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El libro ‘Ver lo que veo’ de Roberto Burgos Cantor expone un monólogo interior

que recuerda a veces a algunos fragmentos de ‘Cien años de soledad’, narra


algunas vicisitudes por las que pasan algunos habitantes del Caribe ¿? , tiene
algunos recursos estilísticos como el hecho de formular una pregunta en la que no
hay ninguna cuestión, simplemente abrir y cerrar de los signos de interrogación, la
narración es bastante frenética por momentos, bastante vertiginosa, reflexiones y
narraciones de la diaria existencia.
Uno de los aspectos narrativos de Roberto Burgos Cantor se asemeja a ‘La ciudad
y los perros’ en el sentido de que los capítulos referidos a una historia, a una línea
narrativa se cortan con otros hilos de diferentes narraciones. En cuanto a la
inserción de canciones en el libro como ‘como me compongo yo el día de hoy,
como me compongo yo el día de mañana’ se parece a las inserciones musicales
de Andrés Caicedo en ‘Qué viva la música’. El capítulo del boxeador es de una
persona que no ha cumplido la mayoría de edad.
Las escenas eróticas que se narran en ‘Ver lo que veo’ de Roberto Burgos Cantor
se asemejan a las escenas de ‘Cien años de soledad’ (una de las últimas) en la
que describen a una persona que tiene sexo con una mujer que me acuerdo salía
de ducharse; asimismo recuerda las narraciones del poeta cuando habla de sexo
en ‘La ciudad y los perros’
En el libro de Albert Camus hay una algunos comentarios del personaje referido a
Jesucristo y la manera en cómo las personas creen, algunas de las palabras que
él dijo, incluyendo la que le dijo a Pedro, cuando dijo que iba a construir la Iglesia
sobre una piedra.

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