COGNICIÓN, CONDUCTA Y ESTRUCTURA EN PSICOLOGÍA

ASTROLÓGICA.
GLOSARIO INTRODUCTORIO (según el Diccionario de la Real Academia
Española de la Lengua):

- Cognición (del latín cognitio, -onis): 1. f. Conocimiento (acción y efecto de

conocer).
- Conocimiento: 1. m. Acción y efecto de conocer. 2. m. Entendimiento,
inteligencia, razón natural. 3. m. Noción, saber o noticia elemental de algo (u. m.
en pl.). 4. m. Estado de vigilia en que una persona es consciente de lo que le
rodea. 5. m. Conocido (persona con quien se tiene algún trato, pero no amistad). 6.
m. Com. Documento que da el capitán de un buque mercante, en que declara tener
embarcadas en él ciertas mercancías que entregará a la persona y en el puerto
designados por el remitente. 7. m. Com. Documento o firma que se exige o se da
para identificar a quien pretende cobrar una letra de cambio, cheque, etc., cuando el
pagador no lo conoce. 8. m. desus. Papel firmado en que se confiesa haber recibido
algo de alguien, y se obliga a pagarlo o a devolverlo. 9. m. desus. Gratitud. 10. m.
pl. Saber o sabiduría.
- Comportamiento: 1. m. Manera de comportarse.
- Conducta (del latín conducta, “conducida”, “guiada”): 1. f. Manera con que las
personas se comportan en su vida y acciones. 2. f. Conducción. 3. f. Gobierno,
mando, guía, dirección. 4. f. Comisión para reclutar y conducir gente de guerra. 5.
f. Recua o carros que llevaban la moneda que se transportaba de una parte a otra, y
especialmente la que se llevaba a la corte. 6. f. Moneda transportada en recuas o
carros. 7. f. Mil. Gente nueva reclutada que los oficiales llevaban a los regimientos.
8. f. Psicol. Conjunto de las acciones con que un ser vivo responde a una
situación. 9. f. desus. Capitulación o contrato.
- Estructura (del latín structura): 1. f. Disposición o modo de estar relacionadas
las diferentes partes de un conjunto. 2. f. Distribución y orden de las partes
importantes de un edificio. 3. f. Distribución y orden con que está compuesta una
obra de ingenio, como un poema, una historia, etc. 4. f. Armadura, generalmente
de acero u hormigón armado, que, fija al suelo, sirve de sustentación a un edificio.

REFERENCIAS EN PSICOLOGÍA ASTROLÓGICA: De acuerdo con el método

Huber existe el sistema de dividir el sistema de casas en cuadrantes dinámicos. Cada
cuadrante dinámico comienza desde el punto de reposo (PR) de una casa fija a la
siguiente casa fija. Esto explica el funcionamiento psicológico de una persona durante
su vida. Primero se parte de un estado de cosas o de una estructura base (casa fija) del
que surge una cognición o conocimiento (casa mutable); desde ahí se generan unas
conductas con determinadas acciones (casa cardinal); y desde esas conductas se crean
nuevas estructuras en otros ámbitos (casa fija) o bien pueden salir reforzadas las viejas.
El proceso cíclico se resume con la frase “del pensamiento surge la energía que crea
la forma”.
 Existen un total de cuatro cuadrantes de acuerdo con el Método Huber: el
personal o del yo (PR 11-PR 2), el grupal o del colectivo (PR 2-PR 5), el impersonal
o el del entorno/tú (PR 5-PR 8) y el individual o del ser (PR 8-PR 11). En todos ellos
se da el mismo proceso de desarrollo psicológico mencionado anteriormente aunque con
variantes según cada persona, producidas a partir de las combinaciones de signo y casa.
Ello implica una mayor o menor tensión a la hora de integrar ambas partes en el empleo
de los planetas de modo adecuado para el mantenimiento del buen estado de la
conciencia (figura de aspectos).

PREGUNTA: Pero, ¿cómo puede facilitarse el trabajo de integración entre signos y

casas?

RESPUESTA: Empleando un sistema de concordancia entre regentes por casa y

regentes por signo por las cruces de ambos. Partamos de la base de que la casa es la
exigencia externa y el signo es el querer interno. Como sabemos cada casa tiene su
analogía con cada signo y, por lo tanto, habría que comprender la cruz y temperamento
a la que pertenece cada uno. Cabe recordar que los elementos se tienen en cuenta a la
hora de averiguar el temperamento o el modo de hacer las cosas de cara al exterior.
Pero las cruces se utilizan para estudiar la motivación intrínseca tras los
pensamientos, acciones y estados de cada persona y es el punto que más habría que
tener en cuenta.

Como sabemos también las tres cruces están regidas por tres cuerpos1
astronómicos de la personalidad (Sol, Luna y Saturno respectivamente) y tres
transpersonales o generacionales (Plutón, Neptuno y Urano siguiendo el orden por
cruces) que son las herramientas que se emplean para la evolución y maduración de los
anteriores. De ese modo, en las casas mutables (3, 6, 9 y 12) rigen la Luna y Neptuno,
en las cardinales (1, 4, 7 y 10) Sol y Plutón y en las fijas (2, 5, 8 y 11) Saturno y Urano.
Por lo que si hay un determinado tipo de signos en un tipo de casas en ese caso se
podría decir que la cognición, la conducta y las estructuras son de un tipo u otro y se
deben combinar los principios de casa y signo de la manera que se propone: sabiendo
dónde se encuentran los regentes de las cruces por signo y casa para el desarrollo
de la personalidad y su evolución, pudiendo la persona vivir desde su dimensión
interior y a la vez respondiendo a los requerimientos del exterior.

EJEMPLO: Si Acuario está en casa 12, como también pueden estarlo en las
casas 3, 6 y 9 Tauro, Leo y Escorpio respectivamente, a nivel cognitivo se cuenta con la
presencia de signos fijos. La cognición de la persona parte de estructuras y de
estados, por lo que habría una cognición fija e inmutable, muy dependiente de cualquier
tipo de estructura. Pero las estructuras cambian (paso de Saturno a Urano) y, con ello,
el pensamiento y el modo de percibir y de razonar las cosas de la persona. Si las
1
A partir de aquí se empleará el término “cuerpo” para agrupar a todos los elementos físicos de cualquier
horóscopo, sean estrellas, satélites, planetas y/o planetoides.
casas mutables exigen razonamiento, comprensión y sabiduría para vivir de modo más
flexible (Luna-Neptuno), cualquier constructo o estructura (Saturno-Urano) tiene que
adaptarse a esos cambios; a la vez que unas estructuras dadas por los signos fijos
proporcionan un principio esencial para orientar la cognición de las casas mutables
hacia una determinada dirección. Evidentemente habrá que ver dónde se ubican
Saturno y Urano para ver cómo se trabajan los signos fijos en las casas mutables.

EJEMPLO DE PERSONAJE HISTÓRICO:

Isabel I de Castilla “la Católica” (1451-1504). Nacida en Madrigal de las Altas Torres
(Ávila) el 1 de mayo de 1451 (según el calendario gregoriano; 22 de abril de 1451 según
el calendario juliano) a las 16:40:00. Muerta en Medina del Campo (Valladolid) el 26 de
noviembre de 1504 (Punto de la Edad ubicado en la zona mutable entre las casas 9 y 10
en Cáncer). Reina de la Corona de Castilla entre 1474 y 1504 (coronada el 13 de
diciembre de 1474, Punto de la Edad ubicado en la zona mutable entre las casas 4 y 5).

Observando la carta Rádix de la que fue cofundadora de la Monarquía Hispánica junto

con Fernando II el Católico (1452-1516) a partir de la unión dinástica entre las coronas
de Castilla y Aragón puede apreciarse que, a nivel cognitivo, Isabel contaba con signos
mutables: Virgo en la casa 12, Sagitario en la casa 3, Piscis en la casa 6 y Géminis en la
casa 9. A un nivel personal su cognición parte de los encuentros y contactos que ha
ido manteniendo desde su Luna, ubicada en Capricornio en la zona cardinal de la
casa 4. Ella era una reina muy cercana y sensible con el estado del colectivo, del
pueblo, siendo capaz de gobernar de acuerdo con sus necesidades pero, al mismo
tiempo, para permitirles progresar individualizándose (Capricornio)2 con la posibilidad
de que no estuviera tan controlado por una nobleza decadente que guerreaba
constantemente por el poder. Pero, al mismo tiempo, ese pueblo hizo cosas en contra de
las propias creencias de la reina que la forzaron a tomar decisiones drásticas, como la
expulsión del pueblo judío en julio de 1492.

La evolución de su cognición, cultivada a partir de la Luna, fue posible por

medio de Neptuno, ubicado en el Punto de Inversión (PI) en Virgo en la casa 12:
desde su retiro se veía a sí misma como una servidora, tanto de Dios como de la gente
corriente, cultivando una fe hacia la humildad y el saber hacer con el que tendría una
sabiduría especial para gobernar. Debía acercarse a su pueblo, reflexionar/rezar
constantemente para saber cuál era el mejor servicio posible que podía prestar desde el
trono en el que fue colocada y, así, reinar de un modo adecuado, anteponiendo los
intereses de su pueblo y de su fe católica3 por encima de cualquier cosa4. Entre ambos
planetas neutros existe, además, un trígono que potencia tanto el acceso a lo más interno
de la personalidad en la casa 12 como el captar el sentir de la población en la casa 4.

Desde esa cognición, y junto con los demás aspectos a la Luna y Neptuno, era
capaz de crear toda una estructura de poder político más dinámica pero con sus
defectos, la Monarquía Hispánica, precedente del Estado español y labrada con el
apoyo de su esposo desde la figura de ambivalencia doble presente en su horóscopo:
dos coronas, dos monarcas, cada una con sus leyes e instituciones pero actuando juntas
en determinados asuntos. La figura se podría interpretar desde el famoso lema “Tanto
monta, monta tanto”.

La cognición desarrollada desde su Luna y Neptuno condicionó la conducta que

Isabel fue desarrollando desde las casas cardinales, ocupadas también por signos de
este tipo. Libra se encuentra en la casa 1, Capricornio en la 4, Aries en la 7 y Cáncer en
la 10. Merece destacarse que su Sol en Tauro está inaspectado en la zona mutable de

2
Ella lo haría a través de campañas de conquista como la del Reino Nazarí de Granada (1482-1492), las
Islas Canarias (1496) e incluso plazas fuertes norteafricanas como Melilla (1497). Cabría preguntarse si
en la aprobación del proyecto de viaje de Cristóbal Colón (1450-1506) intervino esa sensibilidad lunar.
3
El desarrollo de su fe viene dado también por el aprendizaje efectuado en Sagitario en la casa 3
(aprender y transmitir unas creencias, una filosofía…), aunque respetaba otras creencias desde Géminis
en la casa 9. Nunca fue tan hostil contra judíos y moriscos y apostaba por la conversión pacífica y
voluntaria de éstos, algo a lo que Fernando el Católico se oponía. En Aragón ya existía antes que en
Castilla el Santo Oficio o Inquisición para perseguirlos y en Castilla fue importada.
4
La propia conjunción Saturno-Neptuno indique el por qué fue conocida con el apelativo de “la
Católica”: su seguridad estriba en tener una fe hacia el servicio (Virgo) para poner en orden el entorno
(Libra).
entre las casas 7 y 8. Esto quiere decir que Isabel era una mujer acostumbrada a lidiar
con los asuntos de otras personas en su entorno, agresivo y combativo (Aries) y basado
en unas estructuras humanas que estaban orientadas en torno al afán por poseer (Tauro).
Su autoconocimiento estaba basado en las múltiples intrigas palaciegas, conflictos
nobiliarios, disputas diplomáticas y enfrentamientos sociales heredados del pasado
castellano.

Por ello, debía resolverlos con el apoyo de un bando defensor del reforzamiento
del poder real frente al de los señores feudales, evolucionando la conducta solar desde
Plutón en Leo en la zona fija de la casa 10: ella sería un ser humano perfecto si, desde
una posición de altura, separada e individualizada (casa 10), podía ejercer el poder sobre
su entorno, irradiar seguridad, fuerza y estabilidad y, con ello, ser generosa con toda
Castilla, gobernando con amor (Leo); un poder personal de Isabel que, incluso hasta
nuestros días, todavía se siente incluso habiendo diferentes interpretaciones en forma de
novela, película o serie de televisión sobre ella. De no ser por ese Plutón no se formaría
el todo coherente de la figura de ambivalencia doble con la que emergería el primer
Estado Moderno de Europa.

Finalmente se encuentran las estructuras desarrolladas desde su conducta en las

casas fijas, ocupadas también por signos fijos: Escorpio en la casa 2, Acuario en la casa
5, Tauro en la casa 8 y Leo en la casa 11. A un nivel básico sus estructuras psicológicas
parten de su Saturno transfronterizo (Virgo-Libra) en la zona fija de la casa 12:
alejándose del mundo y profundizando en su ser encontraba los problemas del entorno
ante la carencia de ciertas estructuras necesarias para una mejora de la convivencia entre
personas en todo el reino; estructuras necesarias concretamente en la dispensación de
unos buenos servicios (casa 6) y de unas buenas relaciones con el entorno (casa 7).
Primero debía alcanzar una solidez interna en esa fe para luego, desde su elevada
posición, dispensarla hacia los demás.

Ello sería posible gracias a su Urano en Cáncer en la cúspide de la casa 10:

ser un individuo diferenciado del resto era, para Isabel, el apostar por un proyecto
vanguardista que generara bienestar en el colectivo, desarrollando desde los planetas
con los que aspecta (Luna, Venus y Marte), y que constituyen un flip-flop, una filosofía
de entendimiento y comunicación (Géminis en casa 9) como motor de acción (Marte) de
todo cuanto se hiciera por el colectivo (Luna en Capricornio en casa 4) para mejorar el
entorno, repleto de personas con intereses egoístas y básicos (Venus en Aries en casa
7)5.

5
De haberse cerrado el flip-flop por una cuadratura entre Venus y la Luna se formaría la figura
cuadrangular conocida como provocat, con la que Isabel hubiese sido capaz de hacer a su entorno más
comprensivo y dialogante si hiciera cuestionar a su pueblo sobre su propia actitud hacia las creencias
propias y ajenas, pudiendo alcanzar una mayor individualización. De haber sido así, el pensamiento
humanista que llegaba desde Italia hacia España y que era propio del Renacimiento hubiese podido
profundizar mucho más en el país y ser decisivo en la evolución política posterior. Sin embargo, la fuerte
EN RESUMEN: Isabel I la Católica, como cualquier gobernante de su tiempo, hizo lo
que pudo dentro de las condiciones existentes y con tan solo cincuenta y cinco años de
vida, no pudiendo desarrollar todo lo que tenía en su interior. No cabe duda de que, por
su figura de aspectos, contaba con un fuerte potencial que dejó realmente huella en la
Historia de España, de Europa y de la del mundo, además de haber sido todo un icono
del poder femenino, tanto en lo referente con sus elementos personales (Saturno-Luna-
Sol) como en lo que ha trascendido (Urano-Neptuno-Plutón), a nivel de casas y de
signos. Con este ejemplo se espera haber ayudado al lector en nuevas interpretaciones
sobre el sistema de regencias, habiendo próximamente una continuación sobre los
cuatro elementos o temperamentos.

fe católica existente, consolidada con la Contrarreforma del siglo XVI, no pudo hacerlo cuajar del todo.
Aún así, desde su figura se permitiría un notable desarrollo cultural y artístico (Siglo de Oro) y lo que es
más importante: ella generaría desde esa figura las bases de cómo debía ser la convivencia entre los
españoles y la población nativa americana, favoreciendo la preservación de los últimos a pesar de las
dificultades y de la “leyenda negra” creada con posterioridad sobre la dominación española.