Análisis de la película el príncipe de las mareas

En la película se evidencia que es una familia disfuncional. La familia está conformada

por un padre con características alcohólicas, carácter autoritario y abusivo con su
esposa; la madre es manipuladora y violenta, se va formando una familia hostil y
marcando la vida de sus hijos.

La familia tiene tres hijos: Loke, Savannah y Tom. Loke es el preferido del padre, tiene
características similares a él. Tom desarrolla una personalidad pasiva por la violencia
de su padre y busca protección de la madre. Savannah desenvuelve una personalidad
débil, presenta dificultad para recordar y culpabilidad conduciendo varias veces al
intento de suicidio.

La dinámica de la familia se ve afectada por un abuso sexual de personas externas a

la familia, resultando afectados la madre, Savannah y Tom, dándose cuenta el hijo
mayor de la situación y asesina a los abusadores y la madre al tercero. Creándose así
un secreto familiar que se ha prolongado toda la vida, incluso siendo adultos siguen
sin hablar de ese tema; esta situación es el detonante de los cambios de conducta de
cada miembro de la familia.

El abuso sexual, ocurre dentro del seno familiar y el hecho de guardarlo como secreto
familiar fomentó a futuro la represión de sentimientos y emociones que evocaran aquel
suceso para evadir el daño psicológico, así como conductas negativas que ello mismo
acarreó como baja autoestima, incapacidad afectiva, inseguridades, temores
irracionales, odio y resentimientos en cada uno de sus integrantes, siendo Tom el
principal afectado.

El acontecimiento traumante, trae como consecuencia la transición de Tom en un ser

introvertido, de conducta evasiva ante cualquier evento doloroso, el reprime sus
sentimientos para llevar a cabo su vida normal, aunque en su interior continua un
profundo dolor, es por esta razón que Tom desarrolla un mecanismos de defensa para
evitar diferentes acontecimientos de la infancia por medio del humor. Dicho
comportamiento se ve más afectado tras el divorcio de sus padres; la partida de Luke
a la guerra, cuya causa fue la violencia que desde pequeño moldeó su entorno,
además de la recurrente tendencia suicida de Savannah. Además, a estos elementos
traumáticos se suma la muerte de Luke, la cual trajo como consecuencia un profundo
cuadro de dolor y Tom decide suprimir cualquier tipo de emoción.
La muerte de Luke provoca en sus hermanos una confrontación, donde Savannah
intenta nuevamente suicidarse y Tom deja de lado el amor que siente por Sally, su
esposa, originando esto el distanciamiento en la pareja. Sally, piensa que su
matrimonio ya no funciona y que es momento de separarse para no seguir causando
mayor daño a sus hijas. Ante esta eventualidad, Tom acude a una psiquiatra
(Lowinstein) para que le ayude a conocer las vivencias infantiles de la familia con el
propósito de solucionar el problema.

Tom manifiesta resistencia al inicio del proceso terapéutico, sin embargo inicia a
manifestar el problema por medio de regresiones a su infancia, llevándolo a recordar
cómo fue abusado sexualmente; posteriormente se da la aceptación del daño sufrido
que se había ocultado por tantos años, el terapeuta después busca la reintegración
familiar.

Tom minimizar el pensamiento que sus padres habían estado construyendo en él y

que él mismo había alimentado desde niño. Este aprende a perdonarse a sí mismo y a
sus padres, para así poder luego dar amor y acercarse a su familia, para retomar la
relación con Sally y sus hijas, e incluso con su propia madre.