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Lizeth Dayanna Cardozo Barragán Código: 100200382019

Segundo semestre A-2020


Conducta Humana III
ldcardozob@ut.edu.co

RESEÑA DE LA LECTURA “EL DESARROLLO PSICOSOCIAL EN LOS


PRIMEROS AÑOS”

Referencia: ​Papalia, Feldman, Martorell. (2012). El Desarrollo Psicosocial en los


primeros años en ​Desarrollo Humano​. (pp. ​176-208). México D.F: Mc Graw Hill
Education.

IDEAS CENTRALES:
● Las emociones son reacciones propias de cada persona que surgen como
respuesta a ciertas experiencias, esto se puede reflejar tanto a nivel
conductual como fisiológico. Las emociones son evidenciadas desde edades
tempranas, los recién nacidos ya expresan su descontento o su felicidad; uno
de los primeros signos de las emociones en los bebés es el llanto, que puede
significar hambre, ira, dolor o frustración, esto le permite saciar sus
necesidades, posteriormente, tendrá una función comunicativa. Otra manera
en la que expresan las emociones los bebés es a través de la sonrisa, el
recién nacido sonreirá pero no tendrá relación con las emociones, sino más
bien con un reflejo, no es sino hasta los 2 meses de edad cuando el niño
desarrolla la sonrisa social y es hasta los 4 meses que desarrolla la risa.

● Los recién nacidos comienzan a desarrollar estados emocionales para


asegurar la comunicación de sus necesidades, alrededor de los 6 meses de
edad logran desarrollar verdaderas emociones, el surgimiento de dichas
emociones se verá reflejado en un mayor desarrollo y maduración
neurológica. Entre los 15 y 24 meses, cuando el niño es consciente de sí
mismo, desarrolla las llamadas emociones autoconscientes (empatía, envidia,
etc). Posteriormente, cuando el niño comienza a comprender las normas y
reglas de conducta de la sociedad en la que se desenvuelve, desarrolla las
emociones autoevaluativas (orgullo, culpa, vergüenza).

● El desarrollo neurológico y el desarrollo emocional ocurren casi de manera


simultánea: en los primeros 3 meses se va desarrollando la corteza cerebral y
al mismo tiempo, van apareciendo las emociones básicas; a los diez meses,
los lóbulos frontales establecen conexiones con el sistema límbico y a su vez,
se asientan las emociones, el hipocampo se asemeja cada vez más a la
forma adulta, se establecen conexiones con el hipotálamo, lo que le permite
al niño sentir más de una emoción simultáneamente; a los dos años de edad,
la mielinización de los lóbulos frontales se relaciona con el desarrollo de la
consciencia y las emociones autoconscientes; por último, a los tres años de
edad, el sistema nervioso autónomo cursa con alteraciones hormonales, esto
se relaciona con la aparición de las emociones evaluativas.

● Se ha evidenciado la aparición de una conducta altruista desde edades


tempranas, los niños ayudan a quién lo requiera, comienzan a desarrollar la
empatía y la cognición social, por ejemplo, los infantes de edades de 2 a 3
años ya pueden reaccionar a las emociones de los demás.

● El temperamento es la manera en la que una persona reacciona ante ciertas


situaciones; se considera innato y heredable, sin embargo puede estar
susceptible a cambios ligados a la autorregulación y las emociones, a través
de la bondad de ajuste. El temperamento tiene un componente emocional,
pero a diferencia de las emociones, este es constante, estable y duradero. De
acuerdo al estudio longitudinal de Nueva York, existen tres patrones de
temperamento, el fácil, el difícil y el lento para animarse. El primer tipo se
caracteriza por mantener horarios regulares de sueño y alimentación,
intensidad en los estados de ánimo que son por lo general positivos y la
adaptabilidad. El segundo tipo exhibe estados de ánimo intensos que son
negativos, poca adaptabilidad, irregularidad en los horarios. Y por último, el
tercer tipo es el estadio medio, es moderado en la mayoría de campos,
presenta inicialmente una respuesta negativa al ambiente pero logra
adaptarse.

● El papel de la madre en el desarrollo del niño determina las conductas futuras


que pueda presentar, por ejemplo, el interés por explorar, el crecimiento, el
desarrollo social y la capacidad del sujeto para criar sus propios hijos
posteriormente. El papel del padre es un constructo social, la figura paterna
puede variar dependiendo de la familia y de la cultura, en algunas culturas el
padre se encarga únicamente del sustento económico, pocas veces está
relacionado directamente con la crianza de los hijos, sin embargo, en otras
culturas se puede evidenciar un mayor grado de acercamiento del padre
hacia los hijos, se interesa más por ser parte de su desarrollo.

● En las primeras etapas del desarrollo, los bebés no presentan diferencias


relacionadas con el género. Físicamente, los varones serán más grandes que
las niñas, ambos géneros presentan la misma sensibilidad al tacto, crecen,
aprenden a caminar, a hablar y se les caen los dientes a la misma edad. Por
una parte, a los dos años, los niños comienzan a diferenciarse
conductualmente de las niñas, cada uno empieza a preferir cierto tipo de
juguetes, los niños suelen ser más agresivos en el juego que su contraparte
femenina. Estas preferencias relacionadas con el género se ven fuertemente
influenciadas por los padres o por la cultura, quienes usualmente promueven
la tipificación del género, asignándoles los roles que se espera que cumplan
dentro de la sociedad.

● Erikson propone una serie de etapas del desarrollo psicosocial de las


personas, la primera es la confrontación de la confianza básica vs
desconfianza básica, esta etapa comienza en la infancia y se prolonga hasta
la edad de 18 meses; el niño aprende que debe confiar en quienes le
proporcionan cuidados y le permite entablar vínculos y por otro lado, llega a
desconfiar de quienes le hagan daño y le permite protegerse del ambiente. Si
durante este periodo, el niño es estimulado con cuidados y prevalece la
confianza, este desarrollará la virtud de la esperanza, la cual le sugiere que
sus cuidadores o las personas cercanas siempre le proporcionarán cuidados
y podrán satisfacer sus necesidades; si por el contrario, prevalece la
desconfianza, el niño será incapaz o se le dificultará establecer relaciones
con los demás.

● En la primera etapa del desarrollo psicosocial según la teoría de Erikson, el


niño puede desarrollar el apego dependiendo de la confianza que tengan en
sus padres. El temperamento del niño será crucial para determinar la
conducta que tendrán sus padres y en qué manera influye esta sobre el
desarrollo del apego. Además, el apego y el temperamento determinan si un
niño presenta o no ansiedad ante los desconocidos y ansiedad ante la
separación de sus cuidadores; a largo plazo, un apego seguro propiciará un
niño capaz de relacionarse con su entorno con éxito y por el contrario, el
apego inseguro indicará inhibiciones y emociones negativas e incluso
hostilidad.

● Durante la infancia, se puede evidenciar un proceso conocido como


regulación mutua, en la que el infante y su cuidador se comunican y
reaccionan apropiadamente a esta relación. Cuando el cuidador, en este
caso la madre, reacciona de manera adecuada al intento de comunicación de
su hijo, se estima un mejor desarrollo de la conducta del niño, tiene un
coeficiente intelectual más alto y le proporciona herramientas para
comprender la conducta de los demás.

● Cuando los niños están explorando el entorno, recurren a la opinión que


tienen las demás personas sobre el objeto en cuestión, esto hace parte de un
proceso de referenciación social. Así, el niño reacciona a un estímulo de
determinada manera dependiendo de la opinión que tengan sus padres frente
a dicha experiencia; a medida que el niño crece, confiará más en las
opiniones que tienen los padres en vez de las opiniones de desconocidos.

● El autoconcepto es la opinión que tenemos de nosotros mismos, este


comienza a la edad de 3 años cuando los niños se aprecian en un espejo,
luego a los 4 o 9 años, el infante se interesa más por los demás que por sí
mismo y es básico para el desarrollo de la conciencia perceptual que tendrá
inicio a los 15 meses. La aparición de la autoconciencia surge más o menos a
la edad de 24 meses cuando el niño puede reconocerse a sí mismo en el
espejo y a partir de ahí, comienzan a usar pronombres en primera persona. A
los 30 meses, ya pueden describirse y evaluarse.

● Erikson describe la segunda etapa del desarrollo psicosocial entre los 18


meses y los 3 años, en esta se confronta la autonomía vs la vergüenza y la
duda. El deseo de independización del niño, el deseo de tener control de sus
esfínteres y de su lenguaje, serán las bases para alcanzar la autonomía, sin
embargo, su actuar no puede ser del todo libre, debe verse restringido de
cierta manera por la vergüenza y la duda, a fin de que el niño conozca los
límites establecidos a la hora de actuar.

● Para que el niño se adapte de manera adecuada a la sociedad, debe pasar


por un proceso de socialización, a través de este, obtendrá hábitos, valores y
habilidades que le permitan hacer parte de la comunidad. Para que sea
posible la socialización, el niño debe seguir una serie de normas sociales que
restringen su conducta a través del proceso de internalización. Una vez que
el niño limita su conducta en base a lo que esperan que haga y lo que no, es
capaz de desarrollar la autorregulación, un mecanismo básico para que la
socialización pueda llevarse a cabo.

● Kochanska et al., describen distintos tipos de mecanismos que permiten


internalizar las normas en la infancia, así: la obediencia comprometida, por la
cual el niño cumplirá incondicionalmente las órdenes que le son establecidas
ya sea con o sin la presencia de los padres. La obediencia situacional, por la
cual el niño cumplirá las órdenes sólamente si los padres están presentes
para controlar que sean llevadas a cabo. Por último, la cooperación receptiva,
que va más allá de la obediencia comprometida, en esta nace el interés del
niño por cooperar con las normas de los padres.

● Además de la relación con los padres, el contacto con otros niños es un


factor determinante del desarrollo en la infancia. El primer contacto de un
infante con niños de su edad será por medio de sus hermanos, estos pueden
llevar una relación de apego y de conflicto, lo que les permitirá entender las
relaciones sociales, además de comprender al otro y desarrollar empatía.
Posterior a los hermanos, los niños se encontrarán en contacto con otros
niños, por lo general en la etapa de escolaridad, aquí intentarán imitar las
conductas de sus pares, se relacionarán mediante el juego y aprenderán a
comprender a los demás y a socializar más.

● Durante la infancia, los niños son susceptibles y por ello encontramos casos
de maltrato a menudo, este maltrato puede ser físico, emocional, abuso
sexual o por negligencia de sus cuidadores. En la mayoría de los casos de
abuso, el maltrato es practicado por parte de los padres y en una menor
proporción otros familiares o la pareja de alguno de los padres (padrastro,
madrastra). La predisposición a sufrir abuso ocurre en mayor medida en los
hogares con un bajo nivel de escolaridad, pobreza, problemas con el alcohol,
padres con depresión o conductas antisociales. Algunas consecuencias del
maltrato es la muerte por negligencia, los bebés que no tienen cuidados
mueren por la incapacidad de desarrollarse; también se evidencia el
síndrome de bebé sacudido, puede generar contusiones, sangrado e
hinchazón y provocar la muerte.

● Entre las consecuencias a largo plazo del maltrato podemos encontrar


problemas a nivel físico y mental como retraso en el desarrollo, retraso
cognitivo y menor coeficiente intelectual en la infancia. También se
evidencian déficits a nivel emocional, el niño que sufrió de abuso será más
propenso a la depresión, ansiedad, desconfianza y problemas conductuales,
además de un inicio más temprano de la sexualidad o puede hallarse
inadaptación sexual. Los adultos que de niños fueron maltratados, son por lo
general alcohólicos o tienen problemas con las drogas.

DUDAS E INQUIETUDES:
Un niño que es maltratado en la infancia, ¿a futuro puede convertirse en
maltratador?
El hecho de que un niño sufra abusos durante su infancia, puede predisponerlo en
la adultez a conductas sadomasoquistas?
Un apego que no se soluciona de manera correcta en la infancia en el niño, puede
predisponerlo en la adultez a tener dependencia emocional de su pareja?

APORTES:
El ámbito social, la influencia de la cultura y la familia, son determinantes clave en el
desarrollo psicosocial del niño. Como médicos y profesionales de la salud, debemos
conocer los hitos importantes en el desarrollo del infante, a fin de determinar si este
es óptimo o no a través de programas de control y desarrollo; como médicos es
importante educar a los padres para que puedan ofrecer un cuidado óptimo de sus
hijos, siendo ellos la primera relación que tiene el niño con la sociedad, un buen
cuidado asegurará un desarrollo exitoso y un buen desarrollo cognitivo. Además es
importante conocer las señales de alarma que se presentan en los niños que sufren
maltrato y mitigar la problemática con la ayuda de programas de seguridad social
con el fin de evitar consecuencias en el desarrollo psicosocial del menor y procurar
su bienestar.

OBSERVACIONES:
Mi calificación para el texto es 5
Considero que la lectura es bastante oportuna, fácil de leer y de comprender.
Abarca muchos conceptos claves para comprender cómo funciona el desarrollo
psicosocial de los infantes hasta los 3 años de edad y los conceptos básicos de la
teoría del desarrollo psicosocial de Erik Erikson. Adicionalmente, aprecio el hecho
de que incluya bastantes ejemplos en cada una de las teorías, muy buen texto.

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