Está en la página 1de 7

La educación y la

formación como
estrategia para el
progreso social y
económico

Gestión de la
Calidad de las
Instituciones
Educativas
La educación y la formación
como estrategias para el
progreso social y económico
La educación es fundamental para mejorar el futuro de cualquier país, para
brindar accesos más equitativos a sus ciudadanos y para el bienestar
integral de nuestras sociedades. El hecho de poseer mejores y más
diversificadas capacidades y competencias en cada ciudadano, contribuye a
consolidar el crecimiento económico, el desarrollo y la cohesión social. La
educación debe dar acceso a oportunidades educativas a personas que están
excluidas. Allí está el desafío actual, disponerse a brindar a los educandos,
cualquiera sea su condición socio económica y cultural la igualdad de
oportunidades para el acceso al conocimiento, defendiendo ante todo su
derecho a la educación y la posibilidad que esta le brinda para llevar
adelante su proyecto existencial en una sociedad más justa.

Google imágenes. En www.galerias.educ.ar

“Sin ignorar la singularidad de la educación como tarea, ni su elevado


cometido social, ni la cuota de especificidad propia de las instituciones
educativas, lo cierto es que sin un cambio profundo en la conceptualización
de los centros educativos en tanto que organizaciones y en sus prácticas de
gestión, la Educación en nuestro país tendrá serias dificultades para
adaptarse a los nuevos tiempos, lograr mejores estándares de calidad para
todos y contribuir substancialmente al progreso social y económico de
nuestro país.
1
La importancia de la dimensión organizacional, la captación de su
complejidad desde una perspectiva sistémica y la implementación de
estrategias de gestión acordes con esa visión definen, sin lugar a dudas, un
racimo de factores críticos para la mejora de nuestro sistema educativo.” 3

Además, en las últimas décadas, las altas tasas de pobreza, la fuerte


desigualdad y el aumento de la criminalidad han hecho que el desarrollo de
una educación de buena calidad se convierta en una prioridad: el objetivo es
poner a las escuelas en el centro del sistema y apoyar a los docentes para
que se desarrollen como profesionales que creen en su trabajo y poseen las
herramientas necesarias para llevarlo a cabo.

Con respectos a los educadores es sabido que operan en una cultura de


escasos recursos. Muchos docentes enseñan en una escuela por las mañanas
y en otra por las tardes, o tienen otro empleo, o enseñan en pequeñas
escuelas donde hay pocas oportunidades para trabajar en equipo y aprender
de los demás. Esto despierta inquietudes con respecto a la formación,
selección y asignación docente en las escuelas; a las trayectorias
profesionales docentes; y a la calidad del apoyo que reciben los docentes y
las escuelas por parte de los directores, supervisores y demás personas que
guían y gestionan el sistema.

La génesis de la mejora de la calidad se encuentra en el compromiso con la


transformación de la escuela. Este componente inicial constituye la
plataforma sobre la cual se crea el deseo (Conway, 1986a); donde los
esfuerzos de concientización, motivación y potenciación de las relaciones
interpersonales entre los actores de la comunidad educativa, juegan un
papel fundamental, ya que se requiere generar un entusiasmo por trabajar
juntos en la construcción de una escuela de excelencia académica.

3
LÓPEZ RUPÉREZ, F. (2009) “HACIA UNOS CENTROS EDUCATIVOS
DE CALIDAD Contexto, fundamento y políticas de calidad en la gestión
escolar”. En: www.
sites.google.com/site/miguecald/FranciscoLpezRuprez.doc

2
La mejora de la calidad educativa:
objetivo fundamental. La gestión de la
calidad que redefine el sistema educativo
y sus componentes.
En educación, resulta un lugar común la referencia al concepto calidad.
También lo es el hecho de que, al intentar abordarlo, se haga referencia a su
carácter polisémico y a la dificultad para brindar una definición unificada,
toda vez que compromete valores, conceptos, contextos diversos para su
significación.

En el caso específico de la educación el concepto adquiere connotaciones


políticas, por eso es tan difícil encontrar una definición válida para todos: la
preocupación por la calidad es compartida por los diferentes actores
sociales que participan de la educación.

La cuestión de la calidad es una cuestión compleja y múltiple que no se


agota con las definiciones que brinda el diseño por estándares, ni con la
aplicación de procesos de evaluación de los programas.

Es interesante plantear la definición de estándares de calidad, como punto


de partida, para aunar criterios. Según Díaz (en Proyecto Estándares de
calidad para la Educación Superior A. Latina y el Caribe), se llama
estándares al “Nivel o grado definido como necesario e indispensable para
que algo pueda considerarse aceptable” (Díaz, 2001).

Se consideran tres niveles en el proceso de determinación de estándares de


calidad:

1. Criterio: El criterio será una herramienta fundamental para que la


organización realmente funcione.
2. Estándar: Sin criterio es difícil mantener los estándares de calidad,
los niveles mínimos e indispensables de aceptabilidad.
3. indicador: El indicador es una especie de variable de verificación.
Nos permite saber si se ha implementado, y con qué rigor o
adaptabilidad un estándar.

Abordemos ahora la definición de Calidad. Llamamos "calidad" al “grado


en el que un conjunto de características inherentes cumple con los
requisitos. A su vez el término “requisito” se acota como necesidad o
expectativa establecida, generalmente implícita u obligatoria”4.

Juran (2001), sostiene que hablar de calidad significa:

1. Calidad: aquellas características del producto que se ajustan a las


necesidades del cliente y por tanto le satisfacen. En este sentido la
calidad se orienta a los ingresos.

4
http://es.wikipedia.org/wiki/Calidad

3
2. Calidad: ausencia de deficiencias: ausencia de errores que requieran
rehacer el trabajo o que resulten en fallos de operación, satisfacción
del cliente, quejas, etc. En este sentido se orienta a los costos.

Teniendo en cuenta todas estas definiciones podemos determinar que para


reforzar la calidad educativa, es necesario proporcionar un nuevo modelo
de gestión que otorgue nuevos servicios para todos los actores involucrados
en el proceso educativo. Sus principios son la apertura, inclusión,
representatividad, flexibilidad, diálogo, ambiente generativo y liderazgo.

Con este modelo cobra protagonismo la mejora continua, es decir, la


búsqueda permanente por parte de la organización de acercarse o estar
siempre dentro de los parámetros indispensables planteados como
estándares de calidad. El programar actividades, tareas, evaluaciones, etc.
para ratificar o rectificar el rumbo del programa actúa como indicador del
grado de aplicación de los estándares y denota una actitud positiva,
reflexiva y hermenéutica hacia la consagración de los mismos.

Así la flexibilidad aparece como otro de los criterios tácticos-estratégicos


a considerar, pues es necesario que el sistema sobre el que se desarrolle el
proceso educativo tenga considerado como variable la adaptación a los
cambios. Un modelo de gestión, debe ser lo suficientemente flexible como
para sortear y reacomodarse ante situaciones inesperadas que no obturen la
viabilidad del proceso educativo.

Así como planteamos la flexibilidad, debemos considerar que los plazos


pautados dentro del sistema, deberán ser respetados, para evitar
solapamientos o superposiciones de etapas posteriores.

La calidad de un programa será alta va acompañada de una buena gestión


de los recursos que están involucrados. Este punto va de la mano de la
reducción de costos, como uno de los objetivos a plantear. A su vez, el
aprovechamiento de esos recursos, junto con una inversión tecnológica nos
permitirá aumentar la eficiencia del proyecto.

La evaluación, la calidad y la profesionalización son conceptos que


constituyen nodos donde se concentran los debates que muestran
aristas políticas, teóricas y técnicas. Quizá más estrictamente podría
decirse que la calidad (de los aprendizajes, de la intervención docente,
de los recursos, de las instituciones) se ha constituido en objeto de
evaluación. Y la profesionalización de los docentes en indicador de la
calidad.

El profesionalismo, marcará la capacidad por parte de la organización de


brindar un servicio educativo conociendo exactamente todos los puntos que
esto implica: no sólo en cuanto a conocimientos a transmitir, informar,
socializar sino el modo en que se harán llegar al educando, y cómo éste hará
uso, los desmenuzará, y posteriormente construirá conocimiento colectivo.

La credibilidad, que no es lo mismo que la fiabilidad, hace que nuestro


sistema o proyecto se vuelva creíble, que el alumno se acerque buscando
creer en él y que éste sea coherente con las expectativas de la comunidad.
Es decir, no defraudar al alumno, proponer acciones creíbles, viables,
honestas.

4
Respecto de la capacidad de respuesta como otra de las dimensiones de
calidad, hacemos referencia a que, en este tipo de propuestas, el feedback es
fundamental para que nuestro destinatario, no sienta abandono sino
seguimiento.

La accesibilidad es una de las dimensiones más ponderadas, pues implica


la inclusión. Surgió con la inserción de estudiantes con necesidades
educativas especiales en aulas de escuela común, (antes sólo eran aceptados
en escuelas especiales.) Esta dimensión cobró paulatinamente mayor
preponderancia ante los nuevos paradigmas.

La Comunicación, deberá tener en cuenta, y potenciar, las herramientas


de comunicación que nos invitan a utilizar las nuevas tecnologías de la
comunicación para contribuir como elementos coadyuvantes en el proceso
de comunicación.

Finalmente, la Comprensión, deberá hablar de atención personalizada, de


una educación con carácter más cercano al estudiante, posicionada en la
hermenéutica para ubicar a la persona en el centro de la praxis educativa.

Se ha dicho que la calidad es una "sábana corta" puesto que cubre


algunos aspectos pero olvida otros y difícilmente puede
contemplar la calidad del fenómeno educativo en su globalidad
cubriéndolo todo (Tretin, 2000).

¿Qué opina de estas palabras de Tretin?

¿Qué aspectos se olvidan al hablar de CALIDAD EDUCATIVA?

¿Cuáles se tienen en consideración en la institución educativa en


la que usted se desempeña?

5
Bibliografía Lectura 5
Blejmar, B. “Gestionar es hacer que las cosas sucedan” Capítulo 1. La
gestión como palabra.

www.uesiglo21.edu.ar

También podría gustarte