Muchos de los historiadores aceptan la existencia de relaciones entre el protestantismo y
el desarrollo del capitalismo, sin embargo hay pocos acuerdos sobre la naturaleza de tales relaciones. Los protestantes del siglo XVII decían que los artesanos fueron la columna vertebral de la reforma, y que el protestantismo había resultado ser beneficioso para el comercio y la industria. Aunque cabe aclarar, que todavía existen desacuerdos en determinados extremos de las tesis. Una crítica dirigida con Weber, sostiene la influencia causal del protestantismo en la formación del espíritu capitalista. Algunos países en los que el calvinismo se presentó desarrollado en su forma clásica, económicamente hablando, fueron países atrasados. (Escocia, Hungría) Por otra parte, una tercera crítica plantea que Weber y Tawney señalaban aspectos doctrinales que no parecían ser fundamentales ni para los reformadores ni para sus críticos Hasta el momento, es preciso decir, que no se ha demostrado que el protestantismo este asociado como la causa y efecto al surgimiento y desarrollo del capitalismo. Sin embargo, en caso de buscar las relaciones, estas deben buscarse en las doctrinas fundamentales de los Reformadores Los reformadores basaban sus doctrinas en el nuevo testamento y en san Agustín Dichos escritos, ya comenzaban a dar emanaciones sobre el espíritu capitalista; una conducta y disposición moral, con la cual dentro del sistema de una economía, se impulsa la industria productiva, la frugalidad y el ahorro, como bienes por sí mismo. La justificación por la fe, será la doctrina central del protestantismo. El protestante decía que las buenas obras tenían su verdadero valor en el espíritu con que se hacían. Esta insistencia de que cada creyente, podría juzgar las buenas obras según su propia conciencia, contribuyo a dar al protestantismo su carácter fundamentalmente individualista. La justificación de las obras significaba la salvación de las personas, y que estas podían salvarse, a través de la iglesia, sin olvida claro, que esto, solo se podía llevar a través de la mediación de los sacerdotes, quienes cuya autoridad, proviene jerárquicamente del papa No hay que olvidar que para los reformadores, las relaciones directas del alma con dios era lo que importaba. Por esto, no paso demasiado tiempo, esta lucha del protestantismo contra la iglesia Romana., básicamente, fue una lucha por el individualismo. Por el contrario, Lutero sostuvo que el mundo pertenecía al diablo, pero que el verdadero cristiano, podría vivir sin estar poseído por él, gracias a su fe salvadora. Lutero sostuvo la opinión de que la conciencia decide por sí misma, porque todos somos libres, sobre todas las cosas. Había una contradicción entre la conciencia del pecado y la posibilidad de alcanzar la gracia divina, la cual se expresaba en los esfuerzos por hacer buenas obras El protestantismo era más flexible que el catolicismo El protestantismo carecía de muchos impedimentos para reformar las actitudes morales. Por eso, se pude decir, que a través de la actitud teológica. El protestantismo hizo su contribución más importante, para el surgimiento del capitalismo. En el siglo XVII, aquellos más cultos, se expresarían diciendo que el respeto por la propiedad era una ley fundamental o parte de las leyes de la naturaleza. Por otro lado, el énfasis de los protestantes sobre el trabajo penoso, surgió de la circunstancia económica de la época, tal como se reflejaba en el pensamiento de los burgueses Laicos. Otro hecho a destacar en el siglo XVI y a principios XVII fue el ideal medieval, que buscaba repartir limosnas de manera indiscriminada. Sin embargo, aquel ideal, solo creaba mendigos, y estaba visto como un acto egoísta. La verdadera caridad animaba a las gente a ayudarse por si mismo. Los predicadores y congregaciones, estaban convencidos de que la industria era un buen trabajo, para el bien común. Que además, estaba visto como un deber ante Dios y la sociedad, utilizar tu talento. El trabajo de generaciones puritanos, quienes temían a Dios, fue lo que hizo de Inglaterra, la primera nación industrial del mundo. A través de esta convicción interna que inspiraba las acciones, la sociedad laica burguesa, pudo imponer sus propias normas. Lo puritanos intentaron espiritualizar los procesos económicos. Dios instituyo el mercado y el comercio. Más tarde, el énfasis protestante, sobre la conciencia ayudo a romper la corteza de costumbres, tradición y autoridad. Sim embargo, no hay nada para destacar en el protestantismo que nos pueda conducir automáticamente al capitalismo, ya que su importancia, consistió en que acabo con los obstáculos que imponían las rígidas instituciones y ceremonias del catolicismo. En un principio, el protestantismo y el calvinismo, recibieron el apoyo de las minorías cultas. Que además se habían desarrollado por y para la clase media. Es importante destacar, como la lucha protestante derribo al marco inquebrantable que tenía la sociedad. Allí, el capitalismo ya existía, sin embargo, no es que los hombres se hicieron capitalista porque fuesen protestantes, ni protestantes porque fueran capitalista. En una sociedad que se estaba convirtiendo en capitalista, lo que hizo el protestantismo fue facilitar el triunfo de los nuevos valores. Ese énfasis fue una consecuencia natural de la religión, en una sociedad, donde se estaba desarrollando la industria capitalista, En una sociedad dirigida por los protestantes, los limpios tienen que ser sometidos a las disciplinas, y el hacer buenas obras, se va convertir en el deber de la comunidad. Al triunfar las virtudes burguesas, la sociedad de pequeños productores que trabajan en su propia industria, se transformó en una sociedad de trabajadores domésticos y obreros. Que solo podían ser empleados por los que poseían un capital La victoria del protestantismo, ayudo a terminar con el universo animista y mágico. Sin embargo, el sentimiento de pecado sobrevivió, y se hizo más abrumador, pero el sentimiento de pecado, también era de libertad potencial.
Zacarías Moutoukias - NUEVA HISTORIA ARGENTINA. TOMO 2. LA SOCIEDAD COLONIAL - Capítulo 09. Gobierno y Sociedad en El Tucumán y El Río de La Plata, 1550-1800