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· 16ª.- Jesús de nuevo ante Pilatos. Es
pospuesto a Barrabás. Jesús es flagelado.
· 17ª.- (1) Jesús es coronado de espinas.
"Ecce Homo". Jesús es condenado a muerte.
(2) Jesús de Nuevo ante Pilatos, que lo
muestra al pueblo.
· 18ª.- (1) Jesús abraza la Cruz. (2) Jesús
desnudado y coronado de espinas por tercera
vez.
· 19ª.- (1) La Crucifixión de Jesús. (2)
Segunda parte: Jesús Crucificado. Con Él
desarmamos la Justicia Divina.
· 20ª.- Primera Hora de agonía en la Cruz.
· 21ª.- Segunda Hora de agonía en la Cruz.
· 22ª.- Tercera Hora de agonía en la Cruz.
Muerte de Jesús.
· 23ª.- Jesús muerto, traspasado por la lanza.
El descendimiento de la Cruz.
· 24ª.- (1) La Sepultura de Jesús. (2) Se
cierra el sepulcro.
DOLORES DE LA VIRGEN
RESURRECION DE JESUS
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1ª Hora, - Jesús se despide de su Madre
REFERENCIAS A
LAS HORAS DE LA PASION EN LOS 36
VOLUMENES DE LA SIERVA DE DIOS LUISA
PICCARRETA
DOLORES DE LA VIRGEN MARÍA
LA RESURRECCION DE JESUS
PRIMERA HORA
Jesús se despide de su Madre Santísima
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1ª Hora, - Jesús se despide de su Madre
También te digo que todo lo bueno que hacen
las criaturas, todo fue hecho por mi Humanidad,
para hacer que todo el obrar de las criaturas fuera
primero divinizado por Mí. Además de esto, mi Vida
continúa todavía real y verdadera en el mundo, no
sólo en el Santísimo Sacramento sino también en
las almas que se encuentran en mi Gracia, y siendo
muy restringida la capacidad de la criatura, no
pudiendo tomar de una sola todo lo que Yo hice,
hago de manera que un alma continúe mis
reparaciones, otra las alabanzas, alguna otra el
agradecimiento, alguna otra el celo de la salud de
las almas, otra mis sufrimientos y así de todo lo
demás, y según me correspondan así desarrollo mi
Vida en ellas. Así que piensa en quÉ estrechuras y
penas me ponen, pues mientras Yo quiero obrar en
ellos, ellos no me hacen caso.”
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1ª Hora, - Jesús se despide de su Madre
Pero has de saber que al dar, quiero la
correspondencia, y mi amada Mamá comprendió e
inmediatamente me bendijo, no sólo por Ella sino a
nombre de todos. ¡Oh! si todos pudieran ver esta
bendición mía, la sentirían en el agua que beben, en
el fuego que los calienta, en el alimento que toman,
en el dolor que los aflige, en los gemidos de la
oración, en los remordimientos de la culpa, en el
abandono de las criaturas, en todo escucharían mi
Palabra Creadora que les dice, pero
desafortunadamente no escuchada: “Te bendigo en
el nombre del Padre, de Mí, Hijo, y del Espíritu
Santo.” Te bendigo para ayudarte, te bendigo para
defenderte, para perdonarte, para consolarte, te
bendigo para hacerte santa, y la criatura haría eco a
mis bendiciones, bendiciéndome también ella en
todo.
Estos son los efectos de mi bendición, de la
cual mi Iglesia, enseñada por Mí, me hace eco, y
casi en todas las circunstancias, en la
administración de los Sacramentos y en otras
ocasiones da su bendición.”
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1ª Hora, - Jesús se despide de su Madre
bendigo en modo especial, te bendigo el corazón, la
mente, el movimiento, la palabra, el respiro, toda y
todo te bendigo.”…
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2ª Hora, - Jesús se separa de su Madre y va al Cenáculo
CITAS EN VOLUMENES
SEGUNDA HORA
Jesús se separa de su Madre Santísima y se encamina
al Cenáculo.
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3ª Hora, – La Cena Legal
CITAS EN VOLUMENES
TERCERA HORA
La Cena Legal
Vol.13. 09.10.1921(22):
Estaba pensando en el momento en el que mi
dulce Jesús tomaba la última cena con sus discípulos, y
mi amable Jesús en mi interior me ha dicho:
“Hija mía, mientras cenaba con mis
discípulos, no era sólo a ellos a quienes tenía a mi
alrededor, sino a toda la familia humana, una por
una la tenía junto a Mí, las conocí todas, las llamé
por su nombre; también te llamé a ti y te di el
puesto de honor entre Juan y Yo y te constituí
pequeña secretaria de mi Querer, y mientras partía
el cordero ofreciéndolo a mis apóstoles, lo daba a
todos y a cada uno; aquel cordero desangrado,
asado, cortado en pedazos, hablaba de Mí, era el
símbolo de mi Vida y de cómo debía reducirme por
amor de todos y Yo quise darlo a todos como
alimento exquisito que representaba mi Pasión,
porque todo lo que hice, dije y sufrí, mi Amor lo
convertía en alimento para el hombre.
¿Pero sabes tú por qué llamé a todos y les di
el cordero a todos? Porque también Yo quería el
alimento de ellos, cada cosa que hicieran quería
que fuese alimento para Mí, quería el alimento de su
amor, de sus obras, de sus palabras, de todo.”
Y yo: “Amor mío, ¿cómo es posible que nuestro
obrar se convierta en alimento para Ti?” Y Jesús:
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3ª Hora, – La Cena Legal
“No sólo de pan se puede vivir, sino de todo
aquello a lo que mi Voluntad da la virtud de poder
hacer vivir, y si el pan alimenta al hombre es porque
Yo lo quiero. Ahora, lo que la criatura dispone con
su voluntad formarme con su obrar, esa forma toma
su obrar; si de su obrar quiere formarme el
alimento, me forma el alimento; si de su obrar
quiere formar amor, me da el amor; si reparación,
me forma la reparación; y si en su voluntad me
quiere ofender, con su obrar me forma el cuchillo
para herirme y tal vez aún para matarme.”
Después ha agregado:
“La voluntad en el hombre es lo que más lo
asemeja a su Creador; en la voluntad humana he
puesto parte de mi Inmensidad y de mi Potencia y
dándole el lugar de honor la he constituido reina de
todo el hombre y depositaria de todo su obrar. Así
como las criaturas tienen cajas para conservar sus
cosas para tenerlas custodiadas, así el alma tiene
su voluntad para conservar y custodiar todo lo que
piensa, lo que dice y lo que obra, ni siquiera un
pensamiento perderá.
Lo que no puede hacer con los ojos, con la
boca, con las obras, lo puede hacer con la voluntad;
en un instante puede querer mil bienes o mil males,
la voluntad hace volar el pensamiento al Cielo, a las
partes más lejanas y hasta en los abismos; a la
criatura se le puede impedir que obre, que vea, que
hable, que camine, etc., pero todo esto lo puede
hacer en la voluntad. Todo lo que hace y quiere
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3ª Hora, – La Cena Legal
forma un acto y lo deja en depósito en su mismo
querer; y cómo la voluntad se puede extender,
¿cuántos bienes o males no puede contener? Por
eso, entre todo quiero el querer del hombre, porque
si tengo esto, la fortaleza está vencida.”
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4ª Hora, – La Cena Eucarística
CITAS EN VOLUMENES
CUARTA HORA
La Cena Eucarística
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4ª Hora, – La Cena Eucarística
entonces tú estabas presente a Mi y te constituí
depositaria de mi vida sacramental, y en ti a todas
las demás almas que habrían vivido en mi Querer.
Te di el primado sobre todo, y con razón,
porque mi Querer no está sometido a ninguno, aun
sobre los apóstoles, sobre sacerdotes, porque si
bien ellos me consagran pero no quedan como vida
junto conmigo, es más, me dejan solo, olvidado, no
teniendo cuidado de Mí; en cambio esas almas
habrían sido vida en mi misma Vida, inseparables
de Mí, por eso “te amo” tanto, es a mi mismo Querer
que amo en ti.”
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4ª Hora, – La Cena Eucarística
Humanidad y el cortejo de los honores de mi
Divinidad; de otra manera, ¿cómo podía descender
en la criatura?
Y fue sólo por esto que toleré los sacrilegios,
las frialdades, las irreverencias, las ingratitudes,
porque habiéndome recibido a Mí mismo puse a
salvo mi decoro, los honores, la habitación que se
necesitaba a mi misma persona; si no me hubiera
recibido a Mí mismo Yo no habría podido descender
en ella, y a ella le habría faltado el camino, la puerta,
los medios para recibirme.
Así es mi costumbre en todas mis obras, las
hago una vez para dar vida a todas las demás veces
que se repetirán, uniéndolas al primer acto como si
fuera un acto solo; así que la Potencia, la
Inmensidad, la Omnividencia de mi Voluntad me
hicieron abrazar todos los siglos, me hicieron
presentes todos los comulgantes y todas las
hostias sacramentales y me recibí otras tantas
veces a Mí mismo, para hacer pasar por Mí a Mí
mismo en cada criatura.
¿Quién ha pensado jamás en tanto amor mío,
que para descender en los corazones de las
criaturas Yo debía recibirme a Mí mismo para poner
a salvo los derechos divinos y poder dar a ellas no
sólo a Mí mismo, sino también los mismos actos
que Yo hice al recibirme para disponerlas y darles
casi el derecho de poderme recibir?”
Yo he quedado maravillada y como si quisiera
dudar, y Jesús ha agregado:
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4ª Hora, 8 Pm – La Cena Eucarística
“¿Por qué dudas? ¿No es acaso éste el obrar
de Dios? ¿Y de este acto solo formar tantos actos
por cuantos se quiera disfrutar, mientras que es un
solo acto? ¿No fue lo mismo para el acto de la
encarnación, de mi vida y de mi Pasión? Una sola
vez me encarné, una fue mi vida, una la pasión, sin
embargo esta encarnación, vida y pasión son para
todos y para cada uno como si fuera para él solo,
así que están aun como en acto y para cada uno,
como si ahora me estuviera encarnando y sufriendo
mi Pasión, si no fuera así, no obraría como Dios
sino como criatura, que no conteniendo un poder
divino no puede hacerse de todos, ni puede darse a
todos.
Ahora hija mía, quiero decirte otro exceso de
mi amor: Quien hace mi Voluntad y vive en Ella
viene a abrazar el obrar de mi Humanidad, porque
Yo amo mucho que la criatura se vuelva similar a
Mí, y como mi Querer y el suyo son uno solo, El
toma placer y recreándose depone en la criatura
todo el bien que contengo, y hago en ella el
depósito de las mismas hostias sacramentales. Mi
Voluntad que la criatura contiene le presta y la
circunda con decoro, homenajes y honores divinos,
y Yo todo a ella le confío, porque estoy cierto de
poner al seguro mi obrar, porque mi Voluntad se
hace actor, espectador y custodio de todos mis
bienes, de mis obras y de mi misma Vida.”
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4ª Hora, – La Cena Eucarística
Nuestro Señor hizo el depósito de su vida
sacramental en el Corazón de la Santísima Virgen.
Estaba haciendo la hora (de 8 a 9 PM del libro, "Las
Horas de la Pasión."), cuando Jesús instituyó la
Santísima Eucaristía, y Jesús moviéndose en mi interior
me ha dicho:
"Hija mía, cuando hago un acto, primero miro
si hay al menos una criatura dónde poner el
depósito de mi acto, a fin de que tome el bien que
hago, lo tenga custodiado y bien defendido. Ahora:
cuando instituí el Santísimo Sacramento, busqué la
criatura y mi Reina Madre se ofreció a recibir aquel
acto mío y el depósito de este gran don diciéndome:
“Hijo mío, si te ofrecí mi seno y todo mi ser en tu
concepción para tenerte custodiado y defendido,
ahora te ofrezco mi Corazón Materno para recibir
este gran depósito, dispón en torno a tu vida
sacramental mis afectos, mis latidos, mi amor, mis
pensamientos, todo mi ser para tenerte defendido,
cortejado, amado, reparado. Tomo yo el
compromiso de corresponderte el don que haces,
confíate de tu Madre y yo pensaré en la defensa de
tu vida sacramental; y puesto que tú mismo me has
constituido en Reina de toda la creación, tengo el
derecho de disponer en torno a ti toda la luz del sol
como homenaje y adoración; las estrellas, el cielo,
el mar, todos los moradores del aire, todo pongo en
torno a Ti para darte amor y gloria".
Ahora asegurándome donde podía poner este
gran depósito de mi vida sacramental y fiándome de
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4ª Hora, 8 Pm – La Cena Eucarística
mi Madre que me había dado todas las pruebas de
su fidelidad, instituí el Santísimo Sacramento. Sólo
Ella era la digna criatura que podía custodiar,
defender y reparar mi acto, ves así pues como
cuando las criaturas me reciben yo desciendo a
ellas junto con lo actos de mi inseparable Madre y
solo por esto puede durar mi vida sacramental. Por
eso es necesario que escoja primero una criatura
cuando quiero hacer una gran obra digna de mi,
primero por tener el lugar dónde poner mi don,
segundo para obtener la reciprocidad.
También en el orden natural hacen así: si el
agricultor quiere arrojar la semilla, no la arroja en
medio del camino, sino va en busca del pequeño
terreno; primero lo trabaja, le forma el surco y luego
le arroja la semilla y para estar seguro cubre de
tierra esperando con ansia el retoño para
corresponderse por su trabajo y de la semilla que
ha confiado a la tierra. Otro quiere formar un bello
objeto: primero prepara las materias primas, el
lugar donde ponerlo y luego lo forma. Así pues
todo he hecho por ti: te escogí, te preparé y luego te
confié el gran don de las manifestaciones de mi
Voluntad así como encomendé a mi dilecta Madre
el destino de mi vida sacramental, he querido fiarme
de ti confiándote el destino del Reino de mi
Voluntad".
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4ª Hora, – La Cena Eucarística
Soledad de Jesús en la Eucaristía, pues
tantos que pudiéndolo recibir no comparten su
Vida. El alma que Lo acompaña se forma su
Eucaristía viviente en la cual continua su Vida y su
Pasión.
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4ª Hora, 8 Pm – La Cena Eucarística
solo, no me dicen una palabra que parta mi soledad,
son especies mudas.
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4ª Hora, 8 Pm – La Cena Eucarística
por qué? Mi Amor, haciéndome dulce cautiverio,
me dice:
"Tu finalidad, para lo que descendiste del
Cielo a la tierra no está cumplida. El Reino de
nuestra Voluntad, ¿dónde está? Ni existe, ni es
conocida; por lo tanto, quedas prisionero en cada
Hostia Sacramental. Así no será un solo Jesús,
como en tu Humanidad, sino tantos Jesús por
cuantas Hostias Sacras existirán; tus tantas vidas
harán mella y furor de Amor ante la Divinidad y
mella y furor en cada corazón que te recibirá.
Tendrán una palabrita que decir para hacer conocer
nuestro Querer, para éstas vidas mudas, pero
hablantes y te hablará en el secreto de sus
corazones de nuestro Fiat; serás el portador de
nuestro Reino".
Por lo tanto, yo vi justas las pretensiones de
mi Amor y voluntariamente me quedé en la tierra,
para formar el Reino de mí Voluntad hasta que sea
la obra completa.
Ves, si Yo partí para el Cielo y me quedé en la
tierra, mi vida esparcida en tantas hostias
Sacramentales no será inútil aquí abajo. Formaré
con certeza el Reino de mi Querer; Yo no me
hubiera quedado si hubiese sabido de no poder
obtener el propósito, mucho más que me conlleva
más sacrificio que mi misma vida mortal. ¡Cuántas
lágrimas secretas, cuántos suspiros amargos, en
medio de tantas llamas de Amor que me devoran! Y
quisiera devorar todas las almas con mi Amor, para
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4ª Hora, – La Cena Eucarística
hacer resucitar la nueva vida en las almas que
deben vivir en mi Querer Divino. Del centro de mi
Amor saldrá este Reino. Él quemará los males de la
tierra; hará cuentas sobre si mismo, armará su
Omnipotencia y a sus tantas victorias vencerá
nuestro Reino en medio de las criaturas, para
dárselo a ellas”. …
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4ª Hora, 8 Pm – La Cena Eucarística
Querer. Son siempre ellas las que suplen no sólo
todos los actos que me deben las criaturas, sino a
mi misma Vida Sacramental.
Cuántas veces queda obstaculizada mi Vida
Sacramental en las pocas hostias en las que Yo
quedo consagrado, porque son pocos los que
comulgan, otras veces faltan sacerdotes que me
consagren, y mi Vida Sacramental no sólo no queda
multiplicada cuanto quisiera, sino que queda sin
existencia. ¡Oh! cómo sufre por ello mi amor,
quisiera multiplicar mi Vida todos los días en tantas
hostias por cuantas criaturas existen para darme a
ellas, pero en vano espero, mi Voluntad queda sin
efecto.
Pero lo que he decidido, todo tendrá
cumplimiento, por eso tomo otro camino y me
multiplico en cada acto vivo de la criatura hecho en
mi Querer, para hacerme suplir de la multiplicación
de las Vidas Sacramentales. Ah, sí, sólo las almas
que vivan en mi Querer suplirán a todas las
comuniones que no reciben las criaturas, a todas
las consagraciones que no son hechas por los
sacerdotes; en ellas encontraré todo, aun la misma
multiplicación de mi Vida Sacramental.
Por eso te repito que tu misión es grande, a
misión más alta, más noble, sublime y divina no
podría escogerte, no hay cosa que no concentraré
en ti, aun la multiplicación de mi Vida, haré nuevos
prodigios de gracia jamás hechos hasta ahora. Por
eso te pido, sé atenta, sé fiel, haz que mi Voluntad
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4ª Hora, – La Cena Eucarística
tenga vida siempre en ti, y Yo en mi mismo Querer
en ti, encontraré toda completada la obra de la
Creación, con mis plenos derechos y todo lo que
quiero.”
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5ª Hora, – 1ª Hora de Agonía en el Huerto
CITAS EN VOLUMENES
QUINTA HORA
Primera hora de agonía en el Huerto de Getsemaní.
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5ª Hora, – 1ª Hora de Agonía en el Huerto
cual tanto me amó, y mi Jesús, moviéndose de nuevo
en el fondo de mi interior me ha dicho:
“Hija mía, entra en mi Amor, no salgas jamás,
corre junto a él, o detente en mi mismo Amor para
comprender bien cuánto he amado a la criatura;
todo es amor en Mí hacia ella. La Divinidad al crear
a esta criatura se propuso amarla siempre, así que
en cada cosa de dentro y fuera de ella, debía correr
hacia ella con un continuo e incesante nuevo acto
de amor.
Por lo tanto puedo decir que en cada
pensamiento, mirada, palabra, respiro, latido, y en
todo lo demás de la criatura corre un acto de Amor
Eterno. Pero si la Divinidad se propuso el amarla
siempre y en cada cosa a esta criatura, era porque
quería recibir en cada cosa la correspondencia del
nuevo e incesante amor de la criatura, quería dar
amor para recibir amor, quería amar para ser amada.
¡Pero no fue así! La criatura no sólo no quiso
mantener el compás del amor, ni responder al eco
del Amor de su Creador, sino que rechazó este
Amor, lo desconoció y lo ofendió.
Ante esta afrenta la Divinidad no se detuvo,
sino que continuó su nuevo e incesante Amor hacia
la criatura, y como la criatura no lo recibía,
quedaban llenos Cielos y tierra esperando a quien
debía tomar este Amor para tener en ella la
correspondencia; porque Dios cuando decide y
propone, todos los eventos en contrario no lo
cambian, sino que permanece inmutable en su
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5ª Hora, – 1ª Hora de Agonía en el Huerto
inmutabilidad. He aquí porqué, pasando a otro
exceso de amor vine Yo, Verbo del Padre, a la tierra,
y tomando una Humanidad recogí en Mí todo este
Amor que llenaba Cielo y tierra para corresponder a
la Divinidad con tanto amor por cuanto había dado y
debía dar a las criaturas, y me constituí amor de
cada uno de los pensamientos, de cada mirada, de
cada palabra, latido, movimiento y paso de cada
una de las criaturas.
Por este motivo mi Humanidad fue trabajada,
aun en su más pequeña fibra por las manos del
Eterno Amor de mi Padre Celestial, para darme
capacidad de poder encerrar todo el Amor que la
Divinidad quería dar a las criaturas, para darle el
amor de todas y constituirme amor de cada uno de
los actos de criatura. Así que cada pensamiento
tuyo está coronado por mis incesantes actos de
amor; no hay cosa en ti o fuera de ti que no esté
circundada por mis repetidos actos de amor, por
eso mi Humanidad en este Huerto gime, se afana,
agoniza, se siente triturada bajo el peso de tanto
amor, porque amo y no soy correspondido.
Las penas del amor son las más acerbas, las
más crueles, son penas sin piedad, más dolorosas
que mi misma Pasión. ¡Oh! si me amaran, el peso
de tanto amor se volvería ligero, porque el amor
correspondido queda apagado y satisfecho en el
amor mismo de quien ama; pero no correspondido
llega a la locura, delira y se siente correspondido
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5ª Hora, – 1ª Hora de Agonía en el Huerto
con un acto de muerte por aquel amor que de él
salió.
Ves entonces cómo fue mucho más acerba y
dolorosa la Pasión de mi Amor, porque si en mi
Pasión fue una sola la muerte que me dieron, en
cambio en la Pasión del amor, tantas muertes me
hicieron sufrir por cuantos actos de amor salieron
de Mí y no fui por ellos correspondido. Por eso ven
tú, hija mía, a corresponderme de tanto amor, en mi
Voluntad encontrarás como en acto todo este Amor,
hazlo tuyo y constitúyete, junto Conmigo, amor de
cada acto de criatura, para darme la
correspondencia del amor de todos.”
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6ª Hora, – 2ª Hora de Agonía en el Huerto
CITAS EN VOLUMENES
SEXTA HORA
Segunda hora de agonía en el Huerto de Getsemaní.
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6ª Hora, – 2ª Hora de Agonía en el Huerto
me torturaban, para dar a ellas la inclinación al bien
y hacerles más dulces las penas, tanto, que en el
huerto grité al Padre: “Si es posible pase de Mí este
cáliz.” ¿Crees tú que fui Yo? ¡Ah no! Te engañas.
Yo amaba el sufrir hasta la locura, amaba la
muerte para dar vida a mis hijos; era el grito de toda
la familia humana, que resonaba en mi Humanidad,
y Yo, gritando junto con ellos para darles fuerzas,
repetí tres veces: “Si es posible pase de Mí este
cáliz.” Yo hablaba a nombre de todos, como si
fueran cosa mía, pero me sentía aplastar; así que la
repugnancia que sientes no es tuya, es el eco de la
mía, si fuera tuya me habría retirado, por eso hija
mía, queriendo generar de Mí otra imagen mía,
quiero que aceptes, y Yo mismo quiero imprimir en
tu voluntad ensanchada y consumada en la mía
estas mis muertes de amor.” Y mientras esto decía,
con su Santa Mano me las imprimía y ha desaparecido.
Sea todo para gloria de Dios.
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6ª Hora, – 2ª Hora de Agonía en el Huerto
Y con decir: “Non mea voluntas, sed Tua
Fiat”, Yo intentaba vaciar a las criaturas de su
voluntad y llenarlas de la Divina.
Antes de morir, porque no me quedaban más
que horas, Yo quise contratar con mi Padre
Celestial mi primera finalidad por la cual vine a la
tierra, que la Divina Voluntad tomara su primer lugar
de honor en la criatura. El sustraerse de la Voluntad
Suprema había sido el primer acto del hombre, y
por lo tanto nuestra primera ofensa, todos sus
demás males entran en el orden secundario, y Yo
debí primero realizar la finalidad del “Fiat Voluntas
Tua come in Cielo così in terra”, y después formar
con mis penas la Redención, porque la misma
Redención entra en el orden secundario
Es siempre mi Voluntad la que tiene el
primado sobre todas las cosas, y si bien de los
frutos de la Redención se vieron los efectos, pero
fue en virtud de este contrato que Yo hice con mi
Padre Divino, el que su Fiat debía venir a reinar
sobre la tierra, realizando la verdadera finalidad de
la creación del hombre y mi finalidad primaria por la
cual vine a la tierra, que el hombre pudo recibir los
frutos de la Redención, de otra manera habría
faltado el orden a mi Sabiduría.
Si el principio del mal fue su voluntad, a ésta
debía Yo ordenar y restablecer, reunir Voluntad
Divina y humana, y si bien se vieron primero los
frutos de la Redención, esto dice nada; mi Voluntad
es como un Rey, que si bien es el primero entre
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6ª Hora, – 2ª Hora de Agonía en el Huerto
todos, llega al último, precediéndolo por su honor y
decoro sus pueblos, ejércitos, ministros, príncipes
y toda la corte real. Así que primero eran
necesarios los frutos de mi Redención para hacer
encontrar la corte real, los pueblos, los ejércitos,
los ministros, a la altura de la Majestad de mi
Voluntad.
¿Pero sabes tú quién fue la primera en gritar
junto Conmigo: “Non mea voluntas, sed Tua Fiat”?
Fue mi pequeña recién nacida en mi Voluntad, mi
pequeña hija, que tuvo tal repugnancia, tal espanto
de su voluntad, que temblorosa se estrechó a Mí y
gritó junto Conmigo: “Padre, si es posible pase de
mí este cáliz de mi voluntad”, y llorando agregaste
junto Conmigo: “Non mea voluntas, sed Tua
Fiat.” ¡Ah! sí, estuviste tú junto Conmigo en aquel
primer contrato con mi Padre Celestial, porque se
necesitaba al menos una criatura que debía hacer
válido este contrato, de otra manera, ¿a quién
darlo? ¿A quién confiarlo? Y para volver más
segura la custodia del contrato te hice don de todos
los frutos de mi Pasión, poniéndolos en cortejo a tu
alrededor como un ejército formidable, que
mientras hace su cortejo real a mi Voluntad, hace
guerra encarnizada a la tuya.
Por eso, ánimo en el estado en el que te
encuentras, quita el pensamiento de que Yo pueda
dejarte, esto sería en menoscabo de mí Querer,
siendo que tengo el contrato de mi Voluntad
depositado en ti. Por lo tanto quédate en paz, es mi
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6ª Hora, – 2ª Hora de Agonía en el Huerto
Voluntad que te prueba, que quiere no sólo
purificarte sino destruir aún la sombra de tu
voluntad, por eso con toda paz sigue el vuelo en mi
Querer, no te preocupes por nada, tu Jesús hará de
manera que todo lo que pueda suceder dentro y
fuera de ti hará resaltar más mi Voluntad, y
ensanchará en ti los confines de la mía en tu
voluntad humana.
Soy Yo quien llevaré la batuta en tu interior
para dirigir todo en ti según mi Querer. Yo no me
ocupé de otra cosa sino sólo de la Voluntad de mi
Padre, y como todas las cosas están en Ella, por
eso me ocupé de todo; y si enseñé alguna oración
no fue otra sino que la Divina Voluntad se haga
como en el Cielo así en la tierra, pero era la oración
que encierra todo.
Así que Yo no giraba sino sólo en torno a la
Voluntad Suprema; mis Palabras, mis penas, mis
obras, mis latidos estaban llenos de Voluntad
Celestial. Así quiero que hagas tú, debes girar tanto
en torno a Ella, hasta hacerte quemar por el aliento
Eterno del fuego de mi Voluntad, de manera que
pierdas cualquier otro conocimiento y no sepas
más, que solamente y siempre mi Querer.”
Menú
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7ª Hora, – 3ª Hora de Agonía en el Huerto
CITAS EN VOLUMENES
SEPTIMA HORA
Tercera hora de agonía en el Huerto de Getsemaní.
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7ª Hora, – 3ª Hora de Agonía en el Huerto
Así que con la Pasión del amor se rehízo y se
puso en justo nivel el Amor, con la Pasión del
pecado se rehízo y se puso a nivel la gloria del
Padre, con la Pasión de los judíos se puso a nivel y
se rehízo la fuerza de las criaturas. Todo esto lo
sufrí en el huerto, fue tal y tanto el sufrimiento, las
muertes que sufrí, los espasmos atroces, que
habría muerto de verdad si la Voluntad del Padre
hubiera llegado a que Yo muriera.”
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7ª Hora, – 3ª Hora de Agonía en el Huerto
sólo al comprender qué cosa significa pecado, Yo
me sentía morir y moría en realidad; grité al Padre y
fue inexorable, no hubo uno solo que al menos me
diera una ayuda para no hacerme morir, grité a
todas las criaturas que tuvieran piedad de Mí, pero
en vano, así que mi Humanidad languidecía y
estaba por recibir el último golpe de la muerte,
¿pero sabes tú quién impidió la ejecución y sostuvo
mi Humanidad para no morir? Primero fue mi
inseparable Mamá, Ella al oírme pedir ayuda voló a
mi lado y me sostuvo, y Yo apoyé mi brazo derecho
en Ella, la miré casi agonizante y encontré en Ella la
inmensidad de mi Voluntad íntegra, sin haber
habido nunca rotura alguna entre mi Voluntad y la
suya.
Mi Voluntad es Vida y como la Voluntad del
Padre era inamovible y como la muerte me venía de
las criaturas, otra criatura que encerraba la Vida de
mi Voluntad me daba la vida. Y he aquí que mi
Mamá, que en el portento de mi Voluntad me
concibió y me hizo nacer en el tiempo y ahora me
da por segunda vez la vida para hacerme cumplir la
obra de la Redención.
Después miré a la izquierda y encontré a la
pequeña hija de mi Querer, te encontré a ti como
primera con el séquito de los demás hijos de mi
Voluntad y así como a mi Mamá la quise conmigo
como primer anillo de Misericordia, por el cual
debíamos abrir las puertas a todas las criaturas, por
eso quise apoyar en Ella la derecha, a ti te quise
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7ª Hora, – 3ª Hora de Agonía en el Huerto
como primer anillo de la Justicia, para impedir que
se descargase sobre todas las criaturas como se
merecen, por eso quise apoyar la izquierda, a fin de
que la sostuvieras junto conmigo.
Entonces con estos dos apoyos Yo me sentí
dar nuevamente la vida, y como si nada hubiera
sufrido, con paso firme fui al encuentro de mis
enemigos. En todas las penas que sufrí en mi
Pasión, muchas de ellas capaces de darme la
muerte, estos dos apoyos no me dejaban jamás, y
cuando me veían a punto de morir, con mi Voluntad
que contenían me sostenían y me daban sorbos de
Vida. ¡Oh, los prodigios de mi Querer! ¿Quién
puede numerarlos nunca y calcular su valor?
Por eso amo tanto a quien vive en mi Querer,
reconozco en ella mi retrato, mis nobles rasgos,
siento en ella mi mismo aliento, mi misma voz, y si
no la amara me defraudaría a Mí mismo, sería como
un padre sin generación, sin el noble cortejo de su
corte y sin la corona de sus hijos; ¿y si no tuviera la
generación, la corte, la corona, cómo podría
llamarme Rey?
Así que mi Reino está formado por aquellos
que viven en mi Voluntad, y de este Reino escojo la
Madre, la Reina, los hijos, los ministros, el ejército,
el pueblo, Yo soy todo para ellos y ellos son todo
para Mí.”
"46
7ª Hora, – 3ª Hora de Agonía en el Huerto
Encontrándome en mi habitual estado, estaba
pensando en el dolor que sufrió mi dulce Jesús en el
huerto de Getsemaní cuando se presentaron ante su
santidad todas nuestras culpas, y Jesús todo afligido,
en mi interior me ha dicho:
“Hija mía, mi dolor fue grande e
incomprensible a la mente creada, especialmente
cuando vi la inteligencia humana deformada, mi
bella imagen que hice reproducir en ella, no más
bella, sino fea, horrible.
Yo doté al hombre de voluntad, inteligencia y
memoria; en la primera refulgía mi Padre celestial,
el cual, como acto primero comunicaba su Potencia,
su Santidad, su altura, por lo cual elevaba a la
voluntad humana revistiéndola de su misma
Santidad, Potencia y Nobleza, dejando todas las
corrientes abiertas entre El y la voluntad humana,
para que se enriqueciera siempre más de los
tesoros de mi Divinidad;
Entre la voluntad humana y la Divina no había
tuyo ni mío, sino todo en común, con acuerdo
recíproco, era imagen nuestra, cosa nuestra, así
que ella nos semejaba, por lo tanto nuestra Vida
debía ser la suya y por eso constituía como acto
primero su voluntad libre, independiente, como era
acto primero la Voluntad de mi Padre celestial. Pero
esta voluntad cuánto se ha desfigurado, de libre se
ha vuelto esclava de vilísimas pasiones. ¡Ah! es
ella el principio de todos los males del hombre, no
"47
7ª Hora, – 3ª Hora de Agonía en el Huerto
se reconoce más, cómo ha descendido de su
nobleza, da asco mirarla.
Después, como Acto segundo concurrí Yo,
Hijo de Dios, dotando al hombre de inteligencia,
comunicándole mi sabiduría y la ciencia de todas
las cosas, para que conociéndolas pudiese gustar y
hacerse feliz en el bien. Pero, ¡ay de Mí! Qué mar
de vicios es la inteligencia de la criatura, de la
ciencia se ha servido para desconocer a su Creador.
Y después, como acto tercero concurrió el
Espíritu Santo, dotándolo de memoria, a fin de que
acordándose de tantos beneficios, pudiera estar en
continuas corrientes de amor, en continuas
relaciones; el amor debía coronarla, abrazarla e
informar toda su vida; ¡pero cómo queda
contristado el eterno amor! Esta memoria se
acuerda de los placeres, de las riquezas y hasta de
pecar, y la Trinidad Sacrosanta es puesta fuera de
los dones dados a su criatura. Mi dolor fue
indescriptible al ver la deformidad de las tres
potencias del hombre; habíamos formado nuestra
morada en él, y él nos había arrojado fuera.”
"50
8ª Hora, – La Captura de Jesús
Menú
"51
8ª Hora, – La Captura de Jesús
CITAS EN VOLUMENES
OCTAVA HORA
La captura de Jesús.
"52
8ª Hora, – La Captura de Jesús
y queda obstaculizado en su paso, el estorbo que
siente lo agota, lo debilita y lo lleva a nuevas
caídas; si obra siente el impedimento en las manos
y casi queda como si no tuviera manos para hacer
el bien; las pasiones, viéndolo tan atado hacen
fiesta y dicen: “Es nuestra la victoria.” Y de rey
que es el hombre, lo vuelven esclavo de pasiones
brutales.
Cómo es abominable el hombre en el estado
de culpa, y Yo para romperle sus cadenas quise ser
atado, y no quise estar en ningún momento sin
cadenas, para tenerlas siempre listas para
despedazar las suyas, y cuando los golpes y los
empujones me hacían caer, Yo le extendía las
manos para desatarlo y hacerlo libre de nuevo.”
Pero mientras esto decía, yo veía a casi todas
las gentes tan atadas por cadenas que daban piedad y
rogaba a Jesús que tocara esas cadenas con las suyas,
a fin de que por el toque de las suyas quedaran rotas
las de las criaturas.
"53
8ª Hora, – La Captura de Jesús
encadenado, siente que le cortan las alas para volar
a Dios. ¡Oh!, cómo me da compasión ver al hombre
encadenado por sus mismas culpas! He aquí por
qué la primera pena que quise sufrir en la Pasión
fueron las cadenas, quise estar atado para liberar al
hombre de sus cadenas. Aquellas cadenas que Yo
sufrí en cuanto me tocaron se convirtieron en
cadenas de amor, las cuales tocando al hombre
quemaban y rompían las suyas y lo ataban con mis
amorosas cadenas.
Mi amor es operativo, no sabe estar si no
obra, por eso para todos y para cada uno preparé lo
que se necesita para rehabilitarlo, para sanarlo,
para embellecerlo de nuevo, todo hice para que si
se decide encuentre todo preparado y a su
disposición, por eso tengo listas mis cadenas para
quemar las suyas, los pedazos de mi carne para
cubrir sus llagas y adornarlo de belleza, mi sangre
para darle nuevamente la vida, todo lo tengo listo.
Tengo en reserva para cada uno lo que se
necesita; mi amor quiere darse, quiere obrar, siento
una intranquilidad, una fuerza irresistible que no me
da paz si no doy, ¿y sabes qué hago? Cuando veo
que ninguno toma, concentro mis cadenas, los
pedazos de mi carne, mi sangre, en quien los quiere
y me ama, y lo cubro de belleza envolviéndolo todo
con mis cadenas de amor, le centuplico la vida de
gracia y así mi amor se desahoga y se tranquiliza.”
Pero mientras esto decía, yo veía que sus
cadenas, los pedazos de su carne, su sangre, corrían
"54
8ª Hora, – La Captura de Jesús
sobre mí, y El se divertía aplicándolos sobre mí, y
envolviéndome toda. ¡Cómo es bueno Jesús, sea
siempre bendito! Después ha regresado y ha
agregado:
“Hija mía, siento la necesidad de que la
criatura repose en Mí y Yo en ella, ¿pero sabes
cuándo la criatura reposa en Mí y Yo en ella?
Cuando su inteligencia piensa en Mí y me
comprende, ella reposa en la inteligencia de su
Creador, y la del Creador encuentra su reposo en la
mente creada. Cuando la voluntad humana se une
con la Voluntad Divina, las dos voluntades se
abrazan y reposan juntas; si el amor humano se
eleva sobre todas las cosas creadas y ama sólo a
su Dios, ¡qué bello reposo encuentran mutuamente
Dios y el alma! Quien da reposo lo encuentra, Yo le
hago de lecho y la tengo en el más dulce sueño,
estrechada entre mis brazos, por eso ven y reposa
en mi Seno.”
"55
8ª Hora, – La Captura de Jesús
Por lo cual mientras estaba en este mar, mi dulce
Jesús me ha hecho presente cuando en su pasión los
apóstoles se dispersaron, huyeron de Él dejándolo solo
y abandonado en medio de los enemigos. Y mi sumo
bien Jesús me ha dicho:
“Hija mía, el dolor más grande que poseí en
mi Pasión, el clavo que más me traspasó el corazón,
fue el abandono y la dispersión de mis apóstoles;
no tenía un ojo amigo en quien pudiera confrontar
mi mirada. El abandono, las ofensas, la indolencia
de los amigos supera, ¡Oh!, cuánto!, todos los
dolores y también la muerte que puedan dar los
enemigos.
Yo sabía que los apóstoles me debían dar
este clavo y vilmente huirían de mí, pero a esto no
le puse atención, porque, hija mía, quien quiere
hacer una obra no debe poner atención a sus
penas; es más debe hacerse amigos en el bello
tiempo, cuando todo le sonríe alrededor para de
paso en paso sembrar triunfos y prodigios,
comunicando así la fuerza milagrosa a quien se
hace su amigo y discípulo; entonces todos se dan
al alardeo de ser amigo de quien está rodeado de
gloria y honor, todos esperan; y cuantos amigos y
discípulos se quieran se tienen, porque la gloria, los
triunfos, el bello tiempo son imanes potentes que
atraen a las criaturas a seguir al triunfador.
¿Quién quiere seguir y ser amigo o discípulo
de un pobre calumniado, humillado, despreciado?
Ninguno; es más sienten ansia, horror de acercarse
"56
8ª Hora, – La Captura de Jesús
y llegan a ignorar a ese con el cual primero tenían
amistad, como hizo conmigo San Pedro.
Así que es inútil esperar amigos cuando la
pobre criatura se encuentra bajo la pesadilla de las
humillaciones, desprecios y calumnias; por eso
necesita hacerse los amigos cuando el cielo sonríe
y la fortuna quisiera ponerla sobre trono, si
queremos que el bien, las obras que se quieren,
tengan vida y la continúan en las otras criaturas.
Yo me hice amigos cuando sembraba
milagros y triunfos, tanto que llegaron a creer que
Yo debía ser su Rey sobre la tierra, y ellos siendo
mis discípulos debían ocupar los primeros puestos
cerca de mí; a pesar que me abandonaron en mi
Pasión, cuando en mi Resurrección sonó mi pleno
triunfo, los apóstoles se desengañaron, se
reunieron entre ellos y como triunfadores siguieron
mi doctrina, mi vida, y formaron la Iglesia naciente.
Si Yo tuviese en cuenta que debían huir, no
haciéndolos mis discípulos en el tiempo de mis
triunfos, no habría habido quien hablase de mi
después de mi muerte, quien me hiciese conocer.
Por eso es necesario el bello tiempo, la gloria,
es igualmente necesario recibir clavos traspasantes
y tener paciencia de sufrirlos, para tener materias
en mis obras más grandes, para que tengan vida en
medio de las criaturas. ¿Ahora, no ha sido todo
esto, una semejanza de mi vida en el estado
doloroso de humillación, de calumnias y desprecios
que has pasado?
"57
8ª Hora, – La Captura de Jesús
Yo sentía en ti repetirme el clavo del
abandono y la dispersión de mis apóstoles, al ver a
quien tanto se había ocupado de asistirte, alejarse
de ti y con la voluntad de abandonarte; y viéndote
abandonada te veía sola, sola en mis brazos con el
clavo del abandono de quien debía sostenerte, y en
mi dolor decía: “Mundo malo, cómo sabes repetir
bien las escenas de mi Pasión en mis hijos; y
ofrecías tu amargura por el triunfo de mi Voluntad y
para ayuda de aquellos que deberían hacerla
conocer.
Por eso valentía en las dolorosas
circunstancias de la vida; pero conoce que tu Jesús
no te abandonará nunca. Yo no sé hacer éstas
cosas, mi amor no es de naturaleza voluble, sino
firme y constante, y lo que digo con la boca me sale
de la vida del Corazón. En cambio las criaturas una
cosa dicen y otra sienten en el corazón, mezclan
muchos fines humanos también al hacerse amigos,
he aquí por esto cambian según las circunstancias.
Por lo cual la dispersión de quienes parece
que quieren dar la vida en el bello tiempo y que
vilmente huyen en el tiempo de las humillaciones y
desprecios, son todos efectos de la voluntad
humana; ella es la verdadera prisión de la criatura, y
es hasta en el arte de saber formar tantas pequeñas
habitaciones, pero todas sin ventanas, porque ella
no entiende de formar aperturas para recibir el bien
de la luz.
"58
8ª Hora, – La Captura de Jesús
Así que las pasiones, las debilidades, las
ansias, los temores excesivos, la inconstancia, son
tantas habitaciones oscuras de su prisión, y que
ahora la dejan paralizada en una y ahora en otra, y
la ansiedad las hace temer y la hace alejar de quien
está poniendo la vida por amor suyo.
En cambio el alma donde reina mi Voluntad
vive en mi Palacio, donde hay tanta luz que las
penas, las humillaciones, las calumnias, no son otra
cosa que escalas de triunfos y de gloria y
cumplimiento de obras grandes y divinas; así que
en cambio de huir como pobre mártir que ha sido
arrojada al polvo de la perversidad humana, se
aprieta más a él cerca esperando con paciencia la
hora del nuevo triunfo.
¡Oh!, si en los apóstoles reinase plenamente
mi Voluntad, con certeza no se habrían fugado en
una hora en la cual Yo sentía la necesidad de su
presencia, de su fidelidad en mis tantas penas en
medio de enemigos que querían devorarme, Yo
quería mis fieles cerca, porque no hay consuelo
mayor que tener un amigo cerca en tiempo de
amarguras. Yo habría visto en mis queridos
apóstoles cerca de mi, los frutos de mis penas, y
¡Oh! cuántos dulces recuerdos se habrían suscitado
en mi Corazón, que me habrían sido de bálsamo en
mis intensas amarguras!
Mi Divina Voluntad les habría impedido el
paso de huir con su luz, y así que se estarían más
cerca a mi alrededor; pero como vivían en la oscura
"59
8ª Hora, – La Captura de Jesús
prisión de su voluntad, sus mentes se oscurecieron,
el corazón se enfrió, la ansiedad los invadió, en un
momento olvidaron todo el bien que habían recibido
de mí, y no solo huyeron de Mí, sino que se
dispersaron entre ellos; todos efectos del humano
querer que no sabe mantener la unión y sabe solo
perder en un día el bien que se ha hecho en tantos
años, con tantos sacrificios. Por eso solo tu temor
sea no hacer mi Voluntad".
Menú
"60
9ª Hora, – El Torrente Cedrón
CITAS EN VOLUMENES
NOVENA HORA
Jesús, atado, es hecho caer en el torrente Cedrón.
"61
11ª Hora, – 3 Am Jesús en casa de Caifás
Menú
CITAS EN VOLUMENES
DECIMA PRIMERA HORA
Jesús en casa de Caifás.
"62
11ª Hora, – 3 Am Jesús en casa de Caifás
mismo de hacer el bien, piensa como satisfacer sus
pasiones brutales.
Además, el hombre fingido en el bien que
aparentemente hace y dice, no es capaz de dar luz a
los demás, habiéndole cerrado las puertas a la luz,
por lo tanto obran como demonios encarnados, que
muchas veces bajo el aspecto de bien atraen a los
hombres, y estos viendo el bien se dejan atraer,
pero cuando van en lo mejor del camino los
precipitan en las culpas más graves.
¡Oh!, cómo son más seguras las tentaciones
bajo aspecto de culpa que aquellas bajo aspecto de
bien! Así es más seguro tratar con personas
perversas que con personas buenas, pero fingidas;
¿cuánto veneno no esconden, cuantas almas no
envenenan? Si no fuera por los fingimientos y
todos se hicieran conocer tal cual son, se quitaría la
raíz del mal de la faz de la tierra y todos quedarían
desengañados.”
Menú
"63
12ª Hora, – 4 Am Jesús entre los soldados
CITAS EN VOLUMENES
DECIMASEGUNDA HORA
Jesús en medio de los soldados.
"64
13ª Hora, – 5 Am Jesús en la Prisión
en Mí callaba: callaba la estima, la gloria, la
potencia, el honor; pero con mudo lenguaje
hablaban elocuentemente mi paciencia, las
humillaciones, mis llagas, mi sangre, el
aniquilamiento casi hasta el polvo de mi Ser y mi
Amor ardiente por la salud de las almas ponía un
eco a todas mis penas.
He aquí hija mía el verdadero retrato de las
almas amantes, todo debe callar en ellas y en torno
a ellas: estima, gloria, placeres, honores,
grandezas, voluntad, criaturas, y si las hubiera,
debe estar como sorda y como si nada viera, en
cambio debe hacer entrar en ella mi Paciencia, mi
Gloria, mi Estima, mis Penas, y en todo lo que hace,
que piensa, que ama, no será otra cosa que amor, el
cual tendrá un solo eco con el mío y me pedirá
almas.
Mi amor por las almas es grande; como
quiero que todos se salven por eso voy en busca de
almas que me amen y que tomadas por las mismas
ansias de mi Amor sufran y me pidan almas. Pero,
¡ay de Mí, que escaso es el número de los que me
escuchan!”
Menú
"65
13ª Hora, – 5 Am Jesús en la Prisión
CITAS EN VOLUMENES
DECIMATERCERA HORA
Jesús en Prisión.
"66
Esta noche la he pasado en vigilia y mi mente
frecuentemente volaba a mi Jesús atado en la prisión,
quería abrazarme a aquellas rodillas que temblaban por
la cruel y dolorosa posición en la que los enemigos lo
habían dejado atado, quería limpiarlo de aquellos
escupitajos que le habían echado en la cara. Pero
mientras esto pensaba, mi Jesús, mi vida, se ha dejado
ver como entre densas tinieblas, entre las cuales
apenas se descubría su adorable persona, y sollozando
me ha dicho:
“Hija, los enemigos me dejaron solo en la
prisión, atado horriblemente y en la oscuridad, así
que en torno a Mí todo era densas tinieblas; ¡Oh!,
cómo me afligía esta oscuridad, tenía las vestiduras
bañadas por las sucias aguas del torrente Cedrón,
sentía la hediondez de la prisión y la de los
escupitajos con los que estaba cubierto, tenía los
cabellos en desorden, sin una mano piadosa que
me los quitara de los ojos y de la boca, las manos
atadas por las cadenas y la oscuridad no me
permitía ver mi estado, ay de Mí, demasiado
doloroso y humillante. ¡Oh!, cuántas cosas decía
este mi estado tan doloroso en esta prisión!
En la prisión estuve tres horas, con esto
quise rehabilitar las tres edades del mundo: la de la
ley natural, la de la ley escrita y la de la ley de la
Gracia; quería liberarlos a todos, reuniéndolos a
todos juntos y darles la libertad de hijos míos. Con
estar tres horas en la prisión quise también
rehabilitar las tres edades del hombre: la niñez, la
"67
13ª Hora, – 5 Am Jesús en la Prisión
juventud y la vejez, quise rehabilitarlo cuando peca
por pasión, por voluntad y por obstinación.
¡Oh!, cómo la oscuridad que veía en torno a
Mí me hacía sentir las densas tinieblas que produce
la culpa en el hombre! Cómo lo lloraba y le decía:
“!Oh! hombre, son tus culpas las que me han
arrojado en estas densas tinieblas, las cuales sufro
para darte la luz, son tus infamias que así me han
ensuciado, las cuales, esta oscuridad no me
permite ni siquiera ver; mírame, soy la imagen de
tus culpas, si quieres conocerlas míralas en Mí.”
“Has de saber también, que en la última hora
que estuve en la prisión despuntó el alba y por
algunas rendijas penetraron algunos rayos de luz,
¡Oh!, cómo respiró mi corazón al poder ver mi
estado tan doloroso, pero esto significaba cuando
el hombre cansado de la noche de la culpa, la gracia
como alba se pone en torno a él mandándole
reflejos de luz para llamarlo, por eso mi corazón dio
un suspiro de alivio y en esta alba te vi a ti, mi
amada prisionera, a quien mi Amor debía atar en
este estado y que no me habrías dejado solo en la
oscuridad de la prisión, sino que tú, junto conmigo,
esperarías también el alba a mis pies y siguiendo
mis suspiros habrías llorado conmigo la noche del
hombre.
Otro significado contenía esta prisión y esta
oscuridad, era mi larga morada en la prisión en los
tabernáculos, la soledad en la que soy dejado, en la
que muchas veces no tengo a quien decir una
"68
palabra o darle una mirada de amor; otras veces
siento en la Santa Hostia las impresiones de los
tocamientos indignos, la peste de manos purulentas
y fangosas, y no hay quien me toque con manos
puras y me perfume con su amor.
Cuántas veces la ingratitud humana me deja
en la oscuridad sin la mísera luz de una lamparita,
así que mi prisión continúa y continuará y como
ambos somos prisioneros, tú prisionera en tu lecho
sólo por amor a Mí, y Yo prisionero por ti, atemos
juntos, con nuestras cadenas de amor a todas las
criaturas, así nos haremos compañía
recíprocamente y me ayudarás a extender las
cadenas para atar todos los corazones a mi Amor.”
"69
13ª Hora, – 5 Am Jesús en la Prisión
“¿Hija mía sabes tú por qué permití que
también fuese puesto en prisión en el curso de mi
pasión? Para libertar al hombre de las prisiones de
la voluntad humana. Mírala como es de horrenda mi
cárcel: era un pequeño lugar que servía para
encerrar las inmundicias y los excrementos de las
criaturas; así que la pestilencia era intolerable, la
oscuridad era densa; no me dejaron ni siquiera una
pequeña ventanita. Mi posición era desgarrante,
ensuciado de esputos, con los cabello revueltos,
adolorido en todos los miembros, atado, ni siquiera
extendido, sino curvo. No me podía ayudar de
ningún modo, ni siquiera quitarme los cabellos de
adelante de los ojos, que me molestaban.
Esta, mi prisión es la verdadera similitud de la
prisión que forma la voluntad humana en las
criaturas: la pestilencia que exhala es horrible, la
oscuridad es densa, muchas veces no queda ni
siquiera la pequeña bombilla de la razón; están
siempre inquietas, revueltas, ensuciadas por las
más viles pasiones. ¡Oh!, cómo hay para llorar
sobre esta prisión de la voluntad humana, como la
sentí a lo vivo en esta prisión el mal que había
hecho a las criaturas!. Fue tanto mi dolor, que vertí
amargas lágrimas y pedí a mi Padre Celestial que
liberase a las criaturas de esta prisión tan
ignominiosa y dolorosa. También tú pide junto
conmigo que las criaturas se desprendan de su
voluntad”.
"70
Vol. 20 25.12.1926 (41)
…Por lo cual después de esto estaba pensando
cómo era infeliz en aquella gruta donde el niñito Jesús
nació; cómo estaba expuesto a todos los vientos, al frío
de temblar del hielo, en cambio de los hombres,
estaban las bestias que le hacían compañía. ¿Por lo
que pensaba cuál pudiese ser más infeliz y dolorosa: la
prisión de la noche de su pasión o la gruta de Belén? Y
mi dulce niño ha añadido:
"Hija mía, no es comparable la infelicidad de
la prisión de mi pasión con la cueva de Belén. En la
gruta tenía cerca a mi Madre, en alma y cuerpo
estaba junto conmigo, por lo tanto tenía todas las
alegrías de mí querida Madre y Ella tenía todos mis
regocijos de su Hijo, que formaban nuestro paraíso.
Las alegrías de Madre con poseer el Hijo son
grandes, las alegrías de poseer una Madre son más
grandes, otra vez Yo encontraba todo en Ella y Ella
encontraba todo en mi. Luego estaba mi querido
padre San José que me hacía de padre y Yo sentía
todas las alegrías que sentía por mi causa.
En cambio en mi pasión fueron todos
nuestros regocijos interrumpidos, porque debíamos
dar lugar al dolor que sentíamos entre Madre e Hijo;
el gran dolor de la cercana separación, por lo
menos sensible, que debía suceder con mi muerte.
En la gruta las bestias me reconocieron y
honrándome buscaba calentarme con su aliento, en
la prisión ni siquiera los hombres me reconocieron
y para insultarme me cubrieron de esputos y de
"71
13ª Hora, – 5 Am Jesús en la Prisión
oprobios. Por lo que no hay como compararse la
una y la otra”.
Menú
"72
14ª Hora, – Jesús sale de la Prisión ante Caifás
CITAS EN VOLUMENES
DECIMOCUARTA
Jesús de nuevo ante Caifás y después es llevado a
Pilatos.
"73
14ª Hora, – Jesús sale de la Prisión ante Caifás
luz no hacen ningún daño a la persona que la
posee.
Así sucede con el bien obrar, no sólo es día
para ella, sino que puede hacer el día a quién sabe
cuantas más; el bien es siempre comunicativo y mi
Amor no sólo me incitaba a Mí, sino que daba la
gracia a las criaturas que me aman, de formar
tantos días en provecho de sus hermanas por
cuantas obras buenas van haciendo.”
"76
15ª Hora, – 7 Am Jesús ante Pilatos y después Herodes
CITAS EN VOLUMENES
DECIMAQUINTA HORA
Jesús ante Pilatos. Pilatos lo envía a Herodes.
"78
15ª Hora, – 7 Am Jesús ante Pilatos y después Herodes
que las criaturas continúan dándome estas penas;
es más, estoy bajo continuas burlas y por toda
clase de personas.
Si una persona se confiesa y no mantiene sus
propósitos de no ofenderme, es una burla que me
hace; si un sacerdote confiesa, predica, administra
Sacramentos y su vida no corresponde a las
palabras que dice y a la dignidad de los
Sacramentos que administra, tantas burlas me hace
por cuantas palabras dice, por cuantos
Sacramentos administra; y mientras Yo en los
Sacramentos les vuelvo a dar la vida nueva, ellos
me dan escarnios, burlas y al profanarlos me
preparan la vestidura para vestirme de loco.
Si los superiores ordenan a sus inferiores
sacrificios, oración, virtud, desinterés, y ellos llevan
una vida cómoda, viciosa, interesada, son tantas
burlas que me hacen; si los gobernantes civiles y
eclesiásticos quieren la observancia de las leyes y
ellos son los primeros transgresores, son burlas
que me hacen. ¡Oh!, cuántas burlas me hacen!, son
tantas, que estoy cansado de ellas, especialmente
cuando bajo apariencia de bien ponen el veneno del
mal; ¡Oh!, cómo hacen de Mí un juego!, como si Yo
fuera su juguete y su pasatiempo, pero mi Justicia
tarde o temprano se burlará de ellos, castigándolos
severamente. Tú reza y repárame por todas estas
burlas que tanto me duelen y que son la causa por
la que no puedo hacer conocer quién soy Yo.”…
"79
15ª Hora, – 7 Am Jesús ante Pilatos y después Herodes
Vol.14. (01.04.1922 (17):
…Después he seguido las horas de la Pasión, y
seguía a mi dulce Jesús en el momento en que fue
vestido y tratado como loco; mi mente se perdía en este
misterio y Jesús me ha dicho:
“Hija mía, el paso más humillante de mi
Pasión fue propiamente este, el ser vestido y
tratado como loco, llegué a ser el juguete de los
judíos, su harapo; humillación más grande no
podría tener mi infinita Sabiduría; no obstante era
necesario que Yo, Hijo de Dios, sufriera esta pena.
El hombre pecando se vuelve loco; locura más
grande no puede darse, y de rey cual es, se
convierte en esclavo y juguete de vilísimas
pasiones que lo tiranizan y más que a un loco lo
encadenan a su antojo, arrojándolo en el fango y
cubriéndolo con las cosas más sucias.
¡Oh! qué gran locura es el pecado, en este
estado el hombre jamás podía ser admitido ante la
Majestad Suprema; por eso quise sufrir esta pena
tan humillante, para conseguirle al hombre que
saliera de este estado de locura, ofreciéndome Yo a
mi Padre Celestial para sufrir las penas que merecía
su locura. Cada pena que sufrí en mi Pasión no era
otra cosa que el eco de las penas que merecían las
criaturas; este eco retumbaba en Mí y me sometía a
penas, a desprecios, a burlas y a todos los
tormentos.”
"80
15ª Hora, – 7 Am Jesús ante Pilatos y después Herodes
Estaba pensando en mi dulce Jesús cuando fue
presentado a Herodes y decía entre mí: “Cómo es
posible que Jesús, tan bueno, no haya tenido a bien
decirle una palabra, ni dirigirle una mirada. ¿Quién
sabe, a lo mejor aquel pérfido corazón ante la potencia
de la mirada de Jesús se hubiera convertido?” Y Jesús
haciéndose ver me ha dicho:
"82
15ª Hora, – 7 Am Jesús ante Pilatos y después Herodes
liberarlo. Y Jesús, hablándome en mi interior me ha
dicho:
“Hija mía, todo en mi vida es misterio
profundo y enseñanzas sublimes en las cuales el
hombre debe mirarse como en un espejo para
imitarme. Tú debes saber que era tanta la soberbia
de los judíos, especialmente por la fingida santidad
que profesaban, por la que eran tenidos por
hombres rectos y concienzudos, que creían que
sólo con presentarme ellos y decir que me habían
encontrado culpable y reo de muerte, Pilatos debía
creerles y sin interrogarlos debía condenarme;
mucho más porque estaban tratando con un juez
gentil que no tenía ni conocimiento de Dios ni
conciencia.
Pero Dios dispuso diversamente para
confundirlos y para enseñar a los superiores que
por mucho que parezcan buenas y santas las
personas que acusan a un pobre reo, no les crean
fácilmente, sino que las interroguen
cuidadosamente para ver si están en la verdad, o
bien, ver si bajo aquel vestido de bondad hay
algunos celos, rencores, o es para obtener de los
superiores, haciéndose camino en sus corazones,
algún puesto o dignidad que ambicionan. El
escrutinio hace conocer a las personas, las
confunde y se muestra que no se tiene confianza en
ellas y al no verse apreciadas se quitan el
pensamiento de ambicionar puestos o de acusar a
otros.
"83
15ª Hora, – 7 Am Jesús ante Pilatos y después Herodes
Cuánto mal hacen aquellos superiores
cuando a ojos cerrados, fiándose de una fingida
bondad, no de una virtud probada, los ponen en un
puesto o dan oídos a quién acusa a otro de alguna
falta. Cuánto no quedaron humillados los judíos al
no ser creídos fácilmente por Pilatos y al sufrir
tantos interrogatorios, y si cedió en condenarme no
fue porque les creyera, sino forzado y para no
perder su puesto; esto los confundió, de modo que
quedó como marca sobre su frente una extrema
confusión y una humillación profunda, mucho más
que descubrían más rectitud y más conciencia en
un juez gentil que en ellos. Cuán necesario y justo
es el escrutinio, arroja luz, produce calma en los
verdaderos buenos y confusión en los malos.
Y cuando queriendo examinarme Pilatos me
preguntó: “¿Tú eres Rey? Y ¿dónde está tu
Reino?” Yo quise dar otra sublime lección con
decir: “Yo Soy Rey.”
Y quería decir: “¿Pero sabes tú cual es mi
Reino? Mi Reino son mis Dolores, mi Sangre, mis
Virtudes; este es el verdadero Reino, que no fuera
de Mí sino dentro de Mí poseo; lo que se posee por
afuera no es verdadero Reino ni seguro dominio,
porque lo que no está dentro del hombre le puede
ser quitado, usurpado y será obligado a dejarlo. En
cambio lo que está dentro nadie se lo podrá quitar,
el dominio será eterno dentro de él.
Las características de mi Reino son mis
Llagas, las Espinas, la Cruz, donde no hago como
"84
15ª Hora, – 7 Am Jesús ante Pilatos y después Herodes
los demás reyes que hacen vivir a sus pueblos
fuera de ellos, en la inseguridad y tal vez en ayunas;
Yo no, Yo llamo a mis pueblos a habitar en las
estancias de mis Llagas, fortificados y defendidos
por mis Dolores, quitada su sed por mi Sangre,
alimentados por mi Carne; y sólo esto es el
verdadero reinar, todos los demás reinos son reinos
de esclavitud, de peligros y de muerte; en mi Reino
está la verdadera Vida.
Cuántas enseñanzas sublimes, cuántos
misterios profundos en mis Palabras, cada alma
debería decirse a sí misma en las penas y dolores,
en las humillaciones y abandonos de todos, al
practicar las verdaderas virtudes: “Este es mi
Reino, no sujeto a perecer, nadie me lo puede quitar
ni tocar; es más, mi Reino es Eterno y Divino,
semejante al de mi dulce Jesús, mis Dolores y
Penas me lo certifican y me vuelven el Reno más
fortificado y aguerrido, tanto que ninguno podrá
hacerme guerra en vista de mi gran fortaleza. Este
es Reino de Paz, que deberían ambicionar todos
mis hijos.”
"85
15ª Hora, – 7 Am Jesús ante Pilatos y después Herodes
"Hija mía, Herodes no me preguntó para
conocer la verdad, sino para curiosear y hacer una
burla de mí y si Yo hubiese contestado habría hecho
una burla de él, porque cuando falta la voluntad de
conocer la Verdad y de cumplirla, falta el estado de
ánimo en el alma para recibir el calor que trae
consigo la Luz de mis Verdades. Este calor si no
encuentra la humedad para hacer brotar y fecundar
la verdad, quema no más y hace secar el bien que
puede engendrar. Sucede como al sol, que cuando
no encuentra la humedad en las plantas, su calor
sirve para secar y quemar la vida de las plantas;
pero si encuentra humedad, hace prodigios. Por
eso la verdad es bella, amable, restauradora y
fecundadora de las almas. Con su calor y luz forma
prodigios de desarrollo, de gracias y de santidad
para quien ama conocerla y cumplirla pero para
quien no ama cumplir la verdad se burla de ellos en
vez de quedar burlada.”
"86
15ª Hora, – 7 Am Jesús ante Pilatos y después Herodes
soy Yo y he venido al mundo a enseñar la Verdad, y
la Verdad es que no son los puestos, los reinos, las
dignidades, el derecho de mando lo que hace reinar
al hombre, lo que lo ennoblece, lo que lo eleva
sobre todos, es más, estas cosas son esclavitudes
y miserias que lo hacen servir a viles pasiones, a
hombres injustos, cometiendo también él otros
tantos actos de injusticia que les quitan nobleza, lo
arrojan en el fango y le atraen el odio de sus
dependientes.
Así que las riquezas son esclavitudes, los
puestos son espadas con las que muchos quedan
muertos o heridos; el verdadero reinar es la virtud,
es el despojarse de todo, el sacrificarse por todos,
el ponerse por debajo de todos, y este es el
verdadero reinar que vincula a todos y se hace amar
por todos, por eso mi reino no tendrá fin y el tuyo
está próximo a perecer”.
Y estas palabras en mi Voluntad las hacía
llegar a los oídos de todos aquellos que se
encuentran en puestos de autoridad, para hacerles
conocer el gran peligro en el que se encuentran y
para poner en guardia a quienes aspiran a los
puestos, a las dignidades y al mando”.
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"87
17ª Hora, – Coronación de espinas y condenado a muerte
CITAS EN VOLUMENES
DECIMOSEXTA HORA
Jesús de nuevo ante Pilatos. Es pospuesto a Barrabás.
Jesús es flagelado.
"88
17ª Hora, – Coronación de espinas y condenado a muerte
cómo la Divinidad se deleitaba en darle tantas
partículas de su Ser, por cuanto la criatura puede
recibir, para hacerlo semejante a Él.
Ahora, en cuanto rompió la unión de nuestra
Voluntad con la suya, perdió la vestidura real,
perdió el encanto, la luz, la felicidad; se miró a sí
mismo sin la luz de mi Voluntad y viéndose sin el
encanto que lo tenía absorto, se conoció, tuvo
vergüenza, tuvo miedo de Dios, tanto que su misma
naturaleza sintió sus tristes efectos, sintió el frío y
la desnudez y sintió la viva necesidad de cubrirse; y
así como nuestra Voluntad lo tenía en el puerto de
felicidades inmensas, así la suya lo puso en el
puerto de las miserias.
Nuestra Voluntad era todo para el hombre y
en Ella encontraba todo; era justo que habiendo
salido de Nosotros y viviendo como un tierno hijo
nuestro en nuestro Querer, viviera de lo nuestro, y
este Querer debiera sustituirse a todo lo que él
necesitaba; por lo tanto, como quiso vivir de su
querer, tuvo necesidad de todo, porque el querer
humano no tiene el poder de sustituirse a todas las
necesidades, ni tiene en sí la fuente del bien, por
eso fue obligado a procurarse con cansancio las
cosas necesarias a la vida.
¿Ves entonces qué significa no estar unido
con mi Voluntad? ¡Oh! si todos la conocieran, sólo
tendrían un solo suspiro: Que mi Querer venga a
reinar sobre la tierra. Así que si Adán no se hubiera
sustraído de la Voluntad Divina, aun su naturaleza
"89
17ª Hora, – Coronación de espinas y condenado a muerte
no habría tenido necesidad de vestidos, no habría
sentido la vergüenza de su desnudez, ni habría
estado sujeto a sufrir el frío, el calor, el hambre, la
debilidad; pero estas cosas naturales eran casi
nada, eran más bien símbolos del gran bien que
había perdido su alma.
Por eso hija mía, antes de ser atado a la
columna para ser flagelado, quise ser desnudado
para sufrir y reparar la desnudez del hombre
cuando se desnudó del vestido real de mi Voluntad.
Sentí en Mí tal confusión y pena al verme así
desnudo en medio de los enemigos que se burlaban
de Mí, que lloré por la desnudez del hombre y ofrecí
a mi Celestial Padre mi desnudez, para hacer que el
hombre fuera revestido de nuevo con el vestido real
de mi Voluntad, y como pago para que esto no me
fuera negado, ofrecí mi sangre, mis carnes
arrancadas a pedazos, me hice desnudar no sólo de
los vestidos, sino también de mi piel para poder
pagar el precio y satisfacer el delito de esta
desnudez del hombre; derramé tanta sangre en este
misterio, que en ningún otro derramé tanta, que
bastaba para cubrir al hombre como con un
segundo vestido, y vestido de sangre para cubrirlo
de nuevo y así calentarlo y lavarlo para disponerlo a
recibir la vestidura real de mi Voluntad.”
Yo al oír esto, sorprendida he dicho: “Mi amado
Jesús, ¿cómo puede ser posible que el hombre con
sustraerse de tu Voluntad tuvo necesidad de vestirse,
tuvo vergüenza, miedo, y sin embargo Tú hiciste
"90
17ª Hora, – Coronación de espinas y condenado a muerte
siempre la Voluntad del Padre Celestial, eras una sola
cosa con El; tu Mamá no conoció nunca su querer, sin
embargo tuvieron necesidad de vestidos, de alimento y
sintieron el frío y el calor?” Y Jesús ha agregado:
“No obstante hija mía es precisamente así. Si
el hombre sintió vergüenza de su desnudez y quedó
sujeto a tantas miserias naturales, fue precisamente
porque perdió el dulce encanto de mi Voluntad, y si
bien el mal lo hizo el alma, no el cuerpo, pero
indirectamente fue como cómplice de la mala
voluntad del hombre, la naturaleza quedó como
profanada por el mal querer del hombre; por lo
tanto la una y el otro debían sentir la pena del mal
hecho.
Respecto a Mí es verdad que hice siempre la
Voluntad Suprema, pero Yo no vine a encontrar al
hombre inocente, al hombre antes de que pecara,
sino que vine a encontrar al hombre pecador y con
todas sus miserias y debí mezclarme con él, tomar
sobre Mí todos sus males y sujetarme a las
necesidades de la vida como si fuera uno de ellos;
pero en Mí había este prodigio, que si lo quería, de
nada tenía necesidad, ni de vestidos, ni de alimento,
ni de nada; pero no quise servirme de él por amor al
hombre, quise sacrificarme en todo, aun en las
cosas más inocentes creadas por Mí mismo para
atestiguarle mi ardiente amor, es más, esto servía
para impetrar de mi Divino Padre que, por
consideración mía y de mi voluntad toda sacrificada
"91
17ª Hora, – Coronación de espinas y condenado a muerte
a Él, restituyera al hombre la noble vestidura real de
nuestra Voluntad.”
"92
17ª Hora, – Coronación de espinas y condenado a muerte
camino de la cruz, por eso te sientes demasiado
débil, cuando hayas crecido y hayas conocido cuán
precioso es el sufrir, entonces te sentirás más
fuerte. Por eso apóyate en Mí, repósate, porque así
adquirirás fuerza.”
"93
17ª Hora, – Coronación de espinas y condenado a muerte
Continuando mi habitual estado, estaba
pensando en el misterio de la flagelación, y al venir
Jesús, poniendo su mano en mi hombro me ha dicho:
“Hija mía, quise que mi carne fuera esparcida
en pedazos, mi Sangre vertida por toda mi
Humanidad, para reunir a toda la humanidad
dispersa; en efecto, con haber hecho que todo lo
que de mi Humanidad fue arrancado: Carne,
Sangre, Cabellos, quedara disperso, en la
resurrección nada quedará disperso sino todo
reunido de nuevo en mi Humanidad, con esto Yo
reincorporaba a todas las criaturas en Mí; así que
después de esto, quien de Mí queda separado, es
por su obstinada voluntad que de Mí se arranca
para ir a perderse.”
"95
17ª Hora, – Coronación de espinas y condenado a muerte
arrancadas a pedazos están siempre en acto de dar
vida al hombre, pero el hombre rechaza mi sangre
para no recibir la vida, pisotea mis carnes para
quedar llagado. ¡Oh! cómo siento el peso de la
ingratitud.”
Y arrojándose en mis brazos ha roto en llanto.
Yo me lo he estrechado a mi corazón, pero Él lloraba
fuertemente. ¡Qué desgarro ver llorar a Jesús! Habría
querido sufrir cualquier pena para no hacerlo llorar.
Entonces lo he compadecido, le he besado sus llagas,
le he secado las lágrimas, y El, como reconfortado ha
agregado:
“¿Sabes cómo hago Yo? Como un padre que
ama mucho a su hijo, y este hijo es ciego, deforme,
tullido; y el padre que lo ama hasta la locura, ¿qué
hace? Se saca los ojos, se arranca las piernas, se
quita la piel y se lo da todo al hijo y dice: “Estoy
más contento con quedar ciego, cojo, deforme, con
tal que te vea a ti, hijo mío, que puedes ver, que
puedes caminar, que eres bello.” ¡Oh!, cómo está
contento aquel padre porque ve a su hijo mirar con
sus ojos, caminar con sus piernas y cubierto con su
belleza! ¿Pero cuál sería el dolor del padre si viera
que su hijo, ingrato, arroja de sí los ojos, las
piernas, la piel, y se contenta con permanecer feo
como está? Así soy Yo, en todo he pensado, pero
ellos, ingratos, forman mi más acerbo dolor.”
"96
17ª Hora, – Coronación de espinas y condenado a muerte
Estaba pensando en la Pasión de mi dulce Jesús
y sentía sus penas junto a mí como si ahora mismo las
estuviera Él sufriendo, y mirándome me ha dicho:
“Hija mía, Yo sufrí todas mis penas en mi
Voluntad, y a medida que las sufría ellas abrían
tantos caminos en mi Voluntad para llegar a cada
criatura. Si no hubiera sufrido en mi Voluntad, que
envuelve todo, mis penas no habrían llegado hasta
ti, ni hasta todos y cada uno, habrían quedado con
mi Humanidad. Es más, con haberlas sufrido en mi
Voluntad no sólo abrían tantos caminos para ir a
todas las criaturas, sino que abrían también tantos
otros para hacerlas entrar a ellas hasta mí y unirse
con esas penas y darme cada una de las penas que
con sus ofensas me habrían de dar en todo el curso
de los siglos, y mientras Yo estaba bajo la
tempestad de los golpes mi Voluntad me traía a
cada una de las criaturas a golpearme, así que no
fueron aquellos los que me flagelaron, sino las
criaturas de todos los tiempos, que habrían, con
sus ofensas, concurrido a la bárbara flagelación.
Y así también en todas las demás penas: mi
Voluntad me traía a todos, ninguno faltaba a la
llamada, todos estaban presentes, ninguno faltó.
Por eso mis penas fueron, ¡Oh!, cuanto más duras y
múltiples que las que se vieron! Entonces si quieres
que tus ofrecimientos de mis penas, tu compasión,
tus reparaciones y tus pequeñas penas no sólo
lleguen hasta mí, sino que hagan los mismos
caminos de las mías haz que todo entre en mi
"97
17ª Hora, – Coronación de espinas y condenado a muerte
Querer y todas las generaciones recibirán los
efectos. Y no sólo mis penas, sino también mis
Palabras, que también eran dichas en mi Voluntad,
llegaban a todos”.
"98
17ª Hora, – Coronación de espinas y condenado a muerte
“Padre mío, te ofrezco esta mi sangre, ¡ah!
haz que cubra todas las inteligencias de las
criaturas y vuelva vanos todos sus malos
pensamientos, calma el fuego de sus pasiones y
haz renacer inteligencias santas. Ésta sangre cubra
sus ojos y haga velo a su vista, para que no les
entre el gusto de los placeres malos y no se
ensucien con el fango de la tierra. Ésta sangre mía
cubra y llene sus bocas y deje muertos sus labios a
las blasfemias, a las maldiciones, a todas sus malas
palabras.
Padre mío, ésta mi sangre cubra sus manos y
les de terror de tantas acciones infames. Ésta
Sangre circule en nuestra Voluntad Eterna para
cubrir a todos, para defender y para ser arma
defensora en favor de las criaturas ante los
derechos de nuestra Justicia.”…
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CITAS EN VOLUMENES
DECIMASEPTIMA HORA
Jesús coronado de espinas. “Ecce Homo.” Jesús es
condenado a muerte. Jesús de Nuevo ante Pilatos, que
lo muestra al pueblo.
"99
17ª Hora, – Coronación de espinas y condenado a muerte
“Hija mía, quise sufrir estas espinas en mi
cabeza, además de expiar todos los pecados de
pensamiento, para unir la Inteligencia Divina a la
humana, porque la inteligencia divina estaba como
dispersa en las mentes humanas, y mis espinas la
llamaron del Cielo y la injertaron de nuevo. No sólo
esto, sino que obtuve, para quien debía manifestar
las cosas Divinas, ayuda, fuerza, lucidez para
hacerla conocer a los demás.”
"101
17ª Hora, – Coronación de espinas y condenado a muerte
eran tantos riachuelos que ataban la inteligencia
humana al conocimiento de mi supremacía sobre
ellos.”
¿Pero quién puede decir todo lo que oigo en mi
interior? No tengo palabras para expresarlo, es más, lo
poco que he dicho me parece haberlo dicho
incoherente, y así creo que debe ser al hablar de las
cosas de Dios, por cuan alto y sublime uno pueda
hablar, siendo El increado y nosotros creados, no se
puede decir de Dios mas que balbuceos.
"102
17ª Hora, – Coronación de espinas y condenado a muerte
Vol.11. 10.04.1914 (71):
Esta mañana mi siempre amable Jesús ha
venido crucificado y me participaba sus penas, y me ha
atraído hacia El en el mar de su Pasión, tanto, que casi
paso a paso la seguía. ¿Pero quién puede decir todo lo
que comprendía? Es tanto que no sé por dónde
empezar, diré sólo que al verle arrancar la corona de
espinas, las espinas mismas obstruían el paso a la
sangre y no la dejaban salir del todo, pero al arrancarle
la corona de espinas esa sangre ha brotado fuera por
aquellas heridas y le chorreaba a grandes ríos sobre el
rostro, sobre los cabellos y después descendía por toda
la persona de Jesús. Y Jesús:
“Hija, estas espinas que me agujerean la
cabeza, pincharán el orgullo, la soberbia, las llagas
más ocultas de las almas para hacerles salir fuera la
pus que contienen, y las espinas entintas en mi
sangre las sanarán y les restituirán la corona que el
pecado les había quitado.”
Luego Jesús me hacía pasar a otros momentos
de la Pasión, pero yo me sentía traspasar el corazón al
verlo sufrir tanto; y El casi para consolarme continuó
hablando de su Santísimo Querer:…
"103
17ª Hora, – Coronación de espinas y condenado a muerte
“Hija mía, los dolores que sufrí son
incomprensibles a la mente creada; pero mucho
más dolorosos que aquellas espinas se clavaban en
mi mente todos los pensamientos malos de las
criaturas, de modo que de todos estos
pensamientos de las criaturas ninguno se me
escapaba, todos los sentía en Mí. Así que no sólo
sentía las espinas, sino también el horror de las
culpas que aquellas espinas clavaban en Mí.”
Entonces traté de ver al amable Jesús y veía su
santísima cabeza circundada como por una corona de
espinas que le salían de dentro. Todos los
pensamientos de las criaturas estaban en Jesús, y de
Jesús pasaban a ellas y de ellas a Jesús y en El
quedaban como concatenados juntos. ¡Oh, cómo sufría
Jesús! Después ha agregado:
“Hija mía, sólo las almas que viven en mi
Voluntad pueden darme verdaderas reparaciones y
endulzarme espinas tan punzantes, porque viviendo
en mi Voluntad, mi Voluntad se encuentra en todas
partes, y ellas encontrándose en Mí y en todos,
descienden en las criaturas y suben a Mí y me traen
todas las reparaciones y me endulzan, y hacen
cambiar en las mentes las tinieblas en luz.”
"104
17ª Hora, – Coronación de espinas y condenado a muerte
donde ni siquiera por un instante habría quedado
privada de aquel que es toda mi vida y mi sumo y único
bien. Luego, cuando me he reducido a los extremos sin
Jesús, me he sentido llenar toda de Él, de modo que yo
quedaba como un velo que lo cubría, y como estaba
pensando y acompañándolo en las penas de su pasión,
especialmente en el momento cuando Pilatos lo mostró
al pueblo diciendo: “Ecce Homo”. Mi dulce Jesús me ha
dicho:
“Hija mía, cuando Pilatos dijo “Ecce Homo”,
todos gritaron: “Crucifícalo, crucifícalo, lo
queremos muerto.” También mi mismo Padre
Celestial y mi inseparable y traspasada Mamá, y no
sólo aquellos que estaban presentes sino todos los
ausentes y todas las generaciones pasadas y
futuras, y si alguno no lo dijo con la palabra, lo dijo
con las acciones, porque no hubo uno solo que
dijera que me querían vivo, y el callar es confirmar
lo que quieren los demás.
Este grito de muerte de todos fue para Mí
dolorosísimo, Yo sentía tantas muertes por cuantas
personas gritaron crucifícalo, me sentí como
ahogado de penas y de muerte, mucho más que
veía que cada una de mis muertes no le llevaba a
cada uno la vida, y aquellos que recibían la vida por
causa de mi muerte no recibían todo el fruto
completo de mi pasión y muerte.
Fue tanto mi dolor, que mi Humanidad
gimiente estaba por sucumbir y dar el último
respiro, pero mientras moría, mi Voluntad Suprema
"105
17ª Hora, – Coronación de espinas y condenado a muerte
con su Omnividencia, hizo presentes a mi
Humanidad agonizante a todos aquellos que
habrían hecho reinar en ellos, con dominio absoluto
al Eterno Querer, los cuales tomarían el fruto
completo de mi Pasión y Muerte, entre los cuales
estaba, a la cabeza, mi amada Madre, Ella tomó todo
el depósito de todos mis bienes y de los frutos que
hay en mi Vida, Pasión y Muerte, ni siquiera un
respiro mío perdió y del cual no custodiase el
precioso fruto, y de Ella debían ser transmitidos a la
pequeña recién nacida de mi Voluntad y a todos
aquellos en los cuales el Supremo Querer habría
tenido su Vida y su Reino.
Cuando mi Humanidad expirante vio puesto a
salvo y asegurado el fruto completo de mi Vida,
Pasión y Muerte, pudo reemprender y continuar el
curso de la dolorosa Pasión. Así que es sólo mi
Voluntad la que lleva toda la plenitud de mis bienes
y el fruto completo que hay en la Creación,
Redención y Santificación. Donde Ella reina
nuestras obras están todas llenas de vida, ninguna
cosa está a la mitad o incompleta.
En cambio, donde Ella no reina, aunque
hubiera alguna virtud todo es miseria, todo es
incompleto y si producen algún fruto es amargo y
sin maduración, y si toman los frutos de mi
Redención los toman con medida y sin abundancia
y por eso crecen débiles, enfermos y febriles, y por
eso si hacen algún poco de bien, lo hacen a duras
"106
17ª Hora, – Coronación de espinas y condenado a muerte
penas y se sienten aplastar bajo el peso de aquel
poco de bien que hacen.
En cambio mi Voluntad vacía la voluntad
humana y pone en ese vacío la Fuerza divina y la
vida del bien, y por eso quien la hace reinar en ella
hace el bien sin cansancio, y la Vida que contiene la
lleva a obrar el bien con una fuerza irresistible, así
que mi Humanidad encontró la Vida en mi Pasión y
Muerte y en quien debía reinar mi Voluntad, y por
eso la Creación y la Redención estarán siempre
incompletas, hasta en tanto que mi Voluntad no
tenga su Reino en la almas.”
"108
17ª Hora, – Coronación de espinas y condenado a muerte
cuando se reina solo.” Mientras esto decía me he
encontrado en mí misma.
"109
17ª Hora, – Coronación de espinas y condenado a muerte
formadas de la misma carne, no había ninguna
esperanza de que se me pudieran quitar, ni
disminuir la agudeza de una espina o el
traspasarme de los clavos.
Mis penas interiores fueron tales y tantas, que
las penas de mi Pasión las podría llamar alivios y
besos que daban a mis penas interiores, que
uniéndose juntas daban el último testimonio de mi
grande y excesivo amor por salvar a las almas. Mis
penas externas eran voces que llamaban a todos a
entrar en el océano de mis penas interiores, para
hacerlos comprender cuánto me costaba su
salvación. Y además, por tus mismas penas
internas, comunicadas por Mí, puedes comprender
de algún modo la intensidad continua de las mías.
Por eso date ánimo, es el amor lo que a esto me
empuja.”
Menú
"110
18ª Hora, – Toma la Cruz y se encamina al Calvario
CITAS EN VOLUMENES
DECIMOCTAVA HORA
Jesús toma la Cruz y se dirige al Calvario donde es
desnudado. Segunda Coronación de Espinas. Jesús
abraza la Cruz. El Camino Doloroso al Calvario. Jesús
desnudado y coronado de espinas por tercera vez.
"115
18ª Hora, – Toma la Cruz y se encamina al Calvario
Y como mi Voluntad es eterna, su sufrir, sus
reparaciones, sus actos, corrían en cada gota de mi
sangre, corrían en cada llaga, en cada ofensa; mi
Querer las hacía encontrarse como presentes a las
ofensas pasadas, desde que el primer hombre pecó;
a las presentes y a las futuras; eran propiamente
ellas las que me daban nuevamente los derechos de
mi Querer, y Yo, por amor de ellas decretaba la
Redención, y si los demás toman parte de Ella, es
por causa de estas que pueden hacerlo. No hay
bien que Yo conceda, ni en el Cielo ni en la tierra,
que no sea por causa de ellas.”
Vol. 1 (21)
…A veces también el Señor mostraba no
escucharme y aumentaban mis penas, otras veces me
compadecía diciéndome:
“Pobre hija, ven a Mí que te quiero consolar,
tú tienes razón en que sufres, pero es que no
recuerdas que también Yo, ¡Oh!, cuánto más sufrí;
hasta cierto momento mis penas fueron ocultas,
pero cuando llegó la Voluntad del Padre de sufrir en
público, rápidamente salí a encontrar confusiones,
oprobios, desprecios, hasta ser despojado de mis
vestidos y estar desnudo en medio a un pueblo
numerosísimo, ¿podrías tú imaginar confusión más
grande que ésta? Mi naturaleza sentía mucho esta
clase de sufrimientos, pero tenía los ojos fijos a la
Voluntad del Padre y ofrecía esas penas en
reparación de tantos que cometen las más nefandas
"116
18ª Hora, – Toma la Cruz y se encamina al Calvario
acciones públicamente, ante los ojos de muchos y
vanagloriándose sin la más mínima vergüenza, y le
decía: “Padre, acepta mis confusiones y mis
oprobios en reparación de tantos que tienen la
desfachatez de ofenderte tan libremente sin el
mínimo disgusto; perdónalos, dales luz para que
vean la fealdad del pecado y se conviertan.
También a ti te quiero hacer partícipe de esta
clase de sufrimientos; ¿no sabes tú que los más
bellos regalos que puedo dar a las almas que amo
son las cruces y las penas? Tú eres niña aún en el
camino de la cruz, por eso te sientes demasiado
débil, cuando hayas crecido y hayas conocido cuán
precioso es el sufrir, entonces te sentirás más
fuerte. Por eso apóyate en Mí, repósate, porque así
adquirirás fuerza.”
"117
18ª Hora, – Toma la Cruz y se encamina al Calvario
Era el solo objeto que poseía, dado a mí con tanto
amor por mi Madre doliente y ahora no sólo me
despojaron de ella, sino que hicieron un juego.
¿Pero no sabes tú qué me traspasó más? En
aquellos vestidos se me hizo presente Adán,
vestido con el vestido de la inocencia y cubierto
con la túnica indivisible de mi Suprema Voluntad.
La increada Sabiduría, al crearlo se hizo más que
madre amorosísima; lo vistió más que con una
túnica, con la luz interminable de mi Voluntad,
vestido no sujeto ni a descomponerse, ni a
dividirse, ni a corromperse, vestido que debía
servirle al hombre para conocer la imagen de su
Creador, sus dotes recibidas y que debía volverlo
no solo admirable y santo en todas sus cosas sino
que lo recubrió con el sobretodo de la inocencia.
Y Adán con sus pasiones dividió en el Edén
los vestidos de la inocencia y se jugó la túnica de
m i Vo l u n t a d , v e s t i d o i n i g u a l a b l e d e l u z
deslumbrante. Lo que hizo Adán en el Edén, se
repite bajo mis ojos en el monte Calvario. Al ver
divididos mis vestidos y jugada mi túnica símbolo
del vestido real dado al hombre, mi dolor fue
intenso, tanto que ni hice un lamento. Se me
hicieron presentes las criaturas cuando, haciendo
su voluntad, hacen un juego de la mía cuantas
veces dividen con sus pasiones el vestido de la
inocencia. Todos los bienes vienen encerrados en
el hombre en virtud de este vestido real de la Divina
Voluntad. Puesta en juego, éste quedó descubierto
"118
18ª Hora, – Toma la Cruz y se encamina al Calvario
y perdió todos los bienes, porque le faltaba el
vestido que tenía encerrado en Ella. Así que entre
tantos males que hacen las criaturas con hacer su
voluntad, agregan el mal aprendido de jugarse el
vestido real de mi Voluntad, vestido que no podrá
ser sustituido por ninguno otro.”
Después mi dulce Jesús me hacía ver que ponía
mi pequeña alma dentro de un sol y con sus santas
manos me tenía firme en aquella luz, la cual
incluyéndome toda dentro y fuera, yo no podía ni sabía
ver otra cosa que la luz y mi adorado Bien ha añadido:
"Hija mía, al crear al hombre la Divinidad lo
ponía en el sol de la Divina Voluntad y en él a todas
las criaturas. Este sol le servía de vestido, no sólo
al alma, sino que sus rayos eran tantos que cubrían
también el cuerpo, de modo que le servía más que
vestido, para volverlo tan honrado y bello que ni rey
ni emperadores son nunca comparables así de
adornados, como aparecía Adán con este vestido
de luz resplandeciente. Se equivocan aquellos que
dicen que Adán antes de pecar andaba desnudo.
¡Falso, falso! Si todas las cosas creadas por
nosotros son todas adornadas y vestidas, él que era
nuestra joya la finalidad por la cual todas las cosas
fueron creadas, ¿no debía tener el más bello vestido
y el más bello ornamento de todos?
Por eso le convenía el bello vestido de la luz
del sol de nuestra Voluntad y puesto que poseía
este vestido de luz, no tenía necesidad de vestidos
materiales para cubrirse. Cuando se sustrajo del
"119
18ª Hora, – Toma la Cruz y se encamina al Calvario
Fiat Divino, así se retiró la luz del alma y del cuerpo
y perdió su bello vestido y no viéndose más
rodeado de luz, se sintió desnudo y avergonzado al
verse solo desnudo en medio de todas las cosas
creadas y sintió la necesidad de cubrirse y se sirvió
de las cosas superfluas en las cosas creadas para
cubrir su desnudez.
Tan cierto es esto que, después de mi sumo
dolor, al ver divididos mis vestidos y jugar en
suertes mi túnica, al resucitar mi Humanidad no
llevé otro vestido, sino me vestí con el vestido
resplandeciente del sol de mi Querer Supremo. Era
aquel mismo vestido que poseía Adán cuando fue
creado, porque para abrir el cielo, mi Humanidad
debía llevar el vestido de la luz del Sol de mi
Supremo Querer, vestido real que dándome la divisa
de Rey y el dominio en mis manos, abrió el cielo a
todos los redimidos y presentándome a mi Padre
Celestial, le ofrecí los vestidos íntegros y bellos de
mi Voluntad con los cuales estaba cubierta mi
Humanidad para hacer reconocer a todos los
redimidos como nuestros hijos.
Así que mi Voluntad, mientras es vida, es al
mismo tiempo el verdadero vestido de la creación
de la criatura y por lo que tiene todos los derechos
sobre Ella. ¿Pero cuánto no hacen para huir de
dentro de esta luz?! Por lo que tú sé firme en este
sol del Eterno Fiat y Yo te ayudaré a tenerte en esta
luz”.
"120
18ª Hora, – Toma la Cruz y se encamina al Calvario
Por lo cual yo al sentir esto le he dicho: “¿Mi
Jesús y mi todo, cómo es? Si Adán en el estado de
inocencia no tenía necesidad de vestido, porque la luz
de tu Voluntad era más que vestido, sin embargo la
Soberana Reina que poseía integra tu Voluntad, Tu
mismo que eras la misma Voluntad, y ni la Madre
Celestial ni Tu llevaban vestidos de luz y ambos se
sirvieron de vestidos materiales para cubrirse. ¿Cómo
es esto?" Y Jesús renueva a decir:
"Hija mía, tanto mi Madre como Yo vinimos a
hermanarnos con las criaturas; vinimos a levantar
la humanidad caída y por lo tanto tomar sus
miserias y humillaciones en las cuales estaba caída,
para cubrirla a costa de nuestra propia vida. ¿Si
estuviésemos vestidos de luz, quién habría osado
aproximarse y tratar con nosotros? ¿Y en el curso
de mi pasión, quién habría osado tocarme? La luz
del sol de mi Querer los habría cegado y
desplomado en tierra. Por lo tanto debía hacer un
milagro más grande, escondiendo esta luz con el
velo de mi Humanidad y comparecer como uno de
ellos, porque ella representaba no a Adán inocente,
sino a Adán caído y por lo tanto debía someterme a
todos sus males, tomándolos sobre mí, así como si
fuesen míos, para cubrirlos ante la Divina Justicia.
En cambio cuando resucité de la muerte,
representando a Adán inocente, el Nuevo Adán,
cesó la necesidad de tener escondido tras el velo de
mi Humanidad el vestido del resplandeciente sol de
mi Querer y quedé vestido de luz purísima; y con
"121
18ª Hora, – Toma la Cruz y se encamina al Calvario
este vestido real y deslumbrante hice ingreso a mi
Patria, quedando las puertas abiertas, que hasta
aquel punto habían estado cerradas, para hacer
entrar a todos aquellos que me habían seguido. Por
lo cual con no hacer nuestra Voluntad no hay bien
que no se pierda, no hay mal que no se adquiera.”
"124
19ª Hora, – 11 Am La Crucifixión de Jesús
CITAS EN VOLUMENES
DECIMONOVENA HORA
La Crucifixión de Jesús. Segunda parte: Jesús
Crucificado. Con Él desarmamos la Divina Justicia.
"125
20ª Hora, – 1ª Hora de Agonía en la Cruz, 1ª Palabra
cabeza, de la boca y hasta de los ojos; fue tal la
tensión, que cada pequeño movimiento me hacía
sentir penas mortales. Ahora me quedaba inmóvil y
ahora me contorsionaba tanto, que me sacudía de
modo horrible sobre la cruz, que los mismos
enemigos quedaban aterrados. Por eso te repito,
ánimo, mi Voluntad te dará fuerza para todo.”
"127
20ª Hora, – 1ª Hora de Agonía en la Cruz, 1ª Palabra
¡Oh!, cuánto me amarán cuando conozcan lo que
hizo mi Humanidad en la Divina Voluntad, lo que me
hizo sufrir por su amor. Mi cruz no fue de madera,
no, fueron las almas, eran ellas que sentía
palpitantes en la cruz en la que me extendía la
Divina Voluntad, y ninguna se me escapaba, a todas
daba su lugar, y para dar lugar a todas me distendía
en modo tan desgarrador y con penas tan atroces,
que las penas de la Pasión podría llamarlas
pequeñas y alivios.
Por eso date prisa, a fin de que mi Querer
haga conocer todo lo que el Querer Eterno obró en
mi Humanidad; este conocimiento rescatará tanto
amor, que las criaturas se rendirán y lo harán reinar
en medio de ellas.”…
"129
20ª Hora, – 1ª Hora de Agonía en la Cruz, 1ª Palabra
interior de Jesucristo para poder ver todo lo que El
hacía, y para ver lo que más agradaba a su Corazón
para poderlo hacer también yo y mitigar sus penas
ofreciéndole lo que a El más le agradaba.” Mientras
esto decía, el bendito Jesús moviéndose en mi interior
me ha dicho:
“Hija mía, mi interior estaba ocupado en las
penas, principalmente a complacer en todo y por
todos a mi amado Padre, y después en la redención
de las almas, y la cosa que más agradaba a mi
Corazón era el ver la complacencia que me
mostraba el Padre al verme sufrir tanto por amor
suyo. Así que todo lo reunía en Sí, ni siquiera un
respiro, un suspiro se dispersó, sino que todo lo
recogió para poderse complacer y mostrarme su
complacencia.
Y Yo estaba tan satisfecho de esto, que si no
tuviera otra cosa, la sola complacencia de mi Padre
me bastaba para sentirme satisfecho por lo que
sufría; mientras que por parte de las criaturas,
mucho, mucho de mi Pasión quedó disperso. Y
tanta era la complacencia del Padre, que a torrentes
derramaba en mi Humanidad los tesoros de la
Divinidad. Por eso acompaña mi Pasión de esta
manera, que me darás mucho gusto.”
"131
20ª Hora, – 1ª Hora de Agonía en la Cruz, 1ª Palabra
sino con tantos clavos por cuantos actos de mi
Voluntad dispongo sobre la criatura.”
"133
CITAS EN VOLUMENES
VIGÉSIMA HORA
Primera hora de agonía en la Cruz. La Primera Palabra
Primera Palabra en la Cruz. Recapitulación de la Vida y
las Penas de Jesús.
"135
dolores, mi muerte llamaron de nuevo el Sol de mi
Querer a reinar en medio de las criaturas.
Así que el Calvario formó la aurora que
llamaba al sol de mi Eterno Querer a resplandecer
de nuevo en medio de las criaturas. La aurora dice
con certeza que debe salir el sol. Así la aurora que
formé sobre el Calvario asegura, si bien son cerca
de dos mil años para que llamará al Sol de mi
Querer a reinar de nuevo en medio de las criaturas.
En el Edén mi amor quedó vencido por parte de
ellas, aquí triunfa y vence a la criatura. En el primer
Edén el hombre recibe la condenación a muerte del
alma y cuerpo, en el segundo queda desatado de la
condenación y le viene reconfirmada la
resurrección de los cuerpos con la Resurrección de
mi Humanidad. Hay muchas relaciones entre el
Edén y el Calvario y lo que el hombre perdió, aquí
recupera. En el Reino de mis dolores todo viene
devuelto y reconfirmado el honor, la gloria de la
pobre criatura por medio de mis penas y de mi
muerte.
El hombre al sustraerse de mi Voluntad formó
el reino de sus males, de sus debilidades, pasiones
y miserias y Yo quise venir a la tierra, quise sufrir
tanto. Permití que mi Humanidad fuese lacerada,
desgarrada la carne en trizas, toda llena de llagas y
quise también morir, para formar por medio de
tantas penas mías y muerte, el Reino opuesto a
tantos males que se había formado la criatura. Para
formar un Reino no se forma con un solo acto, sino
"136
20ª Hora, – 1ª Hora de Agonía en la Cruz, 1ª Palabra
con muchos y muchos actos y cuanto más actos,
tanto más grande y glorioso se vuelve un Reino.
Así que mi muerte era necesaria a mi amor, con mi
muerte debía dar el beso de vida a las criaturas y de
tantas heridas mías debía hacer aparecer todos los
bienes, para formar el Reino de los bienes a las
criaturas. Por lo tanto de mis llagas han surgido y
manan bienes, y mi muerte es fuente de donde
brota la vida en pro de todos.
Y así como que era necesaria la muerte, fue
necesario a mi Amor la Resurrección, porque el
hombre al hacer su voluntad perdió la vida de mi
Querer y Yo quise resucitar para formar no solo la
resurrección de los cuerpos, sino la resurrección de
la vida de mi Voluntad en esos. Así que si Yo no
hubiera resucitado, la criatura no podía resucitar de
nuevo en mi Fiat, faltaría la virtud, el vínculo de la
resurrección en la mía y por lo tanto mi amor se
sentía incompleto, se sentía que podía hacer más y
no lo hacía, por lo cual habría quedado al duro
martirio de un amor no completado y que luego el
hombre ingrato ni se sirve de todo lo que he hecho.
El mal es todo suyo y mi amor posee y goza su
pleno triunfo”.
Menú
"137
CITAS EN VOLUMENES
VIGÉSIMA PRIMERA HORA
Segunda hora de agonía en la Cruz. Segunda, Tercera
y Cuarta Palabra en la Cruz.
Menú
"140
22ª Hora, – 3ª Hora de Agonía en la Cruz, 5,6 y 7ª Palabra
CITAS EN VOLUMENES
VIGÉSIMA SEGUNDA HORA
Tercera hora de agonía en la Cruz. Quinta, sexta y
séptima Palabra en la Cruz. Muerte de Jesús.
"141
22ª Hora, – 3ª Hora de Agonía en la Cruz, 5,6 y 7ª Palabra
por el dolor grité “tengo sed”, y este “tengo sed” lo
continúo gritando a todos y a cada uno, como
timbre a la puerta de cada corazón: “Tengo sed de
ti, ¡Oh! alma, ah, no salgas de Mí sino entra en Mí y
expira conmigo.”
Así que son seis horas de mi Pasión que di a
los hombres para bien morir, las tres del huerto
fueron para ayuda de la agonía, las tres de la cruz
para ayuda en el último suspiro de la muerte.
Después de esto, ¿quién no debe mirar sonriente a
la muerte? Mucho más para quien me ama, para
quien busca sacrificarse sobre mi misma cruz.
Mira cómo es bella la muerte y cómo hace
cambiar las cosas, en vida fui despreciado, los
mismos milagros no hicieron los efectos de mi
muerte, aún sobre la cruz hubo insultos, pero en
cuanto expiré la muerte tuvo la fuerza de cambiar
las cosas, todos se golpeaban el pecho
confesándome por verdadero Hijo de Dios, mis
mismos discípulos tomaron valor y aun aquellos
ocultos se hicieron atrevidos y pidieron mi cuerpo
dándome honorable sepultura; Cielo y tierra a plena
voz me confesaron Hijo de Dios.
La muerte es una cosa grande, sublime, y
esto sucede también para mis mismos hijos, en vida
despreciados, pisoteados, aquellas mismas
virtudes que como luz deberían brillar entre quienes
los rodeaban, quedan medio veladas, sus
heroísmos en el sufrir, sus abnegaciones, su celo
por las almas, arrojan claridad y dudas en los
"142
22ª Hora, – 3ª Hora de Agonía en la Cruz, 5,6 y 7ª Palabra
presentes, y Yo mismo permito estos velos para
conservar con más seguridad la virtud de mis
amados hijos.
Pero apenas mueren, estos velos, no siendo
más necesarios, Yo los retiro y las dudas se hacen
certezas, la luz se hace clara, y esta luz hace
apreciar su heroísmo, se hace entonces aprecio de
todo, aun de las cosas más pequeñas, así que lo
que no se puede hacer en vida, lo suple la muerte, y
esto es para lo que sucede acá abajo, lo que sucede
allá arriba es propiamente sorprenderte y envidiable
para todos los mortales.”
"144
22ª Hora, – 3ª Hora de Agonía en la Cruz, 5,6 y 7ª Palabra
pequeñas gotitas, para consuelo de la sed que me
devora; ¿pero quién me escucha? ¿Quién tiene
compasión de Mí? Solo quien vive en mi Voluntad;
todos los otros se hacen los sordos y quizás
acrecientan con su ingratitud mi sed, que me vuelve
intranquilo sin esperanza de reponerme”
"145
22ª Hora, – 3ª Hora de Agonía en la Cruz, 5,6 y 7ª Palabra
quedaba confirmado en la Santidad de mi
Humanidad, todo quedaba reparado, y por cada
ofensa sufrí una pena especial. Y habiendo hecho
renacer a todos en Mí, los llevé en Mí todo el tiempo
de mi Vida, ¿y sabes cuándo di a luz? Los parí
sobre la Cruz, en el lecho de mis acerbos dolores
entre espasmos atroces, en el último respiro de mi
Vida; y conforme morí Yo, así renacían todos a
nueva vida, todos sellados y marcados de todo lo
obrado por mi Humanidad.
Y no contento con haberlos hecho renacer, a
cada uno daba todo lo que Yo había hecho para
tenerlos defendidos y al seguro. ¿Ves qué Santidad
contiene el hombre? La Santidad de mi Humanidad;
jamás habría podido dar a luz hijos indignos y
desemejantes a Mí, por esto amo tanto al hombre,
porque es parto mío, pero el hombre es siempre
ingrato y llega hasta no conocer al Padre que lo ha
parido con tanto amor y dolor.”
Después de esto se hacía ver todo en llamas y
Jesús quedaba quemado y consumado en aquellas
llamas y no se veía más, no se veía otra cosa que
fuego, pero después se veía renacer de nuevo y otra
vez quedaba consumado en el fuego. Entonces ha
agregado:
“Hija mía, Yo ardo, el amor me consume, es
tanto el amor y las llamas que me queman, que
muero de amor por cada criatura. No fue
únicamente por las penas por lo que morí, sino que
"146
22ª Hora, – 3ª Hora de Agonía en la Cruz, 5,6 y 7ª Palabra
éstas muertes de amor son continuas, no obstante
no hay quien me dé por refrigerio su amor.”
"147
22ª Hora, – 3ª Hora de Agonía en la Cruz, 5,6 y 7ª Palabra
Esta consumación en el alma no es humana
sino toda Divina y Yo siento la satisfacción como si
otra Vida mía Divina se hubiera consumado por
amor mío, y como en efecto no es su vida la que se
ha consumado, sino la mía, la que ya no siente más,
que ya no ve, le parece que Yo haya muerto para
ella. Y a la criatura le renuevo los efectos de mi
consumación y al alma le duplico la gracia y la
gloria; siento el dulce encanto y los atractivos de mi
Humanidad que me hacía hacer lo que Yo quería.
Por eso déjame hacer también tú lo que quiero
hacer en ti, déjame libre y Yo desarrollaré mi Vida.”
Otro día me lamentaba y le decía: “¿Cómo,
me has dejado?” Y Jesús, serio e imponente me ha
dicho: “Calla, no digas despropósitos, no te he
dejado, estoy en el fondo de tu alma, por eso no me
ves y cuando me ves es porque salgo a la superficie
de tu alma. No te distraigas, Yo te quiero toda
concentrada en Mí para poderte tener para bien de
todos.”
"148
22ª Hora, – 3ª Hora de Agonía en la Cruz, 5,6 y 7ª Palabra
"Hija mía, el mal es grande. Mi Voluntad es
luz y la humana es tiniebla; la mía es santidad y el
querer humano es pecado; la mía es belleza y
contiene todos los bienes, la humana es fealdad y
contiene todos los males. Así que el alma al no
hacer mi Voluntad hace morir la luz, da muerte a la
santidad, a la belleza y a todos los bienes; y al
hacer la suya hace nacer las tinieblas da la vida al
pecado, a la fealdad y a todos los males. Sin
embargo a las criaturas les parece nada el hacer la
propia voluntad, mientras se cavan un abismo de
males que los lleva al precipicio. ¿Y luego te parece
nada que mientras mi Voluntad les trae su luz, su
santidad, su belleza y todos sus bienes y solo
porque ama a éstas criaturas, recibe el agravio de
ver morir en esas su luz, su santidad, su belleza y
todos los bienes suyos?
Mi Humanidad sintió tanto esta muerte que el
querer humano daba a la luz, a la santidad de su
Querer en ellos, que se puede decir que fue la
verdadera muerte que sintió, porque sintió el
desgarro y el peso de una muerte de una luz y
santidad infinita que la criatura había osado destruir
en ellos; y mi Humanidad gemía y se sentía triturar
de tantas muertes, por cuantas veces las criaturas
habían osado dar muerte en ellas a la luz y santidad
de mi Querer Divino.
¿Cuál mal no haría a la naturaleza si hicieran
morir la luz del sol, el viento que purifica, el aire que
respiran? Se tendría tal desorden que todas
"149
22ª Hora, – 3ª Hora de Agonía en la Cruz, 5,6 y 7ª Palabra
criaturas morirían. Sin embargo la luz de mi
Voluntad es más que sol para las almas, viento que
purifica, aire que forma la respiración de ellas. Así
que del desorden que podría suceder si; pudieran
hacer morir la luz del sol, el viento y el aire, puedes
entender el mal que sucede con no hacer mi
adorable Voluntad, acto de vida primario y centro de
todas las criaturas”.
"150
22ª Hora, – 3ª Hora de Agonía en la Cruz, 5,6 y 7ª Palabra
con voz imperativa que pedía todo y obtenía todo lo
que Yo quería; a su Hijo abandonado en sus brazos
no le podía negar nada mi Padre Celestial, mi
abandono de cada instante era el acto más grato,
tanto que quise coronar el último hálito de mi vida
con las palabras: "Padre, en tus manos
encomiendo mi Espíritu". La virtud del abandono
es la virtud más grande, es comprometer a Dios que
ponga atención del abandonado en sus brazos, el
abandono le dice a Dios: "Yo no quiero saber nada
de Mí mismo, esta mi vida es tuya, no mía, y la tuya
es mía"
Por eso si quieres conseguir todo, si me
quieres amar realmente, vive abandonada en mis
brazos, hazme sentir el eco de cada instante de mi
vida: "En tus manos toda me abandono". Y Yo te
llevaré en mis brazos como la más querida de mis
hijas".
Después de esto estaba siguiendo todo lo que ha
hecho la Divina Voluntad, y sentía en mí un orden, uno
cerca del otro, y yo debía seguirlos….
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"151
23ª Hora, – Llaga del costado y descendimiento de la Cruz
CITAS EN VOLUMENES
VIGÉSIMA TERCERA HORA
Jesús muerto es traspasado con un golpe de lanza. El
descendimiento de la Cruz.
"152
23ª Hora, – Llaga del costado y descendimiento de la Cruz
penas de mi Mamá, sobrepasaban todo. Por eso era
justo que mi Celestial Mamá tuviera el primer lugar
en mi Corazón, tanto en el dolor como en el amor,
porque cada pena sufrida por mi Mamá por amor
mío, abría mares de gracias y de amor que se
volcaban en su Corazón traspasado.
En esta herida entran todas las almas que
sufren por causa mía y sólo por amor a Mí; en esta
entras tú y aunque todos me ofendieran y no me
amaran, Yo encuentro en ti el amor que puede
suplirme por todos, y por eso cuando las criaturas
me arrojan, me obligan a huir de ellas, Yo, ligero,
ligero, vengo a refugiarme en ti como a mi
escondite, y encontrando mi Amor, no el de ellas, y
penante sólo por Mí, digo: “No me arrepiento de
haber creado cielo y tierra y de haber sufrido tanto.
Un alma que me ama y que sufre por Mí es todo mi
contento, mi felicidad, mi compensación de todo lo
que he hecho, y haciendo a un lado todo lo demás,
me gozo y me entretengo con ella. Sin embargo,
esta herida de amor en mi Corazón, mientras que es
la más dolorosa y sobrepasa todo, contiene dos
efectos al mismo tiempo: me da intenso dolor y
sumo gozo, amarguras indecibles y dulzuras
indescriptibles, muerte dolorosa y vida gloriosa;
son los excesos de mi Amor, inconcebibles a mente
creada y en efecto, ¿cuántos contentos no
encontraba mi Corazón en los dolores de mi
traspasada Mamá?
"153
23ª Hora, – Llaga del costado y descendimiento de la Cruz
La segunda herida mortal de mi corazón es la
ingratitud: La criatura con la ingratitud cierra mi
corazón, es más, ella misma da dos vueltas a la
llave y mi corazón se hincha porque quiere
derramar gracias, amor, y no puede porque la
criatura me los ha encerrado y los ha sellado con la
ingratitud, y Yo doy en delirio, me agito sin
esperanza de que esta herida me sea curada,
porque la ingratitud me la va haciendo siempre más
áspera, dándome pena mortal.
La tercera herida es la obstinación: ¡Que
herida mortal a mi corazón! La obstinación es la
destrucción de todos los bienes que he hecho para
la criatura, es la firma de la declaración que la
criatura hace de no conocerme, de no pertenecerme
más, es la llave del infierno, al cual la criatura va a
precipitarse, y mi corazón siente por ello el
desgarro, se me hace pedazos y me siento arrancar
uno de esos pedazos. ¡Qué herida mortal es la
obstinación! Hija mía, entra en mi Corazón y toma
parte en estas heridas mías, compadece mi
despedazado Corazón, suframos juntos y
roguemos.” Yo he entrado en su Corazón, ¡cómo era
doloroso, pero bello, sufrir y rogar con Jesús!
"154
23ª Hora, – Llaga del costado y descendimiento de la Cruz
Estaba pensando en el gran bien que el bendito
Jesús nos ha hecho con redimirnos, y El, todo Bondad
me ha dicho:
“Hija mía, Yo creé a la criatura bella, noble, de
origen Eterno y Divino, plena de felicidad y digna de
Mí; el pecado la derribó de esta altura y la hizo caer
hasta el fondo, le quitó nobleza, la deformó y la
volvió la criatura más infeliz, sin poder crecer,
porque el pecado le impedía el crecimiento y la
cubría de llagas, que daba horror sólo verla.
Ahora, mi Redención rescató a la criatura de
la culpa y mi Humanidad no hizo otra cosa que,
como una tierna madre con su recién nacido, que
no pudiendo tomar otro alimento, para dar la vida a
su bebé se abre el seno, pone a su pecho a su niño,
y de su sangre convertida en leche le suministra el
alimento para darle la vida.
Más que madre mi Humanidad se hizo abrir
en Sí misma, a golpes de látigo, tantas aberturas,
casi como tantas mamas que hacían salir ríos de
sangre para hacer que mis hijos, pegándose a ellas
pudieran chupar el alimento para recibir la vida y
desarrollar su crecimiento, y con mis llagas cubría
su deformidad y los volvía más bellos que al
principio; y si al crearlos los hice cielos tersísimos
y nobles, en la Redención los adorné cubriéndolos
con las estrellas brillantísimas de mis llagas para
cubrir su fealdad y volverlos más bellos; en sus
llagas y deformidad Yo ponía los diamantes, las
perlas, los brillantes de mis penas, para ocultar
"155
23ª Hora, – Llaga del costado y descendimiento de la Cruz
todos sus males y vestirlos con tal magnificencia,
de superar el estado de su origen.
Por eso con razón la Iglesia dice: “Feliz
culpa”, porque por la culpa vino la Redención, y mi
Humanidad no sólo los alimentó con su sangre, no
sólo los vistió con su misma Persona y los adornó
con su misma belleza, sino que mis mamas están
siempre llenas para alimentar a mis hijos. ¿Cuál no
será la condena de aquellos que no quieren pegarse
a ellas para recibir la vida y crecer, y para ser
cubiertos en su deformidad?”
"156
23ª Hora, – Llaga del costado y descendimiento de la Cruz
Voluntad, para hacer que mi Voluntad pueda tener
su Vida de actitud continua en ti; además
encontrarás el más bello reposo, porque mi
Voluntad te hará subir siempre más en tu Dios y te
lo hará comprender más, y por cuanto más lo
comprendas, tanto más tu alma quedará ampliada
para poder recibir ese reposo eterno, con todas las
felicidades y alegrías que contiene el reposo divino.
¡Oh! qué bello reposo será este para ti, reposo que
sólo en mi Voluntad se encuentra.”
Ahora, mientras esto decía ha salido de dentro
de mi interior y poniendo sus brazos en mi cuello me
estrechaba fuerte a El; yo extendí también mis brazos y
lo estrechaba fuerte a mí.
Mientras estaba en esto, mi dulce Jesús llamaba
a muchas personas que se estrechaban a sus pies y
Jesús les decía:
“Vengan a mi Corazón y les haré ver los
portentos que mi Voluntad ha hecho en esta alma.”
Habiendo dicho esto ha desaparecido.
Menú
"157
24ª Hora, – La Sepultura y soledad de María Santísima
CITAS EN VOLUMENES
VIGÉSIMA CUARTA HORA
La sepultura de Jesús. Desolación y Soledad de María
Santísima.
"159
24ª Hora, – La Sepultura y soledad de María Santísima
el cumplimiento de mi resurrección como
cumplimiento de la redención. La alegría la
sostenía en el dolor y el dolor la sostenía en la
alegría. A quien posee mi Querer no le puede faltar
ni la fuerza ni la potencia ni la alegría sino todo
tiene a su disposición. ¿No lo experimentas en ti
misma cuando estas privada de mí y te sientes
consumar? La luz del Fiat Divino forma su mar de
felicidad y te da la vida”.
Menú
"160
DOLORES DE LA VIRGEN MARIA
DOLORES DE LA VIRGEN MARIA
"161
DOLORES DE LA VIRGEN MARIA
fulgidísima, que le daban tanta gloria que faltan las
palabras para narrarla. Entonces Jesús ha continuado
diciéndome:
“No fueron los dolores los que constituyeron
Reina a mi Mamá y la hicieron refulgir de tanta
gloria, sino mi Fiat Omnipotente, el cual entrelazaba
cada acto y dolor suyo y se constituía vida de cada
dolor, así que mi Fiat era el acto primero que
formaba la espada, dándole la intensidad del dolor
que quería; mi Fiat podía poner en aquel Corazón
traspasado cuantos dolores quería, agregar heridas
a heridas, penas sobre penas, sin la sombra de la
mínima resistencia; es más, se sentía honrada de
que mi Fiat se constituía vida aun de un solo latido,
y mi Fiat le dio la gloria completa y la constituyó
verdadera y legítima Reina.
¿Ahora, quiénes serán las almas en las
cuales pueda reflejar los reflejos de mis dolores y
de mi misma vida? Aquellas que tendrán por vida
mi Fiat, este Fiat absorberá en ellas mis reflejos y
Yo seré magnánimo en participar lo que mi Querer
obra en Mí; por eso en mi Voluntad espero a las
almas, para darles el verdadero dominio y la gloria
completa de cada acto y pena que puedan sufrir.
Fuera de mi Voluntad, el obrar y el sufrir Yo
no lo reconozco, podría decir: “No tengo qué darte,
¿cuál es la voluntad que te ha animado al hacer y en
sufrir esto? De ella hazte recompensar.” Muchas
veces el hacer el bien, el sufrir, sin que mi Voluntad
en medio, pueden ser míseras esclavitudes que
"162
DOLORES DE LA VIRGEN MARIA
degeneran en pasiones; mientras que sólo mi
Querer da el verdadero dominio, las verdaderas
virtudes, la verdadera gloria de trasmutar lo
humano en divino.”
"163
DOLORES DE LA VIRGEN MARIA
humano? Entonces la finalidad no se hubiera
logrado.
En segundo lugar mi Mamá fue espectadora
de todas las penas de mi vida oculta, y esto era
necesario, pues si Yo había venido del Cielo a la
tierra para sufrir, no para Mí sino para bien de los
demás, debía tener por lo menos a una criatura en
la cual debía apoyar aquel bien que contenían mis
penas y así mover a mi amada Mamá a
agradecerme, a alabarme, a amarme, a bendecirme,
y a hacerla admirar el exceso de mi bondad, tanto
que Ella, conmovida y raptada ante la vista de mis
penas, me rogaba que en vista del gran bien que le
llevaban mis penas, no la eximiera de fundirse con
mis mismas penas para sufrirlas, para darme la
correspondencia y ser mi perfecta imitadora.
Si mi Mamá no hubiera visto nada, no habría
tenido mi primera imitadora, no habría tenido
ningún gracias, ninguna alabanza, mis penas, el
bien que contenían, habrían quedado sin efecto,
porque no conociéndolas ninguno, no podía hacer
el primer apoyo, así que la finalidad del gran bien
que debía recibir la criatura se habría perdido.
Ves, cuán necesario era que al menos una
sola criatura estuviera al tanto de mis penas. Si
esto fue para Mí, quiero que sea también de ti; es
más, te digo que quiero al confesor obrante junto
conmigo, espectador y depositario de las penas que
te hago sufrir, para que también él participe en el
bien y teniéndolo junto pueda excitarlo más en la fe
"164
DOLORES DE LA VIRGEN MARIA
e infundirle luz y amor para hacerle comprender las
Verdades que te voy manifestando.”
Yo he quedado más que nunca oprimida al oír
esto y mientras esperaba misericordia he encontrado
justicia e inamovilidad por parte de Jesús. ¡Oh!, Dios,
qué pena! Y viéndome más afligida ha agregado:
“¿Hija mía, esto es lo mucho que me quieres?
Los tiempos son tan tristes y los males que vendrán
son demasiado espeluznantes, y cuando no puedas
tú sola impedir todo el curso a mi Justicia, lo
podréis entre los dos, y deberías decir tú misma
que te hiciera sufrir. Por eso resígnate también en
esto y ten paciencia, lo quiere tu Jesús y basta.”
"165
DOLORES DE LA VIRGEN MARIA
honor y la supremacía sobre todo, y muchas veces es
más dura la lucha que la misma pena.” Pero mientras
esto pensaba, mi amable Jesús se ha movido en mi
interior diciéndome:
“Hija mía, tú te equivocas, no fue uno el
máximo sacrificio de mi Mamá, sino fueron tales y
tantos, por cuantos dolores, penas, circunstancias
y encuentros fue expuesta su existencia y la mía;
las penas en Ella siempre eran duplicadas, porque
mis penas eran más que penas suyas, y además mi
Sabiduría no cambió nunca dirección con mi Mamá,
en cada pena que debía tocarle Yo le preguntaba
siempre si quería aceptarlas, para sentirme repetir
por Ella aquel Fiat en cada pena, en cada
circunstancia y aún en cada latido; aquel Fiat me
sonaba tan dulce, tan suave y armonioso, que lo
quería oír repetir a cada instante de su vida.
Por eso le preguntaba siempre: ¿Mamá,
quieres hacer esto? ¿Quieres sufrir esta pena? Y a
Ella mi Fiat le llevaba los mares de bienes que
contiene y le hacía entender la inmensidad de la
pena que aceptaba, y este entender con luz divina lo
que paso a paso debía sufrir, le daba tal martirio
que supera infinitamente a la lucha que sufren las
criaturas, porque faltando en Ella el germen de la
culpa, faltaba el germen de la lucha y mi Voluntad
debía encontrar otro medio para hacer que no fuese
menor que las otras criaturas en el sufrir, porque
debiendo adquirir con justicia el derecho de Reina
"166
DOLORES DE LA VIRGEN MARIA
de los Dolores, debía superar a todas las criaturas
juntas en las penas.
¿Cuántas veces no lo has sentido tú misma,
que mientras no sentías ninguna lucha, mi Querer,
haciéndote entender las penas a las cuales te
sometía, tú quedabas petrificada por la fuerza del
dolor, y mientras quedabas destrozada en la pena,
tú eras la pequeña corderita en mis brazos, pronta a
aceptar otras penas a las cuales mi Querer te quería
sometida? ¡Ah! ¿No sufrías tú más que con la
misma lucha? La lucha es señal de pasiones
vehementes, mientras que mi Voluntad, si lleva el
dolor, al mismo tiempo da la intrepidez, y con el
conocimiento de la intensidad de la pena le da tal
mérito, que sólo una Voluntad Divina puede dar.
Por eso, como hago contigo, que en cada
cosa que quiero de ti primero te pregunto si
quieres, si aceptas, así hacía con mi Mamá, para
que el sacrificio sea siempre nuevo y me de la
ocasión de conversar con la criatura, de
entretenerme con ella, y que mi Querer tenga su
campo de acción divino en la voluntad humana.”
Ahora, mientras estaba escribiendo lo que está
escrito arriba, no he podido seguir más adelante,
porque mi mente ha quedado enajenada por un canto
bello y armonioso, acompañado por un sonido jamás
oído, este canto ponía a todos en atención y
armonizaba con toda la Creación con la Patria Celestial.
Todo esto lo escribo por obedecer. Mientras oía
el canto mi Jesús me ha dicho:
"167
DOLORES DE LA VIRGEN MARIA
“Hija mía, escucha como es bello, este sonido
y canto, es un cántico nuevo formado por los
ángeles como homenaje, gloria y honor a la unión
de la Voluntad Divina con tu voluntad humana, es
tanta la alegría de todo el Cielo y de la Creación
toda, que no pudiéndola contener suena y canta.”
Dicho esto me he encontrado en mí misma.
"168
DOLORES DE LA VIRGEN MARIA
ti, mucho más para los demás. Ahora, tú debes
saber que para formar el Reino de la Redención,
entre aquellos que se distinguieron más en el sufrir,
estuvo mi Mamá, y si bien Ella aparentemente no
sufrió ninguna pena que conocieran las otras
criaturas, con excepción de mi muerte que fue
conocida por todos y que fue para su Materno
Corazón el golpe fatal y más desgarrador que
cualquier muerte dolorosísima; pero como Ella
poseía la Unidad de la Luz de mi Querer, esta luz
llevaba a su Corazón traspasado no sólo las siete
espadas que dice la Iglesia, sino todas las espadas,
las lanzas, los pinchazos de todas las culpas y
penas de las criaturas, que martirizaban de modo
desgarrador su Materno Corazón.
Pero esto es nada, esta luz le llevaba todas
mis penas, mis humillaciones, mis aflicciones, mis
espinas, mis clavos, las penas más íntimas de mi
Corazón; el Corazón de mi Mamá era el verdadero
sol, que mientras se ve sólo luz, esta luz contiene
todos los bienes y efectos que recibe y posee la
tierra, así que se puede decir que la tierra está
encerrada en el sol.
Así en la Soberana Reina, se veía solamente
su persona, pero la luz de mi Supremo Querer
encerraba en Ella todas las penas posibles e
imaginables, y por cuanto más íntimas y
desconocidas estas penas, tanto más estimables y
más potentes sobre el Corazón Divino para impetrar
el suspirado Redentor, y más que luz solar
"169
DOLORES DE LA VIRGEN MARIA
descendían en los corazones de las criaturas para
conquistarlas y atarlas al Reino de la Redención.
Así que la Iglesia, de las penas de la Celestial
Soberana conoce tan poco, que se puede decir que
son sólo las penas aparentes, y por eso da el
número de siete espadas; pero si conociera que su
Materno Corazón era el refugio, el depósito de todas
las penas, que la luz de mi Voluntad todo le llevaba
y nada le ahorraba, no habría dicho siete espadas,
sino millones de espadas, mucho más que siendo
penas íntimas, sólo Dios conoce la intensidad del
dolor de ellas y por eso con derecho fue constituida
Reina de los Mártires y de todos los dolores; las
criaturas saben dar el peso, el valor a las penas
externas, pero de las internas no atinan a darles el
justo valor.
Ahora, para formar en mi Mamá primero el
reino de mi Voluntad y después el de la Redención,
no eran necesarias tantas penas, porque no
teniendo culpas, la herencia de las penas no era
para Ella; su herencia era el Reino de mi Voluntad,
pero para dar el Reino de la Redención a las
criaturas, debió sujetarse a tantas penas, así que
los frutos de la Redención fueron madurados en el
Reino de mi Voluntad poseído por Mí y por mi
Mamá.
No hay cosa bella, buena y útil que no salga
de mi Voluntad. Ahora, unida a la Soberana Reina
vino mi Humanidad, Ella quedó escondida en Mí, en
mis dolores, en mis penas, por eso poco se conoció
"170
DOLORES DE LA VIRGEN MARIA
de Ella, pero de mi Humanidad fue necesario que se
conociera lo que Yo hice, cuánto sufrí y cuánto amé,
si nada se conociera no habría podido formar el
Reino de la Redención. El conocimiento de mis
penas y de mi amor es imán y estímulo, incitación,
luz para atraer a las almas a tomar los remedios, los
bienes que en Ella hay; el saber cuánto me cuestan
sus culpas, su salvación, es cadena que los ata a Mí
e impide nuevas culpas.
Si en cambio nada hubieran sabido de mis
penas y de mi muerte, no conociendo cuánto me ha
costado su salvación, ninguno habría tenido el
pensamiento de amarme y de salvar su alma. ¿Ves
entonces cuánto es necesario el hacer conocer
cuánto ha hecho y sufrido aquel o aquella que ha
formado en sí un bien universal para darlo a los
demás?
Ahora hija mía, así como fue necesario hacer
conocer quien fue Aquel y Aquella y cuánto les
costó formar el Reino de la Redención, así es
necesario hacer conocer a aquella a la cual mi
Paterna Bondad ha escogido primero para formar
en ella el Reino del Fiat Supremo, y luego dar el
principio de la transmisión a los demás.
Así como fue para la Redención, que primero
fue formada entre mi Mamá Celestial y Yo y después
fue conocida por las criaturas, así será del Fiat
Supremo, por lo tanto es necesario hacer conocer
cuánto me cuesta este Reino de mi Voluntad y hacer
conocer cómo, para hacer que el hombre pudiera
"171
DOLORES DE LA VIRGEN MARIA
entrar de nuevo en su Reino perdido, he debido
sacrificar a la más pequeña de las criaturas, tenerla
clavada por cuarenta años y más dentro de un
lecho, sin aire, sin la plenitud de la luz del sol que
todos gozan, cómo su pequeño corazón ha sido el
refugio de mis penas y de aquellas de las criaturas,
cómo ha amado a todos, rogado por todos,
defendido a todos y cuántas veces se ha expuesto a
los golpes de la Justicia Divina para defender a
todos sus hermanos, y además sus penas íntimas,
mis mismas privaciones que martirizaban su
pequeño corazón dándole muerte continua, porque
no conociendo otra vida que la mía, otro Querer que
el mío, todas estas penas echaban los fundamentos
del Reino de mi Voluntad, y como rayos solares
maduraban los frutos del Fiat Supremo.
Por eso es necesario hacer conocer cuánto te
costó a ti y a Mí este Reino, y así por el costo
puedan conocer cuánto amo el que hagan
adquisición de él, y por el costo puedan apreciarlo y
amarlo y aspirar a entrar a vivir en el Reino de mi
Suprema Voluntad.”
Esto lo he escrito por obedecer, pero ha sido
tanto el esfuerzo, que apenas he podido señalar algo de
mi pobre existencia, ya que por la gran renuencia me
siento helar la sangre en las venas; pero me conviene
repetir siempre: ¡Fiat, Fiat, Fiat!
"172
DOLORES DE LA VIRGEN MARIA
…Después de esto estaba pensando dentro de
mí: “Cómo es de dura la privación de mi dulce Jesús, se
siente la verdadera muerte del alma y sucede como al
cuerpo cuando se separa del alma, que mientras posee
los mismos miembros, estos están vacíos de la vida,
están inertes, sin movimiento y no tienen más valor. Así
me parece mi pequeña alma sin Jesús, posee las
mismas facultades, pero vacías de vida, sin Jesús
termina la vida, el movimiento, el calor, por eso la pena
es desgarradora, indescriptible y no se puede comparar
a ninguna otra pena.
¡Ah! la Mamá Celestial no sufrió esta pena
porque su Santidad la volvía inseparable de Jesús, y
por eso no quedó jamás privada de El.” Pero mientras
esto pensaba, mi amado Jesús se ha movido en mi
interior diciéndome:
“Hija mía, tú te equivocas, la privación de Mí
no es separación, sino dolor, y tú tienes razón al
decir que es un dolor más que mortal, y este dolor
tiene la virtud no de separar sino de unir con
ataduras más fuertes y más estables la unión
inseparable conmigo, y no sólo esto, sino que cada
vez que el alma queda como privada de Mí, sin
culpa suya, Yo resurjo de nuevo para ella a nueva
vida de conocimiento, haciéndome comprender
más; de nuevo amor, amándola más, y doy nueva
gracia para enriquecerla y embellecerla, y ella
renace a nueva Vida Divina, a nuevo amor y a nueva
belleza, porque es justo; sufriendo el alma penas
mortales, viene substituida con nueva Vida Divina,
"173
DOLORES DE LA VIRGEN MARIA
si esto no fuese así me dejaría vencer por el amor
de la criatura, lo que no puede ser.
Y además no es verdad que la Soberana
Reina no haya quedado jamás privada de Mí;
inseparable jamás, pero privada sí, esto no
perjudicaba la altura de su Santidad, más bien la
acrecentaba. Cuántas veces la dejé en el estado de
pura fe, porque debiendo ser la Reina de los dolores
y la Madre de todos los vivientes, no podía faltarle
el adorno más bello, la gema más resplandeciente
que le daba la característica de Reina de los
Mártires y Madre Soberana de todos los Dolores;
esta pena de ser dejada en el estado de pura fe la
preparó a recibir el depósito de mi doctrina, el
tesoro de los Sacramentos y todos los bienes de mi
Redención, porque siendo mi privación la pena más
grande, pone al alma en condición de merecer ser la
depositaria de los dones más grandes de su
Creador, de sus conocimientos más altos y de sus
secretos.
¿Cuántas veces no lo he hecho contigo?
Después de una privación mía te he manifestado los
conocimientos más altos sobre mi Voluntad, y con
esto venía a hacerte depositaria no sólo de sus
conocimientos, sino de mi misma Voluntad. Y
además la Soberana Reina como Madre debía
poseer todos los estados del alma, por lo tanto
también el estado de pura fe, para poder dar a sus
hijos aquella fe irremovible que hace arriesgar la
sangre y la misma vida para defender y atestiguar la
"174
DOLORES DE LA VIRGEN MARIA
fe. ¿Si este don de la fe no lo hubiera poseído,
cómo lo podía dar a sus hijos?”
Dicho esto ha desaparecido, pero mi mente
quería pensar tantas cosas extrañas y quizá aún
disparatadas y me esforzaba por hacer mis actos en la
adorable Voluntad de Dios, pero mientras esto hacía
pensaba para mí: “Si el vivir en el Reino Supremo de la
Voluntad Divina requiere tanta atención, tantos
sacrificios, serán poquísimos aquellos que querrán vivir
en un Reino tan Santo.” Y mi dulce Jesús regresando
me ha dicho:
“Hija mía, quien es llamado como cabeza de
una misión debe abrazar no sólo todos los
miembros, sino debe regirlos, dominarlos y
constituirse vida de cada uno de ellos; mientras que
los miembros no son los que dan vida a la cabeza ni
hacen todo lo que hace ella, sino que cada uno hace
su oficio. Así quien es llamado como cabeza de una
misión, abrazando todo lo que conviene para poder
desarrollar el trabajo que le ha sido confiado,
sufriendo más que todos y amando a todos, prepara
el alimento, la vida, las lecciones, los oficios, según
la capacidad de quien querrá seguir su misión.
Lo que es necesario a ti, que debes formar el
árbol con toda la plenitud de las ramas y
multiplicidad de los frutos, no será necesario a
quien debe ser solo rama o fruto, su trabajo será de
estar incorporado al árbol para recibir los humores
vitales que él contiene, o sea, hacerse dominar por
"175
DOLORES DE LA VIRGEN MARIA
mi Voluntad, no dando jamás vida al propio querer
en todas las cosas, sean internas o externas.
Conocer mi Voluntad y recibirla como vida
propia para hacerla desarrollar su Vida Divina; en
suma, hacerla reinar y dominar como Reina.
Así hija mía, quien debe ser cabeza conviene
que sufra, que trabaje y que haga él sólo todo lo
que los demás harán todos juntos. Esto es lo que
hice Yo, porque como cabeza de la Redención
puedo decir que hice todo por amor de todos, para
darles la vida y ponerlos a todos a salvo, como
también la Virgen Inmaculada, porque como Madre
y Reina de todos, ¿cuánto no sufrió? ¿Cuánto no
amó y obró por todas las criaturas? Ninguno puede
decir que nos haya igualado, ya sea en el sufrir
como en el amar, a lo más nos asemejan en parte,
pero igualarnos, ninguno. Pero con el haber estado
a la cabeza de todos, tanto Yo como la Soberana
Reina, encerrábamos todas las gracias y todos los
bienes, la fuerza estaba en nuestro poder, el
dominio era nuestro, Cielo y tierra obedecían a
nuestras señas y temblaban delante a nuestra
Potencia y Santidad.
Los redimidos han tomado nuestras migajas
y han comido nuestros frutos, se han sanado con
nuestros remedios, se han revigorizado con
nuestros ejemplos, han aprendido nuestras
lecciones, han resucitado a costa de nuestra vida, y
si han sido glorificados ha sido en virtud de nuestra
gloria, pero el poder es siempre nuestro, la fuente
"176
DOLORES DE LA VIRGEN MARIA
viva de todos los bienes brota siempre de Nosotros,
tan cierto, que si los redimidos se alejan de
Nosotros pierden todos los bienes y vuelven a estar
enfermos y pobres más que antes.
He aquí lo que significa ser cabeza, es verdad
que se sufre mucho, se trabaja demasiado, se debe
preparar el bien a todos, pero todo lo que se posee
sobrepasa todo y a todos; hay tal distancia entre
quien es cabeza de una misión y entre quien debe
ser miembro, como si se comparara al sol como
cabeza y una pequeña luz como miembro. Por eso
te he dicho tantas veces que tu misión es grande,
porque no se trata de la sola santidad personal,
sino se trata de abrazar todo y a todos, y preparar el
reino de mi Voluntad a las generaciones humanas.”
FIN DE HORAS
"177
LA RESURRECCION DE JESUS EN LOS ESCRITOS
Menú
Vol. 4 07.04.1901
…Durante un poco he visto a mi adorable Jesús
en el momento de su Resurrección, con un rostro tan
resplandeciente que no se puede comparar a ningún
otro esplendor, y me parecía que la Santísima
Humanidad de Nuestro Señor, aun siendo carne viva,
era resplandeciente y transparente, de modo que se
veía claramente su Divinidad unida a su Humanidad. Y
mientras lo veía tan glorioso, una luz que venía de El
parecía decirme:
“Tanta gloria tuvo mi Humanidad gracias a la
perfecta obediencia, que destruyendo por completo
la antigua naturaleza me dio la nueva naturaleza
gloriosa e inmortal. Así el alma, por medio de la
obediencia puede formar en sí la perfecta
resurrección en las virtudes; por ejemplo: si el alma
está afligida, la obediencia la hará resucitar a la
alegría; si se siente agitada, la obediencia la hará
resucitar a la paz; si es tentada, la obediencia le
dará la cadena más fuerte para atar al enemigo y la
hará resucitar vencedora de las insidias diabólicas;
si asediada por pasiones y vicios, la obediencia,
dándoles muerte, la hará resucitar en las virtudes.
Eso en el alma, y a su tiempo formará la
resurrección también del cuerpo”.
"178
LA RESURRECCION DE JESUS EN LOS ESCRITOS
Vol. 4 30.03.1902
Esta mañana, encontrándome fuera de mí
misma, he visto un poco a mi adorable Jesús en el acto
de su Resurrección, enteramente vestido de luz
resplandeciente, tanto que el sol quedaba oscurecido
ante aquella luz. Me he quedado encantada y he dicho:
“Señor, si no soy digna de tocar tu Humanidad
glorificada, déjame tocar al menos tus vestiduras”. Y El
me ha dicho:
“Amada mía, ¿qué dices? Después de haber
resucitado ya no tuve más necesidad de vestiduras
materiales, sino que mis vestiduras son de sol, de
luz purísima, que cubre a mi Humanidad y que
resplandecerá eternamente, dando gozo indecible a
todos los sentidos de los bienaventurados en el
Cielo. Eso ha sido concedido a mi Humanidad,
porque no hubo parte en ella que no estuviera
cubierta de oprobios, de dolores y de llagas”.
Dicho lo cual ha desaparecido, sin poder yo
encontrar ni su Humanidad ni sus vestiduras, o sea, que
mientras cogía con las manos sus sagradas vestiduras,
se me escapaban y no las hallaba.
"179
LA RESURRECCION DE JESUS EN LOS ESCRITOS
la naturaleza. Yo suelo hacer antes las cosas
menores como preparativo de las cosas mayores,
que son corona de las cosas menores.
El sol, mientras es mi relator, a la vez
representa a las almas que formarán su santidad en
mi Querer. Los santos que han vivido en el espejo
de mi Humanidad y como a la sombra de mi
Voluntad serán las estrellas. Aquellas almas, si bien
posteriores, serán los soles. Ese mismo orden lo
seguí en la Redención. Mi nacimiento no sólo no
llamó la atención, sino que fue muy humilde; mi
niñez, sin esplendor de grandes cosas ante los
hombres. Mi vida de Nazaret fue tan oculta, que viví
como ignorado por todos; me adaptaba a hacer las
cosas más pequeñas y comunes de la vida humana.
En la vida pública hubo algo de grande, pero lo
mismo, ¿quién conoció mi Divinidad? Nadie, ni
siquiera todos los Apóstoles. Pasaba entre la gente
como uno más, tanto que todos podían acercarse a
Mí, hablarme y, si llegaba el caso, también
despreciarme”.
Y yo, interrumpiendo las palabras de Jesús, he
dicho: “Jesús, Amor mío, ¡qué tiempos felices eran! ¡Y
qué felices las personas que, con sólo quererlo, podían
acercarse a Tí, hablarte y estar contigo!” Y Jesús:
“Ah, hija mía, la verdadera felicidad la da mi
Voluntad. Sólo ella mete todos los bienes en el alma
y, poniéndose como corona en torno al alma, la
constituye reina de la verdadera felicidad. Sólo esas
"180
LA RESURRECCION DE JESUS EN LOS ESCRITOS
almas serán reinas de mi trono, porque son fruto de
mí Querer.
Tanto eso es verdad, que aquella gente no fue
feliz; muchos me vieron, pero no me conocieron,
porque mi Querer no residía en ellos como centro
de vida; por tanto, a pesar de que me vieron,
siguieron siendo infelices, y sólo los que tuvieron el
bien de recibir en sus corazones la semilla de mi
Querer se dispusieron a recibir el bien de verme
resucitado. Ahora bien, el portento de la Redención
fue mi Resurrección, que más que un fúlgido sol
coronó a mi Humanidad, haciendo resplandecer
hasta mis más pequeños actos con tal gloria y
maravilla que asombra Cielo y tierra, y que será
principio, fundamento y cumplimiento de todos los
bienes, corona y gloria de todos los
bienaventurados. Mi Resurrección es el verdadero
sol que glorifica dignamente a mi Humanidad, es el
sol de la religión católica, es la verdadera gloria de
todo cristiano. Sin la Resurrección habría sido
como el cielo sin sol, sin calor y sin vida.
Pues bien, mi Resurrección representa a las
almas que formarán la santidad en mi Querer. Los
santos de los siglos pasados están representados
por mi Humanidad, los cuales, aunque resignados,
no han tenido un acto continuo en mi Querer, por
tanto no han recibido la huella del sol de mi
Resurrección, sino la huella de las obras de mi
Humanidad antes de la Resurrección.
"181
LA RESURRECCION DE JESUS EN LOS ESCRITOS
Por eso serán muchos: a modo de estrellas
formarán un hermoso ornamento al cielo de mi
Humanidad. Pero los santos del vivir en mi Querer,
que representarán a mi Humanidad resucitada,
serán pocos. De hecho mi Humanidad, antes de
morir, mucha gente, muchas personas la vieron,
pero pocos vieron mi Humanidad resucitada, sólo
los creyentes, los más dispuestos, podría decir que
sólo aquellos que tenían la semilla de mi Querer,
porque si no la hubieran tenido les habría faltado la
vista necesaria para poder ver mi Humanidad
gloriosa y resucitada y ser por tanto espectadores
de mi Ascensión al Cielo.
Por tanto, si mi Resurrección representa a los
santos del vivir en mi Querer –y con razón, porque
cada acto, palabra, paso, etc. que se hace en mi
Querer es una resurrección divina que recibe el
alma, es una huella de gloria que recibe, es salir de
sí misma para entrar en la Divinidad, y el alma,
escondiéndose en el fúlgido sol de mi Querer, ama,
obra, piensa–, ¿qué tiene de extraño que el alma
quede enteramente resucitada, se haga una sola
cosa con el mismo sol de mi Gloria y represente a
mi Humanidad resucitada? Pero pocos son los que
se disponen a eso, porque en la misma santidad las
almas quieren algo para su propio bien, mientras
que la santidad de vivir en mi Querer no tiene nada,
nada de propio, sino todo de Dios. Y que se
dispongan las almas a eso, a despojarse de sus
propios bienes, es demasiado pedir; por eso no
"182
LA RESURRECCION DE JESUS EN LOS ESCRITOS
serán muchas. Tú no formas parte del número de
los muchos, sino de los pocos; por eso sé siempre
atenta a la llamada y a tu vuelo continuo”.
Vol. 15 02.4.1923
“Hija mía, cuánta luz, cuánta gloria tuvo
mi Humanidad en mi Resurrección, porque durante
toda mi vida en este mundo no hice más que poner
dentro de cada acto, respiro, mirada, en todo, la
Voluntad Suprema, y a medida que la ponía dentro,
así el Querer Divino me preparaba la gloria, la luz en
mi Resurrección. Y estando en Mí el mar inmenso
de la luz de mi Voluntad, no es de extrañar que si
miro, si hablo, si me muevo, salga tanta luz de Mí
que puedo dar luz a todos. Por tanto quiero
encadenarte y arrollarte en esta luz, para sembrar
en tí tantas semillas de resurrección por cuantos
actos vas haciendo en mi Voluntad. Ella es la única
que hace resucitar el alma y el cuerpo a la gloria, es
semilla de resurrección a la gracia, semilla de
resurrección a la más alta y perfecta santidad,
semilla de resurrección a la gloria.
Así que, a medida que el alma va haciendo
sus actos en mi Querer, absorbe nueva luz divina,
porque mi Querer por naturaleza es luz, y quien vive
en El tiene el poder de transformar los
pensamientos, las palabras, las obras y todo lo que
hace en luz”.
"183
LA RESURRECCION DE JESUS EN LOS ESCRITOS
“Hija mía, mi Resurrección completó,
confirmó, me devolvió todos los honores y llamó a
la vida a todas las obras que hice durante mi Vida
en la tierra, y formó la semilla de la resurrección de
las almas e incluso de los cuerpos en el Juicio
universal. De modo que sin mi Resurrección, mi
Redención habría quedado incompleta y mis obras
más bellas habrían quedado sepultadas.
Igualmente, si el alma no resucita del todo en mi
Voluntad, todas sus obras quedan incompletas, y si
nota el frío respecto a las cosas divinas, si la
oprimen las pasiones, si la tiranizan los vicios,
formarán la sepultura en que la enterrarán, pues
faltando la vida de mi Voluntad, faltará quien haga
resurgir el fuego divino, faltará quien haga morir de
un solo golpe todas las pasiones y haga resucitar
todas las virtudes. Mi Voluntad es más que un sol
que eclipsa todo, que fecunda todo, que convierte
todo en luz y forma la completa resurrección del
alma en Dios”.
"184
LA RESURRECCION DE JESUS EN LOS ESCRITOS
como Adán se veía con esa vestidura de luz
fulgidísima.
Se equivocan los que dicen que Adán, antes
de pecar, iba desnudo; falso, falso. Si todas las
cosas creadas por Nosotros están enteramente
adornadas y vestidas, él, que era nuestra joya, el
destinatario para el que todas las cosas fueron
creadas, ¿no tenía que tener la vestidura más bella
y el ornamento más hermoso? Por eso, era
decoroso que tuviera la bella vestidura de la luz del
Sol de nuestra Voluntad, y poseyendo esta
vestidura de luz, no necesitaba ropas materiales
para cubrirse. Pero en el momento que se salió del
‘FIAT’ Divino, la luz se retiró del alma y del cuerpo y
perdió su bella vestidura, y al no verse ya rodeado
de luz, se sintió desnudo. Y avergonzándose al
verse desnudo él sólo en medio a todas las cosas
creadas, sintió la necesidad de cubrirse y se sirvió
de lo superfluo de las cosas creadas para cubrir su
desnudez.
Tan cierto es, que después de mi sumo dolor
al ver divididas mis vestiduras y sorteada mi túnica,
al resucitar mi Humanidad no tomé otras vestiduras,
sino que me vestí con la vestidura fulgidísima del
Sol de mi Querer Supremo. Era la misma vestidura
que tenía Adán cuando fue creado, porque para
abrir el Cielo mi Humanidad tenía que ir vestida con
la luz del Sol de mi Querer Supremo, vestidura real
que, dándome las insignias de Rey y el dominio en
mis manos, abrió el Cielo a todos los redimidos. Y
"185
LA RESURRECCION DE JESUS EN LOS ESCRITOS
presentándome ante mi Padre Celestial, Le ofrecí
las vestiduras íntegras y bellas de su Voluntad, con
que estaba cubierta mi Humanidad, para hacer que
reconociera como hijos nuestros a todos los
redimidos. Así que mi Voluntad, mientras es vida, es
a la vez la verdadera vestidura con que fue creada la
criatura, y por eso tiene todo el derecho a Ella;
¿pero cuánto no hace para rehuir de esa luz? Por
eso, tú mantente firme en este Sol del Eterno ‘FIAT’
y Yo te ayudaré a que te mantengas en esta luz”.
Entonces yo, al oír eso, le he dicho: “Jesús mío y
todo mío, ¿cómo? Adán en el estado de inocencia no
necesitaba vestiduras, porque la luz de tu Voluntad era
más que vestidura, mientras que la Reina Soberana
poseía íntegra tu Voluntad y Tú mismo eras esa misma
Voluntad, y sin embargo ni la Mamá Celestial ni Tú
llevabais vestiduras de luz, y los dos os servisteis de
ropas materiales para cubriros; ¿cómo es eso?” Y
Jesús ha proseguido:
“Hija mía, tanto Yo cuanto mi Madre vinimos a
hermanarnos con las criaturas, vinimos a levantar a
la humanidad decaída, y por tanto a tomar las
miserias y humillaciones en que había caído, para
expiarlas a costa de nuestra vida. Si nos hubieran
visto vestidos de luz, ¿quién se habría atrevido a
acercarse a tratar con Nosotros? Y durante mi
Pasión, ¿quién se habría atrevido a tocarme? La luz
del Sol de mi Querer los habría cegado y derribado
al suelo; por tanto tuve que hacer un milagro más
grande, ocultando esta luz en el velo de mi
"186
LA RESURRECCION DE JESUS EN LOS ESCRITOS
Humanidad, mostrándome como uno de ellos.
Porque mi Humanidad representaba, no a Adán
inocente, sino a Adán caído, y por tanto me tenía
que someter a todos sus males, tomarlos sobre Mí
como si fueran míos, para expiarlos ante la Divina
Justicia. Por el contrario, cuando resucité de la
muerte, representando a Adán inocente, el nuevo
Adán, hice cesar el milagro de tener ocultas en el
velo de mi Humanidad las vestiduras del fúlgido Sol
de mi Querer y quedé vestido de luz purísima, y con
esta vestidura real y deslumbradora hice mi entrada
en mi Patria, quedando las puertas abiertas, pues
hasta ese momento habían estado cerradas, para
hacer entrar a todos aquellos que me habían
seguido. Por tanto, no haciendo nuestra Voluntad,
no hay bien que no se pierda, no hay mal que no se
adquiera”.
"187
LA RESURRECCION DE JESUS EN LOS ESCRITOS
en virtud de este germen encerrado en mí todos
tendrán el bien de poder resucitar de la muerte.
Quien hace el primer acto debe tener tal virtud de
encerrar en si todos los otros actos que deben
hacer las otras criaturas, de modo que en virtud del
primer acto los otros puedan imitar y hacer el
mismo acto. Cuánto bien no trajo la resurrección
de mi Humanidad dando el derecho a todos de
resucitar! Para el hombre, porque se había
apartado de mi Voluntad, gloria, felicidad, honores,
todo le había fracasado, había roto el anillo de
conjunción, que uniéndolo con Dios le daba los
derechos de todos los bienes de su Creador. Y mi
Humanidad al resucitar junta el anillo de unión,
restituyéndole los derechos perdidos, dándole la
virtud de resucitar. Toda la gloria, todo el honor es
de mi Humanidad; si Yo no hubiese resucitado
ninguno podía resucitar. Con el primer acto vienen
las sucesiones de los actos parecidos al primero.
¿Ves qué cosa es la potencia de un acto primero?
Mi Madre Reina hizo el primer acto de concebirme;
Ella para poder concebirme, Verbo Eterno,
encerraba en sí todos los actos de las criaturas para
corresponder a su Creador de modo de poderle
decir: "Soy yo quien te amo, te adoro, te satisfago
por todos". Por lo cual encontrando a todos en mi
Mamá de manera que fuesen uno, fue una mi
Concepción pude darme a todos como vida de cada
criatura.
"188
LA RESURRECCION DE JESUS EN LOS ESCRITOS
Así tu hija, al hacer tus primeros actos en mi
Voluntad, otorgas las otras criaturas el derecho de
entrar en Ella y repetir los actos tuyos para recibir
los mismos efectos. Cuan necesario es que
también uno solo haga el primer acto! Porque esto
sirve más abrir la puerta, para preparar las materias
primas para formar el modelo para dar vida a aquel
acto. Cuando el primero es hecho, a los otros les
resulta más fácil imitarlos. Esto sucede también en
el bajo mundo: quien es en primer a formar un
objeto debe trabajar más, sacrificarse más, debe
preparar todas las materias que se requieren, debe
hacer tantas pruebas y cuando el primero está
hecho, no solo adquieren el derecho de poderlo
hacer los otros sino que a ellos les resulta más fácil
repetirlo. Pero toda la gloria es de quien ha hecho
el primero, porque si no fuese hecho el primero, los
otros actos parecidos nunca podrían existir. Por
eso estés atenta a formar tus primeros actos, si
quieres que el Reino del Fiat Divino venga a reinar
sobre la tierra".
Después de esto estaba fundiéndome en el
Santo Querer Divino volviendo a llamar a todos los
actos de las criaturas, para que todos resurgieran en Él
y mi dulce Jesús me ha dicho:
"Hija mía, que gran diferencia ocurre entre un
acto hecho en mi Voluntad y un acto también bueno
hecho fuera de Ella; en el primero corre una vida
divina dentro de él, y esta vida llena el cielo y la
tierra y aquel acto recibe el valor de una vida divina,
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LA RESURRECCION DE JESUS EN LOS ESCRITOS
en el segundo corre un acto de vida humana y este
es limitado, restricto, tanto que muchas veces su
valor acaba al acabar el acto y si hay valor dentro,
es valor humano sujeto a perecer".
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Para venir mi Reino sobre la tierra, primero debía
hacerlo conocer, debía hacer saber que quiere venir a
reinar y Yo así como un hermano mayor de la familia
humana, estoy haciendo todas las diligencias en el
Cielo junto de la Divinidad para darle una adquisición
tan grande. Por lo tanto era necesario que yo subiese
al Cielo con mi Humanidad glorificada, para poder
readquirir de nuevo el Reino de mi Fiat para mis
hermanos e hijos míos"
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LA RESURRECCION DE JESUS EN LOS ESCRITOS
Querer, no salgas jamás, si quieres ser nuestro
triunfo y nuestra gloria".
28° día
La Reina del Cielo en el Reino de la Divina
Voluntad. El Limbo. La expectación. La victoria
sobre la muerte. La Resurrección.
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conquistas, la gloria para Jesús y para todos
aquellos que lo amaban. Esto querida hija es
símbolo de que en cuanto la criatura hace morir su
voluntad con la unión de la Voluntad Divina,
comienzan las conquistas en el Orden Divino, la
Gloria, la Alegría, incluso en medio de los más
grandes dolores.
Por tanto, en vista de que los ojos de mi alma
siguieron a mi Hijo, jamás lo perdí de vista, tampoco
en los tres días que estuvo sepultado; Yo sentía tal
ansia de verlo resucitado que iba repitiendo en mi
ímpetu de amor: “Resucita Gloria mía, resucita Vida
mía” Mis deseos eran ardientes, mis suspiros de
fuego, hasta hacerme sentir consumir.
Ahora, en estas ansias vi que mi querido Hijo,
acompañado de aquella gran turba de gente salió
del Limbo triunfante y se la llevó al sepulcro. Era el
alba del tercer día, y así como toda la naturaleza lo
lloró, así ahora se alegraba tanto, que el sol anticipó
su curso para estar presente en el momento en que
mi Hijo resucitaba. Pero, ¡Oh! maravilla, antes de
resucitar hizo ver a aquella turba de gente su
Santísima Humanidad Sangrante, Llagada,
Desfigurada, cómo había quedado reducida por
Amor de ellos y de todos. Todos se conmovieron y
admiraron los excesos de Amor y el grande
portento de la Redención.
Ahora hija mía, ¡Oh! cómo te quisiera
presente en el acto en que Resucitó mi Hijo, Él era
todo Majestad, su Divinidad unida a su Alma
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LA RESURRECCION DE JESUS EN LOS ESCRITOS
manaba mares de Luz y de Belleza encantadora, de
llenar Cielo y tierra, y como Triunfador, haciendo
uso de su Poder, ordenó a su muerta Humanidad
que recibiera de nuevo su Alma y que resucitara
triunfante y gloriosa a la vida inmortal. ¡Qué acto
tan solemne! Mi querido Jesús triunfaba sobre la
muerte diciendo: “Muerte, tu no serás más muerte,
sino Vida.”
Con este acto de triunfo ponía el sello de que
era Hombre y Dios, y con su Resurrección
confirmaba el Evangelio, los Milagros, la Vida de los
Sacramentos y toda la Vida de la Iglesia, y no sólo
esto, sino que daba el triunfo sobre la voluntad
humana debilitada y casi extinta en el verdadero
bien, de hacer triunfar sobre ellas la Vida del Querer
Divino, que debía llevar a las criaturas la plenitud de
la santidad y de todos los bienes, y al mismo tiempo
arrojaba, en virtud de su Resurrección, el germen
en los cuerpos de resucitar a la gloria
imperecedera. Hija mía, la Resurrección de mi Hijo
encierra todo, dice todo, confirma todo y es el acto
más solemne que Él hizo por amor de las criaturas.
Ahora escúchame hija mía, te quiero hablar
como Mamá que ama mucho a su hija. Quiero
decirte qué significa hacer la Voluntad Divina y vivir
de Ella y el ejemplo te lo damos mi Hijo y Yo.
Nuestra Vida estuvo rociada de penas, de pobreza,
de humillaciones, hasta ver morir de penas a mi
amado Hijo, pero en todo esto corría la Voluntad
Divina. Ella era la vida de nuestras penas, y
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LA RESURRECCION DE JESUS EN LOS ESCRITOS
Nosotros nos sentíamos triunfantes y
conquistadores, de cambiar la misma muerte en
vida. Tanto es así, que al ver el gran Bien,
voluntariamente nos ofrecíamos a sufrir, porque
estando en Nosotros la Divina Voluntad ninguno se
podía imponer sobre Ella ni sobre Nosotros. El
sufrir estaba en nuestro poder y lo llamábamos
como alimento y triunfo de la Redención, para
poder llevar el bien a todo el mundo entero.
Ahora hija querida, si tu vida, tus penas
tuvieran por centro de vida la Divina Voluntad, está
cierta que el dulce Jesús se servirá de ti y de tus
penas para dar ayuda, Luz, Gracia a todo el
Universo. Por eso ánimo, la Divina Voluntad sabe
hacer cosas grandes donde Ella reina, y en todas
las circunstancias mírate en Mí y en tu dulce Jesús
y camina adelante”.
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CITAS EN VOLUMENES
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