Para la CNBV (2014b), las casas de bolsa son “sociedades anónimas
dedicadas a la intermediación con valores, lo que comprende el poner en contacto a oferentes y demandantes de valores, así como ofrecer y negociar valores por cuenta propia o de terceros en el mercado primario o secundario”, previa autorización de la CNBV para organizarse y operar, dado que es el organismo regulatorio de la forma y los términos en que las casas de bolsa: Deben realizar sus actividades y la prestación de servicios de inversión sobre valores a sus clientes, incluyendo el establecimiento de normas respecto del perfil de inversión de éstos, distribución de valores, la prevención de conflictos de interés y en general, reglas prudenciales para el sano desarrollo del mercado y la protección de los intereses del cliente (CNBV, 2014b:inciso 1, párrafo3). De acuerdo al artículo 171 de la Ley del Mercado de Valores, las casas de bolsa podrán: (i) fungir como asesores de las empresas para obtener financiamiento a través de la emisión de títulos; (ii) participar en las ofertas públicas como colocador de títulos o como representantes comunes de los tenedores de valores; (iii) actuar como formador de mercado manteniendo continuamente posturas de compra y de venta por un importe mínimo de valores; (iv) celebrar operaciones de compraventa, reporto y préstamo de valores, actuando por cuenta propia o de terceros; (v) liquidar operaciones por cuenta propia o de terceros; (vi) administrar y custodiar valores de terceros; ofrecer servicios de inversión asesorados y no asesorados; (vii) actuar como fiduciarias, administradores y ejecutores de prendas bursátiles; fungir como distribuidoras de acciones de sociedades de inversión; (viii) efectuar para terceros operaciones con derivados, divisas y metales amonedados (CNBV, 2014b: inciso 2). 3.3.1 Obligaciones en operaciones por cuenta de terceros Cuando operan en nombre del público inversionista, las casas de bolsa están obligadas a cumplir con lo establecido por la Ley del Mercado de Valores: 61 1. Prestar servicios de inversión a través de apoderados. 2. En materia de servicios asesorados, deberán: (i) evaluar los objetivos de inversión, la situación financiera y los conocimientos bursátiles de sus clientes para diseñar su perfil de inversión; (ii) analizar los productos financieros ofrecidos a sus clientes considerando su exposición a posibles riesgos; (iii) recomendar operaciones acordes a los perfiles de inversión definidos para sus clientes. 3. En materia de servicios no asesorados, deberán revelar a sus clientes: (i) que bajo esta modalidad, ellos serán responsables de analizar sus objetivos de inversión y determinar los riesgos de los productos financieros con los que operarán; (ii) las comisiones que cobrarán por los servicios de inversión que ofrezcan (CNBV, 2014b). 3.4 Funcionamiento y democratización del mercado de valores. Sólo el 4‰ de la población económicamente activa del país invierte en la BMV, lo que se tradujo en 263 mil cuentas de inversión durante el año 2018 (BMV, 2019); una cifra sorprendentemente baja derivada de la falta de educación financiera, desinformación y falsas creencias que argumentan que califican a los mercados financieros información financiera sobre la complejidad y la inaccesibilidad de los mercados financieros. Ideas erróneas que precisan ser reformuladas como parte de un proceso democratizador que los mercados financieros del país requieren iniciar con urgencia, especialmente en un momento en que los avances tecnológicos aproximan la información financiera y sus mercados al público en general (Urrea, 2019). Un mercado bursátil sano debería poder generar oportunidad de inversión y de financiamiento para grandes sectores de la población y no solo para unos cuantos afortunados. De no hacerlo, se está perdiendo la oportunidad para que millones de mexicanos utilicen este instrumento y para financiar el crecimiento acelerado de las empresas (IMCO; 2015: párrafo 1). 62 En la misma línea, la BMV intenta asumir “la responsabilidad de contribuir a desmitificar las creencias de que la Bolsa solamente es para un sector específico de la población o que necesitas tener mucha experiencia, grandes cantidades de dinero o una gran inteligencia” (BMV, 2019a: párrafo 2), con el propósito de acercar al público al mercado de valores para facilitar una mejor “planeación de sus finanzas de manera responsable y segura, con la convicción de que todo individuo debe tener acceso a la educación financiera” (BMV, 2018: párrafo 2), para un mejor uso de los servicios y productos financieros. Por otra parte, si bien es cierto que durante la mayor parte de su historia el mercado de valores se enfocó en inversores expertos, en los últimos años se ha ampliado para que todas las personas puedan acceder a él mediante el uso de herramientas tecnológicas sencillas orientadas a la inversión de activos (CONDUSEF, 2018a), elementos de gran importancia en la democratización de los mercados financieros.