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Nombre de la Práctica: Vela aromática a partir de esencia de fresa.

Número de la Práctica: 15

Nombre del Laboratorio: Laboratorio de Química Orgánica I Grupo: C

Fecha: martes 28 de mayo de 2019 Carrera: Químico Farmacéutico Biólogo Duración de la Practica (h): 2.5

Nombre del Profesor: Dr. José Eduardo Báez García

Nombre del (de la) Estudiante: Rolando Efraín Hernández Ramírez Número de Equipo: 5

Introducción

Bajo la denominación de parafinas se comprenden todos aquellos hidrocarburos cuya estructura


fundamental contiene únicamente átomos de carbono unidos por enlaces sencillos C-C formando cadenas,
que pueden tener ramificaciones, pero nunca cerrarse sobre sí mismas para formar estructuras cíclicas. La
formula molecular general para todas las parafinas con independencia del grado de ramificación de la
cadena fundamental, CnH2n+2. A estos hidrocarburos se les denomina también saturados o hidrocarburos
límite porque contienen la máxima cantidad de hidrógeno posible para el carbono que integra cada
molécula [1].

Los hidrocarburos saturados típicos constituyen


un grupo de compuestos, que, empezando con
el miembro más sencillo de la serie, el metano,
va formando, por adición de grupos CH 2, una
serie homologa, hasta los compuestos
superiores más complejos. En las parafinas, los
átomos de carbono están unidos formando
cadenas normales sin ramificar, o ramificadas,
como en los ejemplos que figuran en la Tabla 2-
1 [2].

Las parafinas son productos cerosos derivados


del petróleo. El término “parafina” proviene del
latín “parum affinis” (que tiene poca afinidad),
ya que son un material inerte y muy estable. Su
composición es principalmente de
hidrocarburos de cadenas rectas, sin
ramificaciones. Están caracterizadas por tener
una estructura "macrocristalina" (cristales
grandes y quebradizos) y longitudes de C18
hasta C40. Su peso molecular oscila entre 320 y
560, presentan consistencia sólida a
temperatura ambiente. Su obtención se efectúa
mediante procesos de extracción con solvente a partir de las fracciones de crudos parafínicos con rango de
destilación entre 350 y 650°C. Las parafinas son
sometidas a procesos de refinación (eliminación
del aceite) para dar como resultado una variedad
de grados, clasificados por su punto de fusión [3].
Una vela o candela es una fuente de iluminación,
consistente en una mecha que asciende por el
interior de una barra de combustible sólido,
como puede ser la cera, la grasa o la parafina.
Las velas han sido usadas para iluminar por el
hombre durante más de 5.000 años, sin
embargo, poco se sabe sobre su origen.

1
Los egipcios usaban velas ya en el año 3.000 a. de J. C., generalmente se les atribuye el
haber desarrollado este tipo de iluminación al sumergir el papiro enrollado
repetidamente en sebo derretido o cera de abejas. Las velas resultantes se usaban para
iluminar sus hogares, ayudar a los viajeros por la noche y en ceremonias religiosas. La
mayoría de las culturas occidentales primitivas dependían principalmente de velas
fabricadas con grasa animal. Una mejora importante se produjo en la Edad Media,
cuando se introdujeron las velas de cera de abejas en Europa. A diferencia del sebo
animal, la cera de abejas se quema pura y limpiamente, sin producir una llama
humeante. También emitía un agradable olor dulce en vez del olor asqueroso y agrio del
sebo. Las velas de sebo eran las comunes para los europeos y en el siglo XIII, la
Ilustración 1. Vela fabricación de estas se había convertido en un oficio gremial en Inglaterra y Francia. Los
de parafina. fabricantes de velas (artesanos) iban de casa en casa haciendo velas de las grasas de la
cocina atesoradas para ese propósito, o hacían y vendían sus propias velas en pequeñas tiendas gremiales.
El nuevo mundo hizo su primer aporte a la cuestión cuando descubrieron que al hervir ciertas bayas
producían una cera de olor dulce que ardía limpiamente. Sin embargo, extraer la cera de las bayas era
extremadamente tedioso. Como resultado, la popularidad de este tipo de luminarias pronto decayó. Los
principales avances en la fabricación contemporánea de velas tuvieron lugar durante el siglo XIX. En la
década de 1820, el químico francés Michel Eugene Chevreul descubrió cómo extraer ácido esteárico de los
ácidos grasos animales. Esto condujo al desarrollo de la cera de estearina, que era dura, duradera y
quemada limpiamente. Las velas de estearina siguen siendo populares en Europa hoy en día. La cera de
parafina se introdujo en la década de 1850, después de que los químicos aprendieron a separar
eficientemente la sustancia cerosa natural del petróleo y refinarla. La parafina, de color blanco azulado e
inodoro, era una bendición para la fabricación de velas porque se quemaba limpiamente, consistentemente
y era más económica de producir que cualquier otro combustible para velas. Su única desventaja era un
punto de fusión bajo. Esto se superó pronto añadiendo el ácido esteárico más duro, que se había vuelto
ampliamente disponible. Las velas gozaron de una renovada popularidad durante la primera mitad del siglo
XX, cuando el crecimiento de las industrias de proceso de alimentos trajo consigo un aumento de los
subproductos que se habían convertido en los ingredientes básicos de las velas – parafina y ácido esteárico.
En la actualidad el uso lúdico y ritual es el principal destino de la producción, aunque si preguntáis a vuestros
mayores, seguro que todavía guardan una vela por si se va la luz [4].

Las ceras son ésteres de los ácidos grasos con


alcoholes de peso molecular elevado. Se obtienen
por esterificación (reacción química entre un
ácido graso y un alcohol monovalente lineal de Ilustración 2. Reacción de esterificación
cadena larga). Su temperatura de fusión está
por encima de 45 °C, son insolubles en agua y solubles en disolventes orgánicos. Las ceras cumplen en la
naturaleza una función esencialmente protectora, recubriendo tanto animales como vegetales. La cera de
abeja es la más conocida, está compuesta por un alcohol (C 30H61OH) y ácido palmítico (CH 3(CH2)14COOH). Las
velas de mayor calidad son las que llevan entre sus componentes cera de abeja, ya que favorecen una
combustión más lenta y una escasa emisión de humos de color blanco. Debido al alto precio de la cera de
abeja, para la fabricación industrial de velas suele emplearse la cera de parafina. Parafina es el nombre
común que reciben los alcanos de fórmula general C nH2n+2, como se mencionó con anterioridad, con entre 20
y 40 carbonos. La cera de parafina se obtiene del petróleo, de los esquistos bituminosos o del carbón. El
proceso comienza con una destilación a temperatura elevada, para obtener aceites pesados, de los que, por
enfriamiento a 0 °C, cristaliza la parafina, la cual es separada mediante filtración o centrifugado. El producto
se purifica mediante recristalizaciones, lavados y decoloración. También se puede obtener mediante el
craqueo térmico del petróleo, donde se rompen cadenas de carbonos y se añade calor 400-650 °C. La
parafina, además, tiene múltiples usos: aislante eléctrico, conservador del calor, fabricación de moldes,
entre otros [5].

2
Otro tipo de velas son las velas en gel, las cuales están constituidas principalmente por gel para velas el cual
está hecho a base de aceites minerales y polímero elastómero, y el pabilo (mecha) [6].

Hoy en día, las velas más populares son las de parafina debido a su relación calidad-precio, sin embargo, las
velas de mayor calidad son las que llevan entre sus componentes cera de abeja, que serán de mejor calidad
cuanto mayor sea la cantidad de cera que la componga, favoreciendo a una combustión más lenta y la
emisión de humos únicamente de color blanco y escasa evitando así el deterioro de los objetos y del
entorno que los rodea [7].

Vela aromática de uva

Ingredientes:

 Parafina
 Esencia aromática.
 Texturizador
 Colorante.

Objetivo

Hacer una vela a partir de parafina, colorantes artificiales y esencia de fresa.


Experimental

Materiales y reactivos
 Parafina  Molde de aluminio

 Molde para vela  Cucharas

 Pábilo  Para decorar:

 Colorantes  plastilina

 Trans-cinamato de metilo en etanol  diamantina

 Parrilla  Flores

Procedimiento

 ❶Colocar parafina a calentar hasta disolver.


 ❷Adicionar el colorante elegido.
 ❸Mantener en agitación, cuidando que no se queme.
 ❹Tomar el molde para la vela y colocar el pábilo en el centro.
 ❺Adicionar poca parafina caliente, lo suficiente para sellar el pábilo a la base y alinear el pábilo.
 ❻Esperar a que seque.
 ❼Colocar otra capa de parafina, distribuyéndola en todo el molde y secar.
 ❽Decorar la vela a su gusto.
 ❾A la mitad del molde, agregar esencia de fresa (trans -cinamato de metilo).
 ❿Esperar a que se evapore el etanol.

3
 ⓫Seguir adicionando capas de parafina.
 ⓬Esperar a que seque.
Resultados

Vela aromática elaborada Velas con diferentes diseños

Discusión

En la imagen anterior se puede observar la vela elaborada, la cual se hizo con parafina, que como se
mencionó anteriormente esta es una combinación de hidrocarburos, coloreada con colorantes artificiales,
en el caso de esta vela se decidió que fuera de los dos colorantes de parafina proporcionaos (morado y rojo),
así mismo como ultima capa se le coloco el gel diluido para velas el cual le dio una mejor apariencia. La
característica aromática deseada fue posible el adicionar el Ester sintetizado anteriormente, mediante el
mecanismo de esterificación de Fischer, el trans-cinamato de metilo (componente del aroma a fresa), pues
estos compuestos químicos poseen la característica de tener aromas frutales, lo anterior explica que
después de que la vela estuvo terminada, tenía un potente olor a fresa característico de este compuesto
adicionado. En comparación a las velas comerciales a la vela elaborada no se le añadió ningún texturizador.

Conclusión

Una vela o candela es una fuente de iluminación, consistente en una mecha que asciende por el interior de
una barra de combustible sólido, como puede ser la cera, la grasa o la parafina (formada a partir de la
combinación de diversos hidrocarburos). Gracias al éter sintetizado el trans-cinamato de metilo
(componente del aroma a fresa) fue posible elaborar una vela aromática de aroma a fresa, utilizando
parafina con colorantes artificiales, así como gel para velas, la aplicación de las esencias frutales en la
industria es un punto clave, sobre todo en la de elaboración de velas ya que hoy en día estos productos son
muy populares para aromatizar los hogares.

Bibliografía

 [1] Ege, S; Química orgánica estructura y reactividad, 3ª. Edición, Reverté, España, 2000, p. 549.
 [2] McMurry, J; Química Orgánica, 7ª. Edición, Cengage Learning, México, 2008, p. 825. Astruc, D.
 [3] Quiminet.com. Consultada en mayo 29, 2019, en la url:
https://www.quiminet.com/articulos/todo-lo-que-deseaba-saber-de-las-parafinas-2655.htm
 [4] Bruice, P. Química Orgánica, 5ª. Edición, Pearson Educación, México, 2008, p. 300.
 [5] Ciencia en común. Consultada en mayo 29, 2019, en la url:
https://cienciaencomun.wordpress.com/2016/03/14/quimica-ceras/

4
 [6] Mechaspla. Consultada en mayo 29, 2019, en la url: https://www.mechaspla.com/breve-
historia-velas/

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