Las autoridades de Cabo Verde deportan del país en dos

ocasiones a un abogado de Álex Saab, miembro del

despacho ILOCAD

• La vigilancia aeroportuaria impide el paso de uno de los abogados e

integrantes del equipo legal internacional de Alex Saab, del despacho
ILOCAD, que se disponía a llegar hasta Sal para ejercer su trabajo de
defensa con el Enviado Especial.

• Desde ILOCAD, se denuncia públicamente esta situación y se va a

apelar a las instancias correspondientes, así como al Relator Especial
de las Naciones Unidas para la Independencia de Jueces y Abogados,
para que investiguen los hechos y se esclarezcan los motivos por los
cuales se está impidiendo a una persona a disfrutar plenamente de
su Derecho a la Defensa
Madrid, 15 de agosto de 2020

Uno de los abogados del despacho ILOCAD, dirigido por Baltasar Garzón, ha sido deportado
hasta en dos ocasiones, en las últimas 72 horas, al tratar de acceder a Cabo Verde desde el
Aeropuerto Internacional Nelson Mandela en la capital del país, Praia, donde se disponía a
ejercer su trabajo de asesoramiento como parte del equipo jurídico internacional del Enviado
Especial Alex Saab, cuya extradición ha sido solicitada a EEUU “de forma arbitraria y sin
fundamento legal”, tal y como ha puesto de manifiesto la defensa internacional en distintas
instancias.

En la primera ocasión, el pasado jueves 13 de agosto, tras aterrizar en Praia desde Lisboa, las
autoridades aludieron a la necesidad de contar con un escrito oficial por parte de una empresa
caboverdiana. Esta obligación venía debidamente cumplimentada en formato digital tal y como
exigía la aerolínea con la que realizó el vuelo. La razón alegada para proceder a la denegación
fue la de “no haber podido fundamentar el motivo del viaje”. El abogado víctima de la
deportación, tras regresar a Lisboa y cumplimentar este trámite necesario (llevando consigo
dicho escrito en formato impreso), trató de volver a pasar los controles correspondientes de
nuevo un día más tarde. Sin embargo, en la noche del viernes el mismo responsable de la
vigilancia en el control accedió personalmente a revisar la situación del abogado e impedir su
acceso.

"Había otra trabajadora encargada de la seguridad en ese momento, pero al verme de nuevo en
el control, vino expresamente esta persona que ya me impidió el paso el día anterior para valorar
mi documentación", relata el abogado. En ese momento, pese a disponer de todos los trámites
en regla tal y cómo se había solicitado previamente, el vigilante reclamó el justificante de haber
abonado las tasas correspondientes para el vuelo.

“A pesar de demostrar las razones legítimas y la necesidad objetiva de ingresar en Cabo Verde,
y de cumplir plenamente en términos de la prueba Covid-19, las cartas de invitación, el propósito
del viaje y estar dispuesto a pagar las tasas aeroportuarias en el propio aeropuerto como se
permitido normalmente y como lo reconoce la propia aerolínea, se ha impedido mi acceso por
un motivo aleatorio”, concluye la víctima de la deportación.
"Es una tasa que se puede abonar allí mismo, en el aeropuerto; sin embargo, este agente no me
lo permitió e insistió en que sin el justificante de haberlo pagado de antemano de forma
telemática no me permitiría el paso. Se trata de una acción arbitraria y sorpresiva por varias
razones: 1) la información accesible públicamente indica la posibilidad de pagar en el propio
aeropuerto, 2) esta información viene corroborada por la aerolínea, 3) a pesar de admitir que la
carta que explicaba el motivo profesional de mi viaje era del todo correcta, volvió a motivar en
el atestado de deportación la misma razón que la noche anterior: “no haber podido
fundamentar el motivo del viaje” o no un presunto incumplimiento del pago previo de las tasas
exigibles. A todo este se suma el hecho de que otros pasajeros sí podían hacer el pago de las
tasas a su llegada como admitió el propio agente. De hecho, ya conocemos que este caso sucedió
también días atrás con la deportación de otro abogado del mismo equipo de defensa".

Baltasar Garzón, director de ILOCAD, considera este atropello “intolerable por parte de las
autoridades de Cabo Verde, dirigido a perjudicar gravemente el ejercicio de la defensa del
señor Saab” y resalta “la persecución política de la que está siendo objeto a través de un
proceso de extradición injusto e instrumental por parte de USA en su confrontación con el
gobierno venezolano del que Saab es Enviado Especial”. Además, denuncia públicamente esta
situación y asegura que apelarán a las instancias jurídicas correspondientes, así como al relator
de las Naciones Unidas para la independencia judicial y de los Abogados para que investiguen
los hechos y se esclarezcan los motivos por los cuales se está cercenando por el gobierno de
Cabo Verde el derecho de defensa a Alex Saab. “Ésta es una evidencia más de las limitaciones
que se están imponiendo. Es una obviedad que se están poniendo trabas para que nuestro
cliente, Alex Saab, pueda acceder a su Derecho de defensa. Se trata de una formalidad que se
podía haber subsanado en el momento, pero no han permitido hacerlo, por lo que todo
apunta a que hay órdenes concretas de que todo lo que se refiera a abogados o personas que
acudan para ejercer en este asunto tengan dificultades máximas por realizar su trabajo”.