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Proyecto de trabajo

Un intento de comprender el concepto de Supertarea

La idea de una cadena infinita de razones se produce por una confusión similar
a esta: pensar que un línea de una cierta longitud consta de un número infinito
de partes porque es divisible indefinidamente; es decir, porque no hay límite a la
posibilidad de dividirla.

L. Wittgenstein

El concepto de “supertarea” parece descansar sobre dos fuertes intuiciones: por un

lado, está la idea que es posible la infinita división de cantidades finitas, ejemplo que fue
explotado por Zenón de Elea en su famosa paradoja de la competencia entre Aquiles y la
tortuga. Por otra parte, está la intuición según la cual ninguna cantidad finita puede
contener una cantidad infinita de unidades, no importa que tan pequeñas sean esas unidades
ni que tan grande sea esa cantidad finita, esta es la idea según la cual la parte no puede
contener al todo.
Considerando ambas intuiciones parece surgir en principio una manifiesta
contradicción. Algo tiene que andar mal con esto. Intentaré acercarme al concepto de
supertarea manteniendo presentes ambas intuiciones.
Recordemos que una supertarea (ST) puede definirse como una secuencia infinita
de acciones realizas en un lapso finito de tiempo, y una acción puede definirse como un
cambio en el estado del mundo.
Así por ejemplo, una supertarea podría consistir en los sucesivo cambios en el
estado de un circuito eléctrico al accionarse la llave que abre y cierra dicho circuito. En la
realización de esa supertarea puede darse el estado inicial del mundo descripto como OFF y
luego pasar al estado descripto como ON y luego nuevamente como OFF, y así un número
infinito de veces produciendo infinitos cambios en el mundo. Esta supertarea podría
llevarse a cabo en el lapso de una hora, una día o un año, en cualquier caso, siempre en un
tiempo finito.
No parece haber, más allá de las objeciones a la posibilidad física de su realización,
serios problemas con el concepto de supertarea. Dichas objeciones hacen mención del
consumo de tiempo por parte de cada una de las acciones o tareas realizadas en el marco de
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la supertarea, por lo cual, la realización de una serie infinita de acciones –aún cuando el
tiempo que cada una de ellas demande sea ínfimo- no podría insumir menos que una
cantidad infinita de tiempo. Según esta consideración, la parte no puede contener el todo.
Pero podría suponerse idealmente que las acciones no demandaran tiempo alguno,
lo que de alguna manera implica abandonar la objeción física al concepto de supertarea. Me
concentraré ahora en otro problema que parece, al menos a primera vista, tener
consecuencias más serias para este concepto que las planteadas por la imposibilidad física.
Consideremos el caso de supertareas cuyas acciones sean del mismo tipo y
secuencia, esto puede pensarse según el ejemplo anterior, como encendido (on) y apagado
(off) de una llave de un circuito eléctrico. Llamemos a estas supertareas ST (m).

Consideremos ahora una supertarea ST (m) realizada en 1 hora y otra realizada en 2

horas. ¿Qué diferencias hacen respecto al estado final del mundo? Más aún, ¿qué
diferencias hacen en relación a la cantidad de acciones que cada una incluye? ¿y qué
diferencia hay, en relación a los estados parciales y al estado final del mundo como a las
acciones que incluye, entre una ST (m) de 1 segundo de duración y otra ST (m) de duración
infinita?
Consistiendo, la supertarea ST (m)a en la sucesión infinita de estados (on-off) del mundo
durante 1 segundo y ST (m)b en la sucesión infinita de estados (on-off) del mundo durante
un tiempo infinito y en ambos casos el estado inicial del mundo en ON:

ON

ST (m)a 0 |▬▬|▬▬|▬▬|▬▬| Tiempo: 1 Seg.

a1 a2 a3

ON

ST (m)b 0 |▬▬|▬▬|▬▬|▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬► Tiempo: infinito

a1´ a2´ a3´
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Una primera y obvia conclusión señalaría la irrelevancia del factor tiempo en la

realización de una supertarea, dado que la diferencia temporal si bien altera la duración de
la ejecución, esto no parece explicarse por el tipo, ni por la secuencia, ni por la cantidad de
acciones que se realizan en cada una de ellas, puesto que en ambos casos se habrán
realizado al final de las mismas, una cantidad infinita de tareas consistentes en abrir y cerrar
un circuito. ¿Cómo afecta la duración temporal de una supertarea a su identidad o
particularidad?
Lo que se ha considerado parecería mostrar la imposibilidad de distinguir entre
supertareas realizadas en tiempos finitos diferentes e incluso, entre supertareas realizadas
en tiempo finitos e infinitos.
Esta imposibilidad no solo se refiere a la descripción del estado final del mundo
luego de la ejecución de una supertarea- característica compartida por todas las supertareas-
sino al hecho que una supertarea ST (m) de tiempo finito y una ST (m) de tiempo infinito
incluirían las mismas acciones. Una primera y obvia conclusión señalaría la irrelevancia del
factor tiempo en la ejecución de supertareas de un mismo tipo.
Por lo tanto, a la pregunta anterior: ¿cómo afecta la duración temporal de una
supertarea a su identidad o particularidad? Se puede ofrecer una respuesta, a primera vista,
simple: en nada. En la ejecución de supertareas del mismo tipo el tiempo finito y el tiempo
infinito se igualan, y esto compromete seriamente el concepto de supertarea.
En síntesis, el concepto de supertarea para el caso de ST (m), supertareas que
incluyen el mismo tipo o secuencia de acciones, el factor tiempo se torna irrelevante y esto
hace difícil las cosas para un concepto que depende de la idea de tiempo finito; si este es el
caso para las ST (m), entonces, el concepto de supertarea no se sostiene, ya que en este
caso, cualquier tiempo finito (t) será igual a un tiempo infinito (T). Esto no es bueno para el
concepto de supertarea, en el caso de ST (m) el tiempo es finito o infinito, pero lo que
requieren las supertareas es tiempo finito, es decir, t ≠ T.
¿Afecta este argumento al concepto general de supertarea y no solo a las ST (m)?
Diría que este argumento afecta al concepto general de supertarea por cuanto dicho
concepto requiere de un tiempo finito. Pero lo que se ha mostrado, entiendo, afecta a todas
aquellas supertareas que pueden considerarse como supertareas de algún tipo, esto es, en
tanto haya otras que incluyan el mismo tipo y secuencia de acciones. Desde este punto de
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vista, si es correcto, el concepto de supertarea sufre una fuerte objeción, pero que no
proviene del argumento de la imposibilidad física de su realización, sino mas bien, de su
imposibilidad conceptual.
Finalmente, la idea explotada por Zenón según la cual es posible la infinita división
de cantidades finitas choca contra la idea que la parte no puede contener al todo. Pues si
una parte puede contener al todo entonces, cualquier parte puede contenerlo, lo que no hace
sino mostrar, en nuestro contexto, que el todo y la parte no pueden diferenciarse. Esta
conclusión constituye una reductio ad absurdum del concepto de supertarea.