COMPARACION ENTRE EL EMBARGO EJECUTIVO DE DERECHO COMÚN Y LOS

EMBARGOS EJECUTIVOS ESPECIALES

Como ya hemos visto, los embargos ejecutivos tienen como características principales que
son realizados en virtud de un título ejecutorio y practicado sobre bienes muebles. A parte
de este peculiar embargo, existen otros tipos de embargos, llamados embargos especiales
que, por el tipo de bien sobre el que recaen, pueden causar confusión. Se trata del Embargo
de Frutos no cosechados, El embargo de nave, barco o buque y el embargo de los
Semovientes. En este breve análisis realizaremos un estudio comparativo de estos tomando
como punto de partida el Embargo Ejecutivo común.

El Embargo Ejecutivo se define como un procedimiento que busca que el acreedor que
posee necesariamente un título ejecutorio pueda inmovilizar los bienes muebles corporales
de su deudor, ponerlos en manos de la justicia, para de manera posterior hacerlos vender
en pública subasta y cobrar su crédito del producto de los mismos; sin embargo el Embargo
de Frutos no cosechados, posee la misma definición que el anterior, solo que hace una
especificación en el tipo de bienes objeto de su aplicación: las cosechas que aun estén
pendientes de sus ramas o racimos y que pertenezcan al deudor. Entonces de lo ante
mencionado se deduce que en el embargo Ejecutivo común se persiguen bienes muebles
corporales, mientras que en este tipo de embargo, se trata de una clasificación especial de
bienes que, normalmente son considerados inmuebles por su destino (por estar adheridos
al terreno), pero la ley les ha creado una ficción que les da la denominación de muebles
anticipados y permite su embargo por medio del procedimiento ejecutivo. Cabe resalta que
cuando hablamos de frutos no solamente nos referimos a frutas o vegetales, también puede
tratarse de tallos, raíces, al igual que frutos industriales que sean producidos por predios
mediante el trabajo o cultivo.

El proceso de Embargo Ejecutivo no se establece un tiempo expreso en el cual se ha de

realizar el procedimiento de embargo, más en el embargo de Frutos no cosechados,
observando lo dispuesto por el artículo 626 del Código de Procedimiento Civil, el mismo
solamente ha de ser realizado en las seis semanas que precedan la época ordinaria de
madurez de los frutos.

En cuanto al procedimiento, ambos procedimientos inician con la notificación del

mandamiento de pago al deudor con al menos un día franco de plazo, conteniendo ambos
las mismas enunciaciones a pena de nulidad, ya que el articulo 626 CPC exige este requisito.
Las diferencias se empiezan hacer notables en el proceso verbal de embargo, donde se
levanta el “acta de embargo”. En el proceso de embargo ejecutivo se exige al alguacil estar
acompañado de dos testigos mayores de edad, y el acta que el mismo levanta, además de
las menciones de los actos de alguacil debe contener las generales de los testigos, un
inventario detallado de los objetos que son embargados así como una descripción de los
mismos; sin embargo, en el embargo de Frutos no cosechados se omite la mención relativa
a los testigos y, se agregan como requisitos al acta de embargo “la indicación de cada pieza,
su contenido, su situación, así como de dos por lo menos de sus linderos y confines,
expresándose también la naturaleza de los frutos”.
Otra diferencia de importancia substancial entre ambos es lo referente al guardián o
depositario de los objetos embargados. De acuerdo a los artículos 596 al 598 CPC, el
guardián del Embargo Ejecutivo debe ser presentado por el embargado, debe ser solvente y
está en manos del alguacil la aceptación del mismo. Se da cabida a la posibilidad de que el
mismo embargado, sus familiares o afines sean guardianes, mas esta posibilidad se
encuentra cerrada para el alguacil, el embargante y los familiares y afines de ambos. En
cambio, en el Embargo de Frutos no cosechados, en virtud del artículo 628 CPC, el guardián
lo constituirá el alcalde pedáneo del lugar siempre y cuando no recaiga sobre él las
prohibiciones relativas al alguacil y al acreedor planteado anteriormente. Este no será
guardián solamente en el caso de que los bienes a embargar se encuentren en municipios
diferentes pero contiguos, caso en el cual se pasara a elegir una sola persona pero diferente
de éste.

Con respecto de la venta de los objetos embargados, en el embargo ejecutivo, se debe

notificar al embargado la fecha de la misma al menos ocho días antes de ésta y, se deben de
fijar los edictos al menos un día antes de la venta, conteniendo las menciones del lugar, día
y hora de la subasta. Los mismos deben de ser publicados en cuatro lugares: donde están los
objetos, en la puerta del Ayuntamiento, en el mercado del lugar y en la puerta del Juzgado
de Paz. Sin embargo, en el embargo de Frutos no Cosechados, los edictos han de ser fijados
al menos 8 días antes de la venta, debiendo contener como menciones además de los
propios al embargo ejecutivo, el nombre y residencia tanto de la parte embargada como de
la ejecutante, la cantidad de las tareas de tierra y la naturaleza de cada especie de fruto así
como el lugar donde éstos se encuentren; respecto de los lugares de su fijación, se sustituye
la mención del lugar donde residan los objetos por la puerta de la casa del embargado,
quedando las demás inalterables, todo esto al tenor de los artículos 629 y 630 CPC. De
manera análoga, la fijación de edictos se hace constar mediante acto de alguacil con anexo
de los edictos en ambos procedimientos.

Para el procedimiento de venta, ambos poseen la misma modalidad, el lugar de la venta ha

de ser el mercado más próximo en sus horas normales de funcionamiento, pero el articulo
631 CPC hace amplia esta designación en cuanto al embargo de Frutos no Cosechados,
pudiendo la venta ser realizada un domingo y llevarse a cabo en “los lugares o en la plaza de
la común en que esté situada la mayor parte de los objetos embargados”, al tenor del
articulo 633 CPC. Respecto del funcionario competente, se trata del Vendutero Publico, pero
la ley 962 autorizo a los alguaciles que practiquen el embargo a realizar la venta. La venta se
realiza a modo de subasta, de forma que los intervinientes van proponiendo o “pujando” a
partir de una cifra base que abre la convocatoria. Toda persona con capacidad puede pujar,
pero el que realiza la venta no puede salir adjudicado, al igual que los oficiales públicos de
Bienes Nacionales, Jueces, Secretarios, Fiscales, Abogados, Alguaciles, Notarios, etc. La
venta ha de realizarse al contado o por cheque certificado, y con un sobreprecio del 10%
que debe pagarse a Rentas Internas y a Caja Publica en sumas iguales. De las sumas
recaudadas de la venta el acreedor cobrara lo necesario para cubrir su crédito, el restante
debe volver al Embargado, pero, en el supuesto de que el producto de la venta no sea
suficiente, el articulo 635 CPC nos remite, en el embargo de Frutos no cosechados a
observar las disposiciones de la distribución a prorrata. Por último, se ha de levantar un acta
de adjudicación, conteniendo la especificación de los objetos vendidos, el precio de venta,
nombre y domicilio del adjudicatario.
El embargo de Naves, embarcaciones o buques es un procedimiento con las mismas
características que el Embargo Ejecutivo, con la única distinción de que, el mismo recae
sobre un tipo especial de bienes, tratándose de naves, barcos o buques, que se definen
como construcciones de tipo flotante, impulsadas por medios propios sobre el agua, sea de
cualquier clase o dimensión. De manera análoga al embargo anteriormente tratado, éste
entraña una dualidad de caracteres en cuanto a la clasificación de los bienes, ya que, las
naves se entienden como inmuebles por destino, incluso plausibles de ser hipotecadas, sin
embargo, el artículo 190 del Código de Comercio les da la consideración de bienes muebles.

Tanto en el Embargo Ejecutivo como en el Embargo de Naves, el proceso es abierto con un

mandamiento de pago notificado al deudor, solo que en el proceso común debe de mediar
un día franco como mínimo entre la notificación y el embargo, y la misma notificación ha de
ser hecha en la persona o domicilio del deudor, mientras que el Código de Comercio hace
este plazo más exacto, disponiendo mínimo 24 horas entre el mandamiento de pago y el
embargo y agregando la posibilidad de notificar al capitán de la nave el mandamiento de
pago, en caso de que se trate de un crédito privilegiado sobre la nave, según dispone el
artículo 199 del Código de Comercio.

En cuanto al acta de embargo se refiere, la estructura de la misma, en el caso de el Embargo

de Naves, contiene las mismas menciones que un acta de Embargo Ejecutivo que ya
conocemos (las comunes a los actos de alguacil) omitiendo la mención de los testigos y,
agregando las especificaciones relativas a la nave que se embarga, a saber “y en el lugar
donde se halle amarrada la nave embargada; los nombres del dueño y del capitán; el
nombre, la especie y la cabida de la nave; y la enunciación y descripción de las chalupas,
botes, aparejos, utensilios, armas, municiones y provisiones; pondrá un guardián” esto en
virtud del artículo 200 del Código de Comercio.

Para la notificación del acta de embargo ejecutivo, el articulo 601 CPC prevé que, si el
embargo fue realizado en el domicilio de la parte embargada, se le dejara copia del acto en
ese instante, mientras que, si fuere realizado fuera del domicilio de éste, se le notificara el
mismo día y se ha de agregar al plazo un día por cada tres leguas de distancia. Cabe destacar
que en el acta de embargo se enuncia el día de la venta de los bienes, lo que constituye un
procedimiento extrajudicial. En cambio, el acta de Embargo de Naves deberá ser notificada
en los 3 días siguientes en caso de que el dueño de la nave viva en el mismo distrito judicial
del lugar donde se realizó el embargo. En caso contrario, la notificación podrá hacerse al
capitán de la nave o a quien represente al dueño o capitán. Esta misma notificación
contendrá citación ante el tribunal para que se ordene la venta de la nave, barco o buque
embargado, lo que convierte este procedimiento en judicial.

Es importante señalar que mientras en el Embargo Ejecutivo se solicita la designación de un

guardián, en el Embargo de Naves esta mención es completamente omitida. En cuanto a la
venta de los objetos embargados, ambos procesos distan mucho uno del otro. En el
Embargo ejecutivo, como ya sabemos se debe notificar al embargado la fecha de la misma al
menos ocho días antes de ésta y, se deben de fijar los edictos al menos un día antes de la
venta, conteniendo las menciones del lugar, día y hora de la subasta. Los mismos deben de
ser publicados en cuatro lugares: donde están los objetos, en la puerta del Ayuntamiento,
en el mercado del lugar y en la puerta del Juzgado de Paz. Sin embargo, en el Embargo de
Naves, cuando éstas tengan cabidas mayores a diez toneladas, se han de realizar tres
“pregones” y publicaciones de las cosas que se pretendan vender, lo que equivaldría a los
edictos, solamente que los mismos deben de ser colocados de 8 en 8 días y los lugares para
su colocación serán la bolsa (si ésta existiese) y la principal plaza pública del lugar donde se
encuentra amarrada la embarcación. Por igual, el aviso de la venta se debe de colocar en un
periódico del distrito judicial del tribunal donde se está persiguiendo el embargo o el más
próximo. De igual forma, en los 2 días que siguen a cada uno de los pregones y
publicaciones se deben de colocar carteles en el palo mayor de la embarcación perseguida,
en la puerta principal del tribunal donde se conoce el embargo, en la plaza pública y en el
muelle de puerto donde se encuentra la embarcación, al igual que en la bolsa de comercio,
en caso de que haya. Las menciones que han de contener los pregones, las publicaciones y
los carteles antes mencionados, de forma común han de ser las generales del ejecutante, el
título en cuya virtud procede el embargo, el monto del crédito, elección de domicilio en el
lugar del tribunal y donde la nave está amarrada, generales del dueño de la nave, el nombre
de la misma y si la misma está equipada o equipándose, el nombre del capitán, la cabida de
la nave, el sitio donde está amarrada o anclada, el nombre del abogado del persiguiente, el
primer precio de la subasta y los días de las audiencias para recibir las pujas, todo ésto en
virtud de los artículos del 202 204 del Código de Comercio.

En cuanto al procedimiento de venta, en el Embargo Ejecutivo El lugar de la venta ha de ser

el mercado más próximo en sus horas normales de funcionamiento. Respecto del
funcionario competente, se trata del Vendutero Publico, pero la ley 962 autorizo a los
alguaciles que practiquen el embargo a realizar la venta. La venta se realiza a modo de
subasta, de forma que los intervinientes van proponiendo o “pujando” a partir de una cifra
base que abre la convocatoria. La venta ha de realizarse al contado o por cheque certificado,
y con un sobreprecio del 10% que debe pagarse a Rentas Internas y a Caja Publica en sumas
iguales. Por último, se ha de levantar un acta de adjudicación, conteniendo la especificación
de los objetos vendidos, el precio de venta, nombre y domicilio del adjudicatario. Sin
embargo, el procedimiento de venta en el Embargo de Naves, luego del primer pregón, las
pujas han de ser admitidas por el juez solamente en el día indicado en los carteles a éste fin,
además, el juez comisionado para la venta de la nave ha de seguir recibiendo las pujas
después de cada uno de los pregones de 8 en 8 días en un día que este ha de designar
mediante auto. Al cumplirse el tercer pregón, la nave será adjudicada al mejor postor sin
mayor formalidad que cuando se extinga la tercera bugía. A pesar de ésto se le otorga al
juez la capacidad de conceder hasta dos prórrogas de 8 días cada una que deberán de
publicarse y fijarse por carteles. Quien se adjudique la nave debe pagar el precio de la venta
en un término de 24 horas o consignarla sin costas en la secretaría del tribunal de Comercio,
todo ésto en virtud de los artículos 205, 206 y 209 del Código de Comercio.

El Embargo de Semovientes, es un embargo que es de naturaleza igual al ejecutorio, ya que

se necesita de un mandamiento de pago previo para su realización, pero al igual que los
anteriormente analizados, entraña una diferencia considerable en cuanto al tipo de bienes
embargados. En este caso, los llamados semovientes son partes del patrimonio de un sujeto
que poseen la capacidad de movilizarse por sí solos, este grupo está integrado por animales
en producción económica, principalmente cabezas de ganado, así como burros, caballos,
etc. Aunque existen contradicciones doctrinarias respecto a la categoría a la que
pertenecen, se entienden los mismos como bienes muebles.

Sobre el procedimiento para llevar a cabo este tipo de embargo la ley de manera expresa no
define uno en especial, entendiéndose que el mismo ha de ser llevado a cabo de
conformidad con el procedimiento usado para un embargo ejecutivo común, observando la
salvedad que expresa el articulo 594 CPC, donde indica que el ejecutante del embargo podrá
demandar ante el juez de paz del lugar donde se ejecute el embargo la colocación de un
gerente de la explotación, procedimiento éste que se asemejaría a la colocación de un
guardián o depositario de los bienes. De igual manera, podría darse la posibilidad de que los
bienes objeto del embargo sean precintados o que se realice alguna otra medida que se
considere pertinente para su conservación.