A nivel nacional, se celebra cada 07 de setiembre, el Día de los
Derechos Cívicos de la Mujer, en el cual, desde su promulgación e inicio, hasta la actualidad, se promueven los derechos cívicos y fundamentales de la mujer, relacionados con su participación activa en la política y en la sociedad.
Tras una larga lucha de mujeres peruanas por lograr el voto
femenino en nuestro país, entre las que estuvieron María Jesús Alvarado (1878-1971) quien planteó por primera vez en 1911 la necesidad de otorgar la igualdad de derechos civiles y políticos a la mujer peruana. En 1924, Zoila Aurora Cáceres (1872-1958) que también impulsó esta lucha a través de la organización “Feminismo Peruano” y la periodista y educadora Elvira García y García, entre otras muchas, entre las que se encontraban literatas, periodistas, educadoras y mujeres de a pie peruanas que exigían igualdad de derechos entre mujeres y hombres. Finalmente, el 07 de setiembre de 1955, el general Manuel A. Odría promulgó la Ley Nº 12391, la ley del voto femenino. Nuestro país fue el penúltimo en Latinoamérica en conceder este derecho a las mujeres.
En América Latina, hasta el 2000 sólo 10 países habían
implementado el sistema de cuotas para elecciones legislativas. Estos son: Argentina, México, Paraguay, Bolivia, Brasil, Costa Rica, República Dominicana, Ecuador, Panamá y el Perú. El 7 de setiembre de cada año celebramos el Día de los Derechos Cívicos de la Mujer, a partir del año de 1955 las mujeres peruanas obtuvimos el derecho de elegir y ser elegidas. Mujeres como Clorinda Matto de Turner, María Jesús Alvarado, y Zoila Aurora Cáceres lucharon por el voto político y la igualdad de derechos. Las primeras luchas se dieron en el área educativa, luego la lucha por la jornada de las ocho horas, y los derechos cívicos. Se logró el voto femenino, solo a las mujeres que supieran leer y escribir, tuvieran más de 21 años o fueran mayores de 18 años, siempre que fueran casadas. El rechazo varonil existente en aquellas épocas hacia los derechos al voto de la mujer, era fuerte, como es el caso de José Carlos Mariátegui que en 1915 a raíz de un Congreso Feminista escribió: «Este feminismo dogmático y petulante que tiene su más antipática pretensión en el derecho al voto… Yo no concibo a la mujer abandonando el ritmo encantado de su vida quieta y tornándose vocinglera, correcalles y exaltada como uno de nuestros capituleros criollos… A todas las sufragistas me las imagino nurses histéricas, a cuyos oídos ninguna voz caritativa deshojó jamás la flor de un requiebro.» Años más tarde, Mariátegui cambió de opinión a favor del voto femenino, tal como lo señala en un artículo publicado en la revistas Variedades el año de 1924. El año de 1956 las mujeres peruanas acudieron por primera vez a las urnas, representó un 34% de votos contabilizados, fueron elegidas una senadora y seis diputadas para el Congreso de la República. Si bien desde esa fecha las mujeres hemos ganado más espacio en nuestros derechos políticos, aún falta recorrer un largo camino, por lo que debemos buscar mecanismos que garanticen efectivamente la participación plena de la mujer en el poder y en la toma de decisiones. Todo ello sirva de reflexión estando ad portas de elegir nuevas autoridades regionales y municipales.
Hace aproximadamente 64 años, el 17 de junio de 1956, la mujer participó por primera vez en las elecciones generales del Perú. Qué increíble pensar eso. Si un día como hoy hace más de 64 años te contara que por el he