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EVALUACIÓN
Algunas de las principales dimensiones que deben evaluarse son las siguientes.
1. Nivel de estructuración
Los diferentes tipos de test psicológicos pueden variar enormemente según se
solicita la información de una manera más o menos concisa o bien se le deje al
analizado más o menos libertad para expresarse.
Este aspecto es fundamental de cara a la obtención de la información. Tener un
test muy estructurado permitirá obtener respuestas cortas y concisas, dirigiendo la
evaluación a los aspectos considerados más relevantes. Sin embargo, se puede
perder una gran cantidad de información relevante que podría ayudar a un mejor
ajuste y comprensión del estado mental del sujeto.
En este sentido podemos encontrarnos con tipos de test psicológicos no
estructurados (en el que el contenido de la evaluación va variando según las
respuestas del sujeto), semiestructurados (en el que aunque se ofrece libertad de
respuesta y las preguntas varían en función de la información que se refleja se
intenta seguir un guión más o menos prefijado) o estructuradas (en que si bien se
tienen en cuenta las respuestas emitidas, la evaluación sigue un curso
predefinido)
2. Nivel de voluntariedad
Con voluntariedad nos referimos al grado en que el sujeto tiene control respecto a
la respuesta emitida. Por ejemplo, si se hace un electroencefalograma el sujeto no
tiene control respecto a qué respuesta emite, mientras que en algunos tests el
individuo puede decidir el tipo de respuesta que da.
3. Nivel de enmascaramiento
Se entiende enmascaramiento como el grado en que el sujeto conoce la finalidad
del test o prueba que se le está aplicando y/o las connotaciones de sus
respuestas. En este sentido los tests pueden ser enmascarados (como por
ejemplo el test de Rorschach, en que el individuo no conoce que significan sus
respuestas) o no enmascarados.
4. Nivel de objetividad
El nivel de objetividad de los datos hace referencia al grado en que las respuestas
son derivadas de la subjetividad del paciente o bien se trata de datos empíricos y
visibles. En este sentido podemos encontrarnos con diferentes tipos de test
psicológicos, los test objetivos y los test subjetivos, si bien todos los instrumentos
de medición pueden ser evaluados en este sentido.
Sin embargo, sea en estos o en otros contextos a menudo resulta posible hacer
una evaluación conjunta de varios individuos, o incluso realizar una evaluación de
un grupo como tal. Así pues podemos encontrar:
1. Test individuales
Se trata de aquellos tipos de test psicológicos en los que se evalúan las
características o el rendimiento de un único sujeto. Suele tratarse de test que
requieren un cierto nivel de especialización para realizarse, y proporcionan mucha
información respecto a un mismo individuo. Asimismo, permite establecer una
relación con el evaluador que le puede permitir a éste ver y analizar diversos
aspectos que pueden o no estar incluidos en el test.
1. Test de Inteligencia
La capacidad intelectual es uno de los aspectos que más se han evaluado a lo
largo de la historia. Con su uso se pretende descubrir el potencial y la capacidad
de adaptación y de utilización de diversas estrategias, junto con la capacidad de
almacenar y utilizar los propios recursos mentales es evaluado con dichos test.
3. Test de personalidad
Las personas tendemos a comportarnos y a ver el mundo de una manera
determinada, patrón que adquirimos en parte por herencia y en parte según
nuestras vivencias a lo largo del desarrollo. Medir dichos patrones de
comportamiento, creencias, emociones y pensamiento nos permite hacernos una
idea de la manera de ser de la persona evaluada, así como la manera cómo suele
ver o actuar en el mundo.
6. Test de desarrollo/envejecimiento
Este tipo de test se utiliza para valorar el grado en que un individuo se desarrolla a
lo largo del ciclo vital, observando la presencia de alteraciones y comparando el
grado de desarrollo en relación a la normatividad.
La clasificación de Pervin
Teniendo en cuenta todos los aspectos anteriores, diversos autores han generado
a lo largo de la historia diferentes clasificaciones de los tipos de tests psicológicos.
Una de las clasificaciones más extendidas y aceptadas es la de Pervin, que
considera la existencia de las siguientes categorías.
1. Test psicométricos
Los test psicométricos son aquellos empleados en la medición de características
concretas de la psique, como por ejemplo las pruebas de inteligencia o aptitudes.
Se trata de uno de los tipos de test psicológicos que considera que los individuos
van a responder de forma sincera, aplicando para ello pruebas no enmascaradas,
en las que las respuestas son voluntariamente controladas por el sujeto.
2. Test objetivos
Altamente estructuradas, este tipo de test y pruebas se basan en correlatos
fisiológicos con el fin de medir un determinado elemento. Debido a ello, las
respuestas dadas no son voluntarios ni pueden ser modificadas. Sin embargo el
objetivo de la prueba suele estar claro, de modo que se consideraría no
enmascarada. Se emplean diferentes instrumentos y aparatos para el registro de
las respuestas del individuo, no dependiendo del evaluador para el registro per se.
Ejemplos típicos de tests objetivos pueden ser el polígrafo o el biofeedback.
Dentro de los tests objetivos podemos encontrar:
4. Test proyectivos
Los test subjetivos suelen emplearse de cara a analizar los aspectos más
profundos y los rasgos de personalidad del individuo. Se trata del tipo de test
psicológico menos estructurado, no restringiendo en ningún sentido la respuesta
emitida por el analizado y teniendo todas las respuestas del sujeto un significado
válido que debe ser analizado y valorado.
Dichas respuestas son subjetivas, puesto que representan el mundo interno del
sujeto en cuestión. El individuo en cuestión no conoce el sentido o el significado
que tienen sus respuestas, siendo uno de los tipos de tests psicológicos
enmascarados. Cada respuesta y aspecto representado es importante, pero solo
tiene sentido y puede dársele significación en relación al conjunto.