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Pese a que las instituciones colombianas han evidenciado en de tal aparato no debe cargarse de manera oprobiosa al

dos siglos altos niveles de aquiescencia con grupos y bolsillo de los aportantes. De ahí que su cálculo deba
facciones que se hacen al control del aparato estatal a corresponder a propósitos constitucionales y a reclamos
conveniencia, una democracia que se proponga funcionar societales que faciliten la operación institucional mientras
alguna vez precisa definir el tamaño, el nivel y la intensidad promueven iniciativas gestadas por diferentes actores y
con la que se plantea actuar de manera eficaz y reglada para procesos estimulantes del desarrollo local y territorial.
la protección, salvaguarda y garantía de la vida, los derechos
y las libertades del público que aspira a que el Estado sea Dado que la brevedad decisora ni la celeridad ejecutora
algo más que una entelequia lejana a su cotidianidad. garantizan la concreción de los fines del estado y la erosión
del pillaje particularista, la sociedad política requiere
De hecho, afirmaciones rastreras según las cuales quien preservar el bien del mayor público mediante un sistema
espera la actuación del Estado es un “atenido” que “todo lo penal y disciplinario que actúe con contundencia y firmeza y
quiere gratis” en lugar de actuar “por su propia inventiva” cuya capacidad coercitiva y disuasoria extinga la apropiación
olvidan el fundamento por el que el Estado existe, según particularista del erario y el uso de los monopolios estatales
Hobbes, no sólo para preservar la propiedad y sus fueros para el servicio de actores ilegales, postores rentabilistas y
mediante la fuerza del más fuerte sino para satisfacerse con funcionarios abusivos.
la misma libertad que resulta provechosa a unos frente a
otros. El que el neoliberalismo y bajo el modelo de capitales La supervivencia del ideario feudal en plena república
opere cierta arrogancia plutocrática que sostiene el imperio democrática ha superpuesto a las formas de lo nacional el
de la desigualdad evidencia un límite insostenible que socava interés y las necesidades corporativas y clientelares de
la naturaleza misma del Estado. señores, cófrades y domeñadores de políticas en pequeñas
repúblicas gobernadas por casas electorales y movimientos
Las instituciones están dotadas de una fuerza cohesionante políticos que operan como microempresas mercenarias y
que, más allá de las ideas, pero con fundamento en ellas, cofradías corporativas o carteles dedicados al control y
encarnan al Estado y lo hacen actuar para encausar las direccionamiento de la contratación, el personal y la políticas
ejecutorias de quienes lo administran, sobre principios, fines de un ente territorial; recortando y extinguiendo los
y ordenamientos filosóficamente nobles y providentes, propósitos de la institucionalización y la burocratización, en
jurídicamente legales y válidos y políticamente deseables y desmedro de la vida asegurada y contrarios a la realización
legítimos. de derechos y libertades.

Si las exacciones de los gobernantes y de los particulares que Restituir los fueros de las instituciones reclama el desmonte
prestan funciones en nombre del Estado resultan ofensivas de legisladores venales y pendencieros y la restitución de
al público, disciplinables y sancionables por los organismos organizaciones partidarias sólidas, articuladas más allá del
de control y las autoridades judiciales, ocurre a cuenta de la gamonalismo tanto como de la autoconvocatoria, para que
vulneración de las orientaciones y procesos fijados en sea posible “un gobierno en que la ley sea obedecida, el
normas cuya naturaleza social no puede quedar al arbitrio magistrado respetado y el pueblo libre: un gobierno que
particular ni corporativo. impida la transgresión de la voluntad general y los
mandamientos del pueblo”
Así suene lejano a lo que ocurre en la cotidianidad, el
fundamento del Estado es lo que lo justifica; a menos que se ¡Dadnos leyes inexorables”, imploraba Bolívar en plena
acepte que su imposición obedece al prurito autoritario de Convención de Ocaña de 1828 y lo sigue haciendo hoy en la
quien, asido de sus herramientas, gobierna para sí mismo o señora que grita desesperada en una venta de pescado, a la
los suyos. Si bien es cierto que la complejidad institucional que acusan de atenida justamente quien, doscientos años
requiere un conjunto de decisores y operadores distribuidos adelante, debería garantizar que el peso de las instituciones
en funciones legislativas, administrativas y logísticas, el peso estatales le favorezca, también a ella!

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