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Introducción .................................................................................................................. 5
1. Generalidades............................................................................................................ 7
1.1 Características físicas de los suelos ......................................................................... 8
1.2 Características químicas de los suelos. .................................................................. 10
1.3 Características biológicas del suelo ........................................................................ 12
Créditos........................................................................................................................ 24
Lista de figuras
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Mapa conceptual
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1. Generalidades
Las plantas obtienen del suelo los nutrientes necesarios para su producción. El suelo
es un sistema formado por componentes: sólidos, líquidos y gaseosos. El líquido es el
agua y el gaseoso es el aire, ambos son necesarios para la vida de los
microorganismos presentes en el suelo y para el funcionamiento de la planta.
Los componentes sólidos están conformados por los minerales inertes, provenientes de
la meteorización de la roca madre (arcillas, óxidos e hidróxidos), los microorganismos
que viven en el suelo y los residuos de los mismos que conforman la llamada materia
orgánica. A su vez, la materia orgánica se encuentra en formas levemente
descompuestas y en otras estables llamadas compuestos húmicos.
Horizonte 0: en ecosistemas naturales, es la parte biológica más activa del perfil con
un papel fundamental en la conservación de la fertilidad del suelo. Este horizonte es
muy frágil o simplemente no existe en suelos cultivados.
Horizonte A: es la capa más superficial del suelo, de color más oscuro, contiene
raíces, su actividad biológica es alta y constituye la llamada capa arable.
Horizonte B: es la capa de suelo que sigue al horizonte A, de color más claro, contiene
menos raíces y menos actividad biológica. Se aprecia más compacto que el horizonte
A. Constituye la capa llamada subsuelo.
Horizonte C: es la capa más profunda del suelo y está constituida por la roca madre.
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Figura 2. Generalización de un perfil de suelo
Fuente: Gliessman (2002, p. 104)
Textura: las partículas del suelo se dividen en arcillas, limos y arenas, según su
tamaño. Las arcillas son las partículas más pequeñas y fácilmente forman
suspensión en agua, facilitando el intercambio de iones. Por su parte, las arenas son
las más gruesas, poco retenedoras de agua y de baja capacidad de absorber y
retener cationes nutritivos. Mientras que los limos son intermedias entre las arenas y
las arcillas.
Las proporciones entre las cantidades de estas partículas forman diferentes texturas.
En general, las texturas de los suelos se definen así:
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Tabla 1. Texturas de los suelos
Textura Descripción
Arenosos Predominan las arenas.
Francos Arcillas, limos y arenas en proporciones iguales.
Arcillas, limos y arenas en proporciones parecidas
Franco arenosos
predominando las arenas.
Arcillas, limos y arenas en proporciones parecidas
Franco limosos
predominando los limos.
Arcillas, limos y arenas en proporciones parecidas
Franco arcillosos
predominando las arcillas.
Arcillosos Predominan las arcillas.
Estructura: las partículas del suelo también se agrupan en formas y tamaños más
visibles que reciben el nombre de agregados. Los agregados del suelo definen la
estructura de este.
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Un resumen de las diferentes estructuras que puede formar un suelo se presentan
en la siguiente tabla:
Estructura Descripción
Laminar Los agregados se agrupan en forma de láminas.
Prismática Los agregados se agrupan en forma de prismas.
Columnar Los agregados se agrupan en forma de columnas.
Bloques Los agregados se agrupan en forma de bloques.
Los agregados se agrupan en forma de bloques menos
Bloques subangulares
definidos.
Granular Los agregados se agrupan en forma de gránulos.
Grumosa Los agregados se agrupan en forma de grumos.
Color: el color del suelo es una característica física que permite definir
subjetivamente la calidad del mismo. Generalmente un color oscuro indica altos
contenidos de materia orgánica y suelos rojizos podrían indicar alto contenido de
óxidos de hierro. El color gris revela suelos con problemas de drenaje al igual que el
color pardo amarillento, mientras que los colores blanquecinos denotan presencia de
cuarzo, carbonatos o yeso.
El suelo debe contener formas químicas disponibles de nutrientes para las plantas. A
veces, se encuentran nutrientes pero en forma de compuestos que los cultivos no
pueden aprovechar y en otras ocasiones, simplemente se hallan agotados los que son
necesarios para la nutrición de cultivos. En ambos casos, es primordial realizar labores
de fertilización para aportar los faltantes a las plantas.
Macronutrientes o elementos mayores: nitrógeno (N), fósforo (P), potasio (K), calcio
(Ca), azufre (S) y magnesio (Mg).
Micronutrientes o elementos menores: manganeso (Mn), hierro (Fe), boro (B), zinc
(Zn), molibdeno (Mb) y cobre (Cu).
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Estos procesos metabólicos son óptimos cuando los elementos se encuentran en
equilibrio y en cantidades suficientes. Los excesos o déficit provocan alteraciones en
las plantas que afectan su producción.
La CIC se define por las condiciones de la fracción de arcillas del suelo. Las arcillas
forman silicatos e hidróxidos que determinan la absorción de iones de elementos
nutrientes. De igual manera, las que tienen mayor proporción de silicatos tienen más
capacidad de intercambio.
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Algunos nutrientes como el zinc (Zn) y el fierro (Fe) se unen a la materia orgánica en
forma de quelatos permaneciendo en el suelo. También, la materia orgánica tiene un
efecto de amortiguación de acidez o pH haciendo que unos de estos nutrientes, como
el aluminio, no sean tóxicos a las plantas.
Por ello, es muy importante mantener el pH en los rangos adecuados. En suelos ácidos
se realizan labores como el encalado, el cual es la adición de productos con contenidos
de calcio y magnesio que ocupan los lugares de carga negativa del suelo causantes de
la acidez, neutralizándolos en cierta medida y logrando subir el nivel de pH.
Los suelos alcalinos así como los salinos son raros en el trópico y requieren manejo
con riego y adición de algunos compuestos.
En el suelo habitan microorganismos, algunos de los cuales son visibles a simple vista,
pero otros solo se pueden ver a través de un microscopio. Bacterias, hongos,
protozoarios, algas, anélidos y demás microorganismos aumentan en número al
acercarse a la zona de raíces llamada rizosfera.
Los microorganismos del suelo descomponen los restos orgánicos. Mediante esta
descomposición los nutrientes contenidos en la materia orgánica quedan en formas
químicamente disponibles para las plantas; un ejemplo es el del ciclo del nitrógeno: las
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plantas absorben el nitrógeno necesario para su crecimiento y desarrollo en forma de
nitratos y amonios. Estos compuestos se logran después de la descomposición de las
proteínas presentes en la materia orgánica.
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2. Ciclos del nitrógeno y fósforo
La fertilidad de un suelo depende del equilibrio entre sus factores químicos, físicos y
biológicos, que combinados dan un sustrato óptimo para el crecimiento y desarrollo de
las plantas.
Dos de los más importantes elementos de nutrición en las plantas son el nitrógeno y el
fósforo. Los ciclos de estos nutrientes en el suelo están determinados por las
interacciones que ocurren en el sistema, para que se hagan disponibles en diversas
formas químicas.
Los procesos químicos que ocurren en el suelo son de oxidación o reducción. Las
formas químicas de absorción de nitrógeno por las plantas son los nitratos (NO3-) o
amonio (NH4+), estas se encuentran en los estados de oxidación adecuados.
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Más que adicionar nitrógeno al suelo, lo que se busca en la fertilización agrícola
ecológica es la optimización de su balance, lo cual se logra maximizando entradas y
minimizando salidas; estas dependen del tipo de cultivo, características del suelo,
fertilización, contenidos de materia orgánica, entre otros.
Las salidas de nitrógeno del sistema del suelo son la lixiviación, la volatilización, la
cosecha y la erosión. La lixiviación es el lavado de nutrientes por acción del recorrido
del agua en el suelo. Se atenúa por la utilización inmediata del nitrógeno por las plantas
y organismos. Los organismos son fundamentales en la reserva de nitrógeno. A su vez,
la volatilización es la pérdida de nitrógeno por el aire y también se minimiza por la
mayor absorción de los cultivos antes de que se pierdan.
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ocurre la actividad biológica en mayor medida). Cualquier práctica de prevención,
control y manejo de la erosión será beneficiosa, no solo para la disponibilidad de
nitrógeno sino para cualquier nutriente del suelo.
Los factores que influyen en la disponibilidad del fósforo son el pH, la actividad
microbiológica, la presencia de coloides y minerales del suelo y ciertas enzimas y
ácidos orgánicos. El pH, coloides y minerales son muy difíciles de controlar en un
suelo, en cambio los factores biológicos al ser propiciados aumentan la disponibilidad
de formas solubles de fósforo para la nutrición de las plantas.
Los ácidos orgánicos solubilizan fosfatos al soltar el Ca, Al y Fe hacia otras formas.
Algunos de estos ácidos orgánicos son los húmicos y fúlvicos. La principal fuente de
ácidos orgánicos en el suelo es la materia orgánica y los exudados de algunas
bacterias.
También, existen las micorrizas que son hongos del suelo que realizan simbiosis con
las raíces de las plantas obteniendo energía de estas y entregando agua y nutrientes.
Las micorrizas son eficientes en el abastecimiento de fósforo a la planta y se pueden
fomentar mediante inoculaciones al suelo, las cuales se realizan con procedimientos
sencillos.
El fósforo es absorbido por las raíces de las plantas en forma de iones fosfatos
inorgánicos solubles.
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3. Deficiencias nutricionales
o Separar ambos filos de la paleta dejando la franja central del suelo en la pala de 2
cm de ancho.
o De la mezcla del suelo se toma una muestra de 1 kg, se deja secar sobre un
papel limpio y se empaca en una bolsa limpia.
o Se etiqueta con los datos de lote, fecha de recolección, predio, entre otros.
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Figura 7. Muestras del suelo
Fuente: FAO e IFA (2002, p. 58)
Análisis histórico del lote: es el estudio que complementa las otras herramientas
para saber las intervenciones anteriores, en cuanto a fertilización u otras prácticas
que alteren las características del suelo.
Las plantas para su crecimiento y desarrollo necesitan que los nutrientes estén
disponibles y en cantidad suficiente. Si esto no ocurre así, los cultivos empiezan a
manifestar síntomas de las deficiencias nutricionales. La observación de síntomas de
deficiencia de nutrientes en un cultivo constituye una herramienta para evaluar el
estado nutricional del mismo.
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En general, algunos de los síntomas son:
Tabla 3. Síntomas
Figura 9. Fósforo
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Nervaduras verdes y
Magnesio Síntesis de clorofila. clorosis en el resto de la
hoja. Caída de hojas.
Clorosis en hojas
Regulador de
nuevas, pérdida de
absorción de
turgencia de la hoja, con
Calcio nutrientes, formador
lo cual se ve colgando
de paredes
hacia abajo sin que se
celulares.
caiga, se deforman.
Clorosis y
Formación de amarillamiento parecido
Azufre
proteínas. a la deficiencia de
nitrógeno.
Necrosis en el
meristemo apical. Hojas
Metabolismo de
Boro pequeñas y de forma
carbohidratos.
delgada creando
ramilletes.
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Hojas pequeñas,
Síntesis enzimática y
Zinc cloróticas, rizadas y
clorofila.
encartuchadas.
Las nervaduras
permanecen verdes y el
Hierro Síntesis de clorofila.
limbo de las hojas se
torna amarillo intenso.
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4. Fertilizantes orgánicos
Los fertilizantes orgánicos son productos para aportar nutrientes a los cultivos
obtenidos a través de procesos de transformación de insumos naturales, provenientes
de las plantas o los animales.
Según su forma de aplicación se dividen en edáficos o foliares. Los edáficos son los
fertilizantes que se aplican al suelo y pueden ser sólidos o líquidos, mientras que los
foliares lo hacen a las hojas de las plantas y son líquidos.
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Referentes bibliográficos
González, A., Redondo, F., Arrebola, F., Casado, J., Camps, M. J., Rull, P. & Sánchez, R.
(2011). Manual de Conversión a la Producción Ecológica. Sevilla: Signatura Ediciciones,
S.L. Recuperado de
https://www.juntadeandalucia.es/export/drupaljda/Manual_de_Conversixn_a_la_Producc
ixn_Ecolxgica.pdf
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Créditos
Desarrollador de contenidos
Nina Elvira Rocha Nieto
E-pedagogo instruccional
Gloria Amparo López Escudero
Evaluador de contenidos
Andrés Felipe Velandia Espitia
Desarrollador Full-Stack
Bryan Mauricio Giraldo Mejía
Catalina Gutiérrez Castaño
Daniel Enciso Arias
Diana Carolina León Romero
Germán Alberto Rodríguez Liévano
Leyson Fabián Castaño Pérez
Luis Felipe Zapata Castaño
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