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MIL DIEZ.
en contra del acusado ALLAN KEVIN ACOSTA VARGAS, por el delito de:
del Agente Fiscal, Abogado: Marvin Antonio Montejo Estrada, quién compareció a
como quedó escrito, de apodo conocido “El Gato”, de veintiocho años de edad,
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OBJETO DE LA ACUSACION O DE SU AMPLIACION, Y DEL AUTO DE
practicadas por esta agencia fiscal, se ha establecido que: “Usted, ALLAN KEVIN
ACOSTA VARGAS el día veintisiete de junio del año dos mil nueve, siendo
Democracia a un costado del Auto Hotel El Paso del municipio de Malacatán del
calibre doce (12) milímetros, arma que al unir las dos piezas tiene capacidad para
percutir y detonar cartuchos de calibre doce (12) para escopeta; siendo detenido
los elementos de la Policía Nacional Civil José Florentino Gómez Gómez, Waldir
licencia para portar armas de fuego.” Por lo anterior, se imputa al acusado ALLAN
República.
MARVIN ANTONIO MONTEJO ESTRADA, con fecha seis de octubre del año dos
apertura a juicio de fecha trece de noviembre del año dos mil nueve, suscrito en
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Ambiente del Municipio de Malacatán, departamento de San Marcos. Dentro del
civilmente demandado.
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este tribunal el día veinticuatro de marzo del año dos mil diez, son los siguientes:
a) El día veintisiete de junio del año dos mil nueve, siendo aproximadamente las
costado del Auto Hotel El Paso del municipio de Malacatán del departamento de
San Marcos, se encontraba detenido el señor Allan Kevin Acosta Vargas, por una
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el señor José Florentino Gómez Gómez, quién declaró: “Con fecha veintisiete
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de junio del año dos mil nueve a eso de las catorce horas con cincuenta minutos,
Eduardo Miranda Fuentes y Rony Amaliel Perez Santos por rumores públicos nos
supuestamente tenían retenida a una persona de sexo masculino por lo que nos
las personas indicaron que dicha persona juntamente con dos o tres personas
más que portaban armas de fuego intentaron quitar un taxi a una persona de sexo
esa persona de sexo masculino, por lo que pedimos a las personas que
entregaran al señor pero indicaron que no podían entregarlo y que harían justicia
por sus propias manos, por eso fue que pedimos a el apoyo de varias sub
Nacional Civil y del ejercito se logró dar con las personas y fue así que dicha
Alan Kevin Acosta Vargas por lo que vimos que estaba agredido físicamente,
inclusive tenía manchas de sangre por lo que fue trasladado a la emergencia del
de San Marcos donde le dieron asistencia pero no fue necesario que quedara
internado en dicho centro asistencial, fue así como dicha persona fue llevada a la
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sub estación pero cuando nos entregaron a éste señor nos entregaron también un
arma hechiza juntamente con un cartucho útil calibre doce, entonces fue llevado a
del municipio de Malacatan, juntamente con el arma hechiza, eso es lo que puedo
procesado portara arma de fuego el día que se relacionan los hechos, sino que
ésta fue entregada por la turba después de haber sido entregado el procesado.
día veintisiete de junio del año dos mil nueve nosotros con el compañero que ya
tenían detenida a una persona que era el señor aquí presente, de nombre Alan
Kevin Acosta Vargas y al momento de llegar al lugar vimos que lo tenían detenido
turba que lo tenían quienes dijeron que ellos iban a hacer la ley por su propia
al ejercito nacional para que dicha persona fuera entregada porque él estaba
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atado de manos y pies, después a través del dialogo se llevó a un acuerdo y fue
confiere valor probatorio, pues al igual que el testigo anterior también es agente
declaró Luis Alfredo Hernández Salazar y manifestó: “El día siete de junio entre
las doce horas con treinta minutos y una de la tarde en el crucero de San Antonio
veinticinco personas, vi que lo tenían agarrado entonces me bajé del bus porque
gente, no había ninguna patrulla allí y no tenía ningún arma él en la mano porque
pero el taxista no estaba allí y tampoco el taxi, entonces me bajé del bus para
él”. A este testimonio no se le confiere valor probatorio por no ser creíble, toda
experiencia común es imposible que una persona que sólo conoce a otra persona
de vista pierda cuarenta y cinco minutos tratando de establecer qué le pasó, y sin
que haga nada por ayudarlo. Por último fue escuchado Pablo Giovani Joachin
Bautista quien manifestó: “Todo fue un día sábado veintisiete de junio entre las
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dirigíamos al lugar denominado San Antonio el Socorro para celebrar el
sentada otra persona, luego se sentó mi esposa y yo y subió otro señor moreno,
dijimos a San Antonio El Socorro, entonces nos fuimos pero antes de llegar el
señor que iba atrás desenfundó un arma y dijo esto es un asalto entonces yo lo
gritar ladrón, ladrón y se tiró del taxi y al rato se tiró también el que llevaba el
arma y nosotros con mi esposa lo que hicimos fue agacharnos, cuando el taxista
se tiró éste señor que iba en el lado derecho se pasó a la parte de adelante a
manejar el taxi, entonces nos dijo están bien y nosotros le dijimos que si gracias a
tiempo la gente para explicar que él fue quien manejó el taxi para no ir a estrellar
nos, pero él no tenía nada que ver allí, entonces vi cuando lo empezaron a
esposa y a mis hijas y le dije a ella sentada aquí voy a ir a ver si puedo ayudar al
señor, después de eso llegó la policía que estaba aquí con chumpa café y yo vi
cuando le metió las manos a él y le sacó el celular y la gente dijo miren como le
están robando al señor, entonces nosotros solo nos quedamos viendo pero el
señor en ningún momento tuvo nada que ver y no tuvo mala intención, al contrario
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él nos ayudó a nosotros, si no, nos hubiéramos ido a estrellar en el carro”. A este
paso por encima de otro pasajero que iba entre el conductor y el procesado, lo
cual resulta inverosímil y poco creíble, además de no narrar que pasó con el
confiere valor probatorio, por no probar ningún extremo en relación al hecho que
Figueroa, las que fueron exhibidas en el debate y en las que se ilustran las
Nacional Civil que declararon como testigos en este proceso, álbum que fue
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rendido por la trabajadora social del Instituto de la Defensa Pública Penal, no se le
acreditó con el posterior peritaje que se practicó en el arma. Sin embargo, como
tampoco se cuenta con un medio de prueba idóneo que pruebe ese extremo, pues
tipo penal de riesgo, que exige con mucha más razón la flagrancia para que se de
la adecuada relación causal entre el acto de portar el arma y el autor del delito
que debe efectivamente portarla. En este caso, los miembros del tribunal están en
penal, sin que se pueda seguir analizando los otros elementos del delito,
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En relación a este rubro no se hace ningún pronunciamiento por no haber sido
el efecto señalan los artículos: 2, 12, 14, 203, 204 y 251 de la Constitución Política
Congreso de la República; 1, 2 ,3, 4, 5, 7, 8, 11, 11 bis, 14, 15, 16, 18, 19, 20, 21,
24, 24 bis, 37, 38, 39, 40, 43, 48, 92, 107, 108, 109, 142, 143, 144, 145, 146, 160,
161, 162, 163, 165, 166, 167, 169, 173, 181, 182, 186, 207, 219, 220, 354, 355,
356, 358, 359, 362, 363, 364, 366, 368, 369, 370, 372, 374, 375, 377, 382, 383,
384, 385, 386, 387, 388, 389, 390, 391, 395, 396, 397, 516, 517, 518 del Código
Procesal Penal; 141, 142, 143 de la Ley del Organismo Judicial. Al RESOLVER
dejándolo libre de todo cargo en cuanto a este hecho se refiere. II) No se hace
misma situación jurídica hasta que cause firmeza el presente fallo. IV) Léase este
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fallo a presencia de las partes que comparecieren a la sala de debates de este
Tribunal para el efecto, valiendo tal lectura como legal notificación y entréguese
SECRETARIO
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