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El origen de los mecanismos alternativos

en mexico

Origenes de los Medios Alternativos de Solución de


Conflicto

DEFINICIÓN DE LOS MEDIOS ALTERNATIVOS DE SOLUCION DE


CONFLICTOS

Los medios alternativos de solución de conflictos-MASC, pueden definirse todo en sentido


amplio como en sentido restringido.

En sentido amplio, los MASC, son aquellas atribuciones, alternativas al sistema judicial
oficial, que permite la solución privada de los conflictos.

En sentido restringido, los MASC, son aquellos procedimientos que buscan la solución a los
conflictos entre las partes, ya sea de manera directa entre ellas (o con el nombramiento de
agentes negociadores, como es el caso de la negociación) o mediante la intervención de un
tercero imparcial (como son los casos de la mediación, la conciliación y el arbitraje).

ANTECEDENTES HISTÓRICOS

Remotos antecedentes muestran que siempre estuvo presente en el espíritu de los hombres
sacrificar sus posiciones extremas para lograr un acuerdo perdurable que permitiera la
convivencia sin esfuerzos y en lógica armonía.

Algunos autores han señalado que la conciliación fue una de las primeras formas solutoras
de conflictos. Podemos señalar el iter de la conciliación en base a Grecia en donde figuraban
los Thesmotetas o Tesmotetes de Atenas realizaban una labor disuasoria respecto de las
intenciones litigiosas de los ciudadanos, buscando avenir a las partes del posible proceso
para que transaran el conflicto o, cuando menos, se comprometieran en árbitros.
No podemos olvidar a Roma y la ley de las 12 Tablas antecedentes de la conciliación así como
los griegos. Evidentemente los antecedentes españoles son los que más nos interesan, ya
que directamente inciden en el desarrollo de la figura conciliatoria en México.

Se encuentran antecedentes de la institución en estudio dentro del Fuero Juzgo, en el caso de


los llamados "pacis adsertores" o "mandaderos de paz", que enviaba el Rey para que
intervinieran en un pleito concreto, buscando la avenencia entre las partes.

ARBITRAJE

En teoría, el arbitraje parece un medio excelente de terminar las situaciones de conflicto, con
economía de tiempo y de dinero, y cuando se trata de cuentas que revisar y de relaciones
complicadas como son las sociales, susceptibles de los malos entendidos y que en muchas
ocasiones hay en juego un valor económico considerable, hay la ventaja de que el árbitro
dispone de más tiempo que un juez para su minucioso examen.

ANTECEDENTES HISTÓRICOS

El arbitraje constituye un antiquísimo procedimiento para resolver los conflictos entre los
comerciantes, fue conocido en las culturas Hebrea y China, pero donde tuvo mayor relevancia
fue en el Derecho Romano, a partir de la Ley de las XII Tablas, donde aparece el
procedimiento con la intervención de un magistrado que tenía la misión de impedir el ejercicio
de la justicia privada que se realizaba mediante acuerdos entre las partes, la decisión era
encomendada a un órgano privado que las partes elegían obligándose a acatarla en base a un
contrato arbitral denominado “litis contestatio”, y más cercano en el tiempo, en la legislación
procesal española, reconociendo a esta Institución en la Carta de 1812 recibiendo poderosa
influencia de la Constitución francesa.
MEDIACIÓN

Cuando las partes no pueden solucionar directamente una controversia y se interrumpen las
conversaciones, tienen la opción de recurrir a un tercero neutral para que promueva nuevas
reuniones y el reinicio del diálogo a fin de que ellas mismas desplieguen sus mejores
esfuerzos en encontrar una solución. A esta alternativa se le denomina mediación, y es, un
proceso participativo de resolución de conflictos que ha tomado importancia considerable en
el mundo y empieza a tener singular presencia en los países de América Latina.

ANTECEDENTES DE MEDIACIÓN EN MÉXICO

En la Universidad de Sonora desde 1993, en el postgrado de Derecho y Psicología de la


familia, se contemplaba en el plan de estudios la materia de mediación familiar, es ahí donde
surge el proyecto de creación del Centro de Mediación Familiar, iniciando sus actividades en
marzo de 2000. El doctor Jorge Pesqueia, quien en México empieza la labor de difusión y
capacitación en la materia, es considerado el primer promotor del empleo de la mediación en
México.

Sin embargo, fue el Estado de Quintana Roo, en el año de 1997, el primero en diseñar un
proyecto denominado Justicia Alternativa, que buscó materializar la igualdad jurídica en su
Constitución, estableciendo para ello medios alternos a los preestablecidos y vigentes en su
sistema jurídico.

Se realizaron modificaciones a su Constitución local, a fin de establecer en ella el derecho de


todo habitante del Estado a resolver sus controversias mediante la conciliación o mediación
antes, durante su tramitación y durante la ejecución.

Podemos decir que son considerables los esfuerzos en México por rescatar esta institución.
Actualmente, existen 20 estados en el país que cuentan con un Centro de Mediación o que
tienen iniciativas de ley que la han aprobado en sus respectivos congresos.

CONCILIACIÓN

Esta institución, tiende a eliminar un proceso ulterior. Es un medio de solución participativa


que se presenta cuando las partes recurren a un tercero neutral, quien además de convocar a
las partes y facilitar el reinicio del diálogo, puede, de considerarlo necesario, hacer
sugerencias de alternativas de solución para que sean evaluadas por las partes en el caso de
que estas no puedan llegar a un acuerdo y, de ser el caso, acordadas libremente, sin
embargo, las partes retienen el poder de decisión para aceptar o rechazar las sugerencias del
conciliador
ANTECEDENTES DE CONCILIACIÓN EN MÉXICO

No encontramos referencia a la figura conciliatoria en los "Elementos Constitucionales" de


Rayón, como tampoco en los "Sentimientos de la Nación" de Morelos, ni en la "Constitución
de Apatzingan".

La tentativa de conciliación se encargaba a los Alcaldes, y el procedimiento se ajustaba a la


ley referida del 9 de octubre de 1812; por último, se preveía que en los reglamentos
provisionales de cada provincia se debería conceder facultades a los Alcaldes de los pueblos
para realizar labores conciliatorias.

En la Constitución de 1824 se establece la obligación de acudir al "medio" de la conciliación


previamente a iniciar acción civil, o penal por injurias, según establecía el art. 155.

El "Reglamento Provisional Político del Imperio Mexicano" prevé, en su artículo 58, la


subsistencia de los Consulados, pero ejerciendo tan sólo actividades de conciliación y
arbitraje entre los comerciantes.

La última mención de la figura estudiada en nuestra historia constitucional la encontramos en


los proyectos de 1842, tanto del 26 de agosto como en el del 2 de noviembre. En ellos se
establece la obligatoriedad del intento conciliatorio estableciendo, al igual que la Quinta Ley
Constitucional de 1836, que la Ley señalaría los casos de excepción y el procedimiento a
seguir.

EL SURGIMIENTO DE LOS MECANISMO ALTERNOS EN MEXICO

La Constitución federal mexicana, a partir de la reforma del artículo 17 del 18 de junio de 2008,
introduce al orden jurídico nacional los mecanismos alternativos de resolución de conflictos
como un derecho humano. Es así como la justicia alternativa alcanza su punto más alto, en virtud
de que la norma constitucional la establece como obligatoria para todas las áreas del derecho.
Siguiendo la directriz que señala la Constitución en la materia, el presente artículo a través un
análisis crítico de la nueva Ley de Justicia Alternativa del Estado de Chihuahua, como caso de
estudio, busca determinar si la normativa estatal garantiza un verdadero acceso a la justicia
mediante los mecanismos alternativos de resolución de conflictos.
De la interpretación armónica del artículo 17 constitucional párrafo cuarto que dispone: que las
leyes preverán mecanismos alternativos de solución de controversias, en concordancia con el 8
de la Convención Americana sobre Derechos Humanos, que reglamenta las garantías judiciales y
el 14 del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, que considera el derecho de igualdad
de todas las personas ante los tribunales y el derecho al debido proceso. A partir de la reforma
hacia un nuevo sistema de justicia penal en junio de 2008, fueron reconocidos dentro del sistema
de justicia los mecanismos alternativos de solución de controversias. En ese contexto, a partir del
reconocimiento de estos mecanismos como alternativos a la solución de controversias, son
diversos los Estados de la república mexicana que han legislado en referencia a esos
mecanismos, sobre todo porque en la exposición de motivos de la reforma, se dijo que era
necesario la práctica de estos mecanismos para descongestionar la saturación que tienen los
tribunales en cuanto a procesos. En esta reflexión hay que resaltar que la Constitución Federal en
el citado artículo 17 cuarto párrafo, además de garantizar el acceso a los tribunales previamente
establecidos, reconoce como un derecho humano la posibilidad de que los conflictos también se
puedan resolver a través de los mecanismos alternativos de solución de controversias, siempre
que se encuentren previstos por la ley. Al respecto el Poder Judicial de la Federación a través de
su Colegiado de Circuito ha hecho pronunciamiento que como criterio resulta interesante porque
ya se ha ocupado de estudiar la práctica de los mecanismos alternativos de solución de
controversias, en el que define que gozan de la misma dignidad que el acceso a la jurisdicción del
Estado. “Acceso a los mecanismos alternativos de solución de controversias, como derecho
humano. Goza de la misma dignidad que el acceso a la jurisdicción del Estado”. Los artículos 17,
segundo párrafo, de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, 8 de la
Convención Americana sobre Derechos Humanos y 14 del Pacto Internacional de Derechos
Civiles y Políticos, reconocen a favor de los gobernados el acceso efectivo a la jurisdicción del
Estado, que será encomendada a tribunales que estarán expeditos para impartir justicia,
emitiendo sus resoluciones de manera pronta, completa e imparcial; en ese sentido, la
Constitución Federal en el citado artículo 17, cuarto párrafo, va más allá y además de garantizar el
acceso a los tribunales previamente establecidos, reconoce, como derecho humano, la
posibilidad de que los conflictos también se puedan resolver mediante los mecanismos
alternativos de solución de controversias, siempre y cuando estén previstos por la ley. Ahora
bien, en cuanto a los mecanismos alternativos de solución de controversias, se rescata la idea de
que son las partes las dueñas de su propio problema (litigio) y, por tanto, ellas son quienes deben
decidir la forma de resolverlo, por lo que pueden optar por un catálogo amplio de posibilidades,
en las que el proceso es una más. Los medios alternativos consisten en diversos procedimientos
mediante los cuales las personas puedan resolver sus controversias, sin necesidad de una
intervención jurisdiccional, y consisten en la negociación (autocomposición), mediación,
conciliación y el arbitraje (heterocomposición).

Si nos remontamos al origen histórico de la mediación, debemos ir al origen del mismo, que es el
hombre, ya que es tan antiguo como el conflicto, puesto que, por gozar de plena libertad para
desempeñar sus actividades sociales, económicas, políticas y culturales, tiende a encontrarse
inmerso en controversias que deben resolverse mediante un proceso jurisdiccional, donde en
reiteradas ocasiones, solo se busca satisfacer un interés personal. A través de la historia han
existido diversas formas de solución de conflicto, son la autotutela, autocomposición
heterocomposición:

a) Autotutela: Es la primera de las tres formas que existió para resolver la conflictiva social. Es
una forma egoísta y primitiva de solución1. Él más fuerte o el más hábil impone la solución a su
contraparte por medio de su inteligencia, su destreza o su habilidad, el litigio no se resuelve en
razón de la legalidad, sino que, solo una de las dos partes que intervienen en el conflicto, decide
de modo arbitrario como se resolvería su controversia.

b) Autocomposición: La segunda forma de solución al conflicto, en la cual las dos partes que
intervienen, de manera pacífica y voluntaria buscan la mejor forma de dar por terminado su
conflicto, la diferencia entre la autotutela y la autocomposición consiste en que, en la primera
existe una imposición y la autocomposición, es una manifestación de la voluntad entre las partes
que intervienen en el conflicto.

c) Heterocomposición: Es una forma evolucionada de solución de un conflicto, donde interviene


el Juzgador, que es un tercero ajeno e imparcial a la controversia, con el objetivo de dirimido o
solucionarlo, es el acto por el cual se dicta sentencia, esta forma de solución al litigio es un
proceso jurisdiccional, con la finalidad de la aplicar la ley al caso concreto.

Ante esta situación, el ser humano ha buscado las soluciones desde la vía jurisdiccional; es decir,
desde un proceso legal que se ha caracterizado por ser un proceso extenso, tedioso y costoso.
No obstante, en las últimas décadas, han surgido otras alternativas o mecanismos para dar
solución a aquellas diferencias que emanan de las relaciones sociales.

ANTECEDENTES EN MÉXICO ANTES DE LA REFORMA CONSTITUCIONAL DEL 2008

En México, al igual que en otros países, mucho se dice sobre la falta de objetividad, transparencia
e imparcialidad en la actuación de los operadores del derecho que tienen la delicada tarea de
procurar e impartir justicia. Además de que esta no es pronta ni expedita, sino todo lo contrario:
es retardada, formalista, carece de credibilidad y legitimidad y, en casos extremos, propicia la
impunidad.
Mucho se ha hablado acerca de las funciones y efectividad de los órganos jurisdiccionales, los
cuales deben impartir una justicia, sin embargo en la realidad es diferente, ya que no solo se
habla acerca de la carga excesiva de trabajo de los juzgados, sino también de la capacidad del
abogado, el cual ha sido formado para ganar, más no para dialogar, mediar, conciliar o llegar a un
acuerdo, asimismo, con el pronto crecimiento de la población, así como la tecnología, se ha
tenido que buscar nuevos mecanismos que resuelvan controversias en materia civil, familiar,
penal administrativo, laboral y mercantil.

Sin embargo, antes de la reforma constitucional del 2008, México ya contaba con tres Leyes a
nivel Federal y una estatal, que señalaban algún medio alternativo de solución de conflicto, las
cuales son:
1. Ley Federal de Protección al Consumidor: Publicada en el Diario Oficial de la Federación el
24 de diciembre de 1992, contiene dentro de su capitulado a los procedimientos
alternativos de solución de controversias, concretamente el procedimiento de conciliación
de los dígitos 111 al 116, y el procedimiento de arbitraje de los numerales 117 al 122.

2. Ley de Comercio Exterior: En su artículo 97, desde la reforma de 22 de diciembre de 1993,


preveía que “…cualquier parte interesada podrá optar por acudir a los mecanismos
alternativos de solución de controversias en materia de prácticas desleales contenidos en
tratados comerciales internacionales de los que México sea parte. De optarse por tales
mecanismos…”.

3. Ley de Protección y Defensa al Usuario de Servicios Financieros: Publicada en el Diario


Oficial de la Federación el 18 de enero de 1999, que, en su título quinto, en los artículos 60 a
72 ter, regula el procedimiento conciliatorio, y en los artículos 73 a 84 norma el
procedimiento de arbitraje, en amigable composición y en estricto derecho. Asimismo, la
Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros
(CONDUSEF), contempla a los MASC.

4. Ley Ambiental del Distrito Federal: En su artículo 209 bis señala que las autoridades
ambientales podrán aplicar mecanismos alternativos para la solución de conflictos
derivados de infracciones a las disposiciones jurídicas a que se refiere el artículo 201 del
mismo. Dentro de dichos mecanismos, se podrán considerar la mediación, el arbitraje y la
conciliación. En ningún caso los mecanismos alternativos de solución de conflictos
pueden implicar eximir de responsabilidad a los responsables de violaciones o
incumplimientos de la normatividad ambiental y tendrán por objeto resarcir daños al
ambiente y a los recursos naturales.
Dichas Leyes son un parteaguas importante en la regulación de los medios alternos de solución
de conflicto, principalmente la conciliación, ya que su principal objetivo es el diálogo, con la
finalidad de dirimir controversias que son de interés general de la sociedad.

Con la implementación de los medios alternos de solución de conflictos se busca llegar a los
siguientes objetivos generales:

a) Que la sociedad solucione sus conflictos por sí mismos.


b) Promover la mediación como un método de solución de conflictos.
c) Mejorar la comunicación en las relaciones interpersonales.
d) Contribuir a una mayor satisfacción y confianza de la sociedad con los sistemas de justicia.
e) Divulgar y promover la cultura de la paz social, tolerancia y diálogo.
f) Solucionar de forma pacífica los conflictos y no hacerlos jurisdiccionales, obteniendo una
disminución de la carga de trabajo en la utilización de la justicia tradicional.
Como se observó en líneas anteriores, la mediación surge con la finalidad de descongestionar el
trabajo de los juzgados y reducir las costas judiciales, sin embargo, jamás imaginaron sus
alcances y beneficios, ya que, en realidad, es un procedimiento que permite que las personas en
conflicto, tengan la oportunidad de expresar sus sentimientos, pretensiones, emociones y hasta
resentimientos, donde ellos mismos proponen la solución de su problema, pero de manera
pacífica, a través del diálogo y la comunicación.

BIBLIOGRAFIA
http://www.scielo.org.mx/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1405-91932017000200203
https://www.redalyc.org/pdf/3221/322132552006.pdf
https://revistas-Colaboracion.juridicas.unam.mx/index.php/juridica/article/view/11374/10421

http://ri.uaemex.mx/bitstream/handle/20.500.11799/94774/TESIS.pdf?
sequence=1&isAllowed=y
27 Biblioteca Jurídica Virtual del Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM. El
ombudsman de la salud en México. Díaz López de Falcó, Rosa María. p. 48
https://biblio.juridicas.unam.mx/bjv/detalle-libro/3709-el-ombudsman-de-la-salud-en-
mexico

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