4.3.

2 Grados

Para asegurar la durabilidad del ladrillo para diversas aplicaciones, los estándares de materiales
generalmente clasifican el ladrillo de construcción en varios grados. Los tres grados de ladrillo de
construcción, SW, MW y NW están cubiertos por ASTM C62. Los dos grados, SW y MW, se
especifican en ASTM C652 para ladrillo hueco. El ladrillo SW exhibe un alto grado de resistencia a
la acción del congelamiento, incluso cuando la unidad está impregnada de agua. El ladrillo MW se
usa donde se requiere un grado moderado de resistencia a la intemperie y donde es poco
probable que la unidad esté expuesta a la acción del congelamiento cuando está impregnada de
agua. Por lo general, el uso de ladrillos NW está restringido a aplicaciones interiores donde la
exposición al clima no es un problema. Para los Estados Unidos, los estándares de ladrillos
contienen un mapa de índice de meteorización (wathering?) y definen un índice de meteorización,
que para cualquier localidad es el producto del número promedio anual de días de ciclo de
congelación y la precipitación de invierno promedio en pulgadas. El efecto de la intemperie en la
durabilidad y las calidades de los ladrillos está relacionado con la indización de la intemperie.

Los grados del ladrillo se establecen en función de la resistencia a la compresión, las características
de absorción y el coeficiente de saturación. La prueba de congelación y descongelación es una
opción para una mayor garantía de durabilidad o como una alternativa donde el ladrillo no cumple
con los requisitos mínimos. Este tema se cubre con más detalle en la sec. 4.3.7.

Las definiciones de durabilidad del ladrillo en otros países pueden verse afectadas por factores
distintos a la acción de las heladas (congelamiento). Por ejemplo, la práctica australiana define
cinco clasificaciones de exposición que las unidades de mampostería y el mortero, tanto por
separado como en su interacción entre sí, deben poder cumplir. Las clasificaciones de exposición
en las zonas climáticas áridas, moderadas y tropicales de Australia enfatizan la exposición a
atmósferas industriales o zonas de rociado costero de agua salada.

4.3.3 Tamaños y formas.

Los ladrillos están disponibles en muchos tamaños, generalmente basados en un módulo de 4 x 4

pulg. (100 x 100 mm) que forma parte de la cuadrícula de planificación internacionalmente
aceptada de 24 x 24 pulg. (600 x 600 mm). Algunos ejemplos de tipo de ladrillos se muestran en la
Fig. 4.12. Como se indicó, como estimación para las tolerancias de fabricación, las dimensiones
especificadas representan las dimensiones reales que difieren de las dimensiones nominales por el
grosor de una unión de mortero estándar de 3/8 pulg. (10 mm). Las dimensiones se denominan
dimensiones modulares si las unidades, incluidas las uniones de mortero, se ajustan a la cuadrícula
de planificación, como se ilustra en la Fig. 4.13. Por ejemplo, para el ladrillo modular estándar, tres
cursos generalmente dan como resultado una altura de 200 mm (8 pulg.), Y debido a que las
unidades de bloques de concreto cumplen con la misma cuadrícula de planificación, es fácil alinear
los cursos cuando se construye una pared de múltiples wythe. La cuadrícula de planificación
modular facilita la interacción con ventanas y puertas y muchos otros requisitos de construcción.
El ladrillo hueco, según lo definido por ASTM C652, son unidades cuya área de sección transversal
neta en cada plano paralelo a la superficie de apoyo es entre 40 y 75% de su área de sección
transversal bruta medida en el mismo plano. El efecto de la reducción en el área de apoyo es lo
suficientemente significativo como para que las propiedades del área de la sección transversal
neta se utilicen en los cálculos de tensión. Como se indica en la figura 4.12, los patrones de
extracción de núcleos varían ampliamente.

El desarrollo de unidades de mayor tamaño que contienen un mayor porcentaje de huecos ha

llevado a una mayor economía en la construcción de mampostería en las últimas décadas.

Las dimensiones de cara más grandes requieren menos unidades para lograr un área de pared
dada, sin embargo, las unidades no son más pesadas debido al mayor volumen de células. La
presencia de dos o tres celdas grandes permite una fácil colocación de acero de refuerzo y grout.
Figura 4.14(a) muestra una unidad hueca tapica. Las unidades de baldosas de arcilla se fabrican
con los mismos materiales y mediante los mismos procesos de fabricación que el ladrillo de arcilla,
pero difieren de las unidades de ladrillos huecos en que se permiten bandas más delgadas y
cubiertas de cara y resistencias de compresión más bajas. Figura 4.14 (b) muestra una
configuración de celda de ejemplo para baldosas de arcilla estructural portadoras de carga. Las
especificaciones estándar para las losetas de carga están cubiertas por ASTM C34. Las
especificaciones para baldosas sin carga y unidades de cerámica glaseadas están cubiertas,
respectivamente, en ASTM C56 y ASTM C126.

Las unidades de arcilla cocida varían en tamaño como efecto combinado de la contracción inicial
debido al secado y la contracción adicional durante el proceso de cocción, con un total que varía
entre aproximadamente 5 y 15%. Por lo tanto, las tolerancias dimensionales y la estimación para la
deformación de las unidades de arcilla cocida se especifican en los estándares de acuerdo con
diferentes clasificaciones en términos de consistencia y perfección mecánica requerida. Rangos de
cantidades de astillas (restos) y variaciones en la textura y el color también se incluyen en las
especificaciones para estas clasificaciones.

4.3.4 Fuerza compresiva

Las unidades de arcilla modernas a menudo tienen resistencias a la compresión mucho más altas
que las requeridas para satisfacer las especificaciones requeridas del producto y generalmente
exceden en gran medida los requisitos para las resistencias de diseño de los miembros. Sin
embargo, debido a que los registros de rendimiento generalmente muestran que la durabilidad
está vinculada a la resistencia a la compresión de la unidad, esta última propiedad es muy
importante desde el punto de vista del servicio como también desde el punto de vista de la
resistencia general.

Para ladrillos sólidos y huecos, las normas ASTM requieren las resistencias a la compresión
mínimas que se muestran en la Tabla 4.1 para diferentes grados. Los requisitos de resistencia para
la loseta de pared de carga de arcilla estructural se presentan en la Tabla 4.2. Se deben analizar
cinco muestras de medio ladrillo de manera plana para obtener una medida razonable de la
resistencia promedio y también para proporcionar una indicación de variabilidad. La Figura 4.15
muestra un medio ladrillo tapado listo para la prueba y la falla de compresión después de la
prueba. El modo de falla típico implica la división lateral del ladrillo en una serie de "columnas"
que a su vez se aplastan.

Las pruebas de núcleos perforados a partir de unidades de arcilla en las tres direcciones
ortogonales dieron como resultado diferentes fuerzas de compresión. Esto indica anisotropía
material, que puede atribuirse a disparos no uniformes. Como se discutió en la Sec. 4.2.2, la
restricción de la platina, la influencia de los materiales de recubrimiento y la relación de aspecto
de la unidad pueden afectar la medida de la fuerza de compresión. Lo importante es darse cuenta
de que esta medida de resistencia "estándar" es útil para garantizar la conformidad con las
propiedades que tienen previamente establecido sobre esta base.

La medida de la fuerza de compresión del ladrillo de arcilla puede variar de 3000 a 21,000 psi (20 a
145 MPa), dependiendo de factores tales como los componentes de la arcilla plástica, las
condiciones de cocción, el patrón de extracción de núcleos y el tamaño y la forma de las unidades.
En América del Norte, la mayoría de las unidades están en el rango de 6000-10,000 psi (40-70
MPa). Las pruebas de Hilsdorf indican mayores módulos de elasticidad con mayores resistencias
de ladrillo, que, como se discute en el capítulo. 5, puede afectar el mecanismo de falla para
ensamblajes de mampostería de arcilla bajo carga de compresión.

4.3.5 Fuerzas de tensión

Extensas pruebas durante muchos años han demostrado que las fuerzas de tensión, medida por el
módulo de ruptura (Ver ASTM C67) o la tensión de división (ASTM C1006.), Aumenta con la
resistencia a la compresión del ladrillo, pero generalmente es una fracción menor de la resistencia
a la compresión a mayores fortalezas. Según la revisión de Sahlin de los datos de la prueba, la
relación entre el módulo de ruptura y la resistencia a la compresión varía entre aproximadamente
0,10 y 0,32. La figura 4.16 contiene datos para la relación de resistencia a la tracción a la
resistencia a la compresión para la tensión determinada por flexión (módulo de ruptura) o tensión
de división. Como se puede ver, los valores del módulo de ruptura son 20 a 50% más altos que los
valores obtenidos de las pruebas de tensión de división.

4.3.6 Propiedades de absorción

Medida inicial de absorción. La absorción de humedad por acción capilar en la unidad produce un
efecto de succión que extrae el agua del mortero y el grout. Como se describe en la Sec. 4.2.2, esta
característica se define por la tasa inicial de absorción (IRA). Una IRA demasiado alta o demasiado
baja puede ser perjudicial para lograr una buena adherencia debido a que no se logra que el
mortero entre en contacto lo suficientemente íntimo en un extremo en comparación con la
formación de una capa seca y débil de mortero en la superficie del ladrillo en el otro extremo. La
figura 4.17 ilustra la succión que tiene lugar en la construcción de mampostería de arcilla. Los
valores de IRA generalmente oscilan entre 5 y 40 g/min./30 in2. (0.25 a 2.05 kg/min./m2).

Si el valor de IRA es bajo, digamos, menor que aproximadamente 5 g/min./30 in.2 (0.25
kg/min./m2), se habla de unidades de baja absorción o baja succión. Dichas unidades no absorben
mucha agua del mortero y pueden tender a flotar sobre el mortero, particularmente en climas
fríos o si el ladrillo está húmedo. Esto puede producir una mala unión inicial y final, no solo
afectando la resistencia a la flexión de la mampostería, sino también su estanqueidad y, por lo
tanto, su durabilidad. La construcción con unidades de baja succión generalmente requiere un
ajuste en el mortero para lograr una menor retención de agua (ver Sección 4.7.3), lo que
generalmente resulta en una consistencia de mortero más seca y dura.

Si el valor de IRA es alto, digamos, en exceso de 30 g/min./30 in.2 (1.5 kg/min./m2), la unidad es
considerada altamente absorbible. Esto puede dar lugar a una mala adherencia si se produce una
capa delgada y seca de mortero al lado de la unidad cuando se extrae demasiada humedad del
mortero. Además, el mortero puede endurecerse tan rápidamente que hay dificultades con el
ajuste adecuado de las unidades. Para superar este problema en la práctica, las unidades con
valores de IRA superiores a aproximadamente 30-40 g/min./30 in.2 (1.5-2.05 kg/min./m2)
típicamente se humedecen antes de la colocación. Esto disminuirá su absorción de agua durante la
construcción, pero tiene la desventaja de que la compatibilidad con el mortero puede ser bastante
variable debido a los grados variables de humedad. Por lo tanto, las unidades mojadas deben estar
secas cuando se colocan. Los ladrillos mojados también pueden ser difíciles para las manos del
albañil.

Las unidades de mampostería que están calientes debido a la exposición a la radiación solar
absorberán el agua mucho más rápidamente de lo que indica la prueba IRA. En climas cálidos,
puede ser necesario mantener tales unidades a la sombra o mojarse.

El Código Británico relaciona las fuerzas de unión a la tracción con características de absorción
específicas, pero para amplios rangos de ladrillo y mortero, no parecen existir relaciones únicas
entre la unión de IRA y mortero. Sin embargo, las pruebas han indicado que los valores de IRA
entre 5 y 30 g/min./30 in.2 (0.25 a 1.5 kg/min./m2) generalmente producen buena resistencia de
unión con mortero compatible. Afortunadamente, muchas unidades modernas de ladrillo y
azulejos exhiben valores de IRA en este rango.

Absorción del agua y proporción C/B. Dos pruebas de inmersión, a saber, las pruebas de 5 y 24
horas son de interés. La prueba de 24 horas implica determinar la absorción de una unidad cuando
se sumerge en agua a temperatura ambiente, denominada absorción de agua fría, C. En la prueba
de absorción de agua de 5 h, la misma muestra, ahora parcialmente saturada de la prueba de
inmersión en agua fría anterior, se sumerge en agua hirviendo durante 5 h y se determina su
absorción de agua hirviendo (o B). La primera prueba mide la humedad de absorción
relativamente libre y la segunda proporciona una indicación del espacio de poro adicional
disponible para el agua en un entorno de humedad más extremo que implica una temperatura
más alta y algo de presión. La relación de los dos valores (C + B) se conoce como coeficiente de
saturación o relación C / B. La relación C / B es una medida del espacio de poro que se llena
fácilmente con respecto al total poroso y es una indicación del volumen relativo de espacio de
poro abierto presente en la unidad después de que haya tenido lugar la absorción libre. La
presencia de un volumen adecuado de espacio de poro abierto es importante durante la acción de
congelación-descongelación para acomodar el cambio de volumen en el agua a medida que se
congela. De lo contrario, la unidad puede dañarse por la acumulación de presiones internas y
eventualmente desintegrarse. Las relaciones C / B más bajas, por lo tanto, se especifican para una
mayor durabilidad. Además, para ayudar a asegurar una durabilidad satisfactoria, existen límites
en el espacio total de poros, como lo indica la absorción de ebullición de 5 h. Los requisitos de
ASTM para la absorción de agua y el coeficiente de saturación se dan en las Tablas 4.1 y 4.2.

4.3.7 Durabilidad

Los requisitos de resistencia y absorción de ASTM para ladrillo (ASTM C624) y loseta (ASTM C344)
se reproducen en las Tablas 4.1 y 4.2. Los requisitos de resistencia se discuten en la Sec. 4.3.4 De
particular interés son los coeficientes de saturación o los límites de la relación C / B. El ladrillo más
duradero, grado SW, no puede exceder 0.78 basado en el promedio de cinco pruebas. Para
ladrillos MW, el requisito C / B es 0.88. El límite del coeficiente de saturación, de hecho, se puede
renunciar si se cumple alguna otra condición, como unidades que exhiben una alta resistencia a la
compresión, por ejemplo, superior a 8000 psi (56 MPa); absorción de agua fría relativamente baja
las 24 h, digamos, menos del 8%; o desempeño satisfactorio en una prueba estándar de
congelación y descongelación que involucra quizás 50 ciclos

La figura 4.18 ilustra un caso de astillamiento de ladrillos debido a la acción de congelación-

descongelación en una región de intemperie severa. Aunque el ladrillo se especificó
correctamente como grado SW y cumplió con los requisitos físicos enumerados en la Tabla 4.1,
obviamente no es lo suficientemente duradero. Tal caso es relativamente raro en la práctica, pero
a veces ocurre. ¿Cuáles son las razones de la falta de rendimiento? Los expertos en durabilidad de
ladrillos de hoy en día generalmente están de acuerdo en que los requisitos de ASTM y
especialmente el coeficiente de saturación son semiempíricos y, como tales, no pueden ser las
únicas medidas de durabilidad del ladrillo de arcilla para la variedad de ladrillos encontrados. La
investigación indica que, además de la porosidad total de un ladrillo, la distribución del tamaño de
poro puede ser importante para determinar la posible resistencia del ladrillo al congelamiento. Los
estudios citados en la referencia muestran una buena resistencia a la escarcha cuando un gran
porcentaje de los poros supera el tamaño de 3 um. Parece, por lo tanto, que el enfoque del
coeficiente de saturación, que se basa únicamente en la porosidad, no es completamente
satisfactorio y que los estándares futuros también pueden incluir pruebas de tamaño de poro. Una
segunda razón potencial para la falta de rendimiento puede estar en el hecho de que el ladrillo
puede estar expuesto a cientos de ciclos de congelación y descongelación durante varios años,
mientras que las pruebas de laboratorio típicas terminan después de solo 50 ciclos de congelación
y descongelación. Cuando el ladrillo estará expuesto a condiciones climáticas particularmente
severas, también es una buena práctica elegir un ladrillo que haya funcionado bien en condiciones
ambientales similares. Detallar para minimizar la frecuencia de saturación es también un enfoque
efectivo para mejorar la durabilidad.