Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Vivimos en una guerra constante en el mundo espiritual, y esta guerra tiene un objetivo: Nuestra
alma. Por un lado, los enemigos del alma tratando de alejarnos de la voluntad de Dios y por otro lado
Dios brindándonos su amor y fortaleza para resistir y vencer en cada uno de estos ataques, pero
nosotros en el medio jugamos un papel protagónico, pues es nuestra voluntad la que debe rendirse a
Dios y no ceder terreno al diablo.
La batalla que peleamos es real, aunque nuestros ojos espirituales están cerrados para ver lo que
espiritualmente ocurre a nuestro alrededor no por eso debemos ignorar que hay una batalla, pues
todo lo que ocurre en el plano físico es porque ha sido conquistado en el plano espiritual, es decir,
que para ganar terreno y defendernos debemos luchar y conquistar en el mundo espiritual lo que
deseamos ver conquistado en el mundo físico.
Satanás está enfocado en nuestra alma, pues de allí proviene nuestra voluntad, si quebranta nuestra
alma y doblega nuestra voluntad así ganará terreno sobre nuestras vidas y sobre nuestro entorno y
áreas de nuestras vidas.
La Palabra de Dios nos provee de las herramientas con las que debemos hacer frente a estos
enemigos, fuera de lo que está en la Biblia no hay otro método ni manera de ganar esta pelea
espiritual.
LA AMARGURA
Texto: Hebreos 12:15.
¿QUE ES LA AMARGURA?
La amargura es una emoción involuntaria que se agrava con el deseo de no querer perdonar.
Echa raíces y crece hasta cubrirlo todo. Absorbe los pensamientos y las fuerzas de la persona y
destruye su vida espiritual. No permite que la bendición de Dios llegue a la persona.
La amargura indica la carencia de perdón y reconciliación. Este sentimiento es como un cáncer que va
creciendo. Primero se muestra como rencor, luego se convierte en odio. A veces llega hasta la
búsqueda de venganza, de retribuir de alguna manera la mala acción.
CONSECUENCIAS DE LA AMARGURA:
El espíritu amargo impide que la persona entienda los verdaderos propósitos de Dios en determinada
situación: Es posible que la amargura lleve a conceptos equivocados de Dios. No ve el amor de Dios,
sino ve a Dios como un juez que está tratando de castigar.
El espíritu amargo contamina a otros, Hebreros 12:15.
El espíritu de amargura hace que la persona pierda perspectiva: Cuando la amargura echa raíces y se
convierte en norma de vida, la persona ve, estima, evalúa, juzga y toma decisiones según su espíritu
amargo. Las frases “todo el mundo” y “nadie” pertenecen al léxico de la amargura.
El espíritu amargo se disfraza como sabiduría o discernimiento: Es notable que Santiago emplea la
palabra “sabiduría” en el capítulo 3:14-15 al hablar de algunas de las actividades más carnales.
La amargura atrae seguidores. ¡Quien no desea escuchar un chisme acerca de otra persona!
El espíritu amargo da lugar al diablo, 1 Pedro 5:8.
El espíritu amargo puede causar problemas físicos: Algunas personas terminan sufriendo una gran
depresión, otros acaban con ulceras u otras enfermedades.
Nuestra sociedad está acostumbrada a manejarse con actitudes enojosas y agresivas. La gente se
enoja rápidamente, por cualquier cosa. La voluntad de Dios para sus hijos es muy diferente.
En esta clase vamos a detenernos para considerar a un enemigo del alma sumamente destructor: la
murmuración, o como le llamamos más cotidianamente “el chisme”.
RESULTADOS DE LA MURMURACION:
Crea división: (Hechos 6:1) la murmuración tiene la habilidad de enfrentar a la gente, y hace que el
hombre vea al hombre como su enemigo. La murmuración producirá confusión y la confusión lo
único que produce es división.
Rompe amistades: (Proverbios 16:28) la murmuración consigue separar amistades. Personas que
anduvieron juntas, que se amaron, a quienes les gustaba la mutua compañía el chismoso (a) las ha
separado. Ahora existe frialdad y tensión, todo porque alguien dio rienda suelta a la murmuración y
así de dos grandes amigos hizo dos grandes enemigos.
Paraliza la obra de la Iglesia: (Números 12:15) La historia de la Iglesia demuestra que la
murmuración detiene el crecimiento de la obra de Dios, la paraliza.
El tema de los celos merece un tratamiento muy especial. Es necesario distinguir las diferentes clases
de celos según su naturaleza, y de acuerdo a quien sea la persona celada. Así con la gracia del Señor,
podremos meditar en detalle sobre este enemigo del alma que atormenta a tantas personas
haciéndoles vivir en tormentos, en temores, iras, inseguridades y complejos.
Probablemente todos hemos tenido dudas e incertidumbres algunas veces en nuestra vida. Cuando
Moisés ascendió al Monte SINAI para recibir las tablas de la Ley de manos de Dios, y al estar mucho
tiempo fuera de la vista de su pueblo que esperaba ansiosamente su regreso, dudaron de que
volviera. Y se construyeron un becerro de oro (Éxodo 32:8). Su apostasía se debió a sus dudas.
CONCLUSION:
¿Quieres pedirle perdón a Dios? Oremos por lo siguiente:
- Para que hoy la bondad de Dios sea tuya. Lo pasado queda borrado. Él va a renovar tu fe.
- Para que seas fiel a Dios en tu adoración con el pueblo del Señor.
- Para que entregues tus pensamientos a Dios y cultives buenas amistades a partir de hoy.
- Para que confíes plenamente en Jesucristo y recibas la salvación que necesitas
- Para que no tengas más titubeos ni dudas. Para que confíes sin dudar en la Palabra de Dios.
LA HIPOCRESÍA
Texto: 1 Pedro 2:1,2.
Hoy en día muchos no quieren acercase a los caminos del Señor, ya que por el mal testimonio de
ciertos “cristianos” la gente resta credibilidad al evangelio. Es triste ver en nuestras iglesias tanta
gente que dentro de ella aparenta santidad y una buena relación con Dios, pero que en intimidad
deja mucho que desear. Es hora que nos levantemos como hijos de Dios y pongamos en alto el
Nombre de nuestro Señor no solo con palabras sino con hechos.
¿QUE ES HIPOCRESÍA?
La hipocresía es el acto de fingir que se tienen cualidades, ideas y sentimientos que en realidad no se
tienen. La palabra proviene del latín hypocrisis que significa acción de desempeñar un papel.
El que pretende o finge ser lo que no es. Es una trascripción del vocablo griego hypokriteis, que
significaba actor o protagonista en el teatro griego.
CONCLUSIÓN:
Si usted sólo aparenta tener fe sin acompañarla de obras, se parece a la higuera que se secó y murió
porque no dio frutos. La fe genuina incluye el dar frutos para el reino de Dios. Cuando el hombre
aparenta lo que no es, se ha engañado asimismo y ha mentido a los demás. Por el amor de Dios, no
vista la ropa de la hipocresía. La vida futura es lo eterno, este mundo, sólo un instante. Al cielo no
entran los hipócritas. No venda el reino de la eternidad por un segundo.
EL RENCOR
Texto: Proverbios 10:12.
Hoy en día vivimos en mundo lleno de rencor, odio y muchos sentimientos negativos que el enemigo
ha estado minando no solo en las personas que aún no conocen de Cristo sino también entre los
“hijos de Dios”. El enemigo es muy astuto y él sabe que cuando siembra una semilla de rencor en el
corazón de una persona, el mismo se encargará de hacer que crezca con una situación que vendrá a
su vida, las cuales el mismo enemigo ocupará para hacer crecer ese rencor.
¿QUE ES EL RENCOR?
Resentimiento arraigado y tenaz. (Definición de la Real Academia Española)
Es un profundo resentimiento que se incuba como una enfermedad. El rencoroso se aferra a ese
sentimiento de manera obstinada y obsesiva lo cual le provoca debilidad en su salud mental. La
persona que siente rencor suele "rumiar" sus rencores, aumentándolos generalmente con fantasías
creadas por sus pensamientos que nada tienen que ver con la realidad.
Cuando una de estas situaciones hacen nacer o crecer en nosotros una raíz de rencor u odio es ahí en
donde tenemos que analizar y percibir que el rencor es un sentimiento que comenzará a destruir
nuestra vida espiritual poco a poco y que sus consecuencias serán muy duras.
A lo mejor en tu vida has permitido que el rencor nazca y por más que has intentado quitarlo de tu
corazón has fracasado en el intento. Quizá tienes mucho tiempo de venir pidiéndole a Dios que quite
de tu vida ese sentimiento el cual no te deja servirle libremente, puesto que en tu mente vienen los
recuerdos del momento en el que fuiste dañado y eso hace que el rencor cobre fuerza en tu vida.
A lo mejor eres una persona que sabes que estas desagradando a Dios permitiendo que el rencor te
domine y has permitido que tu mente se cauterice y ya no vea ese sentimiento negativo que hay en
tu vida como algo malo, sino que siempre lo excusas haciéndote la víctima.
La verdad es que al hablar del rechazo lo primero que se me viene a la mente es nuestro Señor y
Salvador Jesucristo, puesto que él fue un ejemplo de rechazo, la mayoría de escribas, de fariseos o de
autoridades de aquel tiempo lo rechazaban y no aceptaban que el fuera el Cristo.
¿QUÉ ES El RECHAZO?
La Palabra rechazo viene de “Rechazar” el cual tiene varias definiciones, entre ellas:
•Contradecir lo que alguien expresa o no admitir lo que propone u ofrece.
•Mostrar oposición o desprecio a una persona, grupo, comunidad, etc.
Quizá la gran mayoría de nosotros en momentos determinados nos hemos sentido culpables en
varias situaciones. Lo malo de todo esto, es que hay muchas personas que cometieron ciertos errores
ya sea conscientemente o inconscientemente y pasan toda su vida culpándose de las consecuencias,
cosa que no tendría que ser así tomando en cuenta lo que dice en 1 Juan 1:9.
Una de las trampas que el Enemigo nos pone para no alcanzar la felicidad plena se llama Depresión,
aunque podríamos decir que es casi imposible que un cristiano que vive para Dios pueda tener esto.
¿QUE ES LA DEPRESIÓN?
Es una tendencia excesiva a encontrarse en un estado de ánimo bajo.
Sentimientos de impotencia, desesperanza, ineficiencia y tristeza.
Es un estado de abatimiento e infelicidad, que puede ser transitorio o permanente.
LA SOLUCIÓN A LA DEPRESIÓN:
Ir a la casa de Dios en pocas palabras Congregarnos. (Salmos 84: 1-7)
Mantener un hábito de Oración. (Salmos 69:13)
Echar sobre Dios mí depresión. (Salmos 55: 22)
Practicar la ALABANZA. (Salmos 69: 30-35)
Servir a Dios. “Cuando vivimos una vida activa en Dios esto nos ayuda a avanzar".