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Nacimiento de Hades
Hades era el hijo de Cronos y Rea, el rey y la reina de los Titanes. Después
de nacer, Hades fue tragado por su padre Cronos para evitar una profecía
de que un hijo lo derrotaría algún día. Hades fue finalmente salvado por su
hermano menor Zeus.
Apariencia
El Hades se suele representar con barba, casco o corona, y sosteniendo una
horquilla de dos puntas o un bastón. A menudo su perro de tres cabezas,
Cerbero, está con él. Cuando viaja, monta un carro tirado por caballos
negros.
Después de que los dioses olímpicos derrotaron a los Titanes, Hades y sus
hermanos echaron suertes para dividir el mundo. Zeus dibujó el
cielo, Poseidón dibujó el mar, y Hades dibujó el inframundo. El inframundo
es donde la gente muerta va en la mitología griega. Hades no estaba muy
contento de conseguir el inframundo al principio, pero cuando Zeus le
explicó que toda la gente del mundo sería finalmente sus súbditos, Hades
decidió que estaba bien.
Hades y perséfone
Hades se sintió muy solo en el inframundo y quería una esposa. Zeus dijo
que podía casarse con su hija Perséfone. Sin embargo, Perséfone no quería
casarse con Hades y vivir en el inframundo. Hades entonces secuestró a
Perséfone y la obligó a ir al inframundo.
Hades en el Inframundo
Rara vez había salido del inframundo. Aunque lo hiciera, pocos lo sabrían,
porque había creado un casco que lo hacía invisible. Se sentó en un trono
de ébano sosteniendo un cetro con punta de pájaro.
Hades hizo un carro oscuro, tirado por cuatro caballos negros oscuros; su
impresionante y detestable visión asustaría a cualquiera en su camino.
Aunque Hades era el dios del inframundo y de los muertos, no era el dios
de la muerte, como mucha gente cree falsamente. Tánatos era el dios de la
muerte y hermano de Hypnos.
Ya que el nombre Hades era sinónimo del inframundo mismo, los cristianos
usaban el término Hades para describir un lugar como el infierno, donde las
almas caídas de la gracia irían. En el libro del Apocalipsis, el Hades y la
Muerte están directamente asociados, mientras que el Nuevo Testamento
usa la palabra hades para referirse a la morada temporal de los muertos.