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EL MAESTRO Y LA DIDÁCTICA
PROGRAMAS Y ARTE:
BEATRIZ DE PONS
SECCION DE AYUDAS:
MARY J. STEWART
¿Por Que?
El uso de títeres crea un ambiente de juego, de espontaneidad que es favorable
para la enseñanza. El alumno aprende mejor cuando las actividades de
aprendizaje son divertidas.
Los títeres tienen la habilidad de captar y mantener la atención de los alumnos.
Un títere puede romper las barreras de comunicación entre el maestro y el
alumno, el padre y el hijo, el testigo y el oyente.
Por medio del títere un niño se identifica con un personaje. El ve los títeres
como personajes reales. Puede retirarse al mundo de la imaginación y así vivir
los eventos de un personaje bíblico, y actuar y sentirse como él. Por ejemplo,
al ver un títere que representa a David al confrontar al gigante, el niño puede
sentir el valor del joven. Esto le ayuda a tener valor en los desafíos en su vida
diaria.
Manejar un títere da al niño tímido un sentido de confianza. No es el niño que
está parado enfrente del grupo, sino el títere. El niño está escondido y siente la
libertad de compartir y ser parte importante del grupo.
Los títeres son excelentes para enseñar la buena conducta y ayudar en la
disciplina. Un títere puede decir y hacer lo que una persona no puede. ¡Nadie
se enoja con un títere! En cambio los niños aman a los títeres y si el títere dice
que deben hacer algo, lo hacen porque quieren complacerle.
El uso de títeres no requiere mucho espacio y no es muy costoso. Uno no tiene
que tener talentos especiales para trabajar con títeres. Con un poco de dinero
puede comprar los materiales para hacer los títeres y el escenario y con unas
pocas horas de preparación puede emplear este método de enseñanza tan
efectivo.
En sus manos un títere puede caminar, correr, reír, llorar, dormir, pelear o
abrazar a otro. Puede ser arrogante, rebelde, bondadoso, temeroso, valiente,
débil o fuerte. Un títere puede entretener, promover, anunciar, enseñar,
entrenar o testificar. Puede guiar al niño o joven a conocer a Jesús y seguirle
como Salvador y Señor de su vida.
¿Cuando?
Puede utilizar los títeres en casi todo tipo de reuniones adentro y afuera del
templo. Es un medio de enseñanza muy efectivo en las clases de escuela
dominical, en los programas de apertura o clausura o en programas especiales.
Los directores de coros de niños pueden utilizarlos para enseñar las canciones.
Los títeres son muy útiles para realizar las actividades de las organizaciones
juveniles de la iglesia como los Rayitos de Sol, los Embajadores del Rey, las
Niñas en Acción, los grupos de acción, etcétera.
Otras ocasiones para emplear los títeres son: las Escuelas Bíblicas de
Vacaciones, los campamentos, los retiros, las reuniones de niños en las
misiones o anexos de la iglesia, las “horas felices” o clubes bíblicos de niños.
Los títeres pueden ayudarles en las reuniones sociales con las canciones,
chistes y dramas cómicos.
En los cultos los títeres pueden dar la bienvenida, hacer los anuncios,
promover algo o presentar dramas.
Los programas más formales, los teatros de títeres, son excelentes para
presentar al aire libre en los parques, plazas o patios; en instituciones como los
hospitales, hogares de ancianos, orfanatos, tribunales o en televisión.
Los títeres pueden acompañarle en cualquier ocasión que hay para entretener,
enseñar o testificar.
¿Como?
Hay dos maneras de utilizar los títeres. Puede usarlos con diálogo espontáneo o
con guiones (programas).
En el aula de clase pueden usarlos sin guiones. Así los títeres pueden conversar
con los niños, hacerles preguntas o dejar que los niños les pregunten a ellos.
Este método permite mayor flexibilidad dejando participar al mayor número de
niños puesto que a los niños les encanta hablar con los títeres.
Puede usar los títeres para presentar una nueva unidad o saludar a los niños al
comienzo de la clase.
La Memorización
Los títeres son muy útiles en la memorización de los versículos bíblicos. Con
mucho ánimo los niños repetirán un versículo y discutirán su significado a
través de los títeres.
La Música
Los títeres pueden ayudar al maestro con la música. Un títere puede dirigir los
cantos de los niños. Puede enseñarles una nueva canción. Uno de los títeres
puede cantar solo o puede haber un coro de títeres para presentar números
especiales.
Los titiriteros pueden cantar o los títeres pueden, por medio de mímica,
simular que cantan mientras se tocan discos o casetes. Pueden llevar en sus
manos instrumentos musicales de juguete o recortados de cartón.
Los Guiones
Los guiones (programas escritos) son necesarios para las presentaciones más
formales. Podrían utilizar programas como los que se encuentran en este libro
o escribir sus propios guiones. Hay tres maneras de utilizar un guión:
memorizarlo, grabarlo o aprenderlo más o menos, fijando una copia detrás del
escenario como una ayuda.
Los programas grabados son más fáciles al comienzo porque el que maneja el
títere necesita concentrarse en la manipulación del mismo.
El mismo grupo puede grabar el programa en cinta o casete con cada uno
leyendo la parte que le corresponde o pueden pedir a otras personas con voces
apropiadas que los graben.
Al presentar el programa los títeres hacen mímica de acuerdo con la grabación.
Recuerde que al grabar el programa debe dejar suficientes pausas en el diálogo
para la acción de los títeres (para entrar, salir, cambiar posición, etcétera).
El beneficio de un programa vivo es que puede ser adaptado para distintos
grupos. Pueden realizarlos con o sin manuscritos. Pueden leer los manuscritos
desde atrás del escenario pero deben conocer muy bien el contenido para poder
hacerlo bien.
Los programas sin manuscritos pueden perder la atención de los oyentes y
pueden resultar demasiado largos. Los que trabajan con títeres deben ser
sensibles a la reacción de los oyentes. Si se nota que están perdiendo el interés
y la atención, se debe cambiar la dirección o detener el programa.
¿Quienes?
¿Quiénes son las personas que pueden ser los titiriteros?
1. Los Maestros
Los maestros de la escuela dominical y los líderes de otros organismos de la
iglesia pueden emplear los títeres. El maestro que los utiliza tiene que ponerse
dos sombreros, el de maestro y el de titiritero.
Para ser titiritero debe poder hablar con voz cómica y hacer tonterías detrás del
escenario o delante de la clase. Esperamos que un maestro de niños tenga
suficiente entusiasmo por el trabajo para vencer cualquier vergüenza que
tenga. Siendo titiritero uno pierde cierta dignidad pero ganará mucho más.
Si un maestro no puede hacerlo con ánimo tendrá que pedir a otros que lo
hagan. Siempre pueden encontrar jóvenes de la iglesia que sean aptos para este
trabajo.
2. Los Niños
Los niños mismos pueden manejar los títeres. Pueden empezar a utilizarlos
desde los tres o cuatro años de edad. Los pequeños trabajan solos pero a los
seis o siete años pueden empezar a trabajar en equipos. El niño pequeño no
puede memorizar los diálogos pero puede recordar una historia y contarla por
medio de títeres en una manera espontánea.
3. Los Expertos
Muchas iglesias forman equipos de titiriteros que preparan los programas para
los teatros de títeres. Son grupos bien organizados con equipo adecuado, que
tienen sus ensayos con regularidad y presentan los programas en muchos
diferentes lugares y ocasiones.
2. — Como Empezar El Ministerio
Si desea empezar un ministerio con títeres en su iglesia debe tomar los pasos
necesarios para organizarlo bien. A continuación le damos algunas sugerencias
para realizarlo.
1. Decidan cómo van a utilizar los programas de títeres. Deben fijar
algunos objetivos a lograr con este ministerio. Por ejemplo, podrían
ayudar con la enseñanza en las clases de escuela dominical, Escuelas
Bíblicas de Vacaciones o con los otros organismos juveniles de la
iglesia. Podrían ayudar a los varios grupos de la iglesia con sus
reuniones sociales. También podrían tener un ministerio misionero
presentando los programas en parques, plazas, patios o en instituciones
como hospitales, orfanatos, hogares de ancianos, etcétera.
2. Presentar el ministerio a la iglesia para su aprobación.
3. Anuncien a la congregación el comienzo del ministerio. Inviten a los
jóvenes y adolescentes a inscribirse para esta actividad. Además de los
titiriteros podrían utilizar otras personas en el ministerio para hacer los
títeres, encargarse de las propiedades, construir el escenario, etcétera.
El grupo no debe ser muy grande. De seis a ocho es un buen número.
Los titiriteros deben ser personas que pueden sincronizar el
movimiento de la boca de los títeres con las palabras.
4. Preparen una buena selección de títeres (ocho a diez), el escenario,
etcétera.
5. El grupo necesitará un líder que sepa trabajar con títeres y sea un
buen organizador del trabajo.
6. Los miembros del grupo deben tomar este trabajo como un
ministerio y estar dispuestos a dedicar el tiempo necesario para los
ensayos.
El éxito de los programas depende de la calidad de los ensayos. Deben
realizarlos semanalmente y cada uno debe ser bien planeado.
Antes de cada ensayo el director debe tener todo listo: los manuscritos, los
cantos, los títeres con sus ropas y accesorios correspondientes.
Los ensayos deben seguir el siguiente orden:
1. Comenzar con un momento de oración. Los titiriteros deben recordar
que la meta de este ministerio es glorificar al Señor y presentar su
mensaje. Habrá momentos de diversión durante los ensayos, pero el
propósito es serio y la dirección del Señor es muy importante.
2. Explicar al grupo lo que deben lograr durante este ensayo. Planear en
conjunto los programas que serán presentados en el futuro.
3. Ensayar cada programa por lo menos tres o cuatro veces.
4. Antes de despedirse oren juntos dedicando los programas al Señor.
El director del ministerio debe:
1. Velar por que todo esté preparado para cada ensayo: manuscritos,
música, equipos, títeres, el escenario, etcétera.
2. Asignar la tarea que realizará cada integrante del grupo.
3. Animar a los titiriteros a que practiquen individualmente entre
ensayos.
4. Animar a los integrantes del grupo a crear varios tipos de voces;
graves, agudas, de niño, de animales, etcétera. Ayudar a cada uno a
seleccionar la voz que es más adecuada al personaje que representará.
También tiene que estar seguro de que la voz de cada uno sea
claramente entendida por el público.
5. Estar al frente del escenario mirando desde afuera lo que está
ocurriendo.
6. Hacer el horario de las presentaciones del grupo.
¡Hagamos Los Títeres!
Hay muchos diferentes tipos de títeres que puede utilizar. Podría ser una
pequeña cabeza recortada de papel y colocada en un dedo, o un títere de tela
relleno con algodón u otro material, al tamaño de un niño. Puede comprar
títeres ya listos para trabajar, pero muchas veces son muy caros. Hay muchas
cosas que puede comprar y adaptar como los animales de juguetes. Puede sacar
una parte del relleno del cuello y cabeza para poder meter la mano y manejar la
boca.
Pero cualquier persona que desee trabajar con títeres puede hacerlos. A
continuación le damos ideas para algunos diferentes tipos de títeres que usted
puede hacer.
Títere De Caja
Corte una caja pequeña por la mitad pero sólo en tres lados. Dóblela en medio.
Dibuje la cara en la caja con la boca en la parte que se abre. Puede hacer el
pelo y/o la barba de estambre y las facciones de la cara de papel de colores o
de tela como fieltro y pegarlas al títere. Para manejarlo meta los cuatro dedos
en la parte superior y el pulgar en la parte de abajo.
Títere De Palito
Los títeres de palitos son muy fáciles para hacer y manejar. Puede recortar de
cuadros o dibujos personajes, animales u otros objetos y pegarlos a palitos. El
palito debe extender abajo del títere para que el titiritero pueda coger el palito
con su mano y así manejarlo.
Titeres De Dedo
Pegue recortes de caras o toda la figura de una persona o animal a una tira de
papel. Enrolle cada tira en un dedo y pegúela. La cara debe quedar del lado de
la palma de la mano.
Titere De Guante
En una tela haga el dibujo de un guante un poco más grande que su mano.
Recórtelo y haga otro igual. Cósalos por la orilla, pero dejando abierta la orilla
de abajo. Voltéelo. Con lápices de colores o pintura dibuje las facciones de la
cara y el vestido. Meta la mano como si fuera un guante. Su dedo pulgar debe
quedar en una de las mangas y el meñique en la otra y los otros tres dedos en la
cabeza.
Variación:
Haga la cabeza de una bola de “styrofoam” u otro material. Colóquela en el
dedo índice.
Títere De Medias
Puede hacer títeres de sus medias viejas. Las verdes son buenas para hacer
ranas, las cafés para perros, etcétera.
Primero corte la boca, empezando desde el dedo mayor hasta el dedo pequeño.
El corte será de 6 1/2 cms. de ancho, y 3 1/2 a 4 cms. de profundidad hacia el
talón. De un retazo de fieltro rojo, corte dos pedazos en forma de “U”, un poco
más grandes que la boca del títere. Ponga la media al revés y cosa la boca en el
hueco. Puede añadir dientes y lengua si desea. Voltee la media después de
haberla cosido, y añada botones para los ojos, un pedazo de fieltro para la nariz
y estambre para el pelo.
Titere De Tela
En una tela haga el dibujo del modelo que hallará en las páginas 14 y 15. Corte
dos de estos. Usando el patrón corte una boca de una tela roja. Cosa las pinzas.
Luego junte los dos pedazos de la tela por las orillas, pero dejando abierta la
orilla de abajo y la boca. Cosa la boca.
Usando el mismo patrón de la boca corte un círculo de cartón y pártalo a la
mitad. Cosa o pegue estos dos medios círculos de cartón adentro de la boca
para poder manejarlo mejor. Ahora voltéelo. Puede hacer los ojos de tela o
botones. El pelo puede ser de estambre o retazos de trapos. Puede añadir los
brazos y manos y hacer ropa para ellos si quiere.
Con este patrón puede hacer todo tipo de títeres haciéndolos de diferentes
tamaños y colores y haciendo las facciones de cara, el pelo, etcétera, distintos
para cada uno.
¡Ya Listos Para El Teatro'
4. — ¡Aprendamos A Manejarlos!
Primeramente los titiriteros deben aprender la forma correcta de tomar los
títeres. Nunca deben tomarlos por las orejas, la nariz o el pelo. El títere debe
llevarse de un lado a otro dejando caer su cuello sobre el brazo, como si llevara
un abrigo, con la cabeza afuera de la persona que lo transporta. (Vea la
ilustración 1.)
Para ponerse el títere, el titiritero debe introducir la mano por el cuerpo mismo,
hasta que ésta llegue a la boca. Se introducen cuatro dedos en el paladar y el
pulgar debajo de la boca. (Vea la ilustración 2.)
Se abre la boca bajando sólo el pulgar. No se deben subir los cuatro dedos pues
la cabeza no parecerá natural. La boca no debe abrirse hasta que se comience a
hablar. Es decir, que debe empezar con la boca cerrada.
Los movimientos de la boca deben ser correctos. Hay que sincronizar la
apertura de la boca con las palabras que se pronuncian. Deben pronunciarse las
palabras con toda claridad. No hay que abrir la boca completamente para cada
palabra. Se abre la boca lo más posible llevándola hacia atrás, cuando se
pronuncian expresiones exageradas.
Para entrar al escenario, se debe hacer como si se estuviera subiendo una
escalera, manteniendo la cabeza derecha. Para salir baje el títere como si
estuviera bajando por la escalera.
Al entrar en el escenario debe hablar sólo uno a la vez. La dirección de los ojos
es importante. Cuando dos títeres están conversando deben estarse mirando el
uno al otro.
Cuando un títere está hablando debe haber mucho movimiento relacionado con
lo que está diciendo y los demás títeres no deben estar moviéndose.
Si el títere tiene manos puede moverlas con varas sujetas a las muñecas del
títere. El titiritero puede manejar la boca con la mano izquierda y las varas con
la mano derecha. Hay que ensayar mucho para poder producir movimientos
naturales.
Los títeres muy grandes requieren dos titiriteros para cada uno; uno para
manejar la boca y otro para las manos.
5. — ¡Preparemos El Escenario!
Si utilizarán los títeres en una manera espontánea en el aula de clase no
necesitarán un escenario. Podría utilizar un ángulo del aula con un lienzo (tela)
o cortina adelante a la altura media de las cabezas de los niños o el mismo
lienzo delante de una puerta.
También podría utilizar una mesa o escritorio colocando una cortina encima y
detrás.
En el aire libre podría colocar un lienzo entre los troncos de dos árboles o
postes.
El escenario para los teatros debe ser más formal. Debe haber suficiente
espacio donde los títeres puedan moverse en todo sentido: atravesarán la
escena de un lado a otro, de atrás para adelante y viceversa.
Recuerde que el escenario siempre debe ser: fácil de construir, fácil de levantar
y colocar y no debe ocupar demasiado espacio.
Escenario de Madera
Puede construir un escenario de madera que se pueda doblar para transportarlo.
Necesitará dos piezas de madera terciada de 1 1/4 metros por 60 cms. y una
pieza de 1 1/4 metros cuadrados. Puede juntar las piezas con goznes de
puertas.
Si desea hacerlo alto con una ventana las piezas deben ser de 2 metros de
altura. Puede cortar una ventana en medio.
Escenario con Cortinas
Otra manera de hacer un escenario es hacer el marco con madera o tubos y
colgar cortinas encima de las tres secciones.
¿Pepito Perezoso? — …¡No!
Personajes:
Pepito: ¡Hola, Martita, Martuchita, amiga mía! ¿Cómo estás corazón de miel?
Martita: Yo estoy muy bien … y ahora me voy a una ¡lindísima reunión!
Pepito: ¿Cuál reunión?
Martita: ¿Qué te importa?
Pepito: ¡Martita, no te enojes! Si yo no quise aceptar una de las charlas es
porque … porque … yo no hablo muy bien … pero, otra vez que me pidas
…
Martita: Yo no pensaba pedirte nada.
Pepito: ¿Nada?
Martita: ¡Absolutamente nada!
Pepito: ¡Puedo acompañarte a la reunión!
Martita: Lo siento, ¡no estás invitado! ¡Adiós! (SALE)
Pepito: ¡Martita!, ¡eh! ¡Martuchita!, ¡queridísima amiga! ¡Martuchita!
(Entra Piripincho)
Personajes:
MARISA: Pero, ¡será posible! ¿Qué pasa aquí? ¿No saben el refrán? “Juegos
de manos, juegos de villanos.”
PEPITO: ¡El empezó primero!
PEDRITO: ¡No es verdad! ¡Tú empezaste primero!
PEPITO: ¡No! ¡Fue él!
PEDRITO: ¡Mentira! ¡Fue él!
MARISA: ¡Basta! ¡Estoy harta de estas peleas! ¡No sé para qué son tan
amigos, si la mayor parte del tiempo se la pasan peleando! ¡Tú, Pedro, te
vas a tu casa! ¡Y tú, Pepito, adentro! ¡No jugarás en toda la tarde!
PEPITO: ¡Ufa!
PEDRITO: ¡Ufita!
MARISA: ¡Silencio! ¡Vamos! ¡Obedezcan!
MARISA: ¡Ay, estos chicos! ¡Me sacan canas verdes! ¡Estoy cansada de sus
peleas! ¡Viven enojándose! ¡Oh … allí viene Carola, la madre de Pedrito!
Este hijo mío siempre me hace quedar mal con los vecinos.
(Entra Carola)
(Entra Pepito)
PEPITO: ¡Pedrito!
PEDRITO: ¡Pepito!
PEPITO: ¡ Pedrito!
PEDRITO: ¡Pepito!
PEDRITO: ¡Ay, Pepito! (LOS TÍTERES SE ABRAZAN)
PEPITO: ¡Te voy a extrañar mucho, amigazo!
PEDRITO: ¡Yo también, con toda el alma!
PEPITO: ¡Cuando me enojo soy un tonto!
PEDRITO: ¡Y yo, cuando me enojo, hago y digo tonterías!
PEPITO: Pedro … vamos a ser siempre amigos, no es cierto, ¡aunque estemos
lejos!
PEDRITO: Siempre, Pepe. Y nos vamos a escribir y a recordar, ¡aunque
estemos lejos!
(Se Vuelven A Abrazar)
Personajes:
LUCHO: Por favor, Pepito, no me eches otra vez, debes escucharme, ¡yo no te
quería quitar a Dale-Dale! ¿No es cierto Dale-Dale?
DALE-DALE: ¡Guau! ¡Guau!
LUCHO: A mí me resulta simpático Dale-Dale, ¡Es un perro tan lindo! ¡Por
eso de vez en cuando le daba un hueso! Yo no te lo quería quitar … ¡sólo
quería compartirlo!
PEPITO: ¡Te hubieras comprado otro perro!
LUCHO: ¡Sí, claro! Pero en casa no me dejan tener animales y ¡Dale-Dale
estaba tan cerca! Cuando te ibas al colegio, como yo voy en otro turno,
bueno … yo pensaba … Dale-Dale está solo. Pepito se fue y claro …
PEPITO: ¡Claro, como Pepito se fue! ¡dale dale!
LUCHO: ¿Cómo?
PEPITO: Quiero decir, dale dale huesos, ¡para robármelo!
LUCHO: ¡No, Pepito! ¡Yo no haría eso! Yo soy tu amigo. ¡Yo sólo quería ser
bueno con Dale-Dale! No te miento, Pepito, ¡debes creerme!
PEPITO: Lucho, tengo poder para echar … quiero decir para escucharte .
LUCHO: Pepito, ¡amigo del alma! ¡La chocamos, dale!
PEPITO: ¡Dale! ¡Amistad es amistad! ¿No es cierto, Dale-Dale?
DALE-DALE: ¡Guau!, ¡Guau!, ¡Guau!
Personajes:
(ENTRA MAMA)
MAMA: ¡Este Pepitito mío! ¿Dónde estará? ¡Señor, tu que cuidas a los niños
y amas tanto a todos, regrésame a mi Pepitito! ¡Ya no sé dónde buscarlo,
nadie lo ha visto!
(Entran Los Policías Con Pepitito)
Personajes:
CRU-CRU: ¡Yo soy quien cuida el jardín de don Poromponcito! ¡Soy la ranita
más trabajadora del mundo! ¡Aquí no hay bichos, ni uno solo! ¡Yo cuido
las plantas, las flores y don Poromponcito está muy contento conmigo! ¡Me
quiere muchísimo! ¡Con mi trabajo no necesita ayudante alguno! Soy una
luz, una maravilla, una. . ¡Uia! ¡Viene alguien! ¡Es don Poromponcito y
alguien lo acompaña, y me escondo!
(Entra Muy Orondo El Gordito Amarillito, Tiene La Voz Fuerte, Gruesa Y Alegre.)
(Entra Cru-Cru.)
(Se Va.)
DON POROMPONCITO: ¡Eh! ¡Un momento! ¿Se puede saber a dónde vas
tan apurado, primito?
G. AMARILLITO: ¿Quién me agarra? ¡Ah, Poromponcito, qué susto, eres tú!
DON POROMPONCITO:(SUSPICAZ.) ¿De qué tienes miedo? ¿Por qué
viniste y te ibas sin saludarme? ¡Tu conducta es muy extraña, primito mío!
G. AMARILLITO: Este… ejem… bueno… este… yo vine. ¡Eso es! ¡Yo
vine! ¡Pero ahora me iba, quiero decir, me voy o sea que me estoy yendo,
porque… bueno… ejem, porque como acá, el jardín estaba ocupado por
ese chinito que tú trajiste como ayudante, como… como ese chinito no me
gusta nada yo me iba! ¡Claro, eso es! ¡Yo me iba!
DON POROMPONCITO: Tú crees en la amistad, ¿verdad, Gordito?
G. AMARILLITO: ¡Verdad!
DON POROMPONCITO: Y tú piensas que todos debemos ser buenos
amigos, ¿verdad?
G. AMARILLITO: ¡Verdad!
DON POROMPONCITO: Y debemos tratar a los demás…
G. AMARILLITO: Como queremos que los demás nos traten a nosotros,
¡verdad! Esa es la famosa “Regla de Oro”; es una verdad que sabe todo el
mundo. Y yo, como todo el mundo, la sé muy, ¡pero muy bien!
DON POROMPONCITO: Sí, es una verdad que debemos querer a todos y
¡tú lo sabes! Pero, ¡lo sabes con la cabeza y no lo sabes con el corazón!
Dime, Gordito, ¿por qué no quieres al Sr. Chu-lín? ¿Qué te ha hecho de
malo? O acaso, ¿no lo quieres porque es chino?
G. AMARILLITO: ¡Qué esperanza! ¡Yo… lo que pasa es que… bueno, ese
chinito no trabaja nada! ¡Eso mismo! No trabaja nada, es un haragán, se la
pasa cantando y además… es… es un descuidado y… bueno, ahora me
voy, ¡chau! ¡No me gusta que me reten! (SE VA.)
DON POROMPONCITO: ¡Este Gordito Amarillito! ¿Me habrá dicho la
verdad? ¡Sin embargo, el Sr. Chu-lín parece tan bueno! ¡Si mi primo fuera
extranjero en otra patria, no le gustaría que lo trataran mal! Pero… ¡oia!
¿Qué es esto? ¡Cuántas hojas hay aquí; y las macetas sin plantas! ¡¡Ohhh!!
¡Herramientas, mis valiosas herramientas arrojadas entre las plantas!
¡Cuánto desorden! ¡Esto no puede ser!
CRU-CRU: (LLORA.) ¡¡Mjjj!! ¡¡Mjjj!! ¡Ay, qué dolor inmenso! ¡Qué tristeza
más grande la de mí corazón de ranita arrepentida!
G. AMARILLITO: (ENTRA CONTENTO.) ¡Hola, Cru-crú! Todo salió perfecto,
¿verdad?
CRU-CRU: (CON HONDA TRISTEZA.) Sí, todo salió… Réquete perfecto…
todo salió tal cual lo planeamos, Gordito. ¡¡Ayyyy!!
(Solloza.)
DON POROMPONCITO: ¿Qué sucede? ¿Qué son esos llantos y esos gritos?
CRU-CRU Y G. AMARILLITO: (JUNTOS.) ¡Nosotros no lloramos!
¡¡Buahhhhhhh!!
G. AMARILLITO: Solamente estamos tristes.
CRU-CRU: Claro… ¡estamos tristes por lo del chinito!
DON POROMPONCITO: Entiendo, ¡están tristes porque él se va! ¡Pero era
muy descuidado y, además, no decía la verdad! ¡No lloren! ¡Ya veo que
ustedes son muy buenos y tienen muy buen corazón! ¡Me doy cuenta de
que lo quieren mucho!
G. AMARILLITO Y CRU-CRU: (JUNTOS, LLORAN PEOR.) ¡¡Buahhh!!
¡¡Ayyyn ¡Buahhh!
DON POROMPONCITO: ¡No se pongan así! Ustedes no saben lo que él ha
hecho!
G. AMARILLITO: ¡Lo sabemos requetebién!
CRU-CRU: ¡Claro que lo sabemos! ¡El no ha hecho nada malo! ¡Mjjj!
G. AMARILLITO Y CRU-CRU: (JUNTOS.) ¡Fuimos nosoootrooos! ¡Fuimos
Nosoootrooos!
DON POROMPONCITO: ¿Qué? ¿Cómo? ¿Por qué? ¡Expliqúense
inmediatamente!
G. AMARILLITO: ¡Nosotros le fuimos escondiendo las herramientas para
que no pudiera trabajar!
CRU-CRU: ¡Porque yo no quería un ayudante en el jardín! ¡Me puse celosa, y
el Gordito me ayudó!
DON POROMPONCITO: ¿Ustedes hicieron eso? ¿Aquí? ¿Por el Camino de
la Amistad? ¡Es increíble!
Personajes:
DON MARTÍN: ¡Pepito! ¡Pepito! Pero, ¿qué le ocurrió a este niño? ¡Si yo lo
he alabado, le he festejado! ¡Señora! ¡Señora mamá de Pepito!
(Entra La Mama.)
(Sale.)
PEPITO: ¿Mami?
MAMA: Tengo que hablarte, hijo, ¿estás bien?
PEPITO: Mmmmm…
MAMA: Pepito, ¿estás bien o no?
PEPITO: Mmmm … estoy bien, mamá.
MAMA: ¿Puedes explicar tu extraña conducta con don Martín?
PEPITO: ¡Ay, mami, me cuesta!
MAMA: ¡Confía en mí, por favor. Pepito!
PEPITO: ¿Te acuerdas de Daniel, mi amigo?
MAMA: ¿El que tuvo el accidente?
PEPITO: Sí, el mismo. Daniel ya no está aquí, está en el extranjero, el usa
bastones.
MAMA: ¡Claro, como don Martín! ¡Ay! Ya entiendo, te acordaste de tu amigo
y te pusiste triste al ver el bastón de don Martín.
PEPITO: ¡No! ¡Baaaahhh…! ¡Soy malo!
MAMA: ¡Pepito, por favor tranquilízate!
PEPITO: ¡Don Martín me dijo pancito de azúcar! ¡Buaaahhh…!
MAMA: ¡Te ofendiste!
PEPITO: ¡No! Pero él me dijo pancito de azúcar porque cree que soy bueno,
aayy. Yo lo ayudé y por eso me llamó…
MAMA: ¡Pancito de azúcar! Ya lo sé, ¿qué hay de malo en eso?
PEPITO: ¡Es que yo no le ayudé a don Martín!
MAMA: ¿Cómo?
PEPITO: ¡Claro, yo le ayudé porque pensaba en mi amigo Daniel, de don
Martín no me importaba nada! ¡Soy malo! ¡Buaaahhh…!
MAMA: Y ahora, ¿por qué lloras?
PEPITO: ¡Porque no me importaba de don Martín, buaahhh…!
MAMA: ¡Entonces te importa!
PEPITO: ¿Cómo?
MAMA: Si lloras porque no te importaba de don Martín, es porque ahora te
importa. Te importa el hecho de no haberte importado. Sufres, porque
mentalmente le hiciste el favor a otro, no a él.
PEPITO: ¡Eso mismo!
MAMA: Entonces él te importa, hubieras querido pensar en él, por eso sufres.
Don Martín te importa y lo quieres, por eso te hace sufrir el no haber
pensado en él.
PEPITO: ¡Oia! ¡No me había dado cuenta!
MAMA: ¿Recuerdas la Biblia? Dice: “Y todo cuanto hacéis, hacedlo de
ánimo, como al Señor, porque estás sirviendo al Señor.”
PEPITO: ¿“Hacer todo como al Señor”?
MAMA: Pepito, es hermoso vivir en comunidad siendo útil, ¡sirviendo,
ayudando! Si lo haces por amor a uno o por amor a otro, ¡no importa! ¡Lo
haces! ¡Y por primero o por último “lo haces como para el Señor”!
PEPITO: ¡Mami, yo quiero ayudar a todos! ¡Todo el día! Quiero a Daniel
pero también quiero a don Martín y quiero… ¡quiero servir al Señor!
¡Estoy contento! (EMPIEZA A SALTAR.) ¡Viva! ¡Estoy contento! ¡Seré útil a
todos!… ¡porque quiero a todos! ¡Viva! (SALE CORRIENDO.) ¡Viva!
MAMA: ¡Pepito! ¡Pepito! ¡Y se fue corriendo! ¡Qué chico! ¡Pepito, bueno y
servicial! ¡Señor, bendice a ese pancito de azúcar, quiero decir, bendice a
mi Pepito, Señor!
(CAE EL TELÓN)
¡Valgo Para Algo!
PEPITO … Niño, usa flequillo.
ANGEL … Tiene alitas y un vestido brillante, es un muchacho de 12 años.
MAMA … Señora de aspecto bondadoso.
PAPA … Lleva anteojos y corbata.
LUCHO … Tiene la edad de Pepito, es gordito y pecoso. ESCENARIO: El
cuarto de Pepito. Se ve una camita de cartón, una silla frente a ella y una
pequeña mesa.
MAMA: ¡Pepito, Pepito! ¡Despierta, hijo! ¡Es una pesadilla! ¡Te quedaste
dormido!
PEPITO: ¡Mamá, mamita! ¿Soy tu hijo, existo, me ves?
MAMA: ¡Por supuesto, mi amor! ¿Te sientes bien? ¿Te traigo alguna cosa?
PEPITO: ¡No, mamita! Yo estaba enojado porque me fue mal en el concurso
y en el partido y …
MAMA: ¡Habrá otros concursos y habrá otros partidos, eso no tiene
importancia, Pepito!
(Entra Lucho)
LUCHO: ¡Vamos, Pepito, tenemos otro partido en quince minutos! ¿No estás
listo?
PEPITO: ¿Cómo, Lucho? ¿No era que yo no sé jugar?
LUCHO: ¡No lo habrás tomado en serio! ¿Crees que no recuerdo que tú fuiste
mi maestro? ¡Para mí no hay otro amigo como tú, yo estaría muy triste si
no te tuviera, Pepito!
PEPITO: Te creo, Lucho. Mamá, todos somos importantes para los otros y
para Dios, ¿verdad?
MAMA: ¡Por supuesto, hijo! ¡Tú eres muy importante para mí, para tu padre,
para tus amigos, para el Señor y para su obra!
PEPITO: ¡Eso mismo! ¡Chau, mamita, nos vamos a jugar! ¡Vamos, Lucho!
LUCHO: ¡Chau, señora! (SALEN CORRIENDO.)
MAMA: ¡Pero, Pepito … tu merienda … hijo! ¡Este chico! Siempre dice cosas
tan bonitas… (SUSPIRA) ¡Cuídalo mucho, Señor! ¡Vale tanto para todos
nosotros!
(CAE EL TELÓN)
La Biblia Dice Asi
Personajes:
Personajes:
MAMA: ¡Hola, Raulito! Sucede algo malo? Escuché gritos, ¿dónde está
Pepito?
RAULITO: ¡Mire, señora, tengo algo que decirle de su hijo Pepito!
MAMA: Muy bien, ¡dímelo! Adelante.
RAULITO: ¡Pepito, su hijo, es un mentiroso! ¡Un mal amigo! ¡Y se la pasa
haciendo lo que no debe!
MAMA: ¡Raulito!
RAULITO: ¡Nada de Raulito! ¡Adiós! (RAULITO SALE.)
MAMA: ¡Caramba! (VA ENTRANDO PEPITO.) ¡Pepito!, ¡por fin vienes! ¡Dime,
¿qué ocurre con Raulito?!
PEPITO: ¡Raulito es un chico malo, mamá! Yo diría que un poco más que
malo, en verdad ¡malísimo! Pelea con todo el mundo, insulta, patea, en
fin…
MAMA: Pero es amigo tuyo, ¿verdad?
PEPITO: ¡Qué esperanza! ¡Nadie quiere ser amigo de él! Y yo tampoco, ¡es la
peste!
MAMA: Pepito, ¡no hables así! Escucha, hijo, ¿le has pedido a Dios por ese
niño?
PEPITO: Bueno… yo…
MAMA: ¿Le has hablado a él del Señor Jesús?
PEPITO: Bueno, yo… este…
MAMA: ¡Ves, hijo! ¡Tal vez él no tiene orientación, y tú deberías ayudarle!
PEPITO: ¿Yo? hmm… ¿a ése?… hmm …
MAMA: Piénsalo, Pepito… por favor… ¿eh? ¡Hasta luego, hijo!
(Mama Sale.)
(Raulito Entra Por Atrás De Pepito,
Pepito Da Un Pequeño Salto De Susto.)
Personajes:
PAPA: (MIENTRAS ENTRA PEPITO CON UNA FLAUTA.) ¡Pepito! ¡Otra vez
tocando la flauta!
PEPITO: Tú siempre dices que te encanta escucharme cuando ejecuto, ¿acaso
mientes?
PAPA: ¡No, hijo!, ¡pero alguna vez quiero leer el diario tranquilo!
PEPITO: ¡Está bien, me voy!
PAPA: ¡No, prefiero irme yo! ¡Me voy al dormitorio! (SALE.)
PEPITO: ¡Papá es malo! ¡Yo quería tocar la flauta para que él me escuchara y
él quiere leer el diario!
(Entra Mama.)
(Entra Martucha.)
MARTUCHA: Bien, vengo a leer mis lecciones, espero estar tranquila, y que
tú no toques la flauta. ¡Vete con la música a otra parte!
PEPITO: ¿Para eso tengo una familia? ¡Me voy, me voy con la música a otra
parte! ¡Adiós! ¡Me voy al parque y no sé cuando vuelva, si es que vuelvo!
¡Adiós!
(Pepito Sale.)
Personajes:
(Se Levanta El Telón, Pepito Y Martita Conversan. Detras Se Ven Los Arboles.)
(Entra La Madre)
(Sale)
PEPITO: ¡No vuelo de fiebre! ¡Yo quiero volar en un plato volador! ¡No
quiero nada! ¡No quiero a nadie! Yo quiero el tren, la bicicleta y el plato
volador, ¡y todos los juguetes del mundo! ¡Los quiero, los quiero y los
requetequiero!
(Por Detras Del Plato, O Por La Puerta Central Aparecen Tolin 1 Y Tolin 2)
CAE EL TELÓN
¡Ay, Que Rica El Agua!
Personajes:
Son tres títeres iguales, pueden estar unidos y ser manejados por una sola
persona. Son rubios, flequilludos y graciosos. Hablan a coro y sus voces
pueden ser grabadas por anticipado.
Importante: Hablan acentuando y separando las sílabas tónicas.
Escenografia:
(Entra Lucho)
(Entra Martucha.)
Personajes:
Personajes:
RELATOR: Hola, niños, ¿cómo les va? Qué hermoso es decir poesías,
¿verdad? ¡y más aún cuando se acercan las fechas patrias! Hoy les voy a
contar una historia de un niño a quien no le gustaba decir poesías …. un
niño que tuvo que aprender la bella lección de amar a la patria. El niño se
llamaba …
MADRE: Muy bien Pepito, ¡muy bien! (SALEN JUNTOS POR UN COSTADO
MIENTRAS ENTRA EL MUÑECO RELATOR)
RELATOR: Así fue como Pepito aprendió a decir su poesía con respeto y
sentimiento. Ahora todos juntos diremos con alegría: “¡¡Viva la patria!!”
EL PUBLICO: ¡¡Viva la patria!!
Fechas de Independencia de los siguientes países:
• Argentina: 9 de julio de 1816
• Colombia: 20 de julio de 1810
• Perú 28 de julio de 1821
• Venezuela: 5 de julio de 1811
• Paraguay: 14 de mayo de 1811
• Bolivia: 6 de agosto de 1825
• Ecuador: 10 de agosto de 1809
• Brasil: 7 de septiembre de 1822
• El Salvador: 15 de septiembre de 1821
• Guatemala: 15 de septiembre de 1821
• México: 16 de septiembre de 1810
• Costa Rica: 15 de septiembre de 1821
• Nicaragua: 15 de septiembre de 1821
• Honduras: 15 de septiembre de 1821
• Uruguay: 25 de agosto de 1825
• Chile: 18 de septiembre de 1810
¡Entrega Tus Dones!
Personajes:
(Entran Juntos Martucha, Lucho Y Raulito.) (Martucha Mira Hacia Todos Lados.)
PEPITO: (CANTA FUERTE.) “Yo canto porque me gusta, porque es muy lindo
cantar, ¡la felicidaaa! (ENTRA RAULITO.) ¡La felicidaooo!”
RAULITO: ¡Por favor, Pepito! ¡Cállate, no te aguanto! ¡No te puedo ni
escuchar!
PEPITO:¡Oía! ¿Qué te sucede, Raulito? ¡En lugar de saludarme dices que no
me puedes escuchar! ¿No te gusta esta canción?
RAULITO: ¡No es la canción, es tu voz! ¡Antes cantabas bien, pero ahora, no
sé… está todo desentonado! ¡Se te puso la voz fea!
PEPITO: ¿Te parece? (CANTA) ¡La felicidaaa. la felicidaooo …!
RAULITO: ¡Por favor! ¡Me voy porque no te soporto! (SALE.)
PEPITO: ¡Bah! Este Raulito nunca entendió nada de música. ¡No tiene oído!
(CANTA MIENTRAS ENTRA LUCHO.) ¡La felicidaaaa! ¡La felicidaooo!
LUCHO: ¿Qué escuchan mis pantallas sonoras, quiero decir auditivas? ¡Es
espantoso Pepito! ¡Pensar que antes tenías tan linda voz! ¿Qué te ha
pasado?
PEPITO: Este … no … ¿no te gusta?
LUCHO: ¡Sinceramente, no! Estás desentonado, además el timbre de tu voz…
PEPITO: ¿Qué pasa con el timbre? (CANTA CON MIEDO.) La … fe… li… ci…
daaa…
LUCHO: ¿Ves? ¡Ahí está! ¡La voz se te ha vuelto … como ronca … fea … sí,
muy fea! ¡Bueno, no te aflijas, son cosas que pasan, hasta luego, Pepito!
(SALE.)
(Entra Martucha.)
Personajes:
PEPITO: Yo digo que me canso y me fastidio, pero, después, muy dentro mío,
algo se fortalece, se alegra, algo … mi corazón, tal vez, me dice que es
hermoso servir y …
C. ARREPENTIDO: ¡Qué bonito! ¡Me dijeron que soy el mejor corazón del
mundo! ¡Gracias Señor porque pertenezco a Pepito y él está aprendiendo a
realizar tu voluntad, a servir… con alegría de corazón!
Personajes:
Personajes:
(Le Quita El Avioncito De Cartón, Que Esta Sostenido Con Un Palo Desde Abajo,
Tipo Pantalla, Lo Derriba Y El Avioncito Desaparece De La Escena).
PEPITO: Testificar … claro, ser testigo, ¡eso es decir lo que a uno le pasó!
Testificar es una alegría, … ¿será cierto? ¡Oía! ¡Allí viene la rara de
Juanita! ¿Qué hago, la saludo o no la saludo? ¿La saludo o no la miro más?
¡No la miro más, me rompió el avioncito! ¡Ay!, pero yo debo testificar, eso
dijo mamá … y bueno, qué se le va a hacer, todo sea por el amor de Dios.
PEPITO: El también fue un chico, como nosotros, nació en Belén hace dos
mil años y cuando creció … (SALEN)
(Entra Mama)
Personajes:
PEPITO: Son las cuatro de la tarde, y ¡aquí no ha venido nadie! ¡Qué fracaso,
qué vergüenza, nadie ha llamado a la puerta! ¡Mj!; ¡Mj! (llora) ¡Ay, león
compañero mío! ¡Yo que te había preparado con melenita y todo! ¡Tam,
tam batía los tambores! ¡Aaayyy!
MARTITA: ¡Son las cuatro de la tarde y todos están allí! ¡Qué vergüenza,
¡qué calor, ¿adónde me esconderé?
Personajes:
(Los Tres Títeres Hacen Una Ronda Y Ríen Mientras Baja El. Telón.)
Personajes:
(Sale Corriendo.)
PEPITO: ¡Qué cosa tan extraña! ¡Mi amigo Lucho! ¿Qué estará haciendo?
(Entra Martita.)
MARTITA: ¡Por fin te encuentro! ¡Dime que sí, que sí, que sí!
PEPITO: ¡Primero quiero saber de qué se trata!
MARTITA: ¡Tomas los volantes, te anotas en la campaña “Anti” y nos
ayudas!
PEPITO: Pero … yo …
MARTITA: ¡Pero nada! ¡No debemos comer ni beber nada que perjudique
nuestro cuerpo!
PEPITO: Pero yo…
MARTITA: ¡Ningún pero! ¡Las drogas perjudican y dañan!
PEPITO: Claro, tienes razón, pero …
MARTITA: ¡Debes hablar menos y hacer más Pepito! ¡Debemos cuidar
nuestra salud, no debemos ofender a nuestro cuerpo!
PEPITO: Yo, yo…
MARTITA: ¡Tú repartes estos volantes y ayudas a la comunidad! Además,
¡vigila Pepito!
PEPITO: Bueno, yo…
MARTITA: ¡Ni una palabra más! ¡Viva la campaña anti! ¡Chau!
(Sale Corriendo.)
(Entra Lucho.) (Bebe De Su Botellita.)
LUCHO: (BEBE) ¡A la una, ahí va! ¡A las dos! (BEBE) ¡A las tres y ahora las
vueltitas para largar!