El Fedón es un diálogo que se ambienta en las últimas horas de vida de Sócrates,
donde están la mayoría de sus amigos reunidos en la cárcel a la espera de su ejecución mediante la ingestión de cicuta (planta toxica). En este diálogo Platón profundiza en la teoría de la reminiscencia y la inmortalidad del alma. El diálogo comienza días después con una conversación entre Equecrates y Fedón de Elis en la ciudad de Flius. Fedón le relata a Equécrates, por pedido del mismo, las últimas horas de vida y la conversación que tuvieron, así Fedón va relatándole detalle por detalle las conversaciones de Sócrates, las vivencias y cómo Sócrates moría (la descripción de Platón sobre cómo actuaba el veneno es muy detallada y precisa). Las conversaciones y discusiones de Sócrates se centran principalmente en Simmias y Cebes, amigos de Sócrates y discípulos del pitagórico Filolao, los cuales van discutiendo los más diversos temas, haciendo objeciones a Sócrates y éste demostrándoles que se equivocaban hasta desembocar en un mito escatológico de la travesía de las almas y una descripción del mundo. Cuando Sócrates y Cebes comienzan a hablar de la muerte, ven que el contrario de ella es la vida, así como el contrario del sueño es la vigilia y los diversos procesos de medios que existen entre estos dos para dar lugar al otro (el adormecimiento y el proceso de irse despertando), así entonces esto pasa a ser un circulo, en donde, para morir hay que vivir, y para vivir se tuvo que haber estado muerto ya que es ilógico que el fin de todas las cosas es la muerte. Al decir que la muerte no podría ser el fin inexorable de todas las cosas, estos dos amigos llegan a la conclusión de que algún día han de revivir. También concluyen que de las almas de los muertos han de vivir los vivos, por ende que las almas de los muertos existen y como de ellas las almas buenas expiden bien, y de las malas se expide el mal. Al estudiar este dialogo y razonar acerca de estos pensadores en el cual se basan principalmente este dialogo de las teorías que se plantean en el Fedón puedo decir que estoy algo de acuerdo con ellas, pero no del todo. Al decir Einstein que la materia no se puede crear ni destruir, sino que se transforma, podemos decir que la teoría de Sócrates no es tan descabellada como parece en un principio. Pero también pienso que en un momento dado este círculo deberá detenerse, ya que no tendría sentido nacer, crecer, reproducirnos, morirnos y revivir comenzando de nuevo el proceso. Pienso que quizá el hombre tendrá que llegar a un punto de “perfección” en el cual este ciclo se termine y poder pasar quizá así a una segunda fase de lo que es “vivir”, porque quizá este círculo tan solo sea la primera fase de nuestra vida espiritual y tendremos que pasar por más formas de vida en otras dimensiones. Según lo anterior, se podría decir entonces que el alma es inmortal. Si es inmortal, es muy probable que el alma recuerde algunas experiencias y sensaciones de otras vidas pasadas. Bien eso es básicamente lo que Sócrates plantea en la teoría de la reminiscencia. Sócrates plantea que todos nacemos ya con un conocimiento, y la idea no es aprender, pues en el fondo ya se sabe, sino recordarlo. Si se recuerdan experiencias de vidas pasadas o si se pudieran recordar, sería muy poco el conocimiento que en sí debería aprenderse. También nos dice que las cosas que son iguales entre ellas, aun les falta elementos para ser iguales totalmente entre ellas y nos plantea así varios ejemplos con árboles y rocas. A mi modo de ver, la idea de Sócrates puede llegar a ser cierta y para poder pasar a la segunda fase de nuestra vida espiritual es necesario manejar todos los conocimientos de la vida corporal, pero como es imposible aprenderlos todos en una sola vida, tenemos que repetir la vida corporal varias veces. De este modo estamos viendo como las segundas teorías se complementan ente sí. En conclusión, puedo deducir que pueden haber más de una fase de vida, en la cual, la vida corporal sea solamente un eslabón de una cadena cuyo final sea la perfección. Para pasar a la siguiente fase, es necesario manejar todos los conocimientos de esta vida, como vemos que es imposible en una sola vida, Sócrates plantea que los muertos vuelven a vivir y además pueden llegar a recordar sensaciones. Algo de lo cual estaba seguro Sócrates, y lo cual también considero verdadero es que con la muerte no acaba sino un proceso más en el proceso formativo del alma, o eso pienso.