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Gálatas 5:13 al 15
“Y ya no soy yo quien vive, sino que es Cristo quien vive en mi. Y la vida que ahora vivo en el cuerpo, la vivo por
mi fe en el Hijo de Dios, que me amó y se entregó a la muerte por mí”.
Continuaremos tomando como libro de base para analizar la Epístola a los Gálatas, el comentario de
John Mac Arthur.…
INTRODUCCIÓN
El Apóstol Pablo ya ha hablado sobre la “Libertad que tenemos en Jesucristo” (Gal. 2:4) y
presentó una analogía a partir de Sara y Agar como vimos el domingo pasado. Nos ha declarado
que debemos mantenernos firmes en la libertad que Cristo nos ha dado a fin de no estar más
atados a la esclavitud de cumplir con las observancias de la Ley.
Este concepto de la Libertad, puede ser mal entendido y es aquí donde Pablo aclara el
concepto de la verdadera Libertad Cristiana de acuerdo a lo que la Palabra de Dios enseña…
Vivimos en una sociedad que es adicta no tan solamente a las drogas, tabaco y al alcohol
sino también a pasiones sexuales, violencia y muchas otras formas de esclavitud en donde la
persona tarde o temprano pierde toda posibilidad de escape…
Cuando una persona decide persistir en el pecado, pierde cada vez más el control sobre
él, hasta llegar al punto de perder la misma capacidad de tomar una decisión al respecto…
JESÚS DIJO: “De cierto, de cierto os digo, que todo aquel que hace pecado, esclavo es del
pecado” (Jn 8:34).
Los judaizantes, y algunos creyentes judíos inmaduros, consideraban que Pablo se oponía
a la Ley y fomentaba la antinomia porque era un transgresor libertino…
Los extremos del legalismo y el antinominalismo están por igual centrados en el ser
humano. SIEMPRE AMBOS HAN SIDO ATRACTIVOS PARA LOS PECADORES…
EL LEGALISTA SE SATISFACE A SÍ MISMO Y, SEGÚN CREE, A DIOS, por adherirse a un
código estricto de órdenes y prohibiciones que demuestra, como imagina, que tiene en sí la
justicia suficiente para entrar al cielo…
En este pasaje que hoy analizamos, Pablo presenta cuatro propósitos del llamado de Dios
a la LIBERTAD DE AMARLE: Oponerse a la carne, servir a lo demás, cumplir su ley moral y evitar
hacer daño a otros.
Recuerda Mac Arthur que Pablo utiliza el término griego de aphormé para hablar de la
“ocasión para la carne” que la versión “Dios habla hoy” traduce “dar rienda suelta a sus
instintos”… Este término griego se utilizaba para referirse a la base de operaciones de una
campaña militar…
Es como si dijera que La libertad cristiana no es una base de operaciones donde la carne
da rienda suelta a sus instintos naturales para llevar a cabo sus campañas de pecado con toda
libertad y sin consecuencias graves”…
Hasta los incrédulos más impíos son libres de hacer todo lo que les plazca. Ellos tiene
amplia libertad para complacer los deseos de la carne y nunca necesitan de la obra de
Jesucristo para que les de libertad para hacerlo por la sencilla razón de que Jesús no
suministra esa clase de libertad.
Debemos tener cuidado de aquellos falsos maestros que desvían a muchos cristianos
detrás de esta falsa libertad cristiana y de la cual habla Pedro:
“Porque ellos impresionan a la gente diciendo cosas bonitas, que en realidad no sirven para nada.
Obligan a otros a participar en sus mismos vicios y malos deseos; engañan a los que con mucho
esfuerzo apenas logran alejarse del pecado. Les prometen que serán libres para hacer lo que
quieran, pero ellos mismos no pueden dejar de hacer el mal. ¡Ese mismo mal acabará por
destruirlos! Pues el que no puede dejar de pecar es esclavo del pecado. Además, los que han
conocido a nuestro Señor y Salvador Jesucristo, ya no siguen el ejemplo de los pecadores de este
mundo. Pero si permiten que los vuelvan a engañar con esas cosas, y se dejan controlar por el
pecado, quedan peor que antes. Más les valdría nunca haber sabido de qué manera quiere Dios
que vivan. Pero ahora lo saben, y si dejan de obedecer a Dios, quedarán peor que antes.” (2ª P.
2:18 al 21).
Similares términos utiliza Judas en el v. 4 refiriendo que estos falsos maestros convierten
en libertinaje la gracia de nuestro Dios, y niegan a Dios el único soberano, y a Nuestro Señor
Jesucristo...
Cristo Jesús nos hace libres por amor para que podamos servirnos unos a otros. La
libertad que se nos ha dado es una libertad paradójica ya que es una sumisión mutua en amor.
Así lo enseñó el Señor que para Él, el más importante es el que sirve y no el que manda
que le sirvan (Lc. 22:24 – 27). Pablo a los filipenses les enseñó a ser del mismo sentir que
Jesucristo que se hizo siervo por amor a nosotros (Fil. 2:5 – 7).
Jesucristo por medio del Espíritu Santo, dota al creyente de la misma naturaleza de
servicio en amor que él ejemplificó, al ser el Hijo de Dios y el Hijo del Hombre que vivió en
la tierra como Siervo de Dios y el Siervo de los hombres.
Continua diciendo Mac Arthur que Pablo aquí nos explica que la libertad cristiana no es
una licencia para ignorar el deseo de Dios por nuestra santidad, sino más bien la oportunidad
perfecta para cumplirlo...
El Señor Jesús dijo que del amar a Dios con toda nuestro corazón, alma y mente, y amar
a nuestro prójimo como a nosotros mismos, dependía toda la Ley y los profetas (Mt 22:36-40; cp.
Dt. 6:5; Lv 19:18).
Lo mismo insiste el Apóstol en Romanos que la única deuda que debemos tener es la
deuda de amor entre nosotros (Ro 13:8-10).
Al igual que el esclavo hebreo que una vez libertado deseaba quedarse bajo el mismo
amo por puro amor (Ex 21:2 al 6), el cristiano renuncia de manera voluntaria a la libertad de
servirse a sí mismo (satisfacer su carne) a fin de tener el privilegio glorioso de servir a Dios (Ro
6:22).
Finalmente Mac Arthur indica que Pablo advierte que la contraparte de NO servirse en
amor los unos a los otros corresponde a volverse destructivos los unos con los otros mordiendo y
despedazando al prójimo como si fuésemos animales salvajes...
Las sociedades más libertinas de la historia se han visto forzadas a reconocer que no
habrían podido sobrevivir si cada individuo tuviera el derecho de pasar por encima de los derechos
de los demás a fin de gratificar sus propios caprichos y ambiciones...
Si no nos servimos por amor a Cristo y a los demás, terminamos comportándonos como la
mayoría de los paganos impíos y egoístas que se muerden y devoran unos a otros hasta el punto
de consumirse unos a otros. La falta de amor lleva a la destrucción completa...
Dice M. Henry: “Las iglesias cristianas sólo pueden ser arruinadas por sus propias
manos; si los cristianos se portan como brutos animales, mordiéndose y devorándose unos a
otros, ¿qué se puede esperar sino que el Dios de Amor les niegue su gracia, que el Espíritu Santo
de amor se marche de ellos y que prevalezca el espíritu del maligno?
CONCLUSIÓN:
SAN AGUSTÍN DE HIPONA HA RESUMIDO ESTA DOCTRINA: “AMA Y HAZ LO QUE
QUIERAS, PORQUE DE ESTA BUENA RAÍZ DEL AMOR ES IMPOSIBLE QUE BROTE NINGÚN FRUTO
MALO”.
Sólo hay que preguntarse a sí mismo: ¿Es verdadero amor el que me impulsa a hacer
esto?... PODEMOS HACER LAS COSAS POR TEMOR A ALGUIEN, O POR EXHIBICIONISMO, O POR
AMOR A QUIEN NOS AMÓ PRIMERO.
BIBLIOGRAFÍA:
2.- COMENTARIO AL NUEVO TESTAMENTO por WILLAM MAC DONALD – EDITORIAL CLIE
4.- LA BIBLIA COMENTADA POR LOS PADRES DE LA IGLESIA. GÁLATAS, EFESIOS, FILIPENSES.
EDITORIAL CIUDAD NUEVA.