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La película Mejor imposible nos muestra como cada uno de los personajes manifiesta una

necesidad de afecto, pero el personaje central Melvin presenta un comportamiento propio y


característico de una persona obsesivo compulsivo, exteriorizando una conducta poco
habitual repetitiva, impulsiva- no controlable interfiriendo con su vida relacionado con su
higiene, seguridad, planificación y rituales, aparentando ser una persona organizada,
riguroso, apático e incomprensible, se muestra como alguien que no le interesa interactuar
con los demás, este personaje posiblemente se quedó fijado a alguna situación estresante en
un momento de su pasado, en una fase temprana de su vida, en la infancia, que ayudo a
desencadenar este tipo de trastorno. Así es como Melvin comenta “mi padre no salió del
cuarto por 11 años, me pegaba con una regla en las manos cuando me equivocaba tocando el
piano”. Estos rasgos son propios de una persona que durante su infancia tuvo como factor
nocivo básico la falta de afecto y cariño.

Por otra parte, un elemento importante presente en este personaje es la agresividad constante
al comunicarse con otros y sus aspectos sarcásticos, vemos que la agresividad es una de las
características de personas obsesivo-compulsivas y neuróticas. La neurosis de Melvin es
aquella donde prevalece la angustia y las reacciones pueden ser desencadenadas ante la
mínima provocación, por esto y las demás características se podría considerar a este
personaje como el eje fundamental de una historia muy interesante desde el punto de vista
psicoanalítico-constituida por un conjunto de emociones.

Aunque existe tratamiento para el trastorno obsesivo compulsivo puede no resultar en la cura,
pero puede ayudar a controlar los síntomas para que no controlen la vida diaria. Algunas
personas necesitan tratamiento durante toda la vida, los dos tratamientos principales para el
TOC son la psicoterapia y los medicamentos. A menudo, el tratamiento es más efectivo si se
combinan ambas cosas.

La terapia cognitivo-conductual (TCC) es un tipo de psicoterapia efectiva para muchas


personas con trastorno obsesivo compulsivo. La exposición con prevención de la respuesta
un tipo de terapia cognitivo conductual (TCC), implica la exposición gradual a objetos
temidos u obsesiones, como la suciedad y enseñar de maneras saludables para hacer frente a
la ansiedad. La EPR (exposición con prevención de la respuesta) implica esfuerzo y práctica,
pero se podrá disfrutar de una mejor calidad de vida una vez que aprendas a controlar tus
obsesiones y compulsiones, la terapia puede desarrollarse en sesiones individuales, familiares
o grupales.

Por último, están los medicamentos, determinados medicamentos psiquiátricos que pueden
usarse para controlar las obsesiones y compulsiones propias del trastorno obsesivo
compulsivo (TOC). Lo más frecuente es que primero se indiquen antidepresivos.

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