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ACONTECIMIENTO 66 POLÍTICA & ECONOMÍA 5

El cataclismo de Damocles*

Gabriel García Márquez mínima del arsenal nuclear que duer- ción. Todo esto parecía un sueño im-
Escritor (Colombia). me con un ojo y vela con el otro en las posible de cien mil millones de dóla-
santabárbaras de las grandes poten- res. Sin embargo, ése es apenas el cos-
cias. to de cien bombarderos estratégicos
Para la Universidad para la Paz, Así es: hoy, seis de agosto de 1986, B-1B, y de menos de siete mil cohetes
el día en que sucedió este discurso. existen en el mundo más de cincuen- Crucero, en cuya producción ha de in-
ta mil ojivas nucleares emplazadas, en vertir el gobierno de los Estados Uni-

U
n minuto después de la última ex- términos caseros, esto quiere decir dos veintiún mil doscientos millones
plosión, más de la mitad de los se- que cada ser humano, sin excluir a los de dólares.
res humanos habrá muerto, el niños, está sentado en un barril con En la salud, por ejemplo: con el
polvo y el humo de los continentes en unas cuatro toneladas de dinamita, costo de diez portaviones nucleares
llamas derrotarán a la luz solar, y las cuya explosión total puede eliminar Nimitz, de los quince que van a fabri-
tinieblas absolutas volverán a reinar doce veces todo rastro de vida en la car los Estados Unidos antes del año
en el mundo. Un invierno de lluvias Tierra. La potencia de aniquilación de 2000, podría realizarse un programa
anaranjadas y huracanes helados in- esta amenaza colosal, que pende de preventivo que protegiera en esos
vertirá el tiempo de los océanos y vol- nuestras cabezas como un cataclismo mismos 14 años a más de mil millones
teará el curso de los ríos, cuyos peces de Damocles, plantea la posibilidad de personas contra el paludismo, y
habrán muerto de sed en las aguas ar- teórica de inutilizar cuatro planetas evitara la muerte —sólo en África—
dientes, y cuyos pájaros no encontra- más que los que giran alrededor del de más de catorce millones de niños.
rán el cielo. Las nieves perpetuas cu- sol, y de influir en el equilibrio del Sis-
brirán el desierto del Sáhara, la vasta tema Solar. Ninguna ciencia, ningún En la alimentación, por ejemplo: el
Amazonia desaparecerá de la faz del arte, ninguna industria se ha doblado año pasado había en el mundo, según
planeta destruida por el granizo, y la a sí misma tantas veces como la in- cálculos de la FAO, unos quinientos
era del rock y de los corazones trans- dustria nuclear desde su origen, hace setenta y cinco millones de personas
plantados estaría de regreso a su in- cuarenta y un años, ni ninguna otra con hambre. Su promedio calórico in-
fancia glacial. Los pocos seres huma- creación del ingenio humano ha teni- dispensable habría costado menos de
nos que sobrevivan el primer espanto, do nunca tanto poder de determina- ciento cuarenta y nueve cohetes MX,
y los que hubieran tenido el privilegio ción sobre el destino del mundo. de los doscientos veintitrés que serán
de un refugio a las tres de la tarde del El único consuelo de estas simplifi- emplazados en Europa Occidental.
lunes aciago de la catástrofe magna, caciones terroríficas —si de algo nos Con veintisiete de ellos podrían com-
sólo habrán salvado la vida para mo- sirven— es comprobar que la preser- prarse los equipos agrícolas necesa-
rir después por el horror de sus re- vación de la vida humana en la Tierra rios para que los países pobres ad-
cuerdos. La Creación habrá termina- sigue siendo todavía más barata que la quieran la suficiencia alimentaria en
do. En el caos final de la humedad y peste nuclear. Pues, con el solo hecho los próximos cuatro años. Ese progra-
las noches eternas, el único vestigio de de existir, el tremendo apocalipsis ma, además, no alcanzaría a costar ni
lo que fue la vida serán las cucarachas. cautivo en los silos de muerte de los la novena parte del presupuesto mili-
países más ricos está malbaratando las tar soviético de 1982.
Señores presidentes, señores pri- posibilidades de una vida mejor para
meros ministros, amigas, amigos: todos. En la educación, por ejemplo: con
sólo dos submarinos atómicos Tri-
Esto no es un mal plagio del delirio En la asistencia infantil, por ejem- dente, de los veinticinco que planea
de Juan en su destierro de Patmos, plo, esto es una verdad de aritmética fabricar el gobierno actual de los Esta-
sino la visión anticipada de un desas- primaria. La UNICEF calculó en 1981 dos Unidos, o con una cantidad simi-
tre cósmico que puede suceder en este un programa para resolver los proble- lar de los submarinos Typhoon que
mismo instante: la explosión —dirigi- mas esenciales de los quinientos mi- está construyendo la Unión Soviética,
da o accidental— de sólo una parte llones de niños más pobres del mun- podría intentarse por fin la fantasía de
do, incluidas sus madres. Comprendía la alfabetización mundial. Por otra
la asistencia sanitaria de base, la edu- parte, la construcción de las escuelas y
(*) Tomado de García Márquez, Gabriel: El ca-
taclismo de Damocles / The doom of Damocles,
cación elemental, la mejora de las la calificación de los maestros que ha-
Editorial Universidad para la Paz, Editorial Univer- condiciones higiénicas, del abasteci- rán falta al Tercer Mundo para aten-
sitaria Centroamericana, San José, 1986 miento de agua potable y de alimenta- der las demandas adicionales de la
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educación en los diez años por venir, Una gran novelista de nuestro con justicia. Pero aun si ocurre —y
podrían pagarse con el costo de dos- tiempo se preguntó alguna vez si la más aún si ocurre— no será del todo
cientos cuarenta y cinco cohetes Tri- tierra no será el infierno de otros pla- inútil que estemos aquí. Dentro de
dente II, y aún quedarían sobrando netas. Tal vez sea mucho menos: una millones de millones de milenios des-
cuatrocientos diecinueve cohetes para aldea sin memoria, dejada de la mano pués de la explosión, una salamandra
el mismo incremento de la educación de los dioses en el último suburbio de triunfal que habrá vuelto a recorrer la
en los quince años siguientes. la gran patria universal. Pero la sospe- escala completa de las especies, será
cha creciente de que es el único sitio quizás coronada como la mujer más
Puede decirse, por último, que la del Sistema Solar donde se ha dado la hermosa de la nueva creación. De
cancelación de la deuda externa de prodigiosa aventura de la vida, nos nosotros depende, hombres y mujeres
todo el Tercer Mundo y su recupera- arrastra sin piedad a una conclusión de ciencia, hombres y mujeres de inte-
ción económica durante diez años, descorazonadora: la carrera de las ar- ligencia y la paz, de todos nosotros de-
costaría poco más de la sexta parte de mas va en sentido contrario a la inte- pende que los invitados a esa corona-
los gastos militares del mundo en ese ligencia. ción quimérica no vayan a su fiesta
mismo tiempo. Con todo, frente a este con nuestros mismos temores de hoy.
despilfarro económico descomunal, Y no sólo de la inteligencia huma- Con toda modestia, pero también con
es todavía más inquietante y doloroso na, sino de la inteligencia misma de la toda la determinación del espíritu,
el despilfarro humano: la industria de naturaleza, cuya finalidad escapa in- propongo que hagamos ahora y aquí
la guerra mantiene en cautiverio al clusive a la claridad de la poesía. Des- el compromiso de concebir y fabricar
más grande continente de sabios ja- de la aparición de la vida visible en la un arca de la memoria, capaz de so-
más reunido para empresa alguna en tierra debieron transcurrir trescientos brevivir al diluvio atómico. Una bote-
la historia de la humanidad. Gente ochenta millones de años para que lla de náufragos siderales arrojada a
nuestra, cuyo sitio neutral no es allá una mariposa aprendiera a volar, los océanos del tiempo, para que la
sino aquí en esta mesa, y cuya libera- otros ciento ochenta millones de años nueva humanidad de entonces sepa
ción es indispensable para que nos para fabricar una rosa sin otro com- por nosotros lo que no han de contar-
ayuden a crear, en el ámbito de la edu- promiso que el de ser hermosa, y cua- le las cucarachas: que aquí existió la
cación y la justicia, lo único que pue- tro eras geológicas para que los seres vida, que en ella prevaleció el sufri-
de salvarnos de la barbarie: una cultu- humanos, a diferencia del bisabuelo miento y predominó la injusticia,
ra de paz. pitecantropo, fueran capaces de can- pero que también conocimos el amor
tar mejor que los pájaros y de morirse y hasta fuimos capaces de imaginar-
A pesar de estas certidumbres dra- de amor. No es nada honroso para el nos la felicidad. Y que sepa y haga sa-
máticas, la carrera de las armas no se talento humano, en cambio, haber ber para todos los tiempos quiénes
concede un instante de tregua. Ahora, concebido el modo en que un proceso fueron los culpables de nuestro desas-
mientras almorzamos, se construyó multimilenario tan dispendioso y co- tre, y cuán sordos se hicieron a nues-
una nueva ojiva nuclear. Mañana, losal, pueda regresar a la nada de don- tros clamores de paz para que ésta
cuando despertemos, habrá nueve de vino por el arte simple de oprimir fuera la mejor de las vidas posibles, y
más en los guadarneses de muerte del un botón. con qué inventos tan bárbaros y por
hemisferio de los ricos. Con lo que qué intereses tan mezquinos la borra-
costaría una sola alcanzaría —aunque Para tratar de impedir que eso ocu- ron del Universo.
sólo fuera por un domingo de oto- rra estamos aquí, sumando nuestras
ño— para perfumar de sándalo las ca- voces a las innumerables que claman
taratas de Niágara. por un mundo sin armas y una paz

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