REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA

INSTITUTO BÍBLICO DE PORTUGUESA

DISTRITO LLANOS OCCIDENTALES
ASAMBLEAS DE DIOS DE VENEZUELA
Inscrita ante oficina del primer circuito del registro del Municipio Libertador, Distrito Federal Bajo N° 58,
Folio 122, Protocolo Primero, Tomo 8 de fecha 22 de Noviembre de 1955
Rif: J-00171452-9

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Autor:
Xiomara Parra

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 PLAN DE CURSO

1. OBJETIVOS
1.1. CONOCIMIENTOS
1.1.1. Saber lo que es el plan de Dios en el evangelismo y lo que corresponde al discípulo
de Cristo hacer.
1.1.2. Saber respuestas bíblicas para problemas comunes de la gente.
1.1.3. Aprender de memoria versículos bíblicos claves para resolver problemas comunes en
cuanto a la salvación, sanidad, bautismo en el Espíritu Santo y otros de experiencia
cristiana.
1.1.4. Familiarizarse con técnicas para ganar niños y jóvenes.
1.1.5. Familiarizarse con las técnicas contemporáneas y eficaces de evangelismo.
1.2. ACTITUDES
1.2.1. Sentir la responsabilidad y la urgencia de ganar almas sin esperanza para Cristo frente
a lo inminente del retorno de Jesucristo.
1.2.2. Ver la seria responsabilidad de poner mucho cuidado al discipulado y a la conversión
de almas.
1.2.3. Apreciar el evangelismo personal y la mentoría de nuevos creyentes.
1.2.4. Entender la importancia de ganar niños y jóvenes.
1.3. HABILIDADES
1.3.1. Aprender a ser intercesor por los perdidos.
1.3.2. Analizar y evaluar modelos diferentes de evangelismo para poder escoger e
implementar los mejores en su ministerio.
1.3.3. Adiestrar en ayudar a la gente a aceptar a Cristo por medio de encuentros en
diferentes lugares.
1.3.4. Ganar H en trabajar con la niñez y la juventud.

PLAN DE EVALUACIÓN

1. Asistencia 10%
2. Ética y carácter 10%
3. Aprendizaje de memoria: Ro. 3:23; Ro.5:8; 1 Ped. 3:18; Ef. 2:8-9; Jn. 1:12. 10%
4. Actividad Evangelística 40%
Evangelismo – Culto Evangelístico
5. Exposición 20%
 Discipulado
 Conservación de almas
6. Actividades en clases 10%

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 CAPÍTULO I

EVANGELISMO

Evangelizar es compartir el mensaje de salvación de persona a persona en el amor de Dios y bajo el

poder del Espíritu Santo. Es un extraordinario método eficaz de ganar almas para Cristo.

Todo aquel que desea pescar no espera que el pez se acerque al sartén, el pescador va al encuentro
para su captura. Cristo les dijo a sus discípulos “Boga mar adentro y echad vuestras redes para pescar”.

El pescador de almas en cualquier lugar va al hallazgo de los perdidos. Reconoce que esta no es una
tarea dada al pastor o a los evangelistas, él se incluye en la comisión que Cristo encomendó a la Iglesia
de ir por todo el mundo para predicar el Evangelio a las almas necesitadas.

Por qué evangelizar

A. Porque Jesús lo práctico y lo encomendó. Mateo 28:19-20; Marcos 16:15. Sin duda Jesucristo ha
sido el modelo por excelencia, evangelizo a Nicodemo (Juan 3), a la mujer samaritana (Juan 4) y
muy a menudo recorría las aldeas enseñando (Marcos 6:6).
B. Porque los Discípulos también evangelizaron. Entre ellos se destaca Andrés, quien fue un
constante ganador de almas y cada vez que aparece en la Biblia estuvo involucrado con personas
que condujo hasta Jesús. Gano a Pedro para la causa de Dios al explicarle que Jesús era el
Mesías (Juan 1:40-42); ante una emergencia presento a un niño con su merienda a Jesús lo que
hizo posible que toda una multitud se alimentara (Juan 6:9); condujo a unos griegos hasta Cristo
(Juan 12:20-22).
C. Porque es la tarea esencial de la Iglesia. Dios está muy interesado en la salvación de los perdidos
hasta el punto que por medio de un ángel le ordeno a Felipe el evangelista que estaba en una
campaña en Samaria que se moviera al desierto con la intención de evangelizar a un etíope
(Hechos 8:26-39).
D. Por el reto que presentan las Sectas. El mejor servicio a Dios que cualquier cristiano puede hacer
es, sin duda, ser un anunciador constante del Evangelio de Nuestro Señor Jesucristo. Cada día las
incontables sectas envenenan las mentes y a que la Iglesia presente una alternativa, difícilmente
se podrá contrarrestar su influencia (2 Timoteo 4:1-4).
E. Porque existen otras ovejas que no están en el redil y ellos necesitan oír la voz del Señor (Juan
10:16; Hechos 18:10; 8:31).
F. Los ángeles no lo pueden hacer, aunque lo desearan. Ellos no tienen la experiencia de la
redención (Hechos 10:1-6).
G. Aun cuando la evangelización involucre penas, llegará el momento en que se disfrutará de las
recompensas (Salmos 126:6; 1 Pedro 4:11).

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 Consejos Prácticos para los Evangelizadores

Se requiere que los que formen parte de este programa de evangelización puedan atender lo siguiente:

1. Consideraciones Espirituales
Para esto deben:
 Orar a Dios, para que nos use en la salvación de las almas: Ro. 10:1 y Hch. 4:24 y 29. La
oración debe ser un hábito previo a toda actividad: 1 Tim. 2:1-4. La futura madre tiene dolor
para dar a luz, así la iglesia debe sentir dolor por los perdidos: Mat. 11:24, Efe. 6:18, 1Tes.
5:17.
 Santificarse, los instrumentos usados en una operación quirúrgica deben estar seleccionados y
esterilizados, así como todo aquel que participa en la evangelización: Heb. 12.14; 1 Tes. 4:7.
Si bien es importante lo que vamos a decir, no lo es menos la actitud con que lo digamos
(Mat. 9:36) y se cumplirá lo que dice el Salmo 51:12-13: “Entonces… los pecadores se
convertirán a Ti”.
 Mantener una unción fresca del Espíritu Santo (Juan 16:7-8,13; Hch. 1:8). Esto se logra a
través de una renovación diaria.
 Cultivar un ferviente amor, el amor cubre multitud de faltas y despierta la compasión, Efe.
5:2; 1 Juan 2:10.
2. Consideraciones Académicas
Conocimiento y destreza en el uso de las Sagradas Escrituras
 Conocer las doctrinas de cualquiera secta puede ser útil, pero mucho más importantes que
conozca las verdades bíblicas de la Palabra de Dios. Tal conocimiento profundo podrá
libertad a cualquiera del error o de la confusión religiosa. La palabra es la herramienta del
Espíritu Santo y él usará lo que tú puedes recordar o simplemente lo que has archivado en
tu mente.
 Personalice los versículos aplicados, ejemplo: “De tal manera amo Dios a ¿…..?” en
lugar de decir: “De tal manera amo Dios al mundo”.
 Conozca la naturaleza humana.
 Conocimiento de las técnicas, antes de las múltiples excusas que presentan los perdidos.
 Estudiar bien los folletos o plan que vamos a usar (Juan 5:39), para dar el folleto
adecuado y estar bien preparado para contestar si nos preguntan sobre el mismo.
3. Consideraciones Practicas
 Orden, organización y perseverancia, cuando existe esto no se pierde tiempo, ni recursos
y el personal no se fastidia (1 Corintios 14:14).
 Doctrina inmediata, los ganados en la evangelización deben ser prontamente
discipulados. Las estadísticas demuestran que si una persona no es conectada antes de las
24 horas es muy posible que se pierda.
 Integración a la Iglesia, los convertidos en la Iglesia Primitiva prontamente eran
integrados a la Comunidad Cristiana desarrollando responsabilidades, Hechos 2:44-47.

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  Evaluación, examinar los resultados de acuerdo a la inversión. ¿Los resultados obtenidos
están acordes con la inversión?
 Entrenamiento continúo.
4. Consideraciones Personales
 Ir de dos en dos: Lucas 10:1; Hechos 17:10. Que no solamente uno hable (Hechos 13:15-
16). La otra persona es un auxiliar, quien debe ayudar a los oyentes a localizar los pasajes
bíblicos, cuidar que no haya interrupciones, atender a algún niño travieso y orar
pidiéndole a Dios que bendiga al hermano que está evangelizando.
 Cuidado en el aseo y la buena presentación. 1 Timoteo 4:16.
 Presentarse por nombre y dando a lo más un apellido; si son jóvenes o niños, dirigirnos
en confianza, hablándoles de tu. Juan 4:10.
 Haga lo posible para que la gente nos invite a entrar en sus casas (Lucas 19:5 y Hechos
16:14-15).
 Use siempre la Biblia y dirija a los oyentes a la lectura de los pasajes (Hch. 18:18 y
Apocalipsis 1:3).
 En el supuesto, que la persona no deseara aceptar a Cristo como su salvador personal, es
bueno recordar que somos enviados a predicar a Cristo y no a convertir, lo cual
únicamente es obra del Espíritu Santo (1 Corintios 1:17 y 3:7).

Guiando a la persona al encuentro de Cristo

Dinámica antes de empezar la clase 1.

El hombre Es un PECADOR
2.
Cristo Mostró su AMOR
3.
Dios MURIO por ti
4.
La Salvación Es por FE
5.
Cristo Es el único SALVADOR
Actividad para el alumno Memorice estos 5 versículos
Romanos 3:23, Romanos 5:8, 1 Pedro 3:18, Efesios 2:8-
9, Juan 1:12

Técnicas Básicas para Evangelizar

1. Convenza que todo hombre es un pecador y merece el infierno, por cuantos todos pecaron y
están destituidos de la gloria de Dios (Romanos 3:23).
2. Declare que Dios ama al hombre a pesar de ser un pecador (Romanos 5:8).
3. Afirme que el hombre debería morir por sus pecados pero Cristo murió en su lugar (1 Pedro
3:18).
4. Declare que la salvación no se logra por méritos humanos ni por buenas obras, sino por la
absoluta fe en Jesucristo (Efesios 2:8-9).
5. Declare que si no recibe a Cristo en su corazón estará perdido por la eternidad (Juan 1:12).

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 Como convencer al hombre de su pecado

Indiscutiblemente esta es una acción única que solo compete al Espíritu Santo (Juan 16:8-15). Pero
los consejos que se dan a continuación serán de ayuda en el momento oportuno:

A. Muéstrele pasajes bíblicos, que difícilmente son contradichos por las personas, ejemplos: Isaías
1:5-8, Romanos 3:10 y 23, Eclesiastés 7:20. Mencione pecados que estén de acuerdo con el sexo,
edad y trabajo de las personas que evangelizamos.
B. Hable de los pecados universales, todos en el mundo tenemos pecados: niños y adultos, ricos y
pobres, hombres y mujeres, etc., por eso le llamamos universales y son: orgullo, hipocresía,
rencor, desobediencia, mentira, robo, malos pensamientos, entre otros.
C. Cite pecados de omisión, los cuales también fácilmente reconocerá cualquier persona. No leer la
Biblia, no amar a Dios sobre todas las cosas, no amar al prójimo como a nosotros mismos. Todos
fallamos en no cumplir estos dos grandes mandamientos (Santiago 4:17, Romanos 1:32).

Como convencer al hombre que Dios le ama

A. Muestre pasajes bíblicos como Jeremías 31:3, Juan 14:18, Romanos 5:8 y háblele de la vida y de
la salud que disfrutamos porque Dios nos ama. Mencione decenas de bendiciones diarias: paz,
ropa, casa, familiares, oxigeno, sol, agua, templo, biblia, toda la creación.
B. Mencione la paciencia de Dios. Él nos trata bien, aunque nos portemos mal. La vida de cada uno
es un testimonio. “No merezco lo que Dios me da”, es decir, de casi todas las personas.
C. Pero especialmente el amor de Dios se muestra en que ENVIÓ A SU HIJO (lo más preciado
para un padre)… A MORIR POR NOSOTROS (Colosenses 1:21-22).

Como convencer al hombre que cristo sufrió y murió en nuestro lugar

A. Hable usando la Biblia y mencionando específicamente los sufrimientos de Cristo y su muerte:

azotes, espinas, clavos, cruz, desnudez, sol, escupitajos, golpes (Isaías 53:3-7 y Mateo 26:67-68).
Tengamos en cuenta que ni Cristo mismo nos puede salvar de otra manera, solamente por su
muerte en la cruz ¡CUIDADO! Hablar de la Biblia, no siempre es evangelizar, ni siquiera hablar
de Cristo poderoso sobre los elementos de la naturaleza o enfermedades del hombre, o sobre los
demonios. EVANGELIZAR ES HABLAR DE JESUCRISTO Y DE ESTE CRUCIFICADO
(1 Corintios 2:2). Así lo hicieron los Apósteles y Jesucristo mismo (1 Timoteo 1:15, 1 Pedro
3:18, Marcos 10:45).
B. Cuente la historia de una persona que sufre o muere por salvar a otras, ejemplo: El Ferroviario
Jesús García, es llamado “el héroe de Nacozari”, porque en una ocasión su tren cargado de
dinamita se estaba incendiando. Viendo el peligro, lo echo a andar para alejarlo del pueblo, y una
vez lejos, voló en pedazos, muriendo así su maquinista, pero salvando a los habitantes de
Nacozari Sonora. Así también, el Señor Jesucristo murió para que todos fuéramos salvos.

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 Como convencerlo que la salvación es por fe sin las buenas obras

A. Mencione lo que dice la Biblia en Efesios 2:8-9, Gálatas 2:16, Isaías 55:1.
B. Para ser salvo por medio de las obras, tendríamos que ser perfectos y nadie lo es. Santiago 2:10.
C. Si Dios cobrara por la salvación, no tendríamos con que pagarla, porque todo es de él, Salmo
24:1; además a él no le hace falta nada, Salmo 50:12.
D. Jesucristo sano a muchos enfermos. También enseño a multitudes y no cobro por ninguna de sus
obras. ¿Cobraría por la salvación?

Como persuadirlo a que reciba a Cristo

A. Muestre que Dios declara que “A todos lo que le recibieron, a los que creen en Su Nombre, les
dio potestad de ser hechos Hijos de Dios”, Juan 1:12. Toda persona en alguna forma cree en la
persona de Jesucristo, pero no todos lo han recibido como su único y suficiente Salvador
Personal.
B. Para obtener los beneficios de los alimentos, no basta creer que son nutritivos, hay que digerirlos.
No basta creer en la eficacia de una medicina, hay que aplicársela; de igual forma, además de
creer en la muerte de Cristo, hay que recibirlo como nuestro Salvador, por medio de un acto de
fe.
C. Hágale saber que es fácil y que puede recibir a Jesucristo mediante una oración, invitándolo a
entrar en su corazón y pidiéndole perdón por sus pecados, Apocalipsis 3:20.

Actividad en Clase:
Intercambie verbalmente con otra persona
Los cincos (05) Textos Bíblicos aprendidos
El verdadero secreto para aprender versículos de memoria es repasar, repasar y repasar. Recuerde los versículos
como si fueran números de teléfonos. ¿Recuerda cómo aprendió los números de telefónicos? Marcándolos una
y otra vez. Así de la misma manera aprenderá los versículos repasándolos una y otra vez.

Romanos 3:23
Romanos 5:8
1 Pedro 3:18
Efesios 2:8-9
Juan 1:12

Consejos prácticos para una conversación evangelística efectiva

1. Prepárese: Los atletas antes de competir hacen ejercicios de rigor. Igualmente el auto se calienta
antes de la marcha. El que evangeliza debe invertir tiempo en la preparación de un buen tema (1
Timoteo 2:15). Para eso puede usar ilustraciones u otros recursos para hacer entendible el
mensaje. La improvisación tiene un precio muy costoso.
2. Conozca la naturaleza humana: Es muy importante conocer cuáles son los intereses de las
personas. Cuáles son sus problemas. Esto ayudará a adaptar las verdades de la Biblia a las

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 necesidades prácticas del oyente y le permitirá enfatizar en aquellas áreas que la necesidad lo
requiera.
3. Ganase la amistad, Romanos 15:2: Sea amable y cariñoso aun con aquellos que no acepten el
Señor. Si ellos quedan agradecidos y satisfechos con la conversación habrá ganado la amistad y
las puertas quedaran abiertas para nuevas oportunidades. En todo encuentro demuestre cortesía,
buenos modales y responsabilidad. Sea usted una persona puntual que no falta a ninguno de los
compromisos contraídos con la persona interesada. Demuestre sabiduría. Si al comenzar un tema
el tiempo fue muy corto, conclúyalo en la siguiente oportunidad, teniendo siempre en cuenta de
cumplir lo que promete. No es conveniente quedarse en el hogar de los interesados más del
tiempo planificado. Considere que su conducta es la clave para que alguien acepte o rechace el
mensaje de Dios.
4. No trate de ganar una discusión más bien logre convencer al oyente de quien es Cristo: La
gente tiene conceptos equivocados de lo que es el evangelio, lo que somos y lo que creemos. En
situaciones conflictivas conviene comenzar aclarando puntos que sean comunes a la fe, por
ejemplo: preguntemos ¿Cree usted que existe Dios? ¿Cree usted que Jesucristo nació de una
virgen? ¿Cree usted que Jesucristo es el Hijo de Dios? A estas cosas por lo general contesta que
sí, dígale entonces “Nosotros también”.
5. No ataque las creencias y las costumbres ajenas, Tito 2:1,8: No caiga en la trampa de
condenar o criticar a cristianos de otras congregaciones. Limítese a presentar el mensaje y exaltar
a Jesús. Deje hablar a la otra persona. No ataque frontalmente a sus ídolos, el sábado, ni alguna
otra creencia herética. Si queremos que un pordiosero se ponga ropa limpia que le regalamos, no
debemos burlarnos de sus andrajosos trapos, por tenerla sucia y vieja, démosle la buena ropa y él
dejara la otra.
6. No hable demasiado: Personas muy animadas y conversadoras pueden ahogar al visitado. Debe
darle la oportunidad para que ellos pregunten y opinen. Además si usted va de dos en dos no es
conveniente que ambos hablen a la misma vez. Por eso es aconsejable dejar hablar a la otra
persona. Esto le ayudará a descubrir las enfermedades espirituales y usted sabrá mejor como
dirigir la conversación. Escuche las quejas y usted se dará cuenta inmediatamente que algunos
han sufrido injusticias, otros tienen conflictos matrimoniales, padres con problemas financieros.
Ellos le dejaran hablar a usted, si usted los escucha también. Conviene oír a los demás para
conocerles mejor. “Porque de la abundancia del corazón habla la boca” Mateo 12:34.
7. No contradiga pero sea franco en las respuestas evitando ofender, 2 Timoteo 2:23-24:
Cualquier cosa que digan las personas, no debemos contradecirlas, ejemplo: de un humano
escuche la historia de la anciana que le daba más crédito a la virgen que a Cristo. Este hermano
le respondió que toda medicina viene en un envase y lo natural es que los enfermos le den más
importancia a la medicina que al envase porque allí está la cura de sus males. La medicina para
este mundo es Cristo, pero el Hijo de Dios como hombre tenía que ser engendrado en una virgen.
De esta manera la abuelita entendió que Cristo es más importante que la virgen.
8. No discuta, Tito 3:9: Se puede dialogar, conversar, cambiar opiniones, en forma amistosa. Pero
si la conversación empieza a tomar carácter de disputa, Tito escribe claramente que toda
controversia es "sin provecho y vana”. Lo importante no es ganar una conversación sino
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 convencer al contrario del alto precio que pago Jesucristo en la cruz por el pecador. Concretamos
a hablar de Cristo y este crucificado. Al discutir con la persona a quienes estamos evangelizando,
lo más probable es que ganemos la discusión pero existe la probabilidad que perdamos la
amistad. Trate con mucho tacto los puntos de controversia y tenga paciencia para esperar el
momento oportuno para tratar los temas con mucha prudencia en los cuales el penitente esté
interesado.
9. Haga de Cristo el tema principal: Cristo debe ser el centro y no las modas, los ídolos de todo
mensaje presentado. Nuestro objetivo es hablar de Cristo y aunque tengamos que contestar
preguntas que nada tienen que ver con nuestro objetivo, volvamos cuanto antes al tema principal,
10. Pase por alto cualquier palabra de menosprecio: Muy a menudo en la tarea de la
evangelización se encuentran personas descorteses y ásperas en su trato (Proverbios 15:1).
Cuando alguien se oponga y se burle de usted mantenga la calma. No caiga en la tentación de
proferir juicios a menos que este respaldado por el Espíritu Santo, 2 Timoteo 2:24-25, 1 Pedro
3:15-17.
11. Cuando usted no pueda contestar una pregunta sea honesto y admítalo: Ofrezca hacer una
investigación del asunto para volver con las respuestas en el tiempo requerido. No se avergüence,
es mejor reconocer nuestras limitaciones que decir un disparate para salir del problema.
12. Evite la confusión mental: Evite frases de difícil comprensión y presente el plan de Dios en un
mensaje sencillo pero bien estructurado, a fin de que tenga secuencia y fluidez.
13. Confronte a la persona con la verdad: Deje claro la urgencia de tomar una decisión con
respecto al mensaje presentado. Presente alternativas entre la obediencia y la indiferencia; la vida
y la muerte; la vida eterna y la perdición.
14. Haga el llamado con convicción pero sin causar fastidio: Al impartir su estudio o dar su
testimonio por medio de la evangelización personal, todos los puntos relacionados con el tema
deben ser tratados de manera de manera lógica, de manera que quede claro en la mente de la
persona. De esta forma sabrá con claridad la decisión que tiene que hacer. En ningún momento
bajo amenaza. Deje las puertas abiertas para otra oportunidad.
15. La oración por la conversión o liberación debe ser sencilla y calmada: No intente alzar la
voz; es la persona que está a su lado la que necesita escuchar lo que usted le dice y no tanto los
vecinos.
16. Tenga a disposición de algo con que escriba los datos personales del nuevo convertido: No
olvide anotar las necesidades por la cual usted se ha comprometido a interceder. Escriba su
dirección con claridad y los puntos de referencia.
17. Invítelos a la iglesia y dispóngase a acompañarlos: Es necesario que los nuevos convertidos
conozcan a los otros hermanos de la iglesia. En la primera visita al templo es muy importante
que el instructor, LOS EVANGELISTAS, busquen y los presenten a los miembros de la iglesia.
De esta manera no se está buscando beneficios personales sino el bien de las almas. El mostrar
simpatía en el trato por una persona, no importando la condición social, económica o intelectual,
es un asunto de vida cristiana práctica. El trato sincero y desinteresado de las personas de nuestro
entorno hará que estén en disposición de seguir el camino que le indiquemos.

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 18. Confié en el Espíritu Santo: Su obra es ilimitada tanto el corazón del creyente como al
inconverso. El Espíritu santo tocará el corazón más duro y redargüirá al oyente de pecado,
justicia y juicio (Juan 16:8).

Iniciando una conversación evangelística con desconocidos

Toda persona tiene intereses y presenta necesidades de acuerdo a su edad, vocación, trabajo y
anhelos. Al menos que la conversación toque estos aspectos, las palabras serán rutinarias y despertarán
muy poca atención en el oyente. Una conversación se puede volver interesante cuando el que evangeliza
apela a una serie de situaciones propias del oyente y que tiene que considerar para realizar una
evangelización dinámica. Por eso:
1. Apele al interés personal: Jesucristo fue un experto en conocer el punto de interés de las
personas a quienes les hablaba. Por ejemplo:
A. A la Samaritana le hablo acerca del agua que ella buscaba en el pozo (Juan 4:7-10, 13-
41). Hizo la comparación del evangelio con el agua.
B. Al enfermo del estanque le hablo de la salud física y luego de la salud espiritual (Juan
5:6, 14).
C. A los pescadores les hablo de ser “Pescadores de Hombres” (Marcos 1:16-17). Pablo se
hacía “todo a todos” (1 Corintios 9:19-22).
D. Ejemplos actuales:
 Un cristiano evangelizando por una calle de un vecindario observo que numerosas
personas apostaban en un remate de caballos. Al intentar regalarle un tratado a los
presentes refirieron que no sabían leer. Los oyentes quedaron atónitos cuando les
refirió a los lápices que tienen en sus manos y les dijo: Dios en un libro apunta la obra
de cada uno de ustedes. A partir de allí, ese fue el tema de conversación.
 El cristiano que iba en un transporte público mirando una figura tallada que
representaba a un devoto de la antigüedad le hizo una pregunta a los presentes.
¿Saben ustedes por que el artífice de esta obra la vendió? Los oyentes confundidos no
atinaban a declarar la respuesta, por lo que el cristiano les replico secamente: ¡Porque
no hace milagros! Si hiciera milagros nadie vendería la gallina de los huevos de oro.
A partir de allí les hizo crear conciencia que los ídolos que se venden no ayudan ni al
que los fabrica.

Estamos rodeados de muchas personas supersticiosas que quieren encontrar una razón o
lógica en cada circunstancia y por eso la gente regularmente pregunta ¿Qué es esto?,
entonces contestamos con el evangelio.
2. Se dice algo sorprendente: Toda persona está ocupada en sus propios problemas,
preocupaciones y algo sorprendente puede arrebatar su atención hacia el evangelio.
 Un barbero afilando la navaja le dijo al cliente: ¿Sabía usted que va a morir? Y luego le
dijo que “la paga del pecado es la muerte” (romanos 6:23)

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  Entre muchas otras preguntas se pueden usar las siguientes: ¿Le han contado a usted la
historia más maravillosa? ¿Le han explicado cuales son los planes de Dios para usted?
¿Está usted preparado para encontrarse con Dios?
3. Aprovechando algún objeto o situaciones: A menudo cristo uso las analogías del entorno de
los milagros creados para dar lecciones espirituales. Las parábolas es una clara demostración de
esto.
 Pablo en Atenas usó un altar “Al Dios no conocido” para decir que de ese Dios les iba a
hablar y después paso a hablar de Cristo (Hechos 17:16-34).
 Cristo le hablo al anciano Nicodemo sobre la necesidad de “Nacer otra vez” (Juan 3:3).
4. Prestando una Biblia: Al vecino, al pariente o cuando vamos de viaje, prestemos la Biblia a
nuestro acompañante, señalándole un pasaje bien conocido. Ejemplo: Juan 3:1-18. Después de
un rato de leerlo, podemos hacerle algunas preguntas como la que Felipe hizo al etíope Hechos
8:28-30; ¿Entiendes lo que lees?
5. Con una pregunta: Pregúntele algo relacionado con la persona entrevistada y luego de despertar
el interés, introduzca el evangelio.
Examen Práctico: Evangelizar aplicando estos principios y venir preparado para dar testimonio.
6. Obsequiando un folleto: La gente regularmente pregunta ¿Qué es esto? Entonces contestamos
con el evangelio y aun cuando no pregunten, al entregar el tratado podemos agregar las palabras:
“Aquí encontraras el mensaje de Dios para su vida”. Un folleto puede servir de punto de
contacto, este debe ser sencillo y explicar con claridad el mensaje señalado. Sirve de beneficio
porque allí está la dirección de la iglesia en el sello impreso.

Como combatir las excusas de los inconversos

1. No tengo pecados:
Para combatir esta excusa:
 Leámosle textos que dicen que todos somos pecadores: Romanos 3:10-23, 1 Juan 1:8-10. Y
QUE EL ÚNICO QUE NO PECO ES JESUCRISTO (2 Corintios 5:21, 1 Pedro 2:22).
 Hablémosle de los pecados universales: hipocresía, orgullo, vanidad, etc.
 Háblele también de los dos grandes mandamientos de Mateo 22:37 y 38, las cuales son:
Ama al Señor Dios con todo tu corazón y a tu prójimo como a ti mismo; y hagámosle ver
que nadie los obedece.
2. Soy tan pecador que Dios no me puede perdonar:
 mencione que cristo precisamente vino para salvar a los pecadores y no a justos, Lucas
1:10, 1 Timoteo 1:15, Romanos 5:8.
 Muéstrele que Dios ofrece perdonar, Isaías 1:18 y 55:7.
 El único pecado que Dios no perdona, es no creer que Cristo puede perdonarnos, Juan
3:18.
3. Temo no poder cumplir:
 La salvación es por la fe y no por cumplir. Efesios 2:8-9.

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  Recibir a Cristo es tenerlo como abogado, para defendernos, así como el medico esta para
curar los enfermos, el abogado para defender al acusado (1 Juan 2:1).
 Además, Cristo promete ayudarnos a cumplir la voluntad de Dios. Él dice que su carga no
es pesada para los que vienen a él. Mateo 11:28-30 y Juan 14:12.
4. Mis padres me dejaron una religión y no quiero abandonarla:
 Nuestro propósito no es que usted cambie de religión, sino que reciba a Jesucristo, las
religiones no salvan. Cristo es el único que salva.
 El apóstol Pablo dejó la religión de sus padres con el fin de recibir a Cristo. Él era fariseo
de fariseo. Léase Filipenses 3:4-9.
 No todo lo que hacen nuestros padres es digno de imitarse.
 Cada cual debe dar razón por sí mismo. 2 Corintios 5:10.
5. Tengo que abandonar muchas cosas:
 Todo lo que Dios que abandonemos son cosas que nos dañan y nos hará bien en dejarlas,
por ejemplo: el crimen, el orgullo, pleitos, robos, pandillerismo, parrandas, mujeres, vino,
droga, envidia, etc.
 Si usted no deja sus pecados para aceptar a Cristo, finalmente tendrá que dejar todo para
ser lanzado al infierno sin más esperanza. Marcos 8:36 dice: “¿Qué aprovechará el
hombre si ganare todo el mundo y perdiere su alma?
6. Creo que “debo pagar”, lo que usted dice me parece muy fácil para alcanzar la vida eterna:
 Cristo pagó con su muerte, por eso no necesitamos nosotros pagar nada, 1 Pedro 1:18-19.
Nunca se paga dos veces por la misma cosa.
 Para darle vida a un muerto no se le puede exigir nada, pero cuando tenga vida se le
podrá exigir, así para ser salvos, nada hay que hacer, pero una vez que somos salvos,
inevitablemente debemos esforzarnos para obedecer a Dios, Efesios 2:9-10.

CAPITULO II

PODER EN EL EVANGELISMO

La obra de Dios y la nuestra 1 Corintios 3:9

Nosotros somos colaboradores de Dios

I. ¿Qué es el Evangelismo?
Proviene de la palabra griega evaggelidzo cuyo significado es “traigo buenas noticias”, básicamente
evangelismo es dar a la gente las buenas nuevas del evangelio. Entonces, evangelizamos cuando le
llevamos a la gente las buenas noticias de que Jesucristo, el Hijo de Dios les salvará de sus pecados y
les dará la vida eterna.

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 Evangelizar, es algo que va más allá de simplemente contar las buenas nuevas, ya que debemos
procurar persuadir a las personas que acepten a Cristo y todo cuanto les ofrece Él, les ayudamos a
dar el paso de aceptar la salvación, hacemos todo cuanto podemos para darle solidez en la fe y la
fraternidad cristiana.

RESUMEN

Evangelismo

Acción  presentar a Cristo

Poder  El Espíritu Santo

Propósito  Que los hombres puedan confiar en Cristo como Salvador

Resultado  Servir a Cristo como Señor en la fraternidad de la Iglesia

Autorización para Evangelizar

1. ¿Con que derecho le hablamos de nuestro Dios a personas de otra religión?

2. ¿Tenemos algún derecho para molestarles?

3. ¿Por qué querríamos cambiarles las creencias y costumbres?

4. ¿Con que autoridad salimos a predicar el Evangelio?

El gran Dios del universo, el único Dios verdadero, que hizo el mundo y toda cuanto hay en él, nos
ha ordenado que llevemos su palabra a toda persona sobre la tierra. Hechos 1:8; Mateo 28:19-20;
Marcos 16:15-16.

En la gran comisión todo creyente tiene órdenes específicas para evangelizar.

Jesús tiene toda potestad – autoridad en el cielo y en la tierra y ha prometido estar con nosotros, por
lo tanto, contamos con el respaldo de su autoridad suprema y con su apoyo oficial para que
cumplamos sus órdenes.

II. Métodos básicos de evangelismo

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 Los métodos son las maneras en las cuales presentamos a Cristo con el propósito de persuadir a la
gente a aceptarlo como salvador y servirle como Señor, siendo la base o el fundamento de toda labor
evangelística “el poder del Espíritu Santo”.
El método fundamental del evangelismo es permitir que Dios obre por medio de nosotros, por lo
tanto, hablar de métodos se refiere mayormente a cómo hacemos nuestra parte de la obra, a través de
tres métodos:
1. La predicación: proclamación (anunciamos públicamente) el evangelio y hacemos un
llamado a la gente para que deje sus pecados y acepte al salvador.
2. La enseñanza: explicamos las verdades del evangelio a la gente y los ayudamos a aplicarlas
a su vida.
3. El testimonio: les decimos a la gente lo que Cristo ha hecho por nosotros.

III. La obra de Dios en el evangelismo

El evangelismo comienza con Dios, es plan suyo. Él nos ha dado en su palabra los modelos a los
cuales debemos ceñirnos y mediante su Espíritu Santo nos da el poder para lograrlo.
1. El plan de Dios:
El plan de Dios para el evangelismo es una parte de su gran plan de redención.
Redimir: eximir, librar, salvar, remediar, exonerar, desobligar, libertar.
El pecado tendría que ser castigado con la muerte. Así que el único modo de salvar al
pecador seria que una persona inocente tomara su lugar. De este modo, Dios planeo sufrir Él
mismo el castigo que merecían nuestros pecados. Dios Hijo, la segunda persona de la
trinidad. Tomaría da forma humana y moriría en lugar nuestro. Resucitaría y daría vida
eterna a todos los que le aceptaran como Señor y Salvador. El Espíritu Santo vendría a vivir
en ellos y darles una nueva naturaleza. Él quebrantaría el poder del pecado y los haría hijos
de Dios.
El plan de Dios para el evangelismo es obrar a través de toda la iglesia para llevar el
evangelio a todo el mundo.

de la iglesia para dar

Dios obrando por medio de  la totalidad del evangelio a
del mundo

2. El método divino:
El amor de Dios por los perdidos lo lleva donde quiera que ellos están, aun cuando estén
tratando de ocultarse de él, como en el huerto del Edén – el llamado de Dios: he aquí una
parte esencial del modelo divino.
¿Cuál es la parte nuestra?
Juan el bautista lo comprendió cuando dijo: yo soy la voz de uno que clama en el desierto.
Dios llamara al perdido a través de nosotros y nos utilizará como voz suya para llevar a cada
persona su mensaje

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 El modelo de Dios para el evangelismo va más allá de hallar a los pecadores y darles un
mensaje. Nos hace recordar que al hablar del juicio de Dios contra el pecado, debemos hablar
también del amor que Él tiene por el pecador. La gente debe ver ese amor en nosotros para
creer lo que decimos. El sacrificio por el pecado se consumió en la calvario, pero todavía hay
un sacrificio vivo que nosotros tenemos que hacer: una muerte al “YO” con el fin de ayudar
a otros a encontrar y servir al salvador. El modelo de evangelismo es Dios obrando por
medio del hombre.
3. El poder de Dios
En cuanto al evangelismo; en todo y a través de todo, esta Dios. Sin su presencia y poder,
todo nuestros esfuerzos son infructuosos. Es el mismo Cristo vivo y no tan solo las palabras
acerca de Él, lo que tenemos que presentar al mundo. Es el Espíritu Santo quien quebranta las
cadenas del pecado y transforma a los pecadores en hijos de Dios. Sin este poder, nuestro
testimonio, predicación o enseñanza serían meramente cumplir con las formalidades del
evangelismo.
El verdadero evangelismo, el que produce resultados, debe hacerse en el poder del Espíritu
Santo.
IV. La Parte Nuestra
Si el método divino de evangelismo es obrar por medio de su pueblo, nuestra responsabilidad es
permitirle que lo haga. En el evangelismo nos vemos involucrados:
I. En relación con Dios
Somos sus socios en su obra de salvar a los perdidos. El dirige todo el plan y elige a personas
diferentes para diferentes responsabilidades dentro de ese plan. Por eso buscamos su
dirección y aceptamos el trabajo que nos asigna, ya sea de modo individual o en cooperación
con la iglesia.
Comprometerse con Dios es mucho más que aceptar la misión que él nos dé. Es entregarle
nuestro tiempo, nuestros talentos, poner nuestra vida entera bajo su control, Él a su vez nos
proporciona el poder que necesitamos para cumplir sus órdenes.
II. En relación con los perdidos
Nos relacionamos con gente que conoce a Dios a quienes les anunciamos del perdón para los
que están en las cárceles del pecado. Debemos orientarlos utilizando el mapa que Dios nos da
en la Biblia y conducirlos a Jesús, quien es el Camino, la Verdad y la Vida.
III. Con relación a Satanás
En el evangelismo trabajamos por la libertad de los prisioneros de Satanás, sus esclavos, lo
que nos pone en conflicto con él. Es la misma guerra que se declaró en el Edén entre la
simiente de la mujer y la simiente de la serpiente.
En el combate Satanás trata de obstaculizarnos en toda forma posible.
a) Enceguece a las personas respecto a la verdad y hace que se resistan al evangelio, o
los hace permanecer indiferentes a nuestro mensaje.
b) Utiliza la resistencia y la indiferencia de la gente para desanimarnos y hacernos creer
que somos unos fracasados.

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 c) Puede usar la persecución, la crítica, la duda, la confusión, las presiones emocionales,
las tentaciones, las incomprensiones entre los cristianos y los problemas físicos.

Debido a esta guerra, debemos usar la protección y las armas que Dios nos proporciona.

1) Mientras mejor comprendamos que batallamos contra Satanás y no con las personas
que se nos oponen, nos será más fácil conseguir la victoria. Tendremos más
compasión por los perdidos, más paciencia con aquellos que son insolentes o
indiferentes y más sabiduría para tratar los problemas.
2) No necesitamos atemorizarnos por los peligros de la tarea. Dios nos acompaña Mateo
28:19-20. La luz de su Espíritu y su palabra penetra las mentes oscurecidas y les da
vista espiritual. Él nos conduce a la batalla dándonos la armadura protectora y las
armas con las cuales podremos defendernos, derrotar al diablo y libertar a los
cautivos.
En el evangelismo somos colaboradores de Dios; dependemos de su gracia y poder
cuando presentamos a Cristo y combatimos contra Satanás por las almas. En nuestra
calidad como soldados de Cristo, estamos unidos a su causa.

CAPITULO III

EL MENSAJE EVANGELÍSTICO

Nuestro mensaje respecto del pecado

La paga del pecado es la muerte, Romanos 6:23

I. Decir a la gente lo que es el pecado.

¿Qué importancia tiene esto para usted?
1. El mensaje evangelístico.
Unos lo predican, otros lo enseñan y otros lo comparten, pero el mensaje es el mismo. Todo
creyente ha de ser un mensajero de Dios, de modo que todos necesitamos aprender bien el
mensaje evangelístico. Necesitamos comprender la naturaleza del pecado y sus efectos para
poder combatir lo en nuestra vida y ministerio. Al comprender cuál era nuestra situación
cuando éramos pecadores, podremos apreciar más la liberación que Cristo nos ha dado.
Tendremos mayor compasión por los que nos rodean y oraremos por ellos, más darnos
cuenta de lo que el pecado está haciendo en su vida. A medida que aprendamos lo que la
Biblia enseña acerca del pecado, más fácil será que el Espíritu Santo nos use para tratar con
las personas sus problemas espirituales.
En el evangelismo presentamos a Jesús como Salvador, pero ¿Quién desea un salvador?
Solamente los que reconocen que están en peligro y no pueden salvarse a sí mismos.
2. ¿Qué es el pecado?

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Predicar o enseñar respecto del pecado, no es limitarse solo a hablar de lo que la gente hace.
El pecado es algo mucho más profundo que eso y la Biblia lo describe de 3 maneras:
1. Enfermedad del alma: Dios compara el pecado con la lepra. Las llagas infectadas de
los actos pecaminosos son solamente síntomas de la enfermedad interior del alma. Por lo
tanto, no basta con tratar de curar los síntomas de una enfermedad, sino la cura radical de
nuestra naturaleza pecaminosa, Marcos 7:20-23. Mucha gente no comprende que son
pecadores, porque la enfermedad de su alma no se ha manifestado en acciones
pecaminosas semejantes a las que ellos ven en otras personas. Pero aun así, ellos
necesitan la salvación tanto como la necesita el pecador más perverso. En su palabra
Dios describe el pecado como una enfermedad que afecta la cabeza (pensamientos
erróneos), el corazón (emociones erradas) y los pies (acciones erróneas). El pecado
comienza en los pensamientos y se extiende hacia los sentimientos y acciones, Isaías 1:5-
6; Romanos 1:18-32, describe el desarrollo del pecado en la raza humana, en cualquier
sociedad y en el individuo.
2. Rechazo de Dios: Dios nos hizo con una naturaleza semejante a la suya para que
podamos ser sus hijos, Génesis 1:26-27. Nos dio mente, emociones y voluntad, todo
dentro de un cuerpo, dentro de ellos se hayan los principios activos de la personalidad
con sus necesidades espirituales, para las cuales Dios da su provisión.
a) Para la mente; nos provee la verdad.
b) Para las emociones; nos brinda su amor.
c) Para la voluntad; nos da su autoridad que nos guía a tomar las decisiones
correctas.
El creador tiene derecho a gobernar su creación ya que es la fuente de vida y quien
satisface todas nuestras necesidades. Si le damos a Él, el primer lugar en nuestras vidas,
podemos disfrutar de todas las cosas maravillosas que ha dispuesto para que tengamos
una vida plena y feliz en comunión con él.
El rechazo a Dios, la rebelión contra Él, es el pecado básico del cual provienen todos los
demás pecados, Romanos 1:18-32. El yo pecaminoso, le arrebata el trono a Dios y
levanta barreras contra Él en cada aspecto de nuestra personalidad.
 Incredulidad en contra de la verdad: La mente rechaza la verdad de Dios, así
comenzó el pecado de toda la raza humana, Satanás logro que Eva dudará que
era cierto lo que Dios había dicho, Genesis3:1-5. Los pensamientos erróneos
conducen a emociones erradas y acciones erróneas. Por la incredulidad los
hombres rechazaron la Verdad Encarnada y Crucifixión al Hijo de Dios, Juan
1:1-12; 14:6; 3:14-18. Negarnos a creer lo que Dios dice y buscar otros caminos
de salvación es un pecado de obstinación en la incredulidad, es rechazar la
verdad de Dios y aún a Dios mismo, Hebreos 2:23.
 Indiferencia al amor: Dios es amor, 1 Juan 4:8 y desea que nosotros como hijos
suyos compartamos su naturaleza. Dios desea entrar y llenar cada vida con su
amor, Romanos 5:5. Cuando nos sentimos llenos del amor de Dios por nosotros,

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 le respondemos con nuestra gratitud y nuestro amor. La adoración y la alabanza
son simplemente el modo de expresar ese amor, confianza y devoción. El ritual
de adoración desprovisto de amor es una formalidad vacía. Negarse a permitir
que el amor sea el principio que gobierne nuestra vida es rechazar a Dios.
 Rebeldía en contra de su autoridad: Dios ha establecido ciertas leyes
naturales, morales, y espirituales para el beneficio de toda su creación. Pero el
hombre ha desafiado la autoridad de Dios, se ha revelado contra su gobierno y
ha declarado su independencia de Él, desea autogobernarse y seguir su propio
camino en lugar de acomodarse al plan de Dios para su vida. Este es el pecado
de la voluntad o pecado voluntario. La rebeldía lleva a la desobediencia y a
quebrantar las leyes de Dios para la mente, las emociones y el cuerpo. Debemos
hacer lo bueno y no lo malo, cualquier mal que hacemos deliberadamente a otras
personas, es también un pecado contra Dios, 1 Juan 3:4; 5:17.
 Errar el blanco: Dios nos creó con el propósito de que en calidad de hijos suyos
podamos amarle, honrarle y disfrutar de su amor para siempre. La finalidad del
hombre es glorificar a Dios y disfrutar de Él para siempre. Pecar es apartarse de
Dios y del propósito para el cual nos ha creado, errando en la vida. La Biblia con
mayor frecuencia para hablar del pecado se refiere a la autoseparación de Dios,
esto significa “errar”, no dar en el blanco, es decir; tomar una dirección
equivocada en la vida y en el uso de nuestras facultades. La gente apunta a metas
equivocadas: placer, poder, seguridad, popularidad. El pecado es el uso erróneo
de la vida, desviándonos de los propósitos y las facultades que Dios nos ha dado
para nuestro bien.
II. Mostrar a la gente su necesidad
Jesús, el Gran Medico, se ofrece para curar la terrible enfermedad del pecado en la
humanidad, pero muchos no se interesan en la cura porque no se dan cuenta de su estado. El
único modo de salvarles la vida es convencerlos de su necesidad, mostrarles el diagnostico
que el Gran Medico ha hecho de su situación. Esto es lo que hace el Espíritu Santo cuando
los convence de su pecado para que se sometan a la operación que necesitan para salvar la
vida. En el Edén Dios hizo que los primeros pecadores se enfrentaran con su culpa y las
consecuencias de ella. Hay nos envía a nosotros con un mensaje destinado a convencer de
pecado. Debemos hacer ver a la gente su culpabilidad y el peligro en que se halla.
1. Mostrándoles su culpabilidad: Convencer de pecado es hacer que una persona
comprenda que es culpable de rebelión contra Dios y necesita ser perdonada, aun
aquellas que se creen que son lo suficientemente buenas como para no necesitar ser
perdonadas. Tal como al mirarnos al espejo miramos alguna mancha en el rostro,
aunque no lo sabíamos, de igual modo podemos mirarnos en el espejo de la Palabra
de Dios. A través de ella podemos ver nuestra persona a la luz de las normas de la
santidad de Dios, Santiago 1:21-25. El Espíritu Santo nos ayuda a ver aquellos

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 pecados nuestros que ni siquiera sabíamos que existían, Juan 1:8; Isaías 64:6;
Romanos 3:23; Santiago 2:10.
Las cosas buenas que haga no borran la culpa por haber quebrantado la ley de Dios,
Mateo 22:37-38.
Jesús denuncio los pecados del Espíritu: el egoísmo, los pensamientos lascivos, la
actitud crítica, la incredulidad, mostrando así al hombre su culpabilidad y le exhorta a
arrepentirse para poder ser salvo.
Al hombre no le gusta que le recuerden que es pecador, así que quienes predican
contra el pecado pueden esperar oposición como les sucedió a Jesús y a los profetas.
Cuando el Espíritu Santo convence a la gente de pecado, a menudo se vuelven
irritables y rebeldes contra el evangelio, esto no debe desalentarnos. Debemos ser
pacientes y no hablar ásperamente a quienes se resisten a nuestro testimonio, tal vez
lo que necesita es ver el amor de Dios manifestado en nosotros, ese amor que soporta
y perdona insultos.
2. Mostrándoles el peligro: Cualquiera sociedad o individuo que se niegue a vivir
conforme a las leyes físicas, morales y espirituales de Dios, se encamina a la
destrucción, Romanos 1:18-32. Mientras mejor podamos mostrarles a las personas el
peligro en que se hallan, más disposición tendrán a apartarse del pecado y ser salvos.

¡Peligro! Separación Esclavitud

¡El pecado!  Error Juicio
En aperación Infortunio Muerte

a) La separación: el pecado separa a los seres humanos de Dios, a unos de los

otros, a otros de sus hogares, de lo que Dios ha preparado para sus hijos. La
separación es voluntaria de parte del hombre, Génesis 3:23-24; Isaías 59:2. La
naturaleza de Dios no le permite recibirnos como hijos suyos si nos negamos a
abandonar el pecado. Aun siendo hijos de Dios, si pecamos de nuevo,
debemos arrepentirnos y pedir perdón, 1 Juan 1:5 – 2:2.
b) El error: el pecado enceguece a la gente para no vea la verdad, les hace creer
cualquier clase de errores, los separa de Cristo la luz del mundo y las hace
tropezar en la oscuridad de sus propias teorías y falsas filosofías de la vida,
Efesios 4:17-18; Mateo 15:12-14; Juan 7:17, 8:12; Romanos 1:18-32.
c) El infortunio: el pecado que separa a una persona de Dios le priva de las
bendiciones que provienen de Él: paz, gozo, amor, autorrealización y la
verdadera satisfacción en la vida. Los sufrimientos de la gente son
consecuencia del pecado, rechazar el bien que Dios planeó para nosotros
conduce a la perversidad, con sus desastrosas consecuencias.
Nos hallamos en un conflicto entre el bien y el mal. Dios nos invita a seguir su
camino, el diablo intenta arrastrarnos a la perdición. El gozo se mezcla con la

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 tristeza, el ser humano es en parte bueno y en parte malo, ama a algunas
personas y aborrece a otras, es bueno en algunas situaciones y malo en otras.
Escoger a Dios conduce a la felicidad perfecta que nunca termina, dedicarse al
pecado es perder aun la medida de la felicidad que este mundo ofrece al
quedar excluidos para siempre de todo lo que es bueno.
d) La esclavitud: el pecado esclaviza destruyendo el poder de su víctima para
resistir la tentación, mientras más se rinde al pecado la persona, más aumenta
el poder satánico sobre ella, de tal modo que algunas personas llegan a estar
poseídas por demonios, Juan 8:34; Romanos 6:15-23.
e) El juicio: el pecado conduce a un juicio ante Dios y hace reo de muerte.
Quienes quebrantan la ley deben ser juzgados y castigados conforme a la
seriedad del delito. La pena que merece el pecador es la muerte, separado
eternamente de Dios y esperando el día de su ejecución, Romanos 2:1-11, 16;
Juan 3:18-20; Hebreos 9:27.
f) La muerte: el pecado lleva a sus prisioneros a una muerte que está más allá
de los límites de nuestra imaginación, sufrimiento eterno, pesar y
remordimientos interminables, sin esperanza de liberación, separados
eternamente de Dios y de todo bien, encerrados para siempre con la horrible
presencia de Satanás y sus demonios, Mateo 25:41; Romanos 6:23;
Apocalipsis 20:11-15, 21:8.

CAPITULO IV

MÉTODOS DE EVANGELISMO

Los métodos son las maneras en las cuales presentamos a Cristo con la finalidad o el propósito de
persuadir a la gente a aceptarlo como salvador y servirle como Señor.

I. Tres realidades en el evangelismo

La gente es inexcusable delante de Dios, Él se ha revelado a través de creación, Romanos 1,
ha hablado muchas veces y de muchas maneras, Hebreos 1:1 y la realidad se manifiesta así:
a) La rudeza y dureza del hombre en su condición de pecador para atender y entender el
llamado de Dios.
b) La maravillosa paciencia de Dios en su perseverancia y su disposición para salvar al
pecador.
c) Dios no es ilimitado sino amplio en accionar, lo cual queda demostrado en los
diversos métodos que empleo en el pasado con sus siervos para guiarlos a la victoria.
En el A.T. Moisés, Josué, Gedeón y muchos otros fueron usados por Dios con
distintas estrategias con el solo objetivo de arrebatar este mundo de las garras del
enemigo. Actualmente nuestra lucha no es humana sino espiritual en las regiones

20
 celestes (demonios). Jesucristo fundó la iglesia para poder hacer esta lucha y ganarle
al enemigo las almas que tiene esclavizadas por el pecado.
II. Panorama del Nuevo Testamento
Dios continua obrando de diversas maneras a través de sus siervos escogidos: Juan el
Bautista predico a las multitudes, los discípulos testificaron de persona a persona (Andrés,
Felipe y otros), Jesús mismo obró milagros para que quienes no creían en la palabra,
creyesen por las obras. Posterior a su muerte y resurrección, quedó establecida la necesidad
de recibir al Espíritu Santo para ser más eficaz en la obra de Dios, Hechos 2 y 8. La
evangelización va dirigida a las multitudes, de persona a persona, pero en la iglesia primitiva
el método más eficaz fue en el templo y por las casas, Hechos 5:42.
III. Métodos tradicionales
Con el transcurso del tiempo la iglesia ha continuado la obra evangelística de varias maneras
con métodos que fueron eficaces durante un tiempo (campañas evangelística y sanidad
divina), en la actualidad estos métodos no dejan mucho fruto.
Otros agotaron todo lo que tenían para ofrecer a esta humanidad necesitada y se limitan a
autoproclamarse “la verdadera iglesia del Señor” tildando de falsas a las demás iglesias, para
que los simples se vayan con ellos.
IV. Métodos usados en la iglesia local
Cumpliendo el mandato del Señor la iglesia usa recursos y se esfuerza para alcanzar de una
u otra forma a los perdidos a través de:
a) Cultos en los hogares
b) Testificando en lugares públicos como parques, mercados, en las calles, en las
cárceles, hospitales, unidades de transporte, exhibiendo películas cristianas, etc.

Todo esto ha resultado positivamente en el evangelismo, pero cada día innovamos con
estrategias con la finalidad de alcanzar a los perdidos.
V. Los grupos familiares
La iglesia primitiva empezó la evangelización en los hogares, hoy la iglesia sigue la misma
línea a través de este método que se conoce como G.A.L. u otros.

Beneficios de los Grupos Familiares

Según Hechos 2:43, vemos cuatro razones que impulsan a la iglesia actual a usar este método
de evangelismo
a) Comunión, versículo 44
Desarrolla la unidad física espiritual, social, económica, etc.
b) Atención, versículo 46 – 47
Provee comprensión de las necesidades y mejor disposición de ayuda.
c) Consolidación, versículos 46 – 47
La vida se desarrolló en un ambiente espiritual de amor, gozo y alabanza.
d) Crecimiento, versículo 47

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 El Espíritu Santo encuentra campo fértil, ambiente propicio para redargüir aun los
corazones más duros, Salmo 133 y de esa manera el crecimiento lo da Dios.

CAPITULO V

EVANGELISMO DE NIÑOS, ADOLESCENTES Y JÓVENES

Nadie que comprenda la depravación humana, la misión de la iglesia y la comisión de Cristo

cuestiona la grande y apremiante necesidad de instruir a los niños en el camino de Cristo:

“Vayan, pues, y hagan discípulos de todas las naciones” (Marcos 16:15a).

“Dejen que los niños vengan a mí, y no se lo impidan, porque de los que son como éstos es el reino de
Dios” (Lucas 18:16).

“No lo ocultaremos a sus hijos, sino que contaremos a la generación venidera las alabanzas del Señor, su
poder y las maravillas que hizo. Porque él estableció un testimonio en Jacob, y puso una ley en Israel, la
cual ordenó a nuestros padres que enseñaran a sus hijos, para que la generación venidera lo supiera, aun
los hijos que habían de nacer, y éstos se levantaran y lo contaran a sus hijos, para que ellos pusieran su
confianza en Dios” (Salmos 78:4-7a).

La importancia de enseñar a los niños es clara. Pero inmediatamente surgen dos preguntas:

1. ¿Cómo debemos hacerlo para ser eficaces?

2. ¿Cómo debe ser el proceso de evangelización en los hogares cristianos, en la iglesia, las escuelas,
y en la comunidad?

Lo que nunca debemos olvidar

Antes de adentrarse a consejos más específicos, se debe establecer algunas verdades básicas que
jamás debemos olvidar.

Las iglesias pueden y deben instruir a los niños que asisten semana tras semana. Al mismo tiempo, es
importante dejar claro que la instrucción en casa es fundamental. Es ahí donde los pequeños pasan más
tiempo y aprenden no solo con palabras, sino también observando a sus padres. Ambas cosas son
imprescindibles.

Todo el contenido de la Biblia es importante. Tanto el Antiguo como el Nuevo Testamento son
Palabra de Dios y en ambos podemos encontrar el evangelio de Jesucristo. Es esencial siempre tener en
mente que toda la Escritura se trata de Dios. Está bien enseñar las historias bíblicas de manera creativa,
pero no cometamos el error de enfocarnos tanto en los personajes humanos que Dios termine pasando a
segundo plano. Queremos sembrar en nuestros hijos el conocimiento y temor de Dios.

22
 Tampoco olvidemos darles a nuestros niños la oportunidad de ir a los pies de Cristo en
arrepentimiento y fe. Nuestro objetivo principal en la evangelización es que los niños se encuentren con
Cristo y que tengan la oportunidad de volverse a él. Oremos y confiemos en Dios, quien hace la obra.

¿Cómo evangelizar a los niños de pecho?

Los niños entre cero a tres años de edad son como una esponja; tienen una mente óptima para
aprender. Esta es una edad crucial para instruir a nuestros niños, así que no perdamos el tiempo y
sembremos en ellos la semilla del conocimiento de Dios.

Los niños de pecho aprenden por los sentidos, principalmente la vista. Podemos mostrarles las
historias más puntuales del plan redentor de manera gráfica y con frases cortas. La repetición es clave. A
nuestros hijos les enseñamos la mayoría de los versículos que se saben repitiéndoselos muchas veces y
pidiéndoles que los articularan una y otra vez a la medida que crecían y aprendían a pronunciar.

El objetivo en esta edad es enseñarles que Dios es el Creador de todo, que debemos cuidar de lo
creado y orar en agradecimiento a Dios. Hay que llevarlos a la iglesia, leerles (puede ser útil usar biblias
ilustradas), orar por ellos y con ellos para que vean cómo se hace en privado y en público, y cantar con
ellos. Escojamos un repertorio de recursos sencillo y enfocado en que comprendan la doctrina de Dios,
la creación, la caída y la redención.

¿Cómo evangelizar a los niños que comienzan a leer y a escribir?

Con los niños más grandecitos (de 4 a 7 años) no podemos desaprovechar la oportunidad de
responder sus preguntas acerca de Dios. Ellos ya han pasado la etapa de mera observación, y ahora son
más lógicos en sus razonamientos. En esta edad es un poco más sencillo enseñar extendidamente con
palabras, ya que su tiempo de atención es más prolongado. Podemos ir a través de las historias bíblicas y
mostrarles la gran obra de Dios para mantener su relación con el hombre caído y su plan salvador que
Cristo consumó.
En esta etapa, las doctrinas bíblicas pueden y deben ser tratadas con ellos: la Trinidad, la autoridad de
las Escrituras, la vida y obra de Cristo, y la relación de Dios con su creación; claro, todo con
terminología a un nivel apropiado. Para esto se pueden utilizar traducciones en lenguaje sencillo,
dosificando las historias para contarlas en períodos breves (por ejemplo, de 10 a 15 minutos).
Como en la etapa anterior, debemos seguir orando por y con ellos, y llevándolos a la iglesia con
nosotros.

Niños de ocho años en adelante

Un niño de ocho años ya resuelve problemas matemáticos con cierto nivel de complejidad y suele
manejar muy bien el lenguaje. Obviamente hay diferencias de aprendizaje entre un niño de 8 años y uno
de 18. El punto es que de aquí en adelante, los niños son capaces de lidiar con temas más complejos, son
más independientes, y toman más iniciativa en aprender sobre lo que les interesa.

23
 En términos de contenido, este nivel no es tan diferente a los niveles anteriores. Con estos niños
navegaremos a través de la Biblia, mostrando las historias ordenadas que nos muestran desde la
creación, la caída, los actores reveladores y redentores de Dios hasta llegar a Cristo en el Nuevo
Testamento. En este nivel podemos extender el tiempo de exposición y utilizar un nivel terminológico
más alto.

También, como en la etapa interior, no debemos olvidar el rol de la oración y de la iglesia local.

En resumen, las verdades bíblicas que debemos enseñarles son las mismas; la diferencia es que tienen
que ser adaptadas según la edad y el nivel de los niños. Esa es la parte que nosotros jugamos, junto con
extenderles la invitación al arrepentimiento y la fe en Cristo. El fruto de nuestra evangelización está en
las manos de Dios. Nosotros evangelizamos a nuestros hijos confiando en la gracia y el poder de Dios.

Una nota para los maestros, padres y líderes de las iglesias

La instrucción teológica de los que enseñan a los niños la Palabra de Dios debe ser prioridad. La
mayoría de veces los profesores de niños y niñas son muy eficientes enseñando, pero
desafortunadamente su teología deja mucho que desear. Cambiemos esta realidad y démosle a la
instrucción de nuestros niños la importancia que merece. Tanto padres como maestros deben manejar la
Escritura con precisión para poder enseñar verdad a los pequeños.

CAPITULO VI

EVANGELISMO CON LITERATURA

I. Importancia de la Literatura
Alguien ha dicho: “Dime lo que lees y te diré quién eres. En la batalla que se libra en el mundo
entero para ganar las almas de los hombres, la página impresa es una de las armas más eficaces.
Diarios, revistas, libros, panfletos; todas estas cosas están formando la opinión del lector,
modelando su carácter y fijando el curso de su vida.
La página impresa puede ser usada para vida o para muerte; para bien o para mal. La
sensualidad, el materialismo, el humanismo, los deseos de la carne, los deseos de los ojos, y la
vanagloria de la vida, despiden su hedor de muerte desde muchas publicaciones que se hallan en
los puestos de diarios y las librerías.
Los representantes de las doctrinas falsas van de puerta en puerta vendiendo libros que propagan
sus errores. Los programas para enseñar a leer a los adultos hacen más urgente cada día este
reto. Un millón de adultos por semana están aprendiendo a leer. Estos millones de nuevos
lectores absorben ávidamente cualquier material impreso que se les da. ¿Hemos de abandonar el
campo a las falsas enseñanzas, o le daremos a la gente la verdad en una buena literatura?

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1. Ventajas de la literatura
¿Por qué es tan poderosa la literatura? ¿Por qué gastan tanto en ella las sectas falsas y
las organizaciones políticas? ¿Qué ventajas tiene la literatura sobre los demás medios
de comunicación del evangelismo? He aquí diez respuestas:

Ventajas de la Literatura
1. Permanencia
2. Retención
3. Multiplicación
4. Autoridad
5. Estudio objetivo
6. Identificación del lector
7. Satisfacción
8. Penetración
9. Convivencia
1.1. 10. Economía Permanencia: “La palabra
hablada se graba en el aire; la palabra
impresa se graba en granito”. ¿Qué hubiese sido del mensaje cristiano si nunca se
hubiera escrito la Biblia? ¿Qué sucede cuando una persona escucha el evangelio,
pero no tiene nada a lo cual referirse, nada que le refresque la memoria?
1.2. Retención: Recordamos mejor lo que vemos que lo que oímos. El mensaje escrito
y bien ilustrado mantiene la atención del lector y le permite volver a cualquier parte
que no haya comprendido. Le ayuda así a grabar el mensaje más profundamente en
la memoria.
1.3. Multiplicación: Por medio de la literatura, un testimonio o mensaje evangélico
puede multiplicarse millones de veces y difundirse a través del mundo. Por ejemplo:
el curso evangelístico Los grandes interrogantes de la vida se ha publicado en 58
idiomas. El Instituto Internacional por Correspondencia ha distribuido más de ocho
millones de ejemplares en 145 países. Se han recibido millares de testimonios de
conversión.
1.4. Autoridad: La gente en general le atribuye mayor autoridad a la página impresa
que a la palabra hablada. La mayoría de las personas tienden a creer cualquier cosa
que ven impresa. Esto se ve especialmente entre quienes tienen poca educación
formal.
1.5. Estudio Objetivo: No podemos discutir con un libro como lo hacemos con una
persona que quiera cambiar nuestras opiniones. Si un tratado nos muestra nuestras
faltas, no tenemos que defendernos. Lo podemos estudiar objetivamente, con la
mente abierta. Esta es una de las razones por las que son millares los que se
convierten con los cursos por correspondencia.
1.6. Identificación del lector: A todos nos gustan las historias. Podemos
identificarnos con los personajes. Sufrimos junto con el héroe en sus pruebas y nos
alegramos con él en su triunfo. Los testimonios, las biografías y las novelas
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 cristianas ayudan a las personas a darse cuenta de que necesitan a Cristo. Las
convence de que Dios puede ayudarlas a resolver sus problemas tal como ayudó a la
gente acerca de la cual está leyendo.
1.7. Satisfacción del hambre de leer: En muchos lugares las masas manifiestan un
hambre intensa de leer. Podemos satisfacerla con varias clases de literatura.
1.8. Penetración: La literatura puede penetrar en lugares donde las barreras políticas,
sociales o religiosas no dejan entrar al obrero cristiano.
1.9. Convivencia: Las circunstancias pueden hacer inconveniente o imposible para
algunas personas la asistencia a los cultos evangelísticos, pero pueden leer literatura
evangélica o estudiar un curso por correspondencia a su propia conveniencia en la
intimidad del hogar.
1.10. Economía: Con la producción en masa y un buen sistema de distribución, el
evangelismo por medio de la literatura es una de las formas más económicas de
alcanzar a las masas con el mensaje de salvación. En vista de los resultados, es una
de las mejores inversiones que podemos hacer.
2. Uso en el Evangelismo
Puesto que Dios mismo le dio a Moisés las tablas de piedra en el Sinaí, nos está
diciendo desde entonces que el mensaje hablado debe ser autenticado, suplementado y
conservado mediante la Palabra Escrita. Por lo tanto, la literatura es una parte vital del
evangelismo en la actualidad.

Usos de la Literatura
Con emisiones radiales En la visitación
Con programas de televisión En testimonio y consejo
En cultos evangelísticos Para anunciar los cultos
En la escuela dominical Para cantar el mensaje
En grupos de estudio bíblico Para ayudar a los nuevos
En estudios por Para obsequios
correspondencia

II. Selección de la Literatura

Bien sea que vayamos a preparar, publicar o distribuir literatura evangélica, debemos considerar
dos cosas que determinan su efectividad:
1. El contenido: La literatura debe ser interesante si queremos realmente que la gente la
lea. El titulo debe despertar su interés y crear el deseo por leer el tratado, el artículo o
libro. El mensaje debe ser claro, interesante y apropiado. Debe mostrarle al lector la
solución de sus problemas y llevarle a la acción. Por supuesto, el mensaje debe ser
doctrinalmente sano y relevante para el lector. Lo que puede interesar a cierto grupo
puede ser de poco interés para otro. Por lo tanto, debemos pensar en los lectores al
seleccionar la literatura y seguir así las reglas de la buena comunicación. Por supuesto, la
literatura debe ser bien escrita y gramaticalmente correcta.

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 Antes de decidirse por cualquier clase de literatura para el evangelismo, hay que leerla
por completo. Quizás quiera evaluarla de acuerdo a las preguntas siguientes. Se sugiere
tomar ahora un tratado y calificarlo como fuerte (F), regular (R) o débil (D) en cada
punto.

Evaluación del contenido F R D

1. ¿Despierta interés el titulo?
2. ¿Es importante el mensaje?
3. ¿Es doctrinalmente correcto?
4. ¿Es apropiado para la gente con la cual lo usará?
5. ¿Da la verdad positivamente sin atacar a nadie?
6. ¿Es interesante en su totalidad?
7. ¿Es claro y preciso?
8. ¿Es correcto gramaticalmente y en sus declaraciones hasta donde
usted puede asegurarlo?
9. ¿Es fácil de leer: de vocabulario fácil y oraciones no demasiados
largas?
10. ¿Tiene un impacto fuerte, que conduce a la acción?

La literatura destinada a evangelizar debe decirle al lector donde puede conseguir más
ayuda.

2. Apariencia: “Cuando abrí el sobre y hallé la primera lección de su curso por

correspondencia, la tire al cesto para papeles”, escribió un sacerdote, “pero era tan
atractiva, que volví a tomarla para echarle una mirada”. La leyó, contesto las preguntas,
envió la lección a la oficina de Instituto Internacional por Correspondencia para que la
revisaran y pidió las lecciones siguientes. Termino el curso y desde entonces lo
recomienda a otros.
Puede evaluar la apariencia de la literatura con estas preguntas. Le sugiero que evalué
ahora un cuanto a su apariencia el mismo tratado cuto contenido ya examino.

Evaluación de la apariencia F R D
¿Tiene papel de buena calidad?
¿Es fácil de leer el tamaño de la letra?
¿Es atractivo el diseño o esquema?
¿Está bien ilustrado?
¿Son apropiadas las ilustraciones?
¿Es suficientemente corto?

III. Distribución de la Literatura

Un joven marinero italiano se levantó a testificar en una iglesia de Roma. Conto que había
hallado una botella flotando en el rio Tíber. Dentro de la botella sellada encontró un mensaje

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evangélico que lo condujo a la salvación. Mientras, hablaba, las lágrimas rodaban por las
mejillas del pastor. Él había sido encarcelado una y otra vez por predicar el evangelio. Pero aun
en la cárcel había hallado manera de continuar evangelizando, metía un tratado o texto bíblico
en una botella vacía y la sellaba con un corcho. Después, por entre los barrotes de su celda, la
lanzaba al rio ¡Dios había usado una de sus botellas para salvar al marinero! ¡Ojala nosotros
estemos tan atentos como él para aprovechar nuestras oportunidades!

1. Obsequio de la literatura: Debemos alentar a todos los miembros de nuestras iglesias a

obsequiar, prestar o vender literatura cristiana.
a) Distribución gratuita de la literatura
Cualquiera que sea capaz de sonreír y extender la mano puede repartir folletos. Este
puede ser un fácil primer paso en el evangelismo. La amable invitación a leer un
folleto a veces abre el camino a una conversación sobre temas espirituales.
Las oportunidades son inacabables donde hay libertad religiosa. Usamos también el
correo para obsequiar literatura, ya sea con cartas, invitaciones o cursos por
correspondencia. Se puede usar la guía electrónica para realizar una distribución
sistemática que alcance a las personas cuyo nombre aparece en ella.
b) Regalos y premios
¿Qué mejor regalo hay que una Biblia, un buen libro, o una suscripción a una buena
revista cristiana? Su iglesia puede usarlos como premios de asistencia, de
memorización de textos bíblicos, o por alguna actuación sobresaliente. Podemos
obsequiar literatura en nuestro evangelismo personal y de varias maneras.
2. Prestamos de literatura
Es posible que su iglesia no tenga fondos para regalar mucha literatura, pero si prestar
libros y revistas. Puede desarrollar un programa adaptado a sus circunstancias, sea con
una biblioteca, una sala de lectura, o un ministerio personal de préstamo de libros. El
valor de una biblioteca o sala de lectura en el evangelismo depende más de su uso que
del número de libros que tiene.
La existencia de una sala de lectura aumentará el uso y la utilidad de su biblioteca. En la
iglesia ésta puede ser una sala de escuela dominical, o se pueden tener un estante de
libros y unas cuantas sillas en un rincón del auditorio.
Algunos obreros tienen bibliotecas móviles o portátiles. Llevan en una camioneta,
bicicleta o automóvil un buen surtido de libros para prestar y algunos para vender.
3. Venta de literatura
¿Cuál es, a fin de cuentas, la razón de que se venda literatura cristiana como una forma
de evangelismo? ¿Por qué no nos limitamos a prestarla u obsequiarla? Por dos razones:
a) Excepción hecha de los regalos especiales, la gente pone mayor valor en las cosas
que le cuestan algo.
b) No tenemos el dinero suficiente para regalar toda la literatura que se necesita para
el evangelismo.

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 3.1. Librerías y distribuidores
Las librerías evangélicas no sirven solamente para la venta de literatura. Son centros
de evangelismo. Lo que exhibe en sus vitrinas despierta el interés y hace pensar a la
gente. Los carteles anuncian reuniones especiales, programas radiales o televisados,
ventas especiales y literatura gratuita. Cuando hay materiales escolares, útiles de
oficina y buenos libros seculares en la vitrina, se atraen clientes que de otro modo no
entrarían en una librería religiosa. Las repisas de exhibición en el interior permiten
que los clientes les echen una ojeada a los libros y revistas. Algunas librerías tienen
una sala de lectura. Los que trabajan en la librería están allí para cumplir un
ministerio y a menudo tienen oportunidad de ayudar espiritualmente a las personas.
3.2. Métodos de promoción
Nuestra literatura no se vende por si sola. Debemos tratar de que la gente vea que la
necesita. Este es un principio fundamental del arte de vender. Debemos promover
cualquier cosa que queramos vender. A veces las iglesias evangélicas de un pueblo
se unen en una campaña para vender Biblias. La dirige un representante de la
Sociedad Bíblica. Primero se celebran sesiones de adiestramiento. Luego, todos son
asignados por equipos a diferentes sectores para la venta de casa en casa. En el
sector comercial pueden tener puestos de venta. Después de que Dios les bendice en
esta empresa, los obreros cobran ánimo para esfuerzos futuros con otros tipos de
material escrito.
4. Cooperación en literatura
El evangelismo por medio de la literatura depende de la colaboración de muchas
personas. Las iglesias dependen de las sociedades bíblicas, de las casas editoras y de las
librerías en cuanto al material. Estas a su vez dependen de las iglesias en cuanto al apoyo
económico y el respaldo en oración. La literatura gratuita destinada al evangelismo
puede ser provista únicamente en la medida en que las iglesias y las personas cooperen
para hacerlo posible.
La cooperación hace posible que se impriman los materiales en cantidades mayores y a
precios favorables.

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