Está en la página 1de 4

Patricio Borrás

L.U.: 394169220

Parcial domiciliario Clínica de niños

Caso Martina
El caso de Martina trata sobre una viñeta clínica de Marisa Rodulfo desarrollada
en el texto “El trabajo psicoanalítico con niños afectados por trastornos del
desarrollo”.

Cuando comienza el tratamiento Martina tenía 18 meses y, según comenta


la autora, “Desde la primera sesión Martina gritaba, su cuerpo estaba en un estado
de constante tensión, no tenía locomoción y tampoco cambiaba de posición, no
asía objetos y sus manos estaban hipotónicas”. Marisa nos cuenta que el
tratamiento comienza tarde, ya que hubiese sido preferible poder trabajar durante
el primer trimestre de vida de Martina e intervenir más profundamente en la
relación madre hija que se estaba constituyendo. Esto se debe a que la autora
piensa como necesario, en un cuadro como el que se le presenta, trabajar el
proceso de renarcisización en la madre, ya que nota en ella a una figura “… no
sostenida que tiende a poner distancia en lo que no puede sostener“ dejando
como consecuencia a una bebé aislada. Avanzado el tratamiento se descubre
también que Martina tiene el “síndrome de X frágil”.

Cuando se trabaja la clínica con niños, y sobre todo con aquellos en edades
tempranas, la primera de las series suplementarias conceptualizadas por Ricardo
Rodulfo, toma una relevancia fundamental. Dicha conceptualización, lo
constitucional, está basada en dos dimensiones: una referente a lo genético y
congénito y la otra al mito familiar. Esta última noción remite al espacio simbólico
que preexiste al niño por venir y en el que el mismo advendrá. Puede concebirse
como un “archivo de significantes”, siempre dinámicos, que pueden manifestarse
tanto en forma narrada y elaborada, propias del proceso secundario, como
también más ligados a procesos inconscientes, con incoherencias y zonas de
olvido. Será el medio a partir del cual el niño metabolizará sus experiencias y dará
una respuesta propiamente subjetiva. “Estamos habitados por textos y escrituras”
sobre las cuales el niño transcribe, espontáneamente, su propia existencia como
una nueva narración. Dicho medio mítico, o mito familiar, es un relato al que se
accede de a trozos y que se reconstruye a lo largo de todo un tratamiento. Sin
embargo, como señala Ricardo Rodulfo, “…es inconducente pronunciarse acerca
de la necesidad o no de comenzar un tratamiento sin tener una noción aproximada
de los rasgos principales de ese mito familiar”.

A partir de estas coordenadas podemos comenzar a pensar algunas cosas


en lo que concierne al tratamiento de Martina. Marisa nos cuenta que el embarazo
de Martina trascurrió con dificultades, que el parto fue largo y trabajoso y que el
estudio de Apgar que se le hizo al nacer dio bajo. También comenta que la madre
de Martina viene de una relación muy complicada y de extrema dependencia con
su propia madre. Estos datos, en apariencia aislados, confluyen en las
dimensiones propias de la primer serie suplementaria. Lo constitucional en
Martina, entonces, tendrá que ver tanto con su carga congénita, y los
determinantes ambientales que se pueden apreciar en el relato del trabajo de
parto, como en la historia de su madre, que la precede, y que será una figura clave
en su advenimiento como sujeto. La autora comenta que durante el tratamiento
también se trabajó sobre la reconstrucción del mito familiar a través del pade, en el
que apareció el peso de la culpa por portar la patología de la niña, que le impedía
“no solo conectarse con ella sino también con su propio sufrimiento”.

Desde las primera sesiones Marisa nota que Martina profiería un grito
desesperado que “traspasaba todo el consultorio”; que su cuerpo estaba en un
estado de tensión permanente y que cuando la madre se le acercaba ella tenía el
reflejo contrario al del abrazo (arqueaba su cuerpo hacia atrás). La madre, al
sentirse impotentizada, había comenzado a delegar la crianza de Martina en su
propia madre. A respecto, Marisa comenta que Martina es “una beba que
evidencia una marcada dificultad para que el adulto se relacione con ella, además,
por presentar fallas en la propia capacidad para la interrelación”.

Para Jesica Benjamin el mutuo reconocimiento entre la madre, como


primera figura de apego, y el niño, son experiencias esenciales para el desarrollo
del mismo. Dicho proceso implica que es tan importante para el bebé ser
reconocido por su madre, como que la madre se sienta reconocida por él, y
presenta así una paradoja necesaria, la de Alteridad-unidad: Al reconocer al otro
como alteridad con derecho propio, se habilita su reconocimiento como la
respuesta del otro que hace significativos los sentimientos del sí mismo. Este
doble reconocimiento posibilitará la interrelación niño-madre como dos sujetos
diferentes, permitiendo que se desarrolle la mutualidad afectiva, la influencia
mutua y los estados de ánimo compartidos. “Tú me perteneces pero ya no eres
parte mía” gráfica esa separación entre madre e hijo, que necesita de un tiempo
lógico anterior, la fusión entre ellos. “Es que para poder separarse primero se debe
estar fusionado” dice Marisa Rodulfo.

Siguiendo estos lineamientos es que podemos comprender las primeras


intervenciones que Marisa realiza en el tratamiento. Las mismas tienden a la
renarcisación de la madre para lograr el ejercicio de la función materna y a partir
de esto poder generar una fusión lograda de la que previamente se carecía. La
misma permitirá la separación, como un segundo momento, como el proceso que
implica el mutuo reconocimiento entre Martina y su madre y habilita ese espacio
en común necesario para lograr la interacción entre ellas.
Bibliografía Utilizada
Rodulfo, R. (2008). Cap. 1: Serie y suplemento. En R. Rodulfo, El psicoanálisis de
nuevo (pp. 21-36). Buenos Aires: Eudeba.

Benjamin, J.D. (1996). Cap. 1: El primer vínculo. En J.D. Benjamin, Los lazos de
amor (pp. 23-69). Buenos Aires: Paidós.

Punta Rodulfo, M. Segunda parte. Cap. 2: El trabajo actual en los trastornos del
desarrollo (Caso Martina). En Bocetos Psicopatológicos. El Psicoanálisis y los
debates actuales en psicopatología (pp. 51-74) Buenos Aire: Paidós.

Rodulfo, R. (1989). Cap. 1: La pregunta por el niño y la clínica psicoanalítica. Cap.


2: ¿Dónde viven los niños? En R. Rodulfo, El Niño y el Significante (pp. 17-34; 35-
54). Buenos Aires: Paidós.

También podría gustarte