemos tanto intercambio de bienes o de servicios que se
efectúan a través de un comerciante o un mercader.
El comerciante es la persona física o jurídica que se dedica al comercio en forma habitual, como las
sociedades mercantiles. También se utiliza la palabra comercio para referirse a un establecimiento
comercial o tienda.
HISTORIA
Los orígenes del comercio se remontan a finales del Neolítico, cuando se descubrió la agricultura. Al
principio, la agricultura que se practicaba era una agricultura de subsistencia, donde las justas eran para la
población dedicada a los asuntos agrícolas. Sin embargo, a medida que fueron incorporándose nuevos
desarrollos tecnológicos al día a día de los agricultores, como por ejemplo la fuerza animal, o el uso de
diferentes herramientas, las cosechas obtenidas eran cada vez mayores. Así llegó el momento propicio
para el nacimiento del comercio, favorecido por dos factores:

 Las cosechas obtenidas eran mayores que la que necesitaban para la subsistencia de la
comunidad.
 Ya no era necesario que toda la comunidad se dedicara a la agricultura, por lo tanto parte
de la población empezó a especializarse en otros asuntos, como la alfarería o la siderurgia.
Por lo tanto, los excedentes de las cosechas empezaron a intercambiarse con otros objetos en los que
otras comunidades estaban especializadas. Normalmente estos objetos eran elementos para la defensa de
la comunidad (armas), depósitos para poder transportar o almacenar los excedentes alimentarios (ánforas,
etc.), nuevos utensilios agrícolas (azadas de metal...), o incluso más adelante objetos
de lujo (espejos, pendientes, etc).
Este comercio primitivo, no solo supuso un intercambio local de bienes y alimentos, sino también un
intercambio global de innovaciones científicas y tecnológicas, entre otros, el trabajo en hierro, el trabajo
en bronce, la rueda, el torno, la navegación, la escritura, nuevas formas de urbanismo, y un largo etcétera.
En la península ibérica este periodo se conoce como el Orientalizante, por las continuas influencias
recibidas de Oriente. En este momento es cuando surge la cultura ibérica.
Además del intercambio de innovaciones, el comercio también propició un paulatino cambio de
las sociedades. Ahora la riqueza podía almacenarse e intercambiarse. Empezaron a aparecer las primeras
sociedades capitalistas tal como las conocemos hoy en día, y también las primeras estratificaciones
sociales. En un inicio las clases sociales eran simplemente la gente del poblado y la familia del dirigente.
Más adelante aparecieron otras clases sociales más sofisticadas como los guerreros, los artesanos, los
comerciantes, etc.
1.2 DERECHO DEL COMERCIO
 Conjunto de normas jurídicas aplicables a los comerciantes en el ejercicio de su actividad profesional, y
que rigen también, aunque más excepcionalmente, la actividad comercial, es decir, los actos de comercio,
realizados por cualquier persona.
La observación de la realidad económica a la que se aplica el derecho mercantil nos demuestra que su
contenido se estructura conforme a tres elementos esenciales: el empresario, la empresa y la actividad
externa y conjunta de ambos. La especialidad de las exigencias que estos elementos hacen surgir
(inexistentes en el resto de derecho privado) justifican la especialidad de la disciplina (especialidad por
razón de materia).
El empresario mercantil es el elemento personal. Puede definirse como persona física o jurídica que
en nombre propio y por si o por medio de otro, ejercita organizada y profesionalmente una actividad
económica, dirigida a la producción o a la mediación de bienes o de servicios para el mercado.
El derecho le atribuye un status especial.

La Empresa es el aspecto funcional de la organización con fines


de producción, comercialización o prestación de servicios.

El tercer criterio es la actividad económica del empresario (o comerciante) realizada por medio de una


empresa (este elemento también delimita su contenido).
Es relevante para el derecho mercantil, porque al ser profesionalmente realizada atribuye al
sujeto agente un status especial; porque para hacerla posible surgen principios e instituciones también
especiales y, finalmente, porque la explotación de esta actividad se concreta en la realización de un
conjunto de actos y en la estipulación de negocios jurídicos con quienes se ponen en relación con
el empresario, en razón de la actividad económica explotada por este.
Concepto: de lo expuesto precedentemente, podemos concluir el concepto de derecho mercantil diciendo:
es el ordenamiento privado propio de los empresarios y de su estatuto, así como de la actividad externa
que estos realizan por medio de una empresa.
Esta definición afirma de nuevo que el derecho mercantil es un ordenamiento especial de sujetos o de
actos o actividades profesionales como lo fue en sus orígenes. Es decir que sería el derecho comercial,
mas una categoría histórica que dogmática.
Evolución: la evolución histórica (principales cambios que la economía y la técnica fueron introduciendo)
del comercio (también de la industria) se vincula estrechamente con la aparición y desarrollo de las
instituciones de derecho mercantil.

Como premisa debemos señalar que con el carácter de cuerpo conjunto de reglas específicas
(posteriormente códigos) el derecho comercial aparece recién al finalizar el medioevo.
Desde muy antiguo encontramos disposiciones relativas a contratos comerciales pero estas disposiciones
son aplicables, sin distinción, respecto tanto de actos comerciales o no, de comerciantes o no. En
otros términos, no se hace diferencia entre unos y otros. Sólo hay para el derecho personas y
actos jurídicos (contratos).
Por esta razón se puede hablar del derecho mercantil como categoría histórica: nace y, posteriormente,
subsiste como derecho especial frente al derecho común o civil. El derecho
mercantil como disciplina autónoma no ha existido siempre, sino que, por el contrario, su aparición se
produce en un momento histórico determinado y nace como una rama del derecho privado al lado
del derecho civil, por circunstancias y exigencias históricas (no es el resultado de
una clasificación dogmática).
Señala Broseta Pont que la íntima relación entre el derecho mercantil y los factores económicos y político-
sociales de cada momento histórico explica la relatividad del contenido de la materia mercantil. Porque al
evolucionar y al transformarse aquellos factores, evolucionaba y se transformaba el contenido de
este disciplina.
Esta evolución se evidencia en tres aspectos principales: 1) una corriente de extensión y ampliación del
ámbito del derecho mercantil; 2) una constante tendencia a la generalización y objetivación del contenido
del derecho comercial, y 3) una reciente tendencia a reducir el ámbito derechos antiguos: en
primer término habría aparecido el trueque desembocando en un necesaria consecuencia:
el comercio (intermediación de trueque y transporte).
La Mesopotamia fue el centro económico del mundo antiguo y si bien no existió
un derecho profesional del comercio tuvo su regulación integrando el derecho común. Es de destacar el
código de hammurabi (1728/1686 A. C.) Que incluía normas sobre sociedades, depósitos y operaciones
bancarias.
En Grecia tuvieron importancia la banca privada y la estatal. Se practicaban operaciones de cambio,
deposito y préstamo. Tuvo profunda influencia en el derecho romano, en particular, respecto
del comercio marítimo.
Derecho romano: en el derecho romano, la distinción entre el jus gentium y el jus civile no coincide
necesariamente con la división entre el derecho de los comerciantes y el de los civiles. No existió
derecho comercial, como tal, en esa época. Existieron (y son su origen) algunas instituciones similares a
las que actualmente forman parte del derecho comercial (particularmente en materia de derecho marítimo:
la nauticum foenus).
Roma, en su constante expansion y evolución, termina por convertirse en el centro del comercio mundial
de la época y en consecuencia su derecho civil debe adaptarse a la evolución y aun se hace necesario
crear o incorporar nuevas instituciones jurídicas.
Aparecen asociaciones, agrupaciones profesionales de mercaderes;
conocieron el contrato de cambio a distancia y se fue perfeccionando en sucesivas etapas una forma de
proceso concursal ante la insolvencia del deudor y la pluralidad de acreedores (inclusive llega a
incorporarse la figura del curador de los bienes del deudor como un equivalente al actual
sindico liquidador).
Edad media. Aparición del derecho mercantil. El artesanado. El tráfico de las ciudades. Mercados y ferias.
Las corporaciones y la jurisdicción mercantil: el derecho comercial surge de los usos regulares de
la práctica del comercio occidental entre los siglos XIV y XV sin que sea posible determinar la fecha de
su nacimiento con precisión. Son normas que se van fijando lentamente con motivo de la necesidad de un
proceso del tráfico que se reactiva y se transforma a partir del siglo IX.
1.3 DERECHO ROMANO

El derecho romano (en latín, Ius Romanum) fue el ordenamiento jurídico que rigió a los ciudadanos de


la Antigua Roma. El derecho romano, por su gran complejidad, aplicabilidad práctica y calidad técnica, aún
hoy es la base del derecho continental y de los códigos civiles contemporáneos, y se estudia en las
facultades de derecho de la mayoría de países que emplean el derecho continental. Su importancia
histórica e influencia en la ciencia del derecho, que se extiende también a los países de common law, se
manifiesta en la pervivencia de numerosas instituciones jurídicas latinas en la actualidad, como
la hipoteca o la teoría del contrato, y en la gran cantidad de expresiones jurídicas latinas.
Su vigencia se extiende desde la fundación de Roma (según la tradición, el 21 de abril de 753 a. C.) hasta
mediados del siglo VI d.C., época en la que tuvo lugar la labor compiladora del emperador Justiniano I, que
desde el Renacimiento se conoció con el nombre de Corpus Iuris Civilis. El Corpus destaca por su
complejidad jurídica y por su profunda influencia en la ciencia del derecho y suele considerarse el texto
legal más influyente de la historia de la humanidad. El derecho romano es la base de los países con civil
law y extiende su influencia a importantes aspectos del common law y otros sistemas jurídicos.
El derecho romano se divide, a grandes rasgos, en derecho público y en derecho privado, igual que el
derecho contemporáneo. Asimismo, ramas del derecho actual, como el derecho penal, el derecho
tributario o el derecho administrativo, existieron en la Antigua Roma. Se puede dividir en los siguientes
períodos:

 La monarquía, desde mediados del siglo VIII a.C. (fundación de Roma) hasta la expulsión


de Roma del rey Tarquinio el Soberbio el 509 a. C..
 La República romana, desde el 509 a.C. En los años 451 y 450 a. C. se publicó la Ley de
las XII Tablas, que constituyen la base del derecho romano republicano. En esta época, el Estado se basa
en el equilibrio de poderes: así, los magistrados son elegidos democráticamente por los hombres libres en
las asambleas populares, que además aprueban las leyes; los magistrados ejercitan las funciones que les
son asignadas, mientras que el Senado se encarga de dictar resoluciones, llamadas senadoconsultos, que
en la práctica tenían fuerza de ley. La crisis política que atraviesa Roma en el siglo I a. C. finalmente
termina con la degeneración total del sistema republicano, que culmina con el otorgamiento, en la práctica,
por el Senado del poder absoluto del Estado romano a Octavio Augusto el 27 a. C..
 El Principado, desde el 27 a. C. hasta mediados del siglo II. En esta época, el Estado era
autoritario, sometido a la auctoritas del emperador o Príncipe, de ahí su nombre. Algunos emperadores
célebres son: Augusto (27 a. C.-14 d. C.), Calígula (37-41), Nerón (54-68) o los hispanos Trajano (98-117)
y Adriano (117-138). Bajo estos últimos Roma alcanzó su máxima dimensión territorial: 5 millones de km². 12
, configurándose como una de las grandes potencias mundiales de la época.
 El Dominado o Imperio absoluto, desde mediados del siglo II hasta el 476, año en el que
desaparece el Imperio Romano de Occidente. En esta época, el Emperador tiene el poder absoluto. El
Emperador es quien dicta las llamadas «constituciones imperiales» (no confundir con las
modernas Constituciones). En el 380, se produce la conversión del Imperio de la antigua religión
romana al cristianismo mediante el Edicto de Tesalónica, bajo el gobierno de Teodosio I el Grande. Este
emperador divide el Imperio Occidental y Oriental y lo cede a sus hijos Honorio y Arcadio, respectivamente.
Las invasiones germánicas llevan al declive y desaparición del Imperio Occidental, que separa
la Antigüedad Tardía de la Alta Edad Media.
 Finalmente, el gobierno de Justiniano I (527-565) en el Imperio de Oriente, época en la que
se realiza la Compilación justinianea, cuya publicación data del 549 d. C. La obra esta compuesta por
el Código, el Digesto o Pandectas, las Instituciones y las Novelas. La Compilación es la base del derecho
romano y gracias a ella textos jurídicos de juristas romanos de gran técnica jurídica y valor histórico han
logrado ser conservados. Los textos del Corpus han sido trabajados por juristas desde su publicación y
hasta la actualidad. Con capital en Bizancio (luego Constantinopla y actualmente Estambul), conquistó
toda Italia, la costa del norte de África y el sudeste de Hispania. Tras la muerte de Justiniano,
paulatinamente el Estado pierde gran parte de esos territorios y se le suele denominar con un término
distinto: Imperio bizantino; pues el Imperio pasa a transformarse en un Estado propiamente medieval.
1.4 EDAD MEDIA

1.5 DERECHO MERCANTIL EN ESPAÑA Y MEXICO

Derecho Mercantil Mexicano antes de la Conquista

Los historiadores de aquellos remotos tiempos nos dicen, que a pesar de que la propiedad territorial estaba
casi toda ella vinculada en manos del soberano autócrata, de la nobleza guerrera y de la nobleza
sacerdotal, de manera que el común del pueblo apenas poseía inmuebles y todo se basaba en tributos por
las tierras no monopolizadas por los grandes señores.
Había una plaza con hileras de tiendas. Se hacían las compras y las ventas por vía de permutación, con
que daba cada uno lo que le sobraba por lo que había menester, y el maíz o el cacao servía de moneda
para las cosas menores. No se gobernaban por el peso ni le conocieron; pero tenían diferentes medidas
con que distinguir las cantidades, y sus números, y caracteres con que ajustar los precios, según sus
transacciones.
Hacían el comercio por medio del trueque de los objetos, confrontados según su valor; carecían en lo
absoluto de la moneda acuñada, mas empleaban para suplirla ciertos productos que servían como pecunia
en las transacciones mercantiles.

México 1521-1821

La introducción de ganadería, de nuevos cereales como el arroz, el trigo, la cebada y otros de igual
especie, y del cultivo de algunas plantas como la caña de azúcar, gusano de seda, etc., pero
principalmente el grande impulso que recibió la explotación de minerales del país, abrieron nuevas
corrientes hasta entonces desconocidas para los indígenas, a la industria, a la agricultura y al comercio.
Bajo el imperio de las leyes coloniales, la industria agrícola, lo mismo que la fabril, estaba rodeada de
trabas que hacían imposible su crecimiento.

LEYES MERCANTILES EN MEXICO

Ley General de Títulos y Operaciones de Crédito

Ley del Mercado de Valores

Ley de Instituciones de Crédito

Ley de Aeropuertos

Ley del Impuesto al Valor Agregado

Código Civil Federal

Ley Federal de Protección al Consumidor


Ley de Inversión Extranjera

Ley General de Turismo

Ley del Impuesto Especial sobre Producción y Servicios

Ley Federal de las Entidades Paraestatales

Ley para Regular las Agrupaciones Financieras

Ley del Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores

Ley de Aviación Civil

UNIDAD II CONCEPTOS GENERALES

2.2 LAS FUENTES DEL DERECHO MERCANTIL

Comprende, básicamente, la legislación, la costumbre y la jurisprudencia.


Respecto a la legislación, son fuentes de derecho mercantil mexicano, entre otras, las siguientes:
 El Código de Comercio.r
 La Ley General de Sociedades Mercantiles.
 La Ley General de Sociedades Cooperativas.
 La Ley General de Títulos y Operaciones de Crédito.
 La Ley Monetaria de los Estados Unidos Mexicanos.
 La Ley de Instituciones de Crédito.
 La Ley General de Organizaciones y Actividades Auxiliares del Crédito.
 La Ley Sobre el Contrato de Seguro.
 La Ley Federal de Instituciones de Finanzas.
 La Ley de Concursos Mercantiles.
 La Ley del Fomento y Protección de la Propiedad Industrial.
 La Ley de Inversión Extranjera.
 La Ley Federal de Protección al Consumidor.
Las fuentes del Derecho mercantil son todo aquello que se origina en su aspecto objetivo de norma o regla
obligatoria de conducta y constituye, por lo tanto, el modo o forma especial como se desarrolla y
desenvuelve esa rama del Derecho. La principal fuente del derecho comercial es la legislación mercantil,
una ley tiene carácter mercantil cuando el legislador se lo ha dado explícitamente y cuando recae sobre
materia que por la propia ley, o por otra diversa, ha sido declarada materia de comercio.”

2.2 LOS SUJETOS DEL DERECHO MERCANTIL

El término “sujetos de derecho mercantil” se refiere a todas aquellas personas que por alguna razón
intervienen en un acto de comercio (independientemente de que sean comerciantes o no) y que, por lo
tanto, se les aplica el derecho mercantil. Esta definición atiende a un criterio formal pues depende de lo
que la ley considere como acto de comercio.
Son sujetos del derecho mercantil los que realizan accidentalmente actos de comercio (ART 4º) como los
comerciantes (ART 3º), toda persona que tiene capacidad de ejercicio de derecho civil la tiene también para
realizar por si misma actos de comercio. Sin embargo, algunos de estos actos no pueden celebrarse bajo
cumplir con ciertos requisitos, en todo caso que no exista una disposición legal los actos de comercio pueden
ser celebrado por cualquier persona física no incapacitada civilmente.

2.3 LAS OBLIGACIONES DE LOS COMERCIANTES

OBLIGACIONES DE LOS COMERCIANTES


Varias son las obligaciones y se distinguen algunas que por modo concreto o particular establecen las
leyes mercantiles en orden a ciertos comerciantes individuales o colectivos y tratándose además de
determinadas actividades del comercio.
a)    Inscripción en el Registro Público de Comercio.
b)    Publicación de la calidad mercantil.
c)    Llevar cuenta y razón pormenorizada de las operaciones.
d)    Conservar la contabilidad mediante la conservación de los libros respectivos.
e)    Llevar y conservar la correspondencia mercantil.
f)     Formar parte de las cámaras de comercio.

a).- Inscripción en el Registro Público de Comercio.- El comerciante individual tiene la obligación


potestativa, de inscribirse en el Registro Público de Comercio, en razón de que la calidad comercial en el
sujeto no deriva de la matricula, sino de las circunstancias expuestas en la fracción I del artículo 3º del
Código de Comercio.
En el caso de las sociedades, está más que justificada la inscripción, debido a que tratándose de entes
colectivos que realizan la actividad comercial, el público en general y especialmente los que con dichos
organismos contratan, necesitan estar protegidos, conocer los antecedentes, solvencia, responsabilidad,
domicilio, duración, personas usuarias de la firma social, monto de integración del capital, etc.
b).- Publicación de la calidad mercantil.- De conformidad con el artículo 17 del Código de Comercio, los
comerciantes están obligados a participar en la apertura de su establecimiento o despacho mediante una
circular dirigida al domicilio de comerciante y a los comerciantes de los lugares donde vayan a
establecerse sucursales, agencias o corresponsales, dicha circular debe contener el nombre de
establecimiento, la ubicación del mismo y la determinación de giro comercial; si se han designado
administradores o representante y en su caso los nombres, con indicación de las facultades conferidas
para firmar por el comerciante u obligarlo; y tratándose de sociedades mercantiles, la circular deberá
contener además, la expresión de quien o quienes sean los administradores y señalar las personas que
hayan de tener la firma social.

La obligación de anunciar la calidad mercantil se extiende a dirigir circulares en las mismas condiciones,
cuando variare cualquiera de las circunstancias enunciadas; y finalmente, las circulares se publicarán en el
Diario Oficial de la Federación y en su defecto en algún otro del o de los lugares en que haya de ejercerse
el comercio; la publicación  deberá llevarse a cabo en los casos de liquidación del negocio o clausura del
establecimiento comercial.

c) Llevar cuenta y razón pormenorizada de las operaciones.- Entre las más importantes obligaciones de
todo comerciante, se cuenta  la que atañe a la contabilidad. Esta materia es regulada por los artículos 33 al
46 del Código de Comercio, viene desde luego la utilidad de permitir al comerciante la constatación de sus
operaciones y su comprobación, así como la posibilidad inmediata de establecer el saldo de cada cuenta
en un momento dado; en otro sentido, también constituye una garantía para los terceros que contraten con
el comerciante, debido a que la contabilidad perjudica a éste; esto es, al comerciante en el sentido de que
de ella puede  prevalerse cualquiera persona que tenga interés, incluso por el procedimiento de ofrecerla
como prueba en juicio. En lo que atañe finalmente al Estado, la contabilidad del comerciante le permite
determinar su tributación a las cargas públicas.

d) Conservar la contabilidad mediante la conservación de los libros respectivos.- La ley mexicana


establece el principio general de que todos los comerciantes deben llevar libros: “cuenta y razón
pormenorizada de todas sus operaciones y en tres libros cuando menos”.
De acuerdo con las disposiciones legales vigentes en el artículo 33 del Código de Comercio, se establece
que el comerciante está obligado a llevar y mantener un sistema de contabilidad adecuado. Este sistema
podrá llevarse mediante los instrumentos, recursos y sistemas de registro y procesamiento que mejor se
acomoden a las características particulares del negocio, pero en todo caso deberá satisfacer los siguientes
requisitos mínimos:
1.- Permitirá identificar las operaciones individuales y sus características, así como conectar dichas
operaciones individuales con los documentos comprobatorios originales de las mismas.
2.- Permitirá seguir la huella desde las operaciones individuales a las acumulaciones que den como
resultado las cifras finales de las cuentas y viceversa.
3.- Permitirá la preparación de los estados que se incluyan en la información financiera del negocio.
4.- Permitirá conectar y seguir la huella entre las cifras de dichos estados, las acumulaciones de las
cuentas y las operaciones individuales.
5.- Incluirá los sistemas de control y verificación internos necesarios para impedir la omisión del registro de
operaciones, para asegurar la corrección del registro contable y la corrección de las cifras resultantes.

e) Llevar y conservar al correspondencia mercantil.- Por mandamiento de los artículos 47 al 50 del Código
de Comercio, incumbe a los comerciantes la obligación de conservar y ordenar la correspondencia (todas
las cartas y telegramas que reciban) relacionada a su negocio o giro anotando al dorso de cada uno de
ellos, la fecha respectiva y en la que hubieren sido contestadas o la expresión de no haberse hecho esto
último.
Los preceptos aludidos imponen también la obligación a comerciante de trasladar a un libro apropiado, ya
sea manualmente ya por algún medio mecánico, las cartas que él emita, esta encuadernación debe
hacerse cronológicamente y de manera que la correspondencia aparezca con claridad para que en
cualquier momento pueda reconstruirse la historia de los negocios a través de la correspondencia, hasta
donde ésta lo permita en sentido lógico.
El artículo 50 del código en cita consigna la garantía del secreto de la correspondencia comercial, a
semejanza de lo que ocurre con el secreto de la contabilidad; determina que sólo a instancia de parte
legítima, aunque en algunos casos también de oficio, se deben presentar en juicio las cartas del
comerciante que tengan relación con el asunto materia de la controversia, así como las cartas que se
hayan escrito los litigantes, a condición de que la parte que ofreciere la prueba, determine con precisión y
de antemano la parte de a correspondencia que verse sobre la probanza.

f) Formar parte de las Cámaras de Comercio.- Regulada por una ley especial que se llama de Cámaras de
Comercio e Industria, existe la recomendación para los comerciantes de formar parte de una institución de
esa categoría.
Las Cámaras de Comercio e Industria se definen como instituciones autónomas y de carácter público al
mismo tiempo, con personalidad jurídica, integradas por comerciantes e industriales residentes en la
República y con objeto de representar los intereses mercantiles del comercio y la industria de su
jurisdicción, de fomentar el desarrollo del comercio y la industria nacional, de coadyuvar a al defensa de los
intereses particulares de sus asociados sin más limitaciones que los señalados en la Ley de Cámaras de
Comercio y de Industria y prestarles los servicios a que tengan derecho conforme a los estatutos
respectivos, de ser órganos de colaboración del Estado para la satisfacción de las necesidades
relacionadas con el comercio y la industria nacionales y con todos los demás fines que señalan la propia
ley mencionada, los estatutos de cada cámara y la naturaleza propia de cada institución.

2.4 LOS AUXILIARES DE LOS COMERCIANTES

Los auxiliares del comercio consideran su actividad independiente, puesto que prestan sus servicios al
comercio en general, sin depender directamente de algún comerciante, se clasifican fundamentalmente en:

Comisionista: el comerciante que por lo regular es el comodante confiere comisión mercantil al


comisionista, quien desempeña la realización de actos concretos de comercio, mediante la instrucción que
aquél le da por escrito.

Agentes de Comercio: Son quienes auxilian al comercio y que de manera autónoma se encarga de
fomentar los negocios de los comerciantes.

Corredores: Son personas ante las que se proponen, ajustan y otorgan los contratos mercantiles.

Agentes aduanales: Son quienes intervienen en el trámite de la importación y exportación de mercancías y


tienen la autorización de la patente respectiva.

Contadores Públicos: Profesionales que auxilian a los comerciantes en el examen de la situación de sus
empresas y llevan el sistema de contabilidad correspondiente.
Auxiliare del Comercio Dependiente

Se consideran auxiliares dependientes del comerciante porque prestan sus servicios, dependen
económicamente y están bajo la dirección del comerciante.

Factores: Son quienes tienen la dirección de alguna empresa o establecimiento fabril, comercial o están
autorizados para contratar respecto a todos los negocios concernientes a dichos establecimientos o
empresas por cuenta y en nombre de los propietarios del mismo (art. 309 del Código de Comercio).

Dependientes: Aquellos que desempeñan alguna o algunas gestiones propias del tráfico comercial en
nombre y cuenta del propietario de éste.

Contadores Privados: Son los auxiliares encargados de llevar la contabilidad del comerciante del cual
dependen.

Agentes de ventas: Son los que gestionan la venta y pedidos de mercadería del comerciante en
determinada plaza.

Viajantes de ventas: Son vendedores foráneos que recorren la República levantando pedidos sobre
muestras de mercaderías del comerciante.

Empleados: Son quienes colaboran directamente con el comerciante y están sujetos a un horario dentro
del cual prestan sus servicios.

2.6 LAS COSAS MERCANTILES

Qué es cosa Mercantil: Todo bien mueble que se encuentra en el comercio y que es susceptible de
apropiación.

¿Cuáles son las cosas mercantiles?: En el ordenamiento jurídico específicamente el artículo 1º de la Ley
General de Títulos y Operaciones de crédito, en el cual se establece:

Cosas Mercantiles son:

1. Los títulos de Crédito

TITULO DE CRÉDITO

Es todo aquel documento que se reciba comúnmente en pago o en calidad de crédito, en las transacciones
comerciales, en lugar de moneda, teniendo como características especificas, la literalidad, la legitimidad o
legitimación: la incorporación, la autonomía del derecho que incorpora, formalismo o formulismo y la
circulación.

Art. 385 del código de comercio dice que: Son títulos de crédito los documentos que incorporan un derecho
literal y autónomo, cuyo ejercicio o transferencia es imposible independientemente del título. Los títulos de
crédito tienen la calidad de bienes muebles.

Características Generales

• Formalismo o formulismo: Documento sujeto a una formula especial de redacción y debe contener
los elementos generales de todo titulo y los especiales de cada uno en particular.
• Incorporación: El derecho está incorporado y forma parte de él, al transferir el documento se
transfiere también el derecho. El derecho se transforma, en algo corporal.

• Literalidad: Los alcances del derecho que se encuentra incorporado en el titulo de crédito se rigen
por lo que el documento diga en su tenor escrito. En contra de ello no se puede oponer prueba alguna.

• Autonomía: Tiene una existencia independiente de cualquier vinculo subjetivo, precisamente por su
incorporación. EL titulo genera derechos y obligaciones autónomas. Esto tiene que ver con la acción
cambiaria, ya que se puede hacer valer en contra de cualquier signatario, indistintamente.

• Legitimidad: Consiste en que el tenedor legitimo del título es el que al momento de hacer efectivo
debe de entregar el titulo e identificarse como titular del mismo, convirtiéndose esta en una característica
esencial de la circulación legitima de los títulos de crédito.

UNIDAD III LOS CONTRATOS MERCANTILES


Un contrato, un acuerdo privado, oral o escrito, entre partes que se obligan sobre materia o cosa
determinada, y a cuyo cumplimiento pueden ser compelidas. Es un acuerdo de voluntades que genera
derechos y obligaciones para las partes. Por ello se señala que habrá contrato cuando varias partes se
ponen de acuerdo sobre una manifestación de voluntad destinada a reglar sus derechos.

Doctrinariamente, ha sido definido como un acto jurídico bilateral o multilateral, porque intervienen dos o
más personas (a diferencia de los actos jurídicos unilaterales en que interviene una sola persona), y que
tiene por finalidad crear derechos y obligaciones (a diferencia de otros actos jurídicos que están destinados
a modificar o extinguir derechos y obligaciones, como las convenciones). También se denomina contrato el
documento que recoge las condiciones de dicho acto jurídico.

3.1 LAS OBLIGACIONES: SU CLASIFICACION Y CARACTERISTICAS.

. Las Obligaciones Mercantiles Las obligaciones mercantiles se fundan en las obligaciones civiles del
Código Civil Federal y luego se refieren al Código de Comercio que las menciona en sus artículos que
constituyen los contratos mercantiles que se verán en el Tema 6. ( se recomienda ver el Tema 7 de la
materia Nociones de Derecho que trata de las obligaciones Civiles) Obligaciones Mercantiles La obligación
en un vínculo jurídico por el cual una persona llamada deudor se constituye en la necesidad de dar, hacer
o no hacer alguna cosa en beneficio de otra persona llamada acreedor. El Artículo 77, del Código de
Comercio, dice que las convenciones ilícitas no producen obligación ni acción, aunque recaigan sobre
operaciones de comercio. El artículo 78 del mismo Código, dice: “en las convenciones mercantiles cada
uno se obliga en la manera y términos que parezca que quiso obligarse, sin que la validez del acto
comercial dependa de la observancia de formalidades o requisitos determinados. El artículo 81, del mismo
Código, que con las modificaciones y restricciones de este Código serán aplicables a los actos mercantiles
las disposiciones del civil…….

CLASIFICACIÓN

Por su objeto, las obligaciones se clasifican en obligaciones de dar, de hacer, y de no hacer. Las
obligaciones de dar consisten en la traslación de la propiedad de cosa cierta y en la enajenación temporal
del uso o goce de cosa cierta y en la restitución de cosa ajena o en el pago de cosa debida. En las
obligaciones de hacer el deudor está obligado a realizar un hecho. En las obligaciones de no hacer, el
deudor debe abstenerse de realizar un hecho.

3.2 CONTRATO DE ASOCIACION EN PARTICIPACION

ARTICULOS DEL 252 AL 259 LEY GENERAL DE SOCIEDADES MERCANTILES

De acuerdo al artículo 252 de la Ley General de Sociedades Mercantiles el contrato de


asociación en participación es un contrato por el cual una persona (Asociante) concede
a otras (Asociado (s) que le aportan bienes o servicios, una participación en las utilidades
y en las perdidas de una negociación mercantil o de una o varias operaciones de
comercio.

Para diferenciarlo de otros con los que guarde cierta similitud, es que, no tiene ni razón
social ni personalidad jurídica, por lo que el asociante interviene en nombre propio, y no
hay relación jurídica entre los asociados y terceros.
EFECTOS FISCALES

La Ley del ISR, atribuye al contrato de asociación en participación efectos fiscales una


personalidad jurídica y le da el tratamiento de persona moral.

En el caso del IVA, al ser el asociante quien realiza el negocio, será el que responda de
todas las obligaciones generadas por el mismo, incluido también el IVA.

VENTAJAS PARA EL ASOCIANTE

Las empresas para ser más competitivas requieren de capital para poder modernizar
procesos. En ocasiones el asociante desea obtener capital de trabajo pero no a costas de
abrir su negocio a nuevos socios ni perder el control de su empresa. El contrato de
asociación en participación resulta el mecanismo ideal para obtener aportes de terceros.

El asociado es solo un inversionista que arriesga su aportación y que solo tiene derecho a
que se le de cuenta de los resultados.

¿QUÉ LEY MEXICANA REGULA EL CONTRATO DE ASOCIACIÓN EN PARTICIPACIÓN?

La Ley General de Sociedades Mercantiles

¿CUÁLES SON SUS CARACTERÍSTICAS?

 Se requieren mínimo dos partes.

 Como hemos visto no tiene personalidad jurídica.

 No cuenta con razón o denominación social.

 No tiene un patrimonio social.

 El encargado de la administración del negocio y actuar como representante social


será el asociante.

 Entre el que aporta el capital y realiza la actividad existe un interés común.

 Según lo pactado en el contrato se distribuirán las perdidas y ganancias.

 Lo que pierdan los asociados no puede exceder a lo que hayan aportado.

 Nunca puede adquirir la forma de una sociedad mercantil.


3.3 LA COMPRAVENTA MERCANTIL

  La compraventa mercantil es la compra para revender, lucrándose en la reventa. Para el


Código de Comercio no coinciden, pues, los conceptos de compraventa mercantil y
compraventa profesional. Desde un punto de vista negativo, porque puede ser compraventa
mercantil aquélla por la que adquiere los efectos una persona que no es comerciante habitual,
siempre que pretenda lucrarse con la reventa, incluso ocasionalmente. Desde un punto de
vista positivo, porque las ventas hechas por fabricantes o empresarios agrícolas no se
reputan mercantiles, ni aunque se realicen a un comprador que pretenda revenderlas con
lucro. Será preciso determinar en cada caso la existencia de esa intención de lucro
especulativo. Es claro que será mercantil cuando, a tenor de las circunstancias
(principalmente, profesionalidad del comprador), el vendedor pueda razonablemente suponer
que el comprador revenderá la mercancía.

Esta última afirmación se justifica sosteniendo que los números 2 y 3 del artículo 336 del
Código de Comercio no son repeticiones del artículo 325, sino excepciones al mismo. Es
decir, que las ventas hechas por artesanos o agricultores o ganaderos no son mercantiles, a
pesar de que, conforme al artículo 325 Código de Comercio, el comprador haya sido un
comerciante que pretende lucrarse revendiendo. Si los números 2 y 3 del artículo 326 no se
estuvieran refiriendo a las ventas a comerciantes no hubiera sido preciso mencionarlos, pues
las ventas de fabricantes o agricultores a los consumidores finales ya estaban claramente
excluida del ámbito mercantil por el artículo 325.

 2. Las ventas hechas a un consumidor final no son nunca mercantiles. Tanto si las realiza un
fabricante o productor como si son llevadas a cabo por un comerciante intermediario que
revende lo que él mismo adquirió. Esto ya estaba con claridad dispuesto en el artículo 325
CCo, pero lo remacha el artículo 326.1 CCo, que es ciertamente repetitivo.
 3. Las compraventas que regula el Código de comercio son compraventas de efectos o
mercaderías. Ni en los artículos citados ni en los otros que completan la regulación se regula
la compraventa de bienes de equipo destinados a la explotación y uso en la empresa del
comprador. Tampoco hay normas relativas a la compraventa de inmuebles. De forma que,
aun cuando su mercantilidad no estuviera ya excluida por los artículos citados, habría que
negarla por efectos prácticos, ya que habríamos de acudir en bloque a la regulación de la
compraventa (y en concreto de la compraventa de inmuebles) del Código civil.

3.4 EL PRESTAMO MERCANTIL

Artículo 358.Se reputa mercantil el préstamo cuando se contrae en el concepto y con


expresión de que las cosas prestadas se destinan a actos de comercio y no para
necesidades ajenas de éste. Se presume mercantil el préstamo que se contrae entre
comerciantes.
Legislación: Código de Comercio
Tipo: Federal
Se considera mercantil el préstamo cuando se contrae en el concepto y con expresión de
que las cosas prestadas se destinan a actos de comercio y no para necesidades ajenas
de este. Se presume mercantil el préstamo que se contrae entre comerciantes. (CCo 358-
370)
De lo anterior se desprende que el préstamo mercantil supone la existencia de dos
elementos, a saber, un objetivo, que es cuando la cosa prestada se destina a la
realización de actos de comercio y uno subjetivo, que es cuando el préstamo se contrata
entre comerciantes.
Sánchez Calero Fernando, en su libro Instituciones de Derecho Mercantil, lo define
señalando que es un contrato por el cual una persona (prestatario), recibe de otra
(prestamista), una cosa fungible en propiedad y se obliga a devolverle otro tanto de la
misma especie y calidad.

3.5 EL MANDATO MERCANTIL

Etimología del mandato: 


La palabra mandato procede del latín MANUS DATIO o  MANU DARE (Mandare,
significa dar poder; manun significa dare),   o sea el hecho de darse la mano mandante y
mandatario, para simbolizar la amistad, fidelidad y confianza existente entre ambos que
motivaba la creación del vínculo jurídico contractual que los uniría. Originándose de esta
manera el Mandato en el Derecho Romano.

3.- Diversas acepciones del término Mandato:


Cuando el mandatario obra por cuenta del mandante, pero en nombre propio estamos en el
llamado mandato simple, que se corresponde con la representación indirecta o mandato
sin poder de representación. Si el mandatario actúa por cuenta y también en nombre
del mandante, estamos en el llamado mandato ostensible o mandato
representativo, que se corresponde con la representación directa y se instrumenta
mediante el otorgamiento de poderes (mandato con poder de representación o gestión de
negocios con mandato).
-          Manuel Osorio lo define como “contrato que tiene lugar cuando una parte da a otra el
poder, que esta acepta representarla al efecto de ejecutar en su nombre y por su cuenta
un acto jurídico o una serie de actos de esa naturaleza”.
-          Cabanellas, entiende por mandato el “contrato consensual por el cual una de las
partes, llamada mandate, confía su representación, el desempeño de un servicio o la
gestión de un negocio, a otra persona, el mandatario, que acepta el encargo”.

b-     Para la Ley, el Código Civil en el artículo 1875 es: un contrato en que una persona
confía la gestión de uno o más negocios a otra, que se hace cargo por cuenta y riesgo de
la primera.
c-      Para el Código de Comercio, por el mandato mercantil el mandatario se encarga de
practicar actos de comercio por cuenta y a nombre del mandante, según el artículo 1083.
4.- Objeto del Mandato Mercantil:
El artículo 1083 del Código de Comercio, al definir mandato mercantil dice: el mandatario
se encargara de practicar actos de comercio por cuenta y a nombre del mandante; por lo
cual podemos inferir que el objeto es como anteriormente hemos citado: PRACTICAR
ACTOS DE COMERCIO, POR CUENTA Y A NOMBRE DEL MANDANTE.

3.6 EL DEPÓSITO MERCANTIL

En este contrato el depósito se constituye desde que se recibe la cosa ajena con la obligación
de guardarla y de restituirla, aunque solo se trata de un contrato de depósito mercantil cuando
la finalidad esencial de las partes sea precisamente esa custodia. Además, no se permite el
uso del bien depositado sino únicamente la guarda y custodia.

Requisitos y características
Para que el depósito sea mercantil se requiere que concurran simultáneamente tres requisitos:
- Que el depositario, sea comerciante.
- Que las cosas depositadas sean objeto de comercio, estén dentro del comercio de los
hombres y se trate de un bien mueble.
- Que el depósito constituya por sí mismo una operación mercantil, o se haga como causa o a
consecuencia de operaciones mercantiles.
En función de las características que reúna el contrato de depósito han de entenderse
depósitos mercantiles los siguientes supuestos:
- En los que el depositario es un empresario dedicado al mercado de depósitos y el depositante
es un empresario que precisa de la custodia de sus mercaderías.
- En los que el depositario es un empresario dedicado al mercado de depósitos y el depositante
es un particular-no-empresario que precisa de la custodia de un bien.
No tienen carácter mercantil:
- El depósito hecho en empresario oferente del mercado de depósitos cuando la cosa
depositada no pertenece a su género de comercio.
- El depósito hecho en un particular por un empresario.
- El depósito hecho en un particular por otro particular.
Por tanto, el objeto del contrato ha de ser una cosa mueble, objeto de comercio para el
depositario, sin lo cual el depósito deja de ser mercantil, lícita y no necesariamente propiedad
del depositante.
 
Obligaciones del depositario
El depositario está obligado a conservar la cosa objeto de depósito, respondiendo de los
menoscabos, daños y perjuicios que las cosas depositadas sufran por su malicia y negligencia.
También responde de los daños que provengan de la naturaleza o vicio de las cosas, si en
estos casos no hizo por su parte lo necesario para evitarlos o remediarlos, dando aviso de
ellos, además, al depositante, en cuanto se manifiesten.
El depositario mercantil no cumple su obligación de custodia con una mera conducta pasiva,
como la del depositario civil, sino que debe prestar una activa diligencia en los servicios de
custodia. Este mayor grado de diligencia se justifica porque el contrato se presume retribuido.
Asimismo, tiene que devolverla, incluyendo los aumentos de la cosa. Dicha devolución ha de
verificarse tan pronto lo pida el depositante, aunque en el contrato se haya fijado un plazo o
tiempo determinado para la devolución.
Si se ha designado un lugar de devolución, el depositario debe llevar a él la cosa depositada,
siendo los gastos del traslado a cargo del depositante. Ahora bien, si éste no se ha designado,
la devolución se hace en el lugar en que se halle la cosa depositada, aunque no sea el mismo
lugar en que se hizo el depósito, siempre que no haya mediado malicia por parte del
depositario.
Como garantía para el depositario, si solicitada la devolución de la cosa depositada el
depositante no hubiere pagado el precio y. en su caso, los gastos extraordinarios ocasionados
por razón del depósito, el depositario podrá negarse a devolver la cosa depositada a no ser que
se le garantice el pago mediante caución suficiente. Este derecho subsistirá mientras el
depositario conserve en su poder los bienes depositados.
 
Obligaciones del depositante
La única obligación del depositante es el pago de la remuneración pactada, teniendo en cuenta
que si las partes no han fijado una retribución, se regula según los usos del lugar en que el
depósito se haya constituido.
El depositario puede retener en prenda la cosa depositada hasta el completo pago de lo que se
le deba por razón del depósito.
No es unánime la doctrina al discutir si el depositante está obligado o no a reembolsar al
depositario los gastos que haya hecho para la conservación de la cosa depositada y a
indemnizarle de todos los perjuicios que se le hayan seguido del depósito, pues hay autores
que creen que esta obligación, propia del depósito civil, recae también sobre el depositante en
el contrato mercantil, pero hay otros que entiende que esos gastos e indemnizaciones habrán
sido previstos por el empresario como parte de su estructura de costes, lo que se tendrá en
cuenta para fijar el precio.
3.7 El contrato de transporte
El contrato de transporte es un contrato en virtud del cual una persona (física o jurídica)
se obliga a trasladar de un lugar a otro, por tierra, mar, canales, lagos o ríos navegables o
aire, pasajeros o mercaderías ajenas, y a entregar estas a la persona a quien vayan
dirigidas, a cambio de una contraprestación económica.
El contrato de transporte puede ser verbal; en general, se materializa en la llamada «carta
de porte», cuya emisión no es obligatoria, una vez extendida representa el título legal del
contrato, tiene una utilidad probatoria trascendente. Las partes pueden exigirse
mutuamente la carta de porte.
Un contrato de transporte regula:

1. La responsabilidad del transportista.


2. Los plazos para reclamar daños, tanto aparentes como ocultos.
3. Los plazos de prescripción de las reclamaciones.
4. Las indemnizaciones.
Una carta de porte debe contener, como mínimo: nombre y domicilio de las partes y
demás sujetos intervinientes, descripción de las mercancías a transportar y de su estado,
ruta convenida, plazo y lugar de entrega, firmas y fecha. Tiene dos funciones importantes:
es el elemento probatorio del contrato de transporte y representa el título de propiedad de
la mercadería.
3.8 EL CONTRATO DE SEGURO
¿Qué es un seguro mercantil?

Se define como contrato de seguro aquel contrato mercantil por el que el asegurador se
obliga, mediante el cobro de una prima y para el caso de que se produzca el evento cuyo
riesgo es objeto de cobertura a indemnizar, dentro de los límites pactados, el daño
producido al asegurado o a satisfacer un capital, una renta u otras prestaciones
convenidas.

El contrato de seguro se formaliza por escrito

El contrato de seguro y sus modificaciones o adiciones deberán ser formalizadas por


escrito. El asegurador está obligado a entregar al tomador del seguro la póliza o, al
menos, el documento de cobertura provisional. En las modalidades de seguro en que por
disposiciones especiales no se exija la emisión de la póliza el asegurador estará obligado
a entregar el documento que en ellas se establezca.

Quién ha de ser el tomador del seguro

El tomador del seguro puede contratar el seguro por cuenta propia o ajena. En caso
de duda se presumirá que el tomador ha contratado por cuenta propia. El tercer
asegurado puede ser una persona determinada o determinable por el procedimiento que
las partes acuerden.

Si el tomador del seguro y el asegurado son personas distintas, las obligaciones y los
deberes que derivan del contrato corresponden al tomador del seguro, salvo aquellos que
por su naturaleza deban ser cumplidos por el asegurado. No obstante, el asegurador no
podrá rechazar el cumplimiento por parte del asegurado de las obligaciones y deberes
que correspondan al tomador del seguro.

Los derechos que derivan del contrato corresponderán al asegurado o, en su caso, al


beneficiario, salvo los especiales derechos del tomador en los seguros de vida.

¿Cuáles son los contenidos mínimos del seguro?

Contendrá, como mínimo, las indicaciones siguientes:

1. Nombre y apellidos o denominación social de las partes contratantes y su domicilio,


así como la designación del asegurado y beneficiario, en su caso.

2. El concepto en el cual se asegura.

3. Naturaleza del riesgo cubierto, describiendo, de forma clara y comprensible,


las garantías y coberturas otorgadas en el contrato, así como respecto a cada una de
ellas, las exclusiones y limitaciones que les afecten destacadas tipográficamente.

4. Designación de los objetos asegurados y de su situación.

5. Suma asegurada o alcance de la cobertura.

6. Importe de la prima, recargos e impuestos.

7. Vencimiento de las primas, lugar y forma de pago.

8. Duración del contrato, con expresión del día y la hora en que comienzan y terminan
sus efectos.

9. Si interviene un mediador en el contrato, el nombre y tipo de mediador.

¿Cuánto tiempo dura un contrato de seguro?

1. La duración del contrato será determinada en la póliza, la cual no podrá fijar un


plazo superior a diez años. Sin embargo, podrá establecerse que se prorrogue una o
más veces por un período no superior a un año cada vez.

2. Las partes pueden oponerse a la prórroga del contrato mediante una notificación escrita
a la otra parte, efectuada con un plazo de, al menos, un mes de anticipación a la
conclusión del período del seguro en curso cuando quien se oponga a la prórroga sea el
tomador, y de dos meses cuando sea el asegurador.

3. El asegurador deberá comunicar al tomador, al menos con dos meses de antelación a


la conclusión del período en curso, cualquier modificación del contrato de seguro.

4. Las condiciones y plazos de la oposición a la prórroga de cada parte, o su


inoponibilidad, deberán destacarse en la póliza.

5. Lo dispuesto en los apartados precedentes no será de aplicación en cuanto sea


incompatible con la regulación del seguro sobre la vida.
Tipos de seguros

 Seguro contra daños


 Seguro de incendios
 Seguro contra el robo
 Seguro de transportes terrestre
 Seguro de lucro cesante
 Seguro de caución
 Seguro de crédito
 Seguro de responsabilidad civil
 Seguro de defensa jurídica
 Seguro sobre la vida
 Seguro de accidentes
 Seguros de enfermedad y asistencia sanitaria
 Seguros de decesos y dependencia
Conclusión del contrato de seguro

El tomador del seguro tienen el deber, antes de la conclusión del contrato, de declarar al
asegurador, de acuerdo con el cuestionario que éste le someta, todas las
circunstancias por él conocidas que puedan influir en la valoración del riesgo.
Quedará exonerado de tal deber si el asegurador no le somete cuestionario o cuando, aun
sometiéndoselo, se trate de circunstancias que puedan influir en la valoración del riesgo y
que no estén comprendidas en él.

El asegurador podrá rescindir el contrato mediante declaración dirigida al tomador del


seguro en el plazo de un mes, a contar del conocimiento de la reserva o inexactitud del
tomador del seguro. Corresponderán al asegurador, salvo que concurra dolo o culpa
grave por su parte, las primas relativas al período en curso en el momento que haga esta
declaración.

Si el siniestro sobreviene antes de que el asegurador haga la declaración a la que se


refiere el párrafo anterior, la prestación de éste se reducirá proporcionalmente a la
diferencia entre la prima convenida y la que se hubiese aplicado de haberse conocido la
verdadera entidad del riesgo. Si medió dolo o culpa grave del tomador del seguro quedará
el asegurador liberado del pago de la prestación.

3.9 LOS CONTRATOS DE GARANTÍA: LA PRENDA Y LA FIANZA MERCANTIL

CONTRATOS DE GARANTÍA.
Fianza. La fianza es un contrato por el cual una persona se compromete con el
acreedor a pagar por el deudor, si éste no lo hace, o sea, el contrato de fianza es
un contrato accesorio por el cual una persona se compromete con el acreedor a
pagar por el deudor, la prestación o una equivalente o inferior, en igual o distinta
especie, si éste no lo hace. Las características del contrato de fianza son las
siguientes: a) Accesorio, porque no existe por sí mismo, sino que depende de una
relación preexistente entre un deudor o un acreedor, salvo algunas excepciones.
b) Unilateral, generalmente. c) Bilateral, cuando existe una retribución a cargo del
acreedor. d) Gratuito. e) Oneroso por excepción, cuando el acreedor reporta como
obligación retribuir al fiador. Algunos autores dicen que el contrato de fianza se
convierte en contrato de seguro. f) Consensual en oposición a formal, excepto en
los casos de la fianza legal, judicial u otorgada en póliza. g) Aleatorio o
conmutativo, cuando la fianza tiene el carácter de oneroso, debido a que se
establezca una retribución. h) De garantía, pues, implica una obligación para el
fiador de pagar, en caso de que el deudor no lo haga.

. Prenda. Es un contrato real accesorio por virtud del cual el deudor o un tercero entregan al
acreedor una cosa mueble, enajenable, determinada, para garantizar el cumplimiento de una
obligación principal y su preferencia en el pago, concediéndole además los derechos de
persecución y de venta sobre los citados bienes en caso de incumplimiento.4 O como lo prescribe
el derecho positivo: la prenda es un derecho real constituido sobre un bien mueble enajenable para
garantizar el cumplimiento de una obligación y su preferencia en el pago. También pueden darse en
prenda los frutos pendientes de los bienes raíces que deben ser recogidos en tiempo determinado.
Para que esta prenda surta sus efectos contra tercero necesitará inscribirse en el Registro Público a
que corresponda la finca respectiva. El que dé los frutos en prenda se considerará como depositario
de aquellos, salvo convenio en contrario. Para que se tenga por constituida la prenda, deberá ser
entregada al acreedor, real o jurídicamente. Se entiende entregada jurídicamente la prenda al
acreedor, cuando éste y el deudor convienen en que quede en poder de un tercero, o bien cuando
quede en poder del mismo deudor porque así lo haya estipulado con el acreedor o expresamente lo
autorice la ley. Cuando la prenda quede en poder del deudor, para que surta efectos contra tercero
debe inscribirse en el Registro Público. La inscripción sólo podrá 4 En todo lo referente al contrato
de prenda, véase el Código Civil del Distrito Federal de los artículos 2856 a 2892. efectuarse si se
trata de bienes que sean susceptibles de identificarse de manera indubitable y si conforme al
reglamento del registro pueden ser materia de inscripción. El contrato de prenda debe constar por
escrito. Si se otorga en documento privado, se formarán dos ejemplares, uno para cada
contratante. No surtirá efecto la prenda contra tercero si no consta la certeza de la fecha por el
registro, escritura pública o de alguna otra manera fehaciente. El deudor puede usar de la prenda
que quede en su poder en los términos que convengan las partes. Cuando la cosa dada en prenda
sea un título de crédito que legalmente deba constar en el Registro Público, no surtirá efecto contra
tercero el derecho de prenda, sino desde que se inscriba en el registro. A voluntad de los
interesados podrá suplirse la entrega del título al acreedor, con el depósito de aquél en una
institución de crédito. Si llega el caso de que los títulos dados en prenda sean amortizados por
quien los haya emitido, podrá el deudor, salvo pacto en contrario, sustituirlos con otros de igual
valor. El acreedor a quien se haya dado en prenda un título de crédito, no tiene derecho, aun
cuando se venza el plazo del crédito empeñado, para cobrarle ni para recibir su importe, aun
cuando voluntariamente se le ofrezca por el que lo debe; pero podrá en ambos casos exigir que el
importe del crédito se deposite. Si el objeto dado en prenda fuese un crédito o acciones que no
sean al portador o negociables por endoso, para que la prenda quede legalmente constituida, debe
ser notificado el deudor del crédito dado en prenda. Siempre que la prenda fuere un crédito, el
acreedor que tuviere en su poder el título, estará obligado a hacer todo lo que sea necesario para
que no se altere o menoscabe el derecho que aquél representa. Se puede constituir prenda para
garantizar una deuda, aun sin consentimiento del deudor. Nadie puede dar en prenda las cosas
ajenas sin estar autorizado por su dueño. Si se prueba debidamente que el dueño prestó su cosa a
otro con el objeto de que éste la empeñara, valdrá la prenda como si la hubiere constituido el
mismo dueño.

3.10 LAS OPERACIONES DE CRÉDITO Y BANCARIAS

CONTRATOS

Un contrato, un acuerdo privado, oral o escrito, entre partes que se obligan sobre materia o cosa
determinada, y a cuyo cumplimiento pueden ser compelidas. Es un acuerdo de voluntades que
genera derechos y obligaciones para las partes. Por ello se señala que habrá contrato cuando
varias partes se ponen de acuerdo sobre una manifestación de voluntad destinada a reglar sus
derechos.

Doctrinariamente, ha sido definido como un acto jurídico bilateral o multilateral, porque


intervienen dos o más personas (a diferencia de los actos jurídicos unilaterales en que interviene
una sola persona), y que tiene por finalidad crear derechos y obligaciones (a diferencia de otros
actos jurídicos que están destinados a modificar o extinguir derechos y obligaciones, como las
convenciones). También se denomina contrato el documento que recoge las condiciones de dicho
acto jurídico
TEMARIO DE DERECHO MERCANTIL 1

3.3 LOS CONTRATOS MERCANTILES


En el sistema comercial y económico del México actual, los contratos mercantiles
se han convertido en una herramienta indispensable para darle certeza jurídica a
actos comerciales que están a la orden del día. La seguridad en términos de
validez legal se traduce en un importante incentivo a la actividad económica y
permite celebrar de manera certera actos que se susciten entre comerciantes o
entre éstos y los particulares, a modo que los contratos de esta naturaleza son
muchas veces la base y la fuente del derecho mercantil mexicano.
Aunque el cuerpo fundamental de la legislación mercantil es el Código de
Comercio, lo cierto es que derivan de él algunas otras leyes de carácter especial
como la Ley de Títulos y Operaciones de Crédito o Ley de Contrato de Seguro y
en ocasiones se tiene que recurrir a normas de otras materias ya sea de manera
supletoria o por el carácter especial del contrato.
importante diferencia entre el derecho civil y el derecho mercantil es que, si bien el
primero responde a una necesidad de formalizar, así como dar seguridad a un
acto particular, el segundo en general se utiliza para regularizar los actos en masa
que realizan las empresas sin que se limiten a un acto en concreto. El propio
Código de Comercio, en su artículo 75, delimita qué actos se reputarán como
comerciales.
3.1 LAS OBLIGACIONES: SU CLASIFICACIÓN Y CARACTERÍSTICAS.
Distinción entre Contrato Mercantil y Contrato Civil, con referencias a las
disposiciones mexicanas.
 Competencia y jurisdicción del Tribunal en caso de Litigio. Tribunales civiles
(en el Contrato civil). Tribunales o fuero comercial (en el Contrato
mercantil).
 Según los tipos de bienes en la compraventa. La compraventa puede ser de
cosas muebles o inmuebles (en el Contrato civil). La compraventa puede
recaer solo sobre cosas muebles. Art. 452 Inc. 1° (en el Contrato mercantil).
 En relación a las cosas ajenas. Las cosas ajenas no pueden venderse. Art.
1329 (en el Contrato civil). La compraventa de cosas ajenas es válida. Art.
453 (en el Contrato mercantil).
 En relación a la compraventa. Una parte se obliga a transferir la propiedad
de una cosa y la otra a pagar un precio cierto en dinero (en el Contrato
civil). Además de lo dicho para el contrato civil, en el contrato comercial
existe una finalidad de lucro, de obtener ganancias mediante esa actividad
(en el Contrato mercantil).
 Según el sujeto. Las partes contratantes no realizan actos de comercios
porque no son comerciantes (en el Contrato civil). Si una de las partes es
comerciante, el contrato es comercial porque realiza actos de comercio
(enfoque subjetivo); si el objeto del contrato es la realización de actos de
comercio el contrato es comercial (enfoque objetivo) (en el Contrato
mercantil).
 En cuanto a la ley aplicable: Se rige por el Derecho común y especialmente
por el Código Civil (en el Contrato civil). Se rige por la legislación mercantil
(el Código de Comercio) (en el Contrato mercantil).
 En relación a la transferencia de dominio. Puede ser gratuito y oneroso (en
el Contrato civil). Siempre es oneroso (en el Contrato mercantil).
 Bilateral.
 Oneroso.
 Aleatorio.
 Consensual.
 Principal.
 Instantáneo.
 Tracto sucesivo.

3.2 EL CONTRATO DE ASOCIACIÓN EN PARTICIPACIÓN.


De acuerdo al artículo 252 de la Ley General de Sociedades
Mercantiles el contrato de asociación en participación es un contrato por el cual
una persona (Asociante) concede a otras (Asociado (s) que le aportan bienes o
servicios, una participación en las utilidades y en las perdidas de una negociación
mercantil o de una o varias operaciones de comercio.
Para diferenciarlo de otros con los que guarde cierta similitud, es que, no tiene ni
razón social ni personalidad jurídica, por lo que el asociante interviene en nombre
propio, y no hay relación jurídica entre los asociados y terceros.

VENTAJAS PARA EL ASOCIANTE


Las empresas para ser más competitivas requieren de capital para poder
modernizar procesos. En ocasiones el asociante desea obtener capital de trabajo
pero no a costas de abrir su negocio a nuevos socios ni perder el control de su
empresa. El contrato de asociación en participación resulta el mecanismo ideal
para obtener aportes de terceros.
El asociado es solo un inversionista que arriesga su aportación y que solo tiene
derecho a que se le dé cuenta de los resultados.

¿CUÁLES SON SUS CARACTERÍSTICAS?


 Se requieren mínimo dos partes.
 Como hemos visto no tiene personalidad jurídica.
 No cuenta con razón o denominación social.
 No tiene un patrimonio social.
 El encargado de la administración del negocio y actuar como representante
social será el asociante.
 Entre el que aporta el capital y realiza la actividad existe un interés común.
 Según lo pactado en el contrato se distribuirán las perdidas y ganancias.
 Lo que pierdan los asociados no puede exceder a lo que hayan aportado.
 Nunca puede adquirir la forma de una sociedad mercantil.

PASOS PARA INICIAR UN NEGOCIO CON EL MODELO DE CONTRATO DE


ASOCIACIÓN EN PARTICIPACIÓN
1. Se deben pactar los porcentajes y condiciones de participación en el
negocio.
2. Se debe elaborar el contrato y firma del mismo
3. Se debe inscribir en el registro federal de contribuyentes.

3.3 LA COMPRAVENTA MERCANTIL.


A la compraventa comercial se refiere el artículo 371 del Código de Comercio,
para el que son mercantiles todas las que se hagan con el objeto directo y
preferente de traficar. Dicho precepto recoge el concepto que establece el artículo
75 fracciones I y II de dicho Código de Comercio, que atribuye carácter comercial
a todas las adquisiciones, enajenaciones y alquileres verificados con propósito de
especulación comercial respecto de bienes muebles, sea en estado natural, sea
después de trabajados o labrados; así como a las compras y ventas de bienes
inmuebles, cuando se hagan con dicho propósito de especulación comercial. El
propósito de especulación comercial debe ser el principal y existir en el momento
de celebrarse el contrato
Ahora lo que diferenciará a una compraventa mercantil de una civil, es que en la
primera se dan tres características que la distinguen, estas son:
 Que verse sobre cosa mueble.
 Que sea hecha con el ánimo de vender, permutar o arrendar en la misma
forma o en otra distinta, es decir que el comprado no sea un destinatario
final.
 Que exista un propósito lucrativo.

Entonces la compraventa que cumpla con estos requisitos se podrá considerar
como mercantil.
Por último, en cuanto a su ámbito de uso, debemos señalar que se da
normalmente entre un comerciante y su proveedor, de esta manera cuando el
comerciante adquiere mercaderías para su negocio, o que utilizará para prestar un
servicio posteriormente, estaremos en presencia de una compraventa mercantil.

3.4 EL PRÉSTAMO MERCANTIL.


Artículo 358.Se reputa mercantil el préstamo cuando se contrae en el concepto y
con expresión de que las cosas prestadas se destinan a actos de comercio y no
para necesidades ajenas de éste. Se presume mercantil el préstamo que se
contrae entre comerciantes.
Se considera mercantil el préstamo cuando se contrae en el concepto y con
expresión de que las cosas prestadas se destinan a actos de comercio y no para
necesidades ajenas de este. Se presume mercantil el préstamo que se contrae
entre comerciantes. (CCo 358-370)
De lo anterior se desprende que el préstamo mercantil supone la existencia de dos
elementos, a saber, un objetivo, que es cuando la cosa prestada se destina a la
realización de actos de comercio y uno subjetivo, que es cuando el préstamo se
contrata entre comerciantes.
Sánchez Calero Fernando, en su libro Instituciones de Derecho Mercantil, lo define
señalando que es un contrato por el cual una persona (prestatario), recibe de otra
(prestamista), una cosa fungible en propiedad y se obliga a devolverle otro tanto
de la misma especie y calidad.

3.5 EL MANDATO MERCANTIL.

El contrato de mandato es un contrato por el que el mandatario se obliga a


ejecutar por cuenta del mandante los actos jurídicos que éste le encarga.

¿QUÉ DIFERENCÍA AL CONTRATO DE MANDATO DEL PODER O LA


PRESTACÍON DE SERVICIOS?
El mandato es un contrato y el poder es una declaración de la voluntad. Sin
embargo, el poder puede acompañar un contrato de mandato.
El mandato se refiere a la realización de actos jurídicos, y la prestación de
servicios a la ejecución de trabajos que requieren para su desempeño, una
preparación técnica y en ocasiones, título profesional. La prestación de servicios
profesionales puede comprender también la realización de actos jurídicos.

CLASIFICACIÓN DEL MANDATO:


PRINCIPAL: Existe por si solo y su objeto es la realización de actos jurídicos.
BILATERAL: Ambos se obligan, el mandante a entregar las expensas, honorarios
y gastos realizados por el mandatario y éste a ejecutar los actos encomendados y
rendir cuentas a aquél.
ONEROSO: Por su naturaleza (realización de actos).Excepcionalmente se puede
convenir en que sea gratuito. Art. 2549
CON FORMA RESTRINGIDA: La ley establece en el mandato general que puede
ser revestido de diversas formalidades.
INTUITU PERSONAE: Se celebra en calidad de la persona.
· Cuando el negocio no exceda de mil veces el salario mínimo (DF) se podrá
otorgar en escrito privado ante dos testigos.
· Escritura pública firmada ante dos testigos y ratificadas las firmas ante notario,
juez y autoridad administrativa si:
a) Se trate de un mandato general
b) La cuantía sea mayor de mil veces el salario mínimo en el DF
c) En el mandato se vaya a celebrar un acto que deba constar en escritura pública

3.6 EL DEPÓSITO MERCANTIL.


El depósito tal como se encuentra regulado por la legislación mercantil, es en
realidad una figura que reúne características del depósito y del préstamo. La figura
se perfila ya en el derecho romano, en el cual junto al depósito en sentido estricto,
aparece el depósito irregular el cual da lugar a disparidad de opiniones, ya que
durante largo tiempo se le consideró como un mutuo. Por ello, resulta difícil dar
una definición unitaria, pues la figura se ha diversificado en cuatro especies con
características diversas: el depósito en sentido estricto, el depósito irregular –
dentro del cual cae el depósito bancario de dinero – el depósito de títulos o
documentos y el depósito en almacenes generales de depósito
Artículo 322. Se estima mercantil el depósito si las cosas depositadas son objeto
de comercio, o si se hace a consecuencia de una operación mercantil.
Clasificación. En atención a los derechos de las partes, el depósito se diferencia
en regular e irregular, siendo el primero aquel en que el depositante hace
entrega del bien, sin transferir el derecho de propiedad ni de uso, y el depositario
queda obligado a restituir el mismo bien. En tanto en el depósito irregular, el
depositante transfiere la propiedad del bien, y el depositario queda obligado a
restituir otro de la misma especie y calidad. En atención al depositario, debe
diferenciarse del depósito bancario, y al depósito en almacenes generales de
depósito de las demás figuras, ya que aquéllos están sujetos a regulación
especial.

3.7 EL CONTRATO DE TRANSPORTE.


el Código de Comercio no suministra concepto alguno del transporte; es en la Ley
de Navegación y Comercio Marítimo (artículo 157) en la que aparece el único
concepto mercantil mexicano de este contrato, y ello referido al fletamento: “Por el
contrato de fletamento, el naviero se obliga a realizar con el buque un transporte
marítimo en los términos que se pacten y el cargador se obliga a entregar
oportunamente las mercancías o efectos que deban transportarse y a pagar el
flete”; aquí en cambio, resulta impropio el incluir, como elemento de definición y
con jerarquía de obligación contractual, una conducta del cargador – la entrega de
la carga – que, en unión de otras, en rigor es un derecho-medio, que permitirá al
porteador cumplir con su parte en el contrato.
Es evidente, pues, que los únicos elementos que deben concurrir al concepto del
contrato de transporte son:
 la obligación, por parte del porteador, de transportar una persona o cosa, y
 la obligación de la contraparte de pagar el precio del transporte.
En cuanto a sus características, es un contrato:
 típico, pues encuentra regulaciones específicas en diversas leyes;
 nominado, ya que con tal nombre se le conoce e identifica plenamente así
en las leyes como en la práctica;
 consensual, en razón de que, como se verá, los documentos respectivos,
como boletos, billetes, cartas de porte y otros, sólo cumplen una función
probatoria;
 bilateral, pues configura obligaciones y derechos a ambas partes;
 oneroso, dado que la obligación del porteador tiene, como necesario
correlato, la del pago de un porte, pasaje o flete por parte del otro
contratante;
 conmutativo, en razón de que los derechos y obligaciones de las partes
quedan plenamente demarcados en el momento de su celebración, y
 de tracto sucesivo, visto el tiempo que tomará el traslado de la persona o de
la cosa.

A juzgar por las disposiciones legales respectivas, en la actualidad prácticamente


no existen contratos civiles de transporte; tamaña conclusión es el resultado de las
siguientes consideraciones:
 el artículo 576 Código de Comercio reputa mercantil el contrato de
transporte por vías terrestres o fluviales cuando tenga por objeto
mercaderías a cualesquiera efectos de comercio, y también cuando,
independientemente del objeto, el porteador sea comerciante o se dedique
habitualmente a verificar transportes para el público, y
 según quedó dicho, el porte, pasaje o flete es elemento esencial del
contrato que se examina, pues así lo proclaman los respectivos
ordenamientos legales y lo apunta autorizada doctrina: Garrigues llega a
afirmar que “…. un transporte gratuito no es un contrato de transporte en
sentido técnico-jurídico…” De esta suerte, es válido afirmar que sólo
conservarían carácter civil aquellos transportes contratados
ocasionalmente, pero con una prestación a favor del transportista, pues
como conclusión de lo arriba expuesto habría que afirmar que la difundida
práctica del transporte gratuito de pasajeros ocasionales no configura un
verdadero contrato de transporte, sino, acaso, un contrato de prestación
gratuita de servicios:

3.8 EL CONTRATO DE SEGURO.


Concepto. Es un contrato (póliza) por el cual una mpresa aseguradora se obliga
mediante una prima a resarcir o pagar un daño a otro llamado asegurado un daño
en dinero al verificar que se haya dado el acontecimiento en el contrato.
Elementos personales:
 el tomador
 el asegurador (empresa aseguradora)
 el asegurado (contratante)
 el beneficiario
3.9 LOS CONTRATOS DE GARANTÍA: LA PRENDA Y LA FIANZA MERCANTIL.
La fianza es un contrato por el cual una persona se compromete con el acreedor a
pagar por el deudor, si éste no lo hace, o sea, el contrato de fianza es un contrato
accesorio por el cual una persona se compromete con el acreedor a pagar por el
deudor, la prestación o una equivalente o inferior, en igual o distinta especie, si
éste no lo hace. Las características del contrato de fianza son las siguientes: a)
Accesorio, porque no existe por sí mismo, sino que depende de una relación
preexistente entre un deudor o un acreedor, salvo algunas excepciones. b)
Unilateral, generalmente. c) Bilateral, cuando existe una retribución a cargo del
acreedor. d) Gratuito. e) Oneroso por excepción, cuando el acreedor reporta como
obligación retribuir al fiador. Algunos autores dicen que el contrato de fianza se
convierte en contrato de seguro. f) Consensual en oposición a formal, excepto en
los casos de la fianza legal, judicial u otorgada en póliza. g) Aleatorio o
conmutativo, cuando la fianza tiene el carácter de oneroso, debido a que se
establezca una retribución. h) De garantía, pues, implica una obligación para el
fiador de pagar, en caso de que el deudor no lo haga.

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