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El documento discute los peligros del coqueteo y cómo no es compatible con la pureza cristiana. Se comparan las descripciones bíblicas de una mujer adúltera con una mujer piadosa, mostrando que el coqueteo se alinea más con el carácter de la mujer adúltera. Varias mujeres luego comparten cómo han permitido que Dios moldee sus corazones para evitar el coqueteo y en su lugar tratar a los hombres con honor y pureza.
El documento discute los peligros del coqueteo y cómo no es compatible con la pureza cristiana. Se comparan las descripciones bíblicas de una mujer adúltera con una mujer piadosa, mostrando que el coqueteo se alinea más con el carácter de la mujer adúltera. Varias mujeres luego comparten cómo han permitido que Dios moldee sus corazones para evitar el coqueteo y en su lugar tratar a los hombres con honor y pureza.
El documento discute los peligros del coqueteo y cómo no es compatible con la pureza cristiana. Se comparan las descripciones bíblicas de una mujer adúltera con una mujer piadosa, mostrando que el coqueteo se alinea más con el carácter de la mujer adúltera. Varias mujeres luego comparten cómo han permitido que Dios moldee sus corazones para evitar el coqueteo y en su lugar tratar a los hombres con honor y pureza.
Coquetear: es una práctica tan común y aceptada. Muchas
personas incluso dirían que es una forma perfectamente buena ya veces necesaria de relacionarse con el sexo opuesto. Algunos podrían decir que tener un comportamiento directo y provocativo es la mejor manera de ser atractivo para los hombres. Esta mentalidad también se ha introducido en la iglesia. De hecho, la gran mayoría del coqueteo que he visto en mi vida ha sido en círculos cristianos. Incluso yo, que crecí en un hogar cristiano conservador donde de ninguna manera fue tolerado, fui culpable de ello más de una vez. ¿Por qué es ese coqueteo tan ampliamente aceptado? ¿Es realmente tan inofensivo como las personas lo hacen parecer? Comparemos la descripción de dos tipos diferentes de mujeres en la Biblia. Comenzaremos con la "mujer prohibida" o adúltera. Vemos que ella es "ruidosa y rebelde" (Prov. 7:11), que usa "palabras suaves" (Prov. 7: 5), y habla con una "cara audaz" (Prov. 7:13). Ahora, veamos la descripción de una mujer piadosa; ella "abre la boca con sabiduría" (Prov. 31:26), tiene un "espíritu gentil y tranquilo" (1 P. 3: 4), y es "reverente en el comportamiento" (Ti. 2: 3). Aunque se puede aceptar el coqueteo, ciertamente no se encuentra en la descripción de una mujer de carácter piadoso, ¡es todo lo contrario! Lo que nos viene a la mente cuando pensamos en una mujer coqueta probablemente se alinearía más con el carácter de, bueno ... la mujer adúltera. Ahora, aunque la mayor parte del coqueteo no llega a ese punto, ciertamente no nos lleva a la piedad. El resultado de esto no es una mayor pureza, un mayor honor de nuestro cónyuge (actual o futuro) o un mayor amor por el Señor. ¿Cómo nosotras, como mujeres que amamos a Dios y deseamos complacerlo en nuestras acciones y palabras, combatimos esta mentalidad de coqueteo tan inofensiva en nuestras propias vidas como en la iglesia en general? Aquí hay algunas maneras en que nosotros, en el equipo de Set Apart Girl, hemos permitido que Dios moldee nuestros corazones y nuestras mentes a este respecto, y algunas cosas prácticas que se pueden hacer para protegerse contra eso. HEATHER DICE: Una cosa que escuché a menudo después de observar una interacción demasiado cómoda con un chico es: "tal y tal es como un hermano mayor". Habiendo crecido con un hermano mayor y tres hermanos menores, algo no me pareció bien sobre esa declaración. Hay un par de cosas que no coinciden; en primer lugar, que ISN ' t tu hermano. Hay formas en que una hermana puede interactuar con su hermano que no son apropiadas con tipos con los que no están relacionados. Y segundo, en realidad no estaban actuando hacia ellos como las hermanas suelen actuar hacia los hermanos. Como hermana, nunca traté de atraer la atención de mi hermano mediante acciones directas, discursos en voz alta y en broma o gestos inapropiados. 1 Timoteo 5: 1 dice: " No reprendas a un hombre mayor, sino anímalo como lo harías con un padre, hombres más jóvenes como hermanos, mujeres mayores como madres, mujeres más jóvenes como hermanas, con toda pureza " (énfasis agregado). Aunque esto está hablando desde la perspectiva de un hombre, tiene mucho que podemos aplicar a nuestras propias vidas cuando nos relacionamos con hombres jóvenes. ¿La coquetería encaja en la categoría de tratarlos como hermanos "con toda pureza"? Nuestro deseo y motivo por lo que decimos y hacemos con los hombres debe ser que su atención se dirija a Jesús, no a nosotros. Nunca debemos distraerlos de perseguir al Señor, sino alentarlos hacia Él. Este es un buen indicador para probar la pureza de nuestras acciones y palabras. Si no estás seguro de cómo te encuentras, puede ser útil pedirle a una mujer piadosa (ya sea una compañera o alguien mayor) que observe la forma en que interactúas con los hombres jóvenes y que te haga responsable de mantener la pureza en tus amistades con ellos. ELSJE DICE: Una de las cosas que más me atrajo de mi esposo, Ben, antes de casarnos, fue la forma en que interactuó con las jóvenes que lo rodeaban. Sus conversaciones en grupos mixtos siempre estuvieron marcadas por el honor y la pureza; Nunca lo vi participar en un comportamiento coqueto y juguetón con una chica. Recordar las amistades de Ben antes del matrimonio, me hace sentir amado y apreciado, porque él era consciente y considerado con mis sentimientos, incluso antes de que supiera que algún día se casaría conmigo. A eso es a lo que estamos llamados como cristianos. Considerar a los demás como más importantes que nosotros y colocar sus necesidades por encima de las nuestras. Eso es exactamente lo contrario de lo que es coquetear. En esencia, coquetear es una forma poco saludable de atraer la atención hacia ti en un deseo de aprobación del sexo opuesto. Cuando envía mensajes de texto coquetos, participa en una interacción física lúdica con los niños o publica fotos inapropiadas de usted en Facebook, su deseo de atención tiene mayor prioridad que la gloria de Cristo o la pureza de los hombres jóvenes. Está colocando su necesidad de aprobación por encima del comando de pureza. El coqueteo tiene sus raíces en el egoísmo, y completamente sin la humildad con la que estamos llamados a caminar. Una actitud coqueta grita: "¡yo, yo, yo!" y "toma, toma toma!" mientras que el amor de Cristo dice "otros" y "da". Coquetear no honra a Dios, a tu futuro esposo o al tipo con el que estás coqueteando. Estás deseando dulces, sin calorías; desea la alegría de algo que solo está destinado al matrimonio, sin el compromiso que requiere el pacto matrimonial. ¡En lugar de seguir el patrón del mundo, permita que Dios transforme la forma en que interactúa con los jóvenes en su vida para mostrar el honor y la pureza del Cielo! MANDY DICE: Sentada en una mesa de madera escondida en la esquina de una cafetería, Giselle estaba sentada hablando con el apuesto y apuesto Joe. Giselle jugueteó juguetonamente con su cabello y lo miró a los ojos color avellana mientras agitaba los de ella. "¡Oh, Joe, eres tan inteligente!" Ella brotó y escupió a través de una risita mientras saltaba de su asiento. Se acercó al mostrador de barista para buscar su chai helado con otra risita y un guiño. Seamos honestos. Todos sabemos lo que significa coquetear. Y aunque esta escena era obviamente muy coqueta, hay otras formas en que un espíritu coqueto "disponible" se puede comunicar al sexo opuesto. Coquetear es el intento de atraer al sexo opuesto haciendo alarde de ti mismo, ya sea tu ingenio, tu encanto, tu figura, tu inteligencia, tu cualquier cosa, en lugar de Jesucristo. Es comportarse de una manera que exprese su atracción e intente inducir interés y provocar una respuesta del sexo opuesto. COMPRUEBA TUS MOTIVOS ¿Por qué frecuenta la cafetería en ciertos días a una hora determinada? ¿Por qué te vistes bien y te preparas para ir a la iglesia? ¿Por qué te uniste a ese pequeño grupo en particular? ¿Hay algo que esté haciendo para "exponerse" en un intento de llamar la atención de un hombre? Si es así, esta es una evidencia silenciosa y sutil de un espíritu coqueto. Pídale al Espíritu de Dios que verifique sus motivos y revele cualquier forma en la que se esté poniendo en situaciones en un intento de atraer la atención de los que lo rodean. En lugar de "exponerse", confíe en que Dios será fiel para guiar esta área de su vida y traerá a su Hombre Guapo para que "lo encuentre" cuando sea el momento adecuado. (Ver Proverbios 18.22.) LLÉVATE CON CLASE ¿Cuál es la antítesis del coqueteo? Llevarse con clase y ocuparse de sus propios asuntos. La Palabra de Dios dice que debemos buscar llevar “una vida tranquila y pacífica” (ver 1 Tesalonicenses 4:11) y esto incluye el área de interacción hombre / niña. En lugar de unirte al juego del coqueteo y las burlas, resuelve que no permitirás que tus ojos vaguen para ver si hay chicos guapos en la habitación. Decida que no permitirá que su interés máximo desvíe su corazón y su mente del rumbo, sino que elija rendirse continuamente a Cristo. Si sus ojos deambulan y su corazón está en constante vuelo con una atracción abrumadora, ¿qué cambiará cuando tenga una relación? Lo que se practica hoy se convierte en el fruto del mañana. Una joven apartada lleva la fragancia de Cristo en todo momento y lleva las marcas de la entrega fiel sobre su vida. Cargarse con clase no significa ser frío, blanco o aburrido. Ciertamente, usted y yo podemos entablar amistades agradables con otros hombres: nuestro trabajo es rendirnos al Espíritu de Dios, guardar el corazón y centrarnos en Cristo en nuestras interacciones. Con oración, encomiende esta área de tu vida a Jesucristo y permítele que dirija tus palabras, acciones y expresiones. Él será fiel para guiarte en sus caminos de justicia mientras confías y le obedeces. DEFENDER SU POSICIÓN "Aquí le mostramos cómo enviarle el mensaje de que se siente atraído por él ..." y ". . . si hace esto o aquello a cambio, sabrás que le gustas ". Con una mezcla de emociones de disgusto y pena, apenas podía creer lo que estaba leyendo, ya que recientemente hojeé un libro moderno "cristiano" sobre las relaciones. Coquetear en estos días se considera una forma de arte para estudiar, practicar y perfeccionar. Es cierto, incluso en nuestro "mundo cristiano", el coqueteo es algo que se ha marcado como una forma buena, correcta y normal para que los hombres y las niñas interactúen y "prueben las aguas". Debido a esta mentalidad retorcida, puede parecer oscuro para una mujer joven resistirse a ceder ante las presiones de nuestra cultura, sociedad de la iglesia, familia y amigos. Negarse a "exponerse" o "darle una pista" se considera completamente mojigato. En lugar de buscar el consejo de personas que no tienen un alto estándar en esta área, busque personas piadosas con ideas afines que alienten y fortalezcan su postura al esperar lo mejor de Dios. Recuerde que no está solo buscando lo mejor de Dios en esta área de la vida. Aunque puede sentirse como un pequeño pececito nadando río arriba en un río furioso, continúe con alegría y completa persuasión de que así es como Dios lo ha llamado. Mantente firme y aferrate a las promesas intemporales de Dios para fortalecer tu corazón: “… sé fuerte y ten buen coraje; no temas ni desmayes, porque el SEÑOR tu Dios está contigo ... ”(Jos. 1: 9). INTERACCIÓN HONORABLE Incluso hoy, usted y yo podemos estar fielmente comprometidos con el hombre que Dios ha elegido para nosotros al estar completamente comprometidos con Jesucristo y su gloria en nuestras vidas. Con oración (y según sea necesario, continuamente ) rinde esta área de tu vida a Jesucristo. Si eres fiel en rendirte a Dios y buscar Su Reino primero, no hay necesidad de revolcarte en la preocupación de cómo interactuar con los chicos de tu vida. A medida que el Rey de todos los reyes se mude a tu corazón y purifique tu vida, la interacción honorable con el sexo opuesto será una salida y una demostración del reinado de Cristo en esta área de tu vida. LA GRACIA DE DIOS ESPERA Incluso cuando separamos a las mujeres jóvenes, es probable que no podamos afirmar la perfección máxima en nuestras interacciones con el sexo opuesto. Aunque ser apartado no significa ser perfecto, significa rendirse por completo a Aquel que es, y permitir que Su transformación y naturaleza se hagan cargo y brillen brillantemente en cada área de nuestras vidas, la interacción hombre / niña no es una excepción. Cuando Dios toca esta área de nuestras vidas y nos guía suavemente en su pureza, nuestra respuesta requerida es ceder ante su poda y pedirle su gracia para caminar por el camino más alto del honor celestial. ¡Sobre nuestra súplica sincera, la gracia de Dios espera tomarnos de la mano y guiarnos hacia adelante en su fuerza!
5 duras verdades sobre coquetear
Tengamos una conversación sincera sobre el coqueteo. Quiero compartir contigo algunas cosas que desearía que alguien hubiera compartido conmigo en la escuela secundaria. Mirando hacia atrás, ahora me doy cuenta de cuán egoístas y autopromocionados eran mis motivos. No me habría llamado coqueta, pero definitivamente lo estaba. Es tan obvio para mí ahora. Sí, mi madre intentó decirme, pero realmente no me importó. Necesitaba una niña mayor (alguien que estuviera unos años por delante de mí) para mirarme a los ojos y ser honesta conmigo sobre mis acciones. Sin embargo, eso nunca sucedió. No fue hasta después de años de coquetear y burlarse de los corazones de muchos tipos diferentes que finalmente me di cuenta de cuán egoístas y desagradables eran realmente mis acciones. En este momento, mi objetivo es ser esa chica mayor en tu vida. Para decirte las duras verdades sobre el coqueteo que no quieres escuchar (pero que realmente necesitas). Estoy compartiendo esto contigo porque te amo y me preocupo por ti. Aquí hay algunos comentarios que he escuchado recientemente de mujeres cristianas solteras sobre el coqueteo. "Coquetear no es gran cosa". "Estoy totalmente de acuerdo con el coqueteo" “Coquetear no es un problema. La gente necesita calmarse." "No estoy coqueteando, solo estoy siendo amigable". Si usted, o alguien que conoce, ha hecho un comentario como este, quédese. ¡Esta publicación de blog es para ti, sista! Coquetear según el diccionario se define de esta manera: "Compórtate como si estuvieras atraído o tratando de atraer a alguien, pero por diversión más que con intenciones serias". "Experimente o muestre un interés superficial en (una idea, actividad o movimiento) sin comprometerse seriamente".
"Comportarse como atraído sexualmente por alguien,
aunque no en serio". Coquetear es algo que hacemos para llamar la atención, hacer que un chico nos note, jugar con el corazón de alguien, obtener algo que queremos de alguien, impulsar nuestro propio ego y / o como una forma de competir con otras chicas. Hay más razones, pero esas son algunas de las cuales personalmente fui culpable de mí mismo. Me encanta esta cita de un artículo en setapartgirl.com. “Cuando envía mensajes de texto coquetos, participa en una interacción física lúdica con los niños o publica imágenes inapropiadas de usted en Facebook [u otras plataformas de redes sociales], su deseo de atención tiene mayor prioridad que la gloria de Cristo o la pureza de los hombres jóvenes. Está colocando su necesidad de aprobación por encima del comando de pureza. El coqueteo tiene sus raíces en el egoísmo, y completamente sin la humildad con la que estamos llamados a caminar. Una actitud coqueta grita: "¡yo, yo, yo!" y "toma, toma, toma!" mientras que el amor de Cristo dice "otros" y "da". El artículo continúa diciendo: “Nuestro deseo y motivo por lo que decimos y hacemos con los hombres debe ser que su atención se dirija a Jesús, no a nosotros. Nunca debemos distraerlos de perseguir al Señor, sino alentarlos hacia Él. Este es un buen indicador para probar la pureza de nuestras acciones y palabras ". Esa gran comprensión y sabiduría sobre el tema del coqueteo. Para ayudarnos a desempaquetar aún más este tema, estoy compartiendo con ustedes 5 Verdades difíciles sobre Flirting. 5 duras verdades sobre coquetear 1. La Biblia no da espacio para coquetear Si echamos un vistazo honesto a la Biblia, no encontraremos ningún pasaje que tolere el coqueteo entre las personas solteras. Incluso cuando se trata del matrimonio, el coqueteo no debe hacerse de una manera engañosa o egoísta, sino para dar, amar y servir. Si una mujer casada seduce sexualmente a su esposo, debería ser sincero amarlo. En la Biblia, veo que Dios hace distinciones muy claras entre una mujer sabia y una mujer salvaje. Proverbios 7 describe a una mujer salvaje como sexualmente atractiva (Prov. 7: 5), provocativa (Prov. 7:10), rebelde (Prov. 7:11), tentadora (Prov. 7:21) y ruidosa (Prov. 7 : 11). Por el contrario, otros pasajes en las Escrituras describen a una mujer sabia como ser, sabia con su lengua (Prov. 31:26), evita el pecado sexual (1 Cor. 6:13) mantiene sus ojos lejos del pecado (Salmo 101: 3), teme el Señor (Prov. 31:30) y ama la pureza (Fil. 4: 8). La mujer salvaje se centra en el autoservicio y en impulsar sus propios intereses. La mujer sabia se enfoca en glorificar a Dios y empujar a otros hacia Él. 2. Coquetear es motivado por el orgullo y el egoísmo Mirando hacia atrás en todos mis años de soltería, no puedo pensar en una sola vez en la que coqueteé por el deseo de servir a mis hermanos en Cristo. No Siempre estuve en el centro de mi motivación. Quería atención Quería ser notado. Quería competir con las otras chicas por la atención de cierto tipo. Quería ser envidiado. Quería poner celosas a otras chicas. Quería sentirme bonita. Quería, quería, quería. Eso es un montón de yoes. Y esas son muchas verdades difíciles sobre mi corazón. Veo a muchas chicas solteras coqueteando con hombres y veo mucho de mí en ellas. Cuando escucho su razonamiento de por qué coquetear está bien, solo quiero decir algunas verdades duras, “hermana, se honesta contigo misma. Estás coqueteando por ti. Tu como tu. Deja de jugar este juego tonto y actúa como si estuvieras buscando su mejor interés. Tu no eres." Si somos realmente honestos sobre el coqueteo, el yo es el centro de todo. Dios nunca aprueba el egoísmo, la autopromoción ni nada por el estilo. Estamos llamados a reflejarlo y señalarle a otros. No para nosotros mismos. 3. Coquetear no te da lo que realmente quieres ¿Qué hay en el centro de un acto coqueto? ¿Es el deseo de ser valorado? ¿Sentirse bella? ¿Poner a alguien celoso? ¿Para impulsar tu propia imagen? ¿Para que cierto chico se fije en ti? ¿Para sentirse digno? ¿Sentirse amado? Cualquiera sea la razón, coquetear nunca te dará lo que realmente quieres. No puede Incluso si atraes la atención del chico, no durará. Incluso si pones celosa a otra chica por un momento, eso pronto desaparecerá. Incluso si te sientes bonita, pronto necesitarás más atención para hacerte sentir bonita nuevamente. Dios no nos diseñó para encontrar nuestra satisfacción en nadie más que Él mismo. Él es el único que puede satisfacerte total y completamente. Él solo debería satisfacerte. 4. Coquetear es muy miope Cuando escuché a una chica soltera decir: "No hay nada malo en coquetear", quería preguntarle cuánto durará esta declaración. ¿No hay nada malo en coquetear porque eres soltero? ¿Qué pasa cuando tienes novio? ¿Todavía estás de acuerdo con coquetear con otros chicos y él con otras chicas? ¿Qué pasa cuando te casas? ¿Te gusta la idea de él coqueteando con otras mujeres? Si coquetear es tan inofensivo, ¿por qué sería importante si tu futuro esposo coquetea con otras mujeres cuando estás casado con él? Cuando profundizas un poco más, este razonamiento no tiene sentido. Coquetear es muy miope. Se trata de lo que quiero cuando lo quiero y cómo lo quiero. Me encantaría escuchar a una chica cristiana hacer un argumento legítimo en contra de eso. 😉 5. Coquetear no trae gloria a Dios Todo lo que hacemos en la vida (ya sea que comas o bebas o lo que sea que hagas) debe hacerse para la gloria de Dios. Todo lo significa todo. No hay espacios de los que Dios deba ser excluido. Incluso cuando te casas, el sexo debe hacerse para la gloria de Dios. Las relaciones prosperan cuando Dios está en el centro. Cuando los motivos son alimentados por vivir para la gloria de Dios. Puede comenzar a practicar para una relación fuerte, vibrante y saludable haciendo todo en su vida para la gloria de Dios. Coquetear puede sentirse bien ahora, pero es una práctica terrible para un matrimonio próspero. Hazte un favor a ti mismo y a los demás ahora y comienza a tratar a los que te rodean con un tipo de amor desinteresado y centrado en los demás. Trate a los demás con su mejor interés en mente. Pide a Dios que ayudará a mantener él en el centro de sus motivaciones. De acuerdo, niña. Eso es todo por ahora. Como dije antes, comparto estas duras verdades porque te amo y me preocupo por ti. Quiero que escuches lo que me hubiera gustado que alguien haya compartido conmigo a los 16 años. Tengo mucha curiosidad por saber lo que piensas sobre este tema. Por favor, déjenme un comentario a continuación y háganme saber sus pensamientos sobre el coqueteo. ¿Para ello? ¿En contra? ¿Qué ves en la Biblia? ¡Comparte tus pensamientos a continuación y hablemos!