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Objetivos: Estudiar (1) la activación del músculo Trapecio Superior mediante una

técnica novedosa MAT, y (2) su correlación con una técnica científicamente


validada, la Escala de Borg. Diseño: Tres meses de estudio prospectivo utilizando
la técnica MAT para la testación del trapecio superior. Participantes: La muestra
del estudio fueron 26 participantes voluntarios. Protocolo: Se utilizó un test de
respuesta neuropropioceptiva de ambos trapecios junto a la escala de percepción
del esfuerzo (Escala de Borg). Resultados: Los resultados demuestran que
aquellos trapecios con testación positiva se correlacionan con una mayor
percepción del esfuerzo.

Palabras clave: Trapecio, Escala de Borg, Técnicas Musculares, MAT


Abstract

Aim: Study (1) activation of the upper trapezius muscle using a novel technique
MAT, and (2) its correlation with a scientifically validated technique, Borg Scale.
Design: Three months prospective study using the technique for roasting MAT
upper trapezius. Subjects: The study sample were 26 volunteer participants.
Protocol: A test of both trapezius neuropropioceptiv aresponse by the scale of
perceived exertion (Borg scale) was used. Results: The results show that those
trapezoids roasting correlate positively with higher perceived exertion.

Keywords: Trapezius, BorgScale, Muscular Technique, MAT

INTRODUCCIÓN

El trapecio, se localiza en la parte posterior del tórax (Kapandji, 2006), teniendo su


origen en el hueso occipital (línea nucal superior y protuberancia occipital externa)
y también mediante el ligamento nucal en las apófisis espinosas de todas las
vértebras cervicales (SchÜnke, Schulte, Schumacher, Voll, y Wesker, 2010). Este
músculo pertenece a la articulación acromio-clavicular (ACJ), la cual corresponde
al segundo grupo del complejo articular del hombro, según cita Kapandji (2006),
junto con la escapulo-torácica y esternoclavicular. La ACJ, es una articulación
sinovial distal entre la clavícula y el acromion, con una estabilidad que se debe a
los ligamentos coracoide y trapezoide (Reid, Polson, y Johnson, 2012).
Dicha musculatura se divide a su vez en tres porciones, que son el haz superior,
haz medio y haz inferior. La porción superior se relaciona con las fibras
descendentes (Kapandji, 2006), poseen su inserción abarcando la clavícula,
escápula y el acromion (Reid et al., 2012). El nervio que las inerva es el craneal,
también conocido como el nervio accesorio (SchÜnke et al., 2010).

En cuanto a su funcionalidad, posee un rol motor en la cintura escapular,


sumándose al mismo el romboides, elevador de la escápula, serrato anterior,
pectoral menor y subclavio (Kapandji, 2006). Siendo este haz, concretamente, el
que nos permite inclinar la cabeza hacia el mismo lado y rotarla hacia el lado
contralateral, además de bascular la escápula en sentido oblicuo hacia arriba y
hacia fuera (SchÜnke et al., 2010). No obstante, cuando las tres porciones actúan
al mismo tiempo, desplazan el omóplato hacia dentro y atrás, y lo giran hacia
arriba unos 20º favoreciendo la abducción. Aunque en este sentido cobran mayor
importancia cuando el cuerpo soporta grandes cargas e impide que el brazo se
caiga y que la escápula se separe con respecto al pecho (Kapandji, 2006).

Existen diferentes técnicas que se utilizan para medir la activación de la


musculatura esquelética, entre ellas se destaca la electromiografía, las terapias
manuales etc. Incluso en este sentido, en la actualidad están surgiendo nuevas
corrientes innovadoras, como las técnicas de activación muscular (MAT), en la
actualidad tan solo existe un estudio que ha validado la técnica (Blasco, Roser, y
Bernabe, 2015). Estas técnicas se basan en la identificación y tratamiento de los
desequilibrios musculares con el objetivo de optimizar el sistema muscular, ya que
es el punto donde se encuentra la vulnerabilidad de esta técnica.

Lo que determina realmente a estas técnicas es que se percibe la tensión


muscular como el síntoma de un problema, siendo la debilidad la causa de ello.
Ésta tensión aparece en otros músculos con el fin de proteger a una articulación
cuando la musculatura que la controla está inhibida, es decir, no trabaja de
manera adecuada, proporcionándole inestabilidad. De ahí, que en vez de tratar
dicha tensión, entendida como el mecanismo de protección o solución del Sistema
Nervioso a una debilidad, traten a esta última intentando localizarla y eliminarla
pues es la que crea la disfunción muscular.

Dicha debilidad o inhibición muscular, se puede deber a que existe una incorrecta
comunicación entre el cerebro y el músculo, dando lugar a que éste sea incapaz
de contraerse como toca cuando se le somete a stress o a una resistencia a la
articulación que controla, perdiendo eficacia. Esto ocurre sobre todo cuando el
músculo está en acortamiento contribuyendo a la inestabilidad de la articulación y
mecanismo de protección que anteriormente se explicó.

Por tanto, las técnicas de activación muscular (MAT), diseñadas por el


estadounidense Greg Roskopf, son un sistema diseñado para evaluar y tratar
desequilibrios musculares que busca restablecer las capacidades contráctiles de
la musculatura. MAT ofrece una nueva perspectiva con respecto a las terapias
convencionales, centradas en la tensión como factor principal del dolor o
enfermedad. En contraposición MAT entiende la tensión y el dolor muscular como
un síntoma, no como la causa del problema o la patología.
En lugar de tratar la tensión, MAT intenta localizar la causa de la debilidad o
inhibición muscular. Al corregir la debilidad, el cuerpo gana estabilidad, lo que
provoca una relajación de la musculatura tensa en muchos casos, ya que esta no
tiene que proteger la articulación donde antes existía esta inestabilidad. Así pues a
través de las técnicas MAT se pretende activar la musculatura que no funciona de
manera correcta, para poder así producir un reajuste neuromuscular propioceptivo
para que se envíen las señales sensoriales aferentes correctas al SNC.

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