1

Índice

Introducción…………………………………………………………………………………………4

¿Por qué este libro?.............………………………………………………………………………6

El duelo…...…………………………………………………………………………………………7

Tareas para procesar el duelo……………………………………………………………………12

Qué herramientas utilizar para procesar el duelo…………………...………………………...15

Herramientas prácticas para procesar el duelo…………………..….………………………..17

Bibliografía…………………………………………………………………………………………31

Anexos……………………………………………………………………………………………..32

2
Si quieres, en verdad, contemplar el espíritu de la muerte,
abre de par en par tu corazón en el cuerpo de la vida.
Porque la vida y la muerte son una,
así como el río y el mar
son uno también.
Khalil Gibran

3
 Herramientas prácticas para procesar el duelo

Introducción

La muerte es un proceso natural de la vida; es un acontecimiento trascendental al que nos

dirigimos todos sin ninguna excepción. Pero cuando pasa de cerca, llevándose a uno de nuestros seres
queridos, suscita las emociones, sentimientos y pensamientos más dolorosos, fragmentando de golpe
nuestra identidad.

En este libro se hace una propuesta de recopilación de consejos y actividades que puede
realizar una persona que ha pasado por la dolorosa pérdida de un ser querido. Busca ofrecer recursos
prácticos que ayuden al doliente a transitar de la mejor manera posible las diferentes etapas que
constituyen un duelo.

Para ello se comenzará por definir qué es el duelo y cuáles son sus etapas con base en la
propuesta de Elisabeth Kübler-Ross, quien es pionera en el estudio de la tanatología. También se
exponen las dimensiones del ser humano que son afectadas (cognitiva, física, social, emotiva, espiritual
y conductual) para luego explicar las cuatro tareas necesarias para resolver eficientemente un duelo,
las cuales son aceptar y reconocer que la pérdida es una realidad, expresar el dolor y todas las
emociones implicadas, aprender y adaptarse a vivir sin la presencia de la persona y finalmente
recolocar emocionalmente al fallecido y continuar viviendo. La experiencia dolorosa por la pérdida de
una persona, si se maneja apropiadamente, puede constituir un aprendizaje invaluable, y como dice el
poeta inglés Robert Browning: la muerte, con la potencia de un rayo de sol, toca la carne y despierta el
alma.
Los ejercicios y actividades que se proponen buscan hacer conscientes las diferentes etapas
del duelo, en las cuales se manejan las emociones y los apegos del paciente, hasta llegar a la
aceptación del acontecimiento. Desde el ámbito de la psicología, existen varias técnicas y estrategias
que han resultado útiles para facilitar el proceso del duelo. Para las primeras tareas del duelo se
proponen ejercicios de carácter expresivo, es decir, buscan promover la descarga de emociones
provocadas por el duelo, incluidas la tristeza, la ira, la culpa, etc. Posteriormente los ejercicios buscan
la reflexión y la racionalización para después poder integrar lo que el doliente siente con lo que piensa
acerca de la situación que le tocó vivir. Lo que se pretende con este trabajo es facilitar a que un doliente
afronte el duelo, y que mediante los ejercicios se desbloqueen aquellos sentimientos y emociones que

4
pudieran estar reprimidos y que sus pensamientos poco a poco se vayan restaurando y reestructurando.

Además de las propuestas de ejercicios y consejos en cada una de las tareas para procesar el
duelo, se exponen algunos ejercicios de relajación y meditación que pueden ser utilizados en todo
momento, con la finalidad de calmar la mente y reducir el estrés.

Es importante recordar que la medida del mejor aprendizaje para manejar las pérdidas en
nuestras vidas será la medida de nuestra salud (física, mental y emocional) y felicidad y este desafío
empieza enfrentando las pérdidas como lo que son, una parte normal de la vida, de la cual no se debe
evitar hablar (Bucay, 2011).

5
 ¿Por qué este libro?

Ante la pérdida de un ser querido, el doliente se enfrenta a un proceso arduo y doloroso, que ya
muchos autores han catalogado como las etapas del duelo (principalmente Kubler-Ross). Cada
persona sufrirá su pérdida de una manera diferente, a su propio ritmo y con sus propios recursos; sin
embargo, se deben realizar cuatro tareas para resolver el duelo: 1) aceptar y reconocer que la pérdida
es una realidad, 2) expresar el dolor y todas la emociones implicadas, 3) aprender y adaptarse a vivir
con la ausencia de la persona amada y 4) recolocar emocionalmente al fallecido y continuar viviendo
(Worden, 1997).

Annie Broadbent, en su libro “Hablemos de la muerte”, narra distintas experiencias de personas

que perdieron a algún ser amado, y cómo es que manejaron el duelo. Lo que podemos notar mediante
estas historias, es que lo que para algunos puede ser reconfortante en esos momentos difíciles del
duelo, como por ejemplo un abrazo, para otros puede experimentarse como una invasión a su sensible
privacidad. Cada pérdida se vive de una manera única, por lo que habrá ejercicios que algunos
consideren imposibles, inútiles o difíciles, y en este sentido cabe señalar que los ejercicios son
sugerencias con un sustento teórico, y cada quien puede realizar los que mejor se ajusten a sus
necesidades.

Para una persona que ha sufrido una pérdida importante, puede resultar una dificultad buscar
un apoyo psicológico o tanatológico, ya sea por razones económicas o por falta de iniciativa propia
debido al momento por el que está pasando. El presente proyecto busca ofrecer recursos prácticos
que ayuden al doliente a transitar de la mejor manera posible las diferentes etapas del duelo.
Un mito muy generalizado es que el tiempo lo cura todo; sin embargo eso no siempre es así, se
requiere de aceptar el dolor, de tener el valor de sufrirlo y luego, con el tiempo y con esfuerzo, trabajo
y voluntad reconstruir otra vez el sentido de nuestras vidas. Dejárselo todo al tiempo sería como
abandonarse en las manos del “destino”. El duelo es una reacción ante la muerte de un ser querido
cuya elaboración no depende tanto del paso del tiempo, sino del trabajo que se realice por resimbolizar
el mundo ante una pérdida, lo cual también va a depender del contexto, de los significados del doliente,
así como de su personalidad y recursos con los que se apoye.

El objetivo de este trabajo es contribuir a que las personas que han sufrido una pérdida, puedan
echar mano de distintas herramientas que les permitan trabajar mejor el duelo, y que a través de estos
ejercicios puedan aprovechar de una mejor manera todos sus recursos emocionales, conductuales,
espirituales, cognitivos y creativos que les permitan superar el dolor pérdida.
6
 El duelo

Osho (2004) señala que desde el momento del nacimiento, la muerte ha empezado a acercarse
a nosotros, nos hemos empezado a mover hacia la muerte. En cada momento perdemos: perdemos la
infancia, amistades, el amor, el trabajo, la salud, la estabilidad; y cada pérdida significa una ganancia,
un aprendizaje que supone un crecimiento y una nueva forma de entender la vida.

Sin duda, entre las pérdidas más dolorosas se encuentra la de un ser querido. Montoya
Carrasquilla (2008) lo describe fielmente: "En ninguna otra situación como en el duelo, el dolor
producido es total: es un dolor biológico (duele el cuerpo), psicológico (duele la personalidad), social
(duele la sociedad y su forma de ser), familiar (nos duele el dolor de otros) y espiritual (duele el alma).
En la pérdida de un ser querido duele el pasado, el presente y especialmente el futuro. Toda la vida en
su conjunto, duele". Irvin Yalom (1984) señala que el duelo es tan devastador y aterrador, porque
confronta a la persona con los cuatro conflictos básicos de la existencia: la muerte, la libertad, la soledad
y la falta de significado.

Cada persona vive y enfrenta el duelo de una manera distinta, así como somos individuos únicos
e irrepetibles, así también el proceso de duelo lo va a vivir cada quien a su manera, y va a depender
de diferentes factores como la personalidad, la capacidad de respuesta, la relación que tenía con la
persona fallecida, la forma y las circunstancias en las que se fue el ser querido, la red social de la que
disponga el doliente, etc.

Sin embargo, diferentes autores, a través de la experiencia, han clasificado el duelo en varias
etapas. Kübler-Ross (2010), quien sentó las bases de la tanatología, a lo largo de su carrera habló
sobre la muerte, el acto de morir, los cuidados paliativos y las etapas por las que transitamos ante la
pérdida. Ayudó a muchas familias y pacientes terminales a enfrentar este periodo inevitable de la vida:
el morir. Para Kübler-Ross al fallecer una persona, sus familiares y personas más allegados
experimentaban varias fases, entre las que se encuentran la negación, la ira, la negociación, la
depresión y la aceptación, tal como se exponen en la tabla siguiente; aunque se incluye en un cuadro
aparte la culpa, por ser una emoción fuertemente arraigada en nuestra cultura.

Es importante aclarar que estos ciclos no se desencadenan de manera lineal, es decir uno tras
otro, ni tienen una duración de tiempo determinado, sino que cada individuo los va ir transcurriendo con
avances, saltos, retrocesos y pausas.

7
 Tabla 1
Etapas del duelo

Fases Síntomas Reacciones

Negación: Se caracteriza por un
estado de choque, en donde la
primera reacción es el rechazo y
la incredulidad, que puede llegar
hasta la negación.
Ira: La rabia inunda todo a su
alrededor, pues su autoestima
fue arrasada por la realidad de la
pérdida.
Aturdimiento, confusión, ¡No, no es verdad! Parece que le
insensibilidad, impacto, estrés, veo. ¡Estoy como en una nube!
problemas de memoria y ¡Todo es un mal sueño!
concentración, opresión en el
pecho, falta de aire, fatiga.
Coraje, envidia, resentimiento, ¡Por qué a mí! ¡Nadie me
agresión, irritabilidad, frustración, comprende! ¡No sabes cómo me
vulnerabilidad, trastornos del siento! ¡La vida es injusta!
sueño y alimentación.

Culpa: Autorreproches que el Derrotismo, pensamientos ¡Si me hubiera enterado antes de

doliente se hace por pensar que obsesivos, inseguridad, evasión, la enfermedad...! ¡Si no le
no hizo lo suficiente por su ser autocastigo, inferioridad, hubiera gritado…! ¡Si hubiera
querido. O bien, busca aislamiento, trastornos del sueño actuado de otra manera...! ¡A él
responsables externos por el y alimentación. no le gustaría que sufriera! o ¡Si
fallecimiento de la persona. no lo supero, no lo dejaré
descansar!
Negociación: Aparecen las Añoranza, pensamiento mágico, ¡Lo volveré a ver!, ¡Si me lo
ideas de negociar la realidad. Se inquietud, regateo, idealización devuelves, te prometo...!, ¡Si
piensa en hacer un trato con la del difunto. regresara, yo haría...!
vida, con Dios, o alguna otra
fuerza que le devuelva a su ser
querido. Es una conducta
defensiva que trata de evitar lo
inaceptable.
Depresión: Se distingue por un Miedo, angustia, llanto, ¡Estoy cansado de tanto
estado depresivo, suele ser la desconsuelo, tristeza, sufrimiento!, ¡Ya no puedo seguir
etapa de mayor duración. Se desesperación, desarraigo y de esta manera! ¿Cuál es el
alternan recuerdos de intenso apatía. sentido de continuar con mi vida?
dolor. La realidad comienza a o ¿Para qué seguir si ya no está
imponerse. conmigo?
Aceptación: Periodo de Integración, recuperación, Resignación ante la muerte: ¡No
restablecimiento, el sujeto tranquilidad, gratitud y amor. estoy ni deprimido ni animado!
comienza a mirar hacia el futuro, ¡Debo seguir adelante! ¡Te
se interesa por nuevos proyectos recordaré siempre, pero puedo
y es capaz de volver a sentir volver a mi vida!
nuevos deseos.

Fuente: Elaboración de la autora, con base en la información de Kübler-Ross (2010).

El duelo ante la pérdida de un ser cercano, se va a manifestar afectando las seis esferas de la
persona, lo que crea una desestructuración significativa. Las áreas afectadas son la cognitiva, física,
social, emotiva, espiritual y conductual (Iosu Cabodevilla citado por Nevado, 2005), como se
esquematiza en el siguiente gráfico.
8
 Gráfico 1
Dimensiones afectadas por el duelo

Dificultad para concentrarse, confusión, embotamiento mental,

ideas repetitivas, olvidos frecuentes, alucinaciones, alteraciones
del estado de ánimo, preocupaciones, etc.

Malestar fisiológico, como taquicardia, episodios de pánico o

asfixia, dolor de cabeza, insomnio, pérdida de apetito, pérdida de
fuerza física, sensación de inquietud, falta de deseo sexual, etc.

Sentimientos provocados por la pérdida como aturdimiento,

tristeza, enfado, rabia, culpa, miedo, ansiedad, soledad,
desamparo e impotencia, añoranza y anhelo, desesperanza,
abatimiento, sensación de abandono, histeria, sentimiento de
venganza, etc.

Se replantean las propias creencias y la idea de trascendencia. Se

formulan preguntas sobre el sentido de la muerte y de la vida. Se
puede poner en crisis una determinada visión de la fe o de la
filosofía de vida.

La persona en duelo se aísla, tiene escaso interés por la

participación social y sensación de no pertenencia.

El duelo puede llegar a generar alteraciones de conducta

importantes, como hiperactividad o inactividad, conductas de
búsqueda, implantación de hábitos nocivos: el uso y abuso del
consumo de alcohol, tabaco o medicamentos, dejar de comer o
comenzar a comer en exceso.

Cada una de las dimensiones que conforman al ser se ven afectadas, se resquebrajan y ya no
vuelven a ser las mismas ante la muerte de un ser amado. Pero ¿qué hacer con tanto dolor? Una
respuesta se encuentra en la logoterapia (corriente psicológica fundada por Víktor Frankl, quien fue
sobreviviente de los campos de concentración nazis), que plantea que el sentido del sufrimiento

9
humano tiene también la potencialidad maravillosa de manifestar, ante la mirada humana, una
dimensión de crecimiento, de desarrollo, de humanización, de fortaleza de espíritu que, a veces, las
más óptimas condiciones de vida no lograrían despertar en el ser humano (Frankl, 1989).

Se suele pensar que el sufrimiento es un mal que aqueja, que es estéril y no tendría razón de
ser; no obstante, comprender y afrontar conscientemente el sufrimiento da la oportunidad de
humanizarnos porque nos recuerda nuestra finitud y este recordatorio nos ayuda a evitar caer en la
esterilidad, la apatía, la rigidez o en el círculo vicioso de actitudes autocompasivas o autojustificantes
que nos evaden y alienan de nosotros mismos (Frankl, 1989).

En “La muerte enseña a vivir”, el autor destaca las conclusiones éticas del morir que
demuestran que cuando el ser humano se enfrenta a la muerte es capaz de seguir aprendiendo
(Bermejo, 2004):

 Que en nuestra vulnerabilidad hay grandeza.

 Que la comunicación auténtica es posible.
 Que el sentimiento mudo es más cruel.
 Que se puede integrar la muerte en nuestra vida.
 Que la muerte de la muerte nos mataría la vida.
 Que la ternura no tiene por qué ser síntoma de debilidad, sino de fortaleza.
 Que se puede ser protagonista en el morir en buena medida.
 Que la muerte enseña los valores importantes del vivir.
 Que la última palabra no la tiene la muerte, sino el amor que sobrepasa las fronteras del tiempo
y el espacio.
 Que dejarse querer es también conjugar el verbo amar.

El sufrimiento que deja una pérdida es sin duda devastador; no obstante, la mejor opción es
recorrer ese tortuoso camino a sabiendas de que tarde o temprano el dolor irá disminuyendo y que de
esa profunda herida quedará una cicatriz y una enseñanza de nuestra finitud humana. Bowlby (1983)
señala que antes o después, aquellos que evitan todo duelo consciente, sufren un colapso,
habitualmente con alguna forma de depresión, o peor aún con alguna adicción. Los riesgos de no
resolver un duelo son muchos y, como apuntan J. W. James y R. Friedman (2001), el dolor profundo y
lacerante por una pérdida importante puede cerrar el corazón de la persona, y con ello cerrarse a la
propia vida y a su dinamismo.

10
 La persona que ha sufrido la muerte de un ser amado tiene que ser consciente de que el camino
será largo, pero es preferible recorrerlo a evitarlo. En este sentido, la presente guía pretende ser una
herramienta de trabajo que facilite el camino al doliente; aunque es importante señalar que existen
duelos complicados y ambiguos que se distinguen por la intensidad y la duración de las reacciones en
el tiempo, en estos casos se recomienda apoyo profesional. El duelo complicado se produce cuando la
persona se ve superada por la pérdida, llevando consigo una ruptura de su equilibrio físico y psíquico.
Los duelos complicados pueden ser duelos pospuestos, exagerados, crónicos o enmascarados. El
duelo ambiguo aparece como consecuencia de la no presencia física del muerto, o porque el doliente
no puede cumplir con los rituales de la despedida (Worden, 1997).

Para Worden (1997) son cuatro las tareas que hay que realizar para elaborar de manera positiva
un duelo, como se verá a continuación.

11
 Tareas para procesar el duelo

Tarea I: Aceptar y reconocer que la pérdida es una realidad

Ante la muerte, la primera reacción de los seres queridos es la incredulidad, es decir, la

sensación de que no es verdad lo que está pasando. Esta actitud es normal, siempre y cuando no se
prolongue más allá de lo debido porque resulta perjudicial para los dolientes, ya que puede bloquear el
proceso de duelo.

Cuando se niega a reconocer la realidad de la pérdida, el doliente puede alimentar fantasías

como la de que el fallecido está de viaje y algún día regresará, por lo que puede dejar intactas sus
pertenencias y el espacio donde se movía (como su recámara o el lugar en la mesa); o bien, en
ocasiones sucede lo contrario, se niega el significado de la pérdida al minimizarlo y al acabar lo antes
posible con los recuerdos que lo unían a la persona fallecida, como deshacerse de todas sus
pertenencias repentinamente.

Otro mecanismo utilizado para no reconocer la pérdida es aferrarse a la idea de que la muerte
puede ser irreversible, y en este sentido recurrir al pensamiento mágico (pensar en supuestos erróneos
o sobrenaturales sin ningún fundamente racional o lógico) con la esperanza de reencontrarse con su
familiar perdido.

La primer tarea consiste en afrontar plenamente la realidad de que la persona está muerta y
que no volverá a estar más en este mundo, la negación puede amortiguar el dolor profundo, pero no
para siempre, es necesario aceptar la pérdida (tanto racional como emocionalmente) para poder
continuar el largo recorrido que aún le espera al doliente .

Tarea II: Expresar el dolor y todas las emociones implicadas

Cuando se evade, evita o suprime sentir dolor ante la pérdida de un ser querido,
desafortunadamente lo que se hace es que se prolongue en el tiempo, o bien que se manifieste
mediante algunos síntomas o conductas disfuncionales. Actualmente vivimos en una sociedad que
niega el dolor y el sufrimiento. La búsqueda del placer, de la satisfacción instantánea, del culto a la
belleza y la juventud parecen ser los signos característicos de estos tiempos; por lo que sentir dolor no
está permitido, pues incomoda y puede confrontar a la sociedad. Por ello, se buscan salidas en
12
apariencia más fáciles como negar el dolor, bloquearlo, distraerse con actividades frívolas, tratar de
sustituir inmediatamente la pérdida con alguien más, o en el peor de los casos, abusar de sustancias
dañinas como el alcohol, las drogas, o adquirir algún desorden alimenticio.

Transitar por esta etapa es crucial, es absolutamente sano abandonarse al dolor, sentirlo y
tocarlo. El vacío del dolor es real, y no es recomendable llenarlo con distracciones, pues así como llega,
algún día se irá, dejándonos experiencias y aprendizajes nuevos.

Junto con el dolor, aparecerán otras emociones como el coraje, la tristeza, la culpa o la
desesperanza. Todas ellas tendrán que permitirse y ser escuchadas para poder seguir en este arduo
proceso del duelo.

Tarea III: Aprender y adaptarse a vivir con la ausencia de la persona amada

Además de toda la avalancha de emociones y sentimientos por los que ha atravesado un

doliente, la siguiente etapa será aprender y adaptarse a vivir con la ausencia de la persona amada, lo
que implica cambiar identidades y asumir nuevos roles. Con la muerte del ser querido, también se
perdieron identidades: dejar de ser la madre, el hermano, la hija, el padre o la esposa, por lo que
también se tendrá la tarea de adaptarse a todos los cambios que ello implica, como por ejemplo,
comenzar a trabajar, educar solo o sola a los hijos, vivir sola, mudarse de casa, etc.

Las cargas y exigencias pueden ser muchas, por lo que puede resultar abrumador y se pueden
poner en duda los valores fundamentales de la vida, tal vez se cuestionarán las creencias filosóficas y
religiosas que han sido los pilares sobre los cuales se ha construido la vida.

La vida del doliente ha cambiado y habrá que darle un nuevo sentido, reajustando sus
pensamientos y conductas. En esta tarea pueden aflorar pensamientos de temor, inseguridad, e
inutilidad para salir adelante, ya que los nuevos roles, implicarán desarrollar nuevas habilidades .

Tarea IV: Recolocar emocionalmente al fallecido y continuar viviendo

Superar la pérdida de un ser querido no es olvidar, ni renunciar a esa persona, más bien significa

13
que el sobreviviente le encuentre un lugar en su vida, tanto emocionalmente, como psicológicamente
para que este recuerdo le permita seguir adelante. El dolor de la pérdida genera un bloqueo y un
colapso, crea una sensación de que la vida se detiene y el doliente puede llegar a pensar que jamás
se recuperará. Sin embargo, esta etapa ofrece la oportunidad de recolocar emocionalmente al fallecido
y continuar viviendo. En esta etapa conviene saber que una de las mejores maneras de honrar a los
muertos es buscar la propia felicidad. Si bien la persona que sufre una pérdida no volverá a ser la
misma, el dolor ya no ahoga y se puede recuperar el equilibrio y el bienestar: puede volver a disfrutar.

14
 Qué herramientas utilizar para procesar el duelo

El duelo es un proceso a largo plazo, y su culminación no será un estado como el que tenía el
doliente antes del mismo. No se trata de un proceso lineal. Puede reaparecer y se tendrá que volver a
trabajar.

Existen muchas estrategias de tratamiento del duelo, cada una de ellas busca hacer conscientes
las diferentes etapas del duelo hasta llegar a la aceptación del acontecimiento, en las cuales se
manejan las emociones y los apegos del paciente. Desde el ámbito de la psicología, existen varias
técnicas y estrategias que han resultado útiles para facilitar el proceso del duelo (Lacasta y García):

 Narrativa terapéutica como medio de externar los sentimientos, emociones y frustraciones que
se experimentan ante la pérdida de un ser querido.
 La utilización de fotos, videos e imágenes que puedan servir para la estimulación de recuerdos
y emociones tanto positivas como negativas: promueven la reconciliación y la despedida.
 La reestructuración cognitiva como estrategia psicológica que ayuda a cambiar los
pensamientos desadaptativos por otros más adaptativos.
 Las autoinstrucciones positivas o mensajes que la persona se da a si misma para facilitar el
enfrentamiento a situaciones difíciles.
 La resolución de problemas que ofrece una ayuda en la toma de decisiones.
 La técnica de detención del pensamiento resulta útil cuando éste resulta repetitivo e ineficaz en
la consecución de los objetivos del doliente.
 El manejo de contingencias como el refuerzo de conductas que se consideren adaptativas, la
extinción de las desadaptativas y el autorrefuerzo para adquisición de habilidades.
 Las técnicas de autocontrol favorecen la realización de programas de actividades agradables y
la planificación de la reintegración a las actividades de la vida diaria.
 El entrenamiento en habilidades sociales ayuda a conseguir un apoyo social efectivo.
 Las técnicas de relajación facilitan el manejo de las situaciones de ansiedad e insomnio.
 Visualización e imaginación de escenas temidas, como paso previo a la exposición in vivo.
 La biblioterapia utiliza la lectura de temas relacionados con la pérdida ofreciendo formas de
afrontamiento.
 La exposición repetida y graduada a estímulos evitados con el objetivo de disminuir o suprimir
la ansiedad.
 Tareas conductuales que ayuden a aumentar la realidad de la pérdida (como son los rituales).
15
  El arteterapia que utiliza el arte y el símbolo para modular las emociones. El símbolo es
transformador, tiene poder y un efecto sanador.
 Musicoterapia utiliza la música para facilitar la expresión de los sentimientos del doliente.
 También se consideraron algunas técnicas como la oración, la cual en sí misma no pertenece a
alguna religión en particular; más bien es un medio de contacto con lo superior y divino que está
tanto fuera como dentro de nosotros. Consiste en la expresión de ciertas plegarias dirigidas a
un Ser Superior (sea un Dios, el universo, la naturaleza, la humanidad, etc), desde el cual emana
la totalidad y todas las virtudes (Chávez, 2008).

En un primer momento, las técnicas propuestas son de carácter expresivo, es decir buscan
promover la descarga de emociones provocadas por el duelo, incluidas la tristeza, la ira, la culpa, etc.
Posteriormente los ejercicios buscan la reflexión y la racionalización para después poder integrar lo que
el doliente siente con lo que piensa acerca de la situación que le tocó vivir.

Si bien la siguiente propuesta no es una revisión exhaustiva de toda la bibliografía existente,

pretende ser una selección útil para aquellos que se encuentren pasando el dolor que representa la
pérdida de un ser querido. Como recomendación, es importante no exigirse demasiado, respetar el
propio ritmo de sanación y confiar en uno mismo por encima de todas las dificultades. Es bueno
recordar que como seres humanos estamos equipados emocional, fisiológica y psicológicamente para
enfrentar un duelo; somos más valientes y fuertes de lo que parecemos y, a final de cuentas, el duelo
es el precio que pagamos por haber amado a la persona que murió.

Además de las propuestas de ejercicios y consejos en cada una de las tareas para procesar el
duelo, se exponen algunos ejercicios de relajación y meditación que pueden ser utilizados en todo
momento, con la finalidad de calmar la mente y reducir el estrés.

16
 Herramientas prácticas para procesar el duelo

Tarea I
Aceptar y reconocer que la pérdida es una realidad

De momento no mejores
¿En qué consiste?
Ante la muerte de una persona cercana, hay suficientes motivos para estar deprimido (a), así que
por ahora no te esfuerces en ningún momento a sentirte bien, deja que fluyan todos los estados
emocionales por los que estés pasando. No niegues tus momentos de dolor intenso, no te
avergüences de perder el control, no tengas miedo de volverte loco, llora cuando tengas la necesidad
(Fisch y Schlanger, 2000).

¿Cuál es su finalidad?
A veces uno cree que una acción curativa de urgencia será la solución, pero lo recomendable es
dejar fluir todo tipo de sentimientos y pensamientos. Date permiso para sentirte mal, necesitado y
vulnerable.

Tu ritual
¿En qué consiste?
Asistir al velorio, el funeral y el entierro te permitirá reconocer la realidad de la pérdida. Si por alguna
razón no pudiste asistir al funeral, también puedes realizar tu propio ritual que simbolice la despedida,
como por ejemplo soltar un globo, echar una rosa al mar, poner velitas en su foto, llevar flores al
cementerio, o alguna otra idea que nazca de tu corazón y tus necesidades.

¿Cuál es la finalidad?
Evitar la negación y aceptar la muerte de la persona querida.

Cuida tu salud
¿En qué consiste?
Pasados los primeros días puede resultarte muy útil que te hagas un horario (hora de levantarte,
comidas, hora de acostarte, etc.) y lo sigas. Aliméntate bien y cuida tu cuerpo. No abuses del
tabaco, alcohol y/o tranquilizantes. Si padeces alguna enfermedad crónica no abandones los
cuidados habituales ni los tratamientos. Durante el proceso de duelo uno es más susceptibles de
sufrir enfermedades, así que ahora más que nunca necesitas de tus cuidados y del amor propio.
Caminar es muy recomendable, si puedes hacerlo al aire libre, mejor.

¿Cuál es la finalidad?
Cuidar en todo momento tu salud y evitar que las molestias físicas absorban la energía requerida
en el proceso del duelo.

17
 Duerme bien
¿En qué consiste?
Para facilitar el sueño evita bebidas, comida o medicaciones excitantes al menos seis horas antes
de acostarte; evita el alcohol y el tabaco; evita siestas durante el día. Intenta hacer ejercicio moderado
de forma regular, cena moderadamente y por lo menos dos horas antes de ir a la cama. Acondiciona
el dormitorio, si es posible cambia los muebles de lugar. Evita ver televisión.

¿Cuál es su finalidad?
Evitar que las molestias físicas absorban energía requerida en el proceso del duelo.

No te automediques
¿En qué consiste?
Si para ayudarte en estos momentos tienes que tomar algún medicamento, que sea siempre a
criterio de un médico y nunca por los consejos de familiares o amigos. Recuerda que lo más sano
es no bloquear el proceso del duelo.

¿Cuál es la finalidad?
Recuerda que tomar medicamentos para no sentir el dolor de la pérdida puede contribuir a hacer
más crónico el duelo.

Aplaza las decisiones importantes

¿En qué consiste?
Evita tomar decisiones apresuradas como vender la casa, dejar el trabajo o ir a vivir a otra ciudad,
ya que habrá confusión y poca claridad en tus pensamientos, por lo que más tarde podrías
lamentarlo. Tampoco suele ser conveniente iniciar una nueva relación afectiva (como una nueva
pareja u otro embarazo) mientras no hayas resuelto adecuadamente la pérdida.

¿Cuál es la finalidad?
No tomar decisiones incorrectas.

Objetos vinculares
¿En qué consiste?
Elige un objeto simbólico que te una a tu ser querido (si no lo tienes, puedes hacer un dibujo, un
poema o una escultura, etc.) Colócalo en un sitio visible de tu casa durante unos días y
posteriormente llévalo al lugar donde reposan los restos de tu ser querido. Dedícale unas palabras y
deja ahí el objeto que elegiste.

¿Cuál es su finalidad?
Ayuda a aceptar la realidad de la pérdida.

18
 Tarea II
Expresar el dolor y todas las emociones implicadas

Escribe una carta de reproche

¿En qué consiste?
Escribe una carta dirigida a la persona que has perdido para reprocharle el que se haya ido.
Puedes expresar tu malestar y frustración por su muerte, por lo que no se pudieron decir y por el
resentimiento que guardas de que ya nunca lo volverás a ver (Beyebach y Herrero, 2010).

¿Cuál es su finalidad?
Una persona en duelo puede estar detenida en una emoción de culpa, enojo o pérdida. Las cartas
pueden ayudar a separar los sentimientos.
Escribe una carta de amor
¿En qué consiste?
Escribe una carta dirigida a la persona que has perdido para decirle gracias por todo lo que recibiste
de ella (Neymeyer, 2002).

¿Cuál es la finalidad?
Ayuda a sacar y trabajar con las emociones del duelo de una manera creativa.

El libro de recuerdos
¿En qué consiste?
Esta actividad puedes realizarla con tu familia o con amigos. Realiza un libro de recuerdos con fotos,
historias, anécdotas y escritos, con el fin de elaborar una historia realista de la persona fallecida.
Cada miembro de la familia tiene que buscar fotos por separado y el día acordado presenten cada
quien sus fotos, explicando por qué quieren pegar esa foto en el álbum.

¿Cuál es su finalidad?
Compartir el dolor haciéndolo más llevadero y a la vez recordar o descubrir aspectos desconocido
de la persona fallecida. También puedes hacerlo de forma individual, o realizarlo con amigos.

Biografía musical
¿En qué consiste?
Graba un disco con las canciones o piezas musicales que te recuerden los momentos que
compartiste con tu ser querido, o la música que más le gustaba en las diferentes etapas de sus vidas.
Escucha el resultado final en un ambiente relajado y contemplativo.

¿Cuál es la finalidad?
Expresar las emociones que surjan en lugar de reprimirlas. La música reconforta el alma.

19
 Propuesta de canciones
¿En qué consiste?
En el anexo 1 se proponen canciones que hablen sobre el duelo y la muerte de un ser querido.

¿Cuál es la finalidad?
Dejar que fluyan las emociones y sensaciones de tristeza, enojo y dolor, ya que son normales en
esas circunstancias. También ayudan a comprender el dolor de una pérdida, por su lenguaje
evocador.

Propuesta de películas
¿En qué consiste?
En el anexo 2 se proponen películas que hablen sobre el duelo y la muerte de un ser querido.

¿Cuál es la finalidad?
Dejar que fluyan las emociones y sensaciones de tristeza, enojo y dolor, ya que son normales en
esas circunstancias. También ayudan a comprender el dolor de una pérdida.

Qué echas de menos y qué no

¿En qué consiste?
Haz una lista de las 10 cosas que echarás de menos de la persona fallecida y 10 cosas que no
echarás de menos, sin hacer juicios.

¿Cuál es su finalidad?
Continuar con el proceso de aceptación emocional y evitar la idealización.
Dibuja tus emociones

¿En qué consiste?

Haz un dibujo libre atendiendo estas indicaciones (Nazarevich):

Si estás cansado, dibuja flores.

Si estás enojado, dibuja líneas.
Si te duele algo, esculpe.
Si estás aburrido, llena una hoja de papel con colores diferentes.
Si estás triste, dibuja un arcoíris.
Si tienes miedo, teje macramé o elabora aplicaciones de telas.
Si sientes angustia, haz una muñeca de trapo.
Si estás indignado, rompe el papel en pedazos pequeños.
Si estás preocupado, practica origami.
Si estás tenso, dibuja patrones diferentes.
Si necesitas recordar algo, dibuja laberintos.
Si estás decepcionado, haz una réplica de una pintura.
Si estás desesperado, dibuja caminos.
Si necesitas restablecer las energías, dibuja paisajes.
Si quieres entender tus sentimientos, dibuja un autorretrato.
Si es importante recordar tu estado, dibuja manchas de colores.

20
 Si necesitas sistematizar tus pensamientos, dibuja celdas o cuadrados.
Si quieres entender tus deseos, haz un collage.
Si quieres concentrarte en tus pensamientos, dibuja usando puntos.
Para encontrar la solución óptima a una situación, dibuja olas y círculos.
Si sientes que estás estancado y necesitas seguir adelante, dibuja espirales.
Si quieres concentrarte en una meta, dibuja cuadrículas y un blanco.

¿Cuál es su finalidad?
Es una propuesta terapéutica de la psicóloga Victoria Nazarevich para dejar fluir emociones que
pudieran estar atoradas ante la pérdida de un ser querido.
Mandala
¿En qué consiste?
Un mandala es un diagrama simbólico que representa la totalidad, integración, orden, estructura y el
absoluto (ver anexo 3). Puedes hacer uno, o bien iluminarlo. En internet se pueden descargar diseños
desde los más sencillos hasta los más elaborados.

¿Cuál es la finalidad?
Armonizar el equilibrio entre la mente y el cuerpo. Genera balance y sanación ya que representa el
orden interior.

Dibuja un recuerdo feliz

¿En qué consiste?
Dibuja un recuerdo feliz con la persona fallecida, de preferencia que sea al aire libre. Al terminar
ponle un título, pero que sea con la mano no dominante.

¿Cuál es su finalidad?
Anima la expresión plena de emociones.

La máquina del tiempo imaginaria

¿En qué consiste?
Con tu imaginación, viaja al pasado hasta que encuentres un momento grato que hayas compartido
con la persona fallecida. Revive ese instante, recuerda los olores, las sensaciones, los ruidos y los
colores que envuelven ese momento.

¿Cuál es su finalidad?
Ayuda a expresar sentimientos.
Impacto positivo
¿En qué consiste?
Identifica aquello que siempre querrás recordar de tu ser querido. Recuerda un impacto positivo que
esa persona ha tenido sobre tu forma de ser, de pensar y de sentir ahora y en el futuro.

¿Cuál es su finalidad?
Indicado cuando tienes pocos recuerdos positivos de la persona fallecida.

21
 Silla vacía
¿En qué consiste?
En un ambiente solitario, coloca frente a frente dos sillas. Siéntate en una y en la otra coloca
imaginariamente a la persona recién fallecida. Imagina su postura, la forma en que va vestida, los
colores que utiliza y hasta el olor de su perfume. Habla directamente con ella acerca de los
pensamientos y sentimientos que tienes respecto a su muerte y a su relación. Para mantener el
diálogo con la persona fallecida, intercambia la silla en los momentos que creas necesarios con el
objetivo de facilitar la expresión de emociones y sentimientos. Al final del diálogo, cierra los ojos e
imagina que tu ser querido se acerca a ti y te da un abrazo con todo su amor (Gil, 2014)

¿Cuál es la finalidad?
Permite visualizar a tu ser querido y expresarle tus sentimientos escondidos para así movilizar las
fuentes y capacidades de la persona en duelo.

Termina la frase
¿En qué consiste?
En un ahoja de papel termina las siguientes frases incompletas:
El primer recuerdo que tengo de ti es...
Los mejores momentos que pasé contigo fueron...
Lo que más me gustaba de ti era...
Lo que menos me gustaba de ti era...
Cuando pienso en ti siento...
Lo que nunca te oí decir fue...
Lo que me gustaría poder decirte es...
Cuando más me decepcionaste fue...
El sentimiento de culpa o pensamiento que más me perturba de ti es...
Sé que estoy avanzando en mi proceso de duelo por...

¿Cuál es su finalidad?
Traer a flote los sentimientos que uno se calla, omite o hace.

Comparte tu historia
¿En qué consiste?
Una experiencia dolorosa se puede comparar con una carga. Comparte lo que has vivido con una
persona con la que te sientas en confianza, no importa el tiempo que tengas de conocerla.

¿Cuál es la finalidad?
La capacidad para compartir con otras personas los propios sentimientos e historias sobre la pérdida
tiene propiedades curativas.

22
 Tarea III
Aprender y adaptarse a vivir con la ausencia de la persona amada

Cinco objetos
¿En qué consiste?
Selecciona cinco objetos que pertenecían a la persona fallecida y que estén cargados de emoción.
Haz una pequeña redacción sobre por qué esos objetos son especiales. Guárdalos en un pequeño
recipiente o en una caja.

¿Cuál es la finalidad?
Elegir objetos representativos, lo que te permitirá más adelante ir soltando poco a poco todos los
objetos del ser querido, incluyendo la ropa.

Visualización
¿En qué consiste?
Cierra los ojos, adopta una postura cómoda dirige tu atención a la respiración. Imagina a tu ser
querido nítidamente, escucha su tono de voz, imagínalo con un rostro sereno e igual que tú, en una
postura cómoda. Ahora representa una escena con tu familiar y dile lo que no pudiste decirle, aclarar
una dificultad, despídete y exprésale tu afecto (Charles, 2016).

¿Cuál es la finalidad?
La fantasía guiada ayuda a despedirse de la persona que se ha ido.

Río
¿En qué consiste?
Busca un lugar tranquilo, sin que nadie te interrumpa. Cierra los ojos e imagina la vida de la persona
que has perdido como un río. Dale cuerpo a ese río de acuerdo a como fue tu ser querido, tal vez
sea ancho, caudaloso, profundo, intenso, turbulento, etc. Dibuja mentalmente su lugar de nacimiento,
sus orillas, su extensión, sus accidentes y sus colores. Imagina que esa persona amada desemboca
en el mar y comienza a mezclarse con el agua de otros ríos. Se transforma, se evapora y como gotas
de lluvia va a formar parte de un nuevo río (Greco, 2000).
¿Cuál es la finalidad?
La fantasía guiada ayuda a despedirse serenamente de la persona que se ha ido.
Grupos de autoayuda
¿En qué consiste?
Acércate a personas o grupos que hayan vivido una experiencia similar porque ellos favorecen la
aceptación de la realidad.

¿Cuál es la finalidad?
Un dolor compartido no es paralizante, sino movilizador. Permite la identificación del doliente con
otras personas que han pasado por experiencias similares.

23
 Internet
¿En qué consiste?
En internet cada vez hay más recursos para las personas en duelo, como “chats”,
cibercomentarios, asesorías en vivo y asociaciones sin fines de lucro.
¿Cuál es la finalidad?
Obtener información de calidad y compartir el dolor con personas que hayan sufrido una
experiencia similar.

Biografía
¿En qué consiste?
Trata de organizar tu biografía e incluye estas preguntas: ¿Cómo describirías tu vida antes, mientras
y después de la pérdida? (Nomen, 2007).

¿Cuál es su finalidad?
Proporcionar perspectiva a la pérdida, facilita una visión global y favorece nuevos puntos de vista.

Propuesta de frases
¿En qué consiste?
En el anexo 4 encontrarás frases sobre el duelo que te ayudarán a reflexionar sobre los momentos
que enfrentas.

¿Cuál es su finalidad?
Promueve el pensamiento y la reflexión sobre la situación que se vive.

Propuesta de libros
¿En qué consiste?
En el anexo 5 encontrarás algunas propuestas de libros que hablan sobre la pérdida de seres
queridos (Neymeyer, 2002).

¿Cuál es su finalidad?
Recurso útil para superar el duelo, ya que ofrece formas de afrontamiento.

La hora especial
¿En qué consiste?
Busca establecer momentos específicos para recordar a tu ser querido, una hora especial y más
adelante un día especial de la semana.

¿Cuál es su finalidad?
En una etapa avanzada de duelo busca parar los pensamientos y recuerdos persistentes y rumiantes
con la pérdida al delimitarlos a ciertos momentos.

24
 Epitafio
¿En qué consiste?
Escoge una frase o inscripción que refleje el significado de tu relación con el ser fallecido.

¿Cuál es su finalidad?
Es una expresión condensada de despedida al final, con gratitud, aprobación o perdón de la persona.

Simular el milagro
¿En qué consiste?
Imagina que sucede un milagro y que por arte de magia tus emociones y pensamientos de dolor
relacionados con la pérdida de tu ser querido se terminaron. Escribe el milagro en una hoja y actúa
por un día que como si el milagro hubiese sido real. Puedes simular un milagro una vez cada 15 días
o una vez a la semana. (Beyebach y Herrero, 2010).

¿Cuál es su finalidad?
Sirve para facilitar el paso a la acción.

La carta desde el futuro

¿En qué consiste?
Escribe a ti mismo una carta desde el futuro, veinte o treinta años más adelante. Has superado el
dolor de la pérdida y eres una versión mayor y más sabia de ti mismo. En esta carta, animas a la
persona actual (es decir a ti en estos momentos) y le cuentas cómo conseguiste salir adelante, qué
personas te ayudaron y qué cualidades personales supiste aprovechar (Beyebach y Herrero, 2010).

¿Cuál es su finalidad?
Ampliar la perspectiva temporal del doliente y generar expectativas de éxito. Además, los consejos
que te das a ti mismo desde el futuro puede ayudar a crear alternativas interesantes en el presente.

Tres abrazos al día

¿En qué consiste?
Regala tres abrazos a diferentes personas, que te infundan seguridad y confianza.

¿Cuál es la finalidad?
El abrazo es una de las mejores estrategias para la revitalización personal.

Tres gracias
¿En qué consiste?
Elige tres objetos de tu casa (cama, silla, algún objeto de tu cocina, etc.) y exprésales tu
agradecimiento a cada uno de ellos.

¿Cuál es su finalidad?
Sirve en aquellos momentos en que tengas ideas depresivas u obsesivas, ya que es un distractor
externo.

25
 Estar atentos a las excepciones
¿En qué consiste?
En este ejercicio se te pide que estés atento a los momentos en que te sientas tranquilo, desahogado,
contento y si es posible las anotes o contabilices (Beyebach y Herrero, 2010).

¿Cuál es su finalidad?
Esta tarea focaliza la atención y hace más visible la recuperación.

Cara o cruz
¿En qué consiste?
En las mañanas, lanza una moneda; si sale sol, realizarás un propósito que te hayas fijado (salir de
paseo, visitar a un amigo, buscar empleo, etc.) y si sale águila, puedes hacer lo que quieras.
(Beyebach y Herrero, 2010).

¿Cuál es su finalidad?
Facilita que el doliente lleve a la práctica las conductas que han descrito al hablar de sus objetivos o
sus planes de futuro.

Tarea IV
Recolocar emocionalmente al fallecido y continuar viviendo

Reflexión

¿En qué consiste?

Responde las siguientes preguntas:
¿Qué recuerdas de la forma en que reaccionaste ante la muerte de tu ser querido?
¿Cómo han cambiado tus sentimientos en este proceso?
¿Cuál fue para ti la parte más dolorosa de esta experiencia?
¿Cómo interpretas la pérdida ahora?
¿Qué lecciones sobre el amor has aprendido de esta experiencia?
¿Cómo ha influido esta experiencia en tu sentido de prioridades?
¿Cómo ha cambiado tu visión del mundo?

¿Cuál es su finalidad?
Favorecer la reconstrucción de significados.

26
 Consejo de experto
¿En qué consiste?
Escribe una carta dirigida a otras personas que puedan estar pasando por tu misma situación. En la
carta explica cómo te sentías cuando estabas mal y qué cosas has hecho que te han ayudado a
superar tu dolor (White, 1989).

¿Cuál es la finalidad?
Ayuda a que el doliente haga más consciente todos los recursos que ha puesto en marcha para
superar su pérdida y a la vez funciona como prevención de recaídas.
Viaje al pasado
¿En qué consiste?
Emprende un viaje a uno de los sitios preferidos o uno de los lugares con los que compartiste
momentos importantes con la persona fallecida. Valora si es importante ir solo o acompañado.

¿Cuál es su finalidad?
Traer a la memoria recuerdos y emociones que ayuden a ubicarse en la historia familiar. Recolocar
emocionalmente al fallecido.

Consulta con el sabio

¿En qué consiste?
Imagina que han pasado muchos años y que con el tiempo te has convertido en una versión más
vieja y más sabia de ti mismo. Responde a las siguientes preguntas (Yvonne Dolan, 2003):
¿Qué es lo que más disfrutas de tu existencia?
¿Hay algo que querrías no haber hecho?
¿Hay algo que querrías haber hecho?
¿Qué te gustaría que tus seres queridos recordaran más respecto a tu vida con ellos?

¿Cuál es la finalidad?
Repasar los aspectos de la vida del doliente, permitiéndole concretar qué cosas podría cambiar para
sentirse mejor consigo mismo. Hablar de una versión más sabia de la persona transmite un mensaje
de esperanza, ya que presupone que la persona, en efecto, va a ser más sabio en el futuro.

Post-it para ti
¿En qué consiste?
Pega 20 post-it por toda la casa con breves mensajes positivos para ti misma. Estos post-it pueden
subrayar tus fortalezas, tus anhelos, tus virtudes, etc. (Beyebach y Herrero, 2010).

¿Cuál es la finalidad?
Ayudar a recuperar el sentido de la propia identidad, fortalecer la autoestima y la confianza
necesaria en sí mismo.

27
 Tres gestos de bondad
¿En qué consiste?
Realiza tres actos de bondad como sonreír a la gente, ayudar a alguien a cruzar la calle, recoger
algo que se le ha caído a la persona de enfrente, etc.

¿Cuál es la finalidad?
Es un distractor y está indicado en situaciones en que el doliente se encuentre muy absorbido por
sus problemas y está constantemente reflexionando sobre el propio sufrimiento.

Visita de gratitud
¿En qué consiste?
Piensa en alguien al que tengas algo que agradecer, que te haya ayudado o que haya sido amable
o bondadoso contigo. Escríbele una carta a esta persona, explicándole cómo te han ayudado y el
impacto de su influencia, su conducta y su gratitud en ti. Queda con esa persona, léele la carta y
posteriormente regálasela.
¿Cuál es su finalidad?
Esta tarea promueve que el doliente amplíe su campo de visión y que incluso fortalezca sus
relaciones sociales.

La tarea del antropólogo

¿En qué consiste?
Dedica un tiempo a realizar una verdadera investigación sobre las personas que te rodean. ¿Qué es
lo que les hace sufrir? ¿Qué problemas tienen? ¿Hay algo que podría hacer para ayudarles?
(Nardone, 2004).

¿Cuál es su finalidad?
Esta tarea es un distractor. Está indicada en situaciones en que el doliente se encuentre muy
absorbido por sus problemas y esté constantemente reflexionando sobre el propio sufrimiento. La
tarea promueve que amplíe su campo de visión y que incluso fortalezca sus relaciones sociales.

Haz algo diferente

¿En qué consiste?
Haz algo distinto de lo que has hecho hasta ahora. Puede servir cualquier cosa, por ilógica que sea,
siempre que sea diferente de lo intentado hasta entonces y siempre que no dañe tu integridad. No
tienes que salir de casa si no lo deseas.

¿Cuál es la finalidad?
Esta tarea es una forma de introducir un cambio en su dinámica sin prejuzgar qué ha de ser.

28
 La receta de un elogio
¿En qué consiste?
Dile a alguien un elogio siguiendo estos pasos: describe el comportamiento que te haya gustado del
otro paso a paso, dile por qué es importante ese comportamiento, regálale una sonrisa o un gesto
de afecto (abrazo, beso, mimo). Anímale a que vuelva a hacer ese comportamiento (García, 2014).

¿Cuál es la finalidad?
Es un distractor, que promueve ampliar el campo de visión e incluso fortalecer las relaciones sociales.
Tradición
¿En qué consiste?
Las tradiciones son una manera de rendirle homenaje a la persona recién fallecida. Piensa en algo
que puedas hacer cada año en el aniversario de su muerte, su cumpleaños o durante las vacaciones
que te hagan sentir más cerca suyo. Si tu ser querido amaba la naturaleza, visita un bosque en su
cumpleaños o si solía hacer un ritual al inicio de año, continúa haciéndolo.

¿Cuál es la finalidad?
Las tradiciones ayudan a darle el tiempo y espacio para honrar la memoria de tu ser querido en
compañía de la gente que lo conoció.

Satisface un sueño
¿En qué consiste?
Una forma de honrar la memoria del ser querido es satisfacer uno de los sueños que tenía cuando
estaba vivo, como por ejemplo, finalizar un proyecto, conocer un lugar nuevo, plantar un árbol, etc.

¿Cuál es la finalidad?
Honrar su memoria y recolocar al fallecido en tu vida.
Involúcrate en alguna actividad altruista
¿En qué consiste?
Un corazón herido cicatriza mejor abriéndose a los demás. Puedes involucrarte en una obra de
caridad en tu comunidad o en alguna organización que apoye causas sociales (Centeno, 2013).

¿Cuál es la finalidad?
La energía que tienes puede ser dirigida a construir, no a destruir; además, ser consciente de que
alguien más nos necesita puede dar un sentido nuevo a la vida.

Define tu postura frente a la muerte

¿En qué consiste?
Muchos son los que han tratado de explicar el significado de la muerte, pero vivencialmente puede
ser diferente para cada quien. Como dice Jorge Bucay (2011): hay muchos temas que pueden estar
pendientes, pero hay cinco que es necesario tener “acomodados”: la identidad sexual, la posición
filosófica, la relación con los padres, el proyecto de vida y la postura frente a la muerte

¿Cuál es la finalidad?
Nos ayuda a darle sentido a la vida y a fortalecernos emocional y espiritualmente. Permite analizar
una de las dimensiones que componen el mundo personal.

29
 Ejercicios de relajación y meditación

Meditación de la luz

¿En qué consiste?

Busca un espacio lo más cómodo posible, antes de hacer esta actividad respira tres veces
profundamente. Cierra los ojos e imagina una hermosa luz encima de tu cabeza, imagina que es una
luz de hermosa energía que te hace entrar en un nivel de paz y serenidad cada vez más profundo.
Esta luz entra poco a poco a tu cuerpo, primero entra por la cabeza y recorre tu cerebro, luego recorre
tu médula espinal. Va fluyendo de arriba hacia abajo como una hermosa ola de luz, y pasa por todas
y cada una de las células de tus tejidos, fibras y órganos de tu cuerpo con mucho amor. La luz llega
a tu corazón de forma potente y fuerte y lo está inundando. La luz sigue avanzando y ahora baja por
tus piernas hasta llegar a los pies y llena por fin todo tu cuerpo de luminosidad. Imagina ahora que
esta luz rodea el exterior de tu cuerpo, como si te envolviera una hermosa burbuja o capullo de luz
que te protege, te abraza y reconforta todo tu ser. Permanece en ese estado unos minutos,
disfrutando de este momento de paz, unión y contemplación. Poco a poco cuenta del diez al uno
para volver abrir los ojos. (Cabodevilla, 2007).

¿Cuál es su finalidad?
Efecto tranquilizador que fortalece el espíritu.
Haz una oración
¿En qué consiste?
Independientemente de la religión que profeses o de tus creencias, la oración es un impulso del
corazón, que nos pone en contacto con nuestro ser. Puedes orar plegarias de petición que te
ayuden a entender y aceptar la muerte de la persona amada.

¿Cuál es la finalidad?
Usar el poder de la oración para armonizarnos y comulgar con nuestro interior. Nos ayuda a
descargar tensión, dolor y angustia.

Relajación

¿En qué consiste?

Existen muchos tipos de métodos relajantes, a continuación se muestran tres (Nomen, 2007):
1) La relajación muscular consiste en tensionar y relajar tus músculos (30 a 40 segundos por
cada músculo) poco a poco, durante aproximadamente media hora. Por ejemplo puedes
arrugar tu frente, cerrar tus ojos apretándolos, hacer una sonrisa forzada, apretar tus dientes,
tocar con la barbilla el pecho, pero al mismo tiempo ofrecer resistencia; cerrar tus puños,
estirar tus brazos, elevar los hombros como si intentaras tocar con ellos las orejas, sumir el
estómago, etc. Recuerda tensar y relajar uno por uno para que puedas notar la diferencia.
2) La respiración diafragmática consiste en respirar con el diafragma para provocar mejor fluidez
sanguínea. Para hacerlo coloca una mano en el estómago y respira profundo, de tal manera
que sientas con tu mano cómo se hincha tu estómago. Antes de empezar expulsa totalmente
el aire de tus pulmones varias veces, por ejemplo, haciendo algunos suspiros o exhalando
por la boca.
3) La respiración autógena consiste en visualizar y pensar en sensaciones placenteras y
agradables. Tal vez en este momento te cueste trabajo este tipo de respiración, pero practica
las dos anteriores.

¿Cuál es la finalidad?
Reducir la tensión física y mental.

30
 Bibliografía

Bermejo, J. C. (2004) La muerte enseña a vivir, Madrid, Los Camilos

Beyebach, M., Herrero, M. (2010) 200 Tareas en terapia breve, Herder, Barcelona
Bowlby, J. (1983) La pérdida afectiva, tristeza y depresión, Paidós, Barcelona
Bucay, J. (2011) El camino de las lágrimas, Océano, México
Broadbent, A. (2015) Hablemos de la muerte, Paidós, España
Centeno C., (2013) Gestión del duelo y las pérdidas… Aprendiendo a convivir con lo ausente.
Formación Alcalá, España
Cabodevilla. I. (2007) La espiritualidad en el final de la vida. Serendipity, Desclée de Brouwer
Charles R. (2016) Visualización terapéutica: técnicas para resolver conflictos y comprenderte mejor a
ti. Neo Person, España
Chávez, M. (2008) Todo pasa... y esto también pasará. Cómo superar las pérdidas de la vida, Random
House Mondadori, México
Fisch, R., Schlanger, K. (2000) Cambiando lo incambiable. La terapia breve en casos intimidantes,
Herder, Barcelona.
Frankl, V., (1988), La voluntad de sentido. Barcelona: Ed. Herder.
Frankl, V., (1989), El hombre doliente, Barcelona, Ed. Herder.
García, C., (2014), Dinámicas y ejercicios de PNL y Gestalt, Obtenido de www.cesargarciarincon.com
Gil, J. (2014) Decide cómo vivir tu vida. Terapia Gestalt para la vida cotidiana. Ed. Comanegra, España
Greco, E. (2000) Muertes inesperadas, Manual de autoayuda para los que quedamos vivos, Ed.
Continente, Argentina
James, J.W. y Friedman, R. (2001). Manual para superar pérdidas emocionales. Los libros de comienzo.
Madrid.
Kubler-ross E. (2010), Sobre la muerte y los moribundos, Ed. Debolsillo, México
Lacasta, M., García, E. El duelo en cuidados paliativos, Obtenido de www.secpal.com/guias21.
Montoya, J., Pérdida, Aflicción y Luto (2008), Ed. Trillas, México
Nardone, G. Y Salvini, A. (2004) El diálogo estratégico, Integral, Barcelona
Nazarevich, V. 23 Maneras de poner el cerebro en su lugar, Obtenido de http://genial.guru/inspiracion-
psicologia/corregido-23-maneras-de-poner-el-cerebro-en-su-lugar-55055/
Nevado, M. (2005), Aprendiendo a despedirse: de la pérdida a la superación, Afal, Madrid
Neymeyer, R. (2002) Aprender de la Pérdida. Una guía para afrontr el duelo, Paidós, Barcelona
Nomen, N. (2007) El duelo y la muerte. El tratamiento de la pérdida, Pirámide
Osho (2004), El arte de morir, Gulaab, Océano, México
White, M. (1989) Guías para una terapia familiar sistémica, Gedisa, Barcelona
Worden, W. (1997). El tratamiento del duelo: Asesoramiento psicológico y terapia. Paidós. Barcelona
Yalom, I. (1984). Psicoterapia existencial. Herder, Barcelona
31
 Anexos

Anexo 1

Propuesta de canciones

Tarea I
Aceptar y reconocer que la pérdida es una realidad
Título Intérprete
¿Adónde van? Silvio Rodríguez
Alzo Mi Voz Tercer Cielo y Tito El Bambino
Ángel para un final Silvio Rodríguez
Cuando un amigo se va Facundo Cabral y Alberto Cortez
La noticia Lily Goodman
Mariposas Silvio Rodríguez
Volverte A Ver Elfred Deynes
Tarea II
Expresar el dolor y todas las emociones implicadas
Carta urgente Rosana
Décimas Pedro Aznar
Déjame llorar Ricardo Montaner
El Aire en que no estás Pedro Guerra
En estos días Silvio Rodríguez
En un rincón del alma Alberto Cortez
Era en abril (pérdida de un hijo) Baglietto y Silvina Garre
Hoy mi deber Silvio Rodríguez
¡Oh Melancolía! Silvio Rodríguez
Se fue (sobre suicidio) Rosana
Sus ojos se cerraron Andrés Calamaro
Tu imagen Silvio Rodríguez
Tu fantasma Silvio Rodríguez
Tumbas de la gloria Fito Páez
Y nada más Silvio Rodríguez
Yo te extrañaré Tercer cielo
Tarea III
Aprender y adaptarse a vivir con la ausencia de la persona amada
Aprende a volar Patricia Sosa
Camina siempre adelante Alberto Cortez
Campeones de la vida Alejandro Lerner
De vez en cuando la vida Joan Manuel Serrat
Donde quiera que estés Joan Manuel Serrat
En la vida todo es ir Joan Manuel Serrat
Los recuerdos Joan Manuel Serrat
No me digas adiós, sino hasta luego Samuel Hernández
Profundo valor Martha Sánchez
Un día te veré Tercer cielo

32
 Tarea IV
Recolocar emocionalmente al fallecido y continuar viviendo
Adiós Gustavo Cerati
Al final de este viaje Silvio Rodríguez
Cantares Joan Manuel Serrat
Como la cigarra Mercedes Sosa
Honrar la vida Mercedes Sosa
La vergüenza Silvio Rodríguez
No se han ido del todo Martín Valverde
Pequeña serenata diurna Silvio Rodríguez
Si me voy antes que vos Mercedes Sosa
Sólo se trata de vivir Mercedes Sosa
Testamento Silvio Rodríguez
Volver a empezar Alejandro Lerner
Viviré Andrea Bocceli
Soy pan, soy paz, soy más Mercedes Sosa
Qué suerte he tenido de nacer Alberto Cortez

Anexo 2

Propuesta de películas

Título Año País Director Síntesis

Alabama Monroe 2012 Bélgica Felix Van La hija de un amoroso matrimonio muere
Groeningen a los 6 años, dejando desolados a los
padres
Ahora o nunca/ 2007 EU Rob Reiner Dos enfermos terminales de cáncer, de
Antes de partir caracteres y mundos completamente
opuestos, entablan amistad.
Amar la vida 2001 EU Mike Nichols El amor y la compasión adquieren un
nuevo y dramático sentido para una
profesora a la que le diagnostican un
cáncer terminal.
Azul 1993 Polonia Krzysztof La película retrata el conflicto interior que
Kieślowski vive Julie, tras perder a su marido y su
hija en un accidente.
Después de la 2006 Dinamarca Susanne Bier. Un millonario que aún no ha cumplido los
boda 50 años, se enfrenta con coraje a su
prematuro final.
Gente como uno 1980 EU Robert El mayor de los hermanos muere y el
Redford menor, agobiado por la culpa de haber
sobrevivido, intenta suicidarse
La habitación del 2001 Italia Nanni Moretti Un padre se obsesiona con el hecho de
hijo que su hijo haya muerto y empieza a
descuidar a su familia y a su trabajo.
La decisión más 2009 EU Nick La historia de una familia se trastoca al
difícil Cassavetes enterarse que Kate, de 2 años, padece

33
 una enfermedad terminal.
La fiesta de 2014 Israel Tal Granit y En una residencia de ancianos, un grupo
despedida Sharon de amigos construye una máquina para
Maymon practicar la eutanasia con el fin de
ayudar a un amigo enfermo terminal.
La tumba de las 1988 Japón Isao Takahata Dos niños en plena guerra buscan a su
luciérnagas madre, a quien encuentran malherida en
la escuela, que ha sido convertida en un
hospital de urgencia.
Las invasiones 2003 Canadá Denys Arcand Un hombre con un cáncer avanzado
bárbaras tiene dificultades para aceptar la realidad
de su inminente muerte y encontrar un
momento de paz antes del final.
Las alas de la vida 2006 España Antoni P. Canet Un médico que padece una enfermedad
terminal llama a un director de cine
amigo suyo y le propone que registre su
lucha por vivir y morir dignamente.
Los secretos del 2011 México John Cameron Un matrimonio trata de superar la muerte
corazón Mitchel de su hijo de cuatro años en un
accidente automovilístico.
Ma ma 2015 España Julio Medem Tras serle diagnosticado un cáncer de
mama, Magda, una maestra reacciona
sacando a la superficie toda su energía
vital.
Mar Adentro 2004 España Alejandro Ramón lleva casi treinta años postrado
Amenábar en una cama al cuidado de su familia,
desde entonces, su único deseo es morir
dignamente
Más allá de los 1998 EU Vincent Ward Tras la muerte de sus dos hijos, una
sueños pareja continúa su vida, pero cuando el
esposo muere, la soledad y el dolor
atrapan a la única sobreviviente.
Mi vida sin mí 2003 España Isabel Coixet Ann descubre que le queda poco tiempo
de vida y elabora una lista de cosas que
quiere hacer antes de morir.
Ponette 1996 Francia Jacques Historia de la desolación y desamparo
Doillon de una niña de cuatro años que ha
perdido a su madre.
Postdata Te amo 2007 EU Richard Una viuda trata de encauzar
LaGravenese nuevamente su vida tras la muerte de su
marido.
Siempre a mi lado 2010 EU Burr Steers A Charlie le afectó tanto la muerte de su
hermano menor, que aceptó un trabajo
en el cementerio donde el pequeño fue
enterrado.
Tierras de 1993 Reino Richard Cuenta la relación entre el escritor C. Dir.
penumbra Unido Attenborough S. Lewis y Joy Gresham, quien se entera
que tiene cáncer.

34
Anexo 3

Ejemplo de Mandala

35
Anexo 4

Frases sobre duelo

Tarea I
Aceptar y reconocer que la pérdida es una realidad
Jamás te persigas creyendo que ya deberías sentirte mejor. Tus tiempos son tuyos. Recuerda que el
peor enemigo en el duelo es no quererse.
Jorge Bucay

El proceso del duelo permite para tu ser querido el lugar que merece entre los tesoros de tu corazón
(...) Es recordarle con ternura y sentir que el tiempo que compartiste con él o ella fue un gran regalo
(...) Es entender con el corazón en la mano que el amor no se acaba con la muerte .
Jorge Bucay

El duelo no te cambia, te revela.

John Green

Tarea II
Expresar el dolor y todas las emociones implicadas
Las lágrimas derramadas por otra persona no son un signo de debilidad. Son un signo de un corazón
puro.
José N. Harris

El duelo es el precio que pagamos por el amor.

E.A. Bucchianeri

Recordar es el mejor modo de olvidar.

Sigmund Freud

Solo sanamos de un dolor cuando lo padecemos plenamente.

Marcel Proust

Únicamente aquellos que evitan el amor, pueden evitar el dolor del duelo. Lo importante es crecer,
a través del duelo, y seguir permaneciendo vulnerables al amor.
John Brantner

El que acepta sufrir, sufrirá la mitad de la vida; el que no acepta sufrir, sufrirá durante su vida
entera.
Confucio

Amurallar el propio sufrimiento es arriesgar a que te devore desde el interior.

Frida Kahlo

36
El dolor nos hace niños de nuevo, destruye todas las diferencias de intelecto.
Ralph Waldo Emerson

Cuanto más oscura es la noche, más brillantes son las estrellas. Cuanto más profundo es el duelo,
más cercano está Dios.
Fyodor Dostoyevsky

El dolor que no tiene salida en las lágrimas puede hacer llorar a otros órganos.
Henry Maudsley

Las lágrimas no son para las personas que hemos perdido. Son para nosotros. Para que podamos
recordar, celebrar, extrañarlas y sentirnos humanos.
CJ. Redwine

Debe haber algo extrañamente sagrado en la sal: está en nuestras lágrimas y en el mar.
Khalil Gibran

Tarea III
Aprender y adaptarse a vivir con la ausencia de la persona amada
Amar al otro es renunciar a poseerlo, incluso muerto; renunciar a que vuelva, descubrir que sigue
estando ahí, en un silencio que ya no nos causa pavor, en un desierto que se hace acogedor de lo
más valioso que tenemos, lo esencial de lo que permanece cuando ya no se puede nada .
Jean-Yves Leloup

Cuando eres consciente de la muerte, acabas asumiendo tu propia soledad.

Rosa Regás

La muerte de un ser querido es un hecho inevitable en nuestras vidas y el crecimiento que de eso
deviene también.
Jorge Bucay

La muerte no nos roba los seres amados. Al contrario, nos los guarda y nos los inmortaliza en el
recuerdo. La vida sí que nos los roba muchas veces y definitivamente .
François Mauriac

El dolor quema mucha superficialidad.

Oswald Chambers

No perdiste a nadie, el que murió, simplemente se nos adelantó, porque para allá vamos todos.
Además lo mejor de él, el amor, sigue en tu corazón .
Facundo Cabral

Cuando te sientas adolorido, mira de nuevo en tu corazón y deberías ver que estas llorando por lo
que ha sido tu gran disfrute.
Kahlil Gibran

El hilo no está cortado. ¿Por qué estaría fuera de tu mente, simplemente porque estoy fuera de tu
vista?
San Agustín
37
La muerte, con la potencia de un rayo de sol, toca la carne y despierta el alma .
Robert Browning

Quien pretenda recordar ha de entregarse al olvido, a ese peligro que es el olvido absoluto y a ese
hermoso azar en el que se transforma entonces el recuerdo .
Maurice Blanchot

Tarea IV
Recolocar emocionalmente al fallecido y continuar viviendo
Lo que una vez disfrutamos, nunca lo perdemos. Todo lo que amamos profundamente se convierte
en parte de nosotros mismos.
Helen Keller

Eres más consciente que antes de lo que es importante y lo que es trivial. Tu ser querido vivió, pero
tú todavía estas vivo. ¡Vale la pena esperar al futuro!
H. David Thoreau

Todos le temen a la muerte por la simple razón que no hemos saboreado la vida todavía. El hombre
que sabe qué es la vida, nunca le teme a la muerte.
Osho

Pero la vida es corta: viviendo, todo falta; muriendo, todo sobra.

Félix Lope de Vega y Carpio

He meditado a menudo sobre la muerte y encuentro que es el menor de todos los males.
Francis Bacon

Así, frente a la muerte hay dos actitudes: una, hacia adelante, que la concibe como creación; otra,
de regreso, que se expresa como fascinación ante la nada o como nostalgia del limbo. Una
civilización que niega a la muerte, acaba por negar la vida.
Octavio Paz

Al palpar la cercanía de la muerte, vuelves los ojos a tu interior y no encuentras más que banalidad,
porque los vivos, comparados con los muertos, resultamos insoportablemente banales.
Miguel Delibes

La muerte es una vieja historia y, sin embargo, siempre resulta nueva para alguien .
Ivan Turgueniev

Si queréis, en verdad, contemplar el espíritu de la muerte, abrid de par en par vuestro corazón en el
cuerpo de la vida. Porque la vida y la muerte son una, así como el río y el mar son uno también.
Khalil Gibran

El mundo es redondo y el lugar que puede parecer como el final podría parecer el comienzo .
Baker Priest

38
Las personas más bellas que hemos conocido son aquellos que han conocido la derrota, el
sufrimiento, la lucha, la pérdida, y han encontrado su manera de salir de las profundidades. Estas
personas tienen una gratitud, sensibilidad y comprensión de la vida que los llena con compasión,
dulzura, y una preocupación amorosa. Las personas bellas no suceden por casualidad.
Elisabeth Kübler-Ross

La inclinación a no computar la muerte en el cálculo de la vida, trae como consecuencia muchas

otras renuncias y exclusiones.
Sigmund Freud

Anexo 5

Propuesta de libros

Allende, I. (1994) Paula, Ed. Sudamericana, Buenos Aires

Brooke, J. (2005) Como recuperar la felicidad tras la muerte de un ser querido. Ediciones
Obelisco. Barcelona
Brothers, J. (1992) Vivir sin él. Ediciones Grijalbo. Barcelona
Brothers, J. (1992) como superar el trauma de la viudez, Grijalbo, Barcelona
Bucay, J. (2011) El camino de las lágrimas, Océano, México
Castillo, G. (2001) Buscando a mi estrella Mailí. Reconstruyendo mi vida después de la
muerte de mi hija. Astar Publishing. USA
Colgrove, M; Bloomfield, H. H.; Mc Williams, P. (1993) Como sobrevivir a la pérdida de un
amor. Los libros del comienzo. Madrid
De Mello, A.(1982) El cántaro del pájaro, Sal Terrae
D’Angelico, F. (1992) Como sobrevivir a la pérdida de un amor. Alay. Barcelona
Fauré, CH. (2004) Vivir el duelo. La pérdida de un ser querido. Ed. Kairós. Barcelona
Givaudan A., Meouris, D. (2015) Crónica de un acompañamiento Ed. Luciérnaga, Barcelona
Grecco, E. H. (1998) Muertes inesperadas. Manual de autoayuda para los que quedamos
vivos. Ediciones Continente. Buenos Aires. Argentina
Grollman, E. A. (1986) Vivir cuando un ser querido ha muerto. Ediciones 29. Barcelona
James, J.W. & Friedman, R. (2001) Manual para superar las pérdidas emocionales. Los
libros del comienzo. Madrid
Kübler-Ross, E., Kessler, D. (2001) Lecciones de vida, Ed. Luciérnaga, Barcelona
Kübler-Ross, E. (1992) Los niños y la muerte. Ediciones Luciérnaga. Barcelona
Kübler-Ross, E. (1969) Sobre la muerte y los moribundos. Grijalbo. Barcelona
Kübler-Ross, E (1991) Vivir hasta despedirnos. Ediciones Luciérnaga. Barcelona
Leadbeater, C. W. (1988) A los que lloran la muerte de un ser querido. Editorial Sirio. Málaga
Lukas, E. (2002) En la tristeza pervive el amor. Ed. Paidós Ibérica
Luft, L (2006) Pérdidas y ganancias. Santillana. Madrid
Markham, U. (1997) Cómo afrontar la muerte de un ser querido. Ed. Martínez Roca.
Barcelona
Martínez, P. (2006) Mas allá del dolor. Superando las pérdidas y el duelo. Publicaciones
Andamio
Neimeyer, R.A. (2002) Aprender de la pérdida. Una guía para afrontar el duelo. Paidós.
Barcelona
39
Pangrazzi, A. (1993) La pérdida de un ser querido, Paulinas, Madrid
Poletti, R. Y Dobbs, B. (2004) Cómo crecer a través del duelo. Barcelona: Ediciones
Obelisco
Ginsburg, G. (1999) No estás sola cuando él se va, consejo de viuda a viuda, Martínez
Roca, Barcelona
Montero R. (2013) La ridícula idea de no volver a verte, Seix Barral, Barcelona
Reoch, R. (1998) Morir bien. Ediciones Oniro. Barcelona
Riba, L.M. (2003) Si has perdido a alguien que amabas. Editoras Vergara y Rivas. Argentina
Roccatagliata, S. (2000) Un hijo no puede morir. La experiencia de seguir viviendo. Grijalbo.
Santiago de Chile
Savage, J. A. (1992) Duelo por las vidas no vividas. Luciérnaga. Barcelona
Sherr, L. (1992) Agonía, muerte y duelo. El Manual Moderno. México

40