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Qué es una infección por estafilococo?

Los estafilococos son el nombre común de las bacterias del género Staphylococcus. Estas bacterias
pueden vivir en muchas superficies de la piel sin ocasionar daño alguno, sobre todo alrededor de la
nariz, la boca, los genitales y el ano. Pero, cuando la piel se rompe o perfora por cualquier motivo, los
estafilococos pueden introducirse en la herida y provocar una infección.

Existen más de 30 especies diferentes en este género de bacterias, que pueden provocar diferentes
tipos de enfermedades. Por ejemplo, hay un tipo de estafilococo que puede provocar infecciones
urinarias. Pero la mayoría de las infecciones por estafilococo están provocadas por una especie
denominada Staphylococcus aureus.

Staphylococcus aureus provoca con mayor frecuencia infecciones limitadas a un área reducida de la piel,
como la foliculitis, los forúnculos, el impétigo y la celulitis. Staphylococcus aureus también puede
segregar toxinas (sustancias venenosas) que pueden evolucionar a enfermedades como la intoxicación
alimentaria o el síndrome de shock tóxico.

¿Cómo se contraen las infecciones por estafilococo?

En los adolescentes, la mayoría de las infecciones por estafilococo son infecciones de piel leves. Las
personas con problemas en la piel, como las quemaduras o el eczema, son más proclives a contraer este
tipo de infecciones de piel.

La gente puede contraer una infección por estafilococo a partir de objetos contaminados, pero los
estafilococos a menudo se propagan a través del contacto piel con piel; las bacterias se transmiten de un
área corporal a otra simplemente tocando áreas de piel previamente infectadas seguidas de áreas sin
infectar.

Las infecciones por estafilococo se pueden contagiar entre personas que conviven en situaciones
grupales (como las residencias estudiantiles). Esto suele ocurrir cuando las personas con infecciones en
la piel comparten objetos de uso personal, como ropa de cama, toallas o ropa de vestir. Los ambientes
calurosos y húmedos favorecen este tipo de infecciones; por lo tanto, la sudoración excesiva puede
aumentar las probabilidades de que una persona contraiga una infección por estafilococo.

nfecciones graves por estafilococo

Las infecciones provocadas por Staphylococcus aureus pueden volverse graves en algunas ocasiones.
Esto ocurre cuando las bacterias entran en el torrente sanguíneo a través de una abertura en la piel.
Esto puede provocar infecciones en otras partes del cuerpo, como los pulmones, los huesos, las
articulaciones, el corazón, la sangre y el sistema nervioso central.
Las infecciones por estafilococo en partes del cuerpo distintas de la piel son mucho menos frecuentes.
Tienden a ocurrir en personas cuyos sistemas inmunitarios se han debilitado por otras enfermedades o
por tomar ciertos medicamentos, como la quimioterapia para el cáncer.

A veces, las personas que se someten a operaciones pueden contraer tipos más graves de infecciones
por estafilococo. Lo bueno es que el personal hospitalario toma muchas medidas de precaución para
evitar las infecciones en las operaciones. Por eso, limpian detenidamente el área a operar, utilizan
equipos estériles y, a veces, administran antibióticos al paciente.

Tal vez hayas oído hablar sobre el Staphylococcus aureus resistente a la meticilina o SARM , para
abreviar. El SARM es un tipo de estafilococo que ha desarrollado una resistencia a los antibióticos que
los médicos suelen utilizar para tratar las infecciones por estafilococo. Aunque es posible que el SARM
sea más difícil de tratar, en la mayoría de los casos la infección se cura con el tratamiento adecuado.

Cuáles son los signos de una infección de piel por estafilococo?

Las infecciones de piel por estafilococo se manifiestan de muchas formas diferentes. Algunas de las
afecciones más comunes que suele provocar Staphylococcus aureus son las siguientes:

La foliculitis es una infección de los folículos pilosos, las pequeñas cavidades que hay debajo de la piel
donde crecen las hebras del cabello. En la foliculitis, aparecen pequeños granitos de color blanco en la
base de las hebras, a veces con una pequeña área enrojecida a su alrededor. Esto ocurre a menudo
cuando las personas se afeitan o cuando se irritan la piel por el roce con la ropa.

Un forúnculo, coloquialmente conocido como "divieso", es un bulto hinchado, rojo y doloroso en la piel,
generalmente provocado por un folículo piloso infectado. El bulto suele llenarse de pus, aumenta de
tamaño y se vuelve más doloroso hasta que revienta. Los forúnculos suelen empezar como casos de
foliculitis que se empeoran. Suelen aparecer en la cara, el cuello, los glúteos, las axilas y la cara interna
de los muslos, donde el vello fino tiende a irritarse. Un grupo de varios forúnculos juntos se denomina
ántrax o carbúnculo: Una persona con ántrax puede tener malestar general y fiebre.

El impétigo es una infección de piel superficial que ocurre con mayor frecuencia en los niños pequeños,
aunque también se puede dar en adolescentes y adultos. La mayoría de las infecciones por impétigo
afectan a la cara, las manos o los pies. Una infección de piel por impétigo empieza como una pequeña
ampolla o granito y luego desarrolla una costra de color miel. El impétigo no suele provocar fiebre ni
dolor, aunque las ampollas pueden provocar picor y se pueden extender a otras partes del cuerpo a
través del rascado.

La celulitis es una infección que afecta a la piel y a áreas de tejido ubicadas debajo de la superficie de la
piel. Empieza como un área reducida de piel enrojecida, dolorosa, hinchada y caliente. Cuando el área se
empieza a extender, la persona afectada puede experimentar malestar general y tener fiebre. La celulitis
puede darse en cualquier parte del cuerpo pero es más frecuente en las piernas.
Un orzuelo, también conocido como chalazión, es un bulto doloroso en el párpado. Se desarrolla cuando
las glándulas conectadas a la base de las pestañas se inflaman e irritan. Una persona con un orzuelo
suele notar una hinchazón rojiza, caliente y molesta cerca del borde del párpado.

Muchas de estas infecciones por estafilococo son de menor importancia y se pueden tratar en casa. Si
una infección menor empeora, por ejemplo, si empiezas a tener fiebre o malestar general, o si el área
afectada se extiende y se vuelve muy roja y caliente, lo mejor que puedes hacer es ir al médico.

Las infecciones de heridas suelen aparecer dos o más días después de hacerse una herida o de
someterse a una operación. Los signos de una infección de herida (enrojecimiento, dolor, hinchazón y
calor en el área) son similares a los de la celulitis. La persona puede tener fiebre y malestar general. La
herida puede supurar pus o un fluido turbio, y sobre ella se puede formar una costra amarilla (como en
el impétigo). Si crees que se te ha podido infectar una herida después de haberte sometido a una
operación, o si te has hecho una herida importante que parece estar infectada, llama a tu médico.

Se pueden prevenir las infecciones de piel por estafilococo?

Las bacterias Staphylococcus aureus se encuentran por todas partes. Muchas personas sanas
transportan bacterias de esta especie sin contraer ninguna enfermedad.

La limpieza y llevar una buena higiene personal son la mejor forma de protegerte de las infecciones por
estafilococo (y de otro tipo), incluyendo el SARM. Puedes prevenir las infecciones piel por estafilococo
lavándote las manos con frecuencia y duchándote o bañándote todos los días.

Asegúrate limpiar bien y cubrir las áreas de piel donde tengas heridas (como cortes, rasguños, eczema o
erupciones provocadas por reacciones alérgicas o por la hiedra venenosa). Utiliza la pomada antibiótica
u otro tratamiento que te haya recetado el médico. Si un miembro de tu familia tiene una infección por
estafilococo, no compartas con él toallas, sábanas ni ropa de vestir hasta que complete el tratamiento.

Si contraes una infección por estafilococo, puedes impedir que se propague a otras partes del cuerpo
evitando tocarte la piel infectada, manteniéndola cubierta siempre que sea posible y utilizando una
toalla solo una vez para limpiarte el área infectada. Asegúrate de lavar después la toalla con agua
caliente o de utilizar toallitas desechables.

¿Qué puedo hacer para sentirme mejor?

El tiempo que tarda en curarse una infección de piel por estafilococo depende del tipo de infección y de
si la persona recibe o no tratamiento. Por ejemplo, un forúnculo puede tardar de 10 a 20 días en curarse
sin tratamiento, pero el tratamiento puede acelerar este proceso. Por otro lado, la mayoría de los
orzuelos se curan solos en cuestión de días.
Para ayudar a aliviar el dolor de una infección en la piel y permitir la expulsión del pus, intenta sumergir
el área afectada en agua tibia o bien aplícale toallitas o paños húmedos y tibios. Utiliza uno diferente
cada vez y lava todos los paños con agua caliente y jabón, secándolos después completamente con una
secadora de ropa. También puedes aplicarte una almohadilla térmica o una botella de agua caliente
sobre la piel durante unos 20 minutos, tres o cuatro veces al día.

Los analgésicos (medicamentos contra el dolor), como el acetaminophen o ibuprofen (paracetamol o


ibuprofeno), pueden ayudar a aliviar el dolor hasta que disminuya la infección. En algunas infecciones
cutánea (de piel), también puede ayudar el hecho de lavar el área afectada utilizando una crema
limpiadora antibacteriana, aplicando después una pomada antibiótica. A continuación, cúbrete la piel
con una gasa o vendaje limpios.

Los orzuelos se pueden tratar aplicando compresas tibias sobre el ojo (con el ojo cerrado) de tres a
cuatro veces al día. Asegúrate de utilizar un paño o toallita limpios cada vez. Ocasionalmente, los
orzuelos requieren antibióticos por vía tópica. Ve al médico si el orzuelo no te desaparece al cabo de
pocos días.

Si contraes una infección por estafilococo en las áreas de la piel que te sueles afeitar, evita hacerlo, si es
posible, hasta que la infección se cure. Si no tienes más remedio que afeitarte esa zona, utiliza una
máquina de afeitar desechable o bien limpia tu máquina de afeitar eléctrica después de cada uso.

Revisado por: Rupal Christine Gupta, MD

Fecha de revisión: junio de 2014

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