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Benefici os de l a f i s i oterapia

en el paciente oncológico

Xavier Uriarte
Méd i c o n aturi st�espec i a/ i sta en rehabi l i tac i ón

THE BENEFITS OF PHYSIOTHERAPY IN CANCER PATIENTS. URIARTE, X.


Key words: Tumour. Nutrition. Angiogenesis. Eutrophism. lmmunity. Analgesic. Sedation. Hydrotherapy. Climate the­
rapy. Thermotherapy. Exercise. Music therapy.
English Abstrae!: Physical therapies function thanks lo chemical, thermic, radioactive, electric, magnetic, chromatic or
light and vibrative energies. Amongst the most interesting effects that they generate in the organism are highlighted
the eutrophic, the immune modulator and the sedative. Hydrotherapy, thermotherapy, kinesiotherapy, work therapy and
climate therapy are outstanding as therapeutic resources in oncology. The maximum therapeutic value of physical the­
rapy is obtained when synergistically it is combined with psychophysical therapy.

Palabras clave: Tumor. Nutrición. Angiogénesis. Eutrofismo. Inmunidad. Analgesia. Sedación. Hidroterapia. Climatote­
rapia. Termoterapia. Ejercicio. Musicoterapia.
Resumen: Las terapias físicas funcionan gracias a las energías química, térmica, radioactiva, eléctrica, magnética,
cromática o lumínica y vibratoria. Entre los efectos más interesantes que generan en el organismo destacaremos el
eutrófico, el inmunomodulador y el sedante. Se destacan la hidroterapia, la termoterapia, la cinesiterapia, la laborte­
rapia y la climatoterapia como recursos terapéuticos en oncología. La máxima capacidad terapéutica de la física se da
cuando se combina de manera sinérgica con la terapéutica psicofísica.

Una mirada histórica vista N atura Medicatrix Medicina. Edt. Ancora S.A.
n°3 6 . 1 99 4 . ) 1993).
La primera aplicación de la
fisioterapia como recurso te­ En e l año 1 8 9 6 , e l médico En 1 9 3 8 , el psiquiatra a le­
rapeútico que hicieron los se­ danés Niels Ryberg Finsen mán W. Reich describió el
res vivos era esencia l mente funda en Copenhague un ins­ principio biológico d e l a or­
empírica y con una concep­ tituto para el estudio de la fo­ gonomía (W. Reich. La Fun­
ción holística. toterapia. Clon del orgasmo. Edt.
Paidós. 1 972 ) .
Coincidiendó con la apari­ A principios del siglo X X
ción del " saber médico " , la ( 1 90 0 ) e l médico Georg En 1 9 50,el fisiólogo
terapeútica física formará Groddeck inaugura en Baden­ austríaco Hans Selye define el
parte de la " dieta médica" Baden un sanatorio dedicado síndrome general de adapta­
que se aplicará en la antigua a personas gravemente enfer­ ción (B. B . Brown. Stress et
Grecia, en la vieja China, en mas donde combina los Biofeedback. Editions l' É tin­
la lejana India y en e l conti­ baños, los masajes y l a gim­ celle. 1 977).
nente americano. nasia con l a psicoterapi a (J.
B leker. Tratamiento clínico En la década de los 70 Carl
D urante las épocas SI­ psicosomático. Crónica de la Simonton, trabajando con en­
guientes seguirá formando medicina. Edt. . Plaza y Janés. fermos tumorales, observa l a
parte del criterio médico-fi­ 1993). importancia d e l a comunica­
losófico. ción y de la visual i zación en
En el año 1 903 el médico la evolución de los procesos
Tanto es así que se aplica­ suizo Auguste Rollier incor­ degenerativos celulares (C. Si­
b a principalmente en las en­ pora a los tratamientos la he­ montan. Recuperar la salud.
fermedades reumáticas, car­ lioterapia, a través de los fa­ Edt. Los libros del comienzo.
diovasculares, mentales, mosos baños de sol. 1 9 91).
óseas, renales, neurológicas,
d igestivas, respiratorias y es­ En 1 927, el neurólogo En la década de los 9 0 la
Correspondencia: clerosantes gracias a sus efec­ vienés Julius Wagner-Jauregg Medicina Tradicional China
E-mail: tos depurativos,· seda tivos , recibe el premio Nobel por introduce en la terapeútica de
natura @aticaediciones.com a na lgésicos, tráficos y esti­ sus trabajos sobre la piretote­ los pacientes neoplásicos la
Cl Sicilia 364, entresuelo. m u l a ntes ( X . Uriarte. Notas rapia(J. Wagner. La Piretote­ gimnasia, la respiración y la
08025 Barcelona sobre gimnasia médica . Re- rapi a . Premios Nobel de la meditación.

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Interpretación que se dispara por la presen­ podrá a lterar el equilibrio de
cia de circunstancias desenca­ las poblaciones pluricelulares.
naturista denantes después de ha berse
del proceso tumoral contenido el tumor de mane­ En el caso del proceso tu­
ra localizada (J. Schavelzon. moral, ciertos grupos celula­
Actualmenre se acepta que Psicología y Cáncer. Edt. res compiten e invaden los es­
la génesis puede seguir una se­ Paidós. 1 964) pacios vecinos produciendo
rie pasos escalonados. en el huésped cambios impor­
La Regresión es la fase de tantes en la nutrición, la res­
La iniciación es la fase ge­ ralentización de la actividad puesta inmunitaria, la respi­
notípica que se sucede inrra­ tumoral después de ha berse raclOn celular, el riego
celularmente por la acción de manifestado en toda su di­ sanguíneo y el eje neuroendo­
los estímulos o agentes inter­ mensión. Actualmente y des­ cnno.
nos y externos que actúan so­ de la década de los 90 esta­
bre el organismo de los seres mos en unas cifras de Por lo tanto, en la actuali­
VIVOS. regresión cercanas al 20%. dad se conceptúa el tumor co­
mo aquella masa anómala y
Va acompañada de modifi­ El concepto de terreno nos parásita de tejido cuyo creci­
caciones irreversibles del ma­ aporta interesantes puntos de miento estaría en íntima in­
terial genético, dando como reflexión. Dentro de la filo­ terdependencia con el terreno
resultado una población celu­ sofía naturista, ante una agre­ y éste a su vez con el medio
lar potencialmente maligna. sión el cuerpo intenta home­ ambiente inrerno y externo,
ostáticamente liberarse de los del cual viviría y en el que
Este fenómeno no es nuevo agentes agresores media nte produciría i mportantes a lte­
en la biología y, por lo tanto, las vías de drenaje y/o los sín­ raciones biológicas con seve­
el terreno está dotado de me­ tomas que miran hacia el ex­ ras repercusiones en la espe­
canismos propios de elimina­ terior. ranza de vida.
ción de esta anomalía detecta­
da. Este estado centrífugo, de­
nominado Psore, considera la Desencadenantes
Ahora bien, esta fase se ca­ enfermedad como una elimi­
de la carcinogénesis
E l p roceso
racteriza por ser un hecho nación de las toxinas desde el
irreversible y con memoria. interior hacia el exterior.
t u m o ra l ha ría
Ú ltimamente se está ha­ l as veces
É sto quiere decir que los Cuando la presencia de blando mucho del factor he­
cambios genéticos producidos estímulos es múltiple y per­ reditario en e l desencadena­
de bas u rero
se pueden mantener inactivos sistente y los mecanismos de miento d e la actividad d e l os tóx i cos
d urante mucho tiempo hasta a u torregulación son despla­ tumoral (M. González. Onco­
presentarse unos estímulos zados o suprimidos, el orga­ logía Clínica. Edt. Interameri­
m etabó l i cos
que pongan en marcha el pro­ nismo busca el equilibrio me­ cana. 1 992 ) . ta nto fís i cos
ceso siguiente. dia nte la neutralización de
los agentes tóxicos. En el tumor hereditario
c o m o psíq u i cos
La promoción es la fase fe­ habría una primera mutación
notípica o displásica que tiene Así podríamos considerar heredada y una segunda ad­
como peculiaridad la expan­ que los cambios plásticos en quirida.
sión reversible de la población forma de metaplasia, hiper­
celular hiperplásica contenida, plasia, displasia y/o neoplasia Esta predisposición puede
focalizada y controlada me­ pueden ser una respuesta de darse de diversas maneras.
diante los mecanismos home­ a daptación celular ante la
ostáticos de la inmunidad na­ perturbación. Se puede heredar una muta­
rural. ción que d isponga al porta­
El proceso tumoral haría dor.
En esta segunda fase puede así las veces de basurero de
darse la situación de haber los tóxicos metabólicos tanto Se puede heredar una capa­
desapa rec ido ya a lgunos de físicos como psíquicos. Este cidad d isminuida de repara­
los agentes ca usa les. estado centrípeto, denomina­ ción del daño en el ADN.
do S icosis, consideraría el
La progresión es l a fase de fenómeno tumoral como el Se puede heredar también
compresión, extensión y o resultado del fracaso de los una susceptibilidad en la ex­
metástasis tumoral que, supe­ mecanismos de eliminación. posición del portador.
rando la capacidad de los me­
canismos de la vida, se lanza El organismo vivo puede Hay una serie de tumores,
de manera vertiginosa hacia contemplarse como un ecosis­ en general muy poco fre­
el colapso de la función respi­ tema en el que las células vi­ cuentes, con un claro compo­
ratoria celular y tisular (X. ven y se organizan en conjun­ nente hereditario como son
Uriarte. El Proceso Tumoral. tos tisulares que nacen, el retinoblastoma , el tumor
Apuntes del Postgrado Medi­ mueren, habitan, delimitan, de Wilms, e l neuroblastoma,
cina Naturista UB. 199 6 ) . mutan y colaboran. el glioma, e l m e duloblasto­
m a , el meningioma, l a poli­
L a eclosión es la fase d e Cualquier modificación en posis colónica y vesicular,
máxima actividad tumoral las constantes biológicas etc.

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La gran cantidad de com­ Situaciones reconocidas en con la predisposición, génesis,
ponentes q uímicos presentes la clínica como tumores de resistencia, control, exten­
en el agua, el a ire y la tierra pulmón, de colon, de cuello sión, metástasis, eclosión, ve­
como son los derivados de uterino y de próstata pueden locidad de l a actividad tumo­
los hidrocarburos policícli­ ser la consecuencia de un pro­ ral y la regresión.
cos, de las aminas aromáti­ ceso inflamatorio persistente.
cas, de las nitrosam inas, del Además, con las aportacio­
c loruro de vinilo, de los al­ Ú ltima mente se han publi­ nes neurológicas últimas rea­
qu itranes, del uranio, de los cado artículos en los que re­ lizadas por el médico alemán
organoclorados, de las dioxi­ lacionan el sobrepeso y la hi­ R. Hamer se puede entender
nas, los estrógenos, los inmu­ poactividad fís ica con l a e l concepto holístico del tu­
nosu preso res, ciertos ci totó­ producción d e tumores d e mor.
xicos y los minerales pesados mama y de pulmón.
(H. Barrios. Estilo de vida, Éste siempre tiene una imá­
salud y enfermedad. Univer­ En e l año 1 9 5 8 se identificó gen edematosa a nivel encefá­
sidad de los Andes. Venezue­ el primer virus, VEH, capaz lico en cualquiera de sus ti­
la. 1 9 9 5 ) . de inducir cierta actividad tu­ pos, formas o localizaciones.
moral en los seres vivos. Pos­
L a práctica d e una a limen­ teriormente se han observado
tación hipercalórica, hiper­ otros como VHB, herpes, pa­ Fisiología tumoral
proteica, contaminada, pobre pilovirus y retrovirus que se
en fibra y en micronutrientes introducen en e l genoma mo­
constituye actualmente el dificando la actividad de re­ El tumor conlleva una serie
60% de las causas d e l a apa­ producción celular. de modificaciones en las fun­
rición de tumores (S. Santana. ciones de la nutrición, de la
Una hipótesis nutricional pa­ Existen pruebas experimen­ homeostasis tisular sistémica
ra el origen del cáncer y la tales que demuestran que la y de la inmunidad que supo­
leucemia. Revista Natura Me­ actividad de algunos de estos nen cambios importantes en
La p ráct i c a d e dicatrix n° 36. 1 994). virus puede permanecer laten­ el funcionamiento del orga­
u n a a l i m e n tac i ó n te durante meses o años, de­ msmo.
La manera más aceptada de sencadenándose e l proceso
h i perca l ó r i ca , entender la acción de las sus­ neoplásico cuando concurren En las células displásicas se
h i p e r p rote i c a , tancias qu1m1cas a nivel las circunstancias precisas. han observado incremento de
biológico es mediante la la glucólisis anaerobia, de la
y c o n ta m i n a d a unión de los productos al En el momento actual, el neoglucogénesis y de la activi­
c o n st i t u y e n ADN nuclear y al proceso de estímulo viral no represen­
-
dad enzimática con la finali­
formación de radicales l ibres taría ni el 10% de las causas dad de proveerse e l tumor de
act u a 1 m e nte intracelulares. (C. A. Gonzalez. El cáncer a una gran cantidad de energía
el 6 0 o;o de Catalunya. Revista Salut Ca­ (M. González. Oncología Clí­
La presencia cada vez más talunya. 1 9 8 9 ) nica. Edt. Interamericana.
l as ca u sas frecuente e intensa de radia­ 1 992).
d e a pa r i c i ó n ciones ionizantes X,B y gam­ En ciertas malformaciones
m ::J en el medio ambiente congénitns tipo trisomías 2 1 , También se ha podido ob­
d e t u mo res también es considerad::� como 1 8, 1 3 , e n neurofibromatosis, servar un ::J umento del 5 0 %
inductora y desencadenante en telangiectasia hemorrágica en el metabolismo basal, con
de In actividnd tumor a l (P. y en neuromas múltiples se presencia de elevada nctivi­
Carbone!!. Efectos de las ra­ pueden dar con más frecuen­ dad anabólica y cntabólica,
diaciones de uso médico. Re­ cia l a aparición de tumores. acompañada de una cuantio­
vista Natura Medicatrix sa demanda de micronutrien­
n°35. 1 994). Ya en el Cuerpo Hipocráti­ tes del tipo vitaminas A, B, C
co se anuncia la relación en­ y E así como los minerales
El mecanismo ncept::Jdo tre !::J alteración de la bilis, calcio, sodio, potasio, hierro,
por I n comunidad científicn melancolía o amargura y el selenio, cobre, cobalto, fósfo­
en !::J actualidad pnra enten­ sufrimiento de procesos tu­ ro, yodo, níquel, cinc y sílice.
der la acción de las energías morales (P. Laín Entralgo. La
lumínica, eléctrica, rndiacti­ medicina hipocrática. Edt. La membrana celular pre­
va y magnética en relación a Alianza Universidad. 1 970). senta cambios significativos
nuestro organismo es el fenó­ en cuanto a la proporción co­
meno de la ionización celu­ En Occidente no es a par­ lesterol/fosfolípidos a favor
lar. É sta es e l resultado de los tir de la segunda mitad de es­ del colesterol.
cambios bioeléctricos que se te siglo y más exactamente
producen en e l citoplasma hasta la década de los 60 que En función de la actividad
por la acción de las radiacio­ cuando se comienza a formu­ tumoral , en más del 30% de
nes ya citadas. lar d e m anera científica e l los pacientes el balance nitro­
fenómeno d e la psicogénesis genado se hace negativo.
Desde hace tiempo se viene del cáncer.
observando la relación entre Evidentemente, todas estas
el mecanismo de la infla ma­ Con esta formulación se perturbaciones biológicas se
ción crónica y el sufrimiento hace referencia a l a relación pueden agudizar según la ex­
de procesos tumorales a entre el conflicto y los meca­ posición a los factores carci­
través del tiempo. nismos de defensa utilizados nogenésicos, el tipo de trat::J-

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miento, la evolución, l a s vi­ síndrome de Cushing, hiper­ Tanto la capacidad de res­
vencias angustiosas, la sole­ prolactina, hipercalcitonemia, puesta de la una como de la
dad, la incomunicación, el hipoglucemia, hiper! hipocal­ otra se puede modificar con la
rencor, l a amargura, la hipo­ cemia, hipergonadotrofinas ) , exposición a estímulos quími­
motilidad y la simpaticotonía. hematológicas ( eritrocitosis, cos, físicos, espirituales, psí­
granulocitosis, coagulación quicos, emocionales, mentales
En esta situación metabóli­ intrava scu lar diseminada, a­ y socioeconómicos ( 0 . Segu­
ca basal, de a ltísimo gasto nemia), cutáneas (eritema, ic­ rado . Psiconeuroinmunolo­
energético, las reservas de ma­ tiosis, dermatomiositis, Pa­ gía: emociones y respuesta in­
cro y micronutrientes que se get), digestivas (malabsorción, mune. Revista Profesión
utilizan son las acumuladas enteropatía, obstrucción in­ Médica. Febrero 1 9 9 1 ) .
en e l hígado, mucosas, pán­ testinal ) , renales ( nefrosi s ) ,
creas, músculo y piel. cardiovasculares ( trombofe­ E l fenómeno denominado
blitis, endocarditis) y termo­ Escape Inmunológico haría
A nivel tisular, aparece una rreguladora ( fiebre) . referencia a la incapacidad de
disminución general del po­ respuesta precisa de las dos
tencial electroquímico celular La metastatización se barreras ante la presencia de
m itocondrial ( P . García . La podría entender como el un antígeno de tipo tumoral
electricidad de[ cuerpo huma­ fenómeno biológico que se desencadenando, por lo tan­
no. Edt. Riquelme y Vargas. presenta en d i ferentes órga­ to, una rapi dísima evolución
1 99 5 ) y de los fibroblastos, en nos y tejidos como conse­ de la actividad neoplásica.
particular coincidiendo con la cuencia de una implantación
síntesis elevada de los factores s im ultánea del tumor por ei Es como si e l sistema inmu­
estim uladores de la angiogé­ mecanismo estrés-cerebro­ nitario no detectase la presen­
nesis (TGF, TNF, FGF, citoci­ víscera o como resultado de cia del tumor y/o tolerase su
nas y proteinasa s ) llevada a una instauración progresiva agresividad, quedando el te­
cabo por las células de la ma­ y escalonada en el tiempo a rreno bloqueado o anérgico.
triz extracel u lar. través de la neovasculariza­
ción.
Paralelamente se ha .obser­ Bases fisiológicas
vado a nivel circulatorio un En 1 9 6 1 Burnett propuso la
de la fisioterapia Es f rec u e nte
incremento de los mecanis­ teoría de la Vigilancia Inmu­
mos de la coagulación que fa­ nológica (M. Dawson. Inmu­ d esc r i b i r
vorecen la creación de nuevos nidad frente a los Tumores. Ya en el Cuerpo Hipocráti­ aco m pa ñ a n d o
vasos periféricos. Inmunología. Edt. S a lvar. co (2000 años a . C ) se des­
1991). cribían y definían los cuatro
a l p roceso
Al mismo tiempo aparecen, tipos de terapias troncales. t u m ora l u n a
en cantidades apreciables, los Aplicada a l a actividad tu­
factores inhibidores de ia neo­ moral tiene un papel relevan­ En primer lugar, la terapeú­ se r i e d e
vascularizaci ón como son el te en el crecimiento, la expan­ tica química: aquella que fun­ m a n i festa c i o n es
interferón gamma, el factor sión, la metástasis, la eclosión ciona sobre todo a través de
plaquetario 4 y la trobospon­ y la regresión de las células la energía química.
n e u ro e n d oc r i n a s
dina que, ju nto a la disminu­ tumorales.
ción de la coagu lación, se Sería la basada en el ali­
constituyen como e lementos Esta vigilancia actuaría a mento, en las plantas, en sus
d e gran importancia en la li­ través de las dos barreras in­ derivados y en los de síntesis.
mitación y localización del munitarias (J. Pontón. Inmu­
proceso tumoral. nidad tumora l . Revista Jano En segundo lugar, la tera­
8 - 1 4 noviembre 1 9 9 6 ) . Una, peútica qui r ú rgica, que fun­
También se observa una la referente a l a inmunidad ciona a base de l a energía
disminución del pH a nivel ti­ inespecífica que pone en fun­ mecánica . Se utiliza en
sular así como la l iberación cionamiento los mecanismos traumatología, en transplan­
de radicales libres por encima de síntesis contínua de sustan­ tes, en edemas, en perfora­
de los niveles soportables. cias inmunomoduladoras co­ ciones y en hemorragias.
mo las lisozimas, antibióticos,
Estas modificaciones alcan­ las secreciones corporales, la En tercer lugar, la terapeú­
zan incluso a las estructuras leche materna, las lágrimas, el tica psíquicofísica, aquella
neurológicas de la corteza, hi­ sudor y la orina. Esta mantie­ que funciona a base de las
potjlamo e hipófisis. ne l a correcta función conec­ energías térmica , vibratoria,
tiva y que desencadena las re­ eléctrica y magnética.
En la actu a lidad es fre­ acciones de la fiebre y de la
cuente describir, acompañan­ inflamación. Utiliza las capacidades psí­
do al proceso rumora ! , una quicas, mentales, espirituales
serie de manifestaciones neu­ La otra, la inmunidad es­ y emocionales de los seres vi­
roendocrinas ( fatiga crón ica, pecífica, que actúa a través de vos.
miastenia, miositis, l e ucoen­ l a línea celular (macrófagos,
cefalopatía m ultifoca l , ede­ granulocitos, células NK y Sería la basada en e l hatha­
ma, degeneración cerebelosa, linfocitos B y T) y de la humo­ yoga, en el pranayama, en los
mielopatía, neuropatía sen­ ral (anticuerpos, interferones, mantras y cantos, en la medi­
sorio-motriz, retinopatía, po­ l i n fo c i nas, FNT y el comple­ tación y concentración, en el
lineuritis, encefalomielitis, mento). qigong, en el Tai qi quan, en

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la danza, en la sofrología, en nados, una disminución de La distribución fina l del
e l contro l menta l, en la expre­ los n i ve l es p la sm á t ic os de tri­ flujo sanguíneo depende de la
sión corporal y en la comuni­ glicéridos y de HDL coleste­ intensidad del ej ercicio y de
cación. rol, un menor n úmero de las condiciones climáticas.
plaquetas y d e su adhesivi­
En cuarto lugar, la terapeú­ dad, un descenso de la coa­ En el año 1 944 se observó
tica física o fisioterapia, que gulación, un a u mento de la que e l aumento de la tempe­
funciona gracias a las energías actividad fibrinolítica, u na ratura, sin reposición de lí­
química, térmica, radiactiva, estimulación de la médula quidos, conducía a un a u ­
eléctrica, magnética y vibrato­ ósea con aumento del núme­ mento de l a frecuencia
ria . ro de hematíes y de leucoci­ cardíaca . Cuando el agua se
tos, una modificación del iba reponiendo no sólo dismi­
Sería la basada en la hidro­ apetito y una mejora en e l nuía la frecuencia sino que el
logía, en la cinesiterapia, en la metabolismo del calcio y d e l incremento de la temperatura
climatología, en el masaje, en fósforo (Rehabilitación del corporal era menor (J. R. Bar­
la reflexoterapia, en la terapia paciente coronario. Sociedad bany. Adaptaciones fisiológi­
ocupacional, en la m usicote­ Castellana d e Cardio logía. cas inducidas por el entrena ­
rapia, en la cromoterapia, en Boletín 1 5 . Julio 1 9 8 1 ) . miento físico. Revista ]ano.
la electromagnetoterapia y en Octubre 1 9 8 9 ) .
la geoterapia ( Postgrado de Todo esto se traduce en
Medicina Naturista UB. Bar­ una disminución de la hipo­ E n el a ñ o 1 9 8 9 se pudo
celona. 1 995). xia y de l a acidez tisular así comprobar que una elevación
como en una mejora de la re­ de l a temperatura corporal en
Estas cuatro terapeúticas gulación metabólica (Krusen. ejercicio prolongado induce a
pueden combina rse para lo­ Medicina Física. Edt. Pana­ un agotamineto precoz, debi­
grar así la mayor efectividad mericana. 1 9 8 5 ) . do en parte a un incremento
en la evolución del proceso de l actatO sanguíneo no bio­
tumoral. 2. lnmunomodulador transformado por el hígado.
La tera p é u t i c a Es frecuente la aplicación La aplicación de los dife­ Sin embargo, el acúmulo de
fís i c a f u n c i o n a de la terapeútica física j unto a rentes estímulos a través del l actato era metabolizado de
la ter a peútica psicofísica, baño, el masaje, e l ej ercicio, manera correcta a lo largo de
gra c 1 as a pues fruto de esta sinergia el el clima, la visualización y la un entrenamiento bien plani­
l as e n e rgías terreno puede prepararse y meditación pueden modificar, ficado (P. Pujo!. Estrés calóri­
favorecer el efecto de la tera­ variar y regular la actividad co y rendimiento físico. Re­
q u í m i c a, peútica química, radiactiva inmunitaria a través del me­ vista Jano. Julio 1 992).
t é r m i ca, y/o de la quirúrgica. canismo de la termogénesis
(X. Uriarte. La fiebre como La elevación de l a tempera­
rad i act i va, Entre los efectos terapeúti­ mecanismo regulador. Revis­ tura corporal incrementa el
e l éctr i ca , cos más interesantes destaca­ ta Natura Medicatrix no 3 0 . metabolismo basal, intensifi­
remos: 1 99 2 ) . ca la respiración celular mito­
m a g n ét i c a condrial y libera mayor canti­
y v i brato r i a 1 . Eutrófico E l c a l o r metabólico puede dad de radicales libres, siendo
ser elevado bajo nuestro con­ necesario que e l organismo
La práctica de las diferen­ tro l . D urante el ej ercicio, la cuente con unas buenas reser­
tes modalidades de estímulos temperatura corporal aumen­ vas metabólicas para hacer
físicos y psicofísicos pueden ta a consecuencia de la inten­ frente a estas demandas.
producir una vasodiia tación sidad de la actividad.
local, una vasodilatación Dicha elevación genera una
cutánea, una vasoconstric­ Una persona en reposo pro­ mayor utilización de la reser­
ción esplénica, una modifica­ d uce a !rededor de 7 5 kcal/ va de proteínas y de lípidos,
ción de la frecuencia cardía­ hora de calor mientras que así como una mayor cantidad
ca, una mej oría de la con la realización de ejercicio de micronutrientes y de agua
contracción miocárdica, un la producción puede incre­ (A. Tinajas. O besidad: in­
incremento del gasto cardía­ mentarse hasta 1 5 00 kcal/ fluencia del ejercicio físico so­
co, una mayor saturación hora. bre e l apetito. Revista Jano.
oxihemoglobina, un a umen­ Marzo 1 99 5 ) .
tO de enzimas oxidativas mi­ La temperatura corporal
tocondriales, una mayor oxi­ puede s u bir a 3 8°, 3 9° o 40° Promueve una mayor secre­
dación de ácidos grasos, un según la intensidad del estí­ ción de hormonas adenonohi­
mayor contenido en mioglo­ m u l o . Para minimizar estos pofisarias como la prolactina,
bina, una modificación de las cambios térmicos el organis­ l a STH, l a ACTH, la FSH, l a
cifras tensionales, un aumen­ mo produce unos aj ustes va­ TSH; de hormonas neurohi­
to en la captación de oxíge­ somotores consistentes en fa­ pofisarias como la oxitocina
no y en la e l im inación de vorecer el riego sanguíneo de y la ADH; de endorfinas, de
anhídrido carbónico, una la piel, si bien al inicio de la anandamidas y de hormonas
mayor e liminación de pro­ actividad existe una primera periféricas como los glucocor­
d uctos de deshecho por l a s vasoconstricción hasta que el ticoides, la renina-angiotensi­
vías digestiva, urinaria, cutá­ a umento de l a temperatura na, las catecolaminas, la insu­
nea y mucosas, una mayor interna llega a un cierto ni­ lina, glucagón, testosterona,
retención de cuerpos nitroge- vel. esteroides y protaglandinas

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(J. Ordoñez.Ejercicio y siste­ E n organismos cansados es­ los efectos de esta terapeútica
ma endocrinohormonal. Re­ ta inmunosupresión ( Open explican la situación actual
vista Jano. Octubre 1 9 8 9 ) . window) puede alargarse has­ que favorece l a pasividad, el
ta 23 horas después de haber sedentarismo, la dependencia,
La secreción de l a ACTH realizado el ejercicio. la inmovilidad, el a bandono
está modu lada por el estrés, de " sí mism o " y la involución
el ritmo circadiano, la tempe­ 3. Seda nte del proceso.
ratura corpora l, la ingesta de
alimentos y ei ayuno. Los estímulos físicos y psi­ La práctica de la relajación
cofísicos pueden producir y de la meditación conllevan
En la persona con actividad también importantes modifi­ una disminución s ustancial
di urna ios niveles plasmáticos caciones en la personalidad de del oxígeno del 1 0-20% (J.R.
de cortisol son más elevados a la persona con gran ansiedad, Infante. Eje inmunoneuroen­
la hora de levantarse que en el angustia e hipocondría tales docrino y técnicas de relaj a ­
período de irse a dormir. Así como mayor estabilidad emo­ c i ó n . Revista Jano. Setiembre
ocurre también con las cate­ cional, una mayor resistencia 1998).
colaminas. Sin embargo, las al distrés, un incremento de la
FSH, LH, STH y la melatoni­ autoestima, una mej ora en el Durante e l tiempo d e medi­
na presentan su mayor p ico estado de ánimo, una mayor tación se registra una caída de
durante la noche (A. D íez. relajación y autocontrol, un la frecuencia respiratoria, una
Cronobiología. Universidad bienestar y una mayor satis­ presencia de apneas, una dis­
Barcelona. 1 9 9 6 ) . facción sexual así como una minución de la producción de
modificación en la predisposi­ dióxido de carbono y ácido
E l ayuno potencia l a secre­ ción, en la evolución y en la láctico así como un incremen­
ción de cortisol inducida por metastatización del tumor. to de la resistencia eléctrica de
el ejercicio. la piel, una disminución del
Estos efectos beneficiosos flujo sanguíneo renal y hepá­
El ej ercicio realizado tras dirigidos a los fundamentos tico con un aumento del flujo La tera p é ut i c a
una com ida copiosa puede de la personalidad se traducen cerebral y un incremento en la
disminuir la respuesta de cor­ en una energía psicofísica im­ secreción de endorfinas y de
a l o pát i c a
tisol mientras que si el ej erci­ prescindible para afrontar e l anandamidas. uti l izada
cio se realiza antes de una co­ proceso tumoral.
mida puede atenuarse el En general, la reacción sim­
tiende a
incremento de cortisol post­ Uno de los aspectos intere­ paticotónica generada y el aislar y
prandial. santes de la fisioterapia en e l metabolismo basal disminu­
paciente es l a práctica del ejer­ yen de manera significativa
m a rg i n a r a l
También se ha observado cicio físico frente a los estados con la práctica mantenida, e n fe r m o,
i n u t i 1 i zá n d o l o
una estimulación importante depresivos (J. A. Florez. La persistente y a j ustada de ca­
de la barrera inespecífica con función del ejercicio físico en minar, correr, nadar, de la ri­
una disminución del proceso la ada ptación a l entorno so­ sa, de la relaj ación, del masa­ y d i f i c u l ta n d o
inflamatorio, con un incre­ cia l. Revista Jano. Marzo j e , de la gimnasia, de la
mento de la eliminación cutá­ 1998). laborterapia, de l a meditación
e l a u toc u i d a d o
nea, de la urinaria, de las mu­ y del qi gong (Koar WH Me­ y e l i n terés
cosidades, de la digestiva, con El ejercicio regular ayuda a ditation, T-Cells, Anxiety,
una mejora en l a extensi b i l i ­ afrontar mejor los episodios Depression a nd HIV Infec­
por el e nto r n o
d a d d e la fi bra de colágeno de distrés, de depresión y de tion. Su btle Energies 1 99 5 ;
así como un incremento de la ansiedad que se generan en el 6( 1 ) : 89-97).
respuesta de la barrera es­ enfermo.
pecífica a nivel del aumento Estos efectos sobre el orga­
de la capacidad fagocítica ce­ Es un procedimiento ade­ nismo se mantienen más a llá
lular, de la síntesis de a nti­ cuado para vencer la soledad de los 1 8 meses si la práctica
cuerpos y de inrerferones X, y los sentimientos de desola­ realizada supera los 12 meses
B y gamma ( A . Zauner. Fisio­ ción. Puede ofrecer elementos de actuación rerapeútica.
terapia actua l. Edt. Jims. de relación, de comunicación,
1 980). de contacto y de apoyo (M. Al mejorar, por lo tanto, la
García. Efectos del entrena­ función neurovegetativa, el
Según investigaciones rea­ miento sobre el estado psi­ funcionamiento metabólico,
lizadas últimamente, en el cológico del paciente renal la función mental, la autoesti­
momento de la realización de crónico. Revista Reha bilita­ ma, la sensación de bienestar,
l a actividad fís ica aparece ción vol.VII, n° 3. 1 994 ). las crisis de angustia y la líbi­
una leucocirosis y un aumen­ do se produce una estabilidad
to de la capacidad funcional No obstante, la terapeútica en la persona caracterizada
de l a s células fagocitarías, alopática utilizada actual­ por el optimismo, la euforia y
que se mantiene durante el mente tiende a aislar y margi­ la flexibilidad mental.
esfuerzo para descender e n nar al enfermo, inutilizándolo
número y en capacidad fun­ y dificultándole el autocuida­ Después de dichas prácti­
cional dentro de las 4-6 ho­ do y el interés por el entorno. cas desaparecen preocupa­
ras posteriores (A. D urántez. c iones e inquietudes p si cofí­
Respuesta inmunitaria del Por otro lado, la práctica sica s , de tal suerte que e l
deportista . D i ario médico. inexistencia de hábitos de sa­ espíritu y e l cuerpo son otra
Octubre 1 9 9 7 ) . lud y la poca convicción de vez un solo ser.

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4. Analgésico gias, la hipomovilidad y la fa­ L a falta d e esperanza y e l
tiga crónica. temor a la muerte que s e ave­
El dolor existe en un 5 0 % cina hacen que el sufrimiento
d e pacientes en todas l a s eta­ Podemos así observar que del enfermo exacerbe s u in­
pas del enfermo y en un 70% 1/4 parte de las causas de tensidad y frecuencia.
cuanto más avanzado se en­ ciertos dolores pueden darse
cuentre el proceso tumoral como consecuencia de la ya­ También el dolor es sentido
(W. Astudillo Cuidados del trogenia propiamente médica más intensamente cuando no
enfermo en fase terminal. o a sistenci a l ista y 117 parte se ve el posible final o el buen
Edt. EUNSA. 1 99 5 ) . por motivos propiamente no final.
derivados de la neoplasia.
Según la OMS, el dolor on­ Se ha observado que existe
cológico afecta aproxi mada­ El dolor maligno se produ­ una relación d irecta entre l a
mente a 3,5 millones de per­ ce generalmente por una o severidad de l o s dolores y el
sonas en todo el mundo. más causas y aparece por le­ estado de ánimo.
siones de estructuras sensibles
Es de carácter moderado en al dolor como son los huesos, El alivio de los síntomas, el
alrededor del 70% de los en­ vasos, vísceras y nervios, en calor agradable, la mejora del
fermos que lo sufren y es in­ cuyo caso los órganos afecta­ sueño, el descanso, e l ejerci­
tenso en otro 3 0 % . dos sufren una serie de altera­ cio y l a movilidad, la sim­
ciones fisiológicas y químicas patía, el acompañamiento, la
Los pacientes tienden a pre­ que sensibilizan a los nocicep­ distracción, e l optimismo, ia
sentar más de una tipo de do­ tores y mecanoceptores con la disminución de los temores,
lor. disminución del umbra l de l a alegría, e l perdón y la re­
dolor y la producción de un conciliación, las cosas de la
Estudios realizados en pa­ dolor continuo o intermitente. vida resueltas y la comunica­
cientes cancerosos demostra­ ción son elementos que ayu­
ron que el 8 1 % refería 2 ó En el dolor del paciente on­ dan a aumentar el umbral del
más quejas distintas de dolor. cológico coexisten tres aspec­ dolor.
tos fundamentales que ayudan
Se ha obse rva d o Es común en los niños, so­ a entender l a fenomenología Todavía exactamente no se
bre todo con metástasis óse­ álgica. ha podido determinar qué es
q u e ex i ste u n a as, mientras que con la edad lo que hace que disminuya la
re l a c i ó d i recta disminuye l a sensación noci­ El primero, la nocicepción; severidad del dolor (F. Drob­
ceptiva. el segundo, el dolor y el terce­ nic. El dolor muscular postes­
entre l a ro, el sufrimiento o dolor del fuerzo de aparición tradía.
seve r i d a d El paciente con cáncer pue­ alma. Revista ]ano. Abril 1 99 3 ) .
de presentar dolor por múlti­
d e l os d o l o res ples ca usas, entre ellas la pro­ La nocicepción es definida Sin embargo, actualmente
y e l esta d o pagación del tumor en un como la actividad producida se han observado cinco meca­
60%, los tratamientos antine­ en el sistema nervioso por estí­ nismos que interactúan en es­
de á n i mo oplásicos (quimioterapia, ra­ mulos lesivos para los tejidos. ta sensación nociceptiva, que
dioterapia y cirugía ) , ciertos intervienen en mayor o me­
procedimientos diagnósticos El dolor, a su vez, es la per­ nor grado en el fenómeno ál­
y cienos tratamientos analgé­ cepción de la nocicepción que gico.
sicos en un 25% y de carácter no tiene necesariamente rela­
incidental en un 1 5 % . ción directa con la dimensión Por un lado, al realizar un
de la lesión tisular. ejercicio, un masaje, unas res­
Entre l a s situaciones pro­ piraciones, una terapia ocu­
pias de la expansión del tu­ En ella interviene una inte­ pacional, una meditación,
mor encontraríamos como racción entre la actividad una danza o un baño, serían
m á s frecuentes las lesiones neurosensoria l y la edad, el vertidos al torrente circulato­
óseas, las compresiones ner­ sexo, las influencias cultura­ rio una serie de opioides
viosas, vasculares, las lesio­ les y religiosas, el tipo de tra­ endógenos ( betaen-dorfinas,
nes viscerales y ciertos dese­ tamiento y de cuidados, l a leucina-encefalina y metioni­
q u i l ibrios originados por la evolución d e l paciente, e l na-encefalina) a partir de las
a ctividad tumoral ( i nfeccio­ apoyo sociofamiliar y d iver­ neuronas del sistema nervioso
nes, metabolopatías y para­ sos factores psicológicos y es­ central, con la consiguiente
neoplasi a ) . pirituales. inhibición de l a transmisión
del dolor.
Entre l a s situaciones d e El s u frimiento o dolor del
carácter incidental incluiría­ alma se comprende como la Estas hormonas son opiáce­
mos la cefalea tensional, la fi­ respuesta de la persona can­ os naturales similares a l a
sura anal, el reflujo esofágico, cerosa ante la posibilidad de morfina q u e s o n capaces d e
el angor, la artritis o artrosis, la pérdida. Es lo que se enten­ controlar el dolor. S i n embar­
e l cól ico renal, la dispepsia, dería como el " dolor tota l " go, en dosis compara bles, las
las cicatrices, contracturas ( S . Esteban. Normas d e la endorfinas son dos veces más
musculares, ciertas fracturas, OMS para el tratamiento del poderosas que la morfina.
la hemorragia dentro de una dolor de origen neoplásico.
metástasis, l a osteoporosis, la Revista Dolor. Suplemento El nivel de endorfina que
i squemia crónica, las neural- 1 . 1 988). au menta como reacción a l a

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apl icación de l a fisioterapia o ejercicios, depositándose di­ En primer lugar, valorar l a Crioterapia . Envolturas
puede ser l a explicación de la cho interés en otra ocupación, Vis Natura Medicatrix. frescas p arciales o totales.
disminución de l a sensación con la disminución de la per­ Envolturas ca lientes p arcia­
nociceptiva y e l incremento cepción á lgica mientras se En segundo lugar, aplicar l a les. Sauna seca y/o sauna hú­
del estado de ánimo. está l levando a cabo dicha ac­ higiene y cambio de hábitos. meda.
tividad.
En los momentos de máxi­ En tercer l ugar, introducir Clima toterapia, en forma
ma actividad l a producción de En consecuencia, l a aplica­ la dietética o régimen de vida. de baños de sol ultravioleta o
estas sustancias se incrementa ción de la terapeútica física y infrarrojos, baños de aire frío,
proporcionalmente al esfuer­ psicofísica puede intervenir Si todo esto no fuese sufi­ fresco o caliente, baños de
zo del orgamsmo y a la tem­ favorablemente en e l proceso ciente, vendría el cuarto nivel mar, baños de montaña,
peratura generada. oncológico como analgésico y adicion a l , el denominado te­ baños de luna llena o men­
sedante, aumentado el umbral rapeútica. guante.
Además, recientemente se del dolor, ral e nteciendo l a
ha descubierto en el cuerpo transmisión de l a sensación Clásicamente se han descri­ Geoterapia, en forma de
un sistema endógeno que ge­ nociceptiva y modulando las to cuatro tipos de terapias: baños parciales o totales de
nera dos sustancias cannabi­ aferencias sensoriales. química ( al imentos, aguas, arena, fango o arc i l l a . Cata­
noides que se las ha denomi­ tierras, plantas medicinales y p lasmas de fango y arcilla en
nado Anandamidas (de la Existen actualmente nume­ fármacos de síntesis ) , física, polvo ingerida.
palabra sanscrita ananda, em­ rosas opciones terapeúticas psícofísica y quirúrgica.
beleso o a l egría y del s ufij o para reducir e l dolor total . Cinesiterapia, en forma de
amidas, por s u estructura bio­ La máxima sinergia eficaz cambios posturales, ejercicios
química ) . Es necesario tener e n cuen­ se consigue cuando se aplican pasivos, activos, ginmasia y
ta, siempre que se está tratan­ l a s tres primeras de manera actividades aeróbicas, respira­
Este sistema s e encuentra do una persona afectada de coordinada, valorada y pro­ ciones, danza, psicomotrici­
localizado en la corteza cere­ un proceso tumor a l , que el gramada ante cualquier pro­ dad, expresión corporal , eu­
bral y en e l hipocampo. paciente no es una suma de ceso inflamatorio, infeccioso, tonía, técnica Alexander,
síntomas sino un ser humano alérgico, degenerativo, au­ yoga, biofeedback, tai chi,
La secreción de dichas sus­ con numerosas necesidades. toinmune y tumoral, siendo la programa de marcha, prácti­
tanctas genera un incremento Por lo tanto, l a analgesia pre­ cirugía de gran importancia ca deportiva y ciertos ej erci­
del umbral del dolor así como sentará su máxima eficacia únicamente en situaciones cios en apnea controlada.
un enlentecimiento de l a cuando integremos todos los quirúgicas y traumáticas.
transmisión de l a sensación componentes que intervienen Masaje, tipo sensitivo, me­
nociceptiva. en el fenómeno álgico. Por lo tanto, la compren­ tamórfico, reflexoterapia de
sión de l a Physis, l a aplicación los pies y de las manos.
Por otro, durante la con­ Con la experiencia antigua de la higiene, los cambios de
tracción las fibras que trans­ de la fitotera p i a del dolor a hábitos, l a instauración de un La borterapia o Terapia
miten l a sensación nocicepti­ base del opio y del cannabis, régimen de vida, la implanta­ Ocupacional, a través de l a
va son neutralizadas por otro con el descubrimiento en ción de la terapeútica física y tierra, pintura, papel, baile,
tipo de fibras que bloquean l a 1 95 0 de los psicofármacos, psicofísica serán e lementos ritmo, lectura, audición, foto­
transmisión a l a médula espi­ con la presentación en 1 9 6 5 básicos en la terapeútica ami­ grafía, imágen, madera, huer­
nal. p o r Melzack y Wal l de l a te­ tumoral tanto para modificar to, j uegos, asociacionismo, di­
oría de la compuerta, con l a la predisposición, la evolu­ namismo y actividades en
A su vez e l aumento del flu­ formulación e n 1 9 75 d e los ción y la metastatización co­ compañía del color y de l a
jo sanguíneo y de la tempera­ opiáceos endógenos y con l a mo para ayudar en la fase ter­ música d e l paisaje.
tura favorecen la eliminación observación en 1 9 9 7 de l a s minal y de agonía.
de posibles productos de de­ anandamidas endógenas esta­ Relajación, en forma de vi­
secho ( ácido láctico, bradici­ mos en condiciones de ayu­ En el caso de necesitarse ra­ sualización, concentración,
nma, serotonina, potasio, dar a l paciente de l a manera dioterapia, quimioterapia, ci­ meditación, consciencia cor­
etc . ) y l a disminución de la tu­ más satisfactoria y con los rugía o transplante la aplica­ poral, hipnosis, técnicas de
mefacción, que tienen un pa­ menos efectos adversos se­ ción de l a fisioterapia ayudará Jacobson y de Shultz, sofro­
pel determinante en la percep­ cundarios (S. Acebedo. Nue­ a mej orar los resultados y l a logía y respiración holotrópi­
ción nociceptiva por parte de vo enfoque acerca del dolor. eficacia de dichas tecnologías ca.
las fibras nerviosas. Revista Natura Medicatrix así como a disminuir ciertas
n°32. 1 9 9 3 ) . secuelas propias del trata­ Comunicación, análisis in­
Finalmente, e l ej ercicio ha­ miento referido. dividual, grupal, vegetotera­
ce que se rompan las posibles pia o bioenergía, grupos de
adherencias como consecuen­ Apl i caci ones Entre las a p licaciones de apoyo y asociacionismo.
cia de l a rigidez y de la fi bro­ mayor interés en el p aciente
sis, de una mialgia, de un sín­
fisi oterapéuti cas oncológico describiremos l a :
drome miofascial, de una más usuales Hidroterapia, en forma de cu­ Programa Terapéutico
infección de tejidos blandos y ras hídricas hi persalinas,
de una intervención quirúrgi­ Ya en el Cuerpo Hipocráti­ sulfídricas, sulfatadas, radiac­
ca. co se nos define cuáks han de tivas, ferruginosas y bicarbo­ La fisioterapia j unto a l a s
ser los niveles de intervención natadas. Baños parciales fres­ técnicas psicofísicas son d o s
Una última hipótesis se re­ cuando el organismo mani­ cos, chorros frescos, d uchas grupos q u e h a n d e estar pre­
fiere a l alej amiento, en ma­ fiesta alguna sintomatología. frescas, baños parciales o to­ sentes en la terapeútica d e l
memos determinados, de l a tales calientes en compañía de paciente oncológico básico
atención, hacia e l dolor por Hipócrates establecía los sales o de plantas medicinales j unto a l a dietética y fitotera­
parte del individuo a nivel cuatro clásicos niveles de ac­ y duchas calientes. Baños ca­ pia naturistas, como comple­
cortical al realizar actividades tuación. lientes ascendentes. mentaria, ayudando sinérgi-

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camente en la efectividad d e El programa ha de ser revi­ H. B arrios. Estilo de vida, J. R. Barbany. Adaptaciones
l a q uimioterapia, r adiotera­ sado según la respuesta del salud y enfermedad. U n iversidad fisiológicas i n d u c i das por el
pia, cirugía y transplante, co­ paciente oncológico. d e J o s Andes. Venezuela 1995. entrenam i ento físico. Rev i st a
mo sustitutoria de la farma­ Jano. Octu bre 1989.
cología a lopática en cienos Con todas estas matizacio­ S. Santana. U na h i póte s i s
procesos álgicos y de deso­ nes e l programa constará de nutr i c i onal para e l origen del P. Pujol. Estrés calór i co y ren­
rientación, como paliativo en unas a p licaciones permanen­ cáncer y la leuce mia. Revi sta di miento físico. Revista Jano.
las diferentes manifestaciones tes y otras esporádicas. N atura Medi catr i x, n•36. 1 994. Julio 1992.
a lo largo de la enfermedad y
como acompañante en el pro­ Entre las permanentes in­ P. Carbonell. Efectos de la A. Di ez. A p u ntes de Cronobio­
ceso final de vida. c luiremos la cinesiterapia, la rad i ac i ones de uso m éd i co. logía. U B. B arcelona 1996.
hidroterapia, l a c limatotera­ Revista Natura Medicatrix n•35.
Según la edad, el estadio pia, la terapia ocupacional, la 1 994. A. Zau ner.Fisioterapia actu al.
evolutivo, las referencias cul­ relajación y la comunicación. Editorial Jims, , 1 980.
turales, la manera de afrontar C. A. Gonzá lez. El Cáncer a
el proceso, los tipos de crisis Entre las esporádicas inclui­ Catalunya. Revista Salut Cata­ A. Durántez. Respuesta inm u ­
sufridos a lo largo de la enfer­ remos el masaje y la geoterapia. lunya, 1989. n i t aria d e l deporti sta. D i ario
medad, el estado anímico del Médico. Octu bre 1997.
paciente y el contexto socio­ P. Lain Entralgo.La m edicina
familiar aplicaremos la fisio­ Bibl iografía h i pocráti ca. Editorial A l i anza J. A. Florez. La función del
terapia de manera ordenada Universidad, 1970. ejerci c i o físico en la adaptación
en el tiempo. al entorno soc i al. Revista Jano.
X. U r i arte. Notas sobre g i m na­ P. García. La electric idad del Marzo 1 998.
El programa de fisioterapia sia m é d i c a. Rev i sta N at u ra c u erpo humano. Editorial
ha de tener en cuenta los ci­ Medicatrix, n• 36. 1 994 Ri q uelme y Vargas 1 995. M. García. Efectos del entre­
clos circadiano y ultradiano nam i ento sobre el estado psi­
de tal forma que las aplicacio­ J . Ble q u er. Tratamiento clínico M. Dawson. I n m u n i dad frente cológico del paciente renal cró­
nes tengan en cuenta los hora­ psicoso máti co. Crónica de la a J os tu mores. I n m u nología. Edi­ ni co. Revista Rehab i l i tación vol.
rios de la mañana, tarde y no­ m edi cina. Editorial Plaza y torial Salvat, 1 991. V i l, n• 3. 1 994.
che así como los ritmos J anés, 1993.
semanal, mensual, estacional J . Pontón.lnm unidad t u m oral. JR. I nfante. Eje inm unoneuro­
y anual. J . Wagner. La P iretoterapia. Revista Jano 8-14 novie mbre endocr i no y técni c as de relaja­
Premios Nobel de la Medic i ­ 1 996. ción. Revista Jano. Set i e mbre
Así podremos modular la na. Editorial Ancora SA, 1 993. 1 998.
respuesta del paciente a lo lar­ O. Segurado. Psiconeuro inm u ­
go del tiempo. W. Re i ch. La Función del nología: emoci ones y res p u esta Koar WH Meditation, T- Cells,
orgasmo. Edito r i al Paidós , inm une. Revista Profesión Médi­ Anxi ety, Depression and HIV
El programa ha de contem­ 1 972. ca. Febrero 1 991. lnfect i on. S u btle Energies
plar las tendencia s , gustos y 1 995; 6(1): 89-97.
deseos del paciente en cuanto B B. Bown. Stress et B iofeed­ X. Uriarte. Fisioterapia naturis­
a la a fectividad de los estí­ back. Edi t i ons 1' Etincelle 1977. ta. Apuntes del Posgrado Medi­ W. Ast u d i l lo. C u i dados del
mulos físicos, mentales, psí­ c i na N aturista U B. Barcelona enfermo en fase ter m i nal. Edito­
qu icos y espirituales de tal C. S i m onton. Re c u p erar la 1 995. rial Eunsa, 1995.
manera que las a plicaciones salud. Editor i al Los li bros del
propuestas sean gustosas, com i enzo, 1991. Rehabi litac i ó n del paciente S. Esteban. N ormas de la OMS
apetecibles y agradables. coronario. Sociedad Castellana para el tratamiento del dolor de
X. Uriarte. El Proceso Tu moral. de Cardiología. Boletín 1 5, julio origen neoplásico. Revista Dolor
El programa puede tener A p u ntes del Posgrado Medi c i na 1 981. 1988 Su plemento l .
en cuenta el desarrollo del Naturista U B. B arcelona 1996.
mundo interno y externo del Krusen. Medic ina Física. Edi­ F. Drobnic. El dolor m usc u lar
paciente, buscando siempre J. Schaverzon. Psicología y torial Panamericana 1 985. posesfuerzo de aparición tardía.
la mayor tranquilidad de la Cáncer. Edi torial Paidós 1 964. Revista Jano. Abril 1 993.
persona enferma y aclarando X. Uriarte. La fiebre como
p untua lmente al máximo M. González. Oncología Clíni­ m e c a n i s m o regulador. Revista S. Acebedo. N u evo enfoq ue
cualquier duda que aparezca ca. Edi torial lnteramericana, N at u r a Medicatr i x, n• 30 acerca del dolor. Revista Natura
en el proceso. 1 992. 1 992. Medicatrix, n•32. 1993.

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