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PLENARIO KAIRUS

Cuestiones a tratar
1-Si en el caso de pagarés con la cláusula "sin protesto", la mora del deudor se produce
por el vencimiento del plazo fijado en el documento.
2-Quien tiene la carga de la prueba de la presentación de los documentos al cobro.
Voto de Quintana Terán
-Mi opinión. El pagaré con cláusula "sin protesto" y a fecha determinada la mora se
configura por el solo vencimiento del plazo fijado, y que la prueba de la presentación
del documento al cobro en los términos prescriptos queda suplida por una presunción
legal favorable al portador; sin perjuicio del derecho del obligado de desvirtuar ese
extremo, si alega que la carga ha sido incumplida, mediante elementos de convicción
idóneos a ese fin
-Lo razonable es que el legitimado que posea el documento asuma el peso de
demostrar que lo ha presentado para el pago, pues quien toma la iniciativa de hacerlo
valer, y que para el logro de sus designios indispensablemente debe llevarlo consigo.
-Se encuentra en mejores condiciones de demostrar esas circunstancias que la persona
respecto de la cual se intenta hacer efectivo al cobro del crédito que, por hipótesis,
carece del instrumento.
-No tengo en mi memoria recuerdo de persona alguna que obligada cambiariamente
haya previsto para el día del vencimiento de una letra permanecer en su domicilio,
desde el alba hasta el ocaso, rodeada de quienes puedan dar fe el día de mañana de
que su acreedor no ha concurrido a reclamarle el pago, para de ese modo remontar
airosamente las disvaliosas consecuencias que se siguen del impago de la deuda.
-Solución de que el acreedor debe demostrar que ha comparecido al domicilio del
deudor a los fines de su constitución en mora en aquellas obligaciones que, aun siendo
de plazo cierto y determinado, son pagaderas en el domicilio de este último, entre
tanto para su cumplimiento requieren la cooperación del "accipiens".
-Demostrada por el acreedor la presentación al cobro, se presume que fue realizada en
término, salvo que el obligado acreditara lo contrario.
-Afirmar que la cláusula "sin protesto" no libera de presentar la letra en los términos
prescriptos y abrir la concreta posibilidad de cuestionar esos términos, callando lo
relativo a la presentación misma es dar por supuesto que para que un plazo haya
transcurrido debió haber acaecido el antecedente lógico que autorice a comiusrlo.
-Pienso que para sostener que alguna actividad se llevó a cabo fuera de un
determinado tiempo resulta insoslayable que la misma haya realmente ocurrido, o que
**en su caso** se la de por tal presuntivamente.
-Se ha sostenido que dispensado el protesto por una convención particular entre las
partes intervinientes en la letra, debe entenderse que no otra cosa se ha pactado que
la mora automática. De allí la necesidad de no protestarla.
-Pero mala o ilógica liberalidad sería la apuntada si fatalmente expusiera al acreedor a
demostrar por medios más complejos y a la larga inseguros que ha llevado a cabo el
presupuesto que la ley le ha autorizado omitir insinuándole, curiosamente, un
resultado positivo a sus legítimas aspiraciones de cobro.
-Se engendra una presunción favorable a la presentación oportuna de la letra. "Iuris
tantum" que el pagaré fue presentado debidamente a su vencimiento y se dieron los
avisos, correspondiendo probar lo contrario a aquél que lo expresa contra el portador.
-Comprender el problema importa anexar a la presunción de la ley un mecanismo
pronto y unilateral que no hace sino ratificar el sentido mismo de la dispensa y de la
prohibición del protesto, que no es otro que el de proveer de un medio eficaz y
expeditivo, para intentar el cobro de una deuda.
-Jurisprudencia de este tribunal ha seguido el criterio de que en el caso de pagarés con
la cláusula "sin protesto" la mora del deudor se produce por el vencimiento del plazo
fijado en el documento, con el agregado de que la presentación de la misma al cobro
queda presumida en favor del portador, incumbiéndole al obligado la carga de probar
que la presentación no fue realizada, o que se la hizo fuera de los términos prescriptos.
-Conclusion. En el caso de pagarés con la cláusula "sin protesto" la mora del deudor se
produce por el vencimiento del plazo fijado en el documento.
-La carga de la prueba de la presentación del documento al cobro queda suplida
por una presunción favorable al acreedor de que la misma se ha llevado a cabo;
incumbiéndole al obligado demostrar que la presentación no ha sido efectuada, o que
lo ha sido fuera de los términos prescriptos, si cuestiona esos extremos.
Voto del doctor Morandi
-Según mi opinión, los demandados no han incurrido en mora en el cumplimiento de
su obligación, no obstante la inserción en el texto del documento de la cláusula "sin
protesto", porque el acreedor no probó la presentación del mismo a su deudor, en su
domicilio, el que estaba previsto como lugar de pago, circunstancia que ni siquiera
alegó el accionante al iniciar los autos, ni intentó acreditar en el expediente por algún
medio fehaciente, limitándose a sostener, que la precitada cláusula "sin protesto", no
consiste solamente en eliminar dicha diligencia cambiaria como condición de la "acción
de regreso", sino que la misma busca también suprimir la carga de la "presentación"
del documento al deudor, invirtiendo de esta forma la prueba sobre quién debe hacer
valer la omisión de la precitada diligencia.
-La cláusula "sin protesto" no exime al acreedor de cumplir con la carga de la
presentación del documento al deudor, la que en materia de títulos de crédito tiene el
carácter de "insoslayable”
-Cabe precisar, que la cláusula "sin protesto", sólo exime de la intervención en el caso
de un oficial público, que, para la ley argentina, es un escribano público, a los fines de
levantar una constatación de la que resulte el no cumplimiento del pago por parte del
librador del pagaré pero ella, en mi concepto, no se extiende a eximir el requisito de la
"presentación"
-La inclusión de la cláusula "sin protesto", no libera al portador de presentarla,
circunstancia por la cual no basta "invocar" dicha presentación, sino que es necesario
"acreditar" que efectivamente, tal presentación "se ha hecho". El solo vencimiento del
documento, nada hacer presumir, en tanto el acreedor no demuestra que se apersonó
en el domicilio del deudor.
-Requisito "suficiente" para legitimar al poseedor regular, aunque no titular del
derecho, para el ejercicio del derecho mismo; de lo que resulta, que quien pretende
del deudor cambiario el cumplimiento de la obligación que surge del título (el pago de
la suma cambiaria), debe, primeramente, probar encontrarse en posesión del
documento, mediante su exhibición (presentación), al deudor.
-Cámara Comercial, 28 de abril de 1975, "La Docta Sociedad Cooperativa de Seguros
Limitada c. García Freire, Juan A. Resolvio que si el documento en ejecución señala en
forma expresa el domicilio en el cual debía ser exigido su pago, y no se alegó siquiera
habérselo presentado con esa finalidad, no cabe considerar que el deudor quedó
constituido en mora con el solo vencimiento del plazo, porque la obligación de pagar,
cuando de títulos de créditos se trata, emerge en el momento en que el título "es
presentado" al deudor, y ello, por las peculiares modalidades que los caracterizan:
autonomía, abstracción y literalidad; teniendo una forma de circulación que hace
"indeterminable" para el deudor, la persona del portador legítimo, hasta que éste se
presente "con" el documento, que no sólo es probatorio, sino también constitutivo de
la obligación.
-No caerá en mora el deudor, aún cuando se produzca el mero vencimiento del plazo,
si no se le presenta el título para su cobro, aún cuando se haya utilizado la cláusula "sin
protesto".
-La sala B ha sostenido reiteradamente, que la mora en materia de pagarés, cuando el
lugar de pago es el domicilio del deudor, aun cuando se haya utilizado la cláusula "sin
protesto", el mero vencimiento del plazo, por sí solo, no constituye en mora al deudor,
y, en tal situación, el acreedor, deberá demostrar su oportuna presencia en el
domicilio de aquél, para integrar el "presupuesto de hecho" de la mora.
-La presentación es requerimiento "inexcusable", porque el solo vencimiento de la
fecha de pago no es motivo bastante para considerar al deudor incurso en mora, y, en
caso de omisión de tal diligencia, el punto de partida de los accesorios recién queda
satisfecho, ya con la "citación a reconocer firma".
-Si la mora es fuente de responsabilidad del deudor por el daño que experimenta el
acreedor por el cumplimiento retardado, lo que conlleva a su resarcimiento por parte
del primero respecto del segundo, la solución que se propicia implicaría hacer recaer
sobre el obligado la reparación de unos perjuicios que derivarían de la existencia de
una mora fundada en un retardo presumido, contra el cual, aquél quedaría
prácticamente inerme, y en manos de la buena o mala fe del acreedor, dándose lugar
de este modo, a una discriminación de trato, que en mi opinión, llegaría a ser contraria
a la "buena fe”.
-Pagaré que se ejecuta tiene vencimiento a fecha determinada y en él se ha
establecido expresamente como lugar de pago, el domicilio del deudor. Tratamiento
global del tema.
-A igual solución corresponde arribar, consecuentemente con lo expuesto, cuando el
pagaré no tuviese indicado el lugar de pago, porque tal omisión, al ser suplida por el
lugar de su emisión a falta de determinación convencional (del lugar de pago), debe
considerarse como tal, el domicilio del deudor.
-Lo mismo sucede cuando se trata de un pagaré "a la vista" o cuando el mismo
"carece" de fecha de vencimiento. El término se define con la presentación al cobro.
-¿Qué sucedería en el caso en que el documento se hubiese transmitido a terceros,
portadores legítimos, totalmente ignorados por el deudor? y otra, ¿Qué suerte correría
el deudor frente al portador negligente o de mala fe?
-Sostengo que la presentación al cobro del documento, es un hecho que el acreedor no
puede soslayar, cualquiera sea el ángulo desde el cual se analice la cuestión, aun
cuando se haya estipulado la cláusula "sin protesto", cuando el pago deba ser
efectuado en el domicilio de quien debe pagar.
-La mora del deudor no se produce por el mero vencimiento del plazo fijado en el
documento, si el lugar de pago **determinado expresa o implícitamente** es el
domicilio del deudor, debiendo acreditar el portador legítimo, para que aquélla se
produzca, la presentación del documento al cobro, en el precitado lugar, corriendo por
cuenta del deudor, en tal caso, la prueba de que dicha presentación no se ha
efectuado en término.
-Doctor Martiré adhirió al voto del doctor Morandi
Voto de doctor Alberti
-En mi opinión no importa tanto juzgar "in abstracto" sobre un llamado "estado de
mora del deudor", sino decidir sobre la imposición de una condena al pago de
accesorias, o la absolución respecto de éstas.
-Las accesorias se devengan desde el vencimiento (es decir: desde la fecha de
vencimiento inserta en el título, o la que resulta de sumar el plazo de vencimiento al
día de la emisión).
-La mora del deudor (si así quiere calificarse a tal situación), acaece por el vencimiento
del plazo fijado en el documento. Por cierto que en tal aseveración entiendo empleada
la denominación "mora" para aquella situación que origina las accesorias.
-Sobre la carga de la prueba de la presentación del documento para su cobro
-Supuesto de acción contra el suscriptor de un pagaré o el aceptante de una letra de
cambio
-Ni siquiera hace falta probar que los documentos hayan sido presentados al cobro, ni
sería útil probar que no lo hubieran sido. Esto es indiferente, porque las accesorias son
debidas en razón del transcurso de la fecha de vencimiento, y no por virtualidad de la
presentación
-El obligado que evita pagar la deuda, así ocurriera que sus intenciones no fueran esas,
continúa gozando del dinero que hubo de ser entregado en cumplimiento de la firma
puesta sobre la cambial. Ese goce económico del dinero es una ventaja patrimonial,
que se resarce con la oblación del interés.
-La presentación de la letra, o la omisión de tal presentación, es un tema que adquiriría
interés cuando fuere propuesta otra acción: La pretensión de percibir accesorias
distintas, y mayores, supuesto prácticamente inexistente
-Supuesto de acción dirigida contra un obligado de garantía
-La carga de presentar es relevante, porque su omisión provoca la caducidad de la
acción.
-Es terminante la solución legal: La prueba de la inobservancia del término para
presentar al cobro incumbe a quien invoque tal inobservancia contra el portador.
-Como la presentación ocurre dentro del tiempo, quien alega que no ha sido llevada a
cabo dice, en concreto, que ella no ocurrió en ciertos días determinados. Pedir del
sujeto excepcionante que acredite que no fue respetado el plazo para presentar **y
esto es lo que exige la ley** es tanto como requerirlo para que pruebe que la
presentación no ocurrió en la fecha en que debió ocurrir. Así resulta que la prueba
pedida por la ley, con palabras técnicas, es simplemente la prueba de que la
presentación fue omitida en los días en que debió ser efectuada. O sea simplemente,
que ella no ocurrió en ese momento del tiempo
-El medio de demostración, que es el protesto, opera como elemento constitutivo del
fundamento de la acción cartular. No es decisiva la presentación misma y solitaria, sino
el protesto consecuente con el rechazo del pago de la letra presentada.
-Dispensado el medio constitutivo, que es el protesto, el portador ha sido
constituido por obra de tal dispensa en una situación idéntica a aquella en que se
hallaría de haber levantado el protesto.
-El ejecutado que intenta probar que la presentación realmente fue omitida, debe
proveer prueba contra el instrumento.
-Conclusion. Las accesorias son devengadas desde la fecha del vencimiento. Sobre la
segunda de ellas sostengo que el tema es abstracto, en la acción contra el suscriptor
del pagaré o contra el aceptante de la letra de cambio; en tanto que de existir dispensa
convencional del protesto la prueba de la omisión de presentación pesa sobre el
obligado de garantía que alegara el incumplimiento de la presentación
Voto del doctor Barrancos y Vedia
-Al convenirse la dispensa de formalizar el protesto, el librador ha aceptado que la
mora se configure por el vencimiento del plazo estipulado y la presentación en término
-Salvo que el deudor pruebe la falta de presentación del documento en término, pues
la cláusula "sin protesto" no exime al portador de la obligación de presentar la letra en
los términos prescriptos ni de dar los avisos
-"Como no es fácil acreditar que la cambial fue presentada oportunamente a la
aceptación o al pago, lo cual podría enervar esta cláusula, la ley, favoreciendo al
portador establece la presunción que dicho acto se cumplió en tiempo". "La prueba de
la inobservancia de los términos incumbe a quien la invoca contra el portador".
-Doctor Bosch adhirió al voto del doctor Alberti.
Voto del doctor Williams
-La cláusula sin protesto no solamente dispensa de este acto notarial, sino también de
la presentación al pago. Considero que ello es así.
-Excluir la obligatoriedad de la presentación al pago en la letra de cambio o en el
pagaré **ya que la presentación a la aceptación de la letra de cambio tiene, como
veremos, connotaciones especiales, cuando una y otro llevan inserta la cláusula "sin
protesto"**, significa conmover la teoría general de los títulos de crédito y los
principios sobre los que se sustenta el derecho cambiario.
-Teoría general de los títulos de crédito, señalamos que su fin es otorgar al portador
del título certeza en la existencia del derecho, seguridad en su realización, y rapidez en
su circulación, constituyendo ésta última, la finalidad económica de su creación.
-Las distintas formas de legitimación activa presentan dos requisitos comunes: la
posesión del título y la presentación o exhibición del documento, de lo cual se
desprende, que tanto uno como otro, son presupuestos necesarios de la legitimación.
-La presentación al pago es, en consecuencia, necesaria y suficiente para pretender el
cumplimiento de la obligación por parte del deudor principal
-La presentación debe ser realizada mediante la exhibición material del título en el
término prescripto por la ley, ya que si el acreedor no cumple con el acto de
cooperación que consiste en la referida presentación de la letra de cambio o el pagaré,
el deudor no se encuentra en condiciones de cumplir su obligación, por ignorar quién
es el portador legitimado del título para exigir dicho pago.
-La presentación en término, y en su caso, el protesto, constituyen condición para el
ejercicio de la acción de regreso y para la acción directa
-El protesto consiste en el procedimiento por el cual un acreedor, portador de un
título, reclama su crédito con intervención de un oficial público y hace comprobar por
ésta que el deudor no quiere o no puede aceptar la letra de cambio (protesto por falta
de aceptación) o efectuar su pago (protesto por falta de pago).
-Salvo que se haya insertado una cláusula que imponga la presentación a la
aceptación, el protesto por falta de aceptación constituye condición necesaria de la
acción regresiva anticipada. Si el portador no presenta la letra de cambio a la
aceptación o si, habiéndolo hecho no levanta el protesto, conserva el derecho de
presentarla al pago en el momento del vencimiento y, frente a la negativa del girado,
levantar el protesto por falta de pago. El protesto por falta de pago es indispensable
para comprobar la negativa del girado o aceptante o del suscriptor del pagaré so pena
de caducidad de los recursos cambiarios regresivos.
-El protesto no es necesario para el ejercicio de la acción directa contra el aceptante de
la letra de cambio o contra el suscriptor del pagaré ni aun cuando se trata de letra
domiciliaria así como tampoco para accionar contra el avalista del obligado principal
-El protesto, en nuestro criterio, cumple la función de dejar documentada la mora del
deudor producida por la presentación por el escribano de la letra de cambio o del
pagaré al deudor y acreditar la falta de aceptación o de pago
-Para la viabilidad de la acción de regreso es necesario el protesto o la presentación si
el documento lleva la cláusula "sin protesto", mientras que para ejercer la acción
directa o principal, no es necesario el protesto previo o la presentación.
-La falta de cumplimiento de los recaudos indicados en la acción de regreso produce la
caducidad, efecto ajeno a la acción directa, la cual siempre prescribe
-La exigencia de presentación de la letra de cambio o pagaré que lleve la cláusula "sin
protesto", está íntimamente relacionada con la naturaleza de la caducidad cambiaria,
en tanto ésta no significa la pérdida de un derecho sino que, por el contrario, exige del
portador el cumplimiento de determinadas formalidades a fin de que la acción
cambiaria de regreso nazca y, en este caso dicha formalidad consista en la
presentación del título adquiriendo preponderancia el principio de la especificidad e
infungibilidad del acto a cumplir por el portador.
-Constituye un supuesto de caducidad cambiaria la falta de presentación, ya a
la aceptación, ya al pago, de la letra de cambio o el pagaré que lleven la cláusula "sin
protesto".
-Resulta que la presentación para el pago constituye una facultad y no una obligación
del portador respecto del obligado principal para el nacimiento de la acción cambiaria
directa de manera tal que la falta de presentación no impide al portador el ejercicio de
la acción cambiaria directa contra el deudor principal y su avalista lo cual implica una
diferencia sustancial respecto de la acción cambiaria de regreso
-La acción cambiaria de regreso presupone el cumplimiento de las formalidades
prescriptas por la ley (protesto o presentación si el título lleva la cláusula "sin
protesto") formalidades que no se requieren para la viabilidad de la acción directa.
-Los presupuestos propios de dichas acciones deben distinguirse de las circunstancias
susceptibles de constituir en mora al deudor. La mora del deudor solo se produce por
la presentación del documento es decir, mediante la exhibición del título y el
requerimiento verbal de su pago efectuadas en los lugares determinados
-La presentación no es necesaria cuando la voluntad de no pagar resulta de hechos
incontrovertibles
-La prueba de la presentación decimos, es a cargo del portador y tiene que resultar de
un acto fehaciente del deudor debidamente fechado, salvo que dicho deudor haya
reconocido, en forma expresa, y por acto separado, al portador presentante siendo
suficiente como presentación el envío por correo o por empleado, del aviso respectivo,
el que, sin embargo, sólo tiene efecto con referencia a la persona a quien se presta,
pero no con respecto a los demás coobligados.
-La prueba a cargo del deudor está orientada a desvirtuar la producida por el portador
o sea, a demostrar la inobservancia de los plazos de presentación invocados por el
portador
-Obligatoriedad de la presentación a los efectos de requerir el pago de la letra de
cambio al girado o aceptante, o al suscriptor en el pagaré.
-Presentación como presupuesto de las acciones cambiarias, de manera tal que no
constituye formalidad necesaria para la acción directa mientras que a ella está sujeto
el nacimiento de la acción de regreso, si se inserta la cláusula "sin protesto".
-Obligación de presentación del título a los fines de la constitución en mora del
obligado cambiario ya se trate de acción directa, ya de acción de regreso.
-Presentación al pago coincide con la presentación a los fines de la constitución en
mora y los supuestos en que se ha decidido que existe aquélla son necesarias y
suficientes para ésta
-Acreditada la presentación del título, se presume que la misma fue efectuada en
término, incumbiendo al obligado al pago, la prueba de que la misma fue efectuada
fuera de los plazos reales".
-Voto en el mismo sentido que lo han hecho mis distinguidos colegas doctores
Morandi y Martiré
-Doctor Bengolea adhirió al voto del doctor Alberti.
-Doctor Jarazo Veiras adhirió al voto del doctor Barrancos y Vedia
Voto del doctor Boggiano
-Quien invoca la inobservancia de los términos de presentación contra el portador
carga con la prueba de tal afirmación. Presunción legal según la cual el portador ha
presentado el título en los términos prescriptos.
-Tratándose de pagarés con cláusula "sin protesto" con plazo fijado en el documento,
supuesto específicamente sometido a la presente decisión plenaria, el portador no
necesita afirmar ni probar que presentó el título en término porque la norma
cambiaria le impone al obligado la carga de probar que el título se presentó fuera de
término
-La presunción legal no puede juzgarse arbitraria porque su fundamento radica en un
plausible principio de experiencia y en una prudente consideración práctica.
-Adhiere, pues, a los votos de los doctores Quintana Terán y Barrancos y Vedia
Voto del doctor Guerrero
-"La mora" del deudor se produce al vencimiento indicado en el título.
-En el supuesto de haberse incorporado la cláusula "sin protesto" la prueba de la
inexistencia de la carga de presentación o de los términos le incumbe al obligado de
regreso que la invoque.
-Sólo los obligados de regreso pueden invocar la falta de presentación y a ellos, por
haber negociado una cambial o un pagaré con cláusula de dispensa de protesto, les
corresponde probar la inobservancia de los términos a la falta de presentación.
-Doctor Quinterno adhirió al voto del doctor Alberti
Voto del doctor Anaa
-Quintana Terán y Barrancos y Vedia. Adhiero a sus votos.
SE RESUELVE
1) "En el caso de pagarés con la cláusula sin protesto la mora del deudor se produce
por el vencimiento del plazo fijado en el documento". 2) "Quien invoque la falta de
presentación de los documentos al cobro tiene la carga de la prueba de tal
inobservancia".

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