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República bolivariana de Venezuela

Ministerio del poder popular para la educación superior


Universidad Bicentenaria de Aragua
Extensión San Cristóbal Estado-Táchira
Escuela de psicología

PSICOLOGÍA DE LA ADICCIÓN Y LA DEPENDENCIA


PRIMER EXAMEN 25%
(Ensayo)

Autor:
Jennifer Andrea Parada Bustos
C.I: V-26.630.226
Psicología Trimestre: VIII
Sección: T9
Curso: Psicología de la adicción y la dependencia
Facilitador: Jesús Guerrero

San Cristóbal 26 de febrero del 2020


Las adicciones son un problema en el campo de la salud pública, que requieren de acciones

amplias y coordinadas, en las que deben de estar incluidos los esfuerzos de todos los sectores de la

sociedad en el Sector Salud, describiendo una definición más precisa sobre ¿Qué es la adicción?,

se puede decir que actualmente es una enfermedad física y psicoemocional, según la Organización

Mundial de la Salud (OMS que crea una dependencia o necesidad hacia una sustancia, actividad o

relación. Se caracteriza por un conjunto de signos y síntomas, en los que se involucran factores

biológicos, genéticos, psicológicos y sociales. Es una enfermedad progresiva y fatal, caracterizada

por episodios continuos de descontrol, distorsiones del pensamiento y negación ante la enfermedad.

En el sentido tradicional es una dependencia o necesidad hacia una sustancia, actividad o relación

debido a la satisfacción que esta causa a la persona. En su sentido etimológico, «adicto» proviene

del latín, que denotaba al deudor que, por falta de pago, era entregado como esclavo a su acreedor.

La adicción se caracteriza por episodios continuos o periódicos de descontrol, a pesar de

consecuencias adversas, y por distorsiones del pensamiento, especialmente la negación de padecer

la enfermedad y sus consecuencias.

Está conformada por los deseos que consumen los pensamientos y comportamientos (síndrome

de abstinencia) del adicto, y estos actúan en aquellas actividades diseñadas para conseguir la

sensación o efecto deseado y para comprometerse en la actividad deseada (comportamientos

adictivos). El síndrome de abstinencia consiste en una serie de reacciones físicas que aparecen

cuando una persona que sufre adicción a una sustancia deja de consumirla. A diferencia de los

simples hábitos o influencias consumistas, las adicciones son dependencias que traen consigo

graves consecuencias al adicto. Estas consecuencias afectan negativamente la vida personal y

social del individuo y su salud (física y mental), así como limita la capacidad de funcionar de

manera efectiva. Es adicta la persona que cree que no puede vivir sin la influencia de cierta
sustancia química, por lo cual la consume en forma permanente y compulsiva. El adicto no controla

su adicción, sino que vive en función de ésta: este es el eje y el condicionante de toda su rutina; si

trata de salir repentinamente de esta rutina, se ve afectado por problemas de ansiedad y, por lo

general, vuelve a caer en el consumo de su adicción, aunque puede dejar de ser adicto después de

pasar por la fase del síndrome de abstinencia llamada “mono”. Es importante destacar los factores

que pueden influir en el síndrome de abstinencia ya que la superación de este con éxito marcara la

diferencia en la vida del adicto. Hay varios factores estos dependen del tipo de droga, cantidad de

la droga, vía de administración, frecuencia de la administración, velocidad de absorción y

eliminación, estos factores farmacocinéticos son importantes, pues si la droga se elimina

lentamente, el síndrome de abstinencia se instaura de manera lenta, progresiva y atenuada, mientras

que, si se elimina rápidamente, la sintomatología aparece antes y de manera más intensa.

Así mismo cabe destacar al hablar sobre la adicción el punto de tolerancia a las drogas. Sucede

por una disminución gradual del efecto de una sustancia tras la administración repetida de la misma

dosis, lo que obliga a incrementar la dosis para obtener el efecto inicial. Puede llegar a considerarse

un fenómeno adaptativo del organismo. Se desarrolla en función de las propiedades farmacológicas

de la droga y de los efectos que a nivel bioquímico produce en el organismo. Hay distintas variantes

de tolerancia que pueden deberse al individuo consumidor o a la droga en sí. Además, existen seis

tipos de tolerancia a las drogas, de los cuales nombrando dos: tolerancia aguda y la tolerancia

invertida, esta ultima se da en algunas drogas que tienen una propiedad que producen los mismos

efectos o aun mas pronunciados con una dosis más baja y esto se explica ya que a través de la

acumulación de la droga en tejidos específicos y a la manera en que es expulsada progresivamente,

también puede ser causado por un problema de metabolización.


Claro está, ya explicados estos puntos la administración prolongada de las mismas sustancias puede

generar tolerancia y el cese brusco de su administración puede desarrollar un síndrome de

abstinencia. La vida del adicto está dominada por el consumo de la sustancia, hasta llegar a excluir

prácticamente todas las demás actividades y responsabilidades. Estas consecuencias naturales del

consumo de una sustancia. Se pueden producir no sólo cuando se consumen drogas, sino cuando

se consumen ciertos medicamentos, aunque sean prescritos en indicaciones médicas apropiadas y

en dosis correctas.

Para poder llegar a una conclusión sobre la adicción es fundamental conocer la historia de

la misma, fue entre las décadas de 1920 y 1960, en la cual se hicieron varios intentos para

diferenciar entre “adicción” y “habituación”, una forma menos severa de adaptación psicológica.

En la década de los años 60 la Organización Mundial de la Salud recomendó que dejaran de usarse

ambos términos a favor del de dependencia, que puede tener varios grados de severidad. Dicha

dependencia se divide entre la dependencia psicológica y la dependencia física las cuales tienen en

común la conducta final del dependiente: “obtener y consumir la droga” y no pueden considerarse

como parcelas separadas, sino complementarias e interactuantes en una misma persona. Es así que

en el caso de la dependencia en su caso física tiene que ver con la neuroadaptación que se refiere a

la necesidad de mantener unos niveles determinados de una droga en el organismo, desarrollándose

un vínculo droga-organismo. Que se componen de elementos claves como lo son la tolerancia y el

síndrome de abstinencia agudo, así como también la sensibilización que más específicamente se

trata de la respuesta aumentada a una droga tras una presentación intermitentemente repetida. La

aparición del síndrome de abstinencia agudo es lo que define la existencia de la dependencia física.

La dependencia psicológica es por otro lado, ese estado de ansia o anhelo de volver a

administrar una droga para diferentes fines vivenciales, que se sitúan principalmente efectos
placenteros, que pueden crear sedación, euforia, alucinaciones o evitar el malestar que se siente

con su ausencia. La dependencia psicológica es en sí complicada de afrontar, y la intensidad y

rapidez con la que se instaura, así como la dificultad para salir de ella una vez establecida, obedecen

a un conjunto de diversos factores que pueden ser educativos, sociales, ambientales,

motivacionales, antropológicos y, también, biológicos y tiene que ver relacionado con las

características de la propia droga en específico. Es el uso de la sustancia fuera de la pauta

terapéutica lo que definirá la diferencia entre la dependencia física a la psicológica ya que si, el

individuo tiene el deseo incontrolable por así decirlo de usar la sustancia fuera de esa pauta

terapéutica se entenderá como una dependencia psicológica y no física.

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