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Vamos a comenzar a realizar una relajación muscular progresiva.

Consiste en
tensar y relajar los músculos de nuestro cuerpo para aprender a diferenciar el
estado de tensión y de relajación que se producen en él. Así, podremos
relajarnos cuando estemos preocupados o sintamos tensión emocional. Se
trata de ir apretando con fuerza los músculos que yo te vaya mencionando, de
forma que sientas la tensión, pero sin hacerte daño. Y cuando yo te indique, los
relajas soltando toda la tensión de forma repentina, con la finalidad de sentir la
diferencia entre tensión y distensión.

Al tensar una zona de tu cuerpo, puede que sientas un ligero hormigueo, o


sensación de calor. Eso esta bien, permítete sentir esas sensaciones.
Colócate en una posición cómoda y cierra los ojos. Vamos a proceder a relajar
el cuerpo y a dejarnos llevar por las sensaciones. Vas a tomarte unos
segundos para ponerte en contacto con tu interior y aislarte de los ruidos
externos. Vas a sentir tu cuerpo y te vas a acomodar hasta que tu posición se
haga mas confortable.

Siente tu cuerpo relajado, sin tensiones y respira profundamente, tomando el


aire por la nariz y expulsándolo por la boca, con un ritmo más lento que la
respiración habitual.
Inspira, siente el aire en los pulmones y abdomen y expúlsalo lentamente,
como si quisieras apagar una vela en varios segundos. Respira
profundamente, tomando el aire por la nariz y expulsándolo por la boca.
Con cada inspiración y expiración, nota como el cuerpo va quedando suelto,
relajado, tranquilo, siente como el entorno se vuelve más agradable, los
sonidos suenan suaves, lejanos…Te sientes bien, te sientes sereno y tranquilo.

Ahora vamos a comenzar a tensar los músculos de nuestro cuerpo.


Empezamos con el brazo derecho, para ello aprieta el puño derecho y estira el
brazo. Siente la tensión que se genera en los dedos, en la mano y en todo el
brazo derecho, mantén esa tensión y suéltala. Relaja la mano, relaja el
antebrazo, relaja el codo, la muñeca, los dedos y todo el brazo derecho. Centra
tu atención en esa sensación, una sensación de ligereza o de pesadez. Nota
como el brazo se queda flojo, suelto y respira pausadamente.
Ahora vamos a tensar de nuevo los mismos músculos. Aprieta el puño derecho
y estira el brazo. Lo suficiente como para sentir la tensión muscular en todo el
brazo derecho. Tensa el brazo, tensa unos segundos más, y suelta toda la
tensión de nuevo. Ahora el brazo, el antebrazo, la mano, los dedos, incluso la
yema de los dedos y los nudillos quedan relajados. Nota la diferencia, antes
tensión, ahora relajación. Deja q tu respiración sea suave y rítmica, sin forzar.
El aire circula de forma suave y llega hasta tu abdomen.

Ahora vamos a tensar el brazo izquierdo, para ello aprieta el puño izquierdo y
estira el brazo, con fuerza suficiente para notar la tensión en todo el brazo
izquierdo, tensa un poco más, unos segundos más, y suelta toda la tensión,
permite que se relaje la mano, los dedos, la muñeca, el codo, y todo el brazo
izquierdo. Concentra tu atención en las sensaciones de relajación que se
producen, pesadez, flojedad, suavidad…
repetimos de nuevo la tensión en el brazo izquierdo, aprieta el puño y estira el
brazo izquierdo, ténsalo, ténsalo más, nota la tensión q es incomoda y relaja el
brazo, soltamos la tensión del antebrazo, de la mano, de la yema de los dedos
y los sentimos relajados. El brazo izquierdo se queda suave, libre de tensión y
la respiración sigue suave y tranquila, sin forzar, nos centramos en las
sensaciones tan agradables de tener los brazos relajados.

Ahora vamos a tensar los músculos de la cara, para ello aprieta los parpados,
frunce el ceño, eleva la nariz aprieta los labios y los dientes y empuja la lengua
contra el paladar. Mantén esa tensión, es incomoda…. y suelta toda la tensión,
ve relajando cada una de las zonas de la cara, frente, ojos, nariz, pómulos,
labios, mandíbula, y respira suave y tranquilamente.
De nuevo tensamos los músculos de la cara, apretamos los parpados
fruncimos el ceño, elevamos la nariz, apretamos los labios, los dientes y
empujamos la lengua contra el paladar, sentimos la tensión en los músculos de
nuestra cara mantenemos esa tensión unos segundos y soltamos, relajamos
cada una de nuestras partes de la cara, sentimos como se va relajando la
frente, la nariz los ojos, los pómulos, la mandíbula los labios, y toda la cara.

Ahora vamos a tensar el cuello, para tensarlo empuja la cabeza hacia atrás
contra el respaldo de la silla. Tensa el cuello, siente la tensión, unos segundos
más y relaja, relaja todo el cuello, el cuello queda suave y sin tensión,
respiramos profundamente, sentimos al relajación que nos produce esa
respiración pausada.
Y tensamos de nuevo el cuello, esta vez en sentido contrario intenta con la
barbilla tocar el pecho, tensa el cuello, tensa un poco mas, siente esa tensión
y suéltala, relaja todo el cuello. Concentra tu atención en la sensación de
relajación y bienestar q se van a cumulando. La respiración continua suave,
los brazos están relajados y ahora la cara y el cuello también,

Para tensar los hombros, vamos a tirar de ellos hacia atrás, como si
intentásemos tocar nuestros hombros entre si por la espalda, tensa los
hombros, siente la tensión, es incomoda, tensa un poco mas y suelta toda la
tensión, la espalda se relaja. Nota la diferencia, antes tensión ahora relajación.
Y mantén esa relajación mediante la respiración profunda.
Ahora tensaremos de nuevo los hombros pera esta vez tiraremos de ellos hacia
delante como si quisiéramos juntarlos delante nuestro, ténsalos, tensa los
hombros, siente la tensión… y relaja, el pecho y la espalda se relajan,
concentra tu atención en las sensaciones q se producen, los músculos se
aflojan, disfruta de esa sensación de relajación que se va produciendo, respira
de forma suave.

Ahora vamos a tensar el abdomen, para ello mete el ombligo hacia dentro y
siente la tensión en tu abdomen, siente la tensión, unos segundos mas y suelta
la tensión, los músculos quedan suaves y tu atención se centra en la relajación
y en las sensaciones agradables q se producen.
Tensa de nuevo los músculos del abdomen, mete el ombligo, siente la tensión,
un poco mas, y suéltala tensión, relaja la espalda y el abdomen y disfruta de
esa sensación agradable q siente al soltar la tensión, siente como tus músculos
se aflojan y siente como crece la tranquilidad.
Ahora vamos a tensar la parte media y baja de la espalda, para ello trata de
arquear la espalda como si quisieras sacar el abdomen hacia delante. Arquea
la espalda ahora, siente la tensión, un poco mas, y suelta la tensión. De nuevo
se produce una liberación de tensión q resulta agradable, relajante, compara y
nota la diferencia, antes había tensión y ahora relajación.
Tensa de nuevo la espalda arqueándola, siente de nuevo la tensión, tensa un
poco más, y relaja toda la espalda. Concentra tu atención de nuevo en las
sensaciones agradables que se producen al soltar la tensión, la espalda se va
quedando mas suelta, menos tensa, mas relajada, concentra tu atención en las
sensaciones de relajación profunda, la respiración continua suave y tranquila,
el aire entra y tu cuerpo se relaja, el aire sale y la tensión se va. La respiración
continua suave, profunda, y sin forzar, relajante y agradable.

ahora vamos a tensar la pierna derecha, para ello estira la pierna y dobla los
dedos del pie hacia arriba, hacia la rodilla, curvando el pie, aprieta el muslo,
siente toda la tensión en la pierna, un poco mas, y suelta la tensión. La pierna
derecha se relaja, el pie, el tobillo, el gemelo, la rodilla, y el muslo también.
Concentra tu atención en todos los músculos q han soltado la tensión y nota la
diferencia, respira tranquilamente, disfruta de esa sensación.
De nuevo tensa la pierna derecha, aprieta el muslo, dobla los dedos del pie
hacia arriba, nota la tensión, un poco mas, y suelta la tensión. Ahora se relaja
el pie, el tobillo, la pantorilla, la rodilla, el muslo,

ahora vamos a tensar la pierna izquierda, para ello estira la pierna izquierda y
rtensala con fuerza, dobla los dedos del pie izquirdo hacia arriba, curvando el
pie. Tensa un poco mas, unos segundos más y suelta toda la tensión. Todos
los musculos se relajan, los musculos del gemelo, del tobillo, y del pie se
relajan, respira tranquilamente, y tensamos de nuevo la pierna izquierda,
aprieta el muslo, dobla los dedos del pie izquierdo hacia arriba, tensa toda la
pierna izquierda, siente la tensión, es incomoda y suelta la tensión, la pierna se
relaja, se relaja el pie, el gemelo, la rodilla, y el muslo también. Sientes una
sensaciona gradable de tranwuilidad, y relajación que recorre toda tu pierna.
Sientes que la tensión desaparece.y ahora tu cuerpo se ha relajado,

Esa sensación tan agradable se ha extendido por todo tu cuerpo, por los
brazos, por la cara, por el cuello, los hombros, la espalda, el abdomen y
también las piernas.
Y ahora los sientes muy relajados, la respiración se ha hecho tranquila y
profunda, suave y sin forzar, abdominal y relajante. Siente el ritmo suave y
tranquilo. Siente la paz que te reporta esa respiración tranquila abdominal y
profunda. Siente como se renueva tu energía, como la tensión abandona tu
cuerpo. Siente como la tranquilidad y la relajación cada vez se hacen as y mas
agradables. Permítete sentir esas sensaciones tan agradables, tienes derecho
a sentirte tranquilo y relajado.
Disfruta durante un momento de esas sensaciones y siente como renuevan
también tu mente.
Ve moviendo poco a poco los músculos del cuerpo que hemos ido tensando y
relajando, ve abriendo los ojos lentamente, levantarte de forma suave.

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