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REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA

UNIVERSIDAD BICENTENARIA DE ARAGUA


FACULTAS DE CIENCIAS JURÍDICAS Y POLÍTICAS
VICERRECTORADO ACADÉMICO
ESCUELA DE DERECHO

PRACTICA FORENSE III


ENSAYO

Autor: YENNISER ECHEVERRIA


Facilitador: JOSE C. HERNANDEZ C.I. V-17.471.953
Sección 1

Julio 2020
En Venezuela el Control Constitucional se introduce de una manera amplia desde el comienzo

de nuestra vida republicana, específicamente desde el año 1858, coexisten los sistemas de control

Difuso y Concentrado.

En Venezuela desde el siglo XIX coexisten los sistemas de control concentrado y difuso de la

constitucionalidad, por supuesto con ciertas variaciones en su consagración sobre todo en lo

referido al control concentrado, ya que hasta la Constitución de 1961 se encomendaba a la Corte

Suprema de Justicia en Sala Plena y es a partir de 1999 cuando se le confiere dicha competencia

a la Sala Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia

La Constitución de la República Bolivariana de Venezuela (CRBV) (1999), no duplica la

competencia interpretativa de la Constitución, sino que consagra dos clases de interpretación

constitucional, a saber, la interpretación individualizada que se da en la sentencia como norma

individualizada (control difuso), y la interpretación general o abstracta prescrita por el artículo

335 (control concentrado), que es una verdadera jurisdatio, en la medida en que declara, erga

omnes y pro futuro (ex nunc ). Sistema de Control Preceptos Principio de Supremacía Sistema

Constitucional Principio de Legalidad Control Difuso y Concentrado Art. 7 CRBV (1999) Art.

131 CRBV (1999) Art. 137 CRBV (1999) Art. 334 y 335 CRBV (1999).

Noción del control constitucional

El control constitucional es absolutamente necesario para que se cumpla el principio de

supremacía constitucional. Para que su vigencia quede garantizada es necesario que exista un

órgano facultado a realizarlo mediante procedimientos que confronten normas, actos,

disposiciones, con la constitución. Ante la presencia de conflictos entre ellos que vulneren la

constitución podrán ser declarados inconstitucionales. Notamos claramente la interdependencia


control-supremacía. El mencionado principio concluye que las normas y los actos infractorios de

la constitución son inconstitucionales y es por eso que la doctrina de la supremacía forja de

inmediato el control constitucional como mecanismo que confrontando normas y actos con la

constitución, verifica si están o no de acuerdo con ella y en caso de no estarlo los declara

inconstitucionales, poco vale el principio si no se planifica una magistratura constitucional que

opere como órgano de control y procesos constitucionales para que se haga efectiva la

superioridad de la constitución que haya sido infringida por normas y actos de poderes

constituidos.

El control de constitucionalidad trata de los mecanismos de revisión de la adecuación de las

leyes y de los actos de Estado o de los particulares a la supremacía de nuestra ley fundamental.

Existen diversas clasificaciones atendiendo a diversos criterios. La rama del Derecho

especializada en este estudio es el Derecho Procesal Constitucional.

Definición de Control constitucional

El control constitucional es un mecanismo que consiste en verificar si las leyes contradicen a

la Constitución por el fondo o por la forma. El control de la legalidad tiene la misma finalidad

respecto a las normas de inferior jerarquía. Además, el control de la constitucionalidad y de la

legalidad de las normas jurídicas comprende también la protección de los derechos

fundamentales de la persona consagrados en la Constitución.

Órgano que ejerce el Control Constitucional en Venezuela

La Constitución de la República Bolivariana de Venezuela establece en el artículo 334 y 335,

el rol de la jurisdicción constitucional, el cual es, garantizar la supremacía y efectividad de las

normas y principios constitucionales.


Control Difuso y Concentrado Art. 334 y 335 CRBV (1999)

Artículo 334 de la CRBV: “Todos los jueces o juezas de la República, en el ámbito

de sus competencias y conforme a lo previsto en esta Constitución y en la ley, están en la

obligación de asegurar la integridad de la Constitución. En caso de incompatibilidad

entre esta Constitución y una ley u otra norma jurídica, se aplicarán las disposiciones

constitucionales, correspondiendo a los tribunales en cualquier causa, aún de oficio,

decidir lo conducente. Corresponde exclusivamente a la Sala Constitucional

del Tribunal Supremo de Justicia  como jurisdicción constitucional, declarar la nulidad

de las leyes y demás actos de los órganos que ejercen el Poder Público dictados en

ejecución directa e inmediata de la Constitución o que tengan rango de ley”.

En el artículo 334 podemos observar que este establece que todos los jueces o juezas de la

República están obligados a asegurar la integridad de esta, en caso de incompatibilidad o

contradicción entre la constitución y alguna ley u otra norma jurídica se aplicará siempre la

Constitución. Las leyes o demás actos de los órganos del Poder Público podrán ser anulados por

la Sala Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia.

El Control Difuso, está consagrado en nuestra Constitución de la República Bolivariana de

Venezuela (CRBV), en el artículo 334, además en el Artículo 20 del Código de Procedimiento

Civil vigente de 1987 y el Artículo 19 del Código Orgánico Procesal Penal prevén esta forma de

ejercicio del control constitucional, y solamente el único llamado aplicar el control difuso es el

Órgano Jurisdiccional, es decir faculta al juez ordinario para desaplicar una norma jurídica
contraria a la Constitución, los efectos de la desaplicación, sólo son vinculantes para el caso

concreto y no erga omnes.

Función en el Ordenamiento Jurídico Venezolano

Esta forma de control exige a los Tribunales de Justicia la aplicación de la norma

constitucional con un sentido preferente y no la ley ordinaria, cuando exista una colisión con la

disposición constitucional, tal como reza en el artículo 334 del texto constitucional.

La Sala Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia, recientemente dictaminó que el

órgano jurisdiccional es el único llamado a aplicar el control difuso de la Carta Magna, es decir,

sobreponer los principios del texto fundamental a cualquier otra disposición legal.

La Carta Constitucional de 1999 le confiere rango constitucional al control difuso, el cual

puede ser ejercido de oficio por los Tribunales o a instancia de parte, a desaplicar y dejar sin

efecto legal una norma en el caso concreto, tutelando así la disposición constitucional que

resultaba vulnerada. De igual forma, debe destacarse que esta desaplicación ocurre respecto a la

causa en particular o caso concreto que esté conociendo el sentenciador, mas no así con efectos

generales, por cuanto ello entrañaría otro tipo de pronunciamiento que escaparía del ámbito

competencial de dicho juzgador.

De esta forma nuestra Carta Magna faculta al juez ordinario para desaplicar una norma

jurídica contraria a la Constitución sin necesidad de recurrir ante la Sala Constitucional para

promover una cuestión de inconstitucionalidad, como sucede en otros ordenamientos jurídicos.

La nota resaltante de esta facultad es que los efectos de la desaplicación de la norma que

contraría a la Constitución, sólo son vinculantes para el caso concreto y no erga omnes.
Artículo 335 de la CRBV: “El Tribunal Supremo de Justicia garantizará la

supremacía y efectividad de las normas y principios constitucionales; será el máximo y

último intérprete de la Constitución y velará por su uniforme interpretación y aplicación.

Las interpretaciones que establezca la Sala Constitucional sobre el contenido o alcance

de las normas y principios constitucionales son vinculantes para las otras Salas del

Tribunal Supremo de Justicia y demás tribunales de la República”.

El Segundo Control de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela (CRBV),

es a través del Control Concentrado. Estipulado en el artículo 335 eiusdem, este determina que la

Sala Constitucional es el máximo y último intérprete, para velar por su uniforme interpretación y

aplicación para garantizar la supremacía y efectividad de las normas, con carácter vinculante,

respecto de las otras Salas del Tribunal Supremo de Justicia y demás tribunales de la República

(jurisprudencia obligatoria). Como puede observar, la Constitución de la República Bolivariana

de Venezuela no duplica la competencia interpretativa de la Constitución, sino que consagra dos

clases de interpretación constitucional, a saber, la interpretación individualizada que se da en la

sentencia como norma individualizada (control difuso), y la interpretación general o abstracta

prescrita por el artículo 335 (control concentrado), que es una verdadera jurisdatio, en la medida

en que declara, erga omnes y pro futuro (ex nunc ).

Este control se manifiesta en la facultad asignada a un órgano especial, bien dependiente del

órgano jurisdiccional o bien autónomo, para anular cualquier disposición o acto emanado de los

poderes públicos que contraríen algún dispositivo constitucional, produciendo efectos ex nunc y

erga omnes.
Nuestra Constitución de 1999 estatuye el control concentrado de la constitucionalidad como

atribución propia del Tribunal Supremo de Justicia tal como se desprende de la letra del Artículo

266 numeral 1: «Son atribuciones del Tribunal Supremo de Justicia:

1. Ejercer la Jurisdicción Constitucional conforme al Título VIII de esta Constitución»...

Como se puede observar el texto Constitucional le confiere el ejercicio de la Jurisdicción

Constitucional al Tribunal Supremo de Justicia y dentro de este órgano se crea la Sala

Constitucional (Art.262 C.R.B.V) como ente especializado y que prácticamente monopoliza el

ejercicio de la aludida jurisdicción. Asimismo, el Artículo 334 in fine reza:

Corresponde exclusivamente a la Sala Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia como

jurisdicción constitucional, declarar la nulidad de las leyes y demás actos de los órganos que

ejercen el poder público dictados en ejecución directa e inmediata de la Constitución o que

tengan rango de ley.

En efecto la Constitución delimita el ámbito de competencias de la jurisdicción

constitucional para declarar la inconstitucionalidad de las leyes u otros actos dictados en

ejecución directa e inmediata de la Constitución por los órganos que ejercen el Poder Público,

más no la nulidad de actos administrativos o que tengan rango sublegal. Así pues los actos

administrativos como normas de rango sublegal no son controlados por la Sala Constitucional, su

constitucionalidad será objeto de revisión y control de la Sala Político-Administrativa del

Tribunal Supremo de Justicia como lo apreciamos en el contenido del Artículo 266 numeral 5:

«Son atribuciones del Tribunal Supremo de Justicia.


Artículo 336 Son atribuciones de la Sala Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia:

1. Declarar la nulidad total o parcial de las leyes nacionales y demás actos con rango de ley de

la Asamblea Nacional, que colidan con esta Constitución.

2. Declarar la nulidad total o parcial de las Constituciones y leyes estadales, de las ordenanzas

municipales y demás actos de los cuerpos deliberantes de los Estados y Municipios dictados en

ejecución directa e inmediata de esta Constitución y que colidan con ella.

3. Declarar la nulidad total o parcial de los actos con rango de ley dictados por el Ejecutivo

Nacional, que colidan con esta Constitución.

4. Declarar la nulidad total o parcial de los actos en ejecución directa e inmediata de esta

Constitución, dictados por cualquier otro órgano estatal en ejercicio del Poder Público, cuando

colidan con ésta.

5. Verificar, a solicitud del Presidente o Presidenta de la República o de la Asamblea Nacional,

la conformidad con esta Constitución de los tratados internacionales suscritos por la República,

antes de su ratificación.

6. Revisar en todo caso, aun de oficio, la constitucionalidad de los decretos que declaren

estados de excepción dictados por el Presidente o Presidenta de la República.

7. Declarar la inconstitucionalidad de las omisiones del poder legislativo municipal, estadal o

nacional cuando haya dejado de dictar las normas o medidas indispensables para garantizar el

cumplimiento de esta Constitución, o las haya dictado en forma incompleta; y establecer el

plazo y, de ser necesario, los lineamientos de su corrección.

8. Resolver las colisiones que existan entre diversas disposiciones legales y declarar cuál debe

prevalecer.
9. Dirimir las controversias constitucionales que se susciten entre cualesquiera de los órganos

del Poder Público.

10. Revisar las sentencias definitivamente firmes de amparo constitucional y de control de

constitucionalidad de leyes o normas jurídicas dictadas por los tribunales de la República, en

los términos establecidos por la ley orgánica respectiva.

11. Las demás que establezcan esta Constitución y la ley.

ARTICULO 336 CRBV: Entre las atribuciones de la sala constitucional del TSJ están: La

nulidad parcial o total de las leyes nacionales y demás normas que no concuerden con la

constitución así como también las constituciones y leyes estatales y actos de estados y

municipios; del mismo modo los rangos de ley del ejecutivo; los actos de cualquier poder

público de ejecución directa e inmediata. Así mismo la verificación de los tratados

internacionales del país; Revisar los tratados de estados de excepción; Declarar

inconstitucionalidad de los legisladores en nación, estado y municipio; colisionar las

disposiciones que prevalecerán; dirimir las controversias del poder publico; Revisar los amparos

constitucionales, control de leyes y normas establecidas en ley orgánica, y las demás de

constitución y ley.

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