Está en la página 1de 10

Universidad Central del Ecuador

Facultad de Comunicación Social


Carrera de Turismo Histórico Cultural
Arqueología II

Título: ARQUEOLOGIA EN CALACALI

Realizado por: Barba Michelle, Dávalos María José, Jimbo Johana, Santos Lizbeth,
Saritama Paula, Soledispa Brayan

Docente: MSg. David Zea

2018-2019
INTRODUCCIÓN

Ecuador posee gran riqueza cultural e histórica que puede ser evidenciada a través de los
espacios arqueológicos. La Arqueología es una ciencia y parte de la Antropología
cultural, que estudia el comportamiento humano a través de los restos materiales dejados
por las sociedades antiguas.

La presente investigación fue realizada en el cantón Quito, parroquia Calacalí, dónde se


utilizó el método de investigación prospección pedestre, tomando en cuenta que una
prospección arqueológica pedestre, es todo el conjunto de trabajos o procedimientos de
campo, dirigidos a la búsqueda de yacimientos arqueológicos.

Para el desarrollo de la misma se ha tomado en cuenta una división de trabajo basado en


la etnohistoria, la cual nos permite el estudio de la evolución histórica de una comunidad
y su convivencia con otros grupos humanos; y el medio ambiente, que lo podemos definir
como el entorno centrado en la biodiversidad de especies, donde se incluyen elementos
naturales y artificiales que se relacionan entre sí; y que pueden verse modificados a partir
del comportamiento humano.

Adicional, la investigación estuvo acompañada de una revisión bibliográfica, basada en


libros, revistas, archivos, que contenían información general y específica del lugar a
realizar la prospección.

Todas estas las herramientas utilizadas nos llevaron a conocer el estado de conservación
de cada uno de los sitios, y se puede agregar a la investigación qué, estas se hallan en una
parroquia distinta al inventario del Atlas Arqueológico del Distrito Metropolitano de
Quito.

De esta manera se pudo también conocer la experiencia en el campo de la arqueología


como estudiantes de Turismo Histórico Cultural, donde se pudo identificar los diferentes
sitios como son, pirámides, tolas, terrazas, hornos de cal, culuncos, que se encuentran
dentro de la parroquia Calacalí.
ANTECEDENTES ETNOHISTÓRICOS

La parroquia de Calacalí forma parte del valle Equinoccial y se caracteriza por


haber sido una zona prehispánica de gran importancia astronómica, comercial y agrícola,
especialmente por la presencia del pueblo yumbo (entre 800 D.C. y 1600 D.C.), el cual
dominó una amplia extensión de territorio del noroccidente del cantón Quito. (M.Sc.
Caldas M., 2014)

De acuerdo con la historia de la parroquia, los primeros habitantes del sector de


Calacalí llegaron por las riveras del río Esmeraldas, tomando luego el río Guayllabamba,
hasta cimentarse en el valle de Calacalí, dando paso a la construcción de sus pequeñas
viviendas (chozas de paja). Iniciaron este asentamiento antes de la venida de los españoles
al Ecuador. (Salomon, 1997)

El camino al territorio Yumbo se inició en Cotocollao por las faldas del Pichincha
hasta desembocar en el noroccidente. Se nombró un teniente corregidor para los pueblos
de Cotocollao, Calacalí, San Antonio, Perucho, Puéllaro, Nono, y en la provincia de los
Yumbos. (Salomon, 1997)
En esas regiones transitaban los comerciantes indígenas Mindalaes por ciudades
de la Sierra. Según la información etnohistórica que señala el autor, las rutas más
importantes de comercio de los Yumbos y Mindalaes fueron las de Alóag en los 3.000
m.s.n.m y la de Calacalí a 2.500 m.s.n.m. (Perfectura de Pichincha, 2015)
Según Salomon (1997), los yumbos se organizaron en una serie de cacicazgos en
el bosque tropical, vivían en pueblos dispersos en chozas de caña de guadúa y hojas, este
grupo mantenia un comercio muy importante con los señoríos de la sierra circunquiteña,
una de las vías más importantes para el traslado de estos productos fue por una vía bajando
de Calacalí, por una boca de montaña al norte de Cotocollao y Nono.(Salomon, 1997)
La inmensa importancia del trueque que se tuvo con los yumbos dio como
resultado una relativa comodidad al transitar por estas vías, ya que los pueblos asentados
en las comunidades circunquiteñas evitaron el tránsito por los páramos altos y fríos que
los separaban de la Amazonía
Posteriormente según el estudio realizado por Salomon (1997) afirma que el
incario se impuso a nivel de hegemonía militar sin haber logrado la integración de los
yumbos dentro de la cultura y economía imperiales. Esta forma de vida habría sido
oportuna para garantizar el ininterrumpido flujo de bienes selváticos o marítimos (cuya
producción se realizaba en zonas totalmente fuera del control imperial) hacia ese “otro
Cuzco” que se comenzaba a construir en Quito.(Salomon, 1997)

A continuación como parroquia eclesiástica Calacalí fue fundada en Julio de 1572,


existiendo caseríos de chozas o viviendas en la pequeña planicie donde ahora se asienta
Calacalí; prueba de la antigüedad de esta parroquia es una majestuosa cruz de piedra
existente en el cementerio actual, valorado como reliquia colonial, que data el año 1640,
trabajada seguramente por los aborígenes del lugar.

Durante la época de la Colonia, en esta zona funcionó un ingenio azucarero y,


posteriormente, durante más de cien años, en un sitio llamado El Infiernillo, se dieron
sembríos de caña de azúcar para la producción de aguardiente que se ha mantenido hasta
la presente fecha.
La piedra caliza extraída de Chaupizacha era transportada a sectores aledaños en
donde construyeron hornos para transformarla en cal. Posteriormente, a inicios de 1936
se construyeron hornos en San Antonio de Pichincha, cuyos propietarios principales eran
los señores Segundo Gabriel Molina, Rafael Chipantaxi, Jorge Trujillo y Alfredo
Tufiño.(Castillo Diana, 2016)

La cal sirvió para las edificaciones que se levantaron en la ciudad de Quito


durante la época de la colonia; tuvo también otros usos como la desinfección de piscinas;
para cuidar los árboles, les ponían en su tronco, desde el suelo hasta un metro de altura,
cal disuelta en agua a fin de evitar el ataque de insectos.

El origen de su nombre tiene dos versiones: la primera cuenta que los pobladores
ascendieron a las lomas y observaron el manto blanco (neblina) que cubría sus territorios
a ciertas horas del día, por lo que la población le denominó Calacalí, que significa manto
blanco en kichwa. Una segunda versión dice que el nombre proviene de las minas de
piedra caliza para la producción de cal, existentes al norte de la población, en
“Chaupisacha”, cerca de la localidad de Nieblí. (M.Sc. Caldas M., 2014)
ANTECENDENTES MEDIO AMBIENTALES

La Parroquia de Calacalí presenta varias características medio ambientales; como


su orografía que según el Plan De Desarrollo Y Ordenamiento Territorial la población de
Calacalí tiene un relieve elevado e irregular delimitado por las siguientes quebradas y
páramos: Papatena, El Carnero, Padre Rumi, Moraspugo, Guasaya y Amboasí.
(Perfectura de Pichincha, 2015). El resto de la parroquia tiene extensas zonas de páramo
en las partes altas, las cuales vas descendiendo hasta convertirse en bosques subtropicales.
El uso del suelo se ha destinado fundamentalmente a la producción agrícola y ganadera,
al monocultivo del maíz, la presencia de canteras explotadas sin criterios técnicos que
constituye una fuente de contaminación ambiental.

Los ecosistemas que posee esta zona es el bosque Nublado, donde frecuentemente
estos bosques tienen una cobertura de neblina o de nubes, ya sea constante, o durante las
primeras horas de la mañana y las últimas horas de la tarde; el aporte de la neblina o nubes
a la disponibilidad de agua del ecosistema se conoce como precipitación horizontal o
lluvia incidental. En segundo lugar, el ecosistema llamado Matorral Andino Seco este es
un matorral espinoso seco. Por último, el ecosistema; Bosque plantados latifoliadas que
ayuda a la conservación y regeneración de bosques protectores, son zonas de reforestación
y regeneración de bosques. (Prefectura de Pichincha, 2015)

En cuanto a la hidrografía su río principal es el Carnero que nace en la Quebrada


del mismo nombre. Este río al cruzar por las diferentes quebradas va tomando el nombre
de cada una de ellas para luego unirse en el punto de Conocoto con el río Papatena,
siguiendo su cauce hacia el occidente desemboca en el río Guayllabamba. (Prefectura de
Pichincha, 2015)

En la parroquia de Calacalí existen especies vegetales como el arrayán, cedro,


suro, valeriana, mora, lecherillo, chilca, etc. gran parte de la tierra cultivada predomina el
cultivo del maíz, cuya calidad e considerada por los pobladores como la mejor. Existen
una gran variedad de especies, sobre todo colibríes.

Su clima predominante es el frío, que es de tipo seco y ventoso, variando según la


temporada o estación, oscila de 10 grados a 15 grados de temperatura.
METODOLOGIA

Las metodologías usadas como grupo fue la investigación bibliográfica y la de


campo exploratoria la cual nos permite explicar y describir los elementos o características
vistas; por lo tanto nuestra búsqueda se caracterizó principalmente por la acción de
nosotros como investigadores ponernos en contacto directo con el ambiente natural que
nos fue asignado para realizar el estudio en cuestión.

Empezando por una recolección de información bibliográfica que fue totalmente


necesaria, nos ayudó a tener una percepción y una base para identificar la zona que
estábamos próximos a visitar que fueron San José de Minas y Calacalí, empezando la
etapa exploratoria, donde se empezamos a reconocer el territorio y a observar todo a su
alrededor para identificar lo que anteriormente habíamos leído en los documentos guía ;
esto permitió que el conocimiento sea más a fondo y que datos obtenidos sean manejados
con más seguridad.

En cuanto a su incorporación dentro del proceso investigativo, la Investigación


de Campo produjo grandes aportes, luego de las visitas realizadas a San José de Minas y
a Calacalí recurrimos a la verificación y concordancia de los datos que teníamos en escrito
en este caso del Atlas y se procedió a una selección de sitios, de los 25 que estaban
propuestos elegimos 3; nuestro criterio de selección fue que tenían mayor capacidad de
visualización y facilidad de acceso a estos, aun así los sitios visitados particularmente
en Calacalí no contaban ni existían caminos determinados, para movilizarnos a pie mucho
menos en un vehículo.

Además acudimos a moradores de la zona utilizando el recurso de la entrevista


donde obtuvimos datos extra, tomando nuestra experiencia con el señor Iván Aldaz que
amablemente nos ayudó a recorrer y llegar a lo sitios que el perfectamente conocía.
Aprovechando el momento en el camino iba contándonos sus historias personales donde
pudimos obtener datos únicos, interesantes e importantes.

Instrumentos Utilizados:

1. Camioneta – Movilización 4. Cámara (fotos, videos)


2. Documentos guía 5. GPS
3. Teléfonos celulares - 6. Entrevistas
Comunicación
CONCLUSIONES

 Estos bienes arqueológicos encontrados en la zona de Calacalí merecen un


estudio más profundo, ya que no solamente son los hornos de cal, piedras rituales y
puquios encontrados, sino que forman parte de lo que somos y tenemos como parte
de nuestra identidad. Podemos concluir que esta información nuevamente actualizada
tendrá que ser estudiada y también valorada para proyectos de tesis, darle un valor a
la zona de Calacalí, ya no ver como sitios populares solo a las pirámides de Cochasqui,
Tulipe, entre otras; sino ampliar nuestra visión de historia y cultura, en lugares como
Calacalí.
 Se concluyó que la parroquia de Calacalí adquiere su nombre por la
presencia de minas de cal, en varios sectores de esta zona como Portalanza, y su
materia prima permitió la construcción de edificaciones para la ciudad de Quito.
 A partir de las visitas realizadas y la revisión de fuentes bibliográficas se
puede decir que el sector de Calacalí habría sido un lugar de paso y descanso para el
pueblo yumbo antes de la conquista de los incas y los lugares donde se encontraron
evidencias arqueológicas posteriormente pertenecieron al pueblo inca, debido a que
el sector resultaba estratégico para vigilar la llegada de enemigos.
 La información de investigaciones arqueológicas no ha sido compartida
con los pobladores del sector de Nieblí, por lo cual la mayoría de la población
desconoce los recursos que posee.
 El cambio de las actividades de producción de cal en el sector por la
ganadería y agricultura ha causado repercusión en las estructuras destinadas para este
oficio, dejando en el abandono a los hornos de Calacalí.
 La experiencia en campo nos enriqueció en conocimiento, tanto personal
como académico pues nos hizo salir de nuestra comodidad y movilizarnos hacia
nuestro objeto de estudio, gracias a la determinación, la organización y la manera en
la que interactuamos como grupo de trabajo pudimos obtener satisfactoriamente
nuestros propios resultados.
DISCUSIÓN
La información proporcionada en el Atlas Arqueológico DMQ de Hólger Jara, nos
da una visión general de los sitios arqueológicos reconocidos en el distritito metropolitano
de Quito, además de su ubicación, datos generales y fotografías. Sin embargo durante la
prospección pedestre realizada por el grupo investigador en el Bloque N “San José de
Minas” no fue posible acceder a estos sitios con los datos indicados en el Atlas, fue
necesaria la ayuda de Iván Aldaz, nativo de la zona de Nieblí.
El GAD de la parroquia San José de Minas nos informó que ninguno de los sitios
que se buscaba pertenecían a la parroquia lo que llevó la investigación a la parroquia de
Calacalí, en lo más profundo de esta se accedió al sector de Nieblí, las coordenadas
proporcionadas en el Atlas no fueron de ayuda para rastrear los sitios, la población del
sector en su mayoría adultos mayores no conocían de estos, Según Ivan Aldaz solo eran
llamados los “lugares de los antiguos”, además las referencias indicadas en el atlas no
eran reconocidas por la gente del sector, lo cual es una dificultad para la población en el
desconocimiento de los recursos que poseen, es necesario la transmisión de información
hacia la población del sector.
En cuanto a los hornos encontrados su acceso era nulo, no existía camino, mucho
menos señalética, ni zona de protección. Estos hornos se encuentran en pie gracias al
material y técnica de construcción, con una estructura intacta los hornos se encontraban
fuera de funcionamiento lo que daba paso a que la vegetación del lugar avance a
desarrollarse incluso dentro de la estructura, lo cual nos indica la necesidad de proteger
estos sitios antes de que el deterioro continúe.
Uno de los hallazgos fue el de estructuras de piedra de forma ovoidal encontradas
dentro de un cerramiento de piedra en el cual también se localizaba un horno de cal, estas
estructuras ovoidales posiblemente estaban asociadas a canalizaciones o acueductos por
sus formas, así se encontraron en este territorio algunas de estas por partes, según nos
cuenta Iván Aldaz les habían ofrecido dos mil dólares a unos vecinos del sector por
sacarlos del bosque de aguacates, pero el huaquerismo no fue posible por el peso de estas
estructuras de piedra, este sitio en específico no está registrado en el Atlas, es necesario
el reconocimiento e investigación del lugar.
La casa de la hacienda de Portalanza no tiene mayor información en el Atlas, pero
al estar en el sitio nos informaron que ha sufrido varios cambios desde su construcción.
Según Iván Aldaz primero fue una vivienda para los trabajadores de la hacienda
Portalanza, pero no duro mucho por creencias sobrenaturales, después se modificó al
edificio quitando la base del segundo piso quedando solo la planta baja, con el tiempo al
lugar se le retira el techo y las puertas que eran de madera, finalmente se cubre la entrada
de cuartos con ladrillos dejando al edificio en el abandono.
Ahora en el pucará de Portalanza o “cerro encantado” llamado así por los
pobladores del sector se puede observar lo descrito en el Atlas, muros de contención en
las que aparecen piedras de forma y tamaño irregular, la cima de este lugar fue estratégico
para advertir a los antiguos la llegada de enemigos.
Lo encontrado durante la prospección pedestre en la zona de Nieblí en la parroquia
de Calacalí es realmente sorprendente en todo sentido, uno de ellos es que la mayoría de
la población desconozca la presencia de estos sitios arqueológicos, otra es que las
investigaciones realizadas en el lugar no sean compartidas, como nos menciona Iván
Aldaz “a veces vienen igual que ustedes de la universidad a buscar y dicen que volverán,
pero no vuelven”. Además de esto no existe preocupación por parte de las instituciones
del país que tienen como objetivo proteger estos bienes culturales, así pudimos notar en
las maneras de acceso a estos sitios y el hecho de que no haya información de tipo
arqueológica en el sector, es urgente la intervención de investigadores e instituciones para
determinar la mejor forma de conservar estos sitios arqueológicos.
Bibliografía

Castillo Diana. (2016). CENTRO DE INTERPRETACIÓN TURÍSTICA EN LA


PARROQUIA CALACALÍ. Universidad Central del Ecuador. Retrieved from
http://www.dspace.uce.edu.ec/bitstream/25000/10364/1/T-UCE-0009-685.pdf

M.Sc. Caldas M., U. de E. T. (2014). Potencialidades de los atractivos Turisticos de


Calacalí. Retrieved from
https://dialnet.unirioja.es/servlet/articulo?codigo=4740432

Pichincha, P. de. (2015). Plan De Desarrollo Y Ordenamiento Territorial Calacali 2015-


2019, 25–72. https://doi.org/10.1093/tropej/fmv052

Salomon, F. (1997). LOS YUMBOS, NIGUAS Y TSATCHILA O


"COLORADOS" DURANTE LA COLONIA ESPAÑOLA: Etnohistoria
Del Noroccidente De Pichincha, Ecuador (Ediciones ABYA YALA). Wisconsin.
Retrieved from
https://digitalrepository.unm.edu/cgi/viewcontent.cgi?referer=https://www.google.
com/&httpsredir=1&article=1483&context=abya_yala

También podría gustarte