Está en la página 1de 2

¿Cómo percibe el cambio del Estado Social de Derecho ante el manejo que

se ha dado a la democracia en nuestro país?

La forma como se ha estructurado la organización social, el manejo del Estado, la forma de


gobierno y los modelos de desarrollo diseñados en Colombia, han facilitado la profundización de
las diferencias entre las relaciones de clases, el empobrecimiento de la población, la
concentración de poderes y con ellos, los enfrentamientos armados entre los distintos grupos
sociales, como única solución a esos problemas.

Luis Villar Borda se refiere a la democracia diciendo que “en realidad se trata una opinión que
refleja un pensamiento o una ideología política, es algo que concierne a una convicción personal
sobre el origen, la naturaleza y el ejercicio del poder. ¿Puede confiarse al elector, al ciudadano, la
decisión sobre quiénes hayan de gobernarlo? ¿Está bien que sean los propios administrados
quienes escojan a sus mandatarios, a los gestores de los negocios públicos, o es peligroso y
eventualmente perjudicial para la misma sociedad dejar en sus manos ese poder y es preferible
buscar otros métodos y procedimientos para esos fines? Como puede verse, no se trata de un
punto secundario, sino de algo esencial: es la diferencia entre una concepción democrática y una
concepción autocrática”

En dicha perspectiva tratamos al Estado Social y Democrático de Derecho en sus características


más importantes; así estudiamos la Democracia, forma de gobierno que actualmente se considera
consustancial al Estado, que privilegia la soberanía popular, el principio de constitucionalidad, la
igualdad ante la ley y la seguridad personal, en el marco de la vigencia efectiva de los Derechos
Económicos, Sociales y Culturales

La idea básica es que las leyes que, siguiendo lo establecido en las normas que regulan el “juego
democrático”, son aprobadas por la mayoría de los ciudadanos/as deben ser de obligado
cumplimiento para todos los ciudadanos/as sin distinción por motivos de sexo, raza o religión, tal
y como se recoge en la Declaración Universal de los Derechos Humanos. Esta es la esencia del
“pacto democrático”, cada ciudadano se compromete a cumplir las leyes que se adopten por
mayoría 

 La democracia es el intento de garantizar la igualdad política de todos los ciudadanos, y esta
defensa de la igualdad política es uno de los rasgos que diferencian la democracia de otras formas
de gobierno como la aristocracia, la oligarquía, los regímenes feudales y totalitarios
“La democracia no significa: soy tan bueno como tú. Sino: tú eres tan bueno como yo.”

Theodore Parker

“No hay democracia si no se entiende la Nación como una misión colectiva, un compromiso de
todos.”

Luís Carlos Galán

Hablar de democracia y derechos humanos supone el pleno respeto a las personas; en su forma de
vida, condición económica, sus ideologías; el respeto de los derechos sociales y culturales y sobre
todo respeto por su dignidad, e integridad, donde todos los integrantes del Estado tenga la
oportunidad de ser parte de las decisiones del gobierno, tener acceso al poder político, no
discriminarlo por motivo de raza, credo, religión u otras índoles, el Estado debe de optimizar el
respeto de los derechos humanos, en vez de menoscabarlos.

Referencias bibliográficas.

Bobbio, Norberto, El futuro de la democracia, 2a. ed. en español del Fondo de Cultura
Económica, México, 1996.

De la Madrid Hurtado, Miguel, Constitución, Estado de derecho y democracia, México, UNAM,


2004.

Rodríguez Zepeda, Jesús, Estado de derecho y democracia, No. 12 de la serie Cuadernos de


Divulgación de la Cultura Democrática, México, Instituto Federal Electoral, 2003.

También podría gustarte