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Consumo Socialmente Responsable

Yulian Sofia Zúñiga Alonso

Universidad Cooperativa De Colombia

Facultad De Psicología

Segundo Semestre

2018
Saciar las necesidades propias es fundamental para cualquier individuo, las formas de
consumo se han adaptado a cada época, mejorando y empeorando algo en ella y a
consecuencia de ello, los consumidores son cada vez más exigentes con su futura compra y
por ende el material vendido debe ser ¨perfecto¨ aunque poco duradero trayendo consigo
una nefasta e inminente destrucción y reducción del capital natural.

No obstante (y a mi parecer) esto ha servido como inicio para un futuro y verdadero


cambio, llegar a este tipo de límites les ha permitido a las empresas y a los consumidores
ver con nuevos ojos lo que significa comprar y vender.

El consumo socialmente responsable y responsabilidad social empresarial (consumo


sostenible) (Lorek & Spangenberg, 2014), es la nueva meta a alcanzar por empresas y
consumistas que buscan mejorar su rol con la sociedad, según Lambin (2003) el nuevo
consumidor adopta unas características con un modelo de compra profesional que detonan
gran influencias en los mercados de consumo, por ser autónomos y estar informados
pasando a ser consumidores activos con decisiones racionales que responsabilizaran a las
empresas si no quedan satisfechos puesto que merecen ser escuchados y respetados cuando
de adquirir un nuevo producto se trate.

Por ende entiendo que el consumo socialmente solidario está centrado en el compromiso
sociocultural y ambiental que están adoptando las empresas y consumidores.

(Dueñas et al., 2014) nos dice que el origen de este consumo responsable surge en los
años sesenta como un movimiento ambiental denominado marketing verde para Elkington
& Hailes (1989) el marketing verde se encarga de evitar cualquier tipo de producto que
afecte a la salud del consumidor y por ende cause daños en el medio ambiente a la hora de
su producción, uso y desperdicio. En lo personal creo que esto sirvió como una base para
incluir esta visión sostenible y viable en el mercado y así formar empresas y consumidores
éticos preocupados por seguir un consumo justificado pero amigable con el medio
ambiente.

Webster (1975, p. 188) “el consumidor tiene en cuenta las consecuencias públicas de su
consumo privado e intenta usar su poder de compra para lograr el cambio social” (Mohr et
al., 2001; Ozcaglar-Toulouse, 2005; Webb et al., 2008) dicen que este nuevo consumidor
debe tener en cuenta los aspectos tanto ambientales como éticos y la responsabilidad que
conlleva las empresas en el contexto sociocultural más allá de la obtención de sus bienes y
servicios. Siguiendo lo que dice (Dueñas et al., 2014) sobre como este consumo se ha
transformado en un fenómeno colectivo, opino que con esta información al alcance de los
consumidores permite (al momento de ejecutar la compra) que se conozca cuáles son los
productos y servicios responsables socialmente.

Existen comportamientos que caracterizan a estos nuevos consumidores puesto que se


centran en contribuir de forma sostenible y responsable, protegiendo el medio ambiente y
teniendo claros sus derechos de información comercial.

Ausborn (2006) nos muestra una serie de prácticas que este tipo de consumidores
desarrolla en las cuales se evidencia una compra de productos sostenibles aplicando la regla
de las 3R (reducir, reutilizar, renovar) y contribuyendo a empresas y actividades de
responsabilidad social.

Con la información anterior podemos hacernos una idea de cómo las personas que eligen
convertirse es consumidores éticos tienen una importante responsabilidad por delante.

No obstante, existen una serie de tipologías de consumidores observadas según (Estudio


de Consumo Responsable y Desarrollo Sostenible, 2012) en españoles que son
(conservadores) caracterizados por reciclar y usar marcas blancas (progresistas)
caracterizados por tener un rol critico en temas políticos de igualdad y conciliación familiar
(individualistas) caracterizados por su papel en el tema de reciclar sin vincularse con
entidades públicas.

Centrándonos en nuestro país (Colombia) (Ospina, 2001, 21) al ser un país de tercer
mundo es inevitable que tengamos este estilo de consumo y por ende que encontremos una
desigualdad empresarial con ingresos menores en las necesidades básicas prestando una
mayor atención a adquirir bienes que detonen buen gusto y estilo de vida, estos nos deja ver
que tan responsables son los colombianos cuando de consumo se trata y como los medios y
el marketing siguen siendo factores sumamente importantes en este tipo de decisiones (así
haya un conocimiento previo por parte de los consumidores de cómo se manejan estas
estrategias).
En lo personal creo que estos factores son los mayores causantes de que no se le preste
la atención debía a este tema en el país, se dice que hay ciertos campos en donde hay
participación pero no es tan significativa como en realidad debería ser con la problemática
que se muestra, puesto que aspectos de economía, empleo, medio ambiente y comercio son
de gran importancia y tienen un nivel de potencia y es indispensable que se continúe (o por
lo menos intentarlo) con los tipos de programas vistos en el documento, que incita a la
población a conocer estas problemáticas que atacan nuestra sociedad.

Podemos observar que el consumidor colombiano compra lo que se le vende, es poco


investigativo sobre las prácticas de consumo que existen y tristemente es cierto que muy
pocos son conscientes sobre lo que un consumo responsable significa, el consumismo es un
problema social y cultural y mientras no se trabaje este aspecto de forma seria, no vamos a
tener un consumo responsable. Para esto es necesario trabajar en la educación del
consumidor y que este se apropie de su rol en la sociedad, pues es deber de todos conocer y
comprender estas prácticas y dejar a un lado una vida de consumo por satisfacción y
apariencias y empezar a tener con consumo amigable que nos permita a cada uno como
individuo vivir en paz con el planeta y con nosotros mismos.

Referencias

file:///C:/Users/Sofia/Downloads/Sin%20t%C3%ADtulo.pdf

file:///C:/Users/Sofia/Downloads/Sin%20t%C3%ADtulo.pdf
Lorek, S., & Spangenberg, J. (2014). Sustainable consumption within a sustainable economy e
beyond green growth and green economies. Journal of Cleaner Production, (63), 33-44.

Lambin, J. J. (2003). Marketing estratégico. ESIC, Madrid.

Ospina, S.M. (2001) Globalización y desarrollo local: hacia una perspectiva municipalista. Revista
de Estudios Sociales. Recuperado 20 de 04 de 2015. Disponible en:
http://res.uniandes.edu.co/view. php/171/view.php#10

Dueñas, S. Perdomo-Ortiz, J., Villa, L. E. (2014). El concepto de consumo socialmente responsable y


su medición. Una revisión de la literatura. Estudios Gerenciales: 1-14. Disponible en:
http://dx.doi.org/10.1016/j.estger.2014.01.022

Elkington, J. & Hailes, J. (1989). The green consu - mer guide: From shampoo to cham-pagne:
Highstreet shopping for a better environment. London: V. Gollancz

Webster, F. E. (1975). Determining the characteristics of the socially conscious con-sumer. Journal
of Consumer Research, 2 (3): 188-196.

Mohr, L. A., Webb, D. J. & Harris, K. E. (2001). Do consumers expect companies to be socially
responsible? The impact of corporate social responsibility on buyingbehavior. Journal of Consumer
Affairs, 35(1), 45–72.

Ozcaglar-Toulouse N. (2005). Apport du concept d’identité à la compréhension ducomportement


du consommateur responsable: Une application à la consom-mation des produits issus du
commerce équitable. Université du Droit et dela Santé - Lille II [consultado 21 Sep. 2012].
Disponible en: http:// tel.archives-ouvertes.fr/tel-00300664

Webb, D., Mohr, L., & Harris, K. (2008). A re-exa - mination of socially responsible consumption and
its measurement. Journal of Business Research, 61 (2), 91-98.

Ausborn, B. (2006). Guía para un consumo responsable. El papel de los y las consumidoras en la
Responsabilidad Social de la Empresa. Observatorio de la Responsabilidad Social Corporativa,
Madrid.

Club de Excelencia en Sostenibilidad (2012). Consumo Responsable y Desarrollo Sostenible.


Tendencias de consumo responsable 2012. Madrid.

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