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Realismo mágico

Para el movimiento artístico de los años 1920, véase nueva objetividad.


El realismo mágico es un movimiento literario de mediados del siglo XX y se define como
una preocupación estilística y el interés de mostrar lo irreal o extraño como algo cotidiano y
común. No es una expresión literaria mágica, su finalidad no es suscitar emociones sino,
más bien, expresarlas, y es, sobre todas las cosas, una actitud frente a la realidad.
El realismo mágico comparte características con el realismo épico, como la pretensión de
dar verosimilitud interna a lo fantástico e irreal, a diferencia de la actitud nihilistaasumida
originalmente por las vanguardias como el surrealismo.

Índice
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 1Historia
 2Exponentes
 3Características del realismo mágico
o 3.1Personajes
o 3.2Tiempo
 4Referencias

Historia[editar]
El término fue inicialmente usado por un crítico de arte, el alemán Franz Roh, para
describir una pintura que demostraba una realidad alterada y llegó al idioma español con la
traducción en 1925 del libro Realismo mágico (Revista de Occidente, 1925), fue en gran
medida influenciado por las obras surrealistas de la escritora chilena María Luisa
Bombal1 pero más tarde en 1947, fue introducido a la literatura
hispanoamericana por Arturo Uslar Pietri2 en su ensayo El cuento venezolano.3 Señala
Uslar:
Lo que vino a predominar en el cuento y a marcar su huella de una manera perdurable fue la
consideración del hombre como misterio en medio de datos realistas. Una adivinación poética o una
negación poética de la realidad. Lo que a falta de otra palabra podrá llamarse un realismo mágico.4

El crítico venezolano Víctor Bravo señala que la noción de 'realismo mágico' nació casi de
manera simultánea con la de 'real maravilloso': "La formulación inicial de una y otra noción
--como referencia a un modo de producción literaria latinoamericana-- se hace casi de
manera simultánea. En 1947, Arturo Uslar Pietri introduce el término "realismo mágico"
para referirse a la cuentística venezolana; en 1949 Alejo Carpentier habla de "lo real
maravilloso" para introducir la novela El reino de este mundo".5 y algunos la consideran
que es la novela iniciadora de esta corriente literaria.
Como referente literario previo al uso del término realismo mágico por parte de Uslar Pietri
debe citarse a Massimo Bontempelli quien, en 1919, "conquista gran popularidad al
publicar sus novelas del ciclo la 'Vida intensa', iniciándose en una literatura -–según nota
de Nino Frank en el 'Dictionnaire des Auteurs', de Laffont-Bompiani-– que sacrifica la
corriente convencional de la época, a la manera de Anatole France, convirtiéndose en una
especie de apóstol de lo que se conoció como “realismo mágico”".6
El realismo mágico se desarrolló muy fuertemente en las décadas del '60 y '70, producto
de las discrepancias entre dos visiones que en ese momento convivían enHispanoamérica:
la cultura de la tecnología y la cultura de la superstición. Sin embargo, existen textos de
este tipo desde la década de 1930, en las obras de José de la Cuadra, en sus nouvelles --
por ejemplo, La tigra--, y también sería desarrollado en profundidad este estilo de
escritura Demetrio Aguilera Malta ("Don Goyo", "La isla virgen"). En el año1942 se publica
la novela Pedro Arnáez de José Marin Cañas que según el filosofo Constantino
Láscaris es una obra fundamental para el movimiento.

Exponentes[editar]
Entre sus principales exponentes están el colombiano Gabriel García Márquez y el
guatemalteco Miguel Ángel Asturias,7 ambos galardonados con el Premio Nobel de
Literatura. También destacan autores como el gallego Álvaro Cunqueiro, aunque muchos
aclaman como padres del realismo mágico a Juan Rulfo con Pedro Páramo, Arturo Uslar
Pietricon su cuento La lluvia (1935), José de la Cuadra con Los Sangurimas, Laura
Esquivel con Como agua para chocolate, la chilena Isabel Allende con La casa de los
espíritus,Pablo Neruda y otros. Jorge Luis Borges también ha sido relacionado con el
realismo mágico, pero su negación absoluta del realismo como género o como una
posibilidad literaria lo pone contra este movimiento. Alejo Carpentier, de Cuba, en su
prólogo al Reino de este mundo, define su escritura inventando el concepto de real
maravilloso, que, a pesar de sus semejanzas con el realismo mágico, no debería ser
asimilado a él.

Características del realismo mágico[editar]


Los siguientes elementos están presentes en muchas novelas del realismo mágico, pero
no necesariamente todos se presentan en las novelas y también otras obras
pertenecientes a otros géneros pueden presentar algunas características similares.

 Contenido de elementos mágicos/fantásticos, percibidos por los personajes como


parte de la "normalidad".
 Elementos mágicos tal vez intuitivos, pero (por lo general) nunca explicados.
 Presencia de lo sensorial como parte de la percepción de la realidad.

 En términos de espacio la mayoría se ubica en los niveles más duros y crudos de


la pobreza y marginalidad social, espacios donde la concepción mágica, mítica se
hace presente.
 Los hechos son reales pero tienen una connotación fantástica, ya que algunos no
tienen explicación, o son muy improbables que ocurran.
 Se refiere a la novedad de los personajes irreales que siempre actúan sin actuar,
es decir, que la capacidad del personaje se ve reflejada en cada letra de la novela.
[cita  requerida]

Personajes[editar]
Estos personajes tienen en la conciencia tres esferas activas: el consciente (tiene noción
de lo que hace), el inconsciente (no tiene conciencia de sus actos) y el subconsciente
(están ahí las cosas pero no llega a ser consciente).[cita  requerida]
Tiempo[editar]
Encontramos cuatro posturas:

 Tiempo cronológico: Las acciones siguen el curso lógico del tiempo.


 Ruptura de planos temporales: mezcla de tiempo presente con tiempo pasado
(regresiones) y tiempo futuro (adelantos). (La noche boca arriba de Julio Cortázar
y Pedro Páramo de Juan Rulfo)
 Tiempo estático: El tiempo cronológico se detiene, es como si no trascendiera, en
cambio, fluyen los pensamientos de los personajes.
 Tiempo invertido: Es el más contradictorio: considerar la noche día cuando leemos:
"Era el amanecer. Se hizo la noche", entre otras.
Referencias[editar]
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Juan Rulfo
(Apulco, Jalisco, 1918 - Ciudad de México, 1986) Escritor mexicano. Un
sólo libro de cuentos, El llano en llamas (1953), y una única novela, Pedro
Páramo (1955), bastaron para que Juan Rulfo fuese reconocido como uno
de los grandes maestros de la narrativa hispanoamericana del siglo XX.
Su obra, tan breve como intensa, ocupa por su calidad un puesto señero
dentro del llamado Boom de la literatura hispanoamericana de los años
60, fenómeno editorial que dio a conocer al mundo la talla de los nuevos
(y no tan nuevos, como en el caso de Rulfo) narradores del continente.

Juan Rulfo

Nacido en Apulco, en el distrito jalisciense de Sayula, Juan Rulfo creció


entre su localidad natal y el cercano pueblo de San Gabriel, villas rurales
dominada por la superstición y el culto a los muertos, y sufrió allí las
duras consecuencias de las luchas cristeras en su familia más cercana
(su padre fue asesinado). Esos primeros años de su vida habrían de
conformar en parte el universo desolado que Juan Rulfo recreó en su
breve pero brillante obra.
En 1934 se trasladó a Ciudad de México, donde trabajó como agente de
inmigración en la Secretaría de la Gobernación. A partir de 1938 empezó
a viajar por algunas regiones del país en comisiones de servicio y publicó
sus cuentos más relevantes en revistas literarias. En los quince cuentos
que integran El llano en llamas (1953), Juan Rulfo ofreció una primera
sublimación literaria, a través de una prosa sucinta y expresiva, de la
realidad de los campesinos de su tierra, en relatos que trascendían la
pura anécdota social.
En su obra más conocida, Pedro Páramo (1955), Rulfo dio una forma más
perfeccionada a dicho mecanismo de interiorización de la realidad de su
país, en un universo donde cohabitan lo misterioso y lo real; el resultado
es un texto profundamente inquietante que ha sido juzgado como una
de las mejores novelas de la literatura contemporánea.
El protagonista de la novela, Juan Preciado, llega a la fantasmagórica
aldea de Comala en busca de su padre, Pedro Páramo, al que no conoce.
Las voces de los habitantes le hablan y reconstruyen el pasado del
pueblo y de su cacique, el temible Pedro Páramo; Preciado tarda en
advertir que en realidad todo los aldeanos han muerto, y muere él
también, pero la novela sigue su curso, con nuevos monólogos y
conversaciones entre difuntos, trazando el sobrecogedor retrato de un
mundo arruinado por la miseria y la degradación moral. Como el
Macondo de Gabriel García Márquez, la ardiente y estéril Comala se
convierte en el espacio mítico que refleja el trágico desarrollo histórico
del país, desde el Porfiriato hasta la Revolución Mexicana.
Desde el punto de vista técnico, la novela se sirve magistralmente de las
innovaciones introducidas en la literatura europea y norteamericana de
entreguerras (Proust, Faulkner, Joyce), línea que seguirían en los 60
muchos autores del Boom; planteado inicialmente como un relato en
primera persona en boca de su protagonista, se asiste en seguida a la
fragmentación del universo narrativo por la alternancia de los puntos de
vista (con uso frecuente del monólogo interior) y los saltos cronológicos.
Rulfo escribió también guiones cinematográficos como Paloma
herida (1963) y otra excelente novela corta, El gallo de oro (1963). En 1970
recibió el Premio Nacional de Literatura de México, y en 1983, el Príncipe
de Asturias de la Letras.

Más información en la m

Juan Rulfo
 Biografía
 
 Cronología
 
 Su obra

 
 Fotos
 
 Vídeos

Hay en la literatura latinoamericana contemporánea una peculiar estirpe


de creadores, un grupo de escritores que han sabido poner en pie un
universo propio, característico, cerrado, inventando lugares fabulosos,
ciudades que sirven de repetido paisaje para las historias que brotan de
sus experiencias, de su mundo y de su imaginación. Paradigmático es, a
este respecto, el caso de Macondo, el marco que el colombiano Gabriel
García Márquez levantó para que los Buendía trenzaran su aprendizaje
de la soledad; y no puede tampoco olvidarse la Santa María del
uruguayo Juan Carlos Onetti.

Situados en una geografía reconocible y al mismo tiempo anónima,


ambos lugares pueblan la difusa frontera que separa lo real de lo
fantástico, un lugar que ocupa, también, la infernal Comala de Juan
Rulfo, otro ejemplo de universo personal, levantado por el escritor para
albergar a sus particulares criaturas. Macondo, Santamaría y Comala,
lugares coherentes, reconocibles por sus rasgos peculiares y tan
distintos entre sí, como lo son sus respectivos autores, tienen algo en
común: son el espejo donde se reflejan características y ambientes que
el escritor conoce muy bien.

Juan Rulfo

Cuando apareció El llano en llamas, algunos críticos situaron a Rulfo,


apresuradamente, como un escritor regionalista más. Sin embargo, sólo
hizo falta esperar dos años para que, con la aparición de Pedro Páramo, se
dieran cuenta de su error. El mundo fantasmal de la novela, la ruptura
de las fronteras entre la vida y la muerte, mostraban a un escritor que
había superado los cauces realistas y tradicionales de la novelística
anterior e inauguraba la nueva narrativa mexicana, agotada ya la veta
de la llamada novela de la revolución.
Y es que, dejando a un lado algunos textos para cine (que se incluyeron
en la edición de su Obra completa en 1977), la producción de Juan Rulfo se
reduce a esos dos libros, que forman sin embargo uno de los conjuntos
más singulares de la narrativa latinoamericana. Temáticamente, ambas
obras tienen un entronque regionalista, pero no incurren en un
pintoresquismo local, sino que restituyen en su esencia la vida dura y
marginal de la provincia. Por otra parte, el autor muestra una original
asimilación de las técnicas de la moderna narrativa europea y
norteamericana.
El llano en llamas
Los diecisiete cuentos que componen la colección El llano en llamas, de
1953, se centran en la miseria y la soledad del campo de Jalisco y,
mediante una magistral recreación del habla campesina, revive en sus
historias las relaciones entre los hombres y las de éstos y la tierra. Las
narraciones de El llano en llamas giran todas, en efecto, en torno a la vida
de los campesinos mexicanos; son cuentos breves, de extraordinaria y
fecunda concisión, en cuyas escenas de intenso dramatismo palpita el
hálito poético del autor plasmado en imágenes de brillante sensibilidad y
en un estilo que reelabora y recrea el habla popular mexicana.

Pero, pese a esta última característica, que podría haber convertido a


Rulfo en un escritor regionalista o costumbrista, la persistencia de sus
temas esenciales, la obsesiva presencia de la soledad y la violencia, la
confrontación con la muerte, el amor y el desamor, los secretos
entresijos de la vida y de los hombres o los enigmas que pueblan las
calles de Comala son una fulgurante parábola de lo humano, que
trasciende el marco del nacionalismo literario y demuestran, de nuevo,
que no hay fronteras para la creación.

Juan Rulfo ante la capilla de Tlalmanalco


En uno de los cuentos, titulado El hombre, se entrelazan distintas líneas
temporales, de modo que un hombre que había acosado a otro hasta
darle muerte y acabar también con su familia, se convierte luego en un
ser perseguido y, dialogando con un invisible vengador, se contempla
simultáneamente como víctima y verdugo. Hay en la narración un tono
de pesadilla porque, como en esos sueños en los que intentamos correr
sin conseguirlo, el hombre huye pero no logra nunca escapar. Siempre
se ve obligado a volver atrás como si el horizonte le estuviera cerrado,
como si no existiera más allá y el mundo fuera un lugar cerrado, donde
la culpa adquiere el peso de un destino ineludible. Como él, los
personajes de Rulfo nunca se liberan y su angustia los lanza a largos
monólogos en los que el lector se ve abocado a adoptar el papel de
confidente, de confesor que recoge las postreras palabras del
condenado. En Talpa, otra de las narraciones incluidas en El llano en llamas,
una pareja de adúlteros deja morir al marido mientras hacen el amor, y
la figura del muerto se interpondrá luego constantemente entre ellos. La
fría violencia presente en muchos de los relatos da fuerza y vigor a las
narración, que unas veces tiene un toque de crueldad (El hombre, El llano
en llamas) y otras de ácido sarcasmo (El día del derrumbe, Anacleto Morones).
Pedro Páramo
Publicada en 1955, Pedro Páramo recrea, en el espacio ficticio de Comala,
la miseria y la soledad del mundo campesino de la infancia del autor,
donde la degradación moral y física arrastra a la gente a la desesperanza
y a la desorientación. El narrador y protagonista, Juan Preciado, cuenta
cómo por encargo de su madre moribunda fue en busca de su padre, el
cacique Pedro Páramo, a quien no conoce, y que ha llevado a Comala a
la destrucción por su convulsa pasión por Susana San Juan.

"Vine a Comala porque me dijeron que acá vivía mi padre, un tal Pedro
Páramo. Mi madre me lo dijo. Y yo le prometí que vendría a verlo en
cuanto ella muriera." Así comienza la obra, marcada, a la vez, por la
sencillez y espectralidad del lenguaje. El crítico mexicano Carlos
Monsiváis dijo de Rulfo: "Un eje del mundo rulfiano es la religiosidad.
Pero la idea determinante no es el más allá sino el aquí para siempre".
Ya en las primeras páginas advierte que el lugar responde a una lógica
fantasmal: "al cruzar una bocacalle vi una señora envuelta en su rebozo
que desapareció como si no existiera".

El encuentro con un pueblo deshabitado y lleno de fantasmas le llena de


pavor, y le introduce en un mundo irreal. Por boca de los muertos
conoce los hechos sucedidos en Comala en vida de Pedro Páramo,
cacique que, en un marco histórico que abarca desde el gobierno de
Porfirio Díaz hasta el de Obregón, llevó hasta el límite los abusos de
autoridad. Convertido en un nuevo Dante a las puertas del Infierno-
Comala y conducido, como el autor de la Comedia, por una Beatriz que
ha adoptado las apariencias de un mulero, Juan Preciado descubre ese
ardiente valle donde todos los habitantes son hijos de Páramo, donde
todos están muertos y la vida es sólo un recuerdo.

Cartel de la película Pedro Páramo (1967),


basada en la obra de Rulfo

La historia de Pedro Páramo se va revelando mediante murmullos y


entrevisiones de los fantasmas del pueblo, que a pesar de estar muertos
y de guardarle rencor a Pedro Páramo, aún le tienen miedo. "Este pueblo
lleno de ecos (...) Cuando caminas sientes que te están pisando los
pasos. Oyes crujidos, risas." Pero la fantasmagórica realidad de Comala
no es percibida de inmediato por el narrador; sólo lenta, muy
lentamente, Juan Preciado advierte que está rodeado de cadáveres y
muere, entonces, a su vez, abrumado por el peso insoportable del
pasado.

La gran innovación de Pedro Páramo radica en su compleja construcción


textual. El tiempo narrativo se fragmenta, ajeno a toda continuidad
lógica, y se representa mediante la memoria y el designio íntimo de cada
individuo, técnica que no aparecerá en otros escritores
hispanoamericanos hasta la década de los sesenta. Juan Rulfo se
convierte así, a pesar de su breve producción literaria, en uno de los
primeros escritores latinoamericanos con clara conciencia de renovación
de la novela, inspirada en su propia tradición y en figuras como Joyce,
Proust o Faulkner.

Como en una magna sinfonía, donde los temas y las melodías se


entremezclan y cabalgan dirigidas por una inflexible voluntad de
orquestación, el texto prescinde de las separaciones por capítulos y se
lanza a una construcción que incluye breves fragmentos, monólogos o
diálogos, voces del pueblo cuyo origen el lector debe adivinar, para
describir lo que Jean Franco ha calificado como "una búsqueda del
Paraíso que termina en el Infierno de Comala". La novela se construye
en el límite entre lo real y lo fantástico, y en esa ambigüedad en la que
las fronteras se han borrado se proyectan tanto la huella de un sustrato
indígena como las consecuencias histórico-sociales de la revolución
mexicana, representadas por la violencia, el odio, la venganza
generalizada y el abandono de la tierra.

Cada uno de los personajes de la narración, el cacique Pedro Páramo,


asesino y ladrón, Susana, el padre Rentería, Fulgor Sedano y tantos
otros, son figuras emblemáticas cuyos rasgos, de oscura e inquietante
intensidad, han pasado ya a la historia de la literatura universal;
aunque, como ya se ha dicho, el protagonista principal de la novela,
como de otras narraciones de Rulfo, es el marco donde la acción
transcurre, el universo mítico de Comala donde nacen y mueren las
ansias y los ardores de sus habitantes, un "lugar sobre brasas" que se
convierte en inolvidable metáfora de un mundo de soledad y opresión,
cruel y tierno, pasional o interesado.

La enigmática historia de Pedro Páramo y su prosa llena de oscuros


simbolismos han generado, como es lógico, una ingente cantidad de
interpretaciones y han sido campo abonado para que los estudiosos
buscaran significaciones ocultas, metáforas, lanzándose a una fecunda
tarea de elucidación; la crítica se ha inclinado sobre sus páginas, y sin
duda seguirá haciéndolo durante mucho tiempo, para interrogarlas con
la esperanza de sacar a la luz un significado unívoco. Sin embargo, el
propio Juan Rulfo dijo de ella: "En realidad es la historia de un pueblo
que va muriendo por sí mismo. No lo mata nada. No lo mata nadie", una
interpretación que parecerá demasiado simplista a quienes, empeñados
en una paciente labor investigadora, olviden que cualquier novela es, en
verdad, la obra de sus lectores y que, por lo tanto, en sus páginas
pueden encontrarse todos los universos.

Nace Juan Rulfo


 16 de mayo de 2011     
El autor mexicano nació el 16 de mayo de 1917

Juan Rulfo

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Creador de una estructura vanguardista, que colocó a 'Pedro Páramo' como una novela
innovadora del siglo XX, Juan Rulfo será recordado en el 14 Festival Cultural que se
realiza en su honor en San Gabriel, Jalisco, y que este año tendrá actividades del 16 al 22 de
los corrientes.

El encuentro tiene como propósito promover la cultura y el turismo de esa región del estado, y
ha incluido en su programa lecturas, charlas sobre la obra del polígrafo, representaciones
teatrales, conciertos y exposiciones de pintura.

También se realiza una caminata por este pueblo (que es ya clásica, luego de tantos años),que
lleva a conocer lugares que podrían ser los que inspiraron pasajes de los cuentos de "El
llano en llamas" y la novela "Pedro Páramo".

El festival busca promover la cultura y el turismo, dando a conocer sus atractivos naturales,
historia, cultura y gastronomía, además de la importancia de seguir dando a conocer el gran
legado de Rulfo, uno de los escritores más reconocidos del siglo XX oriundo de este
municipio, donde nació justamente el 16 de mayo, pero de 1917.

Forjado en situaciones adversas, como la muerte de sus padres, en 1933 fracasó en su intento
por ingresar a la Universidad de Guadalajara, a causa de una huelga en esta institución.

Ello determinó que viajara a la Ciudad de México, donde asistió como oyente al Colegio de
San Ildefonso. Sus primeros trabajos los comenzó en 1934, al tiempo que colaboró en la
Revista América, en donde publicó 'Nos han dado la tierra' (1945) y 'Macario'.
Asimismo, escribió 'La cuesta de las comadres' (1948), 'Talpa' (1950) y 'El llano en llamas'
(1953), publicado por el Fondo de Cultura Económica, en la colección Letras Mexicanas, y que
reúne 17 cuentos.

Su faceta en el mundo cinematográfico abarcó la escritura de guiones que le solicitaron


aclamados directores, como Emilio 'El Indio' Fernández, en 1956. Algunos de las escaletas
las realizó con Juan José Arreola.

De esta forma, fueron rodadas para la pantalla grande 'El despojo', en 1960, y cuatro años más
tarde 'El gallo de oro', dirigida por Roberto Gavaldón y adaptada al formato cinematográfico por
Carlos Fuentes y el escritor colombiano Gabriel García Márquez.

Su formación abarcó no sólo el universo de la literatura o las artes visuales. También trabajó


como archivista; agente de inmigración, de 1936 a 1946, agente viajero y fotógrafo.

De 1954 a 1957 fue colaborador de la Comisión del Papaloapan y editor en el Instituto Nacional
Indigenista en la Ciudad de México.

Pero sin duda fue en la escritura, influenciada por el movimiento cristero, en donde tuvo
una mayor proyección, al grado de que su máxima obra fue comentada por dos de los literatos
más prominentes de las letras latinoamericanas, Jorge Luis Borges y Gabriel García Márquez,
teniendo críticas a favor de ambos.

De su legado destacan 'Diles que no me maten' (1955), 'Juan Rulfo' (1980), 'Inframundo, el
México de Juan Rulfo' (1983), '¿No oyes ladrar a los perros?', 'Los Cuadernos de Juan Rulfo'
(1994) y 'Aire de las colinas' (2000).

Por su labor literaria, viajó y participó en varios encuentros internacionales y congresos, como
el que se realizó en la Universidad de Varsovia, en 1974. Pisó tierras teutonas, Checoslovaquia,
Austria y Francia, cuando formó parte de la comitiva presidencial.

Sus aportaciones a la literatura le valieron obtener el Premio 'Xavier Villaurrutia', en


1956, por su novela 'Pedro Páramo'.

Fue ganador del Premio Nacional de Literatura por el gobierno federal de México, en 1970.
Además ganó el Premio Príncipe de Asturias de España en 1983.
En 1976, fue elegido miembro de la Academia Mexicana de la Lengua, tomó posesión de la
silla XXXV el 25 de septiembre de 1980.

El autor, quien perteneció a la corriente literaria conocida como 'realismo mágico', murió el 7


de enero de 1986, en la Ciudad de México.

corriente literaria
Pedro Páramo - Juan
Rulfo
Escrito por FrankoDI 19-03-2014
en Literatura. Comentarios (0)

Juan Rulfo
Juan Nepomuceno Carlos Pérez Rulfo Vizcaíno (de nombre
artístico Juan Rulfo) Jalisco, 16 de Mayo de 1917 - México
D.F., 7 de enero de 1986) fue un escritor, guionista y
fotógrafo mexicano, perteneciente a la generación del 52.
Juan Rulfo fué uno de los grandes escritores
latinoamericanos del siglo XX, en sus obras se presenta una
combinación de realidad y fantasía, cuya acción se
desarrolla en escenarios mexicanos, y sus personajes
representan y reflejan el tipismo del lugar, con sus grandes
problemáticas socio-culturales entretejidas con el mundo
fantástico. La obra de Rulfo, y sobre todoPedro Páramo, es
el parteaguas de la literatura mexicana, marca el fin de la
Novela Revolucionaria, lo cual permitió las
experimentaciones narrativas como es el caso de la
Generación del Medio Siglo en México o los escritores
pertenecientes al Boom latinoamericano.
Obra Literaria
En 1930 participó en la revista México. En 1945, publicó,
para la revista Pan en Guadalajara los cuentos: La vida
no es muy seria en sus cosas, Nos han dado la tierra así
como en Macario. Establecido en la Ciudad de México en
1946 se publicó el cuento Macario en la revista América.
En 1948, se publicó La cuesta de las comadres y en
1950 Talpa y El llano en llamas. En 1951 la
revistaAmérica publicó el cuento ¡Diles que no me
maten! y en 1953 el Fondo de Cultura Económica
integró El Llano en llamas (al que pertenece el cuento Nos
han dado la tierra) en la colección Letras Mexicanas. En
1955 se publicó Pedro Páramo.
Pedro Páramo
Durante mucho tiempo Rulfo tuvo una única novela
publicada, Pedro Páramo. Esta obra tuvo una larga
gestación. Rulfo sostuvo que concibió la primera idea de la
novela antes de cumplir los treinta años, y ya en dos cartas
dirigidas en 1947 a su novia Clara Aparicio se refiere a
esta obra bajo el nombre de Una estrella junto a la luna,
diciendo que le daba algún trabajo. Posteriormente,
también declaró que los cuentos de El llano en llamas
fueron en parte una manera de aproximarse a su novela. En
la última etapa de la escritura de ésta cambia el nombre
en Los murmullos, un título que muestra una aparente
inspiración de la novela Las palmeras salvajes / If I Forget
Thee, Jerusalemde William Faulkner, aunque él siempre
reconoció la influencia de la literatura irlandesa y en
particular de la novela Gente independiente, de
Halldór Laxness islandés. Gracias a una beca del Centro
Mexicano de Escritores puede concluirla entre 1953 y
1954. En este último año tres revistas publican adelantos de
la novela y en 1955 aparece como libro. La edición fue de
dos mil ejemplares, de los cuales solamente se vendieron la
mitad, el resto fueron obsequiados. La novela fue traducida
a varios idiomas: alemán, sueco, inglés, francés, italiano,
polaco, noruego, finlandés.

Personajes:
Juan Preciado: Hijo de Pedro Páramo y de doña Dolores.
Fué a Cómala en busca de su padre para que le diera lo
que le pertenecía por ser su hijo.
Pedro Páramo: Personaje con distintos matices. Fué pobre
de niño, y con el pasar del tiempo se convirtió en el hombre
más importante y temido de Comala.
Doña Dolores: Madre de Juan Preciado. Una de las tantas
mujeres de Pedro Páramo. Al morir le pide a su hijo que
busque a su padre para pedirle lo que le correspondía.
Abundio: Uno de los hermanos de Juan Preciado.
Personaje que guía a Juan Preciado a Comala.
Doña Eduviges: Primera señora que recibe a Juan
Preciado en su hogar. De joven casi tiene relaciones con
Pedro Páramo por un favor que le hizo a Dolores.
Miguel Páramo: Hijo predilecto y reconocido de Pedro
Páramo. Un mal hombre
Colorado: Caballo de Miguel Páramo.
Padre Rentería: Sacerdote del pueblo.
Dorotea: A quién se encontró Juan Preciado después de
muerto. Estaba en su misma tumba. En vida le buscaba
mujeres a Miguel Páramo.
Donis: Hombre que se acuesta con su hermana, y aloja en
su casa a Juan Preciado.
Hermana de Donis: Mujer que esclaviza a Juan Preciado.
Susana: Una de las mujeres de Pedro Páramo. A la que
más amó
Anita: Sobrina de padre Rentería, violada por Miguel
Páramo
Damiana: Cuidó a Juan Preciado cuando era niño. Siempre
estuvo al servicio de Pedro Páramo, a quien cuidó en su
niñez.
Fulgor: Administrador de Pedro Páramo
Justina: Cuidó a Susana de niña. Las dos vieron morir y
enterrar a su madre. No pagó las mismas gregorianas para
que su madre saliera del purgatorio. Nadie fue ni al velorio
ni al entierro.
El Tilcuate: Guardaespaldas de Pedro Páramo, después del
aviso de él tartamudo.
Bartolomé San Juan: Padre de Susana.
El tartamudo: Quien avisó a Pedro Páramo que a Fulgor lo
habían matado y que vendrían matarlo también a él, a
Pedro Paramo.
Damasio: A quien Pedro Páramo puso como jefe de los
revolucionarios.
Doctor Valencia: Doctor que iba a prisa a Casa de Pedro
Páramo, cuando la luz de la ventana se apagó.

Lugar:
Comala: Es un pueblo desalojado cercano a la Colima en
México, lugar donde se desarrolla toda la historia.
Contla: Pueblo donde vivía la mujer que Miguel amaba.
Casa de Doña Eduviges: Primer casa en la cual se hospeda
Juan Preciado al llegar a Comala.
Casa de Adonis: Segunda casa a la cual va Juan Preciado,
es la casa en donde lo esclavizan y al mismo tiempo muere.
Hacienda de Pedro Páramo: Lugar donde se desarrolla la
historia, en esa hacienda fue la boda de Dolores y Pedro, al
igual fue el lugar donde velaron a Miguel Páramo.
Casa de Susana: Lugar donde matan a Bartolomé San
Juan, por otro lado es la casa en la cuál Susana se vuelve
loca y muere.
Sayula: Lugar donde vivía Abundio y a donde se fué
Tilcuate al renunciar a su trabajo.
En el escenario se muestra el pueblo de Comala que és donde se
desarrolla la historia, al principio colocan unas rocas en las cuales Juan
Preciado aparece sentado observando la colina, hay un poco de hierba y
está rodeado por unos árboles.

Por otra parte está la casa de Doña Eduviges, en la cuál hay pocas cosas,
entre ellas una pequeña mesa, unas cazuelas colgadas en la pared y una
pequeña estufa en donde Doña Eduviges calienta un poco de comida
para Juan Preciado.

Otra parte de la escenografía muestra una cantina, donde aparecen


personajes bebiendo. Ahí sólo se muestran algunas mesas redondas de
madera y algunas sillas.

También nos muestran una escena en la Iglesia en donde aparece el


sacerdote y el tartamudo, que le pide al sacerdote que no se vaya.

En la hacienda de Pedro Páramo aparece una silla grande en la cuál


Susana se sentaba a pensar y hablar sola, también aparece una larga
mesa en donde colocan el cuerpo de Miguel Páramo al fallecer.
Otros acontecimientos que ocurrieron en la hacienda fueron la boda de
Pedro Páramo con Dolores y la muerte de Pedro Páramo.

Tiempo
En la obra nos muestra una ruptura de planos temporales, ya
que hace una mezcla del presente con el pasado y a la vez
con el futuro.
·  Susana y Pedro Páramo juegan durante su infancia.
·  La mamá de Susana muere, pero este es un hecho
supuesto, ya que Dorotea no recuerda haber visto a Susana
junto a su madre.
·  Florencio el esposo de Susana muere y ella enloquece
trágicamente, ya que ella todavía cree que él está vivo.
·  Fulgor le dice a Pedro acerca de las deudas de su padre,
por lo cual Pedro concibe un plan para casarse con Dolores
y eliminar así los adeudos.
·  Fulgor y Dolores hablan, Fulgor le cuenta una mentira de
cuanto Pedro siempre ha querido casarse con ella y que en
verdad es un hombre tímido.
·  Dolores decide no dormir con Pedro ya que la luna estaba
brava, así que le pide a Eduviges que duerma con Pedro en
su lugar.
·  Miguel Páramo decide ir a ver a su amada al pueblo de
Contla, cuando decide saltar un cercado, lo cual hizo que
cayera del caballo y muriera.
·  El padre se niega a oficiar una misa de cuerpo presente ya
que Miguel violó a su sobrina, para convencer al padre
Pedro le lanza una bolsa con monedas de oro.
·  Dorotea al estar ebria decide hablar con el padre y le dice
que ella le conseguía las mujeres a Miguel y que ella fue la
que le llevo a su sobrina. El padre se enoja y le dice que no
la podrá perdonar y que no irá al cielo, lo cual hizo que el
padre renunciara.
·  Bartolomé San Juan se niega a leer las cartas de Pedro
pidiéndole que regrese a ser su administrador, pero
finalmente vuelve a Comala porque la Revolución hace del
campo un lugar peligroso, pero descubre que Pedro solo
quiere a su hija.
·  Fulgor y Pedro conspirar para matar a Bartolomé,
finalmente el muere y va al cielo. Su espíritu vuelve para
decirle adiós a Susana. Susana se ríe y le dice que no lo
necesita.
·  Fulgor es asesinado, el tartamudo llega asustado a la casa
de Pedro y le dice que los revolucionarios detuvieron a
Fulgor y le dispararon mientras corría. 
·  Tilcuate, líder revolucionario habla con Pedro. Pedro le
dice a Damasio que no tiene más dinero para darle y que
debería ir a saquear una población más grande para obtener
víveres.
·  Susana muere, niega la absolución del cura, simplemente
espera a que la muerte venga a llevársela. El padre le da la
comunión, pero ella está delirante y habla con Florencio,
Susana pide que quiere ser dejada en paz.
·  La gente de Comala hace una gran fiesta, esto molesta en
gran medida a Pedro, ya que él quería que la gente velara la
perdida de Susana, así que dijo que Comala se moriría de
hambre, y eso sucede.
·  Pedro Páramo es apuñalado por su hijo ilegítimo,
Abundio. Pedro muere después de pensar en Susana.
·  Dolores muere, y su deseo antes de morir es que Juan
encuentre a su padre y consiga de él lo que merece después
de todos estos años.
·  Juan Preciado llega a Comala, el cual es un pueblo muerto
y fantasmal, poblado de murmullos, ecos, sombras de almas
en pena, etc.
·  Juan Preciado se encuentra con los fantasmas de Abundio,
Doña Eduviges y Damiana.
·  Es acogido por Donis y su hermana.
·  Juan Preciado es encontrado muerto en la calle, ya que
murió por obra de la hermana de Donis.
·  Juan y Dorotea son enterrados en la misma tumba, en ese
momento Dorotea comienza a narrar la historia de Comala,
y de su padre Pedro Páramo.

Corriente literaria:
La corriente literaria que aparece en la obra es el realismo
mágico, que es una corriente literaria de mediados del siglo
XX que se caracteriza por la narración de hechos insólitos,
fantásticos e irracionales en un contexto realista.
El realismo mágico comparte ciertas características con el
realismo épico, como la pretensión de dar verosimilitud
interna a lo fantástico e irreal, a diferencia de la actitud
nihilista asumida originalmente por las vanguardias como
el surrealismo.
El término fue acuñado en 1925 por el crítico de arte e
historiador alemán Franz Roh, para describir un
movimiento pictórico que incorpora aspectos mágicos de la
realidad.
Definición.
Los críticos literarios han utilizado la expresión "Mágico"
para designar una tendencia en la novelística del Siglo XX.
Esta se caracteriza por la inclusión y el respeto a los mitos
dentro de un contexto realista. No pocos estudiosos
incluyen elementos sobrenaturales, míticos y de la creencia
popular. No se trata de "presentar la magia como que fuera
real" sino de presentar "la realidad como si fuera mágica".
Es una focalización de lo sobrenatural. Es un género de
Ficción plantado principalmente por los novelistas
iberoamericanos durante la segunda mitad del Siglo XX.
El realismo mágico, como gran parte de la literatura de la
segunda mitad de siglo, es esencialmente moderado.
Muestra la realidad narrativa con elementos fantásticos y
fabulosos, no tanto para reconciliarlos como para exagerar
su aparente contrariedad. El reto que esto supone para la
noción común de la "realidad" lleva implícito un
cuestionamiento de la "verdad" que a su vez puede socavar
de manera deliberada el texto y las palabras, y en
ocasiones la autoridad de la propia novela.

Características.
•    Es una característica propia de la Literatura
latinoamericana de la segunda mitad de Siglo XX que funde
la realidad narrativa con elementos fantásticos y fabulosos,
no tanto para reconciliarlos como para exagerar su
aparente discordancia.
•    Tendencia a fundir lo real con lo fantástico.
•    En sus obras existen elementos mágicos que los
personajes consideran normales.
•    Los elementos mágicos se pueden intuir pero no se
explican..
•    Contiene múltiples narradores que pueden estar en
primera, segunda y tercera personas.
•    El tiempo se puede distorsionar y se percibe como
cíclico y no lineal.
•    Se transforma lo cotidiano en experiencias que pueden
ser sobrenaturales.
•    Los personajes pueden revivir; los escenarios son en su
mayoría americanos.
•    En cuanto a los temas, hay diversidad de épocas
históricas, una esencia cultural del mestizaje y elementos
prehispánicos en sus valores mitológicos.
•    Las propiedades que surgen de la realidad son:
clarividencia, levitación, vidas largas al estilo bíblico,
milagros, enfermedades mitad imaginarias que son
exageradas hiperbólicamente; pero todo eso supone fe.
Todo esto representa la parte mágica, mientras el realismo
se encuentra en el modo de contar la narrativa: como si el
hilo principal fuera realista y lo más importante, mientras
que lo mágico no representa más que unos detalles
ordinarios de poca importancia.
•    El realismo mágico invita al lector a menospreciar lo
real, a apreciar lo milagroso y a despreciar lo histórico.
Personajes.
Estos personajes tienen en la conciencia tres esferas
activas: el consciente (tiene noción de lo que hace), el
inconsciente (no tiene conciencia de sus actos) y el
subconsciente (están ahí las cosas pero no llega a ser
consciente).
Tiempo.
Encontramos cuatro posturas:
•    Tiempo cronológico: Las acciones siguen el curso
lógico del tiempo.
•    Ruptura de planos temporales: mezcla de tiempo
presente con tiempo pasado (regresiones) y tiempo futuro
(adelantos). (La noche boca arriba de Julio Cortázar y
Pedro Páramo de Juan Rulfo)
•    Tiempo estático: El tiempo cronológico se detiene, es
como si no trascendiera, en cambio, fluyen los
pensamientos de los personajes.
•    Tiempo invertido: Es el más contradictorio: considerar
la noche día cuando leemos: "Era el amanecer. Se hizo la
noche", entre otras.

Críticas
-Franco Mauricio Diez Ibarra

A mi parecer esta obra es bastante interesante ya que suceden muchas cosas


que uno tiene que analizar para poder entenderlas como la muerte de varios de
los personajes y cosas fantásticas que suceden, las cuales pueden tener varias
interpretaciones.

Esta obra se me hizo algo aburrida ya que para mi gusto le faltó más acción y
trama como también otro tipo de escenarios.

La obra estuvo muy corta para mi gusto y en ocasiones no se escuchaba muy


bien los diálogos de los personajes. Otra cosa que no me gustó fue la poca
empatía que sentí con los personajes.

A pesar de que la obra no fue lo que yo esperaba, es una excelente historia


con muy buenos actores. Me gustaron los personajes y el ambiente de un
típico pueblo mexicano con sus tradiciones.

También me gustó el final ya que no fue uno ordinario, te deja un mal sabor de
boca.

En conclusión puedo decir que es una obra un tanto complicada y trágica,


aunque también le ponen un toque de humor pero te transmite en mayor parte
una sensación de tristeza y desesperación. La recomiendo.

-Karen Mancera Solis

Bueno en particular las obra es muy buena, pero siento que es un poco
confusa ya que está narrada en forma laberíntica, es una obra en la cual hay
que atar cabos, una obra en donde la concentración de las persona que la está
viendo juega un papel muy importante, ya que puede estar narrando la vida de
Pedro Páramo y de un momento a otro pasa a narrar la historia de Juan
Preciado.

Por otro lado me hubiera gustado ver más cambios en la escenografía, ya que
prácticamente toda la obra tiene la misma escenografía, lo cual provoca que no
distingas bien los lugares que te van narrando. En la obra se van narrando
cosas irreales, de otro mundo, pero te las muestran como si realmente fueran
reales.

Siento que en esta obra lo que tratan de hacer o bien de transmitir es la


sensación de estar atrapado en un momento histórico asfixiante,
irremediablemente cíclico. La obra me envolvió en una historia entre real e
irreal, ya que varias cosas que pasan sabes cuando son reales, pero cuando
ocurre algo irreal piensas que eso es imposible que pase.

Por un lado el estado de los personajes es una duda constante, ya que te


preguntas ¿estarán muertos? Asimismo, la frontera de la vida y la muerte se
presenta tan confusa que su oposición no es absoluta.

Juan Rulfo
Juan Rulfo

Información personal

Nombre de
Juan Nepomuceno Carlos Pérez Rulfo Vizcaíno
nacimiento

Nacimiento 16 de mayo de 1917
 Sayula, Jalisco, México

Fallecimiento 7 de enero de 1986
(68 años)
 Ciudad de México, México

Causa de
Cáncer de pulmón
muerte

Nacionalidad Mexicana

Familia

Cónyuge Clara Angelina Aparicio Reyes

Hijos Claudia Berenice, Juan Francisco, Juan Pablo, Juan


Carlos

Información profesional

Ocupación Escritor, guionista y fotógrafo

El llano en llamas
Obras notables
Pedro Páramo

Miembro de Academia Mexicana de la Lengua

Distinciones  Príncipe de Asturias de las Letras (1983)

Web

Sitio web Sitio web

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Juan Nepomuceno Carlos Pérez Rulfo Vizcaíno, conocido como Juan Rulfonota


1
 (Sayula,3 4 Jalisco, 16 de mayo de 1917 -Ciudad de México, 7 de enero de 1986), fue un
escritor, guionista y fotógrafo mexicano, perteneciente a la generación del 52.5 La
reputación de Rulfo se asienta en dos libros: El Llano en llamas, compuesto de diecisiete
relatos y publicado en 1953, y la novelaPedro Páramo, publicada en 1955.
Juan Rulfo fue uno de los grandes escritores latinoamericanos del siglo XX. En sus obras
se presenta una combinación de realidad y fantasía cuya acción se desarrolla en
escenarios mexicanos. Sus personajes representan y reflejan el tipismo del lugar con sus
grandes problemáticas socio-culturales entretejidas con el mundo fantástico. La obra de
Rulfo, y sobre todo Pedro Páramo, es el parteaguas de la literatura mexicana que marca el
fin de la novela revolucionaria, lo que permitió las experimentaciones narrativas, como es
el caso de la generación del medio siglo en México o los escritores pertenecientes alboom
latinoamericano.

Índice
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 1Primeros años
 2Obra literaria
o 2.1El tío Celerino
 3Guionista de cine
 4Reconocimientos y premios
 5Pedro Páramo
 6El gallo de oro
 7Obras
 8Notas y referencias
o 8.1Referencias
o 8.2Bibliografía
o 8.3Bibliografía de consulta
 9Enlaces externos

Primeros años[editar]
Huérfano de padre a los siete años, cuatro años después falleció su madre. En 1929, se
trasladó a San Gabriel y vivió con su abuela y posteriormente en el orfanatorio Luis Silva
—actualmente Instituto Luis Silva— en la ciudad de Guadalajara. En 1924 inició sus
estudios de primaria. En 1933 intentó ingresar a la Universidad de Guadalajara, pero al
estar en huelga, optó por trasladarse a la Ciudad de México. Asistió de oyente al Colegio
de San Ildefonso. En 1934 comenzó a escribir sus trabajos literarios y a colaborar en la
revista América.6
A partir de 1938 viajó por algunas regiones del país en comisiones de servicio de la
Secretaría de Gobernación y comenzó a publicar sus cuentos más relevantes en revistas
literarias.
A partir de 1946 se dedicó también a la labor fotográfica, en la que realizó notables
composiciones. Trabajó para la compañía Goodrich-Euzkadi de 1946 a 1952 como agente
viajero. En 1947 se casó con Clara Angelina Aparicio Reyes, con quien tuvo cuatro hijos
(Claudia Berenice, Juan Francisco, Juan Pablo y Juan Carlos). De 1954 a 1957 fue
colaborador de la Comisión del Papaloapan y editor en el Instituto Nacional Indigenista en
la Ciudad de México.7

Obra literaria[editar]
En 1930 participó en la revista México. En 1945, publicó, para la revista Pan en
Guadalajara los cuentos: La vida no es muy seria en sus cosas, Nos han dado la tierra así
como en Macario. Establecido en la Ciudad de México en 1946 se publicó el
cuento Macario en la revista América. En 1948, se publicó La cuesta de las comadres y en
1950 Talpa y El Llano en llamas. En 1951 la revista América publicó el cuento ¡Diles que
no me maten! y en 1953 el Fondo de Cultura Económica integró El Llano en llamas (al que
pertenece el cuento Nos han dado la tierra) en la colección Letras Mexicanas.8 En 1955 se
publicó Pedro Páramo.
Las pocas obras de Juan Rulfo, aunque constan sólo de dos libros, le valió reconocimiento
en todo el mundo de habla española, en el que se concretó en premios tan importantes
como el Nacional de Letras (1970) y el Príncipe de Asturias de España (1983); fue
traducida a numerosos idiomas. En 1953 apareció el primero de ellos, El llano en llamas,
que incluía diecisiete narraciones (algunas de ellas situadas en la mítica Comala), que son
verdaderas obras maestras de la producción cuentística. En 1955, sale a la luz Pedro
Páramo, la primera y única novela que escribió Juan Rulfo, el acontecimiento señala el
final de un lento proceso que ha ocupado al escritor durante años y que demuestra toda la
riqueza y diversidad de su formación literaria. Una formación que ha asimilado
deliberadamente las más diversas literaturas extranjeras, desde los modernos autores
escandinavos, hasta las producciones rusas o estadounidenses.
Entre 1956 y 1958 escribió su segunda novela, El gallo de oro, que no fue publicada sino
hasta 1980.9
El tío Celerino[editar]
Después de haber concluido sus dos novelas, Rulfo abandonó la escritura de libros. En
marzo de 1974, durante un diálogo estudiantil en la Universidad Central de Venezuela,
Rulfo justificó ese abandono con la muerte de su tío Celerino, quien "le platicaba todo".10 El
tío Celerino existió realmente y, con él, Rulfo recorrió muchos pueblos y escuchó sus
historias, las cuales eran consideradas como fantasiosas.10
El escritor Enrique Vila-Matas, en su libro Bartleby y compañía, describe esta justificación
como una de las más creativas que haya conocido.11 Para el escritor César Leante, Rulfo
quiso evitar la repetición de evocar la crueldad y el dolor expresados en El Llano en
llamas y Pedro Páramo.12 La esencia de la explicación de Leante se asemeja a la
declaración de Rulfo acerca de que, al escribir Pedro Páramo, pensaba frecuentemente en
salir de la ansiedad, porque la escritura llevaba al sufrimiento.13

Guionista de cine[editar]
En 1956, el director de cine Emilio "el Indio" Fernández le solicitó guiones para cine, Rulfo
en colaboración con Juan José Arreola realizó algunos de ellos. Muchos de sus textos han
sido base de producciones cinematográficas. En 1960 se produjo la película El
despojo basada en una idea de Rulfo. En 1964 El gallo de oro dirigida por Roberto
Gavaldóny adaptada al cine por Carlos Fuentes y Gabriel García Márquez.14
La película El Rincón de las Vírgenes dirigida por Alberto Isaac en 1972, es una
adaptación de los cuentos Anacleto Morones y "El día del derrumbe" incluidos en El Llano
en llamas.

Reconocimientos y premios[editar]
Fue un incansable viajero y participó de varios congresos y encuentros internacionales, y
obtuvo varios premios. Recibió el Premio Xavier Villaurrutia en 1956 por su novelaPedro
Páramo.15 Fue ganador del Premio Nacional de Literatura por el gobierno federal de
México en 1970.16 En 1974 viajó a Europa para participar en el Congreso de Estudiantes
de la Universidad de Varsovia. Fue invitado a integrarse a la comitiva presidencial viajando
por Alemania, Checoslovaquia, Austria y Francia. El 9 de julio de 1976, fue elegido
miembro de la Academia Mexicana de la Lengua, tomó posesión de la silla XXXV el 25 de
septiembre de 1980.7 Rulfo ganó el Premio Príncipe de Asturias de España en 1983.

Pedro Páramo[editar]
Artículo principal: Pedro Páramo

Durante mucho tiempo Rulfo tuvo una única novela publicada, Pedro Páramo. Esta obra
tuvo una larga gestación. Rulfo sostuvo que concibió la primera idea de la novela antes de
cumplir los treinta años, y ya en dos cartas dirigidas en 1947 a su novia Clara Aparicio se
refiere a esta obra bajo el nombre de Una estrella junto a la luna, diciendo que le daba
algún trabajo. Posteriormente, también declaró que los cuentos de El Llano en
llamas fueron en parte una manera de aproximarse a su novela. En la última etapa de la
escritura de ésta cambia el nombre en Los murmullos, un título que muestra una aparente
inspiración de la novela Las palmeras salvajes / If I Forget Thee, Jerusalem deWilliam
Faulkner, aunque él siempre reconoció la influencia de la literatura europea y en particular
de la novela Gente independiente, de Halldór Laxness. Gracias a una beca del Centro
Mexicano de Escritores puede concluirla entre 1953 y 1954. En este último año tres
revistas publican adelantos de la novela y en 1955 aparece como libro. La edición fue de
dos mil ejemplares, de los cuales solamente se vendieron la mitad, el resto fueron
obsequiados. La novela fue traducida a varios idiomas: alemán, sueco, inglés, francés,
italiano, polaco, noruego, finlandés.
Algunos críticos advierten de inmediato que se trata de una obra maestra, aunque no
faltaron lectores habituados a los esquemas novelísticos del siglo XIX que se desorientan
frente a su innovadora estructura, reaccionando con desconcierto. Pero los estudios más
recientes al respecto, como La recepción inicial de Pedro Páramo, de Jorge Cepeda, han
puesto en claro, que desde el principio, el reconocimiento a esta obra, dentro y fuera
de México, ha sido ininterrumpido y creciente. Los estudios dedicados a Pedro Páramoson
muy numerosos y se incrementan cada año.
Pedro Páramo fue muy estimada por autores como Jorge Luis Borges, quien dijo:
Pedro Páramo es una de las mejores novelas de las literaturas de lengua hispánica, y aun de toda la
literatura.17

Gabriel García Márquez escribió, al recordar su primera lectura de la novela:


... Álvaro Mutis subió a grandes zancadas los siete pisos de mi casa con un paquete de libros,
separó del montón el más pequeño y corto, y me dijo muerto de risa: ¡Lea esa vaina, carajo, para
que aprenda! Era Pedro Páramo. Aquella noche no pude dormir mientras no terminé la segunda
lectura. Nunca, desde la noche tremenda en que leí laMetamorfosis de Kafka en una lúgubre
pensión de estudiantes de Bogotá —casi diez años atrás— había sufrido una conmoción semejante.

Y Susan Sontag también:


La novela de Rulfo no es sólo una de las obras maestras de la literatura mundial del siglo XX, sino
uno de los libros más influyentes de este mismo siglo.

El gallo de oro[editar]
Artículo principal: El gallo de oro (novela)

El gallo de oro es la segunda novela de Juan Rulfo. A pesar de haber sido escrita entre
1956 y 1958, recién fue publicada en 1980 y en una edición descuidada; la edición de
2010 corrige muchos errores. Existen traducciones al alemán, italiano, francés y
portugués.
Cuatro películas se basaron en esta novela:9

 El gallo de oro (1964), de Roberto Gavaldón.


 El imperio de la fortuna (1986), dirigida por Arturo Ripstein.
 La fórmula secreta (1964), de Rubén Gámez.
 El despojo (1960), cortometraje de Antonio Reynoso.
En Colombia, El gallo de oro fue llevada a la televisión en una adaptación en formato
telenovela por la productora RTI en 1982, protagonizada por Frank Ramírez y Amparo
Grisales.

Obras[editar]
 Un pedazo de noche, único fragmento que quedó de la novela El Hijo del
desaliento
 La vida no es muy seria en sus cosas (cuento) (1945).
 El Llano en llamas, (1953).
 Pedro Páramo, (1955).
 El gallo de oro (1980).
 Talpa (cuento)

Juan Rulfo
 Biografía

 
 Cronología
 
 Su obra
 
 Fotos
 
 Vídeos
A Juan Rulfo le bastaron una novela y un libro de cuentos para ocupar
un lugar de privilegio dentro de las letras hispanoamericanas. Creador
de un universo rural inconfundible, el narrador plasmó en sus
narraciones no sólo las peculiaridades de la idiosincrasia mexicana, sino
también el drama profundo de la condición humana. El llano en
llamas (1953) reúne quince cuentos que reflejan un mundo cerrado y
violento donde el costumbrismo tradicional se desplaza para vincularse
con los mitos más antiguos de Occidente: la búsqueda del padre, la
expulsión del paraíso, la culpa original, la primera pareja, la vida, la
muerte. Pedro Páramo (1955) trata los mismos temas de sus relatos, pero
los traslada al ámbito de la novela rodeándolos de una atmósfera
macabra y poética. Este libro ostenta, además, una prodigiosa
arquitectura formal que fragmenta el carácter lineal del relato.

Juan Rulfo
La mítica ciudad de Comala sirve de escenario para la novela y algunos
cuentos de Juan Rulfo. Su paisaje es siempre idéntico, una inmensa
llanura en la que nunca llueve, valles abrasados, lejanas montañas y
aldeas habitados por gente solitaria. Y no es difícil reconocer en esta
descripción las características de Apulco, pequeño pueblo en los bajos
del Estado de Jalisco donde el 16 de mayo de 1918 nació el niño que,
más tarde, se haría famoso en el mundo de las letras. Su nombre
completo era Juan Nepomuceno Carlos Pérez Rulfo Vizcaíno.

Juan Rulfo dividió su infancia entre su pueblo natal y San Gabriel


(durante algún tiempo llamada Ciudad Venustiano Carranza), donde
realizó sus primeros estudios y pudo contemplar algunos episodios de la
sublevación cristera, violento levantamiento que, al grito de "¡Viva Cristo
Rey!" y ante el cómplice silencio de las autoridades eclesiásticas, se
opuso a las leyes promulgadas por el presidente Calles para prohibir las
manifestaciones públicas del culto y subordinar la Iglesia al Estado.

Rulfo vivió en San Gabriel hasta los diez años, en compañía de su


abuela, para ingresar luego en un orfanato donde permaneció cuatro
años más. Puede afirmarse, sin temor a incurrir en error, que la rebelión
de los cristeros fue determinante en el despertar de su vocación literaria,
pues el sacerdote del pueblo, con el deseo de preservar la biblioteca
parroquial, la confió a la abuela del niño. Rulfo tuvo así a su alcance,
cuando apenas había cumplido los ocho años, todos aquellos libros que
no tardaron en llenar sus ratos de ocio.

A los dieciséis años intentó ingresar en la Universidad de Guadalajara,


pero no pudo hacerlo pues los estudiantes mantuvieron, por aquel
entonces, una interminable huelga que se prolongó a lo largo de año y
medio. En Guadalajara publicó sus primeros textos, que aparecieron en
la revista Pan, dirigida por Juan José Arreola. Poco después se instaló en
México D.F., ciudad que, con algunos intervalos, iba a convertirse en su
lugar de residencia y donde, el 7 de enero de 1986, le sorprendería la
muerte.

Ya en la capital, intentó de nuevo entrar en la universidad, alentado por


su familia a seguir los pasos de su abuelo, pero fracasó en los exámenes
para el ingreso en la Facultad de Derecho y se vio obligado a trabajar.
Entró entonces en la Secretaría de Gobernación como agente de
inmigración; debía localizar a los extranjeros que vivían fuera de la ley.
Desempeñó primero sus funciones en la capital para trabajar luego en
Tampico y Guadalajara y recorrer, más tarde, durante dos o tres años,
extensas zonas del país, entrando así en contacto con el habla popular,
los peculiares dialectos, el comportamiento y el carácter de distintas
regiones y grupos de población.
Juan Rulfo con su hijo Juan Francisco (c. 1953)

Esta vida viajera, este contacto con la múltiple realidad mexicana, fue
fundamental en la elaboración de su obra literaria. Más tarde, y siempre
en la misma Secretaría de Gobernación, fue trasladado al Archivo de
Migración. Rulfo se ganó la vida en trabajos muy diversos: estuvo
empleado en una compañía que fabricaba llantas de hule y también en
algunas empresas privadas, tanto nacionales como extranjeras.
Simultáneamente, dirigió y coordinó diversos trabajos para el
Departamento Editorial del Instituto Nacional Indigenista y fue también
asesor literario del Centro Mexicano de Escritores, institución que, en sus
inicios, le había concedido una beca.

La obra de Juan Rulfo, pese a constar sólo de dos libros, le valió un


general reconocimiento en todo el mundo de habla española,
reconocimiento que se concretó en premios tan importantes como el
Nacional de Letras (1970) y el Príncipe de Asturias de España (1983);
fue traducida a numerosos idiomas. En 1953 apareció el primero de
ellos, El llano en llamas, que incluía diecisiete narraciones (algunas de ellas
situadas en la mítica Comala), que son verdaderas obras maestras de la
producción cuentística.
Cuando, en 1955, aparece Pedro Páramo, la única novela que escribió Juan
Rulfo, el acontecimiento señala el final de un lento proceso que ha
ocupado al escritor durante años y que aglutina toda la riqueza y
diversidad de su formación literaria. Una formación que ha asimilado
deliberadamente las más diversas literaturas extranjeras, desde los
modernos autores escandinavos, como Halldor Laxness y Knut Hamsun,
hasta las producciones rusas o estadounidenses. Basta con acercarse a
la novela, de estructura más poética que lógica, que ha sido tachada de
confusa por algunos críticos, para comprender la paciente laboriosidad
del autor, el minucioso trabajo que su redacción supuso y que le exigió
rehacer numerosos párrafos, desechar páginas y páginas ya escritas.
Desde 1955, año de la aparición de Pedro Páramo, Rulfo anunció, varias
veces y en épocas distintas, que estaba preparando un libro de relatos
de inminente publicación, Días sin floresta, y otra novela titulada La
cordillera, que pretendía ser la historia de una inexistente región de
México desde el siglo XVI hasta nuestros días. Pero el autor no volvió a
publicar libro alguno. En una entrevista de 1976, Rulfo confesó que la
novela proyectada había terminado en la basura. De vez en cuando,
algunos textos suyos aparecían en las páginas de las publicaciones
periódicas dedicadas a la literatura. Así, en septiembre de 1959, la
Revista Mexicana de Literatura publicó con el título de Un pedazo de
noche un fragmento de un relato de tema urbano; mucho más tarde, en
marzo de 1976, la revista ¡Siempre! incluía dos textos inéditos de Rulfo:
una narración, El despojo, y el poema La fórmula secreta.

Rulfo en su estudio (c. 1954)

Pero esta escasa producción literaria ha servido de inspiración y base


para una considerable floración de producciones cinematográficas,
adaptaciones de cuentos y textos de Rulfo que se iniciaron, en 1955, con
la película dirigida por Alfredo B. Crevenna, Talpa, cuyo guión es una
adaptación de Edmundo Báez del cuento homónimo del escritor.
Siguieron El despojo, dirigida por Antonio Reynoso (1960);Paloma herida,
que, con argumento rulfiano, dirigió el mítico realizador mexicano Emilio
Indio Fernández; El gallo de oro (1964), dirigida por Roberto Gavaldón,
cuyo guión sobre una idea original del autor fue elaborado por Carlos
Fuentes y Gabriel García Márquez. En 1972, Alberto Isaac dirigió y
adaptó al cine dos cuentos de El llano en llamas y en 1976 se estrenó La
Media Luna, película dirigida por José Bolaños que supone la segunda
versión cinematográfica de la novela Pedro Páramo.
Fueron tantas las reacciones periodísticas y las notas necrológicas que
se publicaron después de la muerte de Rulfo que con ellas se elaboró un
libro titulado Los murmullos, antología periodística en torno a la muerte de
Juan Rulfo. Póstumamente se recopilaron los artículos que el autor había
publicado en 1981 en la revista Proceso.

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