Está en la página 1de 22

Federico A. Córdoba R.

Arte en Colombia
18/11/2019

Jorge Ortiz Cancino


Biografía
Jorge Ortiz Cancino nace en 1948, en Neira, Caldas.
Aunque unas fuentes dicen que es originario de la ciudad
de Medellín. Es poco lo que hay escrito acerca de su vida,
comienza a aparecer en el ámbito de la fotografía y el arte
a finales de los 70 en Antioquia con su obra Cables
(1977- 1979). Sin embargo, se hace referencia a una
carrera de Diseño -no se sabe si finalizada- y unos viajes
a Nueva York en Estados Unidos, donde se encontró con
la fotografía por accidente y estudió en The Art Students
League of NewYork.
A Ortiz se le atribuye ser parte de la generación de
Jorge Ortiz, 1978. Fuente: IV
artistas antioqueños que dieron pasos en la modernidad Salon Atenas
. esto por su cercanía a Alberto
y la contemporaneidad, especialmente en la década de 1970,
Sierra, uno de los fundadores del Museo de Arte Moderno de Medellín, y fundador de la
galería La Oficina. Además de la clara tendencia conceptual de Ortiz entorno a la imagen
fotográfica, y al proceso de esta.
Sus inicios en el campo del arte se remiten a exposiciones colectivas como el Salón de La
Oficina, Galería La Oficina (1977), el II Salón Nacional de Artes Visuales de la Universidad
de Antioquia (1978) y el XXVII Salón Nacional de Artes Visuales del Museo Nacional
(Bogotá).
En 1978, participa en el IV Salón Atenas con su serie Cables (1977-1978); en la década
del 80, estuvo en exposiciones en Suiza, Australia, Brasil, Londres, Cuba, Argentina y
Miami, y en 1992 gana el Salón Nacional de Artistas, junto a Danilo Dueñas, con su obra
Enchape; ese mismo año se presenta en Foto Fest, en Houston (EE. UU.). Mas adelante, en
1996, gana la Beca de experimentación de Colcultura. Un año más tarde, en 1997, recibe
mención de honor en el primer Premio Luis Caballero por su serie Un bosque, un jardín.
Su obra hace parte de las colecciones del Museo de Arte Moderno de Bogotá, el Museo
de Arte Moderno de Medellín, el Museo de Arte Moderno de Cartagena de Indias, el Museo
de Bellas Artes de Caracas (Venezuela), la Colección Foto Fest de Houston (EE. UU), la Art
Gallery of Western Perth, Perth (Australia) y recientemente parte de la exposición
permanente del Museo de Arte Miguel Urrutia.
Trabajó como docente por más de una década en diferentes universidades de Medellín y
Bogotá, entre las que se destacan el Instituto de Bellas Artes, la Universidad de los Andes y
la Universidad Jorge Tadeo Lozano. Sin embargo, por cuestiones de las universidades ya no
se encuentra dictando clases en ninguna de las anteriormente mencionadas.

Portafolio
A pesar de que Ortiz sea un fotógrafo, es bastante limitado el registro visual de sus obras,
resulta -triste- irónico: un fotógrafo del cual casi no hay registro. Me gusta creer que esto
tiene algo que ver con que sus obras poseen un carácter conceptual e in situ, son acciones y
momentos en el tiempo que una vez pasan ya no se pueden registrar, lo que queda es la
narración oral y escrita, esto es lo que más hay.
Cables, (1976-78). Fotografía. Dimensiones variables.

En esta serie Ortiz recorre diferentes ciudades


de Colombia y nos enfrenta a unas imágenes de
alto contraste en las que se observa el cableado
eléctrico compuesto equilibrado sobre el espacio
del papel fotográfico.

Jorge Ortiz, 1978. Fuente: IV


Salon Atenas
.

Cables. Jorge Ortiz, 1978. Fuente: Artsy.


Boquerón (1979). Gelatina de plata sobre papel de fibra (24 piezas).

A través de un encuadre
totalmente controlado, Ortiz se
propone tomar una fotografía
cada 5 minutos, observando y
anotando la incidencia y
movimiento de la luz en este
horizonte con nubes. Su
problema no es una cuestión
acerca de la belleza sino del
tiempo, el espacio, el azar y el
proceso fotográfico que involucra
cada una de estas nociones.

Boquerón. Jorge Ortiz, 1979. Fuente: Eafit.

Medellín (1981). Rollos de papel fotográfico.


Como muchos trabajos de Jorge Ortiz, este solo existe escrito y seguramente en la
memoria de los espectadores que pudieron presenciar este trabajo:
“Medellín fue una instalación conformada por dos largas hojas de papel fotográfico,
una completamente negra por la exposición directa a la luz y luego revelada, y la segunda
fijada en blanco, una frente a la otra como los dos horizontes del Valle de Aburrá al
atardecer, con sol sobre las montañas orientales y en sombras las del occidente. Es “otro
paisaje” que logra formularse en dimensión conceptual.” (Fernández, 2009).
Con esta instalación se prolonga algo de esa idea de dualidad presente en Boquerón, al mismo
tiempo que Ortiz empieza a dejar la cámara fotográfica.
Barrido fotográfico (198X). Rollo de papel fotográfico.
Esta es otra de esas obras que parece perdurar en lo escrito solamente: “(…) donde el
artista toma un rollo de papel fotográfico, químicos y una escoba y comienza a barrer con el
líquido preparado sobre el papel.” (Aguilar Restrepo, 2018). En esta obra Ortiz se adentra
aún más en el proceso de la fotografía, y comienza a jugar con los conceptos alrededor de la
misma.
Sin título (1984). Químicos fotográficos y papel de seda sobre papel fotográfico.

A pesar de la nula información acerca


de esta imagen en específico, cabe
destacar que es parte de las
exploraciones con los químicos y el
papel fotográfico para lograr imágenes
que evocan horizontes (paisajes) en el
espectador.

Sin título. Jorge Ortiz, 1984. Fuente: Eafit.

Fotogramas (1985). Químicos fotográficos y papel fotográfico.

En esta imagen Ortiz explora un gran


formato de 100x150 cm con el papel
fotográfico y los colores que pueden surgir
con técnicas mixtas.

Fotogramas. Jorge Ortiz, 1985. Fuente: Colarte.


Sin título (1987). Químicos fotográficos y papel fotográfico.

Hay una primera exploración de las formas más


definidas, un poco más adelante profundizará en esto,
y en el color que hace una aparición algo desaturada
en esta imagen.

Sin título. Jorge Ortiz, 1987. Fuente: Colarte.

Cuarto Oscuro (1987). Instalación (carbón, químicos, papel, cubetas)

Expuesto en el
XXXI Salón Anueal
de Artistas
colombianos en
Medellín. No parece
existir información
acerca de esta obra.

Cuarto Oscuro. Jorge Ortiz, 1987. Fuente: Colarte.


Los cerros (1988). Químicos fotográficos y papel crepé sobre papel fotográfico.
200x360cm

Ortiz comienza a
experimentar con la textura
que otorga el papel crepé,
podría decirse que pinta con la
fotografía, está explorando
formatos aún más grandes.

Los cerros. Jorge Ortiz, 1988. Fuente: Colarte.

Sobre el horizonte (1989). Químicos fotográficos y papel crepé sobre papel fotográfico

Otra obra en la cual Ortiz


explora los materiales y los
procesos fotográficos para dar
como resultado un paisaje,
realiza una profundización en
el paisaje y el uso del color.

Sobre el horizonte. Jorge Ortiz, 1989. Fuente: Eafit.


Sin título (1990). Químicos fotográficos y papel de seda sobre papel fotográfico.

Otra continuación de Jorge Ortiz por


explorar las herramientas de la fotografía y sus
diferentes formatos. Otro paisaje es evocado a
través de las formas abstractas que se logran
con los haluros de plata. Las exploraciones en
el papel que no involucran un espacio o una
acción en el mismo son las que tienen más
registro, algo más fácilmente coleccionable y
exhibible.

Sin título. Jorge Ortiz, 1990. Fuente: Eafit.

Acerca de la fotografía (1992). Instalación (químicos, carbón mineral y periódico).

Expuesto en la galería Valenzuela


y Klenner.

Acerca de la fotografía. Jorge Ortiz, 1992. Fuente: Colarte.


Cámara (1992). Objeto escultórico. Fundición en bronce a la cera perdida.

Este objeto escultórico es una declaración de Ortiz


acerca de su trabajo y la concepción de la cámara:
“La mandé a fundir en bronce porque es un material
eterno. Los conceptos me fueron llevando a otros,
como que la cámara no era una herramienta de
trabajo sino un objeto de arte. Unos principios muy
dadaístas.” (Tiempo, 2016). El concepto se muestra
una vez más como un eje muy importante en su
trabajo.

Cámara. Jorge Ortiz, 1992. Fuente: Eafit.


La fotografía camarada (1993). Papel fotográfico sensibilizado.

Una exploración acerca de la cámara como


objeto del arte y la fotografía, parece ser que
esta imagen es parte de una serie que parte de
este concepto concretado en el 92 con Cámara.

La fotografía cámarada. Jorge Ortiz, 1993.


Fuente: Eafit.
Cuarto oscuro (1993). Vidrio y químicos fotográficos

Cuarto Oscuro. Jorge Ortiz, 1993. Fuente: Colarte.

Esta es una obra acerca del tiempo y la


química, Ortiz dispone los químicos fotográficos
entre placas de vidrio y con el paso del tiempo y
la luz incidente una imagen va apareciendo.

Cuarto Oscuro. Jorge Ortiz, 1993. Fuente: Eafit.

De la serie paisaje (1993). Papel fotográfico y químicos fotográficos.

De la serie paisaje. Jorge Ortiz, 1993.


Fuente: Colarte
La cámara (1994). Técnica mixta.

Otra de las exploraciones


entorno al objeto de
“cámara” surgido en 1992.
Cercana a la vez a su obra
de La fotografía camarada
de 1993.

La cámara. Jorge Ortiz, 1994. Fuente: Colarte.

Piscina (1995). Instalación.

En este caso “(…)


recrea con químicos y
papel crepé azul la
sensación acuosa y
reposada del agua de una
piscina, cuyas formas
emergen gracias al efecto
continuo de la luz sobre
los trazos que el artista
Piscina. Jorge Ortiz, 1995. Fuente: Colarte. realiza encima de
fragmentos cuadrados de vidrio con el reactivo y que se modulan sobre el piso.” (Aguilar
Restrepo, 2018). Expuesto en el VII Salón regional de artistas, en Corferias.
Un bosque, un jardín (1998). Instalación.

Un bosque, un jardín. Jorge Ortiz, 1998. Fuente: Colarte.


Ganadora del premio Luis Caballero en 1998. Instalada en el espacio del planetario de Bogotá.

La obra se componía de paredes y suelo en material fotográfico fotosensible que por su


naturaleza se encontraba en constante cambio: “Como si se tratara de jardines reales, necesitan

exponerse al sol para seguir ‘vivas’. <<Es una obra muy biológica, orgánica y experimental.

Trabaja la idea del azar, y la luz hace el resto>>”. (Tiempo, 2016)

Jardín Polaroid (1998). Película polaroid y reactivos para blanco y negro.

Una extensión de su
instalación. Expuesta en la galería
La oficina de Medellín.

Jardín polaroid. Jorge Ortiz, 1998. Fuente: Colarte.


Cámara de Placa 1 y 2 (1998). Placa fotográfica y reactivos para blanco y negro.

Cámaras de placa 1 y 2. Jorge Ortiz, 1998. Fuente: Colarte.

Bosque 6x9 (1998). Papel fotográfico y reactivos para blanco y negro.

Una exploración sobre la


naturaleza y el medio fotográfico
para llegar a ella, o mejor, el
proceso fotográfico, parte crucial
en sus obras.

Bosque 6x9. Jorge Ortiz, 1998. Fuente: Colarte.

Cubetas del dorado (2001). Reactivos fotográficos sobre MDF

Cubetas del dorado. Jorge Ortiz, 2001. Fuente: Eafit


Foto-grafía-sintesis-grama (2003-2004). Impresión por luz natural, papel fotográfico
y hojas naturales.

Foto-grafía-síntesis-grama. Jorge Ortiz, 2004.


Fuente: Colarte.

Expuesta en el X salón regional de Artistas – Zona


Foto-grafía-síntesis-grama. Jorge Ortiz, 2004.
Antioquía. Es la inmersión y continuación de la línea
Fuente: Colarte.
naturaleza, azar, tiempo, lenguaje y claro: fotografía.

Medellín es un labio (2012). Químicos fotográficos sobre papel fotográfico.


Abstracción
paisajística de Ortiz
entorno a la ciudad de
Medellín, siendo el labio
inferior Santa Elena, el
labio superior Boquerón
y la línea divisoria el río
Medellín.

Medellín es un labio. Jorge Ortiz, 2012. Fuente: Artealto.


De la exposición Objeto (2016). Escultura.

Objeto. Jorge Ortiz, 2016. Fuente: El Mundo.

Objeto. Jorge Ortiz, 2016. Fuente: Vivir en el


poblado.

Damero (2017). Obra en proceso de oxidación.

Damero. Jorge Ortiz, 2017. Fuente: Artealto.

Paisaje a todo color (2017). Pintura.

Paisaje a todo color. Jorge Ortiz, 2017. Fuente: Artealto.


La idea y el objeto (2018). Intaglios sobre papel.

La idea y el objeto. Jorge Ortiz, 2018.


Fuente: STOPART. La idea y el objeto. Jorge Ortiz, 2018.
Fuente: El Espectador.

En esta exposición ubicada en La Balsa Arte, Ortiz escoge las palabras que encarnan ideas
de lo que concierne al acontecimiento fotográfico. Es en 36 intaglios blancos que aparecen
estas ideas de la práctica fotográfica.

Cables (1976-1978)
La obra que catapulta su carrera como fotógrafo y artista es Cables (1978), en esta hace
su primera exploración del horizonte y el paisaje, tan solo que esta vez es un “otro horizonte
que se extiende hacia arriba y hace de él una referencia del entorno que se promueve desde
la construcción de las ciudades” (Molina Saldarriaga, 2016). Ortiz hace evidente el paisaje
de las ciudades: líneas que se entrecruzan de un lado al otro de la ciudad, contrario a la idea
de paisaje ligada a la naturaleza, en el sentido de lo no intervenido, “creado” y/o construido
por el ser humano.
Así la -idea- diferenciación de paisajes comienza a aparecer en Jorge: “pensar en dos tipos
de paisajes: un paisaje que se piensa desde lo urbano y otro que es el paisaje donde se vive
en el alto de la tierra que se definirá como los volúmenes” (Molina Saldarriaga, 2016). El
paisaje urbano es el observado en Cables, el otro, por ejemplo, en Cuarto Oscuro de 1993.
Cables. Jorge Ortiz, 1978. Fuente: Arcadia.

En esta obra Ortiz:


(...) realiza series fotográficas en blanco y negro sobre papel, escogiendo los
postes de distribución eléctrica y sus cables, en que mantiene un rigor de registro:
fondos neutros dados por el cielo plomizo de Medellín, los mismos tema, enfoque y
distancia en cada toma y la consiguiente organización serial de su presentación,
haciendo un registro de arqueología urbana muy similar al de los esposos Bernd e
Hilda Becher, y fuertes contrastes creados por las líneas negras sobre el fondo blanco,
aparente abstracción que simula dibujos geométricos o pentagramas.(Rueda, 2009)

Cables. Jorge Ortiz, 1976. Fuente: Paddle8.


La obra fue expuesta por primera vez al público en el Museo de Arte Moderno de Bogotá,
en el ámbito del IV Salón Atenas, en 1978. De este se encuentra transcrito lo que decía el
folleto para el salón acerca de Ortiz:
(…) puede decirse que dibuja con fotografías (en un proceso inverso al de
muchos dibujantes adscritos al hiper-realismo). Las cuerdas de la luz definen líneas,
cuadrados, rectángulos y otras formas que inicialmente sugieren una división de
superficies, (por lo regular geométrica) pero que observados detenidamente, aparte
de relevar el lenguaje fotográfico, son huellas centrales del entorno urbano en un
paisaje vertical que se extiende al infinito. Su libro "Cables" representa un agudo y
oportuno paso en la divulgación de los valores primordialmente estéticos de la
fotografía.” (Serrano, 1978).
Es el “dibujo con fotografías” como se refiere Serrano, lo que Jorge Ortiz realizará el resto
de su carrera con los formatos en papel fotográfico, estará dibujando y pintando con la
fotografía, dialogando con abstracciones, es decir, con los mismos conceptos que componen
su área de desempeño.
En la revista Arcadia, luego de más de 40 años se comenta acerca de su obra:
Ortiz huye de la perfección y prefiere ligeros desenfoques y oscurecimientos.
Algunas fotografías fueron intervenidas manualmente introduciendo delgados hilos
de plata sobre los cables. Esta serie se une al espíritu de algunos artistas colombianos
de los setenta, que alimentados en la tradición paisajista de finales del xix (y en la
intención de estos artistas de diluir en una sola atmósfera la tierra y el cielo), buscaban
sintetizar el horizonte a través de líneas y formas puras, empleando diversas veladuras
cromáticas (…) trasciende además los límites impuestos por el medio pictórico y se
introduce exitosamente en la fotografía conceptual empleando el contexto urbano
como excusa, sin pirotecnias o aspavientos efectistas. (Badawi, 2015).

Por otro lado, Mónica Molina comenta acerca del acercamiento de Ortiz al paisaje desde
siempre en su artículo: La fotografía de Jorge ortiz, revelando paisajes; siendo el paisaje una
especie de filosofía de creación presente desde cables:
- Profe, ¿para usted qué es el paisaje?
- El paisaje es todo lo que está al frente mío.
- ¿Por qué el paisaje es el tema de su obra?
- Porque uno debe alimentarse de lo que lo rodea
y yo siempre he estado rodeado de naturaleza.
Ella es la que me entrega toda la sabiduría. (Ortiz Cancino, 2014).
Además de ser para Molina una oposición a la tradición paisajística que se llevaba:
(…) trasgrede la concepción costumbrista y propia de la tradición del arte
colombiano, brindando otra mirada a su interpretación, la cual ofrece nuevas
concepciones estéticas en el marco de las construcciones ofrecidas en el arte
contemporáneo local instituido desde los años 60, donde se elimina la mirada
nostálgica a los tiempos de antaño, y se propone que se mire a los paisajes que
promueve el desarrollo urbano. (Molina, 2016).

Empieza a quedarse atrás la visión del paisaje romántico y lleno de naturaleza orgánica, ahora
lo orgánico es la imagen misma.

Cables. Jorge Ortiz, 1978. Fuente: Arcadia.


Todos los comentarios y críticas sobre esta obra van por la misma línea narrativa, entre
estas esta la de Carlos Arturo Fernández en Desde el museo, con el apoyo del Museo de Arte
Moderno de Medellín:
A pesar de su aparente simplicidad, esta serie de fotografías reconoce, por una
parte, que el interés por el paisaje y, en sentido más general, por la relación con la
naturaleza, ha sido una preocupación constante de la cultura antioqueña, lo que se
manifiesta claramente en la pintura de todo el siglo 20; pero, por otra parte, hace caer
en la cuenta de que, en esa relación hombre / naturaleza, lo mejor del arte regional
centró sus preocupaciones en el ser humano, sin falsas nostalgias por paraísos
terrenales que la tradición creó, quizá para exorcizar la dureza de la realidad.
El paisaje de “Cable” es el de la vida urbana, signada por la industrialización y la
tecnología, con una geometría inapelable que se impone a los juegos orgánicos de la
naturaleza pero, por eso mismo, cargada del más profundo sentido humano.
(Fernández, 2009)
Es interesante esta crítica, no solo vuelve sobre el nuevo paisaje urbano que se mostraba,
sino que enuncia de manera literal cómo este parece ser el nuevo sentido humano.

Cables. Jorge Ortiz, 1978. Fuente: Medium.

Ya apelando a lo que he investigado y leído acerca del trabajo de Jorge Ortiz, he de


pronunciarme sobre la manera cómo se desenvolvió conceptualmente con la fotografía, sus
obras parecen juegos que se remiten constantemente el uno al otro. Cables es esa obra que
puede conectarse con la mayoría de su trabajo si así se desea: el alto contraste, el blanco por
un lado y el negro por el otro (un horizonte), la contingencia de la calle y su cableado, el
aumento del “progreso” y la transformación de la relación con el paisaje, tanto en la fotografía
como en la vida misma… Él mismo da testimonio de lo qué es la fotografía: “la idea mía con
la fotografía es básicamente la luz, el espacio y el tiempo, y eso quiere decir el azar, y eso
quiere decir el accidente”. (Cancino, 2019)
Algo que se les pasa a algunos es la misma contingencia del cielo que está detrás de los
cables, una naturaleza lejana fuera de nuestro control, control representado por esas formas
rigidas y rectas del cableado que contrastan con la misma naturaleza contingente de las nubes,
tan ideales y orgánicas en su forma. Podría hablarse de un choque entre la idea y la realidad,
el concepto y la materia; todo relacionado con el trabajo siguiente de Ortiz, no podría haber
elegido mejores bases para desarrollar el resto de su trabajo.
Jorge Ortiz Cancino es un artista conceptual, que se traslada y se mueve de un lugar a otro
entre la pintura, el dibujo, la fotografía, la escultura, la idea e incluso la gráfica. Abordando
temas de una gran amplitud conceptual como un niño que juega con el lenguaje y con el arte;
entre acontecimientos: llenos de tiempo, luz y espacio, nociones más que suficientes para
llegar a una fotografía, una imagen o un concepto... O las tres al mismo tiempo.

Cables. Jorge Ortiz, 1978.


Fuente: El Dorado.
Referencias
Grajales, D. (2016). El vuelo de Jorge Ortiz, un fotógrafo no fotógrafo. Extraído el 14 de
Noviembre del 2019, de
https://www.elmundo.com/portal/cultura/cultural/el_vuelo_de_jorge_ortiz_un_fotografo_n
o_fotografo.php#.XdGV2C_SE1J
Jorge Ortiz, Pintores| ColArte | Colombia. Extraído el 14 de noviembre del 2019, de
http://www.colarte.com/colarte/ConsPintores.asp?idartista=556&pest=obras
Fernández, C. Los paisajes de Jorge Ortiz: poesía de la luz. Extraído el 14 de Noviembre
del 2019, de https://salauartecontemporaneo.wordpress.com/exposiciones/nubes-en-el-
cuarto-oscuro/texto-de-carlos-arturo-fernandez/
Aguilar Restrepo, M. (2018). Jorge Ortiz. Alquimia e imagen. Co-Herencia, 15(58), 331-
337. doi: 10.17230/co-herencia.15.28.15
Tiempo, C. (2016). Exposición 'Despliegues gestuales', en la Gilberto Álzate Avendaño.
Extraído el 14 de noviembre del 2019, de https://www.eltiempo.com/cultura/arte-y-
teatro/exposicion-despliegues-gestuales-en-la-fundacion-gilberto-alzate-avendano-3269
Tiempo, C. (2016). Jorge Ortiz y el arte como un experimento biológico y orgánico.
Extraído el 14 de noviembre del 2019, de
https://www.eltiempo.com/archivo/documento/CMS-16471997
Jorge Ortiz, Fotógrafos| ColArte | Colombia. Extraído el 14 de noviembre del 2019, de
http://www.colarte.com/colarte/ConsPintores.asp?idartista=13356&pest=obras
Jorge Ortiz. Extraído el 14 de noviembre del 2019, de https://www.artealto.com/jorge-
ortiz
Objeto de Jorge Ortiz - Periódico Vivir en El Poblado. (2016). Extraído el 14 de noviembre
del 2019, de https://www.vivirenelpoblado.com/objeto-de-jorge-ortiz/
Molina Saldarriaga, M. (2016). La fotografía de Jorge Ortiz, revelando paisajes. Revista
Palobra, "Palabra Que Obra", 16(16), 146-159. doi: 10.32997/2346-2884-vol.16-num.16-
2016-1433
Badawi, H. (2015). La luz y el azar. Extraído el 15 de noviembre del 2019, de
https://www.revistaarcadia.com/arte/articulo/fotografia-de-jorge-ortiz/42827
Rueda, S. (2009). Autorretrato disfrazado de artista. Arte conceptual y fotografía en
Colombia. Ensayos: Historia Y Teoría Del Arte, 16, 117-147. doi: 10.15446/ensayos
Serrano, E. (1978). Salon Atenas IV, 1978 Salon, Grupos| ColArte | Colombia. Extraído
el 15 de noviembre del 2019, de
http://www.colarte.com/colarte/conspintores.asp?idartista=16749
Fernández, C. (2009). Desde el Museo / septiembre (quincena 1) - Periódico Vivir en El
Poblado. Extraído el 15 de noviembre del 2019, de
https://www.vivirenelpoblado.com/desde-el-museo-septiembre-quincena-1-3/

También podría gustarte