UNIDAD 2

Movimientos literarios colombianos

Autor:Maxx-Studio /Shutterstock.com
Fuente: flick commons/Autor: Banrep Cultural/18/11/2013.

Tema 4
Literatura
modernista y
vanguardista

Título. “José Asunción Silva”. Autor. Modernismo.

Disponible en: https://commons.wikimedia.org/wiki/File:Jose_Asuncion_Silva.jpg

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El modernismo
A. Contexto histórico
Entre 1880 y 1920 Estados Unidos se erige
como el policía guardián de los intereses de
Latinoamérica y su presidente Teodoro Roosevelt,
con su ley del gran garrote, golpea a los
pueblos latinoamericanos: Colombia que se
encuentra librando la guerra de los Mil Días,
permitió la segregación de la República de
Panamá (1903) hecho que dio pie para la
construcción del canal, con lo cual Estados
Unidos descartó la competencia Francesa en
estos países.
El crecimiento de las economías nacionales
implicó una mayor dependencia comercial,
combinada con una acentuada dependencia
financiera. En efecto, para crecer, las economías
necesitaron de las inversiones extranjeras en forma
de préstamos al Estado, obras de infraestructura
e impulso de actividades atractivas. De este modo,
el capital extranjero adquirió un lugar central en las
nuevas economías latinoamericanas.
El cambio económico se hizo extensivo al
rapidísimo crecimiento de las ciudades. La
nueva burguesía que impulsaba este proceso
carecía de tradiciones culturales; estaba, por
eso, decidida a transformar el medio aldeano y
parroquial, echando mano a la modernización
que le proponía el pacto comercial con Europa.
La burguesía fue protagonista de la división
internacional del trabajo, que implicaba el
progreso material; amplió la oferta educativa y
produjo una rígida estratificación social
mediante la creación del proletariado y de la
clase media. El presidente Núñez hizo reformas
con las que pretendía sacar del caos en el que
se encontraba el país hacia 1880. Uno de estos
cambios fue la implantación del federalismo en
sustitución del centralismo, lo que originó la
redacción final de la Constitución de 1886,
escrita por Miguel Antonio Caro y que rigió los
destinos de Colombia hasta 1991. Tal vez el
cambio más significativo dado durante el
gobierno de Núñez, fue la modificación de la
relación entre el Estado y la iglesia.
Durante los gobiernos de la regeneración se
originó la política que terminó con la firma del
concordato en 1887, en este se reglamentó que la
iglesia tendría el control de la educación y la cultura.
Es necesario decir que, dentro de este contexto,
prosperaba en Colombia, el analfabetismo,
las muchedumbres constituían los ejércitos
guerreros que combatían por cada uno de los
partidos: el liberal y el conservador; florecían
las haciendas y las ciudades, donde el
esplendor andaba hombro a hombro con la
miseria. Colombia en general y Bogotá en lo
particular alcanzaron el título de “Atenas
Suramericana” en donde la cultura, el saber
leer y escribir, eran privilegios ostentados por
unos pocos.
El modernismo fue el movimiento de vanguardia
literaria que renovó culturalmente las letras en
Latinoamérica y en España. Los más importantes
críticos coinciden en concebirlo como nuestra
real declaratoria de independencia cultural, a
partir de una transformación radical del
lenguaje poético.
B. La literatura
El modernismo aunque surgido del seno del
romanticismo y, en cierto modo dando
continuidad a las ideas rebeldes de tal
movimiento, es al mismo tiempo una reacción
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contra el excesivo sentimentalismo que terminó Representantes: José Asunción Silva, Guillermo
caracterizando las obras de los autores Valencia, Eduardo Castillo, Porfirio Barba Jacob,
románticos. Con el modernismo surge la poesía Baldomero Sanín Cano, José María Rivas Groot.
contemporánea y sus propósitos generales
Ejemplo de poesía modernista:
siguen rigiendo la poesía actual. Estos propósitos,
a grandes rasgos, son los siguientes: la Los camellos
sugerencia, la autocrítica, el hecho de concebir
el ejercicio de la literatura como un oficio y el (Fragmento)
cosmopolitismo.
Dos lánguidos camellos, de elásticas cervices,
El primero de estos propósitos obedecía a la
de verdes ojos claros y piel sedosa y rubia,
intención de eliminar del poema toda frase
retórica o vacía. La consecuencia de esto es los cuellos recogidos, hinchadas las narices,
que la poesía va a hacerse más ligera, refinada
y musical, al desaparecer de ella los adjetivos a grandes pasos miden un arenal de Nubia.
inútiles y los lugares comunes. El segundo
elemento es la autocrítica, pues ya el poeta no
se sentirá depositario de la verdad y comenzará Alzaron la cabeza para orientarse, y luego
a desconfiar de sus propias palabras. Así, al
interior de las mismas obras, surgirán ironías y el soñoliento avance de sus vellosas piernas
dudas que cuestionan no sólo el trabajo propio,
-bajo el rojizo dombo de aquel cenit de fuego-
sino el sentido mismo de la poesía y del arte en
la época actual. pararon silenciosos al pie de las cisternas.

Otro aspecto consiste en asumir la poesía como

un oficio, lo cual tiene que ver con el momento
histórico en que vive el poeta contemporáneo, Un lustro apenas cargan bajo el azul magnífico,
pues éste se sentirá ajeno a una sociedad que
y ya sus ojos quema la fiebre del tormento:
ya no valora un trabajo que no produce
resultados económicos y que en las ciudades tal vez leyeron: sabios, borroso jeroglífico
modernas ha comenzado a prescindir de la
literatura. Por último más que hijos de un país, perdido entre las ruinas de infausto monumento.
los modernistas se declaran herederos del Guillermo Valencia

mundo y utilizan las tradiciones y expresiones de
cualquier región, surgiendo el exotismo en el
poema; es decir, la alusión a elementos poco
conocidos en el espacio cotidiano de nuestro
país o alejados en el tiempo.

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Toda época tiene sus Características:
extravagancias y
caprichos […] si los Se pueden establecer, como rasgos propios del modernismo, los
caprichos de los siguientes aspectos:
individuos son
Sueños y ensueños. Los modernistas se distanciaron de su realidad y
personales, los de la
época asumen siempre soñaron con mundos paradisíacos.
un carácter no sólo
El exotismo modernista. Constituye una rebeldía contra el destino del
epidémico, sino
hombre, condenado a vivir y a morir en una sociedad dominada por el
contagioso […] el
materialismo. El modernismo necesita darle un sentido a la vida y, para
modernismo hace
estragos con tal ello, acude a su capacidad creadora. Surgen invenciones fabulosas:
intensidad, que se mundos poblados de cisnes, sátiros, ninfas, príncipes de leyenda;
puede prever ya la espacios ornamentados con diamantes, rubíes, jardines de ensueño;
crisis final. El ambientes elegantes, aristocráticos.
modernismo tiene que
vérselas con todo: Gusto por los viajes. Los modernistas vivieron recordando con
artes, literatura, nostalgia la vida en otras tierras, y cuando no pudieron regresar en el
vestidos, muebles, usos momento deseado, se sintieron desterrados de su propio país, como el
y hasta las caso del colombiano José Asunción Silva cuando trabajaba como
costumbres”12. diplomático en Venezuela, y del cubano José Martí, quien se exilió en
Estados Unidos.

La intimidad. Los modernistas llevaron a cabo la idea de alejar la

literatura de la política y de la religión.

Imaginación creadora. El modernismo representa un esfuerzo por

recobrar la libertad perdida con la industrialización y el maquinismo.
Se trata de la libertad esencial de vivir en contacto con la tierra y de
recuperar la magia de un mundo que se resiste a ser ordenado
mecánicamente.

Sentimiento de angustia. El modernista se enfrenta no sólo a la

fugacidad de la existencia, sino a su propia desaparición en la nada.
De aquí surge el miedo, la inquietud, incluso el deseo de no haber
nacido.

Retorno a las raíces propias. Los poetas modernistas buscan en sus

antepasados el sentido de la vida, que la actualidad no les ofrecía.

Preocupación por la perfección formal. Trabajaron con rigor sus

obras, se esmeraron por depurarlas, dotándolas de musicalidad,
plasticidad y coherencia.

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Gran riqueza temática. Los modernistas no se
limitaron a tratar los temas de su entorno, sino
que hablaron de los problemas universales.
La lírica fue el género literario por excelencia
del modernismo. Exceptuando la novela “De
Sobremesa” de José Asunción Silva, la
producción literaria del modernismo colombiano
se centró en el verso, con el que alcanzó los
más profundos cambios para el idioma.
Vanguardismo y Boom
A. Contexto histórico y cultural
Grandes inventos que acortaron distancias,
como la radio, el teléfono, la televisión, el avión,
el computador; dos guerras mundiales con un
saldo de más de ochenta millones de muertos;
la Guerra Fría, como muro ideológico de
incomunicación; el derrumbe del comunismo; la
hegemonía económica de occidente hacia el
final del siglo y el terrorismo de comienzos del
siglo XXI, son los dramáticos acontecimientos
que han marcado la historia del hombre y de un
mundo cada vez más globalizado.
Hacia 1925, se dieron en Colombia ciertos
sucesos que permitieron la modernización
relativa de nuestra sociedad. Entre los más
destacados tenemos:
• El pago en dólares, como indemnización
por la segregación de Panamá.
• La construcción de ferrocarriles y otras vías.
• La iniciación de la explotación petrolera.
• El giro de la educación hacia el conocimiento
de la economía; es decir, todo aquello que
significó la llegada del siglo XX a Colombia.
En síntesis, la aparición del Estado moderno no
fue suficiente para acabar con las estructuras
feudales y oligárquicas existentes en nuestro
país. La modernización no implicó un cambio
en las políticas económicas internas y el
anhelado cambio social fue desplazado por los
intereses de las clases dirigentes y los grandes
monopolios.
Es necesario recordar uno de los acontecimientos
más lamentables de la historia de Colombia: la
masacre de las bananeras en 1928, tragedia
que marcó un hito en la lucha obrera colombiana
y que ha sido registrada por la literatura
nacional, e incluso extranjera.
Durante el período de posguerra, y como
resultado de las pugnas entre liberales y
conservadores por el manejo del poder estatal,
se generó una de las crisis más graves de
nuestra patria. La presión ejercida por grupos
de obreros y marginados del país, y la
aparición del líder popular Jorge Eliécer Gaitán,
hicieron que el mundo empezara a fijarse en el
fenómeno social que se estaba gestando en
Colombia.
El 9 de abril de 1948, hacia la una de la tarde,
Bogotá fue estremecida por la noticia del
asesinato de Jorge Eliécer Gaitán, quien se
perfilaba como seguro ganador de las elecciones
presidenciales que se avecinaban. Esto
desencadenó una revuelta popular contra el
gobierno conservador de Mariano Ospina
Pérez, conocida como el Bogotazo, y que
ocasionó la muerte de más de 1.500 personas.
Este suceso marcó el inicio de un período
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histórico denominado la violencia, cuyas
secuelas continúan agobiando a los colombianos.
Muerto Gaitán, Laureano Gómez ganó las
elecciones sin contar con ninguna oposición.
En la siguiente década se presentaron varios
hechos que cambiaron la situación política,
como la aparición de grupos guerrilleros, entre
ellos las Fuerzas Armadas Revolucionarias de
Colombia (FARC), y las continuas luchas por el
poder, que llevaron al general Gustavo Rojas
Pinilla a tomar las riendas del país. Bajo su
gobierno se trajo la televisión a Colombia. La
violencia continúo desbocada por todos los
campos de la patria, y a pesar de esto, en
1957, el Congreso reeligió a Rojas Pinilla, quien
después fue derrocado. Liberales y conservadores,
entonces, acordaron una alternancia en el
poder que duró dieciséis años: cuatro años
gobernaba un partido y cuatro el otro. A este
período se le conoció como Frente Nacional.
Desde el contexto histórico del modernismo,
vemos como la economía y la política de los
países latinoamericanos se ha visto ampliamente
afectada por los conflictos bélicos mundiales y
el surgimiento de Estados Unidos como nueva
potencia mundial. Sin embargo Estados Unidos
no fue inmune a las consecuencias de la
segunda guerra mundial cayendo en una
profunda depresión económica durante el
período de posguerras. Tras la culminación de
la Segunda Guerra Mundial el mundo se
sacudió con un nuevo conflicto: La Guerra Fría,
etapa caracterizada por la rivalidad entre las
dos potencias mundiales: Rusia y Estados
Unidos. Si bien los países latinoamericanos no
participaron en estas guerras de manera activa,
si sufrieron las consecuencias al poseer una
economía frágil y vulnerable. Al ser una
sociedad netamente agraria, el campesino tuvo
que desplazarse a la ciudad, generando
problemas de superpoblación, miseria y
desplazamiento, pero por otro lado, las
ciudades crecieron y hubo un alto grado de
urbanización y escolarización.
En el período entre guerras y después de la
Segunda Guerra Mundial, se desarrollaron en
Europa y Latinoamérica una serie de movimientos
de corta duración, pero honda influencia
artística y cultural denominados Vanguardias,
caracterizados por su afán de novedad, de
experimentación de nuevas formas y de
trascender lo hecho hasta el momento en arte y
literatura. Luego del auge de los movimientos
de Vanguardia, durante los años sesenta, surge
en el panorama literario el movimiento más
importante de la narrativa hispanoamericana
que se conoce con el nombre del Boom. Los
escritores de este movimiento tuvieron gran
reconocimiento a nivel mundial y las editoriales
se disputaban por publicar y traducir sus obras
en diferentes idiomas y en numerosos países.
B. La literatura de este período
Los años veinte del siglo XX marcan, en
Colombia, el inicio de una nueva vida literaria,
que se inicia como una reacción contra las
normas impuestas por el modernismo. Hasta
los años cincuenta, los movimientos que
iniciaron la renovación de temas y lenguaje
literario fueron principalmente poéticos y sus
miembros se agruparon en escuelas que
recibieron nombres propios. Cada una de ellas
desarrolló también conceptos diversos sobre
qué debía ser la poesía, tanto en la forma como
en el contenido.
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En Colombia no hubo propiamente movimientos
vanguardistas, a semejanza de los europeos
después de la Primera Guerra Mundial, como el
futurismo, el surrealismo o el dadaísmo. Sin
embargo hubo grupos que buscaron renovar
los temas y el lenguaje poético. Entre ellos se
cuentan:
• Los nuevos. Se les conoció con este
nombre por haber escrito en la revista del
mismo nombre. En poesía, son magníficos
León de Greiff y su relato de Sergio
Stepansky, Rafael Maya con su Invitación a
Navegar, Germán Pardo García autor de
Limosna de Alegría y Luis Vidales y su
famoso Suenan Timbres. En prosa sobresalió
Jorge Zalamea con el Sueño de las
Escalinatas.
• Piedracielismo. Esta escuela que nació
hacia 1935, tomó su nombre de la obra del
español Juan Ramón Jiménez, Piedra y
Cielo, porque publicaba unos cuadernillos
con el mismo nombre. Sus figuras más
representativas son: Eduardo Carranza,
Jorge Rojas y Arturo Camacho.
• Los cuadernícolas. Hacia el año 1945
nació una escuela cuyos integrantes,
admiradores del poeta español Jorge
Gullén y como homenaje a éste, publican
su obra poética en unos cuadernillos
titulados Cántico, hecho por el que se les
denominó cuadernícolas. Sus más connotados
representantes son: Álvaro Mutis, Eduardo
Mendoza y Andrés Holguín.
• Mito. En 1954, Jorge Gaitán Durán y
Hernando Valencia fundaron en Bogotá la
revista Mito, nombre que también recibió el
grupo de escritores que colaboraron en
ella. Estos escritores a través de la revista,
le dieron un profundo cambio a la literatura,
pues desde su primer número asumieron
una posición comprometida, utilizando las
palabras como una herramienta para
apoyar un programa de mejoramiento de la
realidad del país. Las figuras sobresalientes
son: Jorge Gaitán Durán, alma y vida del
grupo, y Eduardo Cote Lamus.
• El nadaísmo. Este movimiento fue fundado
por Gonzalo Arango en 1958 y acabado
por él mismo en 1971. Es un grupo rebelde
que pone en duda todos los valores
establecidos: la sociedad, tal como está
organizada, Dios, las costumbres, la
tradición, la política dominante, la literatura,
etc. Su producción es ingeniosa, humorística
y rebelde. En ellos es notable la influencia
de Nietzsche, del existencialismo y del
nihilismo ruso. Sus figuras destacadas,
además de su fundador, son Jaime
Jaramillo Escobar y J. Mario Arbeláez.
Las tres últimas décadas del siglo XX y los
primeros años del siglo XXI conforman el último
período de nuestra literatura, determinado por
una amplia producción novelística, que tuvo
sus inicios en un fenómeno editorial y literario
latinoamericano denominado “el Boom”, del
cual hizo parte el colombiano Gabriel García
Márquez, al publicar, en 1967, Cien Años de
Soledad. El realismo mágico de Gabriel García
Márquez se caracteriza por la sencillez del
lenguaje, muy cercano a las expresiones y
modismos populares, y por la fusión de
elementos extraordinarios y reales que cautivan
a los lectores y lectoras cuando comienzan a
leer sus obras.
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Referencias bibliográficas
12 Citado por Santos Molano, Enrique. José
Asunción Silva (biografía). Santa Fe de Bogotá:
Planeta colombiana editorial. 1996. p.621.

13 Ortega González, Mar Estela. El grupo Mito y

las vanguardias en Colombia. En: revista de
estudios literarios. [En línea], Disponible en:
http://www.ucm.es/info/especulo/numero28/
mitocol.html. Consultado el 6 de julio de 2013.