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TOMO I

Unidad Técnica Ejecutiva


del Sector de Justicia
TOMO I
Código Procesal Civil y Mercantil anotado con jurisprudencia y principales
instrumentos en materia civil.
Comisión Coordinadora del Sector de Justicia

Dr. José Oscar Armando Pineda Navas


Presidente del Órgano Judicial

Cmdo. Mauricio Ramírez Landaverde


Ministro de Justicia y Seguridad Pública

Lic. Douglas Arquímides Meléndez Ruiz


Fiscal General de la República

Lic. Sonia Elizabeth Cortez de Madriz


Procuradora General de la República

Lic. María Antonieta Josa de Parada


Presidenta del Consejo Nacional de la Judicatura

Lic. Kenia Elizabeth Melgar de Palacios


Directora General
Unidad Técnica Ejecutiva del Sector de Justicia

5
347.05
151c Inglés Aquino, Patricia Ivonne
Código procesal civil y mercantil anotado con jurisprudencia y
sv principales instrumentos en materia civil : tomo I / Patricia Ivonne
Inglés Aquino ; diseño de portada y fotografía Karla Michelle
Pérez. – 1ª ed. – San Salvador, El Salv. : Unidad Ejecutiva del
Sector de Justicia, 2018.
580 p. ; 24 cm.

ISBN 978-99961-977-5-8

1. Procedimiento civil-Comentarios. 2. Derecho


comercial-Legislación. I. Título.

Coordinación de la obra
Área de Educación Pública y Reforma Legal de la UTE

Autora de la obra
Lic. Patricia Ivonne Inglés Aquino
Jueza 3ª 1 de lo Civil y Mercantil de San Salvador

Revisión de la obra
Área de Educación Pública y Reforma Legal
Área de Medios de Comunicación

Diseño y diagramación e impresión:


Impresos Quijano, S. A. de C. V.

Diseño de portada y fotografía


Karla Michelle Pérez

UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA


Ave. Las Dalias, Polígono 6, lote #7,
Col. San Francisco San Salvador
PBX 2204-7600 www.ute.gob.sv
Índice

Código Procesal Civil y Mercantil anotado con jurisprudencia


y principales instrumentos en materia civil ......................................................................... 9

Prontuario del Código Procesal Civil y Mercantil ...........................................................433


Unidad Técnica Ejecutiva del Sector de Justicia

Código Procesal Civil y Mercantil anotado con jurisprudencia y principales


instrumentos en materia civil.

San Salvador, diciembre de 2016


UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA

DECRETO Nº 712

LA ASAMBLEA LEGISLATIVA DE LA REPUBLICA DE EL SALVADOR

CONSIDERANDO:

I. Que el vigente Código de Procedimientos Civiles fue promulgado el 31 de diciembre de


1881, siendo incuestionable que cada vez evidencia los males del proceso heredado de la
Ley de Enjuiciamiento Civil Española de 1855, de donde fue tomado, por lo que como es
obvio, no satisface los derechos sustanciales de una justicia pronta y cumplida a que se
refiere el Art. 182 ordinal 5 de la Constitución;

II. Que si bien dicho código ha tenido reformas parciales a lo largo de su centenaria
existencia, que han importado algunos avances, en verdad, no han logrado acelerar
sensiblemente los procedimientos y generar un cambio de actitud de los operadores de
justicia;

III. Que los justiciables con absoluta razón demandan una completa transformación procesal,
coherente con el derecho a la protección jurisdiccional, en virtud de que el añejo código
nació en un contexto social y jurídico muy diferente al del siglo XXI y, por ende, se
muestra inadecuado para una satisfactoria solución a los conflictos propios de una
sociedad moderna e industrializada;

IV. Que la característica principal de la normativa de que se trata, es la de ser un proceso


escrito, lento, formal y burócrata; en consecuencia, se impone la implementación de un
código que mejore con creces la calidad de la justicia civil-mercantil, incorporando una
serie de preceptos modernos y propios de los procesos orales, como son el predominio
de la palabra hablada y la presencia de los principios de inmediación, publicidad,
concentración, función activa del juez, reducción de incidentes e impugnaciones y libre
valoración de la prueba;

V. Que en nuestro país se han tenido magníficos resultados en cuanto a economía procesal y
a la obtención de la verdad real, mediante el funcionamiento del proceso por audiencias
en materia procesal penal, de menores y familia, lo cual avala la nueva normativa en
materia procesal civil-mercantil y que sin duda redundará en un indubitable beneficio
para la ciudadanía salvadoreña.

POR TANTO,

En uso de sus facultades constitucionales y a iniciativa de los diputados Federico Guillermo Ávila
Qüehl, Norman Noel Quijano González, José Antonio Almendáriz Rivas, José Rafael Machuca
Zelaya, José Mauricio Quinteros Cubías, Walter Eduardo Durán y Arturo Argumedo, con el apoyo
de los Diputados Ricardo Bladimir González, Rolando Alvarenga Argueta, Luis Arturo Fernández,
Oscar Abraham Kattán, Douglas Alejandro Alas García, Rubén Antonio Álvarez Fuentes, Herberth

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CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

Néstor Menjívar Amaya, Irma Segunda Amaya Echeverría, Ernesto Antonio Angulo Milla,
Fernando Alberto José Ávila Quetglas, Ingrid Berta María Béndix de Barrera, Noel Abilio Bonilla
Bonilla, Yohalmo Edmundo Cabrera Chacón, Carmen Elena Calderón Sol de Escalón, Oscar
Enrique Carrero, José Vidal Carrillo Delgado, Carlos Alfredo Castaneda Magaña, José Ernesto
Castellanos Campos, María Julia Castillo Rodas, Darío Alejandro Chicas Argueta, Carlos Cortez
Hernández, Luis Alberto Corvera Rivas, José Ricardo Cruz, Héctor Miguel Antonio Dada Hirezi,
María Patricia Vásquez de Amaya, Ana Vilma Castro de Cabrera, Juan Pablo Durán Escobar,
Antonio Echeverría Véliz, Omar Arturo Escobar Oviedo, Enma Julia Fabián Hernández, Fernando
Antonio Fuentes, Guillermo Antonio Gallegos Navarrete, Julio Antonio Gamero Quintanilla,
Argentina García Ventura, César Humberto García Aguilera, Juan García Melara, Manuel de
Jesús Gutiérrez Gutiérrez, Héctor Alfredo Guzmán Alvarenga, Carlos Walter Guzmán Coto, José
Cristóbal Hernández Ventura, Carlos Rolando Herrarte Rivas, Wilfredo Iraheta Sanabria, Jorge
Alberto Jiménez, Gladis Marina Landaverde Paredes, Benito Antonio Lara Fernández, Audelia
Guadalupe López de Kleutgens, Hortensia Margarita López Quintana, Francisco Roberto
Lorenzana Durán, Mario Marroquín Mejía, Alejandro Dagoberto Marroquín Cabrera, Manuel
Orlando Quinteros Aguilar, Hugo Roger Martínez Bonilla, Marco Tulio Mejía Palma, Manuel
Vicente Menjívar Esquivel, Roberto de Jesús Menjívar Rodríguez,Erick Mira Bonilla, Osmín
Romeo Molina Ríos, José Francisco Montejo Núñez, María Irma Elizabeth Orellana Osorio, Rubén
Orellana Mendoza, Mariella Peña Pinto, Juan Enrique Perla Ruiz, Mario Antonio Ponce López,
Gaspar Armando Portillo Benítez, Francisco Antonio Prudencio, Zoila Beatriz Quijada Solís,
Carlos René Retana Martínez, Carlos Armando Reyes Ramos, Inmar Rolando Reyes, Dolores
Alberto Rivas Echeverría, Santos Adelmo Rivas Rivas, Mauricio Ernesto Rodríguez, Hipólito
Baltazar Rodríguez Contreras, Abilio Orestes Rodríguez Menjívar, Ana Silvia Romero Vargas,
Victoria Rosario Ruiz de Amaya, Sandra Marlene Salgado García, Donato Eugenio Vaquerano
Rivas y Ana Daysi Villalobos de Cruz.

DECRETA, el siguiente:

CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL

LIBRO PRIMERO
DISPOSICIONES GENERALES

TÍTULO PRELIMINAR
PRINCIPIOS DEL PROCESO Y APLICACIÓN DE LAS NORMAS PROCESALES

CAPITULO PRIMERO
PRINCIPIOS PROCESALES

Derecho a la protección jurisdiccional

Art. 1.- Todo sujeto tiene derecho a plantear su pretensión ante los tribunales, oponerse a la ya
incoada, ejercer todos los actos procesales que estime convenientes para la defensa de su posición
y a que el proceso se tramite y decida conforme a la normativa constitucional y a las disposiciones
legales.

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SALA DE LO CONSTITUCIONAL, en la Sentencia emitida el veintisiete de abril


de dos mil nueve, en el proceso de AMPARO 441- 2007

“Que el derecho a la protección jurisdiccional conlleva, entonces, la posibilidad de


que un supuesto titular de derecho o interés legítimo pueda acceder a los órganos
jurisdiccionales a plantear su pretensión, a oponerse a la ya incoada, a ejercer todos
los actos procesales en defensa de su posición y a que el proceso se tramite y tramite
de conformidad a la Constitución y a las leyes correspondientes.”

SALA DE LO CONSTITUCIONAL Sentencia de fecha nueve de febrero de mil


novecientos noventa y nueve, pronunciada en el proceso de AMPARO 384-97

“...si el ente jurisdiccional decide rechazar la demanda incoada al inicio del proceso
en aplicación de una causa establecida en la norma jurídica que le impida entrar a
conocer del fondo del asunto planteado, no significa que con ello se esté vulnerando
el derecho al acceso a la jurisdicción, salvo que sea por interpretación restrictiva o
menos favorable a la efectividad del derecho fundamental aludido.”

CÁMARA DE LA SEGUNDA SECCIÓN DE ORIENTE, en la Sentencia emitida


a las once horas y treinta y seis minutos del día once de noviembre de dos mil trece,
bajo la Referencia APE-29-10-CPCM-2013

“Nuestro Código Procesal civil y mercantil establece en su artículo uno el derecho a


la protección jurisdiccional la cual se traduce como una tutela judicial efectiva para
el ejercicio o defensa de sus derechos con sujeción plena a un debido proceso, tal y
como lo ordena nuestra Constitución en su artículo 11, considerando también que
en el proceso civil y mercantil actual deben regir y garantizarse todos los principios
procesales que dan vida a ese debido proceso se realice asegurando y garantizando
todos los derechos de las partes, dando como resultado una tutela judicial efectiva.”

Vinculación a la Constitución, leyes y demás normas

Art. 2.- Los jueces están vinculados por la normativa constitucional, las leyes y demás normas
del ordenamiento jurídico, sin que puedan desconocerlas ni desobedecerlas.

Todo juez, a instancia de parte o de oficio, deberá examinar previamente la constitucionalidad


de las normas de cuya validez dependa la tramitación de cualquier proceso o el fundamento de las
decisiones que adopten en el mismo; y si alguna de ellas contradice la normativa constitucional, la
declarará inaplicable en resolución debidamente motivada, en la que se consignen la disposición
cuya inaplicabilidad se declara, el derecho, principio o valor constitucional que se considera
infringido y las específicas razones que fundamentan.

Las pruebas que se hubieren obtenido, directa o indirectamente, con infracción de derechos o
libertades fundamentales, no surtirán efecto.

SALA DE LO CONSTITUCIONAL, en la Sentencia de Incostitucionalidad


emitida el día diecinueve de diciembre de dos mil ocho, bajo la Referencia 27-2008

“La inaplicabilidad hace Referencia, precisamente, a la facultad de todo tribunal


de preferir la aplicación de la normativa constitucional-a título de derecho más

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CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

fuerte-, cuando resulte contradicha por la legislación secundaria. Esto es así


porque la responsabilidad de cuidar y defender el orden constitucional de valores,
corresponde como primera barrera, a los tribunales ordinarios, y en defecto de ellos,
a la jurisdicción constitucional.”

SALA DE LO CONSTITUCIONAL, en la misma Sentencia de Incostitucionalidad


27-2008

“Ahora bien, como en los casos de jurisdicción ordinaria la “inaplicabilidad”debe


entenderse limitada respecto de aquellas disposiciones susceptibles de aplicación.
En esa misma lógica, el Articulo 77 A de la Ley de Procedimientos Constitucionales
se refiere a dicha potestad de inaplicación. Como una consecuencia de la actividad
judicial en cuya validez dependa la tramitación de cualquier proceso o el fundamento
de las resoluciones que se pronuncien en el mismo.”

SALA DE LO CONSTITUCIONAL, en Inaplicabilidad 37-2011 de seis de julio


de dos mil once.

“…debe de verificarse que la declaratoria de inaplicabilidad remitida en esta


ocasión reúne los presupuestos mínimos derivables de los artículos 77-A y 77-C de
la L.Pr.Cn. para tramitar y decidir un proceso de inconstitucionalidad, entendiendo
por tales requisitos, básicamente: i) la relación directa y principal que debe
tener la disposición inaplicada con la resolución del caso o de la que dependa
su tramitación-Código Tributario, que sirve de base para los medios de prueba
admitidos en el procedimiento tributario iniciado en ese juzgado-; ii) la inexistencia
de pronunciamiento, por parte de esta Sala, respecto de esa disposición inaplicada-
no existe sentencia definitiva en la que se haya resuelto sobre la inconstitucionalidad
planteada en esa ocasión -; iii)el esfuerzo del juzgador, previo a la inaplicación,
de interpretar la norma conforme a la Constitución; y, finalmente, iv) la relación
de la disposición inaplicada, la norma o principios constitucionales supuestamente
vulnerados y las razones que sirven de fundamento de la Inaplicación.”

SALA DE LO CONSTITUCIONAL inconstitucionalidad/inaplicabilidad


Referencia: 42-2010, de fecha diez de septiembre de dos mil diez.

“De igual manera, en la referida resolución se manifestó que los jueces al inaplicar,
no sólo deben plasmar un análisis de constitucionalidad ─ mediante el cual
platee la incompatibilidad irremediable advertida entre la norma a inaplicar y la
Constitución─; sino que también, es necesario que efectúen un análisis de relevancia
en virtud del cual argumente que la resolución a dictar depende de la norma
cuestionada. En otras palabras, el control difuso requiere necesariamente de dos
juicios: el de pertinencia de la norma para resolver el caso, y el de constitucionalidad
de la misma, que es la esencia de la inaplicabilidad. Ahora bien, conforme a lo
expresado queda claro que en los casos de jurisdicción ordinaria ─como el que da
origen a este proceso─ la inaplicabilidad de las disposiciones sometidas al control
de constitucionalidad se entiende limitada a las disposiciones que precisamente son
susceptibles de ser aplicadas al caso concreto y que vinculan al juez porque de su
validez depende la resolución del conflicto.

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SALA DE LO CIVIL recurso de Casación 73 CAC 2011 de quince de febrero de


dos mil doce.

La Sala considera, que el vicio consistente en practicar un medio de prueba ilícito


consistente en “cualquier elemento de prueba que se haya obtenido o incorporado
al proceso en violación a una garantía constitucional o de las formas procesales
dispuestas para su producción, en forma general, es aquella que se encuentra
afectada por una conducta dolosa en cuanto a las formas de obtención y práctica
de la prueba, en todos aquellos supuestos en que la ley procesal regla la forma de
practicar una determinada prueba, la infracción de dicha normativa producirá,
salvo las excepciones, la inadmisibilidad e ineficacia del medio de prueba defectuoso
practicado.”

El impetrante sostiene, que el documento en el que consta la cláusula compromisoria,


no fue aportado como prueba al proceso sino exigido por el juez al demandante,
para el efecto de valorar si admitir o no la demanda.

La Sala considera, que dado que en el documento en el que consta la cláusula


compromisoria, fue agregado al proceso por el impetrante para probar su
legitimación para obrar, por ser el titular de un interés legalmente reconocido en
relación con la pretensión, es un medio de prueba que se presentó con la demanda,
de manera que no se han infringido las disposiciones de los Arts. 284 Inc. 1 o, 288
Inc. 1°y 2° 316 y 317 C.P.C.M. sino por el contrario es un medio de prueba obtenido
e incorporado al proceso de forma lícita.

Es importante señal también, que en relación a las pruebas, una vez que son
promovidas y aportadas al proceso, por el principio de la comunidad de la prueba,
benefician o perjudican a ambas partes involucradas en el mismo, por lo tanto, no
deben ser consideradas como de uso exclusivo de la parte que la promueve, ya que,
una vez anexada e incorporadas a las actas del proceso, las pruebas pertenecen a
éste como un todo, entendido como parte del proceso a ambas partes (demandado y
demandante), así como también al juez; la prueba una vez que ha sido aportada al
proceso tiene que ser tomada en cuenta en la valoración, sin importar que beneficie
a quien la aportó o a la parte contraria, de manera que el documento aportado
por el demandado junto a la demanda es un medio de prueba legal, por lo que al
utilizarlo para determinar el hecho controvertido consistente en la existencia de un
compromiso de arbitraje, no se cometió el vicio denunciado de haber usado para
establecer un medio de prueba ilegal.

Principio de legalidad

Art. 3.- Todo proceso deberá tramitarse ante juez competente y conforme a las disposiciones
de este código, las que no podrán ser alteradas por ningún sujeto procesal.

Las formalidades previstas son imperativas. Cuando la forma de los actos procesales no
esté expresamente determinada por ley, se adoptará la que resulte indispensable o idónea para la
finalidad perseguida.

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Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

CÁMARA DE LA SEGUNDA SECCIÓN DE ORIENTE, en el recurso de


Apelación APE-6-3-CPCM-2011 de fecha cuatro de abril de dos mil once.

“Con base al principio de legalidad establecido en el Art. 3 CPCM, el cual está


reconocido por la Constitución de la República en el artículo 11, los actos procesales
ya sea de las parte o del juez, para que tengan plena eficacia, deben realizarse con el
modo y el orden establecido en la ley, tal como dispone el citado artículo 3 CPCM…”

SALA DE LO CIVIL en la Sentencia de Casación 157-C- 2005 de trece de febrero


de dos mil seis.

“En reiterados fallos este tribunal ha subrayado que la interpretación de las


disposiciones procesales, con respecto al principio de legalidad, los preceptos del
Código de procedimientos deben interpretarse de modo tal que procuren la protección
y eficacia de los derechos de las personas y la consecución de los fines que consagra la
Constitución. En tal virtud el juzgador debe evitar el ritualismo o las interpretaciones
que supediten la eficacia del derecho, a aspectos meramente formales.”

Principio de defensa y contradicción

Art. 4.- El sujeto contra quien se dirija la pretensión tiene derecho a defenderse en el proceso,
interviniendo en las actuaciones y articulando los medios de prueba pertinentes.

En todo caso, cada parte tiene derecho a contar con la oportunidad de exponer su
argumentación y rebatir la de la contraria, y sólo cuando expresamente lo disponga la ley podrán
adoptarse decisiones sin oír previamente a una de las partes.

CÁMARA SEGUNDA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, Apelación, Referencia: 22-3CM-12-A de fecha diecisiete de mayo de dos
mil doce.

“En el presente proceso la Juez A Quo, violento el derecho de defensa de la parte


actora, de controvertir el documento presentado por la sociedad demandada en su
oposición, manifestando que no lo haría en virtud de que se había desistido de ella,
no teniendo en cuenta la comunidad de la prueba, ya que la contraparte manifestó
su voluntad de continuar con dicho medio probatorio a fin de que se determinara su
autenticidad, solicitando el peritaje respectivo.”

Principio de igualdad procesal

Art. 5.- Las partes dispondrán de los mismos derechos, obligaciones, cargas y posibilidades
procesales durante el desarrollo del proceso.

Las limitaciones a la igualdad que disponga este Código no deben aplicarse de modo tal que
generen una pérdida irreparable del derecho a la protección jurisdiccional.

SALA DE LO CONSTITUCIONAL, inconstitucionalidad Referencia: 10 2006


de fecha veintinueve de septiembre de dos mil once.

“Perfilado grosso modo el juicio de igualdad, corresponde ahora especificar cada


uno de los elementos que lo integran.

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UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

El examen de igualdad requiere, como punto de partida, la existencia de un término


de comparación, el cual ─según la jurisprudencia de esta Sala─ debe ser aportado
por el demandante, para estimar que ha configurado adecuadamente su pretensión.
El término de comparación es una herramienta de análisis que permite al tribunal
constatar que al demandante, ante situaciones de hecho iguales, se le ha dispensado
un trato diferente sin justificación razonable, o bien, que en supuestos distintos se le
ha equiparado. La parte demandante debe señalar, pues, con respecto a quiénes o
en relación con qué otra situación se discrimina (Sentencia de 15-III-2006, Inc. 10-
2005, considerando III 1).

Además, para que el trato desigual contenido en la norma constituya una diferenciación
admisible desde el punto de vista constitucional, más no una discriminación
inconstitucional, debe tener un fin constitucionalmente legítimo (Sentencia de 15 -III-
2006, Inc. 10-2005, Considerando III 1). La norma debe tener una finalidad, ya que
no sería justificable, desde ningún punto de vista, un trato desigual caprichoso. No se
exige, empero, que la norma tenga como finalidad expresa la consecución de un valor
constitucional, sino que basta que dicha finalidad no sea contraria al sustrato ético de la
Constitución. Esta es la solución más acorde con el respeto a la libertad de configuración
del legislador.Además, para que el trato desigual enjuiciado sea constitucionalmente
admisible, debe ser idóneo o útil para obtener el fin perseguido mediante el mismo
(Sentencia de 15-III-2006, Inc. 10-2005, Considerando III 1). Se trata ─en palabras del
Tribunal Constitucional español─ de que la exigencia normativa guarde una directa y
razonable relación con la finalidad perseguida (STC 114/1987, de 6- VII- 1987, caso
Exigencia de Buena Conducta para causar Pensiones). Finalmente, para que el trato
desigual sea conforme a la Constitución, debe ser proporcionado con respecto a la
finalidad perseguida. Para determinar el cumplimiento de este requisito, deberá evaluarse
“el nivel de equilibrio que existe entre el efecto producido por la medida y el sacrificio
que la misma implica”, resultando en una “relación de procedencia condicionada entre
los bienes jurídicos en colisión”(Sentencia de 15-III- 2006, Inc. 10-2005, Considerando
III 1).Así como el actor tiene la carga de aportar el término de comparación, al órgano
emisor de la disposición impugnada le corresponde probar haber dado cumplimiento
a la normativa constitucional, especialmente, a las obligaciones concretas que para él
derivan de la Ley Suprema (Sentencia de 17-V-2002, Inc. 6-2000, Considerando VII
3)…”

Principio dispositivo

Art. 6.- La iniciación de todo proceso civil o mercantil corresponde al titular del derecho
subjetivo o interés legítimo que se discute en el proceso; y dicho titular conservará siempre la
disponibilidad de la pretensión.

Las partes podrán efectuar los actos de disposición intraprocesales que estimen convenientes,
terminar el proceso unilateralmente o por acuerdo entre las mismas y recurrir de las resoluciones
que les sean gravosas, de conformidad a lo dispuesto en este código.

Principio de aportación

Art. 7.- Los hechos en que se fundamente la pretensión y la oposición que se conoce en el
proceso sólo podrán ser introducidos al debate por las partes.

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CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

La actividad probatoria debe recaer exclusivamente sobre los hechos afirmados por las partes
o por los que tienen la calidad de terceros de conformidad a las disposiciones de este código, en su
caso; en consecuencia, el juez no podrá tomar en consideración una prueba sobre hechos que no
hubieran sido afirmados o discutidos por las partes o terceros.

La proposición de la prueba corresponde exclusivamente a las partes o terceros; sin embargo,


respecto de prueba que ya fue debida y oportunamente aportada y controvertida por las partes, el
juez podrá ordenar diligencias para mejor proveer con el fin de esclarecer algún punto oscuro o
contradictorio, de conformidad a lo dispuesto en este Código.

SALA DE LO CIVIL, Casación Referencia: 360-CAC-2012 de fecha ocho de


agosto de dos mil catorce.

“De estas aseveraciones hechas por el Tribunal Ad quem, la Sala considera que las
referidas diligencias para mejor proveer son complementarias a las partes, no se
trata, pues, de que el juez pueda suplir la inactividad probatoria de las partes; se
trata, por el contrario, de posibilitar al juez la práctica de actividad probatoria para
complementar la efectuada por las partes y que no ha obtenido su convencimiento.

En ese sentido, ello vincula la aplicación de la regla de juicio no sólo a la valoración


de la prueba practicada por las partes, sino igualmente a la que pueda llevar a cabo
el propio juez. El juez tiene, pues, unos poderes probatorios que están limitados a la
mera complementariedad y, en consecuencia, limitados por la actuación anterior de
las partes.

Por consiguiente, si partimos que del juicio valorativo del juzgador éste infiere la
necesidad de obtener la aclaración de una prueba vertida de forma inconclusa o ambigua
para efectos de integridad probatoria, entonces ello representaría un condicionamiento
para decidir el asunto que se discute, y significará que la eficacia de aquélla es relevante
e insoslayable para complementar su convicción sobre los hechos presentados a su
valoración.

Si en el caso sub lite, el Tribunal Ad quem fue contundente en razonar que la


prueba pericial eficaz era ineludible para decidir el asunto controvertido a efectos
de valoración de la prueba, su abandono injustificado constituye una infracción a
la actividad probatoria, puesto que como ocurrió en el presente caso la Cámara
Sentenciadora, cuando decide celebrar nueva audiencia de apelación, no se
encontraba inhibida legalmente para reiterar la terminación de la diligencia en
cuestión, dado que el procedimiento señalado para la interrupción de la audiencia
en los casos señalados por el Art.211 C.P.C.M, busca la eficacia de las actuaciones
judiciales no su paralización.

En particular, la mencionada diligencia pendiente de realizar que deriva de la


facultad conferida en el Art.7 inciso 3° del CPCM, es una circunstancia excepcional
al principio de unidad de acto (concentración), en cuanto se caracteriza por
acordarse dentro del plazo para dictar sentencia, el cual volverá a computarse
íntegramente una vez practicadas las diligencias acordadas previamente por el
Tribunal; y de este modo, si el análisis hecho por la Cámara Ad quem, en razón
de la insuficiencia probatoria considera conveniente ejecutar aquella para su

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UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

pronunciamiento definitivo, debió entonces culminar la misma ya que ésta generó


especulación en el juicio valorativo, cuya omisión merma el derecho de defensa de
la parte que lo introdujo como elemento probatorio a fin de acreditar los hechos
afirmados, que busca la protección de sus propios intereses.

El poder concedido al juez para practicar de oficio la complementariedad de


una prueba a través de las diligencias para mejor proveer, constituyen parte de
la actividad probatoria, que es una acción procesal desarrollada en el seno del
proceso, debiendo ser desarrollada conforme ciertos procedimientos legales, cuya
inobservancia provocará el quebranto de la estructura procesal conformada por
principios rectores, que en el caso particular, atañen a las reglas de contradicción
y aportación que redundan en la tutela de los derechos de las partes, a través de la
eficacia y credibilidad del proceso.

Bajo tales circunstancias, es preciso señalar que aún cuando la normativa procesal
faculta al juzgador la delegación de la práctica de un reconocimiento judicial cuando
no fuese posible practicarlo en la sede del Tribunal o dentro de su circunscripción
territorial, en el caso subjúdice, la insuficiencia de dicha prueba versa sobre el
informe pericial presentado inconcluso, circunstancia que esta Sala considera ser
de mayor aseguramiento sí es realizada por la Cámara Ad quem, debido a que
precisamente su desacierto ocurre en la actividad de primera instancia, por lo que
será necesario que la diligencia se ejecute por aquélla para mejor garantía de la
actividad probatoria.

La prueba de peritos es, pues verdadero medio de prueba a través de conocimientos


científicos, artísticos o técnicos especializados, que sirve para que el juez pueda
obtener el convencimiento sobre la veracidad de circunstancias, que conformen el
supuesto de hecho de la norma cuya aplicación se pide o de la relación jurídica
llevada ante él.”

Principio de oralidad

Art. 8.- En los procesos civiles y mercantiles las actuaciones se realizarán de forma
predominantemente oral, sin perjuicio de la documentación, de los actos procesales que deban
hacerse constar por escrito y de las aportaciones documentales que en este código se establecen.

Principio de publicidad

Art. 9.- Las audiencias de todos los procesos previstos en este Código serán públicas, salvo
que el juez, de oficio o a instancia de parte, disponga lo contrarío por razones de seguridad
nacional, de moral o de orden público, o de protección de la privacidad de alguna de las partes.

La restricción de la publicidad de las audiencias deberá acordarse en resolución debidamente


motivada, en la que se precisen de manera expresa y clara las razones de dicha restricción, así
como la determinación de quienes, además de las partes, sus apoderados o representantes, podrán
estar presentes en las mismas.

Las partes, sus apoderados, representantes, los abogados y cualquiera otra persona que alegue
algún interés jurídicamente protegido, tendrán acceso al expediente judicial.

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CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

Principio de inmediación

Art. 10.- El juez deberá presidir personalmente tanto la celebración de audiencias como la
práctica de los medios probatorios, quedando expresamente prohibida la delegación de dicha
presencia, so pena de nulidad insubsanable; excepto cuando la diligencia probatoria deba realizarse
fuera de la circunscripción del tribunal, en cuyo caso el juez podrá encomendarla mediante
comisión procesal, debiendo el juez delegado presidir la práctica de la misma.

CÁMARA DE LA TERCERA SECCIÓN DEL CENTRO, SAN VICENTE


Apelación Referencia N°C-46-PE-MC-2013-CPCM Fecha: diecisiete de octubre
de dos mil trece.

“Al folio […] consta el acta de la Audiencia de Prueba o de Oposición como le


llama el señor Juez A Quo, dentro del presente PROCESO EJECUTIVO

MERCANTIL de las once horas del día diecinueve de Febrero de dos mil trece, la
cual fue presidida por el señor Juez de lo Civil Propietario de Zacatecoluca Doctor
[…], tal como consta en dicha acta, por establecerse de esa manera su nombre y
firma; sin embargo la sentencia de mérito de las ocho horas y quince minutos del
día veintiséis de agosto de dos mil trece y agregada a folios a […] es desarrollada y
firmada por el señor juez licenciado […], en su calidad de Juez de lo Civil Interino
de Zacatecoluca, acreditando lo anterior con la firma que se lee en dicha sentencia.

De lo anterior se puede establecer que la autoridad que emitió la sentencia ut supra


relacionada, no estuvo presente en la Audiencia respectiva y por lo tanto no presidió
personalmente dicha Audiencia Probatoria regulada en el Art. 467 CPCM, violentando
con esto el Principio de Inmediación, cuya consecuencia jurídica es la nulidad
insubsanable de los actos que se vean afectados por esta omisión y es que si bien es
conocido socialmente el deceso del Doctor […] y por lo tanto es muy probable que no
haya alcanzado a dictar todas las sentencias que presidió, por lo que el juez interino
que llegara, tenía que percatarse que ante tal situación, lo más razonable y apegado a
Derecho era repetir las audiencias en las que el Doctor […] no logró emitir sentencia,
para respetar de esta manera los Principios establecidos en el Código Procesal Civil
y Mercantil, especialmente el de Inmediación, algo que en el presente proceso no se
hizo y en consecuencia se ha incurrido en una nulidad insubsanable la cual puede ser
declarada de oficio, de conformidad a los Arts. 235 y 238 CPCM.

En conclusión, esta Cámara deberá anular todos los actos procesales realizados
en primera instancia a partir del acta de Audiencia de oposición del PROCESO
EJECUTIVO MERCANTIL, de las once horas del día diecinueve de Febrero de
dos mil trece, de folios […], dicha audiencia inclusive, debiendo el señor Juez A
Quo interino reponer las diligencias anuladas a su costa, por el efecto ex tunc de
esta resolución y en la cuales deberán respetar los todos los Principios del proceso
establecidos en la Constitución y el Código Procesal Civil y Mercantil.”

Principio de concentración

Art. 11.- Los actos procesales se realizarán con la mayor proximidad temporal entre ellos,
debiendo el juez concentrar en una misma sesión todos los actos que sea posible realizar; asimismo,
procurará decidir en una misma resolución todos los puntos pendientes.

19
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

Si una audiencia requiere más de una sesión, se llevará a cabo en los días subsiguientes hasta
darla por concluida, pudiéndose ordenar por el juez que la misma continúe en días no hábiles.

Obligación de colaborar

Art. 12.- Toda persona o autoridad está en la obligación de colaborar con la justicia, cuando
sean requeridas para ello. En consecuencia, a quien se niegue a colaborar se le impondrá una multa
cuyo monto, según la gravedad del caso, se fijará entre cinco y diez salarios mínimos más altos,
vigentes. Si el hecho fuere constitutivo de delito, el juez certificará lo conducente a la Fiscalía
General de la República.

Principio de veracidad, lealtad, buena fe y probidad procesal

Art. 13.- Las partes, sus representantes, sus abogados y, en general, cualquier partícipe en el
proceso, deberán actuar con veracidad, lealtad, buena fe y probidad procesal.

El juez procurará impedir toda conducta que implique actividad ilícita o genere dilación
indebida del proceso.

La infracción de las obligaciones de veracidad, lealtad, buena fe y probidad procesal se


sancionará con la condena en costas, y con el resarcimiento de los daños y perjuicios que hubiera
causado el infractor; sin perjuicio, de que el juez remita a la Sección de Investigación Profesional
de la Corte Suprema de Justicia la respectiva certificación sobre la conducta de los abogados
intervinientes.

Si la infracción fuese constitutiva del delito de falsedad, el juez certificará lo conducente a la


Fiscalía General de la República.

CÁMARA DE LA TERCERA SECCIÓN DE OCCIDENTE, en la Sentencia de


Apelación APC 37-14, de fecha siete de noviembre de dos mil catorce.

“La buena fe, la lealtad, la veracidad y la probidad son principios éticos que han
sido incorporados en los sistemas jurídicos y que componen el llamado “principio
de moralidad”del derecho procesal. Lo que se pretende hacer al incorporar estos
preceptos morales al derecho positivo es darle carácter vinculante a la forma de
actuar de las partes, por considerar que ésta es jurídicamente relevante dentro del
proceso judicial….La lealtad o buena fe son dos manifestaciones del mismo aspecto,
por cuanto ambas se refieren a las conductas de las partes y con el fin de obtener
la recta administración de justicia. Este principio se concreta en que las partes no
utilicen el proceso o las actuaciones de éste para lograr fines fraudulentos o dolosos,
o para alegar hechos contrarios a la realidad, o emplear medios que tiendan a
entorpecer la buena marcha del procedimiento.”

Principio de dirección y ordenación del proceso

Art. 14.- La dirección del proceso está confiada al juez, quien la ejercerá de acuerdo a lo
establecido en este código. En consecuencia, deberá conducir los procesos por la vía procesal
ordenada por la ley, no obstante que la parte incurra en error.

Iniciado el proceso, el juez impulsará su tramitación, disponiendo las actuaciones oportunas y


adecuadas para evitar su paralización, adelantando su trámite con la mayor celeridad posible; por

20
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

tanto, será responsable de la ordenación del proceso, así como de cualquier demora ocasionada por
su negligencia.

CÁMARA SEGUNDA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, Apelación, Referencia: 72-3CM-14-A, de fecha diecisiete de noviembre
de dos mil catorce.

En relación a la reconducción de los procesos por parte de los jueces por haber
utilizado la parte demandante la vía procesal errónea, el Art. 244 Inc. 1° pte. 2ª del
CPCM; establece: “Si se considerase que el proceso determinado por el demandante
no corresponde al valor señalado o a la materia a la que se refiere la demanda, el
juez dará al asunto la tramitación que corresponda.” La norma citada es de carácter
imperativo y fija la obligación judicial oficiosa de examinar la correcta elección del
proceso, hecho inicialmente por la parte actora, su consecuencia es que el juzgador
es obligado expresamente por la ley a iniciar y tramitar las pretensiones tomando en
cuenta la materia y el valor de las pretensiones, instaurándose una causa legal de
subsanación de pleno derecho cuando las partes incurran en traspié al invocar la
vía procesal errónea. Debido a que el juzgador es quien examina in limine el escrito
de demanda, le corresponde también examinar la elección correcta del proceso,
consecuencia de ello y bajo el principio Iura Novit Curia, tiene la obligación de
encausar a las partes sobre el proceso adecuado.

CÁMARA PRIMERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, SAN SALVADOR, Apelación N°156-49CM1-2013 de fecha dieciocho
de diciembre de dos mil trece.

“Respecto al único punto de Apelación, es preciso mencionar que ciertamente el


Art. 14 CPCM., instituye la obligación al juez de dirigir el proceso, por lo que no
se considerará como un mero espectador del mismo, sino por el contrario, para
ejercer su rol de garante de la constitucionalidad deberá impulsar y encausarlo
correctamente para que éste no se paralice. Es en esa misma línea que el Art. 460
Inc. 2° de tal cuerpo normativo prescribe la facultad al operador de justicia, de
prevenir al demandante cuando advierta la existencia de defectos procesales
subsanables para superarlos. Sin embargo, dicha función no debe considerarse
como una obligación generalizada, pues su finalidad es evitar inconvenientes futuros
derivados de las deficiencias en la demanda; sin embargo, su omisión no implica per
se una afectación a la expectativa procesal o a los derechos de las partes.

Tal atribución debe interpretarse sistemáticamente y a la luz del principio de


“aportación”que contempla el Art.7 relacionado con lo dispuesto en el Art. 321
CPCM., que implica que: “Los hechos en que se fundamente la pretensión y la
oposición que se conoce en el proceso sólo podrán ser introducidos al debate por
las partes; asimismo, la proposición de la prueba corresponde exclusivamente
a las partes o terceros”; dicho principio constituye una derivación del principio
constitucional de Imparcialidad que prescribe el Art. 172 Inc. 3° Cn.

Lo anterior, en concordancia con el principio iura novit curia, deducido de los Arts.
14 y 15 CPCM., conlleva a que el juzgador puede suplir los errores o deficiencias
de las partes si pertenecen al Derecho, mas no en los hechos o en las pruebas

21
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

presentadas; pues hacerlo constituiría un exceso en la función jurisdiccional en


desmedro del citado principio legal de aportación y constitucional de imparcialidad.

En estricta relación con lo anterior está la Congruencia, principio universal del


derecho procesal, derivado del derecho de petición y respuesta que prevé el Art. 18
Cn., consagrado y desarrollado en el Art. 218 CPCM., que prescribe que las sentencias
deberán resolver todas las pretensiones y puntos litigiosos planteados y debatidos.
De manera que el juez deberá ceñirse a las peticiones formuladas por las partes, con
estricta correlación entre lo que se pide y lo que se resuelve sin otorgar más de lo pedido
por el actor, menos de lo resistido por el demandado, ni cosa distinta a la solicitada
por las partes. No pudiendo entonces decidir ante la ausencia de elementos fácticos
mínimos, con base a su pericia o meras especulaciones, cuál es la pretensión que tiene el
representante de alguna de las partes, cuando no la menciona.

De lo que se colige que uno de los requisitos fundamentales para sentenciar, es que
mínimamente el peticionario exponga lo que espera sea resuelto por un Tribunal,
pues es un elemento condicionante para que el juzgador resuelva conforme lo pedido,
cuya ausencia supone una omisión que impide un efectivo y real pronunciamiento.

En síntesis, la congruencia consiste en la adecuación de la actividad judicial a


lo solicitado por las partes, con el objeto de evitar una actuación parcial y una
disminución en los principios de defensa y contradicción, enmarcados en el Art. 4
CPCM.

La congruencia es un principio general normativo que limita las facultades


resolutivas del juzgador.

El fundamento de esta limitante radica en la naturaleza privada de los derechos


controvertidos en la sede judicial, pues si el operador de justicia pudiera
pronunciarse sobre cosa distinta de lo pedido perderían su calidad de derechos
privados. Se trata de una consecuencia del principio dispositivo regulado en el Art.
6 CPCM., en el sentido que son las partes quienes delimitan lo que queda sometido
a decisión judicial. Consta en el acta de audiencia preparatoria de las nueve horas
del día seis de junio de dos mil trece […], específicamente en el romano V la fijación
definitiva de los términos del debate, en el sentido que el Licenciado […], solicitó la
restitución y devolución del inmueble descrito en la demanda, para el demandante
[…]; asimismo, el Licenciado […] expresó que estaba de acuerdo con lo planteado.
Por lo tanto, la jueza a quo expresó a las partes que la fijación de la pretensión
de forma definitiva era que “el Licenciado […] ejerciendo la acción de dominio
pide que le sea restituido y devuelto el inmueble al demandante”. Por otra parte,
en la sentencia de las catorce horas y treinta y siete minutos del día dieciocho de
septiembre de dos mil trece, específicamente en el párrafo segundo de fs. 1, en el
que literalmente se establece que las pretensiones que conforman el objeto de la
misma consisten en: a) La reivindicación de dominio al [demandante]; b) Se ordene
la restitución del inmueble objeto de la controversia, a su propietario, ya sea por
medio de la entrega voluntaria o el lanzamiento.En el presente caso, como consta
en la sentencia de mérito, la juzgadora condenó al demandante, […], a devolver
la cantidad de cinco mil cuatrocientos cincuenta dólares de los Estados Unidos de
América al demandado […]; bajo el argumento que éste último, efectuó pagos sin

22
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

que se haya comprobado una causa lícita, ya que el actor, […] inscribió el inmueble
objeto del litigio a su favor, sin la oportunidad de recuperar el mismo, por haber
transcurrido el plazo pactado en el contrato para que el demandado lo recuperara.
De modo que -a su criterio- dichos pagos quedaron sin efecto alguno, y en virtud
del principio de legalidad consideró necesario obligar a la parte actora a devolver
las cantidades depositadas en su cuenta de ahorro, por no haber sido justificada la
razón de su abono, constituyendo pago de lo no debido; pero tal aseveración no es
acertada, en virtud que la naturaleza jurídica de tal figura obedece a un cuasicontrato
civil, contemplado por lo dispuesto en los Arts. 2036 y 2046 C.C., al afirmar que si
quien paga no estaba en la obligación de hacerlo, y prueba tal circunstancia, puede
repetir lo pagado, situación que no es el caso de autos. De lo anterior se infiere
que, si bien es cierto tales abonos no fueron justificados, la señora jueza a quo se
pronunció sobre una cuestión que no fue punto de oposición en la contestación
de la demanda, y tampoco se constituyó en objeto de debate en el proceso, pues
el demandado no formuló ninguna reconvención, configurándose un exceso en sus
facultades al pronunciarse sobre un punto no controvertido. Esta Cámara concluye,
que en el caso que se juzga, se vulnera el principio de congruencia procesal, en
virtud que la juzgadora, en su sentencia de mérito, hace un pronunciamiento sobre
un punto litigioso no planteado y debatido en el proceso.”

Obligación de resolver

Art. 15.- El juez no podrá, bajo ningún pretexto, dejar de resolver, ni aplazar, dilatar o negar
la decisión de las cuestiones debatidas en el proceso.

El incumplimiento de las obligaciones contenidas en este Código será sancionado de


conformidad a lo establecido en la Ley Orgánica Judicial.

Principio de gratuidad de la justicia

Art. 16.- Toda persona tiene derecho a que se le imparta justicia gratuitamente.

CAPÍTULO SEGUNDO

REGLAS PARA LA APLICACIÓN DE LAS NORMAS PROCESALES Ámbito


material de aplicación del código

Art. 17.- Los procesos y procedimientos civiles y mercantiles se tramitarán conforme a lo


dispuesto en este código, sin perjuicio de lo previsto en tratados internacionales.

Las diligencias judiciales no contenciosas se tramitarán de acuerdo a lo previsto en la


respectiva ley de la materia; de no existir procedimiento se aplicarán las disposiciones del proceso
abreviado, en lo que fueren aplicables.

SALA DE LO CIVIL, casación 283CAC2009 de dieciocho de enero de dos mil


diez.

“Tradicionalmente se ha conceptuado a la jurisdicción voluntaria como aquella


en la que no media cantación de partes y es precisamente este criterio el que ha
informado a la totalidad del Codigo de Procedimientos Civiles.”

23
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

Interpretación de las disposiciones procesales


Art. 18.- Las disposiciones de este código deberán interpretarse de tal modo que se procure la
protección y eficacia de los derechos de las personas y la consecución de los fines que consagra la
Constitución, dentro del respeto al principio de legalidad. En consecuencia, el juez deberá evitar el
ritualismo y las interpretaciones que supediten la eficacia del derecho a aspectos meramente formales.
Integración de las normas procesales
Art. 19.- En caso de vacío legal se deberá acudir a la regulación y fundamentos de las normas
que rigen situaciones análogas, a la normativa constitucional y a los principios que derivan de este
código, a la doctrina legal, a la doctrina de los expositores del derecho; y, a falta de todo ello, a
consideraciones de buen sentido y razón natural, atendidas las circunstancias del caso.
CÁMARA SEGUNDA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL
CENTRO, Apelación Referencia: 15-3-CM1 de fecha quince de febrero de dos mil
doce.
“En ese sentido, el Art.19 CPCM, sobre la integración de las normas procesales,
señala que en caso de vacío legal se deberá acudir a la regulación y fundamentos
de las normas que rigen situaciones análogas, a la normativa constitucional y a los
principios que derivan de dicho código, a la doctrina legal, a la doctrina de los
expositores del derecho, y a falta de todo ello, a consideraciones de buen sentido y
razón natural, atendidas las circunstancias del caso.
Lo anterior se encuentra enmarcado dentro de las fuentes del Derecho que,
particularmente para nuestro Derecho Mercantil, conforme al Art. 1 C.Co., se parte
de las disposiciones contenidas en el Código de Comercio y en las demás leyes
mercantiles, en su defecto, por los respectivos usos y costumbres, y a falta de éstos,
por las normas del Código Civil, lo anterior debido a que, como explica el autor
español Joaquín Garrigues, en el Derecho Mercantil se debe considerar la fuente
material como elemento que contribuye a la creación del derecho – convicción
jurídica de los comerciantes, tradición, naturaleza de las cosas y otros factores
morales, económicos, políticos, etc. – y la fuente formal como forma externa de
manifestarse el Derecho Positivo.”
SALA DE LO CONSTITUCIONAL, Amparo Interlocutorias – Improcedencias
Referencia: 408-2010 de fecha veintisiete de octubre de dos mil diez.
“Ahora bien, para fundamentar el carácter de fuente del derecho y, por tanto, la
fuerza vinculante de la jurisprudencia, es oportuno evocar la útil distinción de los
conceptos de disposición y norma que ha sido desarrollada por la Teoría del Derecho.
De esta manera, conviene señalar que por disposiciones jurídicas debe entenderse
los enunciados o formulaciones lingüísticas expresados en textos normativos, que
es el objeto que ha de ser interpretado por los jueces y tribunales; en cambio, las
normas jurídicas se traducen en los significados prescriptivos o deónticos que son
atribuidos a tales enunciados mediante la interpretación.
En consecuencia, las disposiciones jurídicas no son otra cosa más que el articulado
completo de una ley y, por el contrario, las normas de esa misma naturaleza
encuentra su génesis en la interpretación que de aquellas se lleva a cabo, justamente,

24
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

dicha actividad se verifica en la jurisprudencia emanada de los jueces y tribunales,


en concreto, en la justificación de sus decisiones, esto es, en la ratio decidendi.

Por ello, se concluye que las normas, al igual que las disposiciones que contienen los
textos legales, tienen un mismo nivel jerárquico y normativo, por lo que es posible
sostener el carácter vinculante de los significados que las autoridades judiciales
atribuyen a los postulados legales por medio de la interpretación.

Subsecuentemente, debe afirmarse que la ratio decidendi contenida en las


providencias jurisdiccionales es una auténtica norma jurídica concretada
jurisprudencialmente, la cual es fuente del derecho y, por ello posee fuerza
vinculante. Tal circunstancia genera importantes consecuencias, una de las cuales
se refiere a que el tribunal que ha adscrito una norma legal a una disposición
jurídica queda vinculado a ella, debido a que, por exigencia de la seguridad jurídica
y del principio de universabilidad, las entidades judiciales –incluidas las Salas-
deben estar dispuestas a mantener, en lo sucesivo, el significado que atribuyan a los
enunciados legales que interpretan. Se trata del denominado autoprecedente que, en
términos generales, alude a la obligación que tiene todo órgano jurisdiccional de
resolver del mismo modo los casos sustancialmente iguales y futuros y, además, de
justificar la diferencia de los que no se rigen por la norma derivada.”

CORTE SUPREMA DE JUSTICIA EN CORTE PLENA CONFLICTOS DE


COMPETENCIA EN DERECHO PRIVADO Y SOCIAL de Referencia: 60-COM-
2014 de fecha dieciséis de octubre de dos mil catorce.

“Es decir, la jurisprudencia es “una actividad racional argumentativa creadora de


normas”que constituye un autoprecedente para el ente que la emite y un precedente
vertical para los entes jurisdiccionales ubicados en la jerarquía inferior de la
estructura de la organización, por medio del cual poder resolver casos futuros
que guarden semejanza relevante con el ya decidido. De ahí que la jurisprudencia
sea fuente del derecho y que pueda servir de sustento jurídico a las resoluciones
judiciales (Sala de lo Constitucional, nueve horas un minuto del veintisiete de
octubre de dos mil diez, III, 2, A, i, expediente marcado al 408-2010; Sala de lo
Constitucional, catorce horas cuarenta y un minutos del dieciséis de diciembre de
dos mil trece, IX, 2, literal A, párrafo 2, expediente marcado al 7-2012; sentencia
de la Sala de lo Constitucional diez horas cuarenta y un minutos, del veintitrés de
noviembre de dos mil once, I, 1, A, expediente marcado al 11-2005; sentencia de la
Sala de lo Constitucional de las diez horas, catorce de octubre de dos mil trece, V).”

Aplicación supletoria del Código

Art. 20.- En defecto de disposición específica en las leyes que regulan procesos distintos del
civil y mercantil, las normas de este código se aplicarán supletoriamente.

25
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

TÍTULO PRIMERO
JURISDICCIÓN Y COMPETENCIA DE LOS TRIBUNALES

CAPÍTULO PRIMERO
JURISDICCIÓN

Jurisdicción exclusiva de los tribunales civiles y mercantiles salvadoreños

Art. 21.- Son competentes los tribunales civiles y mercantiles salvadoreños para conocer de
las distintas clases de procesos en los supuestos siguientes:
1° En materia de derechos reales y arrendamientos de inmuebles que se hallen en El
Salvador.
2° Cuando se trate de la constitución, validez, nulidad o disolución de personas jurídicas que
tengan domicilio en El Salvador, o de las decisiones de sus órganos.
3° Cuando la pretensión se refiera a la validez o nulidad de inscripciones practicadas en un
registro público salvadoreño.

Todo sin perjuicio de lo establecido en los tratados vigentes en El Salvador.

Otros supuestos de jurisdicción de los tribunales salvadoreños

Art. 22.- Además de los casos del artículo anterior, los tribunales salvadoreños podrán
conocer:
1°. Cuando las partes se hubieren sometido expresa o tácitamente a ellos;
2°. Cuando el demandado, cualquiera que sea su nacionalidad, tuviere domicilio o residencia
en El Salvador. Estará en esta situación la persona jurídica extranjera con agencia, filial o
sucursal en el país, en lo que corresponde a los actos y contratos celebrados por medio de
éstas;
3°. Cuando la obligación debe ser cumplida en el país; y
4º. Cuando la pretensión se funde en un hecho, acto o negocio jurídico ocurrido, celebrado o
con efectos en el territorio nacional.

Abstención de jurisdicción

Art. 23.- Los tribunales civiles y mercantiles salvadoreños se abstendrán de conocer de los
asuntos que se les sometan si concurre en tales asuntos alguna de las circunstancias siguientes:
1° Cuando se haya formulado demanda o solicitado ejecución respecto de sujetos o bienes
que gocen de inmunidad de jurisdicción conforme a las normas del Derecho Internacional
2° Cuando, en virtud de un tratado vigente en El Salvador, el asunto se encuentre atribuido
con carácter exclusivo a la jurisdicción de otro Estado.
3° Cuando el asunto no le venga atribuido de acuerdo con lo dispuesto en el artículo anterior.

Examen de la falta de jurisdicción

Art. 24.- Presentada la demanda, el tribunal examinará su jurisdicción y, si entiende que


carece de ella, la declarará improponible y pondrá fin al proceso.

Si tal defecto es advertido hasta en etapas procesales posteriores, sea de oficio o a petición
de parte, la abstención se acordará previa cita de todas las partes personadas para una audiencia
dentro de los cinco días siguientes al de la notificación, con suspensión del procedimiento; sin

26
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

embargo, cuando la parte no la hubiera pedido en su primera intervención, la alegación no surtirá


el efecto suspensivo a que se ha hecho Referencia.

Efectos de la denuncia de jurisdicción

Art. 25.- La suspensión del procedimiento producida por la alegación de falta de jurisdicción
no obstará a que el tribunal que conoce de la pretensión practique, a instancia de parte, cualquier
actuación de aseguramiento de prueba y adopte las medidas cautelares que considere necesarias
para evitar perjuicios irreparables que pudiere ocasionarle al demandante la suspensión del
procedimiento.

CAPÍTULO SEGUNDO
COMPETENCIA Y PREJUDICIALIDAD

Indisponibilidad de la competencia

Art. 26.- La competencia, como norma general, es indisponible; excepto en razón del territorio
conforme a las reglas establecidas en este código.

Competencia de la Corte Suprema de Justicia en Pleno

Art. 27.- La Corte Suprema de Justicia en Pleno conocerá:


1°. De las abstenciones y recusaciones conforme a lo dispuesto en este código;
2°. Del recurso de casación cuando la Sala de lo Civil ha conocido en apelación, con
exclusión de los magistrados que integran dicha sala;
3°. De los conflictos de competencia; y
4°. De los demás asuntos que determinen las leyes.

Competencia de la Sala de lo Civil de la Corte Suprema de Justicia

Art. 28.- La Sala de lo Civil de la Corte Suprema de Justicia conocerá:


1°. De los procesos de exequátur;
2°. Del recurso de casación;
3°. Del recurso de apelación cuando las cámaras de segunda instancia hayan conocido en
primera instancia;
4°. De la revisión de sentencias firmes; y
5°. De los demás asuntos que determinen las leyes.

Competencia de las cámaras de segunda instancia

Art. 29.- Las cámaras de segunda instancia conocerán:


1°. Del recurso de apelación;
2°. De las demandas contra el Estado; y
3°. De los demás asuntos que determinen las leyes.

CORTE SUPREMA DE JUSTICIA EN CORTE PLENA: Sentencia 4-D-2012 de


veintisiete de marzo de dos mil doce.

“Por consiguiente, esta Corte acuerda integrar la falta de regulación relacionada


ut supra, atendiendo a las reglas de distribución jurisdiccional fijadas en la norma
procesal actual, que son de aplicación supletoria en el caso sub judice, en lo que se

27
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

refiere a la competencia para conocer del recurso de Apelación, que es atribuido


taxativamente a las Cámaras de Segunda Instancia y no así a los Tribunales de
Primera Instancia, tal como lo señala el Art. 29 ordinal 1° C.Pr.C. y M., que expresa:
“Las cámaras de segunda instancia, conocerán: 1° Del recurso de Apelación”, y por
cuyo motivo, en el caso particular, será la Cámara de lo Civil de la Primera Sección
de Occidente la competente para conocer en Apelación de las providencias definitivas
dictadas por la Jueza de Paz de Candelaria de la Frontera, en las diligencias de
desalojo reguladas en la citada Ley, habida cuenta tener ésta jurisdicción para
conocer en segunda instancia de asuntos civiles en el departamento de Santa Ana lo
que así se determinará.”

SALA DE LO CONSTITUCIONAL, AMPARO Referencia: 51-2011 de fecha


quince de febrero de dos mil trece.

“Así, cuando una persona es víctima de un daño antijurídico por parte del Estado,
queda a su opción si demanda al funcionario público por vulneración de sus derechos
constitucionales o al Estado por una lesión sufrida en ocasión del funcionamiento de
la Administración. En este último caso, si resulta condenado el Estado, pero existió
dolo o culpa en la actuación del funcionario involucrado, el primero puede incoar
contra el segundo un proceso para el reembolso.

Al respecto, es pertinente mencionar que las sentencias del 20-I-2009 y 4-II-2011, Inc.
65-2007 y Amp. 228-2007 respectivamente, se sostuvo que en la Constitución solo
se prevén dos casos de responsabilidad del Estado, la cual, además, tiene carácter
subsidiario: (i) por retardación de justicia (Art. 17 Inc. 2° Cn.), y (i) por vulneración
de derechos constitucionales (Art. 245 Cn.). Sin embargo, en dichos precedentes
también se acotó que, en virtud del derecho a la protección jurisdiccional (Art. 2 Inc.
1° Cn)., las pretensiones contra el Estado no se limita a los supuestos contemplados
en los Arts. 17 Inc 2° y 245 de la Cn., sino que pueden tener como base cualquier
transgresión a la legalidad atribuible al Estado o a sus funcionarios.

En tal sentido, si bien la Constitución solo prevé expresamente dos tipos de


responsabilidades del Estado── las prescritas en los Arts. 17 Inc. 2° y 245 de la
Cn., ──, las cuales tienen carácter subsidiario, la responsabilidad de este ──
como se afirmó en las sentencias citadas── no se limita a dichos supuestos. En
efecto, como ya se mencionó, existe una responsabilidad patrimonial del Estado
por el funcionamiento de los servicios públicos, la cual es directa y deriva de una
interpretación extensiva del Art. 2 Inc. 3°de la Cn.”

Competencia de los juzgados de primera instancia

Art. 30.- Los juzgados de primera instancia conocerán:


1°. Del proceso común;
2°. De los procesos especiales regulados en este Código, sin perjuicio de lo establecido para
el proceso monitorio; (2)
3°. De la ejecución forzosa, conforme a lo previsto en este código;
4°. De los demás asuntos que determinen las leyes de la República.

28
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

Asimismo conocerá el juzgado de primera instancia de los procesos abreviados y de los


monitorios que se susciten en aquellas circunscripciones donde no exista juzgado de primera
instancia de menor cuantía.

Competencia de los juzgados de primera instancia de menor cuantía

Art. 31.- Los juzgados de primera instancia de menor cuantía conocerán:


1° Del proceso abreviado;
2° De los procesos monitorios;
3° De la ejecución forzosa, conforme a lo previsto en este código; y
4° De los procesos ejecutivos cuya cuantía no supere los veinticinco mil colones o su
equivalente en dólares de los Estados Unidos de América. (2)
5° De lo demás que determinan las leyes. (2)

CORTE SUPREMA DE JUSTICIA EN CORTE PLENA, conflicto de


competencia Ref. 174 COM-2014 de fecha trece de enero de dos mil quince.

“Con respecto a la competencia en razón de la cuantía, en el proceso de mérito,


el actor claramente establece en la demanda que el documento base la pretensión
consistente en un pagaré sin protesto, fue suscrito por la cantidad de cuatrocientos
dólares de los estados Unidos de América, lo que en definitiva determina que
el capital adeudado no excede de los veinticinco mil colones o su equivalente en
dólares, por lo que se concluye que la cantidad reclamada es competencia de los
juzgados de menor cuantía, como bien lo argumenta el Juez Cuarto de lo Civil y
Mercantil de esta ciudad al declinar su competencia.”

CORTE SUPREMA DE JUSTICIA EN CORTE PLENA, conflicto de


competencia 151 COM- 2014 de fecha doce de febrero de dos mil quince.

“Finalmente, cabe mencionar que cuando se insta demandas relativas a la


expropiación y a la indemnización devenida de la misma, los tribunales de Menor
Cuantía conocerán en proceso abreviado cuando el CPCM o leyes especiales así lo
determinen, v.gr. Art. 241 Inc. 2 CPCM, sobre la oposición a la reposición judicial
de títulos valores, disolución y liquidación de sociedades y de nulidad de las mismas,
al margen del momento que contuvieren los tales títulos o del capital social de las
sociedades. En la disposición legal se muestra que el legislador optó por atribuir tal
competencia por razón de la materia y con independencia de la cuantía del título y,
muy a pesar del antecedente histórico legislativo de carácter procesal que atribuía
tal competencia por la materia a los Juzgados Civiles y a los Juzgados Mercantiles,
en su caso. Aunado a que, en la actualidad, los jueces civiles y mercantiles residentes
en la capital no conocen de los procesos abreviados en la jurisdicción de esta
ciudad.”

Competencia de los juzgados de paz

Art. 32.- Los juzgados de paz conocerán de los actos de conciliación, conforme a las reglas
establecidas en este código.

29
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

Competencia territorial

Art. 33.- Será competente por razón del territorio, el Tribunal del domicilio del demandado.
Si no tuviere domicilio en el territorio nacional, será competente el de su residencia. (2)

Asimismo es competente el Juez a cuya competencia se hayan sometido las partes por
instrumentos fehacientes.

Cuando el demandado no tuviere domicilio ni residencia en El Salvador, podrá ser demandado


en el lugar en que se encuentre dentro del territorio nacional o en el de su última residencia en
éste y, si tampoco pudiera determinarse así la competencia, en los juzgados con competencia en
materia civil y mercantil de la capital de la República.

CORTE SUPREMA DE JUSTICIA EN CORTE PLENA conflicto de competencia


ref. 200 COM-2014 de tres de febrero de dos mil quince.

“Es necesario recordar que en lo que atañe al Pagaré, ya el Art. 788 Com, establece
los requisitos que el título valor debe contener, entre ellos “el lugar de pago”, y
a falta de designación, el Art. 789 del mismo cuerpo legal suple tal deficiencia
al prescribir que se tendrá como tal el lugar del domicilio de quien lo suscribe;
siendo entonces, el señalamiento del lugar de pago, el que determina la competencia
territorial y solo en su defecto, se establece con base al fuero general del domicilio
del demandado, Art. 33 Inc. 1 CPCM.”

CORTE SUPREMA DE JUSTICIA EN CORTE PLENA conflicto de competencia


178 -COM-2014 de trece de enero de dos mil quince.

“Se vuelve necesario aclarar que cuando concurre el fuero convencional- Art. 67 C
y 33 In.2 CPCM- y el fuero legal general del domicilio del demandado-Art. 33 Inc. 1
CPCM,- el actor tiene la facultar de interponer su demanda invocando en su libelo
la validez del primero, o en su caso, señalar de manera inequívoca el domicilio del
demandado y con ello determinar la competencia del juez del domicilio especial o
del demandado, pudiendo acudir a cualquiera de dichos tribunales, dado que en
ambos puede el demandado ejercer su defensa…”

CORTE SUPREMA DE JUSTICIA EN CORTE PLENA conflicto de competencia


168-COM-2014 de fecha ocho de enero de dos mil quince.

“En el subjudice, se tiene como documento base de la acción, Escritura Pública


de Contrato de Mutuo, en el que consta que en la cláusula VII) relativa a las
Estipulaciones Judiciales, se fija en caso de acción judicial, el sometimiento al
domicilio especial de mejicanos.

Así las cosas, si el documento base de la acción fue suscrito por ambas partes,
deberá estarse al domicilio fijado en el mismo; y así ha sido sostenido por esta Corte
en reiterada jurisprudencia, dado respetarse la libertad de contratación, por lo que
no debe el juez ante quien se plantee una demanda en tales circunstancias, limitarse
a la regla general contenida en el Art. 33 inciso 1° CPCM; fijar su competencia
basada en el domicilio de la parte demandada, expresado por el actor en su
demanda. En todo caso, queda a opción de este último, interponer la demanda en el

30
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

domicilio fijado al efecto o en el de la parte demandada si así lo dispusiere; y esto


debe ser observado por el juez al calificar su competencia.

En conclusión y a efecto de dirimir el presente conflicto, se aplicará el criterio


especial que determina la competencia por el lugar designado en el contrato para
tal efecto, regulado en el Art. 33 Inc. 2° CPCM, cual es, la ciudad de Mejicanos;
siendo en consecuencia competente, el Juez de lo Civil de dicha ciudad, por lo que
así impone declararse.”

Determinación del domicilio para atribuir competencia territorial

Art. 34.- Los comerciantes y quienes ejerzan alguna actividad de tipo profesional, cuando se
refiera a conflictos relacionados con su quehacer, también podrán ser demandados en el lugar donde
se esté desarrollando o se haya desarrollado el mismo, y donde aquellos tuvieren establecimiento a
su cargo.

En los mismos casos del inciso anterior, también será competente el tribunal del lugar donde
la situación o relación jurídica a que se refiera el proceso haya nacido o deba surtir efectos.

El tribunal del domicilio de los gestores o el del lugar en que desarrollen su actividad será el
competente cuando el demandado sea un ente.

Competencia territorial en casos especiales

Art. 35. - En los procesos en que se planteen pretensiones que versen sobre derechos reales,
será competente también el tribunal del lugar donde se halle la cosa; sin embargo, si la pretensión
se ejerce sobre varias cosas o sobre un solo inmueble que esté situado en diferentes jurisdicciones,
será competente el tribunal del lugar donde se encuentre cualquiera de aquéllas, o el de cualquiera
de las circunscripciones a las que pertenezca el inmueble.

La misma regla del inciso anterior se aplicará en los procesos arrendaticios.

En los procesos sobre cuestiones hereditarias, será competente el tribunal del lugar en que el
causante haya tenido su último domicilio en el territorio nacional.

En los procesos sobre rendición de cuentas, será también competente el tribunal del lugar donde
deban presentarse dichas cuentas, y si éste no está determinado, el del domicilio del demandante,
poderdante o dueño de los bienes o el del lugar donde se desempeñe la administración.

En las demandas sobre obligaciones accesorias o que sean complemento de otras anteriores,
será competente el tribunal que lo sea para conocer, o esté conociendo, de la obligación principal
sobre la que recayeren.

CORTE SUPREMA DE JUSTICIA EN CORTE PLENA,conflicto de competencia


162 -COM-2014 de ocho de enero de dos mil quince.

“Pertinente es señalar que esta Corte, en reiteradas ocasiones ha sostenido en


casos similares, que la competencia se determina por el último domicilio de él o
la causante; a tenor de lo dispuesto en el Art. 956 CC…..de la misma forma debe
tomarse en cuenta como elemento de juicio para determinar el último domicilio del
causante en el territorio nacional, lo manifestado por la parte actora en su solicitud

31
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

de Fs. ½, en el cual categóricamente establece que dicho causante tuvo como su


último domicilio en el país, el municipio de Ilopango, departamento de San Salvador;
al contar con estos elementos de hecho la parte contribuye con ello a determinar el
elemento pasivo de la pretensión, y por ende el establecimiento de la competencia.”

CORTE SUPREMA DE JUSTICIA EN CORTE PLENA, conflicto de


competencia 107-COM-2014 de fecha tres de febrero de dos mil quince.

“…Es menester señalar que si bien es cierto el señor C.Q. es un empleado público
y que de conformidad a lo establecido en el Art. 64 del Código civil los empleados
públicos tienen su domicilio en el lugar donde desempeñan sus funciones, dicha
disposición no es posible aplicarla para determinar el domicilio del señor C. Q.,
en virtud que como ya se mencionó con anterioridad, el solicitante argumenta que
el referido empleado abandonó su lugar de trabajo, por lo que se tomará como
parámetro para determinar su domicilio el que ha sido consignado en el libelo por
la parte actora como domicilio del demandado, siendo éste la ciudad de Santa Tecla,
departamento de La Libertad.”

CORTE SUPREMA DE JUSTICIA EN CORTE PLENA, conflicto de


competencia Referencia 176-COM-2014 de fecha doce de febrero de dos mil quince.

“Para el presente caso a su vez, cabe mencionar la regla de competencia establecida


en el Art. 35 CPCM, disposición legal que en su inciso primero señala que también
será competente para conocer el tribunal del lugar en el que se halle la cosa;
nótese, de la lectura de la mencionada disposición legal que al insertar la palabra
“también”se entiende que además de las reglas establecidas en el Art.33 CPCM,
son aplicables las enunciadas en el Art. 35 supra mencionado cuando se trate de
derechos reales.

Adecuando esto al caso que nos ocupa, se logra advertir que la parte actora en
su demanda hace mención a que el demandado es del domicilio de Ahuachapán,
más adelante dentro de la relación de los hechos hace mención que el inmueble
objeto de litigio se encuentra en Acajutla, jurisdicción de Sonsonate. En ese sentido,
se encuentra con dos reglas que son perfectamente aplicables; sin embargo,
se comparte el criterio de la Jueza de lo Civil de Ahuachapán, en el sentido que
la parte actora optó por demandar al señor L.V., en el lugar donde se encuentra
ubicado el inmueble; tomando en cuenta, que corresponde al actor de demandar
donde él considere a bien hacerlo, pues queda a decisión del mismo donde incoar
su pretensión, circunstancia que debió ser observada por el Juez de lo Civil de
Sonsonate y no provocar un conflicto de competencia que tiende a generar dilaciones
indebidas en el proceso.”

CORTE SUPREMA DE JUSTICIA EN CORTE PLENA, conflicto de


competencia 189-COM- 2014 de veinticuatro de febrero de dos mil quince.

“Al respecto, es de señalar que el Art. 58 Inciso 1° de la Ley de Notariado, establece


que: “Si se destruyere, extraviare o inutilizare total o parcialmente un libro de
Protocolo, agotado o pendiente, que estuviere en poder del notario, éste se presentará
tan pronto lo notare al juez competente y en la capital al Juez Primero de lo Civil

32
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

a justificar sumariamente la destrucción, el extravío o la inutilización así como las


causas que lo motivaron, debiendo presentar, en su caso, lo que quedaré del libro.
Esta información podrá instruirse también de oficio o de orden de la Corte Suprema
de Justicia, al tener conocimiento del hecho, si el notario no la hubiere promovido.
[…] Disposición legal que ha sido interpretada por esta Corte de la siguiente
manera: “Para una mejor comprensión del Art. 58 L.N., debe de tomarse en cuenta
el texto completo de la Ley de Notariado, por lo que debe estudiarse dos casos: a)
si el notario tiene su domicilio fuera de la capital; b) el juez ante quien se busca
promover las diligencias haya sido quien autorizó el libro de protocolo respectivo, en
este caso podemos encontrar que no obstante tener la notario su domicilio fuera de
la capital, el libro de protocolo dentro del cual se encuentra el folio que se pretende
justificar su inutilización fue autorizado por el Jefe de la Sección de Notariado de
este máximo Tribunal, por lo que corresponde conocer al Juez Primero de lo Civil de
la Capital”, Revista Judicial 2001, Tomo CII, enero-diciembre pág.353.”

Competencia territorial en acumulación y pluralidad de demandados

Art. 36.- Cuando se planteen conjuntamente varias pretensiones en relación con una o más
personas, será competente el tribunal del lugar que corresponda a la pretensión que sea fundamento
de las demás; en su defecto, el que deba conocer del mayor número de las pretensiones acumuladas
y, en último término, el del lugar que corresponda a la pretensión de mayor cuantía.

Cuando se plantee una única pretensión a personas de distinto domicilio, la demanda podrá
presentarse ante el tribunal competente para cualquiera de ellas.

Competencia objetiva

Art. 37.- La cuantía y la materia determinarán la competencia objetiva de un tribunal.

Competencia funcional

Art. 38.- El tribunal competente para conocer de un asunto lo será también para conocer de las
incidencias que surjan sobre él y para llevar a efecto sus resoluciones, sin perjuicio de lo dispuesto
para la ejecución de las sentencias.

CORTE SUPREMA DE JUSTICIA EN CORTE PLENA, conflicto de


competencia 127 COM-2015 de veinticinco de agosto de dos mil quince.

“Se debe asimismo, determinar la competencia funcional en el caso bajo examen,


analizando el contenido del Art. 38 CPCM, de cuyo tenor se colige que los
juzgadores ante los que dirima un litigio determinado, serán competentes para
conocer de las incidencias que surjan sobre él (v. gr. modificación) y para llevar a
cabo la ejecución de sus sentencias, sin embargo el presente caso no se encuadra en
ninguno de esos supuestos, pues se trata de una pretensión dirigida a la declaratoria
de existencia de una obligación de pago, por virtud de los gastos ocasionados
debido al incumplimiento de una sentencia y no a la ejecución forzosa de la misma
(ejecución a la que se hace alusión de forma oblicua en la demanda, pues parte
de la cantidad que la parte demandante reclama, se refiere a “honorarios de la
ejecución forzosa”), es pues una acción que a pesar de encontrarse relacionada al
caso iniciado y fenecido de Referencia 233-SM-2004, no se encuentra vinculada al

33
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

mismo, quedando por lo tanto excluida del espectro de aplicación del Principio de
Perpetuidad de la Competencia contenido en el artículo supra citado.”

Competencia de grado cuando sea parte el Estado

Art. 39.- En los procesos en los que sea demandado el Estado serán competentes para conocer
en primera instancia, las Cámaras de Segunda Instancia de la Capital; y, en segunda instancia,
conocerá la respectiva Sala de la Corte Suprema de Justicia.

Los municipios, el Instituto Salvadoreño del Seguro Social y entes descentralizados del Estado
serán demandados ante los tribunales comunes.

CORTE SUPREMA DE JUSTICIA EN CORTE PLENA, conflicto de


competencia 51-COM-2014 de cinco de febrero de dos mil quince.

“Al respecto, la competencia en razón del grado deberá regirse de conformidad a lo


establecido en el Art. 29, ordinal segundo en relación con el Art. 39 CPCM, que a su
letra dice: “En los procesos en los que sea demandado el Estado serán competentes
para conocer en primera instancia, las Cámaras de Segunda Instancia de la
Capital; y, en segunda instancia, conocerá la respectiva Sala de la Corte Suprema
de Justicia. […] Los Municipios, el Instituto Salvadoreño del Seguro Social y entes
descentralizados del Estado serán demandados ante los tribunales comunes.”;
dicha disposición taxativa al momento de establecer que las Cámaras de Segunda
Instancia de la Capital conocerán en primera instancia cuando “el demandado
sea el Estado”como ocurre en el caso en análisis, puesto que el Viceministerio de
Transporte es una dependencia del Estado.”

SALA DE LO CIVIL, recurso de Apelación Referencia: 119-APC-2012 de fecha


veintiocho de noviembre de dos mil doce.

“La Sala, considera que el Art. 39 CPCM es claro al establecer que en los procesos
en los que sea demandado el Estado serán competentes para conocer en primera
instancia, las Cámaras de Segunda Instancia de la Capital y, en segunda instancia,
conocerá la respectiva Sala de la Corte Suprema de Justicia. Tal norma no hace
distinción alguna acerca de en qué calidad sea demandado el Estado, si directa
o subsidiariamente, por ello yerra la Cámara al considerar que es competente
únicamente cuando el Estado sea el principal demandado, hace pues, una
interpretación restrictiva de tal atribución juzgadora; ya que como principal o
subsidiario que se le atribuya responsabilidad, es el Estado y no un particular, por lo
cual es imposible que sea demandado en los tribunales comunes. Así pues, en virtud
de ser ese el argumento único de la Cámara, se procede a revocar la resolución
apelada y deberá ordenarse la tramitación del proceso, quedando a salvo la facultad
saneadora que por ley tiene el tribunal a quo.”

Examen de oficio de la competencia

Art. 40.- Presentada la demanda, el tribunal examinará de oficio su competencia y, si entiende


que carece de ella, rechazará in limine la demanda por improponible, y remitirá el expediente al
tribunal que considere competente.

34
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

CORTE SUPREMA DE JUSTICIA EN PLENO: Sentencia de fecha seis de


noviembre de dos mil catorce, conflicto de competencia Referencia 342-COM-2013

“…el Art. 33 CPCM, establece los criterios sobre competencia en razón del territorio,
el cual en su inciso primero enuncia el domicilio del demandado, que comprende
domicilio determinado y fijo y el indeterminado cuando no tuviere domicilio ni
residencia en el país. Partiendo de esa premisa, el juzgador está llamado a evaluar
dos aspectos: 1. La aportación que la parte actora hace del lugar donde ésta conoce
que está fijado el domicilio de la parte demandada; bajo el supuesto que es él
quién conoce los hechos que motivan su acción- Art.7 CPCM, y además en base al
principio establecido en el Art.13 del mismo cuerpo legal, que atañe exclusivamente
a las partes al momento de proporcionar sus alegatos; y 2. Que conocido que sea
el hecho del domicilio develado por el demandante, el juzgador realice el juicio
de valoración para establecer su competencia, en concordancia a lo que la Ley
sustantiva entiende como domicilio de una persona. En ese orden de ideas, respecto
a lo estipulado en el Art. 57 C.C., el domicilio está integrado por dos elementos a
saber: la residencia y el ánimo de permanecer en la misma, de ellos predomina el
ánimo de permanencia, ya que como bien lo señala el Art. 61 del mismo cuerpo
normativo el ánimo de permanencia no se presume, ni tampoco se adquiere “por
el solo hecho de habitar un individuo por algún tiempo casa propia o ajena en él,
si tiene en otra parte su hogar doméstico…”; es decir que el domicilio no se gana
por la simple presencia de una persona en otra parte del territorio nacional, por lo
que resulta errado deducir que el domicilio de la parte solicitada en este caso es el
señalado por el solicitante para efectos de realizar el emplazamiento…”

Denuncia de la falta de competencia

Art. 41.- La falta de competencia deberá alegarse ante el mismo tribunal que esté conociendo
de la pretensión.

Salvo en el caso de la incompetencia por razón del territorio, la falta de competencia podrá
alegarse en cualquier estado del proceso, acompañando los documentos que puedan servir de
prueba. Presentada la alegación, se suspenderá el proceso, se comunicará a las demás partes
personadas y se citará a todas para una audiencia dentro de los cinco días siguientes al de la
notificación, en la cual manifestarán lo que estimen procedente y practicarán la prueba que en el
acto aporten y el juez admita.

Cuando la falta de competencia no se hubiere alegado en el primer momento procesal


oportuno, la misma no surtirá el efecto de suspender el curso del proceso.

Denuncia de la falta de competencia territorial

Art. 42.- La falta de competencia territorial sólo podrá alegarse en el plazo que se tiene para
contestar la demanda, sin contestarla, y se deberá indicar el tribunal al que, por considerarse
territorialmente competente, habría de remitirse el expediente.

El demandante, por su parte, podrá, además de sostener la competencia del que está
conociendo, alegar la falta de competencia territorial del tribunal en favor del cual se pretendiere
declinar el conocimiento del asunto.

35
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

El planteamiento de la incompetencia se sustanciará conforme a lo dispuesto en el artículo


anterior.

Sumisión tácita

Art. 43.- Si el juez no hubiere apreciado in limine litis su falta de competencia por razón
del territorio, o si el demandado no la denunciara conforme al artículo anterior, el tribunal será
definitivamente competente para conocer de la pretensión.

Efectos de la denuncia de competencia

Art. 44.- La suspensión del procedimiento producida por la alegación de falta de competencia,
en los casos en que procede, no obstará a que el tribunal que conoce de la pretensión practique,
a instancia de parte, cualesquiera actuaciones de aseguramiento de prueba y adopte las medidas
cautelares que considere necesarias para evitar perjuicios irreparables que pudiere ocasionarle al
demandante la suspensión del procedimiento.

Decisión sobre la falta de competencia

Art. 45.- Si el tribunal considerase que carece de competencia objetiva o de grado, rechazará
la demanda por improponible poniendo fin al proceso, indicando a las partes el competente para
conocer. Si carece de competencia funcional, rechazará el asunto incidental expresando los
fundamentos de su decisión y continuará con el proceso principal con imposición de las costas a la
parte que lo hubiere planteado.

Contra los autos a que se refiere este artículo se podrá interponer recurso de Apelación y, en su
caso, recurso de casación.

CORTE SUPREMA DE JUSTICIA EN CORTE PLENA, conflicto de


competencia 125 COM-2015 de veinte de agosto de dos mil quince expresó:

“El Art. 45 CPCM se refiere a la decisión sobre la falta de competencia objetiva,


de grado o funcional de los juzgadores y de la lectura de su tenor literal que
dice: “Si el tribunal considerase que carece de competencia objetiva o de grado,
rechazará la demanda por improponible poniendo fin al proceso, indicando a las
partes el competente para conocer. Si carece de competencia funcional, rechazará
el asunto incidental expresando los fundamentos de su decisión y continuara con el
proceso principal con imposición de las costas a la parte que lo hubiere planteado.
[---] Contra los autos a que se refiere este artículo se podrá interponer recurso de
Apelación y, en su caso, recurso de casación”, se colige fehacientemente que la parte
solicitante o demandante tiene derecho a apelar la sentencia emitida por el Juzgado
de Primera Instancia, dirigida a declarar improponible la solicitud y declararse
incompetente en razón de la materia. Recurso encaminado a permitirle a las partes
agraviadas, defender su postura ante la declaratoria de incompetencia funcional,
de grado y objetiva, tal como se dio en el presente caso. Asimismo, es menester
abonar al tema, trayendo a cuento lo plasmado en la sentencia de Referencia 60-
COM-2014, en la que se dejó establecida no solo la obligación de los juzgadores
de remitir los autos al juez que consideren competente, aun cuando se trate de un
conflicto de competencia objetiva, sino también se remarcó el hecho de que este tipo
de declaratorias de competencia pueden ser recurridas y la resolución que dirima

36
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

dichos recursos pone fin a la disyuntiva en la que se encuentra el Juez de Primera


instancia, debido a dudas que puede tener en cuanto a su competencia para conocer
de un caso, mediante el razonamiento, fundamentación y motivación que el Tribunal
Ad Quem realice al respecto, tal como se observa en el tenor literal de dicha
resolución: “Hacemos hincapié que el CPCM dispone de dos vías procedimentales
para discurrir y decidir la solicitud a la falta de competencia que son: el conflicto de
competencia y el empleo de los recursos (Apelación y casación). El primero aplica
tratándose del conflicto por razón del territorio; los segundos, permiten a las partes
adversar la decisión del juez de terminar el proceso por improponibilidad sustancial,
que por su trascendencia no puede ser subsanada y que por tanto, carece de sentido
que un juez pase los autos a otro que considerare competente, pues lo hecho por el
que primigeniamente los conoció no puede ser convalidado.”

Decisión sobre la falta de competencia territorial

Art. 46.- Si el juez estima que carece de competencia territorial, declarará improponible
la demanda en el estado en que se encuentre y se abstendrá de seguir conociendo del asunto,
remitiendo el expediente al que considere competente. Contra esta resolución no cabrá recurso
alguno.

Si se desestimare la denuncia de competencia territorial se ordenará la continuación del


proceso con imposición de las costas a la parte que la hubiere planteado.

Conflicto de competencia

Art. 47.- El tribunal que reciba el expediente, si considera a su vez que es incompetente, lo
declarará así.

En dicho caso, deberá remitir el expediente a la Corte Suprema de Justicia, la cual decidirá el
tribunal al que corresponda conocer del asunto, así como el envío del expediente y el llamamiento
a las partes para que comparezcan, dentro de los cinco días siguientes, ante dicho tribunal.

Prejudicialidad

Art. 48.- Cuando en un proceso civil o mercantil, se ponga de manifiesto un hecho que tenga
apariencia de delito o de falta que diere lugar a acción penal, el respectivo tribunal, mediante
resolución, lo pondrá en conocimiento del Fiscal General de la República, por si hubiere lugar al
ejercicio de dicha acción.

En tal caso, no se ordenará la suspensión de las actuaciones del proceso, sino cuando concurran
las siguientes circunstancias:
1° Que se acredite la existencia de causa penal, en la que se estén investigando, como hechos
de apariencia delictiva, alguno o algunos de los que fundamenten las pretensiones de las
partes en el respectivo proceso; y,
2° Que la decisión del tribunal penal, acerca del hecho por el que se procede en causa de
esa naturaleza, pueda tener influencia decisiva en la resolución sobre el asunto civil o
mercantil.

La suspensión de que se trata se acordará, mediante auto, una vez que el proceso esté pendiente
sólo de sentencia.

37
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

No obstante, la suspensión que venga motivada por la posible existencia de un delito de


falsedad de alguno de los documentos aportados, se acordará, sin esperar a la conclusión del
procedimiento, tan pronto como se acredite que se sigue causa penal sobre aquel delito, cuando, a
juicio del tribunal, el documento pudiera ser decisivo para resolver sobre el fondo del asunto.

En el caso a que alude el inciso anterior, no se acordará la suspensión o finalizará la que se


hubiese acordado, si la parte a la que pudiere favorecer el documento renunciare a él. Hecha la
renuncia, se ordenará que el documento sea separado de los autos.

Las suspensiones a que se refiere este artículo finalizarán cuando se acredite que el juicio
penal ha terminado, o que se encuentra paralizado por motivo que haya impedido su normal
continuación.

Si la causa penal sobre falsedad de un documento obedeciere a denuncia o querella de una


de las partes y finalizare por resolución en la que se declare auténtico el documento o no haberse
probado su falsedad, la parte a la que hubiere perjudicado la suspensión del proceso civil o
mercantil, podrá pedir en éste indemnización de daños y perjuicios, con arreglo a lo dispuesto en
este código.

CÁMARA PRIMERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, SAN SALVADOR, Apelación N°132-56CM1-2014 de Fecha: veintidós
de octubre de dos mil catorce.

La prejudicialidad, regulada en los Arts. 48 y 51 CPCM., se presenta cuando se trata


de una cuestión sustancial, diferente pero conexa, que sea indispensable resolver
por sentencia en proceso separado, bien ante el mismo despacho judicial o en otro
distinto, para que sea posible decidir sobre la que ha sido sometido a juzgamiento
en el respectivo proceso, que debe ser suspendido hasta cuando aquella decisión se
produzca.

Su razón de ser radica, en que frente a la eventualidad de que pronunciamientos


de otros jueces puedan influir en el acto decisorio del proceso civil y mercantil,
el legislador ha considerado conveniente exigir que previamente se resuelva
definitivamente la cuestión prejudicial, ya que, de otro modo, la resolución podría
ser contraria u opuesta a la que se pronuncie por parte de otros operadores de
justicia.

En ese sentido, dicha figura no debe ser aplicada de manera que se constituya en
una herramienta dilatoria de los procesos, y contraríe los principios de acceso a
la protección jurisdiccional, celeridad y economía procesal; sino mas bien, en el
caso que se conoce, partiendo del supuesto que exista una resolución que ordene la
suspensión del proceso civil y mercantil, porque la resolución en materia de familia
genere efectos jurídicos directos que afecten el objeto del proceso.

CÁMARA TERCERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, SAN SALVADOR, Apelación N°18-EMSM-12 de Fecha: nueve de
diciembre de dos mil catorce.

Fundamentación doctrinaria y de derecho: Habiendo alegado el apelante que por


parte de la juzgadora ha existido mala aplicación e interpretación de las normas

38
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

que rigen los actos de prejudicialidad, específicamente del Art. 48 del Código
Procesal Civil y Mercantil, es de señalar lo siguiente: La disposición señalada como
infringida es del tenor literal siguiente: “Cuando en un proceso civil o mercantil,
se ponga de manifiesto un hecho que tenga apariencia de delito o de falta que diere
lugar a acción penal, el respectivo tribunal, mediante resolución, lo pondrá en
conocimiento del Fiscal General de la República, por si hubiere lugar al ejercicio
de dicha acción. En tal caso, no se ordenará la suspensión de las actuaciones del
proceso, sino cuando concurran las siguientes circunstancias: 1° Que se acredite
la existencia de causa penal, en la que se estén investigando, como hechos de
apariencia delictiva, alguno o algunos de los que fundamenten las pretensiones de
las partes en el respectivo proceso; y, 2° Que la decisión del tribunal penal, acerca
del hecho por el que se procede en causa de esa naturaleza, pueda tener influencia
decisiva en la resolución sobre el asunto civil o mercantil. La suspensión de que
se trata se acordará, mediante auto, una vez que el proceso esté pendiente sólo de
sentencia. No obstante, la suspensión que venga motivada por la posible existencia
de un delito de falsedad de alguno de los documentos aportados, se acordará, sin
esperar a la conclusión del procedimiento, tan pronto como se acredite que se sigue
causa penal sobre aquel delito, cuando, a juicio del tribunal, el documento pudiera
ser decisivo para resolver sobre el fondo del asunto. En el caso a que alude el inciso
anterior, no se acordará la suspensión o finalizará la que se hubiese acordado, si la
parte a la que pudiere favorecer el documento renunciare a él. Hecha la renuncia,
se ordenará que el documento sea separado de los autos. Las suspensiones a que se
refiere este artículo finalizarán cuando se acredite que el juicio penal ha terminado, o
que se encuentra paralizado por motivo que haya impedido su normal continuación.
Si la causa penal sobre falsedad de un documento obedeciere a denuncia o querella
de una de las partes y finalizare por resolución en la que se declare auténtico el
documento o no haberse probado su falsedad, la parte a la que hubiere perjudicado
la suspensión del proceso civil o mercantil, podrá pedir en éste indemnización de
daños y perjuicios, con arreglo a lo dispuesto en este código.”La prejudicialidad
penal contemplada en la disposición de comentario es muy amplia y encierra varios
supuestos, estableciendo en un primer momento que, cuando en un proceso civil o
mercantil, se ponga de manifiesto un hecho que tenga apariencia de delito o de falta
que diere lugar a acción penal, el respectivo Tribunal mediante resolución, pondrá
en conocimiento del Fiscal General de la República dicho hecho, por si hubiere lugar
al ejercicio de dicha acción; pero la ley supone que SÓLO este hecho no suspende el
proceso, sino hasta cuando se acredite la existencia de causa penal, siempre que en la
misma se estén investigando, como hechos de apariencia delictiva, alguno o algunos
de los que fundamenten las pretensiones de las partes en el respectivo proceso, y
cuando la decisión del Tribunal penal, acerca del hecho por el que se procede en
causa de esa naturaleza, pueda tener influencia decisiva en la resolución del asunto
civil o mercantil de que se trata; estableciendo además que procederá la suspensión,
una vez el proceso esté pendiente sólo de sentencia. La ley establece una excepción a
dicha regla y es que, cuando la suspensión venga motivada por la posible existencia
de un delito de falsedad de alguno de los documentos aportados, se puede acordar
dicha suspensión sin esperar la conclusión del procedimiento, tan pronto como se
acredite que se sigue la causa penal sobre ese delito, siempre y cuando a juicio del
Tribunal ese documento impugnado penalmente pudiere ser decisivo para resolver

39
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

sobre el fondo del asunto. Dicho lo anterior, la ley claramente establece, a fin de que
proceda la suspensión de un proceso civil o mercantil por prejudicialidad penal, el
que esté acreditada la existencia de una causa penal en la que se tenga por objeto la
misma pretensión o elementos conexos. En el presente caso, el objeto del debate es
el alcance del termino causa penal; por dicho término debe entenderse la existencia
de un proceso penal, lo anterior en razón de que sólo en sede judicial puede existir
un real, efectivo y vinculante pronunciamiento que vuelva vulnerable las esferas
jurídicas de los individuos, y coadyuve o no a la seguridad jurídica a través de la
plena concordancia en la tutela efectiva de las pretensiones de los que se avocan al
Órgano Judicial, quien es el encargado de juzgar y ejecutar lo juzgado. Bajo la lógica
antes expuesta, y trayendo a cuenta lo expresado por el apelado en su oposición, la
causa penal no solo se refiere al proceso penal en sí, sino a procedimientos previos
que lo conllevan, encontrándose en dicho lapso el procedimiento en sede Fiscal.
Esta Cámara estima que lo anterior no es valedero, en razón de que como ya se
dijo causa penal es propiamente el proceso penal, pues los procedimientos previos
al mismo son meros trámites administrativos de la investigación del delito, que por
preservar el orden público y seguridad pública, están dotados legalmente de ciertas
medidas precautorias especiales pero que hasta ese momento no constituyen causa
penal, por lo que se acoge el agravio alegado. De lo expuesto se estima que la Jueza
A quo suspendió el proceso por prejudicialidad penal, aplicando erróneamente lo
dispuesto en el Art. 48 CPCM, ya que en el presente caso aún no existe la citada
prejudicialidad, pues la alegada por el señor Manuel Ignacio V. L. por medio de
sus apoderados se encuentra aún en sede fiscal y no en sede judicial, por lo que
todavía no estamos en presencia de un caso de prejudicialidad penal, considerando
que lo dispuesto en el Art. 48 CPCM, debe interpretarse como una investigación
judicializada; en consecuencia el auto recurrido fue dictado contrario a derecho,
siendo procedente revocarlo y ordenar la continuación normal del proceso, siempre
y cuando no se demuestre la existencia de proceso penal en sede judicial.”

Recursos contra la resolución sobre suspensión de las actuaciones por prejudicialidad penal
Art. 49.- Contra la resolución que deniegue la suspensión del asunto civil o mercantil se podrá
interponer recurso de revocatoria. La solicitud de suspensión podrá, no obstante, reproducirse
durante la segunda instancia y, en su caso, durante la tramitación de los recursos pertinentes.
Contra el auto que acuerde la suspensión se dará recurso de Apelación, y contra los autos
dictados en Apelación en los que se acuerde o confirme la suspensión se dará, en su caso, el recurso
de casación.
Casos de excepción y efectos de las sentencias
Art. 50.- Las suspensiones de que tratan los artículos anteriores no tendrán lugar cuando los
ordenamientos penales requieran que el asunto se resuelva previamente en la vía civil o mercantil,
por lo que el juez respectivo llevará dicho asunto hasta su finalización.
Las sentencias pronunciadas en sede penal no producirán efectos de cosa juzgada en lo civil o
en lo mercantil, salvo que la ley exprese lo contrario.
Las sentencias pronunciadas por los tribunales de lo civil y mercantil no producirán tampoco
efectos de cosa juzgada en otras sedes judiciales, salvo disposición expresa en contrario.

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CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

CÁMARA TERCERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, SAN SALVADOR, N°C-5-PC-2013-CPCM de fecha: veinticinco de
febrero de dos mil trece.
“Que el escrito de Apelación se funda en la posibilidad de que ha existido violación
al Art. 298 CPCM, ya que en realidad dicha disposición se refiere a los casos de
DENUNCIA Y EXAMEN DE DEFECTOS y en la parte final de su primer inciso
se refiere al defecto procesal en cuanto al objeto procesal denominado COSA
JUZGADA, el que posteriormente fue alegado en el escrito de interposición del
recurso, ya que se refiere en el mismo escrito a que ha existido violación a la COSA
JUZGADA y este punto también lo desarrolla el Art. 302 CPCM que se titula en su
acápite LITISPENDENCIA O COSA JUZGADA y en todo el resto del escrito hace
relación a la Cosa Juzgada.
Al ser dicho concepto, así como las disposiciones que se consideran por el apelante
como infringidos, el único tema que tendrá que abordarse y que se revisará por ser
el fundamento de Derecho mediante el que se falló en Primera Instancia; por ello,
esta Cámara estima oportuno iniciar la fundamentación de esta sentencia haciendo
las siguientes consideraciones sobre el único punto apelado:
En vista que el objeto de la presente Apelación versa sobre un punto principal, como
es, sobre la procedencia o no de la excepción de cosa juzgada, este Tribunal, en el
entendido de llevar una ilación lógica del punto impugnado, comenzará analizando
si la excepción o el defecto del objeto procesal de cosa juzgada era procedente o no.
Para fines puramente didácticos, comenzaremos por definir qué es COSA JUZGADA
y así, tenemos que en nuestro ordenamiento jurídico procesal no existe una definición
legal de ella, por lo que nos atendremos a lo que nuestra Jurisprudencia patria en
materia procesal civil ha subrayado al respecto y al concepto de lo que es la cosa
juzgada en el sentido en que lo definen los expositores del Derecho y en esa virtud
tenemos, entre otros al maestro español JAIME GUASP, quien al respecto menciona:
La COSA JUZGADA, en sentido amplio, es, pues, la fuerza que el Derecho atribuye
normalmente a los resultados procesales. El proceso, en virtud de la figura de la cosa
juzgada, se hace inaplicable y una cosa juzgada no quiere decir, en sustancia, sino
inaplicabilidad de lo que en el proceso se ha corregido. (Véase la obra de JAIME
GUASP, Derecho Procesal Civil Tomo I, Página 548.)
El gran maestro CHIOVENDA, por su parte, expresa: La cosa juzgada es el bien
de la vida material del juicio y sobre el cual se ha pronunciado sentencia que ya
no está sometida a oposición de rebelde, ni Apelación, ni recurso de casación, ni
demanda de revisión. (CHIOVENDA, GIUSEPE Instituciones de Derecho Procesal
Civil, Tomo I, Página 383.)
Por último, don ARTURO ALESSANDRI RODRÍGUEZ y don MANUEL
SOMARRIBA UNDURRAGA, en su libro CURSO DE DERECHO CIVIL, Tomo I,
Página 79 dicen: “COSA JUZGADA es la fuerza de la sentencia judicial que la hace
inatacable, ya en sentido formal, ya en sentido material.
De todo lo antes transcrito podemos inferir que COSA JUZGADA es la eficacia
misma de la sentencia, eficacia que ya no puede ser atacada por ninguna suerte

41
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

de recurso, pues es inimpugnable y está revestida de una fuerza tal que la vuelve
inmutable: de allí que nos lleve a considerar, por un lado la denominada “eadem
res”(identidad de cosa u objeto) y por otra la identidad de “causa petendi”, pues
como explica el autor colombiano DEVIS ECHANDÍA en su obra Teoría General del
Proceso, Página 445 “””””el límite objetivo de la cosa juzgada se compone de dos
elementos: identidad de cosa u objeto e identidad de causa petendi.””””””””””

En nuestro sistema procesal salvadoreño, se requiere que exista esa identidad de objeto
para invocar la excepción de COSA JUZGADA y así nuestra Jurisprudencia Civil patria
emitida por la Honorable Sala de lo Civil de la Corte Suprema de Justicia sostiene:
“””””””””””Para que en un juicio proceda la excepción de COSA JUZGADA se
requiere la concurrencia de los tres elementos de IDEM PERSONAE, IDEM RES E
IDEM CAUSA PETENDI, o sea que en un juicio anterior se haya tenido por objeto el
mismo fin jurídico perseguido en el segundo juicio y que las respectivas pretensiones
hubiesen sido ventiladas entre las mismas partes.””””””””(Revista Judicial, Tomo
LXXI, Página 117 de 1966 y recientemente la sentencia definitiva pronunciada en
Casación con Referencia 1305- 2003, Romano VII. Literal I. párrafo I)

Partiendo de la definición tanto doctrinaria como Jurisprudencial de lo que es cosa


Juzgada, se puede concluir que ésta le da sentido a todo el proceso declarativo y en
general, nos explica el mismo significado de la Jurisdicción, entendida ésta como la
actividad dimanante de la soberanía del Estado, destinada a juzgar y hacer ejecutar
lo juzgado. Con esa expresión de cosa juzgada, se designa tradicionalmente el valor
específico de la resolución judicial que pone fin al proceso declarativo, la fuerza
que el ordenamiento jurídico concede al resultado de la actividad jurisdiccional
declarativa, fuerza que consista en la subordinación a los resultados del proceso y
que se resuelva en la irrevocabilidad de la decisión judicial.

Si la Jurisdicción es la actuación del derecho objetivo en el caso concreto de modo


irrevocable, advirtiendo que dicha irrevocabilidad no corresponde a cualquier
decisión del Estado, sino exclusivamente a las que provienen de los órganos
jurisdiccionales y que son resultado de un proceso declarativo. Así es como aparece
la relación entre la Jurisdicción y la cosa juzgada o mejor dicho, entre una de las
sub - funciones de la Jurisdicción, la de juzgar y la cosa juzgada, pues en la otra sub
- función, la de ejecutar lo juzgado, no cabe hablar de cosa juzgada, sino de cosa
o materia ejecutada. Aunque sea con Referencia sólo al juzgar, es decir, al proceso
declarativo, la función jurisdiccional adquiere virtualidad únicamente cuando la
actuación del derecho objetivo en el caso concreto se realiza de modo estable.

Mediante la cosa juzgada se potencia el valor Certeza aún en desmedro del valor
Justicia, que además como todo valor es contingente y subjetivo. El estado de
litigio debe en un determinado momento cesar y agotadas las instancias recursivas
ordinarias o extraordinarias, el posible error judicial que pueden contener los fallos
de los Tribunales de grado o los constitucionales queda purgado por la cosa juzgada.
Esto es menos disvalioso que la posibilidad de discutir indefinidamente, reabriendo
un debate que jurisdiccionalmente ya alcanzó un grado de certeza que impide su
revisión, que lo obtuvo a su favor y por ende se encuentra amparado por la garantía
del Art. 172 de la Constitución de la República.

42
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

El sentido de la eficacia y la autoridad de la cosa juzgada no es tanto impedir la


apertura de nuevos procesos, cuanto que en ellos no se desconozca lo resuelto en
otros, o bien no decidir de modo contrario a como antes se había fallado. Se trata de
impedir que la Jurisdicción se vea expuesta a contradicción, lo que podría ocurrir si
se somete dos veces a decisión la misma cuestión.
Frente a la imposibilidad o dificultad de determinar una rigurosa coincidencia entre
los elementos de la pretensión que fue posterior, debe reconocerse a los jueces un
suficiente margen de arbitrio a fin de establecer si los litigios, considerados en su
conjunto, son o no idénticos, contradictorios o susceptibles de existir.
La admisibilidad de la excepción de cosa juzgada está supeditada, en principio, a la
concurrencia de una triple identidad entre los sujetos, el objeto litigioso y la causa
de pedir de ambas pretensiones, es decir, que exista IDEM PERSONAE, IDEM RES
e IDEM CAUSA PETENDI, tal como lo establece la Jurisprudencia de la Sala de lo
Civil anteriormente citada. Por ello la excepción de cosa juzgada procederá cuando
en ambas sentencias coincidan:
a) los sujetos procesales; b) el bien u objeto y c) la causa de pedir, tomando en cuenta
que bastando que una sola difiera para que la excepción sea improcedente, como en
el presente caso planteado.”
Para el caso en examen, al revisar la copia de la sentencia pronunciada por esta
Cámara […] a las catorce horas y treinta y cinco minutos del día veinticuatro de
Noviembre de dos mil tres y compararla con la sentencia recurrida, tenemos que
ambas sentencias son totalmente diferentes y que no reúnen el triple requisito
mencionado para poder invocar la excepción de cosa juzgada, ya que para que
esto suceda se requiere la concurrencia de los tres elementos ya mencionados,
formulados por la Jurisprudencia civil nacional arriba citada, es decir, que existan
los tres requisitos enunciados: IDEM PERSONAE, IDEM RES E IDEM CAUSA
PETENDI, o sea, que en un juicio anterior se haya ventilado una acción por las
mismas personas que promueven el posterior proceso, o sea que las respectivas
pretensiones hubiesen sido ventiladas entre las mismas partes, con idéntica causa a
la intentada en el segundo juicio y que haya tenido por objeto el mismo fin jurídico
perseguido en el segundo juicio o sea que haya existido identidad de personas,
identidad de cosa u objeto e identidad de causa de pedir.
En el juicio cuya sentencia está agregada al expediente principal de este proceso
[…] se establece que la persona que constituía la parte actora era la señora […] y la
ahora demandante es la señora […] y por sucesión procesal al morir esta señora fue
continuada por sus herederos, por lo que no se cumple con el elemento de la identidad
de partes o sea el IDEM PERSONAE; en ese sentido, negarle a la [demandante]
su derecho a demandar la reivindicación del inmueble comprado a la anterior
demandante sería negarle a la compradora su derecho al acceso jurisdiccional a
demandar una acción legal, que en este caso es la de la REIVINDICACIÓN y en
consecuencia, también sería una amplia violación a su Derecho de Propiedad y
Posesión, pues ella no había ejercitado ningún acción legal.
En el caso en discusión no negamos el gran valor de la Jurisprudencia citada por
el apelante, para intentar crear convicción en los suscritos Magistrados de que sí
existe cosa juzgada; sin embargo, esa Jurisprudencia no puede tomarse de manera

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UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

literal y despojada de todo el contenido que en esa sentencia se resolvía, pues


basta remitirnos a la lectura de la sentencia citada por el [apoderado legal de la
parte actora], para concluir que la Sala de lo Constitucional estaba resolviendo
un proceso de habeas corpus, contra actuaciones de una autoridad demandada,
con competencia en materia penal; de ahí, que el Ministerio Público Fiscal,
como ente acusador, jamás podrá ser distinto, aunque sea un Fiscal asignado al
caso distinto, pues a tenor de lo que dispone el Art. 193 de la Constitución de la
República, corresponde a la Fiscalía la persecución del delito; de allí el argumento
del apelante que solo se necesita identidad del sujeto pasivo, o demandado para que
se configure la identidad de sujetos, cuestión que no es cierto para el ámbito civil
por las siguientes razones:

En este caso, que se conoce ahora en Apelación, se trata de un proceso cuya materia
en discusión es de índole civil y por eso decidimos acogernos a un precedente
jurisprudencial de la Sala de lo Civil y cuya sentencia fue tomada en cuenta por esta
Cámara en la sentencia de las catorce horas y quince minutos del día doce de julio de
dos mil once, dentro del incidente de Apelación con Referencia C-7-SD-2011-CPCM, en
donde se explicó que si no existe identidad de sujetos procesales en ambos procesos tal
como lo ordenan los Arts. 515 inciso 2° y 517 ambos CPCM, no procede la declaratoria
de la COSA JUZGADA; en este caso, según Jurisprudencia de la Sala de lo Civil en el
proceso con Referencia Ca. 108 US de las nueve horas y cinco minutos del día dieciocho
de diciembre de dos mil dos, se fundamentó que no puede darse la excepción de cosa
juzgada, ya que se dijo que la identidad de sujetos se refiere a que la pretensión, es decir,
lo demandado sea entre las mismas partes y propuesta por ellas y contra ellas o sus
causahabientes a título singular o universal y con la misma calidad.

Partiendo de lo anterior, para aplicación de este caso, sería un error decir que si
ha existido compraventa y tradición del inmueble existe identidad de sujetos, ya que
este vocablo queda reservado ante la existencia de sucesión por causa de muerte
porque entre el de cujus y el heredero forman un solo patrimonio; en el caso de autos
no ha ocurrido dicha sucesión y por tanto es improcedente alegar la cosa juzgada
por no reunir el requisito de identidad de sujetos o IDEM PERSONAE.

En conclusión, solo existirá IDENTIDAD DE SUJETOS en materia civil, cuando


sean las mismas partes, sin distinción es decir, demandante y demandado sean los
mismos, salvo que una de las partes esté representada por un heredero o legatario,
cuyo ejercicio del derecho provenga de los derechos o créditos obtenidos como
producto de la sucesión, excluyendo en consecuencia, aquellas acciones legales que
tenga provenientes de su patrimonio.”

Prejudicialidad civil o mercantil

Art. 51.- Cuando para resolver sobre el objeto del litigio sea necesario decidir sobre alguna
cuestión que, a su vez, constituye el objeto principal de otro proceso pendiente ante el mismo
tribunal civil o mercantil o ante uno distinto, si no fuere posible la acumulación de autos, el
tribunal, a petición de ambas partes o de una de ellas, oída la parte contraria en el término de tres
días, podrá, mediante auto, decretar la suspensión del curso de las actuaciones, en el estado en que
se hallen, hasta que finalice el proceso que tenga por objeto la cuestión prejudicial.

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CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

Contra el auto que deniegue la petición cabrá recurso de revocatoria; y contra el auto que acuerde
la suspensión, el de Apelación.

CAPÍTULO TERCERO
ABSTENCIÓN Y RECUSACIÓN

Abstención y recusación

Art. 52.- Los jueces o magistrados se abstendrán de conocer de un asunto cuando se pueda
poner en peligro su imparcialidad en virtud de sus relaciones con las partes, los abogados que las
asisten o representen, el objeto litigioso, por tener interés en el asunto o en otro semejante, así
como por cualquier otra circunstancia seria, razonable y comprobable que pueda poner en duda su
imparcialidad frente a las partes o la sociedad.

Si no se abstuviere, cualquiera de las partes podrá plantear la recusación en el primer momento


en que tenga oportunidad para ello; y si no lo hiciera entonces, no se le dará curso. Si los motivos
de recusación hubieran surgido con posterioridad o fueran desconocidos por el recusante, podrá
plantearse con posterioridad hasta antes de dictar Sentencia, pero estas circunstancias tendrán que
ser acreditadas en forma suficiente.

La recusación deberá tramitarse con carácter preferente, y se habrán de acumular en el


mismo incidente todas las causas de recusación que existieran al tiempo de promoverla si fueren
conocidas, rechazando las que se planteen con posterioridad.

Las partes no pueden allanarse a efecto de que conozca el juez o magistrado que haya
manifestado que pretende abstenerse de conocer del asunto.

Abstención. Competencia y Tramitación

Art. 53.- Cuando un juez o magistrado considere que concurre respecto de él algún motivo de
abstención, lo hará saber al tribunal jerárquicamente superior mediante escrito motivado, para que
declare si es procedente o no que se abstenga de conocer del asunto.

Cuando se trate de un magistrado de la Sala de lo Civil, hará saber la concurrencia del motivo
de abstención a la Sala mediante escrito motivado, a los efectos señalados en el inciso anterior.
Cuando se abstenga la mayoría o todos los magistrados que conforman la sala, el conocimiento y
decisión corresponderá a la Corte Suprema de Justicia en Pleno.

La abstención se resolverá sin más trámite, sin que sea necesario aportar prueba.

Recusación. Competencia

Art. 54.- El tribunal competente para sustanciar y resolver las recusaciones será el que
resulte jerárquicamente superior a aquel al que el recusado pertenezca, excepto en el caso de los
magistrados de la Sala de lo Civil de la Corte Suprema de Justicia.

Cuando se trate de la recusación de los Magistrados de la Sala de lo Civil, el tribunal


competente para conocer y resolver sobre ella será dicha Sala; y si fuere la mayoría de magistrados
o todos ellos los recusados, el conocimiento y decisión corresponderá a la Corte en Pleno.

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UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

SALA DE LO CIVIL en el incidente 18. RECUM-2015 de diez de febrero de dos


mil dieciséis.

“En ese sentido la recusación es aquella figura procesal que permite a las partes
solicitar la remoción o apartamiento del conocimiento del Juez o Magistrado
en un determinado proceso o incidente, por circunstancias personales o hechos
considerados un obstáculo al momento de impartir justicia, pues dichos motivos
ponen en duda su imparcialidad… Así las cosas esta Sala estima que el motivo
invocado por los recusantes, el hecho que el Licenciado XXX, ha conocido
previamente del asunto principal que se valorara en el actual recurso de Apelación
es una circunstancia seria, razonable y comprobable que puede poner en duda la
imparcialidad del juzgador…”

Recusación. Tramitación

Art. 55.- La recusación se debe presentar ante el tribunal que está conociendo del proceso,
expresando los hechos en que se fundamenta y acompañando los documentos probatorios
pertinentes.

Planteada la recusación, el juez o magistrado recusado mandará oír a las partes durante el
plazo común de tres días. Vencido el plazo, remitirá de inmediato todo lo actuado al tribunal
competente para tramitarla, acompañando un informe en el que se pronuncie sobre la causa de
recusación alegada. La recusación se decidirá sin más trámites.

Planteada la recusación de un magistrado de la Sala de lo Civil, previa audiencia de las partes


por el plazo común de tres días, se mandará oírle y se decidirá sin más trámites.

Efectos

Art. 56.- Los escritos por medio de los cuales se plantea la abstención o la recusación no
producen el efecto de inhibir del conocimiento o intervención al juez correspondiente, sino
a partir del día en que se le hace saber la resolución que lo declara separado del conocimiento
o intervención en el asunto; sin embargo, no podrá pronunciar resolución final en el proceso o
recurso mientras esté pendiente la recusación o abstención, pena de nulidad.

Decisión

Art. 57.- Siempre que se declare haber lugar a la abstención o la recusación, se mandará
separar al juez referido del conocimiento de la causa, y el tribunal que esté conociendo el incidente
designará al que deba suplirle en el cargo según la ley.

Cuando se declare no haber lugar a la abstención o la recusación por falta de mérito o de


prueba, el juez podrá continuar con el proceso sin la limitación establecida en el artículo anterior, y
se condenará en costas al recusante, en su caso.

De las resoluciones que se dictaren de conformidad con este capítulo no habrá recursos.

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CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

TÍTULO SEGUNDO
LAS PARTES PROCESALES

CAPÍTULO PRIMERO
CAPACIDAD Y LEGITIMACIÓN

Partes del proceso

Art. 58.- Son partes en el proceso el demandante, el demandado y quienes puedan sufrir los
efectos materiales de la cosa juzgada.

En los procesos civiles y mercantiles podrán ser parte:


1° Las personas físicas.
2° El concebido no nacido, para todos los efectos que le sean favorables.
3° Las personas jurídicas.
4° Las masas patrimoniales o los patrimonios separados que carezcan transitoriamente de
titular.
5° En calidad de demandadas las uniones y entidades que, sin haber cumplido los requisitos
legalmente establecidos para constituirse en personas jurídicas, actúen en el tráfico
jurídico.

CÁMARA SEGUNDA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO: Sentencia Referencia 11-3CM-15-A de las nueve horas con treinta
minutos del día veinticinco de marzo de dos mil quince.

“…El Código Procesal Civil y Mercantil en su Art. 58 Inc.1° establece que, son
partes en el proceso el demandante, el demandado y quienes puedan sufrir los
efectos materiales de la cosa juzgada. Parte demandante, es aquel titular del
derecho subjetivo o interés legítimo que se discute en el proceso, en otras palabras,
es el sujeto activo de la relación jurídica procesal, que ha ejercitado su derecho
de acción. El demandado es, el sujeto pasivo de la relación jurídica procesal, es
la persona contra quien se dirige la acción, y que se encuentra legitimadamente
obligado para con el actor. En cuanto a la delimitación del sujeto pasivo, cabe hacer
las siguientes consideraciones. La parte pasiva de la relación jurídica procesal
puede estar compuesta por una pluralidad de sujetos que tiene una misma causa
o un interés común en el proceso, según sea el número de las personas que hayan
intervenido en la relación jurídico material o sustantiva, o de conformidad a los
beneficiarios o personas perjudicadas directamente con la sentencia definitiva. Este
fenómeno de pluralidad de partes procesales, da lugar a la figura conocida como
litisconsorcio…”

Capacidad procesal de las personas físicas

Art. 59.- Podrán intervenir válidamente en el proceso los que gocen del pleno ejercicio de sus
derechos.

Los que no se hallen en pleno uso de sus derechos individuales podrán comparecer por sí
mismos siempre que tengan la debida autorización, asistencia o habilitación que la ley establezca
en cada caso.

47
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

Por los que no se encuentren en esa situación contemplada en el inciso anterior comparecerán
quienes deban suplir su incapacidad con arreglo a derecho.

Integración de la capacidad procesal

Art. 60.- Cuando la persona física no se encuentre en el pleno goce de sus derechos
individuales y no hubiere quien la represente o asista legalmente para comparecer en el proceso,
el juez lo comunicará a la Procuraduría General de la República, que asumirá la representación de
aquélla hasta que se produzca el nombramiento de un defensor judicial. En todo caso, el proceso
quedará suspendido mientras no conste la intervención del representante del Procurador General.

Lo mismo hará el juez cuando el incapaz pretenda demandar a su representante legal, o sea
demandado por éste, o cuando advierta la aparición de un conflicto de intereses entre el incapaz y
su representante legal.

Capacidad procesal de las personas jurídicas

Art. 61.- Tendrán capacidad procesal todas las personas jurídicas constituidas con los
requisitos y condiciones legalmente establecidos para obtener personalidad jurídica.

Las personas jurídicas comparecerán y actuarán en el proceso por medio de quien ostente su
representación conforme a la ley.

Comparecencia de los entes y uniones sin personalidad

Art. 62.- Los entes y uniones sin personalidad comparecerán y actuarán por medio de quienes
aparezcan como sus directores, gestores o administradores, o de quienes lo sean por disposición
legal, o de quienes de hecho actúen en el tráfico jurídico en su nombre frente a terceros.

No podrán denunciar su falta de capacidad para ser parte cuando tuviere reconocida dicha
capacidad en la relación jurídica material debatida o dentro del proceso, pues sería violentar el
principio de que nadie puede ir contra sus propios actos.

Si se desconociera a uno o más de los integrantes de un ente sin personalidad, se podrán


emplazar a todos ellos en la persona del conocido.

Representación de personas jurídicas extranjeras

Art. 63.- Las personas jurídicas extranjeras, sus sucursales, agencias o delegaciones, que
realicen actividades en El Salvador, se sujetarán a las mismas exigencias de representación que la
ley señala para las personas jurídicas nacionales, salvo convenio internacional o disposición legal
en contrario.

Intervención del Estado como parte procesal

Art. 64.- Cuando el Estado intervenga en un proceso civil o mercantil, cualquiera que sea
la calificación o ubicación procesal que se le asigne, se someterá al Órgano Judicial, sin más
privilegios que los señalados expresamente en la Constitución y en este Código.

Apreciación y denuncia de la falta de capacidad

Art. 65.- Las partes tienen la carga de acreditar e integrar su capacidad procesal.

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CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

La falta de capacidad para ser parte podrá ser apreciada de oficio por el tribunal en cualquier
momento del proceso o podrá ser denunciada como cuestión incidental. La incapacidad para ser
parte es insubsanable.

La incapacidad procesal es subsanable en la audiencia preparatoria o en la audiencia del


procedimiento abreviado; con posterioridad a ellas, se podrá denunciar mediante la promoción de
una cuestión incidental.

Legitimación

Art. 66.- Tendrán legitimación para intervenir como parte en un proceso los titulares de un
derecho o un interés legalmente reconocido en relación con la pretensión.

También se reconocerá legitimación a las personas a quienes la ley permita expresamente


actuar en el proceso por derechos e intereses de los que no son titulares.

CÁMARA TERCERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, SAN SALVADOR, Sentencia N°276-CM-13 de fecha: doce de
diciembre de dos mil trece.

“Partiendo de la afirmación anterior, el representante de una sociedad, por tratarse


de un representante convencional, no debería permitírsele actuar directamente en
el proceso, sino cuando sea persona autorizada para procurar. La representación
puede ser legal (emanada de una norma de la ley) o convencional (nace de un acto
de voluntad) según su fuente; puede ser necesaria (personas que no pueden actuar
sino por intermedio de otra), voluntaria (pudiendo actuar por sí mismo, se prefiere
designar a otra persona), según el carácter. En las sociedades, la representación es
necesaria, porque no pueden obrar sino por medio de sus órganos; pero su fuente
es convencional, por nacer del acuerdo de voluntades de los accionistas o socios.”

CÁMARA SEGUNDA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO en el incidente de Apelación 12-4CM-16 de fecha veintinueve de marzo
de dos mil dieciséis.

“…en un proceso concreto debe haber legitimación como un presupuesto procesal, pues
es necesario que haya una especial condición o vinculación de un sujeto con un objeto
litigioso determinado que le habilita para comparecer o exigir su comparecencia en un
proceso, Con la exigencia de la existencia de legitimación de las partes intervinientes
en un proceso se pretende evitar la apertura de toda una actividad jurisdiccional que
desemboque en no poder resolver un asunto jurídico debido a que la persona que
demanda o ha sido demandada no ostenta la calidad de parte.”

CÁMARA SEGUNDA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, SAN SALVADOR, Sentencia de Apelación Referencia N°8-4M-14-A
Fecha: trece de octubre de dos mil catorce.

“El apelante alega como segundo agravio la falta de legitimación ya que la parte
actora demando a la señora […], conocida Tributariamente por […], lo cual no
coincide con el documento base de la pretensión; ya que la letra de cambio fue
suscrito por […].

49
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

Al respecto, la calidad de legítimo contradictor la ostenta el sujeto, contra quien


se dirige la demanda y contra el que está legítimamente obligado para con el
actor, es decir, el sujeto pasivo de la relación jurídico procesal. Nuestro Código de
Procedimientos Civiles, en el Art. 12, hace Referencia a los sujetos que intervienen
en la relación procesal, definiendo la calidad de demandado o reo como aquel a
quien el actor reclama algún derecho real o personal.

La legitimación procesal es la consideración que hace la ley dentro de cada


proceso respecto de las personas que se hallan en una determinada relación con
el objeto del mismo. Es necesario, que en toda demanda exista una legitimación de
las partes procesales, lo cual implica que la parte que actúa como demandante le
asista el derecho para hacerlo, como de igual forma, el demandado sea aquel que se
encuentra obligado para con el actor.

En el caso de autos, la parte actora expuso en su demanda que promovía proceso


ejecutivo mercantil contra la señora […], conocida Tributariamente por […],
sin embargo esto no quiere decir que la persona que se demando es una persona
diferente a la que se emplazó y compareció en primera instancia, ya que la parte
actora en su demanda manifestó que la demandada es del domicilio de […], con
número de Identificación Tributaria […]

SALA DE LO CIVIL, Casación Referencia: 125-CAC-2013 de fecha ocho de


octubre de dos mil catorce.

“En consecuencia, el legítimo contradictor en casos de prescripción adquisitiva


de dominio, es el propietario de la cosa, a fin de que la relación jurídica procesal
se forme correctamente; no existiendo legítimo contradictor si el demandado es
poseedor, usufructuario, o tiene cualquiera otra calidad respecto al inmueble, menos
la de ser señor y dueño de ella.

En este proceso no se ha comprobado que la demandada sea propietaria del inmueble


que se trata de adquirir por prescripción; en consecuencia, no se ha formado
debidamente la relación jurídica procesal por falta de legítimo contradictor, y es
procedente declarar inepta la demanda.”

SALA DE LO CIVIL, Casación Referencia : 84-CAC-2012 de fecha veintiséis de


abril de dos mil trece.

“Así mismo la Sala considera que es un deber del Tribunal examinar la capacidad
para ser parte; en el caso concreto, la capacidad para ser parte en un proceso común
declarativo de constitución judicial de servidumbre legal de tránsito; determinando
que pueden serlo únicamente “el dueño del predio dominante contra el o los
dueños del predio o los predios sirvientes; pero nunca contra el o los poseedores,
habitadores o meros tenedores, pues se trata de un derecho real del cual sólo pueden
intervenir como partes en el proceso sus titulares. Art. 66 CPCM”, sin que se trate
de una limitante a los derechos consagrados en el Art. 2 Inc. 1° Cn. Ya que se trata
de determinar quién es el titular del interés legalmente reconocido en relación con
la pretensión, no bastando como sostiene el impetrante ser una persona física para
Poder ser indiscriminadamente parte en cualquier proceso. De manera que no se ha

50
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

interpretado erróneamente en la resolución recurrida el Art. 66 CPCM. no dando


lugar a casar la resolución por esta causa.”

CAPÍTULO SEGUNDO
POSTULACIÓN

Postulación preceptiva por medio de representante

Art. 67.- En los procesos civiles y mercantiles será preceptiva la comparecencia por medio de
procurador, nombramiento que habrá de recaer en un abogado de la República, sin cuyo concurso
no se le dará trámite al proceso.

No pueden ejercer la procuración:


1° Los pastores o sacerdotes de cualquier culto;
2° Los militares en servicio activo;
3° Los funcionarios y empleados públicos, que laboren a tiempo completo, excepto cuando
procuren por la entidad a que pertenezcan o ejerzan la docencia en la Universidad de El
Salvador;
4° Los presidentes y demás representantes, inclusive los asesores jurídicos de las
Instituciones de crédito, financieras y organizaciones auxiliares, salvo en asuntos propios
de dichas instituciones; y
5° Los abogados que en leyes especiales se les prohíba la procuración.

Modos de otorgar el apoderamiento

Art. 68.- El poder para litigar se deberá otorgar por escritura pública.

El poder

Art. 69.- El poder se entenderá general y abarcará todo el proceso, con sus instancias y
recursos, desde los actos preliminares hasta la ejecución; y facultará al procurador para realizar
válidamente, en nombre de su poderdante todos los actos procesales comprendidos, en la
tramitación de los procesos.

Sin embargo, se requerirá poder especial en los casos en que así lo exijan las leyes y para
la realización de los actos de disposición de los derechos e intereses protegidos por la ley. En
particular, se precisa poder especial para recibir emplazamientos, así como para la renuncia, la
transacción, el desistimiento, el allanamiento y las actuaciones que comporten la finalización
anticipada del proceso.

El otorgamiento de facultades especiales se rige por el principio de literalidad y no se presume


la existencia de facultades especiales no conferidas explícitamente.

Aceptación del poder

Art. 70.- El poder se presume aceptado por su ejercicio. Desde su aceptación el procurador
deberá prestar el asesoramiento y defensa jurídica a la parte en el proceso y la representará en
la realización de los distintos actos procesales, actuando en nombre y por cuenta de ésta, salvo
cuando deban ser realizados personalmente por la parte.

51
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

Deberes del procurador

Art. 71.- Salvo los actos de comunicación, que según la ley requieran la presencia de las
partes en persona, el Procurador oirá y firmará los que se refieran a su parte, incluso la notificación
de sentencias; y tales actuaciones tendrán la misma fuerza que tuvieran si hubiese intervenido
directamente el poderdante, sin que se pueda pedir que se entiendan con éste. (2)

Sustitución y delegación del poder

Art. 72.- El apoderado puede sustituir sus facultades o delegarlas, siempre que se encuentre
expresamente autorizado para ello. La sustitución implica el cese de la representación sin
posibilidad de reasumirla; la delegación faculta al delegante para revocarla y reasumir la
representación.

La actuación del apoderado sustituto o delegado obliga a la parte representada dentro de los
límites de las facultades conferidas.

Cese de la representación

Art. 73.- Cesará el procurador en su representación:


1° Por la revocación expresa o tácita del poder, luego que conste en el proceso. Se entenderá
revocado tácitamente el poder por el nombramiento posterior de otro procurador que se
haya personado en el proceso.
2° Por renuncia voluntaria o por cesar en el ejercicio de la profesión. No podrá el procurador
abandonar la representación antes de que se provea la designación de otro dentro del
plazo de diez días. Transcurridos éstos sin que se haya designado nuevo procurador, se le
tendrá por definitivamente apartado de la representación, y el proceso seguirá su curso,
debiendo realizar las comunicaciones por edicto.
3° Por fallecimiento del poderdante, en cuyo caso estará el procurador obligado a poner el
hecho en conocimiento del juez, acreditando en forma el deceso; y, si no presentare nuevo
poder de los causahabientes del finado, se estará a lo dispuesto para la sucesión procesal.
4° Por fallecimiento del procurador, en cuyo caso se hará saber al poderdante la defunción, a
fin de que designe nuevo procurador en el plazo de diez días. Lo mismo se hará cuando el
procurador sea sancionado con la suspensión en el ejercicio profesional.
5° Por separarse el poderdante de la pretensión o de la resistencia que hubiere formulado
y, en todo caso, por haber terminado el asunto o haberse realizado el acto para el que se
hubiere otorgado el poder.
6° Por vencimiento del plazo para el cual fue otorgado el poder.

Procuración oficiosa

Art. 74.- Se puede comparecer en nombre de aquel de quien no se tiene representación


judicial, siempre que la persona por la que se comparece se encuentre impedida de hacerlo por sí
misma, estuviera ausente del país, tenga razones de fundarlo temor o amenaza, o cuando se trate de
una situación de emergencia o de inminente peligro o haya alguna causa análoga y se desconociera
la existencia de representante con poder suficiente.

Cuando la parte contraria lo pida, el procurador deberá dar garantía suficiente a criterio del
juez de que su gestión será ratificada por el procurado, dentro de los dos meses siguientes a la
comparecencia de aquél.

52
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

Si no se produce la ratificación, se declarará concluido el proceso y se podrá condenar al


procurador al pago de daños y perjuicios, así como a las costas, siempre que, a criterio del juez, la
intervención oficiosa haya sido manifiestamente injustificada o temeraria.

La ratificación deberá hacerse pura y simplemente, siendo nula la ratificación parcial o


condicional. La ratificación tiene efectos retroactivos a la fecha de comparecencia del procurador,
sin perjuicio del derecho de terceros.

Se presume con carácter absoluto la ratificación de la procuración cuando el interesado


comparezca por sí o debidamente representado y no rechace expresamente la actuación del
procurador.

Procuración para personas con escasos recursos

Art. 75.- Todos los que carezcan de recursos económicos suficientes serán defendidos y
representados gratuitamente en el proceso por medio de la Procuraduría General de la República, y
estarán exentos de la constitución de los depósitos y consignaciones que pueda establecer la ley.

CAPÍTULO TERCERO
PLURALIDAD DE PARTES

Litisconsorcio necesario

Art. 76.- Cuando una relación jurídica indivisible pertenezca a varias personas, de modo que
la sentencia extenderá sus efectos a todas ellas, deberán demandar o ser demandadas de forma
conjunta.

En estos casos los actos de disposición sobre la pretensión sólo serán válidos si se realizan por
todos los litisconsortes.

Los actos procesales del litisconsorte activo afectan a los inactivos en la medida en que los
beneficien.

SALA DE LO CIVIL: Casación N°105-2001 de fecha: veintiuno de septiembre de


dos mil uno.

“Cuando no se constituye adecuadamente el litisconsorcio, de acuerdo a las normas


procesales, lo que ocurriría es que la parte no se integró completamente, y haría que
terminadas las distintas tapas del juicio, se presentara una situación anómala, por
haber sido aquél defectuosamente tramitado; lo anterior acarrea, como es natural,
la ineficacia del proceso, pues el juzgador no puede resolver sobre el fondo y sobre
la procedencia o no de lo solicitado por el actor.”

CÁMARA DE LA TERCERA SECCIÓN DE OCCIDENTE, AHUACHAPÁN


N°APC 34-10 de fecha ocho de diciembre de dos mil diez.

“Este conjunto de personas integradas en una misma posición constituye una


parte procesal única, aunque compleja.

Por ello, se considera que dicha figura se presenta cuando en una relación procesal,
ya sea en la parte demandante o en la parte demandada, o en ambas, aparecen

53
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

varios sujetos que, independientes jurídicamente unos de otros, son unificados


procesalmente por tener un interés común.
La figura procesal del litisconsorte necesario surge cuando la relación del derecho
sustancial, sobre la cual debe pronunciarse el juez, está integrada por una
pluralidad de sujetos, bien sean activos o pasivos, en forma tal que no es susceptible
de escindirse (dividirse) en tantas relaciones aisladas como sujetos activos o pasivos
individualmente considerados existan, sino que se presenta como una, única e
indivisible fuente al conjunto de tales sujetos.
Así, dada la naturaleza de la relación jurídica sustancial, los sujetos que litigan bajo
la condición de parte demandante o parte demandada están unidos de modo tal, que
a todos les afectará el sentido de la resolución a dictarse.
En ese sentido el carácter forzoso del litisconsorcio se justifica porque para que la
modificación de la relación única que vincula a los diversos sujetos sea eficaz, ésta
debe operar frente a todos sus integrantes. Como consecuencia del litisconsorcio
necesario las “...partes sustanciales activas o pasivas deben ser llamadas todas a
juicio para integrar debidamente el contradictorio.”
Atinente a ello, el Art. 76 PRCM, señala: “Cuando una relación Jurídica indivisible
pertenezca a varias personas, de modo que la sentencia extenderá sus efectos a
todas ellas, deberán demandar o ser demandados de forma conjunta. En estos casos
los actos de disposición sobre la pretensión sólo serán válidos si se realizan por
todos los litisconsortes.
Los actos procesales del litisconsorte activo afectan a los inactivos en la medida en
que los beneficien.”
Bajo lo expuesto, sin hesitaciones concluiremos que en este proceso debieron
investir el carácter de parte denunciante todos los herederos que aparecen reflejados
en la certificación de razón y constancia de inscripción traspaso por herencia [...],
integrando de este modo un litisconsorcio necesario activo en los términos del
mandato antes citado. Esto es así, por cuanto en el proceso donde se discute derechos
sobre el inmueble que pertenece en proindivisión a todos ellos, resulta necesaria
su participación en la medida que se pretende la desocupación del inmueble por
parte de los denunciados, inmueble que como se ha dicho es propiedad de todos los
herederos en los porcentajes que aparecen reflejados en los instrumentos agregados.
La calidad de parte consorcial se determina por la conexión jurídica de los
herederos respecto al dominio proindiviso del inmueble, de donde resulta la
indivisibilidad del objeto.
En razón de lo antes expuesto, consideramos que el Juez de Paz debió agotar
los medios necesarios para integrar el litisconsorcio necesario activo, debiendo
prevenir de conformidad al Art. 278 PRCM, y no declarar la improponibilidad de la
denuncia, ello para garantizar el derecho a la tutela Judicial efectiva o el derecho
de acceso a la justicia, pues la dirección del proceso está confiada a él, sobre la base
del Art. 14 PRCM.
Por lo anterior, consideramos que debe revocarse la sentencia venida en grado de
Apelación y ordenarse al Juez A Quo realice las prevenciones necesarias a efecto de
integrar el litisconsorcio necesario activo.”

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CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

SALA DE LO CIVIL, Casación N°1204-2001 de fecha: diecisiete de diciembre de


dos mil uno.

“La institución del litisconsorcio se encuentra regulada por los principios jurídicos
que rigen el proceso familiar, según los cuales, en el mismo, el juez debe guardar que
la causa se siga con la presencia de todos aquellos que pudieran resultar afectados
por la sentencia, de tal modo, que se eviten fallos contradictorios; así, pues, la
existencia del litisconsorcio debe apreciarse e integrarse de oficio.”

SALA DE LO CIVIL, Casacion N°105-2001 de fecha: veintiuno de septiembre de


dos mil uno.

“Sino no se constituye adecuadamente el litisconsorcio, de acuerdo a las normas


procesales, lo que ocurriría es que la parte no se integró completamente, y haría que
terminadas las distintas etapas del juicio, se presentara una situación anómala, por
haber sido aquél defectuosamente tramitado; lo anterior acarrea, como es natural,
la ineficacia del proceso, pues el juzgador no puede resolver sobre el fondo y sobre
la procedencia o no de lo solicitado por el actor.”

Excepción de falta de litisconsorcio

Art. 77.- La falta de litisconsorcio se podrá advertir por el demandado en la contestación a la


demanda.

En estos casos podrá el demandante presentar en la audiencia preparatoria un escrito de


demanda, en los mismos términos que la inicialmente presentada, dirigido contra quienes debieron
ser demandados, en cuyo caso el juez, si estima la falta de litisconsorcio, mandará emplazarlos
para que contesten a la demanda, suspendiendo la celebración de la audiencia.

Si el demandante se opusiere a la excepción de litisconsorcio, el juez oirá a las partes sobre


este punto y, si fuere procedente, concederá al demandante un plazo de diez días para constituirlo,
quedando entretanto, en suspenso el curso de las actuaciones. Transcurrido el plazo otorgado
al demandante para constituir el litisconsorcio sin haberlo realizado, se dictará auto motivado
poniendo fin al proceso. (2)

Si lo considera improponible habrá de dictar resolución motivada sobre la denegación del


litisconsorcio.

Litisconsorcio en caso de nulidad de actos jurídicos

Art. 78.- Cuando se pretenda la declaración de nulidad de un acto, acuerdo o negocio jurídico
que afecte a una pluralidad de personas, bastará con que la demanda se plantee sólo por una de
ellas, pero habrá de dirigirse contra todas las demás partes materiales del acto, acuerdo o negocio
jurídico o contra el ente que hubiere adoptado el acuerdo.

Si alguna de las partes materiales del acto, acuerdo o negocio jurídico estuviera conforme con
la nulidad pretendida y por la misma causa, será tenida por demandante a todos los efectos, sin
necesidad de presentar escrito de demanda.

Si estuviera conforme con la nulidad pero por causa diferente, presentará la correspondiente
demanda en el plazo concedido para contestar, de la que se dará traslado a los demás demandados

55
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

para que puedan formular la oportuna contestación, con suspensión del plazo para la celebración
de la audiencia preparatoria.

Si varios quieren presentar su demanda de nulidad, deberán hacerlo en el mismo proceso, y si


lo hacen en procesos distintos se decretará la acumulación.

Integración del litisconsorcio

Art. 79.- El litisconsorcio podrá integrarse con la intervención del legitimado en cualquier
momento del proceso, debiéndosele tener desde entonces por parte, a todos los efectos, sin
retroceder en el curso de las actuaciones, salvo que no se le hubiera emplazado.

De la solicitud de intervención se dará audiencia a todas las partes personadas por tres días,
para que puedan manifestar lo que a su derecho convenga, decidiendo seguidamente el juez.

Litisconsorcio voluntario

Art. 80.- Podrán comparecer en el proceso varias personas, como demandantes o como
demandados, cuando las pretensiones que se ejerciten provengan de un mismo título o causa de
pedir, estándose a las reglas sobre acumulación de pretensiones.

En este caso los litisconsortes serán considerados como sujetos independientes. Los actos de
cada uno de ellos no favorecen ni perjudican a los demás, sin que por ello se afecte la unidad del
proceso.

Intervención procesal del coadyuvante

Art. 81.- Mientras un proceso se encuentre pendiente, podrá ser admitido como coadyuvante
del demandante o del demandado quien acredite tener interés directo y legítimo en el resultado del
proceso, y siempre que dicho interés guarde relación de subordinación o dependencia con el objeto
principal en litigio.

Si la solicitud de intervención no se hubiera denegado de plano, el juez dará audiencia de


ella a todas las partes personadas, por tres días, sin suspender el curso del proceso, para que
puedan manifestar lo que a su derecho convenga; y el juez decidirá seguidamente. La resolución
que admita la intervención no es susceptible de recurso; la que la deniegue puede recurrirse en
Apelación, que será admitida en un solo efecto.

Actuación procesal del coadyuvante

Art. 82.- Si fuera admitida la intervención, no se retrocederá en el curso de las actuaciones y el


coadyuvante se incorporará al proceso en el estado en que se halle al momento de su intervención.

El coadyuvante limitará su actuación procesal a la defensa de su posición, y se le permitirán


las alegaciones necesarias para su defensa, que no hubiere podido presentar por corresponder a
momentos anteriores a su admisión en el proceso, sin que ello afecte el objeto del proceso, ni la
obligación jurídica de congruencia. De estas alegaciones se dará audiencia, en todo caso, a las
otras partes, por plazo de tres días.

Se le reconocerá al coadyuvante el derecho a recurrir la sentencia, pero en ningún caso podrá


actuar en contra de la parte a la que ayuda, ni realizar actos de disposición del derecho de ésta.

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CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

Intervención provocada o denuncia de la litis del demandante

Art. 83.- En caso de que la ley permita que el demandante llame a un tercero para que intervenga
en el proceso sin la calidad de demandado, por tener vínculo, obligación o responsabilidad respecto
del objeto del proceso, la solicitud de intervención deberá realizarse en la demanda, salvo que la ley
disponga expresamente otra cosa. Admitida por el tribunal la entrada en el proceso del tercero, éste
dispondrá de las mismas facultades de actuación que la ley concede a las partes.

Intervención provocada o denuncia de la litis del demandado

Art. 84.- Cuando la ley permita al demandado llamar a un tercero para que intervenga en el
proceso, por tener vínculo, obligación o responsabilidad respecto del objeto del proceso, solicitará
del juez, dentro del plazo concedido para contestar a la demanda, que se notifique al tercero la
pendencia del proceso, quedando entretanto en suspenso el plazo concedido para la contestación.

De la solicitud de intervención presentada por el demandado se dará audiencia al demandante


por tres días y se resolverá lo procedente.

Si se acuerda la notificación, se emplazará al tercero para contestar a la demanda en la misma


forma y en idénticos términos a los establecidos para el emplazamiento del demandado.

Si, comparecido el tercero, el demandado considerare que su litigar en el proceso debe ser
ocupado por aquél, se procederá conforme a lo dispuesto para la sucesión procesal.

Desestimada la solicitud de intervención, contestada la demanda por el tercero o transcurrido


el plazo para ello, el demandado deberá contestar a la demanda en el plazo que le hubiera restado.

Procuración en caso de pluralidad de sujetos

Art. 85. - Fuera del caso establecido en el artículo 80, cuando la posición de parte sea ocupada
por una pluralidad de sujetos, se exigirá una representación común cuando hagan uso de las
mismas alegaciones o excepciones, salvo que se le pudiera causar indefensión a alguno de ellos.

CAPÍTULO CUARTO
SUCESIÓN PROCESAL

Sucesión procesal por muerte

Art. 86.- Cuando por causa de muerte se transmita lo que sea objeto del proceso, la persona
o personas que sucedan al causante podrán continuar ocupando la misma posición procesal que su
causante, a todos los efectos.

Cuando conste en el proceso la defunción de una de las partes se seguirá los procedimientos
según el caso:
1° Comunicada la defunción de cualquiera de las partes por quien deba sucederle, se
suspenderá el proceso, previa audiencia a la contraria por el plazo de cinco días. Una
vez acreditados tanto la defunción como el título sucesorio y cumplidos los trámites
pertinentes, se tendrá por personado al sucesor en nombre del difunto. (2)
2°. Cuando conste en el proceso la defunción de una parte y el inicio de diligencias de
aceptación de herencia por quien deba sucederle, y éste no se personare en el proceso
estando habilitado como representante de la sucesión, conforme al Art. 1163 del

57
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

Código Civil, se permitirá a la contraria, pedir con identificación de los sucesores de


su domicilio o residencia, que se les notifique la existencia del proceso, emplazándoles
para comparecer en el plazo de diez días. Acordada y verificada la notificación del plazo
señalado, se suspenderá el proceso hasta que comparezcan los sucesores o finalice el
plazo concedido. (2)
3° Si hubiesen pasado quince días después del fallecimiento de una de las partes sin que
se presente persona alguna a aceptar la herencia y el juez no fuere competente para el
conocimiento de esas diligencias, comunicará tal situación al juez de lo civil competente,
para que éste proceda de conformidad al Art. 1164 del Código Civil, en cuyo caso se
suspenderá el proceso. Una vez declarada la herencia yacente y nombrado el curador se
emplazará a éste y se continuará el proceso.

CÁMARA SEGUNDA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO: Recurso de Apelación Referencia: 66-3CM-14-A de fecha treinta y uno
de octubre de dos mil catorce.

“Si bien es cierto se ha mencionado que la sucesión opera cuando fallece una de
las partes procesales, esta ópera cuando la persona fallece durante el curso del
proceso, ya que si la demanda ha fallecido con anterioridad al ejercicio del derecho
de acción, la demanda debe de ir dirigida, desde un inicio, en contra de sus herederos
(debiendo realizar previamente lo prescrito en el Art. 1257 del Código Civil), o en
contra de la herencia yacente, esto en virtud de que con la muerte de una persona
no desaparecen sus derechos y obligaciones, ya que al hacerlo produciría grandes
trastornos a la vida jurídica y en el comercio de los hombres razón por la cual las
relaciones de una persona sobreviven a su muerte, el patrimonio del difunto pasa a
sus herederos que vienen a ser continuadores de su personalidad.”

Falta de comparecencia de los sucesores

Art. 87.- Cuando los sucesores del demandado no comparezcan se les declarará en rebeldía y
el proceso seguirá su curso.

Cuando la falta de personación de los sucesores se debiese a que no quisieran comparecer, se


entenderá que la parte demandante renuncia a la pretensión ejercitada.

Sucesión procesal por transmisión del objeto del proceso

Art. 88.- Cuando se haya transmitido o cedido lo que sea objeto de un proceso, el adquirente
podrá solicitar, acreditando la transmisión, que se le tenga como parte en la posición que ocupaba
el transmitente, sucediéndole en el proceso.

Recibida la solicitud, el juez ordenará la suspensión del proceso, oyendo por tres días a la parte
contraria. Si ésta no se opusiere dentro de dicho plazo, se levantará la suspensión y el adquirente
ocupará la posición procesal del transmitente.

Si la otra parte manifestase su oposición a la entrada en el proceso del adquirente, el juez


resolverá conforme a derecho, y si la decisión fuere en el sentido de aceptar la sucesión procesal,
el sucesor quedará sujeto a las mismas alegaciones que podrían haberse ejercitado en contra de su
antecesor, así como a las nuevas que pudieran ejercitarse en su contra.

58
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

Cuando no se acceda a la pretensión del adquirente, el transmitente continuará en el proceso,


quedando a salvo las relaciones jurídicas privadas que existan entre ambos.

Sucesión por disolución de personas jurídicas

Art. 89.- En caso de disolución de una persona jurídica, no se dará por concluido el proceso
de liquidación hasta que no finalicen por sentencia firme todos los procesos que tuviera pendientes,
quedando a salvo siempre los actos de disposición de los bienes sociales, siempre que ello no
pueda volver nugatorio el efecto de la sentencia, a juicio prudencia del juez.

El Tribunal ante el que se ventile el proceso correspondiente enviará, a la brevedad posible,


oficio al Registro de Comercio, a efecto de que no se inscriba ninguna escritura de liquidación. (2)

TÍTULO TERCERO
EL OBJETO DEL PROCESO

CAPÍTULO PRIMERO
LA PRETENSIÓN PROCESAL
Clases de pretensiones

Art. 90.- Las partes podrán pretender de los tribunales de justicia la mera declaración de la
existencia o alcance de un derecho, obligación o cualquier otra situación jurídica; la declaración de
condena al cumplimiento de una determinada prestación; así como la constitución, modificación o
extinción de actos o situaciones jurídicas. También podrán pretender la ejecución de lo dispuesto
en los títulos establecidos por la ley, la adopción de medidas cautelares, y cualquier otra clase de
protección expresamente prevista por la ley.

Las pretensiones a que se refiere el inciso anterior se formularán ante el juez o tribunal que
tenga jurisdicción y sea competente, y frente a los sujetos a quienes haya de afectar la decisión
pretendida.

Delimitación de la causa de pedir

Art. 91.- Con carácter general, la causa de pedir la constituirá el conjunto de hechos de carácter
jurídico que sirvan para fundamentar la pretensión, ya sea identificándola, ya sea dirigiéndose a su
estimación. En los casos en los que la pretensión se apoye en un título jurídico o causa legal, será
ésta la que constituya la causa de pedir.

Si fueran varios los hechos, las partes deberán alegarlo o hacerlos valer en el período de
alegaciones iniciales, así como todos los títulos jurídicos o fundamentos legales, que puedan
integrar la causa de pedir y que fueran conocidos al tiempo de presentarlos.

En todo caso, los hechos, títulos o causas nuevas o de nuevo conocimiento que puedan afectar
la delimitación de la pretensión podrán incorporarse al proceso hasta la finalización de la audiencia
preparatoria, de conformidad con lo dispuesto en este código.

Litispendencia. Comienzo

Art. 92.- La litispendencia se produce desde la interposición de la demanda, si es admitida, y


a partir de la misma se despliegan todos los efectos determinados en las leyes.

59
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

CÁMARA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DE OCCIDENTE,


Apelación Referencia INC-APEL-01-04-2016 de fecha uno de abril de dos mil
dieciséis.

“Con respecto a la prejudicialidad alegada, no consta en el caso en estudio


certificación alguna con la que se compruebe que la demanda de prescripción
adquisitiva de dominio que menciona el licenciado GUILLERMO ADOLFO A. O.
presentada por el señor LUIS ALFONSO M., en contra del señor CARLOS ANTONIO
R.M., haya sido admitida a trámite por el Tribunal a quo, para considerarse que
existe prejudicialidad; ya que no basta solo la presentación de la demanda en la
Secretaría Receptora de demandas que es un trámite administrativo y no judicial,
como lo pretende el Licenciado A. O., sino que debe de haberse admitido la misma;
pues según lo dispuesto en el Art. 92 CPCM, la litispendencia se produce desde la
interposición de la demanda, si esta es admitida y a partir de la misma se despliegan
todos los efectos determinados en las leyes; esto en relación con lo dispuesto en el
Art. 281 Inc. 1° CPCM.-”

Perpetuación de la competencia (2)

Art. 93.- Una vez iniciado el proceso, los cambios que se produzcan en relación con el
domicilio de las partes, la situación de la cosa litigiosa y el objeto del proceso no afectarán a
la fijación de la competencia territorial, que quedará determinada en el momento inicial de la
litispendencia, y conforme a las circunstancias que se contengan en las alegaciones iniciales. (2)

Fijación del objeto del proceso. Prohibición de su modificación

Art. 94.- El objeto del proceso quedará establecido conforme a las partes, la petición y la
causa de pedir que figuren en la demanda. La contestación a la demanda servirá para fijar los
términos del debate en relación con el objeto procesal propuesto por el demandante, sin que éste
pueda ser alterado.

Lo establecido en el inciso anterior será también de aplicación a la reconvención.

Fijado el objeto procesal, las partes no podrán alterarlo, cambiarlo ni modificarlo


posteriormente, sin perjuicio de la facultad de formular alegaciones complementarias, en los
términos previstos en el presente código.

CÁMARA PRIMERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO: Sentencia Referencia 84-35CM1-2015, a las once horas y once minutos
del día treinta y uno de agosto de dos mil quince.

“…las clases de pretensiones pueden consistir en: 1) la mera declaración de la


existencia o alcance de un derecho, obligación o cualquier otra situación jurídica;
2) la declaración de condena al cumplimiento de una determinada prestación; 3)
la constitución, modificación o extinción de actos o situaciones jurídicas; y,4) la
ejecución de lo dispuesto en los títulos establecidos por la ley, la adopción de medidas
cautelares, y cualquier otra clase de protección expresamente prevista por la ley. El
momento procesal para fijar la pretensión es en la audiencia preparatoria, en la que
el demandante puede hacer las precisiones, aclaraciones y concreciones que estime
oportunas en relación con la deducida en la demanda, según lo establecido en el

60
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

inc. 1º del Art. 305 CPCM. En relación a lo anterior, el Art. 94 Incs. 1º y 3º CPCM.,
determina que el objeto del proceso quedará establecido conforme a las partes, la
petición y la causa de pedir que figuren en la demanda, y fijado el objeto procesal,
las partes no podrán alterarlo, cambiarlo ni modificarlo posteriormente.Ahora bien,
las pretensiones de declaración en un proceso civil, que se refieren necesariamente
a los derechos, intereses o situaciones de derecho privado, pueden ser meramente
declarativas, declarativas de condena o constitutivas. En efecto, existen ocasiones
en las que el derecho material se preserva y se tutela con la simple declaración
judicial, entonces se trata de pretensiones meramente declarativas; sin embargo,
cuando se trata de materias que tienen su encuadre en el derecho de obligaciones, al
actor no le basta, ni al ordenamiento jurídico tampoco, con una simple declaración
judicial, sea esta positiva o negativa, siendo necesario añadir a la declaración, la
condena a dar, hacer o no hacer algo, entonces se trata de pretensiones declarativas
de condena. Cualquiera que sea la pretensión deducida en un proceso, los jueces
deben fallar conforme a ésta.”

CAPÍTULO SEGUNDO
ACUMULACIONES

Finalidad de la acumulación. Efectos

Art. 95.- La acumulación tendrá por objeto conseguir una mayor economía procesal, así como
evitar posibles sentencias contradictorias cuando haya conexión entre las pretensiones deducidas
en los procesos cuya acumulación se solicite.

Admitida la acumulación de pretensiones o de procesos, se producirá el efecto de discutirse


todos los objetos procesales acumulados en un mismo procedimiento, con una sola sentencia, que
tendrá tantos pronunciamientos separados cuantos sean los objetos acumulados.

CORTE SUPREMA DE JUSTICIA EN CORTE PLENA, conflictos de


competencia en derecho privado y social, Referencia: 92-D-2012 de fecha treinta de
julio de dos mil doce.

“Es conveniente señalar que en materia de derecho procesal, la doctrina estima


para que la acumulación sea posible han de concurrir los siguientes presupuestos:

a) Instancia de parte: Es decir que tienen legitimación para instar la acumulación


quienes sean parte en cualquiera de los procesos cuya acumulación se pide; y
en el caso en estudio fue la parte actora la que solicitó la acumulación de los
procesos, cumpliéndose con este presupuesto.-

b) Conexión: En el caso en análisis concurren en ambos procesos tanto conexión


fáctica, por tratarse de hechos análogos fundamentados en las mismas normas
jurídicas, existiendo conexión jurídica en ambos casos.-

c) Requisitos procesales: Los requisitos procesales para la acumulación de


procesos, se encuentran regulados en nuestra legislación en el Art. 107 CPCM,
cumpliendo los casos sublite con los requerimientos establecidos en la norma
referida.-

61
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

d) Competencia: La competencia para conocer de los procesos acumulados se


atribuyen al tribunal que estuviera conociendo del proceso más antiguo, al
que se formulará la petición de acumulación, la antigüedad de los procesos
se determina por la fecha de presentación de la demanda, y si se hubieren
presentado el mismo día, el que se hubiere repartido primero; resultando en el
presente caso que el proceso más antiguo es el tramitado en el Juzgado Primero
de lo Civil y Mercantil de esta ciudad, lo cual se comprueba en el informe
rendido por dicho tribunal, agregado a fs. 39.-

Con respecto a la ejecución, ésta se refiere tanto a juicio ejecutivo como al


cumplimiento forzoso de la sentencia, dicho precepto ha sido regulado por el Art.
97 Inc. 2° CPCM el cual a su letra reza lo siguiente: […] La procedencia de la
acumulación de ejecuciones se decidirá en función de una mayor economía procesal,
de la conexión entre las obligaciones ejecutadas, y de la mejor satisfacción de los
diversos acreedores ejecutantes […]”, de lo anterior se colige que no solo hay que
tomar en cuenta que puedan existir sentencias contradictorias para que los procesos
sean acumulables, en virtud que al existir una acumulación de ejecuciones, trata
de dos procesos que han sido sentenciados con anterioridad en los cuales no existen
sentencias contradictorias y que a pesar de ello son acumulables para efectos de
la ejecución de las mismas, por ello como ya se mencionó no es requisito esencial
que los procesos -objeto de acumulación- puedan contener pronunciamientos
contradictorios, sino que dicho supuesto es un elemento más por el cual procede la
acumulación de procesos.-”

Acumulación de recursos

Art. 96.- Las partes podrán solicitar la acumulación de los distintos recursos que se hallen
pendientes ante el mismo o distinto tribunal cuando se den los requisitos de conexión entre las
pretensiones a que se refieren, siempre que exista el riesgo de que puedan recaer sentencias
contradictorias en caso de no procederse a la acumulación.

Los distintos recursos ejercitados por las partes en relación con una misma pretensión se
tramitarán de forma acumulada, procediendo el tribunal a la acumulación de oficio desde que
conste dicha circunstancia.

A la tramitación de la acumulación de recursos le será de aplicación lo dispuesto en este


capítulo.

Acumulación de ejecuciones

Art. 97.- Las partes podrán solicitar la acumulación de ejecuciones que se hallen pendientes
contra un mismo deudor ejecutado, aunque pendan ante distintos juzgados, siempre que las
obligaciones ejecutadas cuya acumulación se solicita no estén totalmente cumplidas.

La procedencia de la acumulación de ejecuciones se decidirá en función de una mayor


economía procesal, de la conexión entre las obligaciones ejecutadas, y de la mejor satisfacción de
los diversos acreedores ejecutantes.

La acumulación podrá solicitarle ante cualquiera de los jueces que estén conociendo de las
distintas ejecuciones; y, si resultare procedente, dicha acumulación se hará al proceso más antiguo.

62
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

Si hubiese comunidad de embargo en bienes hipotecados o pignorados, la acumulación deberá


realizarse en el proceso con garantía hipotecaria o prendaria; y si fuesen varias las garantías de tal
naturaleza, se estará al orden de preferencia de las mismas.

En caso de comunidad de embargo, cualquiera que sea la materia de que procedan, la


acumulación se hará al proceso más antiguo, entendiéndose como tal el que haya realizado el
primer embargo, salvo lo establecido sobre las garantías reales a que se refiere el inciso anterior,
pues en tal caso la acumulación se hará al proceso que contenga las mismas, no obstante lo
establecido en el artículo 110.

En los supuestos regulados en los incisos anteriores, el juez que conoce del proceso al que se
acumulan los otros será el competente para conocer de todas las ejecuciones acumuladas.

CORTE SUPREMA DE JUSTICIA EN CORTE PLENA en el conflicto de


competencia 135-COM.-2014 de tres de febrero de dos mil quince, expresó:

“De la disposición legal antes descrita se hace necesario advertir que si el legislador
previo la acumulación de ejecuciones en orden a la satisfacción de las obligaciones
con independencia de la materia, con mayor razón no debe el juzgador cuestionar su
competencia en virtud de la “cuantía”, como ocurre en el caso de autos, puesto que
la finalidad de tal figura procesal como antes se expusiera, persigue el cumplimiento
del principio de completa satisfacción del ejecutante, previsto en el Art. 552 CPCM.
Sin perjuicio de lo anterior, también cabe mencionar que si el legislador no hizo
ninguna distinción al reglar la competencia de la acumulación de ejecuciones por
razón de la materia, criterio que en si mismo supone la organización de la prestación
del servicio público de administración de justicia por razón de la especialidad
jurídica de la que trata el caso y la legislación a aplicarle, como manifestación de
una garantía del derecho a la protección jurisdiccional, menos deberá atenderse a la
diferenciación el tratamiento por razón de la cuantía.”

CORTE SUPREMA DE JUSTICIA EN CORTE PLENA en el conflicto de


competencia 185-COM-2014 de diecinueve de marzo de dos mil quince, manifestó:

“Por otra parte, es menester señalar que la acumulación de ejecuciones, sólo es


posible si ninguna de las ejecuciones ha concluido, es decir si en ninguna de ellas
se ha procedido a la aprobación del remate y pago al acreedor ejecutante o a la
adjudicación en pago, presupuesto que se cumple en el análisis ya que ninguna de la
ejecuciones ha concluido.”

CORTE SUPREMA DE JUSTICIA EN CORTE PLENA, conflictos de


competencia en derecho privado y social. Referencia: 187-COM-2013, de fecha
diecisiete de diciembre de dos mil trece.

“También es imprescindible referirnos a lo dicho en el Art. 706 CPCM, el que sólo


establece lo siguiente: “Los procesos, procedimientos y diligencias que estuvieren
en trámite al momento de entrar en vigencia el presente código, se continuarán y
concluirán de conformidad a la normativa con la cual se iniciaron. “Sin embargo, el
legislador no previó qué hacer para el caso de acumulación de procesos tramitados
con diferentes normativas, como lo es el de autos; pese a ello, y tomando en
consideración que tanto en la nueva ley como en la antigua se relacionan elementos

63
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

similares como requisitos para la acumulación de procesos, así se advierte del Art.
550 Inc. 2° C.Pr.C., que señala, el pleito más moderno se acumulará al más antiguo, y
el Art. 628 del mismo cuerpo normativo prevé sobre la preferencia de embargos; por
otro lado, el Código procesal Civil y Mercantil en el Art. 110 dispone, que decretada
la acumulación, el juez que conozca del proceso más antiguo devendrá competente
para conocer de todos los acumulados, también se relaciona el Art. 97 párrafo 5° de
dicha norma, que en caso de comunidad de embargo, cualquiera que sea la materia
de que procedan, la acumulación se hará al proceso más antiguo, entendiéndose
como tal el que haya realizado el primer embargo. Por tales circunstancias, no obsta
que sea el Juez de lo Civil de Santa Tecla quien conozca de los procesos de que se
trata ya que es el más antiguo y en donde se trabó primero el embargo.”

CORTE SUPREMA DE JUSTICIA EN CORTE PLENA conflicto de competencia


135-COM-2014 de fecha tres de febrero de dos mil quince.

“En el caso que nos ocupa, se trata de acumulación de ejecuciones, figura procesal
regulada en el Art. 97 CPCM el cual a su letra reza lo siguiente: “Las partes
podrán solicitar la acumulación de ejecuciones que se hallen pendientes contra un
mismo deudor ejecutado, aunque pendan ante distintos juzgados, siempre que las
obligaciones ejecutadas cuya acumulación se solicita no estén totalmente cumplidas.
[---] La procedencia de la acumulación de ejecuciones se decidirá en función de una
mayor economía procesal, de la conexión entre las obligaciones ejecutadas, y de
la mejor satisfacción de los diversos acreedores ejecutantes. [---] La acumulación
podrá solicitarle ante cualquiera de los jueces que estén conociendo de las distintas
ejecuciones; y, si resultare procedente, dicha acumulación se hará al proceso
más antiguo. [--- ] Si hubiese comunidad de embargo en bienes hipotecados
o pignorados, la acumulación deberá realizarse en el proceso con garantía
hipotecaria o prendaria; y si fuesen varias las garantías de tal naturaleza, se estará
al orden de preferencia de las mismas. [---] En caso de comunidad de embargo,
cualquiera que sea la materia de que procedan, la acumulación se hará al proceso
más antiguo, entendiéndose como tal el que haya realizado el primer embargo, salvo
lo establecido sobre las garantías reales a que se refiere el inciso anterior, pues en
tal caso la acumulación se hará al proceso que contenga las mismas, no obstante lo
establecido en el artículo 110.”[…], lo anterior en concordancia con lo establecido
en el Art. 573 CPCM que a su letra reza: “Se permitirá, a instancia de parte, la
acumulación de las ejecuciones seguidas contra un mismo ejecutado, conforme a lo
dispuesto en este código y en las disposiciones concordantes.

De la disposición legal antes transcrita se hace necesario advertir que si el


legislador previó la acumulación de ejecuciones en orden a la satisfacción de las
obligaciones con independencia de la “materia”, con mayor razón no debe el
juzgador cuestionar su competencia en virtud de la “cuantía”, como ocurre en el
caso de autos, puesto que la finalidad de tal figura procesal como antes se expusiera,
persigue el cumplimiento del principio de completa satisfacción del ejecutante,
previsto en el Art. 552 CPCM. Sin perjuicio de lo anterior, también cabe mencionar
que si el legislador no hizo ninguna distinción al reglar la competencia de la
acumulación de ejecuciones por razón de la materia, criterio que en sí mismo supone
la organización de la prestación del servicio público de administración de justicia

64
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

por razón de la especialidad jurídica de la que trata el caso y la legislación a aplicarle,


como manifestación de una garantía del derecho a la protección jurisdiccional, menos
entonces deberá atenderse a la diferenciación del tratamiento por razón de la cuantía.”

CAPÍTULO TERCERO
ACUMULACIÓN DE PRETENSIONES

Acumulación objetiva de pretensiones. Requisitos materiales

Art. 98.- El demandante podrá ejercitar a la vez en la demanda cuantas pretensiones tenga
contra un mismo demandado, con el único límite de que no sean incompatibles entre sí.

Se entenderá que resulta incompatible el ejercicio simultáneo en la misma demanda de dos


o más pretensiones cuando se excluyan mutuamente o sean contrarias entre sí, de suerte que la
estimación de una impida o haga ineficaz la estimación de la otra u otras. En este caso, el juez
decretará la improponibilidad de la acumulación intentada.

Acumulación eventual de pretensiones.

Art. 99.- Si el demandante plantea la acumulación de forma eventual, podrá intentar la


acumulación de pretensiones incompatibles entre sí. En este caso, será requisito indispensable
para la admisión de la acumulación que se determine en forma precisa la pretensión que se reputa
principal, así como aquella otra u otras que se ejercitan para el solo supuesto de que la ejercitada a
título principal no se estime fundada, debiéndose indicar también el orden de prelación entre ellas.

No se admitirá la acumulación de pretensiones a título alternativo.

Requisitos procesales de la acumulación de pretensiones

Art. 100.- La admisibilidad de la acumulación de pretensiones estará condicionada a la


concurrencia de los siguientes requisitos procesales:
1° Que el juez tenga jurisdicción y competencia por razón de la materia o por razón de la
cuantía para conocer de todas las pretensiones cuya acumulación se solicita.
2° Que las pretensiones acumuladas no deban, por razón de su materia, ventilarse en
procesos de diferente tipo o naturaleza si se ejercitaran por separado.
3° Que la ley no prohíba la acumulación en los casos en que se ejerciten determinadas
pretensiones en razón de su materia o por razón del tipo de proceso que se haya de seguir.

Asimismo, la acumulación de pretensiones no podrá alterar la competencia territorial cuando


ésta venga fijada por la ley con carácter indisponible. En todo caso, a la pretensión que deba
sustanciarse por medio de proceso común podrá acumularse la que, por sí sola, se ejercitaría en
proceso abreviado, siempre que ambas pretensiones lo sean por razón de su cuantía.

Casos especiales de acumulación necesaria

Art. 101.- Se acumularán de oficio las pretensiones que versen sobre la declaración de nulidad
de un acto o negocio jurídico y las que se refieran a la anulabilidad de los acuerdos adoptados
en una misma reunión de los órganos de una persona jurídica. Para ello, todas las demandas de
nulidad o anulabilidad que se presenten con posterioridad a otra se remitirán al mismo juzgado que
conoce de la primera.

65
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

También se acumularán en una misma demanda distintas pretensiones en los casos


determinados por la ley.
Apreciación de oficio de la acumulación de pretensiones
Art. 102.- El juez apreciará de oficio la procedencia de la acumulación solicitada por el
demandante. Si considera que la acumulación de pretensiones es indebida, antes de admitir la
demanda le requerirá al solicitante para que subsane el defecto en el plazo de cinco días, instándole
para que mantenga sólo la acumulación que fuere posible conforme a este código.
Transcurrido el plazo otorgado sin que se produzca la subsanación, o si las pretensiones
indicadas por el demandante siguieran siendo no acumulables, se rechazará por inadmisible la
demanda, acordándose el archivo de las actuaciones sin más trámite, pero dejando a salvo el
derecho del demandante para volver a plantear debidamente las pretensiones concernidas.
Denuncia de la acumulación indebida de pretensiones
Art. 103.- La acumulación de pretensiones indebida también podrá hacerse valer por
el demandado como excepción en la contestación a la demanda, y se resolverá en la audiencia
preparatoria del proceso común o en la audiencia del proceso abreviado, o en el primer acto oral
del trámite procesal correspondiente.
Acumulación subjetiva de pretensiones
Art. 104.- Podrán ejercitarse simultáneamente las pretensiones que uno tenga contra varios
sujetos o varios contra uno, siempre que exista un nexo o conexión por razón del título o de la
causa de pedir.
Se entenderá que existe conexión entre las pretensiones cuando deriven de títulos idénticos o
semejantes, y cuando la causa de pedir esté constituida total o parcialmente por el mismo conjunto
de hechos jurídicos relevantes.
CAPÍTULO CUARTO
ACUMULACIÓN DE PROCESOS

SECCIÓN PRIMERA
DISPOSICIONES COMUNES

Legitimación para solicitar la acumulación de procesos

Art. 105.- La acumulación de procesos diferentes sólo podrá solicitarse por quien sea parte en
cualquiera de los procesos cuya acumulación se pretende.

No obstante, la acumulación podrá ser decretada de oficio cuando dichos procesos estén pendientes
ante el mismo tribunal, así como en los otros casos en que expresamente lo disponga la ley.

Acumulación de procesos.

Causas

Art. 106.- La acumulación podrá solicitarse cuando se estén tramitando separadamente


diversos procesos entre cuyos objetos procesales exista conexión fáctica o jurídica, o de ambas

66
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

naturalezas a la vez, de tal modo que, si no se acumularan los procesos pudieren dictarse sentencias
con fundamentos o pronunciamientos contradictorios, incompatibles o mutuamente excluyentes.
Se entenderá que siempre existe conexión cuando entre los objetos procesales de los procesos cuya
acumulación se pretenda exista relación de prejudicialidad.

Requisitos procesales para la acumulación de procesos

Art. 107.- La acumulación de procesos declarativos sólo podrá decretarse cuando se sustancien
por los mismos trámites o la tramitación pueda unificarse sin pérdida de derechos procesales.

La acumulación de procesos sólo podrá admitirse respecto de aquellos en los que aún no haya
recaído resolución definitiva. La solicitud de acumulación deberá efectuarse siempre antes de que
en alguno de ellos se haya celebrado la audiencia probatoria o la audiencia del proceso abreviado.

Para conocer de la acumulación será competente el tribunal que estuviere conociendo del
proceso más antiguo, el cual deberá tener jurisdicción y competencia objetiva por razón de la
materia o de la cuantía para conocer del proceso o procesos que se pretenda acumular.

INCISO DEROGADO (2).

Exclusión de la acumulación de procesos

Art. 108.- La acumulación de procesos se rechazará cuando conste que las partes pudieron
acudir a la acumulación de pretensiones.

Si los procesos fueren promovidos por el mismo demandante o por demandado reconviniente,
se entenderá, salvo justificación cumplida, que pudo promoverse un solo proceso en los términos
del inciso anterior y no procederá la acumulación.

Acumulación de procesos y excepción de litispendencia

Art. 109.- Cuando el riesgo de sentencias con pronunciamientos o fundamentos


contradictorios, incompatibles o mutuamente excluyentes obedezca a la existencia simultánea de
dos o más procesos entre las mismas partes y en relación con la misma pretensión, deberá acudirse
a la excepción de litispendencia, sin que quepa la acumulación de dichos procesos.

De estimarse la excepción de litispendencia se pondrá fin al proceso o procesos iniciados con


posterioridad, con condena en todas las costas causadas en los procesos finalizados.

Competencia para la acumulación

Art. 110.- La acumulación de procesos podrá solicitarse ante cualquiera de los jueces que
conozcan de ellas. En otro caso, se dictará auto rechazando la solicitud, sin que quepa ulterior
recurso.

La antigüedad se determinará por la fecha y hora de la presentación de la demanda.

Decretada la acumulación, el juez que conozca del proceso más antiguo devendrá competente
para conocer de todos los acumulados.

67
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

Rechazo inicial de la solicitud de acumulación de procesos

Art. 111.- El juez dictará auto para rechazar la solicitud de acumulación cuando ésta no
contenga los datos exigidos por la ley y tal insuficiencia no se hubiera subsanado; o cuando, según
lo que conste en dicha solicitud, la acumulación no fuere procedente por no concurrir las causas o
los requisitos procesales establecidos en los artículos anteriores.

Efecto no suspensivo de la solicitud de acumulación

Art. 112.- La solicitud de acumulación de procesos no suspenderá el curso de los que se


pretenda acumular, pero el tribunal que conozca de cada uno deberá abstenerse de dictar sentencia
en cualquiera de ellos en tanto no haya decisión sobre la procedencia de la acumulación,
suspendiéndose al efecto el plazo para dictarla.

Si los procesos están pendientes ante distintos tribunales, en cuanto se solicite la acumulación
se comunicará tal circunstancia, por el medio más rápido, al otro tribunal; y éste deberá abstenerse
en todo caso de dictar sentencia hasta que se decida definitivamente sobre la acumulación
pretendida.

SECCIÓN SEGUNDA
ACUMULACIÓN DE PROCESOS PENDIENTES ANTE UN MISMO TRIBUNAL

Solicitud

Art. 113.- La acumulación se solicitará por escrito, en el que se identificarán los procesos cuya
acumulación se pide, y se indicará el estado procesal en que se encuentran, junto con las razones
que justifican la acumulación. En el proceso abreviado, podrá presentarse la solicitud oralmente en
el acto de la audiencia, si no se hizo antes.

Sustanciación y decisión del incidente

Art. 114.- Admitida la solicitud, se dará audiencia a las demás partes personadas y a todos los
que sean parte en cualquiera de los procesos cuya acumulación se pretende, aunque no lo sean en
aquél en el que se ha solicitado, a fin de que, en el plazo común de tres días, formulen alegaciones
acerca de la acumulación.

En el proceso abreviado, si la solicitud se formuló oralmente en el acto de la audiencia las


demás partes efectuarán a continuación sus alegaciones y se resolverá inmediatamente sobre la
solicitud.

Transcurrido dicho plazo, o recibidas las alegaciones, el juez resolverá la cuestión dentro de
los cinco días siguientes, otorgando la acumulación si todas las partes estuvieren de acuerdo en
ella. En otro caso, resolverá lo que estime procedente, otorgando o denegando la acumulación
solicitada.

Contra el auto que se dicte sólo admitirá el recurso de revocatoria.

Efectos del auto que resuelve la acumulación

Art. 115.- Aceptada la acumulación, el tribunal ordenará que los procesos más modernos se
unan a los más antiguos, a los efectos prevenidos en este código.

68
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

Si los procesos acumulados no estuvieran en el mismo estado de tramitación se ordenará la


suspensión del que estuviera más avanzado, hasta que los otros se hallen en el mismo o similar
estado.

Denegada la acumulación, los procesos se sustanciarán separadamente, condenándose a la


parte que la hubiera promovido al pago de las costas del incidente.

SECCIÓN TERCERA
ACUMULACIÓN DE PROCESOS PENDIENTES ANTE DISTINTOS TRIBUNALES

Normas aplicables

Art. 116.- La acumulación de procesos que pendan ante distintos tribunales se regirá por las
normas anteriores con las especialidades que se indican en los artículos siguientes. La solicitud de
acumulación formulada en un proceso abreviado se sustanciará, en cuanto sea posible, conforme a
las normas contenidas en este título.

Solicitud de acumulación de procesos. Tramitación

Art. 117.- Además de lo previsto en el artículo 113, en el escrito se deberá indicar el tribunal
ante el que penden los otros procesos cuya acumulación se pretende.

De la solicitud se dará audiencia a las demás partes personadas, para que formulen las
alegaciones que estimen oportunas en el plazo común de tres días. El juez dictará auto en el plazo
de tres días decidiendo sobre la acumulación. En caso de que ésta se deniegue, se comunicará al
otro tribunal, que podrá dictar sentencia.

Declaración de procedencia de la acumulación de procesos

Art. 118.- Si el juez estima procedente la acumulación, en el mismo auto requerirá al que
conozca del otro pleito, solicitándole la remisión de los correspondientes procesos.

Al requerimiento se adjuntará certificación de lo pertinente para dar a conocer la causa por


la que se pretende la acumulación y las alegaciones que, en su caso, hayan formulado las partes
distintas del solicitante de la acumulación.

Tramitación ante el juez requerido

Art. 119.- Recibido el requerimiento y la certificación, el juez requerido informará de ellos a


las partes que ante él hayan comparecido.

Si alguno de los personados ante el tribunal requerido no lo estuviera en el proceso ante el


tribunal requirente, dispondrá de un plazo de tres días para instruirse de las actuaciones en la
secretaría del tribunal y presentar por escrito las alegaciones que estime oportunas.

Resolución sobre el requerimiento de acumulación

Art. 120.- Cumplidas las actuaciones anteriores, el Juez dictará auto en el que acepte o
deniegue lo solicitado en el requerimiento de acumulación. (2)

Si ninguna de las partes personadas ante el tribunal requerido se opusiere a la acumulación,


o si no alegaren datos o argumentos distintos de los alegados ante el tribunal requirente, el juez

69
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

requerido sólo podrá fundar su negativa al requerimiento en que la acumulación debe hacerse a los
procesos pendientes ante él mismo.
Efectos de la aceptación de la acumulación por el requerido
Art. 121.- Aceptado el requerimiento, se remitirán los autos al juez requirente y se emplazará
a las partes para que en tres días se personen ante él, a efectos de continuar con el proceso.
Acordada la acumulación de procesos, se suspenderá el curso del proceso más avanzado hasta
que el otro llegue al mismo estado procesal, y entonces se efectuará la acumulación.
Efectos de la no aceptación de la acumulación de procesos por el tribunal requerido.
Resolución de la discrepancia
Art. 122.- Cuando el juez requerido no aceptare el requerimiento de acumulación, lo
comunicará al juez requirente, y se dirigirán a la Corte Suprema de Justicia para que resuelva la
discrepancia, remitiéndole, en el menor tiempo posible que no excederá de cinco días, certificación
de lo actuado en los respectivos juzgados y que sea necesario para resolver.
Los jueces discrepantes emplazarán a las partes ante el tribunal competente, por tres días, para
que puedan comparecer y aleguen por escrito lo que consideren que conviene a su derecho.
Decisión de la discrepancia
Art. 123.- La Corte Suprema de Justicia, en pleno decidirá por medio de auto, en el plazo
de cinco días, a la vista de los antecedentes que consten en los autos y de las alegaciones escritas
de las partes, si se hubieran presentado, procediéndose conforme a lo establecido en los artículos
precedentes. Contra el auto que se dicte no se dará recurso alguno.
Acumulación de más de dos procesos. Requerimientos múltiples de acumulación.
Art. 124.- Cuando un mismo juez fuera requerido de acumulación por dos o más tribunales,
remitirá los autos a la Corte Suprema de Justicia y lo comunicará a todos los requirentes para que
defieran la decisión a dicho superior. En este caso, se estará a lo dispuesto en los dos artículos
anteriores.
Prohibición de un segundo incidente de acumulación
Art. 125.- Suscitado el incidente de acumulación en un proceso, no se admitirá solicitud de
acumulación de otro proceso ulterior si quien la pidiera hubiese iniciado el proceso que intentare
acumular.
El tribunal ante quien se formule la solicitud en el caso del inciso anterior la rechazará de
plano mediante auto.
Si, a pesar de la anterior prohibición, se sustanciase el nuevo incidente, tan pronto como
conste el hecho se pondrá fin a aquél, con imposición de costas al que lo hubiera promovido.
CAPÍTULO QUINTO
FINALIZACIÓN ANTICIPADA DEL PROCESO

Art. 126.- Las partes podrán disponer de las pretensiones ejercitadas en el proceso, en
cualquier estado y momento del mismo, ya sea en la primera instancia, durante la sustanciación

70
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

de los recursos o en la ejecución forzosa, siempre conforme a la naturaleza de cada acto de


disposición. A tal efecto podrán renunciar, desistir del proceso, allanarse, someterse a arbitraje o
a cualquier otro mecanismo de solución alternativa de controversias y transigir sobre lo que sea
objeto del mismo.

De lo dispuesto en el inciso anterior se exceptuarán los casos en los que la ley prohíba la
disposición o la limite por razones de orden público, de interés general, de protección de menores
y terceros, o cuando implique fraude de ley.

Finalización anticipada del proceso por improponibilidad sobrevenida

Art. 127.- Si tras la demanda o la reconvención sobreviene alguna causal de improponibilidad


como las señaladas en este código, la parte a quien interese lo podrá plantear al tribunal por escrito
o verbalmente durante el desarrollo de alguna de las audiencias.

Cuando el vicio sea planteado por escrito, se mandará oír por tres días a todos los
demás intervinientes. Cuando alguno de éstos entendiera que no existe causa para terminar
anticipadamente el proceso, presentará su oposición y el juez convocará a una audiencia sobre ese
único objeto en los diez días siguientes, a menos que estuviere próxima la realización de alguna,
en cuyo caso se incluirá el incidente como punto de agenda.

En la audiencia, el tribunal decidirá si procede continuar el proceso, imponiéndose las costas


del incidente a la parte que viera rechazada su petición. Si la cuestión fuese planteada por todas
las partes, o no hubiere oposición a la finalización del proceso, de inmediato se accederá a lo
solicitado.

El tribunal también podrá apreciar de oficio estas circunstancias, en cuyo caso lo manifestará
a las partes en la audiencia más próxima para que aleguen lo pertinente. Inmediatamente, en la
misma se resolverá lo que conforme a derecho proceda.

Si se termina el proceso, se harán los pronunciamientos relativos a las medidas cautelares,


en caso de que se hubieran decretado, así como en lo que toca a las costas procesales. Contra la
resolución que ordene la continuación del proceso no cabrá ningún recurso. Contra la que acuerde
su terminación, cabrá recurso de Apelación.

CÁMARA TERCERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, SAN SALVADOR, en la Sentencia de Apelación Referencia N°13-
CQCM-16 de fecha: veintiséis de febrero de dos mil dieciséis.

“La improponibilidad de la pretensión, se puede entender como un despacho


saneador de la misma, constituyendo una manifestación contralora por parte del
Órgano Jurisdiccional; en ese sentido puede darse o manifestarse esa facultad al
rechazarse por tal motivo una demanda (pretensión) in limine litis; pero también
puede darse la improponibilidad de la misma in persequendi litis, pues si bien se
exige un examen riguroso, prima facie de la demanda, existe la posibilidad que los
errores o vicios no pueden ser advertidos inicialmente, pasando desapercibidos por
constituir errores o vicios encubiertos, pero sí son (advertidos) in persequendi litis,
bien por el juzgador o porque el demandado se los hace notar. (Art. 127 CPCM)
Esas circunstancias de orden procesal, pueden ser de dos tipos:

71
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

a) Ausencia de un presupuesto de la litis: Sea de alguno de los de carácter


subjetivo, como la falta de competencia objetiva y funcional del órgano judicial o
el sometimiento a compromiso pendiente (lo que hace en este caso al asunto, no
jurisdiccional). A esos ejemplos legales habrá que añadir la posible falta de
jurisdicción de los tribunales salvadoreños por razones materiales o territoriales, o
los defectos de personalidad de las partes; falta de presupuestos objetivos: ilicitud o
imposibilidad de la tutela jurisdiccional reclamada; falta de competencia en razón
del territorio; y,

b) Aparición de un óbice procesal de la sentencia de fondo. El artículo 277 CPCM,


menciona concretamente la litispendencia y la cosa juzgada, sin excluir otros. Por
ello mismo a este grupo de los óbices se une por su naturaleza la caducidad de la
acción por transcurso del plazo previsto para su ejercicio, y otros.

De allí que se considere a la improponibilidad como la facultad que tiene el juzgador


de rechazar de plano las pretensiones que no pueden ser acogidas, ni siquiera
tramitadas por el aparato jurisdiccional, en atención a la legalidad, al debido
proceso y al derecho de defensa de las partes. Inclusive, si la pretensión escapa del
ámbito jurisdiccional o se basa en un objeto que carece de controlador jurisdiccional,
cabría el rechazo por improponibilidad, y es que tal rechazo se traduciría en que la
demanda no constituye el medio idóneo para que el proceso continúe su marcha en
pos de la sentencia definitiva; en consecuencia, tenemos que la improponibilidad está
reservada sólo para casos de vicios que, por su naturaleza, no admiten corrección o
subsanación, pues la pretensión no es judiciable, implicando un defecto absoluto en
la facultad de juzgar de parte del tribunal.”

CÁMARA PRIMERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, SAN SALVADOR, Sentencia Referencia 191-79CM1-2014 de fecha
seis de enero de dos mil quince.

“Por otra parte, la referida funcionaria ha utilizado indebidamente el mecanismo de


control jurisdiccional de la improponibilidad sobrevenida de la demanda, ya que no
se trata del surgimiento de un elemento nuevo que afecte con tal vicio la pretensión,
en los términos que prescribe el Art. 127 Inc. 4° CPCM., sino, que fue una valoración
parcial de los elementos de prueba incorporados al proceso, que debieron ser
valorados en su totalidad por medio del dictado de una sentencia, estimando o
desestimando la pretensión incoada por el apoderado de la parte actora.

En ese orden de ideas, visto el contenido de la demanda con la documentación a que


ha hecho referencia la sentenciadora, se estima que la pretensión de mérito cumple
con los requisitos para que siga siendo conocida por el Órgano Judicial, pues no
existe ninguna causal de improponibilidad sobrevenida, por lo que se acoge el punto
de Apelación invocado.”[...]

Esta Cámara concluye que en el caso sub-júdice, no es viable la declaratoria de


improponibilidad sobrevenida de la pretensión contenida en la demanda, en virtud
que no existe ninguna causal que la genere en el trámite del proceso, y habiéndose
agotado todas las etapas del mismo, se deberá resolver el fondo de la pretensión
debatida en base a las pruebas aportadas, a través de una sentencia.

72
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

Consecuentemente con lo expresado, es procedente revocar el auto definitivo


impugnado, ordenar que se continúe con el trámite de ley, dictándose la sentencia
correspondiente, sin condena en costas de esta instancia.”

Influencia del cambio de circunstancias en la sentencia

Art. 128.- Después de iniciado el proceso, los cambios que se pudieran producir en el estado
de las cosas o de las personas que hubieran originado la demanda o, en su caso, la reconvención,
no se tendrán en cuenta a la hora de dictar sentencia. Lo anterior se entiende con la excepción de
que la innovación privare definitivamente de interés legítimo a las pretensiones que se hubieran
deducido en la demanda o en la reconvención, en cuyo caso se estará a lo dispuesto en el artículo
anterior.

Renuncia

Art. 129.- Cuando el demandante manifieste su renuncia a la pretensión procesal ejercitada o


al derecho material en que funde su pretensión, el juez dictará sentencia absolutoria del demandado,
salvo que la renuncia fuese legalmente improponible, en cuyo caso dictará auto mandando seguir
el proceso adelante.

La renuncia ha de ser personal, clara, expresa, sin condición alguna y deberá formularse apud
acta o por medio de apoderado con poder especial.

La sentencia absolutoria tendrá efectos de cosa juzgada.

Desistimiento de la instancia

Art. 130.- El demandante podrá desistir unilateralmente del proceso siempre que lo haga antes
de que el demandado sea emplazado para contestar a la demanda, o sea citado para audiencia, y
también en cualquier momento cuando el demandado se encontrare en rebeldía.

En cualquier otro caso, el desistimiento deberá contar con la conformidad del demandado,
a cuyo efecto se le dará audiencia del escrito de desistimiento por el plazo de tres días para que
lo conteste. Si el demandado diere su conformidad o no se opusiere al desistimiento, el tribunal
dictará auto de sobreseimiento. Si el demandado se opusiera al desistimiento, el juez resolverá lo
que considere oportuno sobre la continuación del proceso.

En los casos en que se de lugar al desistimiento, quedará a salvo el derecho del demandante
para promover nuevo proceso sobre la misma pretensión.

El desistimiento habrá de ser personal, claro, expreso, sin condición alguna y deberá
formularse apud acta o por medio de apoderado con poder especial.

Allanamiento

Art. 131.- El demandado podrá allanarse a todas las pretensiones del demandante,
aceptándolas, en cuyo caso el juez dictará sentencia estimativa de acuerdo con lo solicitado por
éste. Cuando el juez entienda que el allanamiento es contrario al orden público o al interés general,
o que se realiza en perjuicio de tercero, o que encubre un fraude de ley, dictará auto rechazándolo
y mandando que el proceso continúe su curso.

73
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

El allanamiento podrá limitarse sólo a una parte de la pretensión planteada por el


demandante. En tal caso, el juez, siempre a instancia del demandante, podrá dictar de inmediato
un auto acogiendo los puntos que hayan sido objeto de dicho allanamiento, cuando sea posible
un pronunciamiento separado que no prejuzgue las restantes cuestiones no allanadas, y podrá
ejecutarse conforme a lo establecido en este código.

El allanamiento habrá de ser personal, claro, expreso, sin condición alguna y deberá formularse
apud acta o por medio de apoderado con poder especial. Si el allanamiento se efectuara con
anterioridad a la contestación de la demanda, no se impondrán costas procesales, salvo manifiesta
temeridad.

El proceso podrá continuar para discutir y resolver sobre las cuestiones planteadas por el
demandante que no hubieran sido objeto de allanamiento.

Transacción Judicial

Art. 132.- Las partes podrán realizar una transacción judicial llegando a un acuerdo o
convenio sobre la pretensión procesal. Dicho acuerdo o convenio será homologado por el tribunal
que esté conociendo del litigio al que se pretenda poner fin y tendrá efecto de cosa juzgada. La
homologación se negará si el tribunal entiende que la transacción no es conforme a la ley o se
realiza en perjuicio de tercero.

CAPITULO SEXTO
CADUCIDAD DE LA INSTANCIA

Caducidad de la instancia

Art. 133.- En toda clase de procesos se considerará que las instancias y recursos han sido
abandonados cuando, pese al impulso de oficio de las actuaciones, no se produzca actividad
procesal alguna en el plazo de seis meses, si el proceso estuviere en la primera instancia; o en el
plazo de tres meses, si se hallare en la segunda instancia. Los plazos señalados empezarán a contar
desde la última notificación efectuada a las partes.

La caducidad de la instancia operará también contra el Estado y demás personas de derecho


público.

La caducidad de la instancia se declarará por medio de auto, que contendrá, conforme a las
reglas generales, la condena en costas contra la parte que hubiera dado lugar a aquélla.

En los procesos extinguidos por caducidad, las pruebas producidas no conservarán su validez
legal y no podrán hacerse valer en otro proceso posterior, salvo la instrumental, los informes
periciales y la que hubiera sido anticipada; dichas pruebas se podrán introducir en nuevo proceso
iniciado, conforme a las reglas de admisibilidad establecidas en este código.

Exclusión de la caducidad en ejecución forzosa

Art. 134.- Las disposiciones sobre caducidad de la instancia no serán de aplicación para la
ejecución forzosa, cuyas actuaciones podrán continuar hasta lograr el cumplimiento de lo juzgado,
aunque el proceso haya quedado sin curso durante los plazos señalados. (2)

74
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

Exclusión de la caducidad por fuerza mayor o contra la voluntad de las partes

Art. 135.- No se producirá caducidad de la instancia o del recurso si el procedimiento hubiere


quedado paralizado por fuerza mayor o por cualquier otra causa contraria a la voluntad de las
partes o interesados, que no fuera imputable a ellos.

Efectos de la caducidad de la primera Instancia

Art. 136.- Declarada y firme la caducidad en primera instancia, el juez ordenará el cese
inmediato de todos los efectos de las providencias dictadas en el proceso respectivo, así como el
archivo del expediente.

En este caso, se entenderá producido el desistimiento en dicha instancia y podrá incoarse


nueva demanda. (2)

Efectos de la caducidad en segunda instancia. (2)

Art. 137.- Si se declarare la caducidad en segunda instancia, se tendrá por firme la


decisión impugnada y se devolverán los autos al juzgado de origen, junto con la certificación
correspondiente.

Impugnación de la declaración de caducidad por fuerza mayor

Art. 138.- Declarada la caducidad de la instancia conforme a las disposiciones anteriores, y


notificada que sea, la parte afectada podrá promover un incidente para acreditar que la caducidad
se ha debido a fuerza mayor o a otra causa contraria a la voluntad de las partes o a retraso no
imputable a ellas.

El incidente deberá promoverse en el plazo de cinco días contados desde la notificación de la


declaración de caducidad.

El tribunal convocará a todas las partes a una audiencia, a la que deberán concurrir con las
pruebas de que intenten valerse, al término de la cual dictará auto estimando la impugnación o
confirmando la caducidad de la instancia.

Contra este auto cabrá recurso de Apelación.

Impugnación de la declaración de caducidad por error en el cómputo

Art. 139.- Cuando se impugnare la declaratoria de caducidad por error en el cómputo de los
plazos legales, contra el auto que la declare sólo se admitirá recurso de revocatoria.

TÍTULO CUARTO
ACTIVIDAD PROCESAL

CAPÍTULO PRIMERO
LUGAR, TIEMPO Y FORMA

Lugar de la actividad procesal

Art. 140.- La actividad procesal se llevará a cabo en la sede donde esté radicado el tribunal
que conozca de la pretensión; sin embargo, para el mejor logro de los fines del proceso, y si se

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UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

trata de actuaciones que requieran la presencia del juez, éste podrá acordar, por resolución
motivada, constituirse fuera de su sede habitual, a fin de presenciar por sí la práctica de pruebas o
la realización de un acto procesal.

Comisiones procesales

Art. 141.- Cuando una actuación procesal deba realizarse fuera del territorio al que extiende
su competencia el tribunal, éste podrá solicitar la cooperación y auxilio de otro tribunal.

La solicitud de cooperación y auxilio se efectuará directamente, mediante oficio, sin órgano


intermedio; y se podrá disponer, si ello no causare riesgo a los fines del proceso, la entrega del
mismo a la parte interesada en la realización del acto procesal.

Días y horas hábiles

Art. 142.- Las actuaciones procesales de los tribunales deberán llevarse a cabo en días y horas
hábiles, pero éstos podrán acordar, por resolución motivada y siempre que existiere urgencia en la
realización del acto procesal, habilitar días y horas inhábiles.

La Corte Suprema de Justicia fijará, por acuerdo, el horario de funcionamiento de las oficinas
judiciales, lapso que constituirá las horas hábiles.

CÁMARA PRIMERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, Apelación, Referencia: 161-64CM2-2015 de fecha: dieciséis de febrero
de dos mil dieciséis.

“En ese orden de ideas, según consta en el acta de fs., 24 fte., p.p., el demando
señor RENÉ V.E., fue notificado del decreto de embargo y demanda que lo motiva,
que equivale al emplazamiento, el día diecisiete de abril de dos mil quince, sin
que éste haya hecho uso de su derecho de defensa, por lo que se dictó la sentencia
correspondiente.

Al respecto, el Art. 143 CPCM., estipula que los plazos procesales conferidos a las
partes para realizar los actos procesales son perentorios e improrrogables, salvo
disposición en contrario; es decir que una vez vencido opera automáticamente su
caducidad. Realizados; pues los derechos deben hacerse valer en el proceso en
la forma y plazo estipulados por la ley, partiendo de la ecuación jurídica, “acto
procesal no ejercitado en tiempo igual a derecho precluido.”

En efecto, el principio de preclusión establece que las partes deben realizar los actos
procesales encomendados por la ley dentro del plazo que la misma le indique; caso
contrario, pierden la oportunidad para efectuarlos, y no pueden regresar, como regla
general, al momento preestablecido para ejecutarlo.

La premisa sobre la cual descansa dicho principio, fundamental radica en la


consumación del proceso, porque éste no puede ser perpetuo, y estarse retrotrayendo
a etapas anteriores por la desidia de las partes, pues la forma y tiempo de las
actuaciones procesales se encuentran estipuladas en la ley.

En síntesis, lo que alega el apoderado del referido demandado en el escrito de


Apelación, lo tuvo que haber expuesto debidamente en tiempo, y en la instancia

76
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

respectiva. En todo caso, si realmente fueron realizados esos abonos, posteriormente


a la presentación de la demanda, deberán tomarse en cuenta en la liquidación
correspondiente; por lo que el punto de Apelación incoado, no tiene fundamento
legal.”

Plazos procesales

Art. 143.- Los plazos conferidos a las partes para realizar los actos procesales son perentorios
e improrrogables, salvo disposición en contrario.

Indicación o fijación de plazo

Art. 144.- Cuando se comunicare a una parte que debe realizar un acto procesal, se indicará en
la resolución el plazo legalmente previsto para llevar a cabo aquél; y, de ser posible, se especificará
el día de su vencimiento, así como las consecuencias de la omisión o retraso en la realización del
acto.

Si se ordenare a una parte la realización de una actuación procesal respecto de la cual la ley no
prevé plazo o término, se deberá practicar sin dilación, o en el plazo más breve posible, que fijará
el tribunal, con indicación de las consecuencias de la omisión o retraso en la realización del acto.

Cómputo de plazos

Art. 145.- Los plazos establecidos para las partes comenzarán, para cada una de ellas, el día
siguiente al de la respectiva notificación, salvo que, por disposición legal o por la naturaleza de la
actividad que haya de cumplirse, tengan el carácter de comunes, en cuyo caso aquéllos comenzarán
a correr el día siguiente al de la última notificación. (2)

En los plazos fijados en días sólo se contarán los hábiles.

Los plazos fijados en meses o años se computarán de fecha a fecha; pero si en el mes de
vencimiento no existiera el día equivalente, se entenderá que el plazo expira el último día del mes.

En todo caso, cuando el último día del plazo sea inhábil se entenderá éste prorrogado hasta el
siguiente día hábil.

Los plazos vencen en el último momento hábil del horario de oficina del día respectivo.
Principio general de suspensión de los plazos

Art. 146.- Al impedido por justa causa no le corre plazo desde el momento en que se configura
el impedimento y hasta su cese. Se considera justa causa la que provenga de fuerza mayor o de
caso fortuito, que coloque a la parte en la imposibilidad de realizar el acto por sí.

CÁMARA DE LA CUARTA SECCIÓN DEL CENTRO, SANTA TECLA,


Apelación, Referencia N°98-EC-13 de fecha diecisiete de octubre de dos mil trece.

“Con respecto al literal C), que se refiere al justo impedimento que alega el
demandado tuvo para no presentar el escrito de contestación de la demanda y
oposición de excepciones el día en que se venció el término; es importante acotar
que, efectivamente existió por su parte el justo impedimento en vista de que los
tribunales estuvieron cerrados por el Sindicato del Órgano Judicial el último día en

77
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

que vencía el término, por lo que, de conformidad con lo prescrito por el Art. 146
CPCM, el plazo se suspendió por lo huelga, o como señala la disposición relacionada
no le corrió el mismo desde el momento en que se configuró el impedimento, es decir,
a partir del día veintidós de abril de este año, el cual venció en el día veintinueve
del mismo mes y año, en que se reanudaron las labores, pues únicamente poseía un
día del plazo, y consta que el escrito fue presentado el treinta de abril, es decir un
día después del vencimiento del término que venció el término para contestar la
demanda; por lo que, sin duda alguna esta Cámara comparte los razonamientos del
Juez inferior, al declarar sin lugar la oposición formulada por haberse presentado el
escrito fuera del término a que hace alusión el Art. 465; razón por lo que lo pedido
en dicho punto de igual forma se declara sin lugar.”

Forma de las actuaciones procesales

Art. 147.- Las actuaciones procesales se habrán de realizar bajo el principio general de
oralidad. Sin embargo, la demanda y su ampliación, la contestación de la demanda, la reconvención
y cualquier resolución que ponga fin al proceso o surta efectos materiales sobre la pretensión, serán
siempre por escrito; y, salvo las excepciones legalmente previstas, las declaraciones de testigos y
peritos serán en forma oral.

Idioma

Art. 148. - En todas las actuaciones procesales se utilizará, obligatoriamente, el idioma


castellano.

Cuando deba ser oído quien no conozca el idioma castellano, la parte que lo presente deberá
designar un intérprete, o solicitar a su costa la oportuna designación por el tribunal.

Todo instrumento que conste en idioma extranjero deberá acompañarse con su correspondiente
traducción conforme a la ley y tratados internacionales.

CAPÍTULO SEGUNDO
COOPERACIÓN JUDICIAL INTERNACIONAL

Reglas de actuación

Art. 149.- Los tribunales de El Salvador podrán recabar la cooperación de los tribunales
extranjeros para realizar actuaciones fuera de la República.

Actuaciones a realizar fuera de El Salvador

Art. 150.- Sin perjuicio de lo previsto en tratados internacionales, cuando una actuación
procesal deba realizarse fuera del territorio nacional, la parte interesada en su realización la
solicitará, indicando la causa y el alcance de la actuación procesal solicitada.

Si el tribunal acordare su realización, librará exhorto, que remitirá a la Corte Suprema de


Justicia, para su envío al Órgano Ejecutivo, en el ramo a cargo de las relaciones internacionales, a
fin de hacerlo llegar a las respectivas autoridades extranjeras.

Ni la Corte Suprema de Justicia ni el Órgano Ejecutivo calificarán el contenido o alcance del


exhorto y deberán limitarse a tramitar éste.

78
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

Actuaciones de mero trámite

Art. 151.- Para la realización de actos procesales de mero trámite en el extranjero, como
notificaciones, citaciones o emplazamientos, así como para la recepción y obtención de pruebas e
informes, los tribunales librarán exhortos y cartas rogatorias.

Igual solución se observará respecto de los exhortos o cartas rogatorias provenientes de


tribunales extranjeros.

Exhortos o cartas rogatorias. (2)

Art. 152.- Los exhortos o cartas rogatorias podrán ser trasmitidos por las propias partes
interesadas, por intermedio de los agentes consulares o diplomáticos o a través de la autoridad
administrativa competente en la materia o, en su defecto, por vía judicial.

Cuando los exhortos o cartas rogatorias se tramiten por vía consular o diplomática o a través
de la autoridad administrativa, no será necesario el requisito de la legalización.

Los exhortos o cartas rogatorias se tramitarán de acuerdo con las leyes procesales del Estado de
su cumplimiento. Los tribunales, a solicitud del órgano jurisdiccional requirente, podrán observar
en el diligenciamiento del exhorto o carta rogatoria formalidades o procedimientos especiales,
siempre que ello no fuere contrario a la legislación nacional.

Los exhortos o cartas rogatorias y la documentación anexa deberán ser acompañados, en su


caso, de la respectiva traducción.

Efectos del cumplimiento de actos de cooperación judicial

Art. 153.- El cumplimiento en El Salvador del exhorto o carta rogatoria proveniente de


tribunales extranjeros no implicará el reconocimiento de la competencia internacional de éstos ni
la eficacia de la sentencia que dictaren.

Medidas cautelares

Art. 154.- Los tribunales salvadoreños darán cumplimiento a las medidas cautelares o
ejecutivas decretadas por tribunales extranjeros y proveerán lo que fuere pertinente a tal objeto,
exceptuándose las medidas que estuvieren prohibidas por la legislación nacional o sean contrarias
al orden Público.

La procedencia de la medida cautelar se regulará por las leyes del lugar donde se siga el
proceso extranjero. La ejecución de la medida, así como la contra cautela, serán resueltas por los
tribunales de El Salvador conforme a lo dispuesto en este código.

Lo establecido en los incisos anteriores se entiende sin perjuicio de lo que dispongan los
Tratados y Convenciones Internacionales y bajo de condición de reciprocidad.

Tercerías y oposiciones

Art. 155.- Cuando se hubiere trabado embargo o efectuado cualquier otra medida cautelar
sobre bienes, la persona afectada podrá deducir, ante los tribunales de El Salvador, la tercería
u oposición pertinentes, con el exclusivo objeto de su comunicación al tribunal de origen al
devolvérsele el exhorto o carta rogatoria.

79
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

La oposición o tercería se sustanciará por el tribunal requirente, según sus leyes. El opositor o
tercerista que compareciere luego de devuelto el exhorto o carta rogatoria tomará el proceso en el
estado en que se hallare.

Si se tratare de tercería de dominio u otros derechos reales sobre el bien embargado, o se


fundara en su posesión, se resolverá por los tribunales de El Salvador y de conformidad con sus
leyes.

Efectos del cumplimiento

Art. 156.- El cumplimiento de la medida cautelar no obliga a reconocer y ejecutar la sentencia


extranjera que se dictare en el proceso en el que tal medida se hubiere dispuesto.

Medidas previas a la ejecución

Art. 157.- Cuando se hubiere solicitado el reconocimiento y ejecución de una sentencia


extranjera, la Corte Suprema de Justicia podrá adoptar las medidas cautelares que sean necesarias
para asegurar su cumplimiento, las que se tramitarán conforme a las reglas de este código.

Lo dispuesto en el artículo anterior se entiende sin perjuicio de los tratados y convenciones


internacionales y a condición de reciprocidad.

Facultad cautelar

Art. 158.- Cualquiera que sea la jurisdicción internacionalmente competente para conocer
de un proceso, siempre que el objeto de la medida cautelar se encontrare en territorio nacional
los tribunales de El Salvador podrán ordenar y ejecutar, a solicitud fundada de parte, todas las
medidas conservatorias o de urgencia cuya finalidad sea garantizar el resultado de un proceso que
se pretendiere iniciar.

El juez que ordene la medida fijará un plazo, conforme a lo dispuesto en este código, dentro
del cual el solicitante habrá de hacer valer sus derechos so pena de caducidad de la medida.

Si en el plazo acordado se promoviere la demanda, se estará a lo que resuelva, en definitiva, el


tribunal internacionalmente competente.

Tramitación

Art. 159.- Las comunicaciones relativas a medidas cautelares se harán por las propias partes
interesadas, por intermedio de los agentes consulares o diplomáticos, a través de la autoridad
administrativa competente en la materia o, en su defecto, por vía judicial.

CAPÍTULO TERCERO
ESCRITOS Y EXPEDIENTES

Suscripción de escritos

Art. 160.- Los escritos deberán ser legibles, evitar cualquier expresión ofensiva, consignar en
el encabezamiento los datos identificadores del expediente, expresar con la debida claridad lo que
se pretende y ser suscritos y sellados por el abogado que los presenta.

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CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

SALA DE LO CONSTITUCIONAL Amparos Referencia: 695-2012 de fecha


veintiocho de mayo de dos mil catorce.

“Ahora bien, de la interpretación conjunta de los Arts. 6, 7 y 13 de la Ley Orgánica


de la PGR (LOPGR), se deriva que los procuradores auxiliares o defensores
públicos podrán, por delegación de la Procuradora General, promover, intervenir,
tramitar, fenecer y desistir las diligencias y los procesos judiciales o administrativos
sustanciados, a fin de defender los intereses de los usuarios de la PGR, en los
términos establecidos en el Art. 194.II.2 de la Cn.

Para ello, de acuerdo con el Art. 26 Inc. 2° del Reglamento de la LOPGR, se


requiere de manera ineludible que las personas con el cargo de defensor público
se encuentren autorizadas para ejercer la abogacía. De ahí que resulte razonable
concluir que aquellos que, en calidad de procuradores auxiliares, comparezcan,
asistan técnicamente y defiendan los intereses de otro en algún proceso judicial
o administrativo realizan tales actuaciones porque se encuentran facultados
legalmente para practicar dicha profesión.

Por tal motivo, de conformidad con el Art. 92 Inc. 2° de la LOPGR, la presentación


de la credencial única es suficiente para que los procuradores auxiliares acrediten
que se encuentran facultados para comparecer y asistir técnicamente a los usuarios
de la PGR en las diligencias y procesos respectivos. Ello debido a que del aludido
documento no solo se colige que tienen la facultad, por delegación de la Procuradora
General, para intervenir en sede judicial y administrativa en defensa de los intereses
de las personas, sino también que ostentan dicho cargo precisamente porque han
cumplido con los requisitos establecidos en la ley, entre estos, el encontrarse
autorizados como abogados de la República.

En este contexto, si de la aludida credencial se desprende que los procuradores


auxiliares se encuentran legalmente facultados para ejercer la abogacía, la
denegatoria o el rechazo de las peticiones de aquellos por la simple omisión del sello
de abogado —cuando, por ejemplo, consta en el expediente judicial (en primera
o segunda instancia) el mencionado documento—, atenta contra el derecho a la
protección jurisdiccional o el derecho de defensa del peticionario o, si la solicitud se
relaciona con la interposición de un recurso, contra el derecho a recurrir.

En el presente caso, con la documentación antes relacionada se ha comprobado


que el licenciado Marvin Antonio González Henríquez interpuso recurso de revisión
mediante el escrito del 16-VIII-2012 ante la Cámara de lo Civil de la Primera
Sección de Oriente, en calidad de procurador auxiliar de trabajo y en representación
del señor José Aquilino Rodríguez; para lo cual mostró la credencial única, de la
que se desprendía que estaba facultado para ejercer la abogacía y defender, por
delegación de la Procuradora General, los intereses del aludido señor.

Aunado a lo anterior, consta en el informe del 26-X-2012 que el Secretario de la


citada Cámara tuvo a la vista la credencial única del licenciado González Henríquez,
cuya copia no incorporó al expediente judicial aduciendo que no lo había ordenado
el tribunal ad quem en la Resolución del 20-VIII-2012. Sin embargo, la omisión
de tal diligencia no había sido significativa para la comprobación de la capacidad

81
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

de postulación del citado profesional, ya que en el Oficio n° 258 del 24-VIII-2012,


mediante el cual se solicitó a la Juez A Quo la remisión del proceso de nulidad de
despido, se identificó y reconoció al licenciado González Henríquez como defensor
público laboral delegado por la Procuradora General para representar al señor
Aquilino Rodríguez en el incidente de revisión en cuestión.

Con base en lo expuesto, se concluye que, en el caso en estudio, resultaba innecesaria


la colocación del sello de abogado en el aludido escrito, pues con la credencial
podía tenerse por establecida la capacidad de postulación del citado profesional
(Art. 67 del C.Pr.C.M.). Y es que la exigencia de tal formalidad, cuando existen
otros medios a través de los cuales puede establecerse el cumplimiento del aludido
presupuesto procesal, resulta innecesaria y limita a las partes el ejercicio de sus
derechos y garantías procesales.

Finalmente, resulta inadmisible que se pretenda justificar la no incorporación de la


copia de la credencial al expediente judicial respectivo en que no se había ordenado
expresamente la práctica de esa diligencia, ya que se trata de una actividad implícita
en el examen liminar, que deben efectuar los tribunales al resolver las peticiones
que les formulan. En esas circunstancias, tal exigencia también se traduce en una
formalidad innecesaria y excesiva que ocasiona una dilación injustificada en el
trámite de los recursos.

En consecuencia, los funcionarios demandados, al declarar improcedente el recurso


de revisión en cuestión por la falta del aludido requisito en los términos antes
expresados, vulneraron el derecho a recurrir del señor Aquilino Rodríguez, razón
por la cual resulta procedente ampararlo en su pretensión.”

Constancia de recepción de escritos

Art. 161.- Siempre que se presente un escrito al tribunal, el empleado judicial que lo reciba
dejará constancia, en el momento de su recepción, de la fecha y hora en que se efectúa la misma.
Si se hubiera acompañado una copia, se devolverá la misma al interesado dejando constancia de la
recepción.

Copias de escritos e instrumentos.

Art. 162.- Todo escrito o documento que se presente deberá acompañarse de tantas copias
legibles como sujetos hayan de ser notificados, más una. El tribunal remitirá de inmediato a
las demás partes personadas una copia íntegra. Para tal finalidad, el juzgador podrá valerse de
cualquier medio que preste garantía suficiente o deje constancia por escrito.

Copia de respaldo

Art. 163.- De todo escrito e instrumento que se presente deberá entregarse, además, una copia
al tribunal, que servirá de respaldo en caso de reposición del expediente.

Formación de expedientes

Art. 164.- Con el primer escrito de cada proceso que se promueva se iniciará un expediente al
que se irán incorporando sucesivamente los escritos posteriores.

82
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

Todo escrito e instrumento presentado al tribunal se entenderá incorporado inmediatamente al


expediente.

La Corte Suprema de Justicia dispondrá por acuerdo la forma en que habrán de llevarse tales
expedientes, así como el modo de anotar en los mismos las constancias de los actos.

Derecho de acceso al expediente

Art. 165.- La parte y sus representantes tienen acceso permanente al expediente, el cual se
facilitará íntegramente.

Los expedientes judiciales permanecerán en las oficinas del tribunal para examen de las
partes y de todos los que tuvieren interés legítimo en la exhibición conforme a lo dispuesto en este
Código, y no podrán ser retirados de la sede del tribunal.

En nota o formulario suscrito por el secretario y por el interesado se hará constar cada ocasión
en que se consulte el expediente.

Certificación de expedientes

Art. 166.- De cualquier expediente judicial podrán las partes o quien tuviere interés legítimo
obtener certificación íntegra o parcial del mismo.

La certificación deberá ser autorizada por el tribunal, y se hará mediante copia suscrita por
el secretario del tribunal, a costa de quien la pida, poniendo en el expediente nota expresiva de la
expedición.

Si la certificación fuera parcial, se oirá, en el plazo de tres días, a la parte contraria, la cual
deberá evacuarla por escrito, debiendo extenderse la certificación solicitada, con inserción de
dicho escrito y de los pasajes en él solicitados, para que, al surtir efecto, la persona que la examine
pueda hacer un juzgamiento equitativo y tener completo conocimiento del estado del proceso. En
su caso, se hará constar la existencia de recurso pendiente.

De no evacuarse la audiencia, la certificación será extendida, con expresión de tal circunstancia.

Si la certificación se pidiere en audiencia, se otorgará con lo que expresare en el momento la


parte contraria.

Archivo de expedientes

Art. 167.- Concluido un proceso se dispondrá el archivo del respectivo expediente y podrá ser
consultado por los interesados.

Cuando un expediente archivado hubiere de surtir efecto en otro proceso se incorporará a él


total o parcialmente por medio de copia autorizada por el secretario del tribunal.

La Corte Suprema de Justicia dispondrá por acuerdo las normas de archivo judicial.

Reposición y renovación de expedientes

Art. 168.- Cuando por cualquier causa se hubiere perdido, destruido u ocultado el expediente
original de una actuación procesal, la copia en poder del tribunal tendrá el mismo valor.

83
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

Cuando el tribunal no cuente con copia de las actuaciones destruidas o desaparecidas, ordenará
que se rehagan, para cuyo fin practicará las diligencias probatorias que evidencien su preexistencia
y contenido y, de ser necesario, ordenará a las partes que entreguen sus propias copias de escritos,
documentos y actas.

Si la reposición no fuera posible, el tribunal ordenará, de considerarlo necesario, la renovación


de los actos, prescribiendo el modo de hacerlo.

CAPÍTULO CUARTO
COMUNICACIONES JUDICIALES

SECCIÓN PRIMERA
NOTIFICACIONES

Principio general de notificación

Art. 169.- Sin perjuicio de los plazos señalados en este código, toda resolución judicial se
notificará en el más breve plazo a las partes y a los interesados.

CÁMARA PRIMERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, Sentencia de Apelación Referencia 118-37CM2-2012 emitida el once de
noviembre de dos mil trece.

“cumple un rol que otorga veracidad a lo que hace constar en el acta donde
se plasma lo realizado en este tipo de actos de comunicación, siendo todo
notificador, un funcionario delegado por el juez de la causa, para informar en
este caso al demandado, de la admisión de la demanda interpuesta en su contra;
consecuentemente, dicho funcionario goza de fe pública en sus actuaciones y
diligencias, y por esa fe que ostenta como funcionario judicial, no es posible dudar
de lo consignado por él en el acta de notificación en estudio, tal como pretende
hacerlo ver la parte apelante. Por otra parte, para aseverar aún más que no es
procedente dudar de lo expuesto por el Secretario Notificador del Juzgado inferior
en grado;”

SALA DE LO CIVIL en la Casación REF. 197-CAC-2009 de fecha veintiocho de


mayo de dos mil diez.

“El emplazamiento es un acto fundamental en el desarrollo del proceso, cuya


finalidad es comunicar al demandado que existe una demanda interpuesta en su
contra garantizando el derecho de audiencia y el principio de contradicción. La
falta de emplazamiento o cualquier error cometido en él, queda subsanado, cuando
el demandado contesta la demanda o interviene en el juicio sin alegar dicha falta.”

SALA DE LO CIVIL, Sentencia de Casación Referencia N°287-CAC-2012 de


fecha: diez de julio de dos mil trece.

“El principio general de notificación contenido en el Código Procesal Civil y


Mercantil, en el Art. 169, prescribe que sin perjuicio de los términos señalados, toda
resolución judicial se notificará en el más breve plazo a las partes y a los interesados.

84
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

De la disposición legal en comento se infiere, que se notifican las resoluciones


judiciales y solo pueden tener tal carácter las que ya han sido pronunciadas como
tal por un Tribunal. En el caso del Art. 515 CPCM, cuando el tribunal decide
anunciar el fallo, deberá dictar sentencia por escrito en el plazo que determina la
ley, y es hasta ese momento que la resolución judicial denominada Sentencia, según
la clasificación del Art. 212 CPCM, surge a la vida jurídica y puede ser notificada.
Es importante recordar que el Art. 217 CPCM al establecer los requisitos de la
Sentencia, regula que ésta sea la que contenga los fundamentos de derecho y el fallo
pronunciado, que son precisamente los que aportan los elementos para plantear un
recurso contra esa resolución.

En el sub júdice, la notificación de la sentencia definitiva, dictada por la Cámara,


a las partes, es un imperativo del legislador; pues la misma constituye el acto
procesal que indica a partir de qué momento el impetrador se encuentra habilitado
para interponer el recurso. Al faltar este elemento procesal, esta Sala remitió lo
actuado a la Cámara Segunda de lo Civil de la Primera Sección del Centro para que
procediera a efectuar las notificaciones de ley, quien no cumplió tal cometido.

Es necesario aclarar, que si bien en precedentes anteriores, como el que ejemplifica


la Cámara ad quem, esta Sala ya había resuelto sin hacer reparaciones a la falta
notificación de la Sentencia, lo mismo no es óbice para que la Cámara Sentenciadora
cumpliera lo ordenado por este Tribunal; advirtiendo que este precedente deberá
privar.

En consecuencia, devuélvanse los autos a la referida Cámara para que proceda a


notificar la Sentencia, quedándoles expeditos los derechos a las partes a recurrir
oportunamente.”

Dirección para notificaciones tras el primer escrito o comparecencia

Art. 170.- El demandante, el demandado y cuantos comparezcan en el proceso deberán


determinar con precisión, en el primer escrito o comparecencia, una dirección dentro de la
circunscripción del tribunal para recibir notificaciones, o un medio técnico, sea electrónico,
magnético o de cualquier otra naturaleza, que posibilite la constancia y ofrezca garantías de
seguridad y confiabilidad.

Si no se hiciere el referido señalamiento, el tribunal mandará subsanar dicha omisión.

Cuando se señalare una dirección fuera de la circunscripción del tribunal, se ordenará que la
señale dentro de ésta.

Cualquier cambio de dirección deberá comunicarse de inmediato, teniéndose por válidas, en


su defecto, las notificaciones que se realicen en la dirección anteriormente señalada.

CÁMARA SEGUNDA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, Recurso de Apelación, Referencia: 17-3CM-14-A de fecha veintinueve
de abril de dos mil catorce.

“Por otra parte se le aclara a la Juez A Quo, que si bien es cierto el Art. 170 CPCM,
establece la obligación a las partes de señalar un lugar para oír notificaciones

85
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

dentro de la circunscripción del tribunal, y que cualquier cambio de dirección


debe comunicarse de inmediato al tribunal, el artículo citado establece que dicha
obligación opera cuando las partes presentan su primer escrito o cuando éstas
comparecen al proceso.

Es decir, que cuando las partes no comparecen al proceso debe notificar todas las
resoluciones judiciales en el lugar señalado para tal efecto, o en su caso si dicho
lugar está fuera de la circunscripción territorial del juzgado, deberá prevenir que
señalen un lugar dentro de la circunscripción, otorgándoles el plazo en que debe ser
subsanarse y la consecuencia de no hacerlo, que sería la notificación por tablero
judicial, tal como lo prescribe en el Art. 171 Inc. 1° CPCM.

Sin embargo, cuando la única dirección que se posee para notificar a una persona
está fuera de la circunscripción territorial del Juzgado, y al intentar notificarle no
se encuentra en dicho lugar, previo a realizar la notificación por medio del tablero
judicial, tiene la obligación de seguir el trámite previsto en el Art. 171 Inc. 2° CPCM,
es decir, que debe solicitar a los registros públicos información sobre la persona
que pretende notificar, y sólo habiéndose agotado todos los medios pertinentes sin
ubicarla, procede la notificación por tablero judicial, ya que ésta es la última ratio
a utilizar.”

Notificación por tablero

Art. 171.- Si transcurre el plazo fijado por el tribunal para que el demandado o cualquiera
de los otros comparecientes en el proceso indiquen una dirección dentro de la jurisdicción del
tribunal para recibir notificaciones, o algún medio de los señalados en el artículo anterior, sin que
tal requerimiento se hubiera cumplido, las notificaciones se harán en el tablero del tribunal o en la
oficina común de notificaciones.

De igual manera se practicarán las notificaciones cuando se ignore la dirección o medio


técnico, electrónico, magnético o cualquier otro, de su destinatario, siempre que dicha información
no conste en ningún registro público.

En todo caso, previamente a la realización de las notificaciones por tablero el tribunal


deberá proveer resolución debidamente motivada en la que autorice la práctica de tal diligencia en
dicha forma.

CÁMARA DE LA SEGUNDA SECCIÓN DE ORIENTE, USULUTAN,


Apelación N°APE-4-3-CPCM-2014 de fecha: veintitrés de abril de dos mil catorce.

“Que en lo que respecta a la prueba documental, consistente en “Una alerta de


advertencia que el Jefe del Registro de la Propiedad Raíz e Hipotecas de la Segunda
Sección de Oriente, con sede de Usulután, Licenciado […], ordena realizar por
instrucciones de la Dirección Ejecutiva del CNR, en tres matriculas, incluida la que
ampara el inmueble titulado o en litigio por existir de acuerdo a la investigación
realizada por la Unidad de Inspectoría el que resultó ser congruente con el informe
emitido por la Oficina de Mantenimiento de Catastro de Usulután, en el sentido de
que hay duplicidad de inscripción”, la cual no fue admitida por el Juez A Quo, en
la Audiencia Probatoria, se hacen las siguientes consideraciones: A) Que en efecto

86
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

consta en la Audiencia Probatoria, que el Juez A Quo, no admitió la mencionada


prueba, cuando ésta no la pudo presentar la parte que la propone en el momento
inicial, por ser posteriores a los actos de alegación, ya que la misma fue notificada
al apoderado del ISTA el día veintitrés de Enero del corriente año, y la Audiencia
Preparatoria fue celebrada el día veintiséis de septiembre del año dos mil trece;
existiendo en tal caso una justa causa para no haberla presentado en el momento
inicial, siendo procedente en tal caso, admitir dicha prueba en esta Instancia, ya
que se trata de una prueba documental que fue denegada indebidamente en Primera
Instancia Art. 514 en relación a los Arts. 289 y 311 CPCM; y B) Que no obstante
que el Juez A Quo, no admitió la mencionada prueba, argumentó el motivo, aunque
resultaba innecesario por estarla declarando inadmisible, del porque no apreciaba
la prueba al momento de fallar Art. 316 Inc. 2° CPCM, ya que expresó que la misma
se había obtenido con vulneración a Derechos Constitucionales.- Criterio que es
compartido por este Tribunal, en cuanto a que la mencionada prueba no obstante
proceder su admisibilidad, no puede ser apreciada al momento de fallar, ya que no
se le dio audiencia a las partes afectadas, una vez se procedió a colocar la alerta
de advertencia en sus respectivas inscripciones registrales de sus inmuebles, por
cuanto que no se le dio cumplimiento a lo establecido en el Art. 98 literal “ch”,
95 del Reglamento de la Ley de Reestructuración del Registro de la Propiedad y
171 del Código de Procedimientos Civiles, en el sentido de que de acuerdo a las
disposiciones antes mencionadas, si se desconocía la dirección, o medio técnico,
electrónico, magnético o cualquier otro de su destinatario de los afectados al
emitir la Alerta de Advertencia en sus inmuebles, debió el Jefe del Registro pedir
información a los Registros Públicos sobre la Dirección de éstos a efecto de ser
notificados personalmente, y solo si no se encontraba información de sus residencias
o direcciones en dichos Registros Públicos, es que debió proceder a hacer las
respectivas notificaciones por medio del tablero de dicha oficina registral; por lo
tanto se estima, que al haber hecho las notificaciones a los afectados por medio del
tablero, tal como lo relaciona el Jefe del registro en el mencionado informe, sin que
se haya seguido antes las diligencias que señalan los artículos antes mencionados a
efecto de ser notificados personalmente los afectados, este Tribunal es del criterio
que se han de vulnerando así Derechos Constitucionales establecidos en los Arts. 11
y 12 de la Constitución dela República, ya que no se le dio cumplimiento al Derecho
de Audiencia y al Principio de Publicidad, regulado en el Art. 46 del Reglamento
de la Ley de Reestructuración del Registro de la Propiedad Raíz e Hipotecas;
asimismo se está privando a los afectados al derecho de propiedad y posesión, y a
ser protegida de la conservación y defensa de los mismos, y para ello debió dárseles
la audiencia respectiva, siguiendo el trámite que la ley establece para no violentar
sus derechos, antes de proceder a tal medida o en su caso judicializar la misma a
efecto de garantizar los Derechos señalados a los afectados, todo ello con el fin de
poder ser apreciada por el juez al momento de fallar Art. 316 CPCM.”

Notificación en la oficina judicial

Art. 172.- Las partes y los interesados tienen derecho de acudir a la oficina del tribunal o a la
oficina común de notificaciones, donde existiere, para enterarse de las resoluciones dictadas en el
proceso.

87
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

A tal efecto, se les facilitará copia de la resolución y en formulario se pondrá constancia de la


actuación, el cual firmará el empleado judicial competente y el interesado. Si éste no supiere, no
pudiere o se negare a firmar, se hará constar tal circunstancia.

Notificación tácita

Art. 173.- La consulta del expediente por la parte implica la notificación de todas las
resoluciones que consten en el mismo hasta el momento de la consulta.

Notificación en audiencia

Art. 174.- Las resoluciones pronunciadas en audiencia se tendrán por notificadas a los que
estén presentes. (2)

Notificación notarial

Art. 175.- A petición de parte y previa autorización del tribunal, podrán comunicarse
personalmente las resoluciones judiciales mediante notario que designe aquélla y a su costo. En
tal caso, el tribunal entregará al notario designado certificación de la resolución y la parte deberá
acreditar su diligenciamiento a más tardar tres días hábiles después de la entrega de la certificación.
Si se incumpliere dicho plazo, la autorización de comunicación por medio de notario quedará sin
efecto y las notificaciones sólo podrán efectuarse por el empleado judicial competente.

Notificación a través de procurador

Art. 176.- Siempre que la parte compareciere por procurador éste recibirá todas las
notificaciones que se refieran a su representado, aún la de la sentencia o auto que pone fin al
proceso, con el valor y eficacia establecidos en este código.

El procurador deberá indicar, en el primer escrito que presente, número de fax o cualquier otro
medio técnico que posibilite la constancia por escrito de la comunicación. Si el tribunal contara
con los medios técnicos adecuados para comunicarse con el procurador, las notificaciones se
practicarán por tales medios.

Cuando una parte sea representada por dos o más procuradores, éstos deberán designar un
lugar único para recibir notificaciones.

Notificación personal

Art. 177.- Cuando la notificación deba hacerse personalmente, el funcionario o empleado


judicial al que le corresponda realizar tal diligencia concurrirá al lugar señalado para ese efecto; y
si encontrare a la persona que deba ser notificada, dejará constancia de la actuación.

Si la persona no fuere hallada, la diligencia se entenderá con cualquier persona mayor de edad
que se encontrare en la dirección señalada; y a falta de cualquier persona, o si ésta se negare a
recibir la notificación, se fijará aviso en lugar visible, indicando al interesado que existe resolución
pendiente de notificársele y que debe acudir a la oficina judicial a tal efecto.

Si la parte no acudiere a la oficina judicial en el plazo de tres días hábiles, se tendrá por
efectuada la notificación.

88
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

Notificación por medios técnicos

Art. 178.- Cuando se notifique una resolución por medios técnicos, se dejará constancia
en el expediente de la remisión realizada. En este caso, se tendrá por realizada la notificación
transcurridas veinticuatro horas después del envío, siempre que conste evidencia de su recibo.

SALA DE LO CIVIL, CASACIÓN Referencia N°104-CAC-2013 de fecha:


dieciocho de febrero de dos mil quince.

“El Art. 178 CPCM abre la posibilidad de facilitar las notificaciones por medios
técnicos, y establece las formalidades que deben cumplirse. Dice la ley que se dejará
constancia en el expediente de la remisión que se efectúe y que la notificación se
tendrá por realizada transcurridas veinticuatro horas después del envío, siempre que
conste evidencia de su recibo.

Tratándose de medios electrónicos o técnicos -como les llama la ley-al no existir


en el acto de la notificación ningún tipo de presencia personal reviste peculiar
importancia la forma en cómo se documente el envío de la resolución que se notifica,
la ley así lo entiende y así lo regula, de manera tal que para que la notificación
se tenga por legítima debe constar en primer lugar la remisión realizada. Sobre
lo anterior, denuncia el recurrente que el notificador ha consignado en el acta de
notificación de folios […] que envió la sentencia de primera instancia el día quince
de enero de dos mil trece, que dicho empleado no agregó al expediente judicial el
comprobante respectivo y que la transmisión vía fax de la sentencia de primera
instancia realmente se efectuó el diecisiete de enero de dos mil trece, según fax en
poder del recurrente. Denuncia, también, que a raíz de la revocatoria que solicitara
del auto que declara extemporánea la Apelación ha tenido conocimiento, a través
del informe rendido para mejor proveer por la Jueza de Primera Instancia, que el
notifícador reitera que la fecha de notificación es el día quince de enero de dos mi
trece y que el fax con fecha diecisiete de enero del mismo año en poder del abogado
[…], obedece a una retransmisión que hizo de la sentencia a petición de parte.

En el caso de mérito, la Sala observa que el notificador en el acta de folios […]


ha consignado que a las once horas y treinta minutos del día quince del mes de
enero de dos mil trece notifico al licenciado […], la sentencia pronunciada por el
tribunal de primera instancia, por medio de telefax al número […] recibiendo el
mismo la señora […], y agrega al final que hace constar que no se agrega taco de
fax por haberse terminado la película del mismo, esta ultima acción ha provocado
que el notificador se aparte arbitrariamente de la forma correcta de documentar la
notificación por medio técnico, pues el Art. 178 CPCM de manera clara le indica
cuál debe ser su proceder, ahora bien si el fax a utilizar carece de película - como él
le llama- y por tanto no se puede obtener una boleta que garantice la transmisión,
la conclusión lógica es que no puede utilizar esta vía para notificar. Esta falta de
apego por parte del notificador a la ley en la manera en que ésta manda como deben
documentarse las notificaciones realizadas por medio técnico, en este caso por fax
ha generado - innecesariamente- una confusión en la fecha en que realmente se hizo
la notificación y ha provocado que el cómputo del plazo para la interposición del
recurso se haya efectuado de manera equivocada por la Cámara.

89
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

No obstante lo anterior, el abogado […], no discute la validez de la notificación


sino que por el contrario se da por notificado de la respectiva Sentencia. Su
inconformidad radica en la fecha de la notificación que se ha consignado en el acta
levantada a folio […] quiere ello decir que a pesar de la deficiencia mencionada en
párrafos anteriores, dicho acto procesal de comunicación alcanzó su finalidad y por
tanto se convalidó la nulidad de carácter subsanable de que adolecía.

La convalidación de que se ha hablado alcanza únicamente al hecho de tenerse por


efectuada la notificación, pero no cubre el defecto en cuanto a la fecha en que la
misma se verificó. Quiere decir que al no existir la boleta de transmisión por medio
técnico, y vista la copia del fax en poder del recurrente en el que consta que el envío
le fue hecho el día diecisiete de enero de dos mil trece, se ha demostrado que el plazo
para interponer la notificación comenzó a correr a partir del día veintiuno de enero
de dos mil trece, por lo que al haberse interpuesto la Apelación con fecha veinticinco
de enero de dos mil trece, lo ha sido en tiempo por lo que se concluye que se ha
declarado indebidamente la improcedencia de la Apelación, con lo cual también se
quebrantó el Art. 511 CPCM.”

Notificación a quienes no sean parte en el proceso

Art. 179.- Cuando deban ser notificados testigos, peritos o personas que sin ser parte en el
proceso deban intervenir en él, se realizará la comunicación por cualquier medio que se considere
fehaciente y eficaz.

En los casos en que el tribunal lo considere oportuno, podrán realizarse estas comunicaciones
del modo establecido en el artículo anterior.

Autorización para notificarse

Art. 180.- Por medio de escrito se podrá autorizar a una tercera persona mayor de edad,
aunque no sea abogado, para que con ella se entiendan las notificaciones.

SECCIÓN SEGUNDA
EMPLAZAMIENTOS

Principio de emplazamiento

Art. 181.- Todo demandado debe ser debidamente informado de la admisión de una demanda
en su contra, a fin de que pueda preparar la defensa de sus derechos o intereses legítimos.

A tal efecto, el demandante deberá indicar la dirección donde puede ser localizado el
demandado. Si manifestare que le es imposible hacerlo, se utilizarán los medios que el juez
considere idóneos para averiguar dicha circunstancia, pudiendo dirigirse en virtud de la obligación
que tiene toda persona o autoridad de colaborar, a registros u organismos públicos, asociaciones,
entidades o empresas que puedan dar razón de ella, quienes deberán rendir el informe respectivo
en un plazo que no excederá de diez días, el cual será determinado a juicio prudencial del juez.

Si se obtuviere el conocimiento de un domicilio o lugar de residencia, se practicará la


comunicación en la forma ordinaria. En caso contrario el emplazamiento se realizará en la forma
prevista en este Código.

90
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

Esquela de emplazamiento

Art. 182.- En la misma resolución en que se admita la demanda se ordenará el emplazamiento


del demandado, el cual se efectuará mediante esquela de emplazamiento.

Dicha esquela contendrá:


1°. Identificación del tribunal.
2°. Identificación del demandado.
3°. Identificación del proceso, con indicación del nombre y dirección del demandante,
número del expediente y nombre y dirección del procurador de aquél.
4°. Indicación del plazo para contestar la demanda, apercibiendo al demandado que de no
hacerlo el proceso continuará sin su presencia.
5°. Relación de los documentos anexos.
6°. Fecha de expedición.
7°. Nombre y firma de quien expidió la esquela.

A tal esquela se acompañarán copias de la demanda y de la resolución de admisión de ésta, así


como de los documentos anexos a aquélla.

Diligenciamiento del emplazamiento

Art. 183.- El emplazamiento se practicará por el funcionario o empleado judicial competente


en la dirección señalada por el demandante para localizar al demandado; y si lo encontrare, le
entregará la esquela de emplazamiento y sus anexos.

Si la persona que debe ser emplazada no fuere encontrada pero se constatare que efectivamente
se trata de su lugar de residencia o trabajo, se entregará la esquela de emplazamiento y sus anexos
a cualquier persona mayor de edad que se hallare en el lugar y que tuviere algún vínculo o relación
con aquélla.

El diligenciamiento del emplazamiento se hará constar en acta levantada a tal efecto por el
funcionario o empleado judicial competente que lo llevó a cabo, con indicación del lugar, día
y hora de la diligencia, nombre de la persona a la que se entrega la esquela correspondiente, y
vínculo o relación de ésta con el emplazado, en su caso. El acta será suscrita por el emplazado o
por la persona que recibió la esquela, salvo que ésta no supiera, no pudiera o se negara a firmar, de
lo cual se dejará constancia.

Emplazamiento por apoderado

Art. 184.- El emplazamiento podrá hacerse por medio de la persona del apoderado del
demandado, cuando no pueda hacérsele directamente a éste. A tal efecto, el demandante expresará
las razones por las cuales se hace necesario el emplazamiento en esa forma.

En tal caso, el apoderado deberá tener poder especial para tal fin, y al momento del
emplazamiento deberá manifestar si es o no apoderado de la parte que se está emplazando por su
medio; y si se demostrare que no lo es pese a su dicho, incurrirá en las costas, daños y perjuicios
correspondientes, y el funcionario que conozca del asunto informará a la Sección de Investigación
Profesional de la Corte Suprema de Justicia, para los efectos de ley.

91
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

Diligenciamiento por notario

Art. 185.- A petición de parte y previa autorización del tribunal, el emplazamiento podrá
practicarse mediante notario que designe aquélla y a su costo. En tal caso, el tribunal entregará al
notario designado la esquela de emplazamiento y sus anexos.

Esta forma de emplazamiento deberá diligenciarse a más tardar en el plazo de cinco días
después de la entrega de la esquela. Dicho plazo podrá prorrogarse hasta por lapso igual, por una
sola vez si el demandante alega y prueba causa razonable para la prórroga y solicita ésta dentro del
plazo original.

Vencido el plazo original o su prórroga sin que se hubiere diligenciado el emplazamiento, se


dejará sin efecto la autorización y éste sólo podrá practicarse por el empleado judicial competente.

Emplazamiento por edictos

Art. 186.- Si se ignorare el domicilio de la persona que deba ser emplazada o no hubiera
podido ser localizada después de realizar las diligencias pertinentes para tal fin, se ordenará en
resolución motivada que el emplazamiento se practique por edicto.

El edicto contendrá los mismos datos que la esquela de emplazamiento y se publicará en el


tablero del tribunal.

Asimismo, se ordenará, su publicación por una sola vez, en el Diario Oficial, y tres en un
periódico impreso de circulación diaria y nacional. (2)

Efectuadas las publicaciones, si el demandado no comparece en un plazo de diez días el


tribunal procederá a nombrarle un curador ad litem para que lo represente en el proceso.

Si posteriormente se comprobare que era falsa la afirmación de la parte que dijo ignorar la
dirección del demandado, o que pudo conocerla con emplear la debida diligencia, el proceso se
anulará, condenándose al demandante a pagar una multa de entre dos y diez salarios mínimos
urbanos, más altos, vigentes, según las circunstancias del caso.

SALA DE LO CONSTITUCIONAL, Amparo 658-2008 de fecha veintiuno de


octubre de dos mil nueve.

“… que la notificación por edicto no está habilitada si se conoce la casa o lugar


donde pueda realizarse el acto de comunicación, sea porque la dirección se encuentra
agregada a los autos, sea porque la contraparte lo ha hecho de conocimiento del
juzgador.”

CORTE SUPREMA DE JUSTICIA EN CORTE PLENA, conflicto de


competencia Referencia 164-COM-2014 de fecha trece de enero de dos mil quince.

“Ahora bien, en el libelo la parte actora claramente manifiesta que su demandada es


de domicilio ignorado y que el último conocido era en la ciudad de San Marcos; por
lo que la jueza de dicha ciudad, se informó en los Registros Públicos si constaba en
los mismos domicilio conocido de la demandada en cuestión, tal como lo prescribe
el Art. 181 inciso segundo CPCM. Al observar los informes que le fueron remitidos a
dicha juzgadora, claramente se colige que en ninguno de ellos se estableció domicilio

92
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

alguno; puesto que es menester señalar que la competencia no está determinada por
el lugar para recibir notificaciones que la demandada estableció ante el Ministerio
de Hacienda y que dicha institución proporciona en su informe, como erróneamente
lo interpreta la Jueza de lo Civil de San Marcos.
Aunado a ello, respecto a lo estipulado en el Art. 57 C.C., el domicilio está integrado
por dos elementos a saber: la residencia y el ánimo de permanecer en la misma, de ellos
predomina el ánimo de permanencia, ya que como bien lo señala el Art. 61 del mismo
cuerpo normativo el ánimo de permanencia no se presume, ni tampoco se adquiere “por
el solo hecho de habitar un individuo por algún tiempo casa propia o ajena en él, si tiene
en otra parte su hogar doméstico…”; es decir que el domicilio no se gana por la simple
presencia de una persona en otra parte del territorio nacional.”
“Así las cosas, la parte actora manifiesta categóricamente en la demanda de mérito
que la demandada es de domicilio desconocido, al contar con este elemento de hecho
introducido por el actor, no puede aplicarse la presunción legal a que se refieren
las normas precitadas; y en vista que el domicilio del demandado no ha quedado
establecido, a pesar de la información requerida por la Jueza de lo Civil de San
Marcos, debió haber continuado con el conocimiento del caso, puesto que no existe
prohibición alguna que la inhiba y consecuente aplicar lo dispuesto en el Art. 186
inciso primero CPCM.
Asimismo, es de advertir que cuando se ignorare el domicilio y la residencia y demás
aspectos exigidos por la ley, es cuando aplica la última residencia del demandado
en el territorio nacional para determinar la competencia territorial, con arreglo a lo
dispuesto en el Art. 33 inciso tercero CPCM. En consecuencia el actor interpuso su
demanda ante juez competente, siéndolo la Jueza de lo Civil de San Marcos, por lo
que así se determinará.”
CÁMARA DE LA SEGUNDA SECCIÓN DE OCCIDENTE: en Sentencia de
fecha veinticuatro de abril de dos mil doce, con Referencia 29-CPCM-2011
“…al no ser localizada en la dirección proporcionada por la parte actora para
ser emplazada; el Juez A Quo debió hacerlo del conocimiento de ésta, a fin de
que a instancia de ella, solicitara seguir el trámite preliminar denominado como
“Diligencias de Localización del Demandado”, según el Art. 181 inciso 2º del
Código Procesal Civil y Mercantil; y si el resultado de estas fuere negativo para
la obtención de alguna dirección útil, sea domicilio o lugar de su residencia para
emplazar a dicha demandada, el emplazamiento de ésta debería practicarse en la
forma indicada en el emplazamiento por edicto, tal y como lo prescribe el Art. 186
del mismo cuerpo de ley citado; y si la demandada no compareciere en el plazo
estipulado en dicha disposición, se procediera a nombrársele un curador ad litem
para que la representara en el proceso…”
Emplazamiento en caso de demandado esquivo

Art. 187.- Si la persona que ha de ser emplazada fuera encontrada pero esquivase la diligencia
y no hubiera persona mayor de edad que acepte recibir la esquela y sus anexos, el funcionario o
empleado judicial competente pondrá constancia de ello en los autos y hará el emplazamiento
conforme a lo dispuesto en este código.

93
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

Emplazamiento de un menor
Art. 188.- Cuando se demandare a un menor de edad, la entrega de la esquela y sus anexos se
hará a sus representantes.
Emplazamiento de una persona jurídica
Art. 189.- Cuando se demandare a una persona jurídica, pública o privada, la entrega se
hará al representante, a un gerente o director, o a cualquier otra persona autorizada por ley o por
convenio para recibir emplazamientos.
Emplazamiento del Estado
Art. 190.- Cuando se demandare al Estado de El Salvador, el emplazamiento se diligenciará
entregando la esquela de emplazamiento y sus anexos al Fiscal General de la República o a un
agente designado por éste.
Emplazamiento de persona no domiciliada en El Salvador
Art. 191.- Si se demandare a persona no domiciliada en el país, el emplazamiento podrá
hacerse en la persona encargada de la oficina, sucursal o delegación que aquélla tuviera abierta en
El Salvador.
A petición de parte y a su costo, y sin perjuicio de lo previsto en los tratados internacionales,
el diligenciamiento del emplazamiento se podrá encargar a persona autorizada para la práctica
de dicha diligencia en el país donde el emplazamiento deba practicarse según indicación del
demandante.
SECCIÓN TERCERA
OFICIOS

Oficios

Art. 192.- Cuando el tribunal deba dar conocimiento de sus resoluciones a otros organismos
o entidades, o formularles alguna petición para el cumplimiento de diligencias del proceso, o
solicitare la cooperación y auxilio de otro tribunal, se expedirá oficio.

Dicho oficio se acompañará de copia de la resolución, se cursará por correo o por cualquier
medio idóneo y podrá disponerse, si ello no causare riesgo, su entrega a la parte interesada en la
realización del acto procesal.

CAPÍTULO QUINTO
SUSTANCIACIÓN DEL PROCESO Y AUDIENCIAS

SECCIÓN PRIMERA
SUSTANCIACIÓN DEL PROCESO

Despacho ordinario

Art. 193.- El secretario judicial informará al tribunal sobre el estado en que se encuentre cada
proceso; y a tal fin le dará cuenta de todo escrito y documento que se presente. Esta información la
proporcionará a más tardar en el día hábil después de la presentación.

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CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

Especialmente se le informará, en el día hábil siguiente, de la preclusión de los plazos


procesales otorgados a las partes y del transcurso de los que se refieren al tribunal, a los efectos de
que se puedan impulsar las actuaciones siguientes.

Impulso del proceso

Art. 194.- El impulso del proceso corresponde de oficio al tribunal, que le dará el curso y
lo ordenará como legalmente corresponda. A estos efectos, se dictarán las resoluciones que sean
necesarias tanto por el personal jurisdiccional como por el personal administrativo en el marco de
las competencias fijadas por este código.

Magistrado presidente

Art. 195.- Cuando el proceso deba ser resuelto por un tribunal colegiado, éste será presidido
por el magistrado presidente, que será encargado de llevar la sustanciación de los asuntos que se
ventilen en el mismo.

Funciones del magistrado presidente

Art. 196.- Son funciones del magistrado presidente:


1°. Ejercer las funciones relativas al despacho ordinario en los asuntos de que conozca una
Cámara de Segunda Instancia o la Sala de lo Civil de la Corte Suprema de Justicia. (2)
2°. Impulsar y ordenar el curso del proceso, dictando al efecto los decretos y demás
resoluciones que legalmente procedan.
3°. Proponer la redacción de todas las resoluciones que correspondan dictar a la Cámara de
Segunda Instancia o la Sala de lo Civil, una vez debatidas por éstas.

Disconformidad

Art. 197.- Cuando en un tribunal colegiado, no resultare unanimidad de votos para formar
sentencia en todos los puntos que contenga, se llamará al Magistrado suplente.

Notificadas las partes sobre quién es el magistrado llamado y presente éste, se verá de nuevo la
causa para que dicho magistrado dirima la discordia, adhiriéndose a uno de los votos discordantes
o razonados, en un plazo no mayor de diez días; y, si en este caso no hubiere Sentencia, se seguirá
llamando en discordia.

La sentencia será firmada por todos los magistrados que tomaron parte en la deliberación del
asunto, aún por el que hubiera disentido, haciéndose constar el nombre de los que concurrieron a
formarla con su voto. El disidente deberá consignar su voto a continuación de la Sentencia, con las
razones en que se funde, y será firmado por él y autorizado por el secretario.

Si por cualquier circunstancia un magistrado no quisiere o no pudiere firmar, se dejará


constancia expresa de ello.

Suspensión del proceso de oficio

Art. 198.- El tribunal sólo podrá suspender de oficio el curso del proceso cuando concurra un
supuesto de caso fortuito o fuerza mayor que así obligue a hacerlo. El auto por el que se decida la
suspensión deberá estar especialmente motivado. La suspensión durará sólo mientras subsista la
causa que la motive.

95
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

Suspensión del proceso a instancia de parte

Art. 199.- En el ejercicio del poder de disposición sobre el objeto del proceso, las partes
podrán solicitar de mutuo acuerdo la suspensión del proceso, que será acordada siempre que no
sea contraria al orden público, ni suponga perjuicio para el interés general o para tercero. La
suspensión se acordará por medio de auto y no podrá ser superior a cuarenta y cinco días. En estos
casos, el proceso se reanudará en cualquier momento a solicitud de alguna de las partes.

Transcurrido el plazo por el que se acordó la suspensión sin que ninguna de las partes haya
pedido la reanudación del proceso, se procederá al archivo provisional de las actuaciones, el cual
se mantendrá mientras no se solicite la continuación del proceso o se produzca la caducidad de la
instancia.

SECCIÓN SEGUNDA
RÉGIMEN DE LAS AUDIENCIAS

Publicidad e inmediación

Art. 200.- Las audiencias en los procesos regulados por este Código serán públicas, según lo
previsto en el artículo 9 y se realizarán, bajo pena de nulidad insubsanable, en presencia del titular
o titulares del juzgado o tribunal colegiado, en los términos del artículo 10, sin perjuicio de lo
dispuesto en las normas especiales que establece este código.

Señalamiento de las audiencias

Art. 201.- Las audiencias se señalarán de oficio, fijándose día y hora al efecto cuando así
corresponda conforme al estado de tramitación del proceso y por el orden en que lleguen a ese
estado.

El calendario de audiencias será llevado por el secretario judicial, previo señalamiento del
juez o magistrados. El secretario dará a conocer a las partes las fechas de las audiencias.

Entre el señalamiento y la celebración deberá mediar un mínimo de quince días hábiles y un


máximo de veinte, salvo que se disponga otra cosa en la ley.

CÁMARA PRIMERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, SAN SALVADOR, autodefinitivo Referencia 182-18MC3-2013-5 de
fecha veintitrés de enero de dos mil catorce.

“Sobre la petición de reprogramación de la audiencia formulada por la apoderada


de la parte apelante, licenciada […], esta Cámara hace las siguientes estimaciones
jurídicas:

1) Al respecto, es obvio que la justificación del retraso para presentarse a la hora


señalada a la referida audiencia, tiene que ser objeto de prueba, es decir debe
comprobarse con un documento idóneo conducente y pertinente; sin embargo se
observa que la aludida apoderada, no presentó ningún tipo de prueba para justificar
tal circunstancia.

2) Además de lo anterior es responsabilidad de todo profesional del Derecho


para evitarse inconvenientes como el presente, cuando existe una convocatoria a

96
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

audiencia, presentarse a la sede del Tribunal con un margen de por lo menos quince
minutos de anticipo, pues como conocedora del Derecho sabe que en caso de no
estar a la hora indicada, se procede a levantar el acta respectiva.

3) Este Tribunal estima, que al no haberse probado la inasistencia de la mencionada


apoderada a la audiencia a la hora señalada, no es procedente acceder a lo pedido
por la misma.

En virtud de lo expuesto en el acta de fs. […], en la que consta que no compareció a


la audiencia oral y pública señalada para las nueve horas del día diecisiete de enero
del corriente año, la apoderada de la parte apelante, […].”

Nuevo señalamiento

Art. 202.- Si alguna de las partes, sus representantes o abogados, o alguno de los testigos o
peritos manifiesta la absoluta imposibilidad de concurrir a la audiencia en el día y hora señalados,
se podrá hacer un nuevo señalamiento si concurren los requisitos establecidos en este artículo.

La imposibilidad se comunicará de inmediato al tribunal, justificando debidamente las razones


en que consista.

El Tribunal sólo ordenará que se haga un nuevo señalamiento con la repetición de las citaciones
pertinentes, si considera que la imposibilidad alegada es efectiva, y sólo cuando la presencia de la
persona imposibilitada sea necesaria para el desarrollo de la audiencia. (2)

Cuando la causa de la solicitud de nuevo señalamiento sea la coincidencia de audiencias de


uno de los abogados, tendrá preferencia la audiencia relativa a causa penal; si no fuera ese el caso,
la del señalamiento más antiguo. Si los dos señalamientos tuvieran la misma fecha, se suspenderá
la audiencia correspondiente al procedimiento más reciente.

CÁMARA PRIMERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, SAN SALVADOR Sentencia Referencia N°192-12MC3-2014 de Fecha:
siete de enero de dos mil quince.

“En cuanto al argumento de la señora Jueza de Primera Instancia, es preciso traer


a cuenta que el Art. 202 CPCM., refiriéndose al nuevo señalamiento de audiencia,
prescribe en lo pertinente, que si alguna de las partes , o sus representantes, manifiesta
la absoluta imposibilidad de concurrir a la audiencia en el día y hora señalados,
se podrá hacer un nuevo señalamiento si concurren los requisitos establecidos en
el citado artículo.Tales requisitos, de la literalidad de la norma se extrae que son:
que se comunique de inmediato al tribunal, justificando debidamente las razones
en que consista, que la imposibilidad sea efectiva, y cuando la presencia de la
persona imposibilitada sea necesaria para el desarrollo de la audiencia. Cuando la
causa sea la coincidencia de audiencias de uno de los abogados, tendrá preferencia
la audiencia relativa a causa penal; si no fuera ese el caso, la del señalamiento
más antiguo. Si los dos señalamientos tuvieran la misma fecha, se suspenderá la
audiencia correspondiente al procedimiento más reciente. Del análisis de la aludida
copia simple agregada por el entonces apoderado del ejecutado, conforme a los
principios de veracidad, lealtad, buena fe y probidad procesal, contemplados en
el Art. 13 CPCM., se observa que la misma contiene los requisitos mínimos para

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UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

generar una convicción suficiente sobre la imposibilidad del peticionario para


asistir a audiencia, ya que es suscrita por autoridad judicial, y en ella consta el
señalamiento coincidente con el celebrado en aquella sede jurisdiccional, y la fecha
en que fue proveído. Para la procedencia del nuevo señalamiento, es importante
establecer que la presencia de la persona imposibilitada sea necesaria para el
desarrollo de la audiencia, este requisito concurre ya que el licenciado […], era en
aquel momento, apoderado de la parte ejecutada.”

Debe resaltarse que en la circunstancia en que el juez advierta una situación de


confrontación entre el cumplimiento de una formalidad procesal civil o mercantil,
con el cumplimiento de un acto procesal de naturaleza familiar, éste debe efectuar
un juicio de ponderación de bienes jurídicos a tutelar, en los que deberá primar
éstos últimos en virtud de la naturaleza misma de esa materia y el interés público de
que está revestido y que el Estado está obligado a dar especial protección.

Y es que, la señora jueza a quo, debió hacer una interpretación jurídica sistemática
en lo que se refiere a las causales de suspensión de la audiencia, en relación al
derecho a la protección jurisdiccional (Art. 1 CPCM), al Principio de defensa y
contradicción (Art. 4 Inc. 2o CPCM), Arts. 3 y 8 C. Fam., y otros preceptos contenidos
en tratados internacionales como el Art. 17.1 de la Convención Americana sobre
Derechos Humanos, y 23.1 del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos;
instrumentos que por ser parte nuestro país, constituyen ley de la República, que
prevalecen sobre cualquier ley ordinaria en caso que la contraríe.

Por lo que ante lo razonable de la justificación presentada por el entonces


apoderado del ejecutado, la juzgadora debió realizar un nuevo señalamiento de
audiencia, en virtud que se estima que cuando se trate de una incomparecencia por
una audiencia en materia de Familia, se debe interpretar la ley de manera extensiva
y no restrictiva.”

Régimen de celebración de las audiencias

Art. 203.- Las audiencias se celebrarán en las horas hábiles de un mismo día. Si fuere
necesario, se podrán habilitar para la misma audiencia más horas del mismo día, en una o más
sesiones, así como continuarla el día o días siguientes hasta su conclusión.

En el día y hora fijados para la audiencia, se constituirá ésta en la sala de audiencias del
tribunal, y se comprobará la presencia de las partes, los abogados, los testigos, los peritos y los
intérpretes que deban intervenir, haciéndose una sucinta relación de los antecedentes del caso.

A continuación intervendrán, por su orden, el demandante y el demandado, o el recurrente y el


recurrido, por medio de sus abogados o por sí mismos cuando la ley lo permita.

Si se hubieran admitido pruebas, se practicarán conforme al orden establecido en las normas


que regulan la actividad probatoria.

Practicada la prueba, el juez o presidente concederá de nuevo la palabra a las partes para que
concisamente aleguen lo que a su derecho convenga sobre el resultado de las pruebas practicadas.
Si no se practicó prueba, finalizado el primer turno de intervenciones se abrirá otro para rectificar
hechos o conceptos.

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CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

Dirección de las audiencias

Art. 204.- El juez o presidente dirigirá el debate, ordenará las lecturas necesarias, hará las
advertencias legales, recibirá los juramentos o promesas y declaraciones, y moderará la discusión,
impidiendo preguntas o derivaciones impertinentes o que se separen notoriamente de las cuestiones
que se debatan, instando a quien esté en el uso de la palabra a evitar divagaciones, aunque sin
coartar por ello el ejercicio del derecho de defensa. El juez o presidente podrá retirar la palabra a
quien no siga sus instrucciones.

El juez o presidente mantendrá el buen orden en las audiencias y velará porque se guarde el respeto
y la consideración debidos a todos los que se hallen en la sala de audiencias, amparándolos en sus
derechos, para lo cual hará uso de las potestades de corrección y disciplina que le otorgan las leyes.

Documentación de las audiencias

Art. 205.- La audiencia se documentará en su integridad mediante acta levantada por el


secretario judicial, en la cual se dejará constancia de todo lo sucedido en aquélla. Se incluirán en la
misma las alegaciones y declaraciones de las partes, así como lo que hubieran aportado los testigos
y los peritos, el resultado del reconocimiento judicial si lo hubo y los documentos ofrecidos como
prueba. En el acta se hará constar el día, lugar y hora de la audiencia, la autoridad ante la cual se
celebra, el proceso al que corresponde, los nombres de las partes, abogados, testigos, peritos, e
intérpretes que participaron, y también los nombres de las partes que no concurrieron, indicándose
la causa de la ausencia, si se conociere, las decisiones adoptadas y los recursos que las partes
hubieren interpuesto.

Las partes podrán solicitar que se incorpore en el acta una indicación, expresión o evento
específico, así como aquello que entiendan pertinente para asegurar la fidelidad del acta, siempre
que haya sido debatido en la audiencia.

CÁMARA TERCERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, Sentencia 214-EMSM-12 de fecha cinco de mayo de dos mil doce.

“En relación al primer agravio, en el que alega que existe nulidad insubsanable por
haberle entregado copia del acta de audiencia, sin la correspondiente firma de la
Jueza A-quo, es menester señalar que no obstante el abogado [apelante], presenta
junto con su escrito de Apelación, fotocopia del acta de la audiencia especial de
prueba celebrada en primera instancia, en la cual efectivamente no aparece firma de
la señora Jueza A quo, es pertinente señalar que en la pieza principal se encuentra
agregada el acta original, debidamente firmada por la titular del tribunal, de donde
resulta evidente que la omisión antes señalada, obedece a un descuido, gazapo o
yerro por parte de dicho tribunal, que no trae consigo nulidad alguna, pues consta
en el proceso la referida acta en legal forma, el peticionario perfectamente puede
solicitar su reposición, y en consecuencia no existe la aludida nulidad, debiendo
desestimarse este agravio.”

SALA DE LO CIVIL, Casación Referencia: 80-CAC-2012 de fecha diez de abril


de dos mil trece.

“Ante esta situación, la Sala considera necesario señalar, que el ACTA de una
audiencia de segunda instancia, no podría contener una Sentencia; porque Acta y

99
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

sentencia son actos procesales con efectos jurídicos diferentes. El Acta de Audiencia,
regulada en los Arts. 205 y 514 CPCM, es un documento en el que se deja constancia
de todo lo sucedido en dicha audiencia y la firman todos los comparecientes;
mientras que, la sentencia que constituye la resolución judicial que le pone fin al
proceso, debe ser dictada por el Juez o Magistrados que conocen del asunto y,
consecuentemente, suscrita únicamente por los mismos.
Además la sentencia está sujeta a requisitos formales muy propios, establecidos en
los Arts. 217 y sgts. CPCM en relación con el Art. 515 del mismo cuerpo legal; de tal
manera que al haber pretendido incorporar la sentencia en el acta de audiencia, no
puede considerarse que se ha pronunciado la misma; por lo que se impone declarar
improcedente el recurso interpuesto, porque esa acta de audiencia, de conformidad
al Art. 519 CPCM, no es susceptible de ser recurrible en casación.
También advierte la Sala, que haber incorporado la sentencia en el acta de audiencia,
es un intento fallido de ponerle fin al proceso, pues la sentencia como tal, no ha sido
pronunciada con las formalidades legales establecidas en los Arts. 217, 219, 220 y
515 CPCM; por consiguiente, la Cámara Ad quem, deberá proceder a pronunciar la
sentencia de mérito observando los requisitos legales apuntados.”
Documentación por medios audiovisuales
Art. 206.- De permitirlo la dotación material del tribunal, el desarrollo de la audiencia se
registrará en soporte apto para la grabación y reproducción del sonido y de la imagen, o sólo del
sonido, uniéndose a los autos el original de la grabación y un acta donde conste el día, lugar y
hora, la autoridad judicial ante quien se celebró, el proceso al que corresponde y los nombres de
las partes y abogados, peritos, testigos e intérpretes que intervinieron.
Las partes podrán solicitar a su costa una copia de los soportes en que hubiera quedado
grabada la audiencia.
Las partes podrán proponer al Juez que se documente la audiencia por cualquier medio técnico
de grabación y reproducción de la imagen y sonido, o sólo del sonido, debiendo indicar si una o
ambas partes asumirán los costos de tales medios. El juez accederá a tal petición si de ello resultare
un mejor desarrollo de la actividad procesal y se estará a lo dispuesto en el inciso anterior.
Repetición de la audiencia
Art. 207.- Cuando quede suspendida o interrumpida una audiencia por concurrir una de las
causas legales y deba ser sustituido el juez quien comenzó a celebrarla, se repetirá íntegramente
dicha audiencia a presencia del nuevo juez, salvo el caso de los hechos irreproducibles, de los
cuales sólo se valorará lo que conste en el expediente. Lo que también se aplicará a los tribunales
colegiados.
Suspensión de las audiencias

Art. 208.- La celebración de las audiencias en el día señalado sólo podrá suspenderse por
alguna de las causas siguientes:
1°. Por indisposición del juez o magistrado, cuando no pudiera ser sustituido.
2°. Por causa grave que impida la comparecencia de algún sujeto procesal que hubiera sido
citado.

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CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

3°. Por causa grave comprobada que impida la asistencia del abogado de cualquiera de las
partes.
4°. Por coincidir dos audiencias simultáneas para el abogado de cualquiera de las partes.

En todos estos casos la suspensión sólo se acordará cuando no hubiere sido posible solicitar
con antelación suficiente un nuevo señalamiento de la audiencia.

Asimismo se suspenderá la audiencia ya señalada cuando impida su celebración la


continuación de otra inconclusa. También se podrá suspender la celebración de una audiencia
cuando lo soliciten todas las partes, alegando justa causa a juicio del juez.

CÁMARA TERCERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, SAN SALVADOR Sentencia de Apelación N°120-PD-14 de fecha
veinticuatro de junio de dos mil catorce.

“Sobre el agravio alegado por la recurrente y que se resume a expresar que el Juzgador
ha hecho una interpretación errónea del Art. 425 CPCM debe señalarse lo siguiente:
La ley establece que hay interpretación errónea cuando se da a la norma un sentido
distinto del que lógicamente tiene, o una interpretación equivocada, desatendiendo su
tenor literal y los demás elementos de interpretación, tergiversando los efectos jurídicos
de la misma, es decir, el tribunal Sentenciador selecciona correctamente la norma legal
aplicable al caso controvertido, pero le da un alcance o sentido que realmente no lo tiene.
La disposición en comento señala: “Si el demandante citado en forma no compareciese
ni hubiere alegado causa que motive la suspensión de la audiencia, se le tendrá por
desistido de su demanda, siempre que el demandado no alegare interés legítimo en la
continuación del proceso. Este desistimiento implicará que se le impongan las costas
causadas, y se le condene a indemnizar al demandado comparecido, si éste lo solicitare
y acreditare los daños y perjuicios sufridos. La no comparecencia injustificada del
demandado no impedirá la celebración de la audiencia, que continuará sin necesidad de
declarar su rebeldía.”; de la disposición transcrita se infiere que la ley da la posibilidad
al demandante de poder justificar la no comparecencia a la audiencia señalada, es decir,
alegar impedimento. Es necesario señalar, que tal como lo reclama la apelante, a ella
no se le permitió en la instancia primera demostrar que efectivamente estuvo impedida
para acudir al nuevo señalamiento hecho por el Juez A Quo para la celebración de la
audiencia; debe señalarse que la disposición en comento establece que si el demandante
citado no comparece ni hubiere alegado causa que motive la suspensión de la audiencia,
ello debe entenderse en aquéllos casos en que el demandante tiene conocimiento previo
de un hecho que le impide estar el día y la hora señalados para la audiencia, pero en
el caso particular aunque no se contempla de forma expresa en dicha disposición,
queda expedito el derecho a la parte actora poder justificar su incomparecencia con
posterioridad a la audiencia, cuando se trata de circunstancias ajenas a su voluntad
que no hayan podido comunicarse al tribunal con antelación a la celebración de
ésta, por lo que consideramos que previo a tener por desistida la pretensión del
demandante, el Juzgador debe concederle un plazo razonable para que justifique
los motivos de su incomparecencia a la audiencia, debiendo valorar si la causa
invocada supone un impedimento para la comparecencia a la misma, valorando
tales circunstancias de acuerdo a las reglas de la sana crítica y las máximas de
experiencia.”

101
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

CÁMARA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DE OCCIDENTE,


SANTA ANA, Apelación N°INC-APEL-28-01-13-03-2014 de fecha: siete de mayo
de dos mil catorce.

“Según se observa en la certificación médica presentada, que a la [solicitada] amén


del tratamiento, el médico le recomendó reposo pero no consta que se encontrara
en situación de tal gravedad que la inhibiera de ejercer actos de su voluntad como
lo era el nombrar abogado para que la representara, tal como se le indicó en el
emplazamiento. Así las cosas, el argumento planteado, no es motivo para considerar
justo impedimento, aunado al hecho de que no era la demandada en su carácter
personal la legitimada para comparecer a la audiencia, dado que era innecesaria su
presencia sin su abogado y de haber actuado con diligencia, tiempo tuvo para hacer
uso del derecho de nombrarlo para que la representara, pues es éste el indicado para
comparecer en su nombre a la audiencia, por lo que la presencia del representado no
afecta en modo alguno el desarrollo de la misma.

El recurrente señala que su representada no ha podido hacer uso de su derecho de


defensa al no dársele curso a la petición de suspensión de la audiencia, habiendo
presentado la justificación por quebrantamiento de salud no accediéndose a lo
solicitado. Al respecto se trae a cuenta los conceptos de fuerza mayor y caso fortuito
antes relacionados, a la luz de los cuales ha quedado demostrado que en este caso,
no se está en presencia de tales eventos y lo que sucedió es que la parte interesada
no actuó de manera diligente y así poder comparecer a la audiencia de la manera
legal establecida, dado que la forma en que pretendió hacerlo es impertinente. En
razón de lo antes expuesto, es procedente declarar sin lugar la nulidad alegada en
virtud de que no se han producido los defectos alegados y confirmar la sentencia
venida en Apelación por estar arreglada a derecho.”

CÁMARA DE LA CUARTA SECCIÓN DEL CENTRO, SANTA TECLA,


Apelacion N°130-C-13 de fecha: doce de febrero de dos mil catorce.

“El Art. 208 del CPCM, contiene las causas por las que se puede suspender la
celebración de la audiencia preparatoria, y en su Ord. 2°. mencionado también por
el Juzgador, esta dispone que: “Por causa grave que impida la comparecencia de
algún sujeto procesal que hubiera sido citado.”, circunstancia que a criterio de este
Tribunal no ha concurrido en el caso de autos, ya que en ningún momento la parte
actora justificó su inasistencia por alguna causa que le haya impedido presentarse
a la hora y en el día para el que había sido convocado, razón por la que al Juez A
Quo, en lugar de suspenderla debió proceder conforme a lo indicado en el Código
Procesal Civil y Mercantil, específicamente en su Art. 291, que categóricamente
establece en sus Inc. 1°. y 2° que: “Cuando a la audiencia preparatoria dejaran de
concurrir ambas partes, el juez pondrá fin al proceso sin más trámite, siempre que
tal ausencia no esté debidamente justificada. Lo mismo hará el juez cuando no asista
el demandante, y el demandado no muestre interés legítimo en la prosecución del
proceso.”, es así que al no aplicar lo que correspondía, el funcionario judicial resolvió
haciendo caso omiso de lo dispuesto por el legislador, en completa vulneración
del principio de legalidad, contenido en el Art. 3 del. CPCM, que estipula: “Todo
proceso deberá tramitarse ante juez competente y conforme a las disposiciones

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CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

de este código, las que no podrán ser alteradas por ningún sujeto procesal. Las
formalidades previstas son imperativas. Cuando la forma de los actos procesales
no esté expresamente determinada por ley, se adoptará la que resulte indispensable
o idónea para la finalidad perseguida.”; asimismo aplicando erróneamente el Juez
A Quo el Ord. 2°. del Art. 208 del CPCM, al ordenar la suspensión de la audiencia
sin adecuarse a ninguno de los supuestos de dicho precepto legal, y menos aún el
invocado por el funcionario en su oportunidad al no haberse probado ni alegado
causa grave para no comparecer de parte del actor del proceso principal.

La parte demandada no ha mostrado interés en la continuación del proceso, sino


que por el contrario, en el transcurso del mismo solicitó al Juez de la Instancia
inferior que le diera aplicación a lo que manda el Art. 291 del CPCM, e inclusive
en la audiencia probatoria advirtiendo al funcionario de la nulidad de la que estaba
viciado el proceso desde la audiencia preparatoria suspendida, sin obtener el
interesado, ninguna resolución que satisfaga el procedimiento que para tal efecto ha
señalado el legislador, declarándole sin lugar todas las peticiones formuladas, hasta
llevar el proceso hasta la sentencia definitiva de la que se recurre.

Como consecuencia de lo anterior, los Suscritos aprecian que la sentencia impugnada


no se encuentra apegada a Derecho, por lo que es procedente revocar la misma,
declarar la nulidad de la resolución que contiene la suspensión de la audiencia
preparatoria, y ordenar el archivo del proceso en virtud de que la misma obedece a
raíz de la sanción procesal que no se aplicó en Primera Instancia de conformidad al
Art. 291 del CPCM, por lo que resulta innecesario entrar a valorar respecto de los
otros agravios indicados por el impetrante.”

Nuevo señalamiento de las audiencias suspendidas

Art. 209.- Toda suspensión que el tribunal acuerde se comunicará inmediatamente y por
el medio más rápido a las partes personadas y a quienes hubiesen sido citados judicialmente en
calidad de testigos, peritos o en otra condición.

El nuevo señalamiento se hará al acordarse la suspensión, y si esto no fuera posible, tan pronto
como desaparezca el motivo que la ocasionó. Se fijará el día más inmediato que se pueda, sin
alterar el orden de los señalamientos que ya estuvieran hechos. El tribunal preservará, en lo que
esté a su alcance, el cumplimiento del principio de concentración en la práctica de la prueba.

Sustitución de juez o magistrado después del señalamiento de audiencia

Art. 210.- Si una vez efectuado el señalamiento de la audiencia se hubiera sustituido al juez
o a algún magistrado integrante del tribunal, se comunicará tal circunstancia a las partes, antes de
que se celebre aquélla, para que puedan plantear la recusación.

Si no se plantea la recusación, se procederá a la celebración de la audiencia, sin perjuicio del


derecho a plantearla durante ésta, si se conoció con posterioridad la causa que le da origen. En
este caso, se suspenderá la audiencia y se tramitará el incidente según lo dispuesto en este código,
debiéndose hacer el nuevo señalamiento una vez resuelta la recusación.

103
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

Interrupción de las audiencias

Art. 211.- Iniciada la celebración de una audiencia sólo podrá interrumpirse por alguna de las
causas siguientes:
1°. Cuando sea preciso resolver una cuestión incidental que no se pueda decidir en el acto.
2°. Cuando haya que practicar una diligencia de prueba fuera de la sede del tribunal y no
pudiera verificarse entre una y otra sesión de la audiencia.
3°. Cuando no comparezcan los testigos o los peritos citados judicialmente y se considere
imprescindible su declaración o informe.
4°. Cuando, una vez iniciada la audiencia, se produzca la indisponibilidad del juez, de algún
magistrado, de la parte o su abogado.
5°. Cuando lo soliciten todas las partes, alegando justa causa.

La audiencia se reanudará una vez desaparecida la causa que motivó su interrupción. (2)

Si la interrupción se prolongare por más de treinta días, perderán toda eficacia las actuaciones
realizadas y se deberá celebrar una nueva audiencia, debiéndose realizar al efecto las citaciones
pertinentes y haciendo el oportuno señalamiento para la fecha más inmediata posible.

Lo mismo se hará cuando por cualquier causa el juez o magistrado hayan sido sustituidos
durante la interrupción.

CÁMARA TERCERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, Sentencia de Apelación Referencia N°259-EMSM-13 de Fecha:
veintiuno de enero de dos mil catorce.

“En el desarrollo del proceso, al celebrarse la audiencia especial de prueba de


la oposición que planteó la licenciada […] y que fue iniciada el cinco de junio de
dos mil trece por la señora Jueza de lo Civil de San Marcos licenciada […], dicha
audiencia fue interrumpida para practicar diligencia de prueba pericial a solicitud
de la profesional antes mencionada, tomándose las muestras del mismo en audiencia
del nueve de agosto de dos mil trece; realizándose nueva audiencia de pruebas el
ocho de octubre de dos mil trece, momento en que la Señora Jueza de lo Civil de San
Marcos era sustituida y se encontraba en su lugar el Juez suplente licenciado […].

Así las cosas, debe señalarse que si bien es cierto se trataba de una nueva audiencia
y no una continuación de la realizada el cinco de junio de dos mil trece, tal como
establece el Art. 211 Código Procesal Civil y Mercantil, también lo es que el juez
suplente le dio eficacia a las actuaciones realizadas por la titular de dicho tribunal
y que eran consecuencia de la primera audiencia que ya había quedado sin ninguna
eficacia al igual que la prueba que fue obtenida en ese lapso de tiempo, tal como lo
estipula la disposición antes mencionada, debiendo haberse realizado de nuevo la
prueba que había sido solicitada; y al no haberse hecho, no podía estimarse una
prueba que había perdido eficacia total.

En consecuencia, conforme al Art. 516 en relación con el Art. 232 letra c) ambos
del Código Procesal Civil y Mercantil y que han sido relacionados anteriormente,
y de acuerdo a lo establecido en el Art. 211 incisos 3 y 4 del mismo cuerpo legal,
que señalan respecto a la interrupción de las audiencias que “si la interrupción

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CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

se prolongare por más de treinta días, perderán toda eficacia las actuaciones
realizadas y se deberá celebrar una nueva audiencia, debiéndose realizar al efecto
las citaciones pertinentes y haciendo el oportuno señalamiento para la fecha
más inmediata posible. Lo mismo se hará cuando por cualquier causa el juez o
magistrado hayan sido sustituidos durante la interrupción.”
“al haberse valorado el peritaje de fecha diez de septiembre del año anterior y
que fuera practicado por el perito en documentoscopia […], en contravención a lo
estipulado en los incisos tres y cuatro del Art. 211 CPCM transcrito en lo pertinente,
trae como consecuencia nulidad, razón por la cual esta Cámara, se ve compelida
a declarar nula la sentencia venida en Apelación, así como todas las actuaciones
realizadas a partir de la audiencia de las catorce horas del día ocho de octubre del
año dos mil trece por el Juez Suplente licenciado […] en vista que las anteriores
actuaciones de acuerdo a lo dicho, quedaron sin ninguna eficacia, debiendo
reponerse el proceso desde donde corresponda.
No declarar tal nulidad sería vulnerar no solo la ley secundaria, sino también los
Principios Constitucionales de audiencia y defensa, que son la base para el derecho
al debido proceso, configurado en el Art. 11 Cn. propiciando la inseguridad jurídica;
siendo procedente declarar la nulidad de todo lo actuado a partir de la audiencia
celebrada a las catorce horas de ocho de octubre de dos mil trece, fs. […], y de todo
lo que sea su consecuencia, incluyendo desde luego, la sentencia impugnada.”
CAPÍTULO SEXTO
RESOLUCIONES JUDICIALES

SECCIÓN PRIMERA
CLASES Y RÉGIMEN

Clases de resoluciones

Art. 212.- Las resoluciones judiciales pueden ser decretos, autos y Sentencias.

Los decretos tienen por objeto el impulso y ordenación material del proceso.

Los autos son simples o definitivos. Simples, si se dictaren, entre otros propósitos, para
resolver incidentes, acordar medidas cautelares, definir cuestiones accesorias o resolver nulidades;
definitivos, si le ponen fin al proceso, haciendo imposible su continuación en la instancia o por vía
de recurso, o si así lo determina este código.

Las Sentencias deciden el fondo del proceso en cualquier instancia o recurso.

Responsabilidad de dictar resoluciones

Art. 213.- Las resoluciones se dictarán por el juez o los magistrados que hubieren presenciado
en su integridad la audiencia vinculada con el asunto.

Imposibilidad de dictar resoluciones

Art. 214.- No podrán dictar las resoluciones conforme al artículo anterior, aunque hubieren
asistido a la audiencia, el juez o magistrado que, conforme a la ley, hubieran perdido dicha

105
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

condición, hubiesen sido suspendidos en sus funciones o resultaren afectados por alguna causa de
incompatibilidad.

En tales casos, se tendrá que repetir la audiencia.

Forma

Art. 215.- En toda resolución salvo las adoptadas en audiencia, se indicará el proceso al que
se refiere, el número de expediente, el lugar, día y hora de su pronunciamiento y el tribunal que la
dicta.

La resolución deberá expresar en forma clara y precisa la decisión sobre el objeto del proceso
o sobre el punto concreto al que se refiera, con los pronunciamientos correspondientes a todas las
pretensiones de las partes.

Motivación

Art. 216.- Salvo los decretos, todas las resoluciones serán debidamente motivadas y
contendrán en apartados separados los razonamientos fácticos y jurídicos que conducen a la
fijación de los hechos y, en su caso, a la apreciación y valoración de las pruebas, así como a
la aplicación e interpretación del derecho, especialmente cuando el juez se aparte del criterio
sostenido en supuesto semejante.

La motivación será completa y debe tener en cuenta todos y cada uno de los elementos fácticos
y jurídicos del proceso, considerados individualmente y en conjunto, con apego a las reglas de la
sana crítica.

SALA DE LO CONSTITUCIONAL, Amparo 361-2005 de fecha dieciocho de


septiembre de dos mil seis.

“La revisión en amparo de las resoluciones judiciales no puede atender a criterios


meramente formalistas o de técnicas de composición o extensión —verbigracia,
examinar si las providencias podrán haber sido más extensas o elaboradas en puntos
decisorios y menos en relación de hechos o transcripciones—, es decir, en sede
constitucional únicamente se valora si existe una motivación razonable y congruente
con lo pedido, permitiendo, así, que el afectado de la decisión conozca las razones de
esta y no quede en indefensión o menoscabo de los derechos fundamentales.

En la sentencia de amparo 663-2005 de diez de enero de 2007 se afirmó que la


obligación de motivación por parte de los jueces no puede considerarse cumplida
con la mera emisión de declaración de voluntad del juzgador, accediendo o no a lo
pretendido por las partes en el proceso, sino que está referido a que en los proveídos
judiciales se exterioricen los razonamientos que cimienten la decisión. Razonamientos
que conllevan una exposición de hechos que incluye el material fáctico y su valoración
y una exposición jurídica argumentativa en torno a la aplicación del derecho que
conduce a la parte dispositiva de la sentencia.

Las finalidades de la motivación se encuentran detalladas en el amparo 604-2001 de


fecha 12 de agosto de 2002 entre las cuales pueden citarse: a) permite el control de
la actividad jurisdiccional por parte de la opinión pública, verificando así el requisito

106
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

de publicidad dirigido sobre todo a las partes, b) hace patente el sometimiento del
juez al imperio de la Constitución y las leyes, c) logra el convencimiento de las partes
sobre la justicia de la decisión judicial, eliminando la sensación de arbitrariedad
y estableciendo su razonabilidad al conocer el por qué concreto de su contenido
y d) garantiza la posibilidad de control de la resolución judicial por los tribunales
superiores que conozcan de los correspondientes recursos”.

CÁMARA TERCERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, SAN SALVADOR, Apelación No. 93-ECS-14 de fecha: veinte de mayo
de dos mil catorce.

En cuando a la motivación de las resoluciones judiciales el Art. 216 C.Pr.C.M.,


que ESTABLECE: “Salvo los decretos, todas las resoluciones serán debidamente
motivadas y contendrán en apartados separados los razonamientos fácticos y jurídicos
que conducen a la fijación de los hechos y, en su caso, a la apreciación y valoración
de las pruebas, así como a la aplicación e interpretación del derecho, especialmente
cuando el juez se aparte del criterio sostenido en supuesto semejante. La motivación
será completa y debe tener en cuenta todos y cada uno de los elementos fácticos y
jurídicos del proceso, considerados individuamente y en conjunto, con apego a las
reglas de la sana crítica”. Conforme a la disposición transcrita, hay que tener en
cuenta que toda petición no es sólo el resultado que el solicitante pretende obtener
—lo que pide a la autoridad—, sino también el fundamento jurídico en virtud del cual
pide, que no es otra cosa que la causa de pedir o causa petendi y la ratio decidendi.
Pues en caso de no acceder a lo solicitado –como en el caso que nos ocupa– u
otorgar menos de lo peticionado el juzgador debe motivar su actuar, entendida ésta
como aquella obligación que tiene todo juzgador de cimentar sus resoluciones, a fin
de suministrar a los justiciables los datos, razonamientos y conclusiones ineludibles
que lo llevaron a tomar la decisión, para que éstos puedan conocer el por qué de la
misma, prestándoles así el examen por parte de los órganos jurisdiccionales sumos.
Es por ello que la motivación de las resoluciones es consustancial a los principios de
seguridad jurídica, legalidad e interdicción de la arbitrariedad que son propios del
Estado de Derecho. La resolución objeto del recurso por falta de motivación es la
que rechazó in limine la solicitud de ejecución forzosa incoada por el recurrente, y al
respecto el Art. 575 Inc. 1 C.Pr.C.M., DISPONE: “Si la solicitud no se ajustara a los
requisitos de fondo expresados en el artículo anterior, el juez rechazará in limine la
ejecución mediante auto expresamente motivado, que será susceptible de recurso de
Apelación.”[…]. En ese sentido al haberse limitado la Jueza A Quo a declarar no ha
lugar la solicitud por no reunir los requisitos establecidos en el Art. 551 C.Pr.C.M.,
sin expresar concretamente a cuales requisitos se refiere, en qué consisten y por qué
no los cumple la solicitud, no ha proporcionado en la resolución al solicitante las
razones de su decisión, a fin de que comprenda a cabalidad el motivo del rechazo,
y no tienen las partes porque presumir cual fue la motivación del juzgador para
resolver, sino que ésta debe apreciarse suficientemente clara en la resolución judicial,
y al no haber cumplido con el deber de motivación, se acoge también este agravio,
siendo necesario revocar el auto definitivo venido en Apelación a fin de que la señora
Jueza A Quo pronuncie la resolución que corresponda, con la debida motivación en
cumplimiento de los Arts. 216 C.Pr.C.M., y así se declarará.”

107
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

Requisitos de la Sentencia. Forma y contenido

Art. 217.- La sentencia constará de encabezamiento, antecedentes de hecho, fundamentos de


derecho y fallo o pronunciamiento.

En el encabezamiento se indicará el juzgado o tribunal que dicta la Sentencia, así como a las
partes, sus abogados y representantes, y se indicará la petición que conforma el objeto del proceso.

Los antecedentes de hecho, estructurados en párrafos numerados, expresarán en forma clara


y resumida las alegaciones de cada parte, con especial atención a los hechos alegados y a los que
no hubieran sido controvertidos; y se referirán también a las pruebas propuestas y practicadas, así
como a la declaración expresa de los hechos que se consideran probados y de los que se consideran
no probados.

Los fundamentos de derecho, igualmente estructurados en párrafos separados y numerados,


contendrán los razonamientos que han llevado a considerar los hechos probados o no probados,
describiendo las operaciones de fijación de los hechos y valoración de las pruebas y, también
debidamente razonadas, las bases legales que sustentan los pronunciamientos del fallo,
especialmente cuando se hubiera producido debate sobre cuestiones jurídicas, con expresión de
las normas jurídicas aplicables y, en su caso, de su interpretación. Los fundamentos de derecho
habrán de contener una respuesta expresa y razonada a todas y cada unas de las causas de pedir, así
como a las cuestiones prejudiciales y jurídicas necesarias para la adecuada resolución del objeto
procesal.

El fallo o pronunciamiento estimará o desestimará, con claridad, las pretensiones debatidas


en el proceso. En caso de que se resuelvan varias pretensiones en la misma Sentencia, cada una de
ellas tendrá un pronunciamiento separado.

Si la pretensión es pecuniaria, el juez o tribunal la determinará exactamente en el fallo, sin


que se pueda dejar su fijación para el momento de la ejecución de la Sentencia. Esta podrá también
fijar, con claridad y precisión, las bases de liquidación, dejando la determinación de la cuantía de
la condena para el trámite de ejecución, pero sólo si la liquidación se puede realizar con simples
operaciones aritméticas.

El fallo se dictará a nombre de la República y contendrá el pronunciamiento sobre las costas.

CÁMARA DE LA CUARTA SECCIÓN DEL CENTRO, SANTA TECLA,


Apelación Referencia N°14-C-15 de fecha: tres de septiembre de dos mil quince.

“1.1.- En cuanto a la denominación que el Juzgador le dio al proceso en la sentencia


definitiva, en efecto a fs. […] consta dicha sentencia en la que se identifica el
proceso como Declarativo Común Reivindicatorio de Inmueble, a pesar de que el
funcionario le ha dado trámite a un Proceso Declarativo Común de Constitución
de Servidumbre de Tránsito, lo cual deja en evidencia el descuido con que fue
redactada la aludida Sentencia; asimismo al transcribir la demanda, se cometió el
error de mencionar el nombre de otro Abogado como el que la había presentado,
persona diferente al Abogado […]; circunstancia esta última, que fue corregida
en su oportunidad por el Juez A Quo con base en el Art. 225 del CPCM, mediante
auto de fs. […], e igualmente se corrigieron las medidas de la servidumbre que se
estaba constituyendo; corrección que se hizo a petición del mencionado Abogado

108
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

[…]; quedando únicamente sin corregir la parte introductiva de la sentencia al


identificar erróneamente el Proceso a que se refiere la misma, yerro que aunque ha
sido verificado por esta Cámara no puede tenerse como motivo para calificar de mal
fundamentada la Sentencia, conforme el Art. 217 del CPCM, como lo ha afirmado el
recurrente.”

Congruencia

Art. 218.- Las Sentencias deben ser claras y precisas, y deberán resolver sobre todas las
pretensiones y puntos litigiosos planteados y debatidos.

El juez deberá ceñirse a las peticiones formuladas por las partes, con estricta correlación entre
lo que se pide y lo que se resuelve. No podrá otorgar más de lo pedido por el actor, menos de lo
resistido por el demandado, ni cosa distinta a la solicitada por las partes.

Sin alterar la pretensión, y con respeto a los hechos alegados por las partes como base de sus
causas de pedir, el juzgador podrá emplear los fundamentos de derecho o las normas jurídicas que
considere más adecuadas al caso, aunque no hubieran sido invocados por las partes.

SALA DE LO CIVIL, Casación Referencia N°297-CAC-2012 de fecha: veintiséis


de noviembre de dos mil catorce.

“Vale destacar, que por congruencia debe entenderse la adecuación o conformidad


que debe existir entre la parte dispositiva de la sentencia y las pretensiones
deducidas en el proceso y que constituyen su objeto, así como aquellas alegaciones
del demandado que delimiten dicha pretensión. Nuestra normativa procesal recoge
implícitamente tal dogma procesal en el Art. 218 CPCM, que dispone:

“[...] El juez deberá ceñirse a las peticiones formuladas por las partes, con estricta
correlación entre lo que se pide y lo que se resuelve. No podrá otorgar más de lo
pedido por el actor, menos de lo resistido por el demandado, ni cosa distinta a la
solicitada por las partes...”
A partir del dogma procesal relacionado, debe advertirse que la Cámara de segunda
instancia incurre en clara vulneración al principio procedimental de congruencia,
derivado del enunciado legal dispuesto en el Art. 218 CPCM, que paralelamente le
vincula a su régimen de actuación señalado en el Art. 515 inciso 2° CPCM, dado
que la sentencia pronunciada por aquella concede una cosa distinta a la lo pedido
por la parte apelante en relación a la pretensión procesal, que durante el desarrollo
del proceso discuten un derecho atinente a sujetos procesales ya determinados, esto
es, terminar una situación jurídica entre el [banco demandante] y el señor […];
pero que, en el fallo de mérito no existe correlación de ellos al estimar la pretensión
mediante la confirmación de la terminación del comodato precario pero respecto de
sujetos distintos de la pretensión procesal.”[…]
En definitiva pues, esta Sala considera que en el caso sub examine se ha producido
una ruptura del principio de congruencia, que tiene su vigencia en el principio
dispositivo y de contradicción, fundamental para la obtención de una tutela judicial
efectiva como fórmula de resolución de conflictos, deberá en consecuencia estimar
ha lugar el vicio de forma por infracción de un requisito interno de la Sentencia, en

109
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

especifico, por contener su fallo incongruencia otorgando algo distinto a lo pedido


por las partes (“extraperita”), infringiendo con ello el precepto legal contenido en
el Art. 218 C.P.C.M; y por ende, procederá la anulación del fallo de la sentencia
dictada a las quince horas del veintiocho de septiembre de dos mil doce, a fin de que
se reponga la misma por la Cámara de Segunda Instancia de la Tercera Sección de
Oriente, declaración que así deberá disponerse.”
CÁMARA PRIMERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL
CENTRO, SAN SALVADOR, Referencia N°151-59CM2-2015 de fecha: ocho de
enero de dos mil dieciséis.
“La congruencia es una regla de actividad, en cuanto le impone al juez la obligación
de proferir la sentencia en consonancia con los hechos y las pretensiones aducidas
en la demanda.
La premisa sobre la cual descansa dicho principio es el derecho constitucional de
petición, reconocido en el Art. 18 Cn., y se encuentra consagrado en el Art. 218
CPCM., que en lo medular establece que las Sentencias deberán resolver sobre todas
las pretensiones y puntos litigiosos planteados y debatidos, debiendo el juez ceñirse
a las peticiones formuladas por las partes, con estricta correlación entre lo que se
pide y lo que se resuelve, no pudiendo otorgar más de lo pedido por el actor, menos
de lo resistido por el demandado, ni cosa distinta a la solicitada por las partes.
La transgresión a dicho principio da como resultado una sentencia incongruente,
en la cual lo resuelto no guarda completa armonía con las pretensiones o con las
excepciones que han sido alegadas o que pueden ser reconocidas de oficio, o cuando
se despreocupa de los supuestos que integran la causa petendi o, dicho de otra forma,
se aparta de los extremos fácticos que delimitan el objeto sometido a juzgamiento.
Esa falta de congruencia, es un error de procedimiento, y puede presentarse en tres
formas: 1) cuando se otorga más de lo pedido (plus petita o ultra petita),

2) cuando se otorga algo distinto a lo pedido (extra petita), y 3) cuando se deja de


resolver sobre algo pedido (citra petita).

Por tanto, para establecer la presencia de esta irregularidad se hace necesario


el cotejo objetivo entre lo pedido por el actor, las excepciones aducidas por el
demandado y el contenido concreto de la decisión del juzgador, encaminado a
determinar si evidentemente se ha materializado alguna distorsión, defecto o exceso
que habilite al interesado para aducir la incongruencia.”

Sentencia dictada por una Cámara de Segunda Instancia o por la Sala de lo Civil.

Deliberación

Art. 219.- En la Sala de lo Civil y en las Cámaras de Segunda Instancia la sentencia se dictará
tras la deliberación y voto de todos los magistrados.

A los efectos de preparar de mejor manera la deliberación, los magistrados podrán consultar y
estudiar el expediente antes de la audiencia y hasta la fecha que fije el Presidente para deliberar y
votar.

110
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

La deliberación será siempre a puerta cerrada, inmediatamente después de la audiencia o en el


momento más próximo posible a su celebración y será el Presidente quien dirija los debates.

El magistrado presidente deberá dar a conocer la propuesta de decisión y el borrador de


sentencia que la sustente.

SALA DE LO CIVIL, Sentencia N°123-CAC-2011 de fecha seis de septiembre de


dos mil trece.

“SE HACE CONSTAR: Que la presente sentencia se autoriza con las firmas de
los Magistrados MARÍA LUZ REGALADO ORELLANA Y MARIO FRANCISCO
VALDIVIESO CASTANEDA, quienes han concurrido con su voto a formarla, más no
así con el del Magistrado OVIDIO BONILLA FLORES, quien disiente de la misma
y dará su voto razonado por separado. Tal forma de autorizar la sentencia obedece
a la dictada por la Sala de lo Constitucional, por sentencia de inconstitucionalidad
de las doce horas del uno de marzo de dos mil trece, marcada bajo la Referencia
número 78-2011, publicada en el Diario Oficial número 47, tomo número 398, de
fecha: 8 de marzo de dos mil trece, declaró la inconstitucionalidad del Art. 14, Inc.
2° de la Ley Orgánica Judicial, en lo que corresponde a la regla de votación de
las decisiones de la Sala de lo Civil de esta Corte. Siendo que el Art. 14, Inc. 2° de
esa ley mandaba que: “LAS SALAS DE LO PENAL Y LO CIVIL DE LA CORTE
SUPREMA DE JUSTICIA PARA DICTAR sentencia O AUTOS, NECESITARÁN
LA CONFORMIDAD DE TRES VOTOS... “(sic). Asimismo que en la sentencia de
inconstitucionalidad, al Romano IV, número 5, in fine, se dijo: “... el efecto de esta
sentencia será que para tomar las decisiones interlocutorias y definitivas de la Sala
de lo Contencioso Administrativo de la Corte Suprema de Justicia bastarán los votos
de la mayoría de los Magistrados que la integran, incluso en los procesos iniciados
con anterioridad a esta Sentencia. “(sic). Argumento que aplica a la Sala de lo Civil.
En consecuencia, para la autorización de esta sentencia ha bastado la conformidad
de dos votos, que corresponden a las decisiones de los Magistrados MARÍA LUZ
REGALADO ORELLANA Y MARIO FRANCISCO VALDIVIESO CASTANEDA.”

Voto. Mayoría requerida. Discrepancia


Art. 220.- Concluida la deliberación se procederá a votar, comenzando por el magistrado de
nombramiento más reciente. El presidente votará en último lugar. Las decisiones requerirán del
voto unánime de los magistrados que integran el tribunal, salvo cuando la Corte Plena conozca en
casación.
Los magistrados discrepantes firmarán la sentencia que ponga fin al asunto; pero deberán
explicar su voto disidente razonándolo conforme a lo dispuesto en este código.
Voto del imposibilitado
Art. 221.- Cuando un magistrado que asistió a la audiencia en su integridad no pudiera
concurrir a la deliberación y votación, por circunstancia justificada que le imposibilite para
ello, enviará su voto por escrito, justificado y firmado, siempre que haya podido disponer de la
información necesaria.

111
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

Si la imposibilidad fuera tal que le impide escribir, se asistirá de notario.


Si hubiere imposibilidad absoluta de obtener el voto, se llamará al magistrado suplente, con
cuya presencia se procederá a celebrar de nuevo la audiencia, de cuyo nombramiento se notificará
a las partes para efectos de recusación.
Sentencia oral. Supuestos
Art. 222.- En todos los procesos regulados por este código, y a continuación de los alegatos
finales, el juez o tribunal deberá dictar in voce el fallo de la sentencia y una sucinta motivación
de la misma, bajo pena de nulidad. Si la complejidad del caso lo ameritare, el juez o tribunal
podrá interrumpir la audiencia por un máximo de tres días hábiles, citando nuevamente a las partes
dentro de dicho plazo, para anunciar el respectivo fallo. (4)
En los procesos abreviados y procesos especiales, si lo permitiera la complejidad fáctica y
jurídica del proceso en cuestión, el juez o tribunal podrá dictar oralmente la sentencia íntegra. (4)
En todos los casos anteriores el juez o tribunal preguntará a las partes sobre su intención de
recurrir la Sentencia. Si ambas partes manifestaren su decisión de no impugnar la misma, declarará
su firmeza en el acto. Si por el contrario, ambas partes o alguna de ellas anunciare su intención de
recurrir, el juez la dictará luego por escrito en el plazo legal para que se interponga el respectivo
recurso una vez que la misma sea notificada. (4)
SALA DE LO CIVIL, Auto Definitivo N°406-CAC-2013 de fecha: catorce de
enero de dos mil quince.

“Dentro de la tramitación del presente proceso en primera instancia se resolvió


la mencionada excepción [acumulación indebida de pretensiones] en el acta de la
audiencia preparatoria; es decir, la referida Instancia decidió pronunciar oralmente
la decisión definitiva, misma de la que se recurrió en Apelación sobre ese punto en
específico, sin que se le haya dado cumplimiento a lo establecido en el Art. 222 inc.
3° C. Pr. C. y M. misma que se encuentra dentro del título cuarto, capítulo sexto
denominado “Resoluciones judiciales”, el cual a la luz del Art. 19 del mencionado
cuerpo normativo, se torna perfectamente aplicable.

Se trata pues, de materializar una decisión judicial conforme las exigencias de la


normativa procesal civil y mercantil -Art. 217- y en cumplimiento a los principios
procesales, específicamente el Art. 8 C. Pr. C. y M. el cual claramente establece que
si bien la predominancia en los procesos civiles y mercantiles es la oralidad, ello
no priva al juzgador para documentar los actos procesales, más cuando el mismo
código así lo establece; lo anterior, es con la finalidad de posibilitar a las partes
a que hagan uso de sus derechos canalizándolos por los medios de impugnación
respectivos velando por los principios de legalidad, de defensa y contradicción.
En ese mismo orden, el haberse limitado el de Primera Instancia a emitir un fallo
definitivo en un acta, deviene en una anomalía procesal que de seguir aplicándolo de
tal manera afectará los derechos del justiciable.”

Libro de Sentencias
Art. 223.- En cada juzgado o tribunal será obligatorio llevar un libro de Sentencias y autos
definitivos. La ordenación será por orden cronológico, y se incluirán los votos particulares, en el
caso de que los haya, inmediatamente después de la resolución a la que se refieran.

112
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

Publicidad de la Sentencia
Art. 224.- Una vez que la sentencia o auto que pone fin al proceso haya sido notificado
efectivamente a las partes, se procederá a darles la publicidad y difusión procedentes conforme al
ordenamiento jurídico.
La Corte Suprema de Justicia, será la encargada de garantizar el conocimiento de la jurisprudencia
dictada por la Sala de lo Civil de la misma y de los tribunales de segunda instancia. (2)
En su caso, la publicidad y difusión se harán sin perjuicio del respeto a la garantía de la
identidad de las partes.
Rectificación y aclaración de la sentencia o auto que pone fin al proceso
Art. 225.- Las Sentencias y autos definitivos son invariables una vez firmados.
No obstante, los jueces y tribunales podrán, de oficio, en los dos días siguientes a la
notificación, efectuar las aclaraciones de conceptos oscuros que se pongan de manifiesto y corregir
los errores materiales que se detecten.
Las partes podrán solicitar, en el plazo establecido en el inciso anterior, las mismas
aclaraciones y correcciones, y el juez o tribunal deberá resolver en los dos días siguientes.
Lo dispuesto en este artículo se aplicará igualmente a las omisiones y defectos que se detecten
en los antecedentes de hecho o fundamentos de derecho y cuya corrección sea imprescindible para
poder proceder a la impugnación o a la ejecución.
Los errores puramente numéricos podrán ser corregidos en cualquier momento del proceso,
aun durante la etapa de ejecución de la Sentencia. (2)

CÁMARA SEGUNDA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, SAN SALVADOR, Apelación Referencia 4-4MC-15-A de fecha trece
de julio de dos mil quince.

“En este sentido cabe mencionar que la Juez A Quo, en la resolución objeto del
presente recurso, de las nueve horas y doce minutos del cuatro de mayo de dos mil
quince, efectivamente no se pronunció sobre la petición hecha en la contestación
de la demanda de condenar al demandante en las costas daños y perjuicios, por
infracción al principio de buena fé procesal; no obstante ello, luego de haber
notificado a las partes el auto con tal omisión, para remediar la omisión, pronunció
a las diez horas y cuarenta y siete minutos del veintiuno de mayo del mismo año, el
auto de fs. […], mediante el cual se pronunció al respecto, y consideró que no era
procedente condenar a la parte demandante en las costas, en virtud de que como
lo menciona en dicha resolución citamos:“”””para que procediera condenarse en
costas y resarcimiento de daños y perjuicios, solo pueden imponerse por medio de una
sentencia de mérito en la que se establezcan los supuestos procesales para condenar
en costas cuando procediere; y con relación al resarcimiento de daños y perjuicios,
los juzgados de menor cuantía no somos competentes para pronunciarnos en ese
sentido por no ser de nuestra competencia, sino que es materia de otras instancias
judiciales (…)”””””Éste último argumento, como se dijo, no está contenido en la
resolución apelada sino en un auto separado dictado con posterioridad, por lo que

113
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

la parte apelante no tuvo conocimiento del criterio del juez, sino hasta después de
haber interpuesto su recurso de Apelación, ya que le fue notificada hasta el día dos
de junio del presente año; por lo cual esta Cámara estima conveniente hacer un
llamado de atención a la Juez A Quo, a efecto de que maneje los procesos con la
diligencia debida, ya que situaciones como las acontecidas en autos, pueden generar
eventualmente afectaciones graves en los derechos de defensa de las partes, como
en el presente caso que la parte apelante tuvo que dirigir su recurso para evitar la
preclusión del plazo, sin que existiera pronunciamiento del juez sobre la condena en
costas y daños y perjuicios solicitadas, en ningún sentido”

Además si bien es cierto el legislador en el Art. 245 CPCM, establece que pese a que
en principio las Sentencias y autos una vez firmados son invariables, se podrán hacer
correcciones y aclaraciones, así como subsanar omisiones de las mismas; dichas
aclaraciones deberán realizarse dentro de los dos días siguientes de la notificación
del proveído; lo cual incumplió la Juez A Quo, ya que pretendió subsanar su
error mediante una resolución pronunciada cuatro días hábiles después de haber
notificado a las partes, y aunado a ello notificó dicha resolución hasta el día dos
de junio, es decir siete días hábiles después de haber pronunciado la resolución, en
total once días después de haber notificado la primera resolución a las partes.

La actuación de la juez en este caso, claramente viola lo prescrito en el Art. 245


CPCM, que establece que las Sentencias y autos una vez firmados son invariables;
y únicamente se permite dentro de los dos días siguientes al de la notificación,
subsanar errores u omisiones de las mismas.”

CÁMARA PRIMERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, SAN SALVADOR, Apelación N°149-58CM2-2013 de fecha: diez de
octubre de dos mil trece.

“La inadmisibilidad, es un mecanismo de control de la demanda ya que responde a


circunstancias que limitan la continuación de un determinado proceso, al carecer
de algún requisito formal, de conformidad con lo dispuesto en los Arts. 276 y 575
CPCM., y que es precisamente la figura procesal de rechazo empleada por la
funcionaria judicial.
La funcionaria judicial en síntesis, declaró inadmisible la solicitud de ejecución
forzosa, por estimar que el apoderado de la parte ejecutante había solicitado la
corrección de la Sentencia, amparado en el inc. 5º del Art. 225 CPCM., pero que
tal situación era totalmente incongruente, pues se estaba tratando de modificar
sustancialmente la cantidad de capital a la cual fueron condenados a pagar los
demandados en la sentencia base de la pretensión de ejecución, constituyendo a su
juicio, la acción principal que fue discutida en el proceso cognitivo respectivo y que
no puede estimarse como un error puramente numérico y por esas razones, al no
haberse evacuado la prevención decidió rechazar la solicitud.
Partiendo de lo argumentado por los sujetos procesales relacionados, este Tribunal
considera que el Código Procesal Civil y Mercantil reconoce la posibilidad de
rectificar los autos definitivos y las Sentencias, y esta modificación de la información
incluida en la resolución debe ser corregida, ya sea a petición de parte o de oficio,

114
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

tal como se desprende de la lectura del artículo antes citado, pues así lo refieren los
dos primeros supuestos.
En ese sentido, el inc. Último de la mencionada disposición contempla la posibilidad
de poder rectificar las resoluciones judiciales pero sólo para aquellos casos de errores
numéricos, dejando fuera aquellas equivocaciones de carácter material, que son los
que están regulados en los dos primeros incisos de esa norma procesal, pues en caso de
que estos existan, deben denunciarse dentro de los dos días de notificada la resolución
judicial, so pena de preclusión procesal, para la parte afectada. Por tal razón, el inc.
último del Art. 225 CPCM., dispone que los errores puramente numéricos podrán ser
corregidos en cualquier momento del proceso, aun durante la etapa de ejecución de la
Sentencia. Por todo lo dicho, la norma, únicamente se refiere a “errores numéricos”,
no materiales, como el apelante lo ha querido hacer ver y es que esas equivocaciones
numéricas se refieren a nombres de las partes, los apoderados, los lugares, fechas
y horas, cifras, cantidades o números. En el caso in examine, si bien y en puridad, la
cantidad de condena es una cifra, es decir, la representación numérica de la cuantía
debida por los deudores, ésta es el resultado de la estimación a la pretensión intentada
en la parte declarativa del proceso que hoy nos ocupa; tan es así, que debe entenderse
que esa condena de dinero ubicada en el fallo de la sentencia es el pronunciamiento
del fondo de la cuestión debatida; en virtud de lo anterior, tal como lo señaló la señora
Jueza en su momento procesal oportuno, se debió haber impugnado la Sentencia, para
corregir la aludida situación y siendo que uno de los límites de la Ejecución Forzosa es
el título de ejecución, a tenor del inc. 1º del Art. 560 CPCM., es procedente confirmar
los fundamentos del rechazo liminar de la pretensión, pues claramente se advierte que
no fueron evacuadas las prevenciones que se le formularon al impetrante en los
momentos procesales indicados. Esta Cámara concluye que en el caso sub iúdice,
en virtud de que no se atendió la prevención que en su oportunidad se le formuló
a la parte recurrente, es decir, el diferendo entre la cantidad debida y no pagada
pretendida en la solicitud con la que aparecía en el título de ejecución, vuelve
totalmente improcedente pedirla rectificación del documento base de la pretensión,
por no ser aplicable el supuesto del inc.5º del Art. 225 CPCM., ya que debe quedar
claro que esa corrección, es únicamente para errores numéricos, no para la
modificación de la cantidad de capital en que se ha condenado al pago en el fallo de
una Sentencia.Consecuentemente con lo expresado, es procedente confirmar el auto
definitivo impugnado y condenar en costas de esta instancia a la parte apelante.”
Subsanación de la omisión de pronunciamientos
Art. 226.- Cuando el juez o tribunal hubiera omitido el pronunciamiento sobre una o más
pretensiones o peticiones oportunamente introducidas en el proceso por las partes, estará obligado
a emitir el pronunciamiento que falte sin alterar de otro modo la sentencia o auto dictado.
El pronunciamiento omitido se realizará dentro de los tres días siguientes al dictado de la
resolución si la falta se aprecia de oficio por el juez o tribunal.
Las partes podrán manifestar por escrito la omisión del pronunciamiento en el plazo de tres
días desde la recepción de la notificación de la sentencia o auto que pone fin al proceso. El juez o
tribunal resolverá lo procedente en los tres días siguientes.

115
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

SECCIÓN SEGUNDA
EFICACIA DE LAS RESOLUCIONES JUDICIALES

Eficacia de los decretos

Art. 227.- Los decretos podrán ser rectificados y ampliados en cualquier momento, por
razones de forma o de fondo, siempre que no se cause perjuicio a alguna de las partes.

Eficacia de los autos simples

Art. 228.- Lo resuelto por los autos que no ponen fin al proceso puede ser modificado al
dictarse la Sentencia, siempre que ello no importe retrotraer el procedimiento.

Firmeza de las resoluciones definitivas

Art. 229- Los autos definitivos y las Sentencias adquieren firmeza en los siguientes casos:
1°. Cuando los recursos interpuestos hubieran sido resueltos y no existieren otros disponibles
en el caso.
2°. Cuando las partes los consintieran expresamente.
3°. Cuando se hubiera dejado que transcurriera el plazo de impugnación sin interponer el
correspondiente recurso.

Cosa juzgada

Art. 230.- La cosa juzgada se extiende a las pretensiones de la demanda y de la reconvención


y comprenderá todos los hechos anteriores al momento en que hubieran precluído las alegaciones
de las partes.

La cosa juzgada afectará a las partes del proceso en que se dicte y a sus sucesores; y se puede
extender a los terceros cuyos derechos dependen de los de las partes, si hubieran sido citados a raíz
de la demanda

Efecto de la cosa juzgada en otro proceso

Art. 231.- La cosa juzgada impedirá, conforme a la ley, un ulterior proceso entre las mismas
partes sobre la misma pretensión.

Sin embargo los pronunciamientos que han pasado en autoridad de cosa juzgada vincularán al
tribunal de un proceso posterior cuando en éste aparezcan como antecedente lógico de lo que sea
su objeto, siempre que las partes de ambos procesos sean las mismas o la cosa juzgada se haya de
extender a ellas por disposición legal.

CAPÍTULO SÉPTIMO
NULIDAD DE LAS ACTUACIONES PROCESALES

Principio de especificidad

Art. 232.- Los actos procesales serán nulos sólo cuando así lo establezca expresamente la ley.
No obstante, deberán declararse nulos en los siguientes casos:
a) Si se producen ante o por un tribunal que carece de jurisdicción o competencia que no
pueda prorrogarse.

116
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

b) Si se realizan bajo violencia o intimidación o mediante la comisión de un acto delictivo.


c) Si se han infringido los derechos constitucionales de audiencia o de defensa.

CÁMARA DE LA TERCERA SECCIÓN DEL CENTRO, SAN VICENTE


Referencia JEM-11-2011 de fecha ocho de septiembre de dos mil once.

“En el presente caso, la señora Juez A Quo convocó a ambas partes para que
comparecieran a la Audiencia de Prueba, tal como se ha demostrado con las actas
señaladas y además se puede establecer con la llegada tardía a la Audiencia de la
señora Apoderada del [demandado], ya que se presentó a las diez horas y quince
minutos después que la Audiencia había comenzado y en ese escrito de folios[…]
confiesa dicha Apoderada General Judicial del [demandado], que fue debidamente
citada para asistir a la Audiencia de Prueba:”Que habiéndoseme notificado
Audiencia de Prueba por este Juzgado, para el día quince de Marzo a las nueve
de la mañana del presente año, lo cual se me hace imposible asistir, pues para
ese mismo día y hora tengo un examen de conocimientos de la Honorable Corte
Suprema de Justicia, aplicar a una plaza en los Juzgados de lo Civil y Mercantil,
lo que compruebo con fotocopia certificada de tarjeta extendida por la Unidad
Técnica de la Corte Suprema de Justicia, donde consta el día y la hora del examen
antes mencionado, de lo que estoy muy interesada ; por lo que con el debido respeto
le solicito se suspenda la Audiencia de Prueba y se señale nueva fecha para la
realización de la misma.
Por medio del auto de folios[…] le fue declarada sin lugar su solicitud a la Licenciada
antes mencionada por ser una solicitud extemporánea, ya que lo procedente hubiera
sido hacerla con la anticipación debida al Juzgado para que hubiera tiempo de
resolver y notificar a ambas partes y no presentar el escrito cuando ya había pasado
la Audiencia de Prueba.
Realmente, sobre el único punto alegado por el [apoderado del demandado] o sea
el de que se haya configurado una nulidad por indefensión por la falta de asistencia
de la Apoderada del [demandado] y de éste a la Audiencia Probatoria celebrada
a las nueve horas del día quince de Marzo de dos mil once en el Juzgado de lo
Civil de San Vicente en el presente proceso, este Tribunal no comparte el criterio
sostenido por el peticionario, por cuanto la parte demandada fue legalmente citada
para asistir a dicha Audiencia y no tiene ninguna causal legal probada con la que
pueda acreditar su falta de asistencia por falta de citación.”
Principio de trascendencia

Art. 233.- La declaratoria de nulidad no procede, aun en los casos previstos en la ley, si el
acto, aunque viciado ha logrado el fin al que estaba destinado, salvo que ello hubiere generado la
indefensión a cualquiera de las partes.

CÁMARA SEGUNDA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, SAN SALVADOR, Apelación Referencia 80-4CM-12-R de fecha
veintisiete de septiembre de dos mil doce.

“La nulidad, en derecho procesal, constituye una sanción que priva al acto de sus
efectos normales, y dependiendo de la mayor o menor trascendencia de la falta,

117
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

se puede viciar un solo acto o producir efectos en una serie de ellos o en todo el
proceso. Al regular la nulidad de las actuaciones procesales, el legislador en el
Código Procesal Civil y Mercantil contempla los principios que las regulan, los
cuales son: especificidad, trascendencia, y conservación, los cuales han de estimarse
en conjunto, por su carácter complementario.

El principio de especificidad, hace Referencia a que no hay nulidades sin texto legal
expreso, es decir, que no puede declararse nulo un acto, a no ser que la ley sancione
dicho vicio con nulidad. El legislador ha optado por un número abierto de causales
de nulidad; ya que además de los supuestos expresamente contemplados en distintas
disposiciones del Código Procesal Civil y Mercantil, reconoce que los actos deberán
declararse nulos también en las situaciones previstas en los literales a), b) y c)
del Art. 232 CPCM, siendo aplicable al caso que nos ocupa el literal c) del citado
artículo, pues se discute la vulneración a una de las garantías constitucionales
más importantes: la del debido proceso con sus secuelas de la garantía de defensa,
petición, prueba e igualdad ante los actos procesales.

El principio de trascendencia, en virtud del carácter no ritualista del derecho procesal


moderno, establece que para que exista nulidad no basta la sola infracción a la norma,
sino que debe producirse perjuicio efectivo a la parte, tal como lo reconoce el Art. 233
CPCM. Por su parte, el principio de conservación procura la conservación de los actos
procesales independientes del acto viciado, Art. 234 CPCM.

El Art. 236 CPCM, regula lo relativo al principio de convalidación, aplicable


a los casos de nulidades subsanables. Este principio establece que ante una
nulidad subsanable, la parte afectada tiene la posibilidad de ratificar la misma, o
“convalidada”en los términos establecidos; la consecuencia de tal acto es dotarlo
de los efectos jurídicos que se pretendían ab initio con su producción. Ello no podría
darse en el caso discutido, puesto que la violación a la legalidad es insubsanable.

En el caso de autos, consta a fs. […]de la p.p., emplazamiento realizado a la señora


[…], en dicha acta, consta que fue realizada por el notificador del juzgado y que se
le dejo a la demandada copia de la demanda y anexos, constando de un total de […]
folios, emplazamiento que fue realizado el veinticuatro de agosto de dos mil doce; el
emplazamiento, es el que tiene por objeto situar en un plano de igualdad jurídica a
las partes, para que estas puedan ser oídas en sus respectivas pretensiones, defensas
y excepciones. Por lo que puede afirmarse que el emplazamiento debidamente
efectuado constituye uno de los actos indispensables en todo tipo de proceso,
pues al mismo tiempo posibilita el ejercicio de derecho de audiencia y defensa,
si el emplazamiento no es realizado en legal forma este tiene como consecuencia
la nulidad del mismo, en el caso de marras consta en el acta de emplazamiento
agregada a fs. […] de la p.p., a la demandada no se le notificó la ampliación de la
demanda, sino únicamente la demanda y documentos anexos, por lo tanto al no tener
conocimiento de la ampliación que corre agregada a fs. […] de la p.p., esta no pudo
preparar sus argumentos de defensa respecto a los nuevos hechos, violentando así su
derecho constitucional de audiencia y defensa e igualdad procesal, por lo expuesto,
es procedente acceder a lo solicitado por el recurrente y anular el emplazamiento
realizado por la Juez A Quo y todo lo que fuere su consecuencia, debiendo reponerse

118
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

el proceso. Habiéndose probado la nulidad del emplazamiento esta Cámara no


entrara conocer los demás puntos alegados por el recurrente.”

Principio de conservación

Art. 234.- La nulidad de un acto no implicará la de los sucesivos que hubieren independientes
de aquél cuyo contenido no pudiere haber sido distinto, en caso de no haberse cometido la
infracción que dio lugar a la nulidad.

La nulidad de una parte de un acto no afectará a las demás del mismo acto que sean
independientes de aquélla.

Denuncia de nulidad

Art. 235.- Cuando la ley expresamente califique de insubsanable una nulidad, ésta podrá ser
declarada, de oficio o a petición de parte, en cualquier estado del proceso.

Si la nulidad fuere calificada como subsanable, la misma sólo podrá ser declarada a petición
de la parte que ha sufrido perjuicio por el vicio.

Convalidación del acto viciado

Art. 236.- Si se tratare de nulidad subsanable, la parte afectada podrá convalidar el acto
viciado, expresa o tácitamente.

Existe convalidación tácita cuando la parte afectada no denuncia el vicio en el plazo de cinco
días hábiles luego del conocimiento del acto viciado.

CÁMARA SEGUNDA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, SAN SALVADOR, Apelación Referencia N°41-4CM-12-A de fecha
veinticinco de mayo de dos mil doce.

“Respecto a la nulidad invocada, esta cámara considera, que las nulidades por su
gravedad se clasifican en insubsanables y subsanables. Las primeras son aquellas
en las que falta un requisito tan grave que cualquier sujeto, en cualquier tiempo y
forma, puede poner de manifiesto, sin sujeción a límites jurídicos especiales y en las
cuales no existe posibilidad de convalidación; Las segundas se dan cuando el acto
procesal padece de un vicio de menor gravedad, el cual puede ser convalidado de
forma expresa o tacita y su ineficacia solo puede ser alegada por el afectado.

Para que proceda la nulidad de los actos procesales sean de cualquier tipo
(insubsanables o subsanables) debemos apegarnos a los principios que las rigen,
que son: a) especificidad, establece que no es posible (por regla general) declarar la
nulidad sin texto legal que la respalde, Art. 232 CPCM; b) trascendencia, establecido
en el Art. 233 CPCM, mediante el cual no solo es necesaria la infracción a la norma
para declarar la nulidad, sino que dicha violación produzca un perjuicio en la parte,
es decir, que para que exista nulidad debe comprobarse la indefensión y el perjuicio
sufrido; y c) conservación, establecido en el Art. 234 CPCM, que todos los actos
procesales que no estén relacionados al acto viciado (independientes) deben ser
preservados.

119
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

En el caso de autos el licenciado […], apoderado del [demandado], pretende se


declare la nulidad del proceso de conformidad al Art. 232 literal c) CPCM, por
violación de los Arts. 183 inciso segundo CPCM, ya que la señora [...], demandada
en su calidad de fiadora y codeudora solidaria, fue emplazada a través de su menor
hija, lo cual demuestra con la certificación de partida de nacimiento que agregó a su
escrito de Apelación.

Sin embargo, a pesar de que aparentemente se cumplen los requisitos para que
opere la declaratoria de nulidad; por estar en presencia de una nulidad subsanable,
de conformidad al Art. 235 Inc. 2 CPCM, el expresado profesional carece de
interés legitimo para promover dicha nulidad ya que tal como consta en el poder
general judicial agregado de folios […] del incidente de Apelación, representa al
[demandado], mas no a la señora [...] quien es la única afectada por dicho acto y
siendo que las nulidades subsanables solo pueden ser promovidas exclusivamente
por aquellas personas a quienes el acto realizado ha perjudicado, no puede ser
alegada por nadie más.

Esta cámara considera que de conformidad al Art. 236 CPCM, la parte que ha
sufrido un acto viciado de nulidad subsanable, podrá convalidarlo de forma expresa
o tacita. En el caso que nos ocupa si bien es cierto en el emplazamiento de la señora
[...], se incumplieron los requisitos exigidos por la ley, dicho acto fue realizado en
su lugar de residencia, mismo lugar donde se le notifico la sentencia pronunciada
por el Juez A Quo así como el auto de admisión del recurso y la convocatoria a la
audiencia de Apelación, pronunciado por este tribunal y habiendo dejado transcurrir
el plazo de cinco días, sin haber reclamado la invalidación del acto viciado, por
mandato de ley se considera convalidado, Art. 236 Inc. 2 CPCM. Motivo por el cual
tampoco es procedente acceder a la declaratoria de nulidad solicitada.”

Vía procesal para la denuncia de nulidad

Art. 237.- La nulidad subsanable que afecta a la admisión de la demanda se debe reclamar al
contestar la misma.

La nulidad subsanable que afecta a las resoluciones dictadas en el desarrollo del proceso o a
otros actos procesales, deberá denunciarse en el plazo de cinco días posteriores al conocimiento
fehaciente del acto y se resolverá previa audiencia por cinco días a la parte contraria.

Si se estimare que la denuncia y declaración de nulidad hacen imposible el aprovechamiento


de los actos procesales posteriores se acordará que el proceso se retrotraiga al estado en que se
encontraba en el momento de incurrirse en el vicio.

Cuando la denuncia fuera desestimada, será condenado en costas el que la hubiera planteado,
pero se podrá introducir nuevamente por medio de los recursos que existieren contra la resolución
definitiva.

Declaratoria de nulidad en recurso

Art. 238.- El Tribunal al que le corresponda pronunciarse sobre un recurso deberá observar si
se ha hecho valer en el escrito de interposición la nulidad de la sentencia o de actos de desarrollo
del proceso, o si se ha incurrido en alguna nulidad insubsanable. (2)

120
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

Si se hubiera denunciado nulidad, el tribunal que decida el recurso deberá pronunciarse


inicialmente sobre la misma, y sólo en caso de desestimarse entrará a resolver sobre otros agravios
alegados por el recurrente.

Si se estimare la denuncia de nulidad y su declaración hiciere imposible el aprovechamiento


de los actos procesales posteriores, se acordará que el proceso se retrotraiga al estado en que se
encontraba en el momento de incurrirse en el vicio.

CÁMARA TERCERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, SAN SALVADOR, Sentencia de Apelación Referencia N°214-
EMQCM-14 de Fecha: veinticuatro de septiembre de dos mil catorce.

“En suma pues, esta Cámara considera que con la certificación de la partida de
defunción de […] se ha establecido que falleció el veintiséis de noviembre de dos
mil trece, por lo que, el catorce de enero de dos mil catorce en que se practicó
la notificación del decreto de embargo y demanda que lo motiva que equivale
al emplazamiento según acta de fs. […]., ya no existía la parte notificada, en
consecuencia, deberemos declarar la nulidad de dicho acto de comunicación
procesal respecto de la señora […], así como la sentencia pronunciada a las catorce
horas cinco minutos de once de febrero del presente año, y ordenarle a la señora
Jueza A-quo que reponga las actuaciones desde donde corresponda; y así se hará.”

CÁMARA DE LA SEGUNDA SECCIÓN DE OCCIDENTE Sentencia de


Apelación Referencia N°INC-29-CPCM-2011 de Fecha: veinticuatro de abril de
dos mil doce.

“Que en el caso de vista, consta que la parte actora en su demanda manifestó que
la demandada […], podía ser emplazada en […]; también consta que cuando el
notificador del Juzgado de Paz de Ilopango se hizo presente en dicha dirección a
efecto de emplazarla, no se encontró a la demandada, sino que a una señora que dijo
llamarse […], quien manifestó ser inquilina de la [demandada], la que le expresó
al notificador que la documentación se la podía dejar en su poder, procediendo
el notificador a entregarle copia de la demanda, resoluciones y documentación
anexa; que dicha señora se comprometió a entregar a la demandada la expresada
documentación. Que realizado de esa manera el emplazamiento, el Juez A Quo
estimó que el mismo fue hecho en legal forma, por lo que el emplazamiento era
válido, por consiguiente continuó con el trámite del proceso ejecutivo en mención.
Que esta Cámara considera que el emplazamiento realizado a la demandada […], no
es válido, y por lo tanto los actos posteriores realizados al mismo hasta la sentencia
pronunciada, tampoco no son válidos; ello porque se le ha violentado a la demandada
su derecho de audiencia y defensa en juicio; esto porque al no ser localizada en la
dirección proporcionada por la parte actora para ser emplazada; el Juez A Quo
debió hacerlo del conocimiento de ésta, a fin de que a instancia de ella, solicitara
seguir el trámite preliminar denominado como “Diligencias de Localización del
Demandado”, según el Art. 181 inciso 2º del Código Procesal Civil y Mercantil;
y si el resultado de estas fuere negativo para la obtención de alguna dirección
útil, sea domicilio o lugar de su residencia para emplazar a dicha demandada, el
emplazamiento de ésta debería practicarse en la forma indicada en el emplazamiento

121
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

por edicto, tal y como lo prescribe el Art. 186 del mismo cuerpo de ley citado; y si la
demandada no compareciere en el plazo estipulado en dicha disposición, se procediera
a nombrársele un curador ad litem para que la representara en el proceso Que en el
caso de vista, consta que la parte actora en su demanda manifestó que la demandada
[…], podía ser emplazada en […]; también consta que cuando el notificador del Juzgado
de Paz de Ilopango se hizo presente en dicha dirección a efecto de emplazarla, no se
encontró a la demandada, sino que a una señora que dijo llamarse […], quien manifestó
ser inquilina de la [demandada], la que le expresó al notificador que la documentación
se la podía dejar en su poder, procediendo el notificador a entregarle copia de la
demanda, resoluciones y documentación anexa; que dicha señora se comprometió a
entregar a la demandada la expresada documentación. Que realizado de esa manera
el emplazamiento, el Juez A Quo estimó que el mismo fue hecho en legal forma, por lo
que el emplazamiento era válido, por consiguiente continuó con el trámite del proceso
ejecutivo en mención.Que esta Cámara considera que el emplazamiento realizado a la
demandada […], no es válido, y por lo tanto los actos posteriores realizados al mismo
hasta la sentencia pronunciada, tampoco no son válidos; ello porque se le ha violentado
a la demandada su derecho de audiencia y defensa en juicio; esto porque al no ser
localizada en la dirección proporcionada por la parte actora para ser emplazada; el
Juez A Quo debió hacerlo del conocimiento de ésta, a fin de que a instancia de ella,
solicitara seguir el trámite preliminar denominado como “Diligencias de Localización
del Demandado”, según el Art. 181 inciso 2º del Código Procesal Civil y Mercantil; y
si el resultado de estas fuere negativo para la obtención de alguna dirección útil, sea
domicilio o lugar de su residencia para emplazar a dicha demandada, el emplazamiento
de ésta debería practicarse en la forma indicada en el emplazamiento por edicto, tal
y como lo prescribe el Art. 186 del mismo cuerpo de ley citado; y si la demandada no
compareciere en el plazo estipulado en dicha disposición, se procediera a nombrársele
un curador ad litem para que la representara en el proceso.”

CÁMARA SEGUNDA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, SAN SALVADOR Sentencia de Apelación N°46-4CM-14-A de fecha:
veintitrés de julio de dos mil catorce.

“De la lectura de la documentación relacionada, se concluye que en la fecha en que


se emplazo a la Sociedad demandada a través del señor […], éste ya no ostentaba
el cargo, de representante legal de la sociedad demanda, por lo que es evidente
que dicho emplazamiento y la consiguiente notificación de la sentencia definitiva,
pronunciada en el proceso, no se hizo a través de una de las personas que señala el
Art. 189 CPCM, por cuanto a quien se emplazará es una persona jurídica.

Consideramos que en el caso de autos, los hechos planteados por el apelante


como motivos de nulidad si han infringido los derechos de audiencia y defensa de
la Sociedad demandada, ya que al no haber sido debidamente emplazada no pudo
comparecer en el proceso a manifestar su defensa, trayendo como consecuencia que
se pronunciara una sentencia violatoria de sus derechos.

En ese sentido, es evidente que en el caso sub judice el Juez Aquo, al realizar el
emplazamiento a través de una persona que no ostentaba la representación legal
de la Sociedad demandada, violento su derecho de defensa, ya que al no haber

122
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

sido debidamente emplazado no pudo intervenir en el proceso; la violación al


derecho de defensa, se encuentra sancionada con nulidad, Art. 232 lit. c) CPCM,
configurándose con ello el principio de especificidad; así también al no haberse
permitido a la Sociedad demandada manifestar su defensa, se le ha producido un
perjuicio, configurándose el Principio de trascendencia, lo cual es motivo para
declarar la nulidad.

Habiéndose configurado los supuestos establecidos en los Arts. 232 literal c), 233 y
238 CPCM es procedente acceder al agravio señalado por el apelante.”

CÁMARA SEGUNDA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, SAN SALVADOR, Apelación N°69-4CM-13-A de fecha: dieciséis de
septiembre de dos mil trece.

“Es importante acotar que tal como lo señala el Juez A Quo, la juez interina que
presidía el tribunal al momento de declarar nulo el emplazamiento se excedió en
sus funciones, pues si bien es cierto se produjo una nulidad dentro del proceso, el
límite temporal para declarar tal circunstancia finalizó para el tribunal de primera
instancia al momento en que pronunció Sentencia, quedando únicamente la
posibilidad de corregir tal error por parte el tribunal Ad quem en el conocimiento del
recurso pertinente, el cual ante la negligencia de la parte actora se vio imposibilitada
de pronunciarse al respecto en aquel momento, sin embargo, habiéndose habilitado
la competencia de esta Cámara en virtud de la Apelación que nos ocupa, es que se
procederá a declarar la nulidad comentada.”

LIBRO SEGUNDO
LOS PROCESOS DECLARATIVOS

TÍTULO PRIMERO
DISPOSICIONES COMUNES

CAPÍTULO PRIMERO
CLASES DE PROCESOS DECLARATIVOS

Clases de procesos declarativos

Art. 239.- Toda pretensión que se deduzca ante los Tribunales Civiles o Mercantiles, y que
no tenga señalada por la ley una tramitación especial, será decidida en el proceso declarativo que
corresponda por razón de la materia o por razón de la cuantía del objeto litigioso.

Las normas de determinación de la clase de proceso por razón de la cuantía sólo se aplicarán
en defecto de norma por razón de la materia.

Pertenecen a la clase de los procesos declarativos:


1°. El proceso común.
2°. El proceso abreviado.

123
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

Ámbito del proceso común

Art. 240.- Se decidirán por los trámites del proceso común, cualquiera que sea su cuantía.

Las demandas en materia de competencia desleal, propiedad industrial, propiedad intelectual y


publicidad, siempre que no versen exclusivamente sobre reclamaciones de cantidad, en cuyo caso
se tramitarán por el procedimiento que les corresponda en función de la cuantía que se reclame.

Se decidirán también en el proceso común las demandas cuya cuantía supere los Veinticinco
Mil Colones o su equivalente en Dólares de los Estados Unidos de América, y aquellas cuyo
interés económico resulte imposible de calcular, ni siquiera de modo relativo.

SALA DE LO CIVIL DE LA CORTE SUPREMA DE JUSTICIA: en Sentencia


de fecha trece de diciembre de dos mil trece, con Referencia 141-CAC-2012

“…en el Art. 17 inc. 10 C. Pr. C. y M. que a su letra reza: “Los procesos y


procedimientos civiles y mercantiles se tramitarán conforme a lo dispuesto en este
código ... “Al respecto, dos son las clases de procesos declarativos que señala dicha
normativa, común y abreviado, su ámbito de aplicación se encuentra regulado en
los Arts. 240 Y 241 C. Pro C. y M., respectivamente, para los cuales el juzgador,
previo a su aplicación, debe tener clara la regla general establecida en el inciso
segundo del Art. 239 del mencionado cuerpo de ley, en cuanto a la prevalencia de
la competencia objetiva en razón de la materia sobre la cuantía; es decir, aquella
deberá ser la primera a valorar por el aplicador de la ley. Respecto del proceso
común las materias que establece son: 1. competencia desleal, 2. propiedad
industrial, 3. propiedad intelectual y, 4. publicidad, haciendo la salvedad que estas
materias no deben versar exclusivamente sobre reclamaciones de dinero; a su
vez, establece el artículo respectivo que se tramitarán por proceso común: 5. las
demandas cuya cuantía supere los veinticinco mil colones y, 6. aquellas cuyo interés
económico resulte imposible de calcular. Por su parte el ámbito de aplicación del
proceso abreviado son: a. las demandas cuya cuantía no supere los veinticinco mil
colones, así como: b. las demandas de liquidación de daños y perjuicios, c. oposición
a la reposición judicial de títulos valores, d. disolución y liquidación de sociedades
y, e. nulidad de las sociedades…”

Ámbito del proceso abreviado

Art. 241.- Se decidirán por los trámites del proceso abreviado las demandas cuya cuantía no
supere los Veinticinco Mil Colones o su equivalente en Dólares de los Estados Unidos de América.

Además, se decidirán por este trámite, cualquiera que sea su cuantía:


1°. Las demandas de liquidación de daños y perjuicios.
2°. Las demandas de oposición a la reposición judicial de títulos valores.
3°. Las demandas relativas a la disolución y liquidación judicial de una sociedad.
4°. Las demandas de nulidad de sociedades.

Determinación del valor de la pretensión

Art. 242.- El valor de la pretensión se fijará según el interés económico de la demanda, que se
calculará de acuerdo con los criterios siguientes:

124
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

1°. Si se reclama una cantidad de dinero determinada, la cuantía de la demanda estará


representada por dicha cantidad, y si falta la determinación, aun en forma relativa, la
demanda se considerará de cuantía indeterminada.
2°. Cuando el proceso tenga por objeto dar bienes muebles o inmuebles, se estará al valor de
los mismos al tiempo de interponerse la demanda, conforme a los precios corrientes en
el mercado o en la contratación de bienes de la misma clase, con independencia de que la
reclamación se base en derechos reales o en derechos personales.
3°. En los procesos sobre el derecho a exigir prestaciones periódicas, sean temporales o
vitalicias, se calculará el valor por el importe de una anualidad multiplicado por diez,
salvo que el plazo de la prestación fuera inferior a un año, en cuyo caso se estará al
importe total de la misma.
4°. En los procesos que versen sobre la existencia, validez o eficacia de un título obligacional,
su valor se calculará por el total de lo debido, aunque sea pagadero a plazos. Este
criterio de valoración será aplicable en aquellos procesos cuyo objeto sea la creación,
modificación o extinción de un título obligacional o de un derecho de carácter personal,
siempre que no sea aplicable otra regla de este artículo.
5°. Cuando la demanda tenga por objeto una prestación de hacer, su cuantía equivaldrá al coste
de aquello cuya realización se determine, o en el importe de los daños y perjuicios derivados
del incumplimiento, sin que en tal caso sean acumulables ambas cantidades, salvo si además
de determinarse el cumplimiento se pretendiera también la indemnización. El cálculo de los
daños y perjuicios habrá de ser tenido en cuenta cuando la prestación sea personalísima o
consista en un no hacer, aún si lo que se pretende con carácter principal es el cumplimiento.
6°. Cuando se reclamen varios plazos vencidos de una misma obligación se tomará en cuenta,
como cuantía, la suma de los importes reclamados, salvo si se ha pedido en la demanda
declaración expresa sobre la validez o eficacia de la obligación, en cuyo caso se estará al
valor total de la misma. Si el importe de alguno de los plazos no fuera cierto, se excluirá
éste del cómputo de la cuantía.

Determinación del valor en caso de acumulación

Art. 243.- Cuando en la demanda se acumulen varias pretensiones principales, la cuantía


de la demanda vendrá determinada por la suma de todas ellas, salvo que las pretensiones estén
acumuladas de forma eventual, en cuyo caso se determinará atendiendo a la de mayor valor.

Si con la pretensión principal se piden accesoriamente intereses, frutos, rentas o daños


y perjuicios, la cuantía vendrá determinada por la suma del valor de todas las pretensiones
acumuladas. Para la fijación del valor no se tomarán en cuenta los frutos, intereses o rentas por
correr, sino sólo los vencidos.

Cuando en una misma demanda se acumulen varias pretensiones reales referidas a un mismo
bien mueble o inmueble, la cuantía nunca podrá ser superior al valor de la cosa litigiosa.

Carácter de las normas sobre procedimiento adecuado

Art. 244.- Las normas referentes a la clase de proceso en el que habrá de sustanciarse una
pretensión tienen carácter imperativo y podrán ser consideradas de oficio por el Juez, pero no
procederá la declaración de nulidad cuando se hubiera tramitado según el procedimiento común.
Si se considerase que el proceso determinado por el demandante no corresponde al valor señalado
o a la materia a la que se refiere la demanda, el Juez dará al asunto la tramitación que corresponda.

125
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

El demandante expresará en su escrito inicial, con la justificación del caso, la cuantía de la


demanda, y podrá hacerlo en forma relativa, si Justifica debidamente que el interés económico al
menos iguala la cuantía mínima correspondiente al proceso común, o que no rebasa la máxima del
abreviado.

La alteración del valor de los bienes que sea posterior a la interposición de la demanda no
implicará la modificación de la cuantía ni la de la clase de proceso.

CÁMARA SEGUNDA DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL CENTRO, Apelación


Referencia 72-3CM-14-A, de fecha diecisiete de noviembre de dos mil catorce.

“En relación a la reconducción de los procesos por parte de los jueces por haber
utilizado la parte demandante la vía procesal errónea, el Art. 244 inc. 1° pte. 2ª del
CPC; establece: “Si se considerase que el proceso determinado por el demandante
no corresponde al valor señalado o a la materia a la que se refiere la demanda, el
juez dará al asunto la tramitación que corresponda.”
La norma citada es de carácter imperativo y fija la obligación judicial oficiosa de
examinar la correcta elección del proceso, hecho inicialmente por la parte actora,
su consecuencia es que el juzgador es obligado expresamente por la ley a iniciar y
tramitar las pretensiones tomando en cuenta la materia y el valor de las pretensiones,
instaurándose una causa legal de subsanación de pleno derecho cuando las partes
incurran en traspié al invocar la vía procesal errónea.
Debido a que el juzgador es quien examina in limine el escrito de demanda, le
corresponde también examinar la elección correcta del proceso, consecuencia de
ello y bajo el principio Iura Novit Curia, tiene la obligación de encausar a las partes
sobre el proceso adecuado.”
Impugnación de la clase de proceso y de la cuantía

Art. 245.- El demandado podrá impugnar la clase de proceso que hubiera planteado el
demandante cuando entienda que, de haberse determinado aquélla en forma correcta, el proceso
sería diferente, porque deba tramitarse como un proceso especial o como otro declarativo, por
razón de la materia o de la cuantía.

En el proceso común sé impugnará la adecuación del procedimiento por razón de la cuantía en


la contestación de la demanda, y la cuestión será resuelta en la audiencia preparatoria.

En el proceso abreviado, el demandado impugnará la cuantía o la clase de proceso en la


audiencia, y el Juez resolverá la cuestión en el acto, oído el demandante y antes de entrar en el
fondo del asunto.

CAPÍTULO SEGUNDO
EL ACTO DE CONCILIACIÓN

Competencia

Art. 246.- Antes de promover un proceso, y con el objeto de evitarlo, las partes podrán
intentar la conciliación. Dichos actos tendrán lugar ante el Juzgado de Paz competente, conforme a
las reglas generales establecidas en este código.

126
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

SALA DE LO CONSTITUCIONAL DE LA CORTE SUPREMA DE JUSTICIA:


en Sentencia de Inconstitucionalidad de fecha catorce de diciembre de dos mil once,
con Referencia 46-2010/55-2010/72-2010/73-2010/75-2010/81-2010

“…Nuestro Código Procesal Civil y Mercantil no contiene un concepto legalmente


definido del acto de conciliación debido a su vocación de generalidad, sino que
únicamente establece su objeto: evitar el proceso –Art. 246 C.Pr.C.M.–; no obstante
ello, podemos caracterizarla como una asistencia voluntaria o potestativa de las
partes en disputa de intereses frente al juez, para que ante su presencia intenten
solucionar el conflicto de intereses que los puede llevar al litigio. En ese orden de
ideas, es importante determinar la naturaleza de tal acto, en aras de establecer si
es o no pertinente dotarle de ciertas garantías procesales como si se tratara de un
juicio estrictamente -como la procuración obligatoria-, que no intenta subordinar a
un sujeto a la pretensión de otro, sino que, avenir o congeniar las ideas de ambas
partes para llegar a una solución de común acuerdo. Y es que, mucho se ha discutido
si la conciliación constituye un verdadero proceso, si es parte del proceso que se
generaría de no llegar las partes a un acuerdo, o si se trata de un acto de jurisdicción
voluntaria; ello es determinante, pues, si dicha figura no constituye estrictamente un
litigio, porque no hay en ella contradicción, debe valorarse la necesidad del ejercicio
de una defensa técnica y efectiva. La configuración legal en materia civil y mercantil de
la referida figura – facultativa para las partes, que no están sometidas a la obligación
de intentarla para dar inicio al proceso–, le otorga todas las características de un acto
voluntario, que se caracteriza por la no contradicción. Por el carácter no litigioso del
acto, en muchas ocasiones se prescinde de la actuación judicial. Ahora bien, cuando
existe alguna intervención del juez, lo hace desprovisto de su potestad jurisdiccional,
pues aun cuando ejerce –en el caso de nuestro ordenamiento jurídico– un papel activo
e incluso propositivo, sigue siendo un mediador cuya función es posibilitar el acuerdo
entre las partes, homologarlo y convalidarlo. En ese sentido, si se produce avenencia, es
por acción de las partes –autonomía de la voluntad–, que son los personajes centrales de
tales diligencias –Art. 251 C.Pr.C.M.–. Como se ha expuesto, los sujetos principales del
acto de conciliación son las partes –solicitante y la persona solicitada para conciliar–,
cuya finalidad es llegar a un acuerdo rápido, económico que evite la confrontación y la
controversia jurisdiccional. 2. En ese sentido, la conciliación preprocesal es un método
alterno de solución de conflictos autocompositivo, que aun cuando se desarrolla en
sede judicial, no tiene un carácter jurisdiccional, sino que más bien, tiene la naturaleza
de un acto voluntario, de tal manera que en ella el juez interviene únicamente como
un conciliador que, además de procurar la equidad en las soluciones aportadas por
las partes para resolver el conflicto, da fe de la decisión tomada por las partes, es
decir, homologa y convalida el acuerdo al que ellas voluntariamente han llegado. En
relación con lo anterior es preciso dejar en claro que, no obstante la conciliación no
es un procedimiento con carácter jurisdiccional, ello no implica que el documento que
contiene el acuerdo conciliatorio carezca de fuerza ejecutiva. En tal sentido resulta
pertinente lo expuesto por este Tribunal en la sentencia de 8-XII-2006, pronunciada en el
proceso de Inc. 19-2006. Así, aun cuando la conciliación se lleva a cabo en sede judicial,
debido a las características expuestas a lo largo de la presente, es evidente que tal figura
no requiere de todas las garantías que sí son esenciales al proceso jurisdiccional. Y es
que, desde este punto de vista, el proceso, a diferencia de la conciliación, es un sistema

127
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

reglado de discusión entre dos personas con intereses contrapuestos, colocados en un


plano de absoluta igualdad jurídica, frente a un tercero que tiene como función definir
los derechos invocados, es decir, que les impone una decisión, por lo que es necesario
que se rodee de ciertas garantías que permitan a las partes ser asesoradas y conocer
los alcances de las normas y doctrinas que el juzgador aplica al imponerles la solución
del conflicto, así como el alcance de tal decisión respecto de su patrimonio y sus demás
derechos fundamentales…”

Materias excluidas de la conciliación

Art. 247.- No podrá intentarse la conciliación respecto de las materias que den origen a:
1°. Los procesos en que estén interesados el Estado y las demás administraciones públicas,
así como corporaciones o instituciones de igual naturaleza. También quedan exceptuados
aquellos procesos en los que, siendo parte el Estado, intervenga junto a éste personas
privadas, como parte principal o coadyuvante.
2°. Los procesos en que estén interesados los incapaces.
3°. En general, los procesos que no pueda ser objeto de dicho trámite, por así establecerlo la
ley, y los que se promuevan sobre materias no susceptibles de transacción ni compromiso.

Solicitud de conciliación

Art. 248.- La conciliación se pedirá mediante solicitud escrita dirigida al Juez competente, en
la que se harán constar los siguientes extremos:

1°. Los datos personales del solicitante y de los demás interesados, así como sus domicilios
respectivos.
2°. Enumeración clara y concreta de los hechos sobre los que verse su petición y cuantía
económica, si fuere de esta naturaleza.
3°. Fecha y firma.

A la solicitud se acompañarán los documentos en que el solicitante estime fundado su derecho.


Tanto del original como de los documentos que se acompañen se entregarán tantas copias como
partes interesadas haya, más una.

Registro de la solicitud. Trámite de admisión

Art. 249.- Una vez presentada la solicitud, se registrará inmediatamente en el libro que se
lleve al efecto, abriéndose con ella el correspondiente expediente, Sin dilación se procederá a
examinar si reúne los requisitos exigidos, pudiéndose solicitar las aclaraciones que sean necesarias
o conceder plazo para la subsanación de los defectos, el cual no será de más de cinco días.
Si la solicitud reuniera los requisitos exigidos, o se hubiesen realizado las aclaraciones o
subsanados los defectos en tiempo y forma, se procederá a su admisión. Si los requisitos fueran
insubsanables, o no se procediera a la aclaración o subsanación de los defectos en el plazo
concedido, se archivará el expediente sin que la mera presentación de la solicitud produzca efectos.
Presentada la solicitud de conciliación, si se acepta producirá el efecto de interrumpir la
prescripción. En el caso de derechos sometidos a plazo de prescripción, se tendrá por terminado
el procedimiento y cumplido el trámite si transcurren treinta días sin que se celebre el acto de
conciliación.

128
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

Citación para audiencia

Art. 250.- El tribunal, en el mismo acto en que admita la solicitud, mandará citar a las partes,
con entrega de las copias aportadas y señalamiento de día y hora para la audiencia, debiendo
procurar que se verifique dentro de la mayor brevedad posible y siempre durante los veinte días
siguientes.

Entre la citación y la audiencia deberán mediar al menos veinticuatro horas, término que podrá
ser reducido por el Juez si hubiese causa justa para ello.

Asistencia a la audiencia

Art. 251.- La asistencia al acto de conciliación es obligatoria para las partes o sus
representantes. Si, estando debidamente citadas las partes, no compareciere el solicitante, ni alegare
causa justa, se tendrá por no presentada la solicitud, debiéndose archivar todo lo actuado. Si no
compareciere la otra parte, y tampoco alegare justa causa, se considerará sin efecto la conciliación
intentada. En ambos casos, el no compareciente será condenado en costas; y si no compareciere
ninguno, cada uno abonará las causadas a su instancia y las comunes por mitad.

CÁMARA TERCERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, SAN SALVADOR, Apelación N°57-DNP-15 de Fecha: veintisiete de
mayo de dos mil quince.

“De esta manera, en los procesos civiles y mercantiles es preceptiva la comparecencia


por medio de procurador, es decir, la asistencia técnica a través de un abogado de la
república, sin cuyo concurso no se le dará trámite al proceso, tal como se prevé en
el iterado Art. 67.

En ese sentido, la configuración legal de la referida figura, se convierte en un


presupuesto procesal, sin el cual no es posible que el proceso se lleve a cabo,
es decir, que se convierte en un requisito indispensable para la configuración
constitucional del proceso, ya que es uno de los factores esenciales de los cuales
depende el pleno ejercicio del derecho de defensa, pues nuestro ordenamiento en
materia procesal civil y mercantil proscribe la autodefensa, salvo ciertas excepciones
muy puntuales como la expuesta por la Sala de lo Constitucional en sentencia de
las once horas treinta y un minutos de catorce de diciembre de dos mil once, en el
proceso de Inconstitucionalidad Referencia 46-2010/55-2010/72-2010/73-2010/75-
2010/81-2010 en la que dijo “Así, a la llegada de la nueva legislación, se limitó
la intervención procesal a través del abogado director, y se reguló la procuración
obligatoria, en el sentido de que las partes deben actuar en el proceso a través de
un profesional del derecho, o sea como actualmente lo conocemos, por medio de
apoderado, mandatario o procurador.

(É) la conciliación ante el Juez de Paz comparte la naturaleza de los métodos


alternativos de solución de conflicto auto compositivos, en los que predomina la
autonomía de la voluntad de los sujetos intervinientes, siendo métodos carentes de
contradicción; lo que implica que no se trata del sometimiento de una de las partes
a la pretensión de la otra, sino que buscan un avenimiento de mutuo acuerdo, que
otorgue la posibilidad a las partes de exponer sus puntos de vista para el logro de

129
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

una solución equitativa. En atención a ello, la defensa técnica o la procuración


preceptiva no pueden ser un requisito obligatorio para que las partes accedan
al referido procedimiento. Por tanto, y en atención a lo expuesto, el Art. 252
Ord. 2º C.Pr.C.M. es inconstitucional, puesto que las diligencias de conciliación
llevadas a cabo ante el Juez de Paz, no constituyen, en estricto sentido, un proceso
jurisdiccional –no obstante se desarrollan en sede judicial-y el Juez no ejerce en
tales casos su potestad jurisdiccional.”

Celebración de la audiencia. Resolución

Art. 252.- La audiencia de conciliación se celebrará en la forma siguiente:


1°. El tribunal comprobará la identidad, la capacidad y, en su caso, la representación de las
partes. Asimismo, advertirá a las partes sobre los derechos y obligaciones que pudieran
corresponderles, sin que pueda prejuzgar el contenido de la eventual sentencia en el
proceso posterior.
2°. Las partes serán asistidas por abogados.
3°. Se concederá inicialmente la palabra al solicitante, bien para que confirme su solicitud,
bien para que realice las aclaraciones que estime convenientes respecto de la misma y
pueda manifestar los fundamentos en que la apoye.
4°. Contestará la otra parte, alegando lo que a su derecho convenga.
5°. El Juez concederá la palabra a las partes cuantas veces sea pertinente. Cabe la exhibición
de documentos o la realización de otros medios de prueba que puedan articularse en la
misma audiencia.
6°. El tribunal podrá sugerir soluciones equitativas.

Si no hubiera acuerdo entre las partes, se dará por terminado el acto sin avenencia. Si se
hubiera llegado a un acuerdo, se dará por terminado el acto con avenencia. Si el tribunal estimare
que lo convenido es constitutivo de lesión grave para alguna de las partes, de fraude de ley o de
abuso de derecho, no aprobará el acuerdo.
De lo actuado se extenderá un acta, que será firmada por las partes, sus representantes si los
hubiere, y el Juez. De dicha acta se dará certificación a las partes que la pidieren.
Si concurrieren ambas partes al acto de conciliación y hubiese avenencia, cada parte abonará
sus gastos, y los comunes por mitad. Los gastos de las certificaciones serán del que las pidiere.
Impugnación del acuerdo de conciliación
Art. 253.- El acuerdo de conciliación podrá ser apelado por las partes y por quienes pudieran
sufrir perjuicio por aquél ante el Juzgado competente para conocer del asunto objeto de la
conciliación, por las causas que invalidan los contratos.
La impugnación caducará a los treinta días de aquél en que se adoptó el acuerdo. Para los
posibles perjudicados el plazo contará desde que lo conocieran.
Ejecución
Art. 254.- Lo acordado en conciliación tendrá fuerza ejecutiva entre las partes, y el Juez de
Primera Instancia de la circunscripción en que se celebró podrá llevarlo a efecto, según el trámite
de ejecución de Sentencias.

130
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

CORTE SUPREMA DE JUSTICIA EN CORTE PLENA conflicto de competencia


Referencia 2-COM-2016 de fecha veintiocho de enero de dos mil dieciséis.

“En el caso de autos, es preciso determinar si el documento base de la pretensión


constituye un Título de Ejecución o un Título Ejecutivo, debido a que el primero
daría lugar a un Proceso de Ejecución Forzosa, mientras que el segundo abriría la
posibilidad de instaurar un Juicio Ejecutivo Civil. Abonando al análisis referido,
es necesario traer a cuento que el Art. 41 inciso final de la Ley de Procedimientos
Especiales sobre Accidentes de Tránsito, le confiere fuerza ejecutiva a la Certificación
del Acta de Conciliación, hecho del que podría colegirse que se trata de un Título
Ejecutivo, sin embargo la ley no debe entenderse únicamente analizando su tenor
literal sin enmarcarlo en el resto del ordenamiento jurídico al que pertenece. Es
menester ver las normas en su contexto jurídico, realizando una interpretación
sistemática de las mismas. De tal forma que dicha disposición, debe comprenderse
dentro del marco jurídico que conforman los Arts. 254, 295 y 554 CPCM, preceptos
legales que regulan lo relativo al acto de conciliación dentro del Proceso Civil,
mismo que a pesar de no ser explícitamente de la materia a que corresponde el
presente caso, han de tomarse como guías para la correcta interpretación de la
norma procesal que ha generado la contienda.

El Art. 254 CPCM prescribe: “Lo acordado en conciliación tendrá fuerza ejecutiva
entre las partes, y el Juez de Primera Instancia de la circunscripción en que se
celebró podrá llevarlo a efecto, según el trámite de la ejecución de Sentencias”y de
su lectura se colige que aun cuando en un inicio se estipula que dicho acto posee
fuerza ejecutiva, lo que en efecto generaría la potestad de incoar un Juicio Ejecutivo
en caso de que no se le dé cumplimiento por la parte indicada, al final expresa que
su ejecución se realizará según el trámite de la ejecución de la Sentencia. Esto
debido a que se trata de una imprecisión, pues la norma debería de decir que se
trata de un Título de Ejecución, tal como lo hace el Art. 295 CPCM que refiriéndose
a la conciliación en la Audiencia Preparatoria del Proceso Común, determina:
“Lo convenido en conciliación o transacción en la audiencia preparatoria, una vez
aprobado u homologado judicialmente, tendrá en su caso la consideración de título
de ejecución y podrá llevarse a efecto por los trámites de ejecución de Sentencias
regulado en este código.”

Por lo tanto se debe inferir que en relación al acto de conciliación y su


correspondiente acta, se puede afirmar que aunque la norma literalmente mencione
únicamente que la misma tendrá fuerza ejecutiva, en realidad pretende estatuir que
se trata de un Título de Ejecución, tal como lo establece el Art. 554 ordinal 3° CPCM.
Consecuentemente el inciso final del Art. 41 de la Ley Especial sobre Accidentes
de Tránsito, que a la letra reza: “Si las partes conciliaren se levantará acta de lo
convenido y la certificación de ella tendrá fuerza ejecutiva.”, deberá interpretarse
en el sentido de que da lugar a la Ejecución Forzosa, contenido jurisprudencial que
mediante esta sentencia se establece y así deberá entenderse.”

131
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

CAPÍTULO TERCERO
DILIGENCIAS PRELIMINARES
Diligencias preliminares

Art. 255.- Con el fin de preparar el proceso, el futuro demandante o quien con fundamento
prevea que será demandado podrá pedir la práctica de diligencias necesarias para la presentación
de la demanda, para la preparación de la defensa o para el eficaz desarrollo del procedimiento.

Si el solicitante no interpone la correspondiente demanda en el plazo máximo de un mes, las


diligencias practicadas perderán su eficacia y no podrán ser invocadas. Dicho plazo comienza a
contar desde la conclusión de las diligencias preliminares.

CÁMARA PRIMERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, Apelación Referencia 74-29CM1-2015 de fecha veintiuno de agosto de
dos mil quince.

“En lo que concierne al punto de Apelación que radica en la errónea valoración


de la prueba, porque no se aplicaron las reglas atinentes a la sana critica, en las
diligencias preliminares de reconocimiento de firma.
Al respecto, se estima que íntimamente ligado al tema de la apreciación de la
prueba, se encuentra el tipo de situación procesal en que la misma es admitida para
su valoración.
En el caso en estudio, al estar conociendo en Apelación de diligencias preliminares,
debe acotarse que las mismas son actuaciones que se postulan en el órgano judicial
y su objeto consiste en lograr información acerca de circunstancias relativas a la
personalidad del futuro demandado o a otros extremos a fin de que quien pretenda
presentar una demanda, precise conocer para la iniciación con éxito de un proceso,
así como obtener documentos u objetos que resulten necesarios para entrar en dicho
proceso.
Se trata, por tanto, de diligencias en las que no se producen declaraciones de
derechos, establecidas con carácter general y por ende, no son procedimientos en los
cuales, la prueba pueda tener cabida, ya que se refieren a aquellos hechos, elementos
o datos que son necesarios e indispensables conocer para iniciar correctamente un
proceso y facilitar su desarrollo.
Como su nombre lo indica, son anteriores al juicio y aun cuando pueda intervenir
el deudor, no implica contienda, sino mera comprobación de un hecho, dado que el
juicio solo principia por la demanda.”
Afirma el recurrente, que la Jueza A Quo, debió practicar una prueba pericial a fin
de cotejar si la firma pertenecía o no al solicitado señor […].
Esta Cámara disiente con tal afirmación, en virtud que las diligencias preliminares
no son una prueba anticipada pues sirven para favorecer el cumplimiento de los
presupuestos procesales.
No obstante, puede ocurrir que las diligencias preliminares, pueden servir como
medio para la obtención de alguna fuente de prueba o para la preconstitución de

132
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

alguna; pero ello siempre como segunda finalidad respecto de lo primero. Así mismo,
la diligencia preliminar, a diferencia de la prueba anticipada, nunca consiste en la
práctica misma de la prueba, como quiere hacerlo ver el recurrente.”

Ahora bien, de lo dispuesto en el Art. 255 CPCM., se desprende que las diligencias
preliminares son procedimientos de carácter excepcional, ya que por lo general las
relaciones de derecho privado son conocidas suficientemente por las partes; pero en
algunas ocasiones es necesario determinar ciertas cuestiones con el fin de preparar
el proceso, para poder esbozar apropiadamente la pretensión, ejercer eficazmente la
defensa y evitar un proceso inútil.

El inc. 1º del Art. 256 CPCM. en el numeral 9° establece que las diligencias
preliminares podrán tener por objeto, el reconocimiento del documento privado por
aquél a quien se le atribuya autoría o firma, bajo apercibimiento de tenérselo por
reconocido.

De lo expuesto en el referido numeral se desprende, que su aplicación tiene por


esencia recabar la información necesaria del futuro demandado sobre su capacidad
jurídica, representación o legitimación para ser parte y poder actuar en juicio,
con la finalidad de dirigir adecuadamente la demanda; pues sin contar con la
información idónea no se podría integrar válidamente la relación jurídica procesal
entre las partes.”

Objeto de las diligencias preliminares

Art. 256.- Sin perjuicio de las que específicamente puedan prever las leyes especiales
materiales o procesales, las diligencias preliminares podrán tener por objeto:
1°. La acreditación de circunstancias relativas a la capacidad, representación o legitimación
del futuro demandado, sin cuya comprobación no sería posible entrar en el proceso.
2°. La integración de la representación legal de los menores, los incapacitados y los hijos
menores que litiguen contra sus padres por medio de la Procuraduría General de la
República o por los medios establecidos en la ley.
3°. La exhibición, acceso para examen o aseguramiento de cosas sobre las que recaerá el
procedimiento, que se encuentren en poder del futuro demandado o de terceros.
4°. La exhibición por el poseedor de documentos en los que consten actos de última voluntad,
o documentos y cuentas societarias.
5°. La exhibición de contratos de seguro de responsabilidad civil.
6°. La determinación judicial del grupo de afectados en los procesos para la defensa de
los intereses colectivos de consumidores y usuarios. En tales casos, podrá solicitar del
tribunal la adopción de las medidas oportunas para la averiguación sobre los integrantes
del grupo, de acuerdo a las circunstancias del caso y conforme a los datos suministrados
por el solicitante, incluyendo el requerimiento al demandado para que colabore en dicha
determinación.
7°. Que la persona que haya de ser demandada por reivindicación u otra pretensión exprese a
qué título tiene la cosa objeto del proceso por iniciarse.
8°. Que si el eventual demandado tuviere que ausentarse del país, constituya domicilio dentro
de los cinco días, con el apercibimiento que legalmente corresponda en cuanto a futuras
notificaciones.

133
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

9°. La citación a reconocimiento del documento privado por aquél a quien se le atribuya
autoría o firma, bajo apercibimiento de tenérselo por reconocido.
10°. La determinación judicial de la jactancia del acreedor con el fin de imponerle plazo
perentorio para el planteamiento de su pretensión.
11°. La exhibición judicial de los objetos que comprueben la competencia desleal, a que se
refiere el inciso primero del Artículo 493 del Código de Comercio.
12°. La orden provisional de cese de los actos de competencia desleal a los que se refiere el
inciso segundo del mismo Artículo 493 del Código de Comercio.
13°. La firma del ejemplar repuesto del título valor en el caso del inciso tercero del Artículo
930 del Código de Comercio.
14°. El ejercicio del derecho de retención contemplado en los Artículos 957 y 958 del Código
de Comercio y en las normas pertinentes del Código Civil.
15°. El requerimiento para contratar, contemplado en el Artículo 965 del Código de Comercio.
16°. La petición para que la persona que haya administrado bienes de otro rinda cuenta de su
gestión, en cuyo caso se le intimará para que la presente dentro de un plazo prudencial
que el tribunal señalará, el cual no podrá exceder de 30 días.
17°. La exhibición y reconocimiento de los registros contables y demás documentos
relacionados con el giro de las empresas mercantiles, previo señalamiento de día y hora,
cuando su titular tuviere interés o responsabilidad en el asunto de que se trate.

SALA DE LO CONSTITUCIONAL DE LA CORTE SUPREMA DE JUSTICIA:


en Sentencia de fecha cinco de diciembre de dos mil doce, con Referencia 124-2007,

“…La pretensión de jactancia se define como aquella concedida a una persona para
demandar en juicio a otra que hace alarde de tener derechos contra él (v. gr. afirmar
que es acreedor del demandante) y que, al considerar que la obligación es inexistente
o diversa, se pretende compeler al demandado para que ejercite dichos derechos
en el proceso correspondiente o bien guarde silencio (deje de jactarse) y se vea
impedido de realizar su reclamo con posterioridad (improponibilidad objetiva). Al
respecto, el Art. 256 CPrCyM establece que –mediante el trámite de las diligencias
preliminares– puede obtenerse la determinación judicial de la jactancia del acreedor
con el fin de imponerle plazo perentorio para el planteamiento de su pretensión. El
fundamento del proceso de jactancia se halla en la necesidad de certeza imperante
en toda organización social; ahora bien, la certidumbre jurídica que se busca con
estas diligencias no se refiere a la titularidad de los derechos que –según el actor–
fueron objeto de jactancia por el demandado, sino simplemente a si éste afirmó ser
titular de un derecho de crédito más allá que lo sea o se considere serlo. Desde
esta perspectiva, el proceso de jactancia muestra dos niveles de profundidad. En
lo inmediato, el objeto de la jactancia misma es saber si ésta existió o no; mientras
que, en lo mediato, constituyen objeto de este proceso los derechos que fueron, a su
vez, objeto de jactancia y el descrédito y la lesión al honor sufrida por el actor como
consecuencia de aquella. Con respecto al demandado, se encuentra en una situación
jurídica de carga procesal (de comparecer) y en caso de no cumplir será requerido
por el tribunal a imponer su demanda dentro de un plazo establecido por la ley
procesal pertinente, con apercibimiento de tenerse por improponible la demanda
presentada vencido dicho plazo. Si el demandado no comparece, o habiendo
comparecido se niega a realizar la manifestación que le requiere el tribunal en el

134
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

sentido de si son, o no ciertos los hechos alegados por el actor, en este caso, la
ley establece una presunción de respuesta afirmativa, atribuyendo a su silencio el
mismo valor que la respuesta afirmativa expresa. Ahora bien, debe recordarse que
el sentido de las normas de presunción es establecer una verdad procesal (o una
verdad en el proceso), es decir, obligan al juez, bajo ciertas circunstancias a tomar
como probado o no probado un hecho. Constituyen por tanto, puntos de partida
y de llegada en el proceso decisorio. Sin embargo, la aceptación de una regla de
presunción supone aceptar también su derrotabilidad para un caso particular. El
razonamiento presuntivo es típicamente un razonamiento derrotable: si se cuenta
con más información es posible rechazar la conclusión.”

CÁMARA PRIMERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO Sentencia de Apelación Referencia 146- 51 CM2-2012 emitida quince de
noviembre de dos mil doce.

“Al respecto, esta Cámara estima que de conformidad con lo dispuesto en el Art. 255
CPCM., las diligencias preliminares son procedimientos de carácter excepcional, ya
que por lo general las relaciones de derecho privado son conocidas suficientemente
por las partes; pero en algunas ocasiones es necesario determinar ciertas cuestiones
con el fin de preparar el proceso, para poder plantear adecuadamente la pretensión,
ejercer eficazmente la defensa y evitar un proceso inútil.

El inc. 10 del Art. 256 CPCM., en el numeral 1 establece que las diligencias
preliminares podrán tener por objeto, la acreditación de circunstancias relativas
a la capacidad, representación o legitimación del futuro demandado, sin cuya
comprobación no sería posible entrar en el proceso.

De lo expuesto en el referido numeral se desprende, que su aplicación tiene por


objeto recabar información necesaria del futuro demandado sobre su capacidad
jurídica, representación o legitimación para ser parte y poder actuar en juicio, con la
finalidad de dirigir adecuadamente la demanda; pues sin contar con la información
adecuada no se podría integrar válidamente la relación jurídica procesal entre las
partes; pero no para averiguar o investigar, donde residen o se encuentran los futuros
demandados, para notificarles la cesión del crédito, como lo solicita el impetrante.

En síntesis las normas jurídicas invocadas por el apoderado de la parte apelante,


en que fundamenta su pretensión, no reúnen los presupuestos procesales para darle
trámite a las diligencias preliminares incoadas, ya que estas no tienen por finalidad
la localización de las personas a quienes se pretende demandar, sino que tiene
por finalidad preparar el proceso, dando la oportunidad a las partes de pedir la
práctica de diligencias necesarias para la presentación de la demanda; por lo que
lo solicitado no debe tramitarse como una diligencia preliminar, en virtud que no
encaja dentro de los parámetros indicados en el numeral 1 del Art. 256 CPCM; en
consecuencia, la pretensión es improponible, por la razón que se advierte un defecto
que afecta el fondo de la misma, pues evidencia falta de un presupuesto material o
esencial.”

135
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

CÁMARA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DE OCCIDENTE,


SANTA ANA, Sentencia de Apelación Referencia INC-APEL-33-4-05-03-2015 de
fecha veinticuatro de abril de dos mil quince.

“Con relación a la jactancia, la doctrina ha sostenido que es un medio legal para


evitar los daños patrimoniales o morales que el jactancioso pueda causar a otra
persona, teniendo como fin proteger los intereses antes mencionados. La finalidad
de la jactancia, es precisamente establecer un mecanismo a través del cual toda
persona que se considere perjudicada en su honor o reputación por “manifestaciones
presuntuosas”que otra persona hace en su contra, puede exigirle que cese en
tales manifestaciones, o que de ser ciertas, las formalice judicialmente; por otra
parte, según sentencia de la Sala de lo Civil N° 595-2001, que oportunamente
ha citado el solicitante en el escrito inicial de la pieza principal, dicho Tribunal
ha sostenido que los hechos constitutivos de la jactancia, deben de ser tales que
por su naturaleza y publicidad ocasionen efectos perjudiciales al crédito, fama
y honradez del agraviado; o daños de orden económico con Referencia a la
transmisión de sus bienes a terceros, determinantes de una desconfianza de parte de
la generalidad para con el agraviado. De lo antes apuntado tenemos que para que
se configure la jactancia, deben de coexistir por lo menos los siguientes elementos:
a) manifestaciones presuntuosas de una persona de que otra le es deudora; b) Que
dichas manifestaciones sean públicas, es decir que se propalen a terceros; c) Que
las mismas tengan efectos perjudiciales al crédito, fama y honradez del agraviado o
daños de orden económico.”

CÁMARA TERCERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, SAN SALVADOR, Sentencia Referencia 145-D-15 de fecha quince de
julio de dos mil quince.

“En el presente caso, la pretensión de la parte solicitante radica en que el Estado


de El Salvador, por medio del Fiscal General de la República, como solicitado,
promueva el juicio respectivo en contra de doña […], para exigir el cumplimiento
de la obligación que se le reclama, pues el Ministerio de Hacienda no quiere -dicen-
declarar extinguida la obligación que aparentemente existe en su contra.

A. La solicitante por medio de sus apoderados expresa concretamente en su


solicitud de […], lo siguiente: “(…) nuestra Representada presentó al Registro de la
Propiedad Raíz e Hipotecas de la Primera Sección del Centro, de este Departamento
para su inscripción un Testimonio de Escritura Pública de Compraventa de Inmueble
a su favor y otro, bajo el Asiento número […], la cual está observada, debido a que
se encuentra insolvente ante el Ministerio de Hacienda, por impuesto de donación
no cancelado a favor del Estado de El Salvador, a raíz de eso al solicitarse el Estado
de Cuentas

(É) al Jefe de Sección de Solvencias Electrónicas, Departamento de Cuenta Corriente


y Control Tributario, Dirección General de Impuestos Internos, del Ministerio
de Hacienda, aparece con un saldo deudor de […]. Tal situación constituye un
grave perjuicio en contra de nuestra representada, quien está consciente que
a la fecha no adeuda cantidad alguna, siendo esta la razón de su adopción y la

136
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

utilidad que le brindará (…) es la certeza jurídica sobre la imputación de la deuda


que supuestamente (…) tiene ante el Ministerio de Hacienda, razón por la cual es
procedente entablar las respectivas DILIGENCIAS DE JACTANCIA.”

B. Al analizar lo manifestado en la solicitud, y confrontarla con los hechos


constitutivos de jactancia, no se advierte que a doña […], con el hecho de que se
le haya manifestado que se encuentra insolvente ante el Ministerio de Hacienda
por impuesto de donación no cancelado a favor del Estado de El Salvador, se haya
incurrido en los supuestos de la jactancia, por lo que, ante tal situación y partiendo
de que ella expresa que no debe cantidad alguna a la referida dependencia deberá
hacer las gestiones pertinentes ante la misma a fin de demostrar lo alegado pero no
a través de las diligencias que pretende, pues lo expresado por la referida señora
por medio de sus apoderados en ningún momento constituye jactancia, ya que la
Jactancia consiste principalmente en la manifestación clara que hace una persona
de que otra le es deudora o responsable o le debe alguna cosa o acción, -lo que no
acontece en el presente caso- pues ha sido a ella en forma directa a quien se le ha
extendido por parte de la Dirección General de Impuestos Internos Sección Cuenta
Corriente del Ministerio de Hacienda, el estado de cuenta de la deuda que tiene
pendiente de honrar; de manera que sólo por el hecho de habérsele extendido dicho
estado de cuenta de parte del Estado a través de la relacionada dependencia, ello no
puede ser considerado como jactancia; y más en casos como el de ocurrencia relativo
a que se debe honrar deuda pendiente para con el fisco, por lo que la pretensión
contenida en la solicitud de mérito deviene en improponible y así se declarará.”

Competencia

Art. 257.- La solicitud de diligencias preliminares se dirigirá al tribunal del domicilio de


la persona que deba declarar, exhibir o intervenir de otro modo en las actuaciones. Cuando esta
circunstancia se desconozca, así como en los casos de los numerales segundo y sexto del artículo
anterior, será competente para conocer de la solicitud el tribunal que lo sea para darle curso a la
futura pretensión.

La competencia será examinada de oficio por el tribunal, sin que quepa impugnarla a instancia
de parte.

CORTE SUPREMA DE JUSTICIA EN CORTE PLENA, conflicto de


competencia 395-COM-2013 de fecha veinticuatro de junio de dos mil catorce.

“Antes de resolver el asunto que concierne, es necesario acotar que las Diligencias
Preliminares, tienen la finalidad principal de preparar el futuro proceso, para ello se
han regulado una serie de diligencias que tienen por objeto: a) obtener información
para individualizar al futuro demandado, b) relativas a la exhibición documental de
quien los posea, así como de cosas y objetos sobre las que recaerá el procedimiento;
y, c) relativas a que se realicen conductas de hacer o no hacer del futuro demandado.
Todas ellas comprendidas en el Art. 256 CPCM.

Así en el presente caso, la solicitud de Diligencias Preliminares de Reconocimiento


de Documento Privado, tiene por objeto que el demandado realice una conducta a
su cargo, con base en el ordinal 9° del Art. 256 CPCM, que regula: “La citación

137
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

a reconocimiento del documento privado por aquél a quien se atribuya autoría o


firma, bajo apercibimiento de tenérselo por reconocido”. […]. Siendo presentada
la misma, el 20-VIII-13, fecha en la cual ya había entrado en vigencia el CPCM -1-
VII-2010-.

Dichas diligencias tienen normas de competencia judicial contenidas en el Art.


257 CPCM, que prescriben: “La solicitud de diligencias preliminares se dirigirá al
tribunal del domicilio de la persona que deba declarar, exhibir o intervenir de otro
modo en las actuaciones. Cuando esta circunstancia se desconozca, así como en
los casos de los numero segundo y sexto del artículo anterior, será competente para
conocer de la solicitud el tribunal que lo sea para darle curso a la futura pretensión.

Al caso en análisis, se le aplica la premisa general del domicilio de la persona


que deba declarar, exhibir o intervenir de otro modo en las actuaciones, ya que lo
pretendido es que se realice una conducta de hacer, que se reconozca un documento,
por parte de aquél que actuó como factor de la Sociedad

CONSTRUCCIONES, REPRESENTACIONES Y SERVICIOS, SOCIEDAD


ANÓNIMA DE CAPITAL VARIABLE (COREYSA S.A. de C.V.) -que se dice-es
obligada al pago de la obligación contenida en el documento base de las diligencias;
independientemente de la circunstancia relativa al domicilio de la Sociedad.

En ese orden de ideas, es de advertir que si bien es cierto la persona de quien se


pretende reconozca el documento de mérito —se dice- actuó como factor de la ya
expresada sociedad, no es ésta la que debe manifestarse sobre tal reconocimiento a
través de su órgano de representación o a quien ésta designe como lo aduce el Juez
Tercero de lo Civil y Mercantil de esta ciudad, puesto que no es la persona jurídica
la que declarará reconocer o no el documento privado, lo será la persona natural
que lo suscribió, independientemente de la calidad en que haya comparecido; ya
la persona jurídica manifestará su defensa en el proceso contencioso, si es que lo
hubiere.”

Solicitud y caución

Art. 258.- La solicitud de práctica de diligencias preliminares deberá ser formalizada por
escrito, y deberá contener la legitimación del solicitante, los fundamentos que apoyen lo pedido,
las medidas requeridas, la justificación de la necesidad de su adopción y, eventualmente, el
señalamiento de las personas que en ellas deban intervenir.

En los casos del apartado 4° del Artículo 256, las diligencias preliminares sólo podrán ser
solicitadas por quien se considere sucesor, o por quien acredite ser socio o comunero.

En la solicitud deberá constar, además, el ofrecimiento de caución para responder de los gastos
y de los daños y perjuicios que puedan ocasionarse a las personas cuya intervención sea requerida.
Si en el plazo de un mes desde la conclusión de las diligencias el solicitante no ha interpuesto
la demanda ni ha justificado debidamente causa que lo impida, la caución se perderá a favor de
dichas personas.

138
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

CÁMARA SEGUNDA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, SAN SALVADOR, Sentencia de Apelación 75-3CM-14-A de fecha
dieciséis de diciembre de dos mil catorce.

“Establecido lo anterior, a juicio de las suscritas, la declaratoria de denegatoria de


las diligencias preliminares hecha por la Juez A Quo, estuvo apegada a derecho. La
anterior afirmación radica en que si bien es cierto el Art. 18 CPCM, al que se refiere
el apelante, establece que las disposiciones del código deben interpretarse de tal
modo que se procure la protección y eficacia de los derechos de las personas y la
consecución de los fines que consagra la Constitución, también establece que esto se
hará dentro del respeto al principio de legalidad.

En ese sentido si el Art. 258 CPCM, establece en su inciso ultimo, como un requisito
esencial de la solicitud de medidas preliminares, el ofrecimiento de caución para
responder de los gastos y de los daños y perjuicios que puedan ocasionarse a las
personas cuya intervención sea requerida, se puede concluir, que por regla general
es obligación del solicitante, ofrecer una caución para responder por un eventual
daño, criterio que ya ha sido sostenido por este tribunal en anteriores Sentencias
y que ha sido retomado por la Juez A Quo. No obstante lo expuesto, es necesario
aclarar que toda regla general tiene sus excepciones, y en el caso de las diligencias
preliminares, al no tener regulación expresa, en lo referido a la exención de la
caución debemos realizar una integración de las normas, Art. 19 CPCM, aplicando
de forma supletoria, en lo que respecta a la forma y cuantía de la caución, de las
medidas cautelares, Art. 448 CPCM.

Entonces, si bien es cierto, eventualmente se puede aplicar el Art. 448 CPCM, en las
diligencias preliminares, debemos recordar que al ser esta una excepción a la regla
general, es obligación del solicitante demostrar al juez, las razones de porque debe
eximirlo de rendir la caución, ya que no basta afirmar que la capacidad económica
del solicitado es superior a la del solicitante, sino que también es imperativo que el
solicitante demuestre, su incapacidad económica para prestar la caución que exige el
Art. 258 CPCM, lo cual no ha ocurrido en el caso de autos, caso contrario estaríamos
ante la posibilidad de despojar indebidamente al solicitado del resarcimiento de los
daños causados por el otorgamiento de las medidas preliminares.

En conclusión, las suscritas consideramos que, si bien es cierto, en el caso que nos
ocupa, existió una errónea interpretación de las normas procesales, lo cual llevó
a una Inaplicación de las normas procesales que rigen los actos y garantías del
proceso, dicho defecto no cambia el resultado del presente proceso, ya que la parte
solicitante incumplió su obligación de ofrecer la caución que se exige en el Art.
258 Inc. tercero, CPCM, asimismo, no probó conforme a derecho y en el momento
procesal oportuno, los motivos por los cuales la Juez A Quo, debió eximirlo de la
obligación de rendir la caución establecida en el citado artículo, sino que se limitó
a manifestar de forma vaga e imprecisa que el solicitado tenía una mayor capacidad
económica, motivo por el cual esta cámara considera que en este punto no debe
estimarse lo expuesto por el apelante.”

139
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

Decisión sobre la solicitud


Art. 259.- La solicitud de diligencias preliminares deberá resolverse por el tribunal dentro de
los cinco días siguientes a su presentación.
Si se considera justificada la petición, y cumplidos los requisitos que debe reunir la solicitud,
se dictará auto ordenando la práctica de las diligencias solicitadas y la fijación de la caución, dando
audiencia de la solicitud y del auto de admisión a los interesados. En otro caso, el tribunal denegará
la petición mediante auto que será notificado al solicitante.
El auto por el cual se decida sobre la petición de diligencias preliminares sólo será apelable
cuándo las deniegue.
Si dentro del plazo de los cinco días siguientes a la notificación de la admisión el solicitante
no presta caución en alguna de las formas previstas en el Artículo 447, el tribunal acordará la
terminación de las actuaciones y las archivará. Contra esta decisión no cabrá recurso alguno.
En el caso de la rendición de una cuenta, una vez que el requerido ha cumplido con su
obligación, y si al requirente no le satisface, la cuenta podrá discutirse en proceso común.
Incidente de oposición
Art. 260.- Dentro de los cinco días siguientes a la notificación del auto en que se acuerda
la práctica de diligencias preliminares, el requerido podrá oponerse a ellas mediante escrito
debidamente fundamentado y dirigido al tribunal.
Recibido el escrito de oposición, se convocará a los interesados a una audiencia, que se
celebrará dentro de los cinco días siguientes, con arreglo a las normas del proceso abreviado.
El incidente de oposición se resolverá en dicha audiencia y sólo será recurrible la decisión
que estima justificada la oposición. En otro caso se ordenará la continuación de los trámites,
imponiendo al requerido el pago de las costas qué hubiera generado el incidente.

Negativa del requerido y efectividad de las diligencias preliminares

Art. 261.- Si la persona citada y requerida no atendiera el requerimiento para la práctica de la


diligencia preliminar, el tribunal podrá:
1°. Tener por ciertas las respuestas afirmativas a las preguntas que el solicitante pretendiera
formularle en orden a la capacidad, representación o legitimación del requerido, teniendo
asimismo por aceptados los hechos que de ellas se deriven. El hecho quedará fijado sin
perjuicio de la prueba en contrario que pueda articularse una vez iniciado el proceso.
2°. Tener por ciertas las afirmaciones hechas por el solicitante cuando se trate de cuentas
o datos relativos a sociedades o comunidades. El hecho quedará fijado con la salvedad
establecida en el número anterior.
3°. Ordenar, en resolución motivada justificativa de la necesidad de la adopción de la medida,
la entrada en el lugar cerrado donde presumiblemente se hallen la cosa, los títulos o los
documentos cuya exhibición ha sido solicitada, y el registro del mismo. Los títulos y
documentos serán puestos a disposición del solicitante, en la sede del tribunal. En cuanto
a las cosas, el solicitante podrá pedir su depósito, conservación o examen, debiéndose
adoptar en este último caso las medidas necesarias para garantizar la integridad de la cosa
o la conservación de la cantidad o muestras suficientes para posteriores exámenes.

140
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

4°. Ordenar las medidas conducentes a la identificación de los integrantes de un grupo de


afectados, pudiendo acordar, por medio de resolución en la que se justifique la necesidad
de la medida, la entrada en lugar cerrado y el registro del mismo, la intervención de
documentos o el acceso a bases de datos personales o relativos a personas jurídicas.
5°. Requerir la aportación de documentos, mediante multa en una cantidad equivalente a un
salario mínimo urbano, mayor, vigente por cada día que transcurra sin haber aportado al
Juez el documento o fuente de prueba requerido en el mandato de exhibición.
6°. Tener por cierta la jactancia invocada por el solicitante, procediendo a la fijación de un
plazo no mayor de 10 días para el planteamiento de la correspondiente demanda. De no
hacerlo, la demanda se volverá improponible.
7°. Pedir la cuenta al solicitante, y al rendirla se tendrá por aprobada a petición de éste, a
menos que el requerido alegare su inexactitud durante los tres días siguientes al de su
notificación. En este caso, la cuenta se tendrá que discutir en proceso común.

Todas las medidas previstas en el inciso anterior adoptarán la forma de auto.

Sólo las que acuerden la entrada y registro o el acceso judicial a bases de datos serán
recurribles en Apelación, que tendrá efectos suspensivos.

Serán de cargo del requerido los gastos ocasionados por la práctica de diligencias preliminares
mediando su negativa.

CÁMARA PRIMERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, SAN SALVADOR, Apelación N°163-64CM1-2015 de fecha veintiocho
de enero de dos mil dieciséis.

“Al analizar los medios probatorios tomados en cuenta por parte de la juzgadora
para determinar la obligación contractual a cargo del señor […]., se observa que
en el acta de audiencia de toma de muestra para realizar la prueba grafotécnica
y establecer la autoría de quien suscribió el contrato de arrendamiento en calidad
de arrendatario, realizada a las diez horas del día uno de septiembre de dos mil
quince, agregada de fs. […], aparece que el demandado, se negó a colaborar de
forma expresa en la toma de las muestras solicitadas, así como a prestar declaración
personal de propia parte, sobre hechos personales, como consta en las actas de las
audiencias preparatoria y probatoria de fs. […], respectivamente, en donde en la
primera, se admitió como prueba y en la segunda aparece que no compareció no
obstante su legal citación.

Tal actuación, acarrea consecuencias jurídicas, ya estipuladas en el Ord. 9° del Art.


256 CPCM., el cual se aplica por integración y se relaciona con el Art. 347 del
mismo cuerpo normativo, con lo cual, la responsabilidad de tal demandado como
suscriptor del contrato de arrendamiento fue debidamente comprobada; por lo que
el punto de Apelación invocado no tiene sustento legal.”

Aplicación de la caución y costas


Art. 262.- Salvo lo expresamente previsto para el incidente de oposición, y para los casos
de negativa del requerido, los gastos ocasionados a las personas que hubieren de intervenir en las
diligencias preliminares serán de cargo del solicitante.

141
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

A tales efectos, cuando se hubieran practicado las diligencias acordadas o el tribunal las
hubiese denegado por considerar justificada la oposición, éste resolverá, mediante auto, en el plazo
de cinco días, sobre la aplicación de la caución, a la vista de la petición de indemnización y de la
justificación de gastos que se le presenten, oído el solicitante.
Cuando, aplicada la caución conforme al inciso anterior, quedare remanente, no se devolverá
al solicitante hasta que transcurra el plazo de un mes.
CAPÍTULO CUARTO
CUESTIONES INCIDENTALES

Principio general

Art. 263.- Toda cuestión incidental, ya sea de carácter procesal o material, que siendo distinta
del objeto principal del pleito tuviere relación inmediata con él, se tramitará en pieza separada en
la forma prevista por las disposiciones de este Capítulo, salvo que tengan señalada por ley otro
trámite distinto.

No obstante, las cuestiones incidentales suscitadas en audiencias y que se refieran a su trámite


serán sustanciadas y resueltas directamente en ellas. Si la cuestión es planteada por escrito fuera de
audiencia y ya estuviera próxima la realización de alguna, el asunto incidental se incorporará como
punto de agenda, para evitar suspensiones o dilaciones indebidas.

Regla general de no suspensión del proceso principal. Excepciones

Art. 264.- Las cuestiones incidentales no suspenderán el curso del proceso principal, salvo
que, atendida su naturaleza, la cuestión planteada suponga un obstáculo para la continuación del
proceso.

Cuando la cuestión incidental deba decidirse previamente a la que constituye el objeto del
proceso, sin que sea obstáculo para la continuación del mismo, se resolverá sobre ella en la
sentencia de forma separada.

Supuestos de suspensión del curso del proceso principal

Art. 265.- Aparte de los casos que expresamente prevea este código, se suspenderá el curso
del proceso principal cuando se suscite cuestión incidental referida:
1°. A la falta de un presupuesto procesal o al surgimiento de un obstáculo de la misma
naturaleza, siempre que haya surgido después de terminada la audiencia preparatoria y
sea, por su propia naturaleza, insubsanable.
2°. A cualquier otra incidencia que ocurra durante el proceso y cuya resolución sea
absolutamente necesaria, de hecho o de derecho, para decidir sobre la continuación del
proceso por sus trámites normales o sobre su terminación.

Tramitación conjunta
Art. 266.- Todas las cuestiones incidentales que por su naturaleza pudieren paralizar el
proceso, cuyas causas existieren simultáneamente y fuesen conocidas por quien las promueve,
deberán ser articuladas en un mismo escrito, siempre que sea posible su tramitación conjunta. Se
rechazarán por improponibles, y sin más trámite, las que se entablaren con posterioridad.

142
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

Promoción escrita de la cuestión incidental. Régimen de admisión


Art. 267.- Cuando la cuestión incidental se promueva mediante escrito, éste tendrá que ser
concreto y fundado, tanto fáctica como jurídicamente y a él se acompañarán los documentos
oportunos, así como el escrito en el que se propondrán las pruebas que se estimen necesarias. En
aquél se indicará si la cuestión ha de suspender el curso del proceso principal.
Si el incidente promovido fuere manifiestamente improponible o no se ajustara a los casos
prevenidos en este código, el Juez lo rechazará sin más trámite. La admisión de la cuestión
incidental se realizará mediante auto.
No se admitirá el planteamiento de cuestiones incidentales una vez abierta la audiencia
probatoria en el proceso común o una vez admitida la prueba en la audiencia del proceso abreviado.
Sustanciación de las cuestiones incidentales
Art. 268.- Admitida la cuestión incidental, en el plazo de tres días se dará audiencia a las otras
partes personadas para que aleguen por escrito lo que a su derecho convenga, pudiendo acompañar
los documentos oportunos y proponiendo la prueba que se repute necesaria.
Transcurrido dicho plazo, el Juez citará a las partes a una audiencia que se celebrará en los
diez días siguientes al de la citación. Esta audiencia se celebrará conforme a las reglas establecidas
para el proceso abreviado.
La audiencia podrá postergarse o suspenderse una sola vez por un plazo no mayor de diez
días, cuando hubiere imposibilidad material de practicar la prueba que debe recibirse en ella.
La prueba pericial, cuando procediere, se llevará a cabo por un solo perito designado de oficio.
No podrán proponerse más de cinco testigos por cada parte. (2)
Cuestiones accesorias a la cuestión incidental
Art. 269.- Las cuestiones accesorias que surgieren en el curso de la tramitación de la cuestión
incidental, y que carecieren de entidad suficiente para constituir otra cuestión autónoma, se
decidirán en la misma resolución que aquélla.
Decisión

Art. 270.- Dentro de la audiencia, y practicada, en su caso, la prueba que se hubiera admitido,
el Juez decidirá sin más lo que proceda. Esta decisión será recurrible en Apelación si pone fin al
proceso. En otro caso, sólo podrá recurrirse de la sentencia definitiva que ponga fin al proceso
principal.

Cuando la cuestión incidental no suspenda el curso del proceso principal, se resolverá


directamente y con la debida separación en la decisión que ponga fin a éste.

CAPÍTULO QUINTO
CONDENA EN COSTAS

Pago de las costas

Art. 271.- Como regla general, cada parte pagará los gastos y las costas del proceso causados
a su instancia a medida que se vayan produciendo.

143
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

CÁMARA SEGUNDA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO: en Sentencia de fecha trece de julio de dos mil quince, con Referencia
4-4MC-15-
“…2.2. El código Procesal Civil y Mercantil, en su Art. 271, reconoce que por regla
general, los desembolsos de los gastos del proceso corren por cuenta de las partes;
sin embargo, también se establece el derecho a ser resarcido en dichos gastos bajo
algunos supuestos especiales.
2.3. El primero de estos supuestos lo regula el Art. 271 CPCM, el cual impone a la
parte que vé rechazadas sus pretensiones, la responsabilidad del pago de las costas
procesales conforme al arancel judicial, y a la letra reza:“”””El pago de las costas
de la primera instancia se impondra a la parte que haya visto rechazadas todas sus
pretensiones. En este caso, el que deba pagar solo estara obligado a hacerlo en lo
que corresponda con motivo del procedimiento judicial conforme a arancel…, 2.10.
… si bien es cierto, la regla del Art. 271 CPCM, solamente puede aplicarse cuando
ya se ha determinado cuáles son las pretensiones acogidas y cuáles las rechazadas,
existen otros varios supuestos contemplados por el CPCM, para que proceda
dicha condena, como lo son la finalización anticipada del proceso, la tramitación
de ciertos incidentes procesales, y la tramitación de diligencias previas. 2.11. La
condena en costas procesales además de la sentencia de fondo, también puede
provenir por ejemplo, en los casos de finalización anticipada, cuando las partes
ya poseen disponibilidad de la pretensión, como en los casos de improponibilidad
sobrevenida, renuncia de la pretensión, desistimiento, allanamiento y caducidad de
la instancia; en estos casos, la ley prevee la condena en costas. Arts. 127 Inc 3º, 274
Inc 1º, y 133 Inc 2º. Todos CPCM….”
Condena en las costas de la primera instancia
Art. 272.- El pago de las costas de la primera instancia se impondrá a la parte que haya visto
rechazadas todas sus pretensiones. En este caso, el que deba pagar sólo estará obligado a hacerlo
en lo que corresponda con motivo del procedimiento judicial conforme a arancel.
Si la estimación o desestimación de las pretensiones fuere parcial, cada parte pagará las costas
causadas a su instancia y las comunes por mitad, a no ser que hubiere méritos para imponerlas a
una de ellas por haber litigado con temeridad.
Condena en costas en caso de allanamiento
Art. 273.- Si el demandado se allanare a la demanda antes de contestarla, no procederá
la imposición de costas, salvo que el tribunal, razonándolo debidamente, aprecie mala fe en el
demandado.
Si el allanamiento se produjere tras la contestación a la demanda, se aplicará el inciso primero
del artículo anterior.
Condena en costas en caso de renuncia o desistimiento
Art. 274.- Si el proceso terminara por renuncia de la pretensión o del derecho, o por
desistimiento del demandante no consentido por el demandado, aquél será condenado a todas las
costas.

144
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

Si el desistimiento fuere consentido por el demandado, no se condenará en costas a ninguna


de las partes.

Condena en costas en recursos

Art. 275.- En caso de recursos, se aplicará en lo relativo a las costas, lo dispuesto para la
primera instancia.

TÍTULO SEGUNDO
EL PROCESO COMÚN

CAPÍTULO PRIMERO
LOS ACTOS DE ALEGACIÓN

SECCIÓN PRIMERA
LA DEMANDA

La demanda

Art. 276.- Todo proceso judicial principiará por demanda escrita, en la que el demandante
interpondrá la pretensión.

La demanda debe contener:


1° La identificación del Juez o tribunal ante el que se promueve;
2° El nombre del demandante y el domicilio que señale para oír notificaciones;
3° El nombre del demandado, su domicilio y dirección, estándose en otro caso a lo previsto
en este código;
4° El nombre del procurador del demandante, su dirección, haciendo constar el número de
fax o el medio técnico que le permita recibir comunicaciones directas del tribunal;
5° Los hechos en que el demandante funda su petición, enumerándolos y describiéndolos
con claridad y precisión, de tal manera que el demandado pueda preparar su contestación
y defensa;
6° Los argumentos de derecho y las normas jurídicas que sustenten su pretensión;
7° Los documentos que acrediten el cumplimiento de los presupuestos procesales, los que
fundamenten la pretensión y los informes periciales;
8° Las peticiones que se formulen, indicándose el valor de lo demandado.
9° El ofrecimiento y determinación de la prueba.

Cuando sean varias las pretensiones que se plantean, se expresarán en la petición con la
separación debida. Si las peticiones principales fuesen desestimadas, las que se hubieran formulado
subsidiariamente se harán constar por su orden y en forma separada.

Según la clase de proceso de que se trate, la demanda podrá contener especificaciones


distintas, conforme se determine en este código y en otras leyes.

CÁMARA DE LA TERCERA SECCIÓN DEL CENTRO, SAN VICENTE,


Apelación Referencia N°C-36-PC-2014-CPCM de fecha: veintidós de septiembre
de dos mil catorce.
“En síntesis, expresan ambas disposiciones legales que las partes podrán
PROPONER el nombramiento de un perito judicial, cuyo dictamen consideren

145
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

necesario o adecuado para la mejor defensa de sus intereses, y se hará, por regla
general, indicándolo o proponiéndolo en el correspondiente escrito de alegación
inicial; no obstante también es procedente su solicitud en la Audiencia Preparatoria
o en la Audiencia Única del Proceso Abreviado en su caso, cuando se vuelva
necesario en razón de la fijación de los términos del debate, pero en cualquiera de
los casos el juzgador deberá considerar la pertinencia y utilidad del peritaje judicial
propuesto para admitirlo y posterior nombramiento del perito.
En ese mismo orden, el demandante procedió a proponer el peritaje judicial en la
respectiva demanda por ser éste, su primer escrito de alegación, en el que señaló
la importancia y necesidad de dicho peritaje judicial para probar su pretensión
respecto a los daños y perjuicios sufridos por su mandante; en ese sentido se vuelve
ilógico pretender que se presente el dictamen respectivo con la presentación de la
demanda, cuando es el juzgador quien debe de verificar la utilidad y pertinencia del
peritaje judicial propuesto y establecer si el mismo es admisible o no y en caso de
admitirse, realizarse el referido peritaje.

En ese orden, la escueta explicación de la juzgadora en cuanto que es su criterio que


este tipo de peritaje judicial debe presentarse juntamente con la demanda, implicaría
desconocer la integración de las normas procesales, por cuanto si bien el Art. 276
N° 7 y 9 CPCM establece la exigencia de concretar (proposición y aportación) los
medios de prueba en la demanda, pero existirán casos como el presente en que será
imposible la aportación probatoria en la demanda y bastará con que se proponga
la misma para cumplir con el requisito de admisibilidad, resultando procedente en
consecuencia el segundo motivo de agravio señalado por el apelante.

Por las razones antes indicadas, este Tribunal estima que son procedentes y
atendibles los dos puntos de agravio señalados y que aun existiendo una motivación
insuficiente y adecuada de la resolución de la que ahora se recurre, de conformidad
al Art. 516 CPCM sí existen suficientes elementos para resolver lo solicitado por
el postulante en su escrito recursivo, en cuanto a revocar el auto que decreta la
improponibilidad de la demanda, por ser contrario a Derecho y los argumentos
planteados para decretar la improponibilidad y en consecuencia ordenar a la señora
Juez A Quo admitir la demanda interpuesta y se le dé a la demanda el trámite
procesal correspondiente.”
CÁMARA SEGUNDA SECCIÓN DE OCCIDENTE: Sentencia de fecha trece de
noviembre de dos mil trece, con Referencia INC-CIVY MERC-43-2013
“…Con respecto a los datos del demandado consignados en la demanda, el Art.
276 ordinal 3º del Código Procesal Civil y Mercantil establece que: “El nombre,
su domicilio y dirección…”; integrándose dicha disposición, en lo que se refiere a
los requisitos esenciales establecidos en el Art. 418 ordinal 2° del Código Procesal
Civil y Mercantil, por tratarse de un juicio ejecutivo, es decir, que para identificar
al demandado, la normativa Procesal Civil y Mercantil, exige que el demandante
exprese: NOMBRE, DOMICILIO Y DIRECCIÓN, considerándose como los
datos esenciales que el demandante debe proporcionar, para que el demandado
sea debidamente identificado. Que con respecto al número de Documento Único
de Identidad, la Ley Especial Reguladora de la Emisión del Documento Único

146
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

de Identidad, en su Art. 3 Inc. 1° prescribe: “El Documento Único de identidad, es


el documento oficial, suficiente y necesario para identificar fehacientemente a toda
persona natural, salvadoreña, en todo acto público o privado, tanto dentro del país,
como en el extranjero, cuando dichos actos surtan efectos en El Salvador.”No obstante,
el Documento Único de Identidad es el documento identificativo de las personas por
excelencia, esta Cámara es del criterio, que no puede considerarse como presupuesto
de admisibilidad de la demanda el número de Documento Único de Identidad del
demandado, pues tal exigencia, implicaría imponer un deber al demandante que no le
corresponde, en consecuencia, basta con que éste proporcione NOMBRE, DOMICILIO
Y DIRECCION, tal como el legislador lo estableció en la ley, para que el juzgador
tenga por cumplido dicho requerimiento en relación a la identificación del demandado.
Que en razón a la prevención de proporcionar el número de Documento Único de
Identidad de la persona demandada, no es señalado por la ley como presupuesto formal
de admisibilidad de una demanda, ya que, si no proporciona tal documento, es porque
como lo señala el apelante al momento de realizar el crédito hipotecario el demandado
fue identificado con la Cédula de Identidad y al momento de presentar la demanda lo
desconocía; con respecto a proporcionar las generales actualizadas del demandado,
es de señalar que en determinado momento podría ser una consecuencia por la falta
del Documento Único de Identidad; que además los datos proporcionados no pueden
considerarse como desactualizados por parte del juzgador ya que hasta este momento
procesal, aún no ha sido emplazado, por lo tanto no se ha verificado si los datos
señalados están o no desactualizados; que no puede desconocerse que al momento de
realizarse el emplazamiento podría identificarse al demandado, por lo tanto esos motivos
no son considerados requisitos exigidos para admitir la demanda…”
Improponibilidad de la demanda

Art. 277.- Si, presentada la demanda, el Juez advierte algún defecto en la pretensión, como
decir que su objeto sea ilícito, imposible o absurdo; carezca de competencia objetiva o de grado,
o atinente al objeto procesal, como la litispendencia, la cosa juzgada, compromiso pendiente;
evidencie falta de presupuestos materiales o esenciales y otros semejantes, se rechazará la
demanda sin necesidad de prevención por ser improponible, debiendo explicar los fundamentos de
la decisión. (2)

El auto por medio del cual se declara improponible una demanda admite Apelación.

CÁMARA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DE OCCIDENTE,


Apelación INC-APEL-12-04-2016 de fecha doce de abril de dos mil dieciséis.

“La Sociedad demandada a contestar la demanda por medio de su representante


procesal, alego como motivos de oposición la prescripción de la acción ejecutiva
y la nulidad de los documentos base de la acción intentada, manifestando al Juez
A Quo que el actor cuando se otorgaron los mutuos base de la acción fungía como
Director Vicepresidente de la Junta Directiva de la Sociedad demandada, y que en
los estatutos de la misma se le inhibía celebrar esa clase de negocios, citando el
Art. 275 Com., y 464 Ord. 3° CPCM.- Esa afirmación se demostró con la fotocopia
certificada notarialmente que no fue cuestionada en su contenido ni desvirtuada su
fe probatoria en la forma que prescribe el Art. 30 LENJVOD., pues ni de oficio ni a
petición de la actora se le requirió la presentación del original.-

147
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

El Art. 275 Romano IV) del Código de Comercio es claro cuando dispone lo
siguiente: “Art. 275.- Queda prohibido a los administradores de las sociedades
anónimas, sean directores o gerentes: …IV.- Negociar por cuenta propia, directa
o indirecta, con la sociedad, a no ser que sean autorizados para cada operación,
especial y expresamente, por la Junta General.-…

Por otra parte, la apelante ha argumentado que los documentos base de la acción,
son constitutivos de objetos ilícito, derivándose el deber de declararse su nulidad
absoluta.- Con respecto a ello, esta Cámara advierte que por tratarse de un proceso
ejecutivo, cuyo trámite es especial, la nulidad de una obligación o de un documento
ejecutivo como pretende la parte apelante, no puede discutirse dentro del mismo
proceso sino en otro diferente.-

Por las razones antes indicadas, los documentos de mutuo presentados como base
de la acción ejecutiva, fueron otorgados sin cumplir con lo dispuesto en el Art.
275 Romano IV C. Com., por lo que carecen de ejecutividad, situación que se
adecua perfectamente a lo que dispone al Art 277 CPCM, en su parte primera: “Si
presentada la demanda, el Juez advierte algún defecto en la pretensión, …; evidencie
falta de presupuestos materiales o esenciales y otros semejantes se rechazará la
demanda, sin necesidad de prevención, por ser improponible debiendo explicar los
fundamentos de la decisión.-”

CÁMARA SEGUNDA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, Apelación Referencia: 02-3CM-14-A de fecha siete de febrero de dos
mil catorce.

“En primer lugar se analizará lo relativo a la improponibilidad de la demanda.


La improponibilidad es una figura de control jurisdiccional que implica la
imposibilidad del juzgador de conocer de las pretensiones contenidas en la misma,
en vista que conllevan un defecto irremediable, es decir, insubsanable o insalvable.
Contrario sensu, todos aquéllos errores que sí pueden ser corregidos, no traen como
consecuencia la improponibilidad de la demanda. Sin embargo, la improponibilidad
no quiere decir, que las partes no puedan presentar nuevamente la demanda una vez
se hayan subsanado dichos defectos que dieron lugar a la improponibilidad.”

CÁMARA DE LA SEGUNDA SECCIÓN DE ORIENTE, USULUTAN,


Sentencia de Apelación N°APE-5-2-CPCM-2011 de fecha: cinco de septiembre de
dos mil doce.

“El rechazo de una demanda por improponibilidad está regulada en el

Art. 277 CPCM, el cual establece los supuestos bajo los cuales procede declararse,
debiendo el Juez advertir en tales casos, el defecto insubsanable en la pretensión; y
la otra forma de rechazo in limine de la demanda es la inadmisibilidad regulada en
el Art.: 278 CPCM, que procede por defectos de forma del libelo de la demanda.- En
el caso en estrado el Juez A Quo, ha declarado la improponilidad de la demanda,
argumentando “que la acción incoada contra al demandado no se adecúa al Proceso
de Ejecución Forzosa”; facultad de examinar que le es dada al Juzgador una vez
presentada la demanda, pues éste oficiosamente ejerce un control mediante esos

148
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

dos mecanismos de rechazo in limine; pero es de acatar que una vez presentada la
demanda, dentro de las atribuciones de dirección y ordenación del proceso, también
el Juez antes de revisar sobre la pretensión, debe examinar sobre su competencia,
ya que de este podría resultar también un rechazo de la demanda, pues de acuerdo
al Art. 40 CPCM, “Presentada la demanda, el Tribunal examinará de oficio su
competencia y, si entiende que carece de ella rechazará in limine la demanda por
improponible.”

Que en el caso que nos ocupa, la parte demandante a iniciado ante el Juzgado
de lo Civil de esta Ciudad, JUICIO DE EJECUCION FORZOSA de acuerdo al
Art. 551 y Stgs. del CPCM; presentando como título de ejecución de la sentencia
ejecutoriada, pronunciada a las quince horas con cuarenta y cinco minutos del día
veinte de agosto del año dos mil siete, […], por el TRIBUNAL DE Sentencia, en la
causa penal número […], seguida contra […], procesado por el delito de ESTAFA
AGRAVADA, en perjuicio de la señora […], donde además de ser condenado el
referido imputado a cinco años de prisión, en el literal “C”de dicho fallo se ordena
lo siguiente; Restitúyasela a la victima […], el bien inmueble objeto del presente
proceso, ubicado en […], o en su defecto el pago del respectivo valor actual de
dicho bien inmueble, lo cual deberá determinarse por el respectivo perito.”Siendo la
pretensión de acuerdo al escrito en que contesta las prevenciones hechas por el Juez
A Quo […], es la de “obtener el pago del respectivo valor actual del inmueble que
en fama dolosa se le transfirió al menor […]”, y no la de que se declare la nulidad
del documento aludido y posterior restitución del mismo, como lo habla manifestado
en la demanda.-

Que tal como se dijo anteriormente antes de admitir la demanda el juez de oficio
también debe de examinar si es competente o no para conocer de la misma, ya que
el rechazo de la demanda por improponibilidad aplica para todos los criterios de
competencia sea territorial, objetiva y funcional.-

En el caso que nos ocupa es preciso señalar, que cuando se ejerce la acción de
“EJECUCION FORZOSA DE TITULOS”, se debe de estar a lo regulado en el Art.
561 CPCM, el cual establece: “La competencia para conocer de la ejecución forzosa
de la sentencia corresponde al juez que la hubiere dictado en primera instancia,
independientemente de cuál sea el tribunal que la declaró firme. Para tales efectos,
el tribunal que hubiera dictado ejecutoria en segunda instancia o casación devolverá
el expediente al inferior, dentro de los tres días siguientes al de la notificación con
certificación de la ejecutoria, haciéndolo saber a las partes.” - Que examinada que
ha sido la demanda y en razón de lo anterior, se estima que el Juzgado de lo Civil de
esta Ciudad, no tiene competencia objetiva en razón de la materia, para conocer del
JUICIO DE EJECUCION FORZOSA que ha iniciado la parte demandante, por no
ser quien dicto la correspondiente Sentencia, sino que tal como lo establece dicha,
disposición, y a lo regulado en el Art. 505 Inc.3° Pr. Pn. (vigente) en relación al
Art. 441 Pr.Pn (derogado), corresponde al Tribunal de Sentencia de esta Ciudad,
conocer de la misma, ya que de acuerdo a esta última disposición las resoluciones
judiciales serán ejecutadas salvo lo previsto en la Ley Penitenciaria y aquellas que
sean competencia del Juez de Vigilancia Penitenciaria correspondiente, por el juez
o tribunal que las dictó, quien tiene competencia para resolver todas las cuestiones

149
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

o incidentes que se susciten durante la ejecución y debe hacer las comunicaciones


que por la ley corresponde faltándole en tal caso al Juez de lo Civil de esta Ciudad;
competencia objetiva por razón de la materia, atendiendo a la naturaleza de lo
solicitado, quien debió observar en el examen de la demanda, antes de examinar la
pretensión, que no era competente y remitir el expediente al tribunal correspondiente
Art. 40 CPCM.

Que en virtud de las razones expuestas, este Tribunal estima que es procedente:
Confirmar la resolución que declara la IMPROPONIBILIDAD DE LA DEMANDA,
pronuncia por el Juez A-quo, no por los motivos y argumentos que en la misma se
señalan, sino porque el Tribunal de lo Civil de esta Ciudad; no tiene competencia
objetiva en razón de la materia, para conocer del Juicio de Ejecución Forzosa,
ya que no fue este Tribunal quien dictó en primera instancia la correspondiente
Sentencia, lo que deviene en un RECHAZO IN LIMINE de acuerdo al Art. 40 en
relación con el Art. 561 ambos del CPCM.”

CÁMARA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DE OCCIDENTE,


SANTA ANA N°INC-APEL-115-31-08-12-2 de fecha diecisiete de octubre de dos
mil doce.

“En el proceso Ejecutivo regulado en el Libro Tercero con epígrafe Procesos


Especiales Arts. 457 y siguientes del Código Procesal Civil y Mercantil, se
establecen los parámetros por los cuales, se tramitan las pretensiones ejecutivas que
se encuentran plasmadas en los títulos que traen aparejada ejecución, es decir, por
medio de tal proceso se busca la satisfacción del pago para un acreedor, de una o
varias obligaciones que se encuentren en mora, generalmente en dinero, exigibles,
líquidas o liquidables, contenidas en un documento que constituye el título ejecutivo.

Este Título, visto documentalmente y reuniendo las características de ley, constituye


la prueba plena y perfecta para el éxito de una pretensión ejecutiva, ya que en
él, se ven reflejados la calidad de acreedor y de deudor, así como la existencia,
condiciones, plazo y monto de la obligación que se reclama.

En el sub lite, […] SIGET, pretende con fundamento en los documentos base de
la acción que lo son: dos certificaciones emitidas por el […] Superintendente,
referentes a: 1) […]. Requerimiento de cobro efectuado a las nueve horas
y cincuenta minutos del día treinta de Abril del año dos mil once, a la Sociedad
PROBECA, S.A. de C.V. por encontrarse en mora en el pago de las renovaciones de
las Tasas sobre la administración, gestión y vigilancia del espectro radioeléctrico
correspondientes a los años mil novecientos noventa y nueve, dos mil, dos mil uno,
dos mil dos, dos mil tres, dos mil cuatro, dos mil cinco, dos mil seis, dos mil siete,
dos mil ocho, dos mil nueve, dos mil diez y dos mil once, las cuales ascienden a un
total de OCHO MIL NOVECIENTOS VEINTICINCO PUNTO NOVENTA Y OCHO
DÓLARES DE LOS ESTADOS UNIDOS DE AMÉRICA, más los intereses legales
sobre dicha cantidad y las costas procesales a que hubiere lugar; concesión que
le fue concedida a la Sociedad PROBECA, S.A. de C.V., mediante resolución de la
SIGET, […]; esta resolución de conformidad a los Arts. 91 y 103 del Reglamento
de la Ley de Telecomunicaciones establece que el incumplimiento en el pago de

150
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

los derechos correspondientes, dará lugar a que la SIGET emita la resolución


arriba mencionada, la cual se hará saber a la parte que se encuentre en mora,
para que dentro de un plazo de diez días cumpla con el pago reclamado; si no lo
hiciere, se faculta a la SUPERINTENDENCIA GENERAL DE ELECTRICIDAD Y
TELECOMUNICACIONES a iniciar el respectivo proceso ejecutivo conforme a las
reglas comunes; 2) En el caso de autos, ésta resolución de requerimiento de cobro
que constituye un procedimiento administrativo previo, al proceso ejecutivo especial,
fue enviada para ser notificada mediante correo privado, apareciendo en la copia
de la certificación de la notificación de resolución de requerimiento […], que fue
recibida a las catorce horas treinta y cinco minutos del treinta de Mayo del año dos
mil once; por lo que se Considera:

A) En la resolución recurrida pronunciada por el señor Juez Segundo de lo


Civil y Mercantil de este distrito judicial, a las catorce horas y tres minutos
del día dieciséis de Agosto del corriente año y de la tramitación del proceso que
nos ocupa se observa lo siguiente: frente a la pretensión ejecutiva de cobro
promovida por la SUPERINTENDENCIA GENERAL DE ELECTRICIDAD Y
TELECOMUNICACIONES, en contra de la Sociedad PROVEEDORES PARA
BENEFICIOS DE CAFÉ, SOCIEDAD ANÓNIMA DE CAPITAL VARIABLE, que se
abrevia “PROBECA, S.A. DE C.V se interpuso por parte de ésta última Sociedad,
OPOSICIÓN a la ejecución entablada por la actora, alegando para ello: a)
NULIDAD DE LA NOTIFICACIÓN DEL PROCESO ADMINISTRATIVO PREVIO
DEL REQUERIMIENTO DE NOTIFICACIÓN DE LA EXISTENCIA DE UNA
SANCIÓN ADMINISTRATIVA. b) ALEGACIÓN DE PRESCRIPCIÓN EXTINTIVA
COMO MEDIO DE EXTINGUIR LAS OBLIGACIONES que sirven de base a la
acción ejecutiva entablada; y c) FALTA DE REPRESENTACIÓN PARA OBRAR
EN NOMBRE Y REPRESENTACIÓN DE LA SOCIEDAD PROBECA, S.A. DE C.V.
por parte del señor […], persona que aparece como el solicitante en su calidad de
Director Secretario de la renovación año mil novecientos noventa y ocho de las
Tasas sobre la administración, gestión y vigilancia del espectro radioeléctrico de
la frecuencia [...] con un área de cobertura en la Zona Occidental a favor de la
sociedad demandada; frente a ésta OPOSICIÓN, el señor Juez A Quo, le hizo en
primer término a la Apoderada en ese momento de la parte demandada […], una
serie de prevenciones sobre dicha oposición, las cuales fueron cumplidas por el
[apoderado legal de la parte demandada] mediante escrito de fecha nueve de Julio
del año dos mil doce, ratificadas por escrito de fecha trece de Agosto del corriente
año presentado por el mismo [apoderado legal de la parte demandada], de igual
manera éste profesional, por éste mismo escrito, legitimó su personería en legal
forma.

Frente a esta OPOSICIÓN propuesta por la parte demandada, específicamente la


contenida en el literal “c”el señor Juez A Quo con fundamento en el Art. 460 del
CPCM. le previene al [apoderado legal de la parte demandante], que acreditara
en autos, la documentación necesaria donde se estableciera que el señor […],
en esa oportunidad, actúo en calidad de representante legal de la Sociedad
PROVEEDORES PARA BENEFICIOS DE CAFÉ, SOCIEDAD ANÓNIMA DE
CAPITAL VARIABLE, tal como lo expresa en el escrito de admisión de renovación
adelantada del servicio radioeléctrico concedido, por la SUPERINTENDENCIA

151
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

GENERAL DE ELECTRICIDAD Y TELECOMUNICACIONES; en cumplimiento a


la referida prevención, el [apoderado legal de la parte demandante] presentó en
autos, certificación extendida por la Superintendencia General de Electricidad y
Telecomunicaciones, en la que se certifica del Expediente [....], los folios […] de
la Sección de Telecomunicaciones, en el primero de los folios se certifica un escrito
suscrito por el señor […]. en su calidad de Director Secretario de PROBECA S.A. DE
C.V. Dirigido a la Superintendencia General de Electricidad y Telecomunicaciones
por el cual solicita Renovación adelantada de las frecuencias de Radio TX = 143.690
Mhz RX = 140.710 Mhz cobertura Zona Occidental, recibido por la SIGET a las once
horas del día veintitrés de Diciembre de mil novecientos noventa y siete. En el segundo
folio se certifica un Recibo de Ingreso número 0397 depositado por PROBECA, S.A.
DE C.V., en concepto de cancelación de la frecuencia arriba señalada por un monto
de seis mil cuatrocientos sesenta colones, pagados por medio de Cheque el día tres
de Noviembre de mil novecientos noventa y ocho. Más no se acreditó por medio de
dichas certificaciones, a juicio del señor Juez A Quo, que el señor […], tuviera la
calidad de representante legal o autorización alguna de la Sociedad demandada;
por lo que al no haberse cumplido con la prevención formulada el señor Juez A
Quo, optó por declarar la improponibilidad sobrevenida de la demanda por no ser la
Sociedad demandada legitimo contradictor de la SUPERINTENDENCIA GENERAL
DE ELECTRICIDAD Y TELECOMUNICACIONES. Arts. 127, 460 del CPCM.

Sobre ese punto, aparecen […] prueba documental consistente en dos certificaciones
expedidas por la Registradora del Departamento de Documentos Mercantiles del
Registro de Comercio […], la primera sobre el asiento de inscripción Número
cincuenta del Libro ciento noventa y nueve, que contiene el Testimonio de la
Escritura Pública de Constitución de la Sociedad PROVEEDORES PARA
BENEFICIOS DE CAFÉ, SOCIEDAD ANÓNIMA DE CAPITAL VARIABLE, que
se abrevia “PROBECA, S.A. de C.V.”la cual fue otorgada en la ciudad de Santa
Ana, a las doce horas del día trece de Febrero de mil novecientos setenta y ocho,
habiéndose elegido en el mismo instrumento notarial, la primera Junta de Directores
de la referida Sociedad, la cual quedó integrada por las siguientes personas:
como Director Presidente, […]; como Director Secretario, […]; Primer Director
Propietario, […]; Primer Director suplente, […]; Segundo Director suplente,
[…]; y Tercer Director Suplente, […]; habiéndose estipulado también, que dichas
personas durarían en sus funciones hasta que se celebrara la primera Junta General
de Accionistas. La segunda Certificación contiene la inscripción en el Registro de
Comercio bajo el Número cuarenta y siete del Libro mil cuatrocientos cincuenta y
siete de la Credencial de la Elección de la Junta Directiva de la Sociedad arriba
mencionada, en la cual aparece que en Junta General Ordinaria, celebrada a las
ocho horas del día veintinueve de Mayo del año mil novecientos noventa y nueve
se eligió a la Junta Directiva de dicha Sociedad, habiendo quedado elegidos de la
siguiente forma: Director […]; Director Secretario […]; Primer Director Suplente
[…]; Segundo Director Suplente […]; y por constancia expedida a las nueve
horas y catorce minutos del día veinticuatro de Octubre del año dos mil once por
la […] Registradora del Departamento de Documentos Mercantiles del Registro
de Comercio, se daconstancia que la anterior Credencial de Elección de Junta
Directiva es la última que se encuentra inscrita en dicho Registro de Comercio a

152
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

favor de la Sociedad demandada.- De la referida prueba documental aportada,


se observa que el señor […] ha tenido participación en la Junta Directiva de la
Sociedad demandada en un determinado momento, propiamente desde el trece
de Febrero de mil novecientos setenta y ocho, que fue nombrado como Director
Secretario, lo que induce a pensar que lo ha sido posiblemente también en otros
subsiguientes períodos; situación que ciertamente no se acreditó por el [apoderado
legal de la parte demandante], en cumplimiento a la prevención formulada por el
señor Juez A Quo; sin embargo, considera esta Cámara que tal hecho no es motivo
para tener por IMPROPONIBLE la demanda ejecutiva presentada por la parte
actora, en virtud, que la intervención del señor […], lo es en un acto aislado de
renovación de la Frecuencia de Radio para el período mil novecientos noventa y
ocho, intervención que es instrascendente al objeto del presente Juicio ejecutivo
Civil, en donde se demandan períodos distintos, y que dicho sea de paso pudieron
haber sido renovados por el mismo señor […] o bien por otra persona. En otras
palabras, la intervención o no del señor […], al igual que acreditar su calidad de
representante legal de la Sociedad, o que ha sido autorizado por la misma, es ajena
a la viabilidad del Título Ejecutivo presentado a cobro; en otras palabras, el objeto
del proceso ejecutivo se vincula tradicionalmente con la obligación de pago de
una suma de dinero, líquida y exigible, contenida en un documento que constituye
el TÍTULO EJECUTIVO y la eficacia de éste, le permite al juzgador considerar
acreditada en prima facie, la existencia y cuantía del crédito ejecutado; de ahí que
pretender controvertir los orígenes de la obligación contraída, es algo que escapa al
objeto del proceso ejecutivo que se analiza.

La oposición que puede formular el demandado frente a la pretensión ejecutiva


entablada, se encuentra enmarcada dentro de los motivos que señala el Art. 464
CPCM. Los cuales son: pago efectivo; pluspetición, prescripción o caducidad;
falta de requisitos legales del título ejecutivo; quita, espera o pacto o promesa de
no pedir; transacción. De tales motivos, la parte demandada ha invocado falta de
requisitos legales del título ejecutivo presentado a cobro, los cuales a criterio de este
tribunal no fueron establecidos en el proceso ejecutivo que nos ocupa.

No obstante lo antes dicho, hay un hecho innegable probado en autos, que a la Sociedad
PROBECA, S.A. DE C.V. se le ha concesionado por parte de la SUPERINTENDENCIA
GENERAL DE ELECTRICIDAD Y TELECOMUNICACIONES la frecuencia de
Radio D< = 143.690 Mhz RX = 140.710 Mhz con cobertura en la Zona Occidental,
por la cual se le reclama las Tasas no pagadas referentes a los años mil novecientos
noventa y nueve, dos mil, dos mil uno, dos mil dos, dos mil tres, dos mil cuatro, dos
mil cinco, dos mil seis, dos mil siete, dos mil ocho, dos mil nueve, dos mil diez, dos
mil once; se ha probado también que esta misma Sociedad ha pagado renovación de
dicha concesión, por el año mil novecientos noventa y ocho; por lo que pretender
argumentar que al no haber actuado en calidad de representante legal o con
autorización alguna el señor […], por parte de la Sociedad demandada para tramitar
renovaciones ante la SUPERINTENDENCIA GENERAL DE ELECTRICIDAD Y
TELECOMUNICACIONES y que al no haberse probado tal hecho se genera esa falta
de legítimo contradictor que vuelve improponible la demanda presentada en contra
de la Sociedad PROBECA, S.A. DE C.V., es algo que este Tribunal no comparte;
ya que el objeto del proceso Ejecutivo como se dijo al principio de este numeral,

153
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

es verificar por el juzgador que la obligación reclamada se encuentra en mora, que


sea exigible, líquida o liquidable. Por otra parte, se reitera que la oposición que
contempla el Art. 464 del CPCM. en su numeral tercero, se refiere aquellos casos
en que el Título ejecutivo como tal, no cumple los requisitos legales para su cobro,
situación que no acontece en el caso de autos. Por consiguiente, se deberá revocar
la sentencia dictada por el señor Juez A Quo, por no estar arreglada a derecho en
el punto en que declara la improponibilidad sobrevenida de la demanda presentada
por la […], confirmándose en lo demás resuelto y ordenándose seguir con el trámite
a la demanda incoada en contra de la Sociedad […]., hasta su completo término.-”

Sobre este punto reclamado por el Apoderado de la parte actora en el recurso


instaurado, ésta Cámara observa: que el [apoderado legal de la parte demandante],
pretendió […], que la demanda presentada en contra de la Sociedad PROBECA, S.A.
DE C.V., sea extensiva a los socios de la referida Sociedad en su carácter personal y
como responsables solidarios e ilimitados de las obligaciones de dicha sociedad, de
conformidad a los Arts. 260, 265 del Código de Comercio, por lo que el señor Juez
A Quo, le efectúo mediante resolución de las quince horas diecisiete minutos del
día quince de Junio del corriente año, prevención a dicho profesional en el sentido
de que manifestara el lugar en esta ciudad, en donde podían ser emplazados los
accionistas de la Sociedad demandada, así como la individualización de cada uno
de ellos por medio de sus Documentos Únicos de Identidad personal, Art. 3 de la
Ley Especial Reguladora de la Emisión del Documento Único de Identidad; a lo
cual, el [apoderado legal de la parte actora], únicamente señaló como dirección
para que fueran emplazados dichos accionistas, la misma dirección de la Sociedad
demandada, o sea la […], lo cual a criterio del Juez Sentenciante, imposibilita
cumplir con los requisitos del derecho de audiencia del que gozan las personas
que ha sido demandadas, Art. 177, 181 del CPCM., 11 Cn., 64 C.; argumentando
además, que en tales condiciones se vuelve ineficaz el futuro emplazamiento de
dichos demandados, ya que no habría manera de hacerles saber el emplazamiento
de forma personal, para que ejerzan su derecho de defensa, prevención la cual no
fue cumplida por el Abogado de la parte demandante, teniéndose por desatendidas
las prevenciones hechas y como consecuencia de ello, declaró inadmisible la
ampliación de la demanda interpuesta en contra de los señores […] accionistas de
la Sociedad demandada, fundamentándose en el Art. 278 CPCM. que prescribe que
si no se cumpliere por la parte interesada en el término de cinco días hábiles, la
demanda es declarada inadmisible.-

Efectivamente, al no señalarse en una demanda el lugar de cada uno de los


accionistas para que éstos reciban el emplazamiento de la demanda incoada en
su contra, se incumplen los preceptos legales de audiencia señalados por el Juez
A Quo, lo que vuelve defectuosa la demanda presentada en tales términos; y al no
haberse solventado en legal forma dicho defecto por parte del Abogado impetrante,
era procedente declarar la inadmisiblidad de la ampliación de demanda tal como lo
hizo el señor Juez A Quo.-

154
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

CÁMARA DE LA TERCERA SECCIÓN DEL CENTRO: Sentencia de las diez


horas y cincuenta minutos del día trece de septiembre de dos mil doce, Referencia
C-22-PE-2012-CPCM

“La doctrina nacional en esta materia plantea que la ley procesal le otorga especial
relevancia a la obligación que tiene el juez de examinar de oficio la pretensión y la
correcta elección del proceso correspondiente, hecho o planteado inicialmente por
el demandante. Como resultado de lo anterior, ante una incorrecta invocación del
tipo de proceso por el demandante, el juzgador está obligado a indicar y tramitar
las pretensiones, tomando en cuenta la materia y el valor de las pretensiones
y además, como Director del proceso que es, ordenará el tipo de proceso que le
corresponda seguir según lo ordenado por la Ley. Existe cuestionamiento sobre
esta norma procesal, porque se dice que por ser un proceso de carácter privado,
con un contenido patrimonial y de tendencia del sistema acusatorio, priva el
Principio Dispositivo (Art. 6 CPCM); sin embargo, tal idea es imprecisa, debido a
que el primer acercamiento al escrito de la demanda es del juzgador ante quién se
interpuso la pretensión y por tanto, es él quien debe examinar in limine la elección
correcta del proceso, tomando en cuenta en todo caso, los criterios de competencia.
(Para mayor comprensión del tema, véase el Colectivo del Código Procesal Civil y
Mercantil Comentado, del Consejo Nacional de la Judicatura, en su página 240).

VI.- En el caso in examine, consideramos que la pretensión puede ventilarse en un


proceso declarativo, el cual puede ser encausado por el juzgador en el ejercicio
de su poder de dirección del proceso, sin que ello signifique un asesoramiento, o
imparcialidad de parte del juez de la causa; todo lo contrario, es una auténtica
tutela de los derechos del ciudadano, porque desde el punto de vista del Principio
de Legalidad, se preservan los actos procesales por los cuales se debe tramitar la
pretensión del actor y por otro lado, se brinda de parte de la administración de
justicia, Protección Jurisdiccional al ciudadano.

En este caso en particular, no se van a modificar los hechos planteados en la


demanda, ni la teoría jurídica, ni mucho menos los medios probatorios ofertados,
sino que, únicamente se va a determinar, por quien es el legal director del juicio,
el proceso por medio del cual se ventilará la pretensión; por tanto, la demanda
bajo un esquema de proceso declarativo, en los términos propuestos por el actor, es
proponible y no observamos ningún defecto de fondo.”

SALA DE LO CIVIL DE LA CORTE SUPREMA DE JUSTICIA: SAN


SALVADOR, en Sentencia de fecha once de junio de dos mil catorce, con Referencia
288-CAC-2012

“…dentro del rechazo sin trámite completo de la demanda se encuentran defectos


formales o de fondo debido a que el juez es el director y no solamente un mero
observador, éste controla que la pretensión sea adecuada para obtener una sentencia
satisfactoria (Art.14 C.P.C.M.). A raíz de las amplias facultades que la figura en comento
otorga al juez, algunos profesionales del derecho y doctrinarios, consideran que ésta va
en detrimento al acceso de la protección jurisdiccional, lo cual no es cierto; pues, las
causas legales del rechazo al trámite de la demanda deben interpretarse en el sentido

155
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

más favorable a la efectividad del derecho de acceso de la protección jurisdiccional.


La improponibilidad está reservada solo para casos de vicios que por su naturaleza, no
admiten corrección o subsanación, pues la pretensión no es judiciable, implicando un
defecto absoluto. Lo que se toma como improponible es la pretensión y nunca la demanda
o el derecho de acción, lo que rechaza es la pretensión contenida en la demanda, debido
a un defecto absoluto en la facultad de juzgar y que imposibilita un pronunciamiento
por parte del órgano jurisdiccional sobre el fondo del asunto, pudiendo ser declarada al
inicio del proceso (in limine litis) o en cualquier estado de la causa (in per sequendi iitis).
En tal sentido, la meditación que impone el contenido de la improponibilidad objetiva
de una pretensión atiende a la ausencia absoluta de fundamentos, a aquel interés que
jurídicamente no es digno de protección y que le impone al juez un examen anticipado
de la pertinencia sustancial, pues que si lo deriva a la sentencia de mérito corre el riesgo
de provocar un dispendio jurisdiccional innecesario por haber tramitado un proceso
carente de la mínima motivación en Derecho. d) Supuestos de la Improponibilidad según
jurisprudencia de la Sala: Jurídicamente, la Sala ha señalado que existen tres supuestos
de Improponibilidad jurídica de la demanda: 1) Improponibilidad subjetiva o falta de
legitimación.- Es la facultad oficiosa del juez para decidir antes de dar traslado de
la demanda, si las partes tienen legitimación para demandar o ser demandadas, y si
esta carencia es manifiesta el juez rechaza in limine la demanda.- 2) Improponibilidad
objetiva.- Cuando de forma grave y evidente la pretensión carece de sustento legal o
la demanda tiene por objeto algo que es inmoral o prohibido.- 3) Falta de interés.- El
interés de las partes para litigar debe ser real, con el objeto que la resolución judicial
recaiga en algo concreto, evitándose declaraciones abstractas. (Ref. 251-CAC-2008,
sentencia definitiva del 23-II-2009). Desde luego, ello implica un examen de los
requisitos, presupuestos procesales de forma y fondo. Los presupuestos procesales
de forma son aquellos requisitos sin los cuales no se constituye una relación procesal
valida; cuya ausencia deja al tramite seguido como un proceso invalido, entre estos
esta la observancia de los requisitos de la demanda (o la demanda en forma, por lo
que la demanda debe reunir los requisitos de forma que señala el Art. 276 C.P.C.M.)
Los presupuestos procesales de fondo o condiciones de la acción son requisitos
necesarios para que una pretensión procesal hecha valer con la demanda sea objeto de
pronunciamiento por el juez. El incumplimiento de los presupuestos procesales origina
una sentencia absolutoria en la instancia, el de los requisitos materiales o esenciales, ha
de ocasionar una sentencia absolutoria de fondo para el demandado, que por gozar de
los efectos materiales de la cosa juzgada provocará la desestimación irrevocable de la
pretensión. La Sala ha señalado anteriormente, que los requisitos materiales-esenciales-
de la pretensión podemos clasificarlos en: a) Subjetivos, los cuales vienen determinados
por la legitimación (activa y pasiva de las partes); y, b) Objetivos, los cuales están
conformados por la petición (la cual debe distinguirse su objeto inmediato del mediato)
y la fundamentación o causa de pedir. (Ref. 151-CAM-2013, admisión del recurso de
casación del 11-IX-2013). La petitum es la declaración de voluntad que, plasmada en el
«pido”de la demanda, integra el contenido sustancial de la pretensión, determinando los
límites cualitativos y cuantitativos del deber de congruencia del fallo, la parte dispositiva
de la Sentencia. Dentro de la petición puede distinguirse su objeto inmediato del mediato.
El objeto inmediato, lo constituye la petición strictu sensu, es decir, la solicitud al juez
que declare la existencia de un derecho o relación jurídica. El objeto mediato, viene
determinado por el derecho subjetivo, bien o interés jurídico al que dicha petición se

156
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

contrae o sobre el que recae y que, junto a los requisitos materiales de ser cierto y licito
dentro del comercio, ha de reunir el procesal de ser determinado. Ahora bien, la petición
por sí misma no integra la totalidad del objeto procesal, sino que precisa también de la
fundamentación; es decir, se conoce por algunos como la «causa de pedir”y otros lo
distinguen entre los «hechos”y los «fundamentos de derecho”que sustancian la petición.
Para nuestro legislador, la causa de pedir la constituirá el conjunto de hechos de carácter
jurídico que sirvan para fundamentar la pretensión, ya sea identificándola, ya sea
dirigiéndose a su estimación (Art. 91 C.P.C.M.). Conforme al Art. 277 C.P.C.M., como
supuestos para declarar la improponibilidad, se pueden desglosar así: 1) Defecto en la
pretensión (objeto ilícito, imposible, absurdo; el cual se advierte en la fundamentación);
2) Carencia de competencia (competencia objetiva, grado);
3) Atinente al objeto procesal (litispendencia, cosa juzgada, compromiso pendiente);
4) Evidente falta de presupuestos materiales o esenciales (falta de legitimación
activa o pasiva de las partes); y, 5) Otros semejantes. Ahora bien, respecto al último
supuesto de “otros semejantes”, ha de referirse a otros presupuestos procesales
que no fueron descritos en el precepto bajo estudio; entre ellos, aquéllos relativos
al órgano jurisdiccional, como la falta de jurisdicción, competencia objetiva,
territorial y funcional; asimismo, comprende los relativos a las partes, como la falta
de capacidad para ser parte, la capacidad procesal o su falta de postulación cuando
no existe poder. De tal manera, que el Juzgador no puede encuadrar cualquier otro
supuesto para declarar la improponibilidad. Por otra parte, siendo los presupuestos
materiales correlativos a los requisitos de fondo de la pretensión, reside en la
fundamentación de la misma, que haga falta la legitimación activa o pasiva, o que el
objeto de aquélla sea ilícito, absurdo o imposible…”
Inadmisibilidad de la demanda
Art. 278.- Si la demanda fuera oscura o incumpliera las formalidades establecidas para su
presentación en este código, el Juez prevendrá por una sola vez para que en un plazo no mayor de
5 días se subsanen tales imperfecciones. Si el demandante no cumple con la prevención, se dará
por terminado el proceso declarando inadmisible la demanda. Esta especie de rechazo in limine
deja a salvo el derecho material.
El auto por el cual se declara inadmisible una demanda sólo admite el recurso de revocatoria.
CÁMARA SEGUNDA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL
CENTRO, SAN SALVADOR, Apelación N°1-3CM-13-A de fecha siete de febrero
de dos mil trece.
“De conformidad a lo dispuesto en el Art. 278 CPCM, el juez puede prevenir al
actor si la demanda fuera oscura o incumpliera las formalidades establecidas para
su pretensión; la prevención, constituye una medida transitoria dictada por el juez
a fin de que el actor o demandado subsanen los defectos de tipo formal- esencial
en la formulación de sus escritos, los cuales por su naturaleza ha de admitir su
subsanación; asimismo, de conformidad a lo establecido en el Art. 14 CPCM, el juez
es el director del proceso, por ello está facultado entre otras cosas para prevenir a
las partes la subsanación de cualquier deficiencia de forma que le impida conocer
de las pretensiones de ambas partes; ya que en el caso sugiere el error cometido no
es un defecto de la pretensión.”

157
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

Admisión de la demanda

Art. 279.- Si, presentada la demanda o subsanada la prevención, el Juez estima que aquélla
cumple con los formalismos esenciales para entrar al conocimiento de la pretensión en ella
contenida, y que de la misma resulta su facultad absoluta de juzgar, admitirá la demanda mediante
auto, para iniciar el correspondiente procedimiento.

La reconvención estará sujeta también al examen de fondo y forma a que se refiere el presente
artículo y los dos anteriores.

CÁMARA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DE OCCIDENTE:


SANTA ANA, en Sentencia de fecha diecisiete de abril de dos mil quince, con
Referencia APEL-48-15-4

“…Nuestro Código Procesal Civil y Mercantil en su Art. 278 comprendido en el


título segundo, que se refiere al proceso común, establece las condiciones por las
cuales opera la institución de la Inadmisibilidad de una demanda, delegándose
al juzgador la facultad de examinar, calificar las formalidades establecidas en
la ley para la admisibilidad de las demandas o solicitudes presentadas a su
conocimiento, determinando si las mismas carecen de formalidades legales o son
oscuras, prescribiendo además el legislador en tal sentido, que si las demandas
presentadas carecieren de tales requisitos se deberá prevenir por una sola vez
a la parte interesada para que en un plazo no mayor de cinco días, se subsanen
las mismas; si la parte interesada no las subsana en ese plazo, la ley establece en
el Art. 278 del CPCM., una especie de sanción ante tal incumplimiento, que es la
INADMISIBILIDAD DE LA DEMANDA, dejándose a salvo el derecho material de la
parte interesada, agregando el inciso segundo de la disposición últimamente citada,
que el auto que declara inadmisible la demanda solamente es controvertible por
medio del recurso de revocatoria instaurado ante el mismo juez…”

CÁMARA TERCERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO: SAN SALVADOR, en Sentencia de fecha cuatro de noviembre de dos
mil quince, con Referencia 213-CD-15

“…3.- Al respecto es necesario señalar que de todos es sabido que la demanda es


el medio por el cual inicia todo proceso, la cual debe contener los requisitos que
estipula el Art. 276 CPCM…; no obstante, si en la misma se observare oscuridad o
incumpliera formalidades establecidas para su presentación, da lugar a prevención,
a fin de dársele la oportunidad al actor, de que la interponga correctamente, como
se establece en el Art. 278 CPCM, disposición que también señala que si se cumplen
los requisitos que debe reunir o se subsana la prevención si acaso hubo lugar, se
admitirá la demanda y caso de no subsanarse, se declarará inadmisible. 4.- De lo
que se advierte que la admisión a trámite de una demanda implica la declaración
judicial de que ésta cumple con los requisitos de admisibilidad; no se exige el
análisis de las posibilidades del éxito final de la pretensión, así como tampoco deba
entenderse que el admitirla sea indicativo de una sentencia estimatoria; de ahí que
la admisión a trámite de la demanda se basa en un control judicial de carácter
esencialmente formal y no sustantivo…”

158
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

CÁMARA DE LA SEGUNDA SECCIÓN DE ORIENTE; Sentencia de fecha


veintiséis de febrero de dos mil trece, con Referencia APE-2-1-2013

“…toda demanda se estudia bajo dos ángulos: 1) como acto procesal que contiene
varías formalidades según lo ordena el Art. 276 CPRCYM, y 2) que dentro de los
requisitos se contiene una o varias pretensiones con validez ostensible para poder
admitir la demanda. Conforme la primera si se viola procede la inadmisibilidad;
pero sí se viola la segunda procede la improponibilidad. Esta institución procesal
nace cuando la pretensión alegada carece de requisitos de validez. El Art. 277
CPRCYM, señala los distintos motivos que invalidan la pretensión, doctrinariamente
la pretensión es conceptualizada como “una declaración de voluntad, en la que se
solícita una actuación del órgano jurisdiccional frente a personas determinada y
distinta del autor de la declaración”. De este concepto se concluye que la pretensión
es un acto procesal, no un derecho y que la motivan dos requisitos la petición y la
fundamentación. Los elementos de la petición son 1) el sujeto activo, quien formula
la petición, 2) el sujeto pasivo que es la persona frente a quien se formula, 3) el
tribunal a quien se le presenta la demanda, órgano jurisdiccional, 4) La cosa o
declaración, el objeto de la pretensión. La fundamentación, se divide en supuesto
derecho y en supuesto de hecho. El primero la existencia de una norma cuyos
supuestos contiene la actuación de los hechos y sus consecuencias alegados en
la pretensión. El fundamento de derecho es la existencia, de una o varías normas
que permiten al titular de la pretensión obtener la actuación pedida por coincidir
los hechos y sus consecuencias dentro de la norma. El fundamento de hechos es
lo que finalmente pretende el autor de la solicitud. El examen de la petición y la
fundamentación, si se llenan tales requisitos es lo que debe dirigir al juez si una
demanda es improponible o no, bien al inicio del proceso, bien durante el curso del
mismo. Los motivos de naturaleza insubsanables que señala el Art. 277 CPR y C. YM
son : 1) ausencia de un presupuesto de la Litis: a) bien de carácter subjetivo como
la falta de competencia, o, b) La ausencia de presupuestos objetivos como la ilicitud
2) por aparecer como obstáculo impeditivo de una sentencia de fondo como la cosa
juzgada y la Litispendencia…”

Ampliación de la demanda

Art. 280.- No se permitirá la acumulación de pretensiones después de contestada la demanda.

Antes de la contestación podrá ampliarse la demanda para acumular nuevas pretensiones o


para dirigir las ya ejercitadas contra otros demandados. En tal caso, el plazo para contestar la
demanda se contará desde la comunicación de la ampliación de la misma.

En la contestación, el demandado podrá oponerse a la acumulación pretendida, cuando ésta no


se acomode a lo dispuesto en las normas que regulan la acumulación, y se resolverá sobre ello en
la audiencia preparatoria.

Efectos de la demanda

Art. 281- Desde la presentación de la demanda, si resulta admitida, se produce la


litispendencia.

159
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

Las alteraciones o innovaciones que una vez iniciado el proceso se produzcan en cuanto al
domicilio de las partes, la situación de la cosa litigiosa y el objeto del proceso, así como las que
introduzcan las partes o terceros en el estado de las cosas o de las personas, no modificarán la clase de
proceso, que se determinarán según lo que se acredite en el momento inicial de la litispendencia. (2)

SALA DE LO CONSTITUCIONAL DE LA CORTE SUPREMA DE


JUSTICIA: Sentencia de Amparo, de fecha veinticuatro de junio de dos mil quince,
con Referencia 283-2015

“…1. Entendida la litispendencia como el conjunto de efectos jurídicos procesales


que origina la admisión a trámite de una demanda y, con ello, el reconocimiento
de que existe un conflicto jurídico formalmente planteado ante un tribunal de
justicia, el cual debe ser resuelto por este último, ella produce importantes efectos
procesales, entre los que destacan los siguientes: i) desde el momento de producción
de la litispendencia surge para el tribunal el deber de dictar sentencia de fondo –
esto condicionado a la concurrencia de los presupuestos procesales–; ii) respecto
de las partes se produce la asunción de las expectativas, cargas y obligaciones
que están legalmente vinculadas a la existencia de un proceso; iii) la existencia
de un proceso con la plenitud de sus efectos impide la existencia de otro en que
se den las identidades propias de la cosa juzgada –esto es, subjetivas, objetivas y
causales–; iv) el juez competente en el momento de producirse la litispendencia lo
sigue siendo a pesar de los cambios que a lo largo del proceso puedan producirse;
y v) quienes estaban legitimados en el momento de la litispendencia mantienen esa
legitimación, sin perjuicio de los cambios que puedan producirse en el tiempo de
duración del proceso. En estrecha relación con lo expuesto, debe acotarse que, de
conformidad con lo establecido en el Art. 281 del Código Procesal Civil y Mercantil
–de aplicación supletoria en el proceso de amparo–, la litispendencia se produce
desde la presentación de la demanda, si esta resulta admitida. Asimismo, el Art.
109 de dicho cuerpo normativo dispone que: “... [c]uando el riesgo de Sentencias
con pronunciamientos o fundamentos contradictorios, incompatibles o mutuamente
excluyentes obedezca a la existencia simultánea de dos o más procesos entre las
mismas partes y con relación a la misma pretensión, deberá acudirse a la excepción
de litispendencia, sin que quepa la acumulación de dichos procesos...”. 2. La
jurisprudencia de este Tribunal también ha sostenido –verbigracia en la resolución
del 12-IV-2005 pronunciada en el Amp. 141-2005– que la figura de la litispendencia
produce la improcedencia de la demanda; así, se afirma que eventualmente pueden
plantearse ante el tribunal dos o más demandas que contengan pretensiones
estructuralmente idénticas, las cuales se encuentren siendo controvertidas en
distintos procesos; es decir, que sean idénticas en sus elementos subjetivo, objetivo
y causal. Esto es lo que se conoce como la litis pendencia, la cual implica la falta
de un presupuesto material para dictar la sentencia de fondo, vicio que puede ser
advertido por el mismo tribunal o alegado por las partes. Por otra parte, se observa
que a través de dicha institución la alegación como defensa procesal de la existencia
paralela de más de un proceso sobre el mismo reclamo o conflicto entre las mismas
partes, se persigue en esencia evitar que pretensiones idénticas se traten en distintos
procesos, ya que en tal caso, es contingente el pronunciamiento de Sentencias
contradictorias que quebranten la cosa juzgada. 3. Ahora bien, dada la perfecta
identidad que supone la litispendencia entre los elementos estructurales -objetivos,

160
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

subjetivos y causales- de las pretensiones que se encuentran siendo tramitadas


en diferentes procesos, carece de lógica jurídica proceder a la acumulación de
los mismos, no obstante la previsión legal al respecto. Resulta más atinado que
predomine la figura procesal de la litispendencia, con la consecuente paralización
o finalización definitiva del proceso que se ha promovido con posterioridad, a través
de la declaratoria de improcedencia, si se determina liminarmente; puesto que no
existen elementos nuevos que puedan incorporarse mediante la acumulación de los
procesos ni se producen efectos negativos en las esferas jurídicas de las partes por
prescindir de la reunión procesal mencionada…”

Prohibición del cambio de demanda

Art. 282.- Establecido lo que sea objeto del proceso en la demanda, en la contestación y, en su
caso, en la reconvención, las partes no podrán alterarlo posteriormente.

Lo dispuesto en el inciso anterior ha de entenderse sin perjuicio de la facultad de formular


alegaciones complementarias, en los términos previstos en el presente código.

CÁMARA DE LA TERCERA SECCIÓN DEL CENTRO: SAN VICENTE, en


la Sentencia de fecha veintiocho de mayo de dos mil trece, con Referencia C- 17 -
PC- 2013-CPCM

“…1. Si bien los Arts. 94 y 282 CPCM, contemplan la prohibición procesal de “non
mutatio libelli”, es decir, una vez contestada la demanda, no se puede modificar la
pretensión, lo cierto, es que la pretensión está constituida por cuatro elementos: 1)
Un elemento subjetivo: se refiere a las personas que figura en la relación jurídica:
pretensor, resistente y juez; 2) Un elemento objetivo: se refiere al objeto, es decir, a
lo pedido; 3) Una actividad: Es la situación que se pretende modificar, a través del
proceso y que se constituye de tres elementos: de una petición, de un sustento jurídico
y además debe la obligación de ser fundada; y, 4) Finalmente de una causa petendi:
la cual está constituida por los hechos jurídicos que sostienen la pretensión y las
conclusiones que son los que indican los efectos correspondientes… solo prohíben
la modificación de la causa de pedir, del objeto y de las partes, pero nada se dice del
fundamento de Derecho, es decir, del elemento de actividad…”

SECCIÓN SEGUNDA
INTERVENCIÓN DEL DEMANDADO

Emplazamiento del demandado

Art. 283.- Admitida la demanda, se hará la comunicación de ella a la persona o personas contra
quienes se entable, y se les emplazará para que la contesten dentro de los veinte días siguientes.

CÁMARA DE LA TERCERA SECCIÓN DEL CENTRO: Sentencia de fecha


veintinueve de mayo de dos mil trece, con Referencia C-18 -DC- 2013-CPCM

“…2. Los emplazamientos en materias civil y mercantil son actos de comunicación


procesal mediante los cuales un órgano jurisdiccional convoca a una persona que se
llama emplazado para que comparezca ante aquél dentro de un plazo determinado
y con el fin de apersonarse y poder intervenir en un proceso. En un sentido más

161
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

limitado, el emplazamiento es el llamamiento que hace el Juez a la parte demandada


para que, si ésta lo considera conveniente, se apersone en las actuaciones y conteste
la demanda. La esquela de emplazamiento contiene básicamente las menciones de
la cédula de citación. Los emplazamientos para el proceso sólo pueden practicarse
en la forma establecida por la ley y no por correo y la falta de emplazamiento para
el proceso quebranta una de las garantías básicas del proceso, produciendo nulidad
y asimismo pudiendo ser objeto con posterioridad de un proceso constitucional de
amparo. Sobre el particular, el Art. 11 de la Constitución de la República preceptúa
que ninguna persona puede ser privada del derecho a la vida, a la libertad, a la
propiedad y posesión, ni de cualquier otro de sus derechos sin ser previamente
oída y vencida en juicio con arreglo a las leyes; ni puede ser enjuiciada dos veces
por la misma causa. 3. La Suprema Corte de los Estados Unidos de América ha
tenido necesidad reiteradamente de determinar en qué consiste la garantía del
Debido Proceso Adjetivo a los casos de simple pronunciamiento seguido ante la
administración. Su fórmula ha sido expresada mediante la famosa frase de que
el proceso adjetivo constituye dar al demandado la garantía de “””””””su día
ante el Tribunal””””””””””””””””(his day in court). Esta garantía consiste,
sustancialmente, en un emplazamiento (notice) y en él la posibilidad de ser
escuchado (hearing) por Jueces idóneos y responsables. Más se exige una razonable
oportunidad para hacer valer la defensa, una posibilidad amplia de producir pruebas
y la garantía que supone la intervención de los Jueces del Estado, con su proverbial
respaldo de independencia, de imparcialidad, de autoridad y de responsabilidad. 4.
Así las cosas, pues, el Código Procesal Civil y Mercantil establece como principio
del emplazamiento, que todo demandado debe ser debidamente informado de la
admisión de una demanda en su contra, a fin de que pueda preparar la defensa de
sus derechos o intereses legítimos. A tal efecto, el actor deberá indicar la dirección
donde puede ser localizado el demandado. Si manifestare que le es imposible
hacerlo, se utilizarán los medios que el juez considere idóneos para averiguar
dicha circunstancia, pudiendo dirigirse en virtud del Principio de Colaboración
regulado en el Código Procesal Civil y Mercantil, a registros u organismos públicos,
asociaciones, entidades o empresas que puedan dar razón de ella, quienes deberán
rendir el informe respectivo en un plazo que no excederá de diez días. (Se subraya y
se pone en negrito, por la relevancia normativa de esta disposición procesal, la cual
no estaba contemplada anteriormente en el Código de Procedimientos Civiles, hoy
derogado y que hoy se vuelve imperativa su aplicación). La ley claramente expresa
que si se obtuviere el conocimiento de un domicilio o lugar de residencia por parte
del juez, se practicará el emplazamiento en la forma de rigor…”

CÁMARA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DE OCCIDENTE:


SANTA ANA, Sentencia de fecha once de agosto de dos mil once, con Referencia
97-2011-4

“…El derecho de audiencia esta regulado en el Art. 11 de la Constitución y se


caracteriza, en primer lugar, por ser un derecho de contenido procesal, el cual
fue instituido fundamentalmente para la protección efectiva de los derechos de
los gobernados, estén o no reconocidos en la constitución. El respeto al derecho
de audiencia es una obligación de todas las autoridades estatales, pues tienen que
proceder conforme lo prescribe tal disposición constitucional, inclusive si en la

162
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

ley secundaria no se establece un procedimiento previo para privar de un derecho


a una persona. La Sala de lo Constitucional reiteradamente ha sostenido que:
“el derecho de audiencia, es un concepto abstracto en cuya virtud se exige que
antes de procederse a “limitar”la esfera jurídica de una persona o privársele por
completo de un derecho, debe ser oída y vencida en juicio con arreglo a las leyes.
Ha sostenida que este derecho puede verse desde un doble enfoque: la inexistencia
de proceso o procedimiento previo, o desde el incumplimiento de formalidades de
trascendencia constitucional necesarias al interior del mismo; por ende, existe
violación al derecho constitucional de audiencia cuando el afectado por la decisión
estatal no ha tenido oportunidad real de defensa, privándosele de un derecho, sin
el correspondiente proceso, o cuando en el mismo no se cumplen las formalidades
esenciales establecidas en las leyes que desarrollan el derecho de audiencia”. En
efecto, la existencia del proceso o procedimiento previo, supone dar al sujeto pasivo,
y demás intervinientes, la posibilidad de exponer sus razonamientos y defender sus
derechos de manera plena, facilitándole el ejercicio de los medios de defensa, lo
cual constituyen circunstancias ineludibles para el goce “irrestricto”del derecho
de audiencia... Las comillas y subrayados son de esta Cámara... Ref. sentencia de
la Sala de lo Constitucional, Corte suprema de Justicia, de las catorce horas del
diecinueve de julio de dos mil seis; sentencia de amparo 396-99, 11 de julio de 2000;
sentencia de amparo 378-99 de fecha 26 de junio de 2000, las dos últimas citadas
en “Líneas y criterios jurisprudenciales de la Sala de lo Constitucional, año 2000,
Págs. 59, 60. El derecho de defensa a su vez, esta íntimamente ligado al de audiencia,
pues cuando éste establece que en todo proceso o procedimiento se tiene que otorgar
o posibilitar- de acuerdo a la aplicación directa de la Constitución- al menos una
oportunidad para oír la posición del sujeto pasivo, no cabe que duda que todas las
oportunidades de defensa, a lo largo del proceso, también son manifestaciones o
aplicaciones in extremis del derecho de audiencia. Ahondando mas en este tema,
la Sala de lo Constitucional, en la sentencia de habeas corpus pronunciada el 21
de marzo de 2003, señalo que tal derecho puede entenderse “Como la actividad
procesal dirigida a hacer valer ante una autoridad judicial o administrativa, los
derechos subjetivos y los demás intereses jurídicos de la persona contra b cual se
sigue un proceso o procedimiento.”...Lineas y criterios jurisprudenciales, Sala de
lo Constitucional, 2006. pags. 66 y 67. En el sublite, es claro, que al restringir el
termino para contestar la demanda (a un día), se está limitando o restringiendo,
el derecho de audiencia, el de defensa y por ende, el del debido proceso, ya que
no se ha respetado la normativa constitucional para la defensa de los derechos del
demandado, pues el derecho que ostensiblemente tiene para contestar la demanda,
alegar otras excepciones, o reconvenir al actor, ( principio de contradicción ) se ha
limitado a un día, lo cual puede considerarse insuficiente, cuando la ley expresamente
ha previsto que para tales actos procesales, el demandado tiene el termino de veinte
días; y es que precisamente los fines principales del debido proceso, son el respeto a
los derechos fundamentales que no pueden ser limitados por injustificadas razones,
y la obtención de una sentencia ajustada a derecho.-La Sala de lo Constitucional
en diversos procesos, ha reiterado que el debido proceso contenido en el Art. 14
Cn, se refiere al proceso constitucionalmente configurado, en el cual deben de
respetarse los derechos fundamentales y garantías procesales de las personas.
Líneas y criterios jurisprudenciales de la Sala de lo Constitucional, año 2000, Pág

163
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

195. Ahora bien, nuestros precedentes jurisprudenciales en materia Constitucional,


han sostenido que el amparo, se otorga a quienes han visto conculcado su derecho al
acceso a la jurisdicción por una aplicación o interpretación formalista o restrictiva de
la norma procesal, puesto que si bien parecen ajustadas al tenor literal del texto en que
se encierra la norma procesal, aquella puede resultar contraria al espíritu y finalidades
de la misma, por ello, la Sala, recomienda realizar una interpretación en el sentido mas
favorable a la efectividad constitucional aludido. (Sentencia de amparo del 9-2-99, ref.
384-97), criterio que está en consonancia con lo regulado en el Art. 18 CPCM., el cual
sugiere que deben de evitarse las interpretaciones que supediten la eficacia del derecho
a aspectos meramente formales, procurando la protección y eficacia de los derechos de
las personas y la consecución de los fines que consagra la Constitución. Por todo ello,
resulta que la interpretación dada por esta Cámara en el subiudice, es la que mas
garantías ofrece al demandado para la protección de sus derechos y es la que tuvo
que haber optado la Juez Aquo en la tramitación del proceso…”

La contestación a la demanda

Art. 284.- En la contestación a la demanda, que se redactará en la forma establecida para ésta,
el demandado expondrá las excepciones procesales y demás alegaciones referidas a lo que pueda
obstar a la válida prosecución y término del proceso mediante sentencia sobre el fondo.

El demandado podrá manifestar, en la contestación, su allanamiento a alguna o algunas de las


pretensiones del demandante.

En la contestación, en su caso, el demandado podrá negar los hechos aducidos por el


demandante, exponiendo los fundamentos de su oposición a las pretensiones del que demanda y
alegando las excepciones que considerare convenientes.

El Juez podrá considerar el silencio o las respuestas evasivas del demandado como admisión
tácita de los hechos que le sean conocidos y perjudiciales.

SALA DE LO CONSTITUCIONAL DE LA CORTE SUPREMA DE JUSTICIA:


Sentencia de Inconstitucionalidad, de fecha once de julio de dos mil catorce, con
Referencia 39-2014

“…el Art. 284 Inc. 4° C.Pr.C.Mr. regula el resultado eventual de una cierta forma —
inadecuada o incompatible con la buena fe procesal— de ejercer tales derechos. En
definitiva, el potencial perjuicio para la posición procesal del demandado depende
en todo caso de la forma en que este ejerza sus derechos de audiencia y defensa y no
de limitaciones legales irrazonables para dicho ejercicio. Además, el reconocimiento
de esa atribución judicial no implica en sí misma una privación de los derechos
que se discutan en el proceso respectivo, puesto que se trata de una posibilidad
que el juez determinará en el momento procesal oportuno, sin que ello impida de
ninguna forma el normal desarrollo del resto de las actuaciones procesales y de las
consiguientes oportunidades para la intervención de las partes. Debido a todo lo
anterior, se concluye que la pretensión de inconstitucionalidad carece de fundamento
y por eso es improcedente…”

164
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

SALA DE LO CONSTITUCIONAL DE LA CORTE SUPREMA DE JUSTICIA:


SAN SALVADOR, en la Sentencia de Inconstitucionalidad, de fecha seis de febrero
de dos mil trece, con Referencia 115-2007

“…no existe la inconstitucionalidad advertida por la aparente transgresión


al derecho de defensa establecido en los Arts. 2 Inc. 1°, 11 y 12 Inc. 1° de la
Constitución, debido a que admite una interpretación conforme a la Constitución,
en el sentido que el principio de buena fe procesal (como expresión de los derechos
a la protección jurisdiccional y de defensa, así como el principio de igualdad
procesal) le impone al demandado la carga procesal de pronunciarse sobre las
afirmaciones de hecho que el demandante expone y de responder en forma directa
los cuestionamiento que este haga, con lo cual se pretende evitar que aquél sujeto
procesal perjudique eventualmente los derechos procesales de éste…” (Ref.:116-
2012, Inconstitucionalidad, sentencia 19-IV-2013)

La reconvención

Art. 285.- Al contestar a la demanda, el demandado podrá, por medio de reconvención,


formular la pretensión o pretensiones que crea que le competen respecto del demandante.

No se admitirá la reconvención cuando el Juez carezca de competencia por razón de la materia


o de la cuantía, o cuando la pretensión deba decidirse en un proceso de diferente tipo. Sin embargo,
podrá ejercitarse mediante reconvención en el proceso común la pretensión conexa que, por razón
de la cuantía, hubiere de ventilarse en un proceso abreviado.

La reconvención se propondrá separadamente, a continuación de la contestación, y se


acomodará a lo establecido para la demanda. La reconvención habrá de expresar con claridad lo
que se pretende obtener respecto del demandante y, en su caso, de otros sujetos. En ningún caso
se considerará formulada reconvención en el escrito del demandado que finalice solicitando su
absolución respecto de la pretensión o pretensiones de la demanda principal.

Contestación a la reconvención
Art. 286.- El demandante reconvenido y los terceros demandados en la reconvención podrán
contestar a la misma en el plazo de veinte días contados a partir de la notificación de la demanda
reconvencional. Esta contestación se ajustará a lo dispuesto para la contestación de la demanda.
Falta de personación del demandado
Art. 287.- La falta de personamiento del demandado en el plazo otorgado al efecto producirá
su declaración de rebeldía, pero no impedirá la continuación del proceso, sin que deba entenderse
su ausencia como allanamiento o reconocimiento de hechos.
La resolución que declare la rebeldía se notificará al demandado, y en adelante no se le hará
ninguna otra notificación, excepto la de la resolución que ponga fin al proceso.
Cualquiera que sea el estado del proceso en que el demandado rebelde comparezca, se
entenderán con él las actuaciones sucesivas, sin que se pueda retroceder en ningún caso.

165
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

INCISO DEROGADO. (2)


La admisión de los recursos interpuestos por la parte contraria se hará del conocimiento del
demandado rebelde.
SECCIÓN TERCERA
APORTACIÓN DE DOCUMENTOS

Aportación de documentos con los escritos iniciales

Art. 288.- Junto con la demanda y la contestación de la demanda, y junto con la reconvención
y la contestación de ella se deberán aportar los documentos que acrediten los presupuestos
procesales, así como el poder del representante procesal. También se aportarán los documentos o
dictámenes que comprueben el valor de la cosa litigiosa, a efectos de competencia y procedimiento.

Con los escritos iniciales se habrán de aportar en todo caso los documentos probatorios en
que las partes fundamenten su derecho. Si no se dispusiera de alguno de éstos, se describirá su
contenido, indicándose con precisión el lugar en que se encuentran, y solicitándose las medidas
pertinentes para su incorporación al proceso.

Se aportarán también los dictámenes periciales en que las partes apoyen sus pretensiones. En
el caso de que alguna de las partes sea representada por la Procuraduría General de la República,
no tendrá que aportar con la demanda o con la contestación el dictamen pericial, sino que se podrá
limitar a anunciarlo o solicitarlo.

Asimismo, deberán aportarse aquellos otros documentos que este código u otra ley exijan
expresamente para la admisión de la demanda.

CÁMARA DE LA TERCERA SECCIÓN DE OCCIDENTE, AHUACHAPÁN,


Apelación Referencia: A-P-C-S-D-22-12 de fecha diecinueve de julio de dos mil
doce.

“De conformidad con la ley, existen dos formas de obtener un informe pericial a
saber: la extrajudicial o de parte y la judicial, las cuales tienen una equiparación
en cuanto al valor probatorio, ya que ambas se ubican en un plano de igualdad
y por tanto no son excluyentes la una de la otra, es decir, que indistintamente sea
practicada la pericia por orden del juez o de parte antes del proceso, el potencial
valor probatorio del dictamen en cualquiera de los casos señalados debe ser el
mismo desde la perspectiva legal, pues será valorado por el juzgador conforme a las
reglas de la sana crítica, lo cual se desprende de los Arts. 216 y 416 del cuerpo de
leyes supra citado.

Atinente al momento de proposición de las pericias citadas, el mandato 288 de


la normativa mencionada, impone a las partes procesales la carga de aportar
con los respectivos trámites de alegación inicial, no sólo los documentos sino los
informes periciales de los que quieran valerse en el proceso, refiriéndose la ley
al perito de parte o perito extrajudicial, quien es buscado por cualquiera de las
partes procesales, para que una vez esté listo su dictamen sea aportado en la fase
de las alegaciones. Regla que también es regulada en el Art. 377 CPCM al decir:
“Cada una de las partes tiene derecho a designar su propio perito y a que se elabore

166
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

privadamente el dictamen correspondiente, el cual se acompañara a las respectivas


alegaciones, en los momentos determinados por este código”, en igual sentido el Art.
276.7 del cuerpo de leyes citado determina: “Todo proceso judicial principiará por
demanda escrita, en la que el demandante interpondrá la pretensión. La demanda
debe contener: Los documentos que acrediten el cumplimiento de los presupuestos
procesales, los que fundamenten la pretensión y los informes periciales…”(el
subrayado es nuestro). En ese sentido cuando el informe se aporta con los escritos de
alegaciones iniciales no hay ninguna proposición que hacer del perito, sino que ésta
ya se comprende en la propia entrega del dictamen, sin perjuicio de los controles que
podrán instarse en la audiencia preparatoria.

La otra circunstancia surge cuando no se haya hecho la aportación del dictamen


pericial en el trámite de las alegaciones, pudiendo cualquiera de las partes recurrir
al Juez para solicitar la designación de un perito judicial, en los casos reglados en el
Art. 381 CPCM, donde la actividad probatoria estará bajo el control judicial, tales
casos son: a) cuando la parte pretenda el nombramiento de perito in limine litis y la
urgencia del caso lo requiera, y sea calificada por el juez como pertinente y útil; b)
Por acuerdo entre las partes, según el Art. 378 de la ley aludida; c) cuando se trate
de pedir prueba pericial de contraste, para desvirtuar el valor de algún informe
aportado en las fases previas del proceso por la parte contraria; y, d) en el caso de
que estando las partes cada una por separado o varias estando de acuerdo en pedir
la prueba pericial, durante la audiencia preparatoria o audiencia del procedimiento
abreviado, el Juez la estime pertinente y útil.

Ahora bien, habrá que explorar si la prueba pericial de parte o judicial puede
ser propuesta en audiencia preparatoria; en ese sentido, el Art. 292 del Código
mencionado, regula que la audiencia señalada tiene por objeto: “intentar la
conciliación de las partes, a fin de evitar la continuación innecesaria del proceso;
para permitir el saneamiento de los defectos procesales que pudieren tener las
alegaciones iniciales; para fijar en forma precisa la pretensión y el tema de la prueba;
y para proponer y admitir la prueba que intenten valerse las partes en la audiencia
probatoria como fundamento de su pretensión o resistencia. Excepcionalmente, en
casos de urgencia, comprobada a juicio del tribunal, podrá recibirse la prueba que,
por su naturaleza, sea posible diligenciar en dicha audiencia.”

Las reglas generales sobre proposición de la prueba en la audiencia antes indicada se


encuentran estatuidas en el Art. 310 CPCM, y deben complementarse con las previstas
en relación con cada medio probatorio en el capítulo respectivo. El derecho a proponer
pruebas en la audiencia preparatoria, comprende todos los medios probatorios con
excepción de la prueba documental y dictámenes periciales de parte, que deben aportarse
con la demanda o la contestación a la demanda, de acuerdo a lo previsto en los Arts.
276.7, 288, 289 y 335 CPCM. Como lo indica el Art. 288 mencionado, “con los escritos
iniciales se habrán de aportar en todo caso los documentos probatorios en que las partes
fundamenten su derecho…”, y “se aportarán también los dictámenes periciales en que
las partes apoyen sus pretensiones.”

Por su parte el mandato 289 del cuerpo de leyes aludido, establece la regla de
preclusión de la aportación documental, aunque prevé la posibilidad de presentar

167
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

documentos posteriores a los actos de alegación o anteriores pero desconocidos, y


autoriza al demandante a presentar en la audiencia preparatoria, “los documentos,
medios, instrumentos, dictámenes e informes, relativos al fondo del asunto, cuyo
interés o relevancia sólo se ponga de manifiesto a consecuencia de alegaciones
efectuadas por el demandado en la contestación a la demanda”, situación que
también contempla el Art. 308 citado.

En cuanto a la prueba pericial judicial los Arts. 378 y 381 Inc. 3° determinan que las
partes podrán durante la audiencia preparatoria proponer este tipo de pericia, pero
en los casos allí señalados.

Como corolario de lo anterior se puede determinar, que existe un momento procesal


para aportar la pericia de parte y la pericia judicial, siendo que la primera se
debe proponer o aportar con las alegaciones iniciales, pero no en la audiencia
preparatoria, mientras que la pericial judicial se puede proponer in liminis hasta en
la audiencia preparatoria claro ésta que en los casos señalados por la ley y que han
sido anteriormente relacionados.”

CÁMARA PRIMERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, SAN SALVADOR Sentencia Referencia 91-34-CM2-2013 de doce de
noviembre de dos mil trece.

“1) En el primer punto de Apelación, argumenta el recurrente, que el Doctor

[É] no está acreditado procesalmente con la fotocopia certificada por notario del
instrumento número [...], otorgado a las dieciséis horas del día veintiocho de enero
de dos mil trece, de fs. […], y que por ello, no se logra establecer en legal forma,
la representación judicial de la Sociedad […], pues ésta es distinta a la que se ha
demandado; asimismo, dice que hay una violación a lo preceptuado en el Art. 32
Ord. 9° de la Ley de Notariado, en relación con el Art. 68 CPCM., siendo que la
enmendadura del nombre de la parte material, no se podía realizar porque ya se
había firmado por el representante legal de ésta, o sea, por el compareciente; y
concluye, que también debió tomarse en cuenta que la documentación presentada
por el apoderado de la parte demandada, tuvo lugar fuera del término procesal
correspondiente, en vista que debió introducirse dentro del plazo que estipulan los
Arts. 288 y 289 CPCM.

2) Respecto a lo alegado por el apoderado de la parte apelante, esta Cámara es del


criterio que los documentos a que se refiere el Art. 288 CPCM., se pueden clasificar
en: a) procesales; y, b) materiales. Así, llamamos procesales a los que condicionan
la admisibilidad de la demanda, la contestación o la reconvención de la misma y
que se refieren a algún presupuesto procesal, encontrándose entre ellos, el poder
que acredita la representación del procurador de la parte, por lo que naturalmente,
la preclusión de la que habla el inc. 10 del Art. 289 CPCM., está circunscrita a los
documentos materiales y que incluso la ley expresa que pueden haber excepciones;
en consonancia con lo anterior, tal disposición no es aplicable respecto a los
documentos primeramente mencionados, y específicamente en cuanto al poder para
litigar, ya que su deficiente redacción o errores, pueden ser objeto de prevención por
parte del juez, con el objeto de que se presente uno conforme a derecho; así, el Art.

168
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

300 CPCM., dispone que durante la Audiencia Preparatoria se pueden subsanar los
defectos antes indicados; en consecuencia, tal como consta en el acta de la misma,
la señora Jueza a quo, tuvo por subsanadas tales deficiencias, lo cual fue correcto,
ya que al revisar el documento agregado de fs. […], se estima que los errores
detectados por la parte demandante, fueron corregidos con la presentación de este
nuevo instrumento, antes de la mencionada audiencia, así se puede extraer de la
lectura del mismo, donde queda claro el nombre de la parte demandada.

En concordancia con lo expuesto, no se puede afirmar que el apoderado de la aludida


Sociedad demandada Doctor […], no tiene personería suficiente para actuar en el proceso
y que la contestación de la demanda sea extemporánea por el error mecanográfico
encontrado en el poder, ya que el CPCM., brinda la posibilidad de subsanar esos vicios;
de tal suerte, que todos los actos procesales ejercitados por dicho abogado, son válidos
y al haber incorporado al proceso los instrumentos pertinentes es procedente darle la
intervención de ley, puesto que el mismo Art. 33 de la Ley de Notariado, expresamente
indica que el documento no se invalida por faltarle algún requisito preceptuado en el
Art. 32 del mismo cuerpo legal, por lo que la interpretación restringida del Ord. 9 ° del
Art. 32 de esa ley, traería como consecuencia que ningún notario pudiera enmendar o
corregir un instrumento, siempre que no se altere el contenido propio de la escritura, en
consecuencia se desestima tal motivo de Apelación.”

CÁMARA PRIMERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO: Sentencia de fecha doce de noviembre de dos mil trece, con Referencia
91-34CM2-2013

“…los documentos a que se refiere el Art. 288 CPCM., se pueden clasificar en:
a) procesales; y, b) materiales. Así, llamamos procesales a los que condicionan la
admisibilidad de la demanda, la contestación o la reconvención de la misma y que
se refieren a algún presupuesto procesal, encontrándose entre ellos, el poder que
acredita la representación del procurador de la parte, por lo que naturalmente, la
preclusión de la que habla el inc. 10 del Art. 289 CPCM., está circunscrita a los
documentos materiales y que incluso la ley expresa que pueden haber excepciones…”

CÁMARA PRIMERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO: Sentencia de fecha veintinueve de mayo de dos mil catorce, con
Referencia 53-20CM2-2014

“…Con base al principio de aportación, plasmado en el Art. 7 CPCM., en armonía


con lo estipulado en el inc. 2º del Art. 288 del mismo cuerpo normativo, la proposición
de la prueba corresponde exclusivamente a las partes, debiendo ser ofrecida y
determinada en los escritos de alegaciones iniciales –demanda y contestación-, de
conformidad a lo dispuesto en el ordinal 9º del Art. 276 CPCM., en relación con el
inc. 1º del Art. 284 CPCM., y si no se dispone de alguno de éstos, se describirá su
contenido, indicándose con precisión el lugar en que se encuentran, y solicitándose
las medidas pertinentes para su incorporación al proceso. El legislador previó
así la posibilidad de que si las partes no cuentan con los documentos al momento
de presentar sus alegaciones iniciales, puedan indicar su ubicación, para ser
posteriormente considerados por el juzgador…”

169
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

CÁMARA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DE OCCIDENTE:


Sentencia de fecha diecisiete de septiembre de dos mil trece, con Referencia INC-
APEL-97-13-09-13-2:

“…el Art. 288 CPCM. es claro en manifestar que en los escritos iniciales se habrán
de aportar en todo caso los documentos probatorios en que las partes fundamenten
su derecho, es decir que éste debió haber sido presentado junto con la demanda, o en
todo caso, con el escrito de evacuación de las prevenciones, asimismo dicho artículo
también es claro en señalar que tales documentos pueden no estar a disposición de la
parte que los necesita, y que en tal supuesto, la ley facilita su obtención, mediante la
intervención judicial y que para tal efecto deberá describir su contenido, indicando
con precisión el lugar de ubicación de los documentos, así como las medidas que
deberá adoptar el Juzgado para lograr su incorporación al Juicio…”

Preclusión de la aportación documental

Art. 289.- Cuando no se aporten los documentos inicialmente, o no se designe el lugar donde
se encuentren, precluirá la posibilidad de aportarlos, salvo que la ley autorice excepcionalmente
a hacerlo en momento no inicial, por ser posteriores a los actos de alegación o anteriores pero
desconocidos, por fuerza mayor o por otra justa causa.

No obstante lo dispuesto en el inciso anterior, el demandante podrá presentar en la audiencia


preparatoria los documentos, medios, instrumentos, dictámenes e informes, relativos al fondo
del asunto, cuyo interés o relevancia sólo se ponga de manifiesto a consecuencia de alegaciones
efectuadas por el demandado en la contestación a la demanda.

Salvo las resoluciones judiciales o administrativas que recaigan y deban tener efecto en el proceso,
no se admitirá la presentación de documentos después de concluida la audiencia de prueba.

CÁMARA DE LA TERCERA SECCIÓN DEL CENTRO: Sentencia de fecha


trece de octubre de dos mil once, con Referencia C-17-DC-2011-CPCM

“…V.- …el demandante debe aportar las pruebas idóneas, conducentes y pertinentes
para probar su pretensión …, la única sanción que la Ley da para los casos en que
no se presente prueba suficiente es la absolución del demandado de la pretensión
interpuesta en su contra o en su caso la preclusión del Derecho de aportar la prueba
documental con posterioridad a la presentación de la demanda, tal como lo ordena
el Art. 289 CPCM; …sí existen los documentos necesarios para iniciar el proceso
civil …la aportación documental y la proposición de prueba es una manifestación
del Principio de Aportación del Art. 7 CPCM; pero deja la facultad al Juez para
que cuando haga el examen in limine de la pretensión, advierta que la demanda es
atendible y fundable, cuando se le presenten los documentos iniciales para acreditar
el Derecho material que dice el actor se le ha violentado…”

CÁMARA PRIMERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO: SAN SALVADOR, en la Sentencia de fecha veintinueve de mayo de
dos mil catorce, con Referencia 53-20CM2-2014

“…3.2.4) …de conformidad al Inc. 1º del Art. 289 CPCM., cuando no se aporten los
documentos inicialmente, o no se designe el lugar donde se encuentren, precluirá la

170
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

posibilidad de aportarlos, salvo que la ley autorice excepcionalmente a hacerlo en


momento no inicial, bajo los siguientes supuestos: 1) por ser posteriores a los actos
de alegación o anteriores pero desconocidos, y 2) por fuerza mayor o por otra justa
causa…”

CÁMARA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DE OCCIDENTE:


SANTA ANA, en la Sentencia de fecha diecisiete de septiembre de dos mil trece,
con Referencia INC-APEL-97-13-09-13-2

“…el Art. 289 CPCM. Establece que cuando no se aporten los documentos
inicialmente, o no se designe el lugar donde se encuentre, precluirá la oportunidad
de aportarlos; siendo este el fundamento legal por el cual se le hizo tal prevención
al profesional en comento para que pudiera incorporar tal documentación o
que en todo caso solicitara la intervención judicial, no habiendo evacuado
consecuentemente dicho profesional en el término señalado por la ley, la prevención
que se le hiciera por parte de este Juzgado, en relación a tal circunstancia…En ese
contexto, este Tribunal estima que el Código Procesal Civil Mercantil con el fin de
evitar demandas inútiles y con ello el desgaste jurisdiccional, procura evacuar las
pretensiones de las partes mal planteadas o deficientes bajo dos mecanismos de : a)
La inadmisiblidad y b) La improponibilidad. La jurisprudencia se ha encargado de
definir la inadmisiblidad de una demanda, diciendo que ésta, se produce por defectos
de forma, o sea la facultad de rechazar una demanda que no llena los requisitos
de forma establecidos en la ley para su admisión, o la de puntualizar los defectos
de que adolece para su respectiva subsanación, si ese fuera el caso, bajo pena de
declararla inadmisible. Art. 278 CPCM…”

CAPÍTULO SEGUNDO
LA AUDIENCIA PREPARATORIA

Convocatoria de la audiencia preparatoria

Art. 290.- Evacuados los trámites correspondientes de alegaciones iniciales o transcurridos


los plazos sin haberlas realizado, el Juez, dentro de un plazo de tres días, convocará a las partes a
una audiencia preparatoria, que se celebrará en un plazo no mayor de sesenta días contados desde
la convocatoria judicial.

A tal efecto, se comunicará a las partes el día y hora señalados, citándoles para comparecencia.

Comparecencia de las partes

Art. 291.- Cuando a la audiencia preparatoria dejaran de concurrir ambas partes, el Juez
pondrá fin al proceso sin más trámite, siempre que tal ausencia no esté debidamente justificada.

Lo mismo hará el Juez cuando no asista el demandante, y el demandado no muestre interés


legítimo en la prosecución del proceso.

Cuando dejare de comparecer el demandado o cuando ante la inasistencia del demandante


aquél mostrare interés legítimo en la prosecución del proceso, el Juez ordenará la continuación del
mismo, siguiéndose la tramitación en lo que resulte procedente.

171
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

CÁMARA DE LA CUARTA SECCIÓN DEL CENTRO, SANTA TECLA,


Apelación N°130-C-13 de fecha: doce de febrero de dos mil catorce.

“El Art. 208 del CPCM, contiene las causas por las que se puede suspender la
celebración de la audiencia preparatoria, y en su Ord. 2°. mencionado también por
el Juzgador, esta dispone que: “Por causa grave que impida la comparecencia de
algún sujeto procesal que hubiera sido citado.”, circunstancia que a criterio de este
Tribunal no ha concurrido en el caso de autos, ya que en ningún momento la parte
actora justificó su inasistencia por alguna causa que le haya impedido presentarse
a la hora y en el día para el que había sido convocado, razón por la que al Juez A
Quo, en lugar de suspenderla debió proceder conforme a lo indicado en el Código
Procesal Civil y Mercantil, específicamente en su Art. 291, que categóricamente
establece en sus Inc. 1°. y 2° que: “Cuando a la audiencia preparatoria dejaran
de concurrir ambas partes, el Juez pondrá fin al proceso sin más trámite, siempre
que tal ausencia no esté debidamente justificada. Lo mismo hará el Juez cuando no
asista el demandante, y el demandado no muestre interés legítimo en la prosecución
del proceso.”, es así que al no aplicar lo que correspondía, el funcionario judicial
resolvió haciendo caso omiso de lo dispuesto por el legislador, en completa
vulneración del principio de legalidad, contenido en el Art. 3 del. CPCM, que
estipula: “Todo proceso deberá tramitarse ante juez competente y conforme a las
disposiciones de este código, las que no podrán ser alteradas por ningún sujeto
procesal. Las formalidades previstas son imperativas. Cuando la forma de los
actos procesales no esté expresamente determinada por ley, se adoptará la que
resulte indispensable o idónea para la finalidad perseguida.”; asimismo aplicando
erróneamente el Juez A Quo el Ord. 2°. del Art. 208 del CPCM, al ordenar la
suspensión de la audiencia sin adecuarse a ninguno de los supuestos de dicho
precepto legal, y menos aún el invocado por el funcionario en su oportunidad al no
haberse probado ni alegado causa grave para no comparecer de parte del actor del
proceso principal.

La parte demandada no ha mostrado interés en la continuación del proceso, sino


que por el contrario, en el transcurso del mismo solicitó al juez de la Instancia
inferior que le diera aplicación a lo que manda el Art. 291 del CPCM, e inclusive
en la audiencia probatoria advirtiendo al funcionario de la nulidad de la que estaba
viciado el proceso desde la audiencia preparatoria suspendida, sin obtener el
interesado, ninguna resolución que satisfaga el procedimiento que para tal efecto ha
señalado el legislador, declarándole sin lugar todas las peticiones formuladas, hasta
llevar el proceso hasta la sentencia definitiva de la que se recurre.

Como consecuencia de lo anterior, los Suscritos aprecian que la sentencia impugnada


no se encuentra apegada a Derecho, por lo que es procedente revocar la misma,
declarar la nulidad de la resolución que contiene la suspensión de la audiencia
preparatoria, y ordenar el archivo del proceso en virtud de que la misma obedece a
raíz de la sanción procesal que no se aplicó en Primera Instancia de conformidad al
Art. 291 del CPCM, por lo que resulta innecesario entrar a valorar respecto de los
otros agravios indicados por el impetrante.”

172
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

Contenido de la audiencia preparatoria

Art. 292.- La audiencia preparatoria servirá, por este orden: para intentar la conciliación de
las partes, a fin de evitar la continuación innecesaria del proceso; para permitir el saneamiento
de los defectos procesales que pudieran tener las alegaciones iniciales; para fijar en forma
precisa la pretensión y el tema de la prueba; y para proponer y admitir la prueba de que intenten
valerse las partes en la audiencia probatoria como fundamento de su pretensión o resistencia.
Excepcionalmente, en casos de urgencia, comprobada a juicio del tribunal, podrá recibirse la
prueba que, por su naturaleza, sea posible diligenciar en dicha audiencia.

CÁMARA PRIMERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO: SAN SALVADOR, en la Sentencia de fecha nueve de julio de dos mil
catorce, con Referencia 81-30CM1-2014

“…3.3.2) …de conformidad con lo dispuesto en el Art. 292 CPCM., la audiencia


preparatoria sirve para el saneamiento de los defectos procesales que pudieran tener
las alegaciones iniciales, ya sea en la demanda, contestación, o en la reconvención
si la hubiere, por lo que el funcionario judicial de acuerdo a lo prescrito en el inc. 1°
del Art. 14 CPCM…”.

CÁMARA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DE OCCIDENTE:


SANTA ANA, en la Sentencia de fecha veintiuno de marzo de dos mil catorce, con
Referencia INC- APEL-13-3-2014

“…En la publicación “El Nuevo Proceso Civil y Mercantil Salvadoreño, Colección


Jurídica, Universidad Tecnológica de El Salvador, Primera Edición, 2010, págs.
103 y 104, se sostiene lo siguiente: “B. Objetivos. Conforman los objetivos de la
pretensión la petición, de un lado, y la fundamentación fáctica y jurídica, de otro.
a. La petición es la declaración de voluntad que, plasmada en el “pido”de la
demanda, integra el contenido sustancial de la pretensión, determinando los límites
cualitativos y cuantitativos del deber de congruencia del fallo, la parte dispositiva
de la Sentencia. La petición determina la naturaleza cuantitativa y cualitativa de la
pretensión, de tal suerte que permite inferir si en una demanda se ha planteado una
sola, o existe una acumulación de pretensiones, así como evidencia la naturaleza
de la pretensión ejercitada, esto es, declarativa, constitutiva o de condena.-”… en
la audiencia preparatoria …según lo dispuesto en el Art. 292 CPCM,… sirve entre
otras cosas, para fijar en forma precisa la pretensión y el tema de la prueba…”

Arreglo del proceso mediante conciliación

Art. 293.- Abierta la audiencia preparatoria, el Juez instará a las partes a lograr un arreglo en
relación con la pretensión deducida en el proceso.

A la vez que insta a las partes a lograr un acuerdo, el Juez les advertirá de los derechos y
obligaciones que pudieran corresponderles, sin prejuzgar el contenido de la eventual Sentencia.

Fin del proceso por transacción entre las partes. Impugnación y ejecución de la transacción

Art. 294.- Si las partes logran una transacción, ésta requerirá de homologación judicial. A tal
fin, el Juez examinará el contenido del acuerdo adoptado por las partes, debiendo comprobar que

173
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

lo convenido no implica fraude de ley o abuso de derecho, ni versa sobre derechos indisponibles,
ni tampoco compromete el interés público o el de menores, o se realiza en perjuicio de tercero. En
estos casos, no habrá lugar a la homologación.

Aprobada la transacción, el juez ordenará poner fin al proceso y proceder al archivo de lo


actuado.

El acuerdo transaccional homologado judicialmente podrá impugnarse por las causas que
invalidan los contratos. La impugnación de la validez se ejercitará ante el mismo juzgado, por
los trámites y con los recursos establecidos en este código y caducará a los quince días de la
celebración de la audiencia. Además de las partes, también estarán legitimados para impugnar el
acuerdo transaccional quienes pudieran sufrir perjuicio por el mismo.

CÁMARA SEGUNDA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, Sentencia Referencia: 56-3CM-12-A de fecha treinta de octubre de dos
mil doce.

“Entendemos por transacción, el acto jurídico bilateral, por el cual las partes,
haciéndose concesiones recíprocas extinguen obligaciones litigiosas, es así que toda
transacción implica la voluntad de ambas partes; así el hecho de haber entendido
algo distinto al momento de la lectura del acta correspondiente por la distorsión
que produce un altoparlante en un lugar cerrado, no contribuyo al entendimiento
de lo plasmado en el acto; no implica que tal acuerdo haya sido beneficioso nada
más para una parte, ya que consta en dicho acuerdo, que ambas partes adquirieron
obligaciones en ella, mismas que deberán cumplirse en un lapso de tiempo
determinado, así como una sanción para cada una en caso de no cumplirse lo
pactado en el referido acuerdo.

Así también al haber sido firmada por ambas partes el acta preparatoria en la cual
consta el acuerdo transaccional al que llegaron para dar fin al proceso, se entiende
que ambas consintieron las condiciones que se pactaron en ella, así como los
términos para la ejecución de las mismas; en consecuencia consideramos que en
el presente caso no se han configurado los elementos mencionados para que exista
un fraude de ley; pues no se han suscitado, ninguno de los elementos relacionados
para que se configure la figura; ya que si bien el acuerdo transaccional es un acto
jurídico que bajo el amparo de una disposición tiene como finalidad la transacción
de las partes intervinientes en un proceso con el fin de darlo por terminado; no se
ha obtenido con ella ningún acto ilícito sancionado por otra norma, pues ha existido
consentimiento en lo actuado por ambas partes.”

CÁMARA SEGUNDA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, SAN SALVADOR Sentencia Referencia N°62-3CM-14-A de fecha:
veintiocho de agosto de dos mil catorce.

“Sin embargo, conforme a lo establecido en el Art. 294 del CPCM la conciliación


intraprocesal, al ser homologada por el juez, es susceptible de impugnación por
las causas que invalidan los contratos, es decir, aquellas causas que producen la
nulidad absoluta o la nulidad relativa de los mismos, dichas causas se encuentran
establecidas en los Arts. 1551 y 1552 del Código Civil. Bajo ese contexto, por regla

174
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

general los requisitos de forma que el Tribunal A —Quem debe revisar para admitir
a trámite la Apelación interpuesta son los establecidos en el Art. 511 Inc. 2° del
CPCM, no obstante, en el aspecto material y conforme a lo expuesto en el párrafo
que antecede, la impugnación de una conciliación intraprocesal por su especialidad
es la de cuestionar la validez o existencia de dicha convención, en cuanto a la
capacidad de las partes, al consentimiento libre de vicios, su objeto y su causa. Por
tanto los requisitos de forma que el Tribunal A - Quem debe de revisar para admitir
a trámite la Apelación interpuesta, se encuentran contemplados en el Art. 1316 en
relación con los Arts. 1551 y 1552 todos del Código Civil, en consecuencia, esta
Cámara considera que el Licenciado [...], no ha cumplido con las disposiciones
en comento, en virtud que no ha hecho un planteamiento preciso sobre los motivos
específicos de su recurso, el tribunal de alzada debe entender el examen que deberá
hacerse en su momento a la resolución impugnada, y en el escrito de Apelación
únicamente se observa una mera relación de los hechos generados en la audiencia
especial de inquilinato y una correlación de hechos junto con prueba documental
que debieron incorporarse al el escrito de contestación de la demanda; aunado a lo
anterior, el simple hecho que sea otro procurador mostrándose parte técnica en esta
instancia, no comporta como excepción al principio de preclusión contemplado en
los Arts. 193 Inc. 2° y 289 Inc. 1° ambos del CPCM.

En el presente caso los argumentos que debe contener un escrito de Apelación deben
estar estructurados conforme a lo previsto en el Art. 294 en relación al Art. 511 Inc.
2° ambos del CPCM y al Art. 1316 en relación con los Arts. 1551 y 1552 todos del
Código Civil, ya que el Art. 511 del CPCM a tenor de su texto establece que “En
el escrito de interposición del recurso se expresarán con claridad y precisión las
razones en que se funda el recurso, haciendo distinción entre las que se refieran
a la revisión e interpretación del derecho aplicado y las que afecten a la revisión
de la fijación de los hechos y la valoración de las pruebas. Los pronunciamientos
impugnados deberán determinarse con claridad.”

Para el caso que nos ocupa, tras identificar como objeto del recurso de alzada una
conciliación intraprocesal, la parte apelante obligatoriamente de conformidad a
las disposiciones antes citadas, debe estructurar de manera clara y separada, cada
uno de los motivos que fundamenta su impugnación, y para el presente caso por su
particularidad se deben de señalar como motivos de alzada:

a) la incapacidad legal de las partes para conciliar, b) que no haya habido


consentimiento de las partes o que habiéndolo adolezca de algún vicio como el error,
la fuerza o el dolo, c) que su objeto sea ilícito y d) que tenga una causa ilícita; tal
como lo señala el Art. 294 del CPCM. El análisis anterior responde al principio
dispositivo que rige a los procesos civiles y mercantiles conforme a lo regulado en
el Art. 6 del CPCM, el cual dentro del ámbito impugnativo impone al recurrente: a)
la carga de delimitar los términos del debate, b) el planteamiento de su pretensión
y c) lo que se refiera, en el presente caso, a todos los aspectos de la conciliación
intraprocesal sujeta a censura y los vicios sustantivos que se le atribuye (Art. 1316
en relación a los Arts. 1551 y 1552 todos del Código Civil), argumentación sobre
la cual ha de girar la defensa de su contraparte. En el presente caso el procurador
de la parte apelante no ha señalado con claridad y de manera separada cuáles son

175
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

los motivos de impugnación de la conciliación objeto de alzada, sin embargo este


planteamiento corresponde al ámbito de actuación del recurrente, sin que el tribunal
pueda dictar sugerencias o recomendaciones acerca de la mejor fundamentación del
recurso, de lo contrario presumiría una interferencia prohibida.”

CÁMARA SEGUNDA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO: SAN SALVADOR, Sentencia de fecha treinta de octubre de dos mil
doce, con Referencia 56-3CM-12-A

“…homologación, es la confirmación y firmeza que se da a ciertos actos y


convenios de las partes, mediante la intervención del juez, en consecuencia en toda
homologación la autoridad que la reviste de firmeza debe cuidar que la misma
guarde una relación de igualdad para ambas partes; el Art. 294 CPCM, señala que
el juez previo a proceder a homologar cualquier acuerdo adoptado por las partes
debe verificar que la misma no implique fraude de ley o abuso de derecho, ni verse
sobre derechos indisponibles, así como que no compromete el interés público o el de
menores, o se realiza en perjuicio de tercero…”

Ejecución del acuerdo

Art. 295.- Lo convenido en conciliación o transacción en la audiencia preparatoria, una vez


aprobado u homologado judicialmente, tendrá en su caso la consideración de título de ejecución y
podrá llevarse a efecto por los trámites de ejecución de Sentencias regulados en este código.

Fin del proceso por renuncia, desistimiento o allanamiento

Art. 296.- Si hubiera acuerdo en poner fin al proceso por renuncia, desistimiento o
allanamiento, el Juez dictará la resolución pertinente tras aprobarlo, de acuerdo con las normas
establecidas en este código para la finalización anticipada del proceso.

Continuación de la audiencia

Art. 297.- Si las partes no hubiesen llegado a un acuerdo o no se mostrasen dispuestas a


concluirlo de inmediato, la audiencia continuará según lo previsto en los artículos siguientes.

Si el acuerdo alcanzado fuera parcial, se ordenará lo procedente, continuando la audiencia


preparatoria.

Denuncia y examen de defectos

Art. 298.- La audiencia continuará con el examen de cualesquiera defectos alegados por las
partes, en cuanto supongan un obstáculo a la válida continuación del proceso y a su finalización
mediante resolución de fondo, incluidos los referidos al cumplimiento de algún presupuesto
procesal relativo a las partes, como la capacidad para ser parte y la capacidad procesal; al órgano
jurisdiccional, como la jurisdicción interna y externa, y la competencia objetiva, territorial o de
grado; y al objeto procesal, como la litispendencia, la cosa juzgada, la sumisión al arbitraje, el
compromiso pendiente, y el procedimiento inadecuado.

Se examinarán los defectos manifestados por el demandado en la contestación a la demanda o


por el demandante en la contestación a la reconvención.

176
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

CÁMARA SEGUNDA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO: Apelación Referencia 91-4CM-14-A, de las ocho horas y treinta minutos
del día doce de enero de dos mil quince.

“3.9 Dentro del contenido de la contestación de la demanda, el demandado puede


oponer excepciones, las cuales son de dos tipos: las excepciones procesales,
conocidas en la legislación procesal derogada como excepciones dilatorias, que se
pueden extraer de lo regulado en el Art. 298 CPCM y cuya finalidad es la denuncia
de defectos que suponen un obstáculo a la válida continuación del proceso y a su
finalización mediante resolución de fondo. Este tipo de excepciones se refieren a
aspectos subsanables que son de índole eminentemente procesal y se caracterizan
en que su conocimiento no produce una decisión del fondo de la litis, pero si podría
generar una finalización anticipada del proceso sin efectos de cosa juzgada material
por no haberse entrado a conocer el fondo de la pretensión.

3.10 Por otro lado están las excepciones de fondo o materiales, conocidas también
como excepciones perentorias. El procesalista Lino Enrique Palacio las definió como
“aquellas oposiciones que, en el supuesto de prosperar, excluyen definitivamente
el derecho del actor, de manera tal que la pretensión pierde toda posibilidad de
volver a proponerse eficazmente.”(MANUAL DE DERECHO PROCESAL CIVIL.
Decimoséptima Edición Actualizada. Abeledo Perrot, Buenos Aires, año 2003).

3.11 En el estudio de las excepciones materiales encontramos que estas pueden


fundarse en: a) Hechos impeditivos: circunstancias que han hecho que el derecho
o el pacto no nazcan, por falta de alguno de sus elementos esenciales: minoridad
de algunas de las partes, objeto ilícito, vicios del consentimiento, etc.; b) Hechos
extintivos: aquellos hechos o situaciones que han traído consigo la pérdida
sobrevenida del derecho existente en origen, por actuaciones humanas –acciones u
omisiones- o hechos de la naturaleza: el pago de la deuda, la prescripción extintiva,
la destrucción del bien litigioso, etc.) y c) Hecho excluyentes: circunstancias que han
servido para el nacimiento de otros derechos cuya validez y eficacia se contrapone
a su vez a la del derecho invocado por el actor. (CODIGO PROCESAL CIVIL Y
MERCANTIL COMENTADO. Consejo Nacional de la Judicatura, San Salvador,
2010)”

Defectos insubsanables

Art. 299.- Cuando el defecto examinado y apreciado por el Juez resulte del todo insubsanable,
se rechazará la demanda por improponible y, en consecuencia, se ordenará el archivo de las
actuaciones.

Defectos de capacidad, representación o postulación

Art. 300.- Si los defectos denunciados y examinados se refirieran a la capacidad,


representación o postulación y fueran subsanables, el Juez otorgará a la parte que los cometió un
plazo máximo de cinco días para proceder a su debida corrección, suspendiendo a tal efecto la
audiencia, salvo que la parte estuviera en disposición de sanarlos en el mismo acto. Subsanados los
defectos, se reanudará o continuará, en su caso, la audiencia.

177
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

Si transcurrido el plazo señalado, el demandante o el reconviniente no hubiera acreditado ante


el Juez la subsanación de los defectos que éste advirtió, se rechazará la demanda y se pondrá fin al
proceso con archivo de las actuaciones realizadas hasta el momento, sin perjuicio del derecho de la
parte a volver a plantear la pretensión si ello resultara posible.

Si la subsanación correspondiera al demandado y no se efectuara en el plazo otorgado, el


proceso seguirá su curso con la declaración de rebeldía.

Falta de litisconsorcio necesario

Art. 301.- Si el defecto se refiriera a la falta del debido litisconsorcio, podrá el demandante,
en la audiencia, presentar un escrito dirigiendo la demanda a los sujetos que no fueron traídos al
proceso, en cuyo caso el Juez, si estima la falta de litisconsorcio, ordenará emplazar a los nuevos
demandados para que contesten a la demanda, con suspensión de la audiencia.

Si el demandante se opusiere a la alegación de falta de litisconsorcio presentada por el


demandado, se dará audiencia a ambas partes. Y si el Juez estima que existe tal defecto, concederá
al demandante un plazo de diez días para constituir el litisconsorcio, y mandará emplazar a los
nuevos demandados, quedando en suspenso la audiencia. Si el demandante no presentara la
demanda contra los nuevos demandados, se pondrá fin al proceso y se archivarán las actuaciones.

Cuando el caso entrañe una especial dificultad, el juez podrá resolver la cuestión dentro de los
cinco días posteriores a la audiencia, debiéndose continuar ésta para dar cumplimiento a sus otras
finalidades.

Litispendencia o cosa juzgada

Art. 302.- Cuando se hubiere denunciado la litispendencia o la cosa juzgada, o bien el defecto
fuera apreciado de oficio por el juez, se pondrá fin al proceso en el acto, ordenándose el archivo de
las actuaciones.

No obstante, si el caso entrañara especial dificultad, el juez podrá resolverlo dentro de los
cinco días posteriores a la audiencia, la cual deberá proseguir para que se cumplan sus otras
finalidades.

SALA DE LO CONSTITUCIONAL DE LA HONORABLE CORTE SUPREMA


DE JUSTICIA, en Resolución con Referencia 991-2003, de fecha catorce de enero
de dos mil cuatro, sostiene que:

“…es preciso apuntar que la litis pendencia resulta del planteamiento de pretensiones
estructuralmente idénticas ante el ente jurisdiccional, las cuales se encuentran
siendo debatidas en distintos procesos. Esta figura se traduce, de acuerdo a la
doctrina, en la falta de un presupuesto material para dictar la sentencia de fondo,
y puede motivar la oposición de una excepción por la parte interesada o incluso
declararse de oficio en virtud de los poderes de dirección conferidos al juzgador
(…..) Asimismo, se observa que a través de la alegación como defensa procesal de la
existencia simultánea de más de un proceso sobre el mismo reclamo o conflicto entre
las partes, se persigue evitar que pretensiones idénticas se tramiten separadamente
–en distintos procesos-, ya que en tal caso es contingente el pronunciamiento de
Sentencias contradictorias que pueden quebrantar la cosa juzgada. De este modo,

178
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

resulta atinada la paralización o finalización anormal del proceso que se haya


promovido estando en trámite otro con idénticas particularidades, puesto que
no existen elementos nuevos que puedan incorporarse mediante una eventual
acumulación de los mismos; y en consecuencia, no se producirá una afectación
negativa en la posición de las partes…”

SALA DE LO CIVIL DE LA HONORABLE CORTE SUPREMA DE


JUSTICIA, en Sentencia con Referencia 1652 – Ap – 2006, de fecha veinte de enero
de dos mil seis.

“…En ese sentido, pues, lo que se ha producido en este caso es la figura de la


LITISPENDENCIA POR CONEXIDAD, pues aunque no existe identidad de los tres
elementos que se exigen para que se produzca la litispendencia, los procesos tienen
relación por conexidad, (……….) Por conexidad debe

entenderse la estrecha relación que existe entre dos o más procesos, por lo que
la resolución que se dicte en uno de ellos puede influir en el otro u otros. Con la
declaratoria de Litispendencia se trata de impedir prácticas inescrupulosas,
dilatorias del proceso, al establecer la extinción del procedimiento en el cual no
se haya citado o emplazado al demandado o haya sido citado con posterioridad.
Cuando se promueven dos procesos ante dos instancias distintas, dada la naturaleza
propia de cada uno de ellos y con una vinculación como la señalada, sea a solicitud
de parte y aun de oficio en cualquier estado y grado de la causa cuyo emplazamiento
fue posterior, debe declararse la Litispendencia y ordenar el archivo del expediente,
quedando extinguida la causa…”

Vía procesal errónea

Art. 303.- Si se denunciare error en la vía procesal que se estuviera siguiendo, por discrepancia
sobre la naturaleza de la pretensión, el valor de la misma o la forma de calcularlo, se deberá oír
a ambas partes. El Juez resolverá en el acto lo que proceda, y si hubiera de seguirse el proceso
abreviado citará a dichas partes para la audiencia del mismo.
CÁMARA SEGUNDA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL
CENTRO, Sentencia con Referencia 72-3CM-14-A, de fecha diecisiete de
noviembre de dos mil catorce.
“…2.3.4. Debido a que el juzgador es quien examina in limine el escrito de demanda,
le corresponde también examinar la elección correcta del proceso, consecuencia de
ello y bajo el principio Jura Novit Curia, tiene la obligación de encausar a las partes
sobre el proceso adecuado. 2.3.5. En ese orden el procurador de la parte apelante
por un error material invocó el Art. 304 del CPCM, ya que en sus argumentos se está
refiriendo al Art. 303 de ese cuerpo de ley, el cual establece “Si se denunciare error en
la vía procesal que se estuviera siguiendo, por discrepancia sobre la naturaleza de la
pretensión, el valor de la misma o la forma de calcularlo, se deberá oír a ambas partes.
El Juez resolverá en el acto lo que proceda, y si hubiera de seguirse el proceso abreviado
citará a dichas partes para la audiencia del mismo.”, sugiriendo el referido profesional,
que aunque habiendo incurrido en error en cuanto al trámite invocado en el escrito de
demanda, se debió haber reconducido a través de un proceso abreviado. 2.3.6. Es así
que corresponde a esta Cámara determinar el Proceso Declarativo a seguir, conforme

179
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

a las pretensiones de la parte apelante, las cuales son la terminación del contrato antes
relacionado y la desocupación del inmueble objeto del mismo. 2.3.7. Para determinar el
tipo de proceso declarativo que se debe seguir en un determinado caso se debe tomar en
cuenta lo referente a la cuantía y lo relacionado a la materia, ya que estos son elementos
importantes y de gran utilidad para determinar la vía procesal adecuada asignada a
los juzgados…2.3.11. Habiéndose determinado el tipo de Proceso Declarativo que
corresponde a la… causa, la Juez A Quo conforme a lo establecido en el Art. 244 Inc. 1°
parte 2a del CPCM, debió haberlo reconducido conforme a lo dispuesto en la norma…”

Demanda defectuosa

Art. 304.- Cuando se hubiere denunciado la existencia de defectos subsanables en la


demanda o en la reconvención, o el Juez los hubiera apreciado de oficio, pedirá en la audiencia las
aclaraciones o precisiones oportunas.

Si no se dieran las aclaraciones o precisiones, y los defectos no permitiesen determinar con


claridad las pretensiones del demandante, el Juez dictará auto en el que se ponga fin al proceso,
con archivo de las actuaciones. Si los defectos se hubieran apreciado en la reconvención, el Juez la
excluirá del proceso y no entrará a resolver sobre ella en la Sentencia.

Fijación de la pretensión

Art. 305.- En la audiencia podrá el demandante o reconviniente hacer las precisiones,


aclaraciones y concreciones que estime oportunas en relación con la pretensión deducida en la
demanda o reconvención. En ningún caso podrá alterar o modificar sustancialmente la misma.

El demandante podrá, asimismo, añadir nuevas pretensiones a la ya planteada en su demanda,


pero sólo si aquellas son accesorias respecto de ésta.

Si el demandado se opusiera a esta adición, el juez la admitirá sólo cuando entienda que
no supone menoscabo para el adecuado ejercicio del derecho de defensa. Admitidas las nuevas
pretensiones, se oirá dentro de la audiencia a la parte contraria, a efectos de que ejerza su derecho
de defensa respecto de las mismas.

Fijación de los términos del debate


Art. 306.- Fijada definitivamente la pretensión, tanto el demandante como el demandado
podrán efectuar cuantas precisiones, aclaraciones y concreciones crean oportunas para lograr
establecer la más completa y precisa fijación de la pretensión y de los términos del debate. A estos
efectos, el Juez podrá requerir a las partes cuantas veces crea necesario en la audiencia para que
aclaren los puntos dudosos u oscuros que contengan las respectivas alegaciones iniciales o las
efectuadas en la audiencia conforme a este artículo.
Introducción de los hechos nuevos o de nuevo conocimiento
Art. 307.- Las partes podrán poner de manifiesto en la audiencia cualquier hecho que sea
relevante para la determinación de la causa de pedir de la pretensión o para la fijación de los
términos del debate, siempre que tales hechos hubieran ocurrido con posterioridad al momento en
que se formularon las alegaciones iniciales o, de haber acontecido antes, se hubiesen conocido por
las partes con posterioridad a dicho momento.

180
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

Sobre los hechos nuevos o de nuevo conocimiento que el juez repute admisibles se podrá
proponer prueba de conformidad con las normas de este código.
Presentación de nuevos documentos o informes de peritos
Art. 308.- Las partes podrán aportar en la audiencia preparatoria los documentos o informes
de peritos que se revelen necesarios a la vista de las alegaciones iniciales de la parte contraria.
También podrán presentar los que deriven de las precisiones, aclaraciones y concreciones
efectuadas al amparo de las disposiciones de este código. Si el tribunal considerare improponible
el planteamiento, lo rechazará mediante auto motivado.
No será recurrible la resolución que admitiere o rechazare el hecho o documento nuevo, sin
perjuicio de que, en el supuesto del rechazo, se pueda presentar de nuevo la petición ante la cámara
de segunda instancia, al apelar de la Sentencia.
Fijación del objeto de la prueba
Art. 309.- Las partes, con el Juez, si viene al caso, fijarán los hechos sobre los que exista
disconformidad, así como los que resulten admitidos o estipulados por ambas partes, quedando
excluidos estos últimos de la audiencia probatoria. Si hubiese conformidad sobre todos los hechos
y el proceso queda reducido a una cuestión de derecho, se pondrá fin a la audiencia preparatoria y
se abrirá el plazo para dictar Sentencia.
Sobre los hechos respecto de los que haya disconformidad se dará la palabra a las partes para
que propongan las pruebas que a su derecho convengan.
Proposición de la prueba. Decisión del juez sobre su admisión
Art. 310.- Las partes, por su orden, procederán a comunicar al juez las pruebas de las
que intentarán valerse en el acto de la audiencia probatoria. La proposición de la prueba exige
singularizar el medio que habrá de ser utilizado, con la debida especificación de su contenido y
finalidad a la parte contraria.

Las pruebas admitidas que no puedan practicarse en el acto de la audiencia probatoria deberán
realizarse con antelación a su inicio.

Cuando la prueba que se deba practicar sea sólo la documental, el Juez pasará a dictar
sentencia en el plazo legalmente fijado, inmediatamente después de que concluya la audiencia
preparatoria o una vez que se hayan aportado los documentos admitidos que no obren en poder de
la parte.

CÁMARA DE LA CUARTA SECCIÓN DEL CENTRO: SANTA TECLA, en


Sentencia con Referencia 98-C-12, de fecha seis de diciembre de dos mil doce.

“…el Art. 310 CPCM primer inciso parte media, tiene intima relación con la
disposición antes mencionada el cual dispone que, la proposición de la prueba exige
singularizar el medio que habrá de ser utilizado con la debida especificación de su
contenido y finalidad a la parte contraria…”

181
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

CÁMARA DE LA TERCERA SECCIÓN DE OCCIDENTE: AHUACHAPÁN,


en Sentencia con Referencia A.P.C.S.D.22-12, de fecha diecinueve de julio de dos
mil doce,

“…Las reglas generales sobre proposición de la prueba en la audiencia antes


indicada se encuentran estatuidas en el Art. 310 CPCM, y deben complementarse
con las previstas en relación con cada medio probatorio en el capítulo respectivo.
El derecho a proponer pruebas en la audiencia preparatoria, comprende todos los
medios probatorios con excepción de la prueba documental y dictámenes periciales
de parte, que deben aportarse con la demanda o la contestación a la demanda…”

CÁMARA DE LA TERCERA SECCIÓN DEL CENTRO: SAN VICENTE, en


Sentencia con Referencia C-31-PC-2015-CPCM, de fecha treinta de septiembre de
dos mil quince.

“…1.- La Jurisprudencia Constitucional, verbigracia, las Resoluciones del 17-V-


2010 y del 25/06/2014, Amps. 123-2009 y 347-2011 respectivamente, el derecho
a la prueba se erige como un derecho de naturaleza procesal elevado a rango
constitucional, como manifestación del derecho a la protección jurisdiccional (Art.
2 Cn). Tal derecho, en sentido subjetivo, puede entenderse como la posibilidad que
tiene la persona de utilizar todos los medios posibles en aras de convencer al juez
sobre la verdad del interés material perseguido; o, como aquel que posee el litigante
consistente en la utilización de todos los medios probatorios necesarios para formar
la convicción del órgano jurisdiccional acerca de lo sucedido en el proceso (“El
derecho a la prueba en el proceso civil”, Edit. Bosch, Barcelona, 1996, Págs. 18 y
19). Del último de los conceptos citados, se desprende un triple contenido o ámbito
de exigencia, que se resumen en la admisión, en la práctica y en la valoración de
la prueba. El primer contenido se concreta en la necesidad de admitir la prueba
propuesta en el momento procesal oportuno y que sea pertinente, útil y lícita. Como
corolario del primer contenido se origina el poder exigir la práctica de toda la
actividad probatoria que haya sido admitida, además de asegurar la intervención de
la contraparte en la práctica, incluso en los medios.”

Fijación de la fecha de la audiencia probatoria. Citación de las partes

Art. 311.- La prueba instrumental en que las partes funden su derecho será admitida en la
audiencia preparatoria. Si las partes quisieran aportar otras pruebas instrumentales, su admisión se
examinará en la audiencia probatoria.

El tribunal fijará la fecha de comienzo de la audiencia probatoria, la cual deberá estar


comprendida dentro de los sesenta días siguientes a la audiencia preparatoria, en razón de
la dificultad de su preparación, debiéndose indicar si será necesaria más de una sesión. Para la
comunicación de la parte que no asistió a la audiencia, y que debió estar presente, se estará a lo
dispuesto en este código.

Las partes comunicarán al tribunal quienes son los testigos y peritos que deberán ser citados
por la oficina judicial, en el entendido de que los demás asistirán por cuenta de la parte proponente.
La citación se practicará con antelación suficiente respecto de la fecha de inicio de la audiencia
probatoria.

182
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

Las partes indicarán las pruebas que se practicarán mediante auxilio judicial.

Si antes de dar por finalizada la audiencia preparatoria las partes conocieran la existencia de
una causa que pudiera motivar la suspensión de la audiencia probatoria en la fecha establecida, lo
comunicarán de inmediato, fijándose nuevo señalamiento si se trata de una causa legal y se reputa
justificada.

CAPÍTULO TERCERO
ACTIVIDAD PROBATORIA

SECCIÓN PRIMERA
NORMAS GENERALES SOBRE LA PRUEBA

Derecho de probar

Art. 312.- Las partes tienen derecho a probar, en igualdad de condiciones, las afirmaciones
que hubieran dado a conocer sobre los hechos controvertidos que son fundamento de la pretensión
o de la oposición a ésta; a que el juez tenga en cuenta, en la sentencia o decisión, las pruebas
producidas; y a utilizar los medios que este código prevé, así como aquéllos que, dada la naturaleza
del debate, posibiliten comprobar los hechos alegados.

CÁMARA SEGUNDA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, SAN SALVADOR, Apelación Referencia: 80-3°CM-14-A de fecha
treinta de enero de dos mil quince.

“Es decir, que con la actividad procesal intentada en audiencia por las partes, éstas
pretenderán convencer al juzgador que sus afirmaciones coinciden con la realidad.

Resulta entonces que el objeto de la prueba lo constituyen las afirmaciones que las
partes realizan en torno a los hechos en controversia, tal como lo expone el Art.
312 CPCM que reza: “”””””””Las partes tienen derecho a probar, en igualdad
de condiciones, las afirmaciones que hubieran dado a conocer sobre los hechos
controvertidos que son fundamento de la pretensión o de la oposición a ésta; a que el
juez tenga en cuenta, en la sentencia o decisión, las pruebas producidas; y a utilizar
los medios que este código prevé, así como aquéllos que, dada la naturaleza del
debate, posibiliten comprobar los hechos alegados.””””””””

Pero si bien es cierto las partes podrán utilizar los medios probatorios previstos en el
Código Procesal Civil y Mercantil, ello no significa que se pueda utilizar cualquier
medio probatorio para todos los conflictos que surjan en la vida de los justiciables, ya
que cada caso en específico tiene distintas afirmaciones fácticas y jurídicas a probar, es
por ello que el Código exige, que los medios a utilizar sean pertinentes y útiles, es decir,
que guarden relación con los hechos controvertidos, y que efectivamente sirvan para
probarlos, tal como disponen los Arts. 318 y 319 CPCM.

Y tan es así, que hasta el mismo Código ha otorgado a los funcionarios judiciales,
la facultad de rechazar aquella prueba que considere no guarda relación con los
hechos controvertidos (Art. 320 CPCM).

183
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

En el caso en estudio, los demandados han pretendido probar la excepción de


Solución o Pago efectivo por ellos interpuesta, por medio de unas fotocopias
certificadas por Notario de las notas de abono a cuenta emitidas por personal a
cargo del acreedor, el señor RIGOBERTO P. P, que suman un total de

DIECISIETE MIL NOVECIENTOS NOVENTA Y TRES DÓLARES DE LOS


ESTADOS UNIDOS DE AMÉRICA.

Dichas fotocopias son simples, debido a que, de conformidad a lo establecido


en el Art. 30 de la Ley del Ejercicio Notarial de la Jurisdicción Voluntaria y de
Otras diligencias, cuando se trate de documentos privados no tendrá validez una
fotocopia certificada por Notario; sin embargo, ello no significa que no puedan ser
consideradas como prueba en el proceso.

Lo anterior debido a que nuestra legislación clasifica a los instrumentos en públicos


y privados, dependiendo no sólo de lo dispuesto en la ley, sino además, atendiendo a
sus requisitos de contenido y validez.

No obstante lo anterior, nuestra legislación ha hecho extensivo el concepto de


documentos, y lo ha utilizado para denominar así a los llamados medios modernos
de reproducción de la voz, sonido e imágenes, entendiéndose dentro de éstos a los
dibujos, fotografías, planos, mapas, croquis u otros instrumentos similares, los
cuales de acuerdo con el artículo 343 CPCM, serán prueba documental a efectos
procesales, y dependiendo de si en su fabricación o autenticidad participa un
funcionario o un fedatario, habrán de considerarse documentos públicos o sino
privados.

Dentro de esta extensión de la prueba documental, específicamente dentro de los


denominados instrumentos similares, se encuentran las fotocopias simples, las
cuales se considerarán documentos privados cuyo valor probatorio estará sujeto a
las reglas de la sana crítica, con arreglo alo dispuesto en el artículo 341 CPCM.

En ese orden de ideas, a juicio de este tribunal, las fotocopias de las notas de
abono agregadas al proceso constituyen prueba fehaciente de que entre las partes
efectivamente han existido relaciones comerciales; sin embargo, aunque en ningún
momento dichas fotocopias han sido redargüidas de falso por la parte demandante,
éstas no pueden ser consideradas prueba de la existencia del contrato de suministro
que los demandados manifiestan se acordó por la cantidad de siete mil dólares de
Los Estados Unidos de América, ni mucho menos que las cantidades que aparecen
reflejadas en las notas de abono, se hayan abonado al pagaré base de la pretensión o
a otra obligación que pudieran tener las partes.

Los testigos pudieron haber afirmado que el pagaré se firmó por SIETE MIL
DÓLARES, pero aun así no habría manera de determinar que el pagaré del que los
testigos hablan es el mismo que se está reclamando en la demanda, o si es otro que
los demandados hubieran suscrito, volviéndose una prueba inútil para demostrar la
alteración alegada, pues de realizarse se convertiría en un dispendio innecesario de
la actividad jurisdiccional.”

184
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

SALA DE LO CIVIL Casación N°295-CAC-2013 de fecha dieciocho de febrero de


dos mil quince.

“La Sala estima que una sentencia debidamente motivada principia con una (a)
fundamentación fáctica, que consiste en la descripción de los hechos aportados por
las partes y que se hayan controvertido, con ello se define cuál es el caso que se
debe resolver; luego (b) será necesaria una fundamentación probatoria, que tiene
una doble vertiente, de carácter descriptivo y otro de índole intelectivo, así con el
primero debe describirse el contenido de aquellas probanzas que sean pertinentes
para tener por acreditados los hechos; y el segundo, exige una carga argumentativa
sobre la apreciación y valoración de la prueba bajo los principios que determinan
los poderes del juez para tales efectos, ya sea por las reglas de la sana crítica o
prueba tasada; finalmente, (c) la fundamentación jurídica, será aquélla parte en la
que se apliquen las normas de derecho que resuelven el caso, imponiéndose la tarea
de justificar su aplicación e interpretación según sea el caso. Naturalmente, el fallo
o parte dispositiva debe ser claro y congruente con las peticiones formuladas por los
litigantes.”

CÁMARA PRIMERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO: SAN SALVADOR, en Sentencia con Referencia 53-20CM2-2014, de
fecha veintinueve de mayo de dos mil catorce.

“…3.1.1) La actividad probatoria está encaminada a demostrar que existe una


coincidencia entre los hechos que se alegan ocurridos y los probados, siendo ésta
directa cuando el administrador de justicia tiene conocimiento o relación con el
objeto de la prueba, a través de sus propios sentidos, e indirecta cuando es por
medio de hechos, cosas o personas. 3.1.2) La partes tienen el derecho a probar,
lo cual se consagra en el Art. 312 CPCM., pudiéndose producir la prueba por
cualquiera de los medios probatorios regulados, los cuales se deben valorar en su
conjunto conforme a las reglas de la sana crítica, a excepción de la documental, en
la que se debe estar a lo dispuesto sobre el valor tasado, y cuando se presente más de
uno para establecer la existencia o el modo de un mismo hecho, deberán valorarse
en común, con especial motivación y razonamiento, tal como lo ordena el Art. 416
CPCM, estando obligado el juzgador a tomarlo en cuenta en la Sentencia…”

CÁMARA DE TRÁNSITO DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL CENTRO: SAN


SALVADOR, en Sentencia con Referencia Inc. 20-2011-JC-1°-TTO, de fecha
treinta de abril de dos mil once.

“…si bien las partes poseen exclusivamente el derecho de probar, que reconoce
el Art. 312 CPCM, eso no quiere decir que son ellas las dueñas absolutas de las
pruebas y que por ello las producirán como se les antoje, sino que, el juez, como
el sujeto pasivo en el ejercicio del mencionado derecho, es quien está obligado a
velar porque, tanto el ofrecimiento como la práctica de las pruebas se realice con
las formalidades legales que para cada caso se han establecido; en tal sentido, el
derecho de probar no implica que el juez ya esté convencido con la sola presencia de
ciertos y determinados medios de prueba, sino a que se acepten, y con su práctica,
y de su examen se obtengan resultados a fin de que se tomen en cuenta en la

185
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

sentencia o decisión final, al efecto de valorar que éstos sean pertinentes y generen
la demostración de los hechos alegados por las partes, pues lógicamente en cada
proceso debe probarse todo aquello que forma parte, tanto del presupuesto fáctico,
como de la pretensión, para la aplicación congruente de las normas jurídicas, a
menos que esté exceptuado de prueba por la ley…”

CÁMARA DE TRÁNSITO DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL CENTRO: SAN


SALVADOR, en Sentencia con Referencia INC 6-2012-JC-4°, de fecha uno de
marzo de dos mil doce, sostiene que:

“…La actividad probatoria, como todo derecho, Art. 312 CPCM, implica la
obligación de las partes de probar las afirmaciones por ellas realizadas, y que
generan, por regla general, controversia con lo manifestado por la contraparte; así,
para una mejor comprensión, hemos de iniciar diciendo qué entendemos por prueba;
para tales efectos nos apoyaremos en la doctrina elaborada por los juristas, así para
el Doctor Eduardo J. Couture, desde una acepción común “la prueba es la acción y
el efecto de probar; y probar es demostrar de algún modo la certeza de un hecho o
la verdad de una afirmación”y en su sentido procesal la prueba es, en consecuencia
“un medio de verificación de las proposiciones que los litigantes formulan en el
juicio”(Sic. Fundamentos del Derecho Procesal Civil, Cuarta Edición, Editorial B de
F, Buenos Aires, Argentina 2004. Págs. 177 y 179); asimismo Víctor de Santo precisa
la prueba como:”el conjunto de modos u operaciones del que se extraen, mediante
la fuente que proporcionan, los motivos o razones que producen el convencimiento
del juez sobre los hechos”(Sic. Diccionario de Derecho Procesal, Segunda Edición,
Editorial Universidad S.R.L., Buenos Aires, Argentina, 1994. Pág.287); conforme a
lo anterior podemos decir con seguridad, que la actividad probatoria consiste en el
ofrecimiento, aportación, desarrollo y valoración de aquellos elementos por medio
de los cuales las partes pretenden valerse para recrear en la mentalidad del juzgador
la certeza que las afirmaciones alegadas por las partes son ciertas. En consideración
a lo anterior, es primordial, tener presente que todos los medios de prueba para
ingresar al proceso deben reunir los requisitos, establecidos por el Código Procesal
Civil y Mercantil, de pertinencia, Art. 318, utilidad, Art. 319 y licitud Art. 316, lo
que no implica que ésta efectivamente genere la certeza en el juzgador para tener
por ciertas la alegaciones de las partes, por cuanto la valoración de la prueba está
confiada al Juez, quien deberá basarse en las reglas de la Sana Critica y en el caso
de los documentos, deberá otorgarse la valoración que la ley les reconoce, Arts. 60,
61 y 71 LPESAT, 216, 353, 389, 415 y 416 CPCM…”

Objeto de prueba

Art. 313.- La prueba tendrá por objeto:


1° Las afirmaciones expresadas por las partes sobre los hechos controvertidos.
2° La costumbre, siempre que las partes no se pongan de acuerdo sobre su existencia o sobre
su contenido.
3° El derecho extranjero, en lo que respecta a su contenido y vigencia; pudiendo valerse
el tribunal de cuantos medios de averiguación estime necesarios para asegurar su
conocimiento.

186
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

CÁMARA SEGUNDA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, SAN SALVADOR, Apelación N°11-4CM-12-A de Fecha doce de marzo
de dos mil doce.

“Para considerar como valido un uso mercantil deben cumplirse los siguientes
requisitos: a) La existencia de una cláusula común en la misma clase de contratos;
es decir, repetición constante y uniforme de una misma cláusula, lo que convierte
dicha cláusula en frecuente, en esta etapa y mientras la cláusula común se estipule
de forma expresa y clara en todos los contratos, no estamos en presencia, ni podemos
hablar de un uso mercantil, se requiere que la cláusula ya no conste en los contratos
y sin embargo se siga aplicando su uso en los contratos de igual naturaleza; b) La
repetición constante de la cláusula común en todos los contratos, deriva en que
se sobreentienda su existencia entre los comerciantes o cierto grupo de personas
dedicadas a la misma actividad, cuando la cláusula ya no conste en el contrato; y
c) La objetivación generalizadora, que ocurre cuando aquella clausula típica del
contrato, se destaca de la voluntad de las partes y se convierte en una norma objetiva
de derecho, es decir, que si las partes no pactan lo contrario quedan sometidas a lo
establecido en dicha cláusula aunque no se haya estipulado en el contrato.”

En el caso que nos ocupa los [abogados apelantes], argumentan la existencia de


costumbre o uso mercantil; por lo que la prueba idónea para probar la costumbre
o uso mercantil alegada, eran los contratos previos en los que constara la cláusula
mediante la cual [la demandada] se obligaba a comprar de forma exclusiva a [la
demandante], los sacos que esta produjera, en virtud de que en el contrato base de
la pretensión no se establece en forma clara precisa e inequívoca la obligación de
[la demandada], de comprarle sacos única y exclusivamente a [demandante], con
exclusión de los demás industriales.

En consecuencia, al no haber sido probado por los demandantes, el uso mercantil


alegado no es posible estimar la existencia de compra exclusiva de sacos que tenía [la
demandada], para con [la demandante], y debe desestimarse este punto de agravio.”

CÁMARA TERCERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO: SAN SALVADOR, en Sentencia con Referencia 47-EMSM-12, de
fecha treinta de marzo de dos mil doce, sostiene que:

“…2.- Por regla general, la fundamentación legal o la alegación normativa


(derecho) no hay que probarla, dado que rige en el ordenamiento jurídico el
principio iura novit curia según el cual el juez conoce el derecho, pero dicho
principio sólo cubre las normas de derecho escrito, interno y general, por lo que,
será necesario probar las alegaciones normativas que no cumplen con dichos
presupuestos, entiéndase incluido el derecho extranjero. 3.- La prueba del derecho
extranjero se vincula directamente con el principio de aportación (Art. 7 CPCM) y
la carga de la prueba (Art. 321 CPCM), correspondiendo a las partes que lo invocan
y pretenden hacerlo valer en el proceso, aportar los medios probatorios idóneos
y pertinentes para establecer fehacientemente el contenido y la vigencia de las
normas de derecho extranjero que sean aplicables al caso concreto… la doctrina
española ha dicho: “Por último, cabe plantear el problema de los medios de prueba

187
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

que pueden utilizarse para la acreditación del derecho extranjero. La LEC guarda
silencio sobre el particular aunque la jurisprudencia ha ido consolidando una
línea que exige la prueba documental y la prueba pericial cumulativamente; sin
embargo, como apuntan CALVO CARAVACA y CARRASCOSA, debe considerarse
que si el juzgador queda convencido del contenido, vigencia, interpretación y
aplicabilidad no se precisará más que la prueba documental, mientras que si no
resulta suficiente dicha prueba puede pedir a las partes una prueba pericial que la
complemente.”. (Barona Vilar, Silvia y otros; El Proceso Civil, Volumen III, Tirant
lo Blanch, Valencia, España, 2001, pág. 2201); es decir, que la ley procesal faculta
al juez para que pueda hacer uso de los medios que estime pertinentes con el fin de
asegurar su conocimiento, obviamente, en caso de que la prueba vertida por las
partes no proporcione al juzgador un convencimiento pleno al respecto, pero no
se trata de que el juez recabe las pruebas que las partes requieren para probar el
derecho extranjero, sino que es una participación complementaria en la actividad
probatoria…”

Excepción de prueba

Art. 314.- No requieren ser probados:


1° Los hechos admitidos o estipulados por las partes. (2)
2° Los hechos que gocen de notoriedad general.
3° Los hechos evidentes.
4° La costumbre, si las partes estuvieren conformes con su existencia y contenido y sus
normas no afecten el orden público.

Prueba del derecho

Art. 315.- La parte que sustente su pretensión en norma de derecho extranjero deberá probar
su contenido y vigencia, sin perjuicio de que el Juez pueda valerse de cualquier medio para su
averiguación.

Igualmente, la parte que lo invoque deberá probar el derecho no escrito o consuetudinario.

CÁMARA TERCERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, SAN SALVADOR, Sentencia de Apelación N°47-EMSM-12 de Fecha
treinta de marzo de dos mil doce.

“La prueba del derecho extranjero se vincula directamente con el principio de


aportación (Art. 7 CPCM) y la carga de la prueba (Art. 321 CPCM), correspondiendo
a las partes que lo invocan y pretenden hacerlo valer en el proceso, aportar los
medios probatorios idóneos y pertinentes para establecer fehacientemente el
contenido y la vigencia de las normas de derecho extranjero que sean aplicables al
caso concreto, en cuanto a este punto la doctrina española ha dicho: “Por último,
cabe plantear el problema de los medios de prueba que pueden utilizarse para la
acreditación del derecho extranjero. La LEC guarda silencio sobre el particular
aunque la jurisprudencia ha ido consolidando una línea que exige la prueba
documental y la prueba pericial cumulativamente; sin embargo, como apuntan
CALVO CARAVACA y CARRASCOSA, debe considerarse que si el juzgador queda
convencido del contenido, vigencia, interpretación y aplicabilidad no se precisará

188
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

más que la prueba documental, mientras que si no resulta suficiente dicha prueba
puede pedir a las partes una prueba pericial que la complemente.”. (Barona Vilar,
Silvia y otros; El Proceso Civil, Volumen III, Tirant lo Blanch, Valencia, España,
2001, pág. 2201); es decir, que la ley procesal faculta al juez para que pueda hacer
uso de los medios que estime pertinentes con el fin de asegurar su conocimiento,
obviamente, en caso de que la prueba vertida por las partes no proporcione al
juzgador un convencimiento pleno al respecto, pero no se trata de que el juez recabe
las pruebas que las partes requieren para probar el derecho extranjero, sino que es
una participación complementaria en la actividad probatoria.
Así lo confirma sin dejar espacio a dudas el Art. 315 Inc. 1 CPCM, que DICE: “La
parte que sustente su pretensión en norma de derecho extranjero deberá probar su
contenido y vigencia, sin perjuicio de que el Juez pueda valerse de cualquier medio
para su averiguación.”[...], por tanto, de conformidad con los Arts. 313 Ord. 3° y
315 CPCM., el ejecutante tenía la carga procesal de probar el contenido y vigencia
del mismo, pues el derecho extranjero debe probarse siempre y no hay excepciones a
dicho principio, ya que “Mediante la prueba del derecho extranjero, éste queda fijado
en el proceso: las partes pueden adaptar sus comportamientos jurídicos al mismo y
el juez puede fallar con arreglo al mismo.”(Calvo Caravaca, A. L. y Carrascosa
González, Javier, Revista Anales del Derecho N° 17, publicada por la Universidad
de Murcia, España, 1999, Pág. 298), de lo cual no aportó prueba alguna en primera
instancia, así como tampoco el apelado quien alegó oposición fundándose en el no
cumplimiento del cartular con los requisitos de la ley extranjera, por lo que, también
éste tenía la carga de acreditar el contenido y vigencia de dichas normas.
En esta instancia la parte ejecutante-apelante ha presentado copia simple del decreto
1824 “Ley General de Títulos Valores”de Nicaragua publicada en la Gaceta, Diario
Oficial de la República de Nicaragua que carece de valor probatorio, ya que no se
ha presentado con las formalidades correspondientes.
Por consiguiente, al haber incumplido ambas partes con su carga procesal de
proporcionar la prueba del contenido y vigencia de la Ley General de Títulos Valores
de Nicaragua en la que fundamentaron la demanda y la oposición correspondiente,
dejando las mismas desprovistas de base legal para examinar, por ejemplo, si el
títulovalor base de la ejecución reúne los requisitos que aquella ley exige, si
conforme a la misma está revestido de fuerza ejecutiva, etc., por tanto, no existe
posibilidad de examinar la vía adecuada para obtener un pronunciamiento sobre
el fondo del asunto, ya que si la controversia debe resolverse mediante normas de
derecho extranjero, la ley interna resulta inaplicable; en virtud de ello, se evidencia
un defecto en la potestad de juzgar que imposibilita entrar al análisis del títulovalor
presentado por el ejecutante.
Al respecto GUISEPPE CHIOVENDA en su obra INSTITUCIONES DE DERECHO
PROCESAL CIVIL al referirse a los requisitos para obtener una sentencia de
fondo favorable a las pretensiones del actor denomina al tema “CONDICIONES
GENERALES DE LA sentencia POSITIVA ESTIMATORIA”(en el Volumen I.
Traducción del Italiano por E. Gómez Obraneja, Cárdenas Editor y Distribuidor,
México, 1989, Página 205) y llama también a estas condiciones “condiciones de la
actuación de la ley”y “condiciones de la acción”.

189
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

Este autor concibe a la acción como el poder jurídico que tiene el particular de
provocar con su demanda la actuación de la voluntad de la ley y es por ello que
define a estas condiciones en la pág. 76 de la obra citada como “las condiciones
necesarias para que el juez tenga que declarar existente y actuar la voluntad
concreta de ley invocada por el actor, es decir, las condiciones necesarias para una
resolución favorable”(subrayado no es propio del texto), pero en el sub litem se
trata de las condiciones necesarias para la admisión de la demanda, su calificación
y la determinación de la vía procesal idónea, por lo que, al no haberse probado el
derecho extranjero que alegaron las partes, no se le proporcionó al juez normas de
derecho que aplicar al caso concreto para resolver tanto la pretensión del ejecutante
como la oposición formulada por la ejecutada, por lo que, deviene en improponible
y no en “desestimada”la pretensión ejecutiva, puesto que a criterio de esta Cámara
no puede haber un pronunciamiento sobre el fondo del asunto –en este caso- con
alcance de cosa juzgada formal y material, puesto que como dicen Calvo Caravaca
y Carrascosa González, en la pág. 292 de la obra citada anteriormente, con dicha
resolución: “Lo que el juez dice a la parte es: “El Derecho extranjero es la base
de la fundamentación jurídica correcta: base usted su demanda en el Derecho
extranjero y pruébelo, y entonces tendrá opciones de ganar su pleito, pero no me
cargue a mí con el peso de buscarle la argumentación correcta de su petición, ése
es su trabajo, no el mío, y para eso le paga su cliente”, por lo que, el alcance de la
decisión se limita a reconocer la imposibilidad de enjuiciar el documento base de la
pretensión ni los hechos de la demanda, por no contar con los fundamentos legales
para ello, es decir, la ley que ha regido las formalidades del acto, lo que impide
calificar correctamente la identidad de la vía utilizada, o sea la ejecutiva, puesto
que su naturaleza tan especial, encuentra como piedra angular para su iniciación
la ejecutividad del títulovalor mismo que no ha sido enjuiciada como queda dicho.

Respecto de la nulidad solicitada por el apelante en este incidente de Apelación,


en lo referente a que la Jueza de la causa no hizo el señalamiento de audiencia
de prueba, observa esta Cámara, que previo de proceder a adoptar la decisión de
omitir la audiencia de prueba la judicante correctamente y en aplicación del Art. 4
CPCM, dio la oportunidad al ejecutante de expresar sus argumentaciones sobre la
necesidad o no de la misma, y en el escrito […] el [apoderado de la parte actora] a
pesar de que solicitó la celebración de la audiencia, no ofreció la práctica de ningún
medio probatorio que justificara el señalamiento respectivo, por tanto, la jueza de
la causa estimó que podía resolver la oposición planteada por la parte ejecutada
con la documentación presentada y los argumentos de las partes y en pleno ejercicio
de la facultad que le confiere el Art. 467 Inc. 2 CPCM, omitió el señalamiento a
audiencia por considerarla innecesaria. Es más, la prueba del derecho extranjero
que en esta instancia señala el recurrente. que no pudo aportar por no haberse
realizado la audiencia de prueba, es prueba documental y para incorporarlas al
proceso ejecutivo no era necesaria la celebración de audiencia, además que como
ya se dijo no fue propuesta en primera instancia, en consecuencia, la nulidad del
proceso solicitada por “BANCO [demandante]”, por medio de su apoderado […],
deviene en improcedente y así se declarará.
En suma pues, al no haber probado las partes el derecho extranjero en el que
fundamentaron la demanda y la oposición, este tribunal se ve imposibilitado para

190
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

entrar al estudio del fondo del asunto, pues no se cuenta con las normas jurídicas en
base a las cuales debe ser enjuiciado el títulovalor en que se basa la pretensión del
ejecutante, de lo que resulta que no es posible determinar si conforme a la Ley General
de Títulos Valores de Nicaragua dicho documento cuenta con los imprescindibles
requisitos para tener fuerza ejecutiva, lo que es indispensable para que la obligación
sea exigible por medio del proceso ejecutivo, no pudiéndose establecer la vía idónea
para hacer el reclamo, ello impide que haya un pronunciamiento sobre el fondo de
la cuestión debatida y vuelve improponible la demanda, y no estando la sentencia
recurrida pronunciada en este sentido deberá revocarse y pronunciar la que en
derecho corresponde.”
Licitud de la prueba
Art. 316.- Las fuentes de prueba deberán obtenerse de forma lícita, quedando expedita a las
partes la posibilidad de denunciar su origen u obtención cuando sean contrario a la ley.
Las fuentes de prueba obtenidas con vulneración de derechos constitucionales no serán
apreciadas por el Juez al fallar, y en este caso deberá expresar en qué consiste la violación.
La práctica de los medios probatorios en forma contraria a lo previsto por las leyes procesales
determinará la nulidad del medio correspondiente. Sin embargo, la fuente de prueba podrá ser
utilizada siempre que su aportación se hubiera realizado conforme a las normas legales.
Proposición de prueba
Art. 317.- La prueba deberá ser propuesta por las partes en la audiencia preparatoria o en la
audiencia del procedimiento abreviado, salvo casos expresamente exceptuados en este código.
La proposición de la prueba exige singularizar el medio que habrá de ser utilizado, con la
debida especificación de su contenido.
El Juez evaluará las solicitudes de las partes, declarará cuáles pruebas son admitidas y
rechazará las que resulten manifiestamente impertinentes o inútiles. La decisión del juez no será
recurrible, y las partes podrán solicitar que se haga constar en acta su disconformidad, a efecto de
interponer recurso contra la sentencia definitiva.
CÁMARA DE LA CUARTA SECCIÓN DEL CENTRO: SANTA TECLA, en
Sentencia con Referencia 17-C-14, de fecha once de junio de dos mil catorce:
“…el Código encomienda a todo Juzgador a realizar previo a la admisión de
cualquier medio de prueba, un juicio hipotético de relevancia de la prueba, en
el sentido de que el medio propuesto por las partes, de acuerdo a la información
aportada, pueda o no resultar decisiva para estimar o desestimar la demanda
planteada. Por lo que, si el medio de prueba aportado por las partes, no permite al
juzgador dicho convencimiento, no debe ser admitido, pues carece de finalidad…”
CÁMARA PRIMERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL
CENTRO: SAN SALVADOR, en Sentencia con Referencia 91-36CM1-2014, de
fecha veintitrés de julio de dos mil catorce.
“…3.3) El operador de justicia, debe evaluar el ofrecimiento de la prueba realizado
por las partes, y declarará cuáles son admitidas y rechazará las que resulten

191
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

manifiestamente impertinentes o inútiles, de conformidad a lo estipulado en el Inc.


3º del Art. 317 CPCM.; es decir, que en puridad, cuando se trata de determinar la
admisibilidad o denegación de la prueba, es una evaluación que hace el juzgador,
porque la valoración propiamente dicha, opera cuando ya ha sido admitida, y
sobre ésta descansará la decisión a pronunciarse…3.5) La actividad probatoria
está encaminada a demostrar que existe una coincidencia entre los hechos que
se alegan ocurridos y los probados, teniendo las partes el derecho a probar en
igualdad de condiciones, las afirmaciones que hubieran dado a conocer sobre los
hechos controvertidos que son fundamento de la pretensión o de la oposición a ésta,
a que el juez tenga en cuenta en la sentencia o decisión, las pruebas producidas, y
utilizar los medios que el Código prevé, así como aquéllos que, dada la naturaleza
del debate, posibiliten comprobar los alegados. No obstante, en el desarrollo de la
actividad probatoria, el derecho a probar y la aportación encuentran su limitante en
los presupuestos de admisibilidad de la prueba, ya que se requiere que la ofertada
sea lícita, pertinente y útil, es decir, que sea obtenida de forma legal, guarde relación
con el objeto de la misma, y que según las reglas y criterios razonables, sea idónea
para comprobar los hechos controvertidos…”
Pertinencia de la prueba

Art. 318.- No deberá admitirse ninguna prueba que no guarde relación con el objeto de la
misma.

CÁMARA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DE OCCIDENTE,


SANTA ANA, Apelación Referencia: INC-APEL-76-16-07-13 de fecha trece de
septiembre de dos mil trece.

“Respecto a que les fue denegada la prueba ofertada, considera este Tribunal que si
bien es cierto, que existe libertad probatoria también lo es, que se deben conservar
los principios que la regulan entre los cuales se encuentran los de pertinencia y
conducencia o idoneidad de la prueba y, en atención a ellos, la regla de libertad
probatoria no es absoluta, pues se deben reconocer, entre otros límites, el de la
inutilidad de la prueba que se ofrece o se pretende producir. Para el caso, pretender
comprobar con la prueba de declaración de parte y declaración de parte contraria,
la alteración del texto de la letra, no es posible, pues no es la idónea como lo sería
la pericial, la cual no fue ofrecida y en caso de haberse recibido, el resultado no
afectaría nada en absoluto a la situación jurídica, tiene la letra, según el Art. 702 y
623 Cm. Razón por la que el Juez A Quo, en atención a lo que disponen los Arts. 318
y 319 CPCM, rechazó dicha prueba, conforme los parámetros del Art. 320 CPCM.”

Utilidad de la prueba

Art. 319.- No deberá admitirse aquella prueba que, según las reglas y criterios razonables, no
sea idónea o resulte superflua para comprobar los hechos controvertidos.

192
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

CÁMARA DE LA TERCERA SECCIÓN DEL CENTRO: SAN VICENTE, en


Sentencia con Referencia 44-PA-2014-CPCM, de fecha nueve de octubre de dos mil
catorce.

“…refiere a que solo deberá admitirse aquella prueba que sea idónea (basándose
en criterios razonables y máximas de la experiencia) para comprobar los hechos
controvertidos, este caso no se hace Referencia al objeto de la prueba sino a la
aptitud que tenga esta, para demostrar el hecho controvertido; en ese sentido la
prueba inútil se diferencia de la impertinente en que la primera sí recae sobre el
objeto del debate pero la razón y experiencia nos dicen que su práctica no nos
conducirá a la demostración de ellos…”

Rechazo de prueba

Art. 320.- El rechazo de la prueba deberá acordarse en resolución debidamente motivada.

Frente a este rechazo, las partes podrán proceder conforme a lo dispuesto en esta sección.

Carga de la prueba. (2)

Art. 321.- La carga de la prueba es exclusiva de las partes. Sin embargo, respecto de prueba,
que ya fue debida y oportunamente aportada y controvertida por las partes, el Juez podrá ordenar
diligencias con el fin de esclarecer algún punto oscuro o contradictorio; en tales diligencias no se
podrán introducir hechos nuevos, bajo ninguna circunstancia, ni tampoco practicar ningún medio
probatorio no introducido oportunamente por las partes.

Las partes podrán estipular de manera previa determinados hechos que se consideraren
probados, y así lo comunicarán por escrito al Juez, diez días antes de la celebración de la audiencia
probatoria o en el acto mismo de dicha audiencia.

SALA DE LO CIVIL Sentencia Referencia 389-CAC-2013 de fecha dos de octubre


de dos mil quince:

“En lo tocante a la postura jurídica del impetrante, la Sala considera imperioso


significar, que las diligencias para mejor proveer son complementarias a las partes,
y no estriban en que el juzgador pueda suplir la inactividad probatoria de éstas.
En ese sentido, las diligencias en alusión, tienen por finalidad posibilitar al juez la
práctica de actividad probatoria para concluir complementariamente la practicada
a instancia de las partes y que no ha producido el convencimiento y certeza de los
hechos a establecer.

En esa línea argumentativa, el juez se encuentra facultado de poderes probatorios


que están limitados a la actuación anterior de las partes. Así pues, si partimos
que del juicio valorativo del juzgador éste infiere en la necesidad de obtener la
aclaración de una prueba vertida de forma inconclusa o ambigua para efectos de
integridad probatoria, entonces ello representaría un condicionamiento para decidir
el asunto que se discute, y significará que la eficacia de aquélla es relevante e
insoslayable para complementar su convicción sobre los hechos presentados para
fines valorativos que incidirán en la decisión del objeto litigioso.

193
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

La diligencia probatoria que de acuerdo al impetrante no se verificó por el Juez


A-Quo, deriva de la facultad discrecional conferida en el Art. 390 Inciso 2° C.P.C.M.,
y la misma constituye una circunstancia excepcional al principio de unidad de acto o
concentración, en cuanto se caracteriza por acordarse dentro del plazo para dictar
Sentencia, pero los hechos a acreditarse –en este caso- a través del reconocimiento
judicial, necesariamente tienen que formar parte del tema probatorio fijado por la
pretensión contenida en la demanda y la oposición a la misma.”

“En el caso sub lite, para la configuración de los presupuestos estatuidos en los
Arts. 390 y 392 Inciso 2° C.P.C.M., y posibilitar la orden y práctica probatoria de
reconocimiento judicial, constituye requisito o condición sine qua non que los hechos
que se pretendan acreditar constituyan parte del tema probatorio. Cabe denotar,
que al momento de establecerse la litis con la contestación negativa y oposición
a la demanda, no fue alegada la falta de correspondencia entre el inmueble objeto
de arrendamiento y el inmueble en que opera el auto lote “NICEKAR”propiedad
del demandado, por lo que tal punto –indubitablemente-, fue objeto de exclusión
en la actividad probatoria. De allí, que considerando la falta de imperatividad
para el Juzgador lo estatuido en el Art. 390 Inciso 2° C.P.C.M., y que el contrato
de arrendamiento cuya terminación se pretende, conserva toda su validez y eficacia
dado que su suscripción no fue objeto de impugnación por cualquiera de las causas
legales, este Tribunal concluye, que los Arts. 390 Inciso 2° y 392 Inciso 2° C.P.C.M.
son inaplicables en el proceso de que se trata. Bajo dicho contexto, esta Sala advierte
la inexistencia del vicio denunciado por el interponente, por lo cual, por el motivo de
fondo inaplicación de ley, Arts. 390 y 392 Inciso 2° C.P.C.M. no ha lugar a casar la
sentencia y así se impone declararlo.”

CÁMARA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DE OCCIDENTE:


SANTA ANA, en Sentencia con Referencia INC-APEL-61-30-04-15, de fecha
dieciocho de junio de dos mil quince.

“…la carga de la prueba es la conducta impuesta a uno o a ambos litigantes


para que acrediten la verdad de los hechos enunciados por ellos y corresponde,
en materia de obligaciones, al actor, probar los hechos que suponen la existencia
de la obligación y al demandado los hechos que suponen la extinción de ella.
(Fundamentos del Derecho Procesal Civil, Eduardo J. Couture, Pág. 242-243)
(El resaltado es nuestro). La carga de la prueba, según concepto del autor José V.
Acosta, en su libro Visión Jurisprudencial de la Prueba Civil, Tomo I, pág. 129, es la
actividad prescrita por la ley al litigante, a fin de que las afirmaciones por él hechas,
resulten verificadas y produzcan convicción en el juez sobre la razón que asista a las
partes. No es un deber, pues no existe el correlativo derecho de alguien a exigir su
cumplimiento. La carga de la prueba no supone ningún derecho del adversario sino
un imperativo del propio interés de cada litigante; es una circunstancia de riesgo,
que consiste en que quien no prueba los hechos que debe probar, pierde el pleito sí
de ello depende la suerte de la Litis…”

Cadena de custodia de la prueba

Art. 322.- La cadena de custodia tiene por objetivo evitar que la prueba sea alterada,
contaminada o que lleve error en la identificación de los objetos, substancias, documentos o

194
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

cualquier otro elemento relacionado, directa o indirectamente, con el o los hechos que se estén
queriendo probar.

La parte que propone la prueba podrá establecer inicialmente que ésta no ha sufrido
modificaciones o alteraciones durante el tiempo en que se ha encontrado bajo su custodia o poder,
y que se trata del mismo objeto, sustancia, documento u otra prueba material, sobre los cuales, en
su caso, se hubieran realizado análisis periciales.

No se requerirá lo anterior cuando se tratare de objetos que tengan características distintivas


que los hagan fácilmente identificables, ni cuando los objetos hubieran sido debidamente marcados.

La parte contraria podrá acreditar la interrupción de la cadena de custodia si establece que la


condición de los objetos, substancias, o documentos u otros elementos tangibles relacionados con
el hecho o hechos en controversia han sido sustancialmente alterados o contaminados. En este
caso, el Juez o tribunal podrá rechazar la prueba, en el entendido de que la mera posibilidad de una
interrupción de la cadena de custodia no producirá el rechazo de la prueba.

Aseguramiento de prueba

Art. 323.- Las partes podrán solicitar del Juez que esté conociendo del asunto la adopción de
las medidas que estime pertinentes y adecuadas para proteger o conservar las fuentes de prueba
relevantes para ellas.

Se deberá establecer que existe un riesgo de que una conducta humana o un acontecimiento
natural pudieran desvirtuar las fuentes de prueba cuyo seguramiento se busca.

Si se intenta el aseguramiento antes de la interposición de la demanda, la competencia


corresponderá al juez que deba conocer del proceso principal. (2)

Procedencia del aseguramiento de la prueba

Art. 324.- El tribunal, mediante auto, ordenará las medidas adecuadas para asegurar la fuente
de prueba si estima que el aseguramiento se refiere a una prueba pertinente y útil, que es necesario
para mantenerla disponible y en condiciones para la celebración de la audiencia, y que la medida
es la única manera de lograr la conservación y disponibilidad de la prueba.

El tribunal podrá decidir que el solicitante preste caución para asegurar los posibles daños y
perjuicios que ocasione la medida. Y la persona que deba soportar ésta podrá oponerse a que se
lleve a cabo, ofreciendo caución bastante para responder de que la prueba pueda practicarse en su
día.

En la fijación de la cuantía de la caución el juez deberá respetar la proporcionalidad, referida a


la capacidad patrimonial del solicitante y al objeto del proceso.

Acreditación de prueba material o tangible

Art. 325.- Las partes, mediante testimonio, incorporarán a la audiencia probatoria los objetos,
substancias, fotografías, vídeos, medios de almacenamiento de datos, de imágenes, de voz o de
información, así como cualquier otra prueba material o tangible que puedan aportar elementos
de prueba; y también instrumentos u otros documentos, salvo cuando éstos deban acompañar la
demanda o la contestación de la misma.

195
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

La parte deberá acreditar previamente su pertinencia con el hecho controvertido, así como su
suficiencia para apoyar el hecho que se busca probar.

Para la admisión de esta clase de prueba, la parte deberá solicitar que se autorice la
identificación de la prueba material correspondiente, mostrará a la parte contraria la prueba
identificada y lo hará también al testigo, para que éste, previo interrogatorio, establezca las bases
necesarias para su admisibilidad. Al finalizar el interrogatorio, la parte solicitará al juez o tribunal
que se considere marcada y admitida la prueba identificada.

Luego de que la parte ofrezca la prueba, el juez o el presidente del tribunal deberá hacer
una determinación sobre su admisibilidad, preguntando previamente a la parte contraria si tiene
objeciones al respecto. Si no es objetada, el juez o tribunal tomará su decisión y ordenará que se
marque la prueba como admitida o no admitida, según sea el caso.

Admitida la prueba, la parte que la hubiera presentado continuará con el interrogatorio al


testigo sobre el contenido sustantivo de la evidencia.

Si hay objeción a la admisión de la prueba, la parte que hubiera objetado deberá argumentar y
fundamentar jurídicamente ante el Juez o tribunal las razones de su objeción; o podrá previamente,
contrainterrogar al testigo, limitándose a hacerlo sólo sobre la suficiencia de la prueba que éste
hubiese aportado. Al finalizar el contrainterrogatorio, la parte fundamentará su posición con
respecto a la admisibilidad o inadmisibilidad de la prueba.

SECCIÓN SEGUNDA
ANTICIPO DE PRUEBA

Procedencia del anticipo de prueba

Art. 326.- Cuando por las circunstancias del caso sea de temer la pérdida de un medio de
prueba por la imposibilidad de reproducción de los hechos en la audiencia probatoria, sea por la
situación de las personas o el estado de las cosas, y aún no se hubiese iniciado el proceso en el que
habría de producirse ésta, el futuro demandante, o demandado, que pretenda establecer la existencia
de un hecho, podrá acudir al Juez competente a efecto de que sea practicada anticipadamente.

Lo mismo podrá hacer cualquiera de las partes cuando, encontrándose en trámite el proceso,
no estuviere en la etapa procesal oportuna para ello.

Prueba que puede anticiparse

Art. 327.- Será admisible el anticipo de prueba respecto de cualquier medio de los que este
código prevé.

Tratándose de instrumentos públicos o privados, el anticipo de prueba sólo procede cuando,


habiéndose ya iniciado el proceso donde se anunciaron y al que se pretende su incorporación,
no haya llegado aún la etapa procesal probatoria y se tema por la destrucción u ocultación de los
mismos.

Solicitud del anticipo de prueba

Art. 328.- El futuro demandante o demandado, o cualquiera de las partes, habrán de presentar
ante el Juez competente para conocer del proceso o que esté conociendo del mismo la solicitud de

196
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

anticipo de prueba, en la que deberá alegarse y justificarse la necesidad de su realización, haciendo


Referencia a las circunstancias que razonablemente llevarían a la pérdida de aquélla, sin lo cual el
juez rechazará la petición.

Si el proceso al cual tendría que incorporarse oportunamente la prueba que se está anticipando
no estuviere aún en trámite, éste deberá iniciarse dentro del mes posterior a la práctica de la prueba.

Procedimiento del anticipo de prueba

Art. 329.- La proposición y la práctica de pruebas anticipadas se realizará conforme a lo


dispuesto en este código para cada una de ellas.

A tal efecto, cuando se pidan antes de iniciarse el proceso, el solicitante deberá precisar de manera
suficiente los hechos que justifican su petición y designar a la persona a quien pretenda demandar,
que será citada con suficiente antelación para que pueda intervenir en la audiencia extraordinaria
que se habrá de celebrar para tal efecto. La prueba anticipada podrá practicarse de nuevo si en el
momento de la audiencia probatoria pudiera realizarse y alguna de las partes lo solicitara.

El resultado de la prueba anticipada y el acta de la audiencia extraordinaria quedarán en el


tribunal donde se hubieran practicado y se incorporarán al proceso futuro, si se iniciara en el plazo
establecido en el artículo anterior.

Si se hubiese obtenido prueba testimonial anticipada y el testigo estuviera disponible,


éste comparecerá a la audiencia probatoria y verterá su conocimiento sobre los hechos en el
correspondiente interrogatorio. Lo anterior no tendrá lugar cuando el testigo no está disponible para
declarar en la audiencia probatoria porque se halla en peligro de muerte o ya hubiera fallecido o está
física o síquicamente impedido para comparecer. La prueba testimonial anticipada será admisible si
en la práctica de la misma hubiese existido la posibilidad real de contrainterrogar al testigo.

CAPÍTULO CUARTO
MEDIOS PROBATORIOS

Medios probatorios

Art. 330.- La prueba podrá producirse por cualquiera de los medios probatorios regulados en
este código.

Los medios no previstos por la ley serán admisibles siempre que no afecten la moral o la
libertad personal de las partes o de terceros y se diligenciarán conforme a las disposiciones que se
aplican a los medios reglados.

SALA DE LO CONSTITUCIONAL, Amparo Referencia: 581-2010 de fecha ocho


de febrero de dos mil trece.

“Sobre las copias simples presentadas, si bien el Código Procesal Civil y Mercantil
-en adelante, “C.Pr.C.M.”- no hace Referencia expresa a la apreciación de las
copias de documentos públicos y privados, ello no priva a estas de valor probatorio
dentro de un proceso, toda vez que los medios de prueba no previstos en la ley
son admisibles siempre que respeten la moral y la libertad personal de las partes
y de terceros, resultando aplicables a ellos las disposiciones que se refieren a

197
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

los mecanismos reglados -Art. 330 Inc. 2° del C.Pr.C.M.-. Así, las reglas de los
documentos públicos y privados resultan analógicamente aplicables a sus copias,
especialmente por la previsión contenida en el Art. 343 del C.Pr.C.M., tomando en
consideración las similitudes que presentan tales duplicados con las fotografías.

En razón de lo anterior, las referidas copias serán admisibles dentro del proceso
de amparo y constituirán prueba de la autenticidad del documento que reproducen,
siempre que no se haya acreditado la falsedad de aquellas o del instrumento original,
pudiendo valorarse conforme a las reglas de la sana crítica. Consecuentemente,
mediante la copia presentada se han acreditado de manera fehaciente los datos
contenidos en ella.”

CÁMARA DE LA CUARTA SECCIÓN DEL CENTRO: SANTA TECLA, en


Sentencia con Referencia 29-C-12, de fecha veintiocho de mayo de dos mil doce:

“...conforme al Art. 330 CPCM, establece un sistema de libertad probatoria, que


permite a las partes utilizar cualquiera de los medios probatorios regulados por este
código. Es así que, de acuerdo al principio de aportación, la actividad probatoria
deberá recaer exclusivamente sobre los hechos afirmados por las partes, es decir,
que dicha actividad deberá tener como finalidad convencer al juez de la realidad de
un hecho. En esa medida, el Código, encomienda a todo juzgador a realizar previo
a la admisión de cualquier medio de prueba, un juicio hipotético de relevancia de
la prueba, en el sentido de que el medio propuesto por las partes, de acuerdo a la
información aportada, pueda o no resultar decisiva para estimar o desestimar la
demanda o reconvención. Por lo que, si el medio de prueba aportado por las partes,
no permite al juzgador dicho convencimiento, no debe ser admitido, pues carece de
finalidad...”(17-C-14)

CÁMARA SEGUNDA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, SAN SALVADOR, en Sentencia con Referencia 3-RNLA-11, de fecha
diez de noviembre de dos mil once.

“...25. El vocablo “prueba” es, generalmente, utilizado para designar los distintos
medios con los cuales puede ser acreditada la existencia de un hecho; en tal sentido,
decimos prueba de testigos, prueba de peritos, etc. Estos medios se encuentran
contemplados en el Art. 330 y siguientes CPCM. Sin embargo, este vocablo
comprende también una compleja actividad de los sujetos encaminada a demostrar
la existencia de un hecho o las cualidades de las personas o cosas. 26. En derecho
civil, por regla general, los hechos que son objeto de prueba deben haber sido
afirmados por las partes, Art. 313 CPCM, y en principio, el juez civil no investiga ni
averigua sino que verifica las afirmaciones de las partes...”

CÁMARA TERCERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, SAN SALVADOR, en Sentencia con Referencia 312-CS-14, de fecha
veintinueve de enero de dos mil quince.

“...16. Sobre las copias simples, la Sala de lo Constitucional de la Corte Suprema


de Justicia en reiteradas Sentencias (296-2010, 614-2010, 608-2010 y otras) ha
sostenido que los medios de prueba no previstos en la ley son admisibles, siempre

198
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

que no afecten la moral o la libertad personal de las partes o de terceros, resultando


aplicables a ellos las disposiciones que se refieren a los mecanismos reglados
conforme al Art. 330 Inc. 2 CPCM., estableciendo que las reglas de los documentos
públicos y privados resultan analógicamente aplicables a sus copias y constituirán
prueba de la autenticidad de los documentos que reproducen, siempre y cuando no
haya sido acreditada la falsedad de aquellas o del instrumento original, pudiendo
valorarse conforme a las reglas de la sana crítica...”

SECCIÓN PRIMERA
DOCUMENTOS

Instrumentos públicos

Art. 331.- Instrumentos públicos son los expedidos por notario, que da fe, y por autoridad o
funcionario público en el ejercicio de su función.

CÁMARA SEGUNDA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, SAN SALVADOR, Sentencia de Apelación Referencia 40-4CM-15-A
de fecha veintisiete de julio de dos mil quince.

“Respecto a la pertinencia de la prueba, el legislador nos exige que la prueba


guarde una relación directa con el objeto del debate; así mismo la prueba debe ser
útil, es decir, que la prueba debe ser la idónea para probar los hechos que se alegan,
y que la misma no resulte superflua para comprobar los hechos controvertidos.

En consecuencia, la prueba debe ser conducente, lo cual alude a la eficacia de la


prueba para demostrar los hechos controvertidos en un caso concreto, debe generar
el convencimiento en el juzgador sobre la existencia o inexistencia de los hechos
alegados por las partes; y por último debe ser necesaria, la cual se encuentra
relacionada a los casos de prueba sobreabundante y hechos que no requieren
prueba.

Dicho lo anterior es necesario analizar sobre la admisibilidad de la prueba


documental presentada por la parte apelante para determinar si el Juez A Quo actuó
conforme a derecho.

La parte apelante junto al escrito de oposición al despacho de ejecución y junto


al escrito de Apelación solicitó que se incorporará como prueba documental la
escritura pública otorgada en esta ciudad a las once horas del día cuatro de julio de
dos mil doce, ante los oficios notariales de Alejandro Arturo S., la cual se encuentra
agregada de fs.49 al 52 de la pieza principal y de fs.6 al 9 del incidente de Apelación,
justificando que con dicha prueba pretende probar que la obligación que se pretende
ejecutar en el presente proceso, ya fue resciliada y finiquitada por ambas partes, por
lo que solicitó que con base a dicha prueba se declare ha lugar la oposición de pago
o cumplimiento de la obligación.

Sin embargo este tribunal al examinar los requisitos de admisibilidad de la prueba


enunciados en párrafos anteriores, advierte que la prueba ofrecida por la parte
apelante no cumple con el requisito de pertinencia, ya que en el texto de la escritura

199
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

citada consta que el préstamo que se está resciliando y finiquitando es el otorgado,


en esta ciudad, a las once horas con quince minutos del día veinticuatro de junio de
dos mil diez, ante los oficios notariales de Alejandro Arturo S., tal y como consta en
el romano I) “Antecedentes”, literal a), romano II Resciliación, literal a) y romano
III del documento citado.

Y siendo que en el presente caso se ha ejecutado el préstamo otorgado en esta


ciudad a las diez horas y treinta minutos del día cuatro de julio de dos mil doce, ante
los oficios notariales de Alejandro Arturo S., tal y como consta de fs. 4 al 9 de la
pieza principal, es que consideramos que la escritura de Resciliación y finiquito no
tiene relación con el préstamo que se está ejecutando, ya que son dos obligaciones
diferentes, en consecuencia, dicha prueba documental es inadmisible por no guardar
relación con el objeto de este proceso. Ni es idónea para probar que el crédito que se
pretende ejecutar en el presente proceso ha sido pagado.

Por otra parte el Art.514 Inc.2° y Ord. 2° y 3° del CPCM, establecen: “(...) Sólo
serán proponibles los documentos relativos al fondo del asunto que contuviesen
elementos de juicio necesarios para la decisión de la causa, pero sólo en los casos
en que sean posteriores a la audiencia probatoria o a la audiencia del proceso
abreviado; los documentos anteriores a dicho momento se admitirán cuando la parte
justifique que ha tenido conocimiento de ellos con posterioridad a áquel. También
podrá proponerse prueba documental en el caso de que la parte no aportara los
documentos en primera instancia por alguna causa justa (…)

2° Cuando, por cualquier causa no imputable al que solicite la prueba, no se hubiera


podido practicar, en todo o en parte, aquella prueba que hubiera sido propuesta en
primera instancia.

3° Cuando los medios probatorios estén referidos a la ocurrencia de hechos


relevantes para el derecho o interés discutido, pero acaecidos después de iniciado el
plazo para dictar sentencia en primera instancia. (…)”

De la normativa citada se advierte que la prueba propuesta en esta instancia es


inadmisible, ya que en el mismo documento consta que el notario Alejandro Arturo
S. extendió copia de la escritura de Resciliación y finiquito a los demandados el
día cuatro de julio de dos mil doce, y la contestación de la demanda fue presentada
con fecha nueve de julio de dos mil catorce, tal y como consta a fs. 87 de la pieza
principal.

Es decir, que se tuvo el tiempo suficiente para que su representado buscará y


presentará dicha prueba documental, ya que se encontraba en su poder, y no fue
emitida con fecha posterior a la contestación de la demanda, en consecuencia, si la
prueba se hubiera referido al crédito objeto de este proceso, el momento procesal
en el cual debía ser propuesta y presentada era con el escrito de contestación de la
demanda, Art.288 Inc.2° y 289 CPCM.”

200
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

SALA DE LO CONSTITUCIONAL, Amparo Referencia: 503-2014 de fecha


veintiuno de octubre de dos mil quince.

“Teniendo en cuenta lo dispuesto en el Art. 331 del código Procesal Civil y Mercantil
y 30 de la Ley del Ejercicio Notarial de la Jurisdicción Voluntaria y de Otras
Diligencias, de aplicación supletoria a los procesos de amparo, con la mencionada
certificación se han comprobado los hechos que en ella se consignan. Asimismo, en
razón de lo dispuesto en los Arts. 330 Inc. 2° y 343 del código citado, con las copias
simples antes mencionadas, dado que no se acreditó su falsedad, se han comprobado
de manera fehaciente los datos contenidos en ellas.”

CÁMARA TERCERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, SAN SALVADOR, en Sentencia con Referencia 312-CS-14, de fecha
veintinueve de enero de dos mil quince, sostiene que:

“…15. En el caso de autos, la parte actora en apoyo de su pretensión ha presentado


únicamente prueba documental, por este motivo es necesario referirnos a ella; y al
respecto tenemos que existe una clasificación bipartita de los mismos, según nuestro
Código Procesal Civil y Mercantil, que los divide en públicos y privados, según sea
el carácter de las personas que le confieren certeza, siendo que en el caso de autos
la prueba instrumental presentada por los demandantes, consiste en documentos
públicos, por lo que, se torna necesario analizar los mismos, que son aquéllos
expedidos por notario y por autoridad o funcionario público en el ejercicio de sus
funciones, Art. 331 CPCM; los que pueden hacerse valer como prueba en el proceso
y cuya valoración debe realizarse conforme a las reglas del valor tasado conforme
al Art. 416 CPCM…”

SALA DE LO CONSTITUCIONAL DE LA CORTE SUPREMA DE JUSTICIA,


SAN SALVADOR, en Sentencia de Amparo, con Referencia 296-2010, de fecha
doce de abril de dos mil trece.

“…A. a. El Art. 331 del Código Procesal Civil y Mercantil —en adelante,
“C.Pr.C.M.”—, de aplicación supletoria al proceso de amparo, establece que los
documentos públicos son aquellos expedidos por notario o por una autoridad o
funcionario en el ejercicio de su función, los cuales constituyen prueba fehaciente
de los hechos o actos que documentan, de la fecha y personas que intervienen en
él, así como del fedatario o funcionario que lo expide, siempre y cuando aquellos se
aporten en original o testimonio y no se haya probado su falsedad…”

CÁMARA DE LA CUARTA SECCIÓN DEL CENTRO: SANTA TECLA, en


Sentencia con Referencia 50-C-12, de fecha veinticinco de julio de dos mil doce.

“…actualmente los documentos auténticos, como las certificaciones regístrales


emitidas por un funcionario público, hacen plena prueba de lo contenido en ellas,
ya que se entiende que tendrán igual valor probatorio que los instrumentos públicos
expedidos por notario, puesto que dichos documentos auténticos se encuentran
subsumidos dentro de los instrumentos públicos, y por ende la ley les da valor de
plena prueba conforme al sistema de prueba tasada…”

201
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

CÁMARA DE LA CUARTA SECCIÓN DEL CENTRO: SANTA TECLA, en


Sentencia con Referencia 109-C-15, de fecha treinta de noviembre de dos mil quince.

“…iv) De acuerdo a lo prescrito en los Art. 331 y 341 del CPCM, las certificaciones
extendidas por el Registro de la Propiedad Raíz e Hipotecas, constituyen documentos
públicos, ya que han sido extendidos por una autoridad o funcionario público en el
ejercicio de sus funciones; consecuentemente tienen valor de plena prueba en los
términos expuestos en los artículos relacionados; sin embargo, según el Art. 35 de
la Ley Relativa a las Tarifas y Otras Disposiciones Administrativas del Registro de
la Propiedad Raíz e Hipotecas, la cual por ser una ley de carácter especial priva
sobre la ley general; las certificaciones que hayan sido extendidas por el Registro de
la Propiedad tendrán el mismo valor que el de las escrituras originales, siempre y
cuando no fuere posible presentar el título original…”

Instrumentos privados

Art. 332.- instrumentos privados son aquellos cuya autoría es atribuida a los particulares.

También se considerarán instrumentos privados los expedidos en los que no se han cumplido
las formalidades que la ley prevé para los instrumentos públicos.

Instrumentos redactados en idioma extranjero

Art. 333.- Cuando el instrumento público o privado que se presente no esté en idioma
castellano, deberá acompañarse al mismo una traducción efectuada en legal forma. La traducción
podrá ser impugnada por una sola vez en la audiencia preparatoria o probatoria, según el caso. El
Juez o tribunal designará a un perito para una nueva traducción.

CÁMARA DE LA TERCERA SECCIÓN DEL CENTRO: SAN VICENTE, en


Sentencia con Referencia C-5-PE- EJECUTIVO-2012, de fecha treinta de marzo
de dos mil doce,sostiene que:

“…No se trata de que se haya producido una nulidad por cuanto se presentaron
las facturas en idioma inglés a las Diligencias Preliminares, en razón de que no
hay norma jurídica que así lo ordene conforme al Principio de Especificidad
o Taxatividad; sino que, lo que ha sucedido es que los documentos privados
presentados en dichas Diligencias no adquirieron la categoría de documentos
privados fehacientes, a pesar de haber sido reconocidos legalmente en contumacia
por falta de comparecencia del deudor, por violación de lo dispuesto en el Art.
333 CPCM, pues aun y cuando se tenga por reconocida una firma, la obligación
contenida en ella, debe ser entendida y valorada por el Juez A Quo, es decir, que
no era posible que se tuviera por reconocida una obligación en un idioma que no
era inteligible ni para el presunto deudor ni para el juzgador. Existe consenso en la
Doctrina Procesal que aun y cuando el juez tenga conocimientos de otros idiomas
o lenguas, es necesario que se auxilie de un perito traductor, en primer lugar por
respeto al Principio de Imparcialidad y en segundo lugar, porque debe seguirse el
procedimiento que la Ley ha establecido, respetando en todo caso el Principio de
Legalidad Objetiva...”

202
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

Autenticidad de los instrumentos

Art. 334.- Los instrumentos públicos se considerarán auténticos mientras no se pruebe su


falsedad. (2)

Sin perjuicio de lo previsto en Tratados Internacionales, suscritos y ratificados por El Salvador,


para que haga fe el instrumento público, emanado de país extranjero, la firma que lo autoriza debe
estar autenticada por el Jefe de la Misión Diplomática, Cónsul, Vice-Cónsul o Encargado de los
Asuntos Consulares de la República, o en su defecto, por los funcionarios correspondientes del
Ministerio de Relaciones Exteriores de donde proceden tales documentos, y la firma que autoriza
tal legalización habrá de ser autenticada también por el Ministro o Viceministro de Relaciones
Exteriores de El Salvador, o por el funcionario del Ministerio de Relaciones Exteriores que, por
medio de Acuerdo Ejecutivo en el mismo ramo, haya sido autorizado de modo general para ello.
(2)

También harán fe los instrumentos públicos emanados de país extranjero extendidos por
medio de fotocopias, siempre que por razón puesta al reverso de las mismas se haga constar la
fidelidad de tales fotocopias y que se han llenado las formalidades exigidas por la ley del país en
donde se han extendido. Esta razón deberá ser firmada por el funcionario competente del país de
donde proceden, y la firma de éste, autenticada de la manera prevenida en el inciso anterior. (2)

Siempre que el Juez o Tribunal, o el jefe de la oficina gubernativa donde el instrumento o


instrumentos vertidos al castellano en el extranjero, fueren presentados, creyeren conveniente
una nueva versión, podrán de oficio acordarla, como también en el caso de solicitarlo persona
interesada en ello; y esa nueva versión practicada en forma legal por juez competente, será la única
que se tomará en cuenta. (2)

CÁMARA DE LA CUARTA SECCIÓN DEL CENTRO, Apelación Referencia


86-C-15 de fecha: veintidós de diciembre de dos mil quince.

“Al respecto la Sala de lo Civil de la Corte Suprema de Justicia, en sentencia


Referencia 270-CAC-2013, dictada a las diez horas del día veinticuatro de julio del
año recién pasado, en un recurso de casación interpuesto en un Proceso Común
Reivindicatorio, considera lo siguiente: “…la Sala observa que la norma que ha
sido señalada como inaplicada, es el Art. 35 Inc. 4° de la Ley Relativa a las Tarifas y
Otras Disposiciones Administrativas del Registro de la Propiedad Raíz e Hipotecas
dispone: “A falta de título de propiedad original inscrito, tendrá el mismo valor y
fuerza la nueva certificación del acta de remate o adjudicación o el nuevo testimonio
que, para reponerlos, expidieren el Juez de 1ª Instancia, Alcalde Municipal,
Gobernador, Cartulario o Presidente de la Corte Suprema de Justicia, en su caso,
siempre que tuviere al pie, extendida por la oficina de Registro, la razón de la
inscripción, por certificación.”Ahora bien, se observa de la lectura de la sentencia
impugnada, que el Tribunal Ad quem ha señalado: ““el apelante sostiene que, el
Juez A Quo, ha interpretado erróneamente el contenido de los Arts. 341 C.P.C.M.
y 891 C.C., y ha omitido aplicar lo dispuesto en los Arts. 717 inciso 1° C.C. y 35
inciso cuarto de la Ley Relativa a las Tarifas y Otras Disposiciones Administrativas
del Registro de la Propiedad Raíz e Hipotecas, al haber admitido como elemento
probatorio, una certificación literal…”Ahora bien, de conformidad al art. 331
C.P.C.M., la certificación de la inscripción registral es un instrumento público, el

203
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

cual ha sido expedido por un funcionario público en el ejercicio de su función, el


cual se considerará auténtico mientras no se pruebe su falsedad, Art. 334 C.P.C.M. y
como tal hace plena prueba. Sin embargo, para su efectividad dicho documento debe
cumplir determinados presupuestos señalados en el Art. 35 inc. 4° De la Ley Relativa
a las Tarifas y Otras Disposiciones Administrativas del Registro de la Propiedad
Raíz e Hipotecas; en dicha norma, se establece claramente las condiciones en las
que las certificaciones registrales tendrán el mismo valor probatorio que el título de
dominio originalmente inscrito, de manera que para poder hacer uso de este medio
de prueba, es preciso que el actor establezca procesalmente qué le impide presentar
el título original.” “En consecuencia, el demandante no ha comprobado legalmente
el presupuesto más importante a que se refiere el Art. 891 C.C., y es el relativo a la
propiedad del bien reclamado, por lo cual la certificación registral presentada no
produce los efectos de plena prueba pues la ley ha condicionado el valor probatorio,
solo cumpliendo las condiciones establecidas en el artículo inaplicado tendrá el
valor y fuerza probatoria que el título inscrito.”

Proposición y presentación de los instrumentos públicos o privados

Art. 335.- Los instrumentos se presentarán con la demanda o con la contestación, conforme a
las reglas establecidas en este código.

Deber de exhibición de los instrumentos públicos o privados

Art. 336.- Las partes tienen la obligación de exhibir los instrumentos que se encuentren en su
poder y de cuyo contenido dependa algún elemento del objeto del proceso. Se podrá solicitar al
juez que ordene la exhibición del mismo, so pena de ser sancionado el que incumpla con una multa
cuyo monto se fijará entre cinco y diez salarios mínimos urbanos, vigentes, más altos. (2)

La exhibición se deberá producir en el plazo que indique el Juez, que será el más breve posible
atendidas las circunstancias.

Si el documento que deba exhibirse se encontrare en poder de tercero, se le intimará para que
lo presente. Si lo acompañare, podrá solicitar su oportuna devolución dejando testimonio o copia
autenticada en el expediente.

Reproducción de instrumentos

Art. 337.- La parte que pretenda utilizar como prueba un instrumento al que no tiene acceso, o
se le hubiere denegado éste o la copia, solicitará al Juez su reproducción.

Impugnación de la autenticidad

Art. 338.- La impugnación de la autenticidad de un instrumento se hará en cualquier estado


del proceso y deberá probarse, en su caso, en la audiencia probatoria.

Si se trata de un hecho nuevo o de nueva información que permita establecer la falsedad del
instrumento, podrá impugnarse hasta antes de la Sentencia, siempre que no se hubiera podido
conocer de aquélla en su momento.

204
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

CÁMARA SEGUNDA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO Sentencia de Apelación N°27-3CM-12-A de fecha: dieciocho de junio de
dos mil doce.

“En el presente proceso la parte demandada de conformidad al Art. 338 CPCM,


impugnó la autenticidad del documento base de la pretensión consistente en un
contrato de arrendamiento, manifestando que su representada no lo había firmado,
por lo cual solicitó la realización de un peritaje con la finalidad de probar la falta de
autenticidad del mismo.

El Art. 339 y 340 CPCM establecen, que la verificación de la autenticidad (o la


falta de ella) de un documento se lleva a cabo por dos métodos, a aplicar en orden
subsidiario:

a) En primer lugar y siempre que resulte posible, se comparará o cotejará el


documento público cuestionado, con su original depositado en un archivo o matríz
de registro público; lugares a los cuales debe desplazarse el juez y las partes para la
realización de dicha diligencia.

b) Si el problema radica en que el original ha sido alterado, o en que éste ya no se


conserva porque fue destruido, extraviado, etc., habrá que acudir subsidiariamente
a una prueba pericial que determine la alteración o falsificación del aspecto del
documento de que se trate.

Advirtiéndose que el cotejo de letras conforma una modalidad especifica de pericia


de carácter caligráfico, dirigida a fijar la autoría verdadera del documento, en
relación a la persona que se le atribuye su redacción y firma, tal y como ha ocurrido
en el presente proceso, por tanto, la Juez A Quo previo a reanudar la audiencia
única y poder enunciar su fallo, de conformidad al Art. 310 Inc.1° CPCM, debe
nombrar y juramentar un perito para que realice la experticia solicitada por la
parte demandada, a fin de garantizar el derecho de defensa y contradicción, como
el principio de inmediación—Art. 10 CPCM--, ya que todo medio probatorio debe
realizarse en presencia del juez, pena de nulidad, es decir, que no se puede mandar
a pedir certificación de un peritaje realizado ante otro juez o en un procedimiento
administrativo, salvo el caso de que exista sentencia definitiva en proceso penal por
el delito de falsedad material del documento impugnado.

El legislador para garantizar el acceso a la jurisdicción ha establecido ciertos principios


y normas jurídicas a seguir, regulando al mismo tiempo el derecho de las personas de
oponerse a las acciones incoadas en su contra, y a realizar todos los actos procesales que
estime convenientes para la defensa de su oposición, dentro de los cuales encontramos
el principio de defensa y contradicción (Art. 4 CPCM), principio de igualdad procesal
(Art.5 CPCM), derecho de probar (Art. 312 CPCM), entre otros.

Principios de los cuales nace el derecho de las partes de aportar prueba en igualdad
de condiciones, para probar las afirmaciones o los hechos controvertidos que son
fundamento de la pretensión u oposición de ésta, es decir, que si una de ellas alega
la falta de autenticidad de un documento aportado por su contraparte, y solicita el
peritaje para probarla, el juez tiene la obligación de ordenar dicho peritaje, ya que

205
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

de lo contrario se violenta el principio dicho, y como consecuencia de ello provoca


una nulidad procesal.”

Autenticidad de instrumentos públicos. Impugnación

Art. 339.- La autenticidad de un instrumento público se comprobará mediante su cotejo


con el original correspondiente, lo cual habrá de hacerse por el tribunal, que deberá constituirse
a tal efecto en el lugar donde el original se encuentre. A este acto se citará a las partes y a sus
representantes y abogados, por si quisieran asistir.

Si no fuera posible lo anterior, se intentará el cotejo de letras por perito designado por el Juez,
pero sólo cuando no exista original y el funcionario o notario que expidió el instrumento no pueda
reconocerlo. Para el cotejo de letras se actuará conforme al artículo que sigue.

CÁMARA SEGUNDA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, SAN SALVADOR, Sentencia 42-4CM-13-A de fecha veintisiete de
junio de dos mil trece.

“Al respecto es pertinente señalar respecto a la prueba pericial caligráfica; ésta


nace frente a la necesidad de establecer la validez, autoría, autenticidad o veracidad
de un documento, que por algún motivo se está discutiendo, la mayoría de los casos
se da en la identificación de manuscritos, pero pueden aparecer otras interrogantes,
tales como entrecruzamientos, identificación de papel, identificación de tintas,
adulteraciones, obliteraciones, falsificaciones, temas relacionados con la antigüedad
(relativo a la tinta, el papel, elemento impresor utilizado e incluso pegamento de
libros encuadernados), o incluso documentos quemados o dañados por el agua.

Mediante el análisis documentológico o caligráfico es factible responder estos


interrogantes, a través de la aplicación del método científico, estudiando las
características del documento mediante el estudio técnico del mismo, sea estudiando
las grafías que la componen o su sustrato o base (es decir, el elemento en el que se
encuentra escrito o impreso el texto o grafía, es decir, el papel, cartón, chapa, etc.).
A este fin son analizadas tanto las características del documento, tintas y papel como
los textos y firmas estampadas en él, ya sean que los mismos fueran producidos a
través de medios mecánicos o manuscritos.

El apelante ha señalado que el objeto de solicitar el referido peritaje caligráfico


es establecer la época en que fueron insertos los elementos contenidos en el texto
del documento, y demostrar que los datos insertos en él fueron o no conformes a
los términos del crédito; así dentro de la prueba caligráfica, encontramos aquella a
través de la cual es posible determinar la cronología de determinados documentos,
tales como contratos, pagares, etc., a través de este estudio es posible establecer
si el mismo le fueron agregados con posterioridad a la firma datos, es decir que
sólo es posible determinar que trazo fue suscrito con anterioridad a otro. Por lo que
con la práctica de esta prueba un perito puede determinar: si la firma inserta en el
documento es contemporánea con otra información en el documento, si la misma
fue agregada con posterioridad y si las anotaciones en él fueron agregadas todas al
mismo tiempo.

206
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

De ahí que es pertinente analizar si la prueba solicitada por el apelante reúne o no


los requisitos de admisibilidad de toda prueba; la prueba para ser aceptada por
el juzgador, debe ser pertinente, idónea y conducente. La primera contempla la
relación que el hecho por probar puede tener con el litigio o la materia del proceso;
la segunda, es la adecuada para provocar la convicción del juez; y la tercera, similar
a lo dicho antes, es la aptitud legal de la prueba, para convencer al juzgador sobre
el hecho a que se refiere, Arts. 318, 319 CPCM. Respecto a la pertinencia, habiendo
señalado que dentro de la prueba caligráfica existen mecanismos que contribuyen
a establecer precisamente la diferencia en cuanto a la antigüedad de las tintas
que se encuentran impresas en un documento, consideramos que la prueba que en
su oportunidad solicito el apelante era pertinente, en virtud de que el documento
sobre el cual recaería dicha pericia es el documento base de la acción del presente
proceso.En cuanto a la idoneidad de la prueba, consideramos que el medio
probatorio solicitado por el apelante, si contribuiría a establecer si lo plasmado en
el documento base de la acción es posterior a la firma del mismo, lo cual instruiría
al juez si el demandado al momento de firmar el pagaré tenía conocimiento de
las condiciones establecidas en el titulo valor, o si lo hizo sin conocimiento de las
condiciones a las cuales se estaría obligando. La conducencia es la capacidad del
medio de prueba para demostrar lo que se quiere probar y se encuentra determinada
por la legislación sustantiva o procesal que impone restricciones a la forma como
debe celebrarse o probarse un determinado acto jurídico.

Así, siendo el objeto de la prueba solicitada, establecer la antigüedad en que se


imprimió la firma y los datos puestos en el texto del documento base de la pretensión,
el medio probatorio solicitado por el apelante era pertinente, ya que dicha prueba
se encuentra regulada en nuestra legislación actual, ya que siendo el hecho a
probarse de aquellos que requieren un conocimiento especial, la prueba conducente
para ello, es la prueba pericial, misma que como se señalo está regulada en nuestro
ley procesal, a partir del Art. 375 AL 389 CPCM. En consecuencia habiéndose
establecido que en el caso de autos la prueba solicitada reunía los requisitos de
admisibilidad de la misma; consideramos que el Juez A Quo, debió permitir la
realización de ella; en ese sentido y como bien lo señala el actor, dicha denegatoria
impidió a éste que probara sus alegaciones, por lo que si se le violento su derecho de
audiencia lo que impidió su defensa por no permitirle la producción de tal prueba.”

Autenticidad de instrumentos privados. Cotejo de letras

Art. 340.- La autenticidad de un instrumento privado se comprobará principalmente mediante


el cotejo de letras efectuado por perito designado judicialmente.

El cotejo se practicará en relación con un instrumento sobre el que no haya duda. Y este
carácter lo tendrán los instrumentos reconocidos como tales por todas las partes, los cuerpos de
escritura que figuren en escrituras públicas, los instrumentos privados que total o parcialmente
contengan escritura reconocida por aquél a quien se le atribuye la dudosa o, por lo menos, su firma
reconocida, y las firmas registradas en establecimientos bancarios.

Si no concurre ninguno de los supuestos anteriores se creará, en presencia judicial, un nuevo


cuerpo de escritura por aquél a quien se le atribuye la dudosa, y que servirá para el cotejo. La

207
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

negativa a formar este nuevo cuerpo de escritura tendrá por efecto que se tenga por reconocido el
instrumento impugnado.

CÁMARA DE LA TERCERA SECCIÓN DE OCCIDENTE, AHUACHAPÁN,


Apelación Referencia A-P-C-22-11 de fecha diecisiete de agosto de dos mil once.
“En Referencia a la no aplicación de parte del Juez A Quo, de los dispositivos legales
339 y 340 Pr C y M, refutado por el apelante, se refiere lo siguiente: que al examinar
el texto del Art. 339 Idem, el cual reza: “La autenticidad de un instrumento público
se comprobará mediante su cotejo con el original correspondiente, lo cual habrá de
hacerse por el tribunal, que deberá constituirse a tal efecto en el lugar donde el original
se encuentre. (…) Si no fuera posible lo anterior, se intentará el cotejo de letras por
perito designado por el juez, pero solo cuando no exista original y el funcionario o
notario que expidió el instrumento no pueda reconocerlo. (…)”;y apareciendo agregada
al expediente principal la constancia certificada emitida por la Sección de Notariado, de
la Honorable Corte Suprema de Justicia, de la que se desglosa la información siguiente:
al revisar el libro número Treinta y cinco del protocolo del notario […], conforme a los
datos que se relacionan en la copia de la escritura pública presentada, no se encontró el
instrumento incorporado […], por lo que se buscó en el índice correspondiente y no se
encontró ninguna escritura de Poder Especial, otorgado por la [demandante]; ante tal
circunstancia, resultaría evidentemente imposible cotejar dicho Poder con su original,
en virtud de haberse establecido la inexistencia de su matriz, adecuándose este suceso al
párrafo final del artículo anteriormente descrito; es decir que, por ello debe seguirse el
procedimiento establecido en el Art. 340 del mismo cuerpo legal, ya que con el resultado
de tal acto procesal se crearía certeza respecto de la autenticidad del documento.”
CÁMARA SEGUNDA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL
CENTRO: SAN SALVADOR, en Sentencia con Referencia 27-3CM-12-A, de
fecha dieciocho de junio de dos mil doce.
“...4.10 El Art. 339 y 340 CPCM establecen, que la verificación de la autenticidad
(o la falta de ella) de un documento se lleva a cabo por dos métodos, a aplicar en
orden subsidiario: a) En primer lugar y siempre que resulte posible, se comparará
o cotejará el documento público cuestionado, con su original depositado en un
archivo o matríz de registro público; lugares a los cuales debe desplazarse el juez y
las partes para la realización de dicha diligencia. b) Si el problema radica en que
el original ha sido alterado, o en que éste ya no se conserva porque fue destruido,
extraviado, etc., habrá que acudir subsidiariamente a una prueba pericial que
determine la alteración o falsificación del aspecto del documento de que se trate.
4.11 Advirtiéndose que el cotejo de letras conforma una modalidad especifica de
pericia de carácter caligráfico, dirigida a fijar la autoría verdadera del documento,
en relación a la persona que se le atribuye su redacción y firma…”
Valor probatorio de los instrumentos
Art. 341.- Los instrumentos públicos constituirán prueba fehaciente de los hechos, actos o
estado de cosas que documenten; de la fecha y personas que intervienen en el mismo, así como del
fedatario o funcionario que lo expide.

208
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

Los instrumentos privados hacen prueba plena de su contenido y otorgantes, si no ha sido


impugnada su autenticidad o ésta ha quedado demostrada. Si no quedó demostrada tras la
impugnación, los instrumentos se valorarán conforme a las reglas de la sana crítica.

CÁMARA SEGUNDA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, Sentencia de Apelación Referencia: 39-3CM-14-A de fecha dieciocho de
junio de dos mil catorce.

“La anterior afirmación se debe a que el Art. 107 del Código Tributario, establece
que los contribuyentes están obligados a emitir por las transacciones que realicen
comprobantes de crédito fiscal, o factura dependiendo de si la transacción se
realiza con un contribuyente o no; es decir, que el comprobante de crédito fiscal
es un documento que comprueba la existencia de un determinado negocio sujeto al
impuesto del IVA, sin que esto implique que el servicio o producto sea consecuencia
de un contrato de prestación de servicios de tracto sucesivo o un acto aislado.

En ese sentido, presentar formularios de crédito fiscal y una nota de retención, no


establece la existencia de un contrato de prestación de servicios, pues como ya
se dijo, establecen únicamente el hecho generador del servicio o venta realizado;
asimismo, en estos no consta firma del representante de la sociedad demandada
o que esta se haya obligado, aceptado o reconocido como suya lo establecido en
dichos documentos.

Por lo expuesto, al revisar dichos documentos, se concluye que estos por si solos
no puede establecer una relación contractual, sin embargo, al haber aceptado
la demandada la relación contractual existente, se tiene por probada la misma y
dichos documentos únicamente sirven para reforzar lo expuesto por las partes, por
lo tanto a criterio de este tribunal, si bien es cierto existe error en la valoración de
los documentos presentados, estos no son los únicos elementos que determinaron la
relación contractual establecida en el proceso.”

CÁMARA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DE OCCIDENTE,


Apelación Referencia: INC-APEL-155-15-12-15 de fecha dos de febrero de dos mil
dieciséis.

“En la apreciación de la prueba existe una unidad de función: obtener la convicción


o certeza del juez además de suministrar los medios de fallar conforme a la justicia.
No se puede tener esa convicción cuando frente a una misma prueba, debiera tener
por probado un hecho respecto de uno y no tenerlo por probado respecto de otro,
como ha sucedido, advirtiéndose una clara contradicción del juzgador, en cuanto a
la valoración conferida a la misma prueba, esto es la declaración de parte del señor
José O. B., concediéndole por una parte, valor respecto a un hecho como el haber
tenido en base a ella por acreditado que el origen del abono a cuenta de ahorro o
depósito en cuenta de ahorro sea un mutuo y negándoselo respecto a probar los
intereses.

En relación a que según la representante procesal de la parte actora, debió valorarse


la prueba conforme a la sana crítica, de acuerdo al autor antes mencionado, las
reglas de ésta, se basan en la lógica y en la experiencia. La sana crítica es la

209
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

consecuencia de un razonamiento integrado, en el cual se conectan los hechos y las


pruebas aportadas para llegar al derecho aplicable. En ese sentido, este Tribunal
ante la inconformidad de la Licenciada G.M. y de acuerdo al autor citado, considera
que el juez debió valorar la prueba en todo su contenido, no como lo ha hecho,
contradiciendo sus mismos argumentos.

La libertad probatoria que concede el Código Procesal Civil y Mercantil en el Art.


330, no es ilimitada, debe por simple lógica jurídica, perfilarse dentro de los cauces
normativos vigentes; en este caso, debe recordarse que el Art. 705 CPCM, si bien
es cierto que deroga algunos cuerpos normativos, éstos son de orden procesal y,
el Art. 1580 C.C., es de orden sustantivo y, hasta el momento no ha sido derogada
norma alguna de esa naturaleza. Es de señalar, que la doctrina considera, que al
referirse al Código Civil a la prueba documental, se debe a su carácter de tal y por
la Referencia a los requisitos y alcances sustantivos que comprende dicha prueba.

En cuanto a las valoraciones que de la prueba que hace el Juez A Quo, conviene
señalar lo dispuesto en el Art. 319 CPCM, que establece; “No deberá admitirse
aquella prueba que según las reglas y criterios razonables, no sea idónea o resulte
superflua para comprobar los hechos controvertidos.”Lo manifestado se debe a
que la prueba pertinente en el caso de autos, lo es la instrumental y al no haberse
aportado dicha prueba, la parte actora no acreditó los extremos procesales de su
demanda. Es importante tener presente, que no puede soslayarse la importancia que
tiene la entrega de una suma considerable de dinero, por lo que dicha entrega debe
contener las formalidades exigidas por la ley.

El documento presentado por la parte actora, no le sirve para hacer verosímil la


obligación que le reclama a su contraparte, señor Napoleón B. conocido por
Napoleón B. P., ya que no consta la intervención de éste en la creación de la
obligación cuya declaratoria pretende; en virtud de lo cual es procedente revocar
la sentencia impugnada por no estar conforme a derecho, Para el caso, se trae a
cuenta, lo expuesto por la Sala de lo Civil de la Corte Suprema de Justicia, en la
sentencia de las diez horas y treinta minutos del día nueve de marzo de dos mil once
que al respecto dice: “En relación a este punto la Sala estima preciso señalar, al
margen de los yerros en que la Cámara ad-quem haya incurrido al valorar la prueba
testimonial, que cuando se trata de establecer el pago de una obligación dineraria,
la prueba idónea es la instrumental, no la testimonial, ello se colige de lo dispuesto
en los Arts. 1579, 1580 y 1581 C.C., según los cuales los actos deben constar por
escrito y no se permite prueba testimonial sobre los mismos. (El subrayado es
propio).”

CÁMARA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DE ORIENTE, SAN


MIGUEL, Casación Referencia: 1-CM-05-180314 de fecha dieciséis de junio de
dos mil catorce.

“Por regla general en los procesos civiles y mercantiles, el sistema de valoración de


prueba de la sana critica, esta regla tiene su excepción en la valoración de la prueba
documental, la que se regirá por el sistema de valoración de prueba de la tarifa
legal o prueba tasada, como queda establecido en el Art. 416 inciso segundo.-Pero

210
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

esta excepción tiene a su vez su propia excepción y es la que establece el Art.


341 inciso segundo del mismo Código, que al determinar el valor probatorio de
los documentos privados cuando la autenticidad de los mismos no haya quedado
demostrada, los instrumentos privados se valorarán conforme a las reglas de
la sana crítica.-Siendo que la autenticidad del texto de las letras de cambio ha
sido redargüido, mediante la alegación de la oposición basada en la alteración
del texto, hace necesario determinar si existe o no la denunciada alteración,
habiendo llegado el juzgador a la conclusión establecida en su Sentencia, que
las letras de cambio sí han sido alteradas, valoración de la prueba que no se
considera erróneamente realizada por este tribunal en el sentido que dadas las
circunstancias del caso, los títulos valores presentados que son documentos
privados, se valorarán bajo las reglas de la sana crítica, y no bajo el sistema
de valoración de prueba tasada, por no haberse demostrado la autenticidad
del texto de los mismos, después de haberse intentado impugnarlo por la parte
demandada.-”

CÁMARA SEGUNDA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, SAN SALVADOR Apelación N° 9-4CM-15-A de Fecha: nueve de
abril de dos mil quince.

“En cuanto a la prueba documental, consta de […], copia certificada por


notario de la Escritura Pública de Compraventa del inmueble objeto del
presente proceso con su respectiva constancia de inscripción en el Registro de
la Propiedad Raíz e Hipotecas de la Primera Sección del Centro, y de fs. [….],
copia certificada por notario del contrato de arrendamiento suscrito entre el
señor […] y el [demandado]. Dichos documentos no constituyen un instrumento
público, sin embargo, el Art. 30 Ley del Ejercicio Notarial de la Jurisdicción
Voluntaria y de Otras Diligencias, permite que las partes presenten en juicio
copias de los documentos originales, cuya fidelidad y conformidad haya sido
certificada por notario, y por ello mantienen el mismo valor probatorio que
tendrían los documentos originales.Advirtiéndose que las copias certificadas por
notario son de instrumentos públicos, el valor probatorio de las mismas es el que
la ley da a esta clase de documentos, al respecto el Art. 341 CPCM establece que
los instrumentos públicos son “prueba fehaciente de los hechos, actos o estado
de cosas que documenten; de la fecha y personas que intervienen en el mismo,
así como del fedatario o funcionario que lo expide”, en ese sentido al no haberse
controvertido la Escritura Pública de Compraventa, ni el Documento Privado
Reconocido ante Notario del contrato de arrendamiento, las copias certificadas
notarialmente conservan valor probatorio.”

Instrumentos deteriorados

Art. 342.- Los instrumentos rotos, quemados, raspados o deteriorados en su parte sustancial
no harán fe en cuanto al hecho que con ellos se pretenda establecer.

Lo anterior no tendrá lugar cuando, pese a configurarse cualquiera de los supuestos anteriores,
sea inteligible el contenido del instrumento y su sentido no se vea afectado por el deterioro.

211
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

CÁMARA PRIMERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, SAN SALVADOR, Sentencia N°109-47CM2-2015 de fecha: doce de
noviembre de dos mil quince.

“En el presente proceso especial ejecutivo mercantil, el documento base de la


pretensión lo constituye un Testimonio de la Escritura de Préstamo Mercantil,
otorgado por los señores […], el primero, en su calidad de deudor principal, y la
segunda como fiadora y codeudora solidaria, a favor del BANCO AGRÍCOLA,
SOCIEDAD ANÓNIMA, que se abrevia BANCO AGRÍCOLA, S.A., cuyos nombres
comerciales son BANCO AGRÍCOLA COMERCIAL DE EL SALVADOR, BANCO
AGRÍCOLA COMERCIAL, BANCO AGRÍCOLA o solamente EL AGRÍCOLA.

Sobre dicho instrumento, la juzgadora expone en los fundamentos de derecho de


la Sentencia, que el sello en la razón al final del testimonio, conocido en el caló
jurídico como “pasó ante mí”, es inexistente, debido al deterioro gravísimo, causado
aparentemente, por el derrame de algún liquido sobre todo el documento, lo cual
conllevó a que la tinta del sello se disolviera y se convirtiera en una mancha azul al
costado de la firma del Notario autorizante, estimando que dicho documento carece
de fuerza ejecutiva, y por consiguiente el mismo no constituye un título ejecutivo, por
lo que desestimó la pretensión ejecutiva.

Respecto de tal valoración probatoria, el Art. 32 de la Ley de Notariado, establece


los requisitos que debe contener la escritura matriz, y el Inc. 1º del Art. 44 de dicha
Ley, determina que los testimonios serán una copia fiel del instrumento original y
terminarán con una razón que indique los folios y el número del libro de protocolo
en que se encuentra la escritura a que se refieren, la fecha de la caducidad de dicho
libro, el nombre de la persona a quien se extiende y el lugar y fecha de la expedición
del testimonio. A continuación, serán firmados y sellados por el notario.

Al analizar el instrumento base de la pretensión, que es un préstamo mercantil,


cuyo original se encuentra de fs. [...], de este incidente, se observa que el sello
plasmado a continuación de la razón a que se alude en el párrafo que antecede,
presenta una condición deteriorada, no obstante, contrario a lo afirmado por la
aludida funcionaria judicial, es legible, pudiéndose percibir visualmente y con la
diligencia debida su contenido, por cuanto se trata de un grado menor de dificultad
en su lectura, identificándose que el nombre plasmado es [...], con la palabra
“NOTARIO”al centro, por lo tanto, dicho instrumento, cumple con lo dispuesto en el
Art. 44 de la Ley de Notariado.

En relación con lo expuesto, en lo relativo a la valoración probatoria de un


instrumento deteriorado, el Art. 342 CPCM., determina que los que se encuentren
rotos, quemados, raspados o deteriorados en su parte sustancial no harán fe en
cuanto al hecho que con ellos se pretenda establecer. Lo anterior no tendrá lugar
cuando, pese a configurarse cualquiera de los supuestos anteriores, sea inteligible el
contenido del instrumento y su sentido no se vea afectado por el deterioro.

Habida cuenta de lo anterior, aunque el deterioro no lo sea en la parte sustancial del


instrumento, el Inc. 2º de la disposición legal citada, marca una pauta valorativa,
por cuanto carece de relevancia el deterioro de un documento, siempre y cuando

212
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

el contenido sustancial del mismo pueda ser entendido, lo que se aplica al caso
de autos, pues es legible el documento junto con la razón y los sellos puestos en
cada hoja. Aunado a lo anterior, en el hipotético caso de que el sello plasmado a
continuación de la razón conocida como “pasó ante mí”en el documento base de la
pretensión, fuese ininteligible, eso no constituye un requisito indispensable y esencial
para la validez del mismo, lo que es concordante con lo establecido en el Art. 33 de
la Ley de Notariado.

En ese sentido, conforme lo dispuesto en el ordinal 1º del Art. 457 CPCM., el


préstamo mercantil, asentado en instrumento público, es un título ejecutivo, y el
mismo cumple con los requisitos que para tal efecto señalan los Arts. 32 y 44 Inc. 1º
de la Ley de Notariado, por lo que la juzgadora no puede exigir más requisitos de los
que la misma ley prevé para que el referido documento tenga fuerza ejecutiva.

Esta Cámara concluye, que el deterioro en la impresión del sello puesto por el
notario autorizante de la Escritura Pública del Préstamo Mercantil, en la razón del
“pasó ante mí”, que va a continuación del instrumento, no le resta ejecutividad al
mismo, en virtud que no se configura como un presupuesto de validez.

Consecuentemente con lo expresado, es procedente revocar la sentencia recurrida,


dictando la pertinente, sin condena en costas de esta instancia.”

Otros Instrumentos

Art. 343.- Las disposiciones contenidas en la presente sección serán aplicables cuando en el
proceso se aporten para utilizar como prueba dibujos, fotografías, planos, mapas, croquis u otros
instrumentos similares.

CÁMARA SEGUNDA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, SAN SALVADOR, Apelación N° 91-4CM-13-A de fecha: diecisiete de
diciembre de dos mil trece.

“Respecto al valor probatorio que tienen los documentos presentados por


la parte actora, los suscritos consideran que al no haber sido impugnada su
autenticidad, de conformidad al Art. 343 CPCM, las disposiciones referidas a la
prueba documental serán aplicables, a otros tipos de documentos como dibujos,
fotografías, planos, mapas, croquis u otros instrumentos similares; en el caso
de autos las impresiones de los correos electrónicos pueden catalogarse como
instrumentos similares.

En consecuencia si la carga de la prueba le corresponde a las partes, es obligación


de estas, utilizar y aportar al proceso los medios probatorios pertinentes
e idóneos, en el momento procesal oportuno, para que sus pretensiones sean
acogidas al momento de pronunciar sentencia y al no haber sido impugnada
la autenticidad de los correos electrónicos presentados, de conformidad al ya
citado Art. 343 CPCM, se tiene por establecida la relación comercial existente
entre las partes. En el correo electrónico agregado […], consta que la señora
[…], encargada de ventas de la sociedad demandada, aceptó el error en el
producto elaborado, situación que demuestra la pretensión de los demandantes.

213
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

Por lo tanto a criterio de este tribunal, no existe el error en la valoración de los


documentos presentados, alegada por el demandante.”

Finalmente, de conformidad al Art. 1360, en los contratos bilaterales va envuelta la


condición resolutoria de no cumplirse por uno de los contratantes lo pactado, por lo
tanto si la demandada se comprometió a entregar unos porta biblias de determinadas
medidas, para que el contrato se considerara cumplido de su parte, debió entregar
el producto solicitado y no uno con medidas diferentes. Por lo que tanto a criterio
de los suscritos la parte actora ha demostrado parcialmente sus pretensiones y la
sentencia pronunciada fue conforme a derecho.
En cuanto a la admisión indebida del medio de almacenamiento de información,
tal como lo establece el Juez A Quo, dicha grabación únicamente establece, una
conversación referente a unos porta biblias, entre dos personas, mas no se establece
quienes son los que intervienen o si está se refiere a la caso que nos ocupa, además
de ser incompleta y tener segmentos que no son entendibles, motivo por el cual no
debió admitirse ni valorarse dicho medio probatorio.
En ese sentido, el Juez A Quo, valoró prueba inútil, por lo que en este punto es
procedente acceder a lo expuesto por el apelante, sin embargo, no es posible
declarar la nulidad de la sentencia pronunciada, en virtud de que con la prueba
documental aportada y excluyendo la prueba inútil, se demostró que la sociedad
demandada incumplió el contrato celebrado.”
SALA DE LO CONSTITUCIONAL DE LA CORTE SUPREMA DE JUSTICIA.
SAN SALVADOR, en Sentencia de Amparo, con Referencia 614-2010, de fecha
uno de febrero de dos mil trece.
“…Las reglas de los documentos públicos y privados resultan analógicamente
aplicables a sus copias, especialmente por la previsión contenida en el Art. 343 del
C.Pr.C.M., tomando en consideración las similitudes que presentan tales duplicados
con las fotografías y otros medios de reproducción de datos…”
SECCIÓN SEGUNDA
DECLARACIÓN DE PARTE

Declaración personal de la propia parte (2)

Art. 344.- Cada parte, podrá solicitar se le reciba declaración personal sobre los hechos objeto
de la prueba.

CÁMARA DE LA CUARTA SECCIÓN DEL CENTRO, SANTA TECLA,


Sentencia de Apelación Referencia 15 EC-13 de fecha diecisiete de abril de dos mil
trece.

“En cuanto a los puntos impugnados, es necesario examinar previamente el


literal b) relativo a la prueba que se pretende aportar por el demandado; a efecto
de comprobar que no estaba enterado del proceso que se le seguía en el tribunal
inferior; preferencia que deriva de lo señalado por el Art. 514 CPCM, inciso
Penúltimo y último, en cuanto a que después de propuesta la prueba se resolverá

214
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

y deberá de continuarse la audiencia y las partes podrán formular las alegaciones


finales; por lo que respecto de la prueba señalada, es preciso mencionar que, no
obstante en el Art. 344 CPCM, encontramos que efectivamente las partes pueden
hacer uso de la declaración personal de propia parte; no toda prueba resulta idónea
para comprobar los hechos alegados, tal como bien lo prescribe el Art. 319 CPCM,
el cual señala que: “””””no deberá admitirse aquella prueba que, según las reglas
y criterios razonables, no sea idónea o resulte superflua para comprobar los hechos
controvertidos:””””al respecto, tenemos que, la declaración de parte en el caso en
concreto no es la prueba idónea en virtud de la utilidad cualitativa de la prueba,
puesto que el medio de prueba que se pretende aportar no resulta adecuado por
su naturaleza, para acreditar la realidad de los hechos controvertidos; es decir, la
falta de conocimiento del demandado del libelo interpuesto en su contra; teniendo
en cuenta que las diligencias realizadas por los notificadores, están investidas de
fe pública judicial; la que con dicha prueba no puede ser destruida; por lo que es
procedente declarar sin lugar la misma.”

Declaración de parte contraria (2)

Art. 345.- Para efectos de preparar su pretensión, su oposición a ésta o su excepción, cada
parte podrá solicitar al juez o tribunal que se ordene recibir la declaración de la parte contraria
o de quien potencialmente pudiera ser su contraparte en un proceso.

Sujetos que pueden declarar por la parte

Art. 346.- También podrá requerirse la citación de las siguientes personas a los efectos de
que presten declaración:
1° Los representantes de los incapaces, por los hechos en que hubieran intervenido
personalmente en ese carácter;
2° Los apoderados, por los hechos realizados en nombre de sus mandantes, mientras
está vigente el mandato;
3° Los apoderados, por hechos anteriores, cuando estuvieren sus representados fuera
del país, siempre que el apoderado fuese expresamente autorizado para ello y la parte
contraria consienta.

Declaración sobre hechos de la parte

Art. 347.- Las partes tienen la obligación de comparecer y responder los interrogatorios de
la parte contraria y del Juez, que versen sobre los hechos personales. Si la parte citada para ser
sometida al interrogatorio en audiencia, no comparece sin justa causa, se tendrán por aceptados los
hechos personales atribuidos por la contraparte, salvo prueba en contrario.

Las personas jurídicas serán representadas conforme a la ley. Sus representantes estarán
obligadas a responder los interrogatorios de la parte contraria y del Juez, siempre que versen sobre
hechos ocurridos dentro del período de su representación y dentro de su específica competencia
funcional.

215
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

SALA DE LO CIVIL, Sentencia Referencia 284-CAC -2012 de fecha catorce de


mayo de dos mil catorce.

“El sistema del código está diseñado tomando en cuenta el caso ideal, es decir, si en
su momento se solicita la declaración de parte contraria y esta asiste al señalamiento,
la parte requirente hará las preguntas oralmente auxiliado por su mente o bien en su
caso auxiliarse por cuestionario escrito; pues bien, el problema se plantea cuando
la parte requerida para rendir su declaración no asiste al Tribunal, ya que en este
caso, surge la pregunta de cómo operará o se procederá para que el juez tenga por
aceptados los hechos personales, atribuidos por la parte solicitante. Ante tal vacío
legal, esta Sala considera que frente a esa situación eventual, el peticionario en su
escrito en que pide la comparecencia o por separado deberá agregar por escrito su
cuestionario o interrogatorio, conteniendo las preguntas para que en su momento
obre los efectos legales. Avala esta solución a tal vacío legal, el contenido del Art.
345 C.P.C.M, en el sentido de que cuando la declaración de parte se recibe en el
domicilio de la parte que va a declarar, y la parte interrogante no puede asistir por
cualquiera de los motivos señalados en la ley, las preguntas se harán por escrito
que deberá presentar la parte requirente. Siendo entonces que no habría base o
antecedente en donde consten los hechos personales que se tendrían por aceptados
por inasistencia de la parte, según el Art. 347 C.P.C.M, estos no podrán presumirse
por lo que no ha lugar a casar la sentencia por este único Sub-motivo y así habrá de
declararse en su momento, sobre todo porque la Cámara no tenía porque aplicar tal
artículo, a falta de tal antecedente.”

Forma del interrogatorio

Art. 348.- Las preguntas se formularán oralmente, con la debida claridad y precisión, y se
evitará que contengan valoraciones, sugestiones, calificaciones o cualquier otra clase de indicación
o comentario que pueda dirigir la contestación.

Cuando el interrogatorio sea de la parte contraria serán aplicables las reglas previstas en este
código para el contrainterrogatorio de testigos.

SALA DE LO CIVIL, Casación Referencia: 159-CAL-2012 de fecha veintitrés de


octubre de dos mil trece.

“Esta Sala luego de analizar el proceso advierte, que a fs. 51 de la pieza principal,
corre el acta que señala la audiencia para que la trabajadora B. de C. se presentara
a rendir su declaración de parte; asimismo consta que tampoco estuvo presente en
dicha audiencia la parte demandada; situación que nos lleva a concluir que no había
forma de tener por aceptados los hechos personales que se le atribuyen a la contraria;
ya que si bien es cierto, la no comparecencia sin justa causa de la parte citada al
interrogatorio en audiencia, trae como consecuencia que se tenga por aceptados los
hechos personales atribuidos por la contraparte, tal como lo que refiere el Art. 347
del Código Procesal Civil y Mercantil; ésta sólo tendrá lugar, siempre y cuando la
parte que solicite dicha declaración, se apersone a realizar el interrogatorio; tal y
como lo establece el Art. 348 del Código Procesal Civil y Mercantil, en el sentido
que “Las preguntas se formularán oralmente, con la debida claridad y precisión. y
se evitará que contengan valoraciones, sugestiones, calificaciones o cualquier otra

216
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

clase de indicación o comentario que pueda dirigir la contestación”; -lo subrayado


es de la Sala-; por lo que a juicio de este Tribunal la Cámara si comete el vicio de
interpretación errónea, porque le dio un alcance distinto a la norma, argumentando
que por el hecho de que la trabajadora demandante no se presentó a rendir su
declaración de parte contraria, ésta se tenía por confesa, cuando lo que procedía
era desestimar la prueba, y no tenerla como una declaración ficta; en razón de lo
anterior, la Sala declara ha lugar a casar la sentencia por este submotivo.”

Admisión de preguntas
Art. 349.- El Juez conforme se vaya formulando las preguntas, admitirá o rechazará las que
no cumplan con los requisitos previstos en esta sección. La parte proponente sólo podrá hacer
constar la correspondiente protesta en caso de que una pregunta se rechace.
La parte declarante podrá formular objeción respecto de una pregunta, haciendo constar la
correspondiente protesta si el tribunal rechaza la objeción.
Desarrollo del interrogatorio
Art. 350.- El interrogatorio directo lo hará la parte que haya propuesto la prueba. Las
respuestas habrán de hacerse directamente por la parte, de viva voz, sin valerse de borradores ni de
notas, aunque si podrá consultar apuntes o documentos, si la naturaleza de la pregunta lo exigiera y
el Juez lo autoriza, y a los cuales deberá tener acceso la parte contraria.
Las respuestas de la parte habrán de ser claras y precisas, pero el declarante podrá agregar las
explicaciones que estime oportunas. Para obtener aclaraciones el Juez podrá formular preguntas al
declarante.
En el caso de que sobre unos mismos hechos deban declarar varias personas, el tribunal
adoptará las medidas pertinentes para evitar la comunicación previa y posterior entre ellos que
pueda perjudicar la práctica de los interrogatorios.
Estas normas serán de aplicación para la práctica del interrogatorio de los testigos, con las
especialidades que les sean propias.
CÁMARA DE TRÁNSITO DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL CENTRO: SAN
SALVADOR, en sentencia con Referencia INC 22-2012-JC-4°, de fecha nueve de
agosto de dos mil doce, sostiene que

“…la participación del juez en el interrogatorio a que se refiere el Art. 350 CPCM,
no está referida a que él es quien debe producir la prueba interrogando directamente
al testigo, sino que a que puede hacerle preguntas aclaratorias, es decir, sobre
expresiones de palabra que puedan prestarse a varias interpretaciones y nunca a
pretender establecer hechos, como si le corresponde a quien presenta la prueba”

Negativa a responder. Respuestas evasivas

Art. 351.- La negativa del interrogado a responder podrá ser considerada como reconocimiento
de los hechos en que hubiera intervenido y que fueran perjudiciales para aquéllos a los que se
refieran las preguntas, salvo en el caso de que resulte amparado por la facultad de guardar secreto
o el derecho a no autoincriminarse por un delito.

217
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

Lo previsto en el inciso anterior se aplicará igualmente cuando las respuestas fueran evasivas
o no concluyentes.

SALA DE LO CIVIL DE LA CORTE SUPREMA DE JUSTICIA Casación


Referencia: 318-CAL-2014 de fecha veinte de abril de dos mil dieciséis.

“En el presente caso, se advierte que la Cámara en su sentencia no realizó análisis


con relación a los elementos que resulten de la incomparecencia de la representante
legal de la sociedad demandada a rendir declaración de parte contraria, sino
únicamente en lo relativo a la prueba documental y testimonial y testimonial para
acreditar la excepción de negligencia reiterada alegada por el demandado, y como
resultado de ello, estimó establecida la misma; por consiguiente y dado que el
error de derecho, se configura cuando el juzgador no da a los medios de prueba
impugnados el valor que por ley se le atribuye, es decir, recae directamente en la
apreciación de la prueba, al no aplicarse mal la medida que se establece la ley en
cada caso, ya sea otorgándose un valor en mas o en menos del que corresponde, no
es posible que se configure el vicio alegado por la recurrente, siendo que este sólo
puede devenir del análisis de la prueba, y al no producirse el mismo, debido a que
la Cámara no hizo relación ni análisis del medio probatorio alegado menos puede
existir el error de derecho.”

Interrogatorio domiciliario

Art. 352.- Cuando por enfermedad o por otras circunstancias la persona que deba responder al
interrogatorio, sea parte o testigo, no pudiera comparecer en la sede del tribunal, podrá acordarse,
a instancia de quien propuso la prueba, que preste declaración en su domicilio o en el lugar en que
se encuentre.

El interrogatorio se practicará ante el Juez o Tribunal y podrán asistir las otras partes, salvo
que fuera imposible o que de la comparecencia pudieran derivar perjuicios graves, en cuyo caso
las partes entregarán sus preguntas por escrito y las respuestas que diere el interrogado deberán ser
precisas sobre los hechos a los que se refiera el interrogatorio. De lo actuado se levantará acta que
será firmada por todos los asistentes. (2)

Valoración de la prueba de declaración de parte

Art. 353.- El Juez o tribunal, podrá considerar como ciertos los hechos que una parte haya
reconocido en la contestación al interrogatorio, si en ellos hubiera intervenido personalmente,
siempre que a tal reconocimiento no se oponga el resultado de las otras pruebas.

En lo demás, el resultado de la declaración se apreciará conforme a las reglas de la sana crítica.

CÁMARA DE LA TERCERA SECCIÓN DEL CENTRO, SAN VICENTE,


Sentencia de Apelación Referencia N°C-04-PC-2015-CPCM, de fecha: veinte de
marzo de dos mil quince.

“Por otro tanto, la única manera que en el presente caso pudiera verse acreditado
o darle más valor a un testigo sobre el otro era que en el ejercicio del interrogatorio
y contrainterrogatorio se hubiera desmentido o al menos hubiera perdido fuerza
la versión de alguno de los declarantes como producto de la preguntas realizadas

218
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

por los procuradores, algo que en el presente caso no ocurrió y en ese sentido a
pesar que existe limitada fundamentación por la Sentenciadora, la misma ha sido
subsanada por esta Cámara y por lo tanto este motivo no puede ser suficiente para
revocar la sentencia de mérito.”

SECCIÓN TERCERA
INTERROGATORIO DE TESTIGOS

Objeto de la prueba de interrogatorio de testigo

Art. 354.- Las partes podrán proponer, como medio de prueba, que presten declaración en el
proceso las personas que, sin ser partes, pudieran tener conocimiento de los hechos controvertidos
que son objeto de la prueba.

SALA DE LO CIVIL, Casación N° 84-CAC-2014 de fecha: veintiuno de diciembre


de dos mil quince.
“Al examinar el proceso, se constató que el Tribunal Ad quem ha otorgado
valor probatorio a la declaración de una persona de nombre […], que estaba
en el reconocimiento judicial, y de la cual no se identifica ni se menciona en
que calidad es que se ha hecho presente en esa diligencia. Vale decir entonces,
que el Ad quem, ha dado valor probatorio a la declaración del señor […], del
cual no hay evidencia en el proceso que haya sido propuesto como testigo por
ninguna de las partes. Tampoco consta que sea la misma persona, de nombre
[…], que sí fue propuesta por el actor como testigo y fue juramentado como tal,
y en esa calidad declaró en la audiencia probatoria. En virtud de lo anterior,
la Sala considera que el vicio denunciado ha sido cometido por la Cámara
Sentenciadora, por lo que se casará la sentencia de mérito y se pronunciará la
que ha derecho corresponda.”
Capacidad del testigo
Art. 355.- Podrá ser testigo cualquier persona, salvo los que estén permanentemente privados
de razón o del sentido indispensable para tener conocimiento de los hechos que son objeto de la
prueba.
Los menores de doce años podrán prestar declaración como testigos si poseen el suficiente
discernimiento para conocer y declarar sobre los hechos controvertidos del proceso.
Credibilidad del testigo
Art. 356.- La credibilidad del testigo dependerá de las circunstancias o hechos que determinen
la veracidad de sus declaraciones.
La parte que resulte perjudicada por la declaración de un testigo podrá alegar falta de
credibilidad, mediante cualquier medio de prueba pertinente, con base en el comportamiento del
testigo mientras declara o en la forma en que lo hace; en la naturaleza o carácter del testimonio,
en el grado de capacidad del testigo para percibir, recordar o comunicar los hechos sobre los que
declara, en la existencia de cualquier prejuicio, interés u otro motivo de parcialidad que pudiera
afectar el testimonio, o en manifestaciones o declaraciones anteriores del testigo. Si se presenta
un acta o documento escrito donde conste dicha declaración, la parte que adversa tiene derecho a

219
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

inspeccionar el escrito, a contrainterrogar al testigo sobre dicha declaración y a presentar prueba


pertinente contra lo declarado por el testigo.
La credibilidad de un testigo podrá ser impugnada o sostenida mediante prueba de su carácter
o reputación. No será admisible la prueba para impugnar o sostener la credibilidad de un testigo
que se refiera a sus creencias religiosas, a la carencia de ellas o a sus convicciones políticas.
Pierde credibilidad un testigo cuando queda establecido en autos que su deposición está
basada en un mero juicio de valor derivado de sus creencias particulares.

CÁMARA PRIMERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO: SAN SALVADOR, en Sentencia con Referencia 84-35CM1-2015, de
fecha treinta y uno de agosto de dos mil quince.

“…el Art. 356 Incs. 1º, 2º y 3º CPCM., determina que la credibilidad del testigo
dependerá de las circunstancias o hechos que determinen la veracidad de sus
declaraciones. La parte que resulte perjudicada por la declaración de un testigo
podrá alegar falta de credibilidad, mediante cualquier medio de prueba pertinente,
con base en el comportamiento del testigo mientras declara o en la forma en que
lo hace; en la naturaleza o carácter del testimonio, en el grado de capacidad del
testigo para percibir, recordar o comunicar los hechos sobre los que declara, en la
existencia de cualquier prejuicio, interés u otro motivo de parcialidad que pudiera
afectar el testimonio, o en manifestaciones o declaraciones anteriores del testigo;
pudiendo ser impugnada o sostenida mediante prueba de su carácter o reputación.
El momento procesal oportuno para atacar la credibilidad del testigo, es en la
fase de producción de prueba de la audiencia probatoria, pues de conformidad a
lo dispuesto en el Art. 367 CPCM., relacionado con el Art. 366 de mismo cuerpo
normativo, finalizado el interrogatorio directo, si la parte contraria manifiesta su
deseo de contrainterrogar al testigo, el juez o el presidente del tribunal le concederá
la palabra al efecto, permitiendo las preguntas sugestivas…”

Razón del conocimiento. Testigo de Referencia

Art. 357.- El testigo siempre deberá dar razón de su dicho, con explicación de las formas y
circunstancias por las que obtuvo conocimiento sobre los hechos. No hará fe la declaración de
un testigo que no tenga conocimiento personal sobre los hechos objeto de la prueba o cuando los
hubiera conocido por la declaración de un tercero.

Testigo con conocimiento especializado

Art. 358.- Si el declarante se refiere a hechos cuyo conocimiento requiere un saber científico,
artístico o práctico, sólo se tomará en cuenta su declaración cuando acreditare fehacientemente ser
conocedor en el área de que se trate.

CÁMARA DE TRÁNSITO DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL CENTRO: SAN


SALVADOR, en Sentencia con Referencia INC 6-2012-JC-4°, de fecha uno de
marzo de dos mil doce, sostiene que

“…testigo, es toda persona que, sin poseer interés en el proceso, tenga conocimiento
directo y no por Referencia de los hechos controvertidos en el juicio, por cuanto lo

220
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

que se requiriere de los testigos, es su versión presencial de cómo se generaron


los hechos; en tal sentido éstos, deben haber presenciado los hechos; ahora bien,
si además de esto, resulta que para una mejor comprensión de las circunstancias
que produjeron o se generaron por el hecho, el testigo debe explicarse con bases
especializadas, deberá el testigo poseer conocimientos, técnicos o prácticos, que le
permitieron percibir circunstancias especificas, propias de la ciencia, arte u oficio
en las que está instruido, que una persona que no posea dichos conocimientos no
pueda distinguirlos, y a esta clase de testigos es que se le denomina testigo con
conocimiento especializado (Art. 358 CPCM); distinción ésta, que no convierte
su testimonio en prueba pericial, puesto que para que ésta exista debe constar,
o el nombramiento de perito de parte o de perito judicial, nombrado por el juez
en tal calidad, por cuanto para ser perito no sólo se necesita poseer título o un
conocimiento especializado en determinada ciencia, arte o técnica especializada,
sino que además, rendirse dictamen en la forma que la ley lo exige…”
CÁMARA PRIMERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL
CENTRO: SAN SALVADOR, en Sentencia con Referencia 137-43CM1-2013, de
fecha veinte de diciembre de dos mil trece.
“…5.1.2) …las declarantes son testigos con conocimientos especializados; en
ese sentido, lo que se quiere de éstas es únicamente su versión de los hechos, es
decir, una declaración del saber que pueda resultar representativo de los hechos
controvertidos; sin embargo, en ocasiones como en el caso ahora en análisis, puede
suceder que una persona por circunstancias personales, presencie determinadas
situaciones que cuando acontecen, al margen de los aspectos perceptibles por
cualquier ser humano que hubiera estado en ese momento y lugar, guardan más
información, que sólo puede ser aprehendida por alguien dotado de saberes técnicos
o incluso prácticos pero especializados. La persona que reúna esta última cualidad
y que gracias a ella se obtenga información en la que se incluyen datos que escapan
a la percepción común, interesa al proceso desde dos ópticas simultáneas: la de
testigo y la de perito; ello no significa que por tener conocimientos especializados se
convierta en prueba tasada con mayor valor que un testigo ordinario; sino que, la
diferencia radica en la cantidad de información y la etiología de su conocimiento…”
Proposición
Art. 359.- La prueba por interrogatorio se propondrá en la forma determinada por este código.
La proposición deberá contener la identidad de los testigos, con indicación, en lo posible, del
nombre y apellido de cada uno, su profesión u oficio, así como cualquier otro dato que se repute
necesario para su más completa identificación.
También podrá indicarse el cargo que ocupare o cualquier otra circunstancia que permita
identificarlo, así como el lugar en el que pudiera ser citado, en su caso.
Presentación de testigos
Art. 360.- Los testigos serán presentados por la parte que los propuso, para lo cual se le
entregará a ésta una esquela de citación que deberá contener el motivo del llamamiento.

221
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

No obstante lo anterior, en el momento de proponer la prueba, la parte podrá solicitar que los
testigos sean judicialmente citados, caso en el que deberá hacerse constar el lugar en el que puede
practicarse la citación.
Número de declarantes
Art. 361.- La ley no limita el número de testigos que pueden comparecer en audiencia;
sin embargo, el juez podrá hacerlo a efecto de evitar la práctica de diligencias innecesarias o
acumulativas.
A los efectos de lo prevenido en el inciso anterior, el juez podrá obviar las declaraciones
testificales sobre un determinado hecho o punto en cuanto se considere suficientemente ilustrado
sobre él.

CÁMARA TERCERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, SAN SALVADOR, Apelación N°273-EMQCM-14 de fecha: diez de
diciembre de dos mil catorce.

“Al respecto, en el proceso se constata que […] el recurrente solicitó el


reconocimiento judicial de la contabilidad [del demandante], o la exhibición de
documentos, pues asegura que existen pagos realizados no imputados a la deuda, y
que a pesar que la prueba fue ofrecida oportunamente se le denegó. El señor juez de
la causa en la audiencia de prueba resolvió rechazar la prueba de reconocimiento
de registros contables o exhibición de documentos por considerarla sobreabundante,
debido a que […] corre agregada constancia de pago por un mil ochocientos dólares
de los Estados Unidos de América.

De lo anterior, este tribunal estima que es necesario analizar en qué consiste la


prueba sobreabundante y susceptible de exclusión (ilicitud lato sensu) así: a) La
directa, como vulneración de las reglas mínimas de interacción procesal, ilicitud
stricto sensu; b) En vía de consecuencia, que genera efectos dilatorios como
impertinentes, sobreabundantes, innecesarios (por referirse a hechos públicos,
notorios, incontrovertidos, etc.) El caso típico de prueba que se puede excluir por
sobreabundante es el regulado por el Art. 361 CPCM, en base al cual, el juez puede
disponer que la parte que ofrece prueba testimonial, reduzca el número de testigos
cuando mediante ellos, se desee acreditar los mismos hechos que considera que
ya han sido probados o su declaración verse sobre circunstancias que no guarden
pertinencia sustancial con la materia sometida a juzgamiento.

En este caso la prueba de reconocimiento judicial de la contabilidad [del


demandante] o la exhibición de documentos, fue solicitada para probar la existencia
de pagos realizados no imputados a la deuda, y no en específico el pago de mil
ochocientos Dólares de los Estados Unidos de América que se acreditó por medio
de la constancia […], por consiguiente, no es prueba sobreabundante, y las razones
que el Juez A Quo ha tenido para rechazar el reconocimiento judicial o la exhibición
de documentos aludida, no es válida e incumple lo prescrito en el Art. 320 CPCM;
además, debió resolver sobre la admisibilidad de dicho medio probatorio con
antelación a celebrar la audiencia de rigor atendiendo a la pertinencia, utilidad y
licitud de la misma, para que de admitirse y practicarse, las partes aleguen sobre su

222
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

resultado; por consiguiente, al haber rechazado indebidamente la prueba ofrecida


por la parte ejecutada, se violentó su derecho de defensa, lo que se encuentra penado
con nulidad por el Art. 232 letra “c”del mismo código.

En suma y compendio en el caso analizado, a la luz de las disposiciones legales


citadas, resulta incuestionable la nulidad en mención; no declarar tal nulidad sería
vulnerar no solo la ley secundaria, sino también los Principios Constitucionales de
igualdad, audiencia y legalidad, que son la base para el derecho al debido proceso,
configurado en el Art. 11 Cn., y que propiciaría inseguridad jurídica; imponiéndose
pues declarar la nulidad de todo lo actuado en primera instancia a partir de la
audiencia de prueba de las nueve horas de veintidós de septiembre del presente año,
y todo lo que sea su consecuencia, incluyendo desde luego, la sentencia impugnada, y
ordenarle al señor Juez A-quo que tramite la oposición de pago parcial; se pronuncie
sobre la admisibilidad de la prueba ofrecida, y en virtud de que se declarará la
versada nulidad, no se entrará a conocer los demás agravios alegados.”

CÁMARA TERCERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO: SAN SALVADOR, en Sentencia con Referencia 273-EMQCM-14, de
fecha diez de diciembre de dos mil catorce.

“…es necesario analizar en qué consiste la prueba sobreabundante y susceptible


de exclusión (ilicitud lato sensu) así: a) La directa, como vulneración de las reglas
mínimas de interacción procesal, ilicitud stricto sensu; b) En vía de consecuencia,
que genera efectos dilatorios como impertinentes, sobreabundantes, innecesarios
(por referirse a hechos públicos, notorios, incontrovertidos, etc.) El caso típico
de prueba que se puede excluir por sobreabundante es el regulado por el Art. 361
CPCM, en base al cual, el juez puede disponer que la parte que ofrece prueba
testimonial, reduzca el número de testigos cuando mediante ellos, se desee acreditar
los mismos hechos que considera que ya han sido probados o su declaración verse
sobre circunstancias que no guarden pertinencia sustancial con la materia sometida
a juzgamiento…”

Obligaciones del testigo

Art. 362.- El testigo tiene la obligación de comparecer al acto de la audiencia probatoria para
la que fue citado. Si no compareciera y no ofreciera debida justificación, se le impondrá una multa
cuyo monto se fijará entre uno y tres salarios mínimos, urbanos, más altos, vigente; y se le podrá
volver a citar con advertencia de proceder contra él por delito de desobediencia a mandato judicial.

También está sujeto el testigo a la obligación de responder a las preguntas que se le formulen,
bajo pena por desobediencia a mandato judicial.

Igualmente, el testigo tiene obligación de decir verdad, con apercibimiento previo a su


declaración de las penas en que pudiera incurrir como autor de delito de falso testimonio. Para tal
efecto se le deberán leer los preceptos correspondientes del Código Penal.

De todas sus obligaciones se informará al testigo en la esquela de citación.

223
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

Derechos del testigo

Art. 363.- Los testigos tienen derecho a recuperar los gastos que la comparecencia en el
proceso les hubiera ocasionado, a costa de la parte que los propuso. Si la parte no satisficiera la
indemnización en el plazo de quince días, el testigo podrá reclamar por la vía de ejecución que
corresponda.

Cuando el testigo sea propuesto por varias partes, corresponderá a todas ellas, conjuntamente,
el pago de la indemnización.

Identificación y acreditación del testigo. (2)

Art. 364.- El juez, previamente al acto de la declaración, tomará al testigo juramento o


promesa de decir verdad. De inmediato, le cederá la palabra a la parte que lo hubiera ofrecido
como medio de prueba, la cual, mediante interrogatorio acreditará a su testigo e identificará
preguntándole su nombre, edad, estado familiar, domicilio y ocupación. A continuación se
procederá al examen. (2)

Concurrencia de varios testigos.

Art. 365.- Los testigos serán examinados separada y sucesivamente, sin que unos puedan
presenciar las declaraciones de los otros. A este efecto, el juez fijará un solo día para que se
presenten los que deben declarar, y designará el lugar en el que deben permanecer hasta la
conclusión de la diligencia, de modo que no puedan mantener comunicación posterior a la
declaración de cada uno.

Si no fuere posible terminar el examen de los testigos en un solo día, la diligencia se


suspenderá para continuarla al día siguiente.

Interrogatorio directo

Art. 366.- Las preguntas se formularán oralmente, con la claridad y precisión debidas, y las
hará en primer lugar la parte que propuso la prueba. Los testigos responderán en forma oral, directa,
y concreta a las preguntas que se les formulen, y sobre aquello de lo que tenga conocimiento
personal. No podrán utilizar borradores ni notas, aunque pueden consultar apuntes o documentos
cuando la naturaleza de la pregunta lo exigiera y hubiese autorización del juez. La parte contraria
tendrá acceso a dichos apuntes o documentos.

En sus declaraciones los testigos no podrán emitir opiniones ni hacer especulaciones.

Contrainterrogatorio.

Art. 367.- Finalizado el interrogatorio directo, si la parte contraria manifiesta su deseo de


contrainterrogar al testigo, el juez o el presidente del tribunal le concederá la palabra al efecto,
permitiendo las preguntas sugestivas.

Durante el contrainterrogatorio, la parte que lo haga podrá utilizar, documentos, actas de


declaraciones anteriores del testigo o deposiciones que hubiera rendido y que versen sobre los
hechos en cuestión, para el efecto de demostrar o desvirtuar contradicciones, o para solicitar las
aclaraciones pertinentes.

224
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

La parte que sometió al testigo al interrogatorio directo podrá interrogarlo de nuevo. La parte
contraria podrá someterlo a otro contrainterrogatorio. En estas dos últimas intervenciones, deberán
limitarse a preguntar sobre materias nuevas que deriven del interrogatorio anterior.

CÁMARA PRIMERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO: SAN SALVADOR, en Sentencia con Referencia 84-35CM1-2015, de
fecha treinta y uno de agosto de dos mil quince, sostiene que

“…El momento procesal oportuno para atacar la credibilidad del testigo, es en la


fase de producción de prueba de la audiencia probatoria, pues de conformidad a
lo dispuesto en el Art. 367 CPCM., relacionado con el Art. 366 de mismo cuerpo
normativo, finalizado el interrogatorio directo, si la parte contraria manifiesta su
deseo de contrainterrogar al testigo, el juez o el presidente del tribunal le concederá la
palabra al efecto, permitiendo las preguntas sugestivas. En esa línea de pensamiento,
ante la inasistencia injustificada de la procuradora de la parte demandada a la
audiencia probatoria, al recurrente le precluyó el derecho para impugnar la prueba
documental aportada y desacreditar la credibilidad de los testigos presentados por
la parte actora. En ese sentido, la preclusión es una figura jurídica que extingue la
oportunidad de realizar un acto, dicho en otras palabras, produce la consumación
de una facultad procesal ya sea por pérdida de la no ejercitada en tiempo propio
o cuando se pasa a un distinto estadio del trámite. Su efecto genérico es poner un
límite definitivo e infranqueable al ejercicio de determinadas facultades, para dar
certeza y estabilidad a los actos procesales ya realizados; pues los derechos deben
hacerse valer en el proceso en la forma y plazo estipulados por la ley, partiendo
de la ecuación jurídica, “acto procesal no ejercitado en tiempo igual a derecho
precluído”; por lo que el punto de apelación incoado, no tiene fundamento legal…”

Admisión de preguntas y dinámica del interrogatorio

Art. 368.- El juez moderará el examen del testigo y resolverá de manera inmediata las
objeciones que las partes hubieran interpuesto.

Interrogatorio aclaratorio

Art. 369.- El juez o los miembros del tribunal podrán formular preguntas aclaratorias al
testigo, con las limitaciones que el deber de imparcialidad les impone. Las partes podrán objetar
las preguntas que el juez o los miembros del tribunal formulen y, en su caso, se dará oportunidad a
las partes para interrogar sobre la pregunta aclaratoria.

Exención del deber de responder del abogado

Art. 370.- Las partes y sus abogados tendrán la facultad de negarse a declarar o a facilitar
documentación en un proceso respecto de una comunicación sostenida entre ellos.

No podrá hacerse uso de la facultad prevista en el inciso anterior cuando:


1° Los servicios de un abogado hubieran sido solicitados o realizados para planear o cometer
un delito o un acto que violente la ley;
2° La comunicación resulte pertinente en una controversia en que se pretenda demostrar que
el abogado violó su deber de confidencialidad para con su cliente; o
3° El cliente hubiera relevado a su abogado del deber de confidencialidad.

225
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

Exención del deber de responder del médico

Art. 371.- El paciente y el médico tendrán la facultad de negarse a declarar en calidad de


testigo o a facilitar documentación o información en un proceso en lo referente a la relación
profesional. Además, tienen el derecho de impedir que otra persona revele una comunicación
confidencial entre ellos.

No podrá hacerse uso de la facultad prevista en el inciso anterior cuando:

1°. Los servicios de un médico fueron solicitados u obtenidos para planear o cometer un
delito o un acto que violente la ley;
2°. La información fuere esencial para decidir una controversia sobre el estado o capacidad
mental de un paciente;
3°. Fuera necesario revelar la comunicación como prueba sobre la conducta de un demandado
o demandante en el litigio;
4°. La información fuera esencial en casos de responsabilidad civil por mala praxis médica;
5°. La comunicación fuera pertinente para resolver una controversia en la que se reclamen
obligaciones emanadas de un servicio de atención médica, exista o no contrato, y cuando
se refiera a un seguro con cobertura de cualquier servicio médico o médico-quirúrgico;
6°. La comunicación fuera pertinente en una controversia en la cual el médico hubiera
violado su deber de confidencialidad para con su paciente; y,
7°. El cliente hubiera relevado a su médico del deber de confidencialidad.

Otras exenciones del deber de declarar

Art. 372.- Un sacerdote tiene derecho a rehusar dar testimonio o revelar el conocimiento
obtenido en la confesión; y cualquier ministro religioso tendrá el mismo derecho en lo tocante a
asuntos de conciencia.

La comunicación entre un contador público y su cliente, o entre un auditor y su cliente, estará


sujeta a lo dispuesto por la ley de la materia. Esta información podrá ser divulgada por mandato de
ley o por orden judicial.

El dueño de un secreto comercial o de negocio y el propietario de una patente o su licenciatario


tienen la facultad de negarse a revelarlo. También tienen el derecho de impedir o evitar que lo
divulgue uno de sus empleados. Sin embargo, se admitirá testimonio sobre dicho secreto cuando
fuere necesario para probar un fraude de ley, un delito, una violación a la legislación sobre
propiedad intelectual o industrial o para resolver cualquier otra controversia, a juicio prudencial
del juez o tribunal en función de descubrir la verdad sobre los hechos en disputa.

Lo mismo se aplica a aquellas personas que en razón de su profesión u oficio tengan obligación
de guardar secreto.

Declaración fuera de la sede del tribunal

Art. 373.- Cuando por enfermedad u otra circunstancia especialmente justificada resulte
imposible o demasiado gravoso para el testigo comparecer a la sede del tribunal, podrá
acordarse que declare en su domicilio o en el lugar en que se encuentre, a instancia de quien lo
ha propuesto.

226
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

Si la persona cuya deposición se pretende se encuentra fuera de la circunscripción territorial


del tribunal, el juez deberá trasladarse al lugar respectivo.

En lo demás se aplicará lo establecido para el supuesto de declaración domiciliaria de la parte.

Efectos de la violación del privilegio

Art. 374.- Cualquier prueba obtenida en violación a la exención del deber de guardad secreto
profesional será excluida del proceso y carecerá, en todo caso, de valor probatorio.

SECCIÓN CUARTA
PRUEBA PERICIAL

Procedencia de la prueba pericial

Art. 375.- Si la apreciación de algún hecho controvertido en el proceso requiere conocimientos


científicos, artísticos o de alguna técnica especializada, las partes podrán proponer la práctica de
prueba pericial.

Todo perito deberá manifestar en su dictamen la promesa o juramento de decir verdad, así
como el hecho de que ha actuado y actuará con objetividad.

CÁMARA SEGUNDA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, Sentencia de Apelación 27-3CM-13-A de fecha diecisiete de julio de dos
mil trece.

“TERCER AGRAVIO: El Art. 375 inciso segundo del Código Procesal Civil y
Mercantil establece, que todo perito deberá manifestar en su dictamen la promesa
o juramento de decir verdad, así como el hecho de que ha actuado y actuará con
objetividad.

Al analizar en forma detenida el informe presentado por el perito en documentoscopía,


[…], se observa que dicho perito no manifestó en su informe la promesa de decir
verdad que requiere la disposición anteriormente citada.

Ahora bien, resulta que de la lectura de la referida disposición se observa, que la


misma no establece sanción alguna respecto del dictamen pericial que se presente en
juicio, en el que no se haya hecho constar dicha promesa, es decir, no se estableció
que el dictamen que fuera presentado sin dicha promesa o juramento carecería
de validez o eficacia probatoria, por lo que el Juez A Quo no podía bajo ninguna
circunstancia dejar de tomar en cuenta el informe suscrito por el [perito] por tal
motivo, sobre todo, porque consta en el acta de juramentación de perito, levantada
a las diez horas del día veintitrés de agosto del año dos mil doce, […], que al
momento en que el señor Juez Tercero de lo Civil y Mercantil de este distrito judicial
juramentó al señor […], como perito grafotécnico, y éste prometió bajo juramento
que cumpliría con su cometido, de conformidad con lo dispuesto en los Arts. 375
inciso 2° y 376 del Código Procesal Civil y Mercantil.”

Por otra parte, en cuanto a que no hay congruencia entre la persona que realizó el
dictamen pericial y la persona que lo remitió al Juzgado inferior en grado, y que

227
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

con ello se ha violentado la cadena de custodia de la prueba en el presente proceso,


considera este tribunal que dicha circunstancia debió haber sido acreditada por la
parte que ahora lo alega, al momento de la Audiencia Probatoria, de conformidad
a lo establecido en el Art. 322 inciso 4° del Código Procesal Civil y Mercantil, a
fin de que el Juez A Quo determinara si en efecto la prueba producida pudo haber
sufrido alguna alteración o contaminación. Advirtiéndose que tal circunstancia no
fue comprobada ni en primera instancia ni en segunda instancia, ya que no basta
que el Jefe de la División Policía Técnica y Científica de la Policía Nacional Civil,
dirigiera el informe al tribunal para considerar rota la cadena de custodia, por lo
que se vuelve procedente desestimar este agravio, ya que de conformidad al mismo
Art. 322 inciso 4° CPCM, la mera posibilidad de una interrupción de la cadena de
custodia no producirá el rechazo de la prueba producida, y habiendo sido admitida
y valorada dicha prueba por el Juez A Quo, se vuelve irrelevante quien remitió al
tribunal dicho medio probatorio, pues en definitiva, el informe en comento aparece
suscrito por el perito designado y juramentado […], lo que da fe de que fue él quien
realizó dicho informe.”

En cuanto a que el informe pericial fue dirigido al Comisionado […], Jefe de la


División Policía Técnica y Científica de la Policía Nacional Civil y no al Juez Tercero
de lo Civil y Mercantil, a criterio de este tribunal dicha circunstancia también
resulta irrelevante, en primer lugar, porque dentro de las disposiciones del Código
Procesal Civil y Mercantil que regulan la prueba pericial, no se ha establecido
ningún tipo de sanción respecto al peritaje producido, si éste no se dirige al Juez
que lo haya ordenado, y en segundo lugar, porque al momento de remitir el referido
peritaje, se hizo a través de un oficio debidamente firmado y sellado por el oficial en
servicio de la División Policía Técnica y Científica, dirigido a la […] Juez titular del
Juzgado Tercero de lo Civil y Mercantil de este distrito judicial, en cumplimiento a
lo solicitado a esa institución por dicha funcionaria, tal como aparece en el oficio
número […], de fecha dieciocho de julio de dos mil once, […], con lo cual dicha
formalidad quedó subsanada.”

CÁMARA PRIMERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO: SAN SALVADOR, en Sentencia con Referencia 145-65CM1-2014, de
fecha dieciséis de octubre de dos mil catorce.

“…establece que la pericia es para apreciar hechos que requieren conocimientos


especializados; por lo que este no es un medio para fijar hechos y convencer
al Órgano judicial acerca de su realidad o existencia; sino que es una prueba
complementaria, que recae sobre los hechos probados por otros medios; pero cuya
valoración requiere conocimientos especializados que el juzgador no posee. La
característica del peritaje es que recae sobre hechos y no sobre cuestiones jurídicas,
pues su función no es la de sustituir al operador de justicia en la tarea de aplicar
el derecho al caso, sino la de verificar los hechos que interesan al mismo. Debe
destacarse, que existen disposiciones que imponen al juzgador la prueba pericial,
aunque no la soliciten las partes, como en el caso de la impugnación del documento
privado (Art. 340 CPCM). No obstante, a quien incumbe decidir si dicho tipo de
prueba es pertinente, es al órgano judicial, cuando la considere necesaria para la
valoración de la prueba…”

228
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

CÁMARA DE LA TERCERA SECCIÓN DE OCCIDENTE: AHUACHAPÁN,


en Sentencia con Referencia A.P.C.S.D.22-12, de fecha diecinueve de julio de dos
mil doce.
“…La prueba por perito tiene por finalidad la obtención de un juicio de experiencia
con el cual se pretende el conocimiento o interpretación de los datos de la realidad,
necesarios para resolver la pretensión deducida, la cual no aporta hechos como
tales, sino máximas experienciales o juicios de valor propios del bagaje científico,
artístico o práctico, tal como se extrae del Art. 375 CPCM. De conformidad con la
ley, existen dos formas de obtener un informe pericial a saber: la extrajudicial o de
parte y la judicial, las cuales tienen una equiparación en cuanto al valor probatorio,
ya que ambas se ubican en un plano de igualdad y por tanto no son excluyentes la
una de la otra, es decir, que indistintamente sea practicada la pericia por orden
del juez o de parte antes del proceso, el potencial valor probatorio del dictamen en
cualquiera de los casos señalados debe ser el mismo desde la perspectiva legal, pues
será valorado por el juzgador conforme a las reglas de la sana crítica, lo cual se
desprende de los Arts. 216 y 416 del cuerpo de leyes supra citado…”
Contenido del dictamen pericial

Art. 376.- El dictamen pericial se circunscribirá a los puntos propuestos como objeto de la
pericia y deberá ajustarse a las reglas que sobre la ciencia, arte o técnica correspondiente existieren.
En él se deberá informar, además, sobre las distintas posturas o interpretaciones posibles en el caso
específico.

CÁMARA TERCERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, SAN SALVADOR, Apelación Referencia: 170-EMSM-11 de fecha siete
de noviembre de dos mil once.

“Es oportuno señalar que prueba pericial es aquella que se realiza para aportar
al proceso las máximas de experiencia que el juez no posee, a fin de facilitar la
percepción y apreciación de hechos concretos propios de la controversia. Sirve,
pues, para que el Juzgador pueda obtener el convencimiento sobre la veracidad de
las circunstancias no fácticas, que conforman el supuesto de hecho de la norma cuya
aplicación se pide o de la relación jurídica llevada ante él.
Dicha prueba, pues, no es más que la actividad procesal, desarrollada en virtud
de encargo judicial, por personas distintas de las partes del proceso, especialmente
calificadas por sus conocimientos técnicos, artísticos o científicos, mediante la
cual se suministran al juzgador argumentos o razones para la formación del
convencimiento respecto de ciertos hechos cuya percepción o entendimiento escapa
a las actitudes del común de las personas. Es decir que cuando la comprobación
de los hechos controvertidos requieren conocimientos técnicos ajenos al saber
específicamente jurídico del Juzgador, éste debe ser auxiliado en la aclaración de
esos hechos por personas que tengan conocimientos especiales en alguna ciencia,
arte o industria, los cuales actúan como auxiliares de la Justicia y contribuyen con
su versión a esclarecer los puntos que requieren conocimientos específicos.
En ese orden de ideas, para que la prueba pericial sea válida, tiene que haber sido
ordenada o decretada y notificada en legal forma por el Juez competente, realizada

229
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

por personas calificadas, quienes deben hacer una correcta verificación de los
hechos, establecer sus características y modalidades, sus cualidades, su relación con
otros hechos, las causas que lo produjeron y sus efectos para producir su informe.

El peritaje, es el resultado de la intervención calificada, transitoria en el proceso, de


personas que luego de realizar determinados actos emiten el dictamen que el Juez
ha ordenado como medida para mejor proveer. Percibidos los hechos por parte de
los peritos y rendido su dictamen sobre su existencia, valor y sus características,
técnicas, científicas o artísticas, suministra el instrumento probatorio para que el
juez conozca el hecho y lo verifique. En razón de ello ese dictamen indudablemente
tiene carácter de prueba.”

Perito de parte

Art. 377.- Cada una de las partes tiene derecho a designar su propio perito y a que se elabore
privadamente el dictamen correspondiente, el cual se acompañará a las respectivas alegaciones, en
los momentos determinados por este código.

CÁMARA TERCERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO: SAN SALVADOR, en Sentencia con Referencia 204-CQCM-15, de
fecha veintisiete de noviembre de dos mil quince.

“…E. …si el dictamen llena los requisitos de validez y de eficacia probatoria, en


el sentido de que la prueba fue decretada en forma legal, que no existe norma que
la prohíbe, realizada por perito o peritos capaces, que tomaron posesión de su
cargo debidamente y que el dictamen fue presentado firmado con las formalidades
legales, emitido conscientemente, libre de coacción, violencia, dolo, cohecho o
seducción, después de haber realizado personalmente los estudios del dictamen y
utilizado medios legítimos en la investigación, verificación y calificación sobre
el hecho a probar, cuyo contenido esté debidamente fundado y las conclusiones
sean claras, inequívocas, firmes y convincentes, circunscritas a los puntos
planteados, comprendiendo por supuesto las cuestiones que los peritos consideran
como antecedentes, causas o fundamentos necesarios y ha sido emitido en forma
imparcial, libre de objeciones por error, inexactitudes o excesos, el Juzgador no
puede apartarse de las conclusiones a las que los expertos hubieren arribado…”

Acuerdo de partes

Art. 378.- Las partes, de común acuerdo y hasta la audiencia preparatoria, podrán presentar
un escrito en el que propongan perito y puntos de pericia. El dictamen se dará sobre los puntos
indicados por las partes.

En este caso, los gastos que ocasione la emisión del dictamen pericial serán satisfechos en
partes iguales por el demandante y el demandado, sin perjuicio del pronunciamiento en costas.

Anticipo de gastos

Art. 379.- Si el perito propuesto lo solicitare dentro del tercer día de haber aceptado el
cargo, las partes que han propuesto la prueba deberán depositar la suma que el tribunal fije como
provisión de fondos, conforme al arancel judicial, para gastos de realización del peritaje.

230
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

Dicho importe deberá ser depositado dentro del quinto día contado desde el siguiente al de la
notificación del decreto que lo ordena, y se entregará al perito sin perjuicio de lo que en definitiva
se resuelva respecto de las costas y del pago de honorarios. La falta de depósito dentro del plazo
implicará el desistimiento de la prueba.

Perito judicial

Art. 380.- Las partes podrán proponer el nombramiento de un perito judicial cuyo dictamen
consideren necesario o adecuado para la mejor defensa de sus intereses. El tribunal encargará la
pericia a un técnico en la materia.

Momento de la proposición de prueba pericial judicial

Art. 381.- Cuando la parte pretenda el nombramiento de perito judicial in limine litis, y la
urgencia del caso lo requiera, deberá indicarlo en el correspondiente escrito de alegación inicial,
con identificación del objeto de la prueba.

El tribunal, si considera que la prueba es pertinente y útil, deberá proceder al nombramiento


del perito en el plazo de tres días contados desde la conclusión del señalado para contestar la
demanda, independientemente de cuál de las partes hubiera solicitado la pericia judicial.

Las partes también podrán proponer la prueba pericia] por perito nombrado judicialmente
durante la audiencia preparatoria o en la única audiencia del proceso abreviado, casos en los que el
tribunal lo designará sin más trámite, si considera la prueba pertinente y útil.

La designación judicial del perito contendrá el plazo otorgado a éste para la realización del
correspondiente dictamen.

CÁMARA DE LA TERCERA SECCIÓN DE OCCIDENTE: AHUACHAPÁN,


en Sentencia con Referencia A.P.C.S.D.22-12, de fecha diecinueve de julio de dos
mil doce.
“…La otra circunstancia surge cuando no se haya hecho la aportación del dictamen
pericial en el trámite de las alegaciones, pudiendo cualquiera de las partes recurrir
al Juez para solicitar la designación de un perito judicial, en los casos reglados en el
Art. 381 CPCM, donde la actividad probatoria estará bajo el control judicial, tales
casos son: a) cuando la parte pretenda el nombramiento de perito in limine litis y la
urgencia del caso lo requiera, y sea calificada por el Juez como pertinente y útil; b)
Por acuerdo entre las partes, según el Art. 378 de la ley aludida; c) cuando se trate
de pedir prueba pericial de contraste, para desvirtuar el valor de algún informe
aportado en las fases previas del proceso por la parte contraria; y, d) en el caso de
que estando las partes cada una por separado o varias estando de acuerdo en pedir
la prueba pericial, durante la audiencia preparatoria o audiencia del procedimiento
abreviado, el Juez la estime pertinente y útil…”
CÁMARA SEGUNDA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL
CENTRO: SAN SALVADOR, en Sentencia con Referencia 94-4-CM-13-A, de
fecha veinte de diciembre de dos mil trece.

“…4.20.- …la realización de prueba pericial deberá ser solicitada por la parte
interesada ya sea en los escritos de intervención iniciales, es decir, tanto en

231
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

la demanda para el caso de la parte demandante, como en la contestación de la


demanda para el caso de la parte demandada, o incluso en la Audiencia Preparatoria
o en la Audiencia Única del Proceso Abreviado, la cual será admitida en caso de que
el Juez la considere pertinente y útil, debiendo establecerse junto a la admisión de
dicha prueba, el plazo en el que el perito nombrado deberá cumplir la diligencia y
presentar su informe pericial…”

Puntos de la pericia
Art. 382.- Al proponer la prueba pericial y el nombramiento de perito judicial, la parte
indicará la especialización que ha de tener el perito y propondrá los puntos de pericia.
La otra parte podrá manifestar lo procedente en relación con la especialización del perito,
así como proponer otros puntos que a su juicio deban constituir también objeto del dictamen, y
observar lo oportuno sobre la procedencia de los mencionados por quien propuso la prueba.
El tribunal resolverá sobre los puntos a los que debe referirse el dictamen pericial a la vista de
las alegaciones efectuadas por las partes.
Capacidad para ser perito
Art. 383.- Podrán ser designados peritos quienes posean título oficial en la materia, ciencia
o arte de que se trate. Si el objeto de la pericia no estuviera amparado por un título oficial, se
nombrará el perito entre personas entendidas en la materia.
Número de peritos
Art. 384.- Un solo perito será suficiente para tener por establecidos los hechos que se
controvierten en el proceso, salvo que las partes acuerden designar más de uno, y siempre que
estén de acuerdo en la designación de todos los que hayan de ser nombrados.
Nombramiento y aceptación del perito. Recusación
Art. 385.- El perito que hubiera sido designado por el juez será nombrado por éste para la
realización del peritaje. En el plazo de tres días, dicho nombramiento le será comunicado al perito,
que deberá aceptar el encargo y prestará juramento o hará promesa de cumplir bien y fielmente el
encargo.
El perito designado, podrá excusarse si concurre en él alguna de las causas de abstención.
El tribunal procederá a nombrar otro en los tres días siguientes a la recepción de la abstención.
El perito designado judicialmente podrá ser recusado a más tardar dentro de los tres días
siguientes a su designación, cuando por sus relaciones con las partes o con el objeto del proceso o,
por cualquier otra causa razonable, hubiera dudas sobre su imparcialidad; debiéndose proceder en
este caso a la designación de otro perito, conforme al inciso anterior.
Dictamen pericial
Art. 386.- El perito deberá presentar el dictamen por escrito y remitirlo al juez y a las partes
dentro del plazo otorgado, que deberá finalizar cuando menos diez días antes de la celebración de
la audiencia probatoria.

232
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

Práctica de la prueba pericial

Art. 387.- A la vista de los dictámenes periciales del perito de la contraparte o del dictamen
del perito judicial, las partes podrán solicitar la comparecencia del perito en el acto de la audiencia
probatoria, con el objeto de interrogarle.

El juez citará al perito para el día y hora de la audiencia probatoria.

En la audiencia, las partes, comenzando con la que presentó al perito o con la que solicitó el
perito judicial, podrán pedir que el perito exponga el dictamen, lo aclare, lo ilustre, responda a
preguntas concretas sobre el método seguido, premisas, conclusiones y todos aquellos extremos
que puedan contribuir a aclarar y comprender mejor su opinión.

Concluido el examen, la parte contraria tendrá derecho a contrainterrogar.

El juez podrá en todo momento interrogar al perito sobre algún punto respecto del cual se
requiera mayor claridad, a su prudencial criterio.

CÁMARA SEGUNDA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, SAN SALVADOR, Apelación, Referencia: 26-3CM-15-A, de fecha
veintidós de junio de dos mil quince.

“La sana crítica es la operación intelectual realizada por el juez y destinada a la


correcta apreciación del resultado de las pruebas judiciales, realizada con sinceridad
y buena fe. Ha sido definida como “la lógica interpretativa y el común sentir de
las gentes y como la combinación de criterios lógicos y de experiencia que debe
aplicar el juzgador. En otras palabras, la sana crítica es el método de apreciación
de la prueba, donde el juez la valorará de acuerdo a la lógica, las máximas de la
experiencia y los conocimientos científicamente afianzados.

En el caso de autos, la Juez A Quo ha basado su fallo en el informe pericial


aportado en el proceso, en el cual se estableció que las medidas reales del terreno
del demandado señor Gonzalo Patricio M. G., coinciden con las medidas que se
encuentran inscritas en el Registro, por lo que la Juez A Quo ha fallado en base a la
pruebas aportadas en el proceso.

Acontece frecuentemente, que la comprobación o la explicación de ciertos hechos


controvertidos en el proceso requiere conocimientos técnicos, ajenos al saber
específicamente jurídico del juez. De allí la necesidad que este último sea auxiliado,
en la apreciación de esa clase de hechos, por personas que posean conocimientos
especiales en alguna ciencia, arte o industria y quienes se denomina peritos.
La prueba pericial consiste en la actividad que aquellos deben cumplir con la
mencionada finalidad.

La prueba pericial se encuentra regulado en el Art. 375 CPCM, el cual establece: “Si
la Apreciación de algún hecho controvertido en el proceso requiere conocimientos
científicos, artísticos o de alguna técnica especializada, las partes podrán proponer
la prueba pericial.”, en el caso de autos tanto la parte actora en su demanda propuso
prueba pericial, tal y como consta en la contestación de la demanda agregada de fs.1 al
3 de la p.p., así como la parte demandada en su contestación de la demanda, que corre

233
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

agregada de fs. 39 al 46 de la p.p., nombrándose para ello a los peritos: Técnico Oskar
Alfredo G., de las oficinas de mantenimiento Catastral, agregado a fs. 100 de la p.p. y
al Técnico Roberto Atilio V. B., del Registro Nacional, tal y como consta a fs. 146 de la
p.p., realizando ambos profesionales el trabajo encomendado por la Juez A Quo,
informes periciales que corren agregado de fs. 205 al 210 de la p.p.

No obstante la parte actora- apelante no está conforme, por manifestar que los
informes periciales no son claros.
Al respecto, el Art. 376 CPCM, establece: “El dictamen pericial se circunscribirá a
los propuestos como objeto de la pericia y deberá ajustarse a la regla que sobre la
ciencia, arte o técnica correspondiente existieren.
(…)”En el caso de autos, en los informes presentados por los peritos consta los
resultados de la inspección, que fue realizada en base a lo solicitado por las partes y
las conclusiones, en las cuales tanto el perito del Registro Nacional, así como el perito
del Ministerio de Obras Públicas, coinciden en que las medidas del inmueble del señor
Gonzalo Patricio M. son congruente con la información que contienen las escrituras,
teniendo un área según escritura de 478. 48 y un área real en el campo de 478.30, por lo
que no se probó que en el presente proceso haya existido por parte del demandado señor
Gonzalo Patricio M. G., alguna introducción al terreno del señor Alberto Tomás M. V.
Aunado a lo anterior, si la parte demandante- apelante, no estaba conforme con los
informes periciales, tuvo la oportunidad de interrogar a los peritos en la audiencia
probatoria, ya que dichos profesionales fueron citados de conformidad con lo
dispuesto en el Art. 387 inciso 1° CPCM, a petición de la parte actora, pudiendo
solicitar a los peritos en audiencia que aclarara su informe, ampliaran o explicaran
sus conclusiones así como preguntar el porqué del método empleado, a fin de aclarar
todo tipo de dudas, sin embargo la parte actora realizó una serie de pregunta, a los
peritos pero en ningún momento estas fueron encaminada a tratar de aclarar: 1)
deficiencia alegada en esta instancia en cuanto a la motivación de los dictámenes
de los peritos; 2) el porqué de las técnicas usadas; 3) Tampoco trato de aclarar
las conclusiones de los informes pericial, por lo que esta, no es la etapa procesal
oportuna para manifestar su inconformidad con los mismos.”
CÁMARA TERCERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL
CENTRO: SAN SALVADOR, en Sentencia con Referencia 35-EMM-15, de fecha
veintiocho de abril de dos mil quince.
“…C. La disposición antes transcrita, abre la posibilidad de lograr por parte del
tribunal, una mejor valoración de los conocimientos especializados expuestos en el
informe pericial respecto de los puntos objeto de la pericia, ya que los autores de los
dictámenes pueden comparecer en el acto de la audiencia probatoria, para que a
petición de las partes expliquen el contenido de su informe, aclarando o ampliando
alguno de sus extremos o simplemente para desentrañar la real o aparente
incoherencia o contradicción entre distintos apartados del informe, respondiendo
a las preguntas u objeciones que le sean formuladas por las partes o el tribunal,
garantizando al propio tiempo la debida contradicción de las partes, ese es al final
de cuentas el objeto de citar al perito…”

234
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

CÁMARA SEGUNDA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO: SAN SALVADOR, en Sentencia con Referencia 26-3CM-15-A, de
fecha veintidós de junio de dos mil quince.

“…4.15…A petición de la parte actora, pudiendo solicitar a los peritos en audiencia


que aclarara su informe, ampliaran o explicaran sus conclusiones así como
preguntar el porqué del método empleado, a fin de aclarar todo tipo de dudas,
sin embargo la parte actora realizó una serie de pregunta, a los peritos pero en
ningún momento estas fueron encaminada a tratar de aclarar: 1)deficiencia alegada
en esta instancia en cuanto a la motivación de los dictámenes de los peritos; 2) el
porqué de las técnicas usadas; 3) Tampoco trato de aclarar las conclusiones de los
informes pericial, por lo que esta, no es la etapa procesal oportuna para manifestar
su inconformidad con los mismos…”

CÁMARA TERCERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO: SAN SALVADOR, en Sentencia con Referencia 64-CSM-13, de fecha
diez de julio de dos mil trece.

“…K) …abre la posibilidad de que, para lograr una mejor aprehensión y valoración
de los conocimientos especializados por el tribunal, puedan los peritos autores
de los dictámenes comparecer a pedimento de parte en el acto de la audiencia
probatoria, explicando el contenido del dictamen, aclarando o completando alguno
de sus extremos, o respondiendo a las preguntas u objeciones que le sean formuladas
por las partes o el tribunal, garantizando al propio tiempo la debida contradicción
entre las partes…”

Incomparecencia del perito (2)

Art. 388.- Si no compareciera el perito debidamente citado, y no ofreciera suficiente


justificación, se le impondrá una multa cuyo monto se fijará entre cinco y diez salarios mínimos
urbanos, más altos, vigentes, y se le podrá volver a citar con advertencia de proceder contra él por
cielito de desobediencia a mandato judicial.

El perito tiene la obligación de responder a las preguntas que se le formulen, y al negarse a


hacerlo queda sujeto a responsabilidad por desobediencia a mandato judicial.

La no comparecencia del perito dejará sin validez el dictamen presentado.

CÁMARA TERCERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO: SAN SALVADOR, en Sentencia con Referencia 35-EMM-15, de fecha
veintiocho de abril de dos mil quince.

“…D. En este contexto los Arts. 387 y 388 CPCM, no determinan sanción procesal
para el perito que comparezca iniciada la audiencia y esté presto a contestar las
interrogantes, como en el caso que nos ocupa, sino únicamente para el caso de
incomparecencia de éste, es decir, que no se encuentre para responder a las preguntas
de las partes, establecido en el Art. 388 CPCM, que en su inciso final dispone:
“La no comparecencia del perito dejará sin validez el dictamen presentado”, el
que no debe interpretarse aisladamente del Art. 387 que señala que el objeto de la
cita al perito es para contestar las preguntas de las partes, por lo que no debemos

235
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

confundir el hecho de que el perito no se encuentre presente al momento en que


inicia la audiencia con no comparecer a contestar el interrogatorio de las partes,
Verbigracia, la comparecencia tiene por objeto contestar el interrogatorio de las
partes, más allá de la comparecencia misma….F. Por lo tanto, no procede dejar sin
validez el dictamen pericial, mucho menos nulo como lo hizo el juez de la causa,
puesto que la experta se personó al tribunal antes del desfile probatorio y estaba
presta a contestar las interrogantes de las partes, su llegada tardía no tiene esa
sanción procedimental al Derecho Procesal, por tanto el juez de la causa se excedió
al interpretar de la manera que lo ha hecho el Art. 388 al margen del 387 y los Arts.
1, 2, 3, 4, 5, 6, 7, 14 y 18 CPCM….”

Valor probatorio de la prueba pericial

Art. 389.- La prueba pericial será valorada conforme a las reglas de la sana crítica, tomando
en cuenta la idoneidad del perito, el contenido del dictamen y la declaración vertida en la audiencia
probatoria, según sea el caso.

CÁMARA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DE OCCIDENTE,


SANTA ANA, Apelación Referencia: 216-4-2011 de fecha: seis de febrero de dos
mil doce.

“La prueba pericial tiene por finalidad la obtención de un juicio de experiencia


especializado con el cual se pretende el conocimiento o interpretación de los
datos de la realidad, necesarios para resolver la pretensión deducida, con base
a la sana crítica. Cabe destacar la importante innovación implementada por el
Código Procesal Civil y Mercantil con respecto a la prueba pericial, la cual puede
ser extrajudicial o judicial, equiparándolas a ambas en un plano de igualdad,
destacándose la clara voluntad de la ley de reducir en principio, la intervención
de los peritos a uno solo, siendo la designación de mas de un perito un caso de
excepción. Asimismo retorna de la anterior legislación, la figura de la recusación
del perito en caso dado exista sospechas fundadas y comprobables de la falta de
imparcialidad o idoneidad del perito, como poner de manifiesto si existe alguna
relación de parentesco o de amistad o de enemistad con alguna de las partes entre
otros, pues no parece lógico que baste con la mera denuncia del motivo.

Con relación a la valoración de este medio de prueba, el Art. 389 CPCM., claramente
expone que el informe pericial será valorado con base a las reglas de la sana
critica, es decir como una valoración libre pero racional y motivada de la prueba,
tomándose en cuenta desde luego, la solidez intrínseca del dictamen, la seriedad de
la exposición, la metodología empleada y la logicidad de sus resultados.

En el caso de autos, resulta que la práctica del peritaje solicitado es una prueba
pertinente y licita, pues era necesaria para probar la excepción de falsedad alegada
por la parte demandada, además la obtención de dicho dictamen ha sido dentro
del marco legal, respetando la normativa atinente según el Código procesal Civil y
Mercantil y los derechos de defensa e igualdad de ambas partes; esto debido a que
ambas, tuvieron la oportunidad de proponer un perito, habiendo coincidido en el
mismo; además, dicho medio de prueba se solicito inlimine, según la regla del Art.
381 CPCM., en el escrito de alegación inicial y el dictamen fue presentado dentro

236
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

del plazo que establece el Art. 386 CPCM; se advierte además que la parte apelante
tuvo la oportunidad de recusar al perito designado por el juez y probar las causas
por las cuales sospechaba de la falta de imparcialidad del mismo, o de designar
particularmente a otro para presentar el dictamen en la audiencia respectiva, cosa
que no hizo. Es necesario aclarar, con relación a la alegación de la parte apelante,
consistente en que se efectuaron dos peritajes, que ha existido confusión por la parte
apelante, pues el informe de fs. 132 de la pieza principal, no puede considerarse
como un peritaje, pues el perito designado expone en el mismo que no puede ser
categórico debido a que no se le proporcionaron documentos en original con firmas
originales, por tal razón no puede afirmar que la firma plasmada en el titulo valor
presentado como documento base de la acción haya sido puesta por el causante
LUIS ARMANDO O. P..; fue hasta que se le proporcionaron documentos originales
al perito, que pudo verificar la diligencia encomendada y fue categórico al
manifestar que la firma que consta en la letra de cambio sin protesto, no fue puesta
por la misma persona que firmó los documentos que fueron proporcionados para
comparación; de todas formas, en el supuesto caso que se tratara de dos peritajes, el
primer dictamen siempre seria desfavorable al actor, puesto que al no ser categórico
el perito, obraria a favor del demandado el principio “indubio pro reo”, por lo que
siempre tendría que liberarse al demandado de la acción en contra de el incoada.”
CÁMARA TERCERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL
CENTRO, SAN SALVADOR, Apelación Referencia: 22-EMSM-11 de fecha
diecisiete de junio de dos mil once.
“En ese orden de ideas, para que la prueba pericial sea válida, tiene que haber sido
ordenada o decretada y notificada en legal forma por el Juez competente, realizada
por personas calificadas, quienes deben hacer una correcta verificación de los
hechos, establecer sus características y modalidades, sus cualidades, su relación con
otros hechos, las causas que lo originaron y sus efectos para producir su informe.
El peritaje, es el resultado de la intervención calificada, transitoria en el proceso, de
personas que luego de realizar determinados actos emiten el dictamen que el Juez
ha ordenado como medida para mejor proveer. Percibidos los hechos por parte de
los peritos y rendido su dictamen sobre su existencia, valor y sus características,
técnicas, científicas o artísticas, suministra el instrumento probatorio para que el
juez conozca el hecho y lo verifique. En razón de ello ese dictamen, al ser acogido y
valorado por el juzgador, indudablemente tiene carácter de prueba.
Para que el juzgador pueda apartarse de una conclusión técnica tiene que hacerlo
dando suficiente fundamento; pero si el dictamen llena los requisitos de validez y
de eficacia probatoria, en el sentido de que la prueba fue decretada en forma legal,
que no existe norma que la prohíbe, realizada por perito o peritos capaces, que
tomaron posesión de su cargo en debida forma y que el dictamen fue presentado
debidamente firmado con las formalidades legales, emitido el mismo en forma
consiente, libre de coacción, violencia, dolo, cohecho o seducción, después de haber
realizado personalmente los estudios del dictamen y utilizado medios legítimos en
la investigación, verificación y calificación sobre el hecho a probar, cuyo contenido
esté debidamente fundado y las conclusiones sean claras, inequívocas, firmes y
convincentes, circunscritas a los puntos planteados, comprendiendo por supuesto

237
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

las cuestiones que los peritos consideran como antecedentes, causas o fundamentos
necesarios y ha sido emitido en forma imparcial, libre de objeciones por error,
inexactitudes o excesos, el Juzgador no puede apartarse de las conclusiones a las
que los expertos hubieren arribado, y al hacer la valoración del dictamen, está
facultado para darle el carácter de plena prueba.”
CÁMARA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DE OCCIDENTE:
SANTA ANA, en Sentencia con Referencia INC-APEL-131-07-11-12, de fecha
seis de diciembre de dos mil doce.

“…la prueba pericial será valorada conforme a las reglas de la sana crítica;
definidas éstas por la doctrina como las del correcto entendimiento humano. En ellas
interfieren las reglas de la lógica, con las reglas de experiencia del Juez. Siguiendo
el mismo iter, cabe señalar que “La sana crítica, es la unión de la lógica y de la
experiencia, sin excesivas abstracciones de orden intelectual.”Dicha operación
mental, es realizada por el juzgador, al momento de valorar la prueba, adoptando la
que se adecue a la realidad de los hechos que se investigan, es decir, haciendo uso de
la lógica, el sentido común, a fin de evitar que se dicte una resolución equivocada,
carente de sustento legal. Sobre el tema de la valoración de la prueba, manifiesta el
autor Eduardo 3. Couture, en su obra Fundamentos del Derecho Procesal Civil, pág.
257, “Ya no se trata de saber que es en si misma la prueba, ni sobre qué debe recaer,
ni por quien o cómo debe ser producida. Se trata de señalar con la mayor exactitud
posible, cómo gravitan y qué influencia ejercen los diversos medios de prueba, sobre
la decisión que el magistrado debe expedir.”…”

SALA DE LO CIVIL DE LA CORTE SUPREMA DE JUSTICIA: SAN


SALVADOR, en Sentencia con Referencia 247-CAC-2013, de fecha diecinueve de
junio de dos mil quince.

“…V-…regula el valor probatorio de la prueba pericial, prueba que deberá


analizarse y valorarse conforme a las reglas de la sana crítica, tomando en cuenta
la idoneidad del perito, el contenido del dictamen y la declaración vertida en la
audiencia probatoria, según sea el caso. La ley autoriza al juzgador a aplicar
las reglas de la sana critica, es decir, apartarse de las conclusiones del dictamen
pericial. El perito aporta los conocimientos de la experiencia que el juzgador no
posee; sin embargo, la ley le autoriza para valorar los diferentes dictámenes
tomando en cuenta la autoridad técnica o científica del perito, la idoneidad del
método empleado en el estudio y, sobre todo, la coherencia lógica de los argumentos
y las conclusiones. Sin embargo, entre más especializada sea la cuestión menos
posibilidades tiene el juzgador de criticar el método empleado y la coherencia de los
razonamientos desarrollada, debiendo atenerse a los resultados que se determinen
en el peritaje…”

SALA DE LO CIVIL DE LA CORTE SUPREMA DE JUSTICIA: SAN


SALVADOR, en Sentencia con Referencia 16-CAC-2013, de fecha once de marzo
de dos mil quince.

“…refleja el principio de libre valoración de la prueba pericial con base en las


reglas de la sana crítica. Al respecto, los errores de valoración de la prueba residen

238
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

o deben encontrarse en la fundamentación probatoria de la Sentencia, en la que


se describen y aprecian los distintos medios de prueba, la cual debe atenerse a los
principios que integran dicho sistema, debiendo la Sentencia ser lógica, respetando
los principios de no contradicción, identidad, tercero excluido, etc., fincar máximas
de experiencia y hacer uso de la psicología…”

SECCIÓN QUINTA
RECONOCIMIENTO JUDICIAL

Procedencia del reconocimiento judicial

Art. 390.- Si para el esclarecimiento de los hechos es necesario que el juez reconozca por sí a
una persona, un objeto o un lugar, se podrá proponer este medio de prueba.

El juez podrá ordenar de oficio el reconocimiento judicial cuando lo considere necesario para
dictar Sentencia.

CÁMARA DE LA CUARTA SECCIÓN DEL CENTRO: SANTA TECLA, en


Sentencia con Referencia 89-C-13, de fecha veintitrés de septiembre de dos mil trece:

“…C.)…el reconocimiento judicial, es un medio de prueba por el que se solicita


al juez o tribunal que realice un examen directo y a través de sus sentidos, de una
persona, de un objeto o de un lugar, con el fin de establecer los hechos controvertidos
introducidos por las partes y dejar registro escrito de ello a través de un acta. Es
por ello que, la importancia de dicha prueba no radica tanto en la especialización
del conocimiento del juez, sino en el grado de inmediación de los hechos que van a
examinarse…”

CÁMARA TERCERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO: SAN SALVADOR, en Sentencia con Referencia 64-CSM-13, de fecha
diez de julio de dos mil trece.

“…B) Según el Diccionario Jurídico Universitario de Guillermo Cabanellas de


Torres, Tomo I, Editorial Heliasta, Buenos Aires, Argentina, 2000, en la pág. 363,
reconocer es: “Observar con atención la identidad o cualidades de una persona o
cosa”, ya sobre el reconocimiento judicial, en la pág. 364 nos dice: “Diligencia que
realiza el juez solo o en unión de las partes, de los peritos o de los testigos, para
comprobar la existencia de una persona o de una cosa, o bien la realidad de un
hecho.”C) Es el reconocimiento judicial el único medio de prueba que sitúa al juez
en contacto directo con los hechos, no es lo mismo, por ejemplo, que un testigo o un
perito le relaten al juez el mal olor que desprende una industria próxima a que el
juez lo perciba con su propio olfato. D) El objeto del reconocimiento judicial son los
lugares, objetos o personas, para el caso, el que nos interesa es el reconocimiento
de lugares que atiende normalmente a los vestigios dejados por una cosa o a la cosa
en una determinada disposición o situación. Se trata en este caso de determinar,
en conexión con la afirmación de hecho controvertida, utilizando los sentidos,
determinadas circunstancias de una o varias cosas, en el sentido amplio del término,
puestas en un determinado contexto físico. E) Los lugares deben ser entendidos como
“sitios o parajes”, lo que implica que no se trate de percepción externa de cosas u

239
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

objetos, sino de esas mismas cosas u objetos (sean muebles o inmuebles) en una
determinada situación, porque la controversia en los hechos se refiere precisamente
a tal situación y no a la cosa u objeto en sí mismo. F) Procede este medio probatorio
cuando es necesario que el juez verifique por la apreciación de los sentidos, el
estado en que ha quedado un lugar tras una inundación, la situación de los linderos
de una finca, o los daños provocados en una cosecha, etc., lo que se reconoce no es
el agua o los linderos, sino estos objetos en una determinada situación para poder
determinar una afirmación de hecho de las partes…”

Proposición

Art. 391.- El reconocimiento judicial deberá proponerse de conformidad a las reglas


contenidas en este código.

Práctica del reconocimiento judicial

Art. 392.- Cuando se pretendiere el reconocimiento de una persona o de un objeto, deberá


llevarse a cabo en la audiencia; y se procederá sin más al examen correspondiente, debiéndose
describir en forma ordenada e inteligible el estado en la persona o en que el objeto se encuentren.
Cualquiera de las partes podrá objetar en todo momento la descripción referida.

Si el reconocimiento se refiriera a un inmueble, se señalará día y hora para su práctica, la cual


se realizará antes de la audiencia probatoria, con cita previa de las partes.

Facultad para delegar su realización

Art. 393.- Si no fuera posible practicar el reconocimiento en la sede del tribunal, el juez
se trasladará al lugar donde se encuentre la persona o el bien objeto del reconocimiento. Las
partes podrán concurrir al acto de reconocimiento judicial y hacer las observaciones que estimen
oportunas y pertinentes.

Cuando el objeto del reconocimiento se hallara fuera de la circunscripción territorial del


tribunal, el juez se trasladará a dicho lugar o encargará la práctica de la diligencia por comisión
procesal.

Práctica conjunta del reconocimiento judicial con la prueba pericial y testifical

Art. 394.- Si lo estima conveniente, el juez podrá ordenar el reconocimiento judicial junto con
el reconocimiento pericial o la declaración de testigos.

CÁMARA TERCERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO: SAN SALVADOR, en Sentencia con Referencia 64-CSM-13, de fecha
diez de julio de dos mil trece.

“…H) Existe la posibilidad de realización conjunta del reconocimiento judicial


con la prueba pericial, pero la realización de estos medios de prueba, no tiene
como fundamento la concentración de los actos de prueba, sino la de ayudar a
una mejor apreciación de los hechos controvertidos por parte del juez, cuando su
comprensión está influida por la observación directa del objeto, lugar o persona a
reconocer y por la necesidad de explicar hechos científicos, prácticos o técnicos. Art.
394 CPCM. I) En la práctica, puede que la prueba pericial se agote en el acto del

240
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

reconocimiento, si al perito le basta con apreciar un hecho técnico y plasmarlo en


la propia acta, con las aclaraciones de las partes y del juez, siempre que la pericia
se deba iniciar reconociendo junto al juez y a las partes que concurran el lugar, el
objeto o la persona, pero lo habitual será que el perito se reserve la emisión escrita
del dictamen para un momento posterior, sin perjuicio de que quede constancia,
a instancia del juez o de las partes en el acto del reconocimiento de las primeras
apreciaciones y observaciones del perito una vez observado lo que es objeto de la
pericia. J) En definitiva, la pericial conserva su naturaleza aun incluida en el acto
del reconocimiento judicial; y por ello, ha de seguir las reglas y los pasos habituales
para poder emitir un dictamen y someterlo a la controversia de las partes…”

Contenido del acta de reconocimiento

Art. 395.- Cuando el reconocimiento se realizare fuera de la sede del tribunal, se elaborará
acta en la que deberá incorporarse:
1°. Lugar y fecha de la diligencia.
2°. La identificación del tribunal que llevó acabo la diligencia.
3°. La identificación de las personas que concurren a la diligencia y la calidad en que lo
hacen.
4°. La constatación que de los hechos se hubiere verificado.
5°. La firma de los concurrentes, si pudieren y supieren.

CÁMARA TERCERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO: SAN SALVADOR, en Sentencia con Referencia 64-CSM-13, de fecha
diez de julio de dos mil trece.

“…G) … el contenido del acta de reconocimiento judicial, es la apreciación subjetiva


del juez de datos o circunstancias de relevancia para el pleito, de modo que lo que
recogerá son, precisamente las apreciaciones del juez, que es el único que puede
percibir las exterioridades del lugar, objeto o persona a reconocer, pues es este el
objeto y la naturaleza de este medio de prueba…”

SECCIÓN SEXTA
MEDIOS DE REPRODUCCIÓN DEL SONIDO, VOZ O DE LA IMAGEN Y
ALMACENAMIENTO DE INFORMACIÓN

Medios de reproducción de imágenes o palabras

Art. 396.- Los medios de reproducción del sonido, la voz, los datos o la imagen podrán ser
propuestos como medios de prueba.

SALA DE LO CIVIL, Casación Referencia: 289-CAL-2014 de fecha veinte de


abril de dos mil dieciséis.

“En la sentencia del 29-IV-2003, casación 503 Ca. 1ᵃ Lab., este Tribunal manifestó
que la regla de valoración de prueba establecida en el Código de Trabajo, relativa
a la prueba instrumental, no es absoluta, en tanto que, no todo instrumento por
el sólo hecho de ser auténtico, público o privado, hará plena prueba en los casos

241
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

donde sea introducido como prueba; ya que, además de esa calidad, éstos deben
reunir otras características propias de la prueba, como es la pertinencia, idoneidad
y conducencia, las que deberán ser consideradas por el aplicador de justicia al
momento de ser valorados en juicio.

Posterior al análisis de la sentencia de la Cámara Primera de los Laboral, esta Sala,


comparte el argumento del Ad quem, en cuanto a que los mencionados documentos
–extracción de pantalla del sistema “barbarita”-, son producto de un medio de
almacenamiento informático, situación que nos lleva a concluir que dicho medio
probatorio no es el idóneo ni pertinente para establecer las faltas que se le imputaron
a la trabajadora demandante, ya que no hay certeza de su contenido y por el simple
hecho de constar su firma al pie de cada captura de pantalla, no significa que ella
acepte las faltas cometidas que se le imputan, pues de aceptarlo sería una confesión
provocada; y conforme a la ley, tal acto deviene ilegal, pues existe el principio que
nadie está obligado a auto incriminarse, situación que dejaría un mal precedente
si la documentación presentada, se estableciera como prueba idónea; por lo que a
criterio de la Sala, la Cámara Primera de lo Laboral, no cometió el error de derecho
en la valoración de la prueba, pues su razonamiento lo hizo conforme a lo que
establece el Art. 402 del Código de Trabajo por lo que resulta procedente declarar
no ha lugar a casar la sentencia por este sub- motivo.”

CÁMARA SEGUNDA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO: Apelación Referencia: 25-3CM-14-A de fecha cuatro de junio de dos
mil catorce.

“La admisión o rechazo de los medios probatorios es un trámite que se realiza en la


audiencia preparatoria, ya que es en dicha etapa que se discute sobre la pertinencia,
utilidad y licitud de la prueba que pretenden utilizar las partes, lo cual ocurrió en
el caso de autos; sin embargo, la admisión de un medio probatorio no implica per
se que el mismo determine el resultado del juicio, ya que se requiere un análisis de
utilidad, pertinencia e idoneidad de este y en caso de existir otros su coherencia
con los mismos. El referido análisis, se realiza al momento de pronunciar Sentencia,
asimismo, existe la posibilidad que la contraparte presente prueba para rebatir los
demás medios probatorios o que los aportados no sean suficientes para estimar la
pretensión.

El Art. 396, y siguientes CPCM establecen que los medios de almacenamiento de


información pueden ser aportados como medios de prueba y que serán llevados
al tribunal si la contraparte lo solicita, sin embargo, en el caso de autos, al haber
sido incorporado con la demanda el disco compacto que contenía el petitorio
que representa ASAP, EGC., la demandada debió alegar su inconformidad en el
momento procesal oportuno.Por su parte, el Art. 400 CPCM, establecen que solo
será necesaria la presencia de un perito cuando la reproducción, grabación o
duplicación, del medio requiriese de un conocimiento especializado. No obstante
dicha disposición no es aplicable al caso que nos ocupa, ya que estamos ante la
reproducción de un disco compacto, que contiene un archivo en formato EXCEL
(protegido para evitar su modificación), por lo tanto, únicamente tiene que ser
introducido en la computadora y casi automáticamente comienza la reproducción

242
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

.Aunado a lo anterior, si la parte demandada consideraba que era necesaria la


participación de un técnico en la materia para manejar el equipo, debió solicitarlo a
la Juez A Quo, en la audiencia preparatoria o al menos mostrar su disconformidad
con la forma en que dicho medio se pretendía aportar, motivos por los cuales, a
juicio de las suscritas, no se han violentados los Arts. 396 y 397 CPCM.”

Medios de almacenamiento de información

Art. 397.- Los recursos de almacenamiento de datos o de información podrán ser propuestos
como medio de prueba.

Para este fin, se aportarán las chitas, discos u otros medios en los que esté contenido el
material probatorio; cuando la otra parte lo pidiera, se llevarán a la sede judicial los soportes en
que se encuentren almacenados los datos o la información.

Si el traslado no fuere posible, el juez acudirá al lugar en el que la información se encuentre,


previa cita de partes.

SALA DE LO CONSTITUCIONAL, Amparo, Referencia 356-2012 de fecha


diecisiete de enero de dos mil catorce.

“Ahora bien, no obstante que el derecho a la prueba es un derecho de naturaleza


procesal con rango constitucional, ello no significa que deba valorarse cualquier
medio probatorio presentado por las partes, incluso aquellos que resulten
impertinentes o irrelevantes con relación al objeto del proceso y del debate. Por
el contrario, los únicos medios de prueba que deben ser valorados por el juzgador
son aquellos que tienen conexión con los hechos alegados en la demanda y resultan
idóneos y no superfluos para comprobar los alegatos de los intervinientes.

Las capturas en pantalla de la página de internet “Gobierno Transparente”y


la publicación “Primer monitoreo al cumplimiento de la Ley de Acceso a la
Información Pública y Estudio de Casos”, contenidos en el disco CD-RW, se
encuentran también incorporados en este proceso mediante prueba documental, por
lo que es innecesario valorar separadamente dicho medio de almacenamiento de
información en el presente caso.

Los documentos públicos, según el Art. 331 del Código Procesal Civil y Mercantil
(C.Pr.C.M.), de aplicación supletoria al proceso de amparo, son aquellos expedidos
por un notario, una autoridad o un funcionario, en el ejercicio de su cargo, y
que, cuando se aportan en original o testimonio y no se ha probado su falsedad,
constituyen prueba fehaciente de los hechos o actos que documentan, de la fecha, de
los intervinientes y del fedatario o funcionario que los expide.

Los oficios e informes suscritos por los Ministros de la Defensa Nacional, de


Educación ad honorem, de Agricultura y Ganadería y de Justicia y Seguridad
Pública, el Oficial de Información ad honorem del Ministerio de Gobernación y el
Director de Transparencia y Oficial de Información del Ministerio de Educación, así
como la certificación firmada por el Secretario de Asuntos Legislativos y Jurídicos

243
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

de la Presidencia de la República, son documentos públicos, ya que fueron emitidos


por las referidas autoridades en cumplimiento de las funciones que legalmente les
han sido conferidas y establecen de manera fehaciente los hechos, actos o el estado
de las cosas que consignan.

Por otra parte, el Art. 332 del C.Pr.C.M. reconoce como documentos privados a
aquellos cuya autoría es atribuida a los particulares y a aquellos que no cumplen las
formalidades legales de los instrumentos públicos. Dichos documentos hacen plena
prueba de su contenido y otorgantes si no ha sido impugnada su autenticidad o esta
ha quedado demostrada (Art. 341 Inc. 2° del C.Pr.C.M.).

Las impresiones de las capturas en pantalla de la página de internet “Gobierno


Transparente”y la publicación “Primer monitoreo al cumplimiento de la Ley de
Acceso a la Información Pública y Estudio de Casos”constituyen instrumentos
privados, ya que en ellos se relaciona que fueron elaborados por el ISD. La
autenticidad de tales instrumentos no ha sido impugnada por los demás intervinientes
en este proceso, por lo que constituyen prueba de los hechos que consignan.

Sobre las copias simples de documentos, aunque el Código Procesal Civil y


Mercantil no se refiere expresamente a su valor probatorio, en tanto que medios no
previstos en la ley, serán admisibles cuando respeten la moral y la libertad personal
de las partes y de terceros, debiendo aplicárseles las disposiciones relativas a los
medios reglados. Así, dada su similitud con las fotografías, deben utilizarse las
reglas referidas a la prueba documental (Arts. 330 Inc. 2° y 343 del C.Pr.C.M.).

Consecuentemente, mediante las copias de la documentación relacionada con


el trámite efectuado por las Oficinas de Información y Respuesta del MAG y del
Ministerio de Justicia y Seguridad Pública, arriba relacionadas se ha acreditado
la existencia de los documentos originales que en ellas se reproducen, en vista de
que no ha sido alegada o acreditada la falsedad de ninguna de aquellas o de sus
originales.”

Proposición

Art. 398.- La proposición como prueba de los medios de reproducción del sonido o de la
imagen, así como los soportes magnéticos o informáticos donde se almacena información, deberá
hacerse según lo prescrito en este código. El proponente indicará el lugar donde el material se
encuentra para que el juez lo requiera o se persone en dicho lugar.

CÁMARA SEGUNDA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, SAN SALVADOR, Apelación, Referencia: 25-3CM-14-A de fecha
cuatro de junio de dos mil catorce.

“El Art. 396, y siguientes CPCM establecen que los medios de almacenamiento de
información pueden ser aportados como medios de prueba y que serán llevados
al tribunal si la contraparte lo solicita, sin embargo, en el caso de autos, al haber
sido incorporados con la demanda el disco compacto que contenía el repertorio que
representa ASP, EGC., la demandada debió alegar su inconformidad en el momento
procesal oportuno.

244
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

Por su parte, el Art. 400 CPCM, establece que solo será necesaria la presencia de
un perito cuando la reproducción, grabación o duplicación, del medio requiriesen
de un conocimiento especializado. No obstante dicha disposición no es aplicable
al caso que nos ocupa, ya que estamos ante la reproducción de un disco compacto,
que contiene un archivo en formato EXCEL (protegido para evitar su modificación),
por lo tanto, únicamente tiene que ser introducido en la computadora y casi
automáticamente comienza la reproducción.

Aunado a lo anterior, si la parte demandada consideraba que era necesaria la


participación de un técnico en la materia para manejar el equipo, debió solicitarlo a
la Juez A Quo, en la audiencia preparatoria o al menos mostrar su disconformidad
con la forma en que dicho medio se pretendía aportar, motivos por los cuales, a
juicio de las suscritas, no se han violentados los Arts. 396 y 397 CPCM.

Respecto a lo manifestado por los recurrentes sobre la valoración errónea de la


nulidad existente en las actas notariales presentadas por la parte demandante,
esta cámara hace las siguientes consideraciones: El Art. 52 de la ley de notariado,
faculta al notario, para levantar actas de los hechos que presencie o ejecute, ya sea
por disposición de la ley o a solicitud de algún interesado, estas actas solo se podrán
levantar sobre los hechos que no puedan ser calificados como contratos.

Las suscritas aclaran que la fe pública notarial consiste en la potestad de asegura


la verdad de los hechos y actos jurídicos que consten a quien ejerza y que en virtud
de sus aseveraciones serán tenidos por autenticados mientras no se demuestre su
falsedad, pero dicha fe no es autónoma sino que aquellos documentos a los cuales
se pretenda investir con este tipo de fe pública, deben reunir los requisitos que el
legislador ha establecido.

En ese sentido, el notario es un delegado del estado, que ejerce jurisdicción


pública respecto de los hechos que, en las actuaciones notariales personalmente
ejecuta o comprueba, así como en lo tocante al hecho de haber sido otorgados en
la forma, lugar, día y hora que en el instrumento se expresa. En ese sentido, los
requisitos necesarios para que un acta notarial pueda surtir plenos efectos son los
mismos que el legislador exige para la Escritura Matriz, pero únicamente en lo
que fuere aplicable, de conformidad a los Arts. 50 y 51 de la Ley de Notariado. En
consecuencia, cuando en un acta notarial se incumplen los requisitos que establece
la ley, esta se volverá nula, pero solo cuando los defectos sean tales que vuelvan
dudosa su inteligencia, Art. 33 Ley de Notariado.

En el caso de autos, consta que la notario Kelly Elizabeth S.C., levanto actas
notariales, en las cuales solo dio fe, de lo que escucho en las instalaciones de
la sociedad demandada, es decir, únicamente hizo constar los nombres de las
canciones y de los artistas que escucho; y si bien es cierto, la notario autorizante
omitió consignar en las actas notariales el nombre de las personas que representa
a la sociedad demandante, estamos en presencia de actos que no constituyen
obligaciones, sino únicamente declaraciones o hechos que no puede calificarse
como contratos, ya que únicamente se dio fe de un hecho que presenció, es decir,
estamos ante instrumentos en los cuales no existe un vínculo que genere obligación y

245
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

solo tenían por finalidad establecer hechos que convenían a la demandante recordar.
Respecto a que la notario autorizante no manifestó cual es la fuente de conocimiento
para poder identificar temas musicales, con nombres de autor, las suscritas le
aclaran a la parte apelante, que no se necesita un conocimiento especializado
o técnico, para identificar temas musicales, ya que por ser estos hechos notorios,
de dominio público y difusión masiva, para conocerse no requieren a un técnico
especializado. Si la parte demandad consideraba que la notario autorizante, no
tenía el conocimiento suficiente para poder determinar el nombre de las canciones y
artistas que escuchó, debió desvirtuar a través de los medios de prueba pertinentes y
en el momento procesal oportuno, dicha afirmación.

Por los motivos expuestos no es posible declarar la nulidad de las actas notariales
presentadas por la parte actora, sin embargo, aun cuando la parte demandada
tuviere razón, respecto de los defectos que adolecen dichas actas, estas se volverían
documentos privados, pero al no haber sido redargüido de falso su contenido, de
conformidad a los Arts. 334 y 341 CPCM debe dárseles el valor probatorio que les
corresponde.”

CÁMARA TERCERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO: SAN SALVADOR, en Sentencia con Referencia 118-CQCM-12, de
fecha veinticuatro de agosto de dos mil doce.

“…i) …se pretendió conferir valor probatorio a correos electrónicos, no obstante


que el CPCM establece la forma en que deben introducirse al proceso las
pruebas que se constituyen bajo el sistema de almacenamiento de datos, por lo
que pretender incorporarlos como documentos privados es contrario a lo que
expresamente contempla la ley, siendo responsable de las violaciones a las garantías
constitucionales en el momento que valoró prueba que no debió filtrarse en sede
procesal. ii) Los soportes físicos de grabaciones de imágenes o sonidos y los
llamados informáticos, configuran un verdadero medio de prueba, es decir, una
actividad a través de la cual se aportará esa fuente al proceso y así el Art. 398
CPCM ESTABLECE: ”La proposición como prueba de los medios de reproducción
del sonido o de la imagen, así como los soportes magnéticos o informáticos donde
se almacena información, deberá hacerse según lo prescrito en este código. El
proponente indicará el lugar donde el material se encuentra para que el juez lo
requiera o se persone en dicho lugar”, y el Art. 325 CPCM señala la forma en que
se hará llegar este tipo de prueba al proceso a fin de que la misma tenga eficacia…”

Necesidad de reproducción en audiencia

Art. 399.- La parte que pretendiere utilizar este medio de prueba deberá remitir al tribunal
y a la parte contraria copia de los materiales cuya utilización solicita, salvo que ello resultare
excesivamente gravoso o no se encontrare a su disposición. En este caso, el juez ordenará su
exhibición y aportación al proceso.

Los medios de reproducción del sonido o de la imagen y el almacenamiento de información


deberán ser expuestos en audiencia, si fuere necesario.

246
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

Para este efecto, la parte deberá poner a disposición el soporte técnico donde conste y el
medio que permita evidenciar su contenido. Si no fuere posible el traslado del instrumento donde
la información se encuentre almacenada, el juez y las partes se trasladarán al lugar respectivo.

CÁMARA SEGUNDA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO: SAN SALVADOR, en Sentencia con Referencia 17-3CM-12-A, de
fecha veinticuatro de abril de dos mil doce.

“…señala la obligación de la parte de poner a disposición del juez, no solo el soporte


técnico sino también el medio que permita evidenciar su contenido, en el caso de
autos, la parte demandada, no solicitó peritaje ni la navegación por internet por
parte del juez, no obstante, presentó junto con la contestación de la demanda prueba
documental en donde aparecen impreso los anuncios hechos por internet, páginas que
se encuentran en la USB presentada; si bien es cierto dicha prueba, son instrumentos
privados los cuales de conformidad con el Art. 341 inciso 2° CPCM, hacen prueba
plena de su contenido y otorgantes, si no ha sido impugnada en su autenticidad o esta
ha quedado demostrada, esto no equivale en absoluto a prueba tasada…”

Necesidad de auxilio pericial

Art. 400.- Si para poner en práctica la grabación o duplicación se requiriese, además, de


conocimiento especializado, el juez podrá designar un perito para ese solo efecto. Se aplicará lo
mismo en caso de información almacenada.

Las partes, de considerarlo necesario, podrán solicitar al juez la designación de un perito, a


costa de quien lo propone.

En cualquiera de los dos casos, el dictamen deberá rendirse en la misma audiencia y de viva
voz; y tanto el juez como las partes podrán hacer las preguntas que estimen oportunas, cuando
algún punto no hubiera quedado claro.

Medios de reproducción deteriorados

Art. 401.- Los medios de reproducción de la imagen o del sonido, así como aquellos en los
que estuviera almacenada alguna información, que se hallaren total o parcialmente destruidos no
harán fe respecto del hecho que se pretende probar.

Pero cuando su contenido sea inteligible y su sentido no se vea afectado por el deterioro, no se
aplicará lo que establece el inciso anterior.

CAPÍTULO QUINTO
AUDIENCIA PROBATORIA

Audiencia probatoria

Art. 402.- La audiencia probatoria se iniciará en el día y hora señalados, y tendrá por objeto la
realización, en forma oral y pública, de los medios de prueba que hubieran sido admitidos.

Se comenzará con la lectura de aquella parte de la resolución dictada en la audiencia


preparatoria en la que quedaron fijados el objeto del proceso, los hechos controvertidos, y la
prueba admitida.

247
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

CÁMARA DE LA TERCERA SECCIÓN DEL CENTRO: SAN VICENTE, en


Sentencia con Referencia C-29-PC-2014-CPCM, de fecha veintidós de julio de dos
mil catorce.

“…establece que la Audiencia Probatoria tendrá por objeto la realización de forma


oral y pública de los medios que hubieren sido admitidos y una vez concluida dicha
Audiencia Probatoria, así como realizados los alegatos finales de las partes el Juez
procederá a valorar todos los elementos probatorios desfilados en juicio, tal como
lo establece el Art. 416 CPCM y con base en todo ello pronunciar la sentencia que
deba resolver todas las cuestiones que fueron planteadas en el proceso, tal como lo
ordena el Art. 417 CPCM…”

Producción de la prueba

Art. 403.- Las pruebas se producirán en audiencia, salvo las excepciones que este código
prevé, en cuyo caso se adoptarán las medidas necesarias para su adecuada documentación, a fin de
asegurar los efectos oportunos. Y deberán practicarse concentradamente, salvo que sea imposible
por la naturaleza del medio probatorio.

Prueba separada de la audiencia probatoria

Art. 404.- Cuando la prueba deba realizarse separadamente del acto de la audiencia probatoria,
el tribunal anunciará a las partes, con la debida antelación, el día y hora en que procederá a tal
diligencia. Si, además, tuviera que practicarse fuera de la sede del tribunal, se indicará el lugar. Las
partes tendrán derecho a intervenir en la producción de estas pruebas.

Si la prueba no se pudiera realizar en el acto de la audiencia, se procurará, de ser posible,


producirla antes de que se celebre ésta.

Comparecencia de las partes

Art. 405.- Las partes deberán comparecer a la audiencia. Cuando dejaran de concurrir ambas
partes, el juez pondrá fin al proceso sin más trámite.

Si asistiere una sola de ellas, se procederá a la celebración de ella; y si se hubiere propuesto su


declaración, se tendrán por ciertos los hechos a que se refiriera el interrogatorio.

CÁMARA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DE OCCIDENTE:


SANTA ANA, en Sentencia con Referencia APEL-116-14-4, de fecha doce de
enero de dos mil quince:

“…regula lo concerniente a la comparecencia de las partes a la audiencia


probatoria; en efecto, tal disposición expresamente determina que si asistiere una
sola de las partes a la audiencia, ( lo que efectivamente así sucedió ) se procederá
a la celebración de ella, y si se hubiere propuesto su declaración, se tendrán por
ciertos los hechos a que se refiere el interrogatorio. En principio, ambas partes están
obligadas a comparecer a la audiencia probatoria, y si éstas dejan de concurrir,
de conformidad a la disposición citada, se pondrá fin al proceso sin más trámite,
siempre que la ausencia no esté justificada. Para el caso de que solo una de ellas
compareciera, debe de celebrarse la audiencia, pero la parte que no asistió, perderá

248
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

la oportunidad de realizar los actos previstos durante su curso, que ya no podrán


reiterarse, es decir precluyen, como el caso del interrogatorio de parte, testigos y
peritos, interposición de objeciones a las preguntas de la parte contraria o a las
respuestas de los testigos, impugnación de resoluciones dictadas en audiencia,
alegatos finales, etc. Respecto de testigos cuya declaración hubiere sido propuesta
por la parte ausente, no podrá realizarse el interrogatorio directo previsto en el Art.
366 CPCM., precisamente por la ausencia de la parte proponente que es quien debe
de conducir dicho interrogatorio, tal ausencia no podrá ser suplida por el juez con
el efecto de realizar el interrogatorio directo, pues el juez solo está facultado para
realizar preguntas aclaratorias al testigo. En el caso de que se hubiera solicitado
el interrogatorio de parte, la ausencia injustificada de la parte, tiene el efecto
sancionatorio de que se tengan por aceptados los hechos personales atribuidos por
la contraparte (Código Procesal Civil y Mercantil comentado, Pág. 426)…”

Práctica de las pruebas

Art. 406.- Cada parte, y en primer lugar el demandante, puede presentar las pruebas que
hubiere propuesto, del modo que, a su juicio, convenga más a sus intereses. El juez accederá a ello
cuando no perjudique el desarrollo de la audiencia ni menoscabe el derecho de defensa de la parte
contraria.

Si no comparece un testigo o un perito, el Tribunal decidirá, previa solicitud de la parte


que lo hubiere propuesto, sobre la continuación o la suspensión de la audiencia. Si ordena la
suspensión, se le volverá a citar dentro del plazo de diez días, con advertencia de proceder contra
él, por desobediencia a mandato judicial si no comparece. Si el testigo no declara dentro del plazo
establecido, se rechazará su testimonio y se certificará lo conducente a la Fiscalía General de la
República. (2)

Objeciones. Procedencia

Art. 407.- Las partes podrán objetar la prueba que se pretenda introducir en las audiencias
con violación a lo establecido en este código. Las objeciones que se interpongan tienen que ser
oportunas y específicas. La parte que formule una objeción deberá fundamentarla. Si no se objeta
oportunamente en audiencia, se entenderá que se ha renunciado a ejercer este derecho.

El juez o tribunal fundamentará la admisión o el rechazo de la objeción interpuesta. Las partes


podrán interponer recurso de revocatoria a la decisión del juez o tribunal.

Objeciones a las preguntas formuladas durante los interrogatorios

Art. 408.- Una parte podrá interponer objeciones a las preguntas formuladas por la
contraria, durante los interrogatorios a las partes, testigos o peritos, cuando dichas preguntas sean
impertinentes, sugestivas, repetitivas, capciosas, compuestas, especulativas o ambiguas; cuando la
pregunta formulada asume hechos sobre los cuales no se ha presentado prueba con anterioridad;
todo ello sin perjuicio de que puedan ser interpuestas otras objeciones.

Objeciones a las respuestas de los testigos o peritos

Art. 409.- Las partes podrán oponer reparos ante las respuestas de los testigos o peritos cuando
consistan en una prueba de Referencia, cuando se emita opinión sin haber sido cualificado como

249
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

perito o experto el que la vierte, o cuando el testigo conteste más allá de lo que se le ha preguntado.
Lo mismo se observará cuando se interrogue a la parte.

Objeciones a la conducta de las partes

Art. 410.- Cualquiera de las partes podrá interponer reparos ante el Juez o Tribunal sobre la
conducta de la parte contraria, si ésta no cita correctamente lo que hubiera declarado un testigo
durante el interrogatorio; si se comporta de manera irrespetuosa con el testigo o perito, o no
permite que éstos contesten a la pregunta cuando su respuesta está acorde con aquella; o una parte
comente las respuestas del testigo y la contraria objete sin fundamento. Las partes podrán formular
otros reparos que consideraren oportunos. (2)

CAPÍTULO SEXTO
ALEGATOS FINALES Y Sentencia

Alegatos finales
Art. 411.- Concluida la práctica de la prueba y antes de poner fin a la audiencia probatoria, se
concederá turno de palabra a las partes, por su orden, comenzando por la demandante para efectuar
sus alegatos finales.
El juez o tribunal fijará el tiempo prudencial para efectuar los alegatos finales, conforme la
complejidad del caso, sin que este pueda ser menor de una hora, ni mayor a tres horas, para cada
una de las partes, bajo pena de nulidad. No obstante, cada parte podrá utilizar un periodo menor
del que le sea asignado, si así lo estimare conveniente. Las decisiones judiciales sobre el tiempo de
los alegatos admitirán recurso de revocatoria en audiencia. (4)
Contenido y forma de los alegatos finales
Art. 412.- Los alegatos se expondrán en forma oral, para fijar, concretar y ajustar definitivamente
tanto los hechos alegados como la pretensión, a la vista del resultado de la práctica de las pruebas. No
se admitirán en ningún caso alegatos que supongan cambio de la pretensión, tal como quedó fijada en
la audiencia preparatoria; pero sí las precisiones, modificaciones o rectificaciones no esenciales, que se
razonen como derivadas lógicamente del resultado de la audiencia probatoria.
Las partes, al exponer sus alegatos, relatarán en forma clara y ordenada los hechos que
consideran probados, con indicación de las pruebas que los acreditan. También podrán argumentar
sobre la falta o la insuficiencia de prueba respecto de los hechos aducidos por la parte contraria; así
como sobre lo que a su criterio resulten inciertos.
Las partes podrán referirse asimismo a los fundamentos de derecho que sean aplicables de
conformidad con el resultado probatorio de la audiencia.
El juez o tribunal podrá solicitar las aclaraciones que entienda pertinentes, durante el curso de
los alegatos o a su finalización.
El juez o tribunal podrá solicitar a las partes que le informen sobre la eventual concurrencia de
otros títulos jurídicos, sin que se altere la causa de pedir.
Salvo cuando este código disponga otra cosa en casos particulares, si la petición es de condena
al pago de una cantidad de dinero, se fijarán con precisión los montos líquidos que sean finalmente
reclamables.

250
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

Terminados los alegatos finales, el juez levantará la sesión y dará por concluida la audiencia
probatoria. Desde ese momento comenzará a correr el plazo para dictar Sentencia.
Objeciones en los alegatos finales
Art. 413.- La parte podrá formular objeciones a su contraria, si ésta intentare introducir
elementos de convicción que no deriven de los medios de prueba practicados en audiencia
probatoria.
Presunciones legales
Art. 414.- Cuando la ley establezca una presunción, la persona a la que favorezca quedará
dispensada de la prueba del hecho presunto al estar probados los hechos en que se base.
Si la presunción legal admite prueba en contrario, la actividad probatoria se podrá dirigir tanto
a demostrar que los indicios probados inducen a un hecho distinto o a ninguno, como a efectuar la
contraprueba de dichos indicios para establecer su inexistencia.
En los casos en los que la presunción legal admita prueba en contrario, en la sentencia se
deberá justificar y razonar los argumentos que han llevado al tribunal a la concreta decisión sobre
si el hecho presunto es la consecuencia de los indicios.
Presunciones judiciales
Art. 415.- El juez o tribunal puede presumir la existencia de un hecho a partir de los indicios
probados durante la audiencia probatoria. Esta presunción constituirá argumento de prueba sólo
si se funda en hechos probados, o cuando tales indicios, por su precisión, gravedad, número y
concordancia fueran capaces de producir la convicción judicial, de conformidad con las reglas de
la sana crítica.
Cuando un hecho que se declara probado en la sentencia se sustente en presunción judicial,
será obligatorio que el juez establezca el enlace racional y argumentado que le hubiera llevado a
establecerlo, a partir de los indicios probados.
Las presunciones judiciales siempre admitirán prueba en contrario, dirigida a demostrar que
los indicios probados conducen a distinta o a ninguna. Y siempre podrá practicarse prueba dirigida
a establecer contraprueba de los indicios en los que se pudiera sustentar una presunción judicial.
SALA DE LO CIVIL DE LA CORTE SUPREMA DE JUSTICIA: SAN
SALVADOR, en Sentencia con Referencia 349-CAM-2013, de fecha doce de junio
de dos mil quince.
“….establece la facultad que la ley le otorga al juzgador al amparo de la sana crítica
para tener por establecidos determinados hechos a partir de indicios probados
durante la audiencia probatoria…”
CÁMARA SEGUNDA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL
CENTRO: SAN SALVADOR, en Sentencia con Referencia 6-4CM-14-A, de
fecha diecisiete de febrero de dos mil catorce.
“…Las presunciones son legales o judiciales, la segunda de ellas es la que permite
inferir de los hechos conocidos los hechos desconocidos, mediante deducciones
lógicas. La presunción, como explica Couture, se apoya en el suceder lógico de

251
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

ciertos hechos en relación con otros, explicando que dichas presunciones suponen
el concurso de tres circunstancias: un hecho conocido, un hecho desconocido y una
relación de causalidad. Quedando fuera del campo del objeto de la prueba los dos
últimos elementos…”
CÁMARA SEGUNDA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL
CENTRO: SAN SALVADOR, en Sentencia con Referencia 102-4CM-13-A, de
fecha cuatro de febrero de dos mil catorce.
“…Una de las diferentes acepciones del término “prueba”, es la referida a la
actividad desarrollada en el proceso que tiene por objeto llevar al juzgador a
un estado de convicción sobre la veracidad o falsedad de las alegaciones de las
partes involucradas en el mismo, lo cual se consigue a través de la producción de
diversos medios probatorios encaminados a tal fin. Los hechos sobre los que recae
la actividad probatoria son en definitiva los hechos aportados por las partes y que
-en esencia- constituyen la causa de pedir y el objeto del debate, es decir, los hechos
constitutivos alegados por el demandante y los impeditivos, extintivos y excluyentes
alegados por el demandado…”
CÁMARA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DE OCCIDENTE:
SANTA ANA, en Sentencia con Referencia APEL-32-4-2013, de fecha veinte de
marzo de dos mil trece:
“…esta Cámara comparte en cierta parte, el criterio en que se fundamentó el Juez
Aquo para declarar la improponibilidad de la demanda, pues aplicando las reglas
de la sana critica, que incluye ante todo el uso de la lógica, y tomando en cuenta
el promedio de vida de los hombres en el país, es poco probable que a la fecha
dicho demandado sobreviva; entonces, tenemos que, tal aseveración constituye una
presunción judicial, pues es deducida por el Juez que conoce de la causa con base
a ciertos hechos conocidos y que se tienen por probados que constan en el mismo
proceso, la cual de conformidad al Art. 415 inciso 3° CPCM., admite prueba en
contrario…”
Valoración de la prueba

Art. 416.- El juez o tribunal deberá valorar la prueba en su conjunto conforme a las reglas de
la sana crítica.

No obstante lo anterior, en la prueba documental se estará a lo dispuesto sobre el valor tasado.

El juez o tribunal deberá atribuir un valor o significado a cada prueba en particular,


determinando si conduce o no a establecer la existencia de un hecho y el modo en que se
produjo. Cuando más de una prueba hubiera sido presentada para establecer la existencia o el
modo de un mismo hecho, dichas pruebas deberán valorarse en común, con especial motivación y
razonamiento.

SALA DE LO CIVIL Casación Referencia 231-CAC-2012 de diecisiete de julio de


dos mil trece:

“Al estudiar la sentencia impugnada, la Sala constató que la Cámara Sentenciadora


no ha valorado la prueba en su conjunto conforme a las reglas de la sana crítica;

252
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

pues aunque haya examinado cada una de las pruebas vertidas en el proceso, lo
cierto es, que no las relaciono en su conjunto, y esa es precisamente la infracción
denunciada, en consecuencia el error in judicando invocado se ha configurado y así
habrá de pronunciarlo.”

CÁMARA PRIMERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, SAN SALVADOR, Apelación Referencia: 85-38CM2-2014 de fecha
catorce de julio de dos mil catorce.

“Según lo prescrito en el Art. 312 CPCM., las partes tienen derecho a probar, en
igualdad de condiciones, las afirmaciones que hubieran dado a conocer sobre los
hechos controvertidos que son fundamento de la pretensión o de la oposición a ésta;
a que el juez tenga en cuenta, en la sentencia o decisión, las pruebas producidas;
y a utilizar los medios que el Código Procesal Civil y Mercantil prevé, así como
aquellos que, dada la naturaleza del debate, posibiliten comprobar los hechos
alegados; y el inc. 1º del Art. 330 CPCM., determina que la prueba podrá producirse
por cualquiera de los medios probatorios regulados en dicho cuerpo legal.

En cuanto a la valoración de la prueba, el Art. 416 CPCM., determina que se debe


valorar en su conjunto conforme a las reglas de la sana crítica, no obstante en
la prueba documental se estará a lo dispuesto sobre el valor tasado, debiéndose
atribuir un valor o significado a cada prueba en particular, determinando si conduce
o no a establecer la existencia de un hecho y el modo en que se produjo, y cuando
más de una prueba hubiera sido presentada para establecer la existencia o el modo
de un mismo hecho, estas deberán valorarse en común, con especial motivación y
razonamiento.

La sana crítica, es el conjunto de juicios formados sobre la observación de lo que


ocurre comúnmente y puede formularse en abstracto, siendo la lógica apreciación
de ciertas conclusiones empíricas de que todo ser humano se sirve, y que parten de
las máximas de la experiencia y los principios lógicos.

En otras palabras, es el arte de juzgar atendiendo a la bondad y verdad de los


hechos, sin vicios ni error; mediante la lógica, la dialéctica, la experiencia, la
equidad, las ciencias, artes afines y auxiliares y la moral, para alcanzar y establecer,
con expresión motivada, la certeza sobre la prueba que se produce en el proceso.

Por ende, las reglas de la sana crítica son pautas de correcto entendimiento humano,
contingentes y variables con relación a la experiencia del tiempo y lugar; pero
estables y permanentes en cuanto a los principios lógicos en que debe apoyarse la
Sentencia.”

CÁMARA TERCERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, SAN SALVADOR, Apelación, Referencia: 50-DM-14, de fecha trece de
marzo de dos mil catorce.

“En relación a este tipo de prueba tenemos que existe una clasificación bipartita de
los mismos, según nuestro Código Procesal Civil y Mercantil, se dividen en públicos
y privados, según sea el carácter de las personas que le confieren certeza, en el

253
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

caso de autos la prueba instrumental presentada tanto por el demandante como


por el trabajador, consiste en documentos públicos y privados, por lo que se torna
pertinente analizar los mismos; y al respecto, tenemos que los primeros, son aquéllos
expedidos por notario y por autoridad o funcionario público en el ejercicio de sus
funciones, Art. 331 CPCM; y los segundos, aquellos realizados por los particulares,
Art. 332 CPCM, los que pueden hacerse valer como prueba en el proceso y cuya
valoración debe realizarse en su conjunto con otros medios de prueba, conforme a
las reglas de la sana crítica, de conformidad con el inciso 1° del Art. 416 CPCM,
no obstante lo dispuesto en el inciso 2° de la misma disposición, dada la naturaleza
del presente proceso, ya que para establecer una causal de destitución o despido es
necesario hacer la valoración conforme a las reglas de la sana crítica tal como lo
estipula la Ley Especial.”

CÁMARA PRIMERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, SAN SALVADOR, Apelación N°47-18CM2-2014 de fecha veinte de
junio de dos mil catorce.

“El Art. 416 del CPCM., dispone que el juez o tribunal deberá valorar la prueba
en su conjunto conforme a las reglas de la sana crítica, atribuyéndole un valor o
significado a cada prueba en particular, determinando si conduce o no a establecer
la existencia de un suceso y el modo en que se produjo; y cuando más de una prueba
hubiera sido presentada para establecer la existencia o el modo de un mismo hecho,
deberán valorarse en común, con especial motivación y razonamiento.

La sana crítica como método de valoración de la prueba, está conformada por


las reglas del correcto entendimiento humano. En ellas interfieren la lógica con la
experiencia del juez. Unas y otras contribuyen de igual manera a que el magistrado
pueda analizar la prueba con arreglo a la sana razón y a un conocimiento
experimental de los casos.

Dicho operador jurídico que debe decidir con arreglo a tal sistema de valoración de
prueba, no es libre de razonar a su voluntad, discrecionalmente o arbitrariamente.
Esta manera de actuar no sería este método de ponderación probatoria, sino libre
convicción; ya que la primera es la unión de la lógica y la experiencia sin excesivas
abstracciones de orden intelectual, pero también sin olvidar esos preceptos que los
filósofos llaman de higiene mental, tendientes a asegurar el más certero y eficaz
razonamiento.

Se exige por tanto, al funcionario judicial motivar el fallo de acuerdo a los hechos
probados en el juicio, lo que se traduce en la exigencia de explicitar los argumentos
que llevan al juzgador a concluir en un determinado sentido en relación a los hechos
alegados.”

CÁMARA DE LA CUARTA SECCIÓN DEL CENTRO: SANTA TECLA, en


Sentencia con Referencia 96-EM-15, de fecha tres de noviembre de dos mil quince.

“…el sistema de valoración de la prueba llamado Sana Crítica reclama que la


apreciación probatoria considere la prueba en su conjunto, cuidando celosamente
de no sobrepasarse en sus conclusiones; ya que los límites le vienen impuestos por

254
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

la ciencia y la experiencia. La valoración de la prueba, según las reglas de la Sana


Crítica, pide, sin duda alguna, la coherencia del razonamiento judicial, libre de
contradicciones esenciales y derivadas sus afirmaciones conclusivas de las razones
suficientes contenidas en la misma prueba. Con relación a las reglas de valoración
de la prueba de la sana crítica, la doctrina sostiene lo siguiente: ““Frente a la
absoluta libertad del juzgador para apreciar y valorar las pruebas, y también frente
a la restricción valorativa de la prueba legal, surge el sistema intermedio y más
extendido de la sana crítica, que deja al juez formar libremente su convicción, pero
obligándole a establecer los fundamentos de la misma. En la libre convicción entra
en juego la conciencia en la apreciación de los hechos; en la sana crítica, el juicio
razonado. A este respecto expresa Couture que el juicio de valor en la sana crítica
ha de apoyarse en proposiciones lógicas, correctas y fundarse en observaciones
de experiencia confirmadas por la realidad””. (Manuel Osorio, Diccionario de
Ciencias Jurídicas, Políticas y Sociales, Editorial Heliasta, S.R.L., Buenos Aires,
Argentina, pág. 688)…”

SALA DE LO CIVIL DE LA CORTE SUPREMA DE JUSTICIA: SAN


SALVADOR, en Sentencia con Referencia 250-CAL-2012, de fecha dos de julio de
dos mil catorce.

“…en el sistema valorativo de la sana critica, la declaración de un solo testigo


puede llegar a ser prueba suficiente, aunque para ello es necesario que produzca
un convencimiento completo en el juez acerca de los hechos que relata, dando una
explicación concluyente, respecto de las circunstancias de tiempo, modo y lugar, por
las cuales llegó al conocimiento de los mismos; y aunque ello no signifique la regla
general, es imprescindible acoplar los hechos a cada caso concreto, en donde el juez
que resuelve debe justificar mediante un razonamiento fundado y un análisis integral
de los demás elementos probatorios, el por qué lo dicho por un solo testigo le merece
fe y es suficiente para resolver en determinado sentido, siempre de conformidad a
las reglas aludidas. De las líneas que preceden, hay que señalar que esta Sala en
sentencia con Ref. 96- C- 2005 del veintidós de diciembre de dos mil seis, argumentó
que el sistema de apreciación probatoria conforme la sana critica, consiste en aplicar
los principios lógicos, entre ellos, el de identidad, de tercero excluido, de razón
suficiente y de contradicción, así como las reglas de la experiencia, refiriéndose
generalmente al conocimiento y práctica que el juzgador haya tenido en cuestiones
de hecho y de derecho, o lo que es igual, su vivencia como hombre juzgador. Además
de ello, en este sistema de valoración, todos los indicios y probanzas, se incluyen en
un receptáculo para que tomando el caso en su conjunto, (por eso se llama sistema
circular); este ilustra suficientemente al juzgador, haciéndole saber o persuadiéndolo
de qué lado está la verdad…”

Sentencia

Art. 417.- A continuación de los alegatos finales, el juez o tribunal deberá dictar in voce el
fallo de la sentencia y una sucinta motivación de la misma, bajo pena de nulidad. Si la complejidad
del caso lo ameritare, el juez o tribunal podrá interrumpir la audiencia por un máximo de tres días
hábiles, citando nuevamente a las partes dentro de dicho plazo, para anunciar el respectivo fallo.
La sentencia que deba resolver todas las cuestiones planteadas en el proceso, se dictará dentro

255
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

de los quince días siguientes al pronunciamiento oral del fallo y será notificada a las partes en un
plazo que no excederá los cinco días desde que se dictó.

El incumplimiento de los plazos anteriormente establecidos hará incurrir al juez o tribunal en


una multa cuyo monto será de un salario mínimo, urbano, más alto vigente por cada día de retraso.

Cuando se pretenda la condena al pago de prestaciones o de intereses que se devengan


periódicamente, la sentencia podrá incluir pronunciamiento que obligue al pago de los que se
devenguen con posterioridad al momento en que se dicte, siempre que lo solicite el demandante en
la petición.

Excepcionalmente podrá pedirse la condena al pago de una cantidad sin especificar, y en este
caso el juez dictará la sentencia con declaración de que no se determinará la cantidad por vía de
ejecución forzosa sino mediante el correspondiente proceso declarativo.

CÁMARA TERCERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO: SAN SALVADOR, en Sentencia con Referencia 242-ECS-14, de fecha
quince de octubre de dos mil catorce.

“…e.- La incongruencia en la sentencia tiene tres aspectos a saber:

1) cuando el fallo otorga más de lo pedido (plus petita o ultra petita);

2) cuando el fallo concede algo distinto a lo pedido (extra petita) y 3) cuando deja
de resolver sobre lo pedido (citra o mínima petita), por tanto, nos referiremos al
primero de los aspectos que es el que nos interesa, -otorgar más de lo pedido-; en
el principio de congruencia hay que tener en cuenta que toda petición no es sólo
el resultado que el peticionario pretende obtener –lo que pide a la autoridad-, sino
también el fundamento jurídico en virtud del cual pide, que no es otra cosa que la
causa de pedir o causa petendi, por ello, la autoridad decisoria, así como no puede
rebasar la extensión de lo pedido, tampoco puede modificar la causa de pedir, pues
hacerlo significaría una alteración de la petición. Para decirlo ocupando expresiones
tradicionales, en la resolución estatal necesariamente debe existir relación entre la
causa petendi y la ratio decidendi. La incongruencia debe aparecer formalmente
entre la parte resolutiva de la sentencia y las pretensiones o excepciones….”

CÁMARA TERCERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO: SAN SALVADOR, en Sentencia con Referencia 247-ECS-14, de fecha
veintiuno de octubre de dos mil catorce:

“…d. Las Sentencias según su clasificación pueden ser: declarativas, constitutivas y


de condena, por lo que es necesario, por pureza académica, determinar la naturaleza
jurídica de esta Sentencia…”

CÁMARA TERCERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO: SAN SALVADOR, en Sentencia con Referencia 39-EM-12, de fecha
diez de abril de dos mil doce:

“…4. En primer lugar, hay que tener en cuenta que toda petición no es sólo el
resultado que el peticionario pretende obtener -lo que pide a la autoridad-, sino

256
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

también el fundamento jurídico en virtud del cual pide, que no es otra cosa que
la causa de pedir o causa petendi. Por ello, la autoridad decisoria, así como no
puede rebasar la extensión de lo pedido, tampoco puede modificar la causa de pedir,
pues hacerlo significaría una alteración de la petición a menos que exista una causa
legal o plausible para ello. Para decirlo ocupando expresiones tradicionales, en
la resolución estatal necesariamente debe existir relación entre la causa petendi
y la ratio decidendi. Pues en caso de no acceder a lo solicitado u otorgar menos
…el juzgador debe motivar su actuar, entendida ésta como aquella obligación
que tiene todo juzgador de cimentar sus resoluciones, a fin de suministrar a los
justiciables los datos, razonamientos y conclusiones ineludibles para que éstos
puedan conocer el por qué de las mismas, prestándoles así el examen por parte de
los órganos jurisdiccionales sumos. Es por ello, que la motivación de las Sentencias
es consustancial a los principios de seguridad jurídica, legalidad e interdicción de la
arbitrariedad que son propios del Estado de Derecho…”

TÍTULO TERCERO
EL PROCESO ABREVIADO

CAPÍTULO PRIMERO
DEMANDA

Demanda simplificada

Art. 418.- El proceso abreviado comenzará con demanda simplificada, formulada por escrito,
que deberá contener lo siguiente:
1°. La designación del juzgado ante quien se presente.
2°. La identificación del demandante, del demandado y de aquellos otros interesados que
deban ser llamados al proceso, así como sus domicilios para efecto de las notificaciones.
3°. Una enumeración suficiente de los hechos que justifiquen la razón de ser de la petición.
4°. La petición correspondiente.
5°. Fecha y firma.

De la demanda y documentos que la acompañen se presentarán tantas copias como


demandados y demás interesados en el proceso haya, más una.

CÁMARA TERCERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, Sentencia de Apelación Referencia 50-DM-2014 de fecha trece de marzo
de dos mil catorce.

“b.- En cuanto al otro extremo que el licenciado […] pretendía probar con la
declaración de parte, si bien, era su derecho intentar probarlo con dicho medio, éste
en la celebración de la audiencia especial y única programada, la cual sigue las
reglas del proceso abreviado de conformidad al Art. 418 y siguientes CPCM, debió
ratificar la prueba ofrecida en su contestación de demanda y revisado que ha sido
el contenido del acta de dicha audiencia, no consta que el referido abogado haya
hecho tal petición y que fuera imputable al juez no acceder al medio de prueba, sino
que se denota un total descuido o negligencia por parte del proponente, pues de
conformidad al Art. 423 CPCM, las partes han de concurrir a la audiencia con todos

257
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

los medios de prueba de que intenten valerse y en la etapa de proposición de prueba


deberán enlistar todos los medios que pretendan producir en la audiencia, por lo que
se desestiman estos motivos.”

CÁMARA TERCERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO: SAN SALVADOR, en resolución con Referencia 112-EMQCM-13, de
fecha once de junio de dos mil trece.

“…el ordinal segundo del referido Art. 418 CPCM que se identifique al demandado,
debiendo entenderse por identificar: “Dar los datos personales necesarios para
ser reconocido”, cumpliendo tal exigencia para dar trámite a la demanda sólo con
manifestar el nombre y datos generales de la demandada, y en caso de que ésta no
posea tal calidad, será ella quien en su oportunidad deberá alegarlo y probarlo con
la documentación respectiva…”

CÁMARA SEGUNDA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO: SAN SALVADOR, en Sentencia con Referencia 95-4CM-13-A, de
fecha dieciséis de diciembre de dos mil trece.

“…1.5 Uno de los requisitos del Art. 418 CPCM, es que en la demanda conste
los hechos que justifiquen la razón de ser de la petición, así como la petición
correspondiente, los cuales tienen que ser claros y precisos, a fin de que el
demandado pueda preparar su defensa…”

Proposición de prueba para practicar antes de la audiencia

Art. 419.- Si el demandante pretendiera proponer como prueba el reconocimiento judicial, y


éste deba realizarse fuera del tribunal, lo advertirá en la demanda, a efecto de que pueda verificarse
antes de la audiencia, oído el demandado sobre tal extremo.

Regla especial de acumulación

Art. 420.- En los procesos abreviados, el demandante no podrá efectuar la acumulación


objetiva de pretensiones, salvo en los supuestos siguientes:
1°. Cuando las pretensiones acumuladas estén basadas en unos mismos hechos, siempre que
deba seguirse en todo caso el proceso abreviado.
2°. Cuando se ejercite una pretensión de resarcimiento de daños y perjuicios vinculada a otra
pretensión que sea prejudicial de aquélla.

Será necesario que el tribunal que deba conocer de las pretensiones acumuladas sea competente
objetiva y funcionalmente para conocer de todas ellas y que la acumulación no esté prohibida por
la ley.

En lo demás, se estará a las normas de acumulación subjetiva de pretensiones y de acumulación


de autos reguladas en este código.

Admisión de la demanda simplificada

Art. 421.- El juez procederá a resolver por medio de auto sobre la admisión de la demanda
simplificada en el plazo de cinco días desde su presentación. Si constatara, tras el examen de la

258
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

misma, que se cumplen todos los presupuestos procesales y que no tiene defectos, dictará auto de
admisión.

Subsanación de defectos

Art. 422.- Si la demanda tuviera defectos subsanables, el juez advertirá a la parte sobre los
mismos, otorgándole el plazo de cinco días para que los subsane, con apercibimiento de que, si no
lo efectuase, la declarará inadmisible. Más, si los defectos de la demanda fueran insubsanables, el
juez dictará auto declarándola improponible.

CÁMARA DE LA TERCERA SECCIÓN DEL CENTRO: SAN VICENTE, en


Sentencia con Referencia C-28-PC-2014-CPCM, de fecha catorce de julio de dos
mil catorce.

“…1) La improponibilidad de la pretensión contenida en la demanda o solicitud se puede


entender como un despacho saneador de la misma, constituyendo una manifestación
contralora por el órgano jurisdiccional; con esta figura se pretende purificar el ulterior
juzgamiento de la pretensión, o, en su caso, si ésta ya se encuentra en conocimiento
del juzgador, el poder de rechazarla de manera sobrevenida en caso que se advierta
“un defecto absoluto en la facultad de juzgar”; inclusive, si la pretensión escapa del
ámbito jurisdiccional o se basa en un objeto que carece de control judicial, cabría el
rechazo por improponibilidad y es que tal inhibición se traduciría en que la demanda
o solicitud no constituye el medio idóneo para que el proceso continúe su marcha en
pos de la Sentencia; en concordancia con lo anterior, tenemos que la improponibilidad
está reservada para casos de defectos que, por su naturaleza, no admitan corrección o
subsanación, pues la pretensión no es judiciable, es decir, proponible al momento de su
presentación, ni nunca. De tal forma que el juzgador siempre debe buscar garantizar el
derecho a la protección jurisdiccional al realizar su función contralora, de tal manera
que resulte equilibrada entre la garantía aludida y evitar el dispendio innecesario de la
actividad de juzgar y es que el rechazo de una pretensión no puede formularse como la
primera opción de quien juzga. Nuestro Código Procesal Civil y Mercantil utiliza dos
mecanismos distintos para referirse a las modalidades de control de la demanda.
Una es la Improponibilidad que afecta a la pretensión deducida, a la que alude el
Art.277 CPCM y a la que se remite el Art. 422 CPCM para el proceso abreviado.
La otra modalidad es la inadmisibilidad, que atañe estrictamente a la demanda
como escrito de parte y que se regula en el Art. 278 CPCM y también en el Art.
422 CPCM para el proceso abreviado. De esta manera vienen a ordenarse en la
Ley los distintos motivos que pueden impedir la admisión a trámite de la demanda,
simplificando además la construcción jurisprudencial de la Corte Suprema en esta
materia, la cual había venido a distinguir dentro del género de la Improponibilidad,
(distinta a su vez de la inadmisibilidad y la improcedencia, controles a operar en
otras fases del proceso) diversas variantes y desde otra perspectiva, a diferenciar
también entre demanda inhábil, inútil, inatendible e imposible. Ahora la admisión ha
de reconducirse a una de las dos categorías legalmente establecidas, bien que para
cada una de ellas se nutre de un repertorio de supuestos de aplicación variado. Así,
en primer lugar, la Improponibilidad se refiere a todo proceso que no puede abrirse
por motivos procesales que devienen por su naturaleza insubsanables, de allí que

259
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

se diga que la pretensión no resulta susceptible de ser propuesta y en esa medida,


no procede proveer a ella judicialmente mediante la incoación de un proceso. Esas
circunstancias de orden procesal, conforme a un listado que incluye el propio
precepto pero que deja abierto a su ampliación en el caso concreto. (Evidencie falta
de presupuestos materiales o esenciales y otros semejantes)…”

CÁMARA DE LA CUARTA SECCIÓN DEL CENTRO: SANTA TECLA, en


Sentencia con Referencia 109-C-12, de fecha dieciséis de enero de dos mil trece.

“…según esa norma jurídica, si la demanda tuviere defectos subsanables, el juez


deberá advertirlo a la parte correspondiente, otorgándole el plazo de cinco días
para que los subsane, con apercibimiento de que, si no lo efectuase, la declarará
inadmisible, impidiendo de esa forma el trámite de la demanda, pero dejando a la
parte expedito su derecho material…”

CÁMARA DE LA SEGUNDA SECCIÓN DE OCCIDENTE: SONSONATE, en


Sentencia con Referencia INC-C-M-03-2011, de fecha dieciocho de febrero de dos
mil once.

“…sobre la impugnación de la inadmisibilidad de la demanda en los procesos


abreviados, el Art. 422 CPCM., no regula los recursos que proceden sobre tal
pronunciamiento, por lo que debe aplicarse lo dispuesto en el Art. 278 Inc. 2°
CPCM., que prevé la inadmisibilidad de la demanda en los procesos comunes por
ser una situación análoga a la presente, pues el proceso común al igual que el
proceso abreviado son de la categoría de procesos declarativos…”

Señalamiento de la audiencia

Art. 423.- Si la demanda fuese admitida, el juez señalará, en el mismo auto de admisión, el
día y hora en que habrá de tener lugar la audiencia, que se realizará dentro de un mínimo de diez
días entre la citación y la efectiva celebración de dicho acto y un máximo de veinte.

La celebración de la audiencia tendrá lugar en única convocatoria. Para ello se citará en forma
al demandante, así como al demandado y demás interesados aludidos en la demanda, acompañando
a la citación la copia de la demanda y demás documentos presentados con ella.

En la citación se hará constar que la audiencia no se suspenderá por la incomparecencia del


demandado, y que las partes han de concurrir con todos los medios de prueba de que intenten
valerse.

Reconvención

Art. 424.- En el procedimiento abreviado, el planteamiento de la reconvención por el


demandado se hará en la audiencia. Además, se requerirá que la pretensión deducida en la
reconvención deba tramitarse también por el proceso abreviado y que exista conexión entre las
pretensiones de la reconvención y las que sean objeto de la demanda principal.

260
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

CAPÍTULO SEGUNDO
LA AUDIENCIA

Incomparecencia de las partes

Art. 425.- Si el demandante citado en forma no compareciese ni hubiere alegado causa que
motive la suspensión de la audiencia, se le tendrá por desistido de su demanda, siempre que el
demandado no alegare interés legítimo en la continuación del proceso. Este desistimiento implicará
que se le impongan las costas causadas, y se le condene a indemnizar al demandado comparecido,
si éste lo solicitare y acreditare los daños y perjuicios sufridos.

La no comparecencia injustificada del demandado no impedirá la celebración de la audiencia,


que continuará sin necesidad de declarar su rebeldía.

CÁMARA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DE OCCIDENTE:


SANTA ANA, en Sentencia con Referencia APEL-116-14-4, de fecha doce de
enero de dos mil quince.
“…el Art. 425 CPCM., que se refiere a la audiencia única del proceso abreviado,
no puede ser aplicado por vía de integración como lo sostiene el juez de la causa,
pues el presupuesto que se ha dado en el caso de autos, es decir la incomparecencia
de una de las partes, está expresamente regulado en el Art. 405 inciso 2° CPCM.,
como la forma de proceder ante esa eventualidad, por lo que no es cierto que exista
un vacío de ley que justifique la aplicación supletoria de la norma a que el juez
se refiere; la resolución apelada, en el fondo tiene un efecto sancionatorio para la
parte material por la irresponsabilidad o negligencia de uno de sus Apoderados
que no compareció a la audiencia, no obstante estar obligado conforme a la ley a
representar a su mandante en la misma…”
Intento de conciliación
Art. 426.- El juez, constituido en audiencia pública, intentará que las partes lleguen a un
arreglo que pueda evitar la prosecución del proceso.
Alegaciones
Art. 427.- Si no hubiera avenencia en conciliación, se pasará seguidamente a la audiencia,
concediéndose la palabra al demandante para que ratifique, amplíe o reduzca su demanda, aunque
en ningún caso podrá hacer en ella variación sustancial.
El demandado contestará alegando, en primer lugar, cuantos defectos procesales estime
conveniente, y posteriormente afirmando o negando concretamente los hechos y los fundamentos
de derecho de la demanda. Acto seguido, el demandado podrá formular reconvención.
El demandante contestará defectos procesales alegados y a la reconvención. También podrá
alegar cuestiones relativas a la personalidad y representación del demandado.
Las partes harán uso de la palabra cuantas veces el juez lo estime conveniente.
Si no se aceptase ninguna excepción procesal, el que las hubiere formulado podrá pedir que
conste en acta su disconformidad, a efecto de apelar contra la sentencia que se dicte.

261
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

CÁMARA DE LA TERCERA SECCIÓN DEL CENTRO: SAN VICENTE, en


Sentencia con Referencia C-14-PA-2015-CPCM, de fecha veintiuno de mayo de dos
mil quince.
“…la correspondiente Audiencia Única que caracteriza el proceso abreviado,…es la
etapa idónea para sanear los defectos procesales que pudieran tener las alegaciones
iniciales, fijar en forma precisa la pretensión y admitir la prueba, y además, ya se
había llevado a cabo el desfile probatorio con todas las formalidades de ley…”
Prueba

Art. 428.- A continuación, las partes, comenzando por el demandante, propondrán las pruebas
de las que pretendan valerse respecto de los hechos sobre los que no hubiere conformidad; y el
juez admitirá las útiles y pertinentes.

Las partes podrán solicitar, al menos con tres días de antelación a la fecha de la audiencia,
aquellas pruebas que, para practicarse en la misma, necesiten diligencias de citación o
requerimiento.

Para la práctica de las pruebas se estará a lo dispuesto en el proceso común.

CÁMARA DE LA TERCERA SECCIÓN DEL CENTRO: SAN VICENTE, en


Sentencia con Referencia C-41-PA-2015-CPCM, de fecha dieciséis de septiembre
de dos mil quince.
“…es en esa Audiencia única, en donde se verifica el cumplimiento de la inmediación
- en sentido estricto - de la prueba, pues, por regla general, es en ese acto en donde se
produce la prueba y justamente es en el momento en que se recibe la prueba frente y ante
las partes y el juez de la causa, en la forma prescrita por la ley, que puede considerarse
que la misma ha sido inmediada; de modo que, faltando la producción probatoria, no
es posible afirmar que la prueba valorada, realmente haya sido inmediada, al menos
legalmente. Por otro lado, el derecho de Audiencia es un derecho de contenido procesal,
es decir, que ha sido establecido como máxima protección efectiva de otros derechos
de los gobernados que puedan estar en juego en un proceso determinado, de manera
que en virtud del mismo, la Autoridad competente está en la obligación de establecer,
o en su caso, observar el procedimiento legal para que el gobernado pueda intervenir
en las causas en que tuviere interés, a fin de que tenga la posibilidad de hacerlo valer
y, también, de desvirtuar al contrario, de cara al resultado definitivo; de tal manera
que, existe vulneración a ese derecho cuando habiéndose sustanciado un proceso no
se cumplen dentro de él las formalidades procesales esenciales (que conforme al Art.
3.2 CPCM son, imperativas), como por ejemplo, la posibilidad de ejercer la defensa u
oposición, así como la oportunidad de realizar actividad probatoria. Véase: Amp. 210-
2009 del 09/08/2011. Además, de lo antes establecido es posible inferir que el derecho
de Defensa (Art. 4 CPCM) está íntimamente vinculado al derecho de Audiencia, pues
cuando éste establece que en todo proceso o procedimiento se tiene que otorgar - de
acuerdo a la ley o en aplicación directa de la Constitución - al menos una oportunidad
para oír la posición de las partes, no cabe duda que todas las oportunidades de defensa
a lo largo del proceso también son manifestaciones o aplicaciones del derecho de
Audiencia (v. gr. exponer argumentos y rebatir los contrarios, articular los medios de
prueba pertinentes a su posición, etc.)…”

262
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

Alegatos finales

Art. 429.- Practicada la prueba las partes formularán oralmente sus alegatos finales. El juez
o tribunal fijará el tiempo prudencial para efectuar los alegatos finales, conforme la complejidad
del caso, sin que este pueda ser menor de una hora, ni mayor a tres horas, para cada una de las
partes, bajo pena de nulidad. No obstante, cada parte podrá utilizar un periodo menor del que le sea
asignado, si así lo estimare conveniente. Las decisiones judiciales sobre el tiempo de los alegatos
admitirán recurso de revocatoria en audiencia.

Sentencia

Art. 430.- Terminada la audiencia, y a continuación de los alegatos finales, el juez o tribunal
deberá dictar in voce el fallo de la sentencia y una sucinta motivación de la misma, bajo pena de
nulidad. Si la complejidad del caso lo ameritare, el juez o tribunal podrá interrumpir la audiencia
por un máximo de tres días hábiles, citando nuevamente a las partes dentro de dicho plazo, para
anunciar el respectivo fallo. (2)

Si lo permitiere la complejidad fáctica y jurídica del proceso en cuestión, el juez o tribunal


podrá dictar oralmente la sentencia íntegra.

En todo caso, ha de pronunciarse sentencia dentro de los quince días siguientes a la finalización
de la audiencia. El incumplimiento de dicho plazo hará incurrir al juez responsable en la sanción
establecida en el art. 417 de este código.2

CÁMARA SEGUNDA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO: SAN SALVADOR, en Sentencia con Referencia 30-3CM-15-A, de
fecha veintiuno de julio de dos mil quince.

“…3.8 …establece que el juez una vez finalizada la audiencia tiene quince días
hábiles para pronunciar Sentencia, si el término establecido en dicho artículo no
se cumple, el juez será sancionado con una multa, siempre y cuando esta lo solicite
la parte…3.10 …en el supuesto que la sentencia se hubiere dictado fuera del
termino de ley, dicha causal no es motivo de nulidad, pues ya ley establece que el
incumplimiento del plazo establecido en el Art. 430 CPCM, hace acreedor al juez
a una multa, tal y como lo establece el Art. 417 CPCM, pero en ningún momento
produce nulidad de la Sentencia, ni mucho menos nulidad del proceso, pues la ley ya
estableció cuales son los motivos de nulidad, Art. 232 CPCM…”

TÍTULO CUARTO
LAS MEDIDAS CAUTELARES

CAPÍTULO PRIMERO
PROCEDENCIA Y CLASES

Universalidad de la aplicación

Art. 431.- En cualquier proceso civil o mercantil el demandante podrá solicitar la adopción
de las medidas cautelares que considere necesarias y apropiadas para asegurar la efectividad y el
cumplimiento de la eventual sentencia estimatoria.

263
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

CÁMARA PRIMERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO: SAN SALVADOR, en Sentencia con Referencia 33-16CM1-2014, de
fecha uno de abril de dos mil catorce.

“…5.1.2) Estas se encuentran reguladas desde el Art. 431 al 456 CPCM., siendo
inspiradas en los principios de universalidad, dispositivo, de congruencia,
responsabilidad, proporcionalidad, defensa, contradicción, y de celeridad; siendo las
características de las mismas las siguientes: 1ª) La instrumentalidad, consiste en que
éstas no son autónomas, no tienen vida ni razón de ser por sí mismas, ya que dependen
de un proceso principal determinado, cuyo resultado se pretende asegurar. 2ª) La
proporcionalidad o funcionalidad, que radica en que la adopción de éstas, debe de
adaptarse a la naturaleza del derecho que se ejercita y se pretende, en virtud que hay una
injerencia en la esfera patrimonial de un sujeto procesal que aún no ha sido condenado,
por lo que deben ser adecuadas al cumplimiento de su finalidad y causar el menor
daño posible, de conformidad con lo dispuesto en el inc. 2° del Art. 432 CPCM. 3ª) La
provisionalidad, se refiere a que la medida cautelar queda supeditada a la existencia y
suerte del proceso, por lo que se extingue con el mismo, cualquiera que sea su causa, tal
como lo estipula el Art. 452 CPCM. 4ª ) La variabilidad, reside en que tienen un carácter
variable, pudiendo ser modificadas e incluso levantadas, cuando cambia la situación de
hecho que motivó su decreto, como lo prescriben los Arts. 455 Inc. 1° y 456 CPCM.
5.1.3) En esa misma línea de pensamiento, para establecer su procedencia, es ineludible
verificar si se cumplen los presupuestos para su imposición, que señala el Art. 433
CPCM., los cuales son: 1) fumus boni iuris, conocido como probabilidad o apariencia de
buen derecho; y, 2) periculum in mora, llamado además peligro de lesión o frustración
de ese derecho. El primero consiste en la carga de la presentación de datos, argumentos
y justificaciones documentales que conduzcan a fundar, sin prejuzgar el fondo del asunto,
un juicio provisional e indiciario favorable al fundamento de su pretensión; esto es, que
el derecho existe, pues no tendría sentido asegurar la plena efectividad de la sentencia
que se pretende, si desde el principio no se ofrece una justificación suficiente de que ello
ocurre. El segundo radica en acreditar la posibilidad que de no adoptarse las medidas
pertinentes, pueda frustrarse o impedirse la efectividad o eficacia de una eventual
Sentencia…”

Instancia de parte

Art. 432.- Las medidas cautelares sólo se decretarán a petición de parte, bajo la responsabilidad
del que las solicita.

El juez no podrá ordenar otras medidas cautelares más gravosas que las solicitadas; no
obstante, en función de las circunstancias, podrá acordar aquellas que, siendo tan adecuadas como
las pedidas, resulten menos onerosas para el demandado.

CÁMARA SEGUNDA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO: SAN SALVADOR, en Sentencia con Referencia 70-4°CM-14-A, de
fecha veintitrés de octubre de dos mil catorce.

“Ya sea para asegurar el cumplimiento de la sentencia estimatoria, o para


adelantar provisionalmente la decisión de fondo, las medidas cautelares deberán
ser solicitadas por el interesado en cualquier estado del proceso, incluso como

264
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

diligencias preliminares a la interposición de la demanda, y el juez, gracias a la


potestad cautelar genérica concretada en los Arts. 431 y 437 CPCM, podrá adoptar
cualquier medida que sea necesaria para asegurar la efectividad de la protección
jurisdiccional. 4.8.- Ahora bien, esta facultad de decretar cualquier medida estará
regulada por ciertos requisitos, entre los que se encuentran: 1) el cumplimiento del
principio dispositivo, respecto de que las medidas cautelares solo pueden decretarse
a instancia de parte (Art. 432 CPCM), por el carácter eminentemente privado de los
procesos civiles y mercantiles…”

CÁMARA SEGUNDA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO: SAN SALVADOR, en Sentencia con Referencia 19-4CM-15-A, de
fecha dos de junio de dos mil quince.

“…2.7. El legislador ha establecido que las medidas cautelares, solo pueden ser
otorgadas a instancia o petición de parte, y únicamente en aquellos casos en que el
actor justifique en legal forma que la medida solicitada es necesaria para garantizar
la protección de su derecho, esto con la finalidad de evitar lesionar de forma injusta
o indebida, los derechos del solicitado; es por ello, que además de los otros requisitos
que exige la ley, el solicitante de forma previa está obligado a demostrar: a) La buena
apariencia de su derecho (fumus bonis iuris); b) El peligro de lesión o frustración
de ese derecho (periculum in mora); y c) ofrecer una caución con la finalidad de
garantizar al solicitado, en caso de que la sentencia favorezca a sus intereses la
posible reparación de los daños y perjuicios. 2.8. Sobre la probabilidad o apariencia
de su derecho (fumus bonis iuris), el legislador únicamente exige que el solicitante
proporcione al juez los elementos que le permitan considerar (sin prejuzgar) que la
existencia del derecho que pretende asegurar, es más probable que su inexistencia, es
decir, debe demostrar que existen fuertes probabilidades que en el proceso principal,
se declare la existencia del derecho reclamado. 2.9. En cuanto al peligro de lesión
o frustración de ese derecho (periculum in mora) las suscritas consideramos que
el CPCM establece la obligatoriedad de demostrar, de forma objetiva la existencia
del riesgo o peligro que puede ocasionar la demora del proceso en el derecho del
solicitante, lo cual es un requisito esencial para determinar si procede decretar o
no, la medida cautelar. 2.10. Lo anterior se debe a que las medidas cautelares no
tienen por finalidad una condena anticipada, ni acelerar la satisfacción del derecho
controvertido, por el contrario únicamente buscan asegurar los posibles resultados
del juicio, por lo tanto, no es suficiente con solo demostrar la posible existencia del
derecho, sino que es un requisito indispensable probar de forma sumaria, que él no
acceder a la medida cautelar, la ejecución de una posible sentencia estimatoria se
volvería difícil o imposible…”

Presupuestos

Art. 433.- Las medidas cautelares sólo podrán adoptarse cuando el solicitante justifique
debidamente que son indispensables para la protección de su derecho, por existir peligro de lesión
o frustración del mismo a causa de la demora del proceso; y esto en el sentido de que, sin la
inmediata adopción de la medida, la sentencia que eventualmente estime la pretensión sería de
imposible o muy difícil ejecución.

265
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

El solicitante deberá acreditar, en forma adecuada, la buena apariencia de su derecho, y para


ello deberá proporcionar al juez elementos que le permitan, sin prejuzgar el fondo, considerar que
la existencia del derecho, tal como lo afirma el solicitante, es más probable que su inexistencia.

La acreditación de la apariencia de buen derecho y del peligro, lesión o frustración por demora
deberán justificarse en la solicitud, en la forma que sea más pertinente y adecuada.

CÁMARA PRIMERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO: SAN SALVADOR, en la Sentencia de fecha veintinueve de mayo de
dos mil catorce, con Referencia 53-20CM2-2014

“…3.3.1) En el ámbito civil y mercantil, el demandante puede solicitar la adopción


de las medidas cautelares que considere necesarias y apropiadas para asegurar la
efectividad y el cumplimiento de la eventual sentencia estimatoria, y que las mismas
solo se decretarán a petición de parte, bajo la responsabilidad del que las solicita.
Los presupuestos de las medidas cautelares, se extraen del Art. 433 CPCM., y son:
a) La acreditación de la apariencia de buen derecho, y b) la justificación del peligro,
lesión o frustración del derecho, por la demora en la aplicación de las medidas
solicitadas…”

CÁMARA SEGUNDA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO: SAN SALVADOR, en Sentencia con Referencia 70-4°CM-14-A, de
fecha veintitrés de octubre de dos mil catorce.

“…4.8.-… 2) la invocación y prueba de la apariencia del buen derecho, y el


peligro de lesión o frustración de ese derecho, por la demora en la tramitación del
proceso (Art. 433 CPCM); y 3) la exigencia de una caución que deberá ofrecer y
presentar el peticionario, en resguardo de los eventuales perjuicios que la medida
pueda ocasionar al afectado. 4.9.- Para acreditar la apariencia del derecho, el
peticionante deberá proporcionar al Juez elementos que le permitan, sin prejuzgar
el fondo, considerar que la existencia del derecho, tal como lo afirma el solicitante,
es más probable que su inexistencia (Art. 433 CPCM). 4.10.- Mientras que para
demostrar el peligro de lesión del derecho, el peticionante deberá alegar y acreditar
sumariamente, que la medida requerida es indispensable para la protección de su
derecho, por existir peligro de lesión o frustración de éste a causa de la demora
del proceso, en el sentido de que, sin la inmediata adopción de la medida, la
sentencia que eventualmente estime la pretensión sería de imposible o de muy difícil
ejecución…”

CÁMARA DE LA TERCERA SECCIÓN DEL CENTRO: SAN VICENTE,


en la Sentencia de fecha dieciséis de noviembre de dos mil quince, con Referencia
C-42-MC-2015-CPCM

“…La razón de ser de las medidas cautelares es que el tiempo que hay que cubrir
necesariamente en la tramitación del proceso, puede implicar un grave peligro para
la tutela real de un derecho que se pretende sea declarado en la Sentencia, por el
riesgo de que a la hora de cumplir lo ordenado en la misma, el mandato quede en
el vacío al no existir posibilidad alguna de ejecutarla al haberse dado ocasión al
demandado de realizar actos que propicien esa ineficacia…”

266
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

CÁMARA DE LA TERCERA SECCIÓN DEL CENTRO: SAN VICENTE,


en la Sentencia de fecha veintiuno de mayo de dos mil doce, con Referencia C-10-
DV-2012

“…el vocablo de la disposición citada, según el Diccionario de la Real Academia


Española en su pág. 1657 significa:”””””Del latín praeiudicium, es juzgar de las
cosas antes del tiempo oportuno, o sin tener de ellas cabal conocimiento.”””””””El
prejuzgamiento que menciona la Ley es la estimación de la procedencia de la
pretensión, es decir, con la valoración de prueba, siguiendo una argumentación
como para dictar un fallo relativo al fondo del asunto; sin embargo, como se expuso
ut supra, sí se vuelve necesario establecer si una medida es instrumentalmente
viable para proteger el derecho que posiblemente será dañado, de lo contrario si
la afectación patrimonial no guarda congruencia con la pretensión posterior, la
medida cautelar podría ser injustificada…”

CÁMARA DE LA TERCERA SECCIÓN DEL CENTRO: SAN VICENTE, en


la Sentencia de fecha dieciséis de junio de dos mil catorce, con Referencia C-20-DV-
2014-CPCM

“…1) Las medidas cautelares son considerandos instrumentos de eficacia de la


tutela jurisdiccional al habilitar la adopción inmediata de medidas tendientes
a prevenir el riesgo que presenta la dimensión temporal del proceso ya sea
mediante la conservación de la situación fáctica o jurídica vigente en un momento
determinado (medidas conservativas), la modificación de la situación para prevenir
la continuidad o agravamiento del daño (medidas innovativas) o el adelantamiento
provisorio de la decisión de mérito (medidas provisionales). Además se debe de
observar que se cumplan con los presupuesto o requisitos para la aplicabilidad de la
medida cautelar la probabilidad o apariencia de buen derecho y el peligro de lesión
o frustración, regulados en el Art. 433 CPCM, así como la exigencia de la contra
tutela o caución que debe ofrecer y constituir el peticionante en resguardo de los
eventuales perjuicios que la medida pueda ocasionar al cautelado de ese derecho,
salvo que se estime por el juzgador la exención de la prestación de la caución de
conformidad con el Art. 448 CPCM…”

CÁMARA DE LA SEGUNDA SECCIÓN DE ORIENTE: USULUTÁN, en la


Sentencia de fecha dieciocho de noviembre de dos mil trece, con Referencia APE-
30-10-CPCM-2013

“…requisitos de la providencia cautelar, se encuentran regulados en el Art. 433 CPCM.,


siendo estos: “La invocación y prueba de la probabilidad o apariencia del derecho y el
peligro de lesión o frustración del proceso”, es decir que el solicitante deberá acreditar,
en forma adecuada, la buena apariencia de su derecho, y para ello deberá proporcionar
al juez elementos que le permitan, sin prejuzgar el fondo, considerar que la existencia
del derecho, tal como lo afirma el solicitante, es más probable que su existencia, es
decir, que el juez debe valorar los indicios, elementos o circunstancias que rodean la
fundamentación de la solicitud de la medida cautelar, dotándola de una apariencia
probable de legitimidad. Cabe aclarar que para hacer este juicio de valor, el juez o
tribunal se limita en la generalidad de las ocasiones, a la existencia de un documento

267
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

más o menos fiable en que conste el derecho pretendido por el solicitante; y sobre el
peligro de lesión o frustración del proceso, el peticionario deberá alegar y acreditar
sumariamente que la medidas requerida es indispensable para la protección de su
derecho, por existir peligro de lesión o frustración del mismo a causa de la demora del
proceso, “en el sentido de que, sin la inmediata adopción de la medida, la sentencia que
eventualmente estime la pretensión sería de imposible o muy difícil su ejecución”. Dicha
acreditación de apariencia de buen derecho y del peligro, lesión o frustración por demora
deberán justificarse en la solicitud, en la forma que sea más pertinente y adecuadas.
Que además de dichos requisitos señalados, en la solicitud de dichas medidas cautelares,
deberá ofrecerse la prestación de caución suficiente para garantizar el resarcimiento de
los daños y perjuicios que pudieren causar al patrimonio del demandado, su adopción
y cumplimiento, indicando en la misma, la forma y cuantía de la caución. Art. 446 y
447 CPCM., así también el Art.451 Inc. 3° CPCM, señala “.... En el escrito en que se
soliciten habrá de ofrecerse caución, especificando de qué tipo es la que se propone,
con justificación del importe propuesto:”…”

Momento para solicitar las medidas cautelares

Art. 434.- Las medidas cautelares se podrán solicitar y adoptar en cualquier estado del
proceso, y también como diligencia preliminar a la interposición de la demanda. En este caso,
dichas medidas caducarán de pleno derecho si no se presentare la demanda dentro del mes
siguiente a su adopción, sin perjuicio de lo establecido en tratados internacionales vigentes; y en
este caso el peticionario será condenado al pago de todos los gastos del proceso y de los daños y
perjuicios causados.

CÁMARA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DE OCCIDENTE:


SANTA ANA, en la Sentencia de fecha diez de marzo de dos mil quince, con
Referencia INC-APEL-12-3-23-01-2015

“…La nueva normativa procesal civil y mercantil, contemplan los mecanismos


legales para que las medidas cautelares ya adoptadas en un proceso queden sin
efecto, o se proceda a su levantamiento, ya sean éstas como diligencias preliminares,
o en un proceso ya existente, así: a) como lo dispone el Art. 434 CPCM, que señala
que la medida cautelar caducará de pleno derecho, cuando se adopta la misma
como diligencia preliminar a la interposición de la demanda y ésta no se presenta
dentro del mes siguiente a su adopción, debiéndose condenar al peticionario de
dichas medidas al pago de todos los gastos del proceso y de los daños y perjuicios
causados; y b) como lo señala el Art. 456 CPCM, que es al dictar la sentencia
absolutoria en el proceso para el cual se han solicitado, el juez acordará de
inmediato el levantamiento de las medidas cautelares adoptadas, aunque aquélla
aún no fuese firme; salvo que el demandante, haciendo manifiesta la intención de
recurrir, solicitare su mantenimiento o la modificación de la medida…”

CORTE SUPREMA DE JUSTICIA EN CORTE PLENA: SAN SALVADOR,


en la Sentencia de Conflicto de Competencia, de fecha veintitrés de julio de dos mil
quince, con Referencia 59-COM-2015, sostiene que

“…Las medidas cautelares son instrumentos procesales encaminados a garantizar la


efectividad de un proceso posterior y, su finalidad es evitar una posible vulneración al

268
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

derecho de la tutela judicial efectiva; en las diligencias de mérito se refiere a medidas


cautelares que son auxiliares para la toma de un decisión judicial, no teniendo
dichas medidas independencia por sí mismas. En concordancia con lo anterior, es
menester señalar que dichas medidas cautelares son de carácter temporal, puesto
que caducan de pleno derecho, por lo que no deben ser prorrogadas ya que al no
cumplirse con la interposición de la respectiva demanda se estaría vulnerando los
derechos de la contraparte ocasionándole un perjuicio grave; las medidas son para
prevenir la probable existencia de un derecho amenazado y el daño que ocasionaría
el desarrollo temporal del proceso. Lo que se pretende con la referida caducidad de
las medidas es evitar un abuso en el ejercicio de las mismas de parte del solicitante,
Art. 434 CPCM…”

Medidas cautelares en procesos arbitrales y extranjeros

Art. 435.- El que acredite ser parte en un proceso arbitral iniciado en El Salvador podrá
solicitar del juez la adopción de las medidas cautelares pertinentes.

Al tratarse de procesos jurisdiccionales o arbitrales pendientes en otro Estado, el que acredite


ser parte en ellos podrá solicitar del juez salvadoreño la adopción de medidas cautelares respecto
de bienes situados o actos que se estén realizando en El Salvador, de conformidad con los tratados
aplicables.

CÁMARA DE LA SEGUNDA SECCIÓN DE ORIENTE: USULUTÁN, en la


Sentencia de fecha dieciocho de noviembre de dos mil trece, con Referencia APE-
30-10-CPCM-2013

“…según lo establecido en el Art. 436 No. 5° CPCM; procediendo dicha medida de


la “Anotación de Demanda”, cuando se dedujere una pretensión que pudiera tener
como consecuencia la modificación de una inscripción en el registro correspondiente
Art. 443 CPCM, tal como el caso en comento, ya que se ha demandado la
NULIDAD ABSOLUTA DE VARIAS INSCRIPCIONES REGISTRALES DE
MUTUOS HIPOTECARIOS Y DE EMBARGOS, ASI COMO SUS RESPECTIVAS
CANCELACIONES EN EL REGISTRO CORRESPONDIENTE; pero es de aclarar,
que para solicitar dicha medida cautelar, los peticionarios debieron hacerlo
siguiendo el procedimiento que establece la Ley, es decir hacer la presentación de
la solicitud cautelar con las formalidades de una demanda (demanda cautelar),
puesto que de ésta se forma pieza separada, ya que el objetivo es, que en ningún
caso dicho trámite suspenda el curso del proceso principal; debiendo la solicitud
formularse con claridad y precisión, justificando cumplidamente la concurrencia
de los presupuestos legalmente exigidos para su adopción, acompañando además
a dicha solicitud los instrumentos que la apoyen, y en ella se deberá pedir, bajo
pena de preclusión, la práctica de otros medios de prueba para la acreditación de
los presupuestos que sustentan la adopción de medidas cautelares Art. 451 CPCM.
Que dichos presupuestos a que se refiere la disposición mencionada y que se exigen
como requisitos de la providencia cautelar, se encuentran regulados en el Art. 433
CPCM…”

269
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

Catálogo de medidas cautelares

Art. 436.- Podrá solicitarse la adopción de las siguientes medidas cautelares:


1ª. El embargo preventivo de bienes;
2ª. La intervención o la administración judiciales de bienes productivos;
3ª. El secuestro de cosa mueble;
4ª. La formación de inventarios de bienes, en las condiciones que el tribunal disponga;
5ª. La anotación preventiva de la demanda, y otras anotaciones registrales;
6ª. La orden judicial para cesar provisionalmente en una actividad, para abstenerse
temporalmente de alguna conducta o para no interrumpir o cesar, también de manera
temporal, una prestación;
7ª. La intervención y depósito de ingresos obtenidos mediante una actividad que se considere
ilícita y cuya prohibición o cesación se pretenda en la demanda;
8ª. El depósito temporal de ejemplares de las obras u objetos que se reputen producidos con
infracción de las normas sobre propiedad intelectual e industrial, así como el depósito del
material empleado para su producción y la consignación o depósito de las cantidades que
se reclamen en concepto de remuneración de la propiedad intelectual.

Otras medidas cautelares

Art. 437.- Sin perjuicio de lo dispuesto en el artículo anterior, podrá solicitarse la adopción de
otras medidas que se estimen necesarias para asegurar la efectividad de la protección jurisdiccional
que pudiere otorgarse en la sentencia estimatoria, así como la de aquellas que estén expresamente
previstas por las leyes para la salvaguarda de ciertos derechos.

CÁMARA PRIMERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO: SAN SALVADOR, en la Sentencia de fecha ocho de octubre de dos mil
trece, con Referencia 136-52CM2-2013/04

“…4.2) …el Art. 437 CPCM., establece la posibilidad de adoptarse medidas


cautelares distintas a las previstas en el Art. 436 del citado cuerpo normativo,
que se estimen necesarias y que estén expresamente previstas por las leyes para
la salvaguarda de ciertos derechos. 4.3) Es en ese contexto, se ha afirmado que el
Código Tributario prevé la posibilidad que la Administración Tributaria, por medio
del Fiscal General de la República en virtud de un procedimiento de fiscalización
conforme a los Arts. 173, 176 y 177 puede solicitar al juez con competencia civil la
medida precautoria del allanamiento y registro, con el objeto de realizar el secuestro
de documentación, libros y registros contables, especiales o relativos al Impuesto a
la Transferencia de Bienes Muebles y a la Prestación de Servicios, que constituyan
elementos de prueba útiles para llevar a cabo el proceso de fiscalización, inspección,
investigación y control…”

Procedencia del embargo preventivo

Art. 438.- Podrá solicitar embargo preventivo el acreedor de deuda en dinero, o en frutos,
rentas y cosas fungibles convertibles en dinero por aplicación de precios ciertos.

Son supuestos en los que cabe solicitar el embargo preventivo:


1°. Que el deudor no tenga domicilio en la República.

270
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

2°. Que la existencia del crédito esté demostrada con instrumento público o privado atribuido
al deudor, o por contrato bilateral de existencia justificada cuando el acreedor hubiera
cumplido con su parte, o bien ofreciese el cumplimiento o la obligación fuera a plazo.
3°. Que se acredite la intención del deudor de enajenar, ocultar o transportar sus bienes
en detrimento de la garantía, aunque la deuda esté sujeta a plazo o condición; o que se
justifique la disminución apreciable de la solvencia del deudor después de contraída la
obligación, por cualquier causa.
4°. Que se demande por daños y perjuicios derivados de eventos dañosos y el demandado
no contare con seguro de responsabilidad; o que, en caso de contar con dicho seguro,
la compañía aseguradora esté en proceso de liquidación en el momento de iniciarse el
proceso o en forma sobrevenida.

Fuera de los casos del inciso anterior, también será procedente el embargo preventivo si
resultare medida idónea y no sustituible por otra de igual o superior eficacia y menor onerosidad
para el demandado.

Inhibición general de disponer


Art. 439.- En los casos en que haya lugar a embargo y éste no pueda hacerse efectivo por no
conocerse bienes del deudor o por no cubrir los que se conozcan el importe del crédito reclamado,
podrá solicitarse contra aquél la inhibición general de vender o gravar sus bienes, la cual se dejará
sin efecto cuando se presentaren a embargo bienes suficientes o se diere caución bastante.
El que solicitare la medida cautelar deberá expresar el nombre, apellido y domicilio del
deudor, así como todo otro dato que pueda individualizar al inhibido, sin perjuicio de los demás
requisitos que impongan las leyes.
La inhibición de disponer sólo surtirá efecto desde la fecha de su anotación, en su caso; salvo
en los supuestos en que el dominio se hubiere transferido con anterioridad, dé acuerdo con lo
dispuesto en la legislación general.
Esta inhibición no concederá preferencia sobre otras medidas cautelares anotadas con
posterioridad.
Procedencia de la intervención y administración judicial
Art. 440.- Además de la intervención o administración judicial autorizada por las leyes
sustantivas, que queda sujeta al régimen establecido por ellas, podrá disponerse dicha medida
cuando se pretenda sentencia de condena a entregar bienes a título de dominio, usufructo o
cualquier otro que implique interés legítimo en mantener o mejorar la productividad, o cuando
el aseguramiento de ésta sea de primordial interés para la efectividad de la condena que pudiere
recaer, y no fuera posible garantizar los derechos del acreedor por medio de otras medidas menos
gravosas para el derecho de propiedad.
Régimen general de la intervención o administración judicial
Art. 441.- La resolución que disponga una intervención o administración judicial
necesariamente fijará su plazo, que podrá ser prorrogado mediante la justificación de su necesidad,
y las facultades del interventor o administrador, que se limitarán a las estrictamente indispensables
para asegurar el derecho que se invoque, debiendo procurar, en lo posible, la continuación de la
explotación intervenida.

271
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

El tribunal fijará la retribución del interventor o administrador, que será abonada por el
peticionario o por el patrimonio intervenido, si hay circunstancias que así lo determinen; y tal
retribución se imputará a la que se fije como honorario final, sin perjuicio de lo que en definitiva se
decida respecto de la parte que deba soportar el pago.
Procedencia del secuestro
Art. 442.- Procederá el secuestro de los bienes muebles objeto del proceso cuando se pretenda
su entrega y se hallen en poder del demandado, siempre que se presenten instrumentos que hagan
verosímil el derecho cuya efectividad se quiere garantizar.
Procederá, asimismo, con igual condición, toda vez que sea indispensable para la guarda o
conservación de cosas en función de asegurar el resultado de la Sentencia.
El juez designará depositario a la institución oficial o persona que mejor convenga, fijará su
remuneración y ordenará el inventario, si fuese necesario.

Anotación de demanda

Art. 443.- Será procedente la anotación de la demanda cuando se dedujere una pretensión que
pudiera tener como consecuencia la modificación de una inscripción en el registro correspondiente.

Prohibición de innovar y de contratar

Art. 444.- Se podrá decretar la prohibición de innovar en cualquier clase de procesos si existe
el peligro de que, al alterarse, en su caso, la situación de hecho o de derecho, tal modificación
pudiera influir en la sentencia o volver ineficaz o imposible su ejecución; y siempre que la cautela
no pudiera obtenerse por medio de otra medida precautoria.

Cuando por ley o por contrato, o para asegurar la ejecución forzada de los bienes objeto del
proceso, procediese la prohibición de contratar sobre determinados bienes, el juez ordenará dicha
medida. Con tal fin, individualizará lo que es objeto de la prohibición, y dispondrá que se inscriba
en los registros correspondientes y se notifique a los interesados y a los terceros que mencione el
solicitante.

La medida quedará sin efecto en cualquier momento en que se demuestre su inoperancia o


inutilidad para los fines del proceso.

CAPÍTULO SEGUNDO
ADOPCIÓN DE LAS MEDIDAS CAUTELARES

Reglas de aplicación de las medidas cautelares

Art. 445.- Las medidas cautelares deberán ser efectivas y conducentes a su fin, y resultar lo
menos gravosas o perjudiciales para el demandado, sin que por ello obtenga él demandante más de
lo que obtendría como consecuencia de la ejecución de la Sentencia.

El juez deberá controlar que la aplicación de las medidas cautelares se ajusten a lo prevenido
en el inciso anterior, y, en caso contrario, limitará la solicitud a dichas reglas.

272
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

CÁMARA SEGUNDA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO: SAN SALVADOR, en la Sentencia de fecha veintitrés de octubre de
dos mil catorce, con Referencia 70-4°CM-14-A

“…4.3.- El proceso en términos generales es concebido como un instrumento


lento, que en ocasiones puede volverse incluso ineficaz, si la sentencia del mismo
se demora tanto en pronunciarse que se vuelva difícil o imposible su ejecución.
4.4.- Sin embargo, la demora en el proceso es un hecho lógico en la medida que
las actividades de alegación, instrucción y decisión (y eventualmente impugnación y
revisión) requieren naturalmente de un tiempo que permita conjugar las exigencias
de la celeridad con las de justicia y ponderación; pero este tiempo, que dependerá
de las circunstancias que configuren cada caso en específico, puede resultar excesivo
y con ello podría poner en riesgo la eficacia de la tutela jurisdiccional. 4.5.- De
acuerdo con los doctrinarios, para tratar de aminorar este peligro, el legislador
contempló las medidas cautelares dentro de la legislación, como el instrumento
más idóneo para asegurar la eficacia de la tutela jurisdiccional, ya que habilitan
la adopción inmediata de medidas tendientes a prevenir el riesgo que representa la
dimensión temporal del proceso, ya sea mediante la conservación de la situación
fáctica o jurídica vigente (medidas conservativas), la modificación de la situación
para prevenir la continuidad o el agravamiento del daño (medidas innovativas) o el
adelantamiento provisorio de la decisión de mérito (medidas provisionales)…”

CÁMARA TERCERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO: SAN SALVADOR, en la Sentencia de fecha veintiuno de diciembre de
dos mil quince, con Referencia 232-MCAMB-15

“…x.- Esta Cámara estima que conforme al Art. 102-C Inc. 1 letras a), b) y c)
LMA., las medidas cautelares pueden adoptarse incluso de oficio ante cualquiera
de los supuestos ahí establecidos, y conforme a la letra “b”de la citada disposición,
procede incluso cuando se esté frente a la presencia de un daño al medio ambiente,
por consiguiente, no es determinante para la decisión judicial que la tala de
árboles efectuada por el “INSTITUTO DE PREVISIÓN SOCIAL DE LA FUERZA
ARMADA”hubiera concluido al momento de imponer la medida cautelar, en virtud
de que según la previsión normativa lo que se intenta evitar es que ese daño ya
efectuado genere un peligro o afectación a la salud humana o la calidad de vida de la
población, y en las diligencias de mérito fue constatado por el señor Juez de la causa
que existen otros recursos naturales que proteger, que pueden resultar menoscabados
por la tala efectuada y generar una afectación a la calidad de vida de las personas,
lo cual será discutido ampliamente en el proceso ambiental correspondiente, por
consiguiente, el agravio alegado por el recurrente debe desestimarse. xi.- No obstante
lo anterior, si bien el señor Juez Ambiental de conformidad con el Art. 102-C LMA,
tiene facultades para imponer medidas cautelares oficiosamente como acto previo a
la demanda si la urgencia lo requiere y en virtud de los principios de prevención y
precaución, tal disposición ordena que luego de corroborar que concurre alguno de
los presupuestos de procedencia de las mismas, deberá dictar la medida y dentro de
los cinco días hábiles siguientes certificar a la Fiscalía General de la República para
que ésta interponga la demanda correspondiente en un plazo máximo de quince días
hábiles, por consiguiente, es dentro del proceso que debe revisarse la continuidad de

273
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

la medida, pues no podrá exceder para su vigencia del plazo que establece el Art.
434 CPCM, de otro modo, se desnaturaliza la provisionalidad con que se deben de
adoptar, y es que las medidas cautelares son un medio provisional -no definitivo-
para asegurar la sentencia que pudiera recaer y la protección del medio ambiente,
esto es así, en virtud que el afectado por la medida debe tener la oportunidad de
ejercer sus derechos de audiencia y defensa en un proceso justo, pues el fin de que se
impongan como acto previo es que se incoe la demanda…”

Prestación de caución

Art. 446.- Como regla general, el solicitante de la medida cautelar deberá prestar caución
suficiente para garantizar el resarcimiento de los daños y perjuicios que pudieran causar al
patrimonio del demandado, su adopción y cumplimiento.

La prestación de caución será siempre previa a cualquier acto de cumplimiento de la medida


cautelar acordada.

CÁMARA DE LA SEGUNDA SECCIÓN DE ORIENTE: USULUTÁN, en la


Sentencia de fecha dieciocho de noviembre de dos mil trece, con Referencia APE-
30-10-CPCM-2013

“…VI.- …cuando el Tribunal estimare que concurren los presupuestos y requisitos


para la adopción decretará las medidas, RAZONANDO SU PROCEDENCIA CON
PRECISA INDICACION DE LAS QUE SE ACUERDEN y determinará el régimen a
que han de estar sometidas, estableciendo en su caso la forma, cuantía y tiempo en
que deba prestar caución el solicitante…”

CÁMARA PRIMERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO: SAN SALVADOR, en la Sentencia de fecha once de enero de dos mil
doce, con Referencia 154-26CM1-2011

“…4.3.) En relación al primer punto, respecto de la interpretación errónea de los


Arts. 446 y 453 CPCM., …primero debemos dejar claro que las Medidas Cautelares
en general, constituyen un incidente, pues su trámite constituye una contingencia
procedimental, y por lo tanto no tienen un fin en sí mismas, pues, constituyen un
accesorio de otro proceso principal, que pretenden asegurar las resultas del proceso;
su cognición es superficial, pues el juez debe de asegurarse de su apariencia en el
derecho y del peligro de no adoptarlas, para dictarlas inaudita parte. Además el
juez puede valorar cual medida cautelar es más apropiada con la discreción que se
le acredita, estableciéndolas, si así lo decidiese, de forma provisional, siendo por lo
tanto revocables; de ello deriva el carácter temporal de las mismas y su tramitación
por separado, pues no inciden en el proceso... Sin embargo, lo anterior no es óbice
para que el juzgador considere las pautas y requisitos legales y necesarios para
ordenar su adopción, pues su especialidad no quitan de las mismas, la necesidad de
que concurra la verosimilitud del derecho y el peligro en la demora. Además, se debe
de tener muy en cuenta la contracautela; ésta, responde a las características típicas
de las medidas cautelares, pues prevén eventuales daños y perjuicios que pudieran
ocasionar, al afectar eventualmente sin derecho, un patrimonio de un tercero. En
tal sentido, podemos decir que realmente constituye un tercer presupuesto de las

274
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

medidas cautelares, que amerita una prudente graduación efectuada sobre


la base de los elementos, como la verosimilitud del derecho alegado, el valor
supuesto de los bienes, los daños que eventualmente pueden producirse; por ello,
ante lo expresado por el apoderado de la parte apelante, de que la contracautela
constituye un requisito de ejecución de la medida cautelar, y no del dictado de
la medida, por lo que arguye que no es un requisito en sí, y que en tal sentido
así lo dispone el Art. 433 CPCM., ésta Cámara estima que, si constituye un
verdadero presupuesto, que encuentra su fundamento en el principio de igualdad,
pues reemplaza con cierta medida, a la bilateralidad o controversia, ya que
asegura al actor un derecho aún no actuada, y al demandado la efectividad
del resarcimiento de los daños, si el derecho del actor acaso no existiera o no
se llega a otorgar; por lo que ella debe de constituirse antes del cumplimiento
de la Medida Cautelar de que se trate. En cuanto a su adopción propiamente
dicha, el juzgador debe considerar además de la verosimilitud del derecho, las
circunstancias de cada caso determinado, considerando dos situaciones: i) la
capacidad patrimonial del solicitante; y, ii) el objeto del proceso. (Art. 447 parte
final del Inc. último CPCM.)…”

Forma y cuantía de la caución

Art. 447.- La forma y cuantía de la caución deberá indicarse en la solicitud de la medida


cautelar, y podrá ofrecerse en dinero en efectivo, cheque de gerencia o de caja, garantía bancaria o
de instituciones afianzadoras, o en cualquier otra forma admitida en derecho, siempre que, a juicio
del juez, garantice la inmediata disponibilidad de la cantidad de que se trate.

El juez podrá aceptar la caución ofrecida por el solicitante, graduarla, modificarla o cambiarla
por la que considere pertinente, con apego a la proporcionalidad respecto de la capacidad
patrimonial del solicitante y del objeto del proceso.

CÁMARA PRIMERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO: SAN SALVADOR, en la Sentencia de fecha dieciséis de agosto de dos
mil doce, con Referencia 85-20CM1-2012

“…De la mencionada disposición se desprenden los requisitos indispensables


para la adopción de la caución siendo estos: a) la suficiencia, para reparar el
posible daño; y b) la disponibilidad, en caso de hacerse efectiva. En cuanto
a su adopción propiamente dicha, el juzgador debe considerar además de
la verosimilitud del derecho, las circunstancias de cada caso determinado,
considerando dos situaciones: 1) la capacidad patrimonial del solicitante; y, 2)
el objeto del proceso. Art. 447 parte final del Inc. último CPCM. En tal sentido,
si es acertado afirmar que dicha caución debe ser fijada por el Juez, pero la
forma y cuantía de la caución debe indicarse en la solicitud de medida cautelar,
pudiéndose ofrecer por muchos medios, pero sometiéndose a juicio del Juzgador,
quien puede aceptarla, graduarla, modificarla o cambiarla, según considere
pertinente, con apego a la proporcionalidad en relación a la capacidad
patrimonial del solicitante y del objeto del proceso…”

275
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

CÁMARA DE LA TERCERA SECCIÓN DEL CENTRO: SAN VICENTE, en


la Sentencia de fecha dieciséis de junio de dos mil catorce, con Referencia C-20-DV-
2014-CPCM

“…2) En el caso in examine, la solicitud de la medida cautelar de la anotación


preventiva de la demanda contenida en la solicitud de diligencias preliminares
presentada por la apelante fue declarada improcedente por el señor Juez A Quo
de conformidad con los Arts. 259 y 447 CPCM. En ese sentido cabe señalar que la
anotación de la demanda es una medida cautelar que tiene por finalidad asegurar
la publicidad de un proceso en el que puedan verificarse alteraciones en relación
a bienes susceptibles de inscripción registral, de modo que la eventual sentencia
estimatoria de la pretensión pueda ser oponible o a terceros adquirentes de
dichos bienes o terceros a cuyo favor se constituyan derechos reales o personales
inscribibles sobre los mismos. Se trata en realidad de una medida vinculada con los
efectos de la Sentencia, puesto que la publicidad registral resultante de la anotación
de la demanda tiene por objeto que la sentencia que finalmente se pronuncie en ese
proceso, sea oponible o tenga efecto vinculante respecto de terceros en relación con
la concreta modificación operada en la inscripción registral; sin embargo siempre
será necesario alegar y acreditar sumariamente los requisitos de toda medida
cautelar, es decir la apariencia o verosimilitud de derecho y peligro de su lesión o
frustración, así como aportar la caución o garantía exigida legalmente…”

CÁMARA PRIMERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO: SAN SALVADOR, en la Sentencia de fecha once de enero de dos mil
doce, con Referencia 154-26CM1-2011

“…En tal sentido, si es acertado afirmar que debe ser fijada por el juez, pero la
forma y cuantía de la caución debe indicarse en la solicitud de medida cautelar,
pudiéndose ofrecer por muchos medios, pero sometiéndose a juicio del juzgador,
quien puede aceptarla, graduarla, modificarla o cambiarla, según considere
pertinente, con apego a la proporcionalidad en relación a la capacidad patrimonial
del solicitante y del objeto del proceso. Respecto a la capacidad patrimonial del
solicitante, éste elemento debe ser incorporado por el solicitante de forma clara
y precisa, atribuyendo suficientes elementos de juicio para tener una apropiada
consideración; …el término patrimonio no se limita al capital fundacional de una
persona jurídica (o en general), sino que se entiende comprendido cualquier derecho
económico, como participación en la propiedad real y personal (activos), incluso
sus obligaciones; aunado al respecto, la misma parte apelante hace Referencia a los
derechos económicos a su favor…”

Exención de la prestación de caución

Art. 448.- El juez podrá eximir de la prestación de caución al solicitante si su capacidad


económica y potencial patrimonial es sensiblemente inferior al de la parte contraria, en especial en
aquellos casos en que la pretensión planteada implique, junto a la defensa de un interés particular,
la defensa de intereses generales, colectivos o difusos, como los de los consumidores o los de la
protección del medio ambiente.

276
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

La decisión judicial a que se refiere el inciso anterior será tomada con especial motivación y
previa ponderación razonada de los intereses en juego.

CÁMARA DE LA SEGUNDA SECCIÓN DE ORIENTE: USULUTÁN, en la


Sentencia de fecha dieciocho de noviembre de dos mil trece, con Referencia APE-
30-10-CPCM-2013
“…contempla la situación económica del peticionante como circunstancia
habilitante de la exención, solución necesaria y conveniente para mantener el acceso
igualitario al instrumento cautelar, que de otra forma podría verse afectado frente
a la parte carente de recursos económicos para solventar la caución. No obstante,
la causal de exoneración no refiere exclusivamente a la situación económica del
peticionante o su imposibilidad económica de constituir la caución, sino que
contempla una hipótesis más compleja, es decir que, la capacidad económica
y potencial patrimonial del solicitante sea sensiblemente inferior al de la parte
contraria; hechos o circunstancias que deben exponerse y solicitarse por la parte
demandante…”
CÁMARA SEGUNDA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL
CENTRO: SAN SALVADOR, en la Sentencia de fecha dieciséis de diciembre de
dos mil catorce, con Referencia 75-3CM-14-A
“…2.10. …el Art. 448 CPCM, …al ser esta una excepción a la regla general, es
obligación del solicitante demostrar al juez, las razones de porque debe eximirlo de
rendir la caución, ya que no basta afirmar que la capacidad económica del solicitado
es superior a la del solicitante, sino que también es imperativo que el solicitante
demuestre, su incapacidad económica para prestar la caución…”
Competencia

Art. 449.- Será competente para la adopción de las medidas cautelares el juez que deba
conocer o esté conociendo, en la instancia o recurso, del procedimiento en el que se han de acordar.

Si la medida cautelar se solicita en relación con un proceso arbitral, la competencia


corresponderá al juez de primera instancia del lugar donde se deba ejecutar la sentencia arbitral
o donde deban surtir efecto las medidas. Lo mismo se aplicará respecto de las medidas cautelares
solicitadas para procesos jurisdiccionales o arbitrales extranjeros, salvo que dispongan cosa
distinta los tratados aplicables.

CORTE SUPREMA DE JUSTICIA EN CORTE PLENA, en la Resolución


Referencia 100-D-2011 de fecha veintidós de septiembre de dos mil once.
“Al respecto, debe apuntarse que, en relación con las medidas cautelares, existen
normas especiales de atribución de competencia territorial, y solo cuando no está
previsto especialmente un fuero territorial, se atienden las normas de atribución de
competencia con carácter general; en otras palabras, sino hay fuero especial debe
aplicarse el fuero general.
Lo anterior responde a la prevalencia de un fuero sobre otro que, razonablemente,
toma en cuenta la naturaleza de la pretensión para determinados procesos
especiales, que tienen un carácter imperativo, indisponible para las partes. Una

277
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

norma imperativa con tal carácter es el Inc. 2° del Art. 449 C.Pr.C. y M., que
prescribe: [...] Si la medida cautelar se solicita en relación con un proceso
arbitral, la competencia corresponderá al juez de primera instancia del lugar
donde se deba ejecutar la sentencia arbitral o donde deban surtir efectos las
medidas […].
De la norma transcrita se extrae dos supuestos para atribuir competencia
territorial, así: 1) Es competente el juez donde se deba ejecutar la sentencia
arbitral; y, 2) Es competente el juez donde deban surtir efectos las medidas.
Con el primer caso, es competente el juez donde se deba ejecutar la Sentencia, por
lo que debe remitirse a las reglas del proceso de ejecución para establecer qué juez
puede ser territorialmente competente. Así, en el Inc. 3° del Art. 561 C.Pr.C. y M.,
se establece: [...] Para la ejecución de los laudos arbitrales será competente el juez
de primera instancia que debió conocer de la controversia si no hubiera habido
arbitraje [...]”.
Lo anterior, sugiere que se olvide momentáneamente el arbitraje, para
determinar qué tribunal será el competente al momento de ejecutar la sentencia
arbitral, lo cual indica que debemos remitirnos en primer término a los fueros
convencionales, en su defecto a los fueros legales, considerando dentro de ellos,
primero, a los especiales y luego a los generales.
Con el segundo supuesto, se establece que es competente el juez donde deben
surtir efecto las medidas. De ahí, dependerá del catálogo de medidas cautelares
y de otras que puedan solicitarse, para determinar donde surtirá efecto la
pretensión cautelar.

En definitiva, la elección de uno u otro supuesto para atribuir competencia, debe


ser la que razonablemente garantice de mejor manera la función cautelar que
se pretende; es decir, que, si bien sobre ellos no hay prevalencia uno sobre otro,
debe ser razonable la elección del juez a quien se le solicite la adopción de la
medida.

En el presente caso, la pretensión cautelar consiste en que se ordene,


provisionalmente, a [la sociedad demandada], la suspensión de las Juntas
Generales Ordinarias y Extraordinarias de Accionistas. Dichas Juntas, según lo
afirma el solicitante, por acuerdo, son realizadas en San Salvador. En ese caso,
el lugar donde surtirán efectos las medidas es en dicha ciudad, por consiguiente,
la competencia le corresponde al juez en donde territorialmente puede ejercerse
la función cautelar que se pretende; razón por la que esta Corte concluye que el
competente para seguir conociendo y decidir sobre las diligencias solicitadas
es el Juez Quinto de lo Civil y Mercantil de San Salvador y así se determinará.”

Examen de oficio

Art. 450.- El tribunal examinará de oficio su jurisdicción y competencia para conocer de la


solicitud de medidas cautelares, y rechazará su intervención si considera que carece de alguna de
aquéllas, debiendo remitir al solicitante al tribunal que corresponda.

278
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

CÁMARA PRIMERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO: SAN SALVADOR, en la Sentencia de fecha uno de abril de dos mil
catorce, con Referencia 33-16CM1-2014
“…5.2.2) La jurisdicción constituye una potestad del Estado, atributo de la soberanía
y dimanante de ella, que comprende tanto la emisión del juicio jurisdiccional como
la ejecución de lo juzgado, la que se ejercita exclusivamente por los Juzgados
y Tribunales determinados por las leyes, según las normas de competencia y
procedimientos que las mismas establezcan, siendo única e indivisible. Sin embargo,
este monopolio en el juzgar y hacer ejecutar lo juzgado, no impide que los sujetos
de un posible conflicto, siempre que se refiera a derechos disponibles, puedan
encomendar la resolución de un conflicto a determinada jurisdicción. 5.2.3) Los
tribunales salvadoreños no pueden asumir el conocimiento de cualquier asunto que
se le plantee, pues éstos ejercen su potestad necesariamente dentro de un ámbito y con
los límites impuestos por la ley. Siendo un criterio de atribución general, la sumisión
expresa de las partes a determinada jurisdicción, devenida de un convenio o pacto
(pactum de foro prorrogando), reviste el carácter de una obligación contractual.
5.2.4) Siendo así, las partes contratantes por mutuo consentimiento, convinieron
en atribuir la jurisdicción exclusiva de las disputas relacionadas con el inicio y
terminación del contrato de importador entre éstas celebrado, a los Tribunales de
la ciudad de Munich, República Federal de Alemania, lo que es permitido, por lo
que inhiben la intervención de los tribunales de cualquier otro país; no siendo de
aplicación al presente caso, lo dispuesto en los Arts. 33 y 34 CPCM., citados por el
apoderado de la recurrente, en virtud de no tratarse de la competencia territorial,
sino de la jurisdicción.5.2.5) Lo que no es permitido, es que la jurisdicción de un
tribunal, dentro de un litigio de carácter contractual, venga fijado unilateralmente,
puesto que esa declaración solamente genera obligaciones a cargo de una de
las partes contratantes tal como lo preceptúa el Art. 1310 C.C., contrario sensu,
cuando son ambos los que aceptan las condiciones del acuerdo, la jurisprudencia
nacional ha dado por válida la sujeción a otra jurisdicción; así lo sostuvo la Sala
de lo Constitucional en la sentencia de inconstitucionalidad de las catorce horas del
día dos de marzo de dos mil doce, con Referencia 121-2007 y la Corte Suprema de
Justicia en pleno en su resolución de las nueve horas y cincuenta y seis minutos del
día treinta de agosto de dos mil doce, con Referencia 102-D-2011, en donde ambos
Tribunales dijeron que otra jurisdicción extranjera puede intervenir para resolver
los conflictos contractuales que sucedan en una relación jurídica de carácter
internacional en la que participan elementos extranjeros, pero advirtieron que dichas
conexiones deben ser comprobables y el acuerdo que prorroga la competencia o que
determine la ley aplicable al contrato debe estar expresamente consignado, sin dejar
duda sobre el mutuo consentimiento de las partes intervinientes en el mismo. 5.2.6)
Respecto a la solicitud de medidas cautelares como diligencias preliminares, el Art.
158 CPCM., determina que cualquiera que sea la jurisdicción internacionalmente
competente para conocer de un proceso, siempre que el objeto de la medida cautelar
se encontrare en territorio nacional, los tribunales de El Salvador podrán ordenar
y ejecutar, a solicitud fundada de parte, todas las medidas conservatorias o de
urgencia cuya finalidad sea garantizar el resultado de un proceso que se pretendiere
iniciar. El juez que ordene la medida fijará un plazo, conforme a lo dispuesto en

279
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

este código, dentro del cual el solicitante habrá de hacer valer sus derechos so pena
de caducidad de la medida. Si en el plazo acordado se promoviere la demanda, se
estará a lo que resuelva, en definitiva, el tribunal internacionalmente competente por
lo que en el caso de autos, tratándose de la facultad cautelar, por encontrarse los
bienes objeto de las medidas solicitadas en el territorio de El Salvador, sus tribunales
pueden conocer de la solicitud de las mismas. 5.2.7) En consonancia con lo expuesto,
sobre este punto, el funcionario judicial del Juzgado Primero de lo Civil y Mercantil
de esta ciudad, si tenía la facultad de conocer sobre las Diligencias Preliminares de
Medidas Cautelares, promovidas por el apoderado de la solicitante, sociedad …,
contra la sociedad …, pues la excepción a la regla de atribución de jurisdicción, es
la facultad cautelar, porque aunque las partes se hayan sometido a los tribunales de
la ciudad de Munich, República Federal de Alemania, por encontrarse el objeto de
la medida cautelar en territorio salvadoreño, habilita a los tribunales de este país a
conocer sobre las mismas, no así del proceso propiamente dicho…”
Sustanciación de las medidas cautelares

Art. 451.- Para la sustanciación de la solicitud de medidas cautelares se formará pieza


separada, que en ningún caso suspenderá el curso del proceso principal.

La solicitud adoptará la forma de demanda y se formulará con claridad y precisión, justificando


cumplidamente la concurrencia de los presupuestos legalmente exigidos para su adopción.

A dicha solicitud se acompañarán los instrumentos que la apoyen, y en ella se deberá


pedir, bajo pena de preclusión, la práctica de otros medios de prueba para la acreditación de los
presupuestos que sustentan la adopción de medidas cautelares.

Asimismo, en el escrito en que se soliciten habrá de ofrecerse caución, especificando de qué


tipo o tipos es la que se propone, con justificación del importe propuesto.

CÁMARA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DE OCCIDENTE:


SANTA ANA, en la Sentencia de fecha dieciocho de marzo de dos mil once, con
Referencia 49-2011, sostiene que

“…establece que la solicitud debe adoptar la forma de demanda y se formulará con


claridad y precisión, justificando cumplidamente la concurrencia de los presupuestos
legalmente exigidos para su adopción; esto deviene en que son aplicables a la
solicitud en comento, los requisitos que para la demanda, exige el Art. 276 CPCM..
entre éstos el Ord. 3° del mismo articulo que es el que nos atañe; de esto se infiere
que aunque no se hable estrictamente de demandado, adecuando aquel requisito
de ley, en la solicitud de medidas precautorias, debe de señalarse a la persona
natural o jurídica en su caso, contra quien se dictarán tales medidas; asimismo el
Art. 256 CPCM., Ordinales 1°, 2° y 7°, establece que el objeto de estas medidas,
es la acreditación de las circunstancias relativas a la capacidad, representación
o legitimación del “futuro demandado”, sin cuya comprobación no seria posible
entrar en el proceso; el Inc. último del Art. 92 de la ley en comento, nos habla que
el tribunal podrá requerir al presunto infractor, que proporcione la información
sobre otras personas que hubieren participado en la producción o comercialización
del producto de la presunta infracción. De ahí que, siendo la finalidad de las

280
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

medidas precautorias las antes apuntadas, para que aquéllas se cumplan es


necesario, además de los otros presupuestos señalados, se indique el nombre de
la personas o personas, que presuntamente están cometiendo la infracción que
posteriormente se denunciará por medio del proceso respectivo; tanto es así, que
la parte requirente de tales medidas, está obligada a rendir fianza para responder
de los daños y perjuicios que se ocasionaren a personas que no son responsables
de las infracciones denunciadas. Dicho sencillamente, un juez no puede decretar
las medidas que se solicitan, sino sabe a ciencia cierta contra quien se van a
decretar. Ahora bien, no obstante el nombre de los presuntos infractores contra
quienes se dictarán las medidas requeridas, sean un requisito esencial de
admisibilidad, la omisión del mismo, no es de aquéllas que sea insubsanable; el
Art. 277 CPCM., que franquea la ley como fundamento de la improponibildad
se refiere, a aquella falta de presupuestos materiales o esenciales, que por la
misma naturaleza de la acción ejercida no sean subsanables, tales como que el
objeto de la pretensión sea absurdo o imposible, o que carezca de competencia
objetiva o de grado; en el presente caso, la omisión del nombre o nombres de los
infractores, pudo haber sido subsanada fácilmente con una prevención hecha
por la Juez Aquo al solicitante, ya que por ser una situación de hecho, solo
requería de parte de éste, un poco de investigación…”

CÁMARA PRIMERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO: SAN SALVADOR, en la Sentencia de fecha uno de abril de dos mil
catorce, con Referencia 33-16CM1-2014

“…5.3.1) Es preciso mencionar que tal como lo exige el Art. 451 CPCM., la
solicitud de medidas cautelares adoptará la forma de demanda con claridad
y precisión, justificando la concurrencia de los presupuestos legales para su
adopción, acompañando los instrumentos que la apoyen, solicitando además la
práctica de otros medios de prueba para la acreditación de los presupuestos que
la sustentan; y en el caso de ofrecer caución, debe especificar de qué tipo o tipos
es la que se propone, con justificación del importe propuesto. La razón de ser de
las medidas cautelares es que el tiempo que hay que cubrir necesariamente en la
tramitación del proceso, puede implicar un grave peligro para la tutela real de
un derecho que se pretende sea declarado en la Sentencia, por el riesgo de que a
la hora de cumplir lo ordenado en la misma, el mandato quede en el vacio al no
existir posibilidad alguna de ejecutarla al haberse dado ocasión al demandado
de realizar actos que propician esa ineficacia. 5.3.2) Respecto del momento para
solicitar las medidas cautelares, el Art. 434 CPCM., dispone que se podrán
solicitar y adoptar en cualquier estado del proceso, y también como diligencia
preliminar a la interposición de la demanda.(El resaltado es nuestro)…”

Eficacia de las medidas cautelares

Art. 452.- Al terminar el proceso principal, por cualquier causa, con resolución favorable para
el que solicitó la medida cautelar, se mantendrá ésta mientras transcurre el plazo previsto para el
cumplimiento voluntario, si se concedió. Si tras el cumplimiento no se solicitare la ejecución, se
levantarán las medidas adoptadas.

281
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

Las medidas cautelares se levantarán cuando se conceda la ejecución provisional de la


Sentencia, en lo que ambas sean coincidentes.

Decisión sobre las medidas cautelares

Art. 453.- Las medidas cautelares se decretarán sin audiencia de la contraparte.

El tribunal se pronunciará en el plazo de cinco días desde la recepción de la solicitud en el


tribunal.

Si el tribunal estimare que concurren los presupuestos y requisitos para su adopción decretará
las medidas, razonando su procedencia con precisa indicación de las que se acuerden y determinará
el régimen a que han de estar sometidas, estableciendo en su caso la forma, cuantía y tiempo en
que deba prestar caución el solicitante.

La decisión que resuelva las medidas cautelares admitirá recurso de apelación, pero si quien
recurriese fuese aquel a quien las mismas perjudican el recurso se concederá sin efecto suspensivo.

CÁMARA PRIMERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO: SAN SALVADOR, en la Sentencia de fecha cinco de septiembre de dos
mil trece, con Referencia 109-35CM1-2013

“…V. Esta Cámara, debe de limitarse a analizar el rechazo de la solicitud de Medidas


Cautelares resuelta por la Jueza A Quo, por lo que se formulan los siguientes
argumentos jurídicos: 1) Cuando la pretensión adolece de un defecto en sus requisitos,
constituyéndose como un vicio absoluto en la facultad de juzgar, de parte del Órgano
Judicial, se trata en consecuencia de que la pretensión contenida en la solicitud
es improponible. Es decir, que habrá improponibilidad de la pretensión cuando el
juzgador luego de realizar el juicio de proponibilidad determine que se encuentra
absolutamente imposibilitado para juzgarla y conocer sobre su fondo. Respecto de
la figura de la improponibilidad, la jurisprudencia la ha justificado en el ejercicio de
atribuciones judiciales enraizadas en los principios de autoridad, eficacia, economía
y celeridad procesal, constituyéndose el rechazo sin trámite completo en una figura
que pretende purificar el posterior conocimiento de una solicitud o demanda, o en su
caso, ya en conocimiento, rechazarla por defectos de fondo. Y es que esta institución
faculta al juez, para evitar litigios judiciales erróneos, que, más tarde, retardarán
y entorpecerán la pronta expedición de justicia, entendida la improponibilidad
como una manifestación de control de la actividad jurisdiccional, que imposibilita
juzgar por defecto absoluto en la pretensión planteada. De conformidad con el
Inc. 1º del Art. 277 CPCM., se tienen entre algunas causas de improponibilidad las
siguientes: a) Que la pretensión tenga objeto ilícito, imposible o absurdo; b) Que
carezca de competencia objetiva o de grado, o que en relación al objeto procesal
exista litispendencia, cosa juzgada, compromiso pendiente; y c) Que evidencie falta
de presupuestos materiales o esenciales y otros semejantes…6) De lo estipulado en
la parte final del Art. 431 CPCM., se desprende que las medidas cautelares tan solo
aseguran la ejecución de una Sentencia, es decir, que la función de aseguramiento
de la efectividad de la tutela judicial define la naturaleza de las medidas cautelares,
las que no hay que confundir con las medidas para el aseguramiento del proceso o
alguna de sus fases, como la prueba anticipada, con lo que se aseguran los actos

282
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

procesales, pero no la efectividad de la tutela judicial. 7) … de conformidad con


lo dispuesto en el inc. 1º del Art. 453 CPCM., las medidas cautelares se decretan
sin audiencia de la parte contraria, no significa que puede haber ausencia de
identificación de sujeto pasivo. En concordancia con lo expuesto, este Tribunal,
comparte el criterio de la juzgadora en cuanto a que los sujetos que intervienen
en una relación procesal, que son sujeto activo y pasivo, deben de contar con la
legitimación en la causa y la capacidad procesal, y en el presente caso no hay
certeza jurídica respecto del verdadero legitimado pasivamente, pues la legitimación
alude a una especial condición o vinculación de uno o varios sujetos con un objeto
litigioso determinado, que les habilita para comparecer o exige su comparecencia,
en un proceso concreto, con el fin de obtener una sentencia de fondo, pues se busca
de este modo evitar la apertura de la actividad jurisdiccional en el vacío, por lo que
la operadora de justicia no ha hecho una interpretación errónea de los artículos
58, 61, 433 y 453 CPCM., que se han invocado en el escrito de apelación. VI. Esta
Cámara concluye, que en el caso sub júdice, la solicitud de Medidas Cautelares
Mercantiles, en su modalidad de Diligencias Preliminares a la interposición de la
demanda, no es procedente, en virtud que la pretensión incoada evidencia falta de
presupuestos materiales o esenciales, ya que no está determinada la legitimación de
la relación jurídica procesal, que en el caso de autos, carece de legitimación pasiva,
la que debe establecerse cuando se solicita una medida cautelar, como diligencia
preliminar, por la razón que tiene una función garantista sobre la efectividad del
futuro proceso, que no se alcanza con las diligencias previas…”

CÁMARA TERCERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO: SAN SALVADOR, en la Sentencia de fecha veintiséis de marzo de dos
mil catorce, con Referencia 70-DQCM-14

“…1. De lo establecido en el Art. 508 CPCM, transcrito anteriormente se infiere


que sólo puede interponerse recurso de apelación de las Sentencias y autos
definitivos, salvo cuando expresamente se establezca dicho recurso para otra clase
de resoluciones; en el caso en análisis nos encontramos ante una resolución de la
cual la ley expresamente ha otorgado recurso de apelación conforme a lo prescrito en
el inciso final del Art. 453 CPCM. A. No obstante lo anterior, de conformidad al inciso
uno del Art. 511 CPCM encontramos que: “El recurso de apelación deberá presentarse
ante el juez que dictó la resolución impugnada, y a más tardar dentro del plazo de cinco
días contados a partir del siguiente, al de la comunicación de aquélla.”B. Asimismo,
los incisos uno y dos del Art. 145 CPCM, establecen: “Los plazos establecidos para
las partes comenzarán, para cada una de ellas, el día siguiente al de la respectiva
notificación, salvo que, por disposición legal o por la naturaleza de la actividad que
haya de cumplirse, tengan el carácter de comunes, en cuyo caso aquéllos comenzarán
a correr el día siguiente al de la última notificación. En los plazos fijados en días sólo
se contarán los hábiles.”C. Finalmente, en el mismo sentido el Art. 143 CPCM dice:
“Los plazos conferidos a las partes para realizar los actos procesales son perentorios
e improrrogables, salvo disposición en contrario.”(Subrayados son nuestros) D. Las
disposiciones legales anteriormente transcritas evidencian el ámbito procesal de
aplicación del recurso de alzada, por lo cual se torna imperativo dilucidar si el recurso
de Apelación interpuesto se enmarca o no dentro de tales disposiciones, debiendo antes
aclarar lo siguiente: a) En términos generales la notificación es, ante todo, un acto de

283
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

comunicación procesal que tiene por finalidad hacer saber o comunicar a las partes las
distintas providencias judiciales, garantizándoles de esa forma el derecho de audiencia y
el principio de contradicción. b) Nuestro Código Procesal Civil y Mercantil contempla la
figura de la notificación tácita en su Art. 173 que reza: “La consulta del expediente por
la parte implica la notificación de todas las resoluciones que consten en el mismo hasta
el momento de la consulta”…”

SALA DE LO CIVIL DE LA CORTE SUPREMA DE JUSTICIA: SAN


SALVADOR, en la Sentencia de fecha veintinueve de octubre de dos mil catorce,
con Referencia 387-CAM-2013

“…la resolución de la cual se recurre es aquella que ordena las medidas cautelares
solicitadas por la parte demandante; en tal virtud, según lo establece el Art. 212
CPCM dicha resolución está tipificada como un “auto simple”, no obstante ello,
la ley en el Art. 453 Inc. 3° CPCM, concede a dicho auto el recurso de apelación,
derecho que no se extiende a la impugnación a través del recurso de casación, por
no tratarse ni de una sentencia ni un auto definitivo, que es a los que la Ley les
concede dicho recurso Art. 519 Ord. 1° CPCM…”

Ejecución de la medida cautelar

Art. 454.- Acordada la medida cautelar y prestada la caución, se procederá de oficio a su


inmediato cumplimiento, por los medios que fueren necesarios, aun los previstos para la ejecución
de Sentencias, cuyas normas serán de aplicación supletoria.

Cuando se trate de la anotación preventiva se procederá conforme a las normas del registro
correspondiente.

Los depositarios, administradores judiciales o responsables de los bienes o derechos sobre


los que ha recaído una medida cautelar sólo podrán enajenarlos previa autorización por auto del
tribunal, si concurren circunstancias excepcionales que hicieran más gravosa para el patrimonio
del demandado la conservación que la enajenación.

Modificación de las medidas cautelares adoptadas

Art. 455.- Si luego de adoptadas las medidas cautelares sobrevinieren hechos nuevos o de
nuevo conocimiento, podrá el tribunal, a instancia de parte, modificar el contenido de la medida
acordada

La solicitud de modificación de medidas cautelares será sustanciada con arreglo al


procedimiento previsto para la oposición.

Levantamiento de la medida cautelar

Art. 456.- Dictada la sentencia absolutoria, el juez acordará el inmediato levantamiento de


las medidas cautelares adoptadas, aunque aquélla aún no fuera firme; salvo que el demandante,
haciendo manifiesta la intención de recurrir, solicitare su mantenimiento o modificación. En tal
caso, el tribunal, oída la parte demandada y atendidas las circunstancias del caso, resolverá lo
procedente, con aumento de la caución si acordare el mantenimiento o la modificación de la
medida.

284
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

Si la sentencia estimare parcialmente la pretensión del demandante, el tribunal resolverá sobre


el mantenimiento, modificación o levantamiento de la medida con audiencia de las partes.

Cuando la sentencia absolutoria fuera firme, el tribunal dejará sin efecto inmediatamente y
de oficio todas las medidas cautelares adoptadas, pudiendo el demandado solicitar el pago de los
daños y perjuicios causados. Podrá asimismo el demandado reclamar la oportuna indemnización
en los supuestos de renuncia a la pretensión o desistimiento de la instancia.

LIBRO TERCERO
PROCESOS ESPECIALES

TÍTULO PRIMERO
EL PROCESO EJECUTIVO

Títulos ejecutivos

Art. 457.- Son títulos ejecutivos, que permiten iniciar el proceso regulado en este capítulo, los
siguientes:
1°. Los instrumentos públicos;
2°. Los instrumentos privados fehacientes;
3°. Los títulos valores; y sus cupones, en su caso
4°. Las constancias, libretas o recibos extendidos por las instituciones legalmente autorizadas,
cuando reciban depósitos de ahorro o de cualquier otra clase;
5°. Las acciones que tengan derecho a ser amortizadas, total o parcialmente, por las sumas
que hayan de amortizarse a cuenta del capital que incorporen;
6°. Las pólizas de seguro y de reaseguro, siempre que se acompañe la documentación que
demuestre que el reclamante está al día en sus pagos y que el evento asegurado se ha
realizado, así como la cuantía de los daños. Las pólizas de fianza y reafianzamiento,
siempre que se acompañe de la documentación que demuestre que la obligación principal
se ha vuelto exigible; (2)
7°. Los instrumentos públicos emanados de país extranjero, cuando se hubiere llenado las
formalidades requeridas para hacer fe en El Salvador; y
8°. Los demás documentos que, por disposición de ley, tengan reconocido este carácter.

CÁMARA DE LA TERCERA SECCIÓN DEL CENTRO, SAN VICENTE,


Sentencia de Apelación. N°C-48-PEMC-2015-CPCM de fecha: dieciocho de
febrero de dos mil dieciséis.
“En cuanto al primer punto apelado, conforme al Art. 30.1 de la Ley del Ejercicio
Notarial de la Jurisdicción Voluntaria y de Otras Diligencias: “…En cualquier
procedimiento, las partes podrán presentar en vez de los documentos originales,
copias fotográficas o fotostáticas de los mismos, cuya fidelidad y conformidad
con aquéllos haya sido certificada por Notario”, pero luego fija una excepción al
decir:”Esta disposición no tendrá lugar en el caso del juicio ejecutivo o cuando se
trate de documentos privados…”
Del tenor literal de la anterior disposición legal, pareciera ser que en el juicio
ejecutivo cualquier documento debe presentarse en original, pero al respecto ya la
jurisprudencia de casación civil, que tiene como encargo la correcta aplicación e

285
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

interpretación del Derecho objetivo, comentando el artículo en cita, ha explicado que


“…a cualquier documento se le puede dar fe [notarial] conforme a su original para ser
agregado a determinado procedimiento, a excepción de los títulos valores o documentos
con fuerza ejecutiva base de la acción y los documentos privados. En el primer caso, es
claro que no es posible dar inicio a un juicio ejecutivo, presentando como documento base
de la pretensión la fotocopia certificada del respectivo título o documento, ya que para
iniciar un proceso de tal naturaleza, aparte de los requisitos de ley que debe contener la
demanda, es pre-requisito la incorporación del título o documento en original; esto, por
la ejecutividad o acción cambiaria de que están revestidos los mismos…”(Sentencia de
la Sala de lo Civil de la Corte Suprema de Justicia, de las nueve horas y treinta minutos
del siete de agosto de dos mil tres, con Referencia 69-2003).
Es decir, que lo importante es que en el Juicio Ejecutivo, conste en original el
documento base la acción y no un documento como lo es el testimonio del Poder
Judicial con que actúa una parte u otra, sin perjuicio - por supuesto - de que en
cualquier estado del procedimiento, el juez prevenga a la parte la presentación de
los documentos originales, de conformidad al Art. 30 de la Ley del Ejercicio Notarial
de la Jurisdicción Voluntaria y de Otras Diligencias.
En el presente caso, el apelante ha reclamado que el Abogado de la parte
demandante presentó el testimonio del respectivo poder judicial con que actúa, en
copia certificada por notario, lo que así constata esta Cámara al dar lectura a los
folios 4/8 del proceso principal, sin embargo, la presentación así hecha -a juicio
de este Tribunal-no contraviene el Art. 30 de la Ley del Ejercicio Notarial de la
Jurisdicción Voluntaria y de Otras Diligencias, porque no se trata del documento
base de la acción, cuya presentación en original es la que indiscutiblemente procura
la ley y, por consecuencia, tampoco es que se haya incumplido con la procuración
preceptiva a que se refiere el Art. 67 del CPCM.
No obstante lo anterior, también notamos que en el caso en concreto, el Licenciado
[…] mediante escrito de folios […], presentó en copia simple y en original el
testimonio del poder judicial con que actúa y pidió que confrontada la primera con
el segundo, se le devolviera éste último y es así como a folios

[É] de la pieza en cuestión aparece agregada una copia simple con razón de haber
sido confrontada con su original el día veintiuno de Julio de dos mil quince, por
lo que la propia Juzgadora dio fe de la autenticidad del poder con que actúa el
Licenciado […], sin que pueda advertirse defecto alguno en cuanto a su legitimación.
Entonces en lo que corresponde al primer motivo de apelación el impetrante no tiene
la razón.”

CÁMARA PRIMERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, SAN SALVADOR N°5-2CM2-2012-4 Fecha: veintidós de febrero de
dos mil doce.

“La presente resolución se pronunciará exclusivamente sobre los puntos y cuestiones


planteados en el escrito de interposición del recurso de apelación de fs. […], del
presente incidente, de conformidad con lo dispuesto en el Inc. 2° del Art. 515 CPCM.,
por lo que ésta Cámara formula las siguientes estimaciones jurídicas:

286
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

El proceso ejecutivo es un proceso especial y de ejecución, tendiente a hacer


efectivo el cumplimiento de una obligación documentada en alguno de los títulos
legalmente dotados de fehaciencia o autenticidad. La importancia del título radica,
en que es uno de los requisitos esenciales para que proceda la vía ejecutiva, ya que
representa el documento con fuerza ejecutiva, es decir, un verdadero título ejecutivo;
en tal sentido, observamos que el documento presentado por la parte actora, es un
instrumento privado autenticado de contrato de promesa de venta de inmueble, que
en un primer momento, de conformidad al Art. 457 N° 2 CPCM., permitía iniciar el
proceso ejecutivo; sin embargo, ese sólo hecho no basta para acreditar en cualquier
documento o contrato, la fuerza ejecutiva, pues para que un proceso ejecutivo se
active válidamente es necesario que se cumplan ciertos requisitos: a) Que haya un
acreedor o persona con derecho a pedir; b) Que haya un deudor determinado; c)
Que haya una deuda líquida y exigible; y, d) Que haya un plazo vencido, es decir,
mora; requisitos que de alguna manera están plasmados en el Art. 458 CPCM.

Es por ello que no puede aprobarse jurídicamente que a cualquier contrato,


indistintamente su naturaleza, se le pueda dotar de fuerza ejecutiva mediante el
acuerdo mutuo de las partes. De ser así, se contradeciría la naturaleza de algunos
contratos en los que no puede comprenderse la facultad de hacerlos ejecutivos.

El fundamento del proceso ejecutivo se centra, en la realización de los derechos


establecidos por títulos que el legislador prevé y resoluciones judiciales,
presuponiendo existente un crédito que deriva de la especial modalidad que enviste
el documento que lo comprueba. No puede considerarse que todos los contratos
pueden ser títulos ejecutivos, pues como principio general, tratándose de contratos
de prestaciones recíprocas, el crédito de una de las partes, no es idóneo como
título hábil para proceder ejecutivamente, de conformidad al Art. 1423 C.C., ya
que incluso en el mismo contrato puede que una u otra parte ocupe el puesto de
acreedor y deudor, y para tal caso no les asiste igual derecho, cosa que sucede si
se accionara de conformidad a la naturaleza del contrato mismo. Por otra parte
con la cláusula de ejecutividad insertada por las partes en un contrato, en virtud
del principio de autonomía de la voluntad, se rompería la igualdad de las partes en
el negocio jurídico determinado, pues una de ellas le favorecería, ya que el otro no
podría reclamar el cumplimiento de la otra parte (porque no es crediticio), sino por
otro proceso de diferente naturaleza.

Es cierto que a los particulares les asiste la facultad constitucional de contratar


libremente, y que dicha libertad comprende, tanto la facultad de escoger con quien,
cuando y como contratar, como también la facultad de determinar el contenido
del contrato, incorporando las cláusulas y estipulaciones que mejor favorezcan a
sus intereses. Pero también es cierto que esa libertad no es absoluta, pues existen
limitantes a las cuales los contratantes no pueden sobrepasar, la ley.

El ejercicio desmedido de esa libertad, vacía el contenido de otros derechos y


principios que ameritan igual o mayor protección, como la buena fe y la igualdad,
volviéndose un abuso; en el caso sub-judice, se puede advertir ese ejercicio
desmedido de la libertad de contratación en su elemento de libre determinación del
contenido del mismo, ya que sin mayor análisis se puede apreciar la desigualdad en

287
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

los derechos de las partes, pues al ser el contrato de promesa de venta, un contrato
bilateral y solemne, al reconocerle fuerza ejecutiva por acuerdo mutuo de las partes,
se está favoreciendo a la promitente compradora, quien obtiene de esta relación
un derecho especial de cobro, mientras el promitente vendedor no puede accionar
igual vía ejecutiva, pues no le asiste tal derecho; al mismo tiempo, contradice la
naturaleza de este contrato, desde la perspectiva que lo que pretende es reducir los
costes de transacción de ambas partes en iguales términos, y no solo de una, ya
que la fuerza ejecutiva que se pretende, pone en evidente desventaja a la otra parte,
quien al final soporta todo el coste. Si bien es cierto esta última, es quien se dice ha
incumplido el contrato, también es cierto que ésta tiene derecho a que se le exija su
cumplimiento por la vía adecuada, que es la prevista por el legislador para este tipo
de contratos no ejecutivo, de conformidad a los Arts. 1360 Inc. 2° y 1425 C.C., en la
cual puede apreciarse detalladamente todos los elementos naturales y esenciales del
mismo, cuyo estudio es ineludible y que no pueden ser dirimidos por la vía ejecutiva,
pues la modalidad del contrato no lo permite.

Esta Cámara observa, que tal como lo señala el apoderado de la parte recurrente
[…], la Jueza A Quo cometió ciertos errores al efectuar el análisis de la fuerza ejecutiva
del título presentado, manifiesta que éste se trata de un testimonio de compraventa al
crédito garantizada con hipoteca, cuando en realidad se trata de un Instrumento Privado
Autenticado de Contrato de Promesa de Venta de Inmueble, situación ésta que no afectó
el fundamento de la resolución pronunciada, pues en otras partes de la resolución se hace
alusión al contrato de promesa de venta. Asimismo, manifestó que el […], es apoderado
de la sociedad [demandante], cuando en realidad el mencionado profesional comparece
como apoderado general y especial de la [demandante], siendo la sociedad […], la
demandada, por lo que esta Cámara coincide con lo expresado por el recurrente en su
escrito de apelación en lo que se refiere a que la juzgadora relacionó en la Sentencia en
forma equivocada tales puntos.

No obstante lo anterior, esta Cámara estima que dichos errores son meramente
materiales, que no tienen ninguna trascendencia con el fondo de la resolución
impugnada, como lo sostiene el impetrante, ya que no se cumplen los requisitos
establecidos en el Art. 232 CPCM.

[…]

Esta Cámara concluye, que en el caso sublite, no puede procederse válidamente


al proceso ejecutivo, ya que el documento presentado como base de la pretensión,
que consiste en un contrato privado autenticado de promesa de venta, no puede ser
ejecutivo, pues su naturaleza no lo permite y crearlo de tal forma sería contradecir
su regulación, que ya prevé la forma jurídica para hacer valer los derechos que del
mismo emanan. Tampoco es idóneo como título hábil para proceder ejecutivamente,
de conformidad con lo dispuesto en los Arts. 1360 Inc. 2° y 1425 C.C., ya que es un
contrato de prestaciones recíprocas, en que cualquiera de las partes puede obtener
la calidad de acreedor o deudor dependiendo de la situación de incumplimiento que
se presente, de acuerdo a lo establecido en el Art. 1423 C.C., y habilitar la acción
ejecutiva a una sola de las partes contratantes, lo considera esta Cámara, como
violatorio del principio de igualdad procesal. Art. 5 CPCM.

288
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

Las partes de común acuerdo no pueden dotar de fuerza ejecutiva a un instrumento


que por su naturaleza no la posea, pues no pueden obviarse los requisitos legales
establecidos para el efecto; de lo contrario, se contradeciría la naturaleza de algunos
contratos en los que no puede comprenderse la facultad de hacerlos ejecutivos.

Consecuentemente con lo anterior, existe en la pretensión de la demanda de mérito,


evidente falta de presupuestos materiales o esenciales; por lo que la resolución
impugnada está pronunciada conforme a derecho, debiéndose confirmar por las razones
expresadas por este Tribunal, en el sentido que se declara improponible la demanda
presentada por el [apoderado de la parte demandante], y no como apoderado de la
sociedad [demandada], como erróneamente lo manifiesta la Jueza A Quo.”

CÁMARA DE LA SEGUNDA SECCIÓN DE OCCIDENTE, SONSONATE


Apelación N° INC-CYM-24-15 de fecha: veintiséis de junio de dos mil quince.

“Que el Art. 457 Ord. 8° CPCM, dice lo siguiente: “Son títulos ejecutivos, que
permiten iniciar el proceso regulado en éste capítulo, los siguientes: 8° Los demás
documentos que, por disposición de ley, tengan reconocido este carácter”; que lo
anterior permite considerar que no solo con los títulos enumerados taxativamente en
la citada disposición legal se puede iniciar un juicio ejecutivo, sino que existen otros
a los que distintas leyes les han otorgado la calidad de “títulos ejecutivos”, por lo
que la enumeración que tal artículo hace no debe entenderse cerrada o limitada a
los títulos expresamente reconocidos en el precepto legal aludido; que en ese sentido,
el Art. 71 lit. a) de la Ley del Fondo Social para la Vivienda, dice literalmente que:
“Los juicios ejecutivos que entable el Fondo o las instituciones intermediarias
del mismo, estarán sujetas a las leyes comunes, con las modificaciones siguientes.
a) Las certificaciones del Director Ejecutivo sobre sumas adeudadas al Fondo por
cualquier concepto, constituyen títulos ejecutivos”.

Que partiendo de las disposiciones legales transcritas, puede concluirse que la


certificación del control individual del registro de préstamos correspondiente al
señor [...], extendida por el Presidente y Director Ejecutivo del Fondo Social para
la Vivienda, por ley constituye título ejecutivo y, por lo tanto, permite al demandante
iniciar el proceso ejecutivo; que, por ello, no puede considerarse de que la demanda
es improponible por falta de presupuestos materiales y esenciales por no contener la
obligación contraída por el demandado, como lo afirma el Juez A Quo.

Que es necesario aclararle al juzgador con relación a las expresiones “documento


de ejecución” y “documento ejecutivo”que menciona en el párrafo segundo del auto
impugnado, que tales expresiones tienen un sentido distinto, pues el título ejecutivo
es el que sirve como documento base para iniciar un juicio ejecutivo, en cambio, el
título de ejecución es el necesario para seguir la ejecución forzosa luego de haber
obtenido una sentencia estimativa en el proceso correspondiente.

Que, por las razones expuestas, y estimando que no concurre la causa o motivo
de improponibilidad declarado por el Juez A Quo, ésta Cámara deberá revocar
la resolución apelada y ordenarle al mismo que admita la demanda presentada y
le dé el trámite legal correspondiente, siempre que reúna los requisitos legales de
admisibilidad previstos en el Art. 276 CPCM..”

289
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

CÁMARA SEGUNDA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, SAN SALVADOR, Apelación N°57-4CM-13-A Fecha: diecinueve de
agosto de dos mil trece.

“En el caso en estudio, el Licenciado […], en calidad de Agente Auxiliar del señor
Fiscal General de la República, ha demandado a la sociedad [….], a fin de que se le
condene a pagar al Estado de El Salvador en el Ramo de Hacienda, la cantidad de
[…], en concepto de Impuesto Sobre la Renta, correspondiente al ejercicio fiscal del
año mil novecientos noventa y cinco; más los intereses legales moratorios anuales,
calculados a partir del día dos de mayo de mil novecientos noventa y seis, hasta el
día de su completo pago o remate.

Para ello, ha presentado junto con su demanda, Certificación de Estado de Cuenta,


extendida por la Dirección General de Tesorería, la cual fuera remitida al Señor
Fiscal General de la República, mediante Oficio Número […], Certificación de fecha
veintidós de diciembre de dos mil tres, en la que se hace constar que la Sociedad
demandada, adeuda al estado la cantidad reclamada por éste en su demanda, y que
de conformidad al Art. 68 de la Ley Orgánica de la Administración Financiera del
Estado, es procedente iniciar por parte de la Fiscalía General de la República el
correspondiente juicio ejecutivo.

Dicha certificación, de acuerdo a lo expuesto en los Arts. 68 de la Ley Orgánica de


la Administración Financiera del Estado, 269 literal f) del Código Tributario y 457
ordinal 8° del Código Procesal Civil y Mercantil, tiene fuerza ejecutiva y constituye
el documento base de la presente ejecución.

No obstante el Juez A Quo, considera que con la sola presentación de la


referida certificación, no es procedente despachar la ejecución, ya que siendo la
Certificación a que se refiere el Art. 269 literal del Código Tributario, el resultado de
la finalización del proceso administrativo señalado en el Art. 270 del mismo cuerpo
legal, el demandante debe acompañar a la misma certificación del procedimiento
administrativo de cobro tributario, por considerarlo el referido funcionario un
requisito de procesabilidad de la pretensión incoada.

Consideramos que la decisión tomada por el Juez A Quo carece de fundamento


legal, ya que de la lectura del Art. 270 del Código Tributario, vigente antes de
las reformas al mismo, publicadas en el Diario Oficial Número […], de fecha
veintiuno de diciembre de dos mil nueve, el cual era el aplicable al momento del
cobro judicial del período fiscal que se pretende cobrar a través de la demanda;
se advierte que el referido procedimiento de cobro, es un trámite interno que debe
verificarse por la Administración Tributaria, por medio de la Dirección General de
Tesorería; procedimiento que como consta en el referido Artículo se realiza en forma
escalonada y atendiendo a plazos que la misma ley señala, es así que la remisión
de la certificación de deuda a la Fiscalía General de la República por la Dirección
General de Tesorería, es una de las etapa del referido procedimiento, que no se
verifica sin que antes se haya concluido con las anteriores etapas, por lo que la
conclusión de las anteriores etapas, da la pauta para que la Fiscalía General de la
República proceda de conformidad al literal d) del Art. 270 del Código Tributario.

290
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

Por lo que de la lectura del referido Artículo se concluye que lo que es necesario
para iniciar la acción ejecutiva es la Certificación del Estado de Cuenta, extendida
por la Dirección General de Tesorería, la cual se remite al Señor Fiscal General
de la República, misma que como ya se dijo trae aparejada ejecución, los Arts. 68
de la Ley Orgánica de la Administración Financiera del Estado, 269 literal f) del
Código Tributario y 457 ordinal 8° del Código Procesal Civil y Mercantil, sin que a
la misma le acompañe otro documento.

El Juez A Quo al requerir al demandante certificación del procedimiento


administrativo, está exigiendo más requisitos de los establecidos en la ley
para la admisión de la demanda en estudio, excediendo con ello sus facultades
jurisdiccionales.

Lo anterior, debido a que verificar la realización o no del referido procedimiento


administrativo no es competencia del juzgador o bien no es un requisito de
procesabilidad para la demanda interpuesta, ya que la ley es clara cuando exige
nada más la presentación de la referida certificación para iniciar la acción ejecutiva,
sin más elementos a probar; ya que como se dijo el proceso administrativo de cobro
tributario, es un procedimiento administrativo, competencia de la Dirección General
de Tesorería de la Administración Tributaria, el cual se realiza a nivel interno.

Además, es importante recordar que en todo caso, será a la sociedad demandada a


la que le corresponderá, en la etapa de contestación de la demanda, alegar todas las
excepciones y defensas que tuviese, como por ejemplo, la falta de ejecutividad del
título, la falta del cumplimiento de la etapa de cobro administrativo que establece la
ley, o la verificación de pagos totales o parciales y probarlas en la etapa probatoria
del proceso.

Constando en autos, que ha sido presentado en el proceso venido en apelación el


documento que según la ley, por si sólo trae aparejada ejecución, Arts. 68 de la
Ley Orgánica de la Administración Financiera del Estado, 269 literal f) del Código
Tributario y 457 ordinal 8° del Código Procesal Civil y Mercantil, cumpliendo con
ello los requisitos de procesabilidad exigidos por la ley para admitir a trámite la
demanda ejecutiva que nos ocupa, las suscritas consideran procedente revocar el
auto definitivo recurrido, por no haber sido pronunciado conforme a derecho, y
ordenarle al Juez A Quo, admita la demanda presentada y continúe con el trámite
de ley.”

CÁMARA SEGUNDA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, SAN SALVADOR, Apelación N° 65-3CM-14-A Fecha: quince de
octubre de dos mil catorce.

“4.4 Por otra parte el apelante argumenta que la Juez A Quo ha realizado una
errónea valoración de la prueba, en cuanto a que los documentos con los cuales
pretende acreditar los desembolsos se encuentran agregados al proceso en copia
certificada notarialmente, lo cual de conformidad al art.30 de la Ley del Ejercicio
Notarial, de la Jurisdicción Voluntaria y de otras Diligencias (LJVOD), no es
permitido en el proceso ejecutivo.

291
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

4.5 Afirmación que tampoco es válida, ya que la prohibición que hace la citada
disposición jurídica respecto al proceso ejecutivo, se refiere a que no se pueden
presentar copias simples, ni certificadas notarialmente del documento base de
la pretensión, puesto que los documentos que son títulos ejecutivos deben ser
presentados en original, pero ello no implica que en los procesos ejecutivos no se
pueda presentar otro tipo de prueba documental en copia.

4.6 Por lo que, consideramos que en el caso de marras dicha prohibición no es


aplicable, puesto que la documentación que se ha presentado como copia simple,
no es el documento base de la pretensión, ya que lo único que se pretende probar
con dicha documentación son los desembolsos efectuados al demandado, en
consecuencia, la Juez A Quo ha realizado una adecuada valoración de la prueba al
tomar en cuenta las copias simples presentadas por la parte demandante, lo cual le
ha permitido realizar una mejor fijación de los hechos, en consecuencia, se declara
sin lugar éste agravio.”

Objeto del proceso ejecutivo

Art. 458.- El proceso ejecutivo podrá iniciarse cuando del título correspondiente emane una
obligación de pago exigible, líquida o liquidable, con vista del documento presentado. (2)

Asimismo cuando los títulos ejecutivos se refieran a deudas genéricas u obligaciones de hacer
podrá iniciarse el correspondiente proceso ejecutivo.

CÁMARA SEGUNDA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, Apelación Referencia: 30-3CM-12-A de fecha veintiocho de junio de
dos mil doce.

“El juicio ejecutivo es un proceso especial mediante el cual se hace efectivo el


cumplimiento de una obligación documentada en algún título dotado de autenticidad
y a diferencia de los procesos de conocimiento no tiene por objeto la declaración de
hechos dudosos o controvertidos sino simplemente la realización de los que estén
esclarecidos por resoluciones judiciales o por títulos que autoricen la vehemente
presunción que el derecho del actor es legítimo, por eso el documento que se presenta
ha de ser suficiente y bastarse a sí mismo para que se despache la ejecución. En
ese sentido el artículo 458 del Código Procesal Civil y Mercantil establece que
el proceso ejecutivo puede iniciarse cuando emane de una obligación de pago en
dinero, exigible, líquida o liquidable, con vista del documento presentado. Por su
parte, el artículo 457 del mismo cuerpo legal, establece en su numeral tercero que
son títulos ejecutivos los títulos valores. El título es una declaración contractual o
autoritaria que consta siempre por escrito y cuenta de la existencia de obligación
de manera fehaciente, es decir, que el titulo ejecutivo es la declaración sobre la cual
debe tener lugar la ejecución. La obligación es cierta cuando el titulo da prueba
plena al juzgador, por su simple lectura, de quien es el acreedor y quien es el deudor.
La obligación debe ser liquida, lo cual significa que del titulo debe resultar la
determinación de la especie de la deuda y de la cantidad que debe ser satisfecha.
Además debe contener una obligación exigible y de plazo vencido. La ejecutividad
de un documento está determinada por la ley, es decir que es la ley la que establece
cuales documentos traen aparejada ejecución. Art. 457 ordinal 3° CPCM.”

292
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

CÁMARA PRIMERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, SAN SALVADOR, Apelación Referencia N°62-25CM2-2014 de Fecha:
doce de mayo de dos mil catorce.

“El proceso ejecutivo para que se active válidamente, es necesario que se cumplan
ciertos requisitos: a) que haya un acreedor o persona con derecho a pedir; b)
que haya un deudor determinado; c) una deuda liquida y exigible; d) un plazo
vencido; y, e) un documento que tenga aparejada ejecución; la falta de alguno
de estos requisitos impide tramitar conforme a la ley la pretensión ejecutiva
invocada.

Al analizar el documento agregado […], se determina que la cláusula VII) del


aludido testamento ordena que el inmueble objeto de este litigio, al fallecimiento
del causante, sea vendido o arrendado, debiendo repartirse por partes iguales
entre los herederos instituidos, el producto de la venta o el arriendo; y en caso
de no ponerse de acuerdo con los otros o se opusiera a lo anterior, la decisión de
dos herederos será suficiente para proceder a la realización de la compraventa o
al arrendamiento de la vivienda, perdiendo el que se opusiera el derecho que le
corresponde como asignatario.

De la lectura de la referida cláusula, se estima que no se consigna ninguna


obligación de hacer propiamente dicha, en virtud que el mencionado causante
no le impuso al demandado […], una obligación de plazo vencido y exigible, que
él deba cumplir por la vía ejecutiva.

En ese sentido, aunado a lo anterior, consta en el proceso la documentación


certificada por notario […], en la cual consta que el inmueble a que se refiere
la aludida cláusula del testamento, fue debidamente inscrito el traspaso por
herencia en el respectivo Registro de la Propiedad Raíz e Hipotecas, a favor
de los demandantes […], y el demandado […], lo que significa que los tres son
condueños del mismo.

La circunstancia precedente, abona a que la pretensión contenida en la demanda


de mérito incoada por los indicados actores es defectuosa, porque los mismos
están vinculados a un inmueble del que no sólo ellos son los titulares, sino
también dicho demandado, pues todavía no existe una partición para poder
determinar el límite de su derecho, y así establecer objetivamente la parte del
bien raíz que le corresponde a cada uno.

Esta Cámara concluye que en el caso sub-iúdice, la pretensión ejecutiva


planteada por el apoderado de la parte actora Licenciado […], es improponible,
en virtud que evidencia falta de un presupuesto material y esencial para iniciar
el referido proceso, por la razón que la cláusula contenida en el testamento no
determina una obligación de hacer, y el aludido demandado ostenta la calidad de
copropietario del mencionado bien raíz.

Consecuentemente con lo expresado, es procedente confirmar el auto definitivo


impugnado y condenar en costas de esta instancia a la parte apelante.”

293
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

CÁMARA DE LA CUARTA SECCIÓN DEL CENTRO, SANTA TECLA


Apelación N°21-EC-13 Fecha: trece de mayo de dos mil trece.

“El Art. 457 Ord. 8° CPCM., establece que son títulos ejecutivos, que permiten
iniciar el proceso ejecutivo “Los demás documentos que, por disposición de ley,
tengan reconocido este carácter”. Dentro de esos documentos que por disposición
de ley tienen reconocido la calidad de título ejecutivo, se encuentran los consignados
por el Art. 36 lit. a) de la Ley del Seguro Social, que son las certificaciones del
Director sobre sumas adeudadas al Instituto.

De las disposiciones mencionadas se puede deducir claramente, que uno de


los documentos que tienen reconocido el carácter de título ejecutivo, son las
certificaciones del Director del Instituto Salvadoreño del Seguro Social sobre sumas
adeudadas al Instituto. No establece la ley otros requisitos del título, que no sean que
se trate de una certificación, que dicha certificación sea extendida por el Director
de dicha institución y que contenga la suma adeudada. Sin olvidar obviamente los
requisitos que debe contener la obligación documentada en el título, regulados en el
Art. 458 CPCM., es decir, ser una obligación de pago, exigible, líquida o liquidable.

Exigir más requisitos que los establecidos por la ley, sería violatorio del principio
de legalidad, establecido en los Arts. 2 y 3 CPCM., que manda que los jueces
están vinculados por la normativa constitucional, las leyes y demás normas del
ordenamiento jurídico, sin que puedan desconocerlas ni desobedecerlas y a que todo
proceso debe tramitarse conforme a las disposiciones de ese cuerpo normativo, las
que no podrán ser alteradas por ningún sujeto procesal.

Las certificaciones del Director del Instituto Salvadoreño del Seguro Social, sobre
sumas adeudadas al Instituto, tiene la fuerza probatoria suficiente asignada por ley
para comprobar la legitimación activa y pasiva, y, la existencia y monto de la obligación
documentada. Valor probatorio que resulta de las propias características del documento
(instrumento público), expedido por funcionario o autoridad en el ejercicio de su función,
Art. 331 CPCM. En ese sentido, si el apoderado de la parte demandada considera que
el firmante de la certificación, no es el Director del Instituto Salvadoreño del Seguro
Social, o que la firma es falsa, debió formular la correspondiente oposición y probar
dicha circunstancia, pues en los procesos ejecutivos, se produce un desplazamiento de
la iniciativa del contradictorio, que corresponde al demandado mediante la eventual
formulación de la oposición, lo cual no hizo en el momento procesal oportuno, no
obstante de haber sido emplazado en legal forma.

En vista de los razonamientos expuestos, la sentencia apelada, debe confirmarse y


condenarse en las costas procesales de esta instancia a la parte perdidosa y así se
resolverá.”

CÁMARA SEGUNDA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, Apelación Referencia 7-4C-12-A de treinta de mayo de dos mil doce.

“Respecto a la notificación hecha a la sociedad BALAM QUITZE sobre la intención


de requerir el cobro a la sociedad SAN SIMON S.A. DE C.V., no cumple con los
requisitos del Art. 37 de la Ley de Notariado, y que el documento base de la pretensión

294
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

no cumple con los requisitos del Art.37 de la Ley de Propiedad Inmobiliaria por
pisos y apartamientos, ….que el acta presentada por la parte actora y que corre
agregada a Fs.6 de la pieza principal, cumple con los requisitos del Art.37 de la Ley
de Propiedad Imobiliaria por Pisos y Apartamientos por la cual eldocumento base
de la pretensión tiene fuerza ejecutiva.”

Demanda

Art. 459.- En la demanda del proceso ejecutivo se solicitará el decreto de embargo por la
cantidad debida y no pagada, debiéndose acompañar en todo caso el título en que se funde la
demanda y los documentos que permitan determinar con precisión la cantidad que se reclama.

Se podrán señalar bienes del deudor en cantidad suficiente para hacer frente al principal e
intereses de lo que se deba y a las costas de la ejecución.

CÁMARA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DE OCCIDENTE,


SANTA ANA, Apelación Referencia N°INC-APEL-127-3 de fecha: diecinueve de
octubre de dos mil doce.

“Nuestro Código Procesal Civil y Mercantil regula en el Art. 457 CPCM, los Títulos
Ejecutivos que permiten iniciar el proceso ejecutivo, y entre ellos está en el No. 1 de
la referida disposición, los Instrumentos Públicos.-El Licenciado […], en calidad
de representante procesal del señor […], demanda en proceso ejecutivo, a la señora
[…], en base a unos cheques que fueron elevados a la categoría de Instrumento
Público por medio de Diligencias de Reconocimiento de Firma, y en los cuales solo
en uno de ellos consta que la referida demandada, es titular de la cuenta bancaria
de la cual se libraron, no así de los otros dos restantes, cuyo titular de la misma es
el señor […].-

Planteadas así las cosas, esta Cámara considera lo siguiente: Se pretende por la
parte actora, que por medio del proceso ejecutivo mercantil que promueve en contra
de la demandada señora […], cumpla ésta con la obligación contenida en los
cheques librados a favor del señor […], presentando para ello, las diligencias de
reconocimiento de firma ya antes relacionadas.-
Al analizar dichas diligencias, se observa que dos de los tres cheques que se exhiben
para su reconocimiento, corresponden a la cuenta bancaria No[…] del Banco […],
cuyo titular es el señor […], si bien es cierto que la firma que calzan los tres cheques,
pertenecen a la señora […], por así, haberse tenido por reconocida en las referidas
diligencias ya que ésta no compareció a las citas que al efecto se señalaron, no
consta que ésta estuviera facultada para librar cheques a nombre del señor […],
autorización que puede ser, ya sea por medio del registro de la firma en la tarjeta
que al efecto deberá llevar la institución bancaria en la cual se encuentra registrada
la cuenta corriente, debiéndose entender que para que la persona autorizada actué
como mandataria, sería menester que en la respectiva tarjeta se hiciera constar que
ella actuaría a nombre del titular de la cuenta, o bien como claramente lo establece
el Art. 802 C. Com., cuando dice que la facultad de librar cheques a nombre de otra
persona deberá constar en mandato especial o en uno general con cláusula especial;
sin embargo en las Diligencias de Reconocimiento de Firma, que sirven de base

295
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

para entablar la acción ejecutiva no consta informe alguno emitido por la Institución
Bancaria, en el que se manifestara que la señora […], estuviere autorizada para
firmar cheques de la cuenta cuyo titular es el señor […], por lo que si tal facultad
nunca se comprobó de manera legal, no se debió ordenar la comparecencia de dicha
señora en las referidas diligencias de reconocimiento de firma, ya que aunque ésta
la hubiere reconocido, el titular de la referida cuenta bancaria es el señor […],
y por ello, aunque se tuviera por reconocida la firma que calzan dichos cheques,
no se podía tener por reconocida la obligación contenida en los mismos, por las
razones ya antes indicadas; por lo que se concluye, que a la señora […], no le
asistía el derecho para comparecer al reconocimiento de firma y obligación, y por
consecuencia no puede ser la persona obligada al pago de los mismos, y mucho
menos ser demandada en la calidad que pretende la parte actora, pues no existe una
vinculación subjetiva de ambas partes, actora y demandada, con el objeto litigioso.-
Esta Cámara comparte lo argumentado por el señor Juez A Quo, ya que la señora
[…], carece de legitimación pasiva, para ser demandada en el proceso ejecutivo
mercantil, y siendo que es un requisito subjetivo de la pretensión y con el objeto de
que la persona que la ostenta tenga oportunidad de ejercer su defensa, es necesario
que el interesado demande a quien por derecho le corresponde, pues de lo contrario
la pretensión fracasaría en el intento.-
La regla esencial en el libramiento de un Cheque, es que el librador del Título
responde de su pago, regla que se consagra en el Art. 801 C. Com., donde se indica
que cualquier estipulación en contrario se tendrá por no escrita, es decir, que
toda formula inserta en el documento, por la cual el librador pretenda sustraer a
esa obligación, será reputada como inexistente; he ahí la importancia de lo antes
apuntado, que es el mandato especial, o el registro de la firma en la tarjeta de la
Institución bancaria, para aquel que libra un cheque a nombre de otra persona, ya
que el alcance de responsabilidad del libramiento del mismo depende de ello.”
CÁMARA SEGUNDA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL
CENTRO, SAN SALVADOR, Apelación N°69-3CM-14-A de fecha: diecisiete de
noviembre de dos mil catorce.

“De los Arts. 458, 459 y 460 del Código Procesal Civil y Mercantil (CPCM) se
pueden extraer los elementos que debe contener un título ejecutivo para acceder a la
pretensión de la parte demandante, y son los siguientes:
a) Acreedor con derecho a pedir y deudor cierto: es decir, que la persona que
promueve el proceso debe estar legitimada para hacerlo, estableciendo de forma
clara quién es el deudor.
b) Plazo vencido: que el documento ejecutivo sea exigible, es decir, que su plazo debe
estar vencido al momento de la presentación de la demanda, no debe estar sujeto a
plazo o condición pendiente.
c) Deuda líquida o liquidable: debe entenderse que la deuda es líquida cuando se
establece con precisión, sin lugar a dudas cuál es el monto adeudado y reclamado;
y una cantidad liquidable, es aquella que pueda convertirse en una suma líquida
mediante una o más operaciones aritméticas.

296
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

d) Descripción del título con el que se pretende iniciar el proceso, así como la
incorporación del mismo junto a la demanda, sin el cual no se le dará tramite.
Teniendo claro qué requisitos debe contener el título ejecutivo para proceder a su
ejecución, es que procederemos analizar si el documento presentado como base de la
pretensión reúne cada uno de ellos.
En el presente proceso se ha presentado como documento base de la pretensión
testimonio de préstamo mercantil otorgado por […] a favor del señor […].
Del cual se extrae sin lugar a dudas quién es el acreedor y el deudor de dicha
obligación, así como también se advierte que dicha obligación es de plazo vencido
en virtud de la cláusula de caducidad que las partes pactaron, sin embargo, en
cuanto a la existencia de la deuda liquida o liquidable, las partes establecieron lo
siguiente:
(É) Cláusula IV) TASA DE INTERÉS NOMINAL Y RECARGO POR MORA (É) “b)
CLÁUSULA PENAL: Si el deudor no paga la cuota mensual del presente crédito,
indicada en la cláusula relativa a la forma de pago de éste instrumento, dentro
de los diez días siguientes a la fecha estipulada para su pago, el Banco cobrará
mensualmente al deudor en concepto de penalización por mora hasta la cantidad
de CUARENTA DÓLARES DE LOS ESTADOS UNIDOS DE AMÉRICA. (…)”(lo
subrayado y negrita es nuestro)
De la cláusula anterior se advierte que las partes no fueron claras al redactar el
monto que se debía pagar en concepto de penalización por mora, ya que al establecer
el adverbio “hasta”vuelve a la obligación en indeterminada, ya que lo único que
se tiene claro es que la cantidad de CUARENTA DÓLARES DE LOS ESTADOS
UNIDOS DE AMÉRICA, es la máxima que el acreedor calculará y podrá solicitar
en concepto de penalización por mora.

Es decir, que únicamente se puede cobrar al deudor hasta un monto máximo de


CUARENTA DÓLARES mensuales, sin embargo, no es liquidable porque no basta
con la realización de una operación aritmética para determinar con precisión la
cantidad que se debe exigir al deudor en caso de mora, ya que no sólo se puede cobrar
dicha cantidad sino una menor, pero tampoco quedan claras las circunstancias en
que se cobrará cada cantidad a condenar.

Lo cual es atentatorio al derecho a la seguridad jurídica del deudor (Art. 2 de la


Constitución de la República), ya que no puede el acreedor bajo pretexto de la
voluntad de las partes dejar exclusivamente a su arbitrio el establecimiento del
monto de la cláusula penal, sino que este monto debe ser determinado por ambas
partes, o al menos establecer parámetros para su liquidación, como ocurre en la
variación de los intereses, en consecuencia, para las suscritas no basta con decir
que la seguridad jurídica del deudor deviene al establecer un monto mínimo y un
monto máximo para ser exigido en concepto de cláusula penal.

Aunado a ello, que de conformidad a los Arts.1433 y 1437 del Código Civil (C.), en
caso de que no se pueda aplicar ninguna de las otras reglas de interpretación de
los contratos reguladas en los Arts. 1431, 1432, 1434, 1435 y 1436 C., se deberán

297
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

interpretar las cláusulas ambiguas a favor del deudor, tal y como sucede en el caso
de marras.

Por otra parte respecto a la violación de la imparcialidad, las suscritas


consideramos que no existe, debido a que el Juez A Quo ha actuado conforme a
la ley, ya que debemos recordar que el presente proceso, es un proceso ejecutivo
el cual de conformidad al Art. 458 Inc.1°del CPCM podrá iniciarse cuando del
título correspondiente emane una obligación de pago exigible, líquida o liquidable;
supuestos que no concurren en su totalidad respecto a la cláusula penal que la parte
demandante pretende exigir por las razones que hemos expuesto en los párrafos
anteriores.

Por tanto el hecho que el demandado no se haya opuesto a dicha pretensión, el juez
no está obligado a condenarla, ya que los jueces estamos sometidos a la ley, es
decir, que sólo por el hecho que una de las partes no se oponga a una pretensión
que es contraria a la ley debemos proceder a su condena, Arts.1, 2 y 218 Inc. 3° del
CPCM.

Por tanto, ésta Cámara concuerda con los argumentos del Juez A Quo, en el sentido
que el documento base de la pretensión no contiene una cantidad líquida o liquidable
en concepto de penalización por mora, en consecuencia, no se puede acceder a
condenar al demandado en dicho concepto.”

CÁMARA SEGUNDA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO: SAN SALVADOR, en Sentencia con Referencia 50-3CM-13-A, de
fecha dieciocho de octubre de dos mil trece.

“…1.5 …si bien es cierto, dentro de la ordenación del proceso ejecutivo, no se


establece de manera expresa que la demanda deberá cumplir con los requisitos
del artículo 418 CPCM, pero tomando como base el artículo 19 del mismo cuerpo
legal y la naturaleza del proceso ejecutivo, debe hacerse una integración ante tal
vacío legal, entendiéndose aplicable, por la misma naturaleza del proceso ejecutivo,
los requisitos de la demanda simplificada del mencionado artículo 418 CPCM, ya
que no puede dejarse al arbitrio de las partes la determinación de los requisitos
mínimos que debe contener la demanda, y ante dicho vacío legal, es una obligación
insoslayable del juzgador integrar las normas procesales, tal como lo manda
el artículo 19 antes mencionado, tomando en cuenta que se debe buscar en todo
momento la protección y eficacia de los derechos de las personas y la consecución
de los fines que consagra la Constitución de la República, dentro del respeto al
principio de legalidad, artículo 18 CPCM. (Sentencia de las catorce horas del seis
de enero de dos mil doce en el incidente número 19-4MC-11-A)…”

CÁMARA DE LA CUARTA SECCIÓN DEL CENTRO: SANTA TECLA,


en Sentencia con Referencia 100-EC-14, de fecha diecisiete de octubre de dos mil
catorce.

“…4…el Art. 459 CPCM no menciona de forma explícita que se puede aumentar una
tercera parte a la cantidad adeudada a fin de realizar el correspondiente embargo,
dicha norma jurídica se encuentra íntimamente ligada con el Art. 570.CPCM donde

298
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

sí se permite realizar dicho incremento para efectos de asegurarse las resultas


del proceso; en ese sentido, no existe vulneración alguna a la disposición jurídica
primeramente mencionada, pues el aumento de la tercera parte a la cantidad
reclamada va relacionado con asegurar el cumplimiento de la obligación y como
tal, debe preverse desde un inicio del proceso al momento de ordenar el decreto de
embargo…”

CÁMARA DE LA SEGUNDA SECCIÓN DE OCCIDENTE: SONSONATE, en


Sentencia con Referencia INC-44-CPCM-2014, de fecha once de diciembre de dos
mil catorce.

“…Para iniciar este tipo de proceso, es requisito sine qua non la presentación
de un documento base de la pretensión, el cual debe traer aparejada ejecución,
siendo de aquellos que por sí mismos producen plena prueba y que por lo tanto se
puede proceder, sin dilación a la aprehensión de los bienes del deudor moroso. Sin
embargo, debe estar consagrado legalmente, es decir, que la ley lo haya reconocido
como tal y en consecuencia, además, de hacer plena prueba de la obligación en él
contenida; por lo que es necesario que con la demanda se acompañe este documento;
de igual manera, los documentos que permitan determinar con precisión la cantidad
que se reclama, tal como lo prescribe el inciso 1º del Art. 459 CPCM. Para que un
proceso sea eficaz; esto es, para que pueda pronunciarse en el mismo una sentencia
que satisfaga la pretensión, en principio, es necesaria una demanda, la cual debe
reunir al momento de su interposición determinados requisitos con los cuales se da
inicio al proceso. Paralelamente a la misma, es ineludible que este vehículo de la
acción reúna los presupuestos procesales, los cuales deben ser examinados por el
juez de la causa para entrar a conocer el mérito de la demanda. Todo juzgador tiene
facultades de examinar in limine una demanda, y al advertir que falta alguno de los
requisitos exigidos por la ley para entrar al conocimiento de la misma, rechazarla,
haciendo su correcta fundamentación, sin entrar al conocimiento de la cuestión
pretendida, pues ello deviene en violación al debido proceso, ya que para que exista
un pronunciamiento de fondo se debe observar que se cumplan todas las etapas
procesales hasta llegar a una decisión, ya sea a favor o en contra de las pretensiones
de las partes…”
CÁMARA PRIMERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL
CENTRO: SAN SALVADOR, en Sentencia con Referencia 142-15MC3-2011, de
fecha veinticuatro de octubre de dos mil once.
“…De lo expresado, esta Cámara analizará el caso de autos a la luz de los aspectos
considerados en la resolución impugnada, a saber: 1. Las formalidades requeridas por
la ley para incoar una demanda ejecutiva; 2. La debida identificación del demandado;
3. La integración de las normas procesales; y, 4. El rechazo de la demanda in limine
litis bajo la figura de la inadmisibilidad. a) Una de las bases sobre las que descansa el
Código Procesal Civil y Mercantil, es el derecho a la protección jurisdiccional, como
un derecho básico de los justiciables, reconocido en el Art. 1 CPCM., el cual dice:
“Todo sujeto tiene derecho a plantear su pretensión ante los tribunales, oponerse a la ya
incoada, ejercer todos los actos procesales que estime convenientes para la defensa de su
posición y a que el proceso se tramite y decida conforme a la normativa constitucional

299
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

y a las disposiciones legales. Es respecto de la última parte de dicho artículo, que se


entiende como imperativo para los aplicadores de la justicia, que deben tramitar el
proceso conforme a la ley, es decir, no pueden hacerse exigencias no enmarcadas en la
ley, ni dejar de hacer las que la ley exige, porque de lo contrario, se estaría violentando
el derecho de protección jurisdiccional, arraigado en el principio del debido proceso,
constitucionalmente reconocido en el Art. 11. b) En esa línea de pensamiento, el
debido proceso como máximo principio del derecho procesal, encuentra su máxima
expresión cuando los juzgadores, cumplen la normativa procesal, siendo precisamente
las formalidades procesales un parámetro para que se configure el debido proceso.
Lo anterior también encuentra sustento en lo plasmado en el Art. 3 CPCM., que dice:
“Todo proceso deberá tramitarse ante juez competente y conforme a las disposiciones
de este Código, las que no podrán ser alteradas por ningún sujeto procesal. Las
formalidades previstas son imperativas. Cuando la forma de los actos procesales no esté
expresamente determinada por ley, se adoptará la que resulte indispensable o idónea
para la finalidad perseguida.”c) En el caso de estudio, el punto neurálgico por el que
se siente agraviado el demandante, es el hecho de que se haya declarado inadmisible la
demanda por no haber proporcionado el número de documento único de identidad de
la demandada, por lo que dicho requerimiento debe ser estudiado desde la perspectiva
de las formalidades exigidas por la ley, para saber si es o no conforme a derecho. La
identificación es entendida como la acción que permite identificar a una persona
determinada, siendo el signo de identificación más común el nombre y apellido de una
persona. El Art. 276 CPCM., respecto de los datos del demandado en la demanda,
establece que debe contener, de conformidad al numeral 3º del artículo citado: nombre,
domicilio y dirección; integrándose dicha disposición, en lo que se refiere a los requisitos
esenciales, con lo establecido en el Art. 459 CPCM., por tratarse el caso de autos de un
juicio ejecutivo. Es decir, que para identificar al demandado, la normativa procesal civil
y mercantil, exige que el demandante exprese: NOMBRE, DOMICILIO Y DIRECCIÓN,
considerándose como los datos esenciales que el demandante debe proporcionar, para
que el demandado sea debidamente identificado. d) En cuanto al número de Documento
Único de Identidad, la Ley Especial Reguladora de la Emisión del Documento Único
de Identidad, en su Art. 3 inciso primero dice: “El Documento Único de identidad, es
el documento oficial, suficiente y necesario para identificar fehacientemente a toda
persona natural, salvadoreña, en todo acto público o privado, tanto dentro del país,
como en el extranjero, cuando dichos actos surtan efectos en El Salvador.”No obstante,
el Documento Único de Identidad es el documento identificativo de las personas por
excelencia, no se puede considerar como presupuesto de admisibilidad de la demanda,
que el demandante proporcione el número de documento único de identidad de la
demandada, pues de exigirse como tal, implicaría imponer un deber al demandante
que no le corresponde, en consecuencia, basta con que éste proporcione NOMBRE,
DOMICILIO Y DIRECCION de la persona demandada, tal como el legislador lo plasmó
en la ley, para que el juzgador tenga por cumplido dicho requerimiento, en cuanto a la
identificación de la demandada…”
Admisión de la demanda

Art. 460.- Reconocida la legitimidad del demandante y la fuerza ejecutiva del título, el juez
dará trámite a la demanda, sin citación de la parte contraria, decretará el embargo e inmediatamente
expedirá el mandamiento que corresponda, en el que determinará la persona o personas contra las

300
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

que se procede, y establecerá la cantidad que debe embargarse para el pago de la deuda, intereses y
gastos demandados.

Si el juez advirtiera al demandante un plazo de insubsanables, declarará la fundamentos de su


decisión.

la existencia de defectos procesales subsanables, concederá tres días para subsanarlos. Si los vicios
advertidos fueran improponibílidad de la demanda, con constancia de los

CÁMARA SEGUNDA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, SAN SALVADOR, Apelación N°58-3CM-12-A Fecha: veinticuatro de
octubre de dos mil doce.
“En el presente proceso la Juez A Quo, previo admitir la demanda previno a la parte
actora que aclarara si la demandante era conocida por otros nombres, en virtud de
que en la demanda como en los documentos presentados junto a la misma existía
incongruencia en los nombres de su mandante; prevención que fue subsanada por la
parte actora […], en el cual se estableció y aclaro que la demandante se llama […],
y que la misma es conocida tributariamente como […], y socialmente como […].
No obstante ello la parte demandada al contestar la demanda alegó la falta de
legitimo contradictor por considerar que la demandante y la persona que consta en
las letras de cambio como librador no son la misma; en virtud de ello la Juez A Quo
corrió traslado a la parte actora sobre la oposición, quien por medio de escrito […]
argumentó que dicha persona es la misma y para tal efecto solicitó que se realizara
la experticia grafotécnica en el poder general judicial con cláusulas especiales
presentado junto a la demanda, como en las letras de cambio sin protesto.
Prueba que fue realizada tal y como consta […], en la cual se concluyo que las
firmas estampadas en los documentos relacionados en el párrafo anterior, han sido
elaboradas por la [demandante].
Por tanto, se infiere que los nombres que constan en la demanda, en el escrito agregado
[…], el poder general judicial otorgado por la demandante, y en las letras de cambio
sin protesto identifican a la misma persona, y el hecho de que no se haya comprobado
los conocidos de la demandante en su certificación de partida de nacimiento, no es
razón suficiente para declarar no ha lugar la ejecución, en virtud de la supuesta falta de
legitimación activa, ya que como se dijo en párrafos anteriores las letras de cambio sin
protesto presentadas como documentos base de la pretensión, constituyen títulos valores
y por ende son prueba preconstituida, por tanto, la carga de la prueba corresponde
al demandado quien no logro desvirtuar dichos documentos, ni probo que dichos
nombres no corresponden a la persona demandante o que no era la misma persona,
por el contrario la parte actora por medio del peritaje realizado reafirmo que dichos
documentos fueron elaborados por la misma persona, en consecuencia, no se puede
violentar el derecho a la protección jurisdiccional de la parte demandante, por el simple
dicho de la parte apelante-demandada.

Realizado el análisis de la documentación presentada de la cual con el mínimo


esfuerzo se puede deducir que la demandante es la misma persona que consta como
librador en las catorce letras de cambio sin protesto, en ese sentido esta Cámara

301
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

considera que la sentencia venida en apelación es conforme a derecho y así deberá


pronunciarse.”

CÁMARA TERCERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, SAN SALVADOR, Sentencia N°16-ECS-16 de fecha: veinticinco de
febrero de dos mil dieciséis.

“A. El proceso ejecutivo, no es más que un procedimiento que se emplea a instancia


de un acreedor en contra de un deudor moroso, para exigirle breve y sumariamente
el pago de la cantidad líquida que debe de plazo vencido y en virtud de documento
indubitado, esto es, un documento o título ejecutivo, de ello resulta que el proceso
ejecutivo tiene un contenido concreto: que el Juez ante quien se incoe, sin citación
de la parte contraria, decrete el embargo de bienes y expida el mandamiento
correspondiente. Art. 460 CPCM.

B. Este derecho está condicionado a la concurrencia de dos requisitos: primero,


la integración de todos los presupuestos procesales (jurisdicción, competencia,
capacidad de las partes, legitimación, representación, postulación, etc.); y, segundo,
la presentación por el ejecutante de un título formalmente regular, el que ha de
revestir determinados caracteres para ser reconocido como tal, los cuales subyacen
en la regulación positiva, como lo son por ejemplo: a) indiscutibilidad: el título es
ejecutivo porque en él constan tanto las personas que resultan ser acreedor y deudor,
como el contenido de la obligación misma; b) imposición de un deber: por cuanto el
título ejecutivo ha de reflejar una determinada obligación, perfectamente concreta,
de cualquier contenido válido posible: de dar, hacer o no hacer; c) literosuficiencia:
en el sentido de que los aspectos básicos de la legitimación material de las partes
y del contenido de la obligación, se han de contener o constar precisamente en el
mismo documento; y, d) autenticidad: el título ha de ser auténtico, esto es, que no
quepa duda sobre la correspondencia entre la autoría formal y la autoría material
de las declaraciones de voluntad.

C. Por otra parte, para que tenga lugar el juicio ejecutivo, deben evidenciarse en
la situación controvertida, los siguientes requisitos: un título que conforme a la ley
exhibe fuerza ejecutiva, esto es, que trae aparejada ejecución; un acreedor legítimo
o persona con derecho para pedir; deudor cierto; deuda líquida; y, una obligación
exigible y de plazo vencido.

CÁMARA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DE OCCIDENTE,


SANTA ANA, Sentencia de Apelación Referencia N°INC-APEL-88-16-09-14
Fecha: dieciocho de septiembre de dos mil catorce.

“LEVANTAMIENTO DE EMBARGO. - La figura del Decreto de embargo por


disposición expresa de la ley en su Art. 460 del CPCM., es un acto jurídico de
competencia exclusiva del juez de la causa, pues la ley le impone la obligación de
reconocer previamente la legitimidad del demandante, la fuerza ejecutiva del Título
presentado, para que pueda seguidamente decretar el embargo por la cantidad debida
y no pagada, librando para ello el Mandamiento respectivo. Consiguientemente, si
la parte demandada probare en el proceso que se le instaura alguno de los motivos
de oposición regulados en el Art. 464 del CPCM., será el mismo funcionario judicial,

302
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

el competente para levantar el decreto de embargo dictado y no otra persona; por lo


que en el caso de autos, no se puede acceder a la pretensión de los Licenciados […],
de que sea la señora […], por medio de obligación de hacer que levante el embargo
sobre el sueldo que devenga el señor […], por lo tanto tal pretensión en esos
términos hace que la demanda presentada se vuelva improponible, por contener la
misma falta de presupuestos materiales necesarios para su trámite. Art. 277 CPCM.-

Por consiguiente, la improponibilidad decretada por el señor Juez A Quo, procede


confirmarla por este Tribunal, por estar conforme a derecho.”

CÁMARA TERCERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, SAN SALVADOR, Apelación N°117-CQCM-11 de Fecha: ocho de
septiembre de dos mil once.

“Al respecto es de recordar que el rechazo liminar que se ha hecho en el sub litem
se encuentra sustentado en las particularidades propias de los documentos que se
acompañaron a la demanda, menester es, tener en claro que el acreedor goza de
distintas alternativas procesales para reclamarle a sus presuntos deudores, pero en
el caso de autos eligió invocar el proceso común, adjuntando a su demanda como
prueba instrumental unos recibos o quedan, que como pruebas que son, no es válido
hacer una valoración a priori de ellos -en la etapa de admisión de la demanda-, como
si se tratara del ejercicio de la acción a que dan derechos los referidos documentos,
por el contrario el actor claramente ha promovido un “Proceso Común”en el que
toda consideración jurisdiccional tendiente a la valoración probatoria deberá
hacerse en la etapa procesal que corresponda, por lo que no es procedente la
aplicación del inciso segundo del artículo 651 del Código de Comercio, para
calificar la admisión a trámite de la demanda de mérito.”

CÁMARA SEGUNDA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, SAN SALVADOR, Apelación N°78-4CM-14-A Fecha: diecinueve de
noviembre de dos mil catorce.
“Como se dijo en líneas anteriores, el señor […], falleció en la ciudad de San
Salvador, el día seis de diciembre del año dos mil ocho, por lo que luego de seguir
las diligencias correspondientes, se nombró como curador de la herencia yacente
del causante, al Licenciado […]; debiendo entonces notificarse tanto a la deudora
sobreviviente como al Curador de la herencia yacente, de la existencia del mutuo
hipotecario suscrito por los demandados y del cambio de acreedor que sufrió
dicho crédito, a fin de que el cesionario pudiera iniciar la demanda ejecutiva
correspondiente en contra de éstos.
La demanda se presentó y se acompañó de una serie de documentos, entre los cuales
se encuentran las actas notariales agregadas a folios […], realizadas a las trece
horas quince minutos y a las trece horas treinta minutos, ambas del día veintiocho
de julio del año dos mil catorce, por medio de las cuales se notificó al Curador de la
herencia yacente y a la [demandada], de la cesión del crédito hipotecario suscrito
por los demandados originalmente a favor de la señora […], en las que el Notario
autorizante hizo constar, que les notificaba “”””””””…de la notificación Judicial
de cesión de crédito hipotecario, incoada por [demandante]. -------------- iniciadas

303
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

por medio de su Procurador Licenciado […], con número de tarjeta de Abogado


número […]””””””””; habiendo hecho constar además, que entregó al demandado
la solicitud presentada; el poder general con cláusula especial; el testimonio de
escritura pública de cesión de crédito hipotecario; el testimonio de escritura pública
de mutuo hipotecario, la certificación emitida por el Juzgado Segundo de lo Civil y
Mercantil de San Salvador de las Diligencias de Declaratoria de Herencia Yacente,
en resolución del diecinueve de mayo de dos mil catorce; la esquela de notificación
Judicial de la cesión de crédito hipotecario; copia de la demanda junto con los
anexos y la respectiva resolución de admisión de la misma, en la que también se
autorizó al Notario para realizar dicha notificación.
Ahora bien, el problema surge debido a que para el Juez A Quo las actas
anteriormente relacionadas, no son suficientes para considerar que se ha cumplido
con las notificaciones que exige la ley para que una cesión de derechos pueda ser
oponible frente a terceros, ya que además de notificar la cesión como tal, se debe
notificar a los herederos del causante de la existencia de un título ejecutivo en contra
de éste, tal como prescribe el artículo 1257 C. C., y en el caso que nos ocupa, según
el funcionario judicial, falta notificar de la existencia del crédito hipotecario suscrito
por los demandados, entre ellos el causante.
Ante tal argumento, ha manifestado el apelante en su escrito de interposición del
presente recurso, su inconformidad con el auto definitivo pronunciado por el
Juez A Quo, por considerar que dicho funcionario ha incurrido en una errónea
interpretación del artículo 1257 C. C., pues está exigiendo que se notifique a los
herederos del causante de la existencia del título ejecutivo, además de habérseles
notificado del cambio de acreedor que sufrió dicho crédito, cuando, a criterio del
abogado apelante, el haber notificado del cambio de acreedor supone por lógica la
notificación de la existencia del título ejecutivo.
De acuerdo a lo establecido en los artículos 1692 y 1693 C. C., todo cesionario
tiene la obligación de notificar al deudor la cesión de su crédito, a fin de que ésta
pueda producir efectos contra el deudor y contra terceros, debiendo hacerse dicha
notificación con exhibición del título, si lo hubiere, así como de la nota o instrumento
de traspaso que prescribe el artículo 672 C. C., y solo en caso de que no exista el
título, bastará con la exhibición del instrumento de traspaso.

A juicio de este tribunal, si bien es cierto el artículo 1257 C. C. establece la obligación


de notificar a los herederos del causante, la existencia de un título ejecutivo en su
contra, sucede que en este caso en particular, por el hecho de haber ocurrido una
cesión del titular del crédito que ahora se reclama, al haberse notificado a la deudora
sobreviviente y al Curador de la herencia yacente de dicha cesión, esta notificación
subsumió la notificación de la existencia del título que exige el artículo 1257 C. C., ya
que de la lectura de las actas ya relacionadas, se observa que el Notario autorizante, en
cumplimiento a lo dispuesto en el artículo 1693 del mismo cuerpo de ley, consignó en las
mismas que se entregó a los demandados una copia de la escritura del mutuo hipotecario
suscrito por los [demandados], por lo que se entiende que al notificarles de la cesión
ocurrida, se les ha notificado también de la existencia del título ejecutivo en su contra,
pues es precisamente el título ejecutivo el que ha cambiado de acreedor.

304
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

En ese orden de ideas, considera este tribunal que se ha cumplido con las notificaciones
que exige la ley, para darle trámite a una demanda ejecutiva incoada por un cesionario
de derechos, como la que nos ocupa; además, ya han transcurrido más de los ocho días
que exige la ley para entablar la acción ejecutiva, por lo que es procedente estimar
el agravio expuesto por el abogado apelante y revocar el auto definitivo recurrido,
ordenando al Juez A Quo admita a trámite la demanda presentada.”

Recursos

Art. 461.- El auto que rechace la tramitación de la demanda admitirá recurso de apelación.

Contra el auto que admita la demanda y decrete embargo de bienes no procederá recurso
alguno, sin perjuicio de la oposición que pueda formular el demandado en el momento procesal
oportuno.

Emplazamiento

Art. 462.- La notificación del decreto de embargo equivale al emplazamiento para que el
deudor comparezca a estar a derecho y pueda contestar la demanda en el plazo de diez días. Al
hacerlo, podrá formular su oposición por los motivos señalados en este título.

Terminación del proceso

Art. 463.- El proceso podrá darse por terminado en cualquier etapa del mismo y por cualquiera
de los modos de extinción de las obligaciones, según reglas del derecho común.

Motivos de oposición

Art. 464.- Sin perjuicio de lo establecido en otras leyes serán admisibles en el proceso
ejecutivo los siguientes motivos de oposición:
1°. Solución o Pago efectivo.
2°. Pluspetición, prescripción o caducidad.
3°. No cumplir el título ejecutivo los requisitos legales.
4°. Quita, espera o pacto o promesa de no pedir.
5°. Transacción.
S
CÁMARA SEGUNDA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL
CENTRO, Referencia: 15-DV-CE-11 de fecha veintitrés de noviembre de dos mil
once.

“En nuestro derecho hay dos formas de pagar válidamente: con consentimiento del
acreedor y sin él, mediante la consignación. Ambos pagos, en términos generales,
producen idénticos efectos: extinguen la deuda, dejan de correr los intereses, eximen
de responsabilidad al deudor y este tiene derecho a reclamar que se le restituyan las
garantías. El efecto que produce el pago por consignación es que una vez efectuada
válidamente extinguen la obligación y en consecuencia hace cesar los intereses,
y exime de la obligación al deudor. Para que proceda el pago por consignación
es necesario que se reúnan ciertas circunstancias, las cuales son: 1° Que sea
hecha por una persona capaz de pagar, que las diligencias la presente el deudor
o su representante legal, o un tercero que pruebe interés legítimo para hacerlo 2ᵃ

305
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

Que sea hecha al acreedor, siendo éste capaz de recibir el pago, o a su legítimo
representante; se refiere al quien pude ser solicitado en las diligencias; 3 ᵃ Que si
la obligación es a plazo o bajo condición suspensiva, haya expirado el plazo o se
haya expirado el plazo o se haya cumplido la condición; esto es que la obligación
sea exigible, no se puede en consecuencia proponer pagar, por consignación la
obligación que no sea exigible todavía; 4ᵃ Que se ofrezca ejecutar el pago en el
lugar debido; la diligencia debe presentarse en el lugar para el cumplimiento de la
obligación; 5ᵃ Que el deudor haga la oferta ante juez competente poniendo en sus
manos una minuta de lo que debe, con los interese vencidos, si lo hubiere, y los de
más cargos líquidos; comprendiendo en ella una descripción individual de la cosa
ofrecida, es decir, debe hacer una explicación detallada de lo que debe, de cuál es el
monto de la obligación, según lo regula el Art. 1470 C.C. “

CÁMARA DE LA TERCERA SECCIÓN DEL CENTRO, SAN VICENTE,


Apelación N°26-PE-EJECUTIVO-2011-CPCM, de Fecha: veintidós de diciembre
de dos mil once.

“En general, los motivos de oposición previstos en la norma citada se refieren a la


extinción de la obligación e inexistencia de título, o a la falta de requisitos legales
del título ejecutivo.

El pago efectivo conlleva la extinción de la obligación reclamada y por ende,


la inexistencia de título ejecutivo; la pluspetición determina una carencia de
título respecto de lo reclamado en exceso de lo que efectivamente adeudado; la
prescripción consiste, también, en un modo de extinguir las obligaciones, en este
caso, la contenida en el título; la caducidad, a su turno, conlleva la extinción del
derecho; y la transacción determina la inexistencia de objeto litigioso, y por ende
obstaculiza el progreso del proceso ejecutivo.

La oposición, también puede fundarse en el incumplimiento de los requisitos legales


del título, cuestión que deberá analizarse en relación a los requisitos previstos para
el concreto título ejecutivo invocado; este motivo de oposición puede invocarse,
además, con Referencia a los requisitos procesales del título, de modo que el
demandado podría alegar que la obligación se extinguió por alguno de los modos
de extinción de obligaciones no previstos en el citado artículo 464, pues en este caso
faltaría el objeto que califica al título; y podría igualmente invocar que la obligación
no es líquida ni liquidable, o que no es exigible por no haberse cumplido el plazo o
la condición prevista en el título. Si se hubiera pactado una espera, la obligación
no resulta exigible; y si se hubiere acordado una quita, la obligación no resultaría
exigible por el total reclamado.

La oposición también podrá estar fundada en la existencia de defectos procesales,


lo que deberá alegarse dentro del mismo plazo; cabe remitirse en ese sentido a lo
previsto en los Arts. 298 CPCM y sus concordantes que regulan lo atinente a la
denuncia de los defectos procesales, con las particularidades previstas en el marco
regulatorio del proceso ejecutivo.

De modo que el demandado, dentro del plazo para formular su oposición, podrá
denunciar los defectos procesales que estime del caso, en cuanto supongan un

306
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

obstáculo a la válida continuación del proceso y a su finalización mediante resolución


de fondo, incluidos los referidos al cumplimiento de algún presupuesto procesal
relativo a las partes, como la capacidad para ser parte y la capacidad procesal;
al órgano jurisdiccional, como la jurisdicción interna y externa, y la competencia
objetiva, territorial o de grado; y al objeto procesal, como la litispendencia, la
cosa juzgada, la sumisión al arbitraje, el compromiso pendiente y el procedimiento
inadecuado. Art. 298 CPCM.

El Art. 466 CPCM prevé expresamente la oposición fundada en la existencia de


defectos procesales y regula las alternativas que pueden plantearse en ese caso: si
la oposición a la demanda ejecutiva se funda en la existencia de defectos procesales
subsanables, el juez concederá al demandante un plazo de cinco días para
subsanarlos; si, por el contrario, se alegaren defectos o vicios insubsanables, el juez
declarará improponible la demanda y pondrá fin al proceso. Una vez subsanados
los defectos procesales alegados, se concederá al demandado un plazo de dos días
para que pueda ampliar su contestación u oposición, Art. 466 CPCM, de donde cabe
inferir que, inicialmente, el demandado podrá limitarse a la denuncia de los defectos
procesales y reservar los restantes motivos de oposición para una ulterior etapa,
dentro del referido plazo de dos días posteriores a la subsanación de esos defectos.

Dentro del plazo previsto para la oposición, el demandado podrá limitarse a


denunciar los mencionados defectos procesales, en cuyo caso y si fueran finalmente
subsanados, dispondrá luego de un plazo suplementario de dos días para ampliar
su oposición por los motivos previstos en el Art. 464 CPCM. Sin embargo, nada
impide que el demandado incluya en su contestación ya desde el inicio, dentro del
plazo legal de diez días desde la notificación del decreto de embargo, además de las
excepciones procesales, su oposición por motivos de fondo.”

Planteamiento de la oposición

Art. 465.- La oposición se deberá formular dentro del plazo de diez días contados desde la
notificación del decreto de embargo, con las justificaciones documentales que se tuvieran. Si no
hay oposición, se dictará sentencia sin más trámite y se procederá conforme a lo establecido en el
libro quinto de este código.

CÁMARA TERCERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, SAN SALVADOR, Apelación, Referencia 153-EMM-12 Fecha: trece
de septiembre de dos mil doce.

“En tal sentido el legislador ha previsto que la oposición puede resolverse sin
más trámite, es decir, sin necesidad de celebrar la audiencia de prueba a que se
refiere el inciso primero del Art. 467 CPCM; y en virtud de haberse desestimado la
oposición se encontraba habilitado el Juez A Quo, para pronunciar de inmediato
la Sentencia. Lo anterior significa que en el proceso ejecutivo, el legislador ha
establecido reglas especiales para su tramitación; y que TODOS los motivos de
oposición antes descritos se deben formular dentro del plazo de diez días a que
hemos hecho Referencia; y sólo en el caso de que la oposición se funde en un defecto
procesal subsanable, concederá al demandante un plazo de cinco días para que los
subsane y si se procede a ello, otorgará al demandado un plazo adicional de dos

307
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

días para que pueda AMPLIAR su contestación u oposición. Fuera de este caso, el
juzgador no se encuentra habilitado por la ley para otorgar un plazo adicional para
contestar la demanda, pues como ya se dijo, todos los motivos de oposición deben
de plantearse dentro de los diez días a que se refiere el Art. 465 del Código citado,
no siendo aplicable al caso que nos ocupa el Art. 46 CPCM a que hace Referencia el
recurrente, pues nos encontramos frente a un proceso especial, donde el legislador
ha establecido reglas específicas de procedimiento a que ya se hizo Referencia, por
lo que deberemos rechazar el agravio en comento, ya que el Juez A Quo le dio el
trámite que correspondía a la oposición planteada por el ejecutado. De lo dicho esta
Cámara concluye que en efecto, existe una regulación especial para el trámite de
los procesos ejecutivos, la que prevalece sobre cualquier otra norma que establezca
reglas generales como el Art. 46 CPCM, a que hace Referencia el apelante. En ese
sentido, cuando los Arts. 467 inciso segundo, y 468 inciso primero CPCM sostienen
expresamente que: “Cuando no se hubiera solicitado la celebración de la audiencia,
o el juez no la hubiera considerado procedente, se resolverá sin más trámite sobre
la oposición”; “Una vez desestimada totalmente la oposición, se dictará sentencia
estimativa con condena en costas para el demandado, ordenándose seguir adelante
de acuerdo con las normas que rigen la ejecución de Sentencia”; claramente
están estableciendo aquéllas particularidades de este tipo de procesos, excluyendo
obviamente las reglas generales del mismo cuerpo legal, pues de lo contrario no
tendrían ningún sentido regularlas de manera especial.”

Tramitación de la oposición

Art. 466.- Si la oposición se funda en la existencia de defectos procesales y el juez considera


que son subsanables, concederá al demandante un plazo de cinco días para subsanarlos. Si no se
procede a ello en dicho plazo, se declarará inadmisible la demanda en este estado y se terminará
el proceso; si la subsanación se da, serán concedidos dos días más al demandado para que pueda
ampliar su contestación u oposición.

Cuando la oposición se funde en defectos o vicios insubsanables, el juez, por auto en el


proceso, declarará improponible la demanda, finalizará el proceso y dejará sin efecto las medidas
cautelares que se hubiesen adoptado, con imposición de las costas al demandante.

Audiencia de prueba

Art. 467.- En caso de que la oposición no pudiera resolverse con los documentos aportados, el
juez, a petición de al menos una de las partes, citará a audiencia de prueba, que deberá celebrarse
dentro de los diez días siguientes y a la que deberán acudir las partes con los medios probatorios de
que intenten valerse.

Cuando no se hubiera solicitado la celebración de la audiencia, o el juez no la hubiera


considerado procedente, se resolverá sin más trámite sobre la oposición.

Si se hubiera convocado la audiencia y no acudiera a ella el deudor, se le tendrá por desistido


de la oposición, se le impondrán las costas causadas y se le condenará a indemnizar al demandante
comparecido.

Si no compareciere el demandante, el Juez resolverá sin oírle sobre la oposición. (2)

308
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

Si comparecen ambas partes, se desarrollará la audiencia con arreglo a lo previsto para el


proceso abreviado, debiéndose dictar a continuación la sentencia que proceda.

SALA DE LO CIVIL DE LA CORTE SUPREMA DE JUSTICIA, Sentencia 91


CAM 2012, de fecha uno de noviembre de dos mil trece.

“El impetrante señala, como ya se dijo, la aplicación errónea del Art. 467 inciso
1° CPCM puesto que no se ha aplicado conforme lo establece el Art. 522 CPCM
señalando en relación a la celebración de audiencia de prueba la misma no es
potestativa sino de estricto cumplimiento lo anterior lo fundamenta en señalar que
existió una petición en concreto es decir se hizo la solicitud por una de las partes.
Además dijo que la celebración de la referida audiencia sólo puede ser potestativa
es decir dicha audiencia queda a discreción del juez, cuando la referida audiencia
no se hubiere solicitado por las partes.

Respecto de lo anterior este Tribunal considera adecuado retomar lo manifestado


por la Cámara ad-quem en relación a la audiencia de prueba contenida en el Art.
467 CPCM para determinar su debida interpretación, señalando que el referido
artículo establece como se produce y se lleva a cabo la audiencia de prueba. En ese
orden de ideas el inciso primero del Art. 467 CPCM es claro en señalar lo siguiente:
“En caso de que la oposición no pudiere resolverse con los documentos aportados,
el juez a petición de al menos uno de las partes citara a audiencia de prueba [
... ]””Lo anterior significa que el juez en el juicio ejecutivo tiene la potestad de
determinar con la documentación inicial presentada y con la oposición por la parte
demanda si se establece una audiencia de prueba es decir el juez si puede establecer
en su consideración que la situación jurídica planteada si puede resolverse con los
documentos presentados en un proceso determinado; lo que nos lleva a ultimar lo
que establece el inciso segundo del referido Art. 467 CPCM el cual reza: “[ ... ]
cuando no se hubiere solicitado la celebración de la referida audiencia, o el juez no
la hubiera considerado procedente, se resolverá sin más trámite sobre la oposición.
[ ... ]”

En el caso de que se trata efectivamente con fundamento del inciso primero y


segundo del Art. 467 CPCM. La Cámara ad-quem confirmó efectivamente que la
disposición arriba citada es potestativa es decir que le corresponde determinar al
juez si señala o no la audiencia de prueba y aún mas, señala que en el caso de
autos, no se consignó los motivos para la oposición en el escrito de contestación
de la demanda y es que al revisar el escrito de oposición de la pretensión por parte
del demandado no se puede determinar el motivo especifico de oposición ni el
señalamiento de ningún tipo de excepción, lo que conllevó claramente a determinar
que era impertinente la celebración de una audiencia de prueba; situación que fue
confirmada por la Cámara ad-quem; lo que nos lleva a concluir lo que establece el
inciso segundo del Art. 467 CPCM y que la Cámara ad-quem señaló; esto es, que no
habiéndose consignado los motivos para la oposición en el escrito de contestación
de la demanda, era impertinente citar a esa audiencia especial.

Esta Sala al igual que la Cámara ad-quem, coincide en señalar que la disposición
arriba transcrita es suficientemente clara, para poder establecer la no pertinencia de la

309
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

audiencia especial por lo que se puede concluir que la interpretación y razonamiento


del artículo en comento fue respetado de acuerdo al señalamiento claro y específico
consignado en el inciso primero y segundo del Art. 467 CPCM; lo anterior
implica, que la Cámara ad-quem en forma alguna ha dado una interpretación
o alcance diferente de las norma señalada como infringida, consecuentemente la
Sala considera que no existe la infracción señalada por el impetrante respecto del
artículo citado como vulnerado, por lo que no es posible casar la sentencia por el
sub-motivo denunciado.”

CÁMARA TERCERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, SAN SALVADOR, Apelación, Referencia 153-EMM-12 Fecha:
trece de septiembre de dos mil doce.

“En tal sentido el legislador ha previsto que la oposición puede resolverse sin
más trámite, es decir, sin necesidad de celebrar la audiencia de prueba a que se
refiere el inciso primero del Art. 467 CPCM; y en virtud de haberse desestimado
la oposición se encontraba habilitado el Juez A Quo, para pronunciar de
inmediato la Sentencia. Lo anterior significa que en el proceso ejecutivo, el
legislador ha establecido reglas especiales para su tramitación; y que TODOS
los motivos de oposición antes descritos se deben formular dentro del plazo de
diez días a que hemos hecho Referencia; y sólo en el caso de que la oposición se
funde en un defecto procesal subsanable, concederá al demandante un plazo de
cinco días para que los subsane y si se procede a ello, otorgará al demandado
un plazo adicional de dos días para que pueda AMPLIAR su contestación u
oposición. Fuera de este caso, el juzgador no se encuentra habilitado por la
ley para otorgar un plazo adicional para contestar la demanda, pues como ya
se dijo, todos los motivos de oposición deben de plantearse dentro de los diez
días a que se refiere el Art. 465 del Código citado, no siendo aplicable al caso
que nos ocupa el Art. 46 CPCM a que hace Referencia el recurrente, pues nos
encontramos frente a un proceso especial, donde el legislador ha establecido
reglas específicas de procedimiento a que ya se hizo Referencia, por lo que
deberemos rechazar el agravio en comento, ya que el Juez A Quo le dio el trámite
que correspondía a la oposición planteada por el ejecutado.

De lo dicho esta Cámara concluye que en efecto, existe una regulación especial
para el trámite de los procesos ejecutivos, la que prevalece sobre cualquier
otra norma que establezca reglas generales como el Art. 46 CPCM, a que hace
Referencia el apelante. En ese sentido, cuando los Arts. 467 inciso segundo, y
468 inciso primero CPCM sostienen expresamente que: “Cuando no se hubiera
solicitado la celebración de la audiencia, o el juez no la hubiera considerado
procedente, se resolverá sin más trámite sobre la oposición”; “Una vez
desestimada totalmente la oposición, se dictará sentencia estimativa con condena
en costas para el demandado, ordenándose seguir adelante de acuerdo con las
normas que rigen la ejecución de Sentencia”; claramente están estableciendo
aquéllas particularidades de este tipo de procesos, excluyendo obviamente las
reglas generales del mismo cuerpo legal, pues de lo contrario no tendrían ningún
sentido regularlas de manera especial.”

310
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

Sentencia

Art. 468.- Una vez desestimada totalmente la oposición, se dictará sentencia estimativa con
condena en costas para el demandado, ordenándose seguir adelante de acuerdo con las normas que
rigen la ejecución de Sentencia.

En caso de estimación parcial de la oposición, se seguirá adelante con las actuaciones,


solamente para obtener la cantidad debida, sin condena en costas.

Si se estimara la oposición, el juez declarará sin lugar la pretensión ejecutiva y mandará


levantar los embargos y las medidas de garantía que se hubieran adoptado, haciendo volver al
deudor a la situación anterior al inicio del proceso ejecutivo y condenando en costas al demandante.

CÁMARA TERCERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, SAN SALVADOR, Apelación, Referencia 267-ECQCM-12 de fecha
treinta y uno de enero de dos mil trece.

“En el caso en estudio advierte la Cámara que no obstante en el proceso de mérito,


mediante resolución […], se tuvo por alegada oportunamente por parte de la
licenciada […], como curadora Ad- litem de la ejecutada […], el motivo de oposición
de prescripción, no consta en autos que se haya resuelto sobre la misma, tal como
dispone el Art. 467 CPCM, sino por el contrario de inmediato se procedió a dictar la
Sentencia, sin ni siquiera hacer del conocimiento al ejecutante la contestación de la
demanda que se había realizado.

La referida sentencia fue notificada a la parte ejecutante, junto con el auto mediante
el cual se tuvo por alegada dicha oposición, tal como consta en actas […], de donde
resulta evidente, que el ejecutante no tuvo la oportunidad real de audiencia ni
defensa, para controvertir la misma, quedando en total indefensión respecto de la
oposición planteada, razón por la cual es necesario establecer si existe nulidad de
actuaciones procesales.

En torno a lo anterior el Art. 232 letra c) CPCM ESTABLECE: “Los actos


procesales serán nulos sólo cuando así lo establezca expresamente la ley. No
obstante, deberán declararse nulos en los siguientes casos: C) Si se han infringido
los derechos constitucionales de audiencia o defensa”[...]; por su parte, el Art. 516
CPCM DISPONE: “Si al revisar las normas o garantías del proceso aplicables a
la sentencia impugnada se observara alguna infracción pero hubiera elementos de
juicio suficientes para decidir, el tribunal anulará la sentencia apelada y resolverá
sobre la cuestión o cuestiones que sean objeto del proceso. Si careciera de dichos
elementos, anulará las actuaciones, devolviéndolas al momento procesal oportuno.”

En este orden de ideas, siendo que el juez de la causa omitió: a) dar el trámite que
la ley ordena a la oposición de la pretensión ejecutiva; b) resolver la oposición de
mérito, y sólo en las ocurrencias de rechazarse o acogerse parcialmente la misma,
pasar el juez de la causa a dictar la sentencia correspondiente; y que el judicante
sin notificarle al demandante la contestación de la demanda, sorpresivamente
dicta la sentencia hoy recurrida, omitiendo conceder al demandante audiencia
para que ejerciera su derecho de audiencia, defensa y contradicción conforme lo

311
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

exige el debido proceso, el peticionario no tuvo la oportunidad real, procesal,


ni material de poderse manifestar al respecto; y así defenderse y presentar
pruebas en contra de las imputaciones expresadas por la ejecutada en la versada
contestación de la demanda; por lo que existiendo tales violaciones que son de
rango constitucional, (Art. 11, 12 y 18 Cn.) deberá entonces, esta Cámara, a
tenor de lo expresado en los Art. 232 letra c), 235 y 238 CPCM declarar la
nulidad de tales actos procesales, a fin de que el juez de la causa pueda dar el
trámite a la oposición que la ley ordena.
No declarar tal nulidad sería vulnerar no solo la ley secundaria, sino también los
Principios Constitucionales de igualdad, audiencia y legalidad, que son la base
para el derecho al debido proceso, configurado en el Art. 11 Cn. propiciando la
inseguridad jurídica; debiendo aclarar que siendo que en el auto […], se admitió la
oposición, lo cual se encuentra apegado a derecho y que en el mismo auto se cometió
la violación procesal mencionada, a tenor de lo dispuesto en el Art. 234 Inc. segundo
CPCM que DICE “La nulidad de una parte de un acto no afectará a las demás del
mismo acto que sean independientes de aquélla”, es procedente declarar la nulidad
del párrafo último del auto de las catorce horas con treinta minutos del quince de
octubre del año pasado […], y de todo lo que sea su consecuencia; incluyendo desde
luego, la sentencia impugnada.”
Recursos

Art. 469.- Contra la sentencia que se pronuncie podrá interponerse recurso de Apelación. (2)
Eficacia de la Sentencia

Art. 470.- La sentencia dictada en los procesos ejecutivos no producirá efecto de cosa juzgada,
y dejará expedito el derecho de las partes para controvertir la obligación que causó la ejecución.

Exceptúese el caso en que la ejecución se funde en títulos valores, en el cual la sentencia


producirá los efectos de cosa juzgada.

TÍTULO SEGUNDO
LOS PROCESOS POSESORIOS
Ámbito

Art. 471.- Las disposiciones de este título serán aplicables a las pretensiones posesorias
reguladas en los Títulos XII y XIII del libro segundo del Código Civil.

CÁMARA DE LA TERCERA SECCIÓN DEL CENTRO, SAN VICENTE:


Apelación N° C-11-PA-2015-CPCM de fecha: trece de abril de dos mil quince.
“Por otro lado, en lo relativo a la regulación del PROCESO ESPECIAL
POSESORIO, es pertinente decir que el Título II del Libro Tercero del CPCM,
se refiere a éste en forma plural, bajo la expresión“””””””””””Los Procesos
Posesorios”””””””””””””, como si fueran varios tipos de procesos de
naturaleza posesoria, sin embargo, lo cierto es que se trata de un sólo tipo de
proceso, con varias clases de pretensiones; pues, es tan solo por la remisión
expresa a los Títulos XII y XIII del Libro Segundo del Código Civil, que el
Legislador hace uso de la citada frase.”

312
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

Además, resulta importante explicar que el PROCESO ESPECIAL POSESORIO, no


cuenta con una estructura propia, ya que se sirve de una ya creada para pretensiones
declarativas específicas, siendo éste el PROCESO DECLARATIVO ABREVIADO;
aunque la aplicación de la estructura abreviada no es absoluta sino mayoritaria,
en virtud que el mismo Título que lo regula le dota de algunas especificaciones en
atención a la naturaleza de las pretensiones protegidas.

En el caso en concreto, esta Cámara advierte que efectivamente, según lo transcrito


en el romano dos de este auto, la operadora judicial consideró que la demandante,
hoy impugnante, encausó judicialmente el caso fáctico como un PROCESO
DECLARATIVO ABREVIADO netamente, cuando - en opinión de la Juzgadora - lo
legal era conducirlo como un PROCESO ESPECIAL POSESORIO, por tratarse de
una Acción Posesoria, pero aunque advirtió tal equívoco en la vía procesal utilizada,
olvidó tramitarlo bajo la última de las vías aludidas y más bien rechazó la demanda
bajo la improponibilidad.

En ese orden y de acuerdo a las explicaciones que han precedido, si la señora


Juzgadora consideraba que lo promovido por la parte actora era una vía
procesal errónea para enjuiciar los hechos propuestos, es decir, un PROCESO
DECLARATIVO ABREVIADO en puridad; lo legal era que tramitara lo pedido por
la clase de proceso que - a su juicio- era el apropiado o idóneo, esto es, un PROCESO
ESPECIAL POSESORIO, sin embargo, no lo hizo a pesar de estar facultada para
conocer del mencionado Proceso, inobservando así el Art. 14 CPCM.”

En cuanto al segundo de los planteamientos recursivos, conviene manifestar


inicialmente que conforme al Art. 717.1 del Código Civil:”””””…No se admitirá
en los (…) juzgados de la República, ni en las oficinas administrativas, ningún título
ni documento que no esté registrado, si fuere de los que conforme a este título están
sujetos a registro; siempre que el objeto de la presentación fuere hacer valer algún
derecho contra tercero…”””””(Cursiva, Negritas y Subrayado, son nuestros.)El
resto de incisos de ese artículo contiene excepciones a la regla general planteada y
por ello no se relacionan acá.

Nótese que el artículo en cita, es aplicable cuando la presentación del documento


de que se trate tiene como objetivo “hacer valer algún derecho contra tercero”;
sin embargo, en el caso de la posesión, es aceptado por la doctrina que respalda
al Código Civil, que el mismo desde la definición contenida en el Art. 745 C.C.,
reconoce a la posesión no como un derecho sino como un estado de hecho protegido
por el Derecho y por ello es que el Título XII del Libro Segundo del Código Civil,
específicamente el Art. 926, permite acreditar la posesión efectiva, material o real
mediante hechos positivos de aquellos a los que sólo da el derecho el dominio, como
el corte de maderas, la construcción de edificios, la de cerramientos, plantaciones o
sementeras, y otros de igual significación.

En definitiva entonces, tratándose de acciones posesorias -las cuales tutelan la


posesión como hecho material- la simple falta de inscripción del título presentado
no constituye ninguna falta de algún presupuesto esencial para la promoción del
PROCESO ESPECIAL POSESORIO respectivo, sobre todo considerando que dentro

313
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

del juicio posesorio en sí no se intenta hacer valer ningún derecho en contra de


terceros, sino defender la posesión como un hecho material, que es lo que al final
deberá demostrarse, por lo cual se aplicaron indebidamente los Arts. 277 CPCM y
717 C.C.

En atención a todo lo esgrimido anteriormente, este Tribunal de Alzada concluye que


al declarar improponible la demanda se inobservó el Art. 14 CPCM y se aplicaron
indebidamente los Art. 277 CPCM y 717 C.C. y por ello, el auto apelado deberá
revocarse y ordenarse que se admita la demanda de mérito y se le dé el trámite por
la vía procesal idónea.”

Procedimiento y competencia

Art. 472.- Las pretensiones reguladas en este título se sustanciarán conforme a los trámites
del proceso abreviado, cualquiera que sea su cuantía, con las especificaciones establecidas en los
artículos siguientes.

Será competente para conocer de estos procesos el Juez de Primera Instancia del lugar donde
se encuentre ubicado el bien, con excepción de los juzgados de menor cuantía. (2)

CÁMARA DE LA CUARTA SECCIÓN DEL CENTRO: SANTA TECLA, en


Sentencia con Referencia 22-C-15, de fecha veintitrés de febrero de dos mil quince.

“…4. …el CPCM, a partir del Art. 471 contiene el procedimiento a seguir para
los Procesos Posesorios, que se encuentran contenidos en los Art. 918 y 931 C.-
También le son aplicables además del Art. 473 CPCM relativa al rechazo de la
demanda, el Art. 422 CPCM, que se refiere a la subsanación de defectos en relación
con el Art. 277 y 278 CPCM. De lo anterior podemos afirmar que, la Jueza A Quo
se encuentra facultada para poder declarar tanto inadmisible como improponible
una demanda, conforme las disposiciones antes señaladas. En el presente caso la
juzgadora declaro improponible el libelo, por considerar que se ha interpuesto una
demanda por hechos que no han ocurrido, en vista que la misma fue presentada
antes de que los trabajos hayan iniciado, es decir, por una situación incierta, lo cual
constituye un defecto en la pretensión, y en ese sentido, no le ha nacido el derecho
de acción al demandante para interponerla.- Al respecto de la acción de amparo
de posesión por obra nueva, encontramos el Art. 18 C., que prescribe, “””Las
acciones posesoria tienen por objeto conservar o recuperar la posesión de bienes
raíces o derechos reales constituidos en ellos””””Asimismo el Art. 931, de dicho
cuerpo legal que, señala:”””El poseedor tiene derecho para pedir que se prohíba
toda obra nueva que se trate de construir sobre el suelo de que está en posesión.
…En cuanto a la acción intentada en el presente proceso especial de amparo de
posesión y suspensión de obra nueva, es importante mencionar que, obra nueva
significa toda cosa hecha que antes no existía o que si existía resulta diferente por
la naturaleza de las modificaciones a la que fue sometida y dicha acción compete a
quien está en posesión del inmueble, tal como ya se señaló en párrafos anteriores.
Referente de la misma, esta Cámara es del criterio al igual que algunos autores
importantes, entre ellos Somarriva Undurraga que, para iniciar el proceso no es
necesario que los trabajos estén comenzados, bastando al efecto, que los mismos
estén a punto de realizarse y que se conozca esta intención por hechos exteriores

314
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

que demuestren la voluntad de llevarse a cabo la obra; como ejemplo de esos hechos
exteriores encontramos, la preparación de un terreno con su terracería, la acumulación
de materiales para una construcción, entre otros. Examinada que ha sido la demanda,
encontramos que efectivamente, los actores se encuentran facultados para iniciar
el proceso de amparo de posesión puesto que, en dichos terrenos se iniciará la obra,
y los mismos son poseedores de esos terrenos; pero para poder interponer la misma,
independientemente de que no es necesario que los trabajos hayan iniciado, debe de
comprobarse que los mismos estén a punto de iniciarse y que además se conozca esta
intención por hechos exteriores que demuestren la voluntad de llevarse a cabo la obra…”

CORTE SUPREMA DE JUSTICIA EN CORTE PLENA: SAN SALVADOR,


en Resolución de Conflicto de Competencia, con Referencia 25-COM-2014, de
fecha diez de julio de dos mil catorce.

“…En virtud de lo anterior, con respecto a los procesos posesorios se determina la


competencia de conformidad a la regla especial regulada en el Art. 472 inciso 2°
CPCM el cual a su letra reza lo siguiente: “[…] Será competente para conocer de
estos procesos el Juez de Primera Instancia del lugar donde se encuentre ubicado
el bien, con excepción de los juzgados de menor cuantía.[…]”, en ese sentido, a
tenor del artículo precedente el actor cuando se trata de un proceso posesorio, debe
interponer su pretensión ante el juez del lugar en que se halle el objeto litigioso; por
ende no debe el juez ante quien se entable la acción, declinar su competencia, si se
encuentra dentro del supuesto normativo acá expresado…”

CORTE SUPREMA DE JUSTICIA EN CORTE PLENA: SAN SALVADOR,


en Resolución de Conflicto de Competencia, con Referencia 67-COM-2013, de
fecha diecisiete de diciembre de dos mil trece.

“…el examen de la competencia que el juzgador está llamado a realizar debe ser
minucioso en lo relativo a la naturaleza de lo pedido por las partes, lo que se deriva del
conocimiento que el juez debe tener sobre el derecho, como parte de la función general
del proceso. Uno de los principios que responden a dicho conocimiento, se encuentra
confiado a la actuación del juzgador para efectuar la dirección adecuada del proceso de
acuerdo a lo establecido en el ordenamiento jurídico procesal, tal como se halla previsto
en el Art.14 CPCM. Es así, que el principio de Dirección y Ordenación del Proceso
contemplado en la disposición comentada, autoriza al juez de la causa a conducir los
procesos por la vía procesal ordenada por la Ley, no obstante que la parte incurra en
error. Además, cabe recordar que oportunamente el juzgador con el propósito de recabar
todos los componentes pertinentes a efecto de determinar su competencia, le concierne
reparar oportunamente, es decir, tiene la capacidad saneadora reconocida en la norma
procesal, Art. 278 CPCM, para prevenir respecto a lo pedido por el actor, observado
del examen de admisibilidad de la demanda, de tal manera que, a través de ello se
esclarezca sobre cuestiones de oscuridad de la misma, pero cuya carencia no suponga un
defecto procesal de tal trascendencia que sea insubsanable para su admisión. Esta Corte
advierte de la lectura de la demanda que no hay claridad respecto a las pretensiones que
se están ejerciendo, sin embargo en cualquier caso, ya sea que se trate de acciones reales
o posesorias, la regla de competencia viene determinada por la circunscripción a la que
pertenece el inmueble…”

315
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

Rechazo de la demanda

Art. 473.- Se declararán improponibles las demandas posesorias que pretendan conservar o
recuperar la posesión de bienes raíces o de derechos reales constituidos en ellos si se incoaren una
vez transcurrido el plazo de un año, contado a partir del momento en que tuvo lugar la perturbación
o el despojo.

También se rechazará la demanda que pretenda la suspensión de una obra si ésta hubiera
finalizado o hubiese transcurrido el plazo de tres meses desde que el actor conociera la existencia
de la obra.

Actuaciones previas a la audiencia en caso de suspensión de obra nueva

Art. 474.- Si la demanda pretendiere que se resuelva judicialmente la suspensión de una obra
nueva, el tribunal, antes aun de la citación para la audiencia, dirigirá inmediato requerimiento de
suspensión de la obra al dueño o encargado de la misma.

El requerido podrá ofrecer caución para continuar la obra, así como para realizar las
actuaciones que garanticen la conservación de lo ya edificado, con compromiso de responder de
los daños y perjuicios que pudieran causarse por la continuación o la conclusión. La caución podrá
prestarse en cualquiera de las formas previstas en este código.

Si las partes pidieran el reconocimiento judicial, el reconocimiento pericial o ambos


conjuntamente, el tribunal podrá disponerlo conforme a las disposiciones de este código.

Emplazamiento del demandado y oposición

Art. 475.- Admitida la demanda, se emplazará al demandado para que la conteste, y en su


caso se oponga a la misma, en el plazo de diez días.

Si el demandado dejó transcurrir el plazo sin manifestar su oposición, se dictará sin más
trámites sentencia estimatoria de las pretensiones del demandante, si hay elementos suficientes
para tal estimación. Si el demandado se opone a la demanda, se citará a las partes a audiencia. (2)

Si el demandado no asistiera a la audiencia sin justa causa que se lo impida, o al asistir no


ratificara su oposición, se dictará sin más trámites sentencia estimatoria de las pretensiones del
demandante.

CÁMARA DE LA CUARTA SECCIÓN DEL CENTRO, SANTA TECLA


Apelación N° 135-C-14 Fecha: veintisiete de marzo de dos mil quince.

“En la demanda se afirma por el abogado […], que los demandados el diez de
marzo de dos mil catorce, comenzaron a colocar unos postes y construir un muro de
piedra dentro de la propiedad de su poderdante específicamente en la entrada de la
misma sin autorización y con intención de apoderarse de una franja de terreno de
su propiedad por el rumbo nor-oriente, de una extensión superficial de quinientos
metros.-

Consta que en la sentencia pronunciada por la jueza inferior, que corre agregada de
fs. […], se hace relación de las pruebas vertidas en el proceso, llegando la Jueza A
Quo a la conclusión, y tomando en consideración el informe pericial que consta en

316
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

autos, de desestimar la pretensión de amparo de posesión solicitado por el actor en


la demanda.-

Al recurrir de dicha sentencia el apelante ha señalado tres motivos de agravios, EL


PRIMERO, que la juzgadora inobservó el Art. 475 del CPCM, por cuanto existen
dos momentos: uno, si solo se contesta o no la demanda se dictará sentencia
estimatoria según los elementos de prueba, y la otra si existiere oposición deberá
citar a audiencia; y que en este caso los demandados contestaron la demanda pero
no interpusieron oposición, por cuanto no poseen documento alguno de posesión
o de propiedad o de meros tenedores como lo es un contrato de arrendamiento,
comodato, uso, habitación o de usufructo que los ampare en su perturbación de la
posesión legítima y como consecuencia de ello la señora jueza debió haber dictado
sentencia en forma inmediata estimando la acción.

El Art. 475 Inc. 2º. del CPCM, dispone que: “Si el demandado dejó transcurrir el
plazo sin manifestar su oposición, se dictará sin más trámites sentencia estimatoria
de las pretensiones del demandante, si hay elementos suficientes para tal estimación.
Si el demandado se opone a la demanda, se citará a las partes a audiencia.”

Corre agregado a fs. […], un escrito presentado por el apoderado de la parte


demandada, Abogado […], en el que manifestó en Primera Instancia, que:
””“Habiendo señalado este Tribunal la práctica de reconocimiento judicial y prueba
´por perito en el inmueble propiedad del demandante, de igual forma se ofrece por mi
parte la práctica de reconocimiento judicial y de perito en el inmueble propiedad de
la Alcaldía Municipal de San Miguel de Mercedes, de este departamento, identificado
en su antecedente como TERCER INMUEBLE, a fin de establecer que mi poderdante
reside dentro de la comprensión de dicho inmueble; Arts. 375 y 380 del CPCM,
prueba que puede ser practicada conjuntamente en la fecha señalada por este
Tribunal para la práctica de la prueba ofrecida por la parte demandante.”””[…];
manifestaciones con las que no es posible decir entonces, que no existió oposición
por parte de los demandados porque a criterio de este Tribunal sí la hubo, pues
la finalidad del reconocimiento judicial pedido por el abogado […] ha quedado
claro en dicho escrito, como lo es, desvirtuar los actos de perturbación que se le
atribuyen a los demandados, es por eso que para reforzar los resultados de dicha
diligencia, dicho profesional presentó como prueba instrumental, la certificación
literal del Título de Propiedad inscrito a favor de la Alcaldía Municipal de San
Miguel de Mercedes, al Número de Matrícula 400 […], asiento […] del Registro de
la Propiedad de la Quinta Sección del Centro; documento en el que se describe un
tercer inmueble llamado “[…]”de DIEZ AREAS de extensión superficial.-

A fs. […], aparece el informe del perito del Centro Nacional de Registros, nombrado
para el reconocimiento judicial del inmueble en cuestión, en el que indica, que
los demandados señores […], ejercen posesión material de las porciones de
terreno que les fue entregado a cada uno de ellos por la Alcaldía Municipal de
San Miguel de Mercedes inscrita con la Matrícula 400[…]; que de acuerdo a la
descripción consignada en ella y con la colaboración del demandante, señor […],
se logró determinar el cuerpo cierto del inmueble amparado por la inscripción
arriba mencionada, determinándose que las porciones en posesión de los señores

317
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

demandados se encuentran dentro del inmueble inscrito a favor de la Alcaldía y no


afectan el terreno propiedad del señor […].

Ahora bien, en la audiencia única celebrada en Primera Instancia en este Proceso


Abreviado, el Abogado […], presentó a los testigos […], así como también al perito
[…], Técnico de Campo, quien entre otras cosas en sus deposiciones afirma, que
tuvo a la vista para el peritaje la escritura de la Alcaldía y la de don Liborio que se
encuentran en el expediente del juzgado; que don […] le colaboró para ubicar el
cuerpo cierto del inmueble de la Alcaldía; que don […] señaló los cuatro rumbos y
que las porciones están inmersas en la escritura de la Alcaldía; señalando también
el perito, que no se midió ninguna porción de terreno porque la escritura no dice
ninguna Referencia; y que en la zona no existe levantamiento catastral; y es que
al revisar tanto el testimonio de escritura pública del señor […] que consta de fs.
[…], el cual carece de antecedente inscrito, como la certificación literal del título
de propiedad inscrito a favor de la Alcaldía Municipal de San Miguel de Mercedes
agregado de 47 al 48, se advierte de ambos documentos, que los inmuebles que
en ellos se describen, no poseen medidas, únicamente se refieren a colindancias y
linderos, pero no menciona medidas por ninguno de los rumbos, corroborándose
con ello lo dicho por el perito en su informe y declaración rendida en la audiencia,
siendo comprensible entonces que el Técnico de Campo se haya auxiliado del
demandante, a efecto de que le señalara los cuatro rumbos del inmueble de la
Alcaldía y así determinar si los aquí demandados se encuentran o no perturbando el
terreno de don Liborio, concluyendo así el perito tal como se ha indicado, de que no
existe la aludida perturbación.-”

“Con relación al SEGUNDO MOTIVO DE AGRAVIOS, el abogado apelante,


refiere que la señora jueza ha inobservado el Art. 216 del CPCM, por falta de
fundamentación de la sentencia definitiva, por recaer la misma únicamente a lo que
ha dicho el perito, y que esa prueba no es contundente, y menos, eficaz porque no se
realizó medición alguna, dejándose guiar por lo dicho por su poderdante, dejando a
un lado los documentos de propiedad, que es claro en cuanto al área, colindancias
y linderos.-

En la sentencia recurrida, la juzgadora relacionó toda la prueba que en su


oportunidad se hizo llegar al proceso, pero en efecto el informe rendido por el
Técnico de Campo nombrado para el reconocimiento judicial, fue el que le sirvió
de base y con el que se consideró lo suficientemente instruida para desestimar la
pretensión del demandante; y como se ha afirmado anteriormente, el peritaje resulta
ser la prueba idónea para comprobar la perturbación señalada por el impetrante y
de la que supuestamente ha sido objeto el señor […] desde el diez de marzo de dos
mil catorce; y para establecer tal aspecto en primer lugar innecesario era que se
midiera el terreno, y en segundo, como ya se expresó, ambos inmuebles carecen de
medidas, y por lo dicho por el perito en su informe y declaración, en la zona no existe
levantamiento catastral, por lo que, en tal virtud, la única manera de comprobar la
perturbación del inmueble en cuestión era ubicando los linderos y colindancias tal
como se describen en cada uno de los documentos presentados por cada una de las
partes.-”

318
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

“Finalmente como TERCER MOTIVO manifiesta el apelante, que hubo inobservancia


de parte de la señora jueza respecto de los Arts. 6, 65 y 66 del CPCM, en el sentido
de que el apoderado de los demandados no puede estar alegando derechos de la
Alcaldía y presentando documentos de la misma para defender a sus demandados,
cuando éste no esta acreditado como tal y menos como tercero en el proceso, por lo
que a criterio del impetrante los derechos de terceros no debió haberlos vinculado la
juzgadora y menos valorar los mismos para dar la Sentencia.-

Nuevamente esta Cámara reitera, que al analizar los términos del escrito del Abogado
[…], se advierte del mismo, que dicho abogado manifestó que sus poderdantes
residen dentro de la comprensión del inmueble propiedad de la Alcaldía Municipal
de San Miguel de Mercedes, identificado como INMUEBLE TERCERO, y presentó la
certificación literal del título de propiedad inscrito a favor de la Alcaldía como prueba
documental, la que para los suscritos es prueba pertinente en vista de la afirmación
que se estaba haciendo en aquel momento de parte del citado abogado, pues aparte
de ello, dicho documento sirvió para la práctica del reconocimiento judicial para
efectos de ubicar las colindancias del inmueble de que se dice están en posesión los
demandados, y consecuentemente que no están ejerciendo actos de perturbación sobre
el terreno del señor […], por lo que no es cierto que haya habido inobservancia de las
disposiciones ya citadas de parte de la funcionaria según se ha señalado.-”

“Formalmente la parte actora fundamenta su derecho a interponer la demanda


pues pretende determinar que él es poseedor del terreno en disputa, ya que con
los testigos que él mismo hizo llegar a la audiencia justificó posesión ejercida en
el citado inmueble, cumpliéndose así un requisito formal de conformidad al Art.
922 C., que estipula que el poseedor tiene el derecho de pedir que no se le turbe
o embarace su posesión o se le despoje de ella; igualmente se ha cumplido con
relación al plazo de la interposición de la demanda, ya que lo hizo dentro del
plazo prescrito en el Art. 921 C., el cual dispone que la acción se entable dentro
el año completo, contado desde el acto de molestia o embarazo, requisito que
también se ha cumplido de parte del actor, teniendo en cuenta que la supuesta
perturbación comenzó el día diez de marzo de dos mil catorce y la demanda se
planteó el día treinta y uno del mismo mes y año, pero no se comprobó que los
aquí demandados estén cometiendo actos de perturbación respecto del inmueble
en litigio como los señalados en la demanda.-

Como consecuencia de lo anterior, se procederá a confirmar la sentencia venida


en apelación, por cuanto la parte demandante (apelante), no logró con la prueba
introducida al proceso establecer la perturbación que supuestamente han ejercido
los demandados en el inmueble en cuestión, sino que por el contrario con el
reconocimiento que se practicó se desvaneció tal afirmación hecha por el actor en
su demanda.”

Sentencia y recursos

Art. 476.- La sentencia que se dicte sobre la protección de la posesión que se reclama no
producirá efectos de cosa juzgada, y deja a salvo el derecho de las partes para acudir al proceso
declarativo.

319
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

Contra la sentencia que se dicte procederá recurso de apelación, sin perjuicio de llevar a efecto
lo ordenado en ella, previo otorgamiento de caución suficiente.

Contra la sentencia dictada en apelación no procederá recurso alguno. (2)

CÁMARA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DE OCCIDENTE:


SANTA ANA, en Sentencia con Referencia INC-APEL-89-26-06-15, de fecha
treinta de junio de dos mil quince, sostiene que

“…La sentencia recurrida conforme a lo dispuesto en el Art. 476 Inc. 2 CPCM, es


susceptible de apelación, sin embargo para la admisión de dicho recurso es preciso
que la parte que lo interpone no haya renunciado a la interposición del mismo,
tal como ha ocurrido en el caso que nos ocupa, según se verá a continuación.- En
la sentencia recurrida …ambas partes, actora y demandada manifestaron estar
conformes con la misma y que no harían uso de ningún recurso, por lo que en base
al Art. 222 Inc. 2° CPCM, el señor Juez A Quo, declaró firme la sentencia dictada,
ordenando su archivo.- Las Sentencias adquieran estado de firmeza al darse los
siguientes supuestos: 1) Que se hayan agotados los recursos que establece la Ley;
2) Cuando las partes consienten en ella renunciado expresamente a recurrir de la
misma; y 3) Tácitamente al no hacer uso las partes, de los recursos que les franquea
la ley en los plazos establecidos para interponer el recurso de que se trate.- En el
caso que nos ocupa, al pronunciarse por parte del señor Juez A Quo la sentencia
respectiva en el sentido antes indicado, su decisión fue aprobada unánimemente por
ambas partes, actora y demandada, quienes además manifestaron que no harían uso
de ningún recurso, por lo que, en base al Art. 222 Inc. 20 CPCM, procedía declarar
firme la sentencia dictada, como efectivamente sucedió.- Por lo antes dicho, no
procede la interposición de recurso alguno contra la sentencia dictada, por lo que
mal hizo el representante procesal de la parte actora … al apelar de dicha sentencia
cuando ya había manifestado con anterioridad su conformidad con la misma.- El
proceso posesorio es un proceso especial con pretensiones propias, con trámite
abreviado y la sentencia que se dicta no produce efecto de cosa juzgada, por lo que
deja a salvo el derecho de las partes para acudir al proceso declarativo.- Art. 476
CPCM…”

TÍTULO TERCERO
LOS PROCESOS DE INQUILINATO

Ámbito

Art. 477.- Las disposiciones de este Título serán aplicables a:

1°. Las demandas que, con fundamento en la falta de pago de la renta, pretendan la
terminación del contrato y desocupación del inmueble arrendado por causa de mora.
2°. Las demandas que, con fundamento en la terminación del contrato en los casos previstos
por la ley, pretendan la desocupación del inmueble y el reclamo de los cánones adeudados.
3°. Las demandas que tengan por objeto obtener autorización para incrementar el valor de la
renta.
4°. Las diligencias que tratan de la imposición de multas a que se refiere la ley de la materia,
cuando no hubieran sido impuestas en el proceso principal.

320
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

CÁMARA TERCERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, Sentencia de Apelación Referencia: 163-CQCM-12 de fecha dieciocho
de octubre de dos mil doce.

“En lo relativo a que no se respetó el procedimiento establecido en la Ley de


Inquilinato, violentándose los artículos 1 y 6 de la misma, es de señalar que la parte
demandante ha promovido ante el Juzgado Quinto de lo Civil y Mercantil, Proceso
Común Declarativo de Terminación de Contrato, presentando un contrato de
arrendamiento que no genera el conocimiento de un proceso especial de inquilinato,
puesto que el inmueble objeto de la controversia fue arrendado para instalar un
negocio de cantina y para aplicar tales disposiciones, debían establecerse tres
circunstancias: a) que el activo del negocio no excediera de quince mil colones. b)
que el inquilino fuera el dueño del negocio. c) que habitara permanentemente en el
mismo edificio en piezas contiguas y comunicadas con el establecimiento: las cuales
no fueron demostradas por el recurrente por ningún medio legal de la prueba a lo
largo del proceso. Por lo que tratándose de un contrato regido por el Derecho Civil,
no es atinado exigir el cumplimiento de artículos de la Ley Especial de la materia,
por lo que deberá desestimarse este agravio.”

CÁMARA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DE OCCIDENTE,


Apelación INC-APEL-30-29-03-2016 de fecha veintinueve de abril de dos mil
dieciséis.

“En los casos donde se demanda la terminación de un contrato de arrendamiento de


vivienda, la desocupación del inmueble arrendado y además el pago de los cánones
adeudados, su trámite estará sujeto a lo que regula el Libro Tercero, Titulo Tercero,
Arts. 477 numeral 20, 478 del CPCM, estableciendo dicho marco legal, que si el
demandado no compareciere a la audiencia que ordena el Art. 482 del CPCM., se
declarara el desahucio sin más trámites en un plazo no mayor de diez días, es decir
la desocupación del inmueble arrendado; no obstante lo anterior, si se solicitaren
el pago de cánones adeudados, a criterio de esta Cámara, es procedente condenar
al pago de los mismos, lo anterior deviene por lo consignado en el Art.485 inciso
primero del CPCM, con el epígrafe: “Prueba en procesos de desocupación por
causa de mora”, que estipula: Cuando se pretenda la desocupación del inmueble por
mora sólo se permitirá al demandado alegar y aprobar el pago o las circunstancias
relativas a la procedencia del sobreseimiento.

Lo anterior debe entenderse, que la comparecencia del demandado a tal audiencia


única lo es para desvirtuar o no el pago sobre el reclamo de cánones que le hace el
actor, por consiguiente, si no comparece tal parte a la audiencia única programada,
ó sí comparece y no lograse demostrar pago alguno sobre lo que se le reclama, se
vuelve viable la procedencia de la desocupación del inmueble arrendado, lo que debe
hacerse extensivo a la terminación del contrato de arrendamiento y a la condena de
pago de cánones, si estos hubiese sido demandados por la parte actora, tal como ha
sucedido en autos, lo anterior con fundamento en el principio de congruencia.-

Por consecuencia esta Cámara, no comparte el criterio sustentado por el señor Juez A
Quo, de no haber condenado al pago de cánones demandados, por lo que es procedente

321
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

revocar la sentencia recurrida, en cuanto a la desestimación de cánones adeudados y en


su lugar, ordenar el pago de los cánones reclamados por la parte actora, quedando firme
todo lo demás resuelto y condenado en costas procesales a la parte demandada.”

CÁMARA SEGUNDA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, SAN SALVADOR, Apelación N°29-4CM-13-A de fecha: treinta de
abril de dos mil trece.
“El Juez A Quo en el auto apelado, declaró la improponibilidad de la demanda
presentada, por considerar que no era la vía idónea para ventilar las pretensiones
de la parte actora, ya que el inmueble arrendado no estaba destinado exclusivamente
para el arrendamiento de vivienda, por lo cual, no se debía tramitar como un proceso
de inquilinato, ya que éste es exclusivo para los arrendamientos de vivienda.
El Art. 705 Inc.1° CPCM al respecto establece: “Derógase...las normas procesales
de la Ley de Inquilinato publicada en el Diario Oficial No.35, Tomo 178, publicación
del 20 de febrero de 1958 y sus reformas posteriores...”
De lo anterior se concluye que, todas las disposiciones que no se encuentran dentro
de la parte procesal que regula la Ley de Inquilinato, se encuentran vigentes y por
tanto, deben aplicarse.
Aclarado lo anterior es pertinente citar lo regulado en el Art.1 de la Ley de Inquilinato:
“La presente Ley se aplicará al arrendamiento y subarrendamiento de casas y locales
que se destinen: ...b) Para instalar en ellos un establecimiento comercial o industrial
cuyo activo no exceda de quince mil colones (c.15.000.00), siempre que el inquilino sea
el dueño del negocio y habite permanentemente en el mismo edificio en piezas contiguas
y comunicadas con el establecimiento de que se trate,...”
Por otra parte el Art. 478 Inc. 3° CPCM establece que los procesos regulados en
este título son los que se refieren exclusivamente a arrendamientos para vivienda, no
obstante ello, también debe tramitarse por medio de un proceso de inquilinato los
casos establecidos en el Art. 1 de la Ley de Inquilinato, aunque no todos se refieren
exclusivamente para viviendas.
En el caso en estudio la licenciada […], en calidad de apoderada del señor […], ha
demandado a los señores […] arrendatario y al señor […], codeudor solidario, en
proceso de inquilinato de terminación de contrato de arrendamiento por causa de
mora, pago de los cánones pendientes y desocupación del inmueble arrendado.
Para ello, ha presentado junto a la demanda, un documento privado autenticado que
contiene el contrato de arrendamiento de fecha diecinueve de julio de dos mil cuatro,
en el cual dentro de la cláusula IV se estableció que el objeto de dicho contrato sería
el arrendamiento de una casa para uso de habitación y servicio de polarizado e
instalación de un carwash.
Razón por la cual la parte apelante alega que el caso de marras encaja en el
supuesto regulado en el Art. 1 literal b) de la Ley de Inquilinato, sin embargo, se
advierte que dicha abogada no ha presentado la prueba documental pertinente,
con la cual acredite que dicho negocio no tiene un activo que pase de los quince
mil colones que establece la ley citada.

322
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

Por el contrario consta agregado a fs. […], acta notarial de acuerdo conciliatorio
otorgada a las quince horas con treinta minutos del día siete de septiembre de
dos mil once, por el señor […] a favor del señor […].
En la cual en el romano V el señor […] dio como garantía del pago de la
obligación contraída por él, prenda sin desplazamiento a favor del señor […],
la cual recae sobre un equipo de impresión digital, marca: [...], serie: [...],
con un valor original de VEINTISIETE MIL SETECIENTOS DOCE PUNTO
VEINTISÉIS DÓLARES, el cual se encontraba libre de gravamen, a nombre del
señor […], y que continuaría en poder del último en un inmueble propiedad del
acreedor, situado en [...], Colonia Miramonte, de esta ciudad. […]
Con lo cual las suscritas advierten que, el equipo dado en garantía se encuentra
en el inmueble arrendado por el señor […], y que dicha máquina es propiedad
de dicho señor, pero se usa para el trabajo de polarizado establecido en la
casa objeto del arrendamiento, por tanto, con base a la sana crítica se deduce
que dicho establecimiento comercial o industrial tiene un activo superior
a los quince mil colones establecidos en el Art. 1 de la Ley de Inquilinato, en
consecuencia, el presente caso no puede ser tramitado por medio de un proceso
de inquilinato, sino más bien por un proceso declarativo común, en razón a la
cuantía relacionada.”
CÁMARA SEGUNDA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL
CENTRO, SAN SALVADOR, Apelación, N°82-4CM-13-A de Fecha: uno de
noviembre de dos mil trece.
“En otro orden de ideas y en lo que respecta al título de propiedad que ostenta
el Instituto Nacional de los Deportes de El Salvador, las suscritas aclaran que
si bien es cierto existe prohibición expresa, para que los Tribunales o Juzgados
puedan admitir algún título o documento que no esté registrado, si existe la
obligación de hacerlo, en los casos que el objeto de la pretensión fuere hacer
valer un derecho contra terceros, en consecuencia, de conformidad a los Arts.
667, 680, 683, 686 N° 1, 717 Inc. 1° C.C., la donación celebrada entre el Estado
y Gobierno de El Salvador y el Instituto Nacional de los Deportes de El Salvador,
debió inscribirse, también es cierto que en el caso que nos ocupa, no se está
discutiendo la propiedad de dicho inmueble sino la terminación de un contrato
de arrendamiento.”
La CÁMARA DE LA CUARTA SECCIÓN DEL CENTRO: SANTA TECLA,
en Sentencia con Referencia 85-I-14, de fecha dos de diciembre de dos mil catorce,
sostiene que:
“…3.1…el ámbito de aplicación del proceso de inquilinato recae en las pretensiones
claramente marcadas por el Art. 477 CPCM, las cuales son de carácter general, sin
distinción sobre la procedencia del derecho protegido, sea civil, mercantil o inquilinato.
Dicho proceso, se sustanciara en general conforme a lo dispuesto para los trámites
del proceso abreviado, cualquiera que sea su cuantía, atendiendo siempre las normas
especiales propias de la naturaleza del proceso, (Art. 478 inciso 1° CPCM). Es así, que
se reconoce que la alegación inicial del demandante se formaliza por medio de una
demanda simplificada, que deberá cumplir las reglas del Art. 418 CPCM…”

323
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

CÁMARA SEGUNDA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO: SAN SALVADOR, en Sentencia con Referencia 33-4CM-13-A, de
fecha treinta de mayo de dos mil trece, sostiene que:

“…2.7 Si bien es cierto, el supuesto normal de legitimación en un contrato de


arrendamiento viene dado para las personas que celebraron dicho contrato
originalmente, es decir el arrendante y el arrendatario, en el presente caso, dicha
situación se ve modificada por ley en virtud de haberse vendido el inmueble objeto
del arrendamiento, según se desprende de la regulación del Art. 28 de la Ley de
Inquilinato. 2.8. Al respecto, el art. 28 de la Ley de Inquilinato, establece: “Tampoco
se extinguirá el contrato por muerte del arrendador o por traspaso que éste haga del
inmueble, a título oneroso o gratuito. Los adquirientes del inmueble en estos casos
se sustituirán en los derechos y obligaciones del arrendatario debiendo respetar el
arrendamiento aunque el contrato no estuviese inscrito y sólo podrán obtener su
terminación en los casos que indican los Arts. 24 y 25.”2.9 La disposición transcrita
nos indica que cuando el arrendador enajene el inmueble dado en arrendamiento, la
persona que adquiere el mismo adquiere además la misma posición del arrendante,
y en este caso se encuentra obligado a respetar el arrendamiento. En consecuencia,
la legitimación para reclamar en juicio los derechos que como arrendante le
corresponden se le transfiere al nuevo dueño del inmueble arrendado…”

CÁMARA PRIMERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO: SAN SALVADOR, en Sentencia con Referencia 197-63 CM1-2013, de
fecha diecinueve de febrero de dos mil catorce.

“…3.1.1. El ámbito del proceso especial de inquilinato se encuentra determinado


en el art. 477 CPCM., y este caso en particular, se adecua al numeral 2º que se
refiere al proceso de inquilinato cuyo fundamento sea la terminación del contrato
y que se pretenda la desocupación del inmueble y el reclamo de los cánones
adeudados…3.1.2. El contrato de arrendamiento es un contrato en que las dos
partes se obligan recíprocamente, una a conceder el goce de la cosa y la otra a
pagar por este goce un precio determinado, y es de tracto sucesivo, por ser de
aquellos cuyas obligaciones se van renovando, y extinguiendo sucesivamente, y así
se tiene que si se trata del arrendamiento de una casa, mes a mes se va extinguiendo
la obligación del arrendador, de proporcionar el goce de la cosa, y la obligación
del arrendatario de pagar el precio, y extinguida la obligación de un mes, nace la
obligación del otro mes. Entre los requisitos esenciales, se encuentran los siguientes:
a. El consentimiento; b. Que una de las partes proporcione a otra el goce de una
cosa; y, c. Que la otra parte pague por esta cosa, un precio…3.1.5. Como es sabido,
los hechos admitidos o estipulados por ambas partes, están exentos de prueba, de
conformidad a lo establecido en el ordinal 1º del art. 314 CPCM.; por lo que al
no controvertirse la fecha de la mora, ésta fue probada y acreditada, sin tener que
hacerse mayores consideraciones al respecto; por lo que dicho punto de apelación
no tiene sustento legal…3.2.1. El interés se define como el provecho, utilidad o
ganancia que se saca de alguna cosa; y especialmente el beneficio que obtiene un
acreedor del dinero que se le debe y no le es pagado, en otras palabras, la cantidad
adicional que el acreedor percibe del deudor por el impago de la deuda, para el
caso del contrato de arrendamiento, por la naturaleza inherente al tipo de contrato

324
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

celebrado, en el cual, previamente ha sido determinado un monto por ambas partes,


el que conlleva el lucro perseguido, no se ha generado pérdida de ganancia alguna
que deba reponerse en virtud de una Sentencia, porque la obligación no es producto
de una relación de tipo crediticia, en la que la deudora haya caído en mora y por esa
razón deba ser condenada al pago de intereses legales. El art. 1964 C.C., señala que
si se estipulare en general intereses sin determinar la cuota, se entenderá que deberán
pagarse intereses legales. El interés legal es el seis por ciento al año. El art. 1967
C.C., relacionado en el fallo de la sentencia por la jueza a quo, determina que no se
deberán intereses de intereses, sino en el caso de haberse estipulado, y con tal que
los intereses que se capitalicen se refieran a una obligación cuyo plazo se ha vencido.
3.2.2. En concordancia con lo anterior, este tribunal estima que en el caso de autos no
tiene aplicación lo dispuesto en las disposiciones legales citadas, por la razón que no
se dan los supuestos estipulados en las mismas, para la condena accesoria relativa al
pago de intereses legales moratorios del seis por ciento anual…”

CÁMARA PRIMERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO: SAN SALVADOR, en Sentencia dictada en la Audiencia, con
Referencia 66-23CM1-2013, de fecha once de julio de dos mil trece.

“…3.1.2) La pretensión esencial de la parte actora en el referido proceso de


inquilinato, es que se declare la terminación judicial del contrato de arrendamiento
con su respectiva desocupación del inmueble arrendado, y se condene al pago de
los cánones generados, hasta la fecha de la desocupación de la casa arrendada.
3.1.3) El contrato de arrendamiento es un contrato en que las dos partes se obligan
recíprocamente, una a conceder el goce de la cosa y la otra a pagar por este
goce un precio determinado, que es de tracto sucesivo, por ser de aquellos cuyas
obligaciones se van renovando, y extinguiendo sucesivamente, y así se tiene que si
se trata del arrendamiento de una casa, mes a mes se va extinguiendo la obligación
del arrendador, de proporcionar el goce de la cosa, y la obligación del arrendatario
de pagar el precio, y extinguida la obligación de un mes, nace la obligación del otro
mes. Entre los requisitos esenciales, se encuentran los elementos siguientes: a. El
consentimiento; b. Que una de las partes proporcione a otra el goce de una cosa; y,
c. Que la otra parte pague por esta cosa, un precio. 3.1.4) De acuerdo a lo dispuesto
en el art. 1435 inc. 1º C.C., que es una norma interpretativa, que busca el punto de
vista considerado por las partes, que se dirige a buscar la intención negocional,
existe obligación de interpretar las cláusulas contractuales unas por otras, o
sea relacionándolas, pero dándole a cada una, el sentido que mejor convenga al
contrato en su totalidad, es decir, que en cada caso debe de analizarse lo que los
contratantes le dieron a todo el contrato, y a cada una de sus cláusulas. El inciso
3º de la disposición citada, establece una regla subjetiva para la interpretación de
los contratos, cuando dice “o por la aplicación práctica que hayan hecho de ellas
ambas partes, o una de las partes con aprobación de la otra”…”

Procedimiento y competencia

Art. 478.- Los procesos regulados en este título se sustanciarán conforme a los trámites del
proceso abreviado, cualquiera que sea su cuantía, con las especificaciones establecidas en los
artículos siguientes.

325
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

Será competente para conocer de estos procesos el Juez de Primera Instancia del lugar donde
se encuentre ubicado el bien, con excepción de los juzgados de menor cuantía. (2)

Los procesos regulados en este título son los que se refieren exclusivamente a arrendamientos
para vivienda.

CÁMARA PRIMERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, SAN SALVADOR, Apelación N° 197-63CM1-2013 de Fecha:
diecinueve de febrero de dos mil catorce.

“El ámbito del proceso especial de inquilinato se encuentra determinado en el Art.


477 CPCM., y este caso en particular, se adecua al numeral 2º que se refiere al
proceso de inquilinato cuyo fundamento sea la terminación del contrato y que se
pretenda la desocupación del inmueble y el reclamo de los cánones adeudados.

La pretensión esencial de la parte actora en el referido proceso de inquilinato, es que


se declare la terminación judicial del contrato de arrendamiento con su respectiva
desocupación del inmueble arrendado, y se condene al pago de los cánones
generados, hasta la fecha de la desocupación de la casa arrendada.

El contrato de arrendamiento es un contrato en que las dos partes se obligan


recíprocamente, una a conceder el goce de la cosa y la otra a pagar por este goce un
precio determinado, y es de tracto sucesivo, por ser de aquellos cuyas obligaciones
se van renovando, y extinguiendo sucesivamente, y así se tiene que si se trata
del arrendamiento de una casa, mes a mes se va extinguiendo la obligación del
arrendador, de proporcionar el goce de la cosa, y la obligación del arrendatario de
pagar el precio, y extinguida la obligación de un mes, nace la obligación del otro
mes.

Entre los requisitos esenciales, se encuentran los siguientes: a. El consentimiento; b.


Que una de las partes proporcione a otra el goce de una cosa; y, c. Que la otra parte
pague por esta cosa, un precio.

En el presente caso, el contrato de arrendamiento, […], fue celebrado entre las


señoras [parte demandante y parte demandada], la primera como arrendante y la
segunda como arrendataria, sobre un inmueble situado en […], por el precio total
de TREINTA MIL COLONES, pagados por la arrendataria por mensualidades
anticipadas, fijas y continuas de DOS MIL QUINIENTOS COLONES, cada una
pagaderas el día primero de cada mes.Con la presentación del mismo, se acreditó
la relación contractual existente entre las otorgantes, y la aseveración de los
apoderados de la demandante, […], en cuanto a que la inquilina se encuentra en
mora del pago de la obligación pactada en el contrato de arrendamiento desde el día
DOS DE AGOSTO DE DOS MIL DOCE, en ningún momento fue desvirtuada por la
apoderada de la parte demandada hoy apelante, […], muy al contrario, admite los
hechos afirmados por los referidos apoderados, al expresar en la audiencia pública
celebrada a las diez horas del día dieciocho de octubre de dos mil trece, […], que
“su representada, al darse cuenta que había un error en el nombre que aparece en la
ficha catastral del inmueble DEJÓ DE HACER LOS PAGOS CORRESPONDIENTES
A LOS CÁNONES MENSUALES, porque existía confusión sobre el nombre de la

326
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

arrendante, una duda sobre si era la misma persona a la que le estaban haciendo los
pagos, situación que su representada le hizo ver a la arrendante, manifestándole la
misma que arreglaría ese problema, y que UNA VEZ ARREGLADO EL PROBLEMA
CANCELARÍA LAS CUOTAS QUE ESTABAN PENDIENTES, SITUACIÓN QUE
HASTA LA FECHA NO ES SOLUCIONADA…”

Como es sabido, los hechos admitidos o estipulados por ambas partes, están exentos
de prueba, de conformidad a lo establecido en el ordinal 1º del Art. 314 CPCM.; por
lo que al no controvertirse la fecha de la mora, ésta fue probada y acreditada, sin
tener que hacerse mayores consideraciones al respecto; por lo que dicho punto de
Apelación no tiene sustento legal.”

CÁMARA TERCERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, SAN SALVADOR, Apelación N°215-IM-12 de Fecha: veintiocho de
noviembre de dos mil doce.

“En cuanto al reclamo de no haberse legitimado por medio de escritura pública


inscrita en el Registro de la Propiedad el que la persona con la que se suscribió
el contrato sea propietaria del mismo. Respecto de este agravio, es necesario
recordarle al apelante, que el incidente que ha motivado el presente recurso es
suscitado dentro de un proceso de inquilinato por la causal de mora, en el cual no
se discute el derecho de propiedad del inmueble, sino más bien, la existencia de un
contrato de arrendamiento que vincula jurídicamente a dos personas, que resultan
ser actor y demandado en el proceso de mérito, y que el tema decidendi, entraña el
cumplimiento del versado contrato por el inquilino, razón por la cual determinar
quién es o no el propietario del inmueble, es estéril para los fines de este proceso,
por lo que deberá desestimarse este agravio.”

CÁMARA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DE OCCIDENTE:


SANTA ANA, en Sentencia con Referencia INC-APEL-24-05-03-14, de fecha doce
de mayo de dos mil catorce.

“… el Art. 478 CPCM, indica el procedimiento y competencia de los procesos de


inquilinato, como es el caso y, señala, que éstos se sustanciarán conforme a los
trámites del proceso abreviado, encontrándose entre las disposiciones que regulan
el desarrollo de la audiencia en éstos, el Art. 427 CPCM, que norma las alegaciones
de las partes en la audiencia y dispone que si no hay conciliación, se le concede
la palabra al demandante para que ratifique, amplíe o reduzca su demanda y al
referirse a la participación del demandado, en su inciso segundo acota: “El
demandado contestará alegando en primer lugar, cuantos defectos procesales estime
conveniente, y posteriormente afirmando o negando concretamente los hechos
y los fundamentos de derecho de la demanda. Acto seguido, el demandado podrá
formular reconvención.”En consecuencia, de acuerdo a tal precepto legal es en esta
etapa procesal, que la contestación de la demanda es ejercida y, tal como expresa
el artículo citado, de manera oral, razón por la que no se ha infringido el principio
de legalidad y por ende la sentencia no está viciada de nulidad, como sostiene el
apelante, la cual desde ningún contexto procede declarar, pues la contestación de
la demanda, constituye un acto de impulso procesal que en ejercicio de su defensa

327
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

realiza el demandado, no enmarcándose en los supuestos contenidos en el Art. 232


CPCM…”

CÁMARA PRIMERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO: SAN SALVADOR, en Sentencia con Referencia 216-90CM1-2014, de
fecha diecinueve de febrero de dos mil quince.

“…3.3) …En ese contexto, si bien es cierto la Ley de Inquilinato se encuentra aún
vigente en su parte sustantiva, en su Art. 1 regula su campo de aplicación, y recoge
al inicio, los supuestos y destinatarios de los procesos de inquilinato, quedando
los procesos derogados por el Código Procesal Civil y Mercantil. Así las cosas,
las quejas, derechos y pretensiones ejercidas simple o abusivamente, fundadas
o infundadas, influyen en el goce pacífico que el arrendatario o sub arrendatario
espera razonablemente obtener en virtud del contrato de arrendamiento. Por tales
motivos, en el caso de los alquileres de oficinas profesionales, deben ser ventilados
por el proceso especial de inquilinato, es decir, por un proceso ágil. Además de que
en el Art. 239 CPCM., entre otras cosas, se establece la regla de competencia en
el sentido que la cuantía cede ante la materia; tal disposición, en armonía con lo
prescrito en el Art. 477 Ord. 2º del citado cuerpo legal. En ese sentido, siendo que
el Código Procesal Civil y Mercantil en sus primeras disposiciones establece que
los procesos especiales deben ser conocidos por los Jueces de Primera Instancia, es
dable concluir que deben conocer en San Salvador, los Jueces Civiles y Mercantiles,
porque la competencia para tales juzgados, queda establecida por razón del ámbito
material (inquilinato) y personal (sujetos destinatarios protegibles), de validez y
no por la cuantía. De esta manera, se persigue suplir el vacío procesal que existe
en cuanto al arrendamiento de oficinas profesionales, buscando una identidad
sustancial en relación con el interés protegible. Por ello, no existe óbice para integrar
el derecho donde el Art. 478 Inc. 3° CPCM., emplee el vocablo “exclusivamente”a
los arrendamientos de vivienda, ya que más allá de esa razón autoritativa, existen
motivos de fondo para aplicar la misma solución legal, teniendo aplicación lo
dispuesto en el Código Procesal Civil y Mercantil para los Procesos Especiales de
Inquilinato. De esa misma manera lo ha expresado la Honorable Corte Suprema
de Justicia en Corte Plena, en su resolución de las quince horas y treinta y siete
minutos del día veintidós de febrero de dos mil once, en el Proceso de Conflicto de
Competencia Negativa, identificado con la Referencia 188-D-2010; por lo que el
punto de apelación no tienen fundamento legal…”

CÁMARA PRIMERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO: SAN SALVADOR, en Sentencia con Referencia 206-68CM1-2013, de
fecha diez de enero de dos mil catorce.

“…c) …en el contrato de arrendamiento presentado … se expresó …que la segunda


destinará el inmueble para vivienda familiar, tal como lo indica el inc. último del
Art. 478 CPCM.; asimismo, en la cláusula IV), referente al precio, la arrendataria
se obligó a pagar de forma mensual, fija, anticipada y sucesiva, los cánones, los
días uno de cada mes, y al no hacerlo, incurre en mora. En síntesis, la reconvención
judicial de pago exigida por las disposiciones del derecho común, no son aplicables
para el caso en estudio, precisamente porque el Art. 3 de la Ley de Inquilinato,

328
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

establece que si se demanda por causa de mora en el pago de la renta y se pide


la terminación del arriendo y la desocupación de la cosa arrendada, no habrá
desahucio ni reconvención de pago. III …en virtud que se trata de un arrendamiento
de una casa destinada para vivienda familiar, regulado en el literal a) del Art. 1 de la
Ley de Inquilinato, no es necesario reconvenir el pago de los cánones adeudados a
la arrendataria…, pues ese requerimiento sólo se exige cuando se refiere a procesos
que se inicien con fundamento en el derecho común, pero no para los destinatarios
que señala la disposición legal citada…”

CÁMARA SEGUNDA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO: SAN SALVADOR, en Sentencia con Referencia 33-4CM-13-A, de
fecha treinta de mayo de dos mil trece.

“…2.5 El tema de la legitimación se encuentra en el artículo 66 del CPCM, É.


Dicho artículo establece cuáles son los casos en que puede intervenir una persona
en un proceso sin ser el titular del derecho que se discute, limitándolos sólo a los
casos específicos en que sea reconocido expresamente por la ley… 2.7 Si bien es
cierto, el supuesto normal de legitimación en un contrato de arrendamiento viene
dado para las personas que celebraron dicho contrato originalmente, es decir el
arrendante y el arrendatario, en el presente caso, dicha situación se ve modificada
por ley en virtud de haberse vendido el inmueble objeto del arrendamiento, según
se desprende de la regulación del Art. 28 de la Ley de Inquilinato. 2.8. Al respecto,
el Art. 28 de la Ley de Inquilinato, establece: “Tampoco se extinguirá el contrato
por muerte del arrendador o por traspaso que éste haga del inmueble, a título
oneroso o gratuito. Los adquirientes del inmueble en estos casos se sustituirán en
los derechos y obligaciones del arrendatario debiendo respetar el arrendamiento
aunque el contrato no estuviese inscrito y sólo podrán obtener su terminación en
los casos que indican los Arts. 24 y 25.”2.9 La disposición transcrita nos indica que
cuando el arrendador enajene el inmueble dado en arrendamiento, la persona que
adquiere el mismo adquiere además la misma posición del arrendante, y en este caso
se encuentra obligado a respetar el arrendamiento. En consecuencia, la legitimación
para reclamar en juicio los derechos que como arrendante le corresponden se le
transfiere al nuevo dueño del inmueble arrendado…”

CORTE SUPREMA DE JUSTICIA EN CORTE PLENA, SAN SALVADOR,


en Resolución de Conflicto de Competencia, con Referencia 188-D-2010, de fecha
veintidós de febrero de dos mil once.

“… IV…una de las pretensiones básicas y perseguidas por los arrendantes es


recuperar su inmueble, es decir, terminar el contrato y desalojar al inquilino. Por
otro lado, el mercado inmobiliario, de arrendamiento de inmuebles, siendo un
sector que en las economías inyecta cantidades considerables de dinero, requiere
de prontas soluciones jurídicas; con mayor razón, cuando se trata de centros
educativos y oficinas profesionales. Se considera entonces, que el proceso apto para
tales propósitos es el especial de inquilinato. Por eso, ya sea que solo se reclame la
terminación y la desocupación o únicamente se reclamen los cánones no pagados
de los contratos de arrendamiento de centros educativos y oficinas profesionales, es
recomendable emplear el proceso especial de inquilinato. En ese sentido, siendo que

329
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

el Código Procesal Civil y Mercantil en sus primeras disposiciones establece que los
procesos especiales deben ser conocidos por los Jueces de Primera Instancia, es dable
concluir que deberán conocer en San Salvador, los Jueces Civiles y Mercantiles. En
otras palabras, la competencia para tales juzgados, queda establecida por razón del
ámbito material (inquilinato) y personal (sujetos destinatarios protegibles ya citados
arriba), de validez y no por la cuantía; por lo que se concluye que la competente
para conocer del caso sub-júdice, es la Jueza Segunda de lo Civil y Mercantil de esta
ciudad y así se determinará. De esta manera, se persigue suplir el vacío procesal
que existe en cuanto al arrendamiento de centros educativos y oficinas profesionales,
buscando una identidad sustancial en relación con el interés protegible. Por eso
mismo, no vemos óbice para integrar el derecho donde el Art. 478 Inc. 3° del Código
Procesal Civil y Mercantil emplee el vocablo “exclusivamente”a los arrendamientos
de vivienda, ya que más allá de esa razón autoritativa, existen motivos de fondo para
aplicar la misma solución legal. Asimismo, en aplicación del Art. 478 Inc. 2° del
citado cuerpo jurídico, se descarta que el Juzgado de Menor Cuantía conozca del
caso y a la vez concuerda con las competencias atribuidas a los Juzgados Civiles y
Mercantiles, en el Art. 30 Ord. 2° del iterado Código…”

CORTE SUPREMA DE JUSTICIA, SAN SALVADOR, en Resolución de


Conflicto de Competencia, con Referencia 85-COM-2014, de fecha once de
septiembre de dos mil catorce.

“…es mencionar que la fijación de un domicilio especial y los efectos de éste,


como título de competencia, se encuentran regulados en el Art. 67 C.C. el que
establece lo siguiente: “Se podrá en un contrato establecer de común acuerdo
un domicilio civil especial para los actos judiciales o extrajudiciales a que diere
lugar el mismo contrato”. En consonancia con tal precepto, el Art. 33 inciso 2°
CPCM, estipula: “Asimismo es competente el juez a cuya competencia se hayan
sometido las partes por instrumentos fehacientes”; de lo anterior se desprende,
que la fijación de un domicilio especial, sólo surte efecto cuando ha sido producto
de un acuerdo de voluntades entre las partes, vale decir para el caso en análisis
arrendatario y arrendante… Se le recuerda a la jueza de lo Civil de Santa Tecla,
que el domicilio especial señalado por ambas partes no priva al actor de demandar
donde él considere a bien hacerlo, pues queda a decisión del mismo donde incoar
la acción; ya sea en el domicilio especial, o en el lugar donde se encuentra ubicado
el inmueble - siempre y cuando se trate de procesos de inquilinato con respecto a
arrendamiento para vivienda-siendo el sometimiento a un domicilio especial, uno
de los casos en los que se prorroga la competencia territorial como ya se mencionó
con anterioridad, circunstancia legalmente válida de conformidad a lo establecido
en el Art. 26 CPCM. Así lo determinó este Tribunal en conflicto de competencia con
Referencia 10-COM-2014...”

CORTE SUPREMA DE JUSTICIA, SAN SALVADOR, en Resolución de


Conflicto de Competencia, con Referencia 23-COM-2014, de fecha dos de
septiembre de dos mil catorce, sostiene que:

“…En concordancia con lo anterior, cabe señalar que estamos en presencia de un


conflicto de competencia por razón del territorio, en el cual en el documento base de

330
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

la pretensión existe consentimiento bilateral de las partes sobre el domicilio especial


al que se someten tanto el arrendante como el arrendatario en caso de acción
judicial, siendo éste, la ciudad de San Salvador, cumpliendo con el requisito de
bilateralidad que en reiteradas ocasiones esta Corte ha señalado como fundamental,
para que tal sometimiento surta efectos. En ese sentido, preciso es mencionar que la
fijación de un domicilio especial y los efectos de éste, como título de competencia, se
encuentran regulados en el Art. 67 C.C. el que establece lo siguiente: “Se podrá en
un contrato establecer de común acuerdo un domicilio civil especial para los actos
judiciales o extrajudiciales a que diere lugar el mismo contrato”.En consonancia
con tal precepto, el Art. 33 inciso 2° CPCM estipula que la sumisión expresa de los
contratantes a un domicilio especial, determina la competencia judicial…”

Acumulación

Art. 479.- Cuando la terminación del contrato se deba a la falta de pago de canon de
arrendamiento, podrá acumularse a ella la pretensión de reclamación de las cantidades adeudadas. (2)

Procesos de desocupación por causa de mora

Art. 480.- Cuando se trata de demandas de desocupación por causa de mora, el juez, en la
citación para la audiencia, le advertirá al inquilino sobre su derecho de ser sobreseído en el juicio
si paga el monto total de lo adeudado más las costas del proceso.

Gozará de este derecho el inquilino que por primera vez sea demandado por mora en contrato
de arrendamiento para vivienda, y podrá hacer uso de él en cualquier estado del proceso antes del
lanzamiento.

CÁMARA SEGUNDA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, Apelación Referencia: 22-3°CM-14-A de fecha veintinueve de abril de
dos mil catorce.

“En cuanto a la mora invocada por la parte actora como causa legal de terminación
del contrato de arrendamiento en Referencia, tal como se ha expuesto en repetidas
Sentencias pronunciadas por este tribunal, basados en el Principio “Stare Decisis”y
con el afán de generar una seguridad jurídica mínima al aplicar o invocar, según
sea el caso, los precedentes anteriores, esta Cámara es del criterio que, siendo que
la pretensión se basa en la afirmación de un hecho negativo que es el no pago de
los cánones de arrendamiento por parte del arrendatario demandado, la carga de
la prueba del hecho contrario corresponde a la parte demandada, como medio
de atacar la pretensión de la parte actora y así obtener una sentencia a su favor;
es decir, corresponde al demandado establecer la extinción de su obligación por
cualquier medio probatorio idóneo.”

CÁMARA TERCERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO: SAN SALVADOR, en Sentencia con Referencia 113-IQCM-15, de
fecha veintitrés de julio de dos mil quince, sostiene que:

“…C.- La mora no es más que el retardo o retraso en el cumplimiento de una


obligación; y mora ex re, es la que se produce cuando por la naturaleza y
circunstancias de la obligación -contrato de arrendamiento-, se evidencia que el

331
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

pago al tiempo de los respectivos vencimientos, es fundamental para el acreedor,


se presume sin necesidad de otro requisito, y surte efectos mientras no se pruebe lo
contrario…”

CÁMARA SEGUNDA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO: SAN SALVADOR, en Sentencia con Referencia 61-3CM-14-A, de
fecha ocho de septiembre de dos mil catorce.

“…3.1.5. En el caso que nos ocupa, estamos ante un Proceso Especial de


Inquilinato de Desocupación de Inmueble por Causa de Mora, el Art. 480
inc. 1° en relación con el Art. 423 Inc. 3° ambos del CPCM, establece que en
los procesos de la desocupación por causa de mora, se incluirá en la esquela
de citación para audiencia una indicación al inquilino sobre el derecho de
enervación o debilitamiento del desahucio, el cual consiste en que el demandado
puede ser sobreseído en el proceso solo si éste cumple con el pago del monto
total de los cánones adeudados, mas las costas del proceso tal como lo indica
la norma citada, o bien, oponer la excepción real de pago. 3.1.6. Los motivos
de oposición que se pueden plantear en este tipo de procesos de desalojo por
causa de mora, son los contemplados en el Art. 485 Inc. 1° del CPCM, es decir
oponer la excepción real de pago en el escrito de contestación de la demanda
o allanarse a las pretensiones de la parte demandante y pagar los cánones de
arrendamiento adeudados, esto debido a que opera la inversión de la carga de la
prueba a favor del demandante y subsecuentemente en contra del demandado en
este tipo de procesos especiales de inquilinato de desocupación de inmueble por
causa de mora, ya que el conocimiento sumario es preponderantemente ejecutivo
consistente en la desocupación del inmueble arrendado. 3.1.7. En relación a lo
expuesto, en este tipo de procesos de desocupación de inmueble por causa de
mora de conformidad a las disposiciones antes invocadas, los únicos medios de
prueba pertinentes con los que dispone el demandado son aquellos relativos a la
procedencia del sobreseimiento, lo anterior debido a que se trata de un proceso
especial porque implica un conocimiento sumario de la controversia y se limita a la
procedencia del desalojo y por tanto el demandado solo puede probar el pago…”

CÁMARA TERCERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO: SAN SALVADOR, en Sentencia con Referencia 50-EFQCM-13, de
fecha diecinueve de marzo de dos mil trece.

“…se evidencian los presupuestos que deben darse para la aplicación de la misma,
que son 1°) que se trate de demandas de desocupación por causa de mora, y 2°)
que sea la primera vez que el inquilino sea demandado por mora en contrato de
arrendamiento para vivienda. La mencionada disposición establece que el inquilino
tiene derecho, en todo tiempo, antes de procederse al lanzamiento, a que se sobresea
en el juicio pagando el monto de lo adeudado, se trata pues, de una norma que
concede un beneficio al inquilino. Cabe hacer la aclaración que ésta no distingue en
que se reclame el pago de cánones adeudados, siendo su supuesto hipotético que se
trate de demandas de desocupación por la causal de mora…”

332
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

Procesos de desocupación por obras en el inmueble

Art. 481.- Cuando el propietario pretenda la desocupación total o parcial del inmueble para
hacer una nueva construcción en el mismo, deberá presentar con la demanda un plano completo,
debidamente aprobado, de las obras por realizar, con especificación del tiempo de duración de
éstas.
Lo mismo deberá hacerse cuando se pretenda la desocupación para hacer obras destinadas a
aumentar la capacidad locativa del inmueble o reparaciones indispensables que no puedan diferirse
y exijan la desocupación, dirigiendo entonces la demanda contra el inquilino o inquilinos a los que
afecten las obras o reparaciones.
En estos casos, el propietario deberá consignar, con la demanda, una cantidad igual a dos
mensualidades de renta, que se entregará al inquilino si en el plazo de un mes contado desde la
desocupación no se comenzaran los trabajos que fundamentaron la pretensión, sin perjuicio de las
multas que se establecen en la ley. Sin dicha consignación la demanda no será admitida.
Prevenciones en la citación para la audiencia
Art. 482.- En todos los procesos de inquilinato en los que se pretenda la desocupación
del inmueble, se advertirá al demandado, en la citación para la audiencia, de que su falta de
comparecencia a la misma llevará a la declaración de desahucio sin más trámites en un plazo no
mayor de diez días.
Llamada a los subarrendatarios
Art. 483.- El inquilino estará obligado a dar noticia a sus subarrendatarios de la demanda
interpuesta contra él, y deberá hacerlo en el plazo de tres días contados desde la notificación, so
pena de responder frente a ellos por los daños y perjuicios que sufrieran como consecuencia del
proceso. El demandado deberá poner en conocimiento del juez los nombres de sus subarrendatarios,
para que puedan ser citados a la audiencia.
Intervención de los subarrendatarios
Art. 484.- El subarrendatario podrá intervenir en el proceso como coadyuvante del
demandado, y para ello deberá acompañar el contrato que lo acredite como tal, siempre que el
subarrendamiento hubiese sido autorizado por el arrendador.

Los subarrendatarios no tendrán más derechos que los que la ley concede al inquilino y la
sentencia que se dicte contra éste les afectará aunque no hayan intervenido en el proceso.

Prueba en procesos de desocupación por causa de mora

Art. 485.- Cuando se pretenda la desocupación del inmueble por mora, sólo se permitirá
al demandado alegar y probar el pago o las circunstancias relativas a la procedencia del
sobreseimiento.

Si durante el trámite de un proceso de desocupación por cualquiera de las causales en los


numerales del 2 al 17 del artículo 24 y los del artículo 25 de la ley especial el inquilino incurriera
en mora del pago de la renta, el arrendador tendrá derecho a presentar otra demanda basada en la
causal número uno del mismo artículo 24, la cual no será acumulable al juicio ya existente.

333
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

CÁMARA DE LA CUARTA SECCIÓN DEL CENTRO: SANTA TECLA, en


Sentencia con Referencia 10-I-15, de fecha diecinueve de marzo de dos mil quince.

“…cuando se pretenda la desocupación del inmueble por mora, …se permitirá


al demandado únicamente alegar y probar el pago o las circunstancias relativas
a la procedencia del sobreseimiento …es decir, que los únicos medios de pruebas
pertinentes con lo que dispone el demandado son aquellos relativos a la procedencia
del sobreseimiento; por tanto las alegaciones del inquilino y en consecuencia la
prueba se dirigirán a demostrar el pago del monto total…”

CÁMARA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DE OCCIDENTE:


SANTA ANA, en Sentencia con Referencia INC-APEL-62-06-06-2013-, de fecha
doce de agosto de dos mil trece.

“…Uno de los motivos por los cuales se puede dar por terminado un Contrato de
Arrendamiento, donde se reclama además la desocupación del inmueble y el pago
de cánones adeudados, es por la causal de Mora contemplada en el Art. 24 inciso
primero de la Ley de Inquilinato vigente en ésta parte, por lo que si el demandado
no opusiere oposición alegando y probando el pago sobre la pretensión que se le
instaura, será condenado al pago de lo demandado. Art. 477, 485 del CPCM.-
También es cierto, que en ésta causal de desocupación por Mora, se permite de
conformidad al Art. 480 del CPCM., la oportunidad procesal para el inquilino de
su derecho de ser sobreseído en el Proceso, si pagare el monto total de lo adeudado,
más las costas procesales, derecho el cual, es únicamente válido para aquellos
inquilinos que fueran demandados por primera vez por la causal de mora…”

Sentencia y recursos en desocupación por causa de mora

Art. 486.- La sentencia que se dicte en los procesos por desocupación a causa de mora no
producirá efectos de cosa juzgada, y deja a salvo el derecho de las partes para acudir al proceso
declarativo correspondiente a fin de resolver la cuestión.

Contra ella se dará recurso de apelación. Contra la sentencia dictada en apelación no habrá
recurso alguno.

CÁMARA SEGUNDA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, Recurso de Apelación Referencia: 22-3°CM-14-A de fecha veintinueve
de abril de dos mil catorce.

“Tal como lo expresó el Juez A Quo en la sentencia recurrida, para que proceda la
terminación de un contrato de arrendamiento en materia de Inquilinato, es necesario
que se establezcan en el proceso dos circunstancias jurídicas: en primer lugar, la
existencia del contrato de arrendamiento cuya terminación se pide; y en segundo
lugar, la configuración de una causal legal de terminación de dicho contrato, de
conformidad a lo establecido en los Arts. 24 y 25 de la Ley de Inquilinato.”

334
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

Sentencia y recursos en otros procesos de inquilinato

Art. 487.- La sentencia que se dicte en los restantes procesos especiales de inquilinato
producirá efectos de cosa juzgada, y contra ella procederán los recursos previstos en este
código para las que se dicten en los procesos abreviados.

CÁMARA TERCERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO: SAN SALVADOR, en Sentencia con Referencia 129-IM-11, de fecha
doce de octubre de dos mil once.

“…A.- De la lectura de la disposición anterior se constata que en los procesos de


esta naturaleza queda excluida la cosa juzgada, ya que las partes pueden optar por
el proceso declarativo pertinente para resolver la controversia…”

SALA DE LO CIVIL DE LA CORTE SUPREMA DE JUSTICIA: SAN


SALVADOR, en Sentencia con Referencia 277-CAC-2014, de fecha ocho de mayo
de dos mil quince:

“…La mencionada disposición legal, determina que en este tipo de causas -en la que
se ha pretendido la desocupación en virtud de la mora del arrendatario-no producirá
efectos de cosa juzgada sustancial, y por tanto deja a salvo el derecho de las partes
para acudir al proceso declarativo; aspecto que, guarda correspondencia con lo
establecido en el Art. 520 de dicho cuerpo legal, relativo a los casos y providencias
que son susceptibles de ser examinados por vía casacional, disponiéndose que el
recurso de casación se rechazará cuando se interponga contra resolución dictada en
asuntos de jurisdicción voluntaria o en procesos especiales, cuando la sentencia no
produzca efectos de cosa juzgada material. Siguiendo ese orden de ideas, la Sala de
Casación, debe rechazar el presente recurso de Casación por dos motivos medulares:
Primero, en razón de tratarse la presente impugnación de un proceso especial de
inquilinato cuya pretensión versa en la terminación por mora y la desocupación de
la vivienda, que tal como se ha dicho en líneas anteriores, el inciso primero del Art.
486 ya mencionado, establece que los efectos derivados en tales procesos no produce
efectos de cosa juzgada. El segundo es, que determinado los efectos en la clase
de juicios como el presente, previstos del inciso segundo del Art. 486 en relación
a lo que dispone el Art. 520 CPCM., se encuentra restringido el conocimiento del
presente recurso en virtud de los fines del mismo y consecuentemente deviene en
improcedente…”

Sentencia en procesos de desocupación por ruina o insalubridad

Art. 488.- Cuando el demandante pretenda la desocupación del inmueble por ruina o
insalubridad, la sentencia estimatoria deberá expresar que el inmueble es inhabitable total
o parcialmente. En este caso, la desocupación se mantendrá por el tiempo que duren las obras
necesarias de rehabilitación.

335
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

TÍTULO CUARTO
LOS PROCESOS MONITORIOS

CAPÍTULO PRIMERO
EL PROCESO MONITORIO POR DEUDAS DE DINERO

Ámbito de aplicación del proceso monitorio

Art. 489.- Puede plantear solicitud monitoria el que pretenda de otro el pago de una deuda
de dinero, líquida vencida y exigible, cuya cantidad determinada no exceda de veinticinco mil
colones o su equivalente en dólares de los Estados Unidos de América, cualquiera que sea su
forma y clase o el soporte en que se encuentre, o que el acreedor justifique un principio de prueba
suficiente.

En todo caso, el documento tendrá que ser de los que sirvan para acreditar relaciones entre
acreedor y deudor, y aun cuando hubiera sido creado unilateralmente por el acreedor deberá
aparecer firmado por el deudor o con constancia de que la firma fue puesta por orden suya, o
incorporar cualquier otro signo mecánico electrónico.

CÁMARA PRIMERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO: Sentencia Referencia 4-1MC1-2014-4-C de veinticuatro de febrero de
dos mil catorce.

“…7. …se tiene que el proceso monitorio, ha sido instaurado como un mecanismo
ágil de pretender el pago de una deuda de dinero, siempre que sea líquida, vencida
y exigible, cuya cantidad determinada no supere los veinticinco mil colones o su
equivalente en dólares de los Estados Unidos de América, acreditada mediante
documento privado no ejecutivo, cualquiera que sea el soporte en que se encuentre,
y que contenga la fecha de vencimiento, y las partes intervinientes de la relación
mercantil. Los documentos que permiten accionar este tipo de procesos, son aquellos
que aunque sea mínimamente incorporen un principio de prueba suficiente, es decir
que si bien no son prueba de una obligación documentada propiamente tal, sí
acreditan la existencia de un hecho de supuesta verosimilitud como lo es un crédito
otorgado, abriendo la posibilidad de que pueda constar en cualquier tipo de medios
escritos, tales como fax, telegramas, incluso correos electrónicos u otros soportes de
los que, no necesariamente puedan ni tengan que estar firmados por un deudor, sino
que basta con que estén emitidos por su persona, por lo que este punto de apelación
planteado por el referido apoderado de la parte apelante, será acogido por tener
fundamento legal…”

CÁMARA DE LA SEGUNDA SECCIÓN DE ORIENTE: Sentencia Referencia


Apelación 10-4-CPCM-2013 de uno de julio de dos mil trece.

“…VI.- …El proceso Monitorio es uno de los procesos especiales que se encuentra
regulado en el libro tercero, titulo cuarto del CPCM, específicamente en los Arts. 489
y siguientes del CPCM; el cual se caracteriza por la abreviación estructural que se
obtiene mediante la inversión de la iniciativa del contradictorio. El objeto del proceso
monitorio por deudas de dinero, consiste en la pretensión dirigida al pago de una suma
de dinero, liquida, vencida y exigible, que no sobrepase los veinticinco mil colones o su

336
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

equivalente en dólares.- El Procedimiento del Proceso Monitorio por deudas de dinero


está expresamente establecido en el Código Procesal Civil y Mercantil, específicamente
en los artículos 489 al 496, el cual indica primeramente el ámbito de aplicación del
proceso monitorio referido al monto de la pretensión y la competencia…”

Competencia

Art. 490.- Para conocer de la solicitud monitoria tendrá competencia exclusiva el juez de
primera instancia de menor cuantía del domicilio del demandado.

Requisitos de la solicitud

Art. 491.- El proceso monitorio se iniciará con la presentación de una solicitud en la que se
dará conocimiento de la identidad del deudor, del domicilio o domicilios del acreedor y del deudor
o del lugar en que residieran o pudieran ser hallados, y del origen y cuantía de la deuda, debiéndose
acompañar a la solicitud el documento en que conste aquélla. La cuantía que se señale a efectos del
requerimiento judicial podrá incrementarse en un tercio del monto inicial de lo adeudado.

CÁMARA DE LA SEGUNDA SECCIÓN DE OCCIDENTE, SONSONATE,


Sentencia de Apelación Referencia N°INC-09-CPCM-2012 de fecha veintitrés de
mayo de dos mil doce.

“Que de la lectura de las dos disposiciones mencionadas se puede constatar que


el proceso monitorio se puede entablar por deudas de dinero, y para obligaciones
de hacer, de no hacer y de dar; que en el caso de vista el impetrante ha pretendido
incoar un proceso monitorio para exigir una obligación de hacer; que para esta
clase de procesos debe presentarse la solicitud con los requisitos establecidos en el
Art. 491 del Código Procesal Civil y Mercantil, que no equivale a una demanda; que
además, para esa clase de pretensión, el límite cuantitativo previsto, no debe superar
los veinticinco mil colones o su equivalente en dólares de los Estados Unidos de
América, el cual podrá incrementarse en un tercio del monto inicial de lo adeudado;
y la obligación de hacer deberá constar en documento justificativo, cualquiera que
sea su forma y clase, o el soporte en que se encuentra, siempre que aparezca firmado
por el demandado, o con firma que hubiere sido puesta por su orden o incorpore
cualquier otro signo mecánico o electrónico.

Que en el caso en concreto tal y como lo dice el Juez A Quo en la resolución


impugnada, la cantidad supera en exceso la cuantía fijada para ese tipo de proceso;
además, tampoco se acompañó con la solicitud […] el documento justificativo
de la obligación de hacer. Que en virtud de ello, bien hizo el mencionado juez en
rechazar la solicitud presentada por el [abogado demandante], en el carácter ya
expresado, pues en este supuesto no podía aplicar la vía adecuada, como lo afirma
el recurrente, debido a la naturaleza del proceso iniciado; que, como se dijo, la
solicitud presentada no tiene el carácter de una demanda, por lo que no podría ser
admitida como tal para efecto de impulsar por la vía procesal correcta la pretensión
planteada. Debe decirse que, aunque el Art. 244 inciso 1º del Código Procesal Civil
y Mercantil, fija la obligación judicial oficiosa de examinar la incorrecta elección del
proceso planteado por el demandante, y ante una incorrecta invocación el juzgador
es facultado para tramitar las pretensiones por la vía adecuada, cuando hubiese

337
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

error, tomando en cuenta la materia y el valor de las pretensiones; también es cierto


que se puede presentar la imposibilidad de que el juez le dé al asunto la tramitación
que corresponda; esto porque tal y como sucede en el caso que nos ocupa, se ha
incoado un proceso monitorio de obligación de hacer, que se inicia con una solicitud
como lo establece el Art. 491 en relación al Art. 499 del Código Procesal Civil y
Mercantil, que no reúne los requisitos de una demanda establecidos en el Art. 276 del
mismo cuerpo de ley citado; lo que imposibilita adecuar procesalmente la pretensión
incoada; que, además, la cuantía aunque no se expresó en dicha solicitud, sí se
desprende del testimonio de la escritura pública de compraventa […], que supera la
que exige el Art. 497 del Código citado para la procedencia del proceso monitorio.
Que por lo expuesto deberá declárarse sin lugar lo pedido por el [apelante] en su
escrito de apelación; y estando la resolución impugnada arreglada a derecho deberá
confirmarse la misma.”

Rechazo de la solicitud

Art. 492.- Si no se cumplieran los requisitos establecidos en los artículos anteriores, el juez
dictará resolución motivada en rechazo de la solicitud, con la cual se pondrá fin al proceso, sin
perjuicio de que se pueda interponer contra ella recurso de apelación.

Admisión de la solicitud y requerimiento de pago

Art. 493.- Cumplidos los requisitos que se establecen en los artículos anteriores, el juez
admitirá la solicitud y ordenará requerir al deudor para que, en el plazo de veinte días, pague
directamente al acreedor o en el tribunal, o bien que comparezca a formular oposición, con la
advertencia expresa de que, en otro caso, se procederá a la ejecución.

El requerimiento de pago habrá de hacerse necesariamente al demandado personalmente, o


por medio de esquela en su casa de habitación. (2)

Pago

Art. 494.- Si el requerido paga, lo pondrá en conocimiento del juez, con comprobación de
dicho pago, y éste dictará resolución que ponga fin al procedimiento y ordene el archivo de las
actuaciones.

Inactividad del deudor. Ejecución

Art. 495.- Si el requerido no paga ni se opone en el plazo concedido al efecto, el juez ordenará
el embargo de sus bienes en cantidad suficiente para cubrir la cantidad, siguiéndose en adelante el
proceso por los trámites previstos para la ejecución de Sentencias.

Oposición y tramitación como proceso abreviado

Art. 496.- Si el deudor comparece dentro de plazo formulando oposición, se continuará la


tramitación del proceso conforme a las reglas del proceso abreviado, y la sentencia que se dicte
tendrá valor de cosa juzgada.

A este fin, el solicitante deberá presentar la demanda dentro de los diez días siguientes. Si no
presentare la demanda en este plazo, se pondrá fin al procedimiento, condenándosele en costas.

338
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

Si la oposición se fundara en una pluspetición del acreedor, se ordenará el embargo y se


seguirá la ejecución respecto de la cantidad que se reconoce como debida.

CAPÍTULO SEGUNDO
MONITORIO PARA OBLIGACIONES DE HACER, NO HACER O DAR

Ámbito

Art. 497.- El proceso monitorio también será aplicable cuando se exija el cumplimiento
de una obligación de hacer, de no hacer o dar cosa específica o genérica, si el valor del bien o
servicio no supera los veinticinco mil colones o su equivalente en dólares de los Estados Unidos de
América.

La obligación deberá constar en documento, cualquiera que sea su forma y clase, o el soporte
en que se encuentre, y siempre que aparezca firmado por el demandado o con firma que hubiese
sido puesta por su orden o incorpore cualquier otro signo mecánico o electrónico.

También podrá aplicarse el proceso monitorio cuando la obligación resulte acreditada mediante
facturas, certificaciones de relaciones entre las partes, telegramas, telefax u otros documentos que,
en el tráfico jurídico, documenten relaciones entre acreedor y deudor, aun cuando hubieran sido
creados unilateralmente por el acreedor.

CÁMARA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DE OCCIDENTE,


Referencia INC-APEL-125-3-15-12-2014 del dieciocho de diciembre de dos mil
catorce.

“…es claro en cuanto a que para reclamar por medio del proceso monitorio, la
obligación debe constar en un documento, cualquiera que sea su forma y clase, y
siempre que aparezca firmado por el demandado o con firma que hubiese sido puesta
por su orden o incorpore cualquier otro signo mecánico o electrónico…Es preciso
señalar y determinar que el proceso monitorio es eminentemente documental, ya que
no es suficiente la mera alegación de los hechos constitutivos de la pretensión, sino
que deberá probarse documentalmente el fundamento de la misma.- No obstante las
variantes que puedan presentarse en el proceso monitorio, en primer término será
preciso observar si la demanda o solicitud de la parte actora, está acompañada de la
prueba documental en que se funde, con el fin de acreditar inicialmente la existencia
y monto de la obligación cuyo cumplimiento se reclama, o sí, por el contrario es
suficiente con la mera alegación que en tal sentido efectué el demandante, desde
esa perspectiva, el proceso monitorio del Código Procesal Civil Mercantil, puede
concebirse como un monitorio documental, puesto que se requiere la presentación
del documento con el cual se acredite la obligación…”

CÁMARA SEGUNDA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO: Sentencia Referencia 2-2MC-14-A de fecha once de abril de dos mil
catorce.

“…3.12 El proceso monitorio es definido por el autor Juan Pablo Correa Delcasso,
como “un proceso especial plenario rápido que entiende, mediante la inversión de la
iniciativa del contradictorio, a la rápida creación de un titulo ejecutivo con efectos de

339
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

cosa juzgada en aquellos casos que determina la ley”. 3.13 Para promover un proceso
monitorio debe cumplirse con los siguientes requisitos: a) que el valor del bien o servicio
no supere los veinticinco mil colones o su equivalente en dólares de los Estados Unidos
de América; y b) que la obligación debe constar en documento, cualquiera que sea su
forma o clase, o el soporte en que se encuentre, siempre que aparezca firmado por el
demandado o con firma que hubiese sido puesta por su orden…”

Contenido de la pretensión

Art. 498.- En estos procedimientos se podrá pretender exclusivamente el cumplimiento de una


obligación de hacer, de no hacer, o de dar cosa específica o genérica, sin que quepa en tales casos
sustituir la petición de cumplimiento por su equivalente en dinero, salvo manifestación expresa del
solicitante o absoluta imposibilidad del cumplimiento específico. En este último caso, podrá optar
el solicitante entre exigir el equivalente en dinero o la entrega de un bien, servicio o producto de
características y prestaciones semejantes a las del original.

CÁMARA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DE OCCIDENTE:


Sentencia Referencia INC-APEL-125-3-15-12-2014 del día dieciocho de diciembre
de dos mil catorce.
“…Según nos enseña el Código Procesal Civil y Mercantil comentado del Consejo
Nacional de la Judicatura Escuela de Capacitación Judicial “Dr. Arturo Zeledón
Castrillo”, en su página 526, respecto a lo dispuesto en el Art. 498 CPCM, en cuanto
a la opción que tiene el solicitante de que se le sustituya la petición de cumplimiento
por su equivalente en dinero, nos señala lo siguiente: “La pretensión tendrá por
objeto exclusivamente, el cumplimiento de una obligación de hacer, de no hacer
o de dar cosa específica o genérica (Art. 498). En principio, no cabe sustituir la
petición de cumplimiento por su equivalente en dinero; pero si resultare imposible
el cumplimiento especifico de la obligación (por ejemplo, por destrucción de la
cosa que debe entregarse), el solicitante podrá optar entre exigir el equivalente en
dinero o la entrega de un bien, servicio o producto de características y prestaciones
semejantes a las del original.”…”
Competencia

Art. 499.- La solicitud se llevará ante el juzgado de primera instancia de menor cuantía del
domicilio del demandado; y de no hacerse así, se estará a lo dispuesto en este código.

La solicitud se presentará por escrito y se formalizará con sencillez y claridad, debiendo


contener como mínimo la identificación de las partes, la relación de los hechos en que se basa la
petición, lo que se pida, la fecha y la firma del solicitante.

A la solicitud se acompañarán los documentos justificativos de la petición que se formula.

Procedimiento

Art. 500.- En los casos contemplados en este capítulo se aplicarán las normas previstas para el
proceso monitorio, con las especialidades señaladas en este artículo.

El requerimiento judicial al deudor se hará para que cumpla con la obligación específica que
es objeto de la solicitud.

340
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

Si el deudor no se opone al requerimiento ni cumple con él, el juez adoptará las medidas
pertinentes para dar cumplimiento a la solicitud. Si se trata de obligaciones de hacer de carácter
personalísimo o de no hacer, impondrá una multa en relación con el valor estimado de la obligación.
Si se trata de un hacer que no es personalísimo, mandará que se haga a costa del deudor.

Cuando la condena consista en dar cosa específica o genérica, el juez adoptará cualesquiera
medidas que considere necesarias para lograr el cumplimiento de la obligación en el plazo máximo
de veinte días, contados a partir del siguiente a aquel en que se constató la ausencia de oposición o
de cumplimiento.

LIBRO CUARTO
LOS MEDIOS DE IMPUGNACIÓN

TÍTULO PRIMERO
DISPOSICIONES GENERALES

Principios generales

Art. 501.- Tendrán derecho a recurrir las partes gravadas por la resolución que se impugna.
Igual derecho asistirá a los litisconsortes que resultaren gravados, aun cuando no se hubieran
convertido en partes.

Los plazos para recurrir se contarán a partir del día siguiente al de la notificación de la
resolución que se impugna, o del siguiente a la notificación de su aclaración. (2)

El desistimiento de los recursos será posible en cualquier momento anterior a su resolución, de


conformidad con las disposiciones de este código.

SALA DE LO CONSTITUCIONAL, Inconstitucionalidad 4-99 en la Sentencia


de veintiocho de mayo de dos mil uno.

“… que la garantía de acceso a los medios impugnativos legalmente contemplados,


que comúnmente se denomina derecho a recurrir se conjuga con el derecho a la
protección jurisdiccional y con el debido proceso. Dicha garantía implica que, al
consagrarse en la ley un determinado medio impugnativo, debe permitirse a la
parte el acceso a la posibilidad de un segundo examen de la cuestión-otro grado de
conocimiento (parafraseado es nuestro).”

SALA DE LO CONSTITUCIONAL, inconstitucionalidad/inaplicabilidad


Referencia: 40-2009 de fecha doce de noviembre de dos mil diez.

“Así, se advierte que la normativa procesal civil (v.gr. en los Arts. 471, 476 inciso
2° y 508 CPrCyM) prevé que en aquellos procesos jurisdiccionales en los que se
tutele la posesión de bienes raíces o de derechos reales constituidos sobre ellos -en
los términos de los Arts. 918 a 951 del Código Civil- se habilita la posibilidad de
interponer recurso de apelación contra la sentencia definitiva dictada en ellos.
En ese sentido, al existir en las pretensiones iniciadas con fundamento en la
LEGPPRI un fundamento análogo -la tutela del derecho de propiedad o de posesión
regular sobre un inmueble- resulta pertinente integrar la normativa procesal y
habilitar para la sentencia dictada con ocasión de este tipo de reclamos, el recurso

341
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

de apelación, con el objeto de que el tribunal superior correspondiente, previo


estudio de la cuestión decidida por la resolución recurrida, la reforme, revoque o
anule.
El recurso de apelación se interpone para ante un tribunal jerárquicamente superior
(ad quem) respecto del que dictó la resolución impugnada (a quo), lo que a la luz de
la organización judicial vigente, determina que la competencia en segunda instancia
de las resoluciones dictadas por el Juez de Paz serán de conocimiento del Juez de
Primera Instancia correspondiente al territorio en que aquél tenga su sede (Art. 60
Ley Orgánica Judicial).
En conclusión, debe declararse que el Art. 6 de la LEGPPRI admite una
interpretación conforme a la Constitución en la medida que dicha disposición se
integra con aquellas disposiciones de la normativa procesal pertinente, v.gr. los Arts.
476 inciso 2° y 508 a 518 CPrCyM, para conceder al afectado la habilitación de
hacer uso del recurso de apelación en ellas previsto.
Ahora bien, es preciso aclarar que el presente pronunciamiento no pretende sustituir
las consideraciones legislativas que sobre el asunto pudiera determinar el Órgano
Legislativo. Por ello, debe entenderse la anterior integración normativa hasta que
dicho Órgano del Estado regule un recurso idóneo para dicho tipo de proceso.”
Prohibición de la reformado in peius

Art. 502.- Las Sentencias que resuelvan el recurso no podrán ser más gravosas que la
impugnada, a menos que la parte contraria hubiera a su vez recurrido o se hubiera adherido al
recurso.

TÍTULO SEGUNDO
RECURSO DE REVOCATORIA

Procedencia
Art. 503.- Los decretos y los autos no definitivos admitirán recurso de revocatoria, el cual
será resuelto por el mismo juzgador que dictó la resolución recurrida. (2)
Plazo y forma
Art. 504.- El recurso se interpondrá por escrito en el plazo de tres días, y en él se hará constar
la infracción legal que se estime cometida, con una sucinta explicación.
Si el recurso no cumple con los requisitos anteriores, el tribunal lo rechazará por improponible sin
ningún otro trámite.
Tramitación y decisión
Art. 505.- Del recurso interpuesto se oirá a la parte contraria dentro de tres días siguientes a la
notificación, a fin de que formule su oposición.
El juez o tribunal dictará auto, para resolver sobre la revocatoria en el plazo de tres días contados
desde el siguiente al de conclusión del señalado en el artículo anterior, independientemente de que
las partes hubieran hecho uso de sus derechos.

342
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

Irrecurribilidad
Art. 506.- La resolución que resuelva sobre la revocatoria no admitirá ningún otro recurso, sin
perjuicio de que se pueda reproducir la petición en el recurso contra la resolución que ponga fin al
proceso de manera definitiva.
Revocatoria oral
Art. 507.- Contra las decisiones que adopte el juez o el tribunal en el curso de las audiencias
orales procederá recurso de revocatoria, el cual deberá formularse verbalmente en el mismo acto.
El Juez o Tribunal resolverá en forma inmediata lo que proceda, sin más recurso, y la
audiencia continuará su curso. A instancia de la parte interesada se podrá pedir que conste en el
acta el intento de revocatoria cuando ésta sea desestimada. (2)
TÍTULO TERCERO
RECURSO DE APELACIÓN

Resoluciones recurribles en Apelación (2)

Art. 508.- Serán recurribles en apelación las Sentencias y los autos que, en primera instancia,
pongan fin al proceso, así como las resoluciones que la ley señale expresamente. (2)

SALA DE LO CONSTITUCIONAL Amparo Referencia: 298-2004 de fecha


diecinueve de mayo de dos mil cuatro.

“Mayor énfasis se hace cuando la Sala considera “conveniente aclarar que este
derecho a los medios impugnativos legalmente previstos no supone autorizar la
utilización de cualquiera de los medios establecidos por el sistema procesal, sino
que el mismo está circunscrito al uso de los medios legalmente previstos para el
proceso de que se trate. Ahora bien, una vez que el legislador ha establecido
un medio -generalmente un recurso- para la impugnación de las resoluciones
recaídas en un concreto proceso o para una específica clase de resoluciones, el
derecho de acceso al medio impugnativo adquiere connotación constitucional,
y una denegativa del mismo, basada en causa no legal, o por la imposición de
requisitos impeditivos u obstaculizadores que resultan innecesarios, excesivos
o carecen de razonabilidad o proporcionalidad respecto de los fines que
lícitamente puede perseguir el legislador, o por la imposición de condiciones o
consecuencias meramente limitativas o disuasorias del ejercicio de los medios
impugnativos legalmente establecidos, deviene en violatoria de la normativa
constitucional”(el destacado es nuestro).

El anterior razonamiento se reduce a estimar inadmisible y/o improcedente todo


aquel recurso o medio impugnativo que no esté legalmente señalado y previsto para
el proceso de que se trate, y más específicamente, para atacar la resolución contra
la cual se esté inconforme; de ahí que esta Sala señaló categórica y reiteradamente
-en la resolución que se examina-, que se trata de aquellos “medios impugnativos
legalmente previstos”, esto es, de los contemplados y permitidos previamente por el
ordenamiento jurídico para oponerse el acto agraviante.

343
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

De lo que se trata es pues, que una vez “previsto” por el legislador un medio procesal
de impugnación determinado y sólo ahí, éste adquiere una connotación constitucional
-no antes-, y a partir de ello no puede sujetarse a formalismos y requisitos excesivos
que lo haga inocuo o inoperante, pero bajo ninguna perspectiva quiere decirse que el
juzgador, ante la inexistencia del mismo o -lo que resulta peor aún- ante su prohibición
expresa, inventará o improvisará un medio de impugnación y su trámite con plena
discrecionalidad y arbitrariedad; eso sería atentar frontal y directamente con el Estado
Democrático y Constitucional de Derecho en el que vivimos.”

CÁMARA TERCERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, SAN SALVADOR, Sentencia N°241-EFSM-14 Fecha: veinticuatro de
septiembre de dos mil catorce.

“Conforme al Art. 508 CPCM, el recurso de apelación puede interponerse no sólo de


la sentencia y autos definitivos sino también de aquellos autos de contenido procesal
respecto de los que la ley expresamente permite, y en estos últimos el ámbito del
recurso no va más allá de lo que constituye el contenido y la corrección procesal de
la propia resolución.

En el caso que nos ocupa, nos encontramos frente a un proceso de ejecución forzosa,
para el cual nuestra legislación procesal civil y mercantil expresamente otorga el
recurso de apelación únicamente en los casos siguientes:

a) Respecto del auto que rechaza la ejecución (Art. 575 CPCM); y,

b) Contra la resolución que estima o desestima la oposición formulada por el


ejecutado. (Art. 584 CPCM)

Al respecto la resolución de la cual recurre la licenciada R. Z., es la que declara sin


lugar señalar día y hora para practicar una nueva liquidación, sin lugar ordenar
la constitución de una garantía para el cumplimiento de cuotas alimenticias y
sin lugar condenar al pago de indemnización por daños morales y físicos por el
incumplimiento en el pago de dichas cuotas; y finalmente ordena rectificar el
nombre del ejecutado señor ALEXANDRO R. R., resoluciones que evidentemente no
se encuentran dentro de las expresamente señaladas como apelables en el proceso
de ejecución forzosa -Arts. 575 y 584 CPCM-, en tal sentido y sin lugar a dudas
dicho auto no admite el recurso de apelación interpuesto, lo que imposibilita a esta
Cámara entrar a conocer, si efectivamente, el referido auto le ha ocasionado algún
agravio, por lo que el recurso interpuesto resulta improcedente y así se declarará.”

Efecto suspensivo

Art. 509.- Las resoluciones definitivas recurridas en apelación no serán ejecutadas. Sin
embargo, de conformidad con las previsiones de este código, las Sentencias condenatorias podrán
ser ejecutadas provisionalmente.

Finalidades del recurso de apelación

Art. 510.- El recurso de apelación tendrá como finalidad revisar:


1°. La aplicación de las normas que rigen los actos y garantías del proceso.

344
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

2°. Los hechos probados que se fijen en la resolución, así como la valoración de la prueba.
3°. El derecho aplicado para resolver las cuestiones objeto de debate.
4°. La prueba que no hubiera sido admitida.

SALA DE LO CIVIL, Casación 216 CAC 2014 de fecha dos de marzo de dos mil
dieciséis.

“La Sala coincide con el pensamiento de la Cámara en el sentido de que cuando el


ordinal 3° del Art. 510 CPCM habla de “objeto de debate”se está refiriendo a la
discusión y decisión de fondo sobre las pretensiones y defensas generados por las
partes, y no se está aludiendo dicha norma al examen de las resultas de un análisis
de procedibilidad de la demanda efectuado por el juez en esta etapa procesal de
la audiencia preparatoria. Se estima de acuerdo a lo razonado que la aplicación
errónea del Art. 513 ordinal 3° CPCM que se atribuye a la Cámara no ha tenido
lugar y así se declarará.”

CÁMARA TERCERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, Auto Definitivo Referencia: 94-DA-16 de fecha ocho de junio de dos mil
dieciséis.

“Asimismo, en relación a la finalidad contenida en el Ordinal 4° del Art. 510 CPCM


citado, “La prueba que no hubiera sido admitida.”que invoca el apelante, también
se refiere a una etapa distinta a la que se encuentran las diligencias que se han
recibido en apelación por cuanto la etapa de admisibilidad de los medios de prueba
es ulterior al examen liminar de admisibilidad de la solicitud presentada y que en
todo caso concierne ya al fondo de las diligencias y supone un ataque a la resolución
final por el hecho que ésta se encuentra viciada en cuanto al material de convicción
sobre el que fue pronunciada, específicamente en aquellos casos en que falta una
o más pruebas que de manera probable de haber sido admitidas habrían podido
conducir a un resultado distinto; pero que en casos como el de ocurrencia, -como
se ha dicho- por tratarse de un rechazo liminar de la solicitud presentada tampoco
corresponde alegarla en esta etapa; aunado a lo anterior, no expresó el apelante las
razones por las cuales procedería la revisión del auto recurrido en cuanto a esta
finalidad pues únicamente la enuncia sin un desarrollo de la misma, todo lo que hace
inadmisible su recurso por este motivo.

Es de señalar que las finalidades que invoca el apelante no pueden ser el sustento de
la alzada interpuesta pues se refiere a un tema que no corresponde analizar en este
recurso del rechazo liminar de la solicitud como se ha dicho, porque en su contenido
se ataca el análisis que el juzgador hace en la sentencia al resolver el fondo del asunto.
Aunado a lo anterior, al invocar cualquiera de las finalidades contenidas en el Art.
510 CPCM, debe explicarse de forma clara y precisa porqué la infracción invocada se
encuentra comprendida en la finalidad enunciada, lo que no ha ocurrido en el caso de
mérito pues, el apelante al pretender fundamentar su recurso únicamente se dedica a
expresar porque es necesario que se reconvenga en pago al arrendatario y el trámite de
ello; además, a justificar porque no le es posible cumplir con la prevención que le hiciera
el tribunal y que culminó con el rechazo de su solicitud.

345
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

Finalmente, debe de señalarse que si el recurrente pretendía atacar la inadmisibilidad


de las diligencias declarada, debió solicitar la revisión de las normas que regulan
dicho acto procesal pero no sustentado en el Ord, 3° del Art. 510 CPCM por las
razones expuestas y en vista que la Cámara no puede corregir los errores del
recurrentes ni suplir deficiencias cuando se califica la admisibilidad del mismo, al
ser así, el recurso no se encuentra fundamentado adecuadamente, por consiguiente,
la apelación interpuesta es inadmisible.”

CÁMARA TERCERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, SAN SALVADOR Sentencia N°213-CS-13 Fecha: veintinueve de
noviembre de dos mil trece.

“En primer lugar es preciso aclarar que no obstante los recurrentes hayan
expuesto en cinco puntos los agravios que según dicen les causó la sentencia
recurrida, esta Cámara estima oportuno recordar que el recurso de apelación
tiene por finalidad, según lo dispuesto en el Art. 510 CPCM, revisar: primero, la
aplicación de normas que rigen el proceso; segundo, los hechos fijados y probados
en la valoración; tercero, el derecho aplicado para resolver las cuestiones objeto
del debate; y cuarto, la prueba que no hubiera sido admitida.”

Asimismo, la formalización del recurso que exige el Art. 511 CPCM, es que
debe especificarse la resolución de la cual se apela, con expresión de los
pronunciamientos cuya revocación o reforma se pretende, se trata de delimitar
desde un principio el concreto objeto del recurso, tanto en lo que se refiere a
la resolución o actuación procesal que lo motiva como en lo concerniente a lo
que deba ser materia de debate entre las partes; ya que la apelación supone la
atribución del tribunal ad quem de la competencia funcional para el conocimiento
del proceso en la fase de recurso, pero las posibilidades de actuación de este
Tribunal no se extienden a resolver de nuevo sobre todas las cuestiones planteadas
y decididas en primera instancia.”

En tal sentido, el primero de los agravios está encaminado a invocar un


defecto procesal de la demanda, lo que a todas luces no constituye un agravio
de la sentencia recurrida, más aún cuando no fue oportunamente denunciado
tal vicio, y es que el legislador ha establecido los momentos procesales en que
deben de realizarse, de ahí que dentro del contenido de la audiencia preparatoria
se encuentra la “fase saneadora”, siendo ésta la oportunidad que tienen las
partes para denunciar y permitir el saneamiento de los defectos procesales que
pudieran tener las alegaciones iniciales, entiéndase demanda y contestación de la
misma, por lo tanto, al no constituir un verdadero agravio de la sentencia deberá
rechazarse el mismo.”

Interposición del recurso

Art. 511.- El recurso de apelación deberá presentarse ante el juez que dictó la resolución
impugnada, y a más tardar dentro del plazo de cinco días contados a partir del siguiente, al de la
comunicación de aquélla.

346
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

En el escrito de interposición del recurso se expresarán con claridad y precisión las razones en
que se funda el recurso, haciendo distinción entre las que se refieran a la revisión e interpretación
del derecho aplicado y las que afecten a la revisión de la fijación de los hechos y la valoración de
las pruebas. Los pronunciamientos impugnados deberán determinarse con claridad.

Si se alegare la infracción de normas o garantías procesales en la primera instancia, se deberán


citar en el escrito las que se consideren infringidas y alegar, en su caso, la indefensión sufrida.

Al escrito de interposición podrán acompañarse los documentos relativos al fondo del asunto
que contuviesen elementos de juicio necesarios para la decisión del pleito, pero sólo en los casos
en que sean posteriores a la audiencia probatoria o a la audiencia del proceso abreviado; y también
podrán acompañarse los documentos anteriores a dicho momento cuando la parte justifique que ha
tenido conocimiento de ellos con posterioridad a él.

SALA DE LO CIVIL, Resolución 209-CAM-2013 de fecha veintiuno de diciembre


de dos mil quince.

“Expresa el impetrante en síntesis lo siguiente: que el juez a-quo al valorar


la prueba, no sólo lo hizo equivocadamente, sino que omitió valorarla en su
integridad; que con la documentación aportada ha quedado plenamente demostrado
no sólo la legitimación de su representada, sino también, la existencia de la
obligación a cargo de los demandados; que el juez de primera instancia infringió
el Art. 341 Inc. 2 CPCM., porque los instrumentos privados hacen plena prueba al
no haber sido impugnados, como resulta en el presente caso; que por lo anterior,
la sentencia pronunciada en dicha instancia es gravosa para la demandante; que
con la inadmisibilidad del recurso de alzada declarada en segunda instancia, se
imposibilita a su mandante para que pueda ejercer su derecho constitucional para
recurrir, vulnerándose el Art. 501 CPCM.; que el recurso de apelación que interpuso
cumple todos los requisitos del Art. 511 CPCM., y por lo mismo es admisible; que
debía casarse la resolución pronunciada por la Cámara ad-quem.

Para el tribunal de alzada, el impetrante incumplió lo que establecen los Arts. 510 y
511 Inc. 2 CPCM., al no expresar alguna causal de apelación, y consecuentemente,
ninguna razón para dar base a alguna causal de las contempladas en el Art. 510
CPCM.

El Art. 501 CPCM. señalado como vulnerado, contempla el derecho de recurrir a


las partes, que es precisamente lo que considera la parte demandante le ha sido
conculcado de parte del tribunal de segunda instancia, al no admitirle el recurso,
que cumple los requisitos legales.

Se trata entonces de establecer, si el recurso de apelación interpuesto por el


demandante-recurrente cumple con los requisitos de admisibilidad que contempla el
Art. 510 y 511 CPCM.

Al respecto, resulta de importancia analizar el recurso de alzada, a fin de constatar si


efectivamente se ha Infringido la disposición legal considerada vulnerada, por la no
admisibilidad de dicho recurso, o si por el contrario, la inadmisibilidad declarada
por la Cámara está dentro de los parámetros de la legalidad.

347
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

Así tenemos, que en resumidas cuentas, para el tribunal de apelaciones la


Inadmisibilidad del recurso es a consecuencia de que el impetrador no menciona
la causal de apelación, y por lo mismo, no se expresa “las razones por la que el
apelante considera que por lo menos una de las causales ha ocurrido” (lo subrayado
es nuestro), consecuentemente, estima, que no es suficiente hacer una narración de
lo sucedido en primera instancia, como se hizo.

Por su parte, el recurrente, al interponer el recurso de apelación, en la parte de


“impugnabilidad subjetiva”, “síntesis de los hechos del proceso” y de “fundamentos
del recurso” expresa, que en la sentencia que impugna se ha incurrido en
Incongruencia, infringiéndose el Art. 218 Inc. 2 CPCM., Interpretación errónea por
vulneración de los Arts. 648 y 649 Com., aplicación indebida del Art. 670 Com., y
por infracción en relación a la prueba aportada, por dejarse de valorar, en relación
al documento privado presentado como base de la pretensión, dando claramente
por cada motivo las razones en que fundamenta el recurso de apelación. Es decir,
aspectos relacionados con los motivos contemplados en los numerales 1° al 3° del
Art. 510 CPCM.

Lo anterior significa, que la Interposición del recurso de apelación se presentó


en legal forma, concluyéndose de su lectura, que cumple con los requerimientos
necesarios para su admisión, así como para entrar a conocer del fondo del mismo,
en cuanto a la prueba aportada y aplicación del derecho material, hasta pronunciar
la correspondiente Sentencia.

Observa la Sala, que en su resolución, concretamente de la lectura del numeral 13), el


tribunal de alzada ha caído en aspectos de ritualismo, lo cual, de conformidad a lo que
manda este nuevo Código Procesal Civil y Mercantil en su Art. 18, debe evitarse. Así
mismo, manda dicho precepto, que debe evitarse “las interpretaciones que supediten la
eficacia del derecho a aspectos meramente formales”, situaciones todas estas, que estima
este tribunal ha sucedido en el caso sub-iúdice, al negarse la admisibilidad del recurso
de Apelación por el tribunal de segunda instancia. Lo anterior tiene relación con lo que
establece el Art. 11 Cn.En suma, se observa, que la Cámara le ha negado al interponente
del recurso el acceso a la justicia, al vedarle el derecho a recurrir, es decir, el acceso a la
posibilidad de un segundo examen al proceso, que es precisamente a lo que se refiere el
considerado infringido Art. 501 CPCM.Por lo expuesto, estima este tribunal, se Impone
casar la resolución de mérito en este punto.”

CÁMARA SEGUNDA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, SAN SALVADOR, Sentencia N°27-4CM-14-A Fecha: diecisiete de
marzo de dos mil catorce.

“El no establecer de forma clara y precisa los motivos en que se funda el recurso,
acarrea que el mismo, no cumpla los requisitos establecidos en el inciso segundo del
Art. 511 CPCM. En conclusión, un escrito de apelación que únicamente se limite a
manifestar los hechos ocurridos, lo injusto de la sentencia o su disconformidad con
la misma, omitiendo los fundamentos facticos jurídicos de dichas afirmaciones, las
indefensiones sufridas y/o cuáles son los pronunciamientos impugnados, no cumple
los requisitos exigidos, en los Arts. 160 y 511 inciso segundo y tercero, ambos CPCM.

348
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

Lo afirmado se debe no solo a que, el tribunal superior, según lo dispuesto en los


Arts. 511 y 514, es quien deberá verificar como requisito formal del escrito de
interposición del recurso, sino también al principio dispositivo que rige el proceso
civil y mercantil (Art. 6 CPCM), el cual dentro del ámbito impugnativo impone
la carga al recurrente de delimitar los términos de la controversia, planteando el
fundamento de su pretensión, por lo tanto el recurrente debe agotar toda la carga
argumentativa necesaria, pues no dispondrá de otro momento para formular sus
pretensiones, ya que sobre los argumentos expuestos ha de girar la defensa de la
contraparte (cuando existiere).
No obstante la fundamentación del recurso en los puntos expuestos, no sólo se
vuelve necesaria a efecto de garantizar el derecho de legítima defensa de la parte
contraria, sino también para proveer al tribunal del conocimiento necesario de los
motivos para estimar o desestimar la impugnación interpuesta por el recurrente,
propiciando de tal manera, un pleno desarrollo y conocimiento del recurso de
apelación, llegando a que la decisión en sentencia sea estimatoria o desestimatoria.
Todo este planteamiento corresponde al ámbito de actuación del recurrente, sin
que el tribunal pueda dictar sugerencias o recomendaciones acerca de la mejor
fundamentación del recurso, o de suposición, ya que el hacerlo implicaría una
interferencia de tal modo prohibida.
En el caso de autos, el escrito de la recurrente cumple con el requisito del plazo ya que el
recurso fue interpuesto dentro el plazo que establece la ley, sin embargo, se concluye que
este no cumple con las demás exigencias que la citada disposición requiere.
La anterior afirmación radica en que la licenciada [recurrente], se limitó a
manifestar que el auto recurrido carece de motivos de razonamiento jurídico
fundamentados en la ley para la aplicación del derecho, mas no establece de forma
ordenada, precisa, ni fundamentada las razones por las que se interpone el recurso,
ni cuál es la indefensión sufrida o argumentos de derecho que sustenten su petición.
En ese sentido, consta que el recurso carece de fundamento factico jurídico que
sustente dichas afirmaciones y los motivos de dicha postura, por lo que dicho recurso
no cumple con los demás requisitos exigidos, en los Arts. 160 y 511 inciso segundo
y tercero, ambos CPCM por no haber establecido, si las razones en que funda su
recurso de apelación, obedecen a la revisión o interpretación del derecho aplicado o
si se refieren a la revisión de la fijación de los hechos y/o valoración de las pruebas.”
CÁMARA SEGUNDA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL
CENTRO, SAN SALVADOR, Apelación Referencia N°66-3CM-12-A Fecha:
veintiuno de noviembre de dos mil doce.
“El Art. 511 CPCM., establece los requisitos de la interposición del recurso de
apelación, el primer inciso regula el plazo de interposición y el inciso segundo
los motivos de fondo en que debe basarse todo recurso de apelación, debiendo el
apelante hacer distinción de forma clara y precisa entre: a) las que se refieran a la
revisión e interpretación del derecho aplicado; y b) las que afecten a la revisión de la
fijación de los hechos y la valoración de las pruebas, así como también exige que los
pronunciamientos impugnados sean determinados con claridad.

349
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

En ese sentido en todo recurso de apelación se debe establecer como mínimo:


a) la especificación sobre si en el proceso existen infracciones procesales o
sustantivas, en este último caso, si la infracción es inherente a la prueba o a la
aplicación del derecho material; b) la descripción de los hechos que originan
cada infracción; y c) los fundamentos y razonamientos jurídicos que demuestren
cuales han sido los preceptos infringidos (procesales o sustantivos) ya sea por
inaplicación o aplicación errónea, en los cuales sustenta su posición y por
los cuales el tribunal de alzada debe revocar, reformar o anular la sentencia
impugnada, los cuales deberán constituirse con claridad y precisión.
En el caso de autos, el escrito de la recurrente cumple con el requisito del plazo ya
que el recurso fue interpuesto dentro el plazo que establece la ley, sin embargo, se
concluye que este no cumple con las demás exigencias que la citada disposición
exige, por las razones que a continuación se exponen:
El [apoderado de la parte actora], se limitó a manifestar, en su escrito de apelación,
que la sentencia recurrida violenta el derecho de propiedad, seguridad jurídica,
derecho de audiencia y debido proceso de su representada, y que la certificación
del proceso administrativo valorada como prueba viola el derecho de audiencia de
su mandante por lo que solicita que se revoque en todas sus partes la sentencia
pronunciada por el Juez A Quo.
En ese sentido, consta que el recurso carece de fundamento fáctico jurídico que
sustente dichas afirmaciones, así como en qué consisten las violaciones alegadas
y los pronunciamientos impugnados, con lo cual no cumplió los demás requisitos
exigidos, en los Arts. 160 y 511 inciso segundo y tercero, ambos CPCM por no
haber establecido, si las razones en que funda su recurso de apelación obedecen
a la revisión o interpretación del derecho aplicado o si se refieren a la revisión
de la fijación de los hechos y/o valoración de las pruebas.”

Competencia del juzgado durante la apelación

Art. 512.- Presentada la apelación, el juez notificará a la parte contraria y se limitará a


remitir el escrito de apelación al tribunal superior dentro de los tres días siguientes, junto con el
expediente.

Si se hubiera solicitado la ejecución provisional, quedará en el tribunal inferior certificación


de lo necesario para dicha ejecución.

Cuando la solicitud de ejecución provisional se formule después de haberse remitido los autos
al tribunal superior, el solicitante deberá obtener de éste, previamente, certificación de lo que sea
necesario para proceder en su caso a la ejecución.

Durante la sustanciación del recurso, la competencia del juez que hubiera dictado la resolución
recurrida se limitará a las actuaciones relativas a la ejecución provisional de la resolución apelada.

350
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

CÁMARA PRIMERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, SAN SALVADOR, Apelación N°7-1CM1-2012 de Fecha: veinticuatro
de enero de dos mil doce.
“Para que el recurso de apelación pueda ser conocido en esta instancia, deben
cumplirse una serie de requisitos, sin los cuales no se puede entrar a conocer el
punto de agravio alegado, como lo son: a) competencia, b) plazo de interposición
del recurso de apelación, c) el tipo de resolución impugnada, y d) la fundamentación
del recurso de apelación. Respecto de los primeros dos presupuestos, se considera
que no se han cumplido de parte del apoderado de la parte apelante, por lo que
sobre dichos puntos es que se centrará nuestro estudio en el presente caso.
El presente recurso de apelación ha sido interpuesto por el apoderado de la parte
demandante, […], quien lo presentó ante el Juez Octavo de Paz de San Salvador, a las
diecisiete horas y cincuenta y seis minutos del día cinco de enero de dos mil doce; en
tal sentido, el Art. 511 Inc. 1° parte primera CPCM., al respecto reza que el recurso de
apelación deberá presentarse ante el juez que dictó la resolución impugnada, es decir,
que el juez competente para ser el receptor del escrito de interposición del recurso de
apelación, es el mismo juez que dictó la providencia objeto del recurso mismo, y no otro.
Así, se puede apreciar que este requisito de admisibilidad no se ha cumplido.
En lo que se refiere al plazo de presentación del recurso de apelación, de conformidad
a lo establecido en la parte final del inc. 1° del art. 511
CPCM., el recurso de apelación debe presentarse a más tardar dentro del plazo de
cinco días contados a partir del día siguiente al de la comunicación de aquella.
Para tal efecto, los plazos vencen en el último momento hábil del horario de oficina
del día respectivo, Art. 145 Inc. final CPCM.; además, las actuaciones procesales
de los tribunales deberán llevarse a cabo en días y horas hábiles en el horario de
funcionamiento de las oficinas judiciales, lapso que constituirá las horas hábiles, y
éste es el que la Corte Suprema de Justicia, mediante el Instructivo de Asistencia,
Permanencia y Puntualidad del personal de la Corte Suprema de Justicia e Instituto
de Medicina Legal, ha establecido que es de las ocho horas a las dieciséis horas,
que tiene como base legal el Art. 84 de las Disposiciones Generales del Presupuesto.
Esta Cámara es del criterio que lo dispuesto en el Art. 167 inciso último del Código
Procesal Penal, que invoca el mencionado apoderado en su escrito elaborado
a mano, sin sello de abogado, no tiene aplicación analógica ni supletoriamente
al presente proceso, ni tampoco tiene aplicación lo regulado en el Inc. 1° del Art.
46 C.C., en virtud de lo estipulado en los Arts. 140, 142, 143 y 145 CPCM., pues
sostener lo contrario es abrir la puerta para que la parte apelante, vaya a presentar
su escrito de interposición de recurso de apelación en horas inhábiles, al juez de
turno en materia penal; y no se vaya pensar que con tal criterio, se está violentando
el principio constitucional de acceso a los recursos, ya que en el caso sub-lite, lo
que ocurrió es que la parte recurrente no estuvo atenta a interponer su recurso de
apelación dentro de los cinco días hábiles, en horario hábil ante la Jueza “2”del
Juzgado Primero de lo Civil y Mercantil de esta ciudad.
De lo expuesto se concluye que en el caso sub- judice, el plazo para que la parte
recurrente interpusiera su recurso de apelación, venció en el último momento hábil

351
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

del horario de oficina del día respectivo; por lo que el escrito de interposición del
referido recurso, fue presentado extemporáneamente ante un juez que no dictó la
sentencia impugnada, pues se presentó, en horas inhábiles ante el Juez Octavo de
Paz de esta Ciudad, el día cinco de enero del corriente año, que era el último día que
tenía la parte apelante para interponer el mencionado recurso.
En lo que respecta al acta notarial que presenta el impetrante, a fin de probar que
el mismo se presentó en horas hábiles de oficina al tribunal respectivo, pero que no
le fue posible por los motivos que arguye; en tal sentido esta Cámara estima que no
es la forma procesal idónea para probar un justo impedimento, ya que el referido
documento no tiene ningún valor probatorio.
Consecuentemente con lo anterior, el recurso de apelación es inadmisible, y debe
rechazarse sin más trámite.”
Admisión o rechazo del recurso

Art. 513.- Inmediatamente después de recibido el recurso por el Tribunal Superior, éste
examinará su admisibilidad. Si fuese inadmisible, lo rechazará, expresando los fundamentos de su
decisión y condenando al que hubiere abusado de su derecho, al pago de una multa de entre dos y
cinco salarios mínimos urbanos, más altos, vigentes. (2)

Contra el auto que rechaza darle trámite a la apelación, procederá recurso de revocatoria. (2)

Admitido el recurso, dentro de los tres días siguientes se convocará a las partes a una audiencia
en la sede del tribunal, que habrá de realizarse a más tardar dentro del mes contado a partir del día
siguiente al de la convocatoria.

CÁMARA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DE OCCIDENTE,


SANTA ANA, Apelación N°52-11 Fecha: veintiuno de marzo de dos mil once.

“El Art. 511 CPCM en sus incisos segundo y tercero del Código Procesal Civil y
Mercantil, señala los requisitos necesarios para admitir un recurso de apelación y
cuya ausencia, se traduce en una imposibilidad para este Tribunal de imponerse
sobre tal recurso; a raíz de que ellos constituyen el fundamento, la condición
necesaria, para su admisibilidad. Dicho artículo en los incisos citados, dispone:
“En el escrito de interposición del recurso se expresarán con claridad y precisión
las razones en que se funda el recurso, haciendo distinción con claridad y precisión
las razones en que se funda el recurso, haciendo distinción entre las que se refieran
a la revisión e interpretación del derecho aplicado y las que afecten a la revisión
de la fijación de los hechos y la valoración de las pruebas. Los pronunciamientos
impugnados deberán determinarse con claridad.”“Si se alegare la infracción de
normas o garantías procesales en la primera instancia, se deberán citar en el escrito
las que se consideren infringidas y alegar, en su caso, la indefensión sufrida.”

La fundamentación, cobra relevante importancia para el apelante, en razón de


que es el escrito de interposición del recurso, donde debe agotar toda la carga
argumentativa a su favor, pues no dispondrá de otro momento para exponer y
razonar sus pretensiones; por lo que en dicho escrito, deben expresarse con claridad
y precisión las razones en que se funda el recurso, pues la omisión de este requisito

352
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

tiene como resultado su inadmisibilidad, pues impide el cumplimiento de los fines


que tanto la ley como la doctrina le atribuyen a este medio impugnativo. La misma
disposición insta a distinguir entre las razones que se refieran a la revisión e
interpretación del derecho aplicado y las que afecten la revisión de la fijación de los
hechos y la valoración de las pruebas, por lo que los pronunciamientos impugnados
deberán determinarse con claridad. Asimismo, si se alegare la infracción de normas
o garantías procesales, se deberán mencionar las que se consideran infringidas y
alegar, en su caso, la indefensión sufrida. En consecuencia, además de identificar la
resolución que dio origen al recurso, el impugnante debe distinguir y puntualizar de
manera clara y separada cada uno de los motivos en que fundamenta su impugnación,
debiendo puntualizar en cada motivo, si la infracción ha sido procesal o de fondo y,
en este último caso, si ha sido inherente a la prueba o a la aplicación del derecho
material, el pasaje o pasajes de la resolución gravada con cada motivo; también la
descripción de los hechos que origina cada infracción y las bases legales en que
sustenta la reprobación de la resolución. Debe asimismo, mencionar el precepto o
preceptos infringidos por inaplicación o aplicación errónea; aclarando que, además
de los requisitos señalados, si se alega infracción de normas o garantías procesales,
se debe especificar las que se consideren infringidas y alegar para cada caso, en que
consiste la indefensión sufrida por la conculcación de dichas normas o garantías.
Tomando como base los razonamientos mencionados, se advierte que el escrito de
apelación […], no reúne los requisitos antes apuntados, debido a que el apelante
no ha fundamentado el agravio cometido, limitándose a relatar las actuaciones del
tribunal inferior; agravando tal incumplimiento, el hecho de que [la parte recurrente]
en el mencionado escrito, circunscribe su petitorio, únicamente en cuanto a que se le
admita el escrito, se tenga por interpuesto de su parte el recurso de apelación contra
la resolución que declaró improponible la demanda y se remita el presente escrito
de apelación a este Tribunal, en donde oportunamente se personará y se mostrará
parte; sin haberse manifestado en cuanto a su pretensión respecto a la resolución
dictada por el Juez A Quo.
En consecuencia, advirtiéndose que en el escrito de interposición del recurso de
apelación que se conoce, no se configuran los requisitos de admisibilidad exigidos
en el Art. 511 CPCM, en razón de que no existe un motivo concreto y viable sobre
el cual este Tribunal deba pronunciarse, es procedente rechazar la apelación
interpuesta, por ser inadmisible de conformidad con lo estipulado en el Art. 513
CPCM., sin imposición de la multa a que se refiere tal artículo, por estimar esta
Cámara que al interponerse el mismo, no hubo abuso del derecho en vista de que
el auto impugnado es susceptible de la apelación interpuesta por la parte a quien
le asiste el derecho y se hizo en tiempo y forma debidos, obedeciendo el rechazo
únicamente a que no se especificó la pretensión que esperaba de esta Cámara y a la
falta de fundamentación como se ha dicho.”
CÁMARA SEGUNDA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL
CENTRO: Recurso de Apelación Referencia: 311-EM-11-3CM1 de fecha veintiuno
de mayo de dos mil trece.
“Respecto al monto de dicha multa se hacen las siguientes consideraciones: el Art.
147 C. Tr., establece que la unidad de tiempo cuando se hable de salario mínimo,

353
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

se tomara a la jornada ordinaria de trabajo de ocho horas diarias; por lo que las
suscritas consideran pertinente tomar como base para el cálculo de la suma a la
cual ascenderá la multa impuesta al expresado profesional la tarifa del salario
mínimo vigente, misma que se encuentra regulada en el Decreto Ejecutivo N° 56,
de fecha seis de mayo del año dos mil once, el cual establece en su art. 1 literal
a), que los trabajadores del Comercio y Servicios que laboren en cualquier lugar
de la República, devengarán por jornada ordinaria de trabajo diario diurno siete
dólares con cuarenta y siete centavos de dólar de los Estados Unidos de América
($7.47), equivalente acero punto nueve tres cuatro centavos de dólar ($0.934) por
hora, el cual es el aplicable al expresado profesional en virtud de la función por
él desempeñada; en ese sentido habiéndose establecido que será el salario mínimo
vigente que devenga por jornada ordinaria de trabajo diaria, la multa aplicada
asciende a la cantidad de veintidós dólares con cuarenta y un centavos de dólar
de los Estados Unidos de América, equivalentes a tres salarios mínimos vigentes.”

CÁMARA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DE OCCIDENTE,


SANTA ANA Sentencia de Apelación N°20-2011 Fecha: ocho de febrero de dos mil
once.

“Este Tribunal en vista de que el recurso de apelación del auto que declara
inadmisible la demanda, no se interpuso dentro del plazo que contempla el Art. 511
Inc. 1°. C.P.C.M., estimó que de conformidad al Art. 513 de dicho cuerpo legal, el
actor abusó de su derecho, tomando en cuenta que la postulación es preceptiva y que
está obligado a realizar todos los actos de disposición de los derechos en beneficio
de su representado.- Al evacuar la audiencia el actor esencialmente afirma que no
es su intención actuar maliciosamente o por desconocimiento de lo establecido por
la legislación; y aduce que el auto por el que se declaró inadmisible la demanda le
fue notificado el día veintidós de diciembre del año dos mil diez, y que el recurso lo
interpuso el día seis de enero del corriente año.- En la pieza principal aparece que
la notificación del auto definitivo por el que se le declaró inadmisible la demanda,
fue realizado el día veintiuno de diciembre del año dos mil diez; y por otra parte
en la razón de presentado del escrito de interposición de la alzada, el Secretario
del Tribunal hace constar que fue recibido a las quince horas veinte minutos del
día siete de enero del presente año, no como lo sostiene el recurrente, por lo que es
obvio que se ha abusado del derecho, por ir en contra de una disposición expresa
que contempla plazo para interponer la alzada, circunstancia de la cual no se
puede justificar desconocimiento, ya que el recurso como derecho de la parte debe
interponerlo dentro de los términos que le concede la ley; en ese sentido, no queda
otra alternativa, que la de confirmar la multa impuesta a la parte apelante [...],
representada por su Apoderado General Judicial [...], en cumplimiento al Art. 701
C.P.C.M. en su parte primera.”

CÁMARA SEGUNDA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, SAN SALVADOR, Apelación, .N°42-3CM-13-A de Fecha: veintinueve
de agosto de dos mil trece.
“El Art. 513 del CPCM, establece que el tribunal de apelación, al momento de
recibir el recurso, examinará si este cumple con los requisitos de tiempo y de forma

354
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

establecidos por el legislador para los de su clase - examen de admisibilidad - para


luego pasar al examen de procedencia, donde atenderá a la recurribilidad objetiva
del caso en específico.
En el caso en examen, si bien el recurso cumple con los requisitos de admisibilidad,
respecto de la recurribilidad objetiva corresponde hacer el siguiente análisis.
El recurso de apelación es el recurso ordinario constitutivo de instancia, por
medio del cual el tribunal superior se pronuncia sobre las cuestiones de hecho y de
derecho discutidas en el proceso, teniendo como restricción del ámbito en ésta nueva
instancia, el petitum de las partes y el principio reformatio in peius.
Este recurso además exige como requisito objetivo indispensable, que exista un
interés legítimo de la parte en dejar sin efecto una resolución que objetivamente le
perjudique por ser contraria al ordenamiento jurídico vigente. Este interés se conoce
también como agravio, perjuicio o gravamen. Consecuentemente, y siempre que la
ley lo permita, a la partes les asiste el derecho a impugnar cuando exista un agravio;
siendo la única excepción a esta regla, cuando la parte invoque como motivo del
recurso el defecto que la misma parte contribuyó a crear. (nemoauditur propriam
turpitudinem suam allegans).
Para profundizar en el concepto del agravio, decimos que el agravio no es
simplemente que la decisión sea contraria al criterio de la parte dado que tal
posición conllevaría a un proceso indefinido en razón de que siempre va a existir
una decisión contraria para alguna de las partes y ello legitimaría que se continúe
con los recursos indefinidamente.
El agravio debe cumplir con dos requisitos, a) que el acto que se reputa lesivo a
los intereses, sea contrario a la ley ya sea que se trate de un vicio in iudicando o
in procediendo; b) que cumpla con el llamado perjuicio objetivo, el cual consiste
en el menoscabo tangible a los derechos que forman parte de la esfera jurídica
del agraviado. Este perjuicio se produce en razón de atribuirle ilegalidad a la
resolución impugnada. Es decir: “...Este interés existe si aparentemente, el recurso
se presenta, por su incidencia sobre la parte dispositiva de la resolución, como un
medio jurídicamente adecuado para evitar el perjuicio jurídico, procesal o material,
invocado como agravio por impugnante...”(Gelsi Bidart, Adolfo. De las nulidades
en los actos procesales. Montevideo: Ediciones Jurídicas Amalio)
Cuando un recurso de Apelación no contiene agravio, es decir no cumple con
alguno de estos requisitos, no puede intentarse el recurso; ya que los principios que
rigen las actuaciones de los procesos judiciales, prohíben actuaciones superfluas,
inútiles, de índole puramente académica, en el peor de los casos, contrarias a los
verdaderos intereses de quien está facultado, en abstracto, para ejercerlas. Ello
lleva a determinar que el perjuicio debe ser efectivo e inmediato.
Para impugnar una resolución o sentencia no es suficiente para quien interpone el
recurso que sea parte en el proceso, se requiere, además, que dicha parte sufra un
perjuicio con lo resuelto, es decir, que dicho acto procesal afecte su pretensión; es el
agravio que el fallo causa al recurrente; lo que la doctrina conoce como el Interés
legítimo de recurrir.

355
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

“Interés para impugnar es, por consiguiente, aquella ventaja, jurídicamente


reconocida, que se concreta en la eliminación de una resolución objetivamente
perjudicial o en la sustitución de ésta por una resolución menos dañosa, según el
sistema jurídico y no según la opinión subjetiva del impugnante”(Castillo González,
Francisco. “El interés para impugnar”, en Revista de Ciencias Jurídicas, Facultad
de Derecho Universidad de Costa Rica y Colegio de Abogados, N° 49, enero-abril,
1984, San José, Costa Rica, p. 44.)
En el caso en estudio, esta Cámara encuentra en el recurso interpuesto por el
Licenciado […], que no se ha determinado cual es el perjuicio objetivo e inmediato
para [la recurrente], que causa la resolución de improponibilidad impugnada.
Aunado al hecho de que en el escrito de Apelación no se hace la determinación
concreta del perjuicio sufrido, hay que resaltar que [la recurrente], tiene la calidad
de demandada en el proceso y que por lo tanto la pretensión que ha sido objeto
de rechazo sin trámite completo, ha sido la pretensión de declaratoria de nulidad
incoada por la sociedad [codemandada], por lo tanto, es a dicho sujeto procesal a
quien asistió el derecho de impugnar la resolución en su momento oportuno.
Por otro lado esta Cámara considera que el hecho de simplemente haber rechazado
la pretensión sin llegar a Sentencia, no causa perjuicio concreto a la parte
demandada, ya que el apelante está presuponiendo que dicha sentencia le será
favorable y que la lesión a sus intereses consiste en que no ha podido obtener dicha
declaratoria favorable, con efectos de cosa juzgada; sin embargo el contenido de la
posible sentencia de fondo es desconocido a la fecha, y podría ser tanto favorable o
desfavorable a los intereses de [la recurrente].
Por lo tanto no resulta lógico pensar que el no haber obtenido una sentencia cuyo
contenido y efectos son desconocidos, pueda considerarse un perjuicio o un agravio
concreto a los intereses de la demandada, y por lo tanto, esta Cámara no encuentra
agravio en el presente recurso, y por lo tanto debe rechazarse.”

CÁMARA TERCERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, SAN SALVADOR, Apelación N°25-EMM-14 Fecha: veintisiete de
enero de dos mil catorce.

“La apelación es un recurso ordinario que tiene por finalidad el re-examen de las
infracciones procesales y sustantivas contra resoluciones de primera instancia,
a través de un procedimiento único con el que el tribunal competente (ad quem)
ejercita una potestad de jurisdicción similar

a la desplegada por el órgano inferior (A-quo). Es un remedio procesal encaminado


a lograr que un órgano superior en grado, en relación al que dictó una resolución
que se estima es injusta, la anule, revoque o reforme total o parcialmente.

Dicho recurso encuentra su asidero legal en el Art. 508 CPCM, el cual a su letra
REZA: “Serán recurribles en Apelación las Sentencias y los autos que, en primera
instancia, pongan fin al proceso, así como las resoluciones que la ley señala
expresamente.”

356
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

BANCO PROCREDIT, SOCIEDAD ANÓNIMA, por medio [su apoderado legal]


apela del auto definitivo pronunciado por el Señor Juez A Quo a las nueve horas
quince minutos de diecinueve de noviembre de dos mil trece, […] el cual le fue
notificado vía fax, el dos de diciembre del mismo año, […], transcurridas las
veinticuatro horas que señala el Art. 178 CPCM se tuvo por verificado, quedando
expedito el derecho a las partes de interponer el o los recursos pertinentes dentro
del plazo que establece la ley; y así, respecto del plazo para interponer el recurso
de Apelación, cabe mencionar que el Art. 511 Inc. 1 CPCM, DISPONE: “El recurso
de Apelación deberá presentarse ante el juez que dictó la resolución impugnada, y
a más tardar dentro del plazo de cinco días contados a partir del siguiente, al de la
comunicación de aquélla.”

Por su parte el Art. 145 CPCM, PRESCRIBE: “Los plazos establecidos para las
partes comenzarán, para cada una de ellas, el día siguiente al de la respectiva
notificación, salvo que, por disposición legal o por la naturaleza de la actividad
que haya de cumplirse, tengan el carácter de comunes, en cuyo caso aquéllos
comenzarán a correr el día siguiente al de la última notificación.

En los plazos fijados en días sólo se contarán los hábiles.

Los plazos fijados en meses o años se computarán de fecha a fecha; pero si en el mes
de vencimiento no existiera el día equivalente, se entenderá que el plazo expira el
último día del mes.

En todo caso, cuando el último día del plazo sea inhábil se entenderá éste prorrogado
hasta el siguiente día hábil.

Los plazos vencen en el último momento hábil del horario de oficina del día
respectivo.”(subrayado no es propio del texto).

Finalmente, en el mismo sentido el Art. 143 CPCM DICE: “Los plazos conferidos a
las partes para realizar los actos procesales son perentorios e improrrogables, salvo
disposición en contrario.”(Subrayados son nuestros)

Las disposiciones legales transcritas evidencian la improrrogabilidad del término


para apelar y la forma del cómputo del mismo, por lo que, al haberse notificado la
declaratoria de caducidad vía fax el dos de diciembre de dos mil trece, la misma se
tuvo por verificada el tres de diciembre del mismo año, empezándole a correr el plazo
para recurrir de la resolución que le causaba agravios al BANCO PROCREDIT, S.A.,
por medio de la persona que lo representa, a partir del cuatro de diciembre del año
anterior, es decir, debió haber interpuesto recurso de Apelación dentro de los cinco
días hábiles siguientes a la notificación respectiva, plazo que corrió del cuatro al
nueve de diciembre de dos mil trece, y no habiendo recurrido oportunamente, pues el
recurso lo interpuso hasta el veinte de enero del corriente año, es decir, veintiún días
hábiles después del último en que pudo haber apelado, debe aclararse que si bien
la ley concede este derecho, el mismo está limitado en el tiempo, resguardándose así
el principio de legalidad y de seguridad jurídica, por lo que, el plazo de cinco días
para la interposición del recurso de Apelación establecido en el Art. 511 CPCM, por
disposición expresa es perentorio e improrrogable.

357
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

En razón de que la alzada se interpuso fuera del plazo señalado por la ley, y tomando
en cuenta que la dirección del proceso está confiada al Juez, de conformidad a
las disposiciones citadas y Art. 14 CPCM, debe rechazarse, pues ha precluído la
oportunidad para hacerlo, siendo el mismo extemporáneo.

En virtud que se denegará la admisión de la alzada y para los efectos del Art. 513
CPCM, considera esta Cámara que en el sub júdice no existe abuso del derecho
por parte del recurrente, puesto que no obstante ser extemporáneo, el recurso de
Apelación se interpuso de una resolución apelable, por lo que se omitirá la multa a
que se refiere tal disposición, debiendo hacer un llamado al recurrente a fin de que
en lo sucesivo, haga uso adecuado de los recursos de la manera prevista en la ley.”

Audiencia y prueba en segunda instancia

Art. 514.- En la audiencia, el tribunal oirá a la parte apelada para que se oponga o para que se
adhiera a la Apelación. En seguida oirá al apelante, con relación a la oposición, el cual no podrá
ampliar los motivos de su recurso.

Tanto el recurrente como el recurrido podrán proponer la práctica de prueba. Sólo serán
proponibles los documentos relativos al fondo del asunto que contuviesen elementos de juicio
necesarios para la decisión de la causa, pero sólo en los casos en que sean posteriores a la audiencia
probatoria o a la audiencia del proceso abreviado; los documentos anteriores a dicho momento
se admitirán cuando la parte justifique que ha tenido conocimiento de ellos con posterioridad a
aquél. También podrá proponerse prueba documental en el caso de que la parte no aportara los
documentos en primera instancia por alguna causa justa. (2)

Además de la documental dicha, sólo podrá proponerse prueba:


1°. Cuando la prueba hubiera sido denegada indebidamente en primera instancia.
2°. Cuando, por cualquier causa no imputable al que solicite la prueba, no se hubiera podido
practicar, en todo o en parte, aquella prueba que hubiera sido propuesta en primera
instancia.
3°. Cuando los medios probatorios estén referidos a la ocurrencia de hechos relevantes para
el derecho o interés discutido, pero acaecidos después de iniciado el plazo para dictar
sentencia en primera instancia.

Propuesta la prueba, el tribunal resolverá, admitiendo únicamente los medios que resulten
procedentes. La resolución por la que se rechacen los medios probatorios ofrecidos es
inimpugnable.

Realizada la prueba como último punto de la audiencia, las partes podrán formular sus
alegaciones finales, con lo cual el recurso quedará en estado de dictar Sentencia, sin perjuicio de
que el tribunal pueda solicitar alguna aclaración a las partes.

El tribunal fijará el tiempo prudencial para efectuar los alegatos finales, conforme la
complejidad del caso, sin que este pueda ser menor de una hora, ni mayor a tres horas, para cada
una de las partes, bajo pena de nulidad. No obstante, cada parte podrá utilizar un periodo menor
del que le sea asignado, si así lo estimare conveniente. Las decisiones judiciales sobre el tiempo de
los alegatos admitirán recurso de revocatoria en audiencia. (4)

358
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

CORTE SUPREMA DE JUSTICIA EN CORTE PLENA, conflicto de


competencia 2-C-2001-Pleno-CSJ de veintidós de diciembre de dos mil nueve.

“Desde el punto de vista que la Apelación adhesiva es derivada, incidental, se


concluye que es dependiente de la Apelación principal. Por ende, su alcance es
restringido. No puede conferírsele al adherente el mismo derecho concedido a la
parte que diligentemente interpuso su impugnación en tiempo. Si el apelante desiste
de su recurso, la adhesión no subsiste, esto como consecuencia de esa relación
entre accesorio y principal. Por esa misma razón, la interposición de la Apelación
adhesiva no puede perjudicar el efecto esperado con la Apelación principal,
porque de lo contrario eso podría conllevar a una injusticia como más adelante
ejemplificaremos.

Creemos que la tramitación de la Apelación adhesiva tiene qué tener un límite,


por ser dependiente de la principal, por ejemplo, así como no podría admitirse la
Apelación adhesiva referente a la adhesión de la Apelación (adhesión de la adhesión),
lo que convertiría el procedimiento de alzada en una “rueda de caballitos”, también
podemos entonces afirmar que la adhesión tiene un margen de acción limitado en
relación a la Apelación interpuesta en tiempo.”

CÁMARA DE LA SEGUNDA SECCIÓN DE OCCIDENTE, SONSONATE,


Sentencia de Apelación Referencia INC-CYM-24-14 de fecha 9 de septiembre de
2014

“II. Que del análisis del Art. 514 del Código Procesal Civil y Mercantil, el cual
prescribe expresamente: “En la audiencia, el tribunal oirá a la parte apelada
para que se oponga o para que se adhiera a la Apelación. En seguida oirá a la
parte apelante, con relación a la oposición, el cual no podrá ampliar los motivos
de su recurso. Tanto el recurrente como el recurrido podrán proponer la práctica
de prueba.”, se desprende que la audiencia tiene una doble función o contenido,
pues además de garantizar el principio de contradicción se deben asegurar: 1)
Las alegaciones de las partes empezando por el apelado, y 2) El pronunciamiento
sobre la prueba de las partes en Apelación, la presentada en ese mismo acto por el
apelante, y la que promueva el apelado.”

“Partiendo de esas finalidades se puede prescindir de señalar audiencia oral por no


ser necesaria para decidir el recurso de Apelación interpuesto por el Licenciado [...]
pues en primera instancia solamente ha comparecido el solicitante, pues no existe parte
demandada que sería la parte apelada, lo que implica que no existe parte contraria
que venga a oponerse a lo planteado por el apelante, pues las presentes diligencias
son de carácter no contencioso; que, además, se debe tomar en consideración que el
impetrante en su escrito de Apelación ha concretizado los fundamentos en los que radica
su inconformidad con la resolución pronunciada por el Juez A Quo; que también éste no
ha solicitado la práctica o recepción de ningún tipo de prueba, y que tampoco se prevé la
posibilidad de que la pida en audiencia, pues ya consta en el expediente documentación
suficiente para resolver sobre la improponibilidad dictada; por todo ello es que en el
presente recurso se estima que la realización de la audiencia se torna innecesaria, pues
con la celebración de la misma no se cumplirían los fines antes apuntados para los cuales

359
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

se estableció; y siendo que, como ya se mencionó anteriormente, con la documentación


que obra en el proceso esta Cámara queda suficientemente instruida para resolver el
presente incidente, resulta procedente con sólo la vista de los autos resolver el asunto de
fondo planteado.”

CÁMARA PRIMERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, Casación Referencia: 161-64CM2-2015 de fecha dieciséis de febrero de
dos mil dieciséis.

“En lo atinente a la prueba documental y testimonial propuesta en el escrito de


Apelación, por el apoderado de la parte apelante; el tribunal decide rechazarlos,
por la razón que le precluyó el derecho de aportarlos al proceso; y, por ende, es
impertinente ofrecerlos en esta instancia, ya que no reúnen los requisitos que para
tal efecto indican los Arts. 288 Inc. 1°, 511 Inc. último y 514 CPCM, debido a que
el demandado, fue notificado del decreto de embargo y demanda que lo motiva,
que equivale al emplazamiento, el día diecisiete de abril de dos mil quince, sin
que éste haya hecho uso de su derecho de defensa, por lo que se dictó la sentencia
correspondiente.

Por tal motivo, la petición de admisión de la prueba documental, consistente en los


recibos de pago adjuntándolos al escritorio, como de la prueba testimonial ofertando
el testimonio de los señores […], que se pretende incorporarlos a través del recurso
de Apelación, para acreditar un supuesto arreglo extrajudicial, es extemporánea,
como consecuencia del incumplimiento del plazo procesal establecido para la
oposición mediante el escrito de contestación de la demanda, por lo que le precluyó
el derecho de hacerla valer para oponerse a la pretensión, lo que no deriva en
la nulidad de la Sentencia, ya que entre los principios procesales que regulan el
desarrollo del proceso, destaca uno común a todas las ramas del derecho, como
lo es el principio de preclusión procesal, según el cual, el proceso se divide en
etapas, cada una de las cuales supone la clausura de la anterior, sin posibilidad de
retrocederé a ella para revocarla o modificarla.”

CÁMARA DE LA TERCERA SECCIÓN DEL CENTRO, SAN VICENTE,


Apelacion N°C-7-SD-2011 de Fecha: doce de julio de dos mil once.

“Normalmente los sistemas procesales admiten que la prueba se incorpore en primera


Instancia y en Segunda Instancia lo permiten también pero de forma muy limitada;
además la oferta de esa prueba en segunda instancia requiere que sea pertinente, que
no es más que convencer al juez de la realidad de un hecho que contiene dicho medio
de prueba; por su parte la utilidad de la misma implica siempre un juicio hipotético de
relevancia. Por otro lado, siendo la Apelación parte del proceso y no un nuevo juicio,
como ya se dijo, la Ley impone que dicha prueba instrumental debe haberse encontrado
con posterioridad a la Audiencia del Proceso Abreviado.

El Código Procesal Civil y Mercantil Comentado nos dice al respecto: “””””Toda


vez que la parte proponente del documento puede estar mintiendo, aunque los hechos
que sirven a su justificación puedan tener la apariencia de verosímiles y en principio
eso baste a la Cámara para admitir el documento, no deberá impedirse a la parte
contraria el poder instar prueba dirigida a enervar esa justificación, o sea, dirigida

360
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

a demostrar la extemporaneidad de aquella solicitud de la prueba documental


impidiendo así su valoración por el Tribunal de Apelación.””””””””””””””””

Lo que ocurrió en el caso en examen es que no se presentó evidencia que justificara


que de dicha prueba instrumental tuvo conocimiento el apelante con posterioridad a
la Audiencia del proceso abreviado y también de la sentencia recurrida, por lo cual
se le rechazó durante la Audiencia en este Tribunal, tal como consta a folios […] del
acta de la Audiencia, por lo cual se rechazará toda clase de valoración que pudiere
hacerse de ella, por faltarle el requisito de su incorporación al proceso.”

Sentencia de apelación

Art. 515.- Concluida la audiencia, el Tribunal podrá dictar sentencia de inmediato, si lo estima
pertinente; o dar por concluida la audiencia luego de los alegatos finales para dictar sentencia
por escrito dentro del plazo de veinte días contados desde el siguiente a aquél en que se hubiera
celebrado la audiencia. En todo caso anunciará verbalmente el fallo. (2)

La sentencia que se dicte en Apelación deberá pronunciarse exclusivamente sobre los puntos y
cuestiones planteados en el recurso y, en su caso, en los escritos de adhesión.

El incumplimiento de los plazos establecidos hará incurrir al tribunal responsable en una


multa que consistirá en un salario mínimo urbano, más alto, vigente por cada día de retraso.

Decisión sobre la infracción procesal

Art. 516.- Si al revisar las normas o garantías del proceso aplicables a la sentencia impugnada
se observara alguna infracción pero hubiera elementos de juicio suficientes para decidir, el tribunal
anulará la sentencia apelada y resolverá sobre la cuestión o cuestiones que sean objeto del proceso.
Si careciera de dichos elementos, anulará las actuaciones, devolviéndolas al momento procesal
oportuno.

Decisión sobre los hechos probados y sobre el derecho

Art. 517.- Si al revisar los hechos que se declaran probados en la sentencia impugnada o
las razones de derecho aplicadas en la misma el tribunal observara alguna infracción revocará la
sentencia y resolverá sobre la cuestión o cuestiones que fueran objeto del proceso.

Deserción de recurso

Art. 518.- Si el apelante no comparece a la audiencia, se declarará desierto el recurso de


Apelación y quedará firme la resolución recurrida. La resolución que declare desierta la Apelación
impondrá al apelante las costas causadas.

SALA DE LO CIVIL Sentencia 167-CAC-2012 de fecha veintinueve de enero de


dos mil catorce.

“El Art. 518 Pr. C. y M. establece la deserción del recurso de Apelación, en el caso
en que el apelante no comparezca a la audiencia. La disposición legal no determina
detalles, simplemente, ordena que si la parte apelante no comparece a la audiencia,
se declarará la deserción del recurso de Apelación.

361
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

La no comparecencia del apelante, es un concepto simple de la ley; no lo rodea de


elementos de juicio favorable o desfavorable a las partes. Para realizar audiencias,
es indispensable señalar día y hora, y citar a las partes al efecto. Si no comparece
la parte apelante, que es la que ha provocado la segunda instancia, es de lógica
declarar la deserción del recurso como efecto, con el objeto de que la administración
de justicia sea efectiva para ambas partes.

La ley no señala variantes en cuanto a la comparecencia de las partes, y por orden


del proceso, ha ordenado en el Art. 513 Pro e y M, señalar día y hora para celebrar
la audiencia de Apelación. Es de orden que las partes deben ser puntuales a la
audiencia. En el presente caso, la parte demandada o apelante tiene dos apoderados,
con facultades para actuar conjunta o separadamente. Por ese motivo, cuando uno de
los apoderados tuvo un accidente de tránsito, el otro apoderado del apelante pudo y
debió concurrir a la hora señalada; como no lo hiciera por solidaridad con el colega
accidentado, según lo expresó, lo cual es de su propia responsabilidad, el resultado para
la sociedad demandada que representan, ha sido la no comparecencia a la audiencia,
que se sanciona con la deserción del recurso. Por otra parte, el Art. 18 Pr. C y M.
ordena que las disposiciones del mismo Código deben interpretarse de tal modo que se
procure la protección y eficacia de los derechos de las personas y la consecución de los
fines consagrados en la Constitución, dentro del respeto al principio de legalidad. En
consecuencia, deben evitarse interpretaciones que supediten la eficacia del derecho a
aspectos Parecería que esta formalidad de la comparecencia en meramente formales
tiempo, a la audiencia, es soslayable por ser un ritualismo evitable. Sin embargo,
están de por medio los derechos de ambas partes, por los cuales debe velar el
juzgador, quien no puede dispensar las faltas cuyo efecto está señalado en la ley. Y
para mantener el orden procesal, las citaciones a una hora y día señalados, deben
atenderse tal cual se han ordenado por el Juez o Cámara. Y como se reitera, en este
caso, si uno de los apoderados estuvo impedido de asistir, para eso estaba el otro
apoderado con iguales facultades, quien no estuvo impedido. En consecuencia, no
existe la interpretación errónea alegada por los recurrentes.”

TÍTULO CUARTO
RECURSO DE CASACIÓN

CAPITULO PRIMERO
GENERALIDADES DEL RECURSO

Resoluciones recurribles

Art. 519.- Admiten recurso de casación:


1°. En materia civil y mercantil, las Sentencias y los autos pronunciados en Apelación en
procesos comunes y en los ejecutivos mercantiles cuyo documento base de la pretensión
sea un título valor; asimismo las Sentencias pronunciadas en Apelación, en los procesos
abreviados, cuando produzcan efectos de cosa juzgada sustancial. (2)
2°. En materia de familia, las Sentencias correspondientes en los términos que determina la
Ley Procesal de Familia.
3°. En materia de trabajo, las Sentencias definitivas que se pronunciaren en Apelación, de
conformidad a lo regulado en el Código de Trabajo.

362
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

Casos especiales de rechazo

Art. 520.- El recurso de casación se rechazará cuando se interponga contra resolución dictada
en asuntos de jurisdicción voluntaria o en procesos especiales, cuando la sentencia no produzca
efectos de cosa juzgada material.

Motivos de Casación

Art. 521.- El recurso deberá fundarse en la existencia de una infracción o errónea aplicación
de la norma de derecho.

Motivos de Fondo

Art. 522.- El recurso de casación procede cuando se hubiese producido alguna infracción de
ley o de doctrina legal.

Se entenderá que se ha infringido la ley cuando ésta se hubiera aplicado indebida o


erróneamente, o cuando se ha dejado de aplicar la norma que regula el supuesto que se controvierte.

Hay infracción de doctrina legal cuando se hubiera violado la jurisprudencia establecida por el
tribunal de casación, surgida de la aplicación e interpretación de las leyes y que esté contenida en
tres o más Sentencias constantes, uniformes y no interrumpidas por otra doctrina legal.

Motivos de Forma

Art. 523.- El recurso de casación por quebrantamiento de las formas esenciales del proceso,
tendrá lugar por:

1°. Abuso, exceso o defecto de jurisdicción;


2°. Falta de competencia;
3°. Inadecuación de procedimiento;
4°. Falta de capacidad para ser parte, de actuación procesal y de postulación;
5°. Caducidad de la pretensión;
6°. Litispendencia y cosa juzgada;
7°. Sumisión al arbitraje y el pendiente compromiso;
8°. Renuncia, desistimiento, allanamiento y transacción, si el objeto no fuera disponible o se
hiciera en contravención al interés público;
9°. Falta de emplazamiento para contestar la demanda;
10°. Denegación de prueba legalmente admisible;
11°. No haberse practicado un medio probatorio admitido en la instancia;
12°. Practicarse un medio de prueba ilícito;
13°. Por haberse declarado indebidamente la improcedencia de una Apelación; y,
14°. Por Infracción de requisitos internos y externos de la Sentencia.

Hay infracción de los requisitos internos cuando la sentencia es incongruente o tiene


disposiciones contradictorias. Se entenderá que existe incongruencia en los casos siguientes: haber
otorgado el juez más de lo pedido por el actor, menos de lo resistido por el demandado o cosa
distinta a la solicitada por ambas partes; o haber omitido resolver alguna de las causas de pedir o
alguna cuestión prejudicial o jurídica, necesaria para la resolución del proceso.

363
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

Se entenderá que ha habido infracción de los requisitos externos de la sentencia cuando se


omita relacionar los hechos probados, falta de fundamentación jurídica y oscuridad en la redacción
del fallo.

SALA DE LO CIVIL Casación Referencia: 231-CAC-2012 de fecha diecisiete de


julio de dos mil trece.

“Al estudiar la sentencia impugnada, la Sala constató que la Cámara Sentenciadora


no ha valorado la prueba en su conjunto conforme a las reglas de la sana crítica; pues
aunque haya examinado cada una de las pruebas vertidas en el proceso, lo cierto es,
que no las relacionó en su conjunto, y esa es precisamente la infracción denunciada, en
consecuencia, el error in judicando invocado se ha configurado en el caso de mérito, por
lo que se impone casar la sentencia recurrida y así habrá que pronunciarlo.”

SALA DE LO CIVIL, Casación N°83-CAM-2012 de Fecha: seis de junio de dos


mil catorce.

“Sobre este particular esta Sala hace las consideraciones siguientes: el artículo
49 del Código Procesal Civil y Mercantil, que se encuentra en el Código, dentro
del tratado de la prejudicialidad, y más específicamente bajo el acápite “Recursos
contra la resolución sobre suspensión de las actuaciones por prejudicialidad
penal”sostiene específicamente “contra el auto que acuerde la suspensión se dará
recurso de Apelación, y contra los autos dictados en Apelación en los que se acuerde
o confirme la suspensión, se dará en su caso, el recurso de casación”. Tratando
de adaptar el cuadro fáctico dentro de lo legal, tenemos que en el presente caso,
el Juzgado de lo Civil de San Marcos, […] decretó la suspensión del proceso por
prejudicialidad penal de la cual se usó el recurso de Apelación que la ley franquea
en el inciso segundo, parte primera del artículo 49 Inc. 2° del C.P.C. M; como este
recurso es potestad de la Cámara correspondiente admitirlo o no, resulta que este
Tribunal, en resolución

[É] declaró inadmisible el recurso, siendo la resolución del veintiséis de enero de dos
mil doce; de esta resolución se solicitó revocatoria, pero fue declarada improponible
el veinte de febrero de dos mil doce. De la primera resolución pronunciada por la
Cámara se ha interpuesto recurso de casación, el cual ha sido admitido por la Sala
porque considera este Tribunal que la inadmisibilidad declarada por la Cámara, es
un auto definitivo, y como tal es impugnable en casación de conformidad al Art.

519 Inc. 1°, C.P.M C., por lo que en base a tal argumentación la Sala tiene a bien
desechar la nulidad pedida por el recurrido resolviendo no ha lugar a declarar la
nulidad insubsanable solicitada.”

“Del recurso de casación: desechada la nulidad planteada y como consecuencia,


siendo esta Sala competente para conocer del recurso opuesto, el Tribunal hace
las consideraciones siguientes: La parte actora ha solicitado en su objeción se
case el auto definitivo recurrido, fundamentado en el artículo 523 N° 13 C.P.C.M
que franquea el recurso de casación al agraviado cuando un recurso de Apelación
ha sido denegado indebidamente. El auto definitivo de que se ha apelado, fue
pronunciado —como se ha dicho- por el Juez de lo Civil de San Marcos, a las doce

364
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

horas del día veintitrés de diciembre de dos mil once, por medio del cual se suspende
el presente juicio mercantil ejecutivo en el que [el demandante], por medio de [su
apoderado judicial], ha demandado a [el demandado], la suma de quinientos dólares
de los Estados Unidos de América, en dicha resolución se acuerda suspender por
prejudicialidad penal dicho proceso, por el motivo que se ha dicho con anterioridad.
De la providencia del juez, se interpuso recurso de Apelación, el cual fue denegado
por la Cámara seccional, […].
Esta Sala considera que el recurso de Apelación se concede genéricamente, de
acuerdo al artículo 508 del C.P.C.M, pero además de las resoluciones señaladas
en dicho artículo, resulta que en la legislación procesal civil y mercantil, se
encuentran diseminados otros ejemplos en los cuales se concede el recurso de
alzada, considerando esta Sala que uno de esos casos es el contenido en el artículo
49 Inc. 2°, del Código ritual en mención y que en dicho inciso no se hacen distingos
ni escindimientos de ninguna clase, por lo que a juicio de esta Sala, tal resolución,
la que ordena la suspensión del proceso por prejudicialidad penal es apelable;
terminada esa primera explicación, esta Sala en cuanto al recurso de casación, como
se ha dicho al examinar la declaratoria de nulidad solicitada y que se ha denegado,
estima que cuando la Cámara declara que el recurso de Apelación es inadmisible, si
bien no cae dentro de las frases sacramentales usadas por la ley, o sea, la Cámara
no ha acordado la denegativa porque en este caso no es el Tribunal originario, ni
se ha confirmado, (con esas palabras) pero si, considera que la declaratoria de
inadmisibilidad, confirma el estatus de la Primera Instancia, o sea confirma en el
fondo la denegativa, y es más, con la agravante de que esta declaratoria es liminar,
negándosele la posibilidad de audiencia oral y restándole la de presentar prueba; es
más, el recurso de casación en este caso, no tiene por objeto examinar el fondo de la
cuestión, sino darle la oportunidad al recurrente de al menos la posibilidad de discutir
su problema en una segunda instancia. Por todo lo expuesto, este Tribunal considera
que la Cámara ad-quem, vulneró la ley al no haber concedido el recurso de Apelación,
conculcando el artículo 523 numeral 13 y el artículo 49 Inc. 2° del C.P.C.M., por lo que
la resolución venida se casará y así se declarará en el momento oportuno.”
CAPITULO SEGUNDO
MODO DE PROCEDER

Interpretación de normas

Art. 524.- Las normas sobre el recurso de casación deberán aplicarse en la forma que más
favorezca la uniformidad de la jurisprudencia como medio para asegurar la igualdad ante la ley, así
como la seguridad y la certidumbre jurídica.

Forma para interponer el recurso

Art. 525.- El recurso se interpondrá en forma escrita y deberá estar debidamente fundamentado.

Plazo

Art. 526.- El plazo para presentar el recurso es de quince días contados a partir del siguiente
al de la notificación respectiva de la resolución que se impugna, fuera de dicho plazo no se podrá
aducir ningún motivo de casación.

365
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

Legitimación para interponer el recurso

Art. 527.- Este recurso sólo deberá interponerse por la parte que recibe agravio por la
resolución impugnada.

Requisitos formales de la interposición

Art. 528.- El escrito de la interposición del recurso deberá presentarse ante el tribunal que
dictó la resolución que se impugna y contendrá necesariamente:
1°. La identificación de la resolución que se impugna y el motivo o motivos concretos
constitutivos del fundamento del recurso; y,
2°. La mención de las normas de derecho que se consideren infringidas, razonándose, en
párrafos separados, la pertinencia y fundamentación de los motivos alegados.

Remisión de los autos al tribunal de casación


Art. 529.- Interpuesto el recurso y concluido el término legal correspondiente, el tribunal,
previa notificación a las partes, remitirá, dentro de tercero día, autos y copias a donde corresponda.
Introducción del recurso
Art. 530.- Si se admite el recurso, en el mismo auto se mandará oír a la parte contraria, para
que en el plazo de ocho días contados a partir del siguiente al de la notificación respectiva alegue
lo que de su parte considere conveniente.
Si el tribunal de casación considerare que el recurso no es admisible, lo rechazará
razonadamente. Esta resolución admitirá sólo el recurso de revocatoria.
Desistimiento del recurso
Art. 531.- El recurrente podrá desistir del recurso, por escrito, en cualquier estado del proceso.
El desistimiento se admitirá sin más trámite.
Devolución de autos
Art. 532.- Rechazado o desestimado el recurso por el tribunal de casación, la resolución
impugnada quedará firme, y se devolverán los autos al tribunal de origen con certificación de lo
proveído, en el plazo de cinco días.
Fin del procedimiento
Art. 533.- La sentencia se pronunciará dentro del plazo de los sesenta días posteriores a la
conclusión de los alegatos correspondientes, en caso de que hubieran tenido lugar.
El incumplimiento del plazo anterior hará incurrir al tribunal en una multa de un salario
mínimo, urbano más alto, vigente, por cada día de atraso.
CAPITULO TERCERO
Sentencia

Obligación de pronunciarse y orden del pronunciamiento

Art. 534.- En la Sentencia, el tribunal de casación deberá pronunciarse sobre todos los
motivos invocados por el recurrente, aún cuando sólo fuere procedente casar la sentencia por uno
de ellos.

366
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

Orden en el pronunciamiento de la Sentencia

Art. 535.- En la Sentencia, el tribunal deberá pronunciarse en primer lugar sobre los sub
motivos de forma, y sólo se pronunciará sobre los de fondo si aquellos fueran desestimados.

Iura novit curia

Art. 536.- El tribunal de casación está vinculado al fallar por los motivos invocados y en
razón de los argumentos jurídicos que hubiera presentado el recurrente; no obstante, dentro de
los anteriores, podrá resolver con aplicación de otras normas y fundamentos jurídicos que estime
pertinentes, aunque no coincidan con los del recurrente.

CÁMARA SEGUNDA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, Apelación, Referencia: 44-3°CM-11-A de fecha veintitrés de diciembre
de dos mil once.

“Así mismo la referida Sala, en sentencia con Referencia 176 C-2004, de las nueve
horas y quince minutos veintisiete de Abril de dos mil cinco, ha mencionado que
debe tenerse en cuenta, que los jueces al decidir los litigios, tienen en consideración
los Principios de derecho que expresan: *****Dabo mihi factum, dabo tibi ius*****
y ******iura novit curia*****, los cuales significan, el primero: “Dad los hechos,
que ellos dicen el derecho”, por el cual los jueces por la función que desempeñan,
juzgan los hechos a la luz de las normas aplicables; y, el segundo, “El juez conoce el
derecho”es un aforismo que significa que sin perjuicio de las normas jurídicas citadas
por las partes, en apoyo de sus pretensiones, el juez aplica la ley correspondiente.
De lo anterior podemos deducir fácilmente que no existe violación a la congruencia
en una sentencia cuando: 1) Se ha hecho un pronunciamiento expreso sobre todas
las pretensiones y aquélla debe darse en la parte dispositiva y no considerativa; 2)
Se falla conforme a lo pedido, pero se utilizan normas o figuras jurídicas diferentes
a las invocadas por las partes. Tampoco la hay, cuando se declara sin lugar o con
lugar en todos sus extremos una demanda; y 3) Lo fallado se encuentra dentro de la
pretensión general; tampoco se da cuando el juzgador difiere del demandante o del
demandado en la forma de apreciar la causa jurídica del reclamo.-”

Estimación del recurso

Art. 537.- Si se casare la sentencia en cuanto al fondo, se dictará la que en su lugar


corresponda.

Si se casare por vicio de forma, se anulará el fallo y se devolverá el proceso al tribunal


correspondiente, a fin de que se reponga la actuación desde el acto viciado; pero si el vicio se refiriera a
cuestiones relativas a la jurisdicción, competencia o vía procesal, sólo procederá la anulación.

Si la casación se fundare en errónea decisión respecto de la admisibilidad o la valoración de


la prueba y tal decisión determinare la parte dispositiva del fallo, el tribunal de casación deberá
pronunciarse en cuanto al fondo sobre la prueba que considere admisible o sobre la valoración
que entienda que corresponde; y sólo procederá devolver los autos al tribunal que cometió el vicio
cuando se considerare que la prueba no admitida es capaz de incidir en el fallo; y en tal caso
deberá procederse por dicho tribunal a su diligenciamiento.

367
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

Corrección de motivación jurídica

Art. 538.- El tribunal de casación desestimará el recurso cuando, no obstante existir error
en la fundamentación jurídica de la sentencia impugnada, por concurrir vicios o defectos que
produzcan la infracción o errónea aplicación de la norma de derecho utilizadas para resolver el
caso, se establezca que tal sentencia es correcta y ajustada a derecho conforme a otros fundamentos
y motivos jurídicos de derecho. En este caso, el tribunal de casación se limitará a corregir la
motivación, dándole al fallo la adecuada fundamentación jurídica.

Condena en costas

Art. 539.- Si se desestima el recurso se condenará en costas al recurrente.

TÍTULO QUINTO
REVISIÓN DE SentenciaS FIRMES

Competencia y resoluciones recurribles

Art. 540.- La revisión de Sentencias firmes se solicitará a la Sala de lo Civil de la Corte


Suprema de Justicia.

No procederá la revisión de las Sentencias firmes que, por disposición legal, carezcan de
efectos de cosa juzgada.

Motivos generales

Art. 541.- Habrá lugar a la revisión de una sentencia firme:


1°. Si, después de pronunciada, se recobraren u obtuvieren documentos decisivos, de los que
no se hubiera podido disponer por fuerza mayor o por obra de la parte en cuyo favor se
hubiese dictado la Sentencia.
2°. Si se hubiera pronunciado en virtud de documentos declarados falsos en proceso penal, o
cuya falsedad fuera declarada después.
3°. Si se hubiera pronunciado en virtud de prueba testifical o pericial y los testigos o peritos
hubieran sido condenados por falso testimonio dado en las declaraciones que sirvieron de
fundamento a la Sentencia.
4°. Si el caso se hubiera ganado injustamente por cohecho, violencia o fraude.

Motivos para la revisión de la sentencia dictada en rebeldía

Art. 542.- El demandado que hubiera permanecido en rebeldía podrá solicitar la revisión de la
Sentencia:
1°. Cuando concurra fuerza mayor ininterrumpida que le hubiese impedido comparecer en todo
momento, aunque hubiere tenido conocimiento del proceso, por habérsele comunicado.
2°. Cuando desconociera la demanda y el proceso, bien porque se le notificó por esquela
que no llegó a su poder por causa que no le sea imputable, bien porque la comunicación
se hubiera practicado por anuncios y el demandado hubiese estado ausente del lugar
del proceso o de cualquier otro de la República en que dicha notificación se hubiera
producido.

368
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

Legitimación activa

Art. 543.- Podrá solicitar la revisión quien hubiere sido parte perjudicada por la sentencia
firme impugnada.

Plazo general de interposición

Art. 544.- Se rechazará el recurso de revisión que se interponga después de transcurrido el


plazo de caducidad de dos años, contados desde el día siguiente al de la notificación de la sentencia
que se pretenda impugnar.

Plazos especiales de interposición

Art. 545.- Tampoco procederá la revisión cuando hubiera transcurrido el plazo de caducidad de
tres meses, contados desde el día siguiente a aquél en que se hubieran descubierto los documentos
decisivos, el cohecho, la violencia o el fraude, o en que se hubiese reconocido o declarado la falsedad.

Plazo de interposición para el demandado rebelde

Art. 546.- En el caso del demandado que hubiera permanecido en constante rebeldía, no
procederá la revisión una vez transcurrido el plazo de caducidad de tres meses contados desde el
día siguiente al de la notificación de la Sentencia.

Si la sentencia que se pretende impugnar fue notificada personalmente, el plazo de caducidad


será de treinta días, que se contarán a partir del día siguiente a aquél en que se notificó la sentencia
dictada en apelación o en el extraordinario de casación cuando procedan.

Los plazos previstos en el primer inciso podrán prolongarse si subsiste la fuerza mayor que
hubiera impedido al rebelde la comparecencia, pero sin que se sobrepase el plazo general de dos
años.

Demanda de revisión. Alegaciones de las demás partes

Art. 547.- El recurso de revisión se interpondrá por escrito, con los requisitos y formalidades
previstos para la demanda en el proceso común.

Admitido el recurso, la Sala de lo Civil solicitará que se le remitan todas las actuaciones del
proceso cuya sentencia se pretenda rescindir, y emplazará a cuantos en él hubieren litigado o a sus
causahabientes, para que dentro del plazo de cinco días manifiesten su defensa, sosteniendo lo que
a su derecho convenga, conforme a los requisitos y formalidades previstas en el proceso común.
Tramitación
Art. 548.- Presentadas las alegaciones de defensa, o transcurrido el plazo para ello sin haberlo
hecho, se dará a las actuaciones la tramitación establecida para el proceso abreviado. (2)
Si se suscitaren cuestiones prejudiciales penales durante la tramitación de la revisión, se
aplicarán las normas generales establecidas en el presente código.
Decisión. Recursos
Art. 549.- Si la Sala estimara procedente la revisión solicitada, lo declarará así, y rescindirá la
sentencia que se impugna. A continuación, mandará expedir certificación del fallo y devolverá el

369
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

expediente al tribunal del que proceda, para que las partes usen de su derecho según les convenga,
en el proceso correspondiente. En dicho proceso habrán de tomarse como base, sin que puedan ser
discutidas las declaraciones hechas en la sentencia de revisión.
Si se desestimare la revisión solicitada, se condenará en costas al recurrente.
Contra la sentencia que dicte el tribunal de revisión no habrá recurso alguno.
Eventual suspensión de la ejecución
Art. 550.- La interposición de un recurso de revisión no suspenderá la ejecución de las
Sentencias firmes que lo motive, salvo lo dispuesto en los casos de suspensión del proceso de
revisión y de las Sentencias dictadas en rebeldía.
LIBRO QUINTO
LA EJECUCIÓN FORZOSA

TITULO PRIMERO
DISPOSICIONES GENERALES

CAPÍTULO PRIMERO
PRINCIPIOS DE LA EJECUCIÓN FORZOSA
Acceso a la ejecución forzosa

Art. 551.- Consentida o dictada ejecutoria, en su caso, respecto de uno de los títulos que
lleva aparejada ejecución, y vencido el plazo que se hubiera otorgado para su cumplimiento, se
procederá a hacerla efectiva, a instancia de parte, de conformidad con las reglas que se establecen
en este código.

CÁMARA TERCERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, SAN SALVADOR, Apelación N°93-ECS-14 de Fecha: veinte de mayo
de dos mil catorce.
“El auto definitivo recurrido en lo pertinente resolvió: “CUMPLASE, otorgándosele
al demandado el plazo de 20 días para el cumplimiento voluntario de la misma,
posteriores a los cuales, en cumplimiento de lo ordenado. Le queda a salvo el
derecho a la parte interesada de iniciar la ejecución forzosa. Respecto de la solicitud
presentada por la licenciada SILVIA RAQUEL C.S., declárase NO HA LUGAR
LA EJECUCIÓN F., por no reunir los requisitos establecidos en el Art. 551 del
Código Procesal Civil y Mercantil. NOTIFÍQUESE.”El Art. 551 C.Pr.C.M., trata
sobre el derecho a hacer efectiva la sentencia firme o los restantes títulos que
traen aparejada ejecución y al respecto el autor René Alfonso P. y V. en su obra
“Comentarios al Código Procesal Civil y Mercantil, Tomo III, Editorial Jurídica
Salvadoreña, en la página 108, nos dice: “…esta norma dispone que la ejecución
dará inicio cuando la sentencia quede ejecutoriada y venza el plazo concedido
para su cumplimiento, ya que la regla general será los casos de las prestaciones
instantáneas (condenas de pagar, dar, hacer o no hacer), que son las más comunes;
pero también se presentan condenas que no son de ejecución inmediata, como en
el caso de prestaciones periódicas (utilidades, rentas, cánones, alimentos, etc.) o
cuyo vencimiento (según el título obligacional, las condiciones juzgadas, pacto

370
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

entre las partes, etc.) será en un momento posterior. En tales circunstancias, el plazo
comenzará a partir de que queda consentida o ejecutoriada y que, además, venza
el plazo que se hubiera otorgado para su cumplimiento o que el obligado caiga en
mora, si comenzó a darle cumplimiento.”Conforme a lo dicho, en los casos en que
el propio título de ejecución concede un plazo para el cumplimiento voluntario, éste
corre desde que la sentencia queda firme o ejecutoriada, y una vez vencido sin que
se cumpla, se habilita la ejecución forzosa a favor de la parte victoriosa, esto de
acuerdo al Art. 552 C.Pr.C.M., que establece que las Sentencias deben ejecutarse en
la forma y en los términos que en ella se consignen, para lo cual, la administración
deberá llevarlas a debido efecto y practicar lo que exija el cumplimiento de las
declaraciones contenidas en los fallos.”
CÁMARA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DE OCCIDENTE:
Sentencia Referencia INC-APEL-73-15-07-13 de dieciocho de julio de dos mil
trece.

“…LA EJECUCIÓN FORZOSA DE LA Sentencia: Una vez terminada la fase


declarativa, la ley facultad a un ejecutante o vencedor con Título de ejecución, exigir
el cumplimiento de su pretensión mediante la coercibilidad o imperium del Estado,
es decir en la vía jurisdiccional competente, frente a la actitud del ejecutado que no
cumplió en el tiempo señalado con la obligación impuesta en la sentencia dictada
por el juez en forma espontánea, se presenta en dicho evento para el demandante
la vía de la ejecución forzada para obtener la satisfacción de su derecho. Arts. 551,
552, 554, 561, 564, 570 del CPCM. En ese mismo orden de ideas, en el Código
Procesal Civil y Mercantil Comentado elaborado por el Consejo Nacional de la
Judicatura y la Escuela de Capacitación Judicial “Dr. Arturo Zeledon Castrillo”en
su página 633 y siguientes señala que “el objeto del proceso de ejecución
consiste, fundamentalmente, en modificar una situación de hecho existente a fin
de adecuarla a una situación jurídica resultante, sea de una declaración judicial
o de un reconocimiento consignado en un documento al que la ley le asigna fuerza
ejecutiva.”…”

Principio de completa satisfacción del ejecutante

Art. 552.- La ejecución forzosa se llevará a efecto en sus propios términos, y el ejecutante
tiene derecho a ser indemnizado por los daños y perjuicios sufridos en razón del incumplimiento,
sea a causa de dolo, negligencia, morosidad del ejecutado o cualquier contravención al tenor de la
obligación que se ejecuta.

La ejecución sólo terminará cuando el derecho del ejecutante haya quedado completamente
satisfecho.

CÁMARA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DE OCCIDENTE,


SANTA ANA, Apelación N° INC-APEL-113-18-10-13-2 de Fecha: veintidós de
octubre de dos mil trece.

“En segundo lugar, al no existir disposición legal alguna en el Código Procesal


Civil y Mercantil vigente, que ordene la suspensión de la ejecución forzosa
por el motivo de haberse interpuesto un Proceso de Amparo ante la Sala de lo

371
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

Constitucional de la Corte Suprema de Justicia, no es pertinente para el juez


tramitante, ni para ésta Cámara, acceder a la suspensión de la ejecución forzosa;
ya que el ordenar la suspensión del acto reclamado es de exclusiva competencia
de la Sala de lo Constitucional, ya que es ella quien decide admitir o no el Proceso
de Amparo interpuesto y consiguientemente determinar los efectos de suspensión o
no del acto reclamado. Arts. 19, 20, 21, 22, 23, 24, 25 de la Ley de Procedimientos
Constitucionales.”

Prescripción

Art. 553.- La pretensión de ejecución prescribe a los dos años de haber quedado firme la
sentencia o resolución, del acuerdo y transacción judicial aprobados y homologados, o del laudo
arbitral cuyo cumplimiento se pretenda.

CÁMARA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DE OCCIDENTE:


Sentencia APEL-53-2013-4 de fecha siete de mayo de dos mil trece.

“…La prescripción según el Art. 2231 C.C. Es: “La prescripción es un modo de
adquirir las cosas ajenas, o de extinguir las acciones y derechos ajenos, por haberse
poseído las cosas o no haberse ejercido dichas acciones y derechos durante cierto
lapso de tiempo, y concurriendo los demás requisitos legales.”a su vez, el Art. 2232
C.C. Establece: “El que quiera aprovecharse de la prescripción debe alegarla
el juez no puede declararla de oficio. El primer articulo citado, nos define lo que
es la prescripción, pero al mismo tiempo, nos establece dos formas o clases de
prescripción, como lo son la extintiva, por la cual se extingue un derecho ajeno, y la
adquisitiva por la cual se adquiere o se gana un derecho ajeno; éstas clases o formas
de prescripción se desarrollan ampliamente en los Arts. 2237 y 2253 C.C., y aunque
en algunos casos convergen ambas formas, pues cuando se extingue un derecho para
un titular, se adquiere respecto a otra persona, en el caso de las acciones judiciales
solo opera en un sentido. El segundo articulo, nos establece quien puede hacer uso
de este derecho y la prohibición expresa de que el juez no puede declararla de oficio.
Toma especial consideración para el sublite la prescripción extintiva, pues es de la
que trata el Art. 553 CPCM; sobre esta clase, nuestros antecedentes doctrinarios
han establecido: “La prescripción extintiva o liberatoria, se denomina así porque
el deudor se libra de la obligación, representando la extinción del derecho de
exigibilidad de la obligación, que nació a la vida, pero se extinguió, siendo un
modo de extinguir obligaciones al tenor del articulo 1438 Ord. 9° del Código civil,
operando principalmente como castigo o sanción a la desidia de los que actúan
como acreedores; cuando se ejercita como excepción dentro del proceso se presenta
generalmente como excepción perentoria, por lo que puede oponerse en cualquier
estado; con relación a las acciones judiciales es de aclarar que no es específicamente
la acción judicial la que prescribe, sino lo que en realidad prescribe es la exigibilidad
de la obligación o del derecho, según el caso, por lo que, se sostiene que no procede
declarar prescrita la obligación misma, pues conforme a los artículos 1341 y 1342
ambos del Código Civil, la obligación se volvería natural. Legal y doctrinariamente,
para que proceda la prescripción extintiva se requiere no solo que exista un derecho
que pueda ejercitarse, sino además: a) que la acción ( pretensión) sea prescriptible,
b) Que sea alegada, c) Que haya transcurrido el termino fijado por la ley, d) que no

372
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

se haya interrumpido, y e) Que no esté suspendida. La prescripción es un término


que pertenece al Derecho Civil, lo cual también es reconocido por la legislación
mercantil....”Líneas y

criterios jurisprudenciales de Cámaras de segunda instancia, 2000-2003, pág. 136.


De lo antes expuesto, pueden concluirse lo siguiente: a) Que la ley y la doctrina
han establecido quien puede alegar la prescripción: “las partes”; esto queda
suficientemente claro en la frase: “quien quiera aprovecharse de ella”....; en el
sublite, es obvio que “es el deudor”que pretenda liberarse de la obligación que tiene
para con su acreedor. b) Que el juez, no puede declarar en ningún caso de oficio la
prescripción; esto es, porque a él no le representa ningún provecho y porque no es
un derecho del que el pueda disponer. Y c) Que la prescripción, sea cual sea la ley
que se remita a ella, es una institución que pertenece al Derecho Civil…”

CAPÍTULO SEGUNDO
TÍTULOS DE EJECUCIÓN

Títulos de ejecución nacionales

Art. 554.- Para que la ejecución forzosa tenga lugar, a fin de garantizar el resultado de un
proceso, dar efectividad a la protección jurisdiccional otorgada en el proceso declarativo, se
necesita un título que la lleve aparejada.

Son títulos de ejecución:


1°. Las Sentencias judiciales firmes.
2°. Los laudos arbitrales firmes.
3°. Los acuerdos y transacciones judiciales aprobados y homologados por el juez o tribunal.
4°. Las multas procesales.
5°. Las planillas de costas judiciales, visadas por el juez respectivo, contra la parte que las
ha causado, y también contra la contraria, si se presentaren en unión de la sentencia
ejecutoriada que la condena al pago.

6°. Cualesquiera otras resoluciones judiciales que, conforme a este código u otras leyes,
lleven aparejada ejecución.

CÁMARA SEGUNDA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, SAN SALVADOR, Apelación N°2-2MC-14-A de Fecha: once de abril
de dos mil catorce.

“Del concepto anterior podemos concluir que los presupuestos de la ejecución


forzosa son: a) la falta de cumplimiento voluntario del obligado, b) la existencia de
un título de ejecución, y c) la iniciativa de parte, es decir, que no puede ser iniciada
de oficio, sólo a petición de parte.

El proceso de ejecución forzosa actualmente se encuentra regulado en el libro quinto


del Código Procesal Civil y Mercantil, el cual no puede iniciarse sino contiene un
titulo de ejecución de los enumerados en el Art. 554 del CPCM.

373
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

Requisito sin el cual no debe iniciar un proceso de ejecución forzosa, ya que el título
constituye un presupuesto primordial de la ejecución forzosa, en virtud del precepto
nulla executio sine titulo, es decir, sin el título no se puede promover la ejecución, y
sólo la ley puede determinar qué documentos tienen esa calidad.

Por lo que, en el caso de marras no habiéndose tramitado primeramente un proceso


cognoscitivo del cual naciera una sentencia de condena, no puede pretenderse
ejecutar una obligación constituida en un contrato de arrendamiento con promesa
de venta, ya que éste no constituye un título de ejecución de los enumerados en el
Art. 554 CPCM.

Tampoco puede interpretarse aisladamente el Art. 686 CPCM, sino que debe
realizarse una interpretación sistemática, tomando en cuenta que dicha disposición
jurídica se encuentra dentro del libro quinto de las ejecuciones forzosas, en
consecuencia, es aplicable una vez haya título de ejecución a consecuencia de
sentencia declarativa de condena.

Por tanto, dicho artículo se refiere únicamente a la forma en la que los jueces
procederán a llevar a cabo el proceso de ejecución forzosa cuando la obligación
sea de aquellas de efectuar declaraciones de voluntad, no debe entenderse que
dicha disposición jurídica otorga a las partes la facultad de iniciar de una forma
directa el proceso de ejecución forzosa sin haber tramitado previamente un proceso
cognoscitivo, como erróneamente lo ha interpretado la parte apelante; debiendo
desestimarse dicho agravio.”

Títulos de ejecución extranjeros

Art. 555.- También son títulos de ejecución las Sentencias y otras resoluciones judiciales
extranjeras que pongan fin a un proceso, y los laudos arbitrales extranjeros reconocidos en El
Salvador. Dichos títulos tendrán fuerza ejecutoria en los términos que indiquen los tratados
internacionales multilaterales, las normas de cooperación jurídica internacional o los tratados
celebrados con el país del que provengan los títulos de ejecución.

Una vez reconocido un título de ejecución extranjero, se procederá a darle cumplimiento


conforme a las normas de ejecución forzosa contenidas en este código, salvo que los tratados
internacionales dispongan otra cosa.

Reconocimiento de títulos extranjeros a falta de tratados internacionales

Art. 556.- Cuando no hubiere tratados o normas internacionales aplicables al reconocimiento


de un título extranjero como título de ejecución en El Salvador, dicho reconocimiento se podrá
producir si concurren al menos los siguientes requisitos:
1°. Que la Sentencia, con autoridad de cosa juzgada en el Estado en que se ha pronunciado,
emane del tribunal competente según las normas salvadoreñas de jurisdicción
internacional.
2°. Que la parte demandada, contra la que se pretende realizar la ejecución, hubiese sido
legalmente emplazada, aunque fuera declarada rebelde, siempre que se le hubiera
garantizado la posibilidad de ejercer su defensa y que se le hubiese notificado legalmente
la resolución.

374
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

3°. Que la sentencia reúna los elementos necesarios para ser considerada como tal en el lugar
donde se dictó, así como las condiciones de autenticidad exigidas por la ley nacional.
4°. Que la sentencia no afecte los principios constitucionales o de orden público del derecho
salvadoreño, y que el cumplimiento de la obligación que contenga sea lícito en El
Salvador.
5°. Que no exista en El Salvador un proceso en trámite, ni una sentencia ejecutoriada por un
tribunal salvadoreño que produzca cosa juzgada.

Competencia para el reconocimiento

Art. 557.- Para el reconocimiento de las Sentencias, otras resoluciones judiciales y laudos
arbitrales procedentes del extranjero será competente la Sala de lo Civil de la Corte Suprema de
Justicia. (2)

Procedimiento de reconocimiento de títulos extranjeros

Art. 558.- El reconocimiento deberá ser pedido por la parte a la que le interese, mediante
solicitud escrita presentada ante la Corte Suprema de Justicia. De esta solicitud se dará audiencia
a la parte contraria, emplazándola ante la Corte, para que pueda formular alegaciones sobre los
requisitos establecidos para que proceda el reconocimiento de títulos extranjeros a falta de tratados
internacionales, y proponer pruebas en el plazo de diez días.

Cuando no se hubieran formulado alegaciones, o no se practicara prueba, la Corte dictará


sentencia haciendo reconocimiento de la resolución extranjera y otorgándole plenos efectos, o
denegando dicho reconocimiento, en el plazo de diez días, con devolución de la ejecutoria a quien
hubiera promovido el procedimiento.

Si se hubiera propuesto prueba útil y pertinente, se ordenará su práctica en audiencia, que


deberá celebrarse en un plazo que no pase de veinte días, y concluida la cual se dictará sentencia
en los términos del inciso anterior.

Contra las Sentencias de la Corte no procederá recurso alguno.

CORTE SUPREMA DE JUSTICIA EN CORTE PLENA, Sentencia Referencia


81-P-2013 de fecha treinta de junio de dos mil quince.

“Respecto de la solicitud de revocatoria, debemos ser precisos en determinar que


la resolución recurrida, declaró improcedente la petición de exequátur, por razones
de fondo, que más adelante se relacionarán en atención directa a los argumentos
contenidos en la impugnación.

Por el momento, analizaremos la legalidad del recurso interpuesto. En primer


lugar, haremos mención breve de la estructura del trámite procesal del exequátur
con arreglo al Art. 558 CPCM: éste se inicia a petición de parte, si fuere admitida
se emplazará a la parte contraria ante la Corte, debiendo comparecer en el plazo
de diez días a manifestar si aquélla reúne los requisitos establecidos en el Art.
556 CPCM para que proceda el reconocimiento del título extranjero. Se advierte
que dicha regulación es omisa en varios aspectos, a vía de ejemplo: la normativa
no indica los requisitos de forma que la petición debe reunir ni tampoco el plazo
para admitirla, tampoco se refiere a los tipos de rechazo, liminares o en un estadio

375
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

más avanzado del desarrollo del pariatis, en el mismo sentido se explica que no
se especifiquen los recursos permitidos contra las decisiones que se emitan en
los distintos escenarios del trámite. Esta falta de precisión puede ser superada y
convoca al aplicador a que interprete o integre, según el caso, las demás normas del
CPCM y principios del Derecho.”

“En segundo lugar, tratándose de los recursos, el Art. 558, inciso final reza: “Contra
las Sentencias de la Corte no procederá recurso alguno”(sic). Esta disposición
no detalla a qué se refiere con el vocablo “Sentencias”. Sin embargo, damos por
entendido que la sentencia que reconoce la validez del título extranjero no puede
ser recurrida, esta tiene todo el carácter de ser “definitiva”, lo que lleva razón
porque el tribunal ha examinado el mérito de los requisitos de forma y de fondo
de la pretensión de exequátur, debiéndose dar por cerrado el debate mediante una
decisión firme que procure certeza a los interesados.

Pero no es del todo diáfano saber si, como en el presente caso, una decisión que
rechaza la petición emitida liminarmente y que le pone fin al proceso por razones
de fondo puede ser revocada. Siguiendo una interpretación meramente literal de la
expresión: “las Sentencias”acuñada por el Art. 558 CPCM se evoca una pluralidad
de pronunciamientos lo que pudiera dar lugar a considerar que existe otro tipo de
sentencia además de la que reconoce la validez del título y no podría ser otra más
que la que rechaza la petición habiéndose sustanciado todo el trámite. En este punto
debemos descartar el rechazo por falta de requisitos de forma y el motivado por falta
de presentación de una documentación que puede ser presentada posteriormente,
v.gr. certificación de partida de matrimonio. Contra esa inadmisibilidad de forma
opera el recurso de revocatoria, a esa conclusión llegamos con arreglo a la analogía
del Art. 503 en relación al 513 CPCM que permite la revocatoria contra la decisión
que declara inadmisible el recurso de apelación, también la inadmisibilidad de la
demanda que da lugar al proceso común puede ser revocada, Art. 278, inciso final
CPCM.

Todavía resta por discernir si el rechazo por improcedencia de la petición del


pariatis por razones de fondo puede ser impugnado vía revocatoria, tal como se ha
pedido en este caso: como venimos argumentando en relación al Art. 558 CPCM
y la expresión: “Sentencias”, cuando el tribunal reconoce el mérito por razones
de fondo, que implica la confrontación de la petición con el ordenamiento jurídico
nacional, implica que ha decidido.

En sentido parecido, cuando se ha rechazado la petición por razones de fondo,


porque autorizarla contravendría frontalmente nuestro orden público o normativa de
estricto cumplimiento, el tribunal pronuncia una resolución que decide la cuestión,
aunque formalmente se presente como un auto (definitivo, Art. 212, Inc. 2 CPCM)
resultado de un trámite no acabado a diferencia de la sentencia que reconoce el
título extranjero. Llegar a una decisión judicial implica que hubo un análisis
exhaustivo del asunto y que la deliberación está concluida. Además, por el principio
de economía procesal el legislador decide abrir o cerrar la oportunidad de recurrir
según el tipo de decisión evitando que el litigio se vuelva interminable.

376
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

Sin embargo, consideramos que debe conferirse el derecho a recurrir tratándose de


un rechazo de un pariatis por razones de fondo, esto es, por las mismas causales
que vuelven improponible una pretensión habiéndose emitido sin trámite completo,
Art. 277 CPCM. No lo hubo porque se rechazó la petición de forma inmediata a
su presentación. No aceptar un recurso volvería nugatorio el derecho a recurrir
como derecho humano. Siendo que la Corte es la única competente para decidir
los pariatis y es la última entidad dentro de la estructura del Órgano Judicial
para decidir asuntos judiciales ordinarios lleva a que un rechazo de este tipo solo
pueda ser controvertido ante el mismo tribunal. De no admitirse la procedencia de
un recurso no existiría ninguna posibilidad para ejercitar el derecho a impugnar.
En ese sentido, creemos que la Corte como parte del Estado de El Salvador, está
en la obligación de cumplir el deber de garantizar el debido proceso. El Art. 2 del
Pacto de San José contiene este deber de garantía, es decir, de estructurar todos los
mecanismos estatales y legales para asegurar un derecho humano, Arts. 8, 2, lit. h) y
25, 2, lit. a) Pacto de San José. 2”

Títulos no ejecutables

Art. 559.- No se dará curso a ninguna solicitud de ejecución forzosa respecto de las Sentencias
de mera declaración o de las Sentencias constitutivas, sin perjuicio de que se inscriban o anoten
en registros públicos cuando por su contenido lo requieran, sin necesidad de abrir la ejecución
forzosa.

No obstante lo anterior, cuando estas Sentencias contuvieran pronunciamientos de condena


podrá solicitarle la ejecución forzosa de los mismos.

CÁMARA SEGUNDA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, SAN SALVADOR, Apelación N°71-3CM-12-A de Fecha: diez de enero
de dos mil trece.

“La parte apelante ha manifestado su inconformidad con la resolución del Juez A


Quo, por considerar que ha realizado una errónea interpretación del Art. 559 del
Código Procesal Civil y Mercantil, ya que en dicho artículo se menciona que no se
dará curso a ninguna solicitud de ejecución forzosa respecto de las Sentencias de
mera declaración, no especificando que se refiere a declaraciones de Obligación, si
no simplemente a otras declaraciones.
La regulación de la ejecución forzosa en el nuevo Código Procesal Civil y Mercantil
(CPCM), se fundamenta principalmente en la Ley de Enjuiciamiento Civil Española,
y dentro de las características más relevantes del nuevo modelo de ejecución, se
encuentran las siguientes: enumeración de los títulos de ejecución, distinguiéndolos
de los títulos ejecutivos, la regulación de la oposición del ejecutado, la ejecución
provisional, entre otros.
Debido a ello es importante distinguir el título de ejecución y el título ejecutivo,
conceptos que en algunos sistemas legales tienen un mismo significado, en la
medida que la ejecución de la sentencia se realiza mediante el juicio ejecutivo, la
cual comprende la ejecución de títulos judiciales, (como lo son las Sentencias) y
títulos extrajudiciales (por ejemplo: los títulos valores). Lo cual sucedía con nuestro

377
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

Código de Procedimientos Civiles derogado, el cual en su Art. 587 Ord. 4° que


establecía: “““Los instrumentos que traen aparejada ejecución pertenecen a cuatro
clases, a saber:… 4ª La Sentencia…”””Sin embargo, en el nuevo Código Procesal
Civil y Mercantil, el proceso ejecutivo se concibe como un proceso especial, diverso
del trámite previsto para la ejecución forzosa; de modo que los títulos ejecutivos,
previstos en el Art. 457, dan lugar al proceso ejecutivo, y los títulos de ejecución,
previstos en los artículos 554 y 555, dan lugar a la ejecución forzosa.Al respecto el
Art. 554 establece: “““Para que la ejecución forzosa tenga lugar, a fin de garantizar
el resultado de un proceso, dar efectividad a la protección jurisdiccional otorgada
en el proceso declarativo, se necesita un título que la lleve aparejada.
Son títulos de ejecución:
1°. Las Sentencias judiciales firmes...”””
Así mismo el Art. 559 del CPCM, prescribe: “No se dará curso a ninguna solicitud de
ejecución forzosa respecto de las Sentencias de mera declaración o de las Sentencias
constitutivas, sin perjuicio de que se inscriban o anoten en registros públicos cuando
por su contenido lo requieran, sin necesidad de abrir la ejecución forzosa.
No obstante lo anterior, cuando estas Sentencias contuvieran pronunciamientos de
condena podrá solicitarse la ejecución forzosa de los mismos.”[...].
De lo anterior se deduce que la ejecución forzosa se limita a las Sentencias de
condena, es decir, aquellas que contienen una obligación de pagar una suma de
dinero líquida y exigible, o una obligación de hacer, no hacer algo, o dar cosa
distinta del dinero; las Sentencias meramente declarativas y las constitutivas, no
requieren de una actividad posterior de ejecución, en el sentido de procedimiento
coercitivo dirigido contra el deudor, sin perjuicio de eventuales actos de ejecución
en un sentido amplio, como sería el registro o la anotación de la Sentencia; y es así
porque las Sentencias meramente declarativas pueden ser reconocidas, pero jamás
ejecutadas, y respecto a las Sentencias constitutivas, pueden ser reconocidas, pero no
son aptas para ser ejecutadas, porque se auto ejecutan por su mero pronunciamiento.
Teniendo claro qué tipos de Sentencias constituyen “títulos de ejecución”, es
importante analizar si la sentencia definitiva presentada es un título de ejecución o
no, de conformidad a los Arts. 554 Ord. 1° y 559 del CPCM.

La sentencia definitiva con la cual se pretende iniciar el presente proceso de


ejecución forzosa, fue pronunciada por el Juez Suplente del Juzgado Tercero de lo
Civil y Mercantil de esta ciudad, a las quince horas y cincuenta minutos del día seis
de mayo de dos mil once, dentro del Proceso Declarativo Común de Existencia de
Obligación, clasificado bajo el número […], en la cual se pronuncio el siguiente
fallo: “““Se estima parcialmente la demanda presentada por el [demandante],
a través de su apoderada […], contra la sociedad demandada MUEBLES E
INMUEBLES, SOCIEDAD ANÓNIMA DE CAPITAL VARIABLE, en consecuencia:
DECLARASE LA EXISTENCIA DE LA OBLIGACIÓN a favor del [demandante]
estando en deberle la sociedad

378
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

MUEBLES E INMUEBLES la cantidad total de capital de CUARENTA MIL SESENTA


Y SEIS DÓLARES CON CINCO CENTAVOS DE DÓLAR DE LOS ESTADOS
UNIDOS DE AMÉRICA, los cuales constituyen la suma de las obligaciones supra
detalladas en concepto de capital, más los intereses legales del DOCE POR CIENTO
ANUAL, calculados a partir de julio de dos mil ocho.”””

Del fallo anterior se advierte que la sentencia definitiva presentada, es una sentencia
declarativa de existencia de obligación, la cual contiene una condena tácita para la
parte demandada, ya que en el fallo se ha establecido la existencia de la obligación,
así como la cantidad que está en deberle la sociedad [...] al [demandante], así
como el tipo de interés que debía ser pagado y la fecha a partir de la cual corrían
los mismos, es decir, que dicha sentencia contiene un mandato dirigido al deudor
de pagar una suma de dinero, y no es una sentencia meramente declarativa como
lo sería, una sentencia que declara la nulidad de un instrumento público, o la
declaratoria de prescripción de una obligación.

Así mismo consta agregado […] del proceso de ejecución forzosa, certificación del
auto definitivo pronunciado en las diligencias de establecimiento de plazo judicial
de pago, tramitadas por el Juez 1 del Juzgado Quinto de lo Civil y Mercantil de esta
ciudad, a las catorce horas con cuarenta minutos del día quince de octubre del año
dos mil doce; dentro del cual se hace constar que de conformidad al Art. 1365 Inc.
2° del Código Civil, dicho juzgado estableció un plazo judicial de veinte días hábiles
para que la sociedad [...] le pagara al [demandante] la obligación derivada de la
sentencia pronunciada por el Juzgado Tercero de lo Civil y Mercantil de esta ciudad,
en el proceso común […], el cual no se cumplió, por tanto, dicho juzgador tuvo por
vencido el plazo citado a partir del día veintidós de septiembre de dos mil doce,
fecha en la cual la sociedad citada se constituyó en mora en el cumplimiento de la
obligación relacionada.

Por tanto, en el caso sub judice existe una sentencia firme que constituye un titulo
de ejecución, por ser una sentencia declarativa de condena; dentro de la cual se
ha establecido la existencia de la obligación, la cantidad e intereses adeudados,
así como la fecha a partir de la cual se deben calcular dichos intereses legales; y
con el auto definitivo pronunciado por el Juzgado Quinto de lo Civil y Mercantil
de esta ciudad se ha establecido a partir de qué día inició la mora en el pago de la
obligación de la sociedad [...], en consecuencia, existe una deuda líquida y exigible
y es procedente admitir la ejecución forzosa solicitada por la parte apelante, por ser
éste el proceso señalado actualmente por la ley, y no un proceso ejecutivo como lo
señaló el Juez A Quo.”

Límites de la actividad de ejecución

Art. 560.- El título de ejecución determina los límites de la actividad para darle cumplimiento,
y por consiguiente son nulas las actuaciones de ejecución forzosa que se extiendan a cuestiones
sustanciales que no hubieran sido decididas en el proceso correspondiente o que contradigan el
contenido del título.

Dicha nulidad se podrá alegar en los recursos de revocatoria y de Apelación que se


interpusieren contra la actividad ejecutiva específica.

379
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

CAPÍTULO TERCERO
COMPETENCIA

Competencia para la ejecución de títulos acionales

Art. 561.- La competencia para conocer de la ejecución forzosa de la sentencia corresponde al


juez que la hubiese dictado en primera instancia, independientemente de cual sea el tribunal que la
declaró firme. Para tales efectos, el tribunal que hubiera dictado ejecutoria en segunda instancia o
casación devolverá el expediente al inferior, dentro de los tres días siguientes al de la notificación
con certificación de la ejecutoria, haciéndolo saber a las partes.

La competencia para conocer de la ejecución de los acuerdos y transacciones judiciales


debidamente aprobados y homologados le corresponderá al juez ante el que se hubiere producido
el acuerdo o transacción. Cuando los acuerdos o transacciones se den en segunda instancia o
en casación, serán ejecutados por el juez que conoció en primera, a cuyo efecto se devolverá
el expediente al inferior, con certificación del acuerdo o transacción y de su aprobación u
homologación. (2)

Para la ejecución de los laudos arbitrales será competente el Juez de Primera Instancia que
debió conocer de la controversia si no hubiera habido arbitraje. (2)

La ejecución de otras resoluciones judiciales que legalmente tengan la categoría de títulos


de ejecución será competencia del juez que las hubiera dictado, salvo lo dispuesto en caso de
conciliación.

CÁMARA PRIMERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, SAN SALVADOR, Apelación N°31-11CM1-2013 de Fecha: veintiocho
de mayo de dos mil trece.

“La Jueza A Quo, considera que en virtud que el último árbitro, tomó posesión de su
cargo cuando aún no había entrado en vigencia el Código Procesal Civil y Mercantil,
en razón del principio de jurisdicción perpetua, no puede darle trámite a la solicitud
de ejecución forzosa del laudo arbitral, ya que al haberse establecido que el mismo
debía tramitarse de conformidad a las reglas del Código de Procedimientos Civiles,
es en base a estas mismas disposiciones que debe procederse su ejecución forzosa.
3.6. Cuando se plantea un problema de intereses se piensa, generalmente, que debe
ser resuelto por una tercera persona imparcial, llamada juez, siendo ésta la solución
que se da a los conflictos en las sociedades modernas. El recurrir a la justicia
estatal pareciera ser el camino indicado. Sin embargo, esto no es siempre así. Una
importante cantidad de casos, son sustraídos de la órbita estatal para ser derivados
hacia el arbitraje privado, eligiendo las partes no sólo al juzgador, sino también los
procedimientos aplicables y muchas veces, hasta el monto en que se ejecuta el laudo.
Esta facultad no admite ser discutida, siendo diversos los motivos que legitiman el
derecho de renunciar a la jurisdicción estatal y someterse al mismo. El arbitraje es
una jurisdicción especial, admitida como alternativa al ejercicio de la jurisdicción a
través de los órganos del propio Estado, tanto en el orden interno como en el orden
internacional. Se trata de un desplazamiento de la función jurisdiccional, en su etapa
introductoria y decisoria, desde el Estado hacia ciertos particulares. El principal
fundamento del mismo radica en la facultad que tienen las partes de renunciar

380
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

a un derecho que les asiste, como es el de acudir a la justicia del Estado cuando
creen vulnerados sus derechos. Esta potestad de renunciar a derechos subjetivos
privados, que es admisible dentro de ciertos límites, es su principal fundamento.
3.7. El proceso arbitral, finaliza con el pronunciamiento del veredicto final dentro
de un marco legal, acatando previamente tal jurisdicción, a que arriba este tipo de
tribunal, después de conocer los argumentos expuestos y diligenciar las pruebas por
las partes, el cual debe emitirse por escrito y razonadamente con mérito ejecutivo
universalmente reconocido, como si fuera una sentencia judicial, el que se denomina
Laudo. Este es emitido por un tribunal que carece de fuerza para hacerlo cumplir de
manera coactiva y ante el incumplimiento de quien está obligado por la decisión de
los árbitros, el interesado recurre a la fuerza del Estado para hacer cumplir lo que
se juzgó y se decidió en dicho procedimiento, ya que los mismos, tienen la facultad
de juzgar, más no de ejecutar lo juzgado. 3.8. De lo expuesto, puede colegirse que el
proceso de ejecución forzosa del laudo que nos ocupa, no es un trámite del proceso
arbitral, como quiere hacerlo ver la Jueza A Quo, quien manifestó que la solicitud
realizada por los apoderados de la parte ejecutante, debía tramitarse de conformidad
a lo prescrito por el Código de Procedimientos Civiles, ya que el arbitraje se tramitó
con tal legislación, que era la vigente al momento de iniciar ese tipo de proceso;
pues esta Cámara estima que en el caso que la ejecución forzosa, tenga su origen o
proviene de una resolución extrajudicial, como la de un laudo arbitral firme, la parte
que se ve afectada por el incumplimiento del mismo, acude a la normativa actual
para poder hacer cumplir de manera coercitiva, dicha decisión, lo que constituye un
proceso que ya no tiene nada que ver con el trámite del proceso arbitral finalizado, y
por ende, debe tramitarse de conformidad al derecho positivo que se encuentre vigente al
momento de iniciarse; en consecuencia, lo resuelto por la juzgadora en el auto definitivo
apelado, no es compartido por este Tribunal, ya que no tiene aplicación lo dispuesto en el
Art. 706 CPCM., y lo establecido en el Inc. 3° del Art. 561 CPCM., se refiere al juez que
en ese momento tiene capacidad jurisdiccional, pues la competencia de los anteriores
jueces de lo mercantil, se limitó a terminar con los procesos que se habían iniciado
ante ellos. Por otra parte se observa que la operadora de justicia vulneró lo estipulado
en el inc. 1° del Art. 563 CPCM., por la razón que después de despachar la ejecución,
examinó de oficio nuevamente su competencia. 4. CONCLUSIÓN. Por lo expresado esta
Cámara concluye, que en el caso que se juzga la parte victoriosa tiene el derecho a que se
cumpla de manera forzosa el laudo arbitral firme que no fue cumplido voluntariamente,
aplicando las disposiciones legales concernientes al proceso de la ejecución forzosa del
Código Procesal Civil y Mercantil, en virtud que es la normativa positiva vigente que
permite el cumplimiento de lo ordenado en la resolución extrajudicial; por lo que la
Jueza A Quo, no carece de competencia funcional para conocer en el referido proceso.
Consecuentemente, es procedente revocar el auto definitivo impugnado, por no haberse
pronunciado conforme a derecho, y ordenarle a la mencionada juzgadora, que continúe
con el trámite de ley respectivo.”

Competencia para la ejecución de títulos extranjeros

Art. 562.- Para la ejecución de los títulos extranjeros reconocidos tendrá competencia el
juzgado de primera instancia del domicilio del ejecutado o, si éste no residiere en la República, los
de primera instancia del lugar en que se encuentre la cosa que deba entregarse, o el que designe el
ejecutante por encontrarse en ese lugar los bienes que hubieran de ser embargados.

381
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

Examen de oficio de la competencia

Art. 563.- El juez ante quien se inste la ejecución deberá examinar de oficio su propia
competencia antes de despachar la ejecución. Una vez despachada ésta, no podrá ya proceder al
examen de oficio de su competencia. Cuando aprecie la falta de competencia territorial deberá
dictar auto absteniéndose de continuar con la ejecución y señalando al competente al que deberá
dirigirse.

El auto por el que el juez se abstiene de continuar con la ejecución será recurrible en Apelación.

CAPÍTULO CUARTO
LAS PARTES EN LA EJECUCIÓN

Partes en la ejecución

Art. 564.- Será parte legítima en la ejecución forzosa el que la pide y también aquél contra el
que se ordena, que habrá de ser el que figure en el título como obligado al cumplimiento.

CÁMARA SEGUNDA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, SAN SALVADOR Sentencia N°60-4CM-13-A Fecha: veintitrés de
enero de dos mil catorce.
“De la lectura de lo expuesto en los párrafos anteriores, así como de lo expuesto en
el citado artículo 579 CPCM se advierte, que el momento procesal oportuno para
que el garante hipotecario pueda comparecer al proceso, es dentro de los cinco días
que siguen a la notificación del auto que despacha la ejecución, así como del auto
que ordena se haga del conocimiento del garante hipotecario la ejecución forzosa en
trámite.”
De la lectura de los autos que conforman la pieza principal se advierte, que a
folios […] de la misma corre agregado el auto proveído a las diez horas del día
veintiuno de agosto del año dos mil doce, en el cual, el Juez A Quo ordenó que
se notificara al señor […], en su calidad de GARANTE HIPOTECARIO DE LA
OBLIGACIÓN, (el subrayado es nuestro), a fin de que compareciera al juzgado
“A ESTAR A DERECHO”, expresión que, si bien es cierto no dice de manera
sacramental “QUE SE RECONVIENE EN PAGO AL GARANTE”, no significa que
el Juez A Quo no lo haya reconvenido en pago, salvaguardando en debida forma los
derechos de defensa, audiencia y debido proceso del garante hipotecario, ya que,
la frase “estar a derecho”significa que debe comparecer al proceso a hacer uso de
todos los derechos que la ley le confiere, los cuales, tal y como se expuso en líneas
anteriores son, la oportunidad de pagar la obligación reclamada para salvar su
inmueble y subrogarse en los derechos que le correspondían al ejecutante original, o
bien, comparecer al proceso y alegar los motivos de oposición que tuviese respecto
a la ejecución, no existiendo otros motivos por los cuales un juez pueda mandar a
llamar a un garante hipotecario a comparecer a un proceso de ejecución forzosa, ya
que mediante un contrato ha garantizado el cumplimiento de la obligación con un
inmueble, que responderá en caso de incumplimiento.
Lo anterior debido a que, la persona que firma una obligación en calidad de
garante hipotecario, sabe perfectamente que lo hace para garantizar con sus

382
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

bienes inmuebles el no pago de una obligación contraída por cuenta ajena, por lo
que ni su abogado procurador ni el garante hipotecario como tal, pueden alegar
el desconocimiento de tal situación, ya que de conformidad al artículo 8 del
Código Civil, nadie puede alegar ignorancia de la ley; y además, debido a que, de
conformidad a lo expuesto en el artículo 18 del Código Procesal Civil y Mercantil,
el Juez A Quo debe evitar los ritualismos y las interpretaciones que supediten la
eficacia del derecho a aspectos meramente formales, por lo que exigir al juez que
utilice la frase “RECONVÉNGASE EN PAGO A”, es estar exigiendo el cumplimiento
de formalidades innecesarias dentro del proceso, cuando lo importante es que en
el momento procesal oportuno se haga del conocimiento del garante hipotecario,
la existencia del proceso por el que se ejecutará el bien inmueble que haya dado
en garantía, lo cual sí ocurrió en el caso que nos ocupa, pues el señor […] fue
debidamente notificado del auto que despachaba la ejecución, configurándosele con
ello la oportunidad de comparecer al proceso y ejercer su defensa, interponiendo los
recursos que considerara pertinentes, como la Apelación que nos ocupa.

En ese sentido, consideran los Magistrados que en este caso no ha habido una omisión
procesal, como lo ha querido hacer ver el abogado apelante, por lo que al no existir
violación alguna a los derechos de defensa y audiencia del garante hipotecario, este
tribunal considera procedente desestimar este agravio, procediéndose entonces, a
analizar el resto de los agravios expuestos por el abogado apelante.”

En cuanto a los agravios expuestos en los literales a) y b) del numeral 4.1.-, de los
considerandos de la presente Sentencia, puede decirse lo siguiente:

Según lo dispone el artículo 579 del Código Procesal Civil y Mercantil, si el


ejecutado compareciere dentro de los cinco días siguientes al de la notificación del
despacho de la ejecución, podrá formular, mediante escrito, oposición a la ejecución,
por falta de carácter o calidad del ejecutante o del ejecutado, o de representación de
los mismos; por falta de requisitos legales en el título; por el pago o cumplimiento
de la obligación, justificado documentalmente; por haber prescrito la pretensión de
ejecución; o por la transacción o acuerdo de las partes que consten en instrumento
público.

Advirtiendo esta Cámara, que los agravios de que se habla se refieren a la


prescripción de la acción ejecutiva cuya sentencia firme ha dado mérito al proceso
que nos ocupa, así como a defectos alegados respecto del contrato bancario base de
la referida acción ejecutiva, se concluye que tales agravios no se refieren al proceso
de ejecución forzosa que nos ocupa, ni se refieren a los motivos de oposición que
la ley permite alegar en esta etapa procesal, sino que se refieren a motivos que
únicamente pueden ser alegados en la etapa de contestación de la demanda de un
proceso ejecutivo, siendo evidente que dicha etapa procesal ha concluido ya, por lo
que no es posible entrar a conocer de los mismos.

Lo anterior sin mencionar, que al tratarse de situaciones ocurridas en un juicio ya


fenecido, por mandato constitucional este tribunal carece de facultades para entrar
a conocer de las mismas, (Art. 17 inciso 1° Cn.), por lo que tales agravios deben ser
desestimados.”

383
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

En cuanto al agravio expuesto en el literal c) del numeral 4.1.- de la presente


Sentencia, respecto a que el título base de la presente ejecución carece de requisitos,
pues no incluye al garante hipotecario dentro de la condena, ya que éste nunca fue
demandado ni emplazado en legal forma, advierte este tribunal, que nuevamente el
abogado apelante alega como agravio una situación cuyo origen está en el juicio
ejecutivo que antecedió a la ejecución forzosa que nos ocupa.

Para los autores Arturo Alessandri y Manuel Somarriva, el interés legítimo consiste
en un “”””””””””interés individual, estrechamente vinculado a un interés general
o público y protegido por el ordenamiento sólo mediante la tutela jurídica de este
último interés””””””””””.- Dichos autores citan como ejemplo de interés legítimo
el siguiente: “”””””””””Si tengo una casa con vista al mar y el dueño del terreno
intermedio me priva de esta vista levantando una construcción, no puedo impedirlo
porque no tengo derecho alguno para ello. Pero si una ley, que por razones
estratégicas prohíbe hacer una construcción en dicha heredad, puedo exigir a la
autoridad o a la justicia, que haga cumplir la ley prohibitiva, porque su vulneración
además de dañar el interés general, también daña el mío””””””””””.- (Tratado de
Derecho Civil; Partes general y preliminar; Arturo Alessandri R., Manuel Somarriva
U., Antonio Vodanovic H.).

El garante hipotecario de una obligación, es únicamente tal, es decir, no es un


obligado principal, o fiador o codeudor de la obligación reclamada, no guarda un
interés legítimo con la obligación discutida, por lo que no es cierto que debía ser
demandado.

Lo anterior debido a que de conformidad al artículo 564 CPCM, son parte legítima
en la ejecución forzosa quienes figuran en el título como obligados al cumplimiento,
y el artículo 567 del mismo cuerpo legal faculta la intervención al tercero, por
cuanto que el bien dado como garantía resulta afectado, para lo cual no necesita ser
ejecutado, ni ejecutante.

El proceso ejecutivo tiene una naturaleza especial, cuyo objeto consiste en el reclamo
de una obligación líquida dineraria. Por lo tanto, dada la naturaleza misma de este
objeto procesal, pueden tener únicamente interés el sujeto activo y el sujeto pasivo
de la obligación, es decir, el acreedor y el deudor de la obligación.

Por ello, el tipo de tercerista especialmente contemplado para los procesos


ejecutivos, no interviene en el proceso alegando interés coadyuvante, ni interés
propio (excluyente) dentro del proceso, sino que interviene dentro del proceso
alegando únicamente, el dominio de los bienes embargados, dejando completamente
de lado interés alguno sobre la obligación misma.

Este tipo de tercería denominada “de dominio”, es una regla especial y una excepción
que se contempla únicamente en los procesos ejecutivos, a los cuales por exclusión,
no les es aplicable las reglas generales de las tercerías que si son aplicables al resto
de procesos, dada la naturaleza especial de las ejecuciones dinerarias.

Además, observemos que en los procesos ejecutivos, si existiese un derecho subjetivo


sobre la obligación, esto otorgaría al interesado la calidad de litisconsorte activo

384
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

o pasivo, ya que se encontraría en la misma situación que el deudor o el acreedor


respecto de la obligación; y en caso que afecte el patrimonio de un tercero, a
causa de bienes propios que garanticen obligaciones ajenas, o que se pretenda que
respondan por obligaciones ajenas, el legislador ya prevé las figuras procesales de
garante o tercero de dominio, según el caso.

Por todo lo expuesto, este tribunal considera improcedente acceder a las pretensiones
del abogado apelante, por lo que deberá desestimarse este agravio.”

Ejecución en caso de sucesión

Art. 565.- La ejecución podrá pedirse por el sucesor del acreedor según el título, o contra el
sucesor de quien en dicho título aparezca como deudor.

Asimismo, la ejecución podrá despacharse contra los sucesores de los obligados conforme al
artículo anterior.

La sucesión deberá acreditarse en forma documental y fehaciente ante el juez que tenga
competencia para conocer de la ejecución, y que habrá de despacharla en la forma solicitada, si
estima suficientes los documentos presentados. En otro caso, convocará a todos los implicados a
una comparecencia en la que luego de oírlos, decidirá lo que proceda, para los exclusivos efectos
de la ejecución y, por ende, sin eficacia prejudicial.

Intervención del ejecutante en otra ejecución

Art. 566.- El ejecutante podrá intervenir en otra ejecución en la que se estuvieren realizando
bienes de su deudor, con suspensión de la que él hubiera instado, previa autorización del juez
competente. La intervención da derecho a participar en la ejecución hasta que se efectúe la
distribución de la suma obtenida.

Intervención de terceros

Art. 567.- Podrán intervenir en la ejecución, para la defensa de sus derechos e intereses,
aquellos cuyos bienes o derechos hubieran resultado afectables por la ejecución, aún cuando no
sean parte ejecutante ni ejecutada conforme a este código.

La intervención alcanzará al ejercicio de todos los derechos y posibilidades que conceda


el ordenamiento jurídico para la mencionada defensa, quedando sujetos los que la ejerzan a las
obligaciones y cargas que aquél determine.

Ejecución de obligaciones solidarias

Art. 568.- Si se trata de obligaciones solidarias, la ejecución podrá dirigirse contra cualquiera
de los deudores solidarios, siempre que figure expresamente como condenado en el título que se
pretende ejecutar por haber sido parte en el proceso en que se dictó la sentencia.

Costas de la ejecución

Art. 569.- Las costas y gastos originados por la ejecución correrán a cargo del ejecutante,
sin perjuicio de proceder judicialmente a la liquidación definitiva cuando se dé por finalizada la
ejecución. En todo lo demás se estará a lo dispuesto en este Código. (2)

385
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

CAPÍTULO QUINTO
SOLICITUD DE EJECUCIÓN

Solicitud de ejecución
Art. 570.- La ejecución forzosa sólo podrá iniciarse a instancia de parte ejecutante, que la
solicitará por medio de un escrito en el que deberá constar la identificación suficiente de la persona
contra la que se pretenda dicha ejecución, el título en que se funde, lo que se busca obtener y las
actuaciones ejecutivas que se solicitan.
En el caso de ejecución en dinero, se deberá indicar la cantidad que se pretende, la cual podrá
ser incrementada hasta en una tercera parte para cubrir el pago de los intereses que se devenguen y
las costas que se ocasionen durante la ejecución, sin perjuicio de la liquidación posterior.
CÁMARA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DE OCCIDENTE:
Sentencia definitiva INC-APEL-73-15-07-13 de fecha dieciocho de julio de dos mil
trece.
“…SOLICITUD DE EJECUCIÓN.- La ejecución forzada o forzosa, sólo se podrá
iniciar a instancia de la parte ejecutante en virtud del principio Dispositivo, quien
deberá identificar plenamente la persona contra quien se promueve dicha ejecución,
para evitar casos de homonimia, adjuntando el Título de ejecución en que se funda
su derecho, puede ser la ejecutoria para el caso de autos, aunque también se puede
señalar el Procedimiento de donde deriva la ejecución por haber sido pronunciado
por el mismo juez que conoce de la ejecución forzosa, tal como lo mencionan
los Licenciados P., Y V., y R. A., en su solicitud; de igual manera se deben dejar
establecidas las actuaciones ejecutivas que a opción del solicitante deben ventilarse,
tales como las medidas de localización, el embargo de ciertos bienes muebles
o inmuebles, o ante el desconocimiento de ellos, la manifestación por parte del
ejecutado de los bienes que tuviere; y tratándose de los casos de ejecución dinerarias
se indicará la cantidad que se pretende; entendiéndose por medidas ejecutivas toda
actividad especificada que se desarrolla durante el proceso de ejecución… si bien el
Proceso de Ejecución Forzosa no es una demanda sino una solicitud como bien lo
señala el Art. 570 del CPCM., a criterio de este Tribunal, tal solicitud debe de llenar
los requisitos mínimos que contiene la misma, aplicables este tipo de solicitudes,
como se ha visto la identificación plena del Ejecutante, y Ejecutado, sus generales, el
domicilio y dirección de los mismos, sus representantes procesales, el medio técnico
para recibir comunicaciones, el señalamiento y acompañamiento del Título de
Ejecución, la designación de bienes del ejecutado si se conocieren por el ejecutante,
en caso contrario, la solicitud de las medidas de localización que se utilizarán para
tal fin, lo que debe entenderse determinar los registros de los cuales se pretende
obtener la información que desea; y no menos importante, la acreditación legal de la
personería con que actúan los apoderados de la parte ejecutante…”
Designación de bienes

Art. 571.- En la solicitud se podrá hacer mención de los bienes del ejecutado que podrían
ser afectables por la ejecución, si fueran conocidos por el ejecutante. Si éste no conociera bienes
o los que conociera no fuesen suficientes, tendrán derecho a solicitar del tribunal las medidas de
localización de bienes previstas en este código.

386
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

CÁMARA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DE OCCIDENTE:


Sentencia definitiva INC-APEL-73-15-07-13 de fecha dieciocho de julio de dos mil
trece.

“…si bien el Art. 571 del CPCM. establece al ejecutante el requisito potestativo al
decir “se Podrá”señalar en la SOLICITUD la designación de bienes del ejecutado
que deben ser afectados por la ejecución, si son conocidos del ejecutante; en el
supuesto de que no se conocieran bienes o que fueran insuficientes, la parte ejecutante
tendrá derecho a solicitar del tribunal que conoce de esta fase de ejecución forzosa,
las medidas de localización de bienes, tal requisito a criterio de este Tribunal, es
de riguroso cumplimiento por el ejecutante al plantear una Solicitud de Ejecución
forzosa, lo anterior, para no dejar al juzgador en la incertidumbre a que oficinas
debe enviar oficios para que le informen sobre la existencia de bienes a favor del
ejecutado, lo que se volvería en una innecesaria pérdida de tiempo y de recursos…”

Documentos que deben acompañar a la solicitud

Art. 572.- A la solicitud de ejecución habrá de acompañarse el título, salvo que se trate de
resolución dictada por el propio juez a quien se dirija, o de un acuerdo o transacción aprobado u
homologada por él, en cuyo caso bastará señalar el procedimiento del que derive.

Igualmente se acompañarán cuantos documentos exija la ley, así como los que estime el
solicitante que son necesarios, útiles o convenientes para el adecuado desarrollo de la ejecución.

Sólo se acompañará el documento acreditativo del poder del abogado cuando éste no sea el
mismo que actuó en la primera instancia. En otro caso, bastará con remitirse a la representación
ya acreditada. Cuando se trate de la ejecución de títulos arbitrales, el poder se acompañará a la
solicitud.
Acumulación de ejecuciones
Art. 573.- Se permitirá, a instancia de parte, la acumulación de las ejecuciones seguidas contra
un mismo ejecutado, conforme a lo dispuesto en este código y en disposiciones concordantes.
Despacho de ejecución
Art. 574.- Presentada la solicitud, el juez dictará auto de despacho de ejecución si concurren los
presupuestos procesales establecidos en este código, si el título no presenta ninguna irregularidad
y si las actuaciones que se solicitan son congruentes con el título, este auto no admitirá recurso.
Auto rechazando la solicitud de ejecución
Art. 575.- Si la solicitud no se ajustara a los requisitos de fondo expresados en el artículo
anterior, el juez rechazará in limine la ejecución mediante auto expresamente motivado, que será
susceptible de recurso de Apelación.
Si la solicitud contuviera defectos y éstos fueran subsanables, el juez deberá otorgar plazo,
que no excederá de cinco días, para que el ejecutante los subsane. Una vez subsanados se dictará
auto de despacho de la ejecución. Si no hubiera procedido a la subsanación el juez confirmará el
auto de rechazo a la solicitud.

387
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

Contenido del despacho de ejecución. Impulso de oficio


Art. 576.- El despacho de ejecución determinará con precisión la persona contra la que
se dirige, la cantidad por la que se sigue, las actuaciones que se ordenan, incluido el embargo
de bienes, y las medidas de localización de elementos patrimoniales del deudor. El juez, si lo
considera procedente para un desarrollo más adecuado de la ejecución, hará en su resolución
cuantas precisiones estime oportunas.
En adelante, el juzgador impulsará de oficio el procedimiento, ordenando las actuaciones que
fueren necesarias para que el ejecutante reciba lo que le corresponda.
Notificación del despacho de la ejecución al ejecutado
Art. 577.- El despacho de la ejecución, junto con una copia de la solicitud y de sus documentos,
se notificará al ejecutado, sin citación ni emplazamiento, para que pueda comparecer en cualquier
momento y se entiendan con él las sucesivas actuaciones.
Efectos de la notificación al ejecutado

Art. 578.- El inicio de la ejecución, notificado al deudor, supone la orden judicial que le impide
disponer de sus bienes y derechos, limitarlos o gravarlos sin autorización judicial; y esto deberá
asegurarse mediante la anotación en los registros públicos correspondientes, si a ello hubiere lugar.

Cumplida la obligación de manifestación de bienes suficientes, se alzará la prohibición general


de disponer.

De no existir bienes suficientes, serán nulos todos los actos de disposición o renuncia
efectuados por el ejecutado desde el momento en que se solicite el inicio de la ejecución.

CAPÍTULO SEXTO
OPOSICIÓN A LA EJECUCIÓN

Oposición a la ejecución. Motivos

Art. 579.- Si el ejecutado compareciere dentro de los cinco días siguientes al de la notificación
del despacho de la ejecución, podrá formular, mediante escrito, oposición a la ejecución, por
falta de carácter o calidad del ejecutante o del ejecutado, o de representación de los mismos; por
falta de requisitos legales en el título; por el pago o cumplimiento de la obligación, justificado
documentalmente; por haber prescrito la pretensión de ejecución; o por la transacción o acuerdo de
las partes que consten en instrumento público.

CÁMARA PRIMERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, SAN SALVADOR, Apelación Referencia 171-63CM2-2014 de fecha:
veintisiete de enero de dos mil quince.

“En cuanto a la aseveración que hace la señora Jueza A Quo, en la resolución


impugnada, relativo a que los supuestos establecidos en el Art. 579 CPCM.,
son taxativos, esta Cámara disiente de dicha afirmación, por la razón que la
mencionada norma jurídica es de carácter enunciativa, y no establece de
manera expresa que sólo dichos motivos pueden interponerse, aunque cabe
aclarar que los mismos están restringidos a otros casos que tengan alguna

388
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

relación directa con la pretensión de ejecución, como por ejemplo, aquellos que
sean procesales: (i) la falta de competencia; (ii) no contener la sentencia o el
laudo un pronunciamiento de condena; (iii) Irregularidad en el título por falta
de requisitos legales, de conformidad con los Arts. 563 Inc. 1º, 559, y 574 CPCM., o
de fondo como la pluspetición o exceso, y que sean posteriores al pronunciamiento
de una Sentencia firme, es decir, que dichos ejemplos, son otros motivos que el
legislador no enmarcó en dicho artículo, pero que se refieren a circunstancias que
puedan suscitarse después de haberse tramitado la pretensión a través de un proceso
constitucionalmente configurado, en virtud que este complemento del proceso, se
centra en hacer ejecutar lo juzgado, imponiendo el imperio del Estado al obligado
que no cumple voluntariamente con lo ordenado en la sentencia declarada firme.Por
esa razón, los motivos de oposición durante ésta etapa, deben estar estrictamente
encaminados a las posibilidades que frente a las actividades que integran la
ejecución se ofrecen para la defensa de los derechos e intereses de quienes participan
directamente, o se ven afectados por la misma.”

CÁMARA PRIMERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, SAN SALVADOR, Sentencia N°205-85CM1-2014 de fecha: treinta de
enero de dos mil quince.

“En el caso de autos, es importante destacar que la parte recurrente ha apelado


del auto que desestima el motivo de oposición invocados por la misma, previstos
en el Art. 579 CPCM.; empero, cuando se estudia el contenido de estos, se puede
evidenciar que en su fondo son relativos a la pretensión satisfecha en la Sentencia,
que una vez firme, sirve de base a la ejecución forzosa de que nos trata, y referentes
a la fase cognoscitiva de la cual resultó.

Lo anterior es así, pues se observa que mediante el motivo alegado, respecto


a falta de carácter o calidad del ejecutado, la parte recurrente trae a cuenta
la vulneración del derecho de defensa y seguridad jurídica suscitados por la
denegación de incorporar elementos probatorios, que alegó la parte ejecutada, en
la audiencia de sustanciación de la oposición, y no cuando contestó la demanda en
el proceso Ejecutivo Mercantil, el cual ya fue terminado con la sentencia que sirve
de documento base de la ejecución forzosa en estudio, así como también por dejar
constancia en ella, de ciertas situaciones que la ejecutada considera atentatorias y
violatorias a su derecho de defensa, cuando la misma, como ya se dijo, está firme y
su contenido es irrebatible.”

Sustanciación de la oposición. Audiencia

Art. 580.- La oposición se sustanciará, sin suspensión de las actuaciones, en una audiencia a
la que serán citadas todas las partes personadas para que acudan con los medios de prueba de que
intenten valerse, y que deberá celebrarse dentro de los cinco días siguientes al de la notificación.

Si el ejecutante no comparece a la audiencia, se decidirá sobre los motivos de oposición


sin escucharle. Si no comparece el ejecutado, se entenderá que ha desistido de la oposición, y el
juez adoptará las medidas pertinentes para continuar con la ejecución, condenándole a las costas
procesales causadas y a indemnizar por daños y perjuicios al demandante, si éste lo solicitara y los
acreditara.

389
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

CÁMARA DE LA TERCERA SECCIÓN DEL CENTRO, SAN VICENTE,


Apelación N°C-1-PEF-2013-CPCM de Fecha: veintinueve de enero de dos mil
doce.

“Esta Cámara después de examinar la resolución del Juzgado A Quo, lo dicho por
el recurrente en su escrito de interposición del presente recurso de Apelación y las
alegaciones de ambas partes dentro de la Audiencia Oral de Apelación a que se
refiere el Art. 513 CPCM, consideró desestimar la pretensión del recurso, mediante
el fallo que oportunamente se pronunció en la audiencia oral de Apelación y que
consta en el acta de la Audiencia Oral, bajo los fundamentos que a continuación se
explicarán y que oportunamente fueron deliberados conforme al Art. 219 CPCM, al
concluir las alegaciones finales de las partes técnicas; por lo que en congruencia con
lo pedido y con lo que se resolvió, conforme al Art. 515 CPCM, estima esta Cámara
que en relación a la prueba documental, se consideró que el motivo de oposición que
se interpuso en primera instancia era improcedente, tal como lo resolvió el señor
Juez de lo Civil de Zacatecoluca, por los siguientes motivos:

Inicialmente, debemos iniciar la argumentación de este auto, expresando que


desde una perspectiva constitucional la Constitución de la República en su Art.
172 prescribe:”””””””””La Corte Suprema de Justicia, las Cámaras de Segunda
Instancia y los demás tribunales que establezcan las leyes secundarias, integran el
Órgano Judicial. Corresponde exclusivamente a este Órgano la potestad de juzgar y
hacer ejecutar lo juzgado en materias constitucional, civil, penal, mercantil, laboral,
agraria y de lo contencioso-administrativo, así como en las otras que determine la
ley.””””””””””””
Como corolario de lo antes transcrito, podemos decir que el ejercicio de la actividad
jurisdiccional no se agota con el enjuiciamiento de la pretensión (fase declarativa o
cognoscitiva, o en términos constitucionales el “juzgamiento”), con la correspondiente
decisión definitiva del proceso, declarando el derecho en el caso concreto, sino que como
la misma Carta Magna lo establece, se debe ejecutar lo juzgado.
El Doctor Guillermo Alexander Parada Gámez, jurista salvadoreño, en su
publicación en la revista de la UCA de Junio de dos mil once, “La ejecución en
el nuevo proceso civil y mercantil”, explica que cuando hablamos de la ejecución
de Sentencias, evocamos esa actividad del Estado coactiva a través de la cual, y
contra la voluntad del deudor, o condenado, se cumple lo dictaminado a favor de
un acreedor demandante. Esta sentencia para que pueda ejecutarse como tal, debe
cumplir con ciertos presupuestos y además estar guiada por ciertos principios. En
todo caso se trata de un proceso que ineluctablemente vuelve verosímil la labor
de tutela por parte del Estado en su deber de dar protección jurisdiccional y no
meramente declarativa, sino material y tangiblemente real.
El mencionado jurista también sostiene que el fundamento teleológico de esta
ejecución, en definitiva, es que las Sentencias de condena no siempre son suficientes
para la eficaz tutela de los derechos lesionados, que en el proceso civil son de
naturaleza patrimonial ordinariamente; y, esto, porque el condenado puede negarse
a cumplir voluntariamente el mandato contenido en ellas. Por esto es preciso que
el Estado provea de los medios precisos para conseguir el cumplimiento, aunque

390
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

sea sin o contra la voluntad del deudor. A tal fin, la ejecución no es más que una
actividad del Órgano Jurisdiccional mediante la cual se actúan forzosamente
las consecuencias queridas por la norma en un caso concreto y sobre un sujeto
determinado.
Por otro lado, explica el maestro español Víctor Moreno Catena en su obra “La
Ejecución Forzosa”, Editorial Palestra, Primera edición, Mayo 2009, Pág. 28 dice
que al igual que sucede en el proceso de declaración, la ejecución forzosa tiene por
objeto una pretensión, que no persigue ahora la declaración del derecho, pues ya
consta en el título de forma indiscutible, sino precisamente que el Órgano Judicial
realice actividades coactivas necesarias al caso concreto, para dar satisfacción al
derecho del ejecutante habida cuenta del incumplimiento del ejecutado. Así pues, la
pretensión de ejecución se compone, como la declaración, de una causa de pedir y
de una petición.
Continúa explicando el autor español mencionado que la causa de pedir se concreta
en el título de ejecución; representa en primer término, el hecho jurídico que
faculta para demandar la ejecución y en segundo lugar, por sí mismo fundamenta
la oposición del ejecutante, que nada tiene que probar sino el propio título, pues
éste, marca los límites y la medida de las actividades en que se concreta la ejecución
forzosa.
Trasladando las anteriores concepciones al caso examinado, podemos decir que
el Licenciado […], en el carácter en que actúa, solicitó al Juzgado A Quo que
se ejecutara en su integridad la sentencia pronunciada a las doce horas y treinta
minutos del día dos de julio de dos mil doce, que aparece en el Proceso Civil
Declarativo Común Reivindicatorio, promovido por su persona en representación de
su poderdante en contra de la señora […], en donde se le condenó a la demandada
a restituir a favor de su poderdante un solar urbano que ahí se describe, bajo el
proceso clasificado bajo el número DC-24-2011-4.

Expuso que habiendo transcurrido el plazo de ley, sin que la demandada de forma
voluntaria, abandonara el inmueble, pretende mediante esta nueva solicitud, la
ejecución forzosa de la sentencia declarativa.

Así las cosas, tal como lo establece el Art. 554 N°1 CPCM, las Sentencias judiciales
firmes, son títulos de ejecución, por lo que el documento relacionado en la solicitud
tiene fuerza de ejecución contra el ejecutado en los términos y limites que el mismo
título imponga, en otras palabras, lo descrito en el título es lo único que al ejecutante
puede satisfacer y no otra cosa, por ejemplo: la condena en dinero es sobre la base
del fallo y si este no declaró la condena en intereses, sólo será ejecutivo el cobro
del capital; al ejecutarse cosa distinta a lo que consta en el título, se caería en un
exceso, lo cual puede ser alegado por el ejecutado en el momento procesal oportuno,
es decir, en la oposición al título.

Las razones que llevaron a los suscritos Magistrados a dar el fallo desestimatorio
de la pretensión del recurso, fue porque el apelante sostiene que existió una venta
fraudulenta, de parte del señor […] como tradente primitivo del inmueble, vale decir
entonces que el motivo de la ejecución forzosa era por un motivo de fraude.

391
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

Ante este caso particular, se vuelve necesario citar lo que el Art. 579 CPCM señala:
”””””””””Si el ejecutado compareciere dentro de los cinco días siguientes al
de la notificación del despacho de la ejecución, podrá formular, mediante escrito,
oposición a la ejecución, por falta de carácter o calidad del ejecutante o del
ejecutado, o de representación de los mismos; por falta de requisitos legales en el
título; por el pago o cumplimiento de la obligación, justificado documentalmente;
por haber prescrito la pretensión de ejecución; o por la transacción o acuerdo de las
partes que consten en instrumento público.””””””””””””””[..].

Sin embargo, y a pesar que no somos partidarios de que el Art. 579 CPCM, contemple
taxativamente las causas de oposición de fondo, es decir que fueren numerus
clausus, tesis que sostenemos, de conformidad con el Art. 19 CPCM, basada en la
Doctrina de los Expositores del Derecho Procesal, citando para ello nuevamente al
maestro Víctor Moreno Catena, quien indica que el título de ejecución constituye la
“medida”para la ejecución, en otras palabras, sostiene el jurisconsulto español que
únicamente puede dársele cumplimiento a lo que el título contenga y que los motivos
de oposición son los que indica el Art. 556.1 de la Ley de Enjuiciamiento Civil
Española 1/2000, que en el caso salvadoreño sería el Art. 579 CPCM, pero agrega,
que también pueden ser motivos de fondo, aparte de los enumerados en nuestro
caso en la mencionada disposición (Art. 579 CPCM), aquellos que intenten ejecutar
nuevamente un título ya satisfecho; también razona que la pluspetición (pedir más
de lo que el título contiene) puede ser causa de oposición de fondo.

Explicado lo anterior, el motivo de fraude alegado por el Licenciado […], en su


calidad de apelante, no tiene un sustento como motivo de fondo, pues las alegaciones
que hizo en el recurso y durante la Audiencia Oral, versan sobre un motivo de
fraude, cuestión que se debió debatir en la fase declarativa del proceso o también
denominado por la Constitución de la República como de juzgamiento y no en este
proceso de ejecución forzosa por las razones indicadas. Así, las cosas, si el título,
que en este caso es una sentencia condenatoria firme, ordena la restitución del
inmueble que fue objeto de la litis, se debe proceder al lanzamiento de la ejecutada,
pues no vemos que la causal de oposición de fondo, sea procedente; aunque bien
puede alegar dicha situación el apelante en otro recurso, no siendo éste el caso, ni
esta instancia la correspondiente para verificar dicha situación.”

CÁMARA DE LA SEGUNDA SECCIÓN DE ORIENTE, USULUTAN,


Apelación N°LA-APE-4-2-2012 de Fecha: diecinueve de marzo de dos mil doce.

“Según el Art. 579 y 580 CPCM, en el procedimiento de ejecución forzosa, se necesita


notificar a la parte que se va a ejecutar, luego esta tiene cinco días para formular
oposición y dentro de la oposición tiene otros cinco días para llegar a la audiencia,
el Juez A Quo no siguió el procedimiento que regula nuestro Código Procesal Civil
y Mercantil para el procedimiento de la ejecución forzosa, es decir el juez antes de
resolver la oposición presentada por la parte ejecutada, debió darle cumplimiento al
Art. 580, del CPCM el cual establece que la oposición se sustanciara, sin suspensión
de las actuaciones, en una audiencia a la que serán citadas todas las partes para
que acudan con los medios de prueba que intenten valerse, la audiencia deberá
celebrarse dentro de los cinco días al de la notificación; lo cual no sucedió en el

392
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

presente caso ya que no consta físicamente en el expediente principal que el señor


juez haya notificado a la parte ejecutante de la oposición presentada, mucho menos
consta que en audiencia el Juez A Quo resolviera sobre los motivos de la oposición.

Con la actuación del Juez A Quo, se han infringido Derechos Constitucionales como
es el derecho de audiencia o de defensa, ya que no siguió el procedimiento regulado
para la oposición, violentando el derecho de audiencia en el sentido que la parte
ejecutante no tuvo la posibilidad de exponer los razonamientos y defenderlos de
manera plena y amplia al no ejercer una real defensa sobre la petición que planteo la
parte ejecutada. Lo anterior de conformidad a los artículos 232 literal c del CPCM
y articulo 11 de la Constitución de la República de el Salvador; al haber infringido
derechos constitucionales el señor Juez de Primera Instancia de Jiquílisco por las
razones mencionadas anteriormente es causal de Nulidad Absoluta, siendo por lo
tanto procedente, que se declare la nulidad absoluta de la resolución que declara
que se suspendan los embargos sobre los bienes de los señores [...], resolución que
corre agregada a fs.[...] y los actos que son conexos con ésta, por notar esta

Cámara que el Juez A Quo no respeto el procedimiento de la ejecución forzosa, es


procedente ordenarle al señor Juez del Juzgado de Primera Instancia de Jiquílisco
que le de cumplimiento a lo establecido en los artículos 580 y 581 del CPCM. Por
ser procedente declarar de oficio la Nulidad Absoluta señalada, se hace innecesario
entrar a conocer del fondo del asunto apelado”.

Alegación de defectos procesales

Art. 581.- La audiencia comenzará con la exposición del demandante sobre los defectos
procesales que se hubieran alegado como motivo de oposición, debiéndose practicar la prueba que
en el momento se admita. El juez resolverá sobre los motivos de oposición, y, si fueren defectos
subsanables, se concederá al ejecutante, la posibilidad de subsanarlos en un plazo de cinco días.

Si los defectos no fueran subsanables o no se hubieran subsanado en el plazo concedido, el


juez dictará auto que deje sin efecto la ejecución, ordene que el ejecutado vuelva al estado anterior
al inicio de ésta, alce las medidas adoptadas contra su patrimonio y condene en costas al ejecutante,
así como a la indemnización por daños y perjuicios causados al ejecutado.

Si el juez desestima los motivos de oposición procesal o se subsanan los defectos en plazo, se
pasará al examen de la oposición por motivos de fondo.

Si no se hubiera articulado esta clase de oposición, el juez dictará auto ordenando continuar la
ejecución e imponiendo las costas del incidente de oposición al ejecutado.

Oposición de fondo

Art. 582.- Desestimada la oposición por motivos procesales, se pasará a resolver la oposición
de fondo. Las partes tomarán la palabra por su orden para hacer las alegaciones que estimen
oportunas y practicar la prueba que admita el juez en el momento.

Si se advirtiera algún defecto subsanable en la oposición, se aplicará lo dispuesto en el artículo


anterior.

393
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

Si se desestima la oposición de fondo, el juez mandará por auto que continúe adelante la
ejecución, condenando al ejecutado en las costas de la oposición.

Oposición por falta de competencia territorial

Art. 583.- El ejecutado que alegare la falta de competencia territorial deberá hacerlo dentro de
los cinco días siguientes al de la notificación del despacho de la ejecución.

Esta oposición se sustanciará conforme a lo dispuesto en el libro primero de este código.


Recursos contra la decisión sobre la oposición

Art. 584.- Contra el auto que desestime los motivos de oposición alegados podrá interponerse
recurso de Apelación, que no suspenderá el curso de la ejecución.

Contra el auto que estime los motivos de oposición alegados se podrá interponer recurso de
Apelación; y durante la sustanciación el solicitante tendrá derecho a que se mantengan las medidas
ejecutivas adoptadas en relación con el patrimonio del ejecutado. (2)

Oposición a concretas actuaciones ejecutivas

Art. 585.- El ejecutado podrá oponerse a actuaciones ejecutivas concretas que excedan o
contradigan el título o que infrinjan la ley, mediante el recurso de revocatoria o el de Apelación
cuando lo establezca expresamente este Código. Si la actuación diera lugar a la nulidad, se estará a
lo establecido en este título en lo referente a los límites de la actividad de ejecución. (2)

Si se trata de infracciones legales, y a la falta de resolución expresa, el ejecutado podrá


presentar un escrito en el que se señale la medida propuesta para remediar la infracción.

CAPÍTULO SÉPTIMO
SUSPENSIÓN DE LA EJECUCIÓN

Suspensión de la ejecución. Regla general

Art. 586.- La ejecución sólo podrá suspenderse, mediante auto dictado al efecto, cuando lo
soliciten todas las partes personadas o cuando lo ordene expresamente la ley, sin perjuicio de que
se mantengan las medidas necesarias para garantizar las actuaciones ejecutivas adoptadas. En caso
de suspensión antes de decretarse ésta se cumplirán las medidas ejecutivas adoptadas.

La interposición de los recursos establecidos por la ley contra las actuaciones ejecutivas
no suspenderá el curso de la ejecución. Excepcionalmente, el juez podrá acordar la suspensión
a pedido del ejecutado, citando éste acredite que el no suspenderla le acarreará daños de difícil
reparación y siempre que preste caución suficiente para asegurar la eventual indemnización por los
daños y perjuicios que la suspensión pudiera causarle al ejecutante.

CÁMARA DE LA SEGUNDA SECCIÓN DE ORIENTE, USULUTAN,


Apelación Referencia N°APE-19-5-CPCM-2011 Fecha: cinco de diciembre de dos
mil doce.

“Asimismo, en cuanto a la Excepción Procesal de Prejudicialidad Civil opuesta y


alegada por la parte apelante, el Código Procesal Civil y Mercantil, únicamente
contempla tres casos para suspender la ejecución, siendo ellos, 1) Cuando es

394
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

solicitada por todas las partes personadas o cuando lo ordene expresamente la ley;
en la fase de Ejecución, Art. 586 P r. C. y M..-

2) Cuando una vez dictado el auto de despacho de la Ejecución forzosa, esta no se


suspenderá por el hecho de que se haya iniciado un proceso de revisión, teniendo
sin embargo, en este caso el Tribunal, facultades para acordar la suspensión cuando
así lo solicitare el ejecutado, si concurre causa justificativa suficiente en el caso
concreto y que se preste caución bastante para responder de los daños y perjuicios
que se puedan causar al ejecutante.- 3) En el caso de prejudicialidad penal, Art.
589 P r. C. y M.- Sobre esta excepción la parte demandada la opone y la alega en
base al Art. 51 P r. C. y M., sin embargo dicha causa no es motivo para suspender la
presente ejecución y tampoco está contemplada en los tres artículos anteriores, por
lo que debe resolverse sin lugar la mencionada Excepción de Prejudicialidad Civil
en el presente caso.-

En consecuencia, este tribunal de alzada es del criterio que la sentencia venida en


Apelación, debe confirmarse, reformándola en lo que dirá adelante, en vista que la
oposición relacionada, de la parte apelante ha sido presentada extemporáneamente,
fuera del término señalado en el Art. 579 Pr. C. y M. y debe declararse sin lugar; La
sentencia venida en Apelación, si bien debe confirmarse en todas sus partes, debe
reformarse en lo siguiente: Se declara sin lugar la Excepción de Prejudicialidad
Civil en el presente caso, quedando así su redacción en esta parte, y no como ha sido
pronunciada.”

Suspensión en caso de planteamiento de proceso de revisión


Art. 587.- Una vez dictado el auto de despacho de la ejecución forzosa, ésta no se suspenderá
por el hecho de que se inicie un proceso de revisión. No obstante, el tribunal tiene facultad para
acordar la suspensión cuando así lo solicitare el ejecutado, si concurre causa justificativa suficiente
en el caso concreto y que se preste caución bastante para responder de los daños y perjuicios que
se puedan causar al ejecutante.
Si la demanda de revisión fuera desestimada, en cuanto se tenga conocimiento de este hecho,
se alzará la suspensión, se ordenará que continúe la ejecución y se decidirá lo procedente sobre la
caución prestada. (2)
Si se estima la demanda de revisión, el tribunal mandará archivar las actuaciones ejecutivas
en cuanto se le comunique este hecho, y ordenará que se adopten las medidas oportunas para hacer
volver al ejecutado a la situación anterior al inicio de la ejecución.
Regla especial en caso de revisión de la sentencia dictada en rebeldía
Art. 588.- Si la demanda de revisión la interpone el demandado rebelde, el archivo de las
actuaciones sólo procederá cuando se hubiese estimado la revisión y hubiera sentencia favorable
en el proceso posterior que se siga con audiencia del demandado.
Si el posterior proceso seguido con audiencia del demandado termina en sentencia
desfavorable, se aprovechará, en lo que sea posible, la actividad de ejecución realizada en función
de la sentencia revisada.

395
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

Suspensión en caso de prejudicialidad penal


Art. 589.- Si se iniciara un proceso penal por hechos delictivos relacionados con el título o
con el despacho de ejecución, se podrá decretar la suspensión de ésta, previa audiencia de todas las
partes y del Fiscal General de la República. No obstante, en el caso de que se decrete la suspensión,
podrá el ejecutante evitarla si presta caución suficiente a juicio del juez, para responder de lo que
obtenga y de los daños y perjuicios causados al ejecutado.
En caso de que se suspendieran las actuaciones o el proceso penal finalizara por resolución
en la que conste la inexistencia del hecho o su carácter no delictivo, el ejecutante podrá pedir la
indemnización por los daños y perjuicios que la suspensión le hubiera causado.
CAPÍTULO OCTAVO
EJECUCIÓN CONTRA EL ESTADO

Procedimiento de ejecución

Art. 590.- Cuando se pida la ejecución de una sentencia que condene al Estado, a un municipio
o a una institución oficial autónoma al pago de cantidades líquidas, el juez remitirá el auto de
despacho de la ejecución al funcionario que corresponda, así como a cualquier otro que indique
la ley de la materia, a fin de que libren y autoricen las órdenes de pago con cargo a las partidas
correspondientes del presupuesto general vigente.

Si no fuere posible cargar la orden de pago al presupuesto vigente, el funcionario que


corresponda propondrá que en el presupuesto general de gastos del año siguiente se incluyan las
asignaciones o partidas necesarias para el pago de lo ordenado en la sentencia ejecutoriada.

El incumplimiento de lo prescrito en este artículo será responsabilidad personal del funcionario


infractor. Además, la afectada podrá deducir ante los tribunales e instancias competentes la
ilegalidad de la omisión.

Legitimación

Art. 591.- Intentada la ejecución de una sentencia pronunciada en contra del Estado, o la
ampliación de la misma según sea el caso, el Fiscal General de la República intervendrá en
el trámite por medio de algún delegado, quedándole expedito en todo momento el derecho de
allanarse u oponerse según se considere procedente.

Cuando se trata de los municipios o de las instituciones oficiales autónomas, intervendrá la


persona quien conforme a la ley ejerza la representación de los mismos.

TÍTULO SEGUNDO
LA EJECUCIÓN PROVISIONAL

Títulos provisionalmente ejecutables


Art. 592.- Podrán ser ejecutadas provisionalmente, en tanto se sustancian los recursos
interpuestos contra ellas, todas las Sentencias de condena dictadas por tribunales de la
República en los procesos civiles y mercantiles, salvo las que impongan realizar una
declaración de voluntad.

396
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

También podrán ser ejecutados provisionalmente los pronunciamientos de condena contenidos


en Sentencias constitutivas o meramente declarativas.
Las Sentencias extranjeras que no hubieran alcanzado firmeza se podrán ejecutar
provisionalmente cuando así lo disponga el tratado internacional aplicable al caso.
Solicitud de ejecución y competencia
Art. 593.- La ejecución provisional sólo se iniciará por solicitud de la parte que hubiera
obtenido un pronunciamiento favorable, y se llevará a efecto por el juez que hubiere resuelto
en primera instancia, cualquiera que sea la instancia o grado en que se halle el proceso, con los
mismos trámites de la ejecución de Sentencias firmes.
La solicitud podrá formularse en cualquier momento desde que conste la pendencia de un
recurso y antes de que se dicte sentencia en él.
Cuando se solicite la ejecución y los autos se encuentren ante otro tribunal, se recabará de
éste certificación de lo necesario para llevarla a efecto, acompañando el pedido a la solicitud. Si
se solicita antes de que los autos pasen a otro tribunal, quedará en el juzgado certificación de lo
necesario para proceder a la ejecución.
Garantías y responsabilidades
Art. 594.- Como regla general, el solicitante de ejecución provisional no estará obligado
a prestar garantía o caución para asegurar los posibles perjuicios que se le podrían causar al
ejecutado en caso de revocación de la Sentencia.

No obstante lo anterior, a la vista de la capacidad económica del solicitante de ejecución, el


juez decidirá, atendidas las circunstancias del caso, si debe prestar garantía previa al inicio de la
ejecución provisional, en qué forma podrá hacerlo y en qué cuantía. La cuantía que se fije será
proporcional a la capacidad económica del solicitante.
Si la sentencia resultara total o parcialmente revocada, cualquiera que fuera la causa, deberá
responder el ejecutante de todos los daños y perjuicios producidos al ejecutado, que podrán ser
exigidos de inmediato en el mismo proceso.
Despacho de la ejecución provisional. Recursos
Art. 595.- Si se trata de un título ejecutable provisionalmente, el juez dictará auto de despacho de
la ejecución provisional, si ésta fue solicitada en tiempo y se prestó la garantía fijada, en su caso.
Contra el decreto que ordene la ejecución provisional no procederá recurso alguno.
Contra el que la deniegue puede recurrirse en Apelación.
Oposición a la ejecución provisional
Art. 596.- El ejecutado podrá oponerse a la ejecución cuando no se hubieran cumplido los
requisitos exigidos en el artículo anterior.
El ejecutado también podrá alegar, como oposición, la extrema dificultad o la imposibilidad
de devolver las cosas al estado en que se encontraban antes de las actuaciones ejecutivas, o pedir
que se le asegure la indemnización si la sentencia fuera revocada.

397
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

Oposición a la ejecución provisional en ejecuciones de pago de dinero


Art. 597.- Si la condena fuera dineraria, la oposición no podrá dirigirse contra la totalidad de
la ejecución, sino que debe estar referida a actuaciones ejecutivas concretas del procedimiento,
cuando el ejecutado considere que dichas actuaciones pueden causar una situación imposible de
revertir o de compensar económicamente mediante el resarcimiento de daños y perjuicios.
En este caso, el ejecutado deberá señalar, en el escrito de oposición, medidas alternativas que
resulten posibles y no proveen situaciones similares a las que causaría, a su juicio, la actuación o
medida a la que se opone.
Cuando el juez estime fundada la oposición pero no acceda a las medidas alternativas
propuestas, el ejecutado ofrecerá garantía suficiente para asegurar la indemnización por daños y
perjuicios que pueda sufrir el ejecutante debido al retraso en la ejecución, si la sentencia resulta
confirmada en el recurso.
Sustanciación de la oposición
Art. 598.- El escrito de oposición, al que se acompañarán los documentos que se estimen
pertinentes, deberá presentarse en el plazo de cinco días contados desde el siguiente al de la
notificación del despacho de la ejecución o de la concreta actividad ejecutiva. (2)
Se dará audiencia al ejecutante, y se citará a todas las partes a una audiencia, que se celebrará
dentro de los cinco días siguientes al de la notificación, y a la que deben acudir con los medios de
prueba de que intenten valerse.

En la audiencia, las partes alegarán lo que consideren pertinente y practicarán la prueba que en el
acto aporten y que el juez admita, debiéndose dictar a continuación la resolución que resulte procedente.

Decisión sobre la oposición

Art. 599.- Si se desestima la oposición, continuará adelante la ejecución provisional. Si se


estima la oposición por estar indebidamente concedida la ejecución provisional, ésta se declarará
improponible mediante auto, con orden de archivar las actuaciones ejecutivas; y además, se
levantarán todas las medidas adoptadas contra el patrimonio del ejecutado.

Si se estima la oposición por razones de fondo, se dictará auto para dejar suspendida la
ejecución, sin que ésto afecte la permanencia de las medidas tomadas sobre el patrimonio del
ejecutado.

Si estima la oposición referida a una concreta actuación ejecutiva, se procederá conforme a


la medida alternativa que acepte el juez. Si no se acepta la medida alternativa, el ejecutado deberá
constituir garantía y la ejecución provisional seguirá adelante sin realizar la actuación concreta
para la que hubo oposición.

Interrupción de la ejecución pecuniaria

Art. 600.- Cuando la condena es pecuniaria, el juez deberá detener la ejecución provisional a
petición del ejecutado si éste consigna el principal más los intereses y costas devengados o que se
pudieran devengar hasta la firmeza de la Sentencia.

398
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

Confirmación de la sentencia provisionalmente ejecutada

Art. 601.- Si la sentencia que decida el recurso pendiente confirma la resolución ejecutada
provisionalmente, continuará adelante la actividad ejecutiva provisional, salvo en el caso de que
la sentencia hubiera alcanzado firmeza por no haber recurso contra ella o cuando no se hubiese
presentado el recurso en el plazo legal. En ambos supuestos la ejecución continuará como
definitiva.

Revocación total de la sentencia provisionalmente ejecutada

Art. 602.- Si se revocara totalmente la sentencia provisionalmente ejecutada, se pondrá fin a


la ejecución, y el juez deberá adoptar las medidas que sean procedentes para hacer volver las cosas
al estado anterior, bien sea por la devolución que haga el ejecutante del dinero percibido, de la cosa
o del bien que se le hubiera entregado; bien sea por la vía de deshacer lo hecho. Si no fuera posible
la devolución del bien o de la cosa, se sustituirá por su equivalente en dinero.

La devolución alcanzará a los intereses, frutos o rentas. Asimismo se reintegrarán al ejecutado


las costas ocasionadas y se le indemnizarán los daños y perjuicios.

Revocación parcial de la sentencia provisionalmente ejecutada

Art. 603.- En caso de revocación parcial de la sentencia de condena pecuniaria, se devolverá


sólo la diferencia entre lo que percibió el ejecutante y la cantidad a la que fue condenado en la
sentencia que decidió el recurso.

El ejecutante podrá oponerse a la devolución, prestando garantía suficiente para responder de


los daños y perjuicios que se pudieran ocasionar al ejecutado.

TÍTULO TERCERO
LA EJECUCIÓN DINERARIA

CAPÍTULO PRIMERO
ÁMBITO DE APLICACIÓN
Procedencia

Art. 604.- Serán aplicables las disposiciones contenidas en el presente título a todos los
reclamos derivados de la existencia de un título de ejecución cuando la obligación contenida en el
mismo sea líquida.

Para ordenar la ejecución se considerará líquida toda cantidad de dinero determinada,


expresada en el título con letras, cifras o guarismos comprensibles, prevaleciendo la que conste
con letras si hubiera disconformidad.

Sin embargo, al efecto de ordenar la ejecución, la cantidad que el ejecutante solicite por los
intereses que se pudieran devengar durante la ejecución y por las costas que ésta origine no tendrá
que ser líquida.

Vencimiento de un nuevo plazo de obligación

Art. 605.- Si durante la ejecución venciera algún plazo de la obligación ejecutada o ésta en su
totalidad, se entenderá ampliada la ejecución hasta el importe de los nuevos vencimientos o hasta

399
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

el total vencido, en su caso, lo que podrá pedirse en la solicitud de ejecución. La ampliación de la


ejecución será, por sí misma, causa suficiente para ordenar la mejora del embargo.

Si en el escrito inicial del ejecutante se solicita directamente la ampliación, en el auto que


ordene la ejecución se hará saber al ejecutado que aquélla operará de manera automática, salvo que
en fecha del vencimiento el ejecutado hubiera consignado las cantidades correspondientes en la
cuenta de fondos ajenos en custodia.

Audiencia previa a la ejecución posterior

Art. 606.- Fuera del caso previsto en el inciso segundo del artículo anterior, una vez solicitada
la ampliación de la ejecución se dará audiencia al ejecutado a efecto de que en un plazo no mayor
de tres días se allane o se oponga a la misma.

La incomparecencia del ejecutado al llamamiento se entenderá como sumisión a la ampliación


referida.

Oposición del ejecutado a la ampliación

Art. 607.- Si el ejecutado se opusiere a la ampliación de la ejecución y la causa en que se


funde fuese manifiestamente atendible, se abrirá un incidente en el que se expongan y prueben,
según sea el caso, las razones por las cuales no es procedente la ampliación.

Admitida la solicitud de ampliación, el juez ordenará la mejora del embargo y procederá como
en la ejecución original.

Rechazada la solicitud de ampliación, quedará expedito el derecho del acreedor para entablar
la demanda correspondiente por la suma cuya ampliación le ha sido denegada.

Cantidad por la que se despacha la ejecución

Art. 608.- La ejecución se decretará por la cantidad que indique el ejecutante en la solicitud,
en concepto de principal e intereses vencidos hasta la fecha en que se presenta.

Igualmente, alcanzará a la cantidad que provisionalmente se fije en concepto de intereses


devengados durante la ejecución y costas originadas por ésta, sin que esta cantidad pueda exceder
de una tercera parte de la señalada en el inciso anterior, salvo que excepcionalmente se justifique
una superior cuantía previsible, atendidas las circunstancias del caso. La ejecución por estas
cantidades se entiende sin perjuicio, de la posterior liquidación.

CAPÍTULO SEGUNDO
EJECUCIÓN Y CUMPLIMIENTO

Pago por el ejecutado de la suma debida

Art. 609.- El deudor podrá pagar en cualquier momento, poniendo a disposición del acreedor
el total de las cantidades adeudadas, mediante consignación de las mismas en el tribunal, que
deberá extender comprobante al deudor; y, tras la liquidación de las costas, se dará por cerrada la
ejecución.

También podrá el deudor allanarse sin más al pago de la suma debida tras recibir la notificación
de la ejecución, procediéndose conforme al inciso anterior.

400
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

Las costas de la ejecución se impondrán al ejecutado, salvo si acredita que por causa no
imputable a él estuvo impedido de hacer el pago.

Insatisfacción del acreedor

Art. 610.- Cuando la consignación que realice el deudor sea total, no se admitirá al respecto
insatisfacción alguna proveniente del acreedor.

El juez admitirá la consignación y en el acto remitirá a la cuenta de Fondos Ajenos en Custodia


la cantidad de dinero de que se trate, quedando ele plano extinguida la obligación.

Si el pago fuera parcial, se entenderá que la deuda queda extinguida en la cuantía pagada o
puesta a disposición del acreedor, y continuará la ejecución por el resto.

CAPÍTULO TERCERO
DETERMINACIÓN DEL PATRIMONIO DEL EJECUTADO

Obligación de manifestar bienes suficientes

Art. 611.- El juez exigirá al ejecutado que presente, en el plazo de cinco días, una declaración
bajo palabra de honor en la cual manifieste la tenencia y propiedad de bienes y derechos suficientes
para hacer frente a la ejecución.

Este requerimiento se hará con el apercibimiento de que, si no lo hace o lo hace falsamente,


incurrirá en las sanciones a que hubiere lugar por la desobediencia a mandato judicial.

Averiguación de bienes

Art. 612.- Si, instalada la ejecución, no se tuviere conocimiento de la existencia de bienes


suficientes en poder del ejecutado, el juez podrá dirigirse a los registros públicos pertinentes a
fin de que faciliten la relación de todos los bienes o derechos del ejecutado, de los que se tuviera
constancia.

También se podrá pedir que se solicite informe de los saldos de cuentas y depósitos que pudiera
tener el ejecutado en entidades financieras, hasta el límite de la cantidad objeto de ejecución.

Lo anterior será aplicable cuando la averiguación que pudiera efectuar el acreedor ejecutante
hubiese resultado infructuosa.

Deber de colaboración en la averiguación

Art. 613.- Las personas y entidades a las que se dirija el juez en aplicación del artículo anterior
están obligadas a prestar su colaboración y a entregarle cuantos documentos y datos tengan en
su poder. En todo caso se respetarán los derechos fundamentales y los límites que expresamente
impongan las leyes.

El juez podrá imponer multas periódicas a las personas y entidades que no presten la
colaboración que el tribunal les demande con arreglo al inciso anterior, en cantidades que oscilen
entre cinco y diez salarios mínimos, urbanos vigentes más altos, las que graduará según sea el
valor en litigio, sin perjuicio de informar al respecto a las entidades contraloras.

401
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

Si el tribunal recibiese datos ajenos a los fines de la ejecución, adoptará las medidas necesarias
para garantizar su confidencialidad.

Ausencia de bienes para total satisfacción

Art. 614.- Si resultan insuficientes los bienes ya realizados para cubrir la totalidad de la
deuda y no consta la existencia de otros, se ordenará el archivo provisional una vez agotados
razonablemente los medios de averiguación, hasta que se conozcan otros bienes del ejecutado.

De aparecer nuevos bienes se comunicará al tribunal que hubiere dictado el archivo por
insuficiencia de bienes.

La resolución que declara la insuficiencia de bienes y sus ulteriores modificaciones se anotarán


en los registros públicos pertinentes.

CAPÍTULO CUARTO
DEL EMBARGO
Regla general

Art. 615.- Despachada la ejecución, se procederá al embargo de bienes por medio de la


oportuna declaración judicial que lo acuerde, salvo que el ejecutado consigne la cantidad debida,
en cuyo caso se suspenderá el embargo.

Si el ejecutado formulare oposición, la cantidad consignada se depositará en la cuenta de


Fondos Ajenos en Custodia. Si no la formulare, la cantidad consignada para evitar el embargo se
entregará al ejecutante previa liquidación. (2)

Efecto del embargo


Art. 616.- Decretado el embargo, los bienes a que se refiera quedarán afectos a la ejecución.
No surtirá efecto alguno en perjuicio del ejecutante, ni de los responsables solidarios o
subsidiarios del ejecutado, la disposición a título gratuito o la renuncia que de los bienes o derechos
embargados haga el ejecutado durante la permanencia del embargo.
Ejecutor de embargos
Art. 617.- El embargo se hará por medio de un ejecutor de embargos, como delegado del juez
y con la autoridad conferida por éste. Si hubiera que embargar bienes ubicados en lugar distinto al
de la circunscripción territorial del tribunal, el ejecutor podrá realizar el embargo sin necesidad de
pedir autorización al juez competente de la localidad en que están los bienes.
Embargo mediante oficio
Art. 618.- El embargo sobre salarios o sobre bienes inscritos en cualquier oficina o registro
público podrá trabarse también mediante oficio que el juez librará a tales efectos.
Extensión y límites del embargo
Art. 619.- El embargo de una cosa o derecho, comprende el de todos sus accesorios,
pertenencias y frutos, aunque no hayan sido expresamente mencionados o descritos. (2)

402
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

Los bienes cuyo previsible valor sea mayor que la cantidad por la que se hubiera despachado
ejecución no podrán ser embargados, salvo que fueran los únicos existentes en el patrimonio del
ejecutado y que su afectación resultare necesaria para los fines de la ejecución.
Nulidad del embargo indeterminado
Art. 620.- Será nulo el embargo sobre bienes y derechos cuya efectiva existencia no conste.
No obstante lo dispuesto en el inciso anterior, podrán embargarse los depósitos bancarios y
los saldos favorables que arrojaren las cuentas abiertas en entidades de crédito, siempre que, en
razón del título ejecutivo, se determine una cantidad como límite máximo. De lo que exceda de ese
límite podrá el ejecutado disponer libremente.
Bienes inembargables

Art. 621.- Se consideran bienes inembargables los siguientes:


1°. Los bienes y derechos declarados inalienables, así como los que carezcan de contenido
patrimonial. Se podrán embargar, no obstante, los accesorios alienables con independencia
del principal.
2°. Los bienes y cantidades expresamente declarados inembargables por alguna disposición
legal o por Tratado Internacional.
3°. El mobiliario de la casa, así como las ropas del ejecutado y de su familia.
4°. Los libros e instrumentos necesarios para el ejercicio de la profesión, arte u oficio a que
se dedique el ejecutado.
5°. En general, aquellos bienes como alimentos, combustible y otros que, a juicio del tribunal,
resulten indispensables para que el ejecutado y las personas que de él dependen puedan
atender a su subsistencia con razonable dignidad.
6°. Los destinados al culto de las confesiones religiosas legalmente establecidas.
7°. Los que por su naturaleza, a criterio del juez, sean de valor inferior al de los gastos
necesarios para su realización.

Embargo de salarios

Art. 622.- También es inembargable el salario, sueldo, pensión, retribución o su equivalente,


en cuanto no exceda de dos salarios mínimos, urbanos, más altos vigentes. (2)

Sobre las cantidades percibidas en tales conceptos que excedan de dicha cuantía se podrá
trabar embargo de acuerdo con la siguiente proporción:
- un cinco por ciento para la primera cuantía adicional hasta que suponga el importe del
doble del salario mínimo;
- un diez por ciento para la cuantía adicional hasta el importe equivalente a un tercer salario
mínimo;
- un quince por ciento para la cuantía adicional hasta el importe equivalente a un cuarto
salario mínimo;
- un veinte por ciento para la cuantía adicional hasta el importe equivalente a un quinto
salario mínimo;
- un veinticinco por ciento para las cantidades que excedan de esta suma.

403
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

Nulidad de embargos

Art. 623.- Son nulos de pleno derecho los embargos de bienes inembargables y aquellos que
excedan los límites fijados en este código, aunque se realicen con el consentimiento del afectado.

Orden de bienes para el embargo

Art. 624.- Cuando hubiera bienes hipotecados o empeñados, se procederá contra ellos antes
que contra los que no lo estuvieran; pero si el deudor presentara otros bienes y el acreedor se
conforma se trabará en éstos el embargo.

También se embargarán desde luego otros bienes, siempre que, ajuicio del ejecutor de
embargos, no alcanzaren los bienes hipotecados.

Embargo de dinero. Garantía

Art. 625.- Si se embargara dinero en efectivo o divisas convertibles se estará a lo dispuesto en


la Ley Orgánica Judicial.

Embargo de cuentas, créditos, sueldos, salarios u otras remuneraciones

Art. 626.- Si se embargaran cuentas abiertas en entidades financieras, créditos, sueldos,


salarios u otras remuneraciones o, en general, bienes que generen dinero en favor del ejecutado
a cargo de un tercero, el juez ordenará a éste retener a disposición del tribunal la cantidad
correspondiente hasta el límite de lo adeudado en la ejecución. En lo que exceda de este límite
podrá el ejecutado disponer de sus cuentas bancarias o recibir las cantidades pertinentes.

Después de haberse ordenado judicialmente la retención del crédito del ejecutado no será
válido el pago hecho por el deudor.

Embargo de títulos, valores, o instrumentos financieros

Art. 627.- Si se embargaran títulos, valores o instrumentos financieros, el juez podrá


acordar el embargo de los dividendos, intereses, rendimientos de toda clase y reintegros que, a
su vencimiento, le correspondan al ejecutado, debiéndose notificar dicha decisión judicial a quien
deba hacer el pago, ordenándosele que retenga las cantidades a disposición del tribunal. También
podrá ordenar que se retenga el propio título, valor o instrumento financiero.

También se notificará el embargo a los responsables del mercado en que los títulos, valores
o instrumentos se negocien, o a los administradores de las sociedades emisoras, cuando aquéllos
representaran una participación en ella.

Embargo de intereses, rentas y frutos

Art. 628.- Cuando se embargan intereses, rentas o frutos, se ordenará a quien deba entregarlos
al deudor o a quien los perciba directamente que los retenga y los ingrese en la cuenta de Fondos
Ajenos en Custodia, si son intereses; o simplemente los retenga a disposición del tribunal, si fueran
rentas o frutos de otra clase.

Si fuera necesario, respecto de los últimos podrá ordenarse que se constituya una
administración judicial, con el objeto de asegurar una mejor garantía; e igual providencia podrá
acordarse cuando se desatendiera la orden de retención o ingreso.

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CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

CORTE SUPREMA DE JUSTICIA EN CORTE PLENA resolución 69-COM-


2015 de fecha veintiocho de mayo de dos mil quince.

“Tal como esta Corte lo ha venido sosteniendo, es legalmente procedente acumular las
ejecuciones de Sentencias, aunque alguno de los juicios de conocimiento ejecutivos
que dieron lugar a la demanda de ejecución forzosa hayan sido sustanciados bajo
el imperio del C.Pr.C. o no importando la normativa en que se hayan iniciado los
procesos –Código de Procedimientos Civiles o Código Procesal Civil y Mercantil-;
puesto que la finalidad de la expresada acumulación es garantizar el pago de
las obligaciones contraídas por los deudores, cuando en los procesos hayan sido
embargados los mismos bienes, es decir, que exista “comunidad de embargos”, tal
como lo refieren las disposiciones antes transcritas y el Art. 628 C.Pr.C.; toda vez
que se observen los créditos privilegiados, las garantías hipotecarias o prendarias,
y de no concurrir las mismas, los créditos deberán ser pagados de la manera
prevenida en el Art. 2229 C.C.; en relación a los arts. 628 Inc. 2º, 652 C.Pr.C. y 664
Inc. 2º. CPCM.”

Ahora bien, cabe señalar que en el Código Procesal Civil y Mercantil se estructuró
el juicio ejecutivo de manera distinta a como el Código de Procedimientos Civiles
lo regulaba. En la normativa actual hay dos procesos, el primero, cognitivo y el
segundo, de ejecución de Sentencia, ambos se inician a instancia de parte, por medio
de un escrito (Art. 570 CPCM), según las particularidades del caso. De forma que
el juez no puede iniciar oficiosamente la ejecución de la Sentencia. Esta situación
debe considerarse como premisa a efecto de que el juez decida la acumulación
de ejecuciones de Sentencias pronunciadas en distintos tribunales. Asimismo, es
menester mencionar que la ejecución se inicia a instancia de parte no de oficio. Si
aquella no ha sido iniciada por falta de impulso del acreedor, no puede acumularse
esta “ejecución de Sentencia”a otra, por cuanto aquélla no ha sido instaurada
todavía.”

Embargo de bienes muebles


Art. 629.- El embargo de muebles se llevará a cabo en el lugar donde éstos se encontraren.
Al practicar el embargo, el ejecutor hará constar la más exacta descripción posible de los bienes
embargados, con indicación de sus señas distintivas, del estado en que se encuentran y de todos
aquellos elementos que sirvan para efectos de la posterior realización. Al efecto, el ejecutor podrá
valerse de medios de documentación gráfica; y hará constar las manifestaciones que hagan en el
acto los intervinientes en el embargo.
Lo embargado se depositará con arreglo a derecho, adoptándose, en el propio acto, las medidas
precisas en orden al depósito y a la designación de depositario.
Designación del depositario
Art. 630.- Se determinará la entidad o persona encargada del depósito, teniendo en cuenta la
naturaleza del bien y su productividad. A instancia del ejecutante, se podrá designar depositario al
ejecutado o a un tercero de responsabilidad y solvencia.
Cuando se trate de objetos de especial valor o que necesiten cuidados especiales, el depósito
se realizará en la entidad pública o privada acreditada que resulte más conveniente.

405
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

Deberes del depositario


Art. 631.- El depositario debe custodiar y conservar los bienes con la debida diligencia,
exhibirlos en las condiciones que se le indiquen y entregarlos a la persona que el juez designe, pues
en otro caso se le removerá. Cuando el ejecutado fuere nombrado depositario, podrá autorizársele
el uso de lo embargado que no sea incompatible con su conservación, así como su sustitución si
lo exige la naturaleza de las cosas o la actividad empresarial, pero sus frutos o rentas quedarán
afectos a la ejecución.
Embargo de inmuebles
Art. 632.- Si se embargan inmuebles u otros bienes inscribibles en registros públicos, el
ejecutor de embargos deberá diligenciar el respectivo mandamiento de embargo hasta su efectiva
inscripción.
Si el bien cuyo embargo se pretende inscribir estuviese ya gravado, se dejará constancia de
ello en la respectiva acta, con especificación de la precedencia, de la anotación.
Embargo de empresas. Administración judicial
Art. 633.- Cuando, en un momento, la parte interesada solicitare el embargo de una empresa,
el tribunal nombrará un interventor con cargo a la Caja, y tal nombramiento se inscribirá en el
Registro de Comercio, luego de la aceptación y juramentación.
Corresponde al interventor con cargo a la caja:
1°. Vigilar la contabilidad de la empresa, poniendo cuidado en que los documentos coincidan
con tales movimientos;
2°. Vigilar las compras y ventas que se hagan en la empresa, poniendo cuidado en que los
documentos coincidan con tales movimientos;
3°. Supervisar el cobro de las deudas a favor de la empresa;
4°. Cuidar de que la inversión de fondos se haga adecuadamente;
5°. Llevar cuenta de las entradas y gastos de los bienes que son objeto de la intervención;
6°. Velar porque la empresa embargada continúe con la explotación del giro que tuviere
encomendado.

En caso de que el interventor notare abuso o malversación en la administración de dichos


bienes dará aviso al juez y al ejecutante, pudiendo el primero decretar el depósito y retención
de los productos líquidos en un banco o en poder de quien estime conveniente sin perjuicio de
informar a la Fiscalía General de la República.
Mejora y reducción del embargo
Art. 634.- Tanto el ejecutante como el ejecutado podrán pedir la mejora, la reducción o la
modificación del embargo cuando el cambio en las circunstancias haga dudar de la suficiencia de
los bienes afectos a la ejecución, o cuando el monto embargado exceda de lo necesario para hacer
frente a la obligación, o cuando las circunstancias del embargo puedan cambiar sin riesgo para el
éxito de la ejecución.
Reembargo
Art. 635.- Salvo las excepciones legales, cualquier bien embargado podrá ser objeto de
ulteriores embargos, adoptando el Juez las medidas oportunas para su efectividad. (2)

406
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

CAPÍTULO QUINTO
TERCERÍA DE DOMINIO

Tercerista de dominio

Art. 636.- Podrá interponer tercería de dominio, en forma de demanda, el que afirme ser
dueño de un bien embargado como perteneciente al ejecutado, siempre que no lo hubiera adquirido
de éste una vez trabado el embargo.

También podrán interponer tercerías para el alzamiento del embargo quienes sean titulares de
derechos que, por disposición legal expresa, puedan oponerse al embargo o a la realización forzosa
de uno o más bienes embargados como pertenecientes al ejecutado.

CÁMARA SEGUNDA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, SAN SALVADOR, Apelación N°48-4CM-14-A de Fecha: veintinueve
de agosto de dos mil catorce.

“4.9.- De acuerdo con los doctrinarios, la Tercería es una figura procesal que
permite a personas ajenas a la relación jurídica procesal, intervenir válidamente
en un proceso para defender derechos o intereses propios, no necesariamente
vinculados o dependientes del sustrato fáctico en disputa.

4.10.- Constituye por tanto, una cuestión incidental y una forma concreta de
oposición a medidas ejecutivas concretas, ya que, a consecuencia de un embargo se
ha afectado bienes que no pertenecen al ejecutado, sino a una persona que es ajena
a la ejecución.

4.11.- En ese sentido, la finalidad de una Tercería de dominio es determinar que el


bien embargado no es propiedad del deudor sino del tercerista, a fin de lograr el
desembargo del mismo, por lo que será importante demostrar dentro del proceso,
que el bien embargado pertenecía al tercero desde antes que se trabara el embargo
en contra de los bienes del demandado. (Art. 636 inciso 1° CPCM).

4.12.- La Tercería ha de iniciarse por medio de una demanda que por competencia
funcional se interpondrá ante el mismo juez que esté conociendo del proceso
principal, comenzando desde el momento en que se tuviere conocimiento que se ha
embargado un bien que no pertenece al deudor; esto implica que habrá de seguirse
en pieza separada respecto del proceso principal, y que habrá que presentar
prueba del derecho en que se fundamenta, caso contrario, no podrá darse trámite
a la demanda presentada, por lo que si el tercerista no presentara dicha prueba,
el legislador ha contemplado el darle la oportunidad de subsanar la omisión de la
presentación de prueba, tal como dispone el artículo 637 CPCM.”

Demanda de tercería de dominio

Art. 637.- La tercería de dominio deberá interponerse ante el mismo juez que esté conociendo
del proceso, desde que se hubiera trabado embargo en el bien o en los bienes a que se refiera.

Con la demanda de tercería de dominio deberá aportarse un principio de prueba del


fundamento de la pretensión del tercerista.

407
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

Si a la demanda de tercería de dominio no se acompaña el principio de prueba exigido, se


prevendrá al tercerista por una sola vez, y por el plazo de tres días, para que se subsane dicha
omisión; si no lo hiciera, se rechazará la demanda. También se rechazará la que se interponga
después de la entrega del bien al acreedor o al tercero que lo adquiera en pública subasta.

CÁMARA PRIMERA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO, SAN SALVADOR, Apelación N°170-67CM1-2015 de Fecha: catorce
de diciembre de dos mil quince.

“En el caso sub-lite, la administradora de justicia, fundamenta la improponibilidad


de la demanda, en dos puntos: el primero, en que para dar inicio a un Proceso
Declarativo Común de Tercería de Dominio, es necesario que el título en que se
funde la pretensión se encuentre inscrito para hacer valer su derecho frente a
terceros, tomando en cuenta el principio de inoponibilidad consagrado en los
Arts. 680, 683, 686 Ord. 1° y 718 C.C., lo cual no se había cumplido en el presente
caso; y segundo, que el inmueble adquirido por la demandante, se encontraba en
proindivisión, razón por la cual se carece de un requisito esencial, debido a que no
presentó una declaratoria de heredero para hacer valer su derecho por sí sola con
relación a la totalidad del inmueble.

Respecto a lo ocurrido, es importante señalar que el Art. 277 Inc. 1° CPCM., dispone
que si presentada la demanda, el juez advierte algún defecto en la pretensión, como
decir que su objeto sea ilícito, imposible o absurdo; carezca de competencia objetiva
o de grado, o atinente al objeto procesal, como la litispendencia, la cosa juzgada,
compromiso pendiente; evidencia falta de presupuestos materiales o esenciales
y otros semejantes, se rechazará la demanda sin necesidad de prevención por ser
improponible, debiendo explicar los fundamento de la decisión.
En concordancia con lo expresado, dicha figura está reservada para defectos que,
por su naturaleza, no admiten corrección o subsanación.
Ahora bien, este Tribunal tiene el criterio que el ejercicio del poder- deber del
juzgador para rechazar la pretensión, deber ser ejecutado con suma prudencia,
ya que debe concurrir un verdadero obstáculo de carácter material o esencial,
que impida la facultad de juzgar, siendo éste un defecto absoluto que restrinja al
demandante su derecho constitucional de acceso a la justicia.
En atención a lo expuesto en los párrafos que preceden, al analizar lo pretendido en
la demanda formulada por la apoderada de la parte demandante, licenciada […], en
su escrito de fs. […], no se advierte un obstáculo insalvable para que la pretensión
sea tramitada bajo la óptica de un proceso constitucionalmente configurado, por dos
razones fundamentales:
La primera, es que si bien es cierto los Arts. 680, 683, 686 Ord. 1° y 718 C.C.,
contemplan el principio de inoponibilidad contra terceros como lo sostiene la
Jueza A Quo, en el sentido de que el que funde su pretensión de tercería debe tener
un documento inscrito, tales disposiciones legales no son óbice para rechazar la
demanda por esta sola circunstancia, debido a que como lo expone la recurrente, el
Inc. 2° del Art. 637 CPCM., únicamente impone la carga procesal a la parte actora,

408
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

de aportar un principio de prueba del fundamento de la pretensión; de suerte que


al existir duda en cuanto a si realmente le asiste o no el derecho, debe verificarse
mediante el dictado de una Sentencia, pues de la exégesis de la disposiciones
sustantivas o materiales citadas por la administradora de justicia, no se logra una
armonía e integración congruente con la vigencia de la nueva normativa procesal,
pues el legislador en este último cuerpo normativo, hubiese dispuesto la obligación
de que el tercerista fundara su demanda en documento inscrito, lo cual no es así.”
CÁMARA SEGUNDA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL
CENTRO, SAN SALVADOR Apelación N°48-4CM-14-A de Fecha: veintinueve
de agosto de dos mil catorce.
“De acuerdo con los doctrinarios, la Tercería es una figura procesal que permite
a personas ajenas a la relación jurídica procesal, intervenir válidamente en un
proceso para defender derechos o intereses propios, no necesariamente vinculados o
dependientes del sustrato fáctico en disputa.
Constituye por tanto, una cuestión incidental y una forma concreta de oposición a
medidas ejecutivas concretas, ya que, a consecuencia de un embargo se ha afectado
bienes que no pertenecen al ejecutado, sino a una persona que es ajena a la
ejecución.
En ese sentido, la finalidad de una tercería de dominio es determinar que el bien
embargado no es propiedad del deudor sino del tercerista, a fin de lograr el
desembargo del mismo, por lo que será importante demostrar dentro del proceso,
que el bien embargado pertenecía al tercero desde antes que se trabara el embargo
en contra de los bienes del demandado. (Art. 636 inciso 1° CPCM).
La Tercería ha de iniciarse por medio de una demanda que por competencia
funcional se interpondrá ante el mismo juez que esté conociendo del proceso
principal, comenzando desde el momento en que se tuviere conocimiento que se ha
embargado un bien que no pertenece al deudor; esto implica que habrá de seguirse
en pieza separada respecto del proceso principal, y que habrá que presentar
prueba del derecho en que se fundamenta, caso contrario, no podrá darse trámite
a la demanda presentada, por lo que si el tercerista no presentara dicha prueba,
el legislador ha contemplado el darle la oportunidad de subsanar la omisión de la
presentación de prueba, tal como dispone el Art. 637 CPCM.”
Prohibición dé ulteriores tercerías

Art. 638.- No se permitirá en ningún caso segunda o ulterior tercería sobre los mismos bienes,
fundada en títulos o derechos que poseyera el que la interponga al tiempo de formular la primera.

Efectos de la admisión de la tercería de dominio

Art. 639.- La admisión de la demanda de tercería sólo suspenderá la ejecución respecto del
bien a que se refiera.

El juez, previa audiencia de las partes, podrá condicionar la admisión de la demanda de


tercería a que el tercerista preste caución por los daños y perjuicios que pudiera producir al
acreedor ejecutante.

409
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

A juicio prudencial del tribunal y a instancia de parte, con la admisión de una tercería de
dominio podrá ordenarse la mejora del embargo.

Procedimiento y legitimación

Art. 640.- La tercería de dominio se tramitará por la vía del proceso común, y en él sólo podrá
decidirse sobre la continuidad o el alzamiento del embargo que hubiera recaído en el bien al que se
refiera la tercería.

La demanda de tercería se presentará contra el acreedor ejecutante y contra el deudor


ejecutado.

Resolución. Desestimación

Art. 641.- La tercería se decidirá por auto que no causará efecto de cosa juzgada.

En caso de que se desestime la tercería se ordenará que continúe el embargo sobre el bien.

Resolución estimatoria y alzamiento del embargo

Art. 642.- El auto que estime la tercería de dominio ordenará el alzamiento de la traba y la
remoción del depósito, así como la cancelación de la anotación preventiva y de cualquier otra
medida de garantía del embargo sobre el bien al que se refiera la tercería.

CAPÍTULO SEXTO
TERCERÍA DE PREFERENCIA DE PAGO

Tercerista de pago

Art. 643.- La intervención de un tercero en la ejecución, fundada en su derecho a ser


reintegrado de su crédito con preferencia sobre el acreedor ejecutante, deberá deducirse ante el
juez que esté conociendo de la ejecución, y se sustanciará con el ejecutante y el ejecutado, por los
trámites del proceso común.

La tercería así promovida no suspenderá la ejecución en trámite, debiendo continuarse ésta


hasta la realización de los bienes o derechos embargados. Su importe, hasta el límite de la cuantía
discutida, se depositará en la Cuenta de Fondos Ajenos en Custodia.

Procedimiento y legitimación

Art. 644.- A la demanda, que deberá dirigirse contra el acreedor ejecutante, se acompañará un
principio de prueba del derecho alegado, sin el cual será rechazada.

Igualmente se rechazará la demanda cuando se formule después de realizado el pago al


acreedor ejecutante, así como la que se interponga después de la entrega del bien al ejecutante,
siempre que éste ya hubiera adquirido su titularidad conforme al derecho civil.

El proceso se limitará a decidir sobre la existencia del privilegio y el orden de satisfacción de


los distintos créditos, sin prejuzgar otras acciones que pudieran ejercitarse.

El ejecutado podrá intervenir en este proceso, a cuyo fin se le notificará la demanda, dándole
audiencia de la misma.

410
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

Allanamiento y desistimiento del ejecutante

Art. 645.- Si el crédito del tercerista consta en título ejecutivo y el ejecutante se allana a
esa tercería de mejor derecho, se dictará, sin más trámites, auto que ordene seguir adelante la
ejecución, para satisfacer en primer lugar al tercerista.

Si el crédito del tercerista no constase en título ejecutivo, el ejecutado que estuviere personado
en la tercería deberá expresar su conformidad o disconformidad con el allanamiento del ejecutante,
dentro de los cinco días siguientes a aquel en que se le hubiera dado traslado del escrito de
allanamiento. Si el ejecutado se mostrase conforme con el allanamiento o dejara transcurrir el
plazo sin expresar su disconformidad, se procederá conforme a lo dispuesto en el inciso anterior.
Cuando el ejecutado se oponga al allanamiento, se dictará auto en el que se tendrá por allanado al
ejecutante, mandando seguir la tercería con el ejecutado.

Si, notificada la demanda, el ejecutante desistiese de la ejecución, se procederá conforme a lo


establecido en el inciso anterior, sin necesidad de obtener la conformidad del ejecutado, siempre
que el crédito del tercerista constase en título ejecutivo. Si no fuera así, se sobreseerá en el proceso
de ejecución, salvo que el ejecutado se mostrare de acuerdo en que prosiga para satisfacer el
crédito del tercerista.

CAPÍTULO SÉPTIMO
REALIZACIÓN Y SUBASTA DE LOS BIENES EMBARGADOS

Realización inmediata de bienes


Art. 646.- El dinero, los saldos en depósito, bienes o valores que sean aceptados por el
ejecutante en su valor nominal y las divisas convertibles se entregarán al acreedor previo recibo.
Las acciones, obligaciones y otras formas de participación societaria se realizarán mediante
enajenación en el correspondiente mercado, o conforme a las normas que sean de aplicación si no
son cotizables en el mercado.
Valúo de los bienes embargados
Art. 647.- En todo caso, se procederá al valúo de los bienes embargados por medio de perito
nombrado por el Juez.
Para valorar los bienes, el juez nombrará un perito tasador que demuestre conocimientos
técnicos en la materia.
El perito que se designe podrá ser recusado por el ejecutante y por el ejecutado que ha
comparecido.
Aceptado el encargo, el perito entregará al tribunal la valoración en el plazo de cinco días,
salvo que concurran circunstancias justificadas para fijar otro, que no excederá de diez días. La
valoración se ajustará a los criterios de mercado. En el caso de bienes inmuebles, no se descontarán
las cargas o gravámenes que pudieran tener.
Enajenación previa de bienes

Art. 648.- El ejecutado podrá presentar a un interesado en adquirir total o parcialmente lo


embargado, por el valor de tasación.

411
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

Si el ejecutado hace uso de esta facultad con fines dilatorios, se le rechazará dicha participación
en resolución motivada.

Audiencia para la realización de los bienes

Art. 649.- Justipreciados los bienes, se citará, a instancia de cualquiera de ellos, a las partes
y a los terceros que tengan derechos sobre los bienes por liquidar a una audiencia que tendrá
por objeto decidir la mejor forma de realización de dichos bienes. La audiencia se llevará a cabo
aunque no concurran todos los citados en forma, si al menos estuvieran presentes el ejecutante y el
ejecutado.

Los concurrentes podrán proponer en la audiencia el procedimiento de realización y sus


condiciones, y presentar en el acto personas que, con la debida fianza, se ofrezcan a adquirir los
bienes por el justiprecio.

Riesgo de pérdida o depreciación de los bienes embargados

Art. 650.- Si por la demora en la realización pudiere originarse depreciación trascendente, o


pérdida o extinción de los bienes o derechos, se podrá ordenar en cualquier momento su realización
sin ajustarse estrictamente a los procedimientos establecidos en este código, así como la variación
de plazos o de las restantes condiciones.
Convenio de realización
Art. 651.- Si hay acuerdo entre ejecutante y ejecutado sobre la forma de realización,
la aprobará el juez por medio de auto, salvo que sea contraria a la ley o que cause perjuicios a
terceros. En caso de aprobarla, señalará un plazo máximo para proceder a la misma, quedando
suspendida entre tanto la ejecución.
Cumplido el convenio, se sobreseerá en la ejecución si el ejecutante quedó totalmente
satisfecho; y, de no ser así, se continuará por la cantidad restante.
Si se hubiera incumplido el convenio de realización, se levantará la suspensión y se procederá
a la subasta del bien.
Realización por el ejecutado
Art. 652.- El ejecutado podrá pedir que se le autorice para realizar el bien, sobre lo que
decidirá el juez oyendo al ejecutante.
Si accediere a la solicitud, fijará un plazo máximo para la realización, con el apercibimiento
de que, si el bien no se realizare, deberá abonar al ejecutante los daños y perjuicios que se le
causen.
Delegación en la realización de los bienes
Art. 653.- A instancia de ambas partes, se podrá encomendar la realización de todos o de
alguno de los bienes a persona designada al efecto, que sea idónea por su especialidad y eficacia.
La persona designada deberá llevar a efecto todas las actuaciones materiales y jurídicas que
comporte la realización de los bienes de que se trate; y podrá asumir, en su caso, la condición de
depositaria de los mismos, para lo cual prestará caución que garantice el buen fin del encargo.

412
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

Además, deberá ajustarse a los límites que se le impongan al encargo, de acuerdo con las
normas que lo rigen; y le tocará realizar, bajo su responsabilidad, las actuaciones encomendadas
y las que exija la naturaleza de los bienes, debiendo poner en conocimiento de los adquirentes el
estado de aquéllos.
La realización no podrá hacerse por valor inferior al justiprecio tasado. La cantidad obtenida se
ingresará en la Cuenta de Fondos Ajenos en Custodia, descontándose los honorarios y comisiones
que deba percibir la persona que realizó el bien. Aprobada la gestión por el tribunal, se le devolverá
al realizador la caución prestada.
Si la venta se anulare por causa imputable a la persona designada, deberá reintegrar el
importe de la comisión y de los honorarios que hubiera percibido, y responderá personalmente
de la regularidad del procedimiento de realización encomendado, sin perjuicio de las demás
responsabilidades que procedan.

Adjudicación de bienes

Art. 654.- El ejecutante tendrá en todo momento derecho de adjudicarse o de adquirir los
bienes por la cantidad del justiprecio.

La adjudicación de bienes al acreedor extingue su crédito hasta el límite del valor del bien. Si
dicho valor fuera superior al importe de su crédito deberá abonar la diferencia.

Entrega de los bienes en administración

Art. 655.- El acreedor ejecutante podrá solicitar la entrega de los bienes en administración
en cualquier momento de la ejecución. Cuando se solicite, así se hará, si el juez entiende que lo
solicitado se ajusta a la naturaleza de los bienes embargados, y previa audiencia, en su caso, de
terceros afectados por tener derechos inscritos con posterioridad a los del ejecutante.

El ejecutante deberá rendir cuentas de la administración con la periodicidad que fije el juez. El
ejecutado o terceros afectados podrán oponerse a la liquidación presentada, en el plazo de seis días
contados desde que se le comuniquen las cuentas. La discrepancia se resolverá en una audiencia en
la que las partes podrán valerse de las pruebas pertinentes. (2)

La administración cesará cuando con las rentas o productos se cubra la cantidad total objeto
de ejecución, o cuando el ejecutado abone la cantidad íntegra que en ese momento adeude. En todo
caso, el ejecutante deberá rendir una cuenta final de la administración.

Convocatoria de subasta

Art. 656.- Se acordará de oficio la realización de los bienes embargados mediante


subasta judicial cuando no puedan aplicarse o cuando hubieran resultado ineficaces los demás
procedimientos disponibles.

A toda subasta se le dará publicidad por medio de edictos que se fijarán en el tablero del
tribunal, los cuales además deberán publicarse en extracto en un periódico de circulación nacional.
La convocatoria se hará con, al menos, quince días de antelación a la fecha en que haya de
celebrarse la subasta. En el anuncio respectivo se indicará la fecha, así como el lugar y hora de
celebración.

413
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

CORTE SUPREMA DE JUSTICIA EN CORTE PLENA: Referencia: 336-


COM-2013 de fecha veintidós de abril de dos mil catorce.

“Debe tenerse claro, que la venta en pública subasta es un negocio jurídico.


Como tal es una venta de un bien o bienes, con la novedad que el comprador
eventual está representado por la universalidad de sujetos que pueden acudir a ella
y tomar la calidad de postores. Además, porque es dirigida por autoridad judicial,
quien actúa en calidad de representante del ejecutado.
Varios principios concurren al procedimiento que conduce a la realización del
bien y al acto mismo, como son, la publicidad y la transparencia. Ambos pueden
concretarse mediante la publicación de los edictos, pero también es necesario que
el acto mismo se verifique ante los ojos de todo aquel que pueda ver y oír, en cuyo
caso, debiese celebrarse en plaza pública, en cuyo escenario la autoridad judicial de
viva voz debe anunciar su realización, ejecutarlo y hacer partícipe a quien lo solicite
verbalmente en el mismo instante en que ocurre el acto.
Ello es una forma de llevar a la práctica el concepto de “Acceso a la Justicia”en su
vertiente material, pues se permite que cualquier persona pueda estar en condiciones
de tomar parte del acto y formular posturas. Para ello la infraestructura juega un
papel importante. Como política judicial administrativa debiese, por ejemplo,
construirse un palacio judicial que albergue a los juzgados competentes en materia
civil y mercantil, y disponer su ubicación de tal suerte que cualquier usuario que
acceda pueda con facilidad apreciar el orden de horario de las ventas en pública
subasta y su realización, pudiendo considerarse que algunos de ellos se ubiquen
entorno a una plaza central en la que algún transeúnte o corredor de bienes pueda
asistir al acto con solo hacerse presente al lugar. De modo que bajo un principio de
máxima transparencia de ese acto descartamos que tales ventas sean celebradas en
los despachos privados de jueces o en salas de audiencias.
Asimismo, en su calidad de acto público, la subasta como medio para realizar la
venta del bien embargado, debe realizarse, aunque la parte ejecutada no asista.
Véase que el juez es el representante del ejecutado, tradente, que viene a ser la
persona cuyo dominio del bien se transfiere, Arts. 652 Inc. 3 y 695 C.C. Por eso,
la venta en pública subasta debe celebrarse cuando todos los sujetos interesados
han sido debidamente citados, aunque no asistan. Es más, si el ejecutante no lo
hace, tampoco es óbice para la celebración de la venta. Suspenderla en condiciones
contrarias es atentar contra el interés del acreedor, precisamente en perjuicio del
derecho a que se le dispense un proceso sin dilaciones indebidas, lo que pudiese ser
incluso objeto de sanción administrativa contra el infractor.”
Requisitos para participar en subasta
Art. 657.- Para participar en la subasta el interesado deberá comprobar su solvencia económica.
Condiciones de la subasta y requisitos del oferente
Art. 658.- En los edictos se incluirá un pliego con todas las condiciones, generales o
particulares, de la subasta, si las hubiere, y con los datos y circunstancias que sean relevantes para
el éxito de ésta.

414
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

Para tomar parte en la subasta los oferentes deberán identificarse de manera suficiente y
declarar que conocen las condiciones generales y particulares de la misma.
El ejecutante podrá tomar parte en la subasta y mejorar las posturas que se hicieren.
También podrá hacer postura, reservándose la facultad de ceder el remate a un tercero. La
cesión se verificará mediante comparecencia ante el tribunal, con asistencia del cesionario, que
deberá aceptarla, con previo o simultáneo pago del precio del remate.
Condiciones especiales de la subasta de inmuebles
Art. 659.- En el caso de la subasta de inmuebles, además de, los requisitos exigidos en
el artículo anterior, en los edictos se hará constar que hay en el juzgado certificación registral
actualizada sobre los bienes en subasta.
Desarrollo y terminación de la audiencia de subasta
Art. 660.- El acto de la subasta, que será presidido por el juez, comenzará con la lectura de
la relación de bienes, o, en su caso, de los lotes de bienes, y de las condiciones especiales de la
subasta. Cada lote de bienes se subastará por separado.
A continuación, se irán sucediendo las diversas posturas en relación con el bien o lote de que
se trate, las cuales serán repetidas en voz alta por el Juez. La subasta terminará con el anuncio de la
mejor postura y el nombre de quien la formulara. (2)

Terminada la subasta, se levantará acta de ella, en la que se harán constar los nombres de los
que participaron y las posturas que formularon.

CORTE SUPREMA DE JUSTICIA EN CORTE PLENA conflicto de competencia


Referencia, 336-COM-2013 de fecha veintidós de abril de dos mil catorce.
“Asimismo, en su calidad de acto público, la subasta como medio para realizar la
venta del bien embargado, debe realizarse, aunque la parte ejecutada no asista.
Véase que el juez es el representante del ejecutado, tradente, que viene a ser la
persona cuyo dominio del bien se transfiere, Arts. 652 Inc. 3 y 695 C.C. Por eso,
la venta en pública subasta debe celebrarse cuando todos los sujetos interesados
han sido debidamente citados, aunque no asistan. Es más, si el ejecutante no lo
hace, tampoco es óbice para la celebración de la venta. Suspenderla en condiciones
contrarias es atentar contra el interés del acreedor, precisamente en perjuicio del
derecho a que se le dispense un proceso sin dilaciones indebidas, lo que pudiese ser
incluso objeto de sanción administrativa contra el infractor.
El cumplimiento dinámico y eficiente de las normas de ejecución de sentencia pudiere
contribuir a dinamizar el mercado de bienes a los que se encuentren adscritos los
embargados. Para el caso, si se trata de un bien raíz, pudiere incidir en el mercado
inmobiliario, en tanto se generan las condiciones propicias para despertar el interés
de los diferentes agentes involucrados en el sector. Lo que constituiría un aporte del
Órgano Judicial a la Economía Nacional.
Todo lo anterior puede propiciar el cumplimiento de lo siguiente: el principio de
completa satisfacción del ejecutante, los principios de publicidad y transparencia,
de economía procesal, acceso a la justicia y seguridad jurídica.

415
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

Aprobación del remate

Art. 661.- El juez aprobará el remate a favor del mejor postor mediante auto, en el mismo día
o en el siguiente.

El rematante habrá de pagar el total de su postura dentro de un plazo máximo de diez días. Si
fuera el ejecutante el que hubiera hecho la mejor postura, se procederá a la liquidación de lo que se
le deba por principal e intereses, y deberá consignar la diferencia, si la hubiere, dentro de los diez
días siguientes, teniendo en cuenta la liquidación de costas.

Realizado el pago, se pondrá al adjudicatario en posesión de los bienes, procediéndose


a la inscripción de su derecho en los registros públicos en los que el bien se hallase inscrito y
debiéndose cancelar las cargas posteriores al embargo.

Si dentro del plazo señalado no se hubiere efectuado el pago, se revocará el auto que aprobó el
remate, quedando en todo caso el oferente obligado al pago de los daños y perjuicios ocasionados.

Posturas que ofrezcan pagar a plazos (2)

Art. 662.- Cuando existiendo posturas superiores al valor tasado y se ofrezca pagar a plazos
con garantías suficientes, bancarias o hipotecarias, el ejecutante podrá pedir en los cinco días
siguientes la adjudicación de los bienes por el valor tasado. Si el ejecutante no usa este derecho, se
aprobará el remate en favor del mejor postor.

Adjudicación en pago de los bienes no vendidos

Art. 663.- Si en el acto de la subasta no hubiere ningún postor, podrá el ejecutante pedir la
adjudicación de los bienes por el valor tasado.

Distribución y pago de la suma debida

Art. 664.- Las cantidades que se obtengan en favor de los ejecutantes se aplicarán, por su
orden, al pago del principal, intereses y costas, una vez liquidados aquéllos y tasadas éstas. El
resto, si lo hubiere, se pondrá a disposición del deudor.

Cuando hubiere varios embargantes y resultare insuficiente el sobrante, se distribuirá el pago


a prorrata. Si hay terceros con derecho preferente, se les pagará en el orden debido, conforme a las
disposiciones del código civil y leyes pertinentes.

CAPÍTULO OCTAVO
NORMAS ESPECIALES SOBRE REALIZACIÓN DE INMUEBLES

Certificación de dominio y cargas

Art. 665.- Cuando el objeto de la subasta sea un bien susceptible de inscripción en un registro
público, el tribunal librará mandamiento al registro de que se trate para que le remita certificaciones
en la que conste la titularidad del dominio sobre el bien así como los derechos reales que lo afectan
y las cargas que lo graven, en su caso.

416
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

El encargado del registro hará constar al margen del asiento respectivo la expedición de la
certificación a que se refiere el inciso anterior, expresando la fecha y el procedimiento a que se
refiera.

Valoración de inmuebles para subasta

Art. 666.- Los bienes inmuebles saldrán a subasta por el justiprecio tasado.

Enajenación por convenio o realización delegada (2)

Art. 667.- La enajenación por convenio o realización delegada será aprobada judicialmente
si consta que la transmisión del bien se produjo con conocimiento, por parte del adquirente, de la
situación registral que resulte de la certificación de cargas.

Titulares de derechos anteriores preferentes

Art. 668.- A petición del ejecutante, el tribunal se dirigirá a los titulares de los créditos
anteriores que sean preferentes al que se ejecuta para que informen sobre la subsistencia actual
del crédito garantizado, su actual cuantía, la fecha de vencimiento y, en su caso, los plazos
y condiciones en que el pago deba efectuarse. Si el crédito estuviera vencido y no pagado, se
informará también de los intereses moratorios vencidos y de la cantidad a la que asciendan los
intereses que se devenguen por cada día de retraso.
Dicho informe deberá rendirse en el plazo máximo de diez días; y el procedimiento continuará
aunque dicho informe no se rinda.
Titulares de derechos posteriormente inscritos
Art. 669.- El tribunal comunicará la existencia de la ejecución a los titulares de derechos
inscritos con posterioridad al del ejecutante, si su domicilio consta en el registro. Los demás
titulares de derechos posteriores no serán notificados, pero podrán intervenir en la ejecución si
acreditan la inscripción registral.
Cualquier titular de derechos inscritos con posterioridad al gravamen que se ejecuta podrá
subrogarse en los derechos del ejecutante si paga el principal, intereses y costas generadas hasta el
momento del pago. De este hecho quedará constancia en el registro mediante nota al margen.
Comunicación de la ejecución a arrendatarios y a ocupantes de hecho
Art. 670.- Si en el inmueble embargado hubiera ocupantes que no fueran el ejecutado o los
que con él convivan, se les notificará la existencia de la ejecución, para que en el plazo de cinco
días presenten al tribunal los títulos que justifiquen su situación.
El anuncio de la subasta dará a conocer la situación posesoria del inmueble, y, en el caso
de haber ocupantes, deberá contener la orden de desalojo, cuando se trate de ocupación de mero
hecho o sin título suficiente, o comunicar que los ocupantes tienen derecho a permanecer en el
inmueble tras la enajenación del bien.
En todo caso, esta declaración judicial sobre los ocupantes de un inmueble dejará a salvo,
cualquiera que fuere su contenido, los derechos de los interesados, que podrán ejercitarse en el
proceso que corresponda.

417
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

Tercer poseedor
Art. 671.- El que pase a ser tercer poseedor del inmueble objeto de embargo después de
trabado éste, podrá personarse en la ejecución sin que se suspenda su curso, antes de que el
embargo se realice, debiendo acreditar la inscripción de su título.
El tercer poseedor podrá liberar el bien antes de su realización satisfaciendo lo que se deba
al acreedor por principal, intereses y costas, dentro de los límites de la responsabilidad a que esté
sujeto el bien.
Inscripción de la adquisición
Art. 672.- El adquirente de un bien ejecutado, sea por convenio, realización, delegación o
subasta, podrá inscribir su derecho en los registros correspondientes. Para ello, el tribunal expedirá
certificado de la transferencia y justificante de que se ha efectuado el pago o consignación de
la cantidad acordada o, en su caso, comprobación del financiamiento que hubiera obtenido para
realizar la adquisición.
Cancelación de cargas
Art. 673.- A instancia del adquirente, se expedirá, en su caso, mandamiento de cancelación de
la anotación o inscripción del gravamen que originó el remate o la adjudicación, así como de todas
las inscripciones o anotaciones posteriores, haciéndose constar en el mismo mandamiento que el
valor de lo vendido o adjudicado es igual o inferior al importe total del crédito del demandante y,
en caso de haberlo superado, que se retuvo el remanente a disposición de los interesados.
Posesión judicial y ocupantes del inmueble

Art. 674.- El adquirente podrá entrar en posesión del inmueble que no se hallare ocupado;
y, cuando lo esté, podrá hacerlo si se hubiera declarado que los ocupantes no tienen derecho a
mantener la ocupación tras el remate o la adjudicación. En este caso, se procederá al lanzamiento,
sin perjuicio de las acciones que los ocupantes pretendan ejercitar.

TÍTULO CUARTO
LA EJECUCIÓN DE HACER, NO HACER Y DAR COSA DETERMINADA

CAPÍTULO PRIMERO
EJECUCIÓN DE OBLIGACIONES DE HACER

SECCIÓN PRIMERA
OBLIGACIONES DE HACER NO PERSONALÍSIMAS

Solicitud y requerimiento

Art. 675.- Cuando, admitida la solicitud del ejecutante, el obligado no cumpla la prestación de
hacer, se le requerirá para que lo haga en sus propios términos con lo que el título establezca, dentro
del plazo que el juez estime necesario según la naturaleza de la obligación y las circunstancias del
caso. El plazo señalado para el inicio del cumplimiento en ninguna circunstancia podrá exceder de
quince días.

418
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

Medidas de garantía

Art. 676.- Cuando no pudiera tener inmediato cumplimiento la obligación que se pretenda
ejecutar y la demora pudiese poner en peligro su efectividad, se podrán decretar, a instancia del
ejecutante, las medidas de garantía que se consideren oportunas.

Si se acuerda el embargo, deberá recaer en bienes suficientes para asegurar el cumplimiento


de la obligación principal y el pago de los intereses, indemnización por daños y perjuicios y costas
de ejecución que pudiera resultar.

El embargo se alzará si el ejecutado presta caución en cuantía suficiente, fijada por el tribunal
al acordarlo, conforme a lo dispuesto en este código.

Incumplimiento de la obligación. Sustitución o indemnización

Art. 677.- Si el obligado no cumpliere con lo que se le ordene, dentro del plazo señalado, o
lo hiciere contraviniendo inicialmente o con posterioridad el tenor de la obligación, el ejecutante
podrá pedir que se le faculte para encargar el cumplimiento a un tercero, a costa del ejecutado, o
solicitar que el costo de lo ordenado se abone como daños y perjuicios.

No obstante, cuando el título contenga una disposición expresa para el caso de incumplimiento
del deudor, se estará a lo dispuesto en él.

Realización por un tercero

Art. 678.- Si el ejecutante opta por encargar la realización a un tercero, se valorará el coste de
la misma, sea mediante el presupuesto presentado por el ejecutante o por una pericia ordenada por
el juez; y se procederá al embargo y realización de bienes del ejecutado hasta obtener la cantidad
que se determine. El ejecutante designará a la persona que habrá de encargarse de la ejecución, la
cual será nombrada por el juez.

Resarcimiento de daños y perjuicios

Art. 679.- Si el ejecutante opta por el resarcimiento de daños y perjuicios, se procederá a


cuantificarlos conforme se previene para la liquidación de cantidades.

SECCIÓN SEGUNDA
OBLIGACIONES DE HACER PERSONALÍSIMAS

Solicitud y requerimiento

Art. 680.- Si, admitida la solicitud del ejecutante, el obligado no realizare la prestación, se
le requerirá para que, dentro del plazo que el juez estime necesario de acuerdo con la naturaleza
de la obligación y con las circunstancias del caso, cumpla en sus propios términos lo que el título
establezca. El plazo señalado para el inició del cumplimiento en ningún caso podrá exceder de
quince días.

En el requerimiento se advertirá al ejecutado que si no procede a darle cumplimiento a la


prestación se adoptarán los oportunos apremios y multas.

419
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

CÁMARA DE LA SEGUNDA SECCIÓN DE ORIENTE; Sentencia Referencia


APE-10-3-CPCM-2014 de fecha dieciocho de junio de dos mil catorce.

“…la parte demandante reclama que se le ordene al demandado extienda la


cancelación de la hipoteca y presenta como prueba una certificación de sentencia
en la que se establece que dicha deuda había sido cancelada, por lo tanto se
entiende que quedaba extinguida la obligación, por lo que el procedimiento que se
debe seguir en el presente caso es el de EJECUCIÓN FORZOSA DE HACER DE
OBLIGACIÓN PERSONALÍSIMO Art. 680 CPCYM, pues como es una sentencia
firme la que ampara la ejecución forzosa y en ella se declaró extinguida la
obligación, lo procedente es que el señor Juez A Quo le dé cumplimiento al Art.
-680 CPCM y le prevenga al demandado que le dé cumplimiento a la obligación de
cancelar las hipotecas, y al no hacerlo pasado quince días, deberá el juez sobreseer
en el procedimiento y declarar extinguida las obligaciones ordenando mediante
oficio la cancelación de los gravámenes hipotecarios dando el Juez A Quo estricto
cumplimiento a lo que ordena el Art. 744 C. C…”

Medidas de garantía

Art. 681.- Cuando no pudiera tener inmediato cumplimiento la obligación que se pretenda
ejecutar, y la demora pudiese poner en peligro su efectividad, podrán ser decretadas, a instancia
del ejecutante, las medidas de garantía que se consideren convenientes.

Si se acuerda el embargo, habrá de recaer sobre bienes suficientes para asegurar el


cumplimiento de la obligación principal y el pago de las cantidades que pudieran resultar en
intereses, indemnización por daños y perjuicios y costas de la ejecución.

El embargo se alzará si el ejecutado presta caución en cuantía suficiente, fijada por el tribunal
al acordarlo.

Alegaciones del ejecutado

Art. 682.- El ejecutado, dentro del plazo que se le hubiera concedido para cumplir el
requerimiento, podrá manifestarle al tribunal los motivos por los que se niega a cumplir la
obligación, haciendo alegación de lo que tenga por conveniente sobre el carácter personalísimo o
no personalísimo de la prestación debida.

Si el juez considera que no se trata de una obligación de carácter personalísimo, proseguirá


la ejecución para obtener la reparación de los daños y perjuicios derivados del incumplimiento,
conforme a lo dispuesto para la liquidación de cantidades.

Incumplimiento de la obligación. Opción del ejecutante

Art. 683.- Transcurrido el plazo concedido sin que el ejecutado cumpla la obligación ni
presente alegaciones, el ejecutante podrá optar entre pedir que la ejecución se concrete en la
entrega de un equivalente en dinero, que incluya la reparación de daños y perjuicios, o seguir hasta
obtener el cumplimiento.

No obstante, cuando el título contenga una disposición expresa para el caso de incumplimiento
del deudor, se estará a lo dispuesto en él.

420
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

Equivalente dinerario

Art. 684.- Si el ejecutante hubiera optado por la entrega del equivalente en dinero de la
obligación de hacer, se ordenará que prosiga la ejecución con ese propósito, procediéndose a la
cuantificación en los términos establecidos para la liquidación de cantidades.

Sin perjuicio de ello, el juez impondrá una multa única al ejecutado en consideración al precio
o a la contraprestación satisfecha, que puede llegar hasta la mitad de estas cuantías o del valor que
se atribuya generalmente a la obligación.

Ejecución por el obligado y apremios

Art. 685.- Cuando se acuerde el cumplimiento específico, se apremiará al ejecutado con una
multa por cada mes que transcurra sin llevar a efecto la obligación; dicha multa podrá ascender
al veinte por ciento del precio o de la contraprestación insatisfecha o del valor que se atribuya
generalmente a la obligación.

Si, transcurrido un año, el ejecutado no hubiera cumplido o estuviera cumpliendo la obligación,


el juez ordenará, a instancia del ejecutante, la sustitución por la entrega del equivalente dinerario o
la adopción de cualquier medida esencialmente análoga que resulte adecuada para la satisfacción
del ejecutante.

SECCIÓN TERCERA
OBLIGACIONES DE EFECTUAR DECLARACIONES DE VOLUNTAD

Solicitud y requerimiento

Art. 686.- Si el obligado a emitir una declaración de voluntad no la hubiere realizado, a


solicitud del ejecutante se le requerirá para que, dentro del plazo que el juez señale, que en ningún
caso podrá exceder de quince días, proceda a emitirla.

CÁMARA SEGUNDA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DEL


CENTRO: Sentencia Referencia 2-2MC-14-A de fecha once de abril de dos mil
catorce.

“…3.8 …dicha disposición jurídica se encuentra dentro del libro quinto de las
ejecuciones forzosas, en consecuencia, es aplicable una vez haya título de ejecución
a consecuencia de sentencia declarativa de condena. 3.9 Por tanto, dicho artículo
se refiere únicamente a la forma en la que los jueces procederán a llevar a cabo
el proceso de ejecución forzosa cuando la obligación sea de aquellas de efectuar
declaraciones de voluntad, no debe entenderse que dicha disposición jurídica otorga
a las partes la facultad de iniciar de una forma directa el proceso de ejecución
forzosa sin haber tramitado previamente un proceso cognoscitivo…”

Incumplimiento

Art. 687.- Si el obligado desatendiera el requerimiento o efectuara la declaración de voluntad


contraviniendo el tenor de la obligación, el juez la tendrá por realizada siempre que estén fijados
los elementos esenciales del acto o contrato. La resolución judicial tendrá plena validez y eficacia
como si hubiera sido hecha por el ejecutado.

421
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

Cuando faltase la fijación de elementos no esenciales del acto o contrato sobre el que deba recaer
la declaración de voluntad, el juez, oídas las partes, los determinará en la propia resolución en que tenga
por emitida la declaración, conforme a lo que sea usual en el mercado o en el tráfico jurídico.

Cuando la indeterminación afectase a elementos esenciales del acto o contrato sobre el que
deba recaer la declaración de voluntad, la ejecución se seguirá para la reparación de los daños
y perjuicios causados al ejecutante, procediéndole a cuantificarlos conforme se previene para la
liquidación de cantidades.

CAPÍTULO SEGUNDO
EJECUCIÓN DE OBLIGACIONES DE NO HACER

Solicitud y requerimiento

Art. 688.- Si el obligado a no hacer alguna cosa hiciera lo prohibido, a solicitud del ejecutante
se le ordenará que deshaga lo hecho en contravención, si fuere posible, y que se abstenga de
hacerlo de nuevo, con advertencia de que podría incurrir en delito de desobediencia a mandato
judicial. (2)

En todo caso, deberán repararse los daños y perjuicios causados por el quebrantamiento
de la obligación, los que serán cuantificados de acuerdo con lo dispuesto para la liquidación de
cantidades.

Posibilidad de deshacer

Art. 689.- Si el obligado no procediera de inmediato a deshacer lo hecho en contra de lo que


debe, cuando es posible, se le impondrán multas, cada una de las cuales ascenderá al veinte por
ciento del valor que se atribuya generalmente a la obligación, por cada mes que transcurra sin
deshacer lo hecho, hasta un límite de cinco veces. (2)

Imposibilidad de deshacer

Art. 690.- Cuando no fuere posible deshacer lo indebidamente realizado se sustituirá la


obligación por la reparación de los daños y perjuicios causados al ejecutante.

Reiteración del quebrantamiento de la obligación

Art. 691.- Si el obligado volviera a ejecutar lo prohibido, y cuantas veces lo haga, se


procederá en los términos de este código. En todo caso, si se acredita voluntad rebelde de
incumplir se certificará lo conducente a la Fiscalía General de la República, por si los hechos
fueran constitutivos de delito.

CAPÍTULO TERCERO
EJECUCIÓN DE OBLIGACIONES DE DAR NO DINERARIAS

Obligación de entrega de cosas genéricas o indeterminadas

Art. 692.- Si el ejecutado no cumple la obligación de entregar cosas genéricas o indeterminadas, el


ejecutante podrá pedir que se le ponga en posesión de las cosas debidas o que se sustituya la obligación
de entrega incumplida por el abono del equivalente de su valor, previa determinación si fuere necesario,
o por el pago de los daños y perjuicios que se hubieran causado. (2)

422
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

Obligación de entrega de cosas muebles determinadas

Art. 693.- Si el obligado no cumple la obligación de entregar cosas muebles determinadas, el


juez, a solicitud del ejecutante, pondrá a éste en posesión de la que se deba, para lo cual empleará
los medios que considere necesarios. En su caso, se ordenará la inscripción de la transferencia en
los registros públicos correspondientes, sin necesidad de intervención del obligado.

Si se ignorase el lugar donde estuviera la cosa o no se encontrara ésta, se podrán utilizar los
medios de investigación que el juez declare pertinentes.

Si la cosa no pudiera ser habida, se sustituirá su entrega por el importe del valor de la cosa
más la reparación de los daños y perjuicios que se hubieren causado al ejecutante. (2)

Obligación de entrega de inmuebles

Art. 694.- Cuando deba entregarse algún inmueble, el juez, admitida la solicitud, ordenará
que se ponga en posesión del mismo al ejecutante, con las oportunas adecuaciones registrales.

En el caso de dar posesión, se extenderá diligencia en la que se hará constar el lanzamiento


de ocupantes y el estado del inmueble, con indicación de las cosas que quedan en el mismo, a las
que no alcance el título, las que deberán ser retiradas en el plazo que el juez señale, so pena de ser
consideradas cosas abandonadas. (2)

Asimismo se harán constar en la diligencia las cosas que no se puedan separar del terreno
y sobre las que el deudor o los ocupantes aleguen propiedad. Si consistieran en plantaciones o
en instalaciones estrictamente necesarias para la utilización ordinaria del inmueble, el ejecutante
deberá satisfacer su valor a solicitud del interesado.

También se harán constar en la diligencia los posibles daños que existan en el inmueble, para
cuya reparación se podrá acordar la retención y depósito de bienes suficientes que se encuentren en
aquél y que sean propiedad del posible responsable.

Entrega de inmuebles ocupados

Art. 695.- Cuando el inmueble que se deba entregar estuviera ocupado por personas que no
dependan del ejecutado, se les notificará la existencia de la ejecución para que en el plazo de diez
días presenten en el juzgado los títulos que justifiquen su ocupación.

Si los ocupantes carecieran de título o éste fuera insuficiente, se procederá de inmediato al


lanzamiento. Lo mismo se hará cuando el inmueble estuviera ocupado por el ejecutado o por
quienes de él dependan.

Cuando el inmueble fuera la vivienda habitual del ejecutado se le dará un plazo de un mes
para desalojarlo. Transcurrido el plazo señalado, se procederá al inmediato lanzamiento.

CAPÍTULO CUARTO
LIQUIDACIÓN DE CANTIDADES

Liquidación de daños y perjuicios

Art. 696.- Cuando en la ejecución hubiere de procederse a determinar la cantidad debida en


concepto de daños y perjuicios, o el equivalente en dinero de una obligación no dineraria, junto

423
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

con la solicitud se presentará una relación detallada que incluya el importe y las justificaciones o
informes que el solicitante considere pertinentes. De todo ello se dará audiencia al obligado por un
plazo de seis días, para conocer su respuesta.

Si el deudor acepta expresamente la relación de los daños y perjuicios y su importe, la


aprobará el juez, continuándose la ejecución de acuerdo con lo dispuesto para las obligaciones de
pago de dinero.

Se entenderá qué existe aceptación tácita de la relación de daños y perjuicios y de su importe


si el deudor deja pasar el plazo sin contestar a la solicitud o si en la contestación no concreta su
oposición a la solicitud del acreedor.

Cuando el deudor presente oposición motivada dentro de los seis días, se dará audiencia al
acreedor, sustanciándole el procedimiento por los trámites del proceso abreviado, que finalizará
por medio de auto, en el que se fijará la cantidad que deba abonarse al solicitante.

Liquidación de frutos o rentas

Art. 697.- Cuando en la ejecución hubiere de procederse a determinar la cantidad debida en


concepto de frutos, rentas, utilidades o productos de cualquier clase, se requerirá al deudor para
que, dentro del plazo de diez días, presente la liquidación, ateniéndose, en su caso, a las bases que
estableciese el título.

Si el deudor presenta la liquidación, ésta se le comunicará al acreedor; y, si se mostrara


conforme, el juez la aprobará, continuándose la ejecución de acuerdo con lo dispuesto para las
obligaciones de pago de dinero.

Cuando el acreedor se oponga a la liquidación, se sustanciará el procedimiento por los trámites


del proceso abreviado, que finalizará por medio de auto, en el que se fijará la cantidad que deba
abonarse al solicitante.

Falta de presentación de la liquidación

Art. 698.- Si el deudor no presentare la liquidación, se requerirá al acreedor para que


presente la que considere justa, y se dará audiencia de ella al ejecutado a fin de que la repare o
le haga observaciones, prosiguiendo las actuaciones por los trámites del proceso abreviado. Las
partidas que no se reparen se consideran consentidas.

Rendición de cuentas

Art. 699.- Cuando hubiera que ejecutar una condena a rendir cuentas de una administración
y entregar el saldo, se aplicarán las normas del artículo anterior, aunque se podrá ampliar el
plazo para que el obligado presente las cuentas en atención a la importancia y complejidad de la
administración.

CAPITULO ÚNICO
DISPOSICIONES FINALES
Actualización de cuantías
Art. 700.- Todas las cuantías establecidas en el presente código podrán ser actualizadas cada
cinco años, previo informe de la Corte Suprema de Justicia en pleno.

424
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

De las multas
Art. 701.- Las penas pecuniarias que conforme a este código se incurra por una falta, exceso
o por contravenir a lo ordenado en el mismo, si se tratase de las partes se le dará audiencia a
ésta por cuarenta y ocho horas y con lo que conteste o sin ella, se confirmará o revocará dicha
pena. La certificación que de lo actuado se extendiere será título ejecutivo. Más, si se tratare de
un funcionario, cualquiera de las partes podrá dirigirse al tribunal superior en grado, a fin de que
observando el mismo procedimiento aplicable a las partes, haga efectiva la multa por el sistema de
retención.
Lo antes dispuesto para las partes, se extenderá a cualquier otro interviniente en el proceso.
Remisión de procesos
Art. 702.- Todo proceso se remitirá de inferior a superior y viceversa, con nota expresiva del
foliaje, de la clasificación, de la Referencia y de las partes que intervienen; y en el acto deberá
acusarse el recibo correspondiente. (2)
Medios materiales y recursos humanos
Art. 703.- La Corte Suprema de Justicia adoptará las medidas necesarias para que los
tribunales dispongan de los medios materiales precisos para la constancia de las actuaciones orales
y para las comunicaciones procesales.
Art. 704.- DEROGADO (2)

Derogatoria

Art. 705.- Derógase el Código de Procedimientos Civiles hecho ley por medio de Decreto
Ejecutivo de fecha 31 de diciembre de 1881, publicado en el Diario Oficial No. 1, Tomo 12,
Publicación del 01/01/1882, y sus reformas posteriores; la Ley de Procedimientos Mercantiles,
publicada en el Diario Oficial No. 120, Tomo 239, publicación del 29/06/1973; La ley de Casación
promulgada por Decreto Legislativo 1135 de fecha 31/08/1953, publicado en el Diario Oficial No.
161 Tomo 160, publicación de fecha 4/09/53 y sus reformas posteriores; las normas procesales
de la Ley de Inquilinato publicada en el Diario Oficial No. 35, Tomo 178, publicación del 20
de febrero de 1958 y sus reformas posteriores, así como todas aquellas leyes o disposiciones
contenidas en otros cuerpos normativos referidos a las materias que regula este código.

Las disposiciones que conforme a este artículo deban permanecer vigentes, se entenderán
sin perjuicio de su compatibilidad con la clasificación de los procesos y con los principios
informadores del presente código.

CORTE SUPREMA DE JUSTICIA EN CORTE PLENA. Conflictos de


competencia en derecho privado y social, Referencia: 76-D-2011 de fecha
veintinueve de noviembre de dos mil once.
“En ese orden de ideas, el Art. 20 del Código Procesal Civil y Mercantil, establece la
aplicación supletoria de este Código, en ausencia de disposición especifica; y tomando
en cuenta que con su entrada en Vigencia, se ha establecido que los Jueces de lo Civil
y Mercantil, deben de cumplir con los principios procesales de legalidad, defensa,
contradicción, igualdad procesal, dispositivo, aportación, oralidad, inmediación,
concentración, entre otros; en tal sentido el juzgador debe de respetar en el caso sub

425
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

judice, el proceso que señala el Art. 4 de la Ley Reguladora de la Garantía de Audiencia


de los Empleados Públicos no comprendidos en la Carrera Administrativa, y adecuar en
lo que no esté regulado lo dispuesto en el Código Procesal Civil y Mercantil.
En tal sentido, es preciso señalar que la derogatoria establecida en el Art. 705 C.Pr.C. y
M., hace alusión a leyes y disposiciones que contrarían al expresado Código, en ésta y en
otras materias, pero en lo relativo al caso en estudio, la Ley Reguladora de la Garantía
de Audiencia de los Empleados Públicos no comprendidos en la Carrera Administrativa,
es una ley de carácter especial que es derogada por el C.Pr.C. y M., por lo que sus
disposiciones son vigentes, positivas y aplicables al proceso en concreto.
En consecuencia esta Corte de conformidad a los principios rectores del proceso
como son los de Economía Procesal, Celeridad, Abreviación, Inmediación y el de
una Tutela Judicial Efectiva, determina que la competente para ventilar y Sentenciar
esta controversia judicial, es la Jueza Segundo de lo Civil y mercantil de San
Salvador, y así se declarará. “
CÁMARA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DE OCCIDENTE,
Apelación Referencia: INC-APEL-155-15-12-15 de fecha dos de febrero de dos mil
dieciséis.
“Expuesto lo anterior, es de mencionar, que la prueba que se ha presentado para
que se declare que el señor Napoleón B., recibió en calidad de préstamo la suma
de veinte mil dólares de parte del demandante, es una remesa de abono a cuenta
de ahorro, o sea un documento privado, que no contiene información atinente al
objeto que con el se pretende probar; pues tratándose de un mutuo, el medio idóneo
para probar su existencia es el respectivo contrato, como fuente o productor de
obligaciones que es, de acuerdo a lo dispuesto en el Art. 1569 C. Al respecto, cabe
mencionar que el Art. 1580 C., se sienta el principio de que deben constar por
escrito los actos o contratos que contienen la entrega o promesa de una cosa que
valga más de doscientos colones; el fundamento de esta limitación, de acuerdo a la
doctrina, es que se debe procurar una prueba formal e indiscutible, como lo es la
prueba escrita de un documento, cuando los negocios versen sobre cosas que tienen
un valor significativo, ya que así, se puede acreditar mejor el derecho o comprobar
las obligaciones en caso de controversia.
En relación a lo expuesto, en vista de que la obligación reclamada es mayor de
doscientos colones, de acuerdo al Art. 1580 C.C., la misma debe constar por escrito,
siendo entonces la prueba idónea para establecer la existencia y términos de
dicho contrato la instrumental. Sin embargo, no obstante tal exigencia, el Art.1582
C., contiene una excepción a tal principio, permitiendo la prueba testimonial,
siempre y cuando exista un principio de prueba por escrito, es decir, un acto
escrito del demandado o de su representante, que haga verosímil el hecho litigioso,
o sea, aquellos documentos suscritos por aquél contra quien se dirige la acción.
Remitiéndonos al documento presentado como base de la pretensión, se observa,
que se trata de un documento privado, en el que consta una remesa bancaria, más
sin embargo, no determina a que acto jurídico se refiere o mejor dicho, lo originó
y que según decir de la Licenciada Julia Cristina G.M., se trata de un mutuo que
es el vínculo contractual que pretende que se establezca, así como tampoco dicho
documento revela las obligaciones que del mismo provienen como el plazo, forma de

426
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

pago e intereses que menciona dicha profesional en la demanda, omisión que impide
sostener que se ha producido el supuesto contemplado en el Art. 1582 C. La libertad
probatoria que concede el Código Procesal Civil y Mercantil en el Art. 330, no es
ilimitada, debe por simple lógica jurídica, perfilarse dentro de los cauces normativos
vigentes; en este caso, debe recordarse que el Art. 705 CPCYM, si bien es cierto que
deroga algunos cuerpos normativos, éstos son de orden procesal y. el Art. 1580 C.C.,
es de orden sustantivo y, hasta el momento no ha sido derogada norma alguna de
esa naturaleza. Es de señalar, que la doctrina considera, que al referirse el Código
Civil a la prueba documental, se debe a su carácter de tal y por la Referencia a los
requisitos y alcances sustantivos que comprenden dicha prueba.

En cuanto a las valoraciones que de la prueba hace el Juez A Quo, conviene señalar
lo dispuesto en el Art. 319 CPCM, que establece: “No deberá admitirse aquella
prueba que según las reglas y criterios razonables, no sea idónea o resulte superflua
para comprobar los hechos controvertidos.” Lo manifestado se debe a que la
prueba pertinente en el caso de autos, lo es la instrumental y al no haberse aportado
dicha prueba la parte actora no acreditó los extremos procesales de su demanda.
Es importante tener presente, que no puede soslayase la importancia que tiene la
entrega de una suma considerable de dinero, por lo que dicha entrega debe contener
las formalidades exigidas por la ley.”

Disposición transitoria

Art. 706.- Los procesos, procedimientos y diligencias que estuvieren en trámite al momento
de entrar en vigencia el presente código, se continuarán y concluirán de conformidad a la normativa
con la cual se iniciaron.

CORTE SUPREMA DE JUSTICIA EN CORTE PLENA, Conflicto de


competencia N° 226-D-2011 de Fecha: cinco de enero de dos mil doce.

“Para el caso en estudio se hace necesario abordar lo relativo a la aplicación de


la ley procesal en el tiempo, para determinar qué juzgador es el competente para
dilucidar el caso venido en autos.

Para la aplicación, ya sea de la nueva normativa procesal civil y mercantil, o el


ordenamiento jurídico procesal anterior, debe partirse de la pendencia del proceso
principal, pues se aplica la normativa anterior siempre y cuando éste se haya iniciado
bajo sus trámites específicos, a su vez las cuestiones incidentales promovidas dentro
de él deben tramitarse bajo la normativa con la cual se inició. Por consiguiente, lo
accesorio sigue la suerte de lo principal, de modo que el incidente de nombramiento
de curador ad litem queda absorbido por el juicio que se promovió ante el
Juzgado Tercero de lo Civil de esta ciudad, mismo que se inició con el Código de
Procedimientos Civiles, por lo que será dicho cuerpo de ley el aplicable para ambos
casos, y no la nueva ley Procesal Civil y Mercantil.- Ello tiene su fundamentación en
lo dispuesto en el Art. 706 C. Pr. C. y M., el cual a su tenor literal establece: “Los
procesos, procedimientos y diligencias que estuvieren en trámite al momento de
entrar en vigencia el presente código, se continuarán y concluirán de conformidad a
la normativa con la cual se iniciaron.”.

427
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

En ese sentido, en el caso que nos ocupa, se trata de unas diligencias de nombramiento
de curador ad litem a un ausente no declarado, regulado por el C.Pr.C. en su Art.
141, mismas que pueden seguirse ante notario para posteriormente ser agregadas
al proceso principal, de acuerdo a lo estipulado en el Art. 25 la Ley del Ejercicio
Notarial de la Jurisdicción Voluntaria y de Otras Diligencias; disposiciones legales
que a pesar de la entrada en vigencia del C. Pr. C. y M. son perfectamente aplicables
a tenor de lo estipulado en el Art. 706 supra mencionado. Por lo tanto, no se trata
de la tramitación de un proceso nuevo, como erróneamente lo ha observado el Juez
Tercero de lo Civil; al contrario, son diligencias accesorias al juicio principal ya
entablado en el tribunal a su cargo.

Cabe traer a cuento lo que la Corte dijo en la sentencia dictada a las diez horas
del doce de noviembre de dos mil dos, en cuanto a la tramitación de este tipo de
diligencias —nombramiento de curador ad litem- vía notarial: “(...) cuando
el proceso para el que se requiere las mismas, ya se encontraba en trámite, (...)
tales diligencias constituyen un incidente dentro del juicio ejecutivo (...) siendo
el incidente un obstáculo a la continuidad del pleito, debe ser substanciado en el
relacionado proceso, (...)”(sic). Lo anterior tiene el sustento legal en lo estipulado
en el Art. 141 C.Pr.C., el cual en su inciso último reza: “Lo dispuesto en este
Artículo tendrá aplicación, no solo como acto previo sino también como incidente
en el juicio.”(sic); disposición legal que debió ser observada por el Juez Tercero de
lo Civil de esta ciudad, juzgador que a criterio de esta Corte debe ser el competente
para que conozca de las diligencias en análisis, y así se determinará.”

Vigencia

Art. 707.- El presente código entrará en vigencia el primero de enero del año dos mil diez
previa publicación en el Diario Oficial.

DADO EN EL SALÓN AZUL DEL PALACIO LEGISLATIVO: San Salvador, a los dieciocho
días del mes de septiembre del año dos mil ocho.

RUBÉN ORELLANA
PRESIDENTE

ROLANDO ALVARENGA ARGUETA


VICEPRESIDENTE

FRANCISCO ROBERTO LORENZANA DURÁN


VICEPRESIDENTE

JOSÉ RAFAEL MACHUCA ZELAYA


VICEPRESIDENTE

RODOLFO ANTONIO PARKER SOTO


VICEPRESIDENTE

428
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

ENRIQUE ALBERTO LUIS VALDÉS SOTO


SECRETARIO

MANUEL ORLANDO QUINTEROS AGUILAR


SECRETARIO

JOSÉ ANTONIO ALMENDÁRIZ RIVAS


SECRETARIO

ROBERTO JOSÉ D’AUBUISSON MUNGUÍA


SECRETARIO

ZOILA BEATRIZ QUIJADA SOLÍS


SECRETARIA

NOTA: En cumplimiento a lo dispuesto en el Art. 97, inciso 3° del Reglamento Interior de


este Órgano del Estado, se hace constar que el presente Decreto fue devuelto con observaciones
por el Presidente de la República, el 13 de octubre del presente año, resolviendo esta Asamblea
Legislativa aceptar dichas observaciones, en Sesión Plenaria celebrada el día 5 de noviembre del
2008.

JOSÉ ANTONIO ALMENDÁRIZ RIVAS,


SECRETARIO DIRECTIVO.

CASA PRESIDENCIAL: San Salvador, a los catorce días del mes de noviembre del año dos
mil ocho.

PUBLIQUESE,

ELIAS ANTONIO SACA GONZALEZ,


PRESIDENTE DE LA REPÚBLICA.

RENE MARIO FIGUEROA FIGUEROA,


MINISTRO DE SEGURIDAD PÚBLICA Y JUSTICIA.

DO núm. 224, tomo núm. 381, del 27 de noviembre de 2008

(1) Decreto Legislativo No. 220 de fecha 11 de diciembre de 2009, publicado en el Diario
Oficial No. 241, Tomo 385 de fecha 23 de diciembre de 2009. NOTA*

* INICIO DE NOTA: EL PRESENTE DECRETO LEGISLATIVO CONTIENE LA


PRORROGA A LA ENTRADA EN VIGENCIA DEL PRESENTE CÓDIGO, EL CUAL
SE TRANSCRIBE LITERALMENTE A CONTINUACIÓN:

429
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

DECRETO No. 220

LA ASAMBLEA LEGISLATIVA DE LA REPÚBLICA DE EL SALVADOR,

CONSIDERANDO:

I. Que mediante Decreto Legislativo Nos. 712, de fecha 18 de septiembre de 2008,


publicado en el Diario Oficial No. 224, Tomo No. 381, del 27 de noviembre de ese mismo
año, se emitió el Código Procesal Civil y Mercantil, el cual entrará en vigencia el 1 de
enero del año 2010.

II. Que las instituciones integrantes del Sector de Justicia han emprendido las acciones
necesarias para preparar y fortalecer los recursos y mecanismos orientados a la efectiva
aplicación de la nueva normativa de procedimientos civiles y mercantiles; pero tales
acciones demandan una importante inversión de tiempo y recursos que no puede
completarse en el plazo inicialmente definido para la entrada en vigencia del mencionado
Código.

III. Que de conformidad a las justificaciones a que hace Referencia el considerando que
antecede, se considera necesario y urgente prorrogar la vigencia del Código anteriormente
referido.

POR TANTO,

en uso de sus facultades constitucionales, y a iniciativa de los Diputados Guillermo Antonio


Gallegos Navarrete y Elizardo González Lovo.

DECRETA:

Art. 1.- Prorrógase hasta el día 1 de julio de 2010 la entrada en vigencia del Código Procesal
Civil y Mercantil, aprobado por Decreto Legislativo No. 712, de fecha 18 de septiembre de 2008,
publicado en Diario Oficial No. 224, Tomo No. 381, del 27 de noviembre de 2008.

Art. 2.- El presente decreto entrará en vigencia el día de su publicación en el Diario Oficial.

DADO EN EL SALÓN AZUL DEL PALACIO LEGISLATIVO: San Salvador, a los once días
del mes de diciembre del año dos mil nueve.

CIRO CRUZ ZEPEDA PEÑA


PRESIDENTE

OTHON SIGFRIDO REYES MORALES


PRIMER VICEPRESIDENTE

430
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

GUILLERMO ANTONIO GALLEGOS NAVARRETE


SEGUNDO VICEPRESIDENTE
JOSÉ FRANCISCO MERINO LÓPEZ
TERCER VICEPRESIDENTE

ALBERTO ARMANDO ROMERO RODRÍGUEZ


CUARTO VICEPRESIDENTE

FRANCISCO ROBERTO LORENZANA DURÁN


QUINTO VICEPRESIDENTE

LORENA GUADALUPE PEÑA MENDOZA


PRIMERA SECRETARIA

CÉSAR HUMBERTO GARCÍA AGUILERA


SEGUNDO SECRETARIO

ELIZARDO GONZÁLEZ LOVO


TERCER SECRETARIO

ROBERTO JOSÉ d’AUBUISSON MUNGUÍA


CUARTO SECRETARIO

SANDRA MARLENE SALGADO GARCÍA


QUINTA SECRETARIA

IRMA LOURDES PALACIOS VÁSQUEZ


SEXTA SECRETARIA
MIGUEL ELÍAS AHUES KARRA
SÉPTIMO SECRETARIO

CASA PRESIDENCIAL: San Salvador, a los veintiún días del mes de diciembre del año dos
mil nueve.

PUBLÍQUESE,

CARLOS MAURICIO FUNES CARTAGENA,


PRESIDENTE DE LA REPÚBLICA.

JOSÉ MANUEL MELGAR HENRÍQUEZ,


MINISTRO DE JUSTICIA Y SEGURIDAD PÚBLICA.

FIN DE NOTA*

REFORMAS

(1) Decreto Legislativo No.319 de fecha 15 de abril de 2010, publicado en el Diario Oficial
No. 100, Tomo 387 de fecha 31 de mayo de 2010.

431
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

(2) Decreto Legislativo No. 430 de fecha 25 de julio de 2013, publicado en el Diario Oficial
No. 149, Tomo 400 de fecha 16 de agosto de 2013
(3) Decreto Legislativo No. 246 de fecha 21 de enero de 2016, publicado en el Diario Oficial
No. 29, Tomo 410 de fecha 11 de febrero de 2016.

432
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

Prontuario

“A”
Abstención, 24, 49, 50

acta, 14, 15, 19, 86, 87, 90, 101,107,108, 110,117, 120, 121, 122, 137, 145, 146, 149, 162, 163,
176, 213, 220, 243, 250, 258, 275, 278, 280, 290, 305, 307, 308, 313, 329, 335, 378, 416, 442, 453,
465, 504, 526, 538

acuerdo transaccional, 220

acumulación de ejecuciones, 71, 72, 73, 74, 75, 525

acumulación, 34, 49, 63, 64, 70, 71, 72, 73, 74, 75, 76, 77, 78, 79, 80, 81, 82, 83, 137, 155, 201,
202, 203, 219, 226, 330, 331, 405, 501, 524, 525

alegatos finales, 137, 316, 318, 319, 320, 327, 336, 462, 465

Alegatos finales, 319, 336

allanamiento, 58, 87, 180, 181, 207, 209, 223, 346, 469, 533

anticipo de prueba, 249, 250

Apelación, 13, 17, 25, 26, 38, 43, 44, 45, 48, 49, 50, 62, 64, 84, 86, 89, 90, 91, 100, 107, 108, 121,
123, 124, 128, 131, 132, 137, 139, 140, 147, 148, 149, 152, 156, 160, 164, 168, 176, 177, 178, 183,
185, 186, 198, 210, 212, 213, 221, 223, 232, 241, 244, 253, 260, 265, 266, 268, 278, 283, 287, 289,
292, 297, 301, 303, 309, 312, 323, 324, 361, 362, 363, 364, 366, 367, 370, 374, 375, 376, 377, 379,
380, 386, 387, 390, 392, 401, 411, 412, 413, 414, 416, 418, 420, 421, 423, 431, 433, 435, 440, 441,
442, 443, 444, 445, 446, 447, 448, 449, 450, 451, 452, 453, 454, 455, 456, 457, 458, 459, 460, 461,
462, 463, 464, 465, 466, 467, 468, 469, 470, 471, 477, 478, 480, 483, 486, 488, 491, 492, 494, 495,
501, 504, 510, 511, 514, 553

aportación, 12, 13, 18, 36, 176, 183, 210, 211, 214, 215, 236, 237, 239, 242, 243, 251, 295, 315, 553

aseguramiento de la prueba, 248

Audiencia de Prueba, 14, 143, 144,

audiencia preparatoria, 19, 54, 63, 68, 70, 77, 125, 126, 137, 156, 163, 178, 201, 210, 211, 212, 215,
216, 217, 218, 219, 222, 223, 229, 230, 231, 242, 257, 294, 295, 309, 310, 313, 316, 320, 444, 446

audiencias, 3, 14, 15, 83, 116, 117, 118, 119, 120, 122, 123, 126, 128, 177, 178, 318, 442, 466, 537

Autenticidad, 257, 261, 263

autoprecedente, 23

433
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

“C”
Cadena de custodia de la prueba, 247
Caducidad de la instancia, 88
cambio de dirección, 102
Capacidad procesal, 52, 53
carga de la prueba, 237, 239, 245, 246, 247, 271, 387, 427, 428
Carga de la prueba, 245
Casación, 8, 9, 45, 56, 60, 62, 101, 121, 133, 277, 279, 323, 432, 464, 468, 552
CASACIÓN, 467
coadyuvante, 64, 158, 429, 497
Comisiones procesales, 90
competencia, 25, 26, 28, 29, 30, 31, 32, 33, 34, 35, 36, 37, 38, 39, 48, 69, 71, 73, 74, 75, 76, 78, 84,
85, 90, 94, 112, 139, 143, 152, 153, 162, 166, 167, 171, 172, 185, 187, 188, 195, 197,
198, 201, 208, 209, 223, 247, 274, 346, 355, 356, 357, 358, 360, 362, 373, 388, 389, 394, 404,
405, 406, 419, 422, 423, 425, 426, 433, 440, 446, 452, 463, 469, 475, 480, 491, 493, 494, 498,
503, 510, 513, 528, 529, 530, 539, 552, 555
concentración, 3, 13, 15, 126, 246, 307, 553,
conciliación, 29, 157, 158, 159, 160, 161, 162, 163, 211, 218, 219, 220, 221, 222, 334, 422, 491
Congruencia, 18, 133
contradicción, 9, 13, 19, 101, 119, 134, 137, 157, 161, 206, 261, 266, 299, 300, 305, 326, 337, 363,
401, 463, 553
Contrainterrogatorio, 286
correos electrónicos, 271, 314, 433
cosa juzgada, 43, 44, 45, 46, 47, 48, 51, 52, 85, 86, 87, 142, 143, 185, 197, 201, 202, 223, 224,
225, 226, 241, 362, 401, 412, 430, 431, 432, 436, 437, 459, 468, 469, 484, 529, 531
costas, 16, 38, 39, 51, 59, 79, 81, 83, 84, 86, 87, 88, 110, 123, 132, 139, 141, 148, 160, 175, 177,
180, 181, 189, 271, 294, 334, 377, 378, 396, 397, 399, 400, 414, 426, 427, 430, 436, 466, 475, 478,
482, 499, 504, 509, 516, 517, 518, 519, 539, 540, 541, 542, 543
Cotejo de letras, 263
credencial única, 97
crédito fiscal, 265
cuestión incidental, 54, 126, 177, 178, 179, 180, 528, 530

434
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

“D”
DECLARACIÓN DE PARTE, 273

Defectos insubsanables, 224

defensa, 5, 6, 9, 10, 13, 19, 58, 64, 85, 90, 97, 105, 109, 119, 120, 124, 128, 137, 139, 143, 145,
146, 150, 151, 157, 160, 161, 164, 165, 166, 168, 172, 182, 183, 194, 202, 204, 205, 206, 207, 208,
222, 226, 228, 261, 263, 283, 294, 302, 318, 330, 336, 337, 351, 354, 373, 380, 385, 400, 401, 422,
449, 450, 464, 477, 484, 494, 495, 498, 503, 504, 508, 553

deliberación, 115, 135, 136, 487

demanda, 3, 5, 8, 17, 18, 19, 20, 24, 25, 27, 28, 30, 31, 33, 34, 36, 37, 38, 39, 45, 55, 56, 60, 63, 65,
66, 69, 70, 71, 75, 76, 77, 79, 83, 84, 85, 86, 87, 89, 90, 92, 96, 101, 109, 110, 112, 132, 134, 140,
142, 145, 146, 148, 149, 150, 154, 155, 164, 168, 173, 176, 181, 182, 183, 184, 185, 186, 187, 188,
191, 192, 193, 194, 195, 196, 197, 198, 199, 200, 201, 203, 204, 206, 207, 208, 209, 210, 211, 214,
2015, 2016, 219, 223, 224, 225, 227, 228, 230, 240, 241, 242, 243, 246, 248, 251, 254, 259, 296,
298, 310, 311, 312, 315, 329, 330, 331, 332, 333, 343, 344, 345, 348, 350, 353, 359, 360, 370, 371,
373, 374, 376, 378, 379, 383, 384, 385, 386, 387, 389, 390, 391, 392, 394, 396, 397, 398, 400, 402,
403, 404, 406, 407, 408, 411, 413, 414, 417, 422, 423, 428,429, 430, 435, 436, 437, 444, 446, 455,
457, 464, 476, 477, 486, 489, 496, 500, 504, 512, 518, 524, 528, 529, 530, 531, 532

Demanda defectuosa, 227

demandas contra el Estado, 26

Derecho de probar, 231

derecho de retención, 167

derecho extranjero, 236, 237, 238, 239, 240, 241, 242

deserción, 466

Desistimiento de la instancia, 86

diligencias preliminares, 164, 165, 167, 168, 169, 171, 172, 173, 174, 175, 176, 177, 339, 343, 353, 358

domicilio, 24, 29, 30, 31, 32, 33, 34, 36, 56, 66, 69, 109, 111, 112, 113, 150, 159, 166, 171, 172,
182, 184, 201, 205, 275, 278, 285, 289, 346, 347, 385, 425, 426, 433, 434, 438, 493, 500, 541

“E”
Efecto suspensivo, 444

Ejecución Forzosa, 141, 162, 163, 187, 188, 500, 506

EJECUCIÓN FORZOSA,478, 479, 545

EJECUCIÓN PROVISIONAL, 513

435
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

embargo, 12, 15, 18, 25, 27, 31, 33, 48, 51, 56, 57, 70, 72, 73, 74, 75, 89, 90, 92, 95, 97, 103, 117,
143, 147, 149, 152, 162, 168, 180, 186, 192, 195, 208, 220, 222, 233, 236, 238, 239, 242, 245, 252,
253, 256, 259, 266, 268, 272, 281, 282, 288, 299, 300, 304, 305, 309, 310, 312, 314, 341, 345, 346,
347, 349, 352, 353, 357, 367, 368, 378, 379, 381, 282, 383, 384, 386, 388, 389, 392, 395, 402, 403,
406, 412, 415, 436, 444, 450, 451, 459, 464, 467, 486, 487, 488, 492, 500, 501, 507, 508, 511, 517,
518, 520, 521, 522, 523, 524, 525, 526, 527, 528, 530, 531, 532, 539, 542, 543, 544, 545, 554

emplazamiento, 36, 57, 65, 90, 101, 109, 110, 111, 113, 114, 124, 145, 146, 149, 150, 151, 152,
185, 194, 204, 226, 392, 464, 469, 502

exhibición, 99, 161, 166, 167, 171, 175, 176, 259, 283, 315, 391

exhortos o cartas rogatorias, 94

expedientes, 99, 100

Fijación de la pretensión, 228

“F”
fraude de ley, 83, 87, 162, 219, 220, 222, 289

funcionario público, 27, 252, 255, 256, 259, 324

“G”
GARANTE, 494

gratuidad de la justicia, 20

“H”
hechos controvertidos, 231, 232, 236, 243, 244, 253, 261, 267, 273, 279, 281, 293, 298, 305, 307,
316, 323

herederos, 47, 61, 62, 67, 376, 390, 391

“I”
idoneidad de la prueba, 244, 263

igualdad procesal, 10, 146, 208, 261, 370, 553

Improponibilidad, 185, 196, 332

improponibilidad sobrevenida, 83, 85, 86, 180, 191, 193

436
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

improponible, 25, 36, 38, 39, 63, 86, 168, 169, 171, 176, 178, 179, 185, 186, 187, 193, 196, 200, 224,
229, 241, 242, 331, 361, 370, 371, 377, 389, 394, 396, 403, 404, 406, 441, 455, 470, 487, 516, 529
impugnación, 89, 137, 138, 142, 162, 220, 221, 222, 246, 260, 265, 291, 318, 333, 349, 364, 432,
442, 443, 450, 455, 463, 485
Impugnación de la autenticidad, 260
Impulso del proceso, 115
inadmisible, 77, 98, 104, 140, 194, 198, 199, 200, 216, 254, 331, 332, 385, 396, 404, 443, 445,
446, 454, 456, 457, 470, 471, 486
inaplicabilidad, 6, 7, 8, 44, 440
instrumentos privados, 256, 263, 264, 265, 268, 312, 315, 365, 447
Instrumentos públicos, 252
iura novit curia, 18, 237, 474

“J”
Jactancia, 171

jueces, 6, 7, 17, 22, 29, 40, 46, 49, 70, 72, 74, 79, 82, 138, 156, 377, 382, 474, 483, 493, 537, 547, 552

Jurisdicción, 23, 45, 45, 232, 255, 268, 366, 367, 374, 555

“L”
legalidad, 9, 20, 21, 27, 85, 125, 131, 137, 145, 173, 271, 284, 328, 377, 383, 401, 422, 448, 458,
461, 467, 485, 553

legitimación, 8, 54, 55, 56, 71, 165, 166, 168, 169, 173, 175, 196, 197, 198, 202, 359, 362, 363,
367, 378, 380, 387, 388, 417, 424, 447, 531, 532

Ley de Inquilinato, 413, 415, 416, 417, 422, 423, 424, 430, 431, 552

libertad probatoria, 244, 251, 267, 554

Licitud de la prueba, 242

liquidación, 29, 67, 68, 91, 132, 153, 154, 347, 382, 444, 499, 518, 519, 521, 536, 539, 544, 545,
546, 547, 548, 550, 551

Litisconsorcio, 60, 63, 64

litisconsorcio necesario,

Litispendencia, 61, 62, 225

437
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

“M”
masas patrimoniales, 52
medida cautelar, 94, 95, 338, 339, 340, 341, 342, 343, 345, 347, 350, 351, 352, 353, 354, 355, 356,
358, 361, 363, 364, 365
Medidas cautelares, 94, 344
MEDIDAS CAUTELARES, 337, 349
medios de reproducción del sonido o de la imagen, 312, 315 medios impugnativos, 440, 442, 443
medios técnicos, 106, 107
mejor proveer, 12,13, 107, 245, 293, 303
MONITORIO, 432, 436
mora, 189, 193, 368, 381, 382, 383, 412, 414, 415, 418, 421, 423, 426, 427, 428, 429, 430,
motivación, 38, 130, 131, 137, 184, 196, 234, 299, 300, 323, 325, 327, 328, 336, 354, 475
multa, 16, 111, 176, 259, 284, 300, 327, 337, 413, 429, 439, 454, 456, 457, 461, 466, 473, 482,
520, 544, 546, 548, 551
multas, 413, 429, 482, 520, 544, 548, 551
Mutuo, 30

“N”
notificación, 25, 37, 58, 65, 66, 88, 89, 91, 100, 101, 105, 106, 107, 111, 138, 139, 142, 149,

151, 175, 176, 188, 190, 208, 209, 294, 363, 364, 378, 390, 391, 392, 395, 429, 439, 441, 457,

460, 472, 473, 476, 477, 491, 494, 495, 502, 504, 508, 510, 515, 519

Notificación, 103, 105, 106, 108, 502

nulidad, 14, 24, 29, 51, 63, 76, 77, 97, 108

nulidad en recurso, 148

“O”
Objeciones, 318, 319, 320

ocupantes de hecho, 541

Oficios, 114

Oposición a la ejecución, 502, 514, 515

oralidad, 14, 92, 137, 553

438
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

“P”
partes, 6, 8, 10, 11, 12, 13, 14, 16, 17, 18, 19, 21, 24, 25, 29, 30, 36, 37, 38, 39, 40, 41, 42, 45, 47,
48, 49, 50, 51, 52, 54, 55, 56, 58, 61, 63, 64, 65, 66, 68, 69, 70, 72, 74, 79, 80, 81, 82, 83, 84, 85,
87, 88, 89, 90, 91, 94, 96, 98, 99, 100, 101, 102, 103, 104, 105, 114, 115, 116, 117, 118, 119, 120,
122, 123, 125, 126, 127, 130, 131, 133, 134, 136, 137, 138, 139, 140, 141, 142, 143, 144, 145, 156,
157, 158, 159, 160, 161, 162, 163, 165, 168, 169, 179, 180, 181, 183, 186, 188, 196, 197, 198, 201,
202, 203, 207, 209, 210, 211, 212, 214, 216, 217, 219, 220, 221, 222, 223, 224, 225, 226, 227, 228,
229, 231, 232, 233, 234, 235, 236, 237, 238, 239, 242, 243,245, 247, 249, 250, 251, 252,253, 259,
260, 261, 262, 265, 268, 271, 272, 273, 274, 278, 279, 285, 287, 289, 291, 292, 293, 294, 295, 296,
297, 298, 299, 300, 301, 302, 306, 307, 308, 310, 311, 312, 315, 316, 317, 318, 319, 320, 322, 323,
327, 330, 333, 334, 335, 336, 357, 358, 363, 365, 366, 368, 379, 381, 382, 383, 384, 388, 394, 396,
397, 401, 405, 407, 410, 411, 412, 418, 419, 420, 421, 422, 425, 426, 430, 431, 433, 437, 438, 439,
431, 444, 446, 448, 451, 454, 457, 458, 460, 461, 462, 463, 466, 467, 469, 473, 474, 477, 478, 479,
482, 483, 491, 492, 496, 502, 504, 507, 509, 510, 511, 512, 515, 531, 534, 535, 536, 547, 551

plazos procesales, 90, 114

Plazos procesales, 91

pluspetición, 193, 393, 436, 503, 507

poder, 13, 23, 33, 47, 55, 57, 58, 59, 86, 87, 100, 105, 107, 108, 110, 116, 123, 124, 138, 140, 147,
165, 166, 168, 169, 195, 200, 204, 209, 212, 213, 229, 230, 240, 259, 261, 306, 308, 314, 331, 341,
367, 376, 387, 390, 398, 404, 405, 416, 465, 476, 493, 501, 519, 527

postulación, 97, 198, 224, 388, 457, 469

Postulación preceptiva, 57

Preclusión, 214

prejudicialidad, 40, 41, 42, 43, 69, 78, 470, 471, 511, 512

Prejudicialidad, 39, 49, 511

Presunciones legales, 321

pretensiones, 34

principio de legalidad, 9, 20, 21, 125, 173, 217, 377, 383, 422, 461, 467

Principio dispositivo, 11

PROCESO ABREVIADO, 329

proceso común, 27, 56, 76, 77, 152, 153, 155, 156, 175, 176, 179, 199, 208, 333, 335, 389, 477,
486, 490, 531, 532

proceso ejecutivo, 56, 149, 150, 186, 189, 190, 192, 193, 241, 242, 367, 368, 370, 371, 374, 375,
376, 377, 378, 379, 382, 383, 387, 388, 392, 394, 395, 399, 400, 488, 491, 496, 497

439
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

proceso Ejecutivo, 189, 193, 504


proceso especial de inquilinato, 413, 417, 420, 422, 425, 432
Procuración oficiosa, 59
protección jurisdiccional, 3, 5, 6, 10, 27, 41, 73, 75, 97, 119, 196, 208, 230, 332, 339, 346, 385,
387, 440, 482, 488, 505
prueba documental, 103, 104, 191, 192, 211, 215, 221, 230, 233, 238, 239, 241, 253, 254, 255,
267, 268, 271, 272, 277, 286, 311, 312, 315, 323, 374, 410, 415, 437, 462, 464, 465, 504, 554
prueba ilícito, 8, 469
prueba material o tangible, 248
prueba pericial, 12, 127, 165, 179, 211, 212, 238, 239, 260, 262, 263, 265, 281, 289, 291, 292, 295,
293,296, 297, 298, 301, 303, 304, 305, 307
prueba pericial caligráfica, 262
pruebas, 6, 8, 18, 86, 88, 89, 90, 94, 120, 127, 130, 131, 179, 204, 211, 215, 221, 229, 230, 231,
232, 235, 238, 239, 242, 243, 250, 266, 278, 297, 314, 317, 318, 320, 323, 326, 335, 389, 401, 407,
430, 445, 447, 450, 451, 454, 455, 470, 485, 492, 536, 552
publicidad, 3, 14, 138, 153, 169, 353, 536, 537, 539

“R”
realización de los bienes, 532, 534, 535, 536
reconducción de los procesos, 17, 156
reconocimiento judicial, 13, 120, 246, 279, 283, 305, 306, 307, 308, 330, 407, 408, 409, 410
reconvención, 20, 69, 83, 86, 93, 142, 199, 203, 208, 209, 212, 213, 218, 223, 227, 228, 251, 333,
334, 422, 432
Rectificación y aclaración de la Sentencia, 138
recurso de Apelación, 26, 38, 43, 50, 84, 89, 131, 139, 361, 363, 364, 367, 392, 401, 411, 431, 435,
440, 441, 443, 444, 446, 447, 448, 449, 450, 451, 452, 453, 454, 455, 456, 457, 458, 460,
461, 463, 464, 466, 470, 471, 486, 501, 504, 510
recusación, 49, 50, 51, 126, 136, 302
reformado in peius, 441
regla de juicio, 12
renuncia o desistimiento, 181
representante convencional, 54
Revocatoria, 442

440
CÓDIGO PROCESAL CIVIL Y MERCANTIL ANOTADO CON JURISPRUDENCIA
Y PRINCIPALES INSTRUMENTOS EN MATERIA CIVIL

“S”
sana crítica, 124, 130, 210, 233, 234, 251, 252, 265, 268, 278, 292, 297, 298, 301, 304, 305, 321,
322, 323, 324, 325, 326, 416, 470

sello de abogado, 97, 98, 453

Sentencia, 5, 6, 7, 9, 15, 16, 19, 20, 23, 34, 36, 38, 40, 44, 45, 47, 48, 52, 54, 55, 60, 61, 62, 67, 70,
80, 84, 85, 86, 87, 90, 94, 95, 100, 101, 106, 107, 113, 115, 118, 121, 122, 123, 124, 125, 126, 127,
128, 131, 132, 133, 134, 135, 136, 137, 138, 139, 140, 141, 142, 148, 149, 150, 151, 153, 157, 158,
160, 161, 163, 167, 168, 169, 170, 173, 178, 179, 180, 184, 186, 187, 188, 193, 195, 196, 197, 199,
201, 202, 203, 204, 205, 206, 207, 212, 213, 214, 215, 216, 218, 219, 220, 222, 226, 227, 229, 230,
231, 232, 234, 235, 237, 239, 240, 242, 243, 244, 246, 251, 252, 253, 254, 255, 256, 257, 258, 260,
261, 262, 265, 267, 269, 271, 272, 273, 274, 275, 276, 278, 279, 280, 281, 284, 286, 289, 291, 292,
293, 295, 299, 300, 301, 304, 305, 306, 307, 308, 309, 314, 315, 316, 317, 321, 322, 323, 325, 326,
327, 328, 329, 330, 331, 332, 333, 334, 335,336, 337, 338, 339, 340, 341, 342, 343, 344, 346, 347,
349, 350, 351, 353, 354, 355, 356, 357, 359, 360, 361, 362, 363, 364, 365, 366, 370, 371, 378, 383,
384, 387, 388, 395, 396, 397, 398, 399, 400, 401, 404, 407, 408, 409, 410, 411, 412, 413, 417, 418,
419, 422, 423, 427, 428, 429, 430, 431, 432, 433, 436, 437, 440, 443, 445, 446, 448, 449, 450, 451,
453, 456, 458, 459, 462, 463, 464, 465, 466, 468, 469, 470, 473, 474, 475, 476, 477, 478, 479, 480,
481, 482, 483, 484, 485, 486, 847, 488, 489, 490, 491, 492, 494, 496, 499, 500, 503, 504, 505, 506,
511, 512, 513, 514, 515, 516, 517, 539, 544, 545, 547, 556

subasta, 528, 535, 536, 537, 538, 539, 340, 541, 542 Sucesión procesal, 66, 67

suspensión, 25, 37, 39, 40, 41, 43, 49, 59, 63, 67, 81, 92, 116, 119, 123, 124, 125, 126, 178, 217,
218, 225, 231, 318, 333, 356, 404, 406, 470, 471, 478, 480, 498, 504, 508, 510, 511, 512, 535

Suspensión del proceso, 116

“T”
tablero, 103, 104, 111, 536

tercería de dominio, 95, 527, 528, 531, 532

testigo, 248, 250, 278, 279, 280, 281, 282, 284, 285, 286, 287, 289, 306, 318, 319, 326

Testigo con conocimiento especializado, 281

título de ejecución, 141, 163, 187, 222, 371, 479, 483, 484, 488, 489, 491, 506, 507, 517, 547

transacción, 87, 159, 163, 219, 220, 222, 265, 369, 394, 480, 491, 496, 501, 502, 507

441
UNIDAD TÉCNICA EJECUTIVA DEL SECTOR DE JUSTICIA

“U”
usos y costumbres, 22

Utilidad de la prueba, 244

“V”
vacío legal, 21, 274, 275, 383

Valoración de la prueba, 278, 322

442
TOMO
I

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