Está en la página 1de 3

CHACHACHÁ –BAILE DE SALÓN - CUBANO

Colección: Marta Bercy-Danza Cubana

Ritmo, danza y canción de origen cubano, derivado del


danzón y bajo la influencia del Son. Tal como recopiló el
musicólogo Helio Orovio en su Diccionario de la música
cubana, el creador del Chachachá, Enrique Jorrín, contaba
que a finales de la década de 1940 construyó algunos
danzones en los que los músicos de la orquesta hacían
pequeños coros. El público quedó satisfecho y eso le
estimuló a intercalar algunos montunos conocidos en otros
danzones. Todos los ejecutantes entonces cantaban al
unísono y con ello descubrió que no solo disimulaba la
calidad de las voces, sino que la letra se oía con más claridad
y mucho más potente.

En 1948, tras gustar mucho a su auditorio las variaciones que


le realizó a un danzón mexicano, decidió independizar del género las últimas partes. De esta
manera nacía el Chachachá, con melodías casi bailables por sí solas y con el balance que
surge entre melodías a tiempo y contratiempo.
Bailadores de Chachachá.
El nombre que todos conocemos nació con ayuda de los bailadores. Cuando se inventó el
baile que acoplaba con el ritmo, se descubrió que los pies marcaban un sonido peculiar al
rozar el suelo, precisamente en tres tiempos seguidos: cha - cha - chá; y de ahí de ese sonido,
nació, por onomatopeya, el nombre del ritmo chachachá.
El neo danzón es sólo el nombre original del chachachá.
Este nuevo ritmo se extendió rápidamente por el continente americano, sobre todo en México,
hasta donde llegó Jorrín para crear su propia orquesta. Su rápida difusión se debió a que era
un baile festivo e intermedio, ni muy rápido ni muy lento, por lo que cualquier persona, con
pocas nociones de danza, era capaz de bailarlo y disfrutar con él.

Pero fue en México donde se dio a conocer mejor y cobró gran popularidad, para luego
extenderse al resto de América Latina, e incluso, a Estados Unidos.

El Chachachá es un baile festivo cuyas canciones contienen letras de tipo picaresco.


Probablemente la más popular —justamente el primer cha-cha-chá— sea la dedicada a
aquella muchacha que en la céntrica esquina habanera de Prado y Neptuno, todos los
hombres la tenían que mirar (La Engañadora, 1951). La bella dama, por demás un personaje
real, debía su voluptuosidad a almohadas contenidas bajo sus ropas. "Qué bobas son las
mujeres que nos tratan de engañar", dice el coro ante el silencio instrumental.

El nombre de cha-cha-chá sugiere los tres pasos seguidos que se ejecutan para acentuar el
ritmo de la melodía. Normalmente lo interpreta una charanga que contiene flauta, violines y
percusión, o bien, una orquesta típica.

Los grupos más importantes que han interpretado este ritmo son la Orquesta Aragón, la
Orquesta América y la Orquesta de Enrique Jorrín, principal compositor de este género.
También se destacaron como autores Pedro Junco, Enriquillo Cerón, Isabelita Serpa, Ruddy
Calzado, Jorge Zamora, Félix Reyna, Chucho Martínez Gil, Richard Egües y Frank Pérez,
entre muchos otros.

En cierta oportunidad el compositor Leo Brouwer expresó que la música pop no era más que
"chachachá con batería", dejando en claro su opinión sobre el aporte de este género cubano a
otros ritmos universales.

También podría gustarte